Un aspecto actual de la sociedad juvenil es el uso de las bebidas alcohólicas
para fines recreativos y sociales, el cual ha traído consigo problemas como la ingesta en exceso, conducir bajo los efectos de la ebriedad y problemas de salud. Todos estos problemas se derivan de la carencia de una enseñanza en consumo responsable y la presión social, la cual se ha ido empeorando debido a que en países como Estados Unidos, donde la edad requerida para ingerir alcohol es 21 años, lo que ha fomentado a los jóvenes en actos de rebeldía a tomar más alcohol del límite. La edad mínima legal para consumir alcohol debería ser reducida con el propósito de que los adolescentes dejen de tratarla como algo especial que deben hacer a escondidas, en vez de aprender a tomar responsablemente en una manera legal. En el presente ensayo se discutirá las causas, los puntos a favor y en contra de reducir la edad mínima legal para consumir alcohol y los posibles efectos a corto y largo plazo.
La adolescencia es una etapa donde las personas se empiezan a formar en lo
que serán en la edad adulta, sin embargo para muchos adolescentes es un periodo de confusión e incertidumbre, también es una época de rebeldía causada por actuar impulsivamente sin pensar en las consecuencias, siendo uno de los principales factores de ingesta de alcohol temprana. Un estudio centrado en las expectativas y patrones de consumo revelan que los hábitos y la manera en que se percibe el alcohol empiezan desde los 12 – 15 años y es durante esta etapa donde el alcohol empieza a ser percibido en una manera positiva y atractiva para los menores de edad y ante su prohibición el deseo de consumir aumenta. Debido a la prohibición, los jóvenes buscarán consumir de manera ilegal en fiestas, lugares cerrados y eventos masivos en donde ninguna figura modelo está presente para enseñarles a tomar en una manera responsable y segura.
En la mayoría de los casos de jóvenes universitarios, el consumo de alcohol
es considerado una actividad que se practica diario, a pesar de todos los esfuerzos que no han tenido éxito por prohibir el consumo. De acuerdo a Kauri, V. una encuesta realizada en el 2009 en Canadá comprobó que 40 por ciento de los hombres y casi 30 por cierto de las mujeres entre 18 y 19 años son fuertes consumidores y ningún trato se les ha dado debido a que son consumidores a la sombra de cualquier autoridad. El reducir la edad mínima legal para consumir alcohol pondría a estas personas en una mejor posición porque ya no tendrían que esconderse para tomar con frecuencia, en cambio serían reconocidos por sus compañeros, padres y superiores los cuales le ayudarían a encontrar una solución a su adicción. Para las nuevas generaciones, el reducir la edad mínima legal para consumir alcohol contribuiría a que se abandone la ideología de que embriagarse y no tomar de una manera responsable es algo que debe ser alentado, el hecho de que sea legal consumir a cierta edad reduciría gran parte que se deje ver como algo extraordinario que solo los adultos pueden hacer. Una posible desventaja que podría surgir de reducir la edad mínima legal para consumir alcohol sería que se normalice el tomar alcohol en cualquier lugar, incluso aunque sea en moderación en lugares por ejemplo escuelas, bibliotecas y parques no sería correcto porque contribuiría a un habito irresponsable de consumo.
La realidad es que el consumo de alcohol no se puede suprimir porque es
algo que tiene sus raíces culturales de muchos años atrás, sin embargo la diferencia del ayer y el hoy es que hoy en día si existe la comunicación y los recursos para poder enfatizar a las nuevas generaciones acerca de los efectos del consumo del alcohol, así como plasmar una educación de consumo y limitación que a largo plazo remodelaría la percepción cultural que se tiene acerca del alcohol.
Cuando algo no funcionado de la manera en que debería funcionar, se deben
encontrar diferentes tácticas para resolver el problema, es por eso que es fundamental que en países como Estados