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^ Junta de
Castilla y León
A mis padres
Imagen cubierta: Monasterio de Santa María de Valbuena
I.S.B.N.: 978-84-9718-622-3
Depósito Legal: VA-760-2010
Impreso en España. Printed in Spain
En 1998, con motivo de haberse cumplido 900 años relevantes en los departamentos universitarios de España.
del nacimiento del Cister, se celebró una exposición, Mon- De todos ellos me siento muy orgulloso, no por lo que yo
jes y Monasterios. El Cister en el medievo de Castilla y León, que les haya podido enseñar sino por haberme permitido par-
constituyó un hito en la historiografía de la arquitectura ticipar de sus progresos en el conocimiento, y ahora sen-
medieval. El éxito se fundamentaba en algo que no es habi- tirme su más fiel discípulo en sus brillantes trabajos.
tual en muestras de este tipo, allí se exponían los frutos de Pero si no hay duda de sus valores científicos, para mi
un Proyecto Nacional I + D dedicado a la arquitectura resultan entrañables por su calidad humana.
monasterial hispana. Durante años un grupo de investiga-
Antonio García Flores es uno de los protagonistas de
dores trabajaron con entusiasmo en un tema que, aunque
este brillante grupo de investigadores. Trabajador e intuitivo
pareciese increíble, todavía no habíamos avanzado en su como el que más, solidario como ninguno. En este libro
conocimiento gran cosa con respecto a las aportaciones de que contemplamos aquí podemos vemos una muestra de
los grandes maestros de la primera mitad del siglo XX. su trabajo. El estudio que el grupo presentó en 1998 no
Fruto de este proyecto, además del paradigmático catálogo, era la meta de una línea de investigación, sino el punto de
obra de obligada consulta para aquellos que les interese el partida de nuevas investigaciones. Así es el progreso en la
tema, fueron tesis doctorales, aportaciones a congresos y investigación histórica: se llega a un momento en el que hay
un sin número de publicaciones. Sin duda, se puede decir que realizar un análisis de síntesis con el fin de obtener una
que sobre el tema hay un antes y un después del mismo. visión global; a partir de ese momento, con los resultados
En una época en la que muchos trabajos sobre las obtenidos se inicia una nueva revisión de los viejos mate-
obras de arte medieval, pretendiendo ser originales y atrac- riales y de otros nuevos. La obra de García Flores repre-
tivos, se escriben "bonitos" ensayos de la cultura del siglo senta ya una línea renovadora de investigación.
XXI que piensan que interpretan lo medieval, pero que nada La investigación no se centra sólo en la Universidad.
tiene que ver con la realidad de las creaciones y de los hom- Las instituciones, civiles y religiosas, son las primeras que
bres que las hicieron posible, y mucho menos con la socie- deben fomentarlas. La sólida formación de nuestro querido
dad que las "vivió". Los autores de aquel catálogo dieron Antonio le permitirá, manteniendo su primera y principal
una lección de lo que debe ser una investigación de carácter vocación, colaborar en la formación de grupos de investi-
histórico: catalogar el arte, conocer la actividad artística y gación histórica que tanto lustre dieron a nuestra historia en
progresar en el conocimiento de los hombres de su época. general y al de las órdenes monásticas en particular.
De este proyecto surgieron un grupo de jóvenes inves-
tigadores que, a mi juicio, constituyen hoy lo más sólido de Isidro G. Bango Torviso
la investigación medieval. La mayoría ocupa puestos muy Universidad Autónoma de Madrid, otoño de 2010
INTRODUCCIÓN
Este libro recoge, corregido y ampliado, el texto dio de los cenobios femeninos pertenecientes a la misma
correspondiente a la tesis doctoral que, dirigida por el cate- Orden —Sancti Spiritus de Olmedo y Las Huelgas y San
drático D. Isidro G. Bango Torviso, fue presentada en la Quirce de Valladolid—, a pesar de la escasez de sus restos
Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Autónoma medievales, ya que consideramos necesario contar con una
de Madrid el 29 de julio de 2 0 0 2 y calificada con sobresa- visión completa de la dimensión histórico-artística del Cís-
liente "cum laude" por el tribunal integrado por los doc- ter en dicha provincia. Y si el marco geográfico de nuestro
tores D. José Carlos Valle Pérez, D. Clementina Julia Ara
a trabajo corresponde a una delimitación política actual, el
Gil, D. Concepción Abad Castro, D. Etelvina Fernández
a a período cronológico elegido para el estudio de estos siete
González y D. Vicente Ángel Álvarez Palenzuela. Al año monasterios abarca desde el momento de su incorporación
siguiente fue editada en microfichas por el servicio de publi- a la Orden hasta su reforma a fines de la Edad Media —en
caciones de la UAM. el caso de los masculinos a través de la Congregación de
Castilla, en el de los femeninos por otras instancias—. Ello
El creciente interés existente por la investigación del
explica que hayamos dejado al margen otros dos monaste-
monacato medieval desde sus más diversos aspectos, ha per-
rios femeninos, fundados en el siglo XV, ubicados en la
mitido la aparición de importantes publicaciones, la edi-
misma capital, Nuestra Señora de Belén (1503) y San Joa-
ción de colecciones documentales hasta ahora inéditas, la
quín y Santa Ana (1595).
realización de excavaciones arqueológicas, etc. Gracias a ello,
hoy conocemos mejor el abundante patrimonio monu- Iniciamos el trabajo con una introducción histórica
mental de las diferentes órdenes monásticas y, por otra de carácter general sobre la implantación de la Orden en
parte, contamos con un material rico y variado que permite los reinos de Castilla y León, en los que lógicamente se
retomar, revisar y poner al día estudios clásicos realizados incluyen los territorios que durante los siglos medievales
en el pasado. formaron parte de ellos: Galicia, Asturias, Cantabria, País
En este sentido, el estudio de la arquitectura de los Vasco, La Rioja y parte de Navarra, Extremadura, Castilla
cistercienses de la provincia de Valladolid contaba con un la Mancha, Madrid, Murcia y Andalucía. Abordamos tanto
trabajo excepcional y pionero para la época en que fue ela- las cuestiones cronológicas relativas a la incorporación de
borado. Nos referimos a la obra Monasterios medievales de la las diferentes casas monásticas a la orden cisterciense, como
provincia de Valladolid, escrita en 1923 por Francisco Antón, las diferentes causas que motivaron su nacimiento (religio-
reeditada y ampliada en 1942. En esta obra se abordaba el sas, políticas, económicas, sociales, etc.), su filiación y sus
estudio de seis monasterios, cuatro cistercienses, uno pre- promotores.
monstratense y otro jerónimo, centrado principalmente en A continuación emprendemos el estudio sintetizado
el análisis formal de los edificios. Por nuestra parte escogi- de la arquitectura de los monasterios cistercienses valliso-
mos los conjuntos cistercienses —La Espina, Valbuena, Pala- letanos, que viene a constituir las conclusiones obtenidas a
zuelos y Matallana— ante su importancia en el marco de la través de las distintas monografías que aparecen en la ter-
arquitectura medieval española, a los que añadimos el estu- cera parte de la publicación. N o solamente nos preocupa-
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ron los aspectos formales de nuestros edificios sino que la tesis, tanto por la elección del tema como por sus con-
también dedicamos nuestra atención a los espacios y sus sejos, observaciones y horas de dedicación a la discusión de
funciones, haciendo hincapié en aquéllos utilizados como los aspectos que aquí expongo, y del que he aprendido a
lugar de enterramiento, ampliando el marco geográfico a observar u n edificio, y al Corpus de Arquitectura Monástica Medie-
los reinos de Castilla y León. Asimismo, nos detenemos en val Española, del Departamento de Historia y Teoría del Arte
aspectos puntuales de la construcción del monasterio: en de la universidad Autónoma de Madrid, y a todos sus
primer lugar los artífices, intentando esclarecer el verdadero miembros y colaboradores con los que trabajé durante tres
papel que jugaron monjes y talleres laicos en el desarrollo años, especialmente a mis amigos Juan Carlos Ruiz y Marta
de las fábricas monásticas; en segundo lugar, las distintas Poza, por su compañía, ayuda y amistad.
etapas del proceso constructivo seguidas en aquéllas. Por
último nos planteamos en qué medida estas arquitecturas A las comunidades de los monasterios de Las Huel-
suponen la entrada de aspectos innovadores y foráneos res- gas de Burgos, Dueñas, Las Huelgas y San Quirce de Valla-
pecto a la tradición edilicia de la zona en la que se asientan. dolid, Viaceli y Vico, en donde estuve —en algunos casos
durante largas temporadas— consultando sus archivos y
Seguidamente abordamos el estudio monográfico de bibliotecas, por el interés que pusieron en ello y su grata
los siete monasterios medievales, masculinos y femeninos, acogida. Y cómo no, un recuerdo especial para mis herma-
existentes en la provincia de Valladolid. Para ello se ha pro- nos de Huerta.
cedido a un exhaustivo estudio de la documentación de
cada uno de estos cenobios, en su mayoría inédita: no sólo A la Diputación de Valladolid por facilitarme en todo
aquélla perteneciente a la época que estudiamos, sino que momento el acceso al monasterio de Matallana, y a los
se han revisado también todas las fuentes modernas y con- arqueólogos que han llevado a cabo las excavaciones en el
temporáneas que nos pudieran dar información sobre la conjunto, Manuel Crespo, María Gallardo, M Jesús Puente a
historia constructiva de estas casas, o de otras estrechamente y Rosa San Miguel. A José Luis Velasco, actual Delegado de
relacionadas con ellas. Este trabajo se completa con la ela- Patrimonio de la Diócesis de Valladolid y anteriormente
boración de una planimetría exhaustiva de los restos con- párroco de Santa María de Valbuena, por las facilidades que
servados en cada uno de los edificios, así como de en todo momento me dio para el estudio del complejo
reconstrucciones hipotéticas tanto en planta como en monástico. A Esperanza Martín, vecina de Cabezón, y a D.
alzado de los proyectos medievales de alguno de ellos. José M. González Casado, párroco de Aguilarejo, quienes
a
Cada monografía se subdivide en cuatro secciones o me facilitaron el acceso a Palazuelos. Y a Albino Jorge,
apartados. La primera está dedicada a la historia del centro, entonces Director de la Escuela de Capacitación y Expe-
en la que se reflejan los grandes acontecimientos que rode- riencias Agrarias, del monasterio de La Espina, y al resto de
aron su vida durante el período cronológico elegido. A con- miembros de la comunidad de la Salle que allí viven, por
tinuación se realiza el análisis artístico del edificio, dentro toda la ayuda que me han prestado y el modo en que siem-
del cual ocupa un lugar destacado el estudio comparado de pre allí he sido acogido. Al proyecto Estudio Arqueológico Inte-
cada uno de sus elementos y espacios con respecto a los de gral del Monasterio de Santa María de Valbuena, del D e p a r t a m e n t o
otros monasterios de la orden, sin olvidarnos de otras cons- de Prehistoria, Arqueología, Antropología Social y Cien-
trucciones eclesiásticas coetáneas. Seguidamente tratamos cias y Técnicas Historiográficas de la Universidad de Valla-
de establecer el proceso crono-constructivo de las fábricas dolid, del que fui becario, y a sus directores científicos
y terminamos con una serie de apéndices, en los que se Germán Delibes y Julio Fernández Manzano, y técnicos
transcriben algunos de los documentos más relevantes de José Ignacio Herrán y M. Jesús Puente. Al Dr. José Carlos
a
su historia y se elabora un completo abadologio. Valle Pérez, por su inestimable ayuda y cercanía. Y a
Manuel Arias y Quina, por su amistad.
Para terminar, quiero expresar mi agradecimiento a
todas aquellas personas que de un modo u otro han con- Por último y sobre todo quiero dar las gracias a mi
tribuido a que este trabajo pudiera llevarse a buen término. familia, y muy especialmente a mi padre, por todo el apoyo
En primer lugar, a D. Isidro G. Bango Torviso, director de que me han prestado. Sin ellos, nada de esto vería la luz.
Primera parte
Introducción histórica
• 17 •
INTRODUCCIÚN HISTORICH
LA ORDEN DEL CÍSTER EN LOS los reinos hispánicos, pero el propio San Bernardo lo
REINOS DE CASTILLA Y LEÓN: desaconsejaba en una carta no sólo por la lejanía y difi-
4
Reyes y obispos se consideran dichosos si consiguen copia Así, habrá que esperar poco más de diez años para
de la casa y organización del siervo de Dios ¿Qué digo? A que los monjes blancos se asienten en nuestro territorio . 6
cuando tenga lugar, y probablemente de mano de este la adquisición de los terrenos por parte de los fundadores
monasterio borgoñón, la penetración cisterciense en la —en ocasiones se tardan incluso varios años en definir el
Península. futuro dominio monástico—, la solicitud al Capítulo Gene-
Anteriormente, ca.1127-1129, hubo un intento por ral, la inspección por parte de varios abades del territorio en
parte del abad Artauld de Preuilly de fundar una casa en donde se quiere instalar el monasterio para ver si reúne las
1 SAINT-THIERRY, 1994: cap. XIII, 571; cit. por BANGO TORVISO, 7 Comentan estos aspectos, MARTÍN, 1953 (3): 158 nota 42; GUE-
1998 (7): 17. RIN, 1960: 213; idem, 1963: 84; COCHERIL, 1961: 61-62; idem, 1964:
2LOCATELLI, 1992: 107-108; idem, 1997-1998: 21 y 24. 231-232; ÁLVAREZ PALENZUELA, 1978: 77-79; PÉREZ-EMBID, 1986:
3PACAUT, 1993: 121. 29-30; VALLE PÉREZ, 1991: 135. Por su parte, FORTÚN, 2007: 28-29,
4Obras completas de San Bernardo, 1990: VII, carta 75, 282-285. habla de un "ciclo fundacional" mucho más amplio que incluiría, ade-
5VALLE PÉREZ, 1991: 140-141; idem, 1991 (4): 769. más de lo citado en el texto, las construcciones iniciales y la formación
6Investigadores como COCHERIL, 1964: 232-233 o RUCQUOI, de un patrimonio y domino básico.
2000: 494-495, comentan cómo esta tardanza puede deberse a la inse- 8 GUERIN, 1960: 213 nota 3; ÁLVAREZ PALENZUELA, 1978: 241;
guridad frente a las incursiones musulmanas. PÉREZ-EMBID, 1986: 29.
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condiciones necesarias, la entrega de esas posesiones a una muchos los centros que todavía no cuentan con una inves-
comunidad que será la encargada de enviar los monjes y tigación seria y profunda de sus orígenes, y pretender por
hacerse cargo de él como casa-madre, la dotación oficial que nuestra parte presentar un catálogo definitivo de estos
se produce una vez han llegado los monjes, la confirmación monasterios significaría estudiar detenidamente cada uno
del monarca y finalmente la del pontífice . Las afiliaciones
9 de ellos, con todo lo que ello conlleva . 13
becerros o cartularios, a menudo falsificados por los pro- sometido desde entonces a la filiación de Clairvaux. Esta-
pios monjes y monjas en un afán de dotar de mayor anti- mos, y así se ha reconocido de forma casi unánime, ante "el
güedad y prestigio a su monasterio . 11
primer testimonio documental seguro e incontrovertible de
El panorama se complica aún más cuando acudimos la presencia cisterciense en tierras hispánicas", pudiéndose
a los cronistas de la Orden, a las polémicas Tablas de Cíte- considerar "el primer monasterio fundado por la Orden
aux o a los catálogos de fundaciones que se conservaban en del Císter en el territorio peninsular ibérico" , siempre y
15
algunas abadías, que aportan entre sí noticias y datos a cuando no aparezcan documentos serios y veraces que den
menudo contradictorios. la prioridad a otro cenobio.
A pesar de ello intentaremos realizar un inventario Uno de estos monasterios podría ser Fitero. Fechado
somero de las fundaciones cistercienses en los reinos de por la tradición en 1140 o 1141, aparece documentado
Castilla y León durante la Edad Media, ofreciendo de cada por vez primera el 25 de octubre de 1140, cuando Alfonso
uno de estos monasterios, tanto masculinos como femeni- VII entrega a Durando y a sus socios que viven en la igle-
nos, una visión rápida en la que se pongan de manifiesto la sia de Santa María de Yerga la villa de Niencebas . Hace 16
cronología de su establecimiento, quiénes fueron los impul- tiempo que se ha desestimado la posibilidad de que
sores del proyecto, el modo de incorporación —fundación Durando y sus compañeros fueran cistercienses proceden-
ex-novo o afiliación—, así como su filiación . N o obstante,
12 tes de L'Escaladieu, como se había afirmado tradicional-
somos conscientes de que muchos de los datos que ofrece- mente , señalando que debía tratarse de un simple grupo
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mos pueden ser incompletos o inexactos. Al día de hoy son de ermitaños que, eso sí, acabarían integrándose en la
9 Este proceso es constatado en monasterios fundados ya en el siglo 13Al margen hemos dejado aquellos monasterios que formaron parte
XIII, por ejemplo, Vega, Buenafuente o Herce. de órdenes militares afiliadas a la Orden cisterciense. Por otro lado, al
10 COCHERIL, 1964: 222. inventario de fundaciones acompañan dos tablas, una para los monaste-
1 1 A este respecto es significativa la larga disputa que incluso ha lle- rios masculinos, otra para los femeninos, en los que se recogen además
gado a nuestros días sobre la prioridad fundacional de Moreruela o de del nombre —en el caso de abadías con dos o más asentamientos, se hace
Fitero (vid. en último término, VALLE PÉREZ, 1991: 136-137). constar el del último—, la fecha y modo de incorporación y su filiación.
1 2 Además de la bibliografía específica para cada una de estas casas, 14LOSCERTALES, 1976: II, 27-28.
es interesante la consulta de algunos trabajos de carácter general como 15VALLE PÉREZ, 1998 (3): 1057. Vid. además del mismo autor, idem,
YEPES, 1609-1621; JONGELIN, 1640; MANRIQUE, 1642-1659; JANAUS- 1982: I, 25 y 63-6; idem, 1990: 136; idem, 1991: 140 y 151 y 156-
CHEK, 1877; COCHERIL, 1963; idem, 1964; ÁLVAREZ PALENZUELA, 157; idem, 1 9 9 1 (3): 150; idem, 1991 (5): 59; idem, 1992: 6; idem,
1978; GIBERT TARRUELL, 1981; MILLARUELO, 1981; PÓRTELA SILVA, 1994: 22; idem, 1998: 36; idem, 1998 (4): 4; idem, 2008: 219; idem,
1981; PÉREZ-EMBID, 1986; idem, 1986 (2); idem, 1989; MASOLIVER, 2008 (2): 140.
1987; VALLE PÉREZ, 1982: 25-29; idem, 1991; las fichas del catálogo 16MOTERDE ALBIAC, 1978, doc. 1, 356-357.
Monjes y monasterios..., 1998: 471-500; CAVERO DOMÍNGUEZ, 1998; idem, 17DAILLIEZ ha insistido en señalar a Yerga como cisterciense, "fun-
1999; CASAS CASTELLS, 2005: 28-38; ALONSO ÁLVAREZ, 2007; FOR- dado o afiliado en 1138/1139", y a Durando como su primer abad
TÚN, 2007; entre otros. (1988 (2): 3, 7 y 8), pero sin ninguna prueba documental.
INTRODUCCIÓN HISTÓRICA 19
Orden a través de ese monasterio, pero algunos años más taría en realidad de una afiliación que tuvo lugar entre
tarde . Recientemente se ha negado, incluso, la existencia
18 mediados de septiembre de 1147 —cuando encontramos a
de Durando y de una comunidad eremítica en Yerga . Raimundo en Cíteaux, en el Capítulo General de la Orden,
19
El monasterio de Niencebas aparece documentado hasta donde habría acudido para solicitar la incorporación
como tal el 2 de junio de 1141, con el abad Raimundo a la de su monasterio— y febrero de 1148 —momento en el que
cabeza, aunque en ese instrumento no se menciona todavía la un documento alude a un aspecto propio de los cistercien-
regla que siguen . En un instrumento de don Rodrigo de
20
ses, el que los monjes trabajen con sus propias manos— , 24
Cascante, obispo de Calahorra, dirigido al papa Urbano III opción esta última que parece más fiable. A mediados del
siglo XII —ca. 1147-1152— el monasterio se habrá trasladado
a fines de 1187, aquél señalaba cómo al tiempo que su ante-
a su asentamiento definitivo en Castellón-Fitero . 25
Ramírez, rey de Navarra, con su mujer Urraca, donan los unos monjes cistercienses que allí se encontraban se dirige
lugares de la Oliva y Veruela con todas sus posesiones a Santa Alfonso VII el 4 de octubre de 1143 para donarles las villas
María de Niencebas y a su abad Raimundo et tota congregatio- desiertas de El Cubo y Cubeto con una condición: Et mando
nem monachorum etfratrum sub regula beati Benedicti ibidem nunc ser- predictis Martino Cidis et monachis quodfaciant ibi in praedicta arber-
vientibus et successoribus ab Ordine cisterciensiumfratrum ipsius monasterii garia unum monasterium ordinis cisterciensis ad honorem Virginis Maríe
viventibus, aunque hay serias dudas sobre su autenticidad . 22
quod monasterium habeat iure hereditario . L a i n s a l u b r i d a d del
27
18VALLE PÉREZ, 1991: 146-147. 54; RODRÍGUEZ LAJUSTICIA, 2006; ALONSO ÁLVAREZ, 2007: 655 y 662;
19OLCOZYANGUAS, 2002: 19 y 27-29; idem, 2005: 28 y 38. Según entre otros). Aún más, se le ha acusado de ser una falsificación realizada
este autor, Yerga fue adquirida por el monasterio de Fitero entre 1179 y por el propio Dailliez utilizando como modelos para elaborarla dos
1200, y el pergamino que recoge la donación de Niencebas en 1140 fue documentos de Leire fechados en 1141 y 1145 (FORTÚN, 2006: 53-
escrito a partir del original en los últimos años del XII o principios del 55, en especial nota 19; idem, 2007: 40).
XIII, constituyendo la alusión a ese primer núcleo monástico y a Durando 23 De este opinión son OLCOZYANGUAS, 2002: 19, 30 y 34; idem,
un intento de quitar al abad Raimundo su protagonismo en la fundación 2005 : 29 y 44 ; idem, 2008 : 28; MELERO MONEO, 2004: 12; idem,
de la abadía fiterense. Sí aceptan, en cambio, la existencia del asenta- 75-76 y 77.Vid. además, PÉREZ CELADA, 2005: 358; TORRES SEVILLA,
miento en Yerga MELERO MONEO, 2004: 8; PAVÓN, 2005: 384; o MAR- 2005: 329; idem, 2008: 105; o FORTÚN, 2007: 27, 29, 30 y 31.
TÍNEZ ÁLAVA, 2007: 71-72; por traer los autores más recientes. 2 4VALLE PÉREZ, 1991: 140 y 148-150; idem, 2006: 817-818;
MONTERDE ALBIAC, 1978: doc. 2, 357.
20 ALONSO ÁLVAREZ, 2007: 655.
21GOÑI GAZTAMBIDE, 1965: 295; también citan el documento, 25 Aunque la historiografía ha señalado que Castellón fue un estable-
VALLE PÉREZ, 1991: 147 y OLCOZYANGUAS, 2002: 29; idem, 2005: cimiento independiente del definitivo de Fitero (MONTERDE ALBIAC,
39-41 y 44. 1978: 264-266), el que en un documento de diciembre de 1189 se
22Publicado por DAILLIEZ en 1987 (doc. II, 173-174), un sector refiera al monasterio de Casteion, quod nunc dicitur de Fitero (MONTERDE
importante de la historiografía que se ha ocupado de Fitero o de los ALBIAC, 1978: doc. 210, 516) hace pensar que no hubo tal cambio de
monasterios de la Oliva y Veruela, lo han aceptado como verdadero lugar, como señalan MELERO MONEO, 2004: 8-9; idem, 2007: 70-71 y
(idem, 1988 (2): 27-28 ; OLCOZYANGUAS, 2002: 36, nota 87; idem, 77; o FORTÚN, 2006: 52. Por otro lado, OLCOZYANGUAS sugiere que
2005: 41 y 44; MELERO MONEO, 2004: 8; idem, 2007: 72 y 75; PAVÓN, lo que sí hubo fue un desplazamiento dentro del mismo término de
2005: 389; MUNITA LOINAZ, 2006: 13; MARTÍNEZ ÁLAVA, 2007: 72; Fitero-Castellón (2002: 30, 33, 34 y 43-44; idem, 2005: 41, 44 y 54-
etc...). Sin embargo muchas voces se han levantado para rechazar con- 58; idem, 2008 : 28 nota 14), teoría desmentida por MELERO MONEO
tundentemente el citado documento, argumentando que se trata de una en las obras citadas. Esta última autora señala que el traslado se debió a
copia de fines del siglo XV probablemente con serias interpolaciones y lo poco saludable del primer emplazamiento (2004: 13-14).
de la que no se puede verificar su existencia, pues Dailliez era el único 26 LERA MAÍLLO, 2001: 341-346 ; LERA MAÍLLO et alii, 1998: 3-5.
que conocía su paradero (VALLE PÉREZ, 2006: 817-818; idem, 2008: 2 7Idem: doc. 1, 9-13.
219 nota 10; CABANES PECOURT y RODRÍGUEZ LAJUSTICIA, 2006: 53- 28 Idem: doc. 42, 46-47.
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q u e viven sub ordine beati Benedicti las sernas d e Aldeafalcón, de El monasterio de Santa María de Osera fue fundado
las viñas de Prado Román y la del Molino . La primera 29 el 2 de noviembre de 1137 por Alfonso VII a ruego de Fer-
mención expresa a la Orden es algo tardía, en una bula de nán Pérez de Traba , y aunque la tradición de la Orden
36
Alejandro III de 17 de mayo de 1179, aunque la donación sitúa su afiliación a la Orden en 1141, la primera mención
al abad Pedro de Sacramenia en 1162 del término de Rute a ella de modo explícito se encuentra en una bula de Ino-
para fundar un monasterio que tres años más tarde aparece cencio III de 25 noviembre de 1199 . Frente a la fecha tra-
37
establecido y además como cisterciense, adelanta unos años dicional, que sigue siendo defendida en nuestros días , los
38
vaux y a los monjes que ya vivían en San Pedro de Espina en otra bula de 1155 se aludía a una característica propia
la donación de su hermana . 32
de los cistercienses —que los monjes trabajan la tierra con
Parece que ese mismo año el monasterio benedictino sus manos—, si bien esta fórmula no es del todo conclu-
de Monfero, fundación del abad Florencio de Santa Marina yente para probar que un monasterio esté integrado en la
de Valverde llevada a cabo en 1134, se afiliaba a la Orden Orden . Otros, en cambio, critican esta posición señalando
40
a través de Sobrado. La cronología de la Orden, sin que entre las propiedades inmediatamente anteriores a esa
embargo, establece la adscripción al Císter en 1 2 0 1 y así frase se cuenta una adquirida mucho tiempo después
ha sido aceptado unánimemente . N o obstante, su vincu-
33 (1208), y que entre las posteriores hay otra donada en
lación a este instituto aparece documentada muchos años 1139; y concluyen que con esa frase no se pretendía des-
antes: por un lado, la presencia en Monfero de monjes pro- lindar qué bienes tenía el monasterio antes y después de afi-
cedentes d e O s e r a —Abbas Iohanes, qui fuisitis de Ursaria mona- liarse a la Orden, sino que en todo caso se refería solamente
chus en 1158 y 1167—, y por otro, la mención de la ordine a la heredad inmediata anterior (1148), debiendo ubicar la
cysterciense a la que pertenece el monasterio en dos instru- incorporación al Císter entre esa año y 1199, si bien no
mentos de 19 de enero de 1182. Un mss. del siglo XVII descarta la veracidad de la data tradicional . 41
sobre la fundación y dotación del monasterio apunta que la A pesar de que la tradición del monasterio coloca la
reforma cisterciense se introdujo cuando "finco años atrás fundación de Santa María de Cántavos por Alfonso VII en
havía comentado en aquella Cassa [Sobrado]", es decir, 1142 y la cronología de la Orden en 1144, la primera noti-
1147 . La anexión a la Orden y su consiguiente emanci-
34
cia documental relativa al monasterio data de 30 de enero de
pación respecto de Carracedo motivó un largo pleito entre 1 1 5 1 cuando el citado monarca entrega a Deo et ecclesie Sancte
éste y Sobrado que se saldó a favor del último . 35
Marie de Cantavos y a su abad Rodulfo, la villa de Cántavos con
29 En la versión que ofrece Manrique se habla de regula en vez de la 33 VALLE PÉREZ, 1982: I, 65.
ordine que aparece en el cartulario del monasterio. Hemos manejado la 3 4 LÓPEZ SANGIL, 1999: 19-29 y 233-234.
transcripción de RUIZ DE GALARRETA, 1969: doc. 1, 47-49. 35 Idem: 33-35 y 151.
3 0Vid. más abajo en el texto la cronología de la fundación de Rute- 36 ROMANÍ MARTÍNEZ, 1989 (2): I, doc. 15, 17-18.
Montelaturce. 3 7 ROMANÍ MARTÍNEZ, 1989 (2): I, doc. 97, 109.
31 VALLE PÉREZ, 1991: 155; VALLE PÉREZ, 1992 (2): 217-218. Sin 38 YÁÑEZ NEIRA y GONZÁLEZ GARCÍA, 2000: 52.
embargo, hoy día algunos autores siguen defendiendo la fecha de 1141, 39 VALLE PÉREZ, 1982: I, 95-97.
por ejemplo, MERINO DE CÁCERES, 2003: 13. 40 VALLE PÉREZ, 1991: 154.
32 Vid. la monografía correspondiente. 41 ROMANÍ MARTÍNEZ, 1989: 13-14 y 17.
INTRODUCCIÓN HISTÓRICA 21
su t é r m i n o utfaciatis ibi Ordinem de Cistels et serviatis ibi Deo in per- De este modo recogía la colección de los Instituta el
petuum . El carácter confirmatorio del instrumento indica
42 decreto que en septiembre de 1152 establecía el Capítulo
que el monasterio estaba fundado antes de esa fecha, pero la General: a partir de ese momento no se fundaría ni se afi-
falta de documentos anteriores hace que debamos situar su liaría ningún monasterio. N o obstante, se dejaban fuera
erección ca.1151. u n año después, el 3 de marzo de 1152, aquellas abadías cuyo proceso de fundación hubiera sido
Eugenio III toma bajo su protección al monasterio y sus iniciado antes de dicho capítulo siempre y cuando estuviera
bienes, entre los que se menciona la granja de Huerta . Entre 43 definitivamente cerrado para el capítulo del año siguiente.
abril de 1158 y 1164 se produjo el traslado a Huerta —la Las causas de esta prohibición —desechada hace tiempo
tradición lo sitúa en 1162—, apareciendo documentado su la idea de que fueron las amplias posesiones y derechos que
nuevo asentamiento en una bula de 2 5 de septiembre de poseían los monasterios hispanos, contrarios al espíritu aus-
1 1 6 4 p o r la q u e A l e j a n d r o III c o n f i r m a a Blasio abbati monas- tero de la Orden, las que la motivaron —, hay que buscarlas
49
Anno ab Incarnatione domini M°C°LII°, statutum est in gene- década de los 60 comenzó una nueva oleada de incorpora-
rali capitulo abbatum, ne ulterius alicubi construantur nova abbatia nos- ciones .52
tri ordinis, nec aliquis locus alterius religionis per subiectionem nostro Documentado por primera vez el 1 5 de noviembre
ordini sotietur . 48 de 1154 con el abad Giraldo a la cabeza y la advocación de
42 GARCÍA LUJÁN, 1981, doc. 1, 3-4. sión y fundación en Veruela y La Oliva. Esta hipótesis, sin embargo, cre-
43 Idem: doc. 2, 5-7. emos que carece de fundamento.
4 4Id. doc. 5, 12-13. Una buena síntesis sobre el problema cronoló- 5 0 LEKAI, 1987: 61 y ss; PACAUT, 1993: 141-142; LOCATELLI, 1997-
gico de la fundación de Huerta en SENRA GABRIEL Y GALÁN, PALOMO 1998: 25; WADDELL, 1999: 229-230, 273, 315-318.
FERNÁNDEZy MARTÍNEZ TEJERA, 1991:141-143. 51 VALLE PÉREZ, 1986: 26-27, comenta el incumplimiento de esa
45 Vid. la monografía. normativa en nuestro país, como lo demuestran las fundaciones de
46 VALLE PÉREZ, 1982: I, 153. Por su parte, YÁÑEZ NEIRA y BARRAL Melón y Montederramo, y tal vez Meira (vid. del mismo autor 1982: I,
RiBADULLA, 2000: 60-61, se aferran a la tradición y sitúan la fundación 189). Para el caso portugués, MARQUES, 1991: 178, señala cómo tam-
en 1143, a pesar de que no hay documento alguno que hable del monas- bién se produjeron diversas fundaciones (Bouro, Maceira, Salzeda y
terio antes de 1154. Alcoba^a, aunque tal vez los trámites para este último se habían iniciado
4 7VALLE PÉREZ, 1982: I, 77 nota 13. ya en 1152). En cambio en Gran Bretaña sí se cumplió, no encontrando
48 WADDELL, 1999: 364 y 492. fundaciones desde 1147 hasta mediados de los 60 (BURTON, 2000:
49 Esta teoría, defendida por TYBURG(I953: 183-188; idem, 1964: 301). Lo mismo pasaría en Alemania, en donde frente a las abundantes
85-88), fue criticada de modo acertado por ÁLVAREZ PALENZUELA, fundaciones en el período 1130-1150, los veinte años siguientes fueron
1978: 39-40. Recientemente OLCOZYANGUAS, 2005: 58, ha retomado un período estático, que atribuye EYDOUX a la segunda y la llegada al
la tesis "hispana" de Tyburg aunque modificando el motivo de la prohi- trono de Federico Barbarroja y su lucha contra el papado (1952: 18).
bición: para él la cuasa estaría en la problemática de Fitero y su expan- 5 2WADDELL, 1999: 312.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
22
Santa María, la fundación de Melón se ha colocado en dar un monasterio , constando como tal tres años más
59
Tampoco hay documentación definitiva que aclare la 20 de agosto de 1181 Diego Jiménez y su mujer Guiomar
fecha exacta de afiliación a la Orden del monasterio de San le cedieron el viejo monasterio de san Prudencio con la con-
Juan de Montederramo, aunque el cambio de hábito tuvo dición de que se trasladasen a Montelaturce . La comuni- 61
lugar necesariamente entre 1155, última vez en la que apa- dad de este último cenobio quedó absorbida por la de Rute,
rece con la advocación de aquél santo, y el 7 de octubre de que ya estaba establecida en el nuevo asentamiento el 14 de
1163, cuando en una bula de Alejandro III ha trocado el febrero de 1182 . Sin embargo, la cesión definitiva de San
62
título por el de santa María y se afirma que siguen la obser- Prudencio no llegaría hasta el 20 de mayo de 1203, cuando
vancia cisterciense: In primis si quidem statuentes ut Ordo monas- Rodrigo Díaz, hijo de Diego Jiménez, señor de los Came-
ticus qui secundum Deum et B. Benedicti Regulan et institutionem ros, done el monasterio a la Orden y lo coloque bajo pro-
Cisterciensium fratrum in eodem loco noscitur institutus perpetuis ibi- tección real . 63
mento en el que aparece bajo la advocación de santiago, y el Trece años después de que fracasase el intento de fun-
17 de abril de 1162, cuando en una bula de Alejandro III , 57
dación de un monasterio benedictino femenino por parte de
además de haber trocado el título por el de santa María, se los condes Vela Gutiérrez y Sancha Ponce, quienes donaron
hace mención expresa a que los monjes viven secundum Deum a Aldara Pérez y a sus sucesoras la villa de Nogales, más
et Beati Benedicti regulam et institutionem Cesterciensium .
58
Quintanilla, Bóveda y otras posesiones, con una condición,
El 19 de abril de 1162, don Pedro Jiménez donaba damus tibi et tuis sociabus vel quae post te futurae erunt ad serviendam Deo
al abad Pedro de sacramenia el término de Rute para fun- sub regula sancti. Benedicti , la condesa viuda hacía entrega el 21
65
53 VALLE PÉREZ, 1990: 135; idem, 1998 (4): 6. (2): 478; también en idem, 1990: 47-54; idem, 1998).
5 4 VALLE PÉREZ, 1982: I, 208 y 231 nota 38; publican el documento 59 GARCÍATURZA, 1992: 20 y doc. 27, 45-46.
ROMANÍ MARTÍNEZ y OTERO PIÑEYRO, 2009: 36-37. 60 Idem: 20 y doc. 28, 46.
5 5 VALLE PÉREZ, 1982: 1,189-190 y 198 nota 17. Vid. además, SIN- 61 Idem: 22 y doc. 45, 56-57.
GUL, 2002: 13-17. 62 Idem: doc. 47, 57-58.
5 6 ALFONSO ANTÓN, 1986: doc. 11, 304-305. 63 Idem: 22-23 y doc. 57, 65-66
5 7 idem: doc. 13, 306-308; idem, 2008: 129, con fecha 4 de octu- 64 VALLE PÉREZ, 1982: I, 245.
bre de 1163. Sin embargo VALLE PÉREZ, 1991: 137-139 especialmente 65 La fecha del documento es 6 de abril de 1150 (CAVERO DOMÍN-
nota 12, e idem, 2008: 220 nota 15, ha demostrado que la fecha correcta GUEZ, 2001: 32-33; CALDERÓN MEDINA, 2008 (2): 442-443). El
del documento, a partir de la data que ofrece Manrique, es la de 17 de Tumbo del monasterio, y a él han seguido historiadores y autores pos-
abril de 1162. teriores, han señalado que la destinataria de la donación era abadesa del
5 8 Vid. VALLE PÉREZ, 1991: 136-139; idem, 2008: 219-220; monasterio de San Miguel de Bóveda —cuando en el documento además
ALFONSO ANTÓN, 2008: 129. Por su parte, GRANJA ALONSO ha vuelto, ni se hace mención de que fuese abadesa ni que lo fuese del monasterio
aunque sin argumentos concluyentes, a la teoría tradicional, llegando a de Bóveda—, al que algunos incluso hacen por esas fechas ya cisterciense
decir que en 1131-1132 fue fundado como cisterciense, pero que hasta (vid. más abajo en el texto), y que la fundación no salió adelante por la
1143 no se produciría el asentamiento de los monjes; y que el monas- escasez de la dotación (CAVERO DOMÍNGUEZ, 2007: 86-87; ALFONSO
terio de Santiago de Moreruela "de Tábara" es diferente al de Santa ANTÓN, 2008: 34; CALDERÓN MEDINA, 2008 (2): 432-439, señalando
María de Moreruela "de Guadaña", y que los monjes cistercienses de esta última —sin fundamento alguno— que en realidad lo que sucedió fue
este último se sentían herederos de aquella otra fundación, por lo que que Doña Sancha Ponce expulsó a las monjas para responder, introdu-
durante un tiempo mantuvieron su advocación; y concluye su exposi- ciendo a monjes cistercienses en su lugar, al cambio de mentalidad pro-
ción diciendo: "La tradición tiene un valor histórico que hay que acep- piciado por la introducción de la Orden en la Península).
tar, en tanto no haya razones más convincentes para cambiarla" (1998
INTRODUCCIÓN HISTÓRICA 23
de diciembre de 1164 al abad Gualterio de Moreruela la villa Madroñal. Lo cierto es que en un documento de 1437 que
d e N o g a l e s ad usum et cultum monachorum cisterciensis ordinis . 66
recoge la relación de todos los privilegios que poseía el
El 22 de septiembre de 1165 Diego Martínez junto monasterio antes de que desaparecieran en un incendio, el
con el Maestro Pedro hacía entrega del viejo monasterio de instrumento más antiguo que aparece recogido es el de
San Andrés de Valbení al abad Guillermo de Valbuena con 1167 , debiendo por ello y por el propio carácter funda-
73
la c o n d i c i ó n d e q u e ordo cisterciensis ibidem integer et illibatus cus- cional del documento, situar la fundación en torno a ese
todiatur et sit abbatia in perpetuum. A finales del p r i m e r c u a r t o año, y aunque en el documento de 1169 tampoco se dice
del siglo XIII el monasterio se traslada a su definitivo empla- qué regla sigue el cenobio, el que conste la advocación
zamiento, Palazuelos, donado con ese fin en 1213 por m a r i a n a y q u e se aluda a los monachi vel conversi vestri Ordinis,
Alfonso Téllez . 67 hace pensar que ya entonces era cisterciense . Fue filial de
74
L'Escaladieu . 75
Aunque la tradición del monasterio de La Espina,
casa-madre de Sandoval, coloca su fundación en 1173 y la Los orígenes de Rioseco deben remontarse a una
cronología de la Orden en 1171, la primera noticia que comunidad eremítica a quien Alfonso VII donaba el 4 de
tenemos de este monasterio data de 1167. El 15 de febrero noviembre de 1139 la villa de Quintanajuar y otras pose-
de este último año los condes Ponce de Minerva y Estefa- s i o n e s . L a d o n a c i ó n se dirige a Christoforo monacho et fratri-
76
nía Ramírez donaban a Diego Martínez y a sus fratribus tuis bus tuis, sin mencionarse ninguna regla ni la condición de
in Christo, tam praesentibus quam futuris, sub Regula B. Benedicti monasterio de ese asentamiento. Posteriores donaciones del
secundum constitutionem Cisterciensem, del lugar d e S a n d o v a l y monarca (numerosas en 1150) se dirigen a Martín y a Juan
las heredades de Valverde y Santa Eugenia , constando el 68
y a sus sociorum monachorum, constando ya Quintanajuar bajo
2 6 d e o c t u b r e del a ñ o s i g u i e n t e el abath Gonzalo d e Sancta advocación mariana, aunque sigue sin hacerse referencia a la
Maria a Sompnoalis , aunque no se menciona en este docu-
69
regla que siguen o el título del superior . Hay que esperar
77
1140 o 1 1 4 1 y en un asentamiento cercano, la ermita del barajado para situar la afiliación a la Orden oscila entre
66 CAVERO DOMÍNGUEZ, 2001: doc. 5, 36-38 (erróneamente en la tratase de una historia manuscrita del monasterio, no un documento ori-
regesta que encabeza la transcripción del documento —página 10 y tam- ginal y auténtico.
bién en 2007: 8 7 - da como fecha el año 1163); CALDERÓN MEDINA, 75 Aunque no hay documentos que lo confirmen y haciéndose eco de
2008 (2): 443-445. una antigua tradición (PÉREZ ARRIBAS, 1998: 29-32, recoge varios tes-
67 Vid. su monografía. timonios relativos a este asunto), OLCOZYANGUAS, 2002: 73 y 78; idem,
68 CASTÁN LANASPA, 1981: doc. 4, 45-46; HERRERO JIMÉNEZ, 2005: 83-84 y 89, tomando como fuente el manuscritofiterense y las Memo-
2003: doc. 6, 53-54; CALDERÓN MEDINA, 2008: 36-37. rias delmonasterio de Fitero del P. Calatayud, sugiere que la comunidad
69 CASTÁN LANASPA, 1981: doc. 5, 46-47; HERRERO JIMÉNEZ, 2003: monástica que a fines de 1158, tras salir de Calatrava, se había asentado
doc. 7, 55. en Ciruelos, se trasladó poco después de la muerte de Raimundo
70Vid. más información y detalles en la monografía de la Espina. (ca.1161-63) a Córcoles. Siguiendo al manuscritofiterense, tras el Capítulo
71 DÍAZ IBÁÑEZ, 1995: doc. 1, 432. General de 1164, L'Escaladieu asumió la tarea de encauzar el futuro de
72 Idem: doc. 2, 433-434. la comunidad errante, part de la cual se había asentado en Córcoles
73 Idem: 367 nota 19 y doc. 11. Este autor, sin embargo, concluye (idem, 2002: 76-78). Esto explicaría la existencia de una comunidad
fijando la fecha de fundación entre 1164-1165 y 1167, y señalando ade- previa a la fundación.
más que el fundador fue Alfonso VIII. 76 GARCÍA Y SAINZ DE BARANDA, 1961 (2): doc. 2, 636-637; CADI-
ABAD CASTRO, 1990: 48. Por su parte, PÉREZ ARRIBAS, 1998: 94,
7 4 ÑANOS BARDECI, 2003: doc. 1, 110.
indica cómo en uno de los inventarios realizados durante la Desamorti- 7 7 CADIÑANOS BARDECI, 2003: docs.4 a 8, 112-16.
zación se catalogó un libro bajo el siguiente título: "Un libro apergami- 78 GARCÍAYSAINZ DE BARANDA, 1961 (3): doc. 14, 748-749; CADI-
nado en que consta se fundó este monasterio en el año de 1140". Este ÑANOS BARDECI, 2003: doc. 14, 121-122.
autor se pregunta entonces si no sería cierta la fecha tradicionalmente 79 GARCÍAYSAINZ DE BARANDA, 1961 (3): doc. 15, 749-750; CADI-
atribuida para tal acontecimiento, aunque no debemos descartar que se ÑANOS BARDECI, 2003: doc. 17, 123-124.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
24
1147 y 1150 , ésta tuvo que ocurrir necesariamente des-
80 El 12 de mayo de 1159 Gonzalo Marañón y María
pués de 1151, data en que se incorpora a la misma Val- García donaban el lugar de Bujedo al monasterio francés
buena, su casa madre. Por nuestra parte creemos que tras un de G i m o n t pro abbatia construenda secundum consuetudinem cister-
episodio eremítico con Cristóbal a la cabeza, hacia 1170 se ciensis ordinis, pero por causas de momento desconocidas no
organizan en una comunidad monástica e inmediatamente se llevó a cabo . Posteriormente el matrimonio lo volverá
90
después —ca. 1171— acaba integrándose en la Orden. Entre a intentar, pero en esta ocasión el monasterio destinatario
1180 y 1184 la comunidad se traslada al hospital de San de la donación será L'Escaladieu . Aunque la primera noti-
91
tino, con Guillermo a la cabeza, y a quien Alfonso VIII con- que fue fundado por Afonso Enriques el 30 de marzo de
cedía el 28 de noviembre de ese año la heredad de Sajazarra . 85 1170, señalando algunos autores una etapa anterior bene-
Probablemente coincidiendo con el cambio de hábito, reci- dictina, pero las noticias más antiguas que hablan de la exis-
bido de manos del abad Raimundo de Veruela, se trasladaría tencia del monasterio datan de 1174, momento en que las
la comunidad a este último lugar, fechando la tradición del tierras sobre las que se levanta el monasterio eran leonesas.
monasterio tal acontecimiento el 12 de mayo de 1171 . Lo 86 En enero de ese año el monarca portugués confirmaba al
cierto es que el 10 de octubre de 1172 Doña Teresa y sus abad Domingo del monasterio de Torre de Aguiar los términos
sobrinos donaban a Guillermo, ahora abad de Santa María de que le había donado anteriormente y los acotaba ; y en el 95
Sajazarra, la mitad de la villa de Arteaga, haciéndose mención 22 de agosto de ese mismo año, Fernando II dona a Deo et
expresa que la donación se otorgaba Deo et sacrosancto Cisterciensis beate Marie de Aquilari y a su abad Hugo, las granjas de Turris
Ordini . Cuatro años más tarde, el 1 de noviembre de 1176,
87 Aquilarum y la de Rio Chiquo, con su jurisdicción civil y cri-
Alfonso VIII le donaba las propiedades de Herrera, Herre- minal y les exenta de todo pecho y tributo . Dejando al 96
bre de 1187 bajo el nombre de Herrera . 89 por el rey leonés al obispo de Ciudad Rodrigo y en 1174
80 En la monografía de Valbuena nos hacemos eco de las diferentes sugiere que algunos de los monjes que acompañaron a Raimundo de
opiniones al respecto. Fitero a Calatrava y luego a Ciruelos y a Córcoles, llegaron hasta el lugar
8 1En diciembre de 1180 Gonzalo Pérez y su mujer donaban el hos- de Bujedo poco después de la fundación del monasterio alcarreño y se
pital de San Cipriano para que se traslade el monasterio allí (GARCÍA Y afiliaron años después (1172) al cenobio francés.
SAINZ DE BARANDA, 1962 (2): doc. 42, 325-326, con fecha de 1186; 92 VALLE PÉREZ, 1986: 25-28, concluye que se debe datar "la fun-
seguimos la cronología corregida por ÁLVAREZ PALENZUELA, 1978: 125; dación efectiva del Monasterio de Santa María de Bujedo ca.1178"; por
por otro lado, CADIÑANOS BARDECI, 2003: doc. 32, 134-135, lo data su parte VALENTÍN DE LA CRUZ, 1990: 85-97, hace un repaso a todas
hacia 1182), constando en septiembre de 1184 bajo la advocación de las fechas que se han adjudicado, y termina señalando que fue fundado
Sancti Cipriani de monte qui vocat Ocha (GARCÍA Y SAINZ DE BARANDA, 1962: entre 1166 y 1176, fecha ésta de la paz entre Castilla y Navarra (97).
doc. 30, 60; CADIÑANOS BARDECI, 2003: doc. 34, 136). 93 Sobre los problemas fronterizos entre los reinos castellano-leone-
82 GARCÍA Y SAINZ DE BARANDA, 1963: doc. 67, 508-509; CADIÑA- ses y Portugal, vid. en último término, LADERO QUESADA, 1997; y para
NOS BARDECI, 2003: docs.73 y 74, 163-165. el caso concreto de la Riba Coa y Aguiar, vid. la revisión que hace del
83 En 1207 ordenaba al abad de Morimond inspeccionar cuál de los tema SÁNCHEZ-ORO ROSA, 1997: 54-55, 61-62, 74-75 y 120-125.
dos lugares, Rioseco o San Cipriano era más adecuado. 9 4 Además de la bibliografía que aquí citamos, puede encontrarse más
8 4CADIÑANOS BARDECI, 2003: doc. 153, 221. en la monografía de Valbuena, en donde tratamos la cuestión de la filia-
85 LÓPEZ CASTILLO, 1985: doc. 1, 184-185. ción de Aguiar.
86 YÁÑEZ NEIRA, 1975 (2): 36; CANTERA MONTENEGRO, 2010: 6. 95 BORGES, 1998: doc. 6, 222.
8 7LÓPEZ CASTILLO, 1985: doc. 2, 185-186. 96 Idem: doc. 5, 219-220. El documento lleva erróneamente la fecha
88 Idem: doc. 4, 187-188. de 1165
89 Bula de Gregorio VIII confirmando a L'Escaladieu todas sus pose- 9 7 LADERO QUESADA, 1997: 432 nota 8, sugiere que es extraño que
siones, privilegios y filiales (DAÍLLIEZ, 1990: doc. 3, 77-81, en concreto la copia de este documento sea de 1306, precisamente cuando más con-
78). venía a los intereses políticos de Dinis I para hacerse con este territorio,
90 VALENTÍN DE LA CRUZ, 1990: 89, sugiere que tal vez la prohibi- apuntando además que es muy extraño que los propios monjes de Aguiar
ción de fundaciones del Capítulo General de 1152 tuvo parte de culpa. no lo conocieran ya en el siglo XIII.
91 OLCOZYANGUAS, 2002: 78-79; idem, 2005: 89, siempre siguiendo
al manuscritofiterense y a las Memorias del monasterio de Fitero del P. Calatayud,
INTRODUCCIÓN HISTÓRICA 25
el monarca la entregaba a Aguiar con su consentimiento, El origen de Óvila tiene lugar en el intercambio reali-
apareciendo entre las posesiones que constan en la bula de zado el 12 de agosto de 1181 por Alfonso VIII con la igle-
creación de aquel obispado (25 de mayo de 1175), el sia de Sigüenza de la heredad de Quinqueyuga por los
monasterio de Turre Aquilan . En 1182 Lucio III confir-
9& términos de Muriel, Sotodosos y Santa. María de Benacalde
maba su fundación y le exentaba del pago de diezmos, seña- ad edifficandam abbatiam in prefato Murel vel alibi in pertinentiis suis .
106
lando no sólo su pertenencia a la Orden y filiación a Un año después la existencia del monasterio queda confir-
Boulbonne, sino la noticia de que el primer asentamiento mada por la bula de Lucio III de 23 de noviembre en la que
que tuvo el monasterio fue Torre de Aguiar . 99 t o m a b a j o su protección a dilectisfiliis Petro Abbati Santae Mariae
1164 es la fecha que tradicionalmente se viene dando de Murelo y confirma sus posesiones, entre los que se ya se
para la fundación del monasterio de Bonaval por parte de encuentra la granja de Óvila . Aunque en ninguno de los
107
Alfonso VIII, cuando el primer testimonio documental que dos instrumentos se menciona la Orden ni regla que sigue el
alude a la existencia del monasterio es un instrumento de recién creado monasterio, todos los investigadores le consi-
ese mismo monarca expedido el 2 4 de noviembre de deran cisterciense desde su fundación, procediendo los mon-
1175 . En él concede al abad Nuño de Bonaval el propio
100
jes de Boulbonne. Entre la data de este último documento y
monasterium Sanctae Mariae eiusdem Bonaevallis, vestrisque successo- el 1 de septiembre de 1186 el monasterio se mudó a Óvila,
ribus universis et monachis ibi degentibus tam presentis quam futuris, pues en esta fecha Alfonso VIII dona a Deo et Beate Maria et
otros lugares y propiedades, y acota sus términos. El carác- Monasterio quod ad honorem ipsius per me servum et vicarium suum et
ter confirmatorio de este documento invita a pensar que Cistesciensis Reglaefratribus de novofundatum est in loco qui dicitur Ovila
antes de esa fecha ya existía como monasterio, y esto viene y a su abad Esteban el aprovechamiento de las aguas y bos-
avalado, así como su vinculación a la Orden, por la presen- ques de una parte del Tajo . El 29 de junio de 1191 el pro-
108
cia de su abad en el capítulo general celebrado en septiem- pio monarca confirma al monasterio todas sus posesiones . 109
donaba al monasterio de Sobrado la possessione mea que antiquitis Aunque hasta el capítulo general de 1206 no hay
dicebatur Venivives... ut ibi abbatiam construatis .Tres
102 años m á s tarde documento alguno que certifique la pertenencia de Oya a
ya existía el monasterio, pues el 18 de abril de 1179 Alfonso la Orden, se ha venido aceptando 1185 como año de afi-
V I I I p o r amore et precibus Bernardi monasterii Sancte Marie de Valle liación de este monasterio que tiene sus orígenes en tres
Viridi de Bovadella abbatis dono et concedo sicut iam dudum dederam et núcleos eremíticos que unidos en uno solo formaron un
concesseram Deo et monasterio de Superaddo secundum Cysterciensem ordi- cenobio que vive bajo la RB al menos desde 1149 . 111
98 FERNÁNDEZ FLÓREZ, 1991: doc. 1382, 350-352; SÁNCHEZ-ORO 105La primera mención a este monasterio en las definiciones de los
ROSA, 1997: 125. Respecto a la jurisdicción diocesana sobre los monas- Capítulos Generales es ya muy tardía, de 1211 (CANIVEZ, 1933-1941:
terios cistercienses, vid. la monografía de Valbuena. I, 1211, def.11, 380). Vid. lo que se dice al respecto en la monografía
99 SÁNCHEZ-ORO ROSA, 1997: 126; BORGES, 1998: 52. de La Espina.
100 GONZÁLEZ, 1960: II, 397-398. 106LAYNA SERRANO, 1932 (1998): doc. 1, 155-156.
1 0 1En la monografía de Valbuena comentamos todas estas noticia con 107Idem: doc. 2., 157.
detalladas referencias bibliográficas. 108Idem: doc. 3, 157-158.
102 LOSCERTALES, 1976, II, doc. 40, 68-69; CALDERÓN MEDINA, 109MILLARES CARLÓ, 1933: doc. 1, 13-15.
2008: 37-38.. Vid. la correspondiente monografía.
1 1 0
103 LOSCERTALES, 1976: II, doc. 41, 69-70. 111VALLE PÉREZ, 1982: I, 275; y recientemente CENDÓN FERNÁN-
104 VALLE PÉREZ, 1982: I, 65-66; PÉREZ-EMBID, 1986: 271 y 277- DEZ, 2005: 467.
278; ARA GIL, 1990: 40-41; CALDERÓN MEDINA, 2008: 30-32.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
26
cómo se afilia a la Orden. En efecto, el 23 de noviembre de cienses, las importantes donaciones recibidas le hicieron
ese año, Alfonso VIII entregaba Deo et Ordini Cisterciensi, et cabeza de una pequeña congregación de monasterios repar-
vobis dompno Guidoni, Marimondensi abbati, vestrisque successoribus, tida por Galicia, Asturias y León . El 17 de noviembre de
119
et conventi Sancti Petri de Gomielpresenti etfuturo, monasterium santi 1203 Inocencio III sancionaba su unión a la Orden —la cual
Petri de Gomiel. , documento que en realidad es la confir-
112 había sido solicitada pocos años antes por el abad Amigo
mación de la cesión realizada en torno a ese año por los y con el beneplácito del obispo de Astorga—, y dos días más
calatravos . 113 tarde le felicita por ello . Pero, ¿qué iba a suceder enton-
120
Hasta 1207, momento en que Junquera de Espada- ces con aquellos monasterios que a él estaban sujetos? El
ñedo aparece mencionado en los capítulos generales al cas- pontífice escribía el día 20 de ese mismo mes y año al
tigarse a su abad por no haber acudido a la reunión, no obispo de Braga y sufragáneos para que instasen a sus filia-
tenemos constancia de la adscripción de este monasterio a les a aceptar la unión , pero no iba a ser tarea fácil ya que
121
la Orden. La estrecha relación que desde 1174 mantuvo la férrea negativa de aquéllas motivó que hasta mediada la
con Montederramo y especialmente la expedición de una centuria no se completase el proceso . 122
bula de Inocencio III en 29 de mayo de 1198 dirigida a los En 1133 el obispo de Segovia Pedro de Agen donaba
dos monasterios sugiere que ya a finales del XII Junquera la heredad de sotosalbos a la iglesia de santa María y san-
era cisterciense y dependía de Montederramo , fechando 114 tiago d e Sierra y a los fratribus ibidem sub Regula Beatissime Bene-
la tradición este acontecimiento en 1170 . 115 dicti Deo servientibus ut perenniter habeant, e n t r e l o s q u e se
e n c u e n t r a Guillelmo praesente Monacho supradictae Ecclesiae,
momento en que se puede considerar fundado este monas-
El siglo XIII
terio benedictino. La tradición sitúa la afiliación de Santa
Con el cambio de siglo daba comienzo en el Reino de María de Sotosalbos o de la Sierra a la Orden, de mano de
León una nueva casa, Valdediós. El 27 de noviembre de Cíteaux, en 1212, si bien no se constata documentalmente
1200 Alfonso IX y Berenguela donaban al abad Bernardo su adscripción a la Orden hasta el 4 de agosto de 1219
de sobrado la heredad de Boiges para construir un monas- cuando Fernando III le confirma todas sus posesiones . 123
sición del obispo y cabildo de la catedral leonesa, impidió rado del asunto, encargó a los abades de Carracedo y Bujedo
que aquél se realizase . 118
inspeccionase si el lugar era adecuado y las posesiones entre-
Poco tiempo después, ca.1201-1203, se llevaba a gadas suficientes para el mantenimiento de la nueva abadía.
cabo la afiliación de un importante monasterio benedic- El resultado de la investigación fue favorable, y en febrero del
tino, Carracedo. Restaurado en 1138 por Doña Sancha, año siguiente Enrique I ampliaba la dotación inicial entre-
hermana de Alfonso VII, con el abad Florencio a la cabeza g a n d o al f u n d a d o r y al monasterio Sancte Marie de Vega, Cister-
y siguiendo un modo de vida muy cercano al de los cister- ciensis ordinis [quod] de novo construitis la villa d e A g ü e r o .
125
112 GONZÁLEZ, 1960: III, doc. 628, 117-118. 119Un valioso estudio general sobre el monasterio, BALBOA DE PAZ,
113AYALA MARTÍNEZ, 2000: 543-544; vid también RODRÍGUEZ 1991; en cuanto a su relación con la Orden y su adscripción a la misma,
RODRÍGUEZ, 1994: 312-314. Por su parte, OLCOZYANGUAS, 2002: 96- vid. GOUGTAUNY, 1963; los diversos trabajos de QUINTANA PRIETO,
97; idem, 2005: 109-110, retrasa unos años la conexión Calatrava- por ejemplo, 1971, 1983 y 1990; o los comentarios de PÉREZ-EMBID,
Gumiel y sugiere que una parte de la comunidad del monasterio de 1986: 49-53; VALLE PÉREZ, 1991: 145; e idem, 1991 (3): 150.
Fitero, tras reivindicar en 1187 la afiliación fiterense de Calatrava, se 120MARTÍNEZ MARTÍNEZ, 1997: I, doc. 186, 148-149 y doc. 187,
habría trasladado hasta tierras burgalesas, al viejo monasterio benedictino 149-150.
de Gumiel, haciendo posible que este cenobio se convirtiese en enlace Idem: I, doc. 188, 150.
1 2 1
entre la joven orden militar y Morimond. Más adelante volveremos sobre ello.
1 2 2
114VALLE PÉREZ, 1982: I, 191-192; también, SINGUL, 2002 (2): 13 123ABAD CASTRO y SENRA GABRIEL Y GALÁN, 1991: 141-143.
y 22-23. 124RÓSCALES OLEA, 2000: doc. 4, 272-273.
115 Data defendida por YÁÑEZ NEIRA, 2000: 246-247. 125GONZÁLEZ, 1960: III, 714-716; RÓSCALES OLEA, 2000: doc. 59,
116Vid. el documento en GONZÁLEZ, 1944: doc. 143, 204-205. 362-363. Sobre la fundación del monasterio, vid. YÁÑEZ NEIRA, 1987:
117 GAIBROIS BALLESTEROS, 1948: II, doc. 7, 6-7. 69-71 y 77 nota 26; ARA GIL, 1990: 44-45; y RÓSCALES OLEA, 2000:
118 TORNÉ CUBELLS, 1995: 51-53; GARCÍA CUETOS, 1998: 69. 21-23.
INTRODUCCIÓN HISTÓRICA 27
En 1225 se producen tres nuevas incorporaciones, nostros eandem jurisditionem instituendi, ac destituendi abbatem, visi-
todas afiliaciones. A Penamayor, antiguo priorato de Carra- tandi, corrigendi, et reformandi quam habet cistercium in abbatis sibi
cedo que con la anexión a la Orden pasa a convertirse en inmediati subjetis . 128
granja -así consta en la bula de Inocencio III de 21 de Por esas mismas fechas se resolvía el contencioso con
noviembre de 1203-, en dicho año le es concedida por el Belmonte . El 6 de septiembre de 1245 Inocencio IV
129
beiro y San Clodio: el primero, fundado en 1135 bajo la mendando el 17 de octubre de 1247 al Arcediano de
RB. y con algunas particularidades propias de lo cisterciense, Robleda su cumplimiento . N o obstante, otras dificulta-
131
pasaría a la órbita de Clairvaux; mientras que el segundo, des vinieron a empañar la victoria de Carracedo, ya que el
antiguo monasterio restaurado ca.1158 bajo el abad Pelagio, obispo de Oviedo no vería con buenos ojos la exención de
quedaría -aunque esto no es seguro- vinculado a Melón . 127
Belmonte de su jurisdicción y de ahí que apoyara la nega-
Aunque tradicionalmente se ha venido situando inme- tiva de éste a obedecer al berciano. Así, habrá que esperar
diatamente después de la unión de Carracedo a la Orden la hasta el 24 de abril de 1264 para que ambas partes lleguen
afiliación de algunas de sus antiguas filiales, como es el caso a un acuerdo, por el cual cada uno por su cuenta o bien
de Villanueva de Oscos (1203) y poco después el de Bel- conjuntamente podían visitarlo . 132
monte (1206), todo hace pensar que será durante los años Algo más complicada fue la adhesión de Villanueva
centrales del siglo y tras sucesivos pleitos y avenencias de Oscos . La primera mención expresa de su vincula-
133
cuando tenga lugar la incorporación de éstas y las otras ción al Císter tiene lugar el 16 de septiembre de 1232,
casas que en tiempos dependían del cenobio berciano. cuando Pedro Fruela dona al abad Gómez las heredades
u n o de los primeros en someterse fue San Martín de que poseía en Lavero y Raón, con la condición de que sea
Castañeda. El 28 de enero de 1245 el abad Viviano, tras acogido como familiar y se le asigne su parte de omnium
admitir cómo Pedro Cristiano y Martín, monjes de Carra- benefficiorum Cisterciensis ordinis . Pero habrá que esperar a
134
cedo, habían revitalizado por voluntad de Alfonso VII el septiembre de 1 2 5 7 para encontrar una nueva alusión a la
viejo cenobio de Castañeda, reconocía como patre et pastore subordinación de Villanueva a la Orden: el Capítulo Gene-
abbate qui pro temporefuerit in dicto monasterio Carraceti, y entregaba ral encargaba a los abades de Monfero y Penamayor solu-
su m o n a s t e r i o a C a r r a c e d o et ordini cisterciensi tali modo quod cionasen el conflicto suscitado entre el por entonces abad
monasterio Carraceti habeat in monasterio nostro, in nos et inposteros de la casa y su antecesor . Este último, Gómez, se había
135
126 FERNÁNDEZ DEVIANA, 2000: 204-208. 243), lo que podría interpretarse como monjes y conversos, y de ahí la
127 Para Acibeiro vid. VALLE PÉREZ, 1991: 142-144; y para San Clo- vinculación a la Orden en esa fecha. Sin embargo, bien podía ser éste otro
dio, VALLE PÉREZ, 1982: I, 209; LUCAS ÁLVAREZ y LUCAS DOMÍNGUEZ, rasgo de la aceptación por parte de la congregación carracetense de carac-
1996: 33-42; FERNÁNDEZ GONZÁLEZ, 2006: 99 y GOY DIZ, 2006. teres propios del Císter. De hecho, otro documento de julio de 1217 (doc.
128 QUINTANA PRIETO, 1992: 713-717. El documento puede verse en 107, 250-251) está dirigido a Petro Roderici, fratri meo Abbati de Lapedo, et omni
MARTÍNEZ MARTÍNEZ, 1997: doc. 427, 297-298. conventui qui ibi sub norma beati Benedicti Deo serviunt.
129 La fecha tradicional de 1206 que se viene citando como de adscrip- 131 MARTÍNEZ MARTÍNEZ, 1997: doc. 443, 308-309.
ción a la Orden, deriva de que en ese año aparece en el Capítulo General 132 MARTÍNEZ MARTÍNEZ, 1997: doc. 492/15, 355-356. Vid. nota 136.
un monasterio con este nombre, identificándose con el asturiano. Sin 133 La fecha tradicional de 1203 es admitida por YÁÑEZ NEIRA, 1973
embargo, nada se dice de su situación geográfica, por lo que bien pudiera (4): 650; QUINTANA PRIETO, 1983: 314; GONZÁLEZ GUTIÉRREZ,
tratarse de otro cenobio con el mismo nombre. De hecho, en el Capítulo 1998: 97-98; ÁLVAREZ CASTRILLÓN, 2001: 103; idem, 2007: 553 nota
de 1219 (def.37) aparece de nuevo este título, pero constando ahora su 13, 559 y 564; idem, 2009: 37; MONROY FERNÁNDEZ, 2008: 52 y 53-
ubicación en Siria. Hasta 1269 (def.17) no vuelve a mencionarse este nom- 54; entre otros.
bre, y ahora tampoco se aludirá a su localización geográfica. 134 FLORIANO LLÓRENTE, 1995-1996: doc. 19, 23-24; cit. por ÁLVA-
130 SANZ FUENTES, 1991: doc. 19, 186; CAVERO y MARTÍN LÓPEZ, REZ CASTRILLÓN, 2001: 105 nota 174, con fecha 16 de abril.
2000: doc. 1212, 405-406. Este es el primer documento en que aparece 1 3 5N o obstante, en varios documentos anteriores a esta fecha, encon-
Belmonte asociado a la Orden, y aunque así lo ha reconocido GONZÁLEZ tramos como confirmantes a miembros de la comunidad de Meira (en
GUTIÉRREZ, 1997: 333-334, es de la opinión de que ese vínculo existía 1244 a Pelagius Lupi, monachus de Meira; al año siguiente a Pelagius de Saldange,
con anterioridad. GOUGTAUNY, 1963: 151; y QUINTANA PRIETO, 1983: frater de Meyra; en 1246 a Pelagius Iohannisfrater de Meyra; y a Petrus Petri mona-
314, han situado su afiliación en 1206. Otros, en cambio, lo llevan a 1203 chus de Meyra en 1249 -FLORIANO LLÓRENTE, 1995-1996: doc. 44, 42;
(HEVIA BALLINA, 1998: 50). Lo cierto es que en un documento de 1213 doc. 47, 45-46; doc. 53, 50; y doc. 63, 57, respectivamente-), monas-
aparecen confirmando tras el abad, el prior y otros miembros de la comu- terio con el que Villanueva tenía, como veremos a continuación, cierta
nidad alude a "outros monges e frades" (FLORIANO, 1960: doc. 102, 241- vinculación.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
28
negado a obedecer al visitador de Carracedo, por lo que t r o d e R e y —ordinis sancti Benedicti— al d e C a r r a c e d o —cister--
fue depuesto y elegido en su lugar Pelayo, lo que originó ciensis ordinis— . El 10 de agosto del año siguiente el deán
139
Villanueva de liberarse de la sujeción al monasterio leonés, en solucionarse debido, como también sucedió en los casos
al igual que estaban haciendo en esos momentos las otras de Belmonte y Villanueva, a la injerencia del obispo de Lugo
fundaciones que a él habían estado unidas. En torno a que apoyaba la rebeldía de los monjes de Castro de Rey . 141
1 2 3 1 Gómez, monje profeso de Meira, fue enviado por De este modo, el abad Fernando de Carracedo y Miguel,
los abades Martín Muñiz de Carracedo (1228-1232) y obispo de Lugo, llegaron a un acuerdo el 5 de mayo de
Fernando de Meira (1224-1232) como nuevo abad de 1254 sobre la visita del monasterio, por el cual los dos se
Villanueva , tal vez con la intención de anexionar al ins-
137
comprometían a visitar y nombrar abad conjuntamente . 142
136MARTÍNEZ MARTÍNEZ, 1997: doc. 392, 342-358 recoge 17 ins- 142 MARTÍNEZ MARTÍNEZ, 1997: I, doc,491, 341.
trumentos sobre la disputa en los que nos basamos para relatar el suceso. 1 4 3Lo cierto es que este monasterio no volverá a aparecer en la docu-
Vid. además, MARTÍNEZ MARTÍNEZ y QUINTANA LAMAS, 2006; mentación de Carracedo hasta septiembre 1459 en que actúan como
CAVERO DOMÍNGUEZ, 2007: 213; Y álvarez castrillón, 2009: 73. testigos el abad y otros monjes de Castro de Rey —sin decir, eso sí, a que
La primera mención a Gómez como superior de Villanueva la tene-
1 3 7 orden pertenecían-, en unos aforos que hace el abad del monasterio leo-
mos en mayo de 1231 (FLORIANO LLORENTE, 1995-1996: doc. 12, nés en Villafranca y Cacabelos (Idem: docs.1115 y 1116, 328-330). En
18), constando en ese mismo mes pero del año anterior Martín como contra de lo que dicen DURO PEÑA, 1972: 11; y FERNÁNDEZ LÓPEZ,
abad (FLORIANO LLÓRENTE, 1995-1996: doc. 11, 17). 2006: 78-79, que sugieren su adscripción a la Orden en 1142 y de mano
138Aunque ÁLVAREZ CASTRILLÓN acepta la fecha de 1203 como de de Alfonso VII, VALLE PÉREZ, 1982: I, 200-201 nota 57, comenta que
incorporación a la Orden, apunta que Villanueva "continuará con una la unión a la Orden se llevaría a cabo muy tardíamente, "probablemente
observancia un tanto particular durante decenios" y que no sería hasta del último tercio del siglo XV", y a través de Montederramo. De hecho,
mediada ya la centuria cuando tenga lugar "la plena subordinación" a sólo en tres documentos de 1474 consta expresamente que Castro de
Carracedo (2001: 103-104 y 109). Rey pertenecía a la Orden de Cistel (vid. DURO PEÑA, 1972: 14-20). N o
139MARTÍNEZ MARTÍNEZ, 1997: I, doc. 307, 308. Erróneamente FER- obstante, y mientras no aparezcan documentos que confirmen la sepa-
NÁNDEZ LÓPEZ, 2006: 73, lo fecha en 1248. ración formal entre Carracedo y Castro de Rey, creemos que no hay
Idem: I, doc. 447, 312.
1 4 0 argumentos contundentes que impidan afirmar que Castro de Rey estu-
141QUINTANA PRIETO, 1983: 315-316, recogía estas noticias seña- viera vinculado a la Orden con anterioridad.
lando que al igual que otras filiales de Carracedo, Castro de Rey se 144 VALLE PÉREZ, 1982: I, 209-210; LIMIA GARDÓN, 2000: 272-273.
negaba a sujetarse a él. 145 Hasta 1833 perteneció a la provincia de Segovia.
INTRODUCCIÓN HISTÓRICA 29
lugar porque la historiografía tradicional lo ha venido con- gamino en mal estado, escrito en latín y con fecha de 21 de
siderando como una fundación cisterciense duradera. marzo de 1 1 4 7 y dos traducciones al castellano de dicho
151
Fray José de Sigüenza en su Historia de la Orden de San instrumento, en papel y con fecha de un año después . En 152
Jerónimo relata el hallazgo de una imagen de la Virgen en el efecto, en aquélla fecha, el concejo de Cuellar entregaba el
interior de una cueva próxima a Cogeces del Monte que locum illum Sancte Marie Armidelle al a b a d R a i m u n d o d e Sancte
habría sido escondida en el momento de la invasión islá- Marie et Sancti Iohannis de Sacramenia ceterisque fratribus in eodem
mica. Convertido el lugar en centro de peregrinación y devo- loco sub ordine Sancti Benedicte.
ción, los habitantes de Cuellar "edificaron unos aposentos Dejando ahora al margen la problemática de la fecha
de buena proporcion y traja, para los que yvan a visitar la de incorporación de Sacramenia a la Orden del Císter, hay
santa imagen tuviessen donde guarecerse el invierno de los que remarcar que en el documento no se especifica que el
frios, y el verano del calor del sol, y para que las processio- fin de la donación sea fundar allí un monasterio. Simple-
nes y cofradias que acudian de toda la comarca, hiziessen mente se trata de una entrega de propiedades. Además, y
sus juntas y cabildos" . Tiempo después, y siguiendo al
146 como ha señalado Martín Postigo , ni en la documenta-
153
mismo cronista, los miembros del concejo de la villa sego- ción de Sacramenia aparece recogida esta donación o cual-
viana "rogaron al Abad y monges de la orden de San Ber- quier otra referencia o documento alusivo a La Armedilla , 154
nardo, que estavan alli cerca en el monasterio de Sacrameña, ni los cronistas de las órdenes benedictina y cistercienses
se encargassen deste Santuario. Recibieronlo, y hizieronles —Yepes y Manrique— o redactores de catálogos —Jongelin y
donacion y entrega de todo, como parece por la carta escrita Janauschek—, dan noticia de su existencia.
en pergamino y lengua latina, era mil y ciento y ochenta y Tampoco los documentos correspondientes a la
cinco: y junto con ella el traslado en Castellano" . 147
implantación jerónima son ilustrativos al respecto.
A partir del testimonio del monje jerónimo, nume- José de Sigüenza nos relata que tras la marcha de los
rosos investigadores y estudiosos han supuesto: la funda- monjes cistercienses los vecinos de Cuellar "pusieron alli
ción por monjes llegados de Sacramenia (Segovia) de un su cofradia, y la governavan como suya. Encargavan la Igle-
monasterio cisterciense, Santa María de la Armedilla, en sia a algún hermitaño, o santero, para que tuviesse cuenta
1 1 4 7 ; la consiguiente construcción de un conjunto
148
de limpiarla, y encender la lampara. De ninguna destas
monástico con su iglesia, claustro y dependencias de mudanjas ay escritura que de luz" . El infante don Fer-
155
acuerdo con las normas y "estilo cisterciense"; y por último, nando de Antequera, Señor de Cuellar y Cogeces, que
el abandono del asentamiento por los monjes blancos por había contribuido ya a las fundaciones jerónimas de La
causas desconocidas, según algunos en el siglo XIV , rever- 149
Mejorada de Olmedo y Corralrubio, propuso al Concejo
tiendo de nuevo la propiedad a Cuellar . 150
de Cuellar la donación de la hermita e granja de Señora Santa
En el Archivo Histórico Nacional se conservan los Maria de Armedilla a los monjes del primero para que fun-
documentos a que hacía referencia josé de Sigüenza: un per- dasen allí un monasterio. La toma de posesión del lugar
146SlGUENZA, 1907: I, 129. Por su parte ZUMEL MENOCAL piensa 240, apunta que allí existía un santuario mariano que en el XIII "había estado
que la construcción de una ermita que albergase esa imagen de la Virgen bajo la custodia de los monjes cistercienses de Sacramenia".
puede fecharse en torno a las postrimerías del siglo XI, después de la 149 ZUMEL MENOCAL, 1999: 40. Desconocemos en qué se basa para
repoblación llevada a cabo por el conde Pedro Ansúrez en toda la zona dar esta fecha. Por otro lado, GARCÍA DEL POZO, 2005: 30 y 31, apunta
de Cuéllar (1990: 37; también GARCÍA DEL POZO, 2005: 27; y LOSA que "en el año 1281 hay documentos [no dice cuáles] que hablan de
HERNÁNDEZ, 2008: 21, para quien la conversión de la cueva en "centro reuniones de abades del Císter y La Armedilla ya no figura como tal",
cultual popular" pudo tener lugar en la primera mitad del siglo XII). añadiendo que ya entonces los cistercienses habrían abandonado el lugar.
147SIGUENZA, 1907, I, 129. "Tampoco ay claridad en la villa de Cuellar, ni en el monasterio de
1 5 0
148ANTON, 1942: 240-241 (erróneamente en un trabajo anterior había Sacrameña, de porque dexaron los religiosos Bernardos la casa, ni quanto
supuesto que fue un monasterio premonstratense —1920: 72); TORMO Y tiempo la tuvieron en su poder, o que ocasiones huvo para que se tor-
MONZO, 1919: 23; MADRID, 1967: 122; idem, 1973; HERAS GARCÍA, nasse a los vezinos de Cuellar..." (SlGUENZA, 1907: I, 129).
1966: 128; JIMÉNEZ LOZANO, 1980: 23; REVUELTA SOMALO, 1982: 247; 151 A.H.N., Clero, carpeta 3.411, doc. 1; pub. por MARTÍN POSTIGO,
OLIVERA ARRANZ, 2002: 1147; GARCÍA DEL POZO, 2005: 29 (de forma 1979: 313-314.
inconcebible, este último autor relata que de Sacramenia saldrían cinco 152 A.H.N., Clero, libro 16.210, fols.25v-27r; y legajo 7.524-7.525.
monjes profesos y un abad llamado Raimundo, error que se debe a una 153 1979: 315.
mala interpretación del documento de 1147 y a su imaginación). Otros 154 En el fol.7r del Tumbo de Sacramenia (A.H.N., Códices, 104-B), se
autores inexplicablemente llevan la fecha de fundación del monasterio de la recoge una confirmación de todas sus posesiones realizada por Alfonso
Armedilla como cisterciense a 1141: VALDIVIESO GONZÁLEZ, 1985: 74, y VIII el 14 de octubre de 1174 y no se le menciona.
ZUMEL MENOCAL, 1990: 39. Por su parte, LINAGE CONDE, 1991 (2): 155 1907: I, 129. Esta noticia ha sido recogida por ANTON, 1942: 231
comenta sin más que fue una posesión de Sacramenia, y ARA GIL, 1998: nota 7 y JIMÉNEZ LOZANO, 1980: 24.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
30
tuvo lugar el 19 de febrero de 1402 , si bien hasta el 22
156 solamente un documento algo posterior alude al ins-
de mayo de ese mismo año el capítulo de La Mejorada no trumento de 1147 y al origen cisterciense de La Armedi-
concedió la licencia de fundación del nuevo cenobio . 157 lla. El 2 0 de junio de 1440 Juan de Navarra se dirige a los
Según el primer documento, los vecinos de Cuellar concejos de Cuellar y Peñafiel y hace constar que los jeró-
n i m o s le h a b í a n i n d i c a d o q u e el dicho conzejo de esa dicha nues-
tenían una cofradía en aquel lugar, siendo su mayordomo
tra villa de Cuellar movidos con zelo del servizio de nuestro Señor Dios
Nicolás López , y fueron ellos quienes la havian fecho efizie-
158
e con debopon que haviades al dicho monasterio que a la sazon era hera
ron e edificaron e la rejian e administravan, e n t r e g a n d o a los m o n -
de la horden de San Bernardo, le h a b í a e n t r e g a d o puede haver dos-
jes la dicha hermita egranxa con todas las cassas e edificaciones della e cientos e veinte años poco mas o menos el lugar y t é r m i n o d o n d e se
con los libross e dos calizes e una cruz e un enjensario en que podria asentaba el monasterio según la escritura que ante nos mostraron,
tener con todo fasta diez e seis marcos de plata, e otrosi dos campanas e y que le pedían fuese confirmada . 164
obstante, hay constancia documental de que los jerónimos Como podemos observar, los monjes de La Armedi-
ya estaban establecidos en esa zona un año antes: el 15 de lla sólo podían testimoniar su dominio sobre esas tierras
febrero de 1401 se hizo un deslinde y amojonamiento de con el documento de 1147. Y es ciertamente extraño que,
los términos de Cuellar y Peñafiel y aparecen mencionadas de haber sido, como se ha pretendido, erigido en esa fecha
las tierras que poseían los monjes jerónimos de La Arme- como monasterio, no se haya conservado ni un sólo docu-
dilla en el valle de Vallillana . 160
mento más relativo al mismo, ni siquiera una mínima noti-
cia de la existencia de otros documentos confirmatorios que
Así pues, los jerónimos se instalaron en este lugar a se hubiesen perdido posteriormente. Creemos que la dona-
principios de 1401, en una granja con ermita que poseía ción al monasterio de sacramenia no llegó a hacerse efec-
una cofradía de la villa de Cuellar con todas sus casas y tiva, si bien desconocemos cuál o cuáles fueron los motivos
heredades, y posteriormente, en febrero de 1402, se pro- que la abortaron ; el lugar de Sancta María de La Arme-
165
dujo la dotación y fundación oficial de un monasterio, favo- dilla seguiría desde entonces en poder de la villa de Cuellar,
recido por don Fernando de Antequera, siendo confirmada que establecería allí una granja con su ermita, en la que se
su erección el 2 7 de enero de 1405 por Benedicto XIII . 161
conservaría el citado documento del siglo XII, hasta que a
Ninguno de estos documentos hace referencia a un principios del XV pasó a manos de la Orden jerónima.
posible asentamiento monástico previo , y si bien el hecho
162
Respecto a los vestigios arquitectónicos construidos
de que La Armedilla aparezca bajo la denominación de her- durante el supuesto pasado cisterciense, y a pesar de que el
mita e granja puede hacer pensar que estamos ante un antiguo estado de ruina impide un estudio exhaustivo del conjunto,
centro de explotación agraria cisterciense, lo cierto es que podemos asegurar que a excepción de la "cueva" —retocada
las peculiaridades de la Orden estaban ya muy extendidas a a mediados del siglo XV— y de la estructura rectangular con-
partir del último tercio del siglo XII, entre ellas, sus sistemas servada sobre ella, todos los elementos hoy visibles datan de
de aprovechamiento del dominio, pudiéndose encontrar época jerónima, pudiéndose fechar aquéllas dos dependen-
granjas pertenecientes a otras instituciones tanto monásti- cias en la decimotercera centuria o incluso, al menos la
cas como laicas . 163 última, en la siguiente . 166
156 A.H.N., Clero, carpeta 3.411, doc. 3; pub. por MARTÍN POSTIGO, nos que acudían a venerar la imagen de la Virgen, motivaron el rechazo
1979: 315-318. por parte de los monjes segovianos. Este aspecto ha sido también des-
157 A.H.N., Clero, carpeta 3.411, doc. 4. tacado por JIMÉNEZ LOZANO, 1980: 23, aunque mantiene la existencia
158 Este documento nos da además los nombres de otros dos cofrades, de un monasterio cisterciense en este lugar. Por su lado, ARA GIL, 2002:
Gonzalo sánchez y sancho sánchez; los de los capellanes de la ermita, 72-73, niega la existencia de una casa cisterciense en La Armedilla; y
Gregorio Mínguez y Juan Juanez; y los de dos pastores que habitan en LOSA HERNÁNDEZ, 2008: 24-25, aunque señala que quizás no llegase
la granja, Gonzalo Fernández y Juan García. a establecerse una fundación cisterciense —de hecho, en las págs. 22-23
159 Vid nota 149. afirma que "son muchos los indicios que determinan que el Císter jamás
160 A.H.N., Clero, libro 16.210, fols.4v-5v, y legajo 7.524-7525. estableció allí casa alguna"—, sí contempla la posibilidad de que los mon-
REVUELTA SÓMALO, 1982: 246, cita este documento pero lo fecha un jes blancos implantaran una granja y administrasen la ermita y sus depen-
año después, en 1402. dencias.
161 A.H.N., Clero, carpeta 3.411, doc. 6. 166 Centrándonos en la iglesia, hemos publicado un trabajo: GARCÍA
1 6 2 MARTÍN POSTIGO, 1979: 318. FLORES, 2000. Vid. también ALONSO, RUANO y ESCRIBANO, 2006; y
163 VALLE PÉREZ, 1991: 156 nota 85. LOSA HERNÁNDEZ, 2008, quien sitúa el claustro a principios del siglo
164 A.H.N., Clero, libro 16.210, fols. 21r-24r. XV (23-24), las reformas de la cueva y de la estancia que se levanta sobre
165 Tal vez la pobreza del terreno y la afluencia continua de peregri- ella, a mediados de la misma centuria (29).
INTRODUCCIÓN HISTÓRICA 31
Tras la muerte del abad Florencio de Carracedo en de Castilla", suponiendo ante la falta de referencias poste-
diciembre de 1152, uno de los monasterio a él sujetos, Tol- riores que no se llegó a formalizar . 172
fallidos. En 1207, el Capítulo General aceptaba la donación su linaje, se poblaría con monjes de San Pedro de Gumiel,
que Alfonso IX había hecho a Sandoval de una "casa ere- tal y como viene estipulado en la carta fundacional . La 174
mítica" y ordenaba investigar los terrenos donde se asentaba elección de este monasterio burgalés como casa madre ven-
y sus posesiones , pero no se tienen más noticias sobre el
170
dría condicionado por un hecho significativo: el haber ser-
particular. Algo semejante sucedió en 1240, pues aunque el vido de panteón funerario a sus antecesores . Favorecido 175
Capítulo General comisionaba a los abades de Moreruela y ampliamente por sus sucesores, fue sin embargo uno de
Meira que inspeccionaran los terrenos donados por un ellos, Enrique de Guzmán, Conde de Niebla, quien ante el
noble de nombre Rodrigo Fernández para construir un estado caótico en que se encontraba el monasterio debido
monasterio colocado bajo la filiación de Nogales, tampoco a una controvertida elección de abades, pidió a Martín V
se llevó a cabo . Del mismo modo, el Capítulo General
171
desposeyera a los cistercienses del cenobio y lo entregase a
encargó en 1275 a los abades de Bujedo y Matallana que los jerónimos, ejecutándose la sentencia el 21 de septiem-
acudiesen al lugar llamado Hospital y comprobasen si era bre de 1431, y siendo confirmada la expulsión de los mon-
apto para la fundación que pretendía hacer "un noble varon jes blancos en mayo de 1435 . 176
167 Vid. más detalles al respecto en la monografía de La Espina. tibus committitur ut ad loca personaliter accedentes, pensatis omnibus
168 GARCÍA LUJÁN, 1982: doc. 7, 15-17. quae secundum Deum et Ordinem pensanda sunt, faciant quod sibi vide-
1 6 9 Ibid: doc. 43, 69-70. rint expedire, et quid inde fecerint, etc." (CANIVEZ, 1933-1941: III,
170 "De domo eremítica quae offertur abbatis Saltus novalis a rege 1275, def.72; cit. por VALENTÍN DE LA CRUZ, 1990: 146).
Legionensi, committitur abbatibus de Spina, et de Moreolia qui diligen- 173 El monarca, en carta de 27 de octubre de 1298 indicaba que: Tengo
ter inquirant de loco si sit ordini idoneus, si sufficientam habeat in pos- por bien que el Monasterio que vosfacedes a San Isidro que es en Sevilla la vieja, que sea
sessionibus, et quod invenerint Capitulo sequenti renuntiet" (CANIVEZ, de cualquier orden que quisiéredes e que seades Patrón del vos e los que vinieren de vues-
1933-1941: I, 1207, def.39, 341; cit. por PÉREZ-EMBID, 1986: 142). tro linage (GESTOSO Y PÉREZ, J., 1 8 9 2 : 5 4 6 - 5 4 8 ) .
171 "Inspectio abbatiae monachorum quam petit aedificari vir nobilis 1 7 4Et damos los con tales condiciones que vos el padre de sant pedro de gumiel enbie-
Redericus Fernandi, de Morerosa et de Mera abbatibus committitur ut des para morar en el dicho monesterio quarenta monges e destos que sean al menos los
ad locum personaliter accedentes pensatis omnibus, etc., et quid inde, veynte de misa e que ellos se escoian su abad. Et damos e otorgamos a vos el dicho padre
etc., et sit filia Nuchariae" (CANIVEZ, 1933-1941: II, 1240, def.60, 227: abad la confirmacion del abad e la visitafion deste monesterio (GESTOSO Y PÉREZ,
cit. p o r YÁÑEZ NEIRA, 1 9 8 4 : 2 2 5 ; y PÉREZ-EMBID, 1 9 8 6 : 142). 1892: 548-551).
"Inspectio loci qui Hospitale dicitur, in quo fundare intendit abba-
1 7 2 1 7 5 ZEVALLOS, 1 8 8 6 : 2 0 8 .
tiam monachorum nobilis vir Castellae, de Buxeto et de Mataplana abba- 176 Idem, 213-217.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
32
Tampoco tuvo suerte el de los Santos Acisclo y Vic- igual que el monasterio cordobés, el monasterio de Santa
toria de Córdoba . Erigido en torno a un templo dedi-
177 María de Villamayor, fundado entre 1 3 7 7 y 1 3 8 1 por
cado a estos mártires, las primeras noticias que delatan su Gutierre de Toledo, obispo de Oviedo, con los bienes de dos
existencia se remontan a 1292, aunque todavía no está bajo monasterios benedictinos femeninos suprimidos —Sta. María
la órbita cisterciense, como tampoco parece que lo estu- de Villamayor y San Martín de Soto—, estuvo sujeto desde
viera en julio de 1297, cuando Fernando IV concede a frey un principio a la jurisdicción diocesana, y como tal cons-
rodrigo ordoñez comendador del monesterio de sant ciscle e sancta vito- taba en 1385 en el Becerro de la catedral ovetense. Fundado
ria, una serie de casas para ampliar el sitio . Será el 10 de
178 con monjes de Valdediós —Don Gutierre le había entregado
junio de 1332 cuando se firma un acuerdo entre el obispo a éste último esos dos cenobios para que enviasen "duode-
Don Gutierre Ruiz de Mesa y el cabildo cordobés y frey cim monachi ibidem secundum regula vestri ordinis insti-
Alfonso Ruiz de la orden de ¡istelfijo de don Ruy peres de alcalá e tuantur et unus ex monachis vestri monasterii laudable vite
capellan de nuestro señor el Rey, p o r el q u e aquellos le d a n la egle- et conversacione honeste... in abbatem eligant"—, los conti-
sia de sancto a^isclo e sancta victoria que es en esta cibdat de cordova en nuos problemas con el diocesano seguramente por cuestio-
el ayarquia e la collacion de santiago para fundar un monasterio nes de derecho de visita y obediencia provocaron la
cisterciense . Se desconoce la procedencia de los primeros
179 desaparición de esta casa en el umbral del nuevo siglo . 183
177 Poco se ha escrito sobre este monasterio, pero NIETO CUMPLIDO, 181 MANRIQUE, 1642-1659: III, 58-59; MUÑIZ, 1784: III, 256-258 y
1991: 172, 336, 340-441, recoge los más importantes acontecimien- 332-334. Sobre la ermita, hoy conocida como Santuario de Postoloboso,
tos de su vida, aunque con algunos errores; también SANZ SANCHO, que tras el abandono de los cistercienses fue ocupada por agustinos y luego
2002: 51; y especialmente CERRATO MATEOS, 2005: 38-46. Respecto (1557) por franciscanos, en el que se veneraban los huesos de "San" Ber-
a su advocación, en el Capítulo General de 1515aparece bajo el nom- nardo de Candeleda, vid. FERNÁNDEZ GÓMEZ, 1986: 898-903.
bre de "Sanctis Martyribus" (CANIVEZ, 1933-1941: VI, 1515, def.27, 182 Así lo narra fray Bernardino de Sandoval en una relación de la fun-
478). dación de Valdeiglesias (1650), recogida y transcrita por TEJELA JUEZ,
178Archivo de la Catedral de Córdoba, mss.125, fol.32v. Agradezco a 1987: 118-120. Por su parte MUÑIZ negó la pretensión de Valdeiglesias
su archivero, Don Manuel Nieto Cumplido, las facilidades que me dio de ser casa madre de Grandeselve (1784: 333 y 334).
para consultar estos documentos. 183 TORNÉ CUBELLS, 1995: 61-63; idem, 1998 (2).
179 Archivo de la Catedral de Córdoba, cajón T, n.151, doc. 17 184 FERNÁNDEZ MARTÍN, 1963: 173-175; VILLAR ROMERO, 1987:
180 DUBOURG-NOVES, 1971: 307, ha señalado a Gumiel como casa 73-74 y doc. 76, 140-141; y VILLAR ROMERO y VILLAR ROMERO,
madre, aunque sin pruebas documentales. 1994: 16-19.
INTRODUCCIÓN HISTÓRICA 33
En Torquemada fue el abad de La Espina el que escu- Castilla y León. La Bula Fulgens sicut stella de Benedicto XII
dándose en su condición de reformador expulsó a las mon- dirigida a la Orden Cisterciense (13 de julio de 1335) pres-
jas e instaló allí una comunidad de monjes (ca. 1435). La taba atención especial a la formación intelectual de los
intervención de la abadesa de Las Huelgas de Burgos, a cuya monjes, a la organización de los estudios y los Colegios,
filiación pertenecía el femenino, consiguió ca.1437 resta- buscando una mejor preparación para sus miembros, tal y
blecer a las monjas en su casa . 185
como otras órdenes lo venían haciendo hace tiempo . El 190
Ya cercano el fin de siglo, tiene lugar la afiliación de artículo 31 del citado instrumento pontificio establecía que
un pequeño monasterio benedictino, San Justo de Tojo- el colegio que desde 1289 estaba establecido en Estella
soutos. Por bula de Sixto IV expedida en 27 de junio de (Navarra) , se trasladase a Salamanca, al calor de su pres-
191
1475 se incorporaba a Sobrado durante el abadiato del tigiosa Universidad. A este nuevo colegio debían acudir
comendatario Diego de Muros, obispo de Tuy . A pesar 186
todos los estudiantes hispanos excepto los de los reinos de
de las protestas del antiguo abad, fray Lope de Montoro, Navarra y Aragón, que irían a los de Toulouse y Montpe-
q u e i n t i t u l á n d o s e abbad del monasterio de Sant Justo de Tojos Obtos, llier . Aunque algunos autores aseguran que el traslado no
192
de la Horden de Qistel en 1484 se dirigía a los Reyes Católi- se llevó a cabo , en 1400 el Capítulo General concedía a
193
cos protestando por la toma de posesión de Diego de fray Pedro de Mansilla permiso para acudir al Estudio de
Muros , el cenobio siguió en manos de éste hasta su
187
mucho su condición de abadía, pues pocos años después el último cuarto de siglo no volveremos a encontrar noti-
de la incorporación de Sobrado a la Congregación de Cas- cias relativas a un centro de enseñanza de la Orden en Sala-
tilla (1498), Tojosoutos pasaba a ser priorato (1504). manca , cuando la iglesia y casa de San Salvador,
195
nitiva no se produjo hasta 1506 —si bien no tendría pleno Por otra parte, el 21 de noviembre de 1426, desde
efecto hasta 1512, cuando muere el hasta entonces abad Roma se comisionaba al ordinario para que fundase un cole-
del monasterio, Juan de Pradomao—, momento en que gio en el hospital de San Juan de Valladolid, acusando al
queda reducido a "beneficio curado", durante la década de monasterio de Las Huelgas de dicha ciudad —del que depen-
los 70 de la anterior centuria se detecta un intercambio de
día por deseo de Nuño Pérez de Monroy, su fundador—, de
monjes entre ambas casas . 189
sedes de colegios cistercienses no se cumplió la comisión y a mediados del siglo XVI la pie-
Un último aspecto que debemos comentar es el dra del por entonces ruinoso hospital sería empleada para la
intento por fundar un Colegio de la Orden en el reino de construcción del nuevo templo de Las Huelgas.
185 Vid. más detalles en las monografías de La Espina y San Quirce. 194 PÉREZ-EMBID, 1986: 587.
186 FERNÁNDEZ DEVIANA, 1989: 95-97 y doc. 1, 97-100. 195 Al margen dejamos el intento también frustrado de Martín de Var-
187 Idem: doc. 2, 100-103. gas de fundar un colegio en el antiguo monasterio e iglesia de la Vera
188 Así se denomina en un foro de 1496 (PORTELA SILVA, 1981: 25 Cruz donado por el obispo de Salamanca Don Sancho el 14 de sep-
nota 11). tiembre de 1435 (A.H.N., Clero, carpeta 3. 442, doc. 1).
189 DURO PEÑA, 1972: 14-20; VALLE PÉREZ, 1982: I, 200-201 nota 196 El 18 de marzo de 1480 los Reyes Católicos ordenan respetar y
57; FERNÁNDEZ LÓPEZ, 2006: 82 y 94-95. Vid. más arriba en el texto guardar los bienes que pertenecen a Valparaíso y su "casa e collegio de
la relación de este monasterio con Carracedo. Sante Salvador, que es en la jibdad de Salamanca, miembro anexo" (LERA
190 El texto completo, traducido al castellano, en "Bula del Papa Bene- MAÍLLO et alii, 1998: doc. 242, 246-252). Sea como fuere, el Capítulo
dicto XII...", 1993: 697-733. General de la Congregación de Castilla celebrado en 1504 dispuso la
191 GOÑI GAZTAMBIDE, 1990: 281-282. apertura de un colegio en aquella casa de San Salvador (A.H.N., Clero,
192 PÉREZ EMBID-WAMBA, 1986: 657-658; REDONDO CANTERA, libro 20.261, s.f.).
1990: 437-438; YÁÑEZ NEIRA, 1996: 490; RUCQUOI, 2000: 509. 197 Vid. el documento en BELTRÁN DE HEREDIA, 1967: III, doc.
193 REDONDO CANTERA, 1990: 438. 1478, 407-408.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
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1.3. Las fundaciones femeninas prueba de su pertenencia a la Orden hasta 1385, momento
Las fundaciones femeninas comenzaron con cierto en el que aparece recogido como Santa Maria de Gua de la Orden
de Qstel monjas blancas en una relación de abadías de la dióce-
retraso respecto a las masculinas, casi 20 años más tarde . 198
Alfonso VII, con lo que estaríamos, de ser cierta esta cro- les. El 29 de enero de 1160, los condes N u ñ o Pérez de
nología, ante el primer monasterio cisterciense femenino Lara y Teresa Fernández de Tovar entregaban Perales y
del reino de Castilla y León. Puesto bajo la jurisdicción del Z o r i t a a Domnae Ozendae et sororibus Deo devotis secundum Ordi-
prelado diocesano, anterior a aquélla fecha hay un único nem de Cistellis ibi regulariter degentibus , p o n i e n d o a su hija
203
indicio, y a pesar de ello no concluyente, de su vinculación Mencía como abadesa del grupo de monjas provenientes
a la Orden, y es la mención en 1287 de un altar dedicado de Tulebras . 204
terciense, a pesar de que todos los autores coinciden en mento que alude a la existencia del monasterio es de 1160,
señalar que en esa fecha este monasterio, fundado en tiem- fecha en la que el matrimonio permutaba con Pedro Díez
pos de Alfonso VI tras la conquista de la ciudad, adopta los una heredad en Gradefes, in monasterio , y diez años más206
IV otorgaba cuarenta días de indulgencia a quien acudiera la encontraremos algo más tarde, en junio de 1181, cuando
a la iglesia del monasterio el día de su patrón, señalando ya I s i d o r o N i c o l a d a et concede corpus meum sepulture christiane, post
su adscripción a la Orden del Císter. mortem, monasterio beate Marie de Gradephes, cisterciensis ordinis . 208
Lo mismo habría que decir de Gúa (Asturias), monas- A principios de 1169 Lope Díaz de Haro y Aldonza
terio al parecer fundado por Fernando II —quien le otorga R u i z d e C a s t r o h a c e n cartulam donationis deo et ordini de ciste et
carta de coto en fecha indeterminada—, pero del que no hay sororibus servientibus et omnibus successoribus eorum illud monasterium
198 Además de la bibliografía citada en la nota 12, en la biblioteca del Recordemos que el primero de la Península fue santa María de la
2 0 2
monasterio de San Isidro de Dueñas hemos podido consultar el trabajo Caridad de Tulebras (1147). Sobre su fundación en Tudela, sus prime-
mecanografiado de Fr. Dalmacio Ortiz., Reseña histórica de los monasterios ros pasos e instalación definitiva en Tulebras diez años después, vid. GAR-
femeninos del Císter en España (1997), en el que hace una breve reseña de la CÍA M. COLOMBAS, 1987: 40-64.
historia de estos monasterios, aunque con algunos errores. 203 Publican el documento, por ejemplo, YÁÑEZ NEIRA, 1988: 394-
199 CASAS CASTELLS y PALOMO FERNÁNDEZ, 1991: 33-34 y 39; 395 y CASAS CASTELLS, 2005: 496-497.
CASAS CASTELLS, 2005: 569-572. Vid. además del trabajo citado en la nota anterior, PÉREZ-EMBID,
2 0 4
200 MARTÍNEZ CAVIRÓ, 1990: 21-22; LEBLIC GARCÍA, 2001: 8. 1989: 1082; ARA GIL, 1990: 37-38; HEREDIA ORTIZ, 1999: 964 y
201 UREÑA Y HEVIA, 1998: 32; idem, 1999: 1034. Aunque no hay CASAS CASTELLS, 2005:492-493. GARCÍA M. COLOMBAS, 1987: 94
documentación al respecto, CAVERO DOMÍNGUEZ, 1999: 799, sugiere afirma que la Ocenda a la que se dirige la donación era la abadesa de
que Gradefes fue su casa-madre, mientras que la tradición de Carra- Tulebras, quien enviaría a Perales una comunidad de monjas.
cedo transmitida por fray Jerónimo de Llamas (1593) le hacía depen- Por ejemplo, CALVO, 1936-1944: 12; CASADO y CEA, 1987: 8;
2 0 5
der de él (GONZÁLEZ GONZÁLEZ, 1993: 198). Por su parte, Fr. PÉREZ-EMBID, 1989: 1083; ALONSO MELCÓN, 1996: 930-931; CASAS
Dalmacio Ortiz señala que una vez asentadas en el siglo XVI en Avi- CASTELLS, 2005: 366-368; COELHO, 2006: 35-36. Otros sin embargo
lés, fueron atendidas por los monjes de Valdediós, mientras que ante- la sitúan un año más tarde, en 1169, como GARCÍA M. COLOMBAS:
riormente tal vez fueran los de Belmonte los encargados de su dirección 1987, 95 o CAVERO DOMÍNGUEZ, 1999: 797 (esta investigadora en
espiritual (1997: 249); y en cuanto a su advocación, en documentos 1998: 79 y 2007: 39 y 99, la coloca en 1168).
de Alfonso XI de 1336 y 1337, se le llama monasterio de monjas de Nues- CAVERO DOMÍNGUEZ, 2007: 105. Por su parte, CASAS CASTELLS,
2 0 6
tra Señora la Real de las Huelgas de Gúa de Babia y Somiedo (Idem), mientras 2005: 366, niega que ese monasterio se refiera al que tratamos.
que CAVERO DOMÍNGUEZ, 2007: 80 y 81 señala que la titularidad ori- BURÓN CASTRO, 1998: doc. 106, 143-144.
2 0 7
ginal era san Bernardo. BURÓN CASTRO, 1998: doc. 148, 192-193.
2 0 8
INTRODUCCIÓN HISTÓRICA 35
sancte marie de faiola , 209 e n t r e g á n d o l e s e n abril d e l a ñ o Sandoval y Valdeiglesias para que lo incorporasen a Cíte-
siguiente las villas de Cañas y Canillas. A la primera de aux , lo que se podría interpretar como la vuelta a su depen-
213
estas posesiones se trasladaría el monasterio antes de junio dencia directa de la Orden. Se desconoce de qué monasterio
d e 1 1 7 1 , fecha en la q u e c o n s t a c o m o ecclesia Sancte Marie de vinieron monjas para adoctrinarle en los nuevos usos, aunque
Cannas. Como los anteriores, fue filiación de Tulebras, lle- algunas tradiciones apuntan al de Santo Domingo de la
gando a ocupar la hija de los fundadores el cargo de misma ciudad . 214
Alfonso VIII quien el 29 de enero de 1175 confirma al Años más tarde, en 1196, Guiomar, hija de la condesa, con-
monasterio las donaciones y privilegios concedidos por sus firmará lo hecho por su madre a la Orden cisterciense y al
predecesores, al tiempo que le eximía de la jurisdicción del abad de Meira , de quien dependerá hasta fines del XVI .
216 217
arzobispo de Toledo y le sometía a la Orden del Císter: Mando N o se pone de acuerdo la historiografía en si fue
etiam quod idem monasterium Sancti Clementis et moniales ibidem Domino durante 1175 o en 1176 cuando Urraca de Avellaneda,
sirvientes vivant sub regula Sancti Benedicti et sub habitu et regularibus mujer de Martín López de Haro, fundaba en Fuencaliente
observantiis ordinis cisterciensis, et quod sit inmediate filia cisterciensis et el monasterio de Nuestra Señora del Valle de Fuente
Abbas cisterciensis, vel cui ipse in vinxerit habeat potestatem visitandi abba- Armengil y se convertía en su primera abadesa. Nada se
218
tisam etpromovendi sive, etiam si necessefuerit, deponendi; et quod de cetero sabe de la procedencia de las monjas ni a quien estuvo
sit totaliter ordini cisterciensis incorporatam, ut possit gaudere et uti privi- sometido hasta que pasa a formar parte de la filiación de
legiis et indulgentiis, libertatibus de quibusgaudet et utitur generaliter Ordo Las Huelgas de Burgos.
Cisterciensis. Un mes más tarde, el 19 de febrero, el arzobispo Mejor documentada está la creación de Carrizo: el
Cerebruno a instancias del monarca les concedía licencia para 10 de septiembre de 1176 Estefanía Ramírez, viuda del
unirse al instituto cisterciense y ponerse bajo la autoridad del Conde Ponce de Minerva, donaba entre otras la villa de
abad de Cíteaux, renunciando así a cualquier derecho sobre C a r r i z o a Ordini Cistercienso, tali convenientia, ut sit abbatiam sanc-
el mismo. El cambio de hábito sería confirmado en 1180 timonialium in Carrizo . La tradición del monasterio narra
219
celebrado en 1264 encomendaba la inspección de la "abba- rior, se desconoce la procedencia de las monjas y su
tiae monialium Sancti Clementis de Toleto" a los abades de dependencia inmediata.
2 0 9 Los transcribe fragmentariamente, RODRÍGUEZ DE LA LAMA, 1954: 213CANIVEZ, 1933-1941: III, 1264, def.25, 21.
101-102 y 102-103; una fotografía de este documento, desde donde MILLARUELO, 1981: 79. Más datos sobre la historia del monaste-
2 1 4
transcribimos, en AGUADO GRIJALBA, 2001: 40. La traducción caste- rio durante la Edad Media, en MARTÍNEZ CAVIRÓ, 1990: 71-73.
llana del m i s m o se puede ver en BAURY, 1999: II, 5 4 9 - 5 5 0 : otorgamos como 2 1 5 Vid. el d o c u m e n t o completo en FERNÁNDEZ DEVlANA, 1994: doc.
estad dicho carta de donación y damos a Dios y a la horden de Zister y a las hermanas 7, 24.
que alli sirben a Dios y a todos sus subcesores el monasterio de Sancta Maria de Ayuela. 216Idem: doc. 10, 26.
El simple hecho de que en la carta de donación apareciese ya el nombre Sobre la fundación del monasterio, la fundadora y su hija y la rela-
2 1 7
del monasterio como tal, ha hecho que diversos autores afirmen, sin ción del monasterio con Meira, vid. YÁÑEZ NEIRA y RODRÍGUEZ, 2000:
prueba documental alguna, que Santa María de Hayuela fue antes que 230-241.
cisterciense benedictino (SAENZ ANDRÉS, 1961: 2 5 5 - 2 5 6 ; ABAD LEÓN, 2 1 8 O p t a n p o r la primera, JANARIZ, 1 9 3 4 : 9 - 1 0 y ALDEA CHACOBO,
1984: 5 9 y 62; IBÁÑEZRODRÍGUEZ, 2 0 0 0 : 4; AGUADO GRIJALBA, 2 0 0 1 : 1 9 7 6 ; p o r la segunda, PALACIOS y FRÍAS BALSA, 1 9 7 8 : 8; MILLARUELO,
39). 1 9 8 1 : 80; PÉREZ-EMBID, 1989: 1 0 8 5 . Vid. también, CASAS CASTELLS,
2 1 0 PÉREZ-EMBID, 1 9 8 9 : 1084. Vid. además, BAURY, 1 9 9 9 : passim; y 2005: 599.
ALONSO ÁLVAREZ, 2004: 37-39. CASADO, 1983: doc. 38, 43-45; CALDERÓN MEDINA, 2008: 38-39.
219
211VIZUETE MENDOZA, 1993: 159-161; idem, 1993 (2): 12-13 y Sobre la fundación y los fundadores, CASADO, 1983: I, XIII-XXI;
220
37; TEJUELA JUEZ, 2008: 401-402. CASAS CASTELLS, 2005: 432-433; COELHO, 2006: 36-38; CAVERO
2 1 2 YÁÑEZ NEIRA, 1975: 2 2 6 . DOMÍNGUEZ, 2007: 92-97; CALDERÓN MEDINA, 2008: 32-35.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
36
El 12 de diciembre de 1181, Rodrigo Pérez, sus her- pariente de Fronilde, fundadora de Ferreira—, a Urraca de
manos y otras familias de Benavente donaban el viejo la heredad de Moreira con todos sus términos para que allí
monasterio de San Salvador de Santa Colomba Deo omni- hiciese vida monástica bajo la sujeción y obediencia al abad
potenti: tali siquidem ratione, ut ab hac die semper ibi Abbatissa habea- de Meira. En dicho lugar vivió una comunidad de monjas
tur benedicta, et sanctimoniales quae serviant Deo sub Regula sancti con su abadesa a la cabeza hasta que es reducido a priorato
Benedicti et Ordine Sanctae Mariae de Cistels . L a t r a d i c i ó n hace
221 a fines de la Edad Media —como tal se documenta ya en
a las monjas fundadoras procedentes de Gradefes -proba- 1468—, siendo sustituidas por monjes a partir de 1504 . 230
blemente por la participación de Teresa Pérez en la dona- Del monasterio de Santa María del Escobar de Tor-
ción-, pero al parecer desde muy pronto quedó sujeto a la quemada apenas se sabe nada. Lo único cierto es que ya
jurisdicción de Moreruela . 222
existía antes de 1189, por cuanto en esa fecha acude al capí-
Por esas mismas fechas, pero en Castilla, tenía lugar la tulo de Las Huelgas de Burgos, pues su presunta filiación a
creación del monasterio de San Andrés de Arroyo. Fundado Perales no está documentada . 231
por la condesa Mencía de Lara, que se convertiría entonces A mediados del último cuarto de siglo tiene lugar la
en su abadesa, aparece documentado por vez primera el 23 creación a las afueras de Burgos del monasterio de Santa
de abril de 1181, cuando Alfonso VIII le dona la iglesia de María la Real, fundación de Alfonso VIII y su esposa Leo-
San Millán, cerca de Villasandino , considerándose ese año
223 nor, que será conocido como Las Huelgas de Burgos . 232
seguridad la procedencia de las monjas, haciéndolas unos cuando los monarcas señalan que construimus ad honorem Dei et
venir de Cañas y otros de Perales .
226 227 Sancte eius genitricis Virginis Marie monasterium in la vega de Burgis,
quod vocatur Sancta Maria Regalis, in quo cisterciensis ordo perpetuo obser-
En enero del año siguiente (1182) la condesa Mayor vetur, y lo entregan a Misol, eiusdem monasterii instanti abbatisse, et
García, viuda de Gonzalo Marañón fundaba el monasterio de omnibus sororibus vestris, presentibus et futuris, secundum cisterciensem
Santa María de Aza, poniéndolo bajo la tutela del abad de ordinem degentibus, perpetuo possidendum . E l 2 de enero siguiente,
234
221 YÁÑEZ NEIRA, 1994: doc. 1, 264-266; CASAS CASTELLS, 2005: fecha de fundación 1198 (VALLE PÉREZ, 1982: I, 154) o 1196 (MÍLLA-
633-635. RUELO, 1981: 81).
222 Idem: 231, 234-236 y 254 y ss.; CASAS CASTELLS, 2005: 629- 231 CASAS CASTELLS, 2005: 489. Erróneamente GARCÍA CUESTA,
630. 1973: 103-104 lo considera filial de Las Huelgas de Valladolid, fun-
223 GUTIÉRREZ PAJARES, 1993: 24 y 105-106 dado a su vez según este autor en 1140.
por ejemplo, Idem: 25. Por su parte YÁÑEZ NEIRA y TOBÍO CEN-
2 2 4 232 u n a muy completa relación de títulos referentes a este monasterio se
DÓN, 2001: 3, señalan que ya estaría fundado con anterioridad, pero no puede ver en la ficha elaborada en el catálogo de la exposición Monjes y monas-
dicen cuándo ni cómo. terios..., por CARRERO SANTAMARÍA y POZAYAGÜE, 1998, a los que se pue-
225 MASOLIVER, 1985: 11; CASAS CASTELLS, 2005: 500-501. den añadir especialmente para los aspectos que aquí tratamos, GARCÍA M.
226 YÁÑEZ NEIRA y TOBÍO CENDÓN, 2001: 4-6, basándose en que el COLOMBAS, 1987: 107-117; PÉREZ-EMBID, 1989: 1078-1080 y 1086-
cenobio riojano fue fundado por los padres de Doña Mencía. 1088; CONNOR, 1995: 29-38; BAURY, 1999: 240-242; CAVERO DOMÍN-
Así constaba en la continuación de la Crónica de la Orden de San
2 2 7 GUEZ, 1999: 803-808; CASAS CASTELLS, 2005: 113-118; YARZA LUACES,
Benito, de Yepes, de la que se conserva una copia manuscrita en el monas- 2005: 15-16; VALLE PÉREZ, 2005: 35; ALONSO ABAD, 2007: 21-26.
terio de San Joaquín y Santa Ana de Valladolid (HEREDIA ORTÍZ, 1999: 233 LIZOAIN GARRIDO, 1985: doc,10, 17-19.
968). Idem: doc. 11, 19-23. También en CASAS CASTELLS, 2005: 271-
2 3 4
1990: 101-103; CASAS CASTELLS, 2005: 107-109. Idem: doc. 52, 92-94. También en CASAS CASTELLS, 2005: 274-
2 3 6
230 MARTÍNEZ COELLO, 2000: 268-270. Otros autores dan como 276.
INTRODUCCIÓN HISTÓRICA 37
Sin embargo, la intención del monarca no era crear un cularse a Las Huelgas. Basta recordar que, a pesar de su pre-
monasterio más, sino que éste se convirtiese en cabeza de sencia en el citado capítulo, el monasterio de Santa
todas las abadías cistercienses femeninas de los reinos de Colomba no llegó a someterse nunca al burgalés, sino que
Castilla y León, y en un segundo momento, en panteón real. estuvo bajo la paternidad de Moreruela , y que tampoco
244
Tras la fundación de Las Huelgas, Alfonso VIII y las estuvieron a él unidos todos los monasterios cistercienses
abadesas castellano-leonesas se dirigieron al Capítulo Gene- que se fueron fundando en años posteriores.
ral con el fin de que les autorizarse a reunirse una vez al A principios del siglo XIII, ca.1203, San Miguel de
año en el monasterio burgalés como casa-madre para cele- las Dueñas, dependiente desde 1152 de Carracedo, se afi-
brar capítulo general, lo que se autoriza en septiembre de lia a la Orden siguiendo a su casa-madre . 245
las Huelgas como casa matriz y a acudir anualmente a cele- erigido entre 1201 y esa fecha con el de Santa María de Tar-
brar capítulo general, excepto las de Gradefes y Perales que desillas, a quien en 27 de diciembre 1212 Alfonso VIII auto-
optaron por esperar la autorización de su verdadera casa- rizaba a comprar 30 yugadas , llegando a señalar algunos
247
a reunir todas las abadesas, incluidas las díscolas que habían de estos documentos se alude a la regla o instituto al que per-
sido dispensadas por el monasterio navarro, y a las que se tenecen. El 23 de mayo de 1218 Fernando III confirmaba al
sumaba una nueva, la de Santa Colomba, declarándose de monasterio Sancte Marie de Oterdesiellas, que est aldea de Soria licencia
forma unánime sujetas a Las Huelgas . N o obstante, pro-
240
para adquirir 30 yugadas de heredad y 50 aranzadas de
blemas relacionados con esta nueva obediencia motivaron viña ; tampoco hay referencias a la orden a la que pertene-
249
que Alfonso VIII se dirigiera al Capítulo General para que cen. Sin embargo, en una copia de este documento se incluye
mediase en el asunto, mas éste contestó en 1 1 9 1 que nada una cláusula que señala no sólo la adscripción a la Orden a
podía hacer para obligar a las abadesas cistercienses de Cas- través de Las Huelgas, sino también el papel jugado por
tilla y León a acudir a capítulo al monasterio burgalés, ya M a r í a Vicente, q u i e n apus Oterum Sellarum aldeam Sorie funditus
que carecía de autoridad sobre ellas . Pero finalmente, la
241 composuit et contruxit Sancte Marie regalis Burgensis obedienti Monaste-
intervención del abad de Cíteaux consiguió que en 1199 rio et subjetcto et dominarum conventui ibidem deo servientibus . Pero,
250
Tulebras renunciase a sus filiaciones castellano-leonesas . 242 ¿no estaremos ante dos monasterios independientes, uno en
Quedan, sin embargo, un problema por solucionar Soria y otro en Tardesillas, éste fundado como cisterciense
relacionado con el número de monasterios asistentes al ca. 1212, el otro de observancia desconocida a principios de
Capítulo de 1189: el por qué no estuvieron presentes las siglo, en cuya dotación interviene un mismo sujeto donante?
abadesas de Aza, Ferreira, Moreira o San Clemente de La falta de documentación impide clarificar este punto. Sea
como fuere, la destrucción de sus edificios y la presencia de
Toledo . Se podría pensar que solamente estuvieron pre-
243
una sola monja motivaron el cierre del monasterio de Tarde-
sentes aquellas casas ligadas a Tulebras —si bien todavía no sillas a fines de noviembre de 1285, entregando la infanta
está clarificado su ascendente sobre varios de ellos—. Tal vez Berenguela y María Gutiérrez, abadesa de Las Huelgas, los
su dependencia directa de monasterios masculinos que no restos a la Iglesia Colegial de San Pedro de Soria . 251
243 Dejamos fuera a las de Gúa, Segovia, Olmedo y Sto. Domingo de 248 CASA y RUBIO, 1994: 83 y 84.
Toledo por no ser seguras sus fechas de adopción de los usos cister- 249 GONZÁLEZ, 1983: II, doc. 32, 40-41.
cienses. 250 ZAMORA LUCAS, 1961: 86-88 y 89; CASA y RUBIO, 1994: 83-84.
• YÁÑEZ NEIRA, 1994: 238-239. 251 ZAMORA LUCAS, 1951: 91-93, publica el acta de liquidación.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
38
Tampoco es segura la fecha de fundación de Barría . 252 parecer bajo la tutela de Bonaval , por cuanto en 1262
259
Documentado por vez primera en 1217 cuando Toda pertenecía ya a la Orden de Calatrava . 260
Y á ñ e z , Dei gratia Abatissa novi cenobii, c o m p r a b a h e r e d a d e s , Hacia 1207 debieron comenzar los preparativos para
veredas y montes en uhovil, el hecho de que se califique al la fundación de un monasterio de monjas en el lugar de
monasterio de nuevo puede sugerir una data cercana para Vileña, propiedad de la reina urraca López de Haro, pues en
sus comienzosP P, pero no se indica a qué instituto per-
253
esa fecha actúan como testigos algunas sanctimonialibus feminis
tenece. Este último dato nos será revelado el 2 de abril de que allí vivían , y en 1213 Álvaro Núñez entregaba ciertas
261
1 2 3 2 cuando Gregorio IX toma bajo su protección a la heredades a la viuda de F e r n a n d o II ad opus vestri monasterii . 262
abbatisse et conventii monasterii novi cisterciensis ordinis . 254 N a d a se Finalmente, el 15 de abril de 1222 doña urraca donaba a
sabe de sus fundadores, de la procedencia de las monjas o sancha, abadesa de las Huelgas de Burgos, diversos bienes ade-
de si desde un principio estuvo vinculada a Las Huelgas . 255
m á s d e Vileña ad construendum monasterium et abbatiam sanctimonia-
La primera noticia que hemos localizado al respecto es de lium ordinis cisterciensis in predicto loco de villaenna . L a f u n d a d o r a
263
1415, cuando el 1 1 de noviembre Fernando de Baquedano, ingresó en el monasterio como señora del mismo, siendo
abad de Iranzu, comisionado por la abadesa de Las Huel- nombrada abadesa Elvira García, tal vez nieta de la reina . 264
al o b i s p o d e S i g ü e n z a d e domun illam circa Penellam quae Sothiel siguientes instrumentos conservados se hace referencia a que
de hacha, antiquitis dictafuit para f u n d a r u n m o n a s t e r i o d e m o n - regla o instituto siguen las monjas, y habrá que esperar a una
jas cistercienses en honor a san salvador, comprometién- bula de Gregorio IX de 22 de noviembre de 1273 por la que
dose a no ejercer ningún derecho de patronato ni ellos ni confirma al monasterio todas sus posesiones y privilegios
sus herederos; en ese mismo documento el obispo se obliga para encontrar la primera mención a la Orden cisterciense . 266
a hacerlo: ... donationes quas vos... facitis... accepimus, et in loco supra- A principios del primer tercio del siglo XIV el monasterio se
dicto quem Sothiel de hacham ab antiquis dici, memoralis monasterium encontraba en un estado lamentable, por lo que el 26 de
Cisterciensis Ordinis, in honore et nomine Sancti Salvatoris, cum con- enero de 1331 Sancho Blázquez Dávila, obispo de Ávila,
sensu nostri capituli fundamus... .257 C o m o abadesa f u e elegida traslada a las monjas a un nuevo monasterio que, con la advo-
urraca Fernández, hermana de los fundadores, que antes cación de san Benito, había construido para tal fin en el arra-
había profesado en San Juan Bautista de Vallfermoso de las bal de la ciudad, y al que se incorporan otras monjas y la que
Monjas, monasterio que vivía bajo la R.B. y las Ordo de será su abadesa, Yllana Muñoz, procedente del sancti spiri-
Fontisgartari . Poco tiempo iba a vivir el monasterio de
258
tus de Olmedo . Ya bien avanzado el siglo XV trocará de
267
San Salvador de Pinilla de Jadraque como cisterciense, al nuevo el nombre por el ya definitivo de Santa Ana . 268
PORTILLA, 1986.
2 5 2 establecer una data fija para la anexión de Pinilla a la orden militar, si bien
253Idem: 1 y 4, sitúa su fundación a fines del XII o principios del XIII. apunta que dicha fecha no debe estar muy lejos de la de vinculación a la
Transcribe el documento, conservado parcialmente, ENCISO VlANA, misma por parte de San Felices de Amaya, hecho que tuvo lugar en 1220;
1977: 534. sin embargo, este mismo autor en 2002: 41 y 49, comenta cómo la vin-
ENCISO VIANA, 1977: 544.
2 5 4 culación a Calatrava tuvo lugar, quizás, a mediados del XIII.
La tradición sitúa su fundación por la familia Mendoza y a tra-
2 5 5 261 Sobre los pormenores de la fundación, vid. CADIÑANOS BARDECI,
vés del cenobio burgalés ya muy tardíamente, durante el gobierno de 1990: 17-18; BAURY, 1999: passim; CASAS CASTELLS, 2005: 284-285.
María Gutiérrez, abadesa de Las Huelgas ca.1280-1290 (RODRÍGUEZ 262 PÉREZ DETUDELA 1977: doc. I, 3.
LÓPEZ, 1907: 169). Por su parte PORTILLO, 1986: 8, le hace hija de 263 Idem: doc. III, 5; CASAS CASTELLS, 2005: 303-304.
Tulebras, colocándose bajo la jurisdicción del burgalés ya a mediados Así lo piensa PÉREZ-EMBID, 1989: 1090.
2 6 4
del XIII. 265 Así piensa BARRIOS GARCÍA, 1984. Otros, en cambio, señalan que
ENCISO VIANA, 1977: 553.
2 5 6 "nada parece estar en contra de un origen más modesto en la segunda
DAZA PARDO, 2002: doc. 1, 51-53; cit. SOLANO RUIZ, 1984-1986:
2 5 7 mitad del siglo anterior" (GUTIÉRREZ ROBLEDO y VICENTE DELGADO,
534-536; DAZA PARDO, 2001: 558. 1991: 14).
MOLINA PIÑEDO, 1996: 86-88; DAZA PARDO, 2001: 558.
2 5 8 266 BARRIOS GARCÍA, 1984: 102-103.
259DAILLIEZ, 1988: 207. Idem: 122-125. También en GUTIÉRREZ ROBLEDO y VICENTE
2 6 7
García Fernández y Mayor Arias adquirieron el 9 de de Olgis de Burgis, quod dicitur Sancte Marie regalis , 177 siempre
enero de 1223 el viejo monasterio de San Vicente de Villa- estuvo bajo la dependencia de Carracedo . 278
ciendo reflejada esta fundación en el Capítulo General de para fazer hi monesterio de Dueñas de la horden de Cistel, a ñ a d i e n d o
la Orden de ese mismo año . El 4 de marzo de 1228, el
271
q u e dolo a la Orden del Cistel, asi que la Abbadesa de Santa Maria que
matrimonio fundador hacía entrega oficial del mismo a Las es agora doña teresa Alfonso, del Convento e las demas que vernán des-
H u e l g a s d e Burgos: Deo omnipotenti et Beate Marie semper Virgini pués della, hagan con sus fijas segund que el la Abadesa de Burgos sobre
et cisterciensi ordini et monasterio Sancte marie Regalis burgensis et vobis, las suas . La comunidad que allí se instaló procedía al pare-
280
domne Sancie, abatisse, et succesioni vestre, ut semper sit monasterium per cer de Gradefes, aunque no todos los autores están de
se exhibens tantum monasterio burgensi reverentiam et debitam obedien- acuerdo en este punto . Sí en cambio es más seguro la pre-
281
mujer Teresa de Portugal el cillero de Villabuena y otras A las afueras de Arévalo existía al menos desde 1179
i m p o r t a n t e s p r o p i e d a d e s ita quod in villabona ad honorem Dei un monasterio de canónigos regulares, sancta Marie de Gomez
et beate Virginis Marie et omnium Sanctorum monasterium sub regula Roman, dependiente del obispo de Ávila, y que seguía exis-
beati benedicti regendum hedficetis in quo vos et alie domine ordinem cis- tiendo como tal en 1232 . N o sabemos cuándo los mon-
283
269 MARTÍNEZ DÍEZ y GONZÁLEZ SÁNCHEZ, 2000: doc. 21, 53. tugal nunca fue abadesa del monasterio (CAVERO DOMÍNGUEZ y GON-
270 Idem: doc. 25, 58. ZÁLEZ GARCÍA, 2000: 109-110).
271 "Ad preces illustrium regis et reginae Castellae, petitio viri nobilis Idem: doc. VI, 201-202.
2 7 7
domini Garsiae Roumae de abbatia monialium construenda, ex speciali 278 Idem: 113-114; idem, 2007: 83-84; CASAS CASTELLS, 2005: 469-
gratia exauditur, sententia contra quem fieri videtur in suo robore per- 471.
manente, ita tamen ut domus Sancti Petri de Gomer expensas quas fecit 279 RODRÍGUEZ, 1948: 8 y doc. 321, 80.
occasione consessionis sibi prius factae velit benignissime resarcire 280 CALVO, 1936-1944: 247-248; CASAS CASTELLS, 2005: 485-486.
(CANIVEZ, 1933-1941: II, 1227, def.17, 59). 281 Vid. las opiniones de CALVO, 1936-1944: 248-249; MORENO,
272 Idem: doc. 29, 62-65; CASAS CASTELLS, 2005: 342-345. Sobre 1971: 134; CASADO y CEA, 1987: 80; YÁÑEZ NEIRA, 1989: 42;
este período de vida del monasterio, vid. CASAS CASTELLS, 1998: 35-36; ALONSO MELCÓN, 1996: 928-929; CASAS CASTELLS, 2005: 479-480;
idem, 2005: 309-311; MARTÍNEZ DÍEZ y GONZÁLEZ SÁNCHEZ, 2000: COELHO, 2006: 38-39; o CAVERO DOMÍNGUEZ, 2007: 37 y 99. La
13-18; y VALENTÍN DE LA CRUZ, 2003: 30-45. superioridad de Gradefes sobre Otero causó un sonado pleito a finales
273 CAVERO DOMÍNGUEZ y GONZÁLEZ GARCÍA, 2000: doc. I, 197- del siglo XV (CALVO, 1936-1944: 250-254).
198; CASAS CASTELLS, 2005: 475-476. BAURY, 2001: 38, señala que el 282 MORENO, 1971: 135 señala cómo María Núñez aparecía en los docu-
monasterio de monjas que aparece mencionado en la definición 41 del mentos de Otero anteriores a 1248, siempre antes que la propia abadesa.
Capítulo General de 1227 ("Petitio filiarum regis Legionis de abbatia 283 GARCÍA FLORES, 2005. CASAS CASTELLS, 2005: 75-78 y 94-98,
monialium facienda, de Spina et de Morerola abbatibus committitur, et copia casi textualmente el contenido de nuestro trabajo, incluidos los
ipsi anno sequenti quod invenerint renuntiet Capitulo generali", CANI- documentos y transcripción de la lápida del cementerio del actual
VEZ, 1933-1941: II, 1227, def.41, 63), se refiere a este de Villabuena. monasterio, sin citarlo.
CAVERO DOMÍNGUEZ y GONZÁLEZ GARCÍA, 2000: doc. IV 200;
2 7 4 Fr. Bernardo Cardillo Villalpando, Fundacion del insigne y religioso
2 8 4
CAVERO DOMÍNGUEZ, 2007: 83. Monasterio de nuestra Señora Santa Maria de Valparaiso en el Reyno de Leon y obis-
275 YÁÑEZ NEIRA, 1986 (2): 260-261; CAVERO DOMÍNGUEZ, 2007: 84. pado de Zamora, fol.12v (Salamanca, Archivo Histórico Diocesano,
276 En contra de lo que tradicionalmente se ha aceptado, Teresa de Por- 356/35); GARCÍA FLORES, 2005: 916-917; .
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
40
más tarde, en septiembre de 1244, el Capítulo General man- el obispo de Sigüenza, a ruegos de Sancha y Alonso de
daba a los abades de Moreruela y de Aguiar la inspección Molina, entregaba Buenafuente a Huerta, excepto el censo
del monasterio de monjas de "Gometroniam", cuya incor- que tenía que pagar a la iglesia de Sigüenza y la jurisdic-
poración a la Orden había solicitado, como hemos visto, el ción episcopal, debiendo esperar hasta el 27 de octubre de
prelado abulense . La adscripción se materializaría a prin-
285
ese año, para que doña Sancha ratifique la entrega ya sin
cipios del verano de 1245, como lo confirma Inocencio IV ningún tipo de reserva episcopal ni señorial . El 25 de294
el 27 de septiembre cuando se dirige al monasterium Sancte Dei junio de 1246 Inocencio IV tomaba bajo su protección al
Genitricis et Virginis Mariae de Gomez Roman (...) In primis, siquidem monasterio cisterciense y aprobaba su erección.
statuentes ut ordo monasticus qui secundum Deum et Beati Benedicti
También son conocidos los pasos seguidos por Alfonso
regulam atque institutionem cisterciensium fratrum a vobis post concilium
López de Haro y María Álvarez de los Cameros para fundar
generale susceptam in eodem monasterio institutus esse dinoscitur perpe-
tuis ibidem temporibus inviolabiliter observetur . E n c u a n t o a la
Herce. Aunque los preparativos se iniciaron en 1242, el 14
de septiembre de 1246 el Capítulo General de la Orden exa-
286
el segundo cuarto del siglo XVI Santa María de Gómez oficial del monasterio, sometiéndolo de acuerdo con lo esti-
Román consta documentalmente sujeto a la jurisdicción del pulado por el Capítulo General al abad Martín de Iranzu . 296
exento de jurisdicción episcopal, autorizaron al abad de siguiente aparece m e n c i o n a d o el Monasterium in honore Sancti
Huerta para que llevase a cabo todos los trámites necesarios Clementi que por entonces se estaba edificando junto a unos
para la fundación, trayendo para poblarlo monjas del terrenos y casas pertenecientes a la Orden de San Juan;
monasterio hoscense de Casbas , aunque quedaría some-
293 apoyaría aquélla creencia el hecho de que en un privilegio
tido para siempre al masculino. El 28 de febrero de 1246 de Fernando IV (1310) se diga que mi bisabuelo don Fernando
285 "Inspectio abbatiae monialium de Gometroniam, quam episcopus 291 VILLAR ROMERO, 1987: doc. 21, 121-122.
Habulensis petit ordini incorporari, committitur de Mozeloia et de [S. 2 9 2 Así lo había encargado en septiembre del año anterior, indicando
Maria] aquilari abbatibus ut ad locum, etc., et quid inde, etc. Abbas de Valle además que quedaría sometido a Huerta (CANIVEZ, 1933-1941: II,
Paradisi hoc eis denuntiet" (CANIVEZ, 1933-1941: II, 1244, def.52, 285). 1244, def.47, 284).
286 GARCÍA FLORES, 2005: 917-921. 293 VILLAR ROMERO, 1987: doc. 23, 122.
2 8 7Fr. Bernardo Cardillo Villalpando, Fundacion del insigne y religioso 2 9 4Idem: doc. 31, 123-124.
Monasterio de nuestra Señora Santa Maria de Valparaiso..., fol. 12v. 2 9 5CANIVEZ, 1933-1941: II, 1246, def.59, 312-313.
288 Recogen la noticia, YÁÑEZ NEIRA, 1957: 164; LERA MAILLO et 2 9 6BAURY, 1999: II, 701 y 722; PÉREZ CARAZO, 2008: 217-219,
alii, 1998: doc. 65, 64. 235-239 y docs. 10 A 15..
289 CANSECO ÓYARBIDE, 1998: 1120 y 1121; GARCÍA FLORES, 2005: 2 9 7LÓPEZ LACALLE, 1994: 79.
915.. 2 9 8La única conexión que hemos localizado entre estos dos monaste-
290 VILLAR ROMERO, 1987: 61-63 y 72-73; CASAS CASTELLS, 1996: rios es ya tardía: en 1361 Pedro I elegirá como abadesa del monasterio
753-754. burgalés a una monja del sevillano (BORRERO, 1991: 66).
INTRODUCCIÓN HISTÓRICA 41
y mi abuelo don Alfonso ganaron la ¡iudad de Sevilla el dia de San el monasterio y que llevaría el nombre de San Clemente.
Clemente, y fizieron en la ¡iudad un monasterio en honor a San Cle- Ante la inestabilidad que vivía por entonces esta ciudad
mente con dueñas del Cistel. A d e m á s d e los m o n a r c a s , el a r z o -(guerra civil entre Alfonso X y su hijo Sancho; campañas de
bispo Remondo de Losada tuvo parte importante en la Abu Yusuf...), el monasterio es abandonado y su comunidad
fundación, y así lo reconoce Alfonso X en un privilegio trasladada a su homónimo de Sevilla, confirmando el 10
c o n c e d i d o en 1 6 d e e n e r o d e 1 2 8 4 : díxonos de commo elfiziera de enero de 1284 al monasterio sevillano, cuya abadesa era
en esta ¡ibdat el monesterio de Sant Clameynt. P e r o la ausencia de la que lo había sido en Córdoba, todos los privilegios y pro-
documentación ha hecho pensar recientemente que hasta piedades concedidas a las monjas de Córdoba . 302
ese último año —en que está documentada como superiora La pérdida de documentación —el instrumento con-
del monasterio la que hasta poco antes ejercía como tal en servado más antiguo data de 1356—, obliga a ser cautos con
el por entonces desaparecido San Clemente de Córdoba, los datos que sobre la fundación de Santa María de las
cuyas propiedades además estaban ahora en poder del sevi- Dueñas de Sevilla, recoge la tradición monástica. Ésta narra
llano—, no había comenzado la vida monástica en el de cómo en 1251, tras el repartimiento de Sevilla, Juan Mathe
Sevilla, aunque sí los preparativos de una fundación . N o 299
de Luna, almirante de Castilla, entregaba a sus hermanas
obstante, creemos que no se debe rechazar la posibilidad de Leonor y María de Aragón unas casas para fundar un
que al monasterio ya fundado en Sevilla se le incorporase monasterio de monjas cistercienses, ocupando ambas suce-
más adelante la comunidad y propiedades del de Cór- sivamente el cargo de abadesas ; en cambio, otra reseña
303
Sevilla. El Capítulo General de 1263 envía a los abades de hace mucho tiempo criticadas, y sitúan la fundación no
Berdoues y Valdeiglesias a inspeccionar abbatiae monialium antes del reinado de Sancho IV basándose en el hecho de
Sancti Clementis etfiliarum suarum q u e A l f o n s o X había p e d i d o que las casas donadas tras el repartimiento lo fueron al
incorporar a la Orden, haciendo tal vez referencia a éstos padre del almirante, y que este último no ocuparía un papel
cenobios andaluces, dada la relación del monarca con destacado en la política del momento hasta los años 89 y
ambas casas . Respecto a la vinculación con Las Huelgas
301
90 del siglo XIII . Dependían del arzobispo de Sevilla, al
305
de Burgos, el único dato que tenemos es que en 1361 menos desde 1334 . 306
mente, la fundación oficial del monasterio de San Cle- Hacia 1280 doña Urraca, "de sangre real de Aragón,
mente de Córdoba por dicho monarca tiene lugar el 11 de mujer de Rodrigo Rodríguez", fundaba en Abia de las
enero del año siguiente, al donar a la abadesa Guntroda por Torres el monasterio de Santa María de los Barrios, que-
grand sabor que avemos que aya monasterio de dueñas del Cister e la dando bajo la jurisdicción de Las Huelgas de Burgos e
noble cibdad de Cordova, de una huerta en la Ajerquía para hacer ingresando en él como abadesa . 308
299 BORRERO, 1991: 37-43; idem, 1994: 502-507; idem, 1999: 31-33. 302 NIETO CUMPLIDO, 1991: 306-309; CERRATO MATEOS, 2005: 35-
300 LÍNAGE CONDE, 1991 (2): 28, señala que el Capítulo General de 36"; GRAÑA CID, 2010: 226-227.
la Orden concedió en 1262 al abad de Sacramenia autorización para 303 MUÑOZ, PuENTEy CALVO, 1991: 11; BORRERO, 1994: 500-501;
enviar a San Clemente de Sevilla uno de sus monjes como confesor. Sin idem, 2004: 53-57
emabrgo, en la definición correspondiente no viene recogido cuál era el 3 0 4MUÑOZ, PUENTE y CALVO, 1991: 30.
monasterio al que estaba destinado ese confesor ("Petitio domini archie- 305 BORRERO, 1994: 501-502. N o obstante, esta misma autora en
piscopi Sebillensis, de uno monacho de Sacramoenia eidem pro confes- 2004: 56, apunta que si la tradición comentada arriba en el texto fuera
sore assignando, exauditur" CANIVEZ, 1933-1941: III, 1262, def.23, 4). cierta, "estaríamos ante el primer monasterio femenino sevillano en fun-
N o obstante, si fuera cierto, reforzaría la postura que defendemos en el cionamiento tras la conquista".
texto. 306 MUÑOZ, PuENTEy CALVO, 1991: 12; BORRERO, 1994: 501; idem,
301 CANIVEZ, 1933-1941: III, 1263, def.44, 16, quien lo identifica 2004: 57.
con el monasterio homónimo de Toledo, probáblemente porque éste 307 LÓPEZ DE GUEREÑOSANZ, 1991; CASAS CASTELLS, 2005: 591-592.
aparece mencionado en el Capítulo del año siguiente. 308 FUENTE GARCÍA, 1986; CASAS CASTELLS, 2005: 565.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
42
Pocos años más tarde, ca.I288, se fundaba a las afue- visita de Dom Edme de Saulieu, abad de Clairvaux, alegando
ras de Valladolid el monasterio de San Quirce, aunque que dependían del arzobispo de Toledo . 3I5
La tradición recoge que San Bernardo de Guadalajara del XII, llegando algún autor a señalarle ya como cisterciense .
fue fundado extramuros de dicha ciudad —algunos dicen en Lo cierto es que hasta I 3 I 6 no aparece documentado como
época de Alfonso VIII o de su hija Berenguela, otros incluso tal * , recibiendo en I379 por voluntad de Juan I un contin-
3 8
lo adelantan a II53— en el lugar ocupado posteriormente gente de monjas de Las Huelgas tras la trágica destrucción
por la ermita de Nuestra Señora de Afuera, y que tras un del edificio monástico . Hacia I300 se ha situado el traslado
3I9
incendio en I296 se trasladaron al arrabal de Santa Ana con al interior de la villa de Talavera del antiguo monasterio de
la ayuda de las infantas Beatriz e Isabel, hijas de sancho IV San Antolín de las Dueñas, cambiando al mismo tiempo el
y María de Molina, incorporándose por entonces a la hábito —bajo la autoridad de San Martín de Valdeiglesias— y
reforma cisterciense con monjas llegadas del sancti spiritus el nombre, ya que desde entonces será conocido como San
de O l m e d o . Los primeros documentos que se conservan
3n Benito . sí es segura, en cambio, la fundación de Las Huel-
320
son dos privilegios de Fernando IV de 20 octubre de I299 gas de Valladolid el 9 de febrero de I320 de mano de la reina
por los cuales concede una fanega de trigo de cada una de las María de Molina, y colocado bajo la tutela directa del abad de
iglesias del arciprestazgo y I.000 mrs. de la moneda nueva en Cíteaux . Hasta la segunda mitad de siglo no se producirá
3ZI
la martiniega de Guadalajara y su término a las monjas del otra fundación, cuando en I372 Egas Venegas, capitán del rey
monesterio de Guadalfajara, p o r ser muy pobres e que no han con que se don Pedro, y su esposa Beatriz de Tolosa, donaron sus casas
mantener, sin aludir ni a la advocación del monasterio, la regla de Córdoba para acoger una comunidad cisterciense bajo el
o instituto al que pertenecen, ni la situación en la ciudad . título de Santa María de las Dueñas .
3I2 322
El I 5 de diciembre de I325 aparece ya nombrado como Dejando al margen el caso de San Miguel de Bóveda,
monasterio de San Bernardo en una confirmación de Alfonso monasterio de benedictinas que tras un primer intento de
XI del privilegio de Fernando IV de los I.000 mrs de la anexión a San Clodio en I 4 5 I por mandato de Nicolás V
moneda nueva ; y en I338, cuando María de Portugal
3I3
se incorpora definitivamente el 2 I de diciembre de I482,
ordena al concejo de Guadalajara dejen al convento de las dueñas pero en calidad de priorato , o el de La Concepción de
323
de Sant Bernardo cortar leña y pastar su ganado en los montes Córdoba, que aunque tiene su origen en las últimas volun-
del concejo * . En I533 las monjas se negaron a recibir la
3 4
tades de Beatriz de los Ríos, dictadas en 28 de noviembre de
1487, la autorización papal para la erección de este nuevo Bujedo, fundado anteriormente por ella y su marido, o que
monasterio no llegaría hasta 1506 , solamente se fundan
324 tanto Ferreira como Moreira dependieran de Meira, ya que
dos casas en el siglo XV, ambas en la ciudad de Ávila y estre- la fundadora del primero era hermana de la fundadora del
chamente relacionadas entre sí. Juan Sánchez, Arcediano de masculino, y la del segundo, hija de esa última. En esta
Arévalo había fundado ca. 1425-1427 el monasterio de misma dirección debemos situar la entrega de San Andrés
Santa Escolástica, y de éste saldrían tras una seria disputa de Valbení por Diego Martínez y Fernando García a Val-
por el cargo abacial varias monjas para crear uno nuevo a las buena, ya que el segundo fue posiblemente hijo de Estefa-
afueras de la ciudad, Santa María de San Millán, favore- nía Armengol; y también la de San Isidoro de Sevilla a
cido por Juan Núñez Dávila, escribano y mayordomo per- Gumiel por haber servido éste de panteón funerario a los
petuo del concejo de la ciudad, siendo confirmado este antepasados de Alonso Pérez de Guzmán.
suceso por Nicolás V el 1 de marzo de 1458. A comienzos
del XVI los dos cenobios se unirán al de Santa Ana . 325
monasterios de monjas en el seno de la Orden, sobre su pesar de ello, el número de abadías seguía creciendo, en parte
condición de verdaderos miembros o no, de la resistencia favorecidas por el papado, hasta que en agosto de 1251 con-
a su entrada oficial hasta principios del XIII, visiones en su siguió el Capítulo General que el Papa renunciara a forzar
mayoría muy rígidas, ajenas a la realidad histórica que nuevas incorporaciones a través de la expedición de breves
vivieron estas casas femeninas desde sus inicios en la pri- pontificios y cediera la entera responsabilidad de las funda-
mera mitad del XII . 328
ciones al mencionado Capítulo . Aunque las fundaciones
331
Durante ese último siglo surgieron numerosas abadías disminuyeron desde entonces, no dejaron de surgir monas-
de monjas que se integraron en la Orden cisterciense a través terios, algunos ajenos a las directrices oficiales de la Orden.
de fórmulas diversas: unas lo hicieron bajo la responsabilidad Como ha señalado Ghislain Baury , en algunos de
332
y supervisión de monasterios masculinos, llegado a formar los monasterios femeninos que nacen en el siglo XII, como
incluso congregaciones propias; otras mediante la incorpo- Perales, Santa Colomba de las Monjas o Las Huelgas de
ración a la Orden de congregaciones autónomas compuestas Burgos, al margen de aquéllos relacionados íntimamente
por cenobios de hombres y de mujeres; y por último con fundaciones masculinas, los fundadores en sus cartas de
mediante la adopción por parte de casas independientes de dotación oficial hacen hincapié en que el nuevo monasterio
la Regla de San Benito y los usos cistercienses, siendo reco- seguirán los usos y costumbres de la Orden, si bien no hay
nocidas como tales por instancias laicas y eclesiásticas, espe- donación a la Orden, ni participación expresa del Capítulo
cialmente los monarcas, obispos y el papado. u abades delegados. Este investigador se olvida, sin
Será a finales del XII y comienzos del XIII, en pleno pro- embargo, de la posible pérdida de documentación, encon-
ceso de centralización del gobierno de la Orden en manos trando otros casos en que los que sí existe esa donación,
del Capítulo General, cuando este último asume todas las como ocurre en Carrizo, Cañas, San Clemente de Toledo o
competencias relativas a nuevas fundaciones, afiliaciones y Las Huelgas. Pero además, en los casos de Perales, Cañas,
traslados, y ante el fuerte incremento de monasterios feme- Gradefes o Arroyo, por ejemplo, fundados según ella sin
ninos, el momento en que se comienza a regular y definir un participación de la Orden, el hecho de ser filiales de Tule-
modo único de incorporación de los cenobios de mujeres al bras, que a su vez dependía de Lumen-Dei y Tart, les vin-
instituto cisterciense —tras la petición de unión dirigida al culaba ya de alguna manera a Cíteaux, afianzándose aún
Capítulo General, éste enviará a dos abades a que inspeccio- más estos lazos con la pertenencia desde 1189 a la filiación
nen el lugar para ver si reúne las condiciones necesarias (ubi- de Las Huelgas y la dependencia directa de este último
cación, recursos, exención episcopal...)—, su relación con las monasterio de Cíteaux desde 1199.
casas masculinas —se crea la figura del padre inmediato, encar- Cuando a partir de 1213 se necesite la aprobación de
gado de la visita y asistencia espiritual de las monjas— y el Capítulo General para fundar un monasterio de monjas
modo de vida —práctica estricta de la clausura—. De ahí la comenzaremos a encontrar en las colecciones de estatutos
aparición a partir de 1213 en las colecciones de estatutos las autorizaciones para fundar algunos de nuestros monas-
emanados del Capítulo General de una serie de resoluciones terios, como Villamayor, Villabuena, Buenafuente, Arévalo,
encaminadas a dictar normas al respecto y a limitar e incluso Herce o Sevilla . Pero habrá otros muchos como Barría,
333
3 2 8Esta postura "tradicional" la encontramos, por ejemplo, en Les DECHAVANE y WABONT, 2001: 8; GARCÍA FLORES, 2005: 909-910.
moniales cisterciennes, 1986-1989: I, 37-82; LECLERQ 1990; BOUTON, 3 2 9Un resumen de las mismas hasta mediados del siglo XIII, en
1995: 15-17 y 24-25; CHAUVIN, 2001: 195-201; entre otros, y para el DEGLER-SPENGLER, 1995: 97-101.
caso hispano: CAVERO DOMÍNGUEZ, 1998: 91-93; idem, 1999: passim; 3 3 0CANIVEZ, 1933-1941: II, 1228, def.16, 68.
idem, 2007: 22; ALONSO ÁLVAREZ, 2004: 20-21; CASAS CASTELLS, 331 Idem: II, año 1251, def.4, 361.
2005: 18-24; COELHO, 2006: 223-230; o FORTÚN, 2007: 46. Por nues- 3 3 21999: 282-284; idem, 2001: 37-39.
tra parte, seguiremos más de cerca la visión de DEGLER-SPENGLER, 1995: 3 3 3Recordemos, no obstante, que hasta los estatutos de 1190 no
87-106; BAURY, 1999: 32-41, 71-83, 86-87; idem, 2001: passim; BER- encontramos recogidas de forma generalizada las fundaciones de monas-
MAN, 1999; idem, 2000: 39-45 y 233-234; CAMPION, 1999; o BONIS, terios masculinos.
INTRODUCCIÓN HISTÓRICA 45
varios abades cistercienses—, Otero —entregado directamente q u e se encargarían de la cura animarum y la visita y c o r r e c c i ó n
a la Orden en presencia del abad de Benavides—, Las Huel- que aquéllos les negaban. De hecho, los monasterios hispa-
gas de Valladolid —que dependía directamente de Cíteaux—, nos que sabemos estuvieron sometidos a obispos o arzobis-
que sus fundaciones no aparecen reflejadas y sólo se reco- pos se fundan a partir del segundo cuarto del XIII: los tres
gen sus nombres en los estatutos ya en fechas muy avanza- monasterios abulenses —San Clemente, Santa Escolástica y
das. Otros no aparecerán nunca. San Millán—, San Bernardo de Guadalajara, Santa María de
Veamos ahora a qué autoridades estaban sujetos estos las Dueñas de Sevilla o su homónimo cordobés. También se
monasterios femeninos. acogieron a esta modalidad San Vicente de Segovia, Gúa,
Santo Domingo el Antiguo de Toledo y el Sancti Spiritus de
En primer lugar encontraríamos aquellos dependien- Olmedo, que aunque la tradición sitúa fundados o afiliados
tes de monasterios de monjes, ya sean de su entorno inme- como cistercienses ya en el siglo XII, no hay testimonio docu-
diato como de la propia casa madre de la Orden. En el mental que lo asegure.
primero de los casos debemos incluir a Ferreira y Moreira,
dependientes de Meira; San Miguel de las Dueñas y Villa- Por último, hay un monasterio del que no hemos
buena, de Carracedo; Santa Colomba, de Moreruela; Aza, encontrado prueba absoluta de que estuviera vinculado a
de Bujedo; Contodo, de Sacramenia; Buenafuente, de alguna de estas tres opciones, San Quirce de Valladolid,
Huerta; Herce, de Iranzu; y tal vez San Benito de Talavera, aunque no descartamos una de las dos primeras: en 1437
de Valdeiglesias, y San Salvador de Pinilla, de Bonaval; por nutre de monjas al monasterio de Torquemada, por orden
su parte, San Clemente de Toledo y Arévalo pasaron en de la abadesa de Las Huelgas de Burgos, y en 1462 vemos
época tardía a depender del diocesano. Y en el segundo a algunos abades cistercienses tratando de impedir su
caso, encontramos a las dos Huelgas, las de Burgos y las de reforma por parte del prior de San Benito de Valladolid.
Valladolid, que estaban sujetas a Cíteaux directamente. Hay
que resaltar que tres de ellos —Moreira, Aza y Contodo—
terminarían convirtiéndose en prioratos o granjas de las
abadías masculinas de las que dependían. 3. LOS FUNDADORES:
En segundo lugar estarían aquellos que dependientes MONARQUÍA Y NOBLEZA
de Tulebras (Gradefes, Perales, Cañas) junto a otros de ¿A quién se debe la iniciativa de fundar un monasterio?
dudosa filiación original (Carrizo, Torquemada, Fuenca- A menudo serán los distintas casas ya establecidas las que en
liente y Arroyo), pasaron a formar parte en 1189 de la el contexto de una dinámica interna de la Orden procederán
órbita de Las Huelgas de Burgos, hija como aquellos pri- a la fundación de nuevos monasterios o a incorporar abadías
meros del monasterio navarro. Posteriormente se le irían preexistentes, pero no hay que olvidar que el éxito y popula-
agregando otras casas de nueva creación: Tardesillas, Vileña, ridad de los cistercienses atrajo la atención de reyes y nobles
Villamayor, Barría, Abia y Renuncio. A su vez, de Grade- que quisieron participar de lleno en la expansión de la nueva
fes dependió Otero de las Dueñas. orden y convertirse en sus protectores. De hecho, sin el apoyo
En tercer lugar estarían aquellos situados bajo la juris- económico de éstos difícilmente podía llevarse a cabo la cre-
dicción del prelado diocesano. Aunque a primera vista esta ación de un nuevo asentamiento. Sólo en el caso de afiliacio-
dependencia pueda parecer extraña, dado el privilegio de nes de abadías con un patrimonio ya formado la dependencia
exención de que gozaba la Orden, las causas de esta modali- de agentes exteriores era mucho más reducida, aunque no
dad creemos que hay que buscarlas en las negativas a aceptar debemos olvidar que en algunos casos estas incorporaciones
nuevas fundaciones de mujeres por parte del Capítulo Gene- son resultado de la voluntad de sus patronos . 334
ral en los años 20 del siglo XIII: recordemos, por ejemplo, El hecho de que la introducción de la Orden en los
que en 1228 los capitulares ofrecieron a esas comunidades reinos castellano-leoneses se produjera durante el reinado
femeninas a las que impedían incorporarse la posibilidad de de Alfonso VII (1126-1157), así como la supuesta rela-
seguir los usos y costumbres de la Orden aunque sin contra- ción familiar entre el monarca y Bernardo de Clairvaux
prestación alguna por su parte, es decir, que no podrían reci- motivó que durante mucho tiempo se viniera hablando del
bir asistencia del tipo que fuere de la rama masculina. Ello emperador como el gran impulsor y patrocinador de los
obligaría a buscar la protección de las jerarquías diocesanas, cistercienses . Esta cuestión se puso posteriormente en
335
3 3 4 GUINOT, 2001: 135-137. MARTÍN, 1953 (2): 284-285 o el ya clásico trabajo de YÁÑEZ
3 3 5
NEIRA, 1959.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
46
duda alegando que el monarca favoreció por igual a otras Como parte de las obligaciones propias de la monar-
iglesias y monasterios, sin importar la regla que siguieran o quía hacia la Iglesia se deben entender las donaciones que los
la orden a la que pertenecieran, pero especialmente a todos monarcas de los reinos castellano-leoneses dirigen a la
aquellos centros religiosos de carácter reformista que sur- cabeza de la Orden, Cíteaux, durante la primera mitad del
gieron en las primeras décadas del XII con vistas a su polí- XIII. Alfonso VIII le concedía el 2 8 de junio de I203 ade-
tica de fijación de fronteras y control interno . 336 más de los 2.500 áureos que ya había otorgado, una renta
sea como fuere, el primer monasterio cisterciense de anual de 300 en las salinas de Atienza, para que se conclu-
la Península, Sobrado ( I I 4 2 ) , creación de Fernando Pérez yera la casa de conversos, después para las obras de la igle-
sia y otros edificios y finalmente para la utilidad general del
de Traba, se f u n d ó con el consilio, iussione et fortutudine del
monasterio . u n mes más tarde, el 2 4 de julio, comunica
340
en Cántavos otro monasterio cisterciense y reformará el de que unos años antes, el 29 de abril de I 2 I I , el rey leonés le
San Vicente de Segovia. Además de éstos al menos otros había hecho entrega de 300 mrs. en las salinas reales de Villa-
seis cenobios se crearán ex-novo o se afiliarán a la Orden fáfila . Estas dádivas serían confirmadas por Fernando III
343
durante sus últimos quince años de imperio. sus sucesores en febrero de I 2 2 3 y por Alfonso X en julio de I 2 5 5 .
344 345
en el reino de León favorecerán también a la nueva Orden, Esta política de favor también se extendía hacia Cluny, que
erigiéndose cerca de veinte casas cistercienses durante sus recibiría importantes contribuciones de Fernando II,
reinados, pero Fernando II ( I I 5 7 - I I 8 8 ) no fundaría per- Alfonso IX y Fernando III , siendo, eso sí, destacable la
346
sonalmente ninguno —a no ser que desde su origen Gúa per- falta de donaciones por parte del fundador de las Huelgas
teneciese a la Orden—, y Alfonso IX ( I I 8 8 - I 2 3 0 ) sólo de Burgos, quien, por otra parte, beneficiaría mucho más a
uno, Valdediós, aunque su participación en Villabuena se las órdenes militares, como santiago y Calatrava . 347
336 PÓRTELA SILVA, I98I: 55-63; idem, I982: 325 y ss; LINAGE 339 PÓRTELA SILVA, I98I: 59; idem, I982: 325-326; PÉREZ-EMBID,
CONDE, I982: 353; PÉREZ-EMBID, I986: 35-37; VALLE PÉREZ, I982: I986: 36-37; entre otros.
I, 26-27; idem, I99I: I6I nota I02; idem, I998 (4): 6-7; entre otros. 3 4 0LIZOAIN GARRIDO, I985: doc. 72, I20-I22.
N o obstante, la labor de esta infanta para con los cistercienses no
3 3 7 3 « GONZÁLEZ, I960: III, doc. 749, 3I2-3I3.
fue realmente muy significativa (CAVERO DOMÍNGUEZ y GONZÁLEZ 3 4 2LIZOAIN GARRIDO, I985: doc. I2I, I90-I92.
GARCÍA, 2000: 34; ALONSO ÁLVAREZ, 2007: 658 y 683-684), a pesar 343 LIZOAIN GARRIDO, I985: doc. I05, I69-I75.
de la leyenda que la ha relacionado estrechamente con san Bernardo (vid. 3 4 4LIZOAIN GARRIDO, I985: doc. I83, 275-276.
al respecto la monografía de La Espina). 3 4 5CASTRO GARRIDO y LIZOAIN GARRIDO, I987: docs.3 y 4, 6-7.
338 COCHERIL, I964: 233. También BANGOTORVISO, I989: I88, ha des- 3 4 6SENRA GABRIEL Y GALÁN, I998: 33-36.
tacado frente a las opiniones adversas que esta idea ha tenido, la importan- 3 4 7RUCQUOI, 2000: 500-50I. Sobre las "obligaciones financieras" de
cia del mecenazgo de Alfonso VII; y más recientemente ha destacado que los reyes de Aragón para con el Císter, vid. CóNTEL BAREA, I966: 84-
"las fundaciones del siglo XII se inician bajo los auspicios de una buena rela- 86; RUCQUOI, 2000: 499-500.
ción de la familia real con los cistercienses" (I998 (7): I8); y también en 3 4 82000: 494.
este sentido, RECUERO ASTRAY, I992: I9I y más recientemente ALONSO 349 SENRA GABRIEL Y GALÁN, I998: 35 y 36.
ÁLVAREZ, 2007: 682-693; CAVERO DOMÍNGUEZ, 2007: 25, 73-74; FOR-
TÚN, 2007: 33 y 34; y TORRES SEVILLA, 2008: I06 y II0.
INTRODUCCIÓN HISTÓRICA 47
Tampoco mostraron mucha predilección los monar- Es importante destacar la implicación de determina-
cas castellano-leoneses por los monasterios cistercienses dos linajes con los cistercienses, participando a veces en más
como lugares de descanso eterno . Mientras Alfonso VII
350 de una fundación y que incluso están ligados por paren-
y Sancho III decidieron sepultarse en la catedral de Toledo, tesco a otras familias fundadoras . Es el caso, por ejemplo,
356
los reyes leoneses —Fernando II y Alfonso I X - lo harían en de los Ponce de Cabrera, relacionados con Moreruela y
la de Santiago. Serán Alfonso VIII y Leonor quienes reto- Nogales. Estefanía Ramírez había fundado junto a su
men la antigua tradición de las monarquías hispanas de marido Sandoval, y una vez viuda, ofrece a la Orden otros
enterrarse en monasterios al elegir Las Huelgas de Burgos, dos monasterios más, Carrizo y Benavides. u n pariente
su fundación predilecta, como panteón funerario suyo y suyo, García Pérez, junto con su esposa Teresa, daría
de sus descendientes . Sin embargo sólo su sucesor inme-
351 comienzo al monasterio de Gradefes; mientras que ella con
diato, Enrique I, recibirá allí sepultura, así como Beren- sus hermanos, Santa Colomba de las Monjas. Igualmente es
guela, viuda de Fernando II; el resto de personajes allí de señalar el caso de la familia Téllez de Meneses: Tello
enterrados, serán los otros hijos de los fundadores y de Pérez y Guntroda -hija de los fundadores de Gradefes-
monarcas posteriores, pero ningún otro rey . Otros 352 fundan Matallana; su hijo Alfonso Téllez, dona Palazuelos
monasterios femeninos serán escogidos por las reinas fun- a Valbení; mientras que uno de sus nietos, Martín Alfonso,
dadoras: urraca López de Haro, mujer de Fernando II, será principal benefactor de La Espina, y alguna generación
Vileña, y María de Molina, mujer de Sancho IV Las Huel- posterior María de Molina inauguraría el de Las Huelgas de
gas de Valladolid. Por el contrario, el entierro de María de Valladolid. Al linaje de los Traba pertenecían los fundado-
Portugal, mujer de Alfonso XI, en San Clemente de Sevi- res de Sobrado, Ferreira, Meira, Moreira y Perales, y a la
lla no se debió a una elección personal de la reina, sino que casa de Haro los de Cañas, Arroyo, Otero de las Dueñas,
fue Enrique II, hijo bastardo del monarca, quien en con- Vileña, Barría y Herce.
tra de los deseos de María, que había ordenado enterrarse Por último, quedaría por comentar el escaso número
junto a su marido en la capilla real hispalense, trasladó de fundaciones llevadas a cabo por eclesiásticos. De los
hasta esta casa su cadáver, donde ya reposaba Berenguela, monasterios masculinos sólo encontramos dos: Monsalud,
una de las hijas de Alfonso X . 353 fundado por el Arcediano de Huete (ca.1167), y Santa
María de Villamayor, por Gutierre de Toledo, Obispo de
El hecho de que a lo largo del proceso fundacional Oviedo (ca.1377-1381), si bien este último tendría una vida
aparezca frecuentemente la monarquía y de que son nobles corta debido a los problemas de jurisdicción con la casa
muy cercanos a ésta los que fundan estos monasterios, que madre, Valdediós. Quizás sea esa la causa por la que los pre-
generalmente lo hacen en terrenos donados por los reyes y lados diocesanos no se preocuparon de crear monasterios
que en unos pocos casos, como por ejemplo Sobrado y que no iban a estar sujetos plenamente a ellos . Tampoco
357
Matallana, en la carta de fundación y dotación se alude al fue muy distinto en el caso femenino. Únicamente fueron
monarca como inspirador del proyecto, ha motivado que fundados por un obispo San Clemente de Sevilla, Tardesillas
se pensara que el ascendiente real era lo primordial en y Santa María de Gómez Román, en Arévalo, pero no debe-
muchas de las fundaciones . Sin embargo todo apunta a
354
mos olvidar la intervención de Sancho Blázquez Dávila en
que fue la buena acogida por parte de la nobleza hispana de la restauración de San Clemente de Ávila, la del obispo de
la espiritualidad cisterciense, por entonces en plena pujanza, Sigüenza en la fundación de San Salvador de Pinilla o la del
la que favoreció la implantación de la Orden en la Penín- cardenal Egidio de Torres en la de Herce. N o obstante, fue-
sula, teniendo un protagonismo especial en el proceso fun- ron problemas con la jurisdicción episcopal precisamente
dacional las mujeres de estos linajes . 355
los que retrasaron la erección de Buenafuente.
351 ABAD CASTRO, 2001: 65; BANGO TORVISO, 1998 (6): 307. ALONSO MELCÓN, 1996; CAVERO DOMÍNGUEZ, 2007: 91-92 y 105-
Vid. un buen esquema de estos entierros en BANGOTÓRVISO, 1998
3 5 2 106. Además, MARTÍNEZ SOPEÑA, 2003: 49-53; D'EMILIO, 2004: 313-
(6): 321. 315; CASAS CASTELLS, 2005: 26-27; TORRES SEVILLA, 2005: 341-343;
353 BORRERO, 1987. idem, 2008: 107-109; ALONSO ÁLVAREZ, 2004: 25-26; idem, 2007:
ÁLVAREZ PALENZUELA, 1992: 794; idem, 1993: 170; ALONSO
3 5 4 passim; ALFONSO ANTÓN, 2008: 124, 131-132; CALDERÓN MEDINA,
MELCÓN, 1996: 921; CAVERO DOMÍNGUEZ, 1998: 86; idem, 2007: 25 2008; idem, 2008 (2): 440-441; entre otros.
7 73; MARTÍNEZ SOPEÑA, 2003: 49-50; RODRÍGUEZ MONTAÑÉS, 2004: En la monografía de Valbuena comentamos con más detalle estos
3 5 7
implicaciones tanto políticas, sociales y religiosas, a veces darnos tampoco de la fundación de Aguiar a orillas del
relacionadas unas y otras de modo tan íntimo que no es Coa, territorio ocupado por Fernando II frente a las pre-
fácil saber si alguna de ellas predominaba sobre las otras . 358
tensiones de Afonso Henriques, y que terminaría siendo
u n o de los móviles que se han barajado es el polí- portugués en 1297 . Sin embargo, desde hace años se
362
tico, en una doble vertiente: por una lado, la fijación de viene poniendo en duda la importancia de este "tema fron-
fronteras y por otro la organización del territorio. terizo" en las fundaciones cistercienses peninsulares, al
menos para una gran parte de las mismas . 363
paraíso y Moreruela —éste afiliado más tarde—, frente a Por- restación y de nueva roturación —recordemos, por ejemplo,
tugal Su sucesor en el trono de Castilla , Alfonso VIII, se
360 que las villas donadas para la fundación de La Espina y
serviría también en momentos concretos de su reinado de Meira estaban desiertas y yermas, respectivamente—, ten-
los monasterios cistercienses en sus luchas fronterizas con- dría lugar en zonas muy concretas y generalmente dentro de
tra León y Navarra. En oposición al reino leonés habría sus cotos redondos. Se distinguen de este modo de los
otra línea en la que la historiografía debería deternerse, las fronteras entre idem, 1991: 199-204; LINAGE CONDE, 1984: 65-66; idem, 1984
diócesis y entre señoríos nobiliarios (83-84). (2):91; ALFONSO ANTÓN, 1986: 61-64; idem, 1993: passim; PASCUA
También en las fundaciones de Tulebras, La Oliva, Piedra y Veruela,
3 6 2 ECHEGARAY, 1989: 438-439; ÁLVAREZ PALENZUELA, 1992: 791. Tam-
todos ellos en enclaves geográficos estratégicos, se ha dicho que tuvo un bién PÉREZ-EMBID fue crítico con esta idea, y señalaba que "la implan-
papel importante, tal vez el que más, la afirmación de poder y dominio tación del Cister sirvió, a lo más, para estimular una repoblación que iba
sobre intereses fronterizos por parte de las respectivas monarquías languideciendo", debiendo buscar otros motivos para la introducción de
(MUNITA LOINAZ, 1995 (2): 139; MARTÍNEZ BUÉNAGA, 1998: 35-36; la Orden (1986: 34-39). Le siguen RUCQUOI, 2000: 498-499; PÉREZ
D'EMILIO, 2005: 199-200; pavón, 2005: 405). CELADA, 2005: 362-363; ALONSO ÁLVAREZ, 2007: 689.
363 PÉREZ-EMBID ya en 1986: 36-37, ponía en duda que el tema fron-
terizo estuviese justificado en las fundaciones de Bujedo, Herrera, Rio-
INTRODUCCIÓN HISTÓRICA 49
monasterios de la corona de Aragón que participaron de Gregoria Cavero, una de las causas que llevan a muchas muje-
una manera activa en el proceso de colonización y repobla- res de la realeza y nobleza, generalmente viudas, son de
ción de los nuevos espacios conquistados al Islam . 365 "orden familiar" . Aunque el patronato laico fue mucho
370
Por otro lado, hay que señalar que en la erección del más importante en los monasterios benedictinos, encontra-
poderoso monasterio de Las Huelgas de Burgos se ha visto mos en las fundaciones cistercienses un interés por parte de
no sólo el deseo de imitar, pero superándolas, a las funda- la fundadora o de su familia por controlar muchos aspectos
ciones nobiliarias, sino también un claro interés político de la vida del monasterio, bien a través de su propio nom-
por parte del monarca castellano: el sometimiento a esta bramiento o el de alguna hija o incluso nieta como abadesa,
nueva fundación de todos los monasterios femeninos de su o entrometiéndose en ocasiones en las elecciones abaciales , 371
reino y los del leonés le permitiría controlar e incluso diri- o bien mediante la existencia de una figura, la señora, que junto
gir sus dominios, con lo que todo esto suponía . Además 366
a la superiora, gobierna en los aspectos materiales del monas-
debemos recordar que hasta 1199, momento en que ya terio, sobre todo durante los primeros años . 372
están solucionados los problemas con las filiales de Tulebras En lo concerniente a este último punto, contamos con
y hacen entrega oficial del monasterio a la Orden, no dis- el ejemplo paradigmático de la Señora de Las Huelgas de
ponen enterrarse en él. Recientemente ha tomado relieve la Burgos, título confiado a las infantas castellanas como pro-
propuesta de que con la erección del cenobio burgalés lo tectoras y representantes de la monarquía. Esa misma deno-
que pretendía Alfonso VIII era recuperar de forma actua- minación será recogida posteriormente en el testamento de
lizada la tradicional institución del Infantado . 367 María de Molina al referirse al monasterio por ella fundado
en Valladolid, con claros visos de emular la fundación bur-
N o hay que olvidar tampoco la importancia que para galesa: q u e siempre una duenna del mio linage sea Sennora del dicho
los nobles —para el rey la fundación de un monasterio era monesterio para guardar e enderezar el monasterio e poner recabdo en los
casi una función innata de la monarquía— el hecho de 368
sus bienes asi como lo es en el monesterio de las huelgas de Burgos. E s t e
fundar una abadía o convertirse en su benefactor suponía, mismo papel, aunque con distinto nombre, sería desempe-
además de las correspondientes gracias espirituales, un ñado en muchos casos por las propias fundadoras, como
manifiesto prestigio social. Con tales acciones se garanti- vemos en Cañas por la condesa Aldonza Ruiz de Castro, en
zaban su aparición en los tumbos y becerros de los monas- Carrizo por Estefanía Ramírez, en Ferreira por Fronilde
terios como grandes mecenas —en el Tumbo de La Espina, Fernández, en Vileña por urraca López o en Villabuena
por ejemplo, la labor desempeñada por Martín Alfonso en por la reina Teresa, que aparece en los documentos como
la continuación de las obras del templo debió parecer tan tenente del monasterio. Función semejante tendría también,
importante que se le consideró como el Segundo fundador, aunque en época algo posterior, Doña Milia en Ferreira, en
y lo mismo habría que decir de Juan Alfonso de Albur- donde aparece documentada como custos et domina (1247).
querque—, pero también ocuparían un lugar destacado en Y aunque desconocemos si en Santa Colomba de las Mon-
las historias genealógicas . 369
jas llegó a existir esta figura, lo cierto es que una de las con-
Desde esta misma óptica debe contemplarse el papel diciones para la fundación del monasterio era que la
ejercido, especialmente en el caso de los cenobios femeninos, abadesa fuera del linaje de los fundadores: Abbatissa vero hujus
por las fundadoras o sus descendientes. Como ha señalado Monasterii semper sit de progenie eorum qui in hanc Charta scripti sunt.
365 MARTÍNEZ BUÉNAGA, 1998: 32-33; RUCQUOI, 2000: 498; CUA- WALKER, 2005; idem, 2007: 188-189; ALONSO ÁLVAREZ, 2007:
3 6 7
DRADA, 2001: 143-144; PÉREZ CELADA, 2005: 358-359. 706-707; idem, 2009: 346; o ABELLAVILLAR, 2008: 35-36.
366 PÉREZ-EMBID, 1989: 1086-1087; idem, 1991: 54. Este mismo 368 ÁLVAREZ PALENZUELA, 1992: 794; RECUERO ASTRAY, 1992: 192-
autor señala que fue tal la victoria conseguida por el monarca que, al 193.
haber cubierto ya sus objetivos, "el movimiento fundacional va a cono- 369 NICHOLS, 1991: 11-12; LOCATELLI, 1992: 123-124.
cer ahora una pausa de treintaicinco años" (1989: 1088). Si bien es 370 1998: 86; le sigue CASAS CASTELLS, 2005: 27-28. FORTÚN, 2007:
cierto que desde 1187 no se incorporan nuevos monasterios en lo que 34 añade que muchos de los linajes fundadores trataron en ocasiones de
queda de siglo, no ha tenido en cuenta, sin embargo, las fundaciones de perpetuar su tutela sobre "sus" monasterios, aferrándose a las viejas pau-
Barría, Tardesillas o la afiliación de San Miguel de las Dueñas, llevadas tas y tradiciones del monacato hispano.
a cabo a principios del XIII. También BAURY, 1999: 239-242, es de esta Idem: 88, 94-95 y 103; idem, 1999: 810; idem, 2007: 163-164;
3 7 1
opinión, llegando a afirmar que en Vileña, cuyo proceso de fundación se también aluden a ello PÉREZ-EMBID, 1989: 1100-1102; BAURY, 1999:
inició ca.1207, pasaron quince años hasta que se produjo la dotación 280; idem, 2001: 46-47; o COELHO, 2006: 48-51; idem, 2007: 301-305.
oficial, debido a las presiones de Alfonso VIII por controlar todos los 372 Bibliografía concreta sobre los ejemplos aquí recogidos, pueden
cenobios femeninos, debiendo esperar la reina Urraca a que éste se encontrarse en la monografía de Las Huelgas.
hubiera muerto para llevar a cabo el proyecto (Idem: 242-243). Vid.
también D'EMILIO, 2005: 193-199 y ALONSO ÁLVAREZ, 2007: 706
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
50
Respecto al asunto de las abadesas, en Gradefes, nocido unánimemente cómo en torno a la tercera década
Arroyo, Aza y tal vez en Fuencaliente y Abia, las propias del siglo XII se produce en distintos puntos de la Península
fundadoras ocuparon ese cargo, mientras que en Perales y una reactivación de la vida monástica caracterizada por la
Carrizo, lo fueron sus hijas, en Vileña, la nieta, y en Sta. búsqueda de emplazamientos aislados, el uso de advoca-
María de las Dueñas de Sevilla las dos hermanas. ción mariana, la valorización del trabajo manual y un fuerte
Sin embargo todo apunta a que fueron razones de tipo componente ascético y eremítico, rasgos todos ellos que no
religioso o espiritual las que impulsaron no sólo la fundación se pueden entender si no es a partir de la difusión de las
de estos centros, sino las continuas donaciones que recibi- prácticas cistercienses a través de las grandes vías de comu-
rían de mano de reyes, nobles y campesinos . En primer 373 nicación como el Camino de Santiago, o por la iniciativa de
lugar, es importante la noción que se tenía de la vida tras la importantes personajes conocedores de la reforma religiosa
muerte: la donación y fundación de comunidades garantiza- llevada a cabo al otro lado de los Pirineos. 378
ban un cuantioso número de oraciones y misas ofrecidas no En este ambiente surgieron monasterios como Valbuena,
solo por la salvación de las almas de donantes o fundadores Moreruela o Carracedo, este último cabeza de una pequeña
tras su muerte, sino también por la de sus antecesores y suce- congregación de monasterios repartidos por todo el reino de
sores. En segundo lugar, tanto las fundaciones de centros reli- León en la que se adoptaron los usos cistercienses por influjo
giosos como las donaciones que a ellos se realizaban, eran de Clairvaux, aunque tardará en afiliarse a la Orden más de
considerados como un acto de caridad y una responsabilidad medio siglo y en el caso de sus filiales casi uno entero . 379
373 ÁLVAREZ PALENZUELA y RECUERO ASTRAY, 1984: 454; PÉREZ- Sobre Carracedo, su orden "precisterciense" y el modo de vida que
3 7 9
EMBID, 1986: 35 y 38; idem, 1991: 54; ALONSO MELCÓN, 1996: 932; practicaba, vid. QUINTANA PRIETO, 1971; idem, 1983; idem, 1990;
BAURY, 1999: 279; entre otros. idem, 1992; BALBOA DE PAZ, 1991: 36-53.
NICHOLS, 1991: 8-10; LOCATELLI, 1992: 123-124; COELHO,
3 7 4 En Fitero, la tradición sitúa a Durando y sus sociis, en el monte
3 8 0
2006: 47-48; idem, 2007: 301. Yerga; en Rioseco, a Cristóbal y sus fratribus a quienes se entrega Quin-
BANGO TORVISO, 1998 (7): 18.
3 7 5 tanajuar; en Sacramenia, al legendario Juan Pan y Agua que vivía en una
PÉREZ CELADA, 2005: 362.
3 7 6 cueva cercana y terminaría siendo converso del monasterio; en Monsa-
NICHOLS, 1991: 10; MUNITA LOINAZ, 1995 (2): 98-99. En este
3 7 7 lud a Fortuno, Donato, Raimundo y Bueno, viviendo en la ermita del
sentido, FÓRTÚN, 2007: 29, indica que "aunque es evidente el predo- Madroñal; en Valdeiglesias, donde se localizaban doce eremitorios aisla-
minio de las motivaciones religiosas, que nadie discute, pero que no dos y luego reagrupados en el de Santa Cruz; en Grande-Selva, encon-
impide la existencia de otros fines que pueden confundirse con aquellas tramos la ermita de San Juan de Portam Latinam, a donde se retira
y que, cuando se evidencian, están presentes casi en la cuarta parte de las Bernardo de Candeleda; en Valparaíso, a Martín Cid y sus confratres, en
donaciones". la alberguería de Peleas; en Oya hubo tres núcleos eremíticos que acaba-
COCHERIL, 1964: 223-224; PÓRTELA SILVA, 1981: 43-48 y 141-
3 7 8 ron unidos en sólo uno; en Osera, los monjes García, Juan, Diego y Pedro
143; VALLEPÉREZ, 1982: I, 26; idem, 1991: 141 y ss; idem, 1991 (3): que vivían retirados haciendo vida penitente; en Armenteira, a Ero, caba-
150; idem, 1991 (4): 769; idem, 1992: 6; idem, 1994: 22; idem, 1998 llero de la corte alfonsí que se hace ermitaño en sus posesiones; en Villa-
(4): 4-5; LINAGE CONDE, 1984 (2): 87-88; PÉREZ-EMBID, 1986: 117- nueva, a Pelagio y Alfonso que vivían como eremitas en Santa Colomba;
118; ROMANÍ MARTÍNEZ, 1989: 7-8; RUCQUOI, 2000: 496-497; entre en Palazuelos y Sandoval, a cuya fundación cisterciense precede la estan-
otros. cia de Diego Martínez y sus compañeros.
INTRODUCCIÓN HISTÓRICA
49
Orden había luchado por mantener intactos y con rigor habría ninguna duda de que existiese algún engaño por
durante casi un siglo, comienzan a diluirse, coincidiendo con parte de Vargas. Recibidos los informes solicitados, y
la aparición de nuevas formas de monacato más acordes con viendo Martín V que todo era cierto, expidió el 2 4 de
las necesidades de la sociedad del momento (dominicos y noviembre de I 4 2 5 la bula Pia supplicum vota , por la cual 3&6
franciscanos principalmente). El tantas veces citado texto de le permitía erigir en el reino de Castilla dos eremitorios, es
Las Partidas de Alfonso X, "Quales cosas non deven aver los decir, monasterios, con sus iglesias y demás dependencias
frayles del Cistel" es sintomático al respecto . Ese decai- 38t
necesarias, o recibir otros ya construidos, en los cuales se
miento, sobre todo espiritual, provocó el descenso progresivo había de observar estrictamente la Regla de San Benito. En
de las donaciones, lo cual incidiría de modo importante en el junio de I 4 2 6 regresaron los dos monjes a España y pidie-
proceso de construcción de los distintos monasterios, que o ron a Juan de Cervera, cardenal de Sevilla y abad de Salas,
no se terminaron o lo hicieron muy lentamente . 382
que pusiese en ejecución la bula recién obtenida, lo que se
Durante los siglos XIV y XV la situación de los monas- llevó a cabo el 7 de Junio de ese mismo año . 387
terios cistercienses hispanos empeora debido principalmente El primer eremitorio, Montesión, se fundó ex novo a
a la encomienda de éstos en manos de clérigos y seglares, las afueras de la ciudad de Toledo, en la vega de San Román
más preocupados por aumentar sus propias rentas que por junto a la roca conocida como Peñaventosa. El terreno fue
el bienestar de las casas que estaban a su cargo, y al Cisma
comprado por el canónigo y tesorero de la catedral don
de Occidente . Frente a este ambiente de crisis generali-
383
zada surgió la figura de Martín de Vargas, monje profeso del Alonso Martínez, a quién había conocido anteriormente
cenobio aragonés de Piedra . Este, junto con otros doce
384
en Roma. La autorización del arzobispo para proceder a la
monjes, decidió que había que acabar con una situación que fundación se dio el 2 3 de Diciembre de I426, celebrán-
ya se le escapaba de las manos al Capítulo General de Cís- dose la ceremonia de colocación de la primera piedra el 2 I
ter, y que había que emprender una reforma de la Orden . 385
de Enero de I427, día de Santa Inés . 388
En I424, Martín de Vargas, acompañado de fray En I 4 3 0 Martín de Vargas pudo proceder a extender
Miguel de Cuenca, se dirigió a Roma a entrevistarse con la reforma y fundar un segundo eremitorio, esta vez sobre
Martín V del cual había sido confesor y predicador. Tras un monasterio ya existente, Santa María de Valbuena. El
referirle el bajo estado moral en que se encontraba el Cis- caos interno que se vivía en esta casa desde I 4 2 6 provocó
ter hispano, mostró su propósito de vivir, junto con el resto la intervención real que acabaría con su entrega al reforma-
de sus compañeros que habían quedado en Piedra, en la dor el 4 de marzo de ese año. Poco tiempo después fue
observancia estricta de la Regla de san Benito según los enviado a Roma fray Gregorio de Medina, monje proce-
usos cistercienses. Antes de dar una respuesta afirmativa a dente de Piedra, con cartas del rey Juan II para que el papa
sus deseos, el papa pidió informes a los abades de salas y confirmase la construcción de Montesión y la incorpora-
de Valladolid sobre la veracidad de lo relatado. De esta ción de Valbuena, concediendo Eugenio I V el privilegio
manera, sirviéndose de personajes ajenos a la orden, no Dudum siquidem el 2 5 de enero de I 4 3 2 .
3 MPuede verse, por ejemplo, en BANGO TÓRVISO, I998 (7): I9-20. I 5 6 4 (PEÑA, I 9 8 9 : en concreto, 4 3 3 - 4 4 8 ) , el Exordio y Progresos de nues-
382BANGOTORVISO, I995: 65 y 68; idem, I998 (7): I8-20. tra Regular Observancia en los Reynos de Castilla y Leon, y Reformacion que con ella
383Acerca de la situación del Císter hispano en la Baja Edad Media, tiene en ellos la Religion, desde el principio de dicha observancia hasta el año de 1620,
véanse entre otros, HERRERA, I975: 283-287; MARTIN, I953, I5-I6; de Fray Luis de Estrada (A.H.N., Clero, libro I6.62I), o el Exordio de la
PÉREZ-EMBID, I986: 589-592 y 666-67I. Aunque no se centra en la Observancia de la Religion de nuestro Padre San Bernardo, en los Reynos de Castilla y
Orden, es interesante consular el trabajo de GARCÍA ORÓ, I969: I9-23, Leon, de Fray Bernardo Suarez, escrito en I656 (A.H.N., Clero, legajo
y en particular sobre la encomienda, HERRERA, I962: I92-200; idem, 7.658), vid. los trabajos de MONTALVO, I602: 339-347; MANRIQUE,
I984-I995: III, 269-277. I642-I659: IV: 592 y ss; MARTÍN, I953; YÁÑEZ NEIRA, I974 (5);
u n buen resumen acerca de la personalidad de Martín de Vargas,
3 8 4 idem, I974-I975; idem, I980; idem, I98I; HERRERA, I975; idem,
recogiendo todas las noticias que de él poseemos a través de distintas I984-I995: III, 3I4-350; PÉREZ-EMBID, I986: 656-7I7; GARCÍA FLO-
fuentes y publicaciones, en YÁÑEZNEIRA, I974 (5): 204-2I3, por citar RES, I996: 557-558; PASCUAL, I996: 690-694; idem, I996 (2); TORNÉ
uno sólo de los trabajos en los que trata estos aspectos. También, CUBELLS, I996; RUCQUOI, 2000: 5I8-52I; entre otros.
HERRERA, I975: 289-29I y 307-3I3; idem, I984-I995: 3I5-3I9; y 386 Una transcripción de la bula puede verse en HENRÍQUEZ, I630:
del mismo, Martín de Vargas, fundador de la Congregación de Castilla de la Orden 248-249; y MARTIN, I953: Apéndice IV I03-I06.
del Císter, manuscrito en la biblioteca del monasterio de San Isidro de HENRÍQUEZ, I630: 247-252; MARTÍN, I953: I07-II0; PASCUAL,
3 8 7
por Castilla buscando la protección real y señorial para la Hasta entonces únicamente Valbuena y Montesión
nueva observancia, a la vez que huía de los abades de Mori- formaban la incipiente congregación de monasterios refor-
mond y Sacramenia, comisarios enviados por Cíteaux que mados, ya que la incorporación de Valdeiglesias, autorizada
pretendían arrebatarle la posesión de Valbuena. Además, por Eugenio I V el 25 de septiembre de 1437 no se hizo
tuvo que viajar él mismo a Roma, y enviar a su hermano efectiva hasta 1485.
fray Manuel de Vargas y a fray Gregorio de Medina, prior A la muerte de Martín de Vargas, el abad de Cíteaux se
de Valbuena, a pedir al papa Eugenio IV nuevos privilegios encaminó a Roma a comunicar al papa que la reforma his-
que, al mismo tiempo que les absolvía de su desobediencia pana había caído tanto en lo espiritual como en lo temporal,
al abad de Cister, confirmaba todo lo hecho hasta el pretendiendo de esta manera que Valbuena se sometiese a su
momento e incluso aumentaban su jurisdicción, tanto mate- jurisdicción. De este modo, consiguió que Nicolás V anulase
rial como espiritual. Ejemplo de ello son los concedidos el los privilegios concedidos a la reforma por sus predecesores
2 5 de Noviembre de 1434 y el del 26 de octubre de 1437: el 16 de Abril de 1450. Pero el nuevo abad de Valbuena, fray
el primero daba facultad para extender la reforma a otros Bautista de Ocaña envió a Roma al cillerero fray Pacífico para,
seis monasterios, y el segundo afianzaba la jurisdicción de con cartas de recomendación de Enrique IV entablar un
Vargas sobre Valbuena, eximiéndole de toda autoridad pleito que restaurase la observancia, lo que tuvo lugar el 16
externa, incluida la de Berdoues, su casa madre . 389
de Mayo de 1455, por gracia de Calixto III . 392
Tras la anexión del primero y a pesar de la interven- El Capítulo General seguía mientras enviando visita-
ción de Eugenio IV ante el Capítulo General a favor de la dores a la Península, hasta que en febrero de 1493, en vista
reforma, comenzaron los ataques contra Vargas. Aunque en del poder creciente de la Congregación, se firmó un acuerdo
un primer momento encargaron al abad de Montesión que por el cual ésta seguiría adelante con sus privilegios y estatu-
reformase los monasterios hispanos y portugueses junto a tos, comprometiéndose a no unir más monasterios ni impe-
los de Ourscamp y Balerne, e incluso aceptaron la existen- trar nuevos privilegios sin permiso del Capítulo. Éste, a su
cia de la Congregación, pero no su autonomía (1438), al vez, facultaba al abad de Cíteaux o de uno de los cuatro pri-
año siguiente revocaron las definiciones "favorables", exco- meros abades de la Orden para visitar cualquier monasterio
mulgaron a Martín de Vargas y se ordenó que los abades de de la Congregación . En 1505, por concesión pontificia, la
393
Palazuelos, La Espina, Sacramenia y Bonaval, vendiesen Congregación podía incorporar aquellas abadías que lo deci-
Montesión y recuperaran Valbuena. En 1440 encargaban diesen . Finalmente, en 1515 el Capítulo General enco-
394
la visita de las filiales de Valbuena al abad de Berdoues, al mendaba al Reformador de la Congregación visitar los
tiempo que prohibían al de La Espina tratase con el refor- monasterios que todavía no estaban reformados. N o obs-
mador; cinco años más tarde ratificarían la excomunión y tante, el reconocimiento de la Congregación como entidad
mandaban al abad de la Espina encarcelarl . 390
autónoma e independiente no llegaría hasta 1603 . 395
Mientras tanto, aprovechando una estancia de Martín La reforma de los monasterios no fue cosa fácil. Por
de Vargas en Italia entre junio de 1437 y 1439, el mencio- un lado, los abades comendatarios exigían unas pensiones
nado fray Gregorio de Medina impetró al Papa la abadía de elevadas a cambio de renunciar a la abadía, e incluso las pro-
Valbuena diciendo que estaba vacante tras la muerte del pias comunidades, prefiriendo el régimen tradicional, se
antiguo abad. Al enterarse Vargas de lo sucedido, regresó hacían apoyar por campesinos y señores de su entorno para
rápidamente y encontró el monasterio en poder del dicho evitar la entrada de los observantes, produciéndose en oca-
prior y de gentes de Portillo. El reformador fue llevado a la siones altercados violentos, como en La Espina, Valpara-
cárcel de dicho lugar, sufriendo prisión durante seis meses. íso, Vega, Carracedo, Castañeda, Gumiel, Benavides, Oya,
TELA SILVA, 2001: 109-127; e idem, 2004: 107-139. Sobre el proceso MARTÍN, 1953: 28-29.
3 9 8
de incorporación de los monasterios castellanos y leoneses, consúltese 399YÁÑEZ NEIRA, 1994: 254-255.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
54
MONASTERIOS MASCULINOS
Monasterio Fecha de incorporación Modo de Incorporación Filiación
Sobrado 1142 Fundación Clairvaux
Valparaíso 1143 Afiliación Clairvaux
Fitero ca. I I 4 I - I I 4 5 Afiliación? Scala Dei
La Espina 1147 Fundación Clairvaux
Sacramenia ca. II47? (antes de I I 6 2 ) Afiliación Scala Dei
Monfero ca. I I 4 7 Afiliación Sobrado
Osera ca. I I 4 8 - I I 5 I / I I 9 9 Afiliación Clairvaux
Huerta II5I Fundación Berdoues
Valbuena ca. I I 5 I Afiliación Berdoues
Meira ca. I I 5 I - I I 5 4 Fundación Clairvaux
Toldanos ca. I I 5 2 Afiliación Clairvaux
Melón ca. I I 5 4 Fundación Clairvaux
Montederramo ca. I I 5 5 - I I 6 3 Afiliación Clairvaux
Moreruela ca. I I 5 8 - I I 6 3 Afiliación Clairvaux
Montelaturce II62 Fundación Sacramenia
Armenteira ca. 1162 Afiliación Clairvaux
Nogales II64 Fundación Moreruela
Palazuelos II65 Afiliación Valbuena
Sandoval II67 Fundación? La Espina
Monsalud II67 Fundación Scala Dei
Rioseco ca. I I 7 0 - I I 7 I Afiliación Valbuena
Herrera ca. I I 7 I Afiliación Veruela
Bujedo de Juarros II72? Fundación Scala Dei
Aguiar ca. I I 7 0 - I I 7 4 Afiliación? Boulbonne
Bonaval antes de I I 7 5 Fundación Valbuena
Benavides II76 Fundación Sobrado
Valdeiglesias II77 Afiliación La Espina
Óvila II8I Fundación Boulbonne
Matallana ca. I I 8 5 Fundación La Crete / Valbuena
Oya ca. I I 8 5 Afiliación Clairvaux
Gumiel de Izán II94 Afiliación Morimond
Junquera de Espadañedo fines del XII, antes de I 2 0 7 Montederramo
Valdediós I200 Fundación Sobrado
carracedo ca. I 2 0 I - I 2 0 3 Afiliación Cíteaux
Sierra ca. I 2 I 2 Afiliación Cíteaux
Vega I2I5 Fundación Benavides
Acibeiro I225 Afiliación Clairvaux
San clodio I225 Afiliación Melón
Penamayor I225 Fundación Carracedo
castañeda I245 Afiliación Carracedo
Belmonte ca. I 2 4 5 - I 2 6 4 Afiliación Carracedo
Villanueva de Oscos ca. I 2 3 I - I 2 5 7 / I 2 6 4 Afiliación Carracedo
INTRODUCCIÓN HISTÓRICA 55
MONASTERIOS FEMENINOS
Monasterio Fecha de Incorporación Modo de Incorporación Filiación / Dependencia
Segovia, San Vicente ca. 1156? Afiliación Diocesana
Gúa ca. 1157-1188? Fundación Diocesana
Toledo, Sto. Domingo 1159? Afiliación
el Antiguo o de Silos
Perales 1160 Fundación Tulebras / Huelgas (BU)
Gradefes ca. 1168 Fundación Tulebras / Huelgas (BU)
Cañas 1169 Fundación Tulebras
Ferreira do Pantón 1175 Fundación Meira
Toledo, San Clemente 1175 Afiliación Cíteaux / Diocesana
Fuencaliente ca. 1175-1176 Fundación Tulebras? / Huelgas (BU)
Carrizo 1176 Fundación Tulebras? / Huelgas (BU)
Arroyo ca. 1181 Fundación Tulebras? / Huelgas (BU)
Santa Colomba 1181 Fundación Moreruela
Aza 1182 Fundación Bujedo
Moreira 1183 Fundación Meira
Torquemada antes 1189 Fundación Tulebras? / Huelgas (BU)
Burgos, Las Huelgas 1187 / 1199 Fundación Tulebras / Cíteaux
San Miguel de las Dueñas ca. 1203 Afiliación Carracedo
Tardesillas ca. 1212? Fundación Huelgas (BU)
Barría ca. 1217 Fundación? Huelgas (BU)
Pinilla de Jadraque 1218 Fundación Bonaval?
Vileña 1222 Fundación Huelgas (BU)
Ávila, San Clemente /
San Benito / Sta. Ana. ca. 1223 Fundación Diocesana
Villamayor de los Montes 1228 Fundación Huelgas (BU)
Villabuena 1229 Fundación Carracedo?
otero 1240 Fundación Gradefes
Arévalo 1245 Fundación Diocesana
Buenafuente del Sistal 1246 Fundación Huerta
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
56
Monasterio Fecha de Incorporación Modo de Incorporación Filiación / Dependencia
Herce I246 Fundación Iranzu
Sevilla, San Clemente ca. I248 Fundación
Sevilla, Santa María
de las Dueñas I25I Fundación Diocesana
Contodo ca. I 2 5 2 - I 2 8 4 Fundación Sacramenia
Córdoba, San Clemente I26I Fundación
Abia de las Torres ca. I280 Fundación Huelgas (BU)
Valladolid, San Quirce ca. I288 Fundación
Olmedo antes I296? Fundación Diocesana
Guadalajara, San Bernardo I296? Afiliación Diocesana
Talavera de la Reina, San Benito I300 Afiliación Valdeiglesias?
Renuncio antes I 3 I 6 Afiliación Huelgas (Bu)
Valladolid, Las Huelgas I320 Fundación Cíteaux
Córdoba, Santa María
de las Dueñas I370 Fundación Diocesana
Ávila, Santa Escolástica ca. I 4 2 5 - I 4 2 7 Fundación Diocesana
Ávila, San Millán I444 Fundación Diocesana
Segunda parte
Introducción artística
• 59 •
INTRODÜCCIÚN HRTÍSTICR
sencillez de la que hablábamos; y qué decir de la panda occi- Las comunidades masculinas construirán grandes
dental de ese mismo claustro, obra ya del XiV, con muy diver- iglesias de tres naves, encontrando cierta diversidad tipoló-
sos motivos figurativos, o de la fastuosa decoración de la gica en la zona oriental de las mismas:
capilla de los Vega, en el monasterio de La Espina, de los
años 30 del XV. N o solo eso, la monumentalidad, esbeltez y > Iglesias con transepto destacado y cabecera com-
verticalidad que vemos en fábricas como La Espina o la que puesta por cinco capillas. s e diferencian a su vez tres tipos
tendría la de Matallana, e incluso la capilla mayor de Pala- según el modelo de cabecera empleado:
zuelos está ya muy alejada de aquellos ideales iniciales, y en • Aquellas que siguen el llamado "plan bernardin",
nada se diferencia de la de otros edificios de la época. N o es decir, capillas de testero recto, la central desta-
obstante, se observa en todos ellos una tendencia conserva- cada sobre las laterales, cerradas éstas por un muro
dora, teñida de cierto arcaísmo, proclive a mantener fórmu- común: La Espina. Recibe aquel nombre por la
las constructivas anticuadas —sirva de ejemplo, el alzado estrecha vinculación que se ha visto entre la adop-
interior de las naves de Palazuelos o el de La Espina—, pese a ción de este modelo por vez primera en Clairvaux II
lo avanzado de la época en que se levantan . 2 (1135) y su abad Bernardo, y que a su vez sería uti-
lizado de modo generalizado en la rama de Clair-
vaux mientras vivió el santo. En nuestro país lo
encontramos también en Santas Creus y posible-
mente en sobrado y Montederramo, y con tres ábsi-
1. CONSIDERACIONES GENERALES: des en Vallbona de las Monjas, Rueda, Iranzu y tal
ESPACIOS Y ANÁLISIS FORMAL 3 vez en Monfero y Valldigna.
1 Estos rasgos, comunes a las edificaciones de la Orden —aunque tam- monografías, siendo aquí nuestra intención destacar de forma concisa
bién a otras de la misma época—, así como la uniformidad en la organi- aquellos aspectos que estimamos más interesantes, intentando evitar
zación espacial de sus casas, tienen su origen según VALLE PÉREZ en la repetir conceptos y notas bibliográficas. Por el contrario, en cuestiones
observancia de la Regla de San Benito, el sistema de filiaciones, el con- que no se han destacado en las monografías sí se incidirá con cierto dete-
trol llevado a cabo por el Capítulo General y la participación de maes- nimiento.
tros constructores de la Orden en las obras de sus monasterios (VALLE 4 Estos aspectos han sido destacados en ocasiones por BANGO TOR-
PÉREZ, 1978: 284-285; ídem, 1982: I, 35-36). VSO, por ejemplo en 1991: 33-34 o 2000: 86-87. Sobre los templos de
2 TORRES BALBÁS, 1944: 213; SOWELL, 1987: 140 y ss. Esta per- los cistercienses, sus tipologías, su compartimentación espacial, etc, vid.
sistencia de fórmulas ya superadas quizá haya que considerarlo no un AUBERT, 1947: I, passim; DIMIER, 1974: 39-40; o KINDER, 1998: 139-
conservadurismo propio de los cistercienses, sino de los talleres locales 223, y centrándonos en el caso hispano, TORRES BALBÁS, 1924; idem,
que trabajan para estos monasterios, anclados en una tradición que se 1954; EYDOUX, 1954; BANGO TORVISO, 1985: 428-436; idem, 1995:
mantiene hasta bien entrado el siglo XIV. 72; o MUÑOZ PÁRRAGA, 1998.
3 En este capítulo se hace un mínimo enunciado de temas y concep-
tos que tienen su explicación específica y detallada en las respectivas
INTRODUCCIÓN HISTÓRICA 61
por citar solamente ejemplos cistercienses, ya que fue En la iglesia de Las Huelgas, y seguramente en sus
un modelo empleado asiduamente durante el gótico dependencias, se empleó el tapial.
en templos parroquiales y de otras órdenes monás- > Sistemas de cubrición
ticas, por ejemplo, en los premonstratenses de Agui-
• Bóvedas
lar, Rivas y Pelayos de cerrato.
• Un último tipo sería el desarrollado en Valbuena: En La Espina, Valbuena y Palazuelos se combinan
distintos tipos de bóvedas, románicas y góticas: de
capilla mayor e intermedias con ábsides de medio
cuarto de esfera, cañones apuntados, crucería sim-
punto precedidos de tramo recto y las extremas de ple o completada con ligaduras, y de nervios. La
testero plano. Este modelo es único en el panorama única iglesia que con toda probabilidad se cubrió
cisterciense, pero en cambio lo vemos utilizado en por completo con abovedamientos góticos fue
colegiatas y catedrales dentro de la Península, como Matallana. La cúpula la vemos empleada en el cru-
la de Tudela y la Seo de Zaragoza. cero de Valbuena —en este caso ochavada—, aunque
> Iglesia con transepto no acusado en planta y tres tal vez se utilizó otra en el cimborrio de Matallana,
ábsides semicirculares precedidos de tramo recto, pero que pero de nervios radiales.
en el curso de las obras modifican el trazado de la capilla En algunos casos esa diversidad de abovedamientos
mayor adoptando un polígono: Palazuelos. El resultado es que encontramos en un mismo templo se debe a
una mezcla de formas arcaizantes ancladas en la tradición una aplicación simultánea, de forma voluntaria y
románica local y de otras inmersas en el nuevo espíritu consciente, de fórmulas dispares, como ocurrió en
gótico procedente del foco de Burgos. Esta simbiosis será la parte oriental de la iglesia de Valbuena, en donde
copiada en la parroquia de Santa María de Dueñas. vemos cañones apuntados en los brazos del tran-
septo y tramos rectos de las tres capillas centrales,
Respecto a las comunidades femeninas, en Las Huel-
crucería en las extremas y bóvedas de nervios en la
gas de Valladolid se optó por un esquema mucho más sim-
mayor e intermedias. Sin embargo, las más de las
ple: una sola nave rematada con un único ábside de testero
veces es consecuencia de alteraciones del proyecto
recto. Esta elección parece ser indicativo de la precariedad
original, ya sea por la propia lentitud del proceso
económica que condicionó la vida de muchos de los monas-
constructivo o bien por la incorporación de nove-
terios cistercienses femeninos, siendo por otro lado una
dades sobre la marcha.
tipología corriente en los cenobios urbanos, dada la facili-
dad de adaptación de este plan a espacios a veces limitados Ejemplo evidente del primero de estos casos es el
y a la rapidez que implicaba una construcción tan sencilla, templo La Espina: su cabecera, de los años 60-70
hecha en ocasiones con materiales pobres. Lo encontramos del siglo XII, se cubrió con cañones apuntados, sis-
también en Santa Ana de Ávila y en San Clemente de Sevi- tema que parece estaba previsto usar también en el
lla. Ignoramos si en San Quirce o en Sancti Spiritus de transepto, mientras que las naves, iniciadas ya den-
Olmedo se siguió esta planimetría, ya que ambos templos tro del XIII con soportes previstos para aristas, se
fueron reformados en época moderna, aunque no debe des- cerraron finalmente con crucería a partir del último
cartarse esa posibilidad. cuarto del XIII y durante la primera mitad del XIV,
al igual que el transepto.
Respecto al segundo caso, es innegable en las naves
Interiores de Valbuena, en donde la columna acodillada de los
> Muros pilares estaba destinada a recibir las dobladuras de
En los cuatro monasterios masculinos están realiza- los perpiaños y no los nervios de una bóveda de
dos en piedra caliza a base de sillares regulares muy crucería, o en los tramos rectos de las capillas late-
bien recortados aparejados a soga en hiladas isódo- rales de Palazuelos, cuyas columnas angulares en
mas —los tizones son muy escasos—, trabadas con finas origen estaban diseñadas para recoger también
lechadas de mortero de cal. Los muros son muy dobladuras no cruceros, algo que también sucedía
anchos, con un grosor medio que oscila entre 1 m. de en las naves de este mismo templo.
la capilla mayor de Palazuelos y los casi 2'50 m que Debemos tener en cuenta que en la época de gran
alcanza en la zona más oriental el muro sur de las eclosión constructiva de estos monasterios
naves de Valbuena, predominando aquellos que se —último tercio del XII y primero del siguiente—, se
sitúan en torno a I'80-2'00 m. Sillarejo y mampos- produce en diversos puntos de la Península la
tería se emplearán en época moderna. El ladrillo adopción de fórmulas novedosas pertenecientes al
parece que se utilizó sólo en las dependencias y pan- léxico constructivo gótico en edificios de concep-
das del claustro de La Espina y en la intervención ción general románica. Es un período de cambios,
moderna de Palazuelos. en la que el nuevo léxico a veces no se entiende
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
62
bien y se superponen dos sistemas diferentes entre Valbuena). Respecto a los utilizados en La Espina,
sí, uno románico —muros y soportes— y otro el lento y complicado proceso constructivo de su
gótico —bóvedas de nervios— . 5 templo hace que no sea fácil confirmar si en rea-
• Armaduras de madera lidad las columnas menores estaban pensadas para
Únicamente el templo de Las Huelgas se cubrió con apear, como vemos, los nervios de una bóveda de
techumbre de madera, lo más probable con un sen- crucería o para recibir la dobladura del perpiaño o
cillo alfarje. los arranques de una bóveda de aristas. En Val-
buena y Palazuelos las acodilladas estaban desti-
> Arcos nadas a recibir el volteo de dobladuras, pero
En los arcos constructivos —triunfales, formeros, fajo- durante la marcha de las obras cambió su función
nes, perpiaños y cruceros—, domina el arco apuntado, al incorporarse al proyecto la bóveda de crucería.
siendo también generalizado su uso en puertas a En Matallana, por el contrario, vemos un pilar
excepción de unos pocos ejemplos en donde se muy articulado diseñado en gótico: destinando la
emplea el de medio punto (puerta de monjes y de la columnilla intermedia como apeo del nervio cru-
sacristía en La Espina y del husillo a cubiertas en Val- cero y las otras para dobladuras y formeros.
buena). De modo excepcional, en Palazuelos -embo-
cadura a la capilla mayor y perpiaños de la nave • cruciforme con dobles semicolumnas en los fren-
central- aparece el arco apuntado peraltado. tes y otras en los codillos. c o n una simple columna
Respecto a su molduración, en Valbuena prevalecen acodillada lo encontramos en Valbuena y Palazue-
los perfiles prismáticos y aristados -sólo se molduran los, y con tres en Matallana. Este grupo se corres-
las dobladuras de los torales, la puerta de monjes y la ponde con los pilares en T con dobles columnas
de la fachada occidental—, así como en Palazuelos, si del grupo anterior. En los dos primeros, los sopor-
bien aquí las nervaduras y puertas —a excepción de la tes de los codillos se diseñaron para recoger dobla-
de conversos—, están profusamente molduradas. En duras, mientras que en el último había una columna
La Espina, puertas y arcos constructivos —excepto en específica para recibir nervios.
la capilla original de la cabecera— se mostrarán, por lo • cruciforme con una columna embebida en cada
general, con molduración —los perpiaños de las naves frente y un codillo más entre los brazos de la cruz.
laterales muestran vivas sus aristas, pero su dobladura Aparece en las naves de La Espina. Los codillos
sí está moldurada—. intermedios seguramente en origen fueron conce-
> Soportes bidos para recibir el arranque de bóvedas de arista,
Dejando de lado las columnas empleadas en ventanas aunque aquí se sustituyeron por arcos cruceros,
y puertas, en ningún momento encontramos este tipo mientras que la columna frontal se destina a reco-
de soporte empleado de forma exenta, pero sí embu- ger el perpiaño y el codillo anejo su dobladura.
tidas en pilares y muros; incluso las situadas en los • de núcleo prismático con una columna en el
rincones de capillas y naves no están totalmente ado- frente, las responsiones en el transepto de La
sadas, sino que tienen algunos tambores, las basas y Espina. En éstos la columna recibe el volteo del
capiteles entregos. Grupos de dos y tres columnas se perpiaño, mientras que sobre los codillos de la
alzan en los ángulos del transepto y cuerpo de naves pilastra, encapitelados, voltean los nervios de las
de Matallana. bóvedas de crucerías.
Respecto a los pilares, podemos distinguir funda- Pilastras simples, encapiteladas, encontramos úni-
mentalmente tres tipos: camente en las embocaduras de las capillas laterales
• con planta en forma de T. Diferenciamos a su vez, y en los brazos del transepto de Valbuena.
aquellos que llevan una columna gruesa en el También se utilizan con asiduidad ménsulas como
frente y otra más pequeña (naves de La Espina) o soporte de arcos y columnas. Los modelos emplea-
incluso tres (transepto de Matallana), acodilladas, dos son diversos, encontrando pequeñas piezas tron-
de los que emplean dobles semicolumnas flan- copiramidales (rincones del brazo norte del
queados por una (Valbuena y Palazuelos) o tres transepto de La Espina), troncocónicas (nave central
columnas (Matallana) de menor sección, o un de Valbuena y zona oriental de los brazos del tran-
simple codillo (primera responsión de las naves de septo de La Espina) —a veces terminadas en un
5 Sobre estos aspectos, vid. BANGOTORVISO, 1985: 410-411; idem, 1991: 35-37.
INTRODUCCIÓN HISTÓRICA 63
baquetoncillo (nave central de La Espina)—, o mén- Con columnas únicamente hacia el interior y simples
sulas-columnilla (ángulos del brazo sur del tran- al exterior, las vemos en la cabecera de Valbuena,
septo de La Espina y presbiterio y rincones del siendo excepcionales por su forma las correspon-
transepto de Palazuelos). dientes a las capillas extremas, en donde adoptan una
Al igual que veíamos al describir los tipos de pila- curiosa forma geminada con parejas de estrechos
res, es complicado en algunos casos discernir si vanos rematados en cuarto de círculo cobijados por
estamos ante un procedimiento planeado desde un un gran arco apuntado.
principio o es resultado de la adopción tardía de El tipo contrario sería aquel que hacia el exterior lleva
un nuevo sistema de abovedamiento, sobre todo columnillas —parejas en Palazuelos y sencillas en La
debido a que un sector de la historiografía ha Espina—, pero que al interior carece de ellas.
venido señalando que el empleo de ménsulas en o t r a modalidad es aquella provista de arquivoltas
construcciones de los cistercienses era consecuen- sobre columnillas tanto al interior como al exterior:
cia de su sentido práctico y economía de medios con dos pares de columnillas y arcos de medio punto
que les impulsó a eliminar, muchas veces, los las vemos en la cabecera de Palazuelos, mientras que
soportes preparados desde el suelo para el volteo la del brazo sur del transepto de La Espina lleva las
de arcos y nervios. En casos como el apeo de las arquivoltas apuntadas; en ambos casos los arcos están
columnas de las naves centrales de La Espina, Val- muy moldurados.
buena y, aunque no se conservan, Matallana, se Estrechas saeteras adinteladas con derrame interno
trata de una solución buscada desde el origen cuyo vemos en el husillo de Valbuena, mientras que en el de
fin era facilitar el apoyo de las sillerías de monjes Palazuelos aparece con doble derrame y rematada en
y conversos; en cambio, las empleadas en el tran- arco de medio punto.
septo del primero de esos monasterios derivan de En dos ocasiones se utilizan en el templo de Valbuena
la incorporación de bóvedas de crucería al pro- vanos circulares o deberíamos decir mejor rosetones,
yecto inicial. ¿Qué ocurrió en Palazuelos? la exis- uno en el hastial norte del transepto y otro coronando
tencia de precedentes en edificios relacionados con la calle central de la fachada oeste; en ambos casos
él nos llevan a pensar que las ménsulas-columnilla están muy moldurados, pero no se conserva en ningún
del presbiterio fueron diseñadas una vez se había caso la tracería. Quizás también en alguno de los
adoptado la crucería, no antes, aplicándose enton- otros cenobios masculinos se empleó este mismo sis-
ces también a los ángulos del transepto. Y es que tema de iluminación.
lo que en un determinado edificio pudo ser resul-
tado de un cambio sobre la marcha, una solución > Capiteles, fustes y basas
accidental, pudo ser copiado en otros posteriores según el desbastado que presenten podemos distin-
y pensado por tanto desde el principio. Única- guir dos tipos de capiteles, de cesta troncopiramidal
mente el proceso constructivo y el modo de inser- o troncocónica. Y aunque en líneas generales se pue-
ción de estos elementos en muros y soportes den vincular los primeros a una etapa más temprana,
pueden dar una pista sobre la originalidad o lo en la que se siguen formulaciones románicas, y los
accidental en la elección este tipo de procedimien- segundos a otra más evolucionada, ya gótica, hay que
tener en cuenta que en algunas ocasiones —y habla-
tos . 6
6 Ibidem.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
64
carnosas y con complicados y muy diversos juegos Exteriores
florales colgando de sus extremos, a las grandes hojas > Fachadas occidentales
de múltiples lóbulos y a los crochets plenamente góti- Siguiendo el prototipo habitual en iglesias de tres
cos en diversas combinaciones. Capiteles enteramente naves, las fachadas occidentales de los monasterios
lisos, desnudos, los vemos en contadas ocasiones. masculinos —aunque la de La Espina quedó oculta en
Capiteles historiados sólo los encontramos en la capi- el siglo XViii y la de Matallana junto con el resto de
lla mayor de Palazuelos: en una de las ventanas se pue- la iglesia desapareció en el XiX, los restos que perma-
den ver a unas arpías y a dos parejas de dragones necen permiten, en el primero de los casos más que en
afrontados, en otra unas cabecitas humanas que emer- el otro, hacernos una idea de cómo eran—, aparecen
gen entre grandes hojas lobuladas, y en el gran arco divididas en tres calles, la central más ancha y alta que
funerario del costado meridional vemos unos plañi- las laterales, por medio de cuatro contrafuertes —dos
deros mesándose los cabellos. en los extremos y otros dos a la altura de los forme-
Lo habitual es que los fustes de columnas que sopor- ros interiores— que marcan la organización interna del
tan arcos triunfales, perpiaños, formeros y cruceros edificio.
estén constituidos por un elevado número de tambo- En la calle central se dispone, en su parte inferior, una
res, o deberíamos decir mejor semitambores, de altura monumental portada compuesta por un elevado
regular. En algunas puertas y ventanas encontramos número de arquivoltas muy molduradas que descan-
fustes monolíticos. Generalmente son lisos, sin deco- san en columnas acodilladas (Palazuelos, La Espina)
ración alguna, aunque en uno de los vanos de la nave o jambas (Valbuena); la de Matallana, por el contra-
meridional de La Espina están decorados con flores rio, sería de poca entidad —un simple arco doblado—.
y acanaladuras. En un caso —La Espina—, lleva tímpano, y además con
Las basas siguen el modelo ático, incorporando garras motivos figurados —escudo del monasterio y tetra-
en las esquinas y, en algunos casos, otra intermedia morfos—. En la parte superior se abre un amplio rose-
en las dobles columnas. En líneas generales se carac- tón —sólo ha llegado a nosotros, como hemos
terizan por tener un toro superior fino; una escocia a señalado más arriba, el de Valbuena, sin tracería y
veces alta y poco profunda, otras muy profunda o cobijado por un arco de medio punto—, rematando el
recorrida por perlas; y un toro inferior de gran conjunto con un piñón —la reconstrucción llevada a
tamaño, en cuarto de círculo o muy aplastado. En cabo en Palazuelos durante el XVI impide averiguar si
cuanto a las garras, las más de las veces son planas y presentaba remate horizontal como en el brazo norte
lisas, aunque a veces aparecen recorridas por gruesos del transepto o un piñón como en el opuesto—.
nervios o llevan en sus extremos bolas y frutos. Los En cuanto a las calles laterales, las de Palazuelos lle-
plintos sobre los que descansan suelen ser paralelepí- van sendas ventanas con arquivoltas apuntadas sobre
pedos aristados —en contadas ocasiones con la arista columnillas y remataban a una sola vertiente —segu-
superior rebajada—, empleando las formas poligona- ramente ocurría lo mismo en La Espina y Matallana—.
les escalonadas en épocas muy tardías. Los vanos que muestran las de Valbuena son el resul-
tado de una reforma moderna, careciendo posible-
> Temas decorativos y figurados en impostas, arcos y mente en origen de cualquier abertura; y en cuanto a
otros elementos. sus remates almenados, deben ser también fruto de
Casi todas las molduras de los monasterios cister- una intervención tardía, ya del XV.
cienses de la provincia de Valladolid son lisas, sin nin-
gún tipo de decoración. Únicamente encontramos > Puertas
unos pocos ejemplos aislados en Valbuena, Palazuelos Dejando ahora al margen aquellas que dan paso al
y La Espina: en este último hay que reseñar las flores claustro o a otras dependencias anejas, y además de la
octopétalas y las cadenas de círculos que embellecen situada en la fachada occidental encontramos otras
los plintos de las primeras responsiones de la nave del puertas, en algunos casos deberíamos decir portadas,
Evangelio; en Valbuena vemos una imposta con varias abiertas en el costado del templo que queda libre.
filas de billetes en las capillas extremas y la rosca del Por un lado están aquellas utilizadas como puertas
rosetón del brazo norte del transepto está decorada de salida al cementerio practicadas en uno de los has-
con dientes de sierra; finalmente, en la puerta norte y tiales del transepto: en Valbuena es muy sencilla —un
tal vez en la occidental de Palazuelos, los vértices y arco apuntado y doblado que apea directamente sobre
arranque de las chambranas llevaban pequeñas cabe- las jambas—, como seguramente también lo fue la de
citas humanas, contando también con una de ellas la Matallana; la de La Espina desapareció en el XVII y en
arquivolta exterior de la portada oeste de La Espina. Palazuelos no la hubo, al menos en ese lugar.
INTRODUCCIÓN hisTórICA 65
Otra puerta encontramos en la nave lateral de Val- También en Valbuena encontramos un cimborrio de
buena, Palazuelos y Matallana. En Valbuena se abrió, tambor octogonal, macizo, con un pequeño óculo
idéntica a la que lleva al cementerio, en el tercer como único vano, del que ha desaparecido el remate.
tramo; en Palazuelos la encontramos en el segundo, Más espectacular, a juzgar por las someras descrip-
pero en este caso se trata de una puerta de mayor enti- ciones que de él tenemos, debía de ser el cimborrio de
dad, compuesta por varias arquivoltas molduradas Matallana, con sus cuatro torretas circulares.
sobre columnas acodilladas y rematada por una cor- De las espadañas que debieron tener todos los tem-
nisa sobre canecillos. También destacaría por su plos, sólo se conserva en la actualidad la de Valbuena,
monumentalidad la que se practicaba en el tercer erigida en el vértice del hastial sur del transepto: de un
tramo de Matallana: doble vano cobijado por otro u solo cuerpo rectangular, con tres campaneras abier-
otros, todos apuntados, que descansaban sobre tas a distintas alturas. Hasta hace pocos años se con-
columnas acodilladas, y con una inscripción conme- servó la de Palazuelos, situada en esta ocasión entre el
morativa en el tímpano. Respecto a la finalidad exacta tramo recto de la capilla mayor y el crucero, de poca
de estas puertas, no está todavía clara. altura, con dos campaneras en arco de cuarto de cír-
> Contrafuertes culo y remate apiñonado.
En líneas generales, se emplean gruesos contrafuertes
prismáticos con remate en talud (transepto y naves de
Valbuena; nave central de La Espina), que en algún caso 1.2 El claustro y su entorno
están formados por dos cuerpos de altura y anchura Las principales dependencias monásticas se organi-
decreciente separados por un goterón cuyo resalte corre zaban en torno al claustro que, en la mayoría de los casos,
diagonalmente por sus laterales (nave norte de Palazue- se disponía al sur de la iglesia (Valbuena, Palazuelos, Mata-
los). También se emplean estribos muy poco resaltados, llana, San Quirce de Valladolid y Sancti Spiritus de
como por ejemplo en la cabecera de Valbuena, en donde Olmedo) . En La Espina la topografía del terreno y la
7
alcanzan sin interrupción la cornisa, mientras que los situación de los cursos de agua provocaron que además de
de la nave meridional de La Espina llevan remate api- disponerse al norte del templo, quedase a un nivel mucho
ñonado y se coronaban con un florón, y en la capilla más bajo que aquél. El caso de Las Huelgas de Valladolid
mayor de Palazuelos son estrechos y escalonados. es diferente por que su construcción estuvo condicionada
> Aleros desde un principio al reaprovechar dependencias de un pala-
Dominan los aleros más sencillos, con cobijas de cio preexistente y situarse junto a la cerca de la villa, lo que
nacela o abiseladas, soportadas por canecillos de proa obligó a ubicar el claustro al sudeste del templo.
o de nacela; únicamente la nave sur de La Espina pre- De todos ellos, únicamente Valbuena ha conservado
senta una decoración de crochets. Por su parte, los hasta nuestros días las galerías del claustro medieval: se trata
hastiales del transepto de Palazuelos rematan en una de unas pandas de estructura gótica, cubiertas con bóvedas
simple cornisa de nacela, sin canes. de crucería cuyos arcos y nervios descansan en los muros
> Torres, cimborrios y espadañas interiores sobre ménsulas y hacia el jardín sobre una, dos o
N o es habitual la presencia de torres en monasterios tres columnillas, según los casos; los intercolumnios están
cistercienses. Dejando al margen la estructura cúbica formados por una sucesión de grandes arcos apuntados que
que aloja las escaleras de subida a cubiertas, única- cobijan grupos de dos o tres arcos de medio punto, con el
mente se descubre una estructura torreada en la tímpano a veces liso y otras perforado por óculos de variada
fachada occidental de Valbuena, y además no parece traza; en uno de los tramos de la panda meridional se eri-
que responda a los planes originales, sino que esta- gía el pabellón del lavabo, de planta hexagonal y del que
mos tal vez ante una intervención tardía motivada por apenas quedan restos visibles.
los difíciles momentos que atravesaba el monasterio En La Espina, Matallana y Las Huelgas el claustro
durante el primer tercio del siglo XV. medieval fue sustituido en época moderna. Del último, a
7 Dejando al margen aquellos trabajos de carácter general sobre la sable la consulta de los estudios de BANGO TORVISO, 1985: 436-445;
arquitectura de la Orden (vid. por ejemplo, AUBERT, 1947: I, 107-134 ídem, 1995: 70-80; ídem, 1998 (2) y (5); MUÑOZ PÁRRAGA, 1998 (3);
y II, I-I40; COCHERIL, 1969; DIMIER, 1974: 39-41; o KINDER, 1998: ABAD CASTRO, 1998 y 1998 (4); y LÓPEZ DE GUEREÑO, 1998, 1998
129-138 y 241-331), y centrándonos en el caso hispano, es indispen- (3) y 2003.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
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juzgar por los datos documentales que tenemos, sabemos c o n una planta algo más amplia, tendente al cuadrado y
que era una sencilla estructura porticada sobre pies dere- provista de una única bóveda de crucería, la sacristía de
chos; en el de La Espina se empleó ladrillo para su cons- Palazuelos se distancia aún más de las anteriores por su gran
trucción, conservándose además huellas en los muros altura e incorporar hacia oriente una capilla; el acceso desde
perimetrales que nos hablan de una cubierta abovedada; y el claustro fue clausurado en época moderna.
respecto al de Matallana, las excavaciones arqueológicas lle- La siguiente estancia que encontramos es la sala capi-
vadas a cabo en el área del claustro descubrieron hace años tular, una de las dependencias más importantes del monas-
los restos de un fuste de columnilla que probablemente terio. Únicamente se conserva completa en su forma
deba relacionarse como parte del intercolumnio de las pan- original la de La Espina; la de Valbuena mantiene sus muros
das, si bien carecemos de datos sobre sus cubiertas. Aunque de cierre; la de Matallana fue reformada junto toda la panda
en la fundación femenina no está claro, en los masculinos en el XVi, y la de Las Huelgas, que era en realidad uno de
el nuevo claustro supeditó sus dimensiones al medieval los salones del viejo palacio de María de Molina, fue derri-
debido a que algunas de las dependencias medievales toda- bada en los años 6 0 del siglo pasado.
vía se mantenían en pie y las que habían sido renovadas
mantuvieron los muros de cierre interno. Tanto en Valbuena como en La Espina se abrían hacia
el claustro dos vanos flanqueando la puerta central de
De los de Palazuelos, Sancti Spiritus y San Quirce no acceso; los del primero, de medio punto y muy simples, los
tenemos testimonios materiales ni noticias documentales del segundo apuntados y muy moldurados, elevados sobre
que nos hablen de su configuración original, ignorando en movidos grupos de columnas y cobijando los laterales sen-
los tres casos si llegó a monumentalizarse durante el perí- das parejas de arcos sobre dobles columnillas. Al interior, la
odo que estudiamos. de La Espina presenta planta cuadrada dividida en nueve
Pasemos a analizar ahora la distribución y configura- tramos por cuatro columnas centrales, cubriéndose todos
ción de las distintas dependencias claustrales . 8
los compartimentos con bóvedas de crucería que descansan
en los ángulos sobre simples columnas y en los costados
sobre grupos de tres. De la compartimentación interna de
El pabellón de monjes Valbuena nada se sabe, pero el hecho de que su planta sea
El primer espacio que encontramos en la panda orien- rectangular y que para este tipo de estructura sea más usual
tal es el armarium. El de La Espina se conserva práctica- la presencia de sólo dos soportes centrales, hace que nos
mente intacto, mostrándose como una sala relativamente decantemos por esta otra solución para el cenobio del
amplia situada en prolongación de la sacristía —con la que Duero. En los dos casos, tres ventanas perforan el muro
además comunica—, formada por dos tramos cubiertos con oriental —las de Valbuena reformadas—.
bóvedas de crucería y con acceso desde el claustro a través A continuación de la anterior se disponen en Val-
de una pareja de arcos; esta ordenación no es extraña, buena y La Espina tres salas estrechas y alargadas, y puede
encontrando ejemplos semejantes en Oya y tal vez en Val- que también en Matallana.
dediós. El de Valbuena desapareció en el XVI bajo un altar
y del de Matallana apenas queda rastro. Excepcionalmente, La más cercana al capítulo albergaba la escalera que
en Palazuelos se sitúa en la panda del maniatum, junto a la comunicaba con el dormitorio. En los dos primeros ha lle-
Puerta de monjes, en donde adopta el tipo de nicho gado muy transformada: en Valbuena se conserva casi intacto
pequeño rematado en arco lobulado. el arco de embocadura y las huellas del tiro de la escalera en
los laterales, y en La Espina también el vano de acceso desde
La sacristía de Valbuena sigue la tipología habitual- el claustro y primeros tramos de bóveda con arcos rampan-
mente utilizada para esta dependencia: planta rectangular, tes. En ambos casos bajo el hueco de la escalera y separada
algo estrecha y alargada, cubierta con un cañón continuo, de la anterior por un muro se disponía una pequeña habita-
que comunica con el claustro y el templo, modalidad que ción —más amplia en La Espina por ocupar además la parte
vemos empleada también en Moreruela, Bujedo o Monsa- trasera de la sala contigua—, a la que se accedía desde el paso
lud. A la de La Espina, de dos tramos abovedados con cru- siguiente, y que serviría como cárcel, tesoro o archivo, ilu-
cería, se accede directamente desde la iglesia, aunque los minándose mediante un vano de medio punto en Valbuena
dos vanos que conectan con el armarium situado en prolon- y dos ventanucos adintelados en La Espina. Tal vez en Mata-
gación de esta sala, permiten el tránsito hacia el claustro. llana encontrásemos esta misma organización, dado que el
pasillo inmediato —el único que, aunque incompleto, se ha en el muro que le separa de la iglesia y en alto, una pequeña
conservado— cuenta con una puerta en el costado norte que cámara abovedada con medio cañón a la que se accedía con
podría identificarse como la puerta de ese pequeño espacio ayuda de una escalera de madera; en la Espina, en cambio,
situado bajo el vuelo de la escalera. ocupaba el extremo opuesto al templo y como aquélla estaba
Le sigue el locutorio, abovedado con medio cañón excavada en un macizo mural.
en Valbuena, cañón apuntado en Matallana, y dos tramos de Del dormitorio de Palazuelos sólo sabemos que no se
crucería sobre ménsulas —aunque sus nervaduras han des- situaba en la planta alta del pabellón de monjes, como lo
aparecido y aparece dividido por un grueso tabique— en La demuestra la ausencia de puerta de maitines en el hastial
Espina; en los dos primeros, aunque contaban con otro del brazo del transepto y la existencia de una cornisa rema-
pasaje independiente de salida al exterior, se abre una puerta tando la sacristía. En Matallana parece que ocurrió lo
en el testero también con carácter exterior. mismo, ya que cuando se reformaron la sacristía y capítulo
El pasaje hacia el exterior o hacia unas posibles a finales del XVI y comienza a construirse el claustro de la
h o s p e d e r í a , la vivienda de los monjes estaba partida y derramada al
dependencias orientales se cubre tanto en la Espina como
oriente del reglar, todo en vajo. En Las Huelgas, al menos en
en Valbuena con bóveda de cañón, apuntada en el primero,
1621, cuando se lleva a cabo la remodelación del claustro
de medio punto en el segundo. En los dos casos desde él se reglar, estaba en la panda occidental y posiblemente en
practica el acceso a la llamada sala de monjes. planta baja. Para el caso de los masculinos, las causas de
Esta última dependencia, situada en el extremo del esta anomalía deben quizás buscarse en problemas econó-
pabellón, se conserva completa en Valbuena y solamente el micos y en la lentitud del proceso constructivo, que no per-
perímetro y responsiones de la de La Espina, aunque la exis- mitieron completar el trazado canónico previsto en un
tencia de fotografías antiguas y testimonios escritos permiten principio, debiendo conformarse con habilitar unas depen-
reconstruir con fidelidad la estructura original de esta última. dencias en otras zonas del complejo. Respecto a la casa
De planta rectangular, en ambos ejemplos una espina de femenina, no parece extraña su ubicación, ya que en ningún
soportes centrales —columnas simples en Valbuena, pilares monasterio castellano-leonés se levantó en alto el dormito-
cruciformes con columnas en los frentes y codillos en La rio de monjas, desconociéndose exactamente el lugar que
Espina—, las divide en dos naves de ocho y seis tramos res- ocupaban en el conjunto monástico; sea como fuere cuando
pectivamente. Cubiertas con bóvedas de crucería, perpiaños a finales del XV se reforma el monasterio el visitador ordena
y cruceros descansan en el centro de la sala en los soportes q u e las mongas duerman todas en dormydor, e non por camaras, lo
mencionados y en los muros de cierre, sobre ménsulas en el que sugiere que por entonces estaba ya difundida la cos-
caso de Valbuena, y sobre grupos de tres columnas en los late- tumbre de dormir en celdas individuales.
rales y una sola en los ángulos en el de La Espina. Respecto
a la iluminación de estas salas, en Valbuena se abren ventanas La panda del refectorio
en los costados Este y Oeste, excepto en el último tramo del
lado occidental, en donde encontramos en su lugar una puerta La primera estancia de esta panda es el calefactorio,
de salida al exterior; en La Espina sólo recibe luz por el Este, espacio que ha sufrido en los monasterios masculinos
mostrando liso el costado occidental —no está del todo claro importantes transformaciones durante época moderna. En
si la tribuna visible a principios del XX respondía a los planes La Espina solamente se ha conservado parte de la puerta
originales—, y un paso al exterior en el norte. de ingreso desde el claustro, en arco de medio punto. En
Matallana fue sustituido en el siglo XVI por la cocina,
En ninguno de los monasterios se conserva rastro aprovechando posiblemente la estructura preexistente, con
alguno de las letrinas. lo que estaríamos, de ser esto cierto, ante un calefactorio
Ocupando todo lo largo del piso superior se disponía de planta cuadrada con hogar central, tal y como aparece
en Valbuena y en La Espina el dormitorio común. En ambos dibujado en un croquis del monasterio del XVIII. Pero aun-
casos se trataba de una sala diáfana cubierta con armadura de que en Valbuena se instaló en esa última centuria una esca-
madera a dos aguas sobre arcos diafragma que en La Espina lera monumental de subida al claustro alto, podemos
descansaban sobre ménsulas y en Valbuena adelgazaban pro- reconstruir con mayor precisión la configuración original
gresivamente hasta embutirse en el muro; en cada uno de los de esta sala, dividida aquí en dos plantas: la inferior, con
tramos se abrían ventanas, simples en la Espina y por pare- acceso desde el claustro, se cubre con bóveda de cañón
jas en Valbuena. En este último, además de la preceptiva apuntado de eje paralelo a la panda y está provista de una
puerta de acceso al templo y la comunicación con el claustro chimenea adosada al lienzo meridional, cerca del refecto-
bajo, una pequeña puerta permitía acceder a la planta alta del rio; la superior, a la que se llega por el dormitorio, se cubri-
calefactorio vecino. También en estos dos monasterios hay ría seguramente con una sencilla armadura de madera y
constancia de la existencia de piezas anejas al dormitorio des- recibiría calor a través del tiro de la chimenea que subía
tinadas a tesoro o archivo: en Valbuena se localiza, excavada desde la planta baja.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
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El único refectorio medieval que se conserva es el de forme al plan original, sino que en alguno ni siquiera se
Valbuena. siguiendo la disposición general de los monaste- monumentalizaron, levantando un simple cerramiento, e
rios cistercienses se trata de una amplia sala de planta rectan- incluso en otros fueron sustituidas en el momento de su
gular perpendicular a la panda. se cubre con una bóveda de construcción por otras más acordes con los tiempos.
cañón apuntado sobre fajones que apean en sobrias ménsulas,
Lo primero que destaca es la ausencia del corredor de
que la divide en cuatro tramos. sobre la puerta de acceso desde
el claustro se abre un pequeño óculo, iluminándose además el conversos. En Valbuena, Matallana y Palazuelos la puerta
interior a través de sencillas ventanas que perforan los lados que para estos miembros de la comunidad existía en el
mayores y por amplios ventanales en el testero meridional, último tramo del templo abría directamente al claustro,
fruto éstos y la puerta de entrada al recinto de una reforma actuando como paso la galería occidental. En La Espina esa
posterior; en el último tramo del lienzo occidental se sitúa el puerta ni siquiera aparecerá.
púlpito del lector; un sencillo pasaplatos en el primer tramo En Valbuena se cerró el claustro con un simple muro
de este mismo lado comunicaba con la cocina. jalonado por contrafuertes y una puerta llamada reglar que
También en Matallana se disponía perpendicular a la comunicaba con el exterior en el extremo sur, situándose la
galería del claustro y contaba en este caso con tres tramos cilla y dependencias de conversos tal vez alejadas del ámbito
cubiertos con bóvedas de crucería que en los lados mayo- claustral. En Matallana, antes de la reforma moderna, hubo
res descansaban en grupos de tres columnillas elevadas una estancia rectangular paralela a la panda —tal vez la cilla—,
sobre altos zócalos; como en Valbuena, en el primer tramo abierta hacia un pasillo situado a mediodía —¿locutorio del
del costado oeste se practicaba el pasaplatos hacia la cocina. cillerero?—, pero en el siglo XV se encontraban en esta zona
Del de La Espina sólo queda el lienzo de muro que da el palacio abacial y la portería. Estas últimas estancias junto
al claustro, con la huella de vano de entrada en el centro-este con la hospedería y otras habitaciones de servicio aparece-
de la galería. En la actualidad vemos ocupa su espacio una rán a occidente del claustro reglar de La Espina antes de la
estancia rectangular y paralela a la panda de mediados del construcción del de la hospedería en el último cuarto del
XVII como bodega, en cuya construcción se aprovecharon siglo XVI, y organizadas en este caso en torno a un patio.
fragmentos de fustes de columnas, nervios y otras molduras
tal vez de la estancia precedente, lo que implicaría además de Otras dependencias
una cubrición a base de bóvedas de crucería, una comparti-
mentación interior en naves. Respecto al eje de la primitiva A oriente del pabellón de monjes de La Espina se
estancia, quizás la complicada topografía sobre la que se situaba una estancia rectangular muy alargada de función
asienta el monasterio condicionase una estructura paralela, desconocida, que se ha identificado como la enfermería,
pero no se puede afirmar de modo concluyente. ubicada generalmente al Este del conjunto monástico.
En Las Huelgas ocupaba a principios del XVII el En cuanto a la cerca que rodeaba el perímetro de los
extremo meridional de la panda oeste, paralelo al claustro, monasterios, poco sabemos de ella, y además las noticias son
mas ignoramos si esta era su ubicación y forma original. muy tardías. En Las Huelgas, por ejemplo, en 1 4 8 1 el visita-
dor ordenó elevar las paredes de la huerta y de otras zonas del
Al oeste del refectorio se situaba la cocina. La de Val- complejo para proteger la clausura, dado que su situación
buena, aunque transformada en el siglo XVIII, conservó
junto a la cerca de la villa provocó diversos incidentes con el
parte de su planta y alzado: a través de una vano apuntado
se ingresaba en esta dependencia, de planta rectangular, Concejo de Valladolid, que se negaba a clausurar el tramo que
dividida en dos ámbitos por dos grandes arcos apuntados lindaba con el monasterio. En Valbuena se documenta, en
en dirección Este-oeste que apoyaban sobre un pilar cen- cambio, la existencia de cerramientos internos en el segundo
tral y soportaban una techumbre de madera; el hogar se ins- tercio del XV que debían ir englobados dentro de la gran cerca,
talaría en el costado meridional o en el tramo sudoeste. En c o m o el corral de las gallinas, el de los ángeles o el de la enfermería.
La Espina ha llegado únicamente a nosotros el vano de De la portería medieval sólo contamos con la des-
ingreso desde el claustro, mientras que del resto de monas- cripción de la que hubo en La Espina antes de su demoli-
terios nada podemos decir. ción en 1573: una estructura torreada, con el gran arco para
los carros en planta baja y unas habitaciones en alto.
La panda occidental En Las Huelgas, por ejemplo, junto al corral y porte-
Las soluciones adoptadas en la ordenación de esta ría se localizaba la red y grada, es decir, los locutorios, en
panda varían de unos monasterios a otros. Y es que la len- donde se llevaban a cabo los distintos negocios con el exte-
titud de los procesos constructivos motivó que las depen- rior —el torno se instalaría ya muy a finales del XV—, aun-
dencias que habitualmente se disponen a este lado del que desconocemos su exacta localización y estructura
claustro no se llegasen a materializar en todos los casos con- durante la Baja Edad Media.
INTRODUCCIÓN hisTórICA 69
Aunque en un principio los cistercienses se opusieron Por lo que a nuestro territorio se refiere, no hemos
a que sus monasterios se convirtieran en lugares de enterra- localizado ninguna solicitud de enterramiento del XII que
miento, y así se recoge en el capítulo X V del Exordium Par- contemple el templo como lugar de descanso, debiendo espe-
vum o en los Instituta , ya desde mediados del siglo XII hay
w II
rar a los primeros años de la siguiente centuria para encon-
numerosas referencias a inhumaciones en las casas cister- trarlas. Pero hasta mediados del XIII no se especificará la
cienses y las definiciones de los capítulos Generales empie- ubicación en el templo, siendo entonces cuando surgen las
zan a dictar excepciones a esa normativa. En I I 8 0 se estipula primeras menciones al altar mayor . A lo largo del siglo XIV
I6
que sólo podrán ser enterrados en el interior de los templos se produce un importante aumento de este tipo de alusio-
los reyes y reinas, arzobispos y obispos , y por esos mismos
I2
nes , percibiéndose un ligero descenso durante el XV .
I7 I8
años —ca. I I 5 7 - I I 7 9 — se había admitido el entierro de los ¿Quiere decir esto que hasta el primer tercio del siglo XIII no
fundadores , y aunque no se explicita qué lugar ocuparían
I3
se admiten entierros de fundadores y / o benefactores en el
que avanzado el tiempo, cuando las presiones de los lai- Sea como fuere, la capilla mayor fue espacio de ente-
cos por adquirir un espacio en su interior habían conse- rramiento privilegiado para los fundadores y grandes patro-
guido mitigar los impedimentos existentes hasta ese nos, convirtiéndose en ocasiones en auténticos panteones
momento y, además, las obras de los templos que los iban familiares, como ocurrió en La Espina, Palazuelos o Mata-
a acoger estaban próximas a terminar, se planificase la llana. En todos estos y en los restantes monasterios encon-
organización de los panteones de aquellos personajes vin- traremos dos modalidades de entierro, en arcosolios
culados al monasterio y se encargasen sus sepulcros. El abiertos en los costados o en sepulcros exentos en el pres-
ejemplo de Las Huelgas es bien conocido: en 1 2 5 1 fue- biterio.
ron trasladados a la iglesia desde el primer núcleo monás- Respecto al primer grupo, encontramos un vistoso
tico situado en torno a las Claustrillas y capilla de la lucillo en Valbuena, abierto con posterioridad a la fábrica
Asunción los cuerpos de los fundadores, Alfonso VIII y de la capilla en el costado meridional de la misma, pero en
Leonor (f1214), labrándose en aquel momento sus sar- fechas no muy tardías, en torno al segundo cuarto del Xiii;
cófagos; a éstos se añadirían poco a poco otros —tanto aunque no tenemos constancia documental alguna, quizás
nuevos como antiguos—, y el 4 de septiembre de 1279, se descansara allí Estefanía Armengol, la fundadora. En el
consagrarían tres cementerios correspondientes a cada una mismo lugar, pero en Palazuelos, se construyó al tiempo
d e las naves del t e m p l o —cemaeterium nobilissimo regis Alphonsi, que se levantaba la capilla un arcosolio mucho más sencillo
funiatoris praefati monasterii, cemaeterium aliorum regum, cemaete- que el anterior —aunque fue clausurado casi de inmediato al
rium infantissarum— . Tal vez en otras abadías ocurriera algo
22
modificarse el tipo de cubiertas del presbiterio—, y también
similar. De hecho, el que los siete sarcófagos que hubo en en Matallana, en donde la destrucción de la piedra impide
Matallana se atribuyan a un taller que trabaja en el último confirmar tanto su aspecto como su cronología; en ambos
cuarto del Xiii o principios del XiV y que de los diez con- casos, los ocupantes serían igualmente miembros de las
servados de Palazuelos, la mitad constituye también un familias fundadoras. La capilla del monasterio de las Huel-
grupo homogéneo datado ca.1300, nos hace pensar que gas acogió en s e n d o s arcosolios labrados de follages de yeso las
unos y otros fueron encargados por algún descendiente tumbas de dos infantes hijos de la fundadora. Esta moda-
de los fundadores como instrumento de propaganda y lidad tuvo una buena acogida, pudiéndose ver también en
19De esta opinión es BANGOTORVISO, 1998 (4): 318 y 328 nota 4. AMEIJEIRAS, 1998; GÓMEZ BÁRCENA, 2005: 67; SÁNCHEZ AMEIJEIRAS,
20Para Sandoval y Carrizo, FRANCO MATA, 1998: 423 y 449-450; en 2006: 301-302 (aunque fecha los sepulcros de los reyes en el segundo
cuanto a Matallana, ARA GIL, 1977: 44-53. cuarto del siglo XIV); ALONSO ÁLVAREZ, 2007 (2): núms. 31-34; PALOMO
21Son los sarcófagos de María de Almenara (f1196), don Nuño FERNÁNDEZ y RUIZSOUZA, 2007: 35-37; entre otros muchos.
(f1209) y otro anónimo —aunque atribuido al infante don Sancho o a 23 Sobre este último aspecto ha llamado la atención CASSIDY-WELCH,
doña Leonor— fechado en 1194. 2001: 236.
22Lizoain Garrido, 1987: 112-113 doc. 596. GÓMEZ MORENO, 1946;
HERRERO SANZ, 1990; BANGO TORVSO, 1998 (4): 319-321; SÁNCHEZ
INTRODUCCIÓN hisTórICA 71
Sacramenia, Bujedo, Monsalud, Ferreira, Villanueva de de los sepulcros de Martín Alfonso (f1285), Juan Alfonso de
Oscos, etc . 24 Alburquerque (f1354), su mujer Isabel de Meneses y su hijo
u n a variante de este tipo la encontramos en Mata- Martín Gil (f1365), y de la infanta Leonor, hija de Juan II,
llana y Palazuelos: grandes arcos que perforan los costados aunque la importancia de los primeros en el conjunto de la
de la capilla mayor y la ponen en comunicación con la late- historia del monasterio obliga a pensar en la existencia de
yacijas monumentales, tal vez exentas.
ral aneja. Testimonios documentales, fotografías antiguas y
la propia iconografía del ejemplar de Palazuelos evidencian El sepulcro de la reina y fundadora María de Molina
su carácter funerario. Aunque cegado, un arco de similares ocupó hasta su traslado al templo actual el centro de la
características se puede ver en Bonaval. capilla mayor de la iglesia medieval de Las Huelgas de Valla-
dolid, y aunque las fuentes no señalan el lugar, probable-
La ocupación del presbiterio por urnas exentas está mente ocuparan lugar semejante en san Quirce los entierros
bien atestiguada, como hemos visto más arriba, ya avanzado en monumentos altos de Ruy sánchez de Herrera y su mujer,
el siglo XIII. En el de Matallana sabemos que hasta 1611 aquellos que donaron sus casas para alojar a las monjas
había cuatro sumptuossos sepulchros —en esa fecha fueron cam- cuando se trasladaron al interior de la ciudad.
biados de sitio—, mientras que en Palazuelos se disponían seis
Esta preocupación por ocupar un lugar tan señalado
sepulcros, entre ellos los de Alfonso Téllez de Meneses y su en el templo no fue excepcional en el marco de los monaste-
mujer Teresa sánchez, algunos de los cuales estuvieron guar- rios cistercienses castellano-leoneses: La Vega, San Isidoro de
necidos por el gran arco que hemos comentado. sevilla, sobrado, Monfero, Montelaturce, Villamayor de los
La transformación sufrida por la capilla mayor de La Montes o Huerta, contaron con monumentales sepulcros en
Espina en el siglo XVI impide conocer la disposición original sus capillas mayores . conocer su distribución original en
25
de Toledo . 27
26 La condesa Aldonza, fundadora de Cañas, que ocupaba el centro Sancha, frontero deste en el choro del Prior, y otros dos sepulcros sin identifi-
de la capilla mayor, fue trasladada al coro cuando allí se colocó el gran car estaban en los dos remates del crucero (ROSCALES OLEA, 2 0 0 0 : 9 4 - 9 5 ,
retablo del siglo XVI (BAURY, 1999: I, 234-235; PÉREZ CARAZO, 2006: 288-289 doc. 18 y 294-296 doc. 22). Según el Tumbo del monasterio
76 y 222 nota 530); también el sepulcro de Urraca López de Haro fue de Nogales, en la capilla mayor reposaron la fundadora, Sancha Ponce
desplazado a un costado en 1748 (CADIÑANOS BARDECI, 1990: 56-57), de Cabrera (f1176), su marido Vela Gutiérrez (f1160) y dos de sus hijos
coincidiendo seguramente con las obras de remodelación del presbiterio. pequeños, a los que se añadiría, por su condición real, el cuerpo de la
2 7Cuando Juan Alonso Pérez de Guzmán (f1507), eligió su entierro infanta Aldonza Alfonso, hija de Alfonso IX de León y mujer de Pedro
en Sevilla, indicó en su testamento e porque en la dicha iglesia hay muchos bul- Ponce; en la capilla colateral de san Bernardo (luego de santa Catalina)
tos y tumbas de mis antepasados e ocupan mucho, e la capilla nueva en queficiere el ente- su hijo Fernán Vela (f1192), su mujer Sancha Álvarez de Guzmán, su
rramiento non se porra facer, mando que los dichos bultos e tumbas se pongan todos en hijo Juan Fernández de Cabrera y su esposa Aldonza y una hija de éstos
los lados de la iglesia, porque así parezca nuestro enterramiento, e la iglesia este menos ocu- (A.H.N., Clero, libro 5.564, fol. 245; La descendencia de la noble familia y
pada (RESPALDIZA LAMA, 1996: 27 nota 14). En el caso de Toledo, fue linage de Cabrera —BRAH, Colección Salazar y castro, C-41, fol. 310-340,
María Silva (+1575) quien dudó en enterrarse en la iglesia monástica en concreto p. 339); y en la capilla de San Benito, dotada por otro de los
debido a que estaba ocupada por las sepulturas de otros personajes par- hijos de los fundadores, Ponce Vela (f1202) y su mujer Teresa Rodríguez,
ticulares y familiares de las abadesas, por lo que sus testamentarios deci- además de éstos, en noviembre de 1264 estaba aquí sepultado su hijo
dieron construir un nuevo templo en el que el principal entierro fuera el Pedro Ponce; a mediados del siglo XV era considerada como la capilla
de ella (MARTÍNEZ CAVIRÓ, 1990: 23; GONZÁLEZ MARTÍN, 1992). principal de los Ponce de León, y según un documento de agosto de 1449, allí
28 Según el Libro de actas de La Vega (A.H.N., Clero, libro 9.843, descansaban también Gutierre y Luis Ponce, hermanos de Alvar Ponce,
fol.14 -16 ) el sepulcro del fundador, Rodrigo Rodríguez Girón, se
v r así como Rodrigo, el hijo de éste (Marqués de Mondéjar, Memorias histó-
situaba en la capilla mayor, mientras que el de Gómez Ruiz de Manza- ricas y genealógicas de la Casa de los Ponce de León —BRAH, Colección Salazar
nedo, su hijo, en cuyo testamento de 8 de marzo de 1275 dejaba quatro- y Castro, B-3, escritura XLIV fol. 343 -246 ). El sarcófago del bene-
v r
fientos mrs. para lugiellos de mi et de donna Menfia mi mugier et para sepultura factor de Benavides, Rodrigo González Girón (f1256) estuvo situado
( A . H . N , Clero, libro 9.845, Tumbo nuevo, fol.13 ), esta en el cuerpo de laygle-
v "casi en medio de la yglesia, a donde antiguamente fue la capilla mayor"
sia arrimado al primer pilar del coro baxo en el asiento del Abbad, y enfrente, corres- (GUDIEL, 1577: 44); y en una de las capillas laterales descansaron, al
pondiente a este en el otro choro junto al asiento del Prior, el de su m u j e r ; el de su menos, los restos de Gonzalo Ruiz Girón (doc. entre 1326-1346) y su
nieto, Gonzálo Gómez Manzanedo —en cuyo testamento de junio de mujer María Téllez de Meneses y los de su nieta María Girón, la cual en
1 2 8 5 entregaba mill mrs. parafafer una sepultura al mio enterramiento (Ibid., fol. 1 4 1 4 comenta c ó m o los de su linaje son patrones de los enterrorios onrrosos del
15)—, estaba también arrimado al pilar del choro del Abbad, y el de su m u j e r dicho monesterio (FERNÁNDEZ, 1 9 5 9 : 1 8 3 doc. 13).
INTRODUCCIÓN hisTórICA 73
un contacto más íntimo y continuado con Dios al ser alcan- Capillas funerarias
zados por los himnos, salmos y cánticos que allí se cantaban En las cuatro casas masculinas se construyeron capi-
o recitaban. Así sucedió en las casas femeninas de Las Huel-
llas anejas al templo colindantes con el cementerio y que
gas de Burgos, carrizo o Villamayor, y en las masculinas de
sirvieron como lugar de enterramiento a personajes nobles
Villanueva de Oscos, Rioseco o Sobrado . 29
la embocadura de esa misma nave pero en Matallana sería Santa Inés de Palazuelos se adosa directamente al hastial, de
enterrado el abad García de Villanueva (fI469), bajo lápida modo semejante a las de San Juan de Sobrado, San Andrés de
con su efigie rodeada por una orla con inscripción, siendo Osera o Santo cristo de Melón , y más desplazada a oriente,
33
según el Tumbo del monasterio el primer superior del monas- la de San Juan en Las Huelgas de Burgos . La de San Pedro 34
2 9En Burgos encontramos los sepulcros de Alfonso VIII de castilla en su lápida (GARCÍA LOBO Y MARTÍNEZ LÓPEZ, I 9 9 8 : 6 I ) . L o con-
y Leonor Plantagenet ( f I 2 I 4 ) , de su primogénita y reina de León y de firma el testamento de su hijo, García Rodríguez de Valcarce III - I 2
Castilla, doña Berenguela (fI246), de una hija de Fernando III llamada de febrero de I 3 6 4 - , en donde además de mandar enterrarse en ese
también Berenguela (fI288), y el de Blanca ( f I 3 2 I ) , hija de Alfonso III mismo recinto declara que fue construido por su padre (MARTÍNEZ
de Portugal y nieta de Alfonso X (vid. bibliografía en nota 22); en MARTÍNEZ, I997-2003, II, I 8 9 - I 9 0 doc. 884), siendo así reconocido
carrizo, a los lados del coro hay dos sarcófagos que hasta mediados del por Fray Jerónimo de Llamas en I 5 9 3 (GONZÁLEZ GONZÁLEZ, I993:
XX se situaban "in medio chori" (MANRIQUE, I642-I659: III, 38), y I 3 3 - I 3 6 nota I22). Algunos autores, sin embargo, sugieren que los
que según una tradición del siglo XVII estarían ocupados por la funda- Valcarce reformaron una capilla preexistente levantada en la segunda
dora Estefanía Ramírez ( f I I 8 3 ) y su hija María Ponce ( f I I 9 2 ) (Ibi- m i t a d del XIII (MIGUEL HERNÁNDEZ, I 9 9 6 : I 5 2 ) . E n cuanto a la de
dem; HENRÍQUEZ, I 6 3 0 (2): 366); no obstante, Sandoval también Valdediós, sólo permanecen a la vista la imposta y arranque de la
revaliza por el cuerpo de su fundadora, y el que en una de las tapas apa- bóveda de cañón apuntado que la cubría en el exterior del primer tramo
recezca el relieve de una espada sugiere su pertenencia a un hombre. Tam- de la nave norte y la huella de aquélla en el husillo del brazo del tran-
bién es Manrique el que informa que en Villamayor, "Iacet in medio septo; no hay restos materiales ni documentales que nos hablen del
chori Monialium fundatoris sepulchrum", García Fernández ( f I 2 4 2 ) uso funerario de esta construcción erigida cuando ya estaba avanzada
(I642-I659: IV 252). En I328 el monasterio de Villanueva se com- la decimotercera centuria.
p r o m e t í a con Pedro M é n d e z de Grandas a fafer una sepultura entre o altar 33 La de Sobrado, construida ca.I230, está documentada el I 5 de
maior de Santa Maria e o coro (ÁLVAREZ CASTELLÓN, 2 0 0 I : doc. I 6 , I 5 9 ) . mayo de I 3 3 4 c o m o capela de don Ares de Parraga. D e la de Osera, construida
El 30 de octubre de I 3 8 3 Diego Alonso de Cañúcar solicitaba al abad c a . I 2 I 0 - I 2 I 5 y consagrada en I239, los datos más antiguos que hablan
de Rioseco enterrarse dentro en la dicha iglesia en el coro que es entre las rejas de de su dedicación funeraria son tardíos: las crónicas del monasterio reco-
vos el dicho don abad e prior del dicho monesterio que es en el coro de la dicha iglesia gen que Rui González de Vilariño ( f I 4 4 8 ) en una donación al cenobio
(CADIÑANOS BARDECI, 2003: 368-369 doc. 297). En I 4 0 2 Gonzalo aludía a la capela dos de Vilariño, que foy e é dotada do meu linage, y en su testa-
Ozores de Ulloa entregaba en su testamento al abad de Sobrado mil m e n t o se m a n d a b a enterrar este meu corpo na capela de Santo Andrés, que e junta
maravedis para levantar dos m o n u m e n t o s funerarios junto dos pilares do coro, do Mosteyro de Santa Maria Dosseyra. Y en cuanto a la de M e l ó n , n o hay
uno para él y otro para su padre, Vasco López de Ulloa, siendo también documentos que vinculen a esta capilla construida ca.I220-I225 un uso
enterrados cerca de ellos su mujer María Álvarez de Sotomayor —ante el funerario, sólo la presencia de lucillos en el costado norte lo confirma
facistol del coro- y su hijo Lope Sánchez de Ulloa ( f I 4 6 5 ) (PORTELA (VALLE PÉREZ, I 9 8 6 (2)).
SILVA y PALLARES MÉNDEZ, I988: 29; idem, I992: 32-33). 3 4Esta capilla fue mandada construir por Jofre de Loaysa, ayo del
30 DABROWSKA, 2000: 23I, señala cómo en el siglo XIII se empiezan infante Fernando de la Cerda y de su madre la reina Violante, y cuyas
a sepultar en el templo los abades, si bien ya mediado el XII encontramos armas están labradas en su portada, siendo consagrada en I279 con el
algunos ejemplos, como San Bernardo ( + I I 5 3 ) , sepultado delante del título de los Santos Juan Evangelista y Juan Bautista. Y aunque en el
altar de la Virgen (AUBERT, I947: I, 348). documento que recoge la consagración mencionada se alude a ella como
31 I 6 0 9 - I 6 2 I : III, 384. También, HENRÍQUEZ, I630 (2): 20I. capilla clericorum (LlZOAIN GARRIDO, I I 2 - I I 3 doc. 596), su destino fune-
3 2La de carracedo, según la documentación conservada, fue cons- rario queda atestiguado por el hecho de que en I288 recibiera los cuer-
truida por García Rodríguez de Valcarce II, quien en su testamento 23 pos de los suegros del fundador de la capilla (RODRÍGUEZ LÓPEZ, I907:
de septiembre de I328 mandaba enterrarse en mia capella que eu fis (MAR- II, 25I-253). Sobre ésta y el cementerio del compás "de afuera", vid.
TÍNEZ MARTÍNEZ, I997-2003, II, I36 doc. 8I3), tal y como consta CARRERO SANTAMARÍA, 2004: 7 I 3 - 7 I 5 ; e idem, 2006: 549.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
74
opuesto, ocultando el testero de la sacristía. En Palazuelos y De los cementerios de nuestros monasterios , no tene- 37
Matallana el ingreso a ellas se efectuaba desde el interior del mos más noticias que las aportadas por las excavaciones
templo, en La Espina parece que sólo tuvo un único acceso arqueológicas llevadas a cabo en el de Valbuena —se han reco-
desde el exterior, y en Valbuena contó con dos, uno exterior nocido enterramientos en el interior de simples fosas excava-
y otro interior. Por otro lado, sólo las de Valbuena y La das en la tierra o bien dentro de cajas formadas por lajas de
Espina contaron con arcosolios en sus costados, mostrando piedra— , las dos estelas discoideas decoradas con cruces de
38
las otras dos sus paramentos lisos. malta reutilizadas en los años 60 del siglo XX en la "restaura-
Las motivos de su construcción parecen claros: las ción" del dormitorio , las inscripciones alusivas a entierros
39
restrictivas normas que en materia de enterramientos habían particulares —como por ejemplo, hicyacet Ricariu— , o las cru- 40
impuesto los capítulos Generales de la Orden prohibiendo, ces y rosas inscritas en círculos grabadas en el paramento del
salvo contadas excepciones, enterramientos de laicos en el templo , todo ello también en Valbuena. Al contrario de lo
41
interior de sus iglesias, obligaron a construir estos recintos que ocurre en otros cenobios cistercienses de los reinos caste-
inmediatos al cementerio. A ello se sumaría el deseo de llano-leoneses, no hay ninguna manda testamentaria en la que
algunos hombres por erigir espacios privados dotados de se exprese de forma concreta el deseo de recibir sepultura en
acuerdo con su condición y, en época tardía, las condicio- el cementerio monástico . N o obstante, hay que ser cautos
42
nes impuestas por los patronos . 35 con el con el uso que se hace del término "cementerio" en
estos documentos, ya que en alguna ocasión se alude con él a
la propia iglesia abacial . 43
El cementerio
En ocasiones, en lugar de levantar una capilla junto al
cementerio, lo que se hizo fue excavar arcosolios en los Pórticos
muros del templo, como tal vez ocurriera en el primer Respecto a los pórticos que se levantaban en la
tramo del cuerpo de naves de Valbuena, y vemos en el de fachada occidental o a lo largo de la septentrional , apenas 44
35 AUBERT, 1947: I, 213 nota 2; VALLE PÉREZ, 1982: I, 119-120; desconocido (s. XIII); y la de María Juana de Benavente y su marido (s.
idem, 1986 (2): 96-99; BANGO TORVISO, 1992: 124-125; idem, 1998 XII) en la nave meridional (GARCÍA LOBO y MARTÍN LÓPEZ, 2 0 0 8 : 112-
(4): 322-323. 114).
36 Aquí encontramos, además del arcosolio ubicado en el segundo 41BANGOTORVISO, 1998 (4): 317, señala la existencia en Moreruela
tramo de la nave meridional, las huellas que dejó la lauda de un sarcó- de cruces a lo largo del muro de la iglesia que "parecen aludir a señales
fago en el sexto tramo de esa misma nave, y también hay indicios en el propias de enterramientos".
muro de cierre de la panda del pabellón de monjes de otros dos arcoso- 42Por ejemplo, Pero Peláez do Vilar en su testamento de 1292 manda
lios de medio punto (MIGUEL HERNÁNDEZ, 2008: 266). mia alma a Deus et a Santa Maria et manio suterrar meu corpo en fimiteiro io moes-
3 7Tras sucesivos castigos del capítulo General a aquellos abades que teiro ie Santa Maria i'Aziveyro (VAQUERO DÍAZ, 1 9 9 8 : doc. 1, 9 5 2 - 9 5 4 ) ;
habían dado sepultura en el encintado de la abadía a personas ajenas a Pedro Julián, presbítero, m a n d a en diciembre de 1 2 5 7 corpus meum sepe-
la comunidad (1191, 1201, 1213 y 1214), en 1217 consiente final- leir in cimiterio ecclesie sancte Marie (ROMANÍ MARTÍNEZ, 1 9 8 9 (2): II, doc.
mente que los fieles puedan recibir sepultura en sus cementerios 794, 758-759); o D. Sancha, madre de Martín de Finojosa (f1189), que
a
(DABROWSKA, 2000: 229): "Mortui saeculares qui in coemeteriis nos- fue enterrada en el cementerio, detrás de la capilla mayor (AGUILERA Y
tris sepulturam sibi eligunt, si de licentia sacerdotum suorum hoc faciant, GAMBOA, 1908: 285). El número de sepulturas que acogieron estos
recipiantur" (CANIVEZ, 1 9 3 3 - 1 9 4 1 : I, 1217, def.3, 4 6 5 ; HALL, SNED- cementerios fue bastante elevado, y así se refiere fray Basilio Duarte en
DON y SOHR, 2005: 392). su historia manuscrita del monasterio de Armenteira al cementerio aba-
38Las publicaciones de los resultados de excavaciones arqueológicas cial: "... todos se enterraban antiguamente en el zimenterio con tal dife-
de enterramientos en nuestros monasterios son escasas, de ahí el interés rencia que era inferior lugar mientras más cercano a los pies de la Yglesia,
que cobra el estudio llevado a cabo recientemente sobre San Andrés de y más honrado mientras más arriba y más arrimado a la pared de la Capi-
Arroyo (SAN GREGORIO, ENRÍQUEZ, MARTÍN RODRÍGUEZ y CRUZ SÁN- lla mayor. Y assi se allaron allí los sepulcros que hoy están dentro de la
CHEZ, 2009). Yglesia arrimados a sus paredes. Y muchas piedras con armas que metie-
39Su cronología oscila entre los siglos XIII y XIV (LÓPEZ DE LOS ron en la iglesia y otras muchas que se ven fuera entre la hierba por todo
MOZOS, 1994: 605-607). En otros monasterios cistercienses se han con- el prado de la Magdalena pegadas a las paredes de la Iglesia..." (YÁÑEZ
servado también importantes conjuntos de esta modalidad de estelas, NEIRA, 1 9 8 0 (3): 162).
c o m o en Las H u e l g a s de Burgos (CASA, DOMENECH y MENCHÓN, 43 El caso más conocido es el ya mencionado de Las Huelgas de Bur-
1994) o Tulebras (ZUBIAUR CARREÑO, 1981). gos, con sus tres cementerios en las naves del templo. Por otro lado, el 13
40 En la nave norte de Carrizo, por ejemplo, encontramos el epitafio de agosto de 1362 Aras Pardo en su testamento señalaba: Et manio enterrar
del capellán Martín Domínguez (f1272) (GARCÍA LOBO y MARTÍN meu corpo no fimyterio ia yglesia ie sancta María ie Monffero ientro na iglesia aly hu iazen
LÓPEZ, 1998: 60-61). En Moreruela encontramos varias: dos en la zona os iitos meu paire et mia maire (MARTÍNEZ SALAZAR, 1911: 116-120).
de la cabecera, la de Gonzalo González (s. XIV) y otra de un personaje 4 4 BANGO TORVISO, 1 9 9 8 (4): 3 2 4 .
INTRODUCCIÓN hisTórICA 75
noticias de enterramientos en ellos . Más suerte tenemos45 En las cuatro crujías del claustro de Valbuena las exca-
con los femeninos de las Huelgas de Burgos, San Andrés vaciones arqueológicas han documentado numerosas inhu-
de Arroyo o Vileña, ubicados al norte del templo y a los maciones, generalmente en fosa, si bien en la del capítulo se
que la tradición viene denominando pórtico o salón "de extrajeron en 1981 sarcófagos fabricados con grandes sillares
los caballeros", cobijando en su interior sarcófagos exentos de piedra caliza, alguno con cabecera antropomorfa, del tipo
—los dos primeros— o lucillos en origen ricamente decora- del que apareció en 1999 en la galería occidental del claustro
dos con pinturas murales —el último— . 46 de Matallana. Corresponden estos últimos, sin duda, a ente-
rramientos de los monjes y conversos que, a lo largo del
El claustro medievo pero también en época moderna, solían sepultarse
Los claustros de los cenobios cistercienses acogieron en las galerías claustrales. Respecto a sepulturas de laicos, el
también desde el siglo XII enterramientos en los que se daba Tumbo de La Espina nos dice que los dos vultos de piedra que estan
sepultura no solo a miembros de la comunidad monástica, en el claustro baxo entre el crucifixo y el capitulo pertenecían a M a r -
sino también a laicos, ocupando diversos lugares: el suelo de tín Románez y su mujer Jimena Ruiz (ca. 1210). Descono-
las galerías, los muros del entorno e incluso los interco- cemos si se trataba de sepulcros o laudas con relieves figurados.
lumnios de las arquerías . 47
En algunos monasterios, como en Moreruela, se señalizaban
mediante inscripciones en los paramentos cercanos , mientras 51
antiguas datan del siglo XIV —, tanto las noticias de los cro-
50 tum— parece que son posteriores a la fábrica del muro, en La
nistas de los siglos XVI-XVIII como los restos materiales que Espina —nueve en el mandatum y uno en la occidental—, están
han llegado a nuestros días, nos informan de inhumaciones realizados al mismo tiempo que el paramento en el que se
llevadas a cabo ya a finales del XII. abren, lo que sugiere que desde el momento en que se levanta
45 En Huerta se conservan los cimientos de la galilea así como las ciales de la casa que encontrario se hiziere y quel P. Reformador no pueda dispensar en
huellas dejadas por sus bóvedas en la fachada del templo; en las excava- contrario desto salvo que los religiosos se entierren en al claustro del capitulo como se tiene
ciones llevadas a cabo en el recinto, apareció en la esquina nordeste una en costumbre antigua y los Reformadores y abbades en el capitulo y los frayles legos y
tumba de lajas del siglo XIII sin restos óseos (CASA, DOMENECH y TERÉS, donados en el claustro de la lection o en el fiminterio en las casas que le huieren en lugar
1992: 582 y 585), y algunos historiadores del siglo XVII sitúan aquí la honesto (A.H.N., Clero, Libro núm. 20261, fol. 81v). En cuanto al sen-
tumba de María Manrique de Lara, hija de los primeros Condes de tido funerario del claustro en la Edad Media, vid. CARRERO SANTAMA-
Molina y primera mujer de Diego López de Haro, trasladada en tiem- RÍA, 2006 (2).
pos de Carlos V al claustro (SALAZAR Y CASTRO, 1696: 127-128; 48 Estatutos de 1194 o las codificaciones de 1202 y 1220 simple-
LÓPEZ DE GUEREÑO, 2007: 46). Del que recorría la fachada norte de mente ordenaban que las sepulturas no sobresaliesen del suelo con el fin
la iglesia de Valdediós se pueden ver las ménsulas que sostenían su de facilitar el tránsito por las galerías: "Lapides positi super tumulos
techumbre y una excavación arqueológica ha sacado a la luz parte de sus defunctorum in claustris nostris coaequentur terrae, ne sint offendiculo
cimientos y restos humanos asociados a esta estructura. Y en Moreruela transeuntibus" (1194.8; 1202, dist. x.33 y 1220, dist.X.27; NORTON,
se conserva la huella de un arcosolio de medio punto, el rebaje para alo- 1986: 340; DABROWSKA, 2000: 228; WADDEL, 2002: 285).
jar una lauda y las huellas de las ménsulas que soportaban el sarcófago 49 ESPAÑOL BERTRÁN, 2003: 23-24.
(MIGUEL HERNÁNDEZ, 2008: 265-266). 5 0Moreruela (1307); Carracedo (1364); Rioseco (1404, 1423,
46 Para Las Huelgas, vid. CARRERO SANTAMARÍA, 2004; para Vileña, 1429, 1434); etc.
CADIÑANOS BARDECI, 1990; y para Arroyo, SAN GREGORIO, ENRÍQUEZ, 51 Se conservan dos en la panda del mandatum, la de un tal Pedro de
MARTÍN y CRUZ, 2 0 0 9 . Castro (f1275) y la del maestro don Gil y de don Pablo (f1276).
4 7Por lo que a la comunidad monástica se refiere, las actas del capí- 5 2En la panda del capitulo María de Vera, mujer de Ruy González, y
tulo provincial de 1507 de la Congregación de Castilla celebrado en el tal vez el deán Ruselus y los arcedianos Gil y Bugo; en la del mandatum
monasterio de Valparaíso —aunque el dato es bastante tardío recoge una familiares de los Montuenga; en la del refectorio, la mujer e hijos de
" c o s t u m b r e antigua"—, recogen lo siguiente: Hordeno y mando el dicho capi- Simón Sánchez de Cerezuela; entre otras.
tulo que de aqui adelante ningun Reformador ni abbad de nuestra familia ni rreligioso 5 3 ESPAÑOL BERTRÁN, 2 0 0 3 : 24; MARTÍNEZ DE AGUIRRE, 2 0 0 3 : 140;
monje nifraile se entierre en nuestras yglesias so pena de pribacion de los ofifios a los ofi- CARRERO SANTAMARÍA, 2006: 548; idem, 2006 (2): 36.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
76
ese lienzo se planificó dedicarlo a lugar cementerial. En forma diversa para su nueva función , tal y como parece que
57
Huerta las cuatro pandas acogieron los restos de numerosos sucedió en Huerta —en donde recibieron sepultura los II
hombres y mujeres pertenecientes a diversos linajes vincula- Condes de Molina, Pedro y Sancha — y en Moreruela —que
58
dos estrechamente con el cenobio (los Finojosa, los Condes alojó a miembros de las familias Ponce de Cabrera y Vela —. 59
ron elementos originales de la fábrica claustral para acoger había en las cuatro crujías del claustro de Huerta desapare-
sepulcros. u n o de ellos fue el armarium, acondicionándolos de cieron entre los siglos XVII y XVIII . La desaparición de las
61
5 4Las intervenciones llevadas a cabo en el recinto, sobre todo en el cias históricas..., fol. 423 ; Ponz, XIII, p. 57-58, y los que le siguen), seña-
v
siglo XVII, modificaron la disposición original de gran número de sepul- lando la tablilla que servía como epitafio —el mismo para todas las fuen-
turas, provocando traslados y reubicaciones de restos, intentando salvar tes— que hifieron aqueste paño de la claustra.
la memoria de los individuos que allí descansaban colocando tablillas ABAD CASTRO, 1 9 9 8 : 188; BANGOTORVISO, 1 9 9 8 (4): 3 2 5 .
5 7
identificativas. Desaparecidas también éstas, sí ha llegado la descripción 5 8Aunque como se lee en el epígrafe empotrado al fondo del lucillo
que de ellas hizo Antonio Ponz en 1777 (PONZ, 1788-1794: XIII, p. (GARCÍA LOBO y MARTÍN LÓPEZ, 1998: 60), el conde murió el 10 de
54-64 y 66) así como varias relaciones manuscritas de los siglos XVI y enero de 1202, siendo enterrado en Huerta cuatro días más tarde, el
XVIII acerca de los enterramientos existentes en el cenobio. Estos docu- vano geminado sobremontado con un óculo que cierra el primitivo semi-
mentos se conservan en la Colección Salazar y Castro de la BRAH circular es del segundo cuarto del siglo (SÁNCHEZ AMEIJEIRAS, 1993:
(Memoria de los Señores de la Casa de Hinojosa que estan enterrados en esta Casa de 29). Sus huesos reposan bajo dos lápidas dispuestas en la base de esta
Nuestra Señora la Real de Huerta, Legajo C, carpeta 13, n. 2; la Tabla de entie- hornacina.
rros que esta en el monesterio de sancta maria de huerta de la borden del Qstel, F-40, 5 9Según Yepes, a ambos lados del altar de San Juan yacían los restos
fol. 6 4 - 7 9 ; o las Noticias históricas de Huerta y copia de algunas inscripciones sepul- de Juan Vela (f1181) y de su sobrino Fernán Ponce, en cuyos sepulcros
crales, C-41, fol. 417-424) y en el archivo del monasterio de Osera (Epi- estaban esculpidas "unas cabras en campo verde" (II, 396). Juan Vela,
tafios del claustro por su orden, Caja 85.5; p u b . p o r SUERO SOSA, 1 9 9 7 : III, nieto del fundador del monasterio, descansaba en Moreruela ya en
1152-1170). Hay que tener en cuenta, no obstante, que unas y otras se diciembre de 1181, fecha en que cuatro de sus hermanos hacen una
contradicen en varias ocasiones, por lo que precisar su ubicación exacta donación siguiendo la última voluntad de Juan, cuius est apud vos sepultura
es, si no imposible, harto difícil y que los lazos genealógicos estableci- (ALFONSO ANTÓN, 1986: 317-319 docs. 21 y 22). Respecto a Fernán
dos entre los distintos miembros de las familias sepultadas contienen Ponce, de sobrenombre el Menor, hijo de Ponce Vela y Teresa Rodrí-
abundantes errores. Aún así, podemos aventurar qué personajes acogie- guez, sabemos que en 1196 pedía ser enterrado aquí (Ibid.: 338-339
ron: Pedro Gil de Montuenga y Gil Ruiz de Montuenga en la panda doc. 40). Otras fuentes, sin embargo, señalan que el Fernán Ponce ente-
meridional; Roldán Pérez de Medrano (f1293) y Simón Sánchez de r r a d o en el claustro baxo junto al altar de S. Juan en un sepulcro de piedra que tiene
Cerezuela (f1287) en la septentrional; Manrique Pérez de Lara, I Conde gravadas las armas es otro, a saber, el hijo de Ponce de Cabrera y tío, por
de Molina (f1164) y su mujer Ermesenda de Narbona, y sus hijos Pedro tanto, de Juan Vela, ya que junto a su sepulcro se podía ver el epitafio
Manrique de Lara, II Conde de Molina (f1202) y su mujer Sancha Gar- siguiente: Aqui yace Fernán Ponce de Cabrera, el mayor, hijo de Conde Ponce de
cía de Navarra, y Amalrico, Duque de Narbona, en la oriental. Vid. ade- Cabrera, que murió en las kalendas de octubre, era 1218 (Casa y descendencia de los
más la propuesta de LÓPEZ DE GUEREÑO, 2007: 46-52 . Cabreras y Ponces, BRAH, Colección Salazar y Castro, C-41, fol. 324).
5 5 En una de las tablillas que viera Ponz, estaba escrito lo siguiente: Vid. también MIGUEL HERNÁNDEZ, 2008: 250-251.
"desde la fundacion de este Monasterio se guardó siempre inviolable- 6 0 BANGOTORVISO, 1 9 9 8 (4): 3 2 4 y 3 2 8 n. 34.
mente, y se tuvo, y tiene en costumbre, que en el paño del claustro, que 61 Según las relaciones manuscritas aludidas, en la galería oriental yace-
va delante del Capitulo, donde yacen los Caballeros de cuenta, que no se rían Gonzalo Pérez, III Conde de Molina (f1239) y Ruy González, aña-
deba enterrar ninguno, si no fuere persona de grande estado, o que muera diendo algunas fuentes al deán Ruselus de Toledo y los arcedianos Gil y
en pelea de Moros, y que herede, y de algunas posesiones al Monaste- Bugo y a algunos miembros del linaje de los Vera (Epitafios del claustro...) y a
rio" (XIII, 63-64). los hermanos García y Diego Muñoz (Tabla de entierros... , fol. 70 ). En la r
5 6 Es el caso de los miembros de la familia Finojosa —Nuño Sancho septentrional, Nuño Sancho de Finojosa (f1206), su mujer Marquesa
(f1206), sus hijos Martín y Adán Muñoz y otros descendientes—, que López de Haro y sus hijos Martín y Adán Muñoz, más, según la relación
descansaron en la galería aneja al refectorio, aquella y éste por ellos finan- conservada en Osera, los hermanos Diego y García Martínez de Finojosa
ciada (HERNANDO GARRIDO, 2003: 191; y MARTÍNEZ DE AGUIRRE, —fallecidos según esta misma fuente en 1289 y 1285 respectivamente— y
2003: 141). Lo mismo sucedió con los condes de Molina, que descan- según Ponz (XIII, p. 55-56), Nuño Martínez. En la occidental, Diego
saron en nichos abiertos en el pabellón de monjes y de los cuales se Jordán, su mujer Mafalda y dos hijos suyos (las Noticias históricas..., fol. 422 - v
informa en una de las relaciones de sepulturas del monasterio que hifie- 423 los coloca en la norte); una serie de caballeros franceses que vinieron
r
decir, en la p a n d a oriental (Tabla de entierros..., fol. 69; el pub. p o r SUERO la mesnada de Jiménez de Rada (las Noticias históricas... , fol. 421 -422 , losv r
SOSA, 1997: III, p. 1156 dice que su epitafio está en las arquerías), mien- sitúa en la oriental y en su lugar, en ésta, coloca a los testamentarios de
tras que otros los sitúan en el claustro de la lifion, esto es, la meridional (Noti- Jiménez de Rada y a los caballeros francos —fol. 423 -). v
INTRODUCCIÓN hisTórICA 77
galerías de Matallana, Palazuelos y La Espina impiden averi- enterrarse en la sala capitular , y el 2 8 de mayo de 1 1 9 0
65
guar si las arquerías que daban al patio alojaron también Vasco o Velasco Fernández, nieto del fundador de Sobrado,
sepulcros. pedía que si moría en Galicia recibiera sepultura en el capí-
tulo de la abadía . Esta práctica, que al contrario de lo que
66
al menos la segunda mitad del siglo XI, los abades cister- mediados del XV . 70
terio de Sandoval a cambio de que los monjes celebraran En estos recintos las sepulturas se disponían, como
todos los años un aniversario el día de San Juan Bautista por vemos, bien en fosas excavadas en el suelo cubiertas o no
su alma y la de su padre Alfonso VII in capitulo iicti monasterii con lápidas , en lucillos practicados en los muros latera-
72
6 2 DABROWSKA, 1 9 9 4 . mi maire sepultaios (A.H.N., Clero, carpeta 995, doc. 20; regesta en
63 La sala capitular de Carracedo fue comenzada, según las últimas HERRERO JIMÉNEZ, 2003: 206-207).
investigaciones, hacia 1170 o poco después (VALLE PÉREZ, 1998 (2): El 2 1 de octubre de 1362 Sancha Ruiz, hija de Ferrán González de
69
rio por su alma, otras fuentes afirman que finalmente su cuerpo fue ente- nando González de Fermosa había dejado en su testamento a Valpara-
rrado en la catedral de Palencia. íso ionie su cuerpo jas sepultaio, quince m i l m r s para una capellanía (LERA
6 5 YÁÑEZ NEIRA, 1 9 8 4 : 2 2 1 . MAÍLLO et al., 1998: 152-154 doc. 172). Fr. Bernardo Cardillo Villal-
6 6 Preterea manio me sepeliri in monasterio vestro si contigerit me mori in Galletia p a n d o (fol 11 ) señala que ambos estan enterraios en este monasterio, pero no se
v
et vos conceiitis mihi pro vestra bona voluntate in vestro capitulo et partem in orationi- sabe ionie, aunque se sospecha son los que estan en ios sepulchros ie alabastro ricamente
bus vestris (A.H.N., Clero, carp.532, doc. 4; cit. por Valle Pérez, 1998 labraios que ay en una capillica pequeña iel capitulo.
(3): 1059-1060 n. 31. 7 1 Seguimos, p o r ser la que más detalles ofrece, la Tabla ie entierros..., fol.
67 En 1197 se sanciona al abad de Clairmont por haber enterrado al 69 -70 de la BRAH.
v r
fundador en este recinto, en 1198 al de Vauluissant (AUBERT, 1947: II, 72 A fines de 2004 y principios de 2005 se efectuaron una serie de
331; DABROWSKA, 2000: 229) y en 1219 al de Bebenhausen por hacer excavaciones arqueológicas en la iglesia, capilla de San Pedro y sacristía.
lo mismo con un noble (CASSIDY-WELCH, 2001: 232). Hay que seña- En esta última se localizaron "dos enterramientos de lajas de piedra, de
lar, no obstante, que por esas fechas en algunos monasterios ingleses cierta suntuosidad, incluso alguno de ellos con la cabecera semicircular,
(Newminster, Byland o Meaux) recibieron sepultura otros fundadores y mientras que en el centro de la sala y entre las dos anteriores apareció lo
no parece que fueran castigados (BUTLER, 1993: 81). que parece ser un panteón de mayores dimensiones y que pudiera haber
68 El 12 de mayo de ese año Inés Ramírez, hija de Diego Ramírez de albergado varios cuerpos en su origen". Agradezco a Jesús Misiego, de
Cifuentes y Leonor Fernández, se comprometía a hacer un altar dedicado Strato: Gabinete ie estuiios sobre patrimonio histórico y arqueológico, S.L., esta infor-
a la Santísima Trinidad en el cabilio io yafen los cuerpos ie los iichos mi paire e mación.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
78
de piedra lisa" . Arcosolios se han conservado en algunos
73 maestres de Calatrava, N u ñ o Pérez de Quiñones ( f I 2 I 2 )
monasterios, generalmente ocupados por abades como en y Sancho de Fontova ( f I 2 6 3 ) en Monsalud . 79
de laicos en su ubicación original, debiendo recurrir a la -el de Aldonza ( f I 3 I 5 ) , hija de Simón Ruiz de Cameros y
documentación para encontrar testimonios de su uso. Ade- mujer de Juan Sánchez de Velasco, desaparecido- . 82
portada de acceso a esta sala fueron reutilizados como monios gráficos, ya algo tardíos, en los que se ven a monjes y
lugares de inhumación, como ocurrió en el caso de los conversos trabajando en la construcción de sus casas , motivó 84
73 MORALES, I765: 40. En el segundo cuarto del siglo XVII fue derri- GARCÍA, I999: I I 3 8 ; ENRÍQUEZ RODRÍGUEZ, 2006: 6I6) o los de
bado el capítulo y dependencias anejas, pero MANRIQUE menciona que Huerta, que tras la reforma llevada a cabo en el pabellón de monjes a
en origen estaba en medium capituli (I642-I659: II, 45I-453), y en I754 principios del siglo XVII, fueron reubicados en los tres vanos de su
"se descubrió la lápida que cubre el sepulcro que está devajo del altar de fachada occidental y en los antiguos accesos a las otras dependencias de
el Capítulo del referido Monasterio (de Sandoval) en el cual dicen que la panda (No estamos de acuerdo con SÁNCHEZ AMEIJEIRAS, I993: 26
yace la Sra. Dña Urraca hija que fue del Sr. Emperador Dn. Alonso y y 28, quien sugiere que la reutilización debió llevarse a cabo en el XIII).
mujer de Dn. García Rey de Navarra la cual parece haver fallecido el año 80 SUERO SOSA, I997: IV I299.
de II80, según consta por el epitafio que está a la puerta de dicho Capí- 81 CADIÑANOSBARDECI, I990: 60-6I.
tulo..." (SAHELICES, 2005: 36I-363). 82 BAURY, I999 : I, 398.
7 4 Así se recoge en el Tumbo del monasterio, transcrito parcialmente 83 "In desertis atque silvestribus locis monasteria proprio labore
por MARTÍN GONZÁLEZ y PLAZA SANTIAGO, 987: I0 y 24. condiderunt, et sacra illis nomina solerti provisione imposuerunt"
7 5 Vid. notas 55 y 60. (MIGNE, I854: 64I).
76 CADIÑANOS BARDECI, I990: I56-I58 doc. CLXVIII. 8 4 En el Evangelisches Seminar de Maulbronn se conserva una pintura
7 7 GONZÁLEZGUTTÉRREZ, I987: 4I5. sobre tabla (I450) procedente del monasterio de esa misma localidad en
78 GARCÍA LOBO y MARTÍN LÓPEZ, I998: 59 y 6I2; idem, 2008: II3. la que aparecen representados monjes trabajando en la edificación de la
El segundo se localiza en el exterior de la puerta de acceso al capítulo. iglesia monástica. Posteriores (ca.I600), son los dibujos con escenas de
79 Fray Bernardo de Cartes expone que el del primero "está en el la construcción de Schonau -conservados en el Germanisches Natio-
Capitulo baxo de Monsalud en el espacio de un arco" y el del segundo nalmuseum de Nuremberg-, en la que se aprecia en esta ocasión a los
"Al contrario lado del Capitulo, debaxo de otro arco, ay un sepulcro con conversos sacando piedra de la cantera, transportándola en carros de
la inscripcion siguiente..." (I72I: I77). De otra parte, otros ejemplos bueyes, preparando mortero y argamasa, escuadrando los sillares y mon-
conservados de esta variedad datan de época moderna, como el de la tándolos en el templo, ayudados por algún monje (vid. fotografías de
condesa Fronilde en Ferreira (CARRERO SANTAMARÍA y GONZÁLEZ estas obras en France, I998: 203 y 204).
INTRODUCCIÓN hisTórICA 79
que durante mucho tiempo se tuviera la idea de que sus fábri- varios monjes o conversos con el apelativo de maestros de
cas eran en exclusiva obra de arquitectos y artesanos pertene- obras u operarios: Juan, monachus obreiro (1218 y 1221) y
cientes a la comunidad monástica . Sin embargo, contra esta
85 Fernán Martínez, maestre da obra (1278), en Osera ; Fray 92
visión un tanto mitificada e idealizada de la arquitectura de la García, magister de la obra de Nogales (1231) ; Fre Joan de la
93
Orden, diversos testimonios de la época, como la Vita Prima Obra ( 1 2 3 5 ) o Don Nicolao el monge de la obra ( 1 2 4 8 ) en San-
de San Bernardo , e incluso los propios "documentos pri-
86 doval ; Diego, operario monachis de Valparaíso (1238) ;
94 95
mitivos" —el Exordium Parvum o alguno de los Capitula —, 87 Domingo Juan, monachus et magister operis de Meira (1246) ; 96
nos informan de la contratación de obreros especializados Garsia Pelagii magister opere en Villanueva de Oscos ( 1 2 4 7 ) ; 97
para tales menesteres, aunque monjes y conversos también Fray Pedro Pedreiro maestro da obra de M e l ó n ( 1 2 6 9 ) ; o Pedro
98
buena nómina de monjes y conversos enviados desde Clair- Junto a ellos aparecen en la documentación otros maestros
vaux a las nuevas casas incorporadas a su filiación —como y operarios de los que no sabemos si eran religiosos o lai-
Achard a Himmerod, Geoffrey d'Ainai a Fountains y Rie- cos: es el caso de Gundisalvis Pelagii, magister operis (1246),
vaulx, Roberto a Noirlac, Alberto a Sobrado, Bernardo a Oya de D. Rodrigo, maestre da obra de Santa Maria de Oya (1273),
o Nivardo a La Espina—, a los que se ha considerado arqui- de Joham Pérez, maestre da obra (1276 y 1291) y Affonso
tectos. Incluso, se ha hablado de una escuela de cantería des- Fernandiz, maestre da obra (1287), todos ellos de Oya ; y 100
tinada a adiestrar técnicos que exportarían el proyecto también el de don domingo obrero, que aparece representando
claravalense a las nuevas casas y enseñarían a los maestros loca- al abad y convento de Valbuena en una compra llevada a
les a ejecutarlo correctamente . Pero aunque en alguno de los
89 cabo en 1284.
casos así fuera —por ejemplo, el faber Alberto del primero de
los cenobios hispanos— , quizás simplemente se trataba de
90
Sin embargo, todo apunta a que, en la mayoría de los
planificadores y organizadores, entre cuyas tareas se encon- casos, aquellos operarios o maestros de obra eran, en reali-
traba el sentar las bases administrativas del nuevo asentamiento dad, supervisores y administradores de los bienes destina-
y, posiblemente, el diseño y trazado de los futuros edificios dos a la construcción y mantenimiento de los edificios . 101
85 Al margen de autores de la segunda mitad del XIX, como Lenoir, el 91 Han puesto en duda el papel de arquitectos de Geoffrey, Achard y
Abbé Texier o Montalembert, algunos investigadores del siglo XX seguían otros, por ejemplo, HALSEY, 1986: 67-68 y 76; COLDSTREAM, 1998:
fieles a esta idea (por ejemplo, AUBERT, 1947: I, 95 y ss; o DlMIER, 1964: 38; LEROUX-DHUYS, 1999: 43. Son interesantes los resultados de la
108-111). investigación de COPPACK (2004) sobre las primeras construcciones de
86 Arnaldo de Boneval, en el Libro II, cap. V al hablar de la cons- Fountains, Kisrkstall, Meaux o Newminister: erigidas "según nuestra
trucción de Clairvaux II señala: "Una vez reunidos abundantes fondos costumbre", "a nuestra manera", "de acuerdo a la forma de la Orden",
y contratados rápidamente los obreros, todos los hermanos se dedicaron por monjes como Geoffrey d'Ainai o Adam de Meaux, según las cróni-
a trabajar en los menesteres necesarios. Unos cortaban árboles, otros cas de los monasterios y las excavaciones arqueológicas se trataba de
tallaban piedra, otros levantaban los muros y otros redirigían el río construcciones sencillas que integraban un oratorio, refectorio con dor-
ampliando sus orillas y construyendo saltos de agua para los molinos. mitorio encima, letrina, cocina, es decir, las requeridas por los Instituta
Los carpinteros, molineros, curtidores y demás artesanos preparaban para comenzar una fundación, lejos de lo que sería el conjunto monás-
máquinas adecuadas a sus trabajos..." (BONEVAL, 1994: 606). tico tradicional cisterciense.
8 7 En el Exordium Parvum, cap. X V I 0 , al hablar de la necesidad de 92 VALLE PÉREZ, 1982: I, 105 y 122.
tener conversos comentan: "Tunc diffinierunt se conversos laicos bar- 93 CAVERO DOMÍNGUEZ, 2001: doc. 56, 94-95.
batos livcentia episcopi sui suscepturos, eosque in vita et morte, excepto 9 4CASTÁN LANASPA, 1981: doc. 62, I I 3 - I I 5 y doc. 68, 122-123.
monachatu, ut semetipsos tractaturos, et homines mercennarios; quia 95 LERA MAÍLLO et alii, I998: doc. 53, 57-60.
sine amminiculo istorum non intelligebant se plenarie die sive nocte pre- 96 VALLE PÉREZ, I982: I, I72.
cepta regule posse servare" (WADDELL, 1999: 254; trad. castellana en 9 7FLORIANO LLÓRENTE, I995-I996: doc. 58, 53.
HERRERA, 1995: 71). También en los Capitula XIII, XX y XXIV se 98 Idem: 228.
habla de los "artifice conductos" y "mercenarios" que viven y trabajan 99 BANGO TORVISO, I988: 69; MIGUEL HERNÁNDEZ, 2008: 269-
en el monasterio (WADDELL, 1999: 188, 190 y 191; trad. castellana en 270.
HERRERA, 1995: 159, 161 y 163). 100 CENDÓN FERNÁNDEZ, 2009: 488.
88 VALLE PÉREZ, 1982: I, 54 nota 43; FERGUSSON, 1984 (2): 14-17; IQI VALLE PÉREZ, I982: I, 36 y 54 nota 43; idem, I99I (4): 774;
o BIALOSKORSKA, 1994: 57 y 71-74. idem, I992: I0; BANGO TORVISO, I988: 66 y ss; idem, I998: 74-75 y
89 ROMANINI, 1992: 418; ASCANI, 1993: 817 y 819. 90; BALBOA DE PAZ, I99I: I77 nota 2I; BOZZONI, I99I; MARTÍNEZ
90 Sobre este personaje y su participación en Sobrado, vid. VALLE BUÉNAGA, I997: 52I nota I5; idem, I998: 264 y I 9 I - I 9 2 nota 47;
PÉREZ, 1982: I, 67. etc.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
80
monasterio, con el verdadero técnico, el especialista cuali- en I 2 3 5 y I 2 4 4 ; y de nuevo en ese cenobio aragonés,
n 0
ficado en tareas edilicias, el architectus, artifex o fabricator . I02 encontramos a Domingo Nocito, chantre en I284, obrero
A este respecto hay que recordar a la figura de en I 3 0 9 y cillerero mayor en I 3 I 5 - I 3 I 6 ; también Ber-
m
Gerardo, hermano de San Bernardo y cillerero de Clairvaux, nardo de Portaregia, operarius de Poblet en I I 6 8 , llegaría a
de quien el santo en el panegírico que le dedicó tras su cillerero m a y o r ; etc.
n2
muerte hablaba en estos términos: "¿Escapó alguna cosa a su N o obstante, encontramos entre los miembros de las
pericia en lo tocante a la dirección de las casas, de las gran- comunidades cistercienses -ya sean monjes o conversos-,
jas o de los huertos, o en lo referente al agua y, en fin, en los distintos profesionales artesanos que colaborarían sin duda
demás quehaceres en las labores del campo o en cualquier tanto en los grandes trabajos edilicios como en el manteni-
otro negocio? Con la facilidad de un verdadero maestro se miento diario de los edificios: Juan Pérez, pedrero en San Clo-
movía entre los albañiles, artesanos, agricultores, sastres o dio ( I 2 4 2 ) ; fre Ysidro carpentero yfre Domingo ferrero ( I 2 3 5 )
n 3
femenino hoscense de Casbas cuyo carácter eminentemente tarius en Carracedo ( I 2 4 8 ) ; o freyre Peydro el carpentero
n 5
A través de la documentación de diversos monaste- la presencia de esclavos musulmanes -algunos de ellos pedre-
rios hispanos se ha detectado la trayectoria de algunos de ros y carpinteros- en monasterios como Sobrado o Las
estos monjes por distintos cargos monásticos, lo que Huelgas de Burgos, que participarían igualmente en las
demuestra no sólo que se trataba de un puesto más en el o b r a s . Pero, sin duda, serían equipos de obreros laicos
n7
escalafón sino también la importancia que revestía esta ocu- especializados los que llevaron el peso de la construcción de
pación de maestro u operario. Es el caso de Juan López, los monasterios™, a pesar de que se ha venido reduciendo
monje de Carracedo, que fue soprior (I270), prior ( I 2 7 4 su papel a una simple ayuda en tareas complicadas o para
y I275), maestre de la obra ( I 2 8 0 y I282), cillerero mayor agilizar las obras y épocas avanzadas del medievo™. Y debe-
( I 2 8 2 ) y abad ( I 2 8 6 - I 3 I 8 ) ° ; Félix, de Moreruela, magis-
I 6 mos señalar que, en algunos casos, encontramos talleres iti-
ter operis en I I 8 2 y posiblemente prior en I I 8 5 - I I 8 6 ; I 0 7 nerantes trabajando en diversos monasterios, como lo hizo
Arnaldo, de Fitero, en I I 8 I era custos operis, apareciendo uno de Carracedo en Penamayor y tal vez otro de Valbuena
años más tarde ( I I 8 7 - I I 8 9 ) como cillerero mayor ; Mar-I08
en Palazuelos, destacando el equipo que, a las órdenes y
tín de Nogarol, cillerero en Gimont ( I 2 0 I ) , aparece años siguiendo las trazas dadas por el maestro Gualterio, opera en
más tarde en Rueda como operarius ( I 2 I 5 - I 2 2 0 ) y en I 2 2 3 La Espina, Sandoval, Gradefes y Valdediós, y que a lo largo
era nombrado abad ; Gil Rubio, también de Rueda, des-
I09
del tiempo de actividad va introduciendo fórmulas propias
empeñaba el cargo de operario en I 2 2 5 y de cillerero mayor del entorno donde actúa.
102 Como bien ha señalado BANGO TORVISO para el caso concreto de 107BANGO TORVISO, I988: 67; HERNANDO GARRIDO, 2008: 279;
la catedral calceatense, en las grandes empresas constructivas medievales MIGUEL HERNÁNDEZ, 2008: 269.
se podían distinguir dos figuras: por un lado, el arquitecto creador del 108MONTERDE ALBIAC, I978: doc. I65, 488 y doc. 2 I I , 5I8-5I9;
proyecto -Garsión, en Santo Domingo de la Calzada-, y por otro el VALLE PÉREZ, 2004: 8I9.
administrador de la obra -en esta ocasión, Domingo Cidamon, quien en 109CONTELBAREA, I977: I, 75-76; MARTÍNEZ BUÉNAGA, I998: I9I.
principio ostenta el cargo de mayordomo para designársele luego obrero- 110CONTEL BAREA, I977: I, 2I5; MARTÍNEZ BUÉNAGA, I998: I92.
, al que se le da habitualmente "igual o más protagonismo" que al ver- M CONTEL BAREA, I977: I, 2I5.
dadero artífice (2000: 35-4I). Vid. también BOZZONI, I99I; DURLIAT, 112SANTACANA, I974: I79.
I995: I2 y 20; BANGO TORVISO, I998: 74-75; idem, 2000: 36-40; 113LUCAS ÁLVAREZ y LUCAS DOMÍNGUEZ, I996: doc. 55, 297-298.
FITÉ, I999: passim; PALOMO FERNÁNDEZ, I999 (2): I29; HUERTA 114CASTÁNLANASPA, I98I: doc. 62, I I 3 - I I 5 ; cit. por PÉREZ-EMBID,
HUERTA, 2004; MARTÍNEZ DE AGUIRRE, 2009. Sobre los diferentes tér- I986: 22I y 228, y por CARNICERO MÉNDEZ-AGUIRRE, I992: 887
minos con que se designan a gestores y artífices durante el medievo, sigue nota 46. Fray Gonzalo pedrero, aparece en un documento de Otero de las
siendo fundamental el trabajo de AUBERT, I96I: 7-I7. Dueñas (FERNÁNDEZ FLÓREZ, 2005).
103 CONRADO DEEBERBACH, I998: I62. 115MARTÍNEZ MARTÍNEZ, I997: I, doc. 445, 3I0; cit. por CARNI-
1 0 4Blasquita en I235, Sancha de Fraga en I260, Sancha de Pueyo CERO MÉNDEZ-AGUIRRE, I992: 88I nota I4, pero con fecha de I244.
entre I275 y I288, Toda Pérez de Aybar entre I30I y I303, Alamanda 116GARCÍATURZA, I992: doc. 80, 89 y doc. 99, I05-I06.
de Castellet de I309 a I 3 I I y María Ramírez en I33I (ASCASO SAR- 117Para el cenobio gallego, vid. VALLE PÉREZ, I982: I, 66-67 y GAU-
VISE, I986: 9I y 92; MARTÍNEZBUÉNAGA, I998: 350 y 369). TIER DALCHE, I986; y para el burgalés, TORRES BALBÁS, I943: 252-
105 En este caso, el cargo de obrera lo posee Bernarda de Sant Tomás en 253, MAZUELA, I987: 38, y ALONSO ABAD: 38 y I75.
I297 y Gueralda de Girona en I337 y I339 (PUIGDEVALL I DlUMÉ, 118FERGUSSON, I984 (2): 22-24; HALSEY, I986: 67; BIALOSKORSKA,
I992: I72-I74) I994: 7I-72; BANGO TORVISO, 2000: I50.
106 BALBOA DE PAZ, I99I: I76-I77. 119AUBERT, I947: I, 95-96 y 99-I00.
INTRODUCCIÓN hisTórICA 81
Respecto a la existencia de una institución gestora de diversas circunstancias acabarían ocupando una parte del
la obra y fábrica del monasterio y de carácter permanente, palacio de la reina.
vendría condicionada por la amplitud de las tareas cons- En Palazuelos y Valbuena, al tratarse de afiliaciones,
tructivas, la dilatada duración de los trabajos, pero también ocuparían las construcciones de las fundaciones preexis-
por el necesario mantenimiento continuado de los edificios tentes. En Matallana, sucedería algo semejante, pues aunque
ya construidos . En este sentido, es significativo el ejem-
120
se trata de una fundación ex-novo, en ese mismo lugar
plo de Carrizo, en donde en 1 2 2 4 aparece documentado estuvo asentada anteriormente una encomienda sanjuanista.
D o n Gonzalo, tenente ela obra , y en 1230 se acepta como
121
familiar a Martín Domínguez, presbítero y "alumno" del Pero ¿cuándo empezaron a levantarse los edificios
monasterio, y se le da encomienda la obra del mismo para que hoy vemos? En líneas generales se viene hablando de
que la regente de por vida a cambio de la donación de sus un período de tiempo que viene a oscilar entre 30 y 40
años tras la fundación durante el cual el nuevo monasterio
bienes ; este personaje se encargará de la fábrica hasta su
122
120Una visión clarificadora del problemático empleo del término opus 1 2 3E n mayo de 1 2 3 4 cambia una terra que habeo de la obra de Sancta Maria
o fábrica, diferenciando entre el organismo administrativo y la propia de Carrizo (CASADO LOBATO, 1983: I, doc. 195, 2 1 2 ) ; en m a r z o de 1 2 3 7
construcción del edificio, se puede encontrar en BRANNER, 1976. Cen- él m i s m o d o n a una heredad a la obra (CASADO LOBATO, 1 9 8 3 : I, doc.
trado en los siglos del románico, vid. DURLIAT, 1995, ampliado junto 208, 226-227). En el testamento de Lorenzo, marido de Dominga, de
con los del gótico en KIMPEL, 1995, en donde se puede encontrar una la segunda mitad del XIII, se hacen una serie de donaciones en las que
amplia bibliografía sobre el particular. aparece n o m b r a d o el uorto de la obra, o la terra de la obra (CASADO LOBATO,
1 2 1CASADO LOBATO, 1 9 8 3 : I, doc. 133, 151. 1983: II, doc. 588, 266-268). Vid. además, CASAS CASTELLS, 2005:
1 2 2... damus ei operam ad tenendum in vita sua cum suis pertinenciis, ut possideat, 456-457.
laboret, fructificet, plantet, exolat de eafaciat secundum Deum et ercundum posse suum 1 2 4 PÉREZ-EMBID, 1 9 8 6 : 5 8 4 .
(CASADO LOBATO, 1 9 8 3 : I, doc. 181, 1 9 7 - 1 9 8 ) . 1 2 5 1988: 69-70.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
82
en su construcción, que también son válidas para otros plicado, se varía la traza de la capilla mayor y los aboveda-
lugares fuera de nuestro territorio, e incluso para otras órde- mientos de ésta y las colaterales, además de otros detalles
' • T26:
nes monásticas 126 como molduras, tipos de ventanas, etc.
T. Planificación y trazado general del monasterio, Las obras continúan, en una fase inmediata, hasta
marcando sobre el terreno la superficie a ocupar dejar cubiertos los brazos del transepto y completado el
por las distintas dependencias. cierre del primer tramo de las naves, pero sin abovedar —en
2. Primer impulso constructivo. De la iglesia se el caso de Palazuelos se produce también un nuevo cambio
levanta la zona oriental del templo (cabecera, tran- del perfil de las molduras—, sufriendo entonces una inte-
septo y primeros tramos del cuerpo de naves), rrupción de las tareas constructivas del templo, para dedi-
dependencias del pabellón de monjes y en ocasio- carse a las dependencias orientales. En La Espina, en
nes alguna sala de las otras pandas. cambio, las tareas quedarán paralizadas antes de lanzar
3. Segunda fase constructiva. Tras una paralización de siquiera los muros de cierre del cuerpo de naves y haber
los trabajos —a veces de unos pocos años, otras de cubierto el transepto.
incluso siglos—, las obras se reanudan para terminar Cuando las principales estancias de los monjes ya
el templo y edificar el claustro y resto de estancias están avanzadas, se reanudan los trabajos en la iglesia, y aun-
reglares, aunque en ocasiones, sólo se levantan con- que la progresión de las obras de La Espina varía respecto
forme a los planes originales las dependencias a las de Valbuena y Palazuelos, en todos ellos encontramos
orientales. características comunes, como la alteración de los above-
Por otro lado, Bango Torviso ha insistido en la lenti- damientos previstos en el plan inicial, la aparición de nue-
tud de la construcción de estos monasterios, motivada espe- vos tipos de vanos, cornisas, contrafuertes y líneas
cialmente por la crisis económica que los asola desde fechas decorativas desconocidas hasta entonces (capiteles, claves,
tempranas del siglo XIII, lo que provocó múltiples e impor- perfiles de molduras...), una mayor progresión por el cos-
tantes transformaciones tanto funcionales como estilísticas tado contiguo al claustro y, especialmente, la larga duración
y constructivas . 127 de las obras en la que, no obstante, se mantienen las gran-
El proceso constructivo de nuestros monasterios — des líneas arquitectónicas.
nos referiremos a partir de ahora, sólo a los masculinos, por En La Espina se cerrará el perímetro del cuerpo de
ser los que han conservado la fábrica medieval—, no difiere naves hasta el arranque de las ventanas de las naves latera-
en líneas generales del arriba expuesto, aunque lógicamente les, al tiempo que se van elevando los hastiales y costados
se pueden introducir ciertos matices según el caso. occidentales del transepto; a continuación se introducen los
Comenzaremos con la iglesia. Las obras, como suele pilares exentos y se cierra el templo por el oeste; las obras
ser habitual, se inician por la cabecera, en concreto por la avanzan lentamente por las naves, se realiza la portada occi-
zona donde van a ir luego adosadas las dependencias dental y comienza a elevarse la nave central y a abovedarse
monásticas —así sucede en Valbuena y Palazuelos—, erigién- las laterales; finalmente, se rematan los muros del transepto
dose al tiempo buena parte del transepto: costado oriental y nave central y se abovedan sus tramos; ampliaciones pos-
de ambos brazos, partes bajas de los hastiales y zona orien- teriores vendrán a modificar una capilla de la cabecera.
tal del primer tramo de las naves, como ocurre en Valbuena Valbuena y Palazuelos presentan un ritmo de ejecución
y Palazuelos; sin embargo, tanto en uno como en otro pausado, en sentido Este-Oeste: incorporación de bóvedas
hemos visto que la ejecución de la cabecera no es homogé- de crucería en el primer tramo de las laterales, cubrición del
nea, sino que se producen en ellas cambios de proyecto crucero prácticamente a la vez que se alza el primer tramo de
sobre la marcha: en el primero la adopción de las dobles la nave central —en Valbuena, en cambio, el cimborrio es sen-
columnas y nuevos tipos de vanos e impostas, mientras que siblemente posterior al abovedamiento de ese primer tramo—,
en el segundo, en un proceso mucho más dilatado y com- y progresión hacia la fachada occidental, elevando los muros
126VALLE PÉREZ, T992 (2): 221; idem, T99T (3): T62-T63 nota 36; entre otros. Para el proceso constructivo de los monasterios premons-
idem, T992: 28; idem, T992 (2): 220. Vid además sobre estos aspectos, tratenses hispanos, LÓPEZ DE GUEREÑO, T997: I, T27-T33.
BIGET, PRADALIER y PRADALIER-SCHLUMBERGER, T986: 34T-342; T27 BANGOTORVISO, T985: 438; idem, T995: 72; idem, T998: 9T;
ROMANINI, T992: 4T8 y 420; ASCANI, T993: 8T9 y 832; ABAD CASTRO, idem, T998 (2): T60-T6T; idem, 2003: 226-227. Vid. también, espe-
T998: T92y ss; idem, T998 (4): 237; BANGOTORVISO, T998: 90; idem, cialmente para el caso de las fundaciones femeninas, CASAS CASTELLS,
T998 (2): T60-T6T; MARTÍNEZ BUÉNAGA, T998: T4T-T43, T44-T45, T994: T03-T04; idem, T994 (2): 693 y 706; idem, 2005: 59-60;
T54 y 40T-404; ARA GIL, 2002: 64; HERNANDO GARRIDO, 2003: T84; MUÑOZ PÁRRAGA, T998: TT6.
INTRODUCCIÓN hisTórICA 83
perimetrales de las laterales y la nave central con sus bóvedas. etapa. Sin embargo, las bóvedas del paso a la huerta y sala de
En el caso de Valbuena —en Palazuelos la pérdida de los últi- monjes de este monasterio, así como todas las de Valbuena
mos tramos impide decir más—, se observa una gradual pér- y la que hasta hace pocos años se conservaba en Matallana
dida de la calidad según se avanza hacia los pies tanto en la parecen fruto del mismo empuje constructivo que los muros.
labra de capiteles y otras molduras como en la propia ejecu- En una última fase, una vez abovedadas las estancias de la
ción, debido seguramente a un intento de acelerar el proceso planta baja, comienza la construcción del dormitorio de
de construcción, aspecto que ha sido detectado en algunos monjes, cuyas obras se dilatan a veces tanto (La Espina), que
otros monasterios, e incluso los tramos finales pudieron que- se pueden incluso encontrar diferencias estilísticas de unas
dar sin terminar hasta fechas avanzadas, algo que tampoco zonas a otras de la misma sala (Valbuena); a veces la propia
sería extraño en el conjunto de los monasterios cistercienses lentitud del proceso constructivo general provocó que no se
hispanos. llegará a construir en su lugar habitual (Palazuelos y tal vez
El proceso de Matallana es anómalo debido a la exis- Matallana).
tencia de un templo anterior que se conservó parcialmente Al tiempo que se está trabajando en las dependencias
mientras se estaban acometiendo las obras del nuevo. Así, orientales se inicia en Valbuena y quizás también en Mata-
se distinguen dos grandes etapas en su construcción: una llana la construcción del refectorio como un bloque inde-
primera que abarcaría toda la cabecera, brazo norte del pendiente, añadiéndose a ambos lados y en una etapa
transepto, costado septentrional, fachada occidental y pila- posterior la cocina y el calefactorio; en La Espina, en cam-
res exentos del Evangelio; y otra que abarcaría el costado bio, todo el lienzo de la panda correspondiente se alzó de
meridional del transepto y cuerpo de naves y pilares exen- una sola vez, pero con posterioridad a la del capítulo. Es
tos de la Epístola. N o obstante, en la primera fase se per- también el momento en que se está levantando el muro que
ciben, a su vez, otras dos campañas: cabecera —en la que se corresponde a la nave lateral del templo.
produce además un cambio sobre la marcha, como en Val-
buena y Palazuelos, en este caso en el planteamiento de las Finalmente, se acometerá la panda occidental del
bóvedas de las capillas laterales— y zona oriental del tran- claustro. En algunos casos, como en Valbuena, se resuelve
septo, y resto del transepto y naves. simplemente con un muro de cierre, sin monumentalizar la
cilla y dependencias de conversos, mientras que en el de La
Las obras de las dependencias claustrales comienzan Espina parece que no se llegaron a ubicar en este lugar las
inmediatamente después de haber construido la cabecera y, salas tradicionales.
al menos, las partes bajas del transepto.
Por lo que se refiere a las galerías, sólo han llegado a
Lo primero en levantarse será el pabellón de monjes, nosotros las de Valbuena, aunque el análisis de sus fases cons-
que en Valbuena se adosa limpiamente al hastial del tran- tructivas pueden ser extrapolables a las de otros monasterios.
septo, lo que indica que tanto la cabecera como esa zona del
templo se habían erigido exentas; en La Espina sucedió lo Cuando ya están levantadas las dependencias más
mismo, aunque allí los sillares superiores se engatillaron con necesarias para la vida monástica —el pabellón de monjes y
los que formaban los ángulos del transepto. En Palazuelos se han empezado las obras del refectorio—, se proyecta la
la solución es algo distinta: mientras el cierre oriental de la construcción de las pandas claustrales, decidiéndose en este
capilla de la sacristía se adosa al costado de la capilla del momento sus dimensiones y estructura general. Hasta
templo, el occidental se erige conjuntamente con el de la entonces este espacio estaría cerrado por un muro provisio-
nave de la Epístola. A pesar de ello, hay escasa diferencia nal. Las obras comienzan por la galería oriental, cuyas bóve-
cronológica entre la zona oriental de la iglesia y las depen- das ocultan parcialmente las arquivoltas de los vanos de
dencias de la planta baja de este conjunto. acceso al capítulo. En una segunda fase se aborda la elevación
de las galerías norte y sur, correspondiendo a la meridional
Pero, a su vez, en la construcción del pabellón se pue- cierta prioridad constructiva; también en este último flanco
den distinguir hasta tres fases. En una primera etapa se alzan la construcción de las bóvedas, posterior a la erección de las
los muros que delimitan las distintas salas y sus respectivas dependencias, provocó alteraciones en algunas de sus puer-
aperturas hacia lo que será el claustro y la huerta o depen- tas. En cuanto a la panda norte, sus bóvedas se voltearon al
dencias orientales. En algunos monasterios esta fase se des- tiempo que se levantaba el muro de la iglesia. Interrumpidas
arrolla en dos campañas sucesivas: en un primer momento se las obras cuando se estaba iniciando la panda occidental,
levantan la sacristía y sala capitular (Valbuena) o también la ésta no se remataría hasta mucho tiempo después.
escalera y locutorio (La Espina), completándose el resto de
habitaciones en un impulso posterior; esta interrupción en De los claustros de La Espina y Matallana sabemos
ninguno de los casos fue amplia. En La Espina aquellas pri- únicamente que se alzaron en épocas tardías.
meras dependencias quedaron cubiertas con un cierre pro- u n último aspecto que queremos destacar, y al que ya
visional de madera, procediendo a colocar los soportes en el hemos aludido en varias ocasiones, es la lentitud de las
interior de las dependencias y abovedarlas en una segunda obras en nuestros monasterios.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
84
Hacia los años 60 del siglo Xii se inició la construc- T. En una primera etapa que se inicia hacia TT50, los
ción de los templos de La Espina y Valbuena. Si este último edificios de los cistercienses se caracterizan por el
no se termina hasta por lo menos el tercer cuarto del Xiii, empleo de soluciones arquitectónicas y ornamen-
habrá que esperar a mediados de la siguiente centuria para tales muy novedosas, que nada tienen que ver con
encontrar finalizada, en lo esencial, la fábrica del primero. lo que se estaba haciendo en ese momento en el
Los trabajos de Palazuelos tampoco fueron rápidos: ini- entorno, ya que se trata de soluciones ultrapirenai-
ciada hacia finales del primer cuarto del Xiii, en torno a cas, bien borgoñonas o del sur de Francia.
T300 se estaba trabajando en la zona de los pies de las naves 2. En una segunda etapa, que arranca de los años 80
laterales, rematándose posiblemente las obras no mucho y 90 del siglo XII, se asiste a la progresiva intro-
tiempo después. Y de la iglesia de Matallana poco pode- ducción de soluciones propias de su entorno, tanto
mos decir: iniciada en T228, sabemos que a mediados del en planta como alzado. Lo local se irá imponiendo
Xiii se consagraba la capilla de San Juan, en su cabecera, pero poco a poco, fusionándose en principio con los ele-
poco más podemos decir. intervenciones tardías —amplia- mentos foráneos para acabar, especialmente en las
ciones y transformaciones— afectarán a aspectos puntuales de fundaciones tardías y / o incorporadas a la Orden
los templos de Valbuena y La Espina ya en el XV. a través de una casa del país, o aquellas de escasa
Respecto al claustro y dependencias reglares, en torno entidad, pero siempre supeditados a las normas de
a T200 se estaba trabajando en la planta baja de los pabello- sencillez y austeridad que caracterizan a sus cons-
nes de monjes de Valbuena y La Espina, pero al igual que veí- trucciones. De todos modos, aún en estas fechas se
amos en las iglesias, el ritmo de las obras no es el mismo en pueden encontrar edificios totalmente exóticos.
uno y otro: el dormitorio de La Espina, así como las pandas 3. Hacia finales del primer cuarto del Xiii, se incor-
del claustro, no se terminan hasta la primera mitad del XiV; poran soluciones plenamente góticas, originarias
en cambio, a mediados del Xiii debían estar rematadas todas del norte de Francia, y a mediados de esta centuria
las dependencias de Valbuena, aunque las pandas, iniciadas las construcciones de los cistercienses ya no se dife-
durante el primer cuarto del Xii, sufrirán algún retraso, rencian prácticamente en nada de las coetáneas, se
estando finalizadas a fines del Xiii o incluso a principios del ha llegado a "la pérdida de idiosincrasia, a la des-
XiV. De Matallana sólo sabemos que en T285 hay donacio- aparición de su mismidad, a la supeditación, en
nes para la terminación de la bodega, aunque probablemente, definitiva, a soluciones extrañas a la Orden", inte-
al igual que sucedió en Palazuelos y La Espina, no se llega- grándose en la evolución general de la arquitectura.
ron a concluir todas las dependencias conforme a la distri-
Y en esta evolución, es determinante la procedencia
bución y planificación habituales en la Orden.
de los maestros y talleres. Así, en la primera fase, tendría
lugar el envío desde la casa madre transpirenaica —ya sea de
Borgoña o de Gascuña y Languedoc—, de un monje o con-
verso experto en obras y formado en la arquitectura de su
3. INNOVACIÓN TRANSPIRENAICA región, que trazaría, dirigiría y revisaría los trabajos de cons-
Y / O TRADICIÓN LOCAL EN LOS trucción del nuevo monasterio, lo que supondría la aplica-
ción de principios estructurales y decorativos propios de
MONASTERIOS CISTERCIENSES aquellas zonas y ajenos a la tradición local. Poco a poco, la
VALLISOLETANOS participación de mano de obra del entorno del monasterio
Valle Pérez, a través de diversos trabajos* , ha anali-
28
posibilitaría la paulatina introducción de elementos locales,
zado la evolución de la actividad constructiva de la Orden hasta que en el caso de las fundaciones indirectas o aque-
en los reinos de Castilla y León, especialmente en lo que se llas realizadas tardíamente, cesa el flujo de maestros desde
refiere al origen y desarrollo de las fórmulas estructurales y el exterior, para nutrirse exclusivamente de talleres laicos* . 29
decorativas empleadas en sus monasterios, diferenciando N o obstante, señala, hay que tener en cuenta que no
tres grandes fases: fueron los cistercienses los únicos que introdujeron aquellos
T28 Por ejemplo, VALLE PÉREZ, T982: I, 36-37 y 43-45; idem, T99T HERNANDO GARRIDO, 2006: 97; FERNÁNDEZ LADREDA, 2007: 6T-65.
(3): T56-T58; idem, T99T (4): 772-778; idem, T99T (5): 65; idem, T992: T29 VALLE PÉREZ, T982: I, 43 y 45; idem, T99T (3): T50-T52 y T57;
23-26; idem, T994: passim; idem, T998: 38-4T; idem, T998 (3): T060- idem, T99T (5): 63-64; idem, T992: T0 y ss; idem, T994: 23-24 y 32;
T06T; idem, T998 (4): 22-29; o idem, 2008 (2): T44-T57. Le siguen, idem, T998: 39.
INTRODUCCIÓN hisTórICA 85
procedimientos novedosos en la Península, sino que al tiempo Entonces, ¿cómo hay que entender, por ejemplo, la
que se levantaban sus primeras casas, lo hacen otras grandes adopción de soluciones eminentemente borgoñonas en La
fábricas seculares que también incorporan esos mismos ele- Espina, en concreto en la cabecera del templo, la sala capi-
mentos, produciéndose en ocasiones contactos entre unas y tular o el alzado de las naves, todas ellas separadas entre sí
otras; y esta relación se explicaría tanto por compartir los cronológica y estilísticamente? Respecto a la cabecera, la
maestros un mismo origen y formación, como por la parti- adopción del "plan bernardin" es consecuencia de ser este
cipación en ambas empresas de los mismos artífices . 130
monasterio hijo directo de Clairvaux y fundada en vida de
Por nuestra parte creemos, en primer lugar, que la San Bernardo, siguiendo el esquema adoptado en Clair-
arquitectura de los cistercienses, dejando de lado la restric- vaux II, que sería aquí traído por Nivardo, encargado de ek-
ción de motivos ornamentales o de determinados elemen- gir el sitio y dar la traza de la nueva casa, comenzada además
tos estructurales en busca de una sencillez y austeridad fiel en fechas tempranas, en la década de los 60 del XII. En
al espíritu inicial de la orden, apreciable tanto en las reali- cuanto al capítulo, no creo que haya que acudir de nuevo
zaciones románicas como en las góticas , en nada se dife-
131 a la vía monje/converso arquitecto desplazado desde la
rencia de las construcciones coetáneas, sino que pertenece casa-madre, sino al empleo de carnets de modelos creados
al modo de hacer del período en el que se levantan y por por artistas de Borgoña, tal vez enviados desde allí , o 135
130 VALLE PÉREZ, 1991 (3): 158; idem, 1991 (4): 773; o idem, 1994: que en origen fue una solución originada por las dimensiones de la sala,
34. que no convenían ni a una compartimentación en seis tramos ni a una
131En este sentido son interesantes los trabajos de BRUZELIUS, 1979 de nueve (BIGET, PRADALIER y PRADALIER-SCHLUMBERGER, 1986: 342),
y 1997-1998, en donde insiste en que los cistercienses en la búsqueda fue copiada en tres de sus hijas, al igual que la ordenación de los vanos
de esa pureza arquitectónica, dieron origen a "variante monástica" den- de su fachada y el perfil de los nervios; el resto de elementos, como tipos
tro de los estilos románico y gótico. de capiteles, basas y otras molduras nada tienen que ver entre sí. Cree-
132BANGOTORVISO, 1982: 565-566; idem, 1985: 424-425; idem, mos que estas tres salas se erigieron en un momento inmediatamente
1989: 189-192. posterior a la conclusión del capitulo francés, cuyo abovedamiento se
133BIGET, PRADALIER y PRADALIER-SCHULMBERGER, 1986: 332-333. fecha ca.1200-1225: cuando las abadías peninsulares iban a iniciar la
Bango Torviso ha demostrado al analizar las cabeceras con girolas
1 3 4 construcción de esta dependencia, la de su casa madre se estaba termi-
de Moreruela, Poblet, Fitero, Veruela y Gradefes, que todos ellos se han nando o hacía poco que se había concluido, y fue precisamente debido
podido inspirar en un modelo común foráneo, pero su materialización a esa cercanía en el tiempo por lo que se calcó en aquéllas este original
monumental es muy diferente de un caso a otro, cada uno de ellos obra diseño, pero sólo en lo que a sus líneas arquitectónicas se refiere —aun-
de maestros de formación y experiencia dispar (BANGOTORVISO, 1988: que también se copió algún detalle ornamental—; los planes eran en los
88-97; idem, 2000: 87-96. Vid. también MUÑOZ PÁRRAGA, 1998: tres los mismos, pero no los artistas que los materializaron. Las otras
112). tres hijas hispanas de L'Escaladieu —Fitero, Bujedo y Monsalud—, siguen
135Éste fue seguramente el medio por el que se difundió desde L'Es- esquemas de salas capitulares dispares: en el primero de los casos se había
caladieu a alguna de sus filiales hispanas —Sacramenia, La Oliva y realizado antes que la de su casa madre, mientras que las de Monsalud
Veruela—, la curiosa compartimentación interna de su sala capitular. Lo y Bujedo ya son más tardías, de mediados del XIII.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
86
construcciones erigidas en su entorno inmediato . Pero si I36 en esta ocasión, bien ligadas entre sí: una que, si bien pro-
en La Espina debíamos acudir a fuentes transpirenaicas en cedente de Burgos -cabecera-, tiene su origen en realiza-
busca del origen de su exotismo, en esta ocasión no creemos ciones francas, y otra que remite a modelos bien asentados
necesario dirigirnos a la zona originaria de los monjes que en el entorno -soportes del transepto y naves-.
poblaron la abadía -Gascuña-, donde, por otra parte, no Respecto a los edificios de los cenobios femeninos, a
hallamos edificios que puedan haberle servido de inspira- jugar por los datos que tenemos, serían resultado la tradi-
ción , sino que los elementos estructurales y decorativos
I37
ción constructiva local.
aquí empleados los encontramos en otras zonas peninsula-
res -Navarra y La Rioja- desde mediados de siglo . Res- I38
Únicamente nos quedaría por determinar la posible
pecto a la las pandas del claustro , todos sus elementos
I39
influencia de estos monasterios en la arquitectura del terri-
remiten a ejemplos bien conocidos en otros monumentos torio en el que se levantan. Lo cierto es que es una tarea
de la diócesis de Palencia, desde finales del XII y primera harto compleja por varios motivos. En primer lugar, por la
mitad del siglo XIII, a los que se unirán, ya mediada la cen- ausencia de fábricas monumentales comparables a las de
turia, recetas ornamentales plenamente góticas provenientes nuestros edificios: si exceptuamos otros conjuntos monás-
del entorno burgalés; la última fase del claustro (siglo XIV), ticos como el premonstratense de Retuerta, la colegiata de
será obra menor, realizada por canteros del entorno rural Santa María la Mayor de Valladolid o unas pocas realiza-
cercano. ciones del sur de Palencia, el resto de construcciones que se
levantan durante el último cuarto del XII y buena parte del
El templo de Palazuelos, comenzado bien entrado el XIII en esta zona de la diócesis palentina son de escasa enti-
primer cuarto del siglo XIII, es resultado de la yuxtaposi- dad y en la mayoría de los casos muy modificadas en el
ción de dos modos de hacer radicalmente opuestos: uno de transcurso de intervenciones modernas* . En segundo 40
tradición románica local que afecta al plan general de la lugar, porque en un elevado número de estos templos rura-
iglesia y otro gótico que introduce fórmulas de origen bur- les se aprecian ciertos aspectos que se han venido califi-
galés pero no directamente sino a través de otros monu- cando como de influencia cisterciense, como pueden ser la
mentos más cercanos, entre los que se incluye Valbuena, su sobriedad decorativa en el empleo de capiteles de hojas lisas
casa madre. o incluso crochets, los canecillos de nacela o de proa, el
En Matallana, iniciado en I228, nos encontramos apuntamiento de las portadas, unas bóvedas de cañón apun-
ante un edificio plenamente gótico, producto, como Pala- tado o de crucería, incluso unas simples basas áticas o una
zuelos, de dos tradiciones constructivas diferentes aunque, sencilla espadaña , cuando en realidad estos elementos no
I4I
son exclusivos de la arquitectura de la Orden. Y por último, (estructura de los pilares, tipos de capiteles, bóvedas y cla-
la participación tanto en las obras monásticas como en las ves) o Palazuelos en Dueñas (cabecera). La desaparición de
seculares de los mismos talleres laicos. Matallana impide decir nada sobre este particular. En
Sin embargo, creemos que algunos de nuestros ceno- cuanto a La Espina, no hemos detectado conexión alguna
bios sí causaron impacto directo sobre otros monumentos, con edificios del entorno cercano, aunque sí con algunos
como por ejemplo, Valbuena en Villamuriel de Cerrato cenobios cistercienses del antiguo reino de León.
Tercera parte
Monografías
Fundaciones masculinas
• 93 •
quema del patrimonio documental únicamente se salvaron mana de Alfonso VII, viajó de peregrinación a Tierra Santa,
el Tumbo, comenzado entre 1607 y 1624 por fray Her- en donde permaneció de cinco a siete años, ayudando a los
nando de Aedo y continuado posteriormente hasta la des- necesitados de Jerusalén y siendo testigo de varios mila-
amortización por diversos monjes , y unos pocos libros de
1
gros . A continuación, sigue la narración, se desplazó a
6
apartados históricos que, aunque no suplen la falta de los Posteriormente se dirigió a Francia para visitar a Bernardo
documentos originales, informan acerca de los mismos y de Clairvaux, a quien comunica su deseo de fundar un
de los avatares por los que ha discurrido la historia del monasterio cisterciense en alguna de sus posesiones. El
monasterio desde su fundación . 4
santo abad envió a su hermano menor Nivardo para que
1 El Libro TUMBO o Memoria de lafundación y dotación deste insigne y devoto 4Tumbo, fols. 47r-n.62 a 97v-n.189, 400r-n.721 a 428v-n.777. Para
monasterio de Nuestra Señora Sancta María de la Espina (a partir de ahora cita- una relación de su contenido vid. RODRÍGUEZ DE DIEGO, 1982: 27-28.
remos Tumbo), se conserva en el propio monasterio, hoy Escuela de Capa- 5 La noticia m á s antigua proviene de la Carta de fray Antonio de Vega a
citación y Experiencias Agrarias, del cual RODRÍGUEZ DE DIEGO, 1982, Ambrosio de Morales sobre lafundación del monasterio de la Espina, escrita en 5 de
ha realizado un estudio completo. Existe una xerocopia en el Archivo octubre de 1 5 6 8 en el p r o p i o m o n a s t e r i o (Papeles varios. Copia de un códice
Histórico Provincial de Valladolid (en adelante, A.H.P.V), con doble de El Escorial quefue de Ambrosio de Morales, Biblioteca Nacional (citada como
foliación: la original y una moderna realizada cuando se hizo la copia ya B.N.), Mss. 5938, fols.301-306, en concreto, fols.302r-303r. A partir
que algunos folios estaban sin numerar y otros la tenían repetida. Nos- de ahora la llamaremos Carta defray Antonio de Vega - v i d . A p é n d i c e docu-
otros citaremos las dos: el número original del folio —recto o vuelto- mental, doc. 3-).
seguido de la nueva numeración precedida por una "n."; en caso de que 6Tumbo, fols. 47r.-n.62; 69r-n.115.
la primera no existiera, se citará sólo la moderna. Otras reliquias fueron los trozos de las cruces de San Pedro y San
7
2 Tumbo, fol. 4 2 3 r - n . 7 6 6 . Andrés, huesos de los santos Andrés, Lucas, Pablo, Santiago el Menor,
3 RODRÍGUEZ DE DIEGO, 1 9 8 2 : 2 3 - 2 6 ; LÓPEZ GARCÍA, 1 9 9 0 : 17- Simón y Blas, mas un trozo del pellejo de San Bartolomé (Tumbo, fol. 47-
18 nota 2 y 115 y ss. núms. 62-63).
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
94
acompañase a la Infanta y eligiese y organizase el nuevo relativas a la peregrinación de Sancha por Jerusalén, Roma
asentamiento. Antes de volver a la Península Sancha visitó y París, haciéndose desde entonces eco de ellas numerosos
a los reyes de Francia, Luis VII y Constanza, sobrina de la historiadores . Autores como Manrique o Risco , y tras
11 12 13
infanta, quienes le entregaron una espina de la corona de ellos otros muchos , especialmente García Calles , nega-
14 15
Cristo que estos guardaban en Saint Denis. A su vuelta fun- ron sin embargo la veracidad de esos viajes.
daría el monasterio de La Espina. Otro polémico aspecto relativo a los primeros años
Doña Sancha (1095?-1158), primogénita de Rai- del monasterio recogido en la leyenda es la presencia de
mundo de Borgoña y doña urraca, participó activamente en Nivardo, hermano de San Bernardo. Son muchos los auto-
la vida pública tras la coronación como emperador de su res que sostienen que el hermano del abad de Clairvaux
hermano Alfonso VII . Restauradora y fundadora de un
8 vino a la Península con la Infanta para preparar la fundación
elevado número de monasterios , los cronistas de la época
9 del nuevo cenobio; algunos creen que tras finalizar las obras
no tardaron en rodear su figura de un halo casi de santi- de acondicionamiento volvió a Francia y en cambio otros
dad, proclamando la consagración de su virginidad a Dios que se quedo en La Espina como primer abad . Los argu- 16
8 Sobre Doña Sancha, vid. el estudio monográfico de GARCÍA 18; HERRERO MARCOS, 1997: 107. Por otro lado, YÁÑEZNEIRA, 1972:
CALLES, 1972, pudiéndose ampliar lo que se refiere a su señorío y el 74, ÁLVAREZ PALENZUELA y RECUERO ASTRAY, 1984: 433, PUENTE,
infantazgo, en VIÑAYO GONZÁLEZ, 1990: 43-45; REGLERO, 1993: 43- 2002: 7; o SAN JOSÉ NEGRO, 2002: 33-35, aunque niegan los viajes a
46; o HENRIET y LEGRAS, 2000: 197-201. Roma y Jerusalén, sí aceptan la posibilidad de la entrevista con San Ber-
9 GARCÍA CALLES, 1972: 69-102. nardo en el sur de Francia en 1145.
10 Vid. por ejemplo lo que escribe Lucas de Tuy en su Crónica de España: 1 5 Ésta apunta el silencio de Lucas de Tuy al respecto (además éste
"Esta muy sabia reyna Sancha en quanto bivio quedó virgen y llamose comenta en sus Milagros de San Isidoro cómo el Lignum Crucis fue un regalo
esposa del muy sancto confessor Ysidro, afermosando con muchas noble- de los templarios y hospitalarios a Doña Sancha —MARTÍNEZ RODRÍ-
zas las yglesias de Christo y hedificando monesterios y criando los pobres GUEZ, 1992: 63), el hecho de que todos los cronistas de los siglos XVI y
de Christo" (PUYÓL, 1926: 391-392) o lo que de ella y Berenguela su XVII expongan siempre los mismos datos, como si procediesen de una
cuñada comenta la Crónica del emperador Alfonso VII: "... eran muy temerosas fuente única, el que la Infanta aparezca constantemente otorgando o con-
de Dios, promotoras de la construcción de iglesias de Dios y de monas- firmando documentos o el que la Corona de Espinas no llegase a poder
terios de monjes, guías de los huérfanos y de los pobres y amantes de de los Reyes de Francia hasta el reinado de Luis IX, prueban la inexis-
todos los temerosos de Dios" (PÉREZ GONZÁLEZ, 1997: Lib.I.12, 68). tencia de los viajes a Tierra Santa y Roma, si bien plantea la posibilidad
11 A la Carta de fray Antonio de Vega, fols.301v-302v, hay que sumar: de que sí se llevase a cabo la entrevista con San Bernardo en 1145 (GAR-
Tumbo, fol.47-n.62 y 63 (sin embargo, el Padre Águila, posteriormente, CÍA CALLES, 1972: 58-61).
copiaría una nota de Francisco de Vibar en la que afirma que esas pere- 16 Carta defray Antonio de Vega, fol.302v; Tumbo, fols.47v-n.63, 50v-n.69
grinaciones nunca tuvieron lugar, n.752); MORALES, 1765: 187 y 188; y 410v-417v; GUTIÉRREZ, 1587: lám.54 y comentario adjunto (en la
SANDOVAL, 1600: 119-120; idem, 1615: 184; YEPES, 1609-1621: III, lámina se representa el encuentro de Doña Sancha con San Bernardo, al
345-346; GONZÁLEZ DÁVILA: 1647: III, 134; ARGAIZ, 1675: I, 348v- que ofrece en donación tres monasterios, y en presencia de Nivardo; vid.
349r; FLÓREZ, 1761: 269; QUADRADO, 1885: 268; ORTEGA RUBIO, también DALPRA, 1991: 148); MORALES, 1765: 186 (dice simplemente
1895: 137: FERNÁNDEZ DE BETHENCOURT, 1897: I, 545; PÉREZ DE que vino un monje hermano de San Bernardo); SANDOVAL, 1600: 120;
URBEL, 1934: II, 496-497; DEFOURNEAUX, 1949: 51; TIJBURG, 1953: YEPES, 1609-1621: 346-347; HENRIQUEZ, 1630: 46; JONGELIN, 1640:
177; TORRES BALBÁS, 1954: 49- 50; YÁÑEZ NEIRA, 1959: 83; ROLDÁN libro VI, 5; MANRIQUE, 1642-1659: II, 87; GONZÁLEZ DÁVILA, 1647:
YGUERRERO, 1961,161; RUIZ, 1963: 969-970; ÁLVAREZ PALENZUELA, III, 134; ARGAIZ, 1675: I, 349r; MABILLON, 1745, VI, 420; FLÓREZ,
1978: 92; MARTÍNEZ TOMÉ, 1991: 45; entre otros. 1761: 269; QUADRADO, 1885: 268-272; GUILLÉN ROBLES, 1887: 12 y
12 "De Sanctia Infante Galiam, & Italiam, Germanianque, quin loca 15; ORTEGA RUBIO, 1895: 137-138; FERNÁNDEZ DE BETHENCOURT,
Sancta devote perlustrasse, traditione, quam scripto magis accepimus" 1897: I, 545-547; GUTIÉRREZ CUÑADO, 1913: 31, 32 y 36-37; LAM-
(MANRIQUE, 1642-49: II, 86) PÉREZ Y ROMEA, 1930: III, 402; PÉREZ DE URBEL, 1934: II, 497; MAR-
13 "Con el motivo de esta fundación se han inventado de Doña San- TÍN, 1953 (2): 284; TORRES BALBÁS, 1954: 49-50; YÁÑEZ NEIRA, 1959:
cha varias fábulas adoptadas aún por escritores de mucho juicio (...) La 83; idem, 1988: 11, nota n.12; YÁÑEZ NEIRA, 1951: 280 nota 20; idem,
qual noticia es contra la fe que se debe a las escrituras de aquel tiempo, 1972: 80; idem, 1973: 1562; DIMIER, 1954 (2): 195; GARCÍA CHICO,
en que se halla sin interrupción la memoria de Doña Sancha residente 1959: 29; CASTILLA, 1960: 4; GÓMEZ GONZÁLEZ, 1956: 32; ROLDÁN
en España no descubriéndose por otra parte testimonio legítimo en Y GUERRERO, 1961:161; TIJBURG, 1953: 177; idem, 1964: 85; BRON-
prueba de haber estado ausente de estas regiones por tantos días como SEVAL, 1970: 274; ÁLVAREZ PALENZUELA, 1978: 49-50 y 93-94; PÓR-
era menester para aquellas jornadas (...) Así que toda la relación que los TELA SILVA, 1981: 53-54; Monumentos españoles, 1984-1987: III, 402; ARA
citados Escritores, y otros hacen de las peregrinaciones de la Infanta, y GIL, 1986: 7; PÉREZ EMBID, 1986: 276; VIÑAYO GONZÁLEZ, 1990: 46;
de las Reliquias que la regalaron en las ciudades por donde pasó, deben BRONSEVAL, 1991: 170-171; PUENTE, 2002: 5 y 7; SAN JOSÉ NEGRO,
contarse entre las fábulas de que abundan las historias" (RISCO, 1786: 2002: 36 y 37; VILLEGAS DÍAZ, 2008: 89 nota 11. Por otra parte, ÁLVA-
221-226). REZ PALENZUELA y RECUERO, 1984: 434 nota 9, señalan que en el perí-
14 GUILLÉN ROBLES, 1887: 10-12; GUTIÉRREZ CUÑADO, 1913:193- odo comprendido entre 1144, cuando era superior de Buzax, y 1147,
196; ANTÓN, 1923 (3): 54 y 55; idem, 1942: 118; idem, 1951: 312; cuando se funda Soleuvre, "pudo intervenir de alguna manera en la pre-
VIELVA, 1976: 650; JIMÉNEZ LOZANO, 1980: 31; LÓPEZ GARCÍA, 1990: paración de la fundación del monasterio de La Espina".
FUNDACIONES MASCULINAS • 95 •
• El Tumbo describe un repostero que estaba colgado A éstos habría que añadir que la mención a La Espina
en la hospedería del cenobio en el que aparecía en la susodicha carta 301 aparece al final de la misma,
rodeando las armas de los reyes de castilla y del semejando simplemente una llamada aparte, un recordato-
m o n a s t e r i o la siguiente leyenda: Petit Aedificat: Dittat: rio para que la infanta cuide del monasterio por ella fun-
Protegit: Aperit: Santia: Bernardus per Nibardum: Alfonsus: dado, sin relación aparente con el asunto de Toldanos o el
Spinea corona: Petrus. L a m i s m a f u e n t e señala q u e Jun- "fratrer Nivardus".
tando cada nombre con su verbo por su orden quiere dezir San-
Por otro lado, ya Quintana Prieto había demostrado
tia petit: Bernardum per Nibardum aedificat: Alfonsus ditat:
hace años que esas cartas fueron en realidad escritas en los
Spinea corona protegit: Petrus aperit , y Y á ñ e z N e i r a la
primeros meses de 1153, puesto que la rebeldía de Tolda-
17
• Dos cartas de San Bernardo a Doña Sancha (núms. Sea como fuere, lo que parece cierto es que un monje
301 y 455) , tradicionalmente datadas en torno a
19 llamado Nivardo fue uno de los integrantes del grupo de
II4920, que aluden al problema de la afiliación de monjes que desde Clairvaux vinieron a poblar el nuevo cen-
Toldanos, monasterio dependiente de Carracedo, a tro monástico y que, como veremos más adelante, ha sido
la Orden, y menciona a un "frater Nivardus" y "fra- señalado como director de las obras, arquitecto o tracista de
tris nostri Nivardi", respectivamente, que sería quien la abadía.
le habló de la infanta como persona idónea para Pero, ¿por qué se creó esta leyenda? Probablemente el
resolver la controversia. En la primera carta, ade- deseo de autentificar las reliquias que poseía y el prestigio
más, el santo pide a Sancha que vele por La Espina, que aportaría el hecho de que el propio hermano de San
su reciente fundación . 21
Bernardo estuviese involucrado en su fundación hizo que el
Otros autores, en cambio, lo ponen en duda o niegan monasterio idease esta fabulosa historia en el siglo XVI . 24
esta posibilidad basándose en dos puntos: Lo único seguro es que el 20 de enero de 1147 Doña
• El que se le llame "frater", no quiere decir que sea S a n c h a d o n a b a a domno Bernardo, Claravalis Abbati las h e r e d a -
hermano de sangre de Bernardo ya que los monjes se des de San Pedro de Espina y Santa María de Aborridos
llamaban entre sí "hermanos". para que construyese un monasterio . , 25
• Nivardo, hermano de San Bernardo, funda el 2 4 Según la Cronología Cisterciense La Espina fue fundada
junio de 1147 —año que como veremos más ade- en 1143 . Tanto el Tumbo del monasterio como Yepes, que
26
lante corresponde al de fundación de La Espina—, la señalan haber consultado un "Libro de Cistel" el primero
abadía de Vaux-de-Souleuvre —más tarde Val-Richer- y "la memoria cisterciense" el segundo, se extrañan de la
en Normandía, lo que imposibilitaría la participa- diferencia de años entre la fecha que podríamos llamar "ofi-
ción en ambas casas . 22 cial" y la data del instrumento de doña Sancha. u n o y otro
rencia llegan a la siguiente conclusión: la infanta se debió cronista de la Orden al transcribir la data del documento y
entrevistar con Bernardo en 1143, siendo anotada dicha en lugar de escribir "era M C L X X X V " que correspondería
fecha en las tablas cistercienses; entre ese año y 1 1 4 7 se al año 1147, consignó "era M C L X X X I V " , originando el
irían realizando los preparativos necesarios y cuando todo adelanto de un año en la fundación de la abadía, error que
estuvo a punto se hizo la entrega de las heredades a clair- sería copiado por autores posteriores . 31
darse cuenta del error añade: "Ex quibos tantum Spina dif- A este lugar acudirían doce monjes con un abad a la
ferenda qui constat incepisse post quadriennium" . Y más 29
cabeza, ya que se trata de una fundación ex-novo , es decir, 38
adelante inserta la carta de donación de Doña Sancha, des- la instalación de una comunidad en un lugar en el que no
2 7YEPES, 1609-1621: III, 347; Tumbo fol. 48v-n.65 (según fray Her- trad. española en HERRERA, 1984-95: VI, 71). También se aludía en los
nando de Aedo, fray Bernardino de Villalpando, hijo de Nogales, estuvo en Capitula transmitidos por el mss 1 7 1 1 de Trento a que se debían enviar a
Cíteaux y del libro de Cistel extrajo esa data: Anno Domini 1143. kallendis octob). una nueva fundación al menos doce monjes con un nuevo abad ("Non
28 ÁLVAREZ PALENZUELA, 1978: 92-96; ARA GIL, 1986: 5-6 y 7; idem, mittendum esse abbatem novum in locum novellum sine monachis ad
1998: 227; idem, 2002: 61; PÉREZ EMBID, 1986: 271. Por su parte, minus XII" -WADDELL, 1999: 187 y 408; trad. castellana en HERRERA,
REGLERO, 1993: 41 y 161, señala que la fundación tuvo lugar entre 1143 1984-95: VI, 157-), y lo mismo en los Instituta ("Quomodo novella eccle-
y 1149; y en 1994: 122 dice que la donación data de 1147, y en 115 que sia abbate et monachis et ceretis necessariis ordinentur. Duodecim mona-
se instaló el monasterio en 1149. FERNÁNDEZ GARCÍA, 2009: 28, comenta chi cum abbate terciodecimo ad cenobia nova transmittantur"
que fue en 1149 cuando llegaron los primeros monjes. -WADDELL, 1999: 330 y 461). Respecto a la cronología de estos textos,
29 MANRIQUE, 1642-1659: I, 453. y centrándonos en los Capitula, los estudios de LEFEVRE (1954 y 1954
30 Ibidem, II, 86-89. (2)) habían concluido que los transmitidos por Trento datarían de hacia
31 FLÓREZ, 1761: 270; VACANDARD, 1895: II, 407 y 556; FERNÁNDEZ 1119, habiendo sido presentados junto con la versión primitiva de la
DE BETHENCOURT, 1897: 595; PÉREZ DE URBEL, 1934: II, 496; TIJBURG, Carta de Caridad y el Exordium Cistercii a Calixto II, mientras que los Ins-
1953: 177; GÓMEZ GONZÁLEZ, 1956: 32; ROLDÁN Y GUERRERO, 1961: tituta, que podemos ver en el mss 31 de Laibach, compilación realizada por
161; GARCÍA CALLES, 1972: 41; BRONSEVAL, 1991: 169 nota 317; o el capítulo General de 1151 —frente a la tesis tradicional que los situaba
HERRÁEZy COSMÉN, 1992: 67. en 1134—, fueron aprobados por Eugenio III al año siguiente. Posterior-
32 Carta defray Antonio de Vega, fol.301v. mente, trabajos como los de VAN DAMME (en especial 1983), AUBERGER
33 FERRERAS, 1759: 290. (1986 y 1992), HOLDSWORTH (1986) o WADDEL (1978 y sobre todo
3 4FINESTRES Y DE MONTALVO, 1753-1765: I, 29, y el Tumbo de 1999) precisaban las cronologías tanto de los textos en sí como de los
Herrera (cit. por GONZÁLEZ, 1960: I, 512). manuscritos en los que estaban reunidos, fechando la compilación de
35 SIMÓN Y NIETO, 1895: 156. Trento entre 1130 y 1140 y la de Laibach hacia 1147-52, si bien los
36 SANDOVAL, 1600: 119 y GONZÁLEZ DÁVILA, 1647: III, 134. Capitula incluidos en el primer manuscrito y su correspondiente en la pri-
3 7Así lo han estimado MORALES, 1765: 186; JANAUSCHEK, 1877: 108; mera serie de los del segundo, entre los que se sitúan los arriba transcri-
QUADRADO, 1885: 268; FERNÁNDEZ Y GONZÁLEZ, 1894: 6; GUILLÉN tos, habrían sido compuestos durante el abadiato de Esteban Harding - y
ROBLES, 1887: 9; ORTEGA RUBIO, 1895: 137; GUTIÉRREZ CUÑADO, según algunos presentados para la aprobación papal de 1 1 1 9 - ; el resto se
1913: 32; ANTÓN, 1923 (3): 54; ídem, 1942: 117; ídem, 1953: 299 y iría dictando progresivamente bajo los abadiatos de Guy (1133-1134) y
312; COTTINEAU, 1935-9, I, 1070; TORRES BALBÁS, 1952: 104; LAM- Raynard de Bar (1134-1150), siendo compilados todos ellos bajo la
PÉREZY ROMEA, 1930: III, 402; ANTÓN, 1953: 312; EYDOUX, 1954: forma de los Instituta antes de 1152, momento en que se incorporan nue-
174; TORRES BALBÁS, 1952: 104; idem, 1954: 49; DIMIER, 1954: 597; vos estatutos al tiempo que otros viejos eran eliminados o reformados. sin
idem, 1969: 250; YÁÑEZ NEIRA, 1951: 280 nota 20; idem, 1959: 83; embargo recientemente todas estas cronologías han sido desestimadas por
idem, 1972: 81; idem, 1973: 1562; GARCÍA CHICO, 1959: 29; CASTILLA, BERMAN, quien además de negar la autenticidad de la bula Ad hoc in Apos-
1960: 4; GONZÁLEZ, 1960: I, 148 nota 45 y 673; COCHERIL, 1963: 949; toliza otorgada por Calixto II en la que aprueba y confirma la constitución
RUIZ, 1963: 970; TIJBURG, 1964: 83 y 84; COCHERIL, 1964: 234; idem, cisterciense y considerarla como una falsificación realizada en torno a
1974: 42; MARTÍN GONZÁLEZ, 1968: 82; MARTÍNEZ, 1978: 245; JIMÉ- 1170 (2000: 59, 68 y 87-89), opina que los primeros Capitula conserva-
NEZ LOZANO, 1980: 31; RODRÍGUEZ DE DIEGO, 1982: 69; Monumentos dos son los correspondientes a los años 1157-61 insertos en el mss. H
españoles, 1984-1987: III, 212; MASOLIVER, 1987: 521; LÓPEZ GARCÍA: 322 de la Biblioteca de Medicina de Montpellier, desechando los de 1152
1990: 18; VIÑAYO GONZÁLEZ, 1990: 46; VIELVA, 1976: 650; BANGO que aparecen en el mss. 1 1 4 de la Biblioteca Municipal de Dijon, y que
TORVISO, 1988: 62; YARZA, 1994: 328 y 338; VALLEJO, 1995: 52; los incorporados en los manuscritos de Paris, Trento o Laibach deben ser
HERRERO MARCOS, 1997: 106; CASTÁN LANASPA, 1998: 347; MARTÍNEZ fechados entre los años 60 y 70 de la decimosegunda centuria, momento
TEJERA, 2002: 143; PUENTE, 2002: contracubierta y 8; SAN JOSÉ NEGRO, en el que se preparaba según esta autora la creación y aprobación por Ale-
2002: 37; ALONSO ÁLVAREZ, 2007: 657 (aunque en 683 afirma que se jandro III de la constitución cisterciense —la primera confirmación papal
fundó entre 1143 y 1147); FORTÚN, 2007: 34-35. de esos documentos—, negando además la datación independiente de los
38 Siguiendo a San Benito, el Exordium Parvum anota lo siguiente: "Et distintos textos que componen esas recopilaciones legislativas (Ibid: 50 y
sicut ille monasteria constructa per duodennos monachos, adiuncto patre, ss). Esta postura ha sido criticada por MCGUIRE, 2000: 290-291 y más
disponebat, sic se acturos confirmabant" (WADDELL, 1999: 2 5 4 y 435; duramente en un largo artículo por WADDELL, 2000 (2).
FUNDACIONES MASCULINAS • 97 •
queda comprobado por las palabras de Alfonso VII en su ya aludía el padre Águila, monje de La Espina, para recha-
privilegio de 6 de abril de 1149 por el que confirma a los zar las supuestas peregrinaciones de Doña Sancha, así como
m o n j e s in Sancto Petro de Spina morantibus las h e r e d a d e s d o n a - la procedencia de las reliquias, porque en el Archivo de San Mar-
das por Doña Sancha , a las que denomina villae desertae .
40 41
tín de Castañeda, mas de doscientos años antes que doña Sancha naciese
N o obstante, dejando al margen las noticias relativas hay ilustre noticia de ellas porque en unafórmula de juramento conque le
a hallazgos de época romana o al supuesto palacio de
42 tomaban juramento a los testigos en las informaciones, por los años del
recreo de Doña Sancha , el Tumbo y los estudios posterio-
43 Señor de ochocientos y el de novecientos, despues de jurar por el cielo y la
res sí informan de la existencia de un monasterio benedic- tierra y otras cosass, decian que tambien juraban por el dedo de San Pedro
tino o de una iglesia previa. que está en San Pedro del Espino, que assi llamaban nuestros españoles
antiguos a la Spina y al templo donde ambas reliquias estaban
Fue ANTóN el primero en hablar de la existencia de
46
44
un monasterio benedictino dedicado a San Pedro, basán- Todo ello ha provocado que numerosos autores hayan
dose en un documento de 1088 del Becerro de Sahagún defendido la existencia de un monasterio previo que sería
(fol.24). Según este autor hacía alusión a un monasterio abandonado, eso sí, tiempo antes del establecimiento de los
que identifica con el actual de La Espina "porque el docu- cistercienses . Otros investigadores en cambio, como Mar-
47
m e n t o n o m b r a al lugar: monte Cauriense iuxta Autero de Fumos", tínez , Pérez Embid o Rodríguez de Diego , dudan de
48 49 50
y porque en la confirmación de Alfonso VII de 1149 se su existencia. Este último se basa en dos puntos. En primer
nombra a San Pedro de la Espina como ville deserte. lugar comenta la ausencia de referencias a ese pasado
Por otro lado, en el Tumbo de San Martín de casta- monástico en el Tumbo o en los cronistas benedictinos y cis-
ñeda se conserva la noticia sobre un monasterio en la villa de tercienses como Yepes o Manrique. En segundo lugar, aclara
Espino: allí se celebra en el 927 un juicio sobre la posesión que en el folio del Becerro de Sahagún señalado por Antón
de ciertas pesquerías del lago Sanabria entre San Martín de no aparece ningún monasterio. En efecto, el documento en
castañeda y Galende, y uno de los juramentos de los testi- cuestión es simplemente una carta de arras en la que se cam-
gos es este q u e sigue: iuramus per reliquiarum Sancti Petri qui est bia una heredad localizada "subtus monte Cauriens, discu-
fundato in territorio Sampire in villa que vocitant Spino ubi has condi- rrente rio Sicco, iuxta Autero de Fumos" . 51
3 9Sobre las distintas modalidades de integración de los monasterios muchos autores han aludido a la existencia de estos palacios (YEPES,
en la Orden, fundación en sentido estricto y afiliación, vid. por ejemplo, 1609-1621: III, 344; ARGAIZ, 1675, I, fol. 349r; FINESTRES Y DE MON-
VALLE PÉREZ, 1982: I, 16. TALVO, 1753, I., Diss.III, 29; ORTEGA RUBIO, 1895: 138; GUILLÉN
40 Tumbo, fol.51-n.70 y 71. Lo transcriben MANRIQUE, 1642-1659: ROBLES, 1887: 13 y 35; GUTIÉRREZ CUÑADO, 1913: 31; YÁÑEZ NEIRA,
II, 87-88; GUILLÉN ROBLES, 1887: 13-14 nota 1; y RODRÍGUEZ DE 1972: 31, quien añade (71-72; y en 1959: 83 y 1973: 1562) que una
DIEGO, 1982: 187-188. MORALES, 1765: 186, erróneamente fecha este vez abandonado el monasterio que él estima hubo anteriormente (más
doc. en 1148 (Vid. Apéndice, doc. 2) adelante hablamos de ello), fue convertido en casa de retiro por los reyes
41 Aspecto señalado por RODRÍGUEZ DE DIEGO, 1982: 51. y Sancha tenía aquí su "casa solariega"; o SAN JOSÉ NEGRO, 2002: 36.
42 Fue YEPES, 1609-1621: III, 344, el primero que habló sobre un 4 4 ANTÓN, 1923 (3): 53, 54 y 56-57; idem, 1942: 115; idem, 1953:
posible establecimiento romano en la zona: "...ya en siglos de atrás fue- 312.
ron de romanos, de que es indicio el haber hallado monedas antiguas 45 Pub. por RODRÍGUEZ GONZÁLEZ, 1973: 27-28, en concreto 28; y
del tiempo de los emperadores Vespasiano y Nerva cuando se habrían los ANTA LORENZO, 1996: 49-59, en especial, 49; cit. por el Tumbo, fol.752
cimientos para acomodar diferentes oficinas del convento...". GUTIÉRREZ y RODRÍGUEZ DE DIEGO, 1982: 51 nota 29.
CUÑADO (1913: 31), GARCÍA CALLES (1972: 88) y RODRÍGUEZ DE 46 Tumbo, fols.415v-416r-n.752; GUTIÉRREZ CUÑADO, 1913: 195-
DIEGO (1982: 50) recogen la noticia, aunque este último señala que en 196; YÁÑEZ NEIRA, 1972: 77.
la Carta Arqueológica de Valladolid no se mencionan restos romanos 4 7 PÉREZ DE URBEL, 1934: II., 496; RUIZ, 1963: 969; TIJBURG, 1953:
por los alrededores del monasterio. 177; idem, 1964: 84; BRONSEVAL, 1970: 274 nota 91; YÁÑEZ NEIRA,
43 La primera mención a esta casa de esparcimiento de la Infanta la 1972: 70, 71 y 76; VIELVA, 1976, 650; ÁLVAREZ PALENZUELA, 1978:
encontramos en la Carta defray Antonio de Vega: Con todas estas reliquias vino en 93, nota 80; JIMÉNEZ LOZANO, 1980: 31; ÁLVAREZ PALENZUELA y
España gozosa y con gran veneration y reverentia las trajo a este su lugar y Palacio, que
RECUERO ASTRAY, 1984: 95 nota 91; CASTÁN LANASPA, 1986: 5; ARA
entonces se llamaba Sant Pedro del Espino, a donde de su casa y Palatio hizo Casa de GIL, 1986: 7 y 8; idem, 2002: 61; MARTÍNEZ TOMÉ, 1991: 45;
Dios y Palatio sagrado y repositorio de la Sancta Espina y de las más reliquias, edifi-VALLEJO, 1995: 52 (quien añade además un cambio de establecimiento
cando este monasterio (fol.303r). Por su parte MORALES señala cómo tenía en los primeros años); HERRERO MARCOS, 1997: 106; CASTÁN
en el monasterio un "aposento, que agora llaman su Casa" (1765: 189), LANASPA, 1998: 347; MARTÍNEZ TEJERA, 2002: 143; PUENTE, 2002:
y SANDOVAL nos habla de una "villeta" de doña Sancha denominada San contracubierta y 8; entre otros.
Pedro del Espino" (1600: 120). Pero las noticias más extensas sobre este 48 MARTÍNEZ, 1978: 245.
supuesto palacio nos lo proporciona el Tumbo (fol.47v-n.63 y más 49 PÉREZ EMBID, 1986: 276, nota 20. Este autor niega que el monaste-
ampliamente en fols.51v-n.71 a fol.52v-n.73), quien lo describe minu- rio citado por el Becerro de Sahagún se corresponda con el de la Espina.
ciosamente (Más adelante volveremos sobre ello tratando de averiguar su 5 0 1982: 51.
posible funcionalidad como dependencias monásticas) Posteriormente, 51 Pub. por HERRERO DE LA FUENTE, 1988 (2): 144-145.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
98
N o obstante, entre la colección diplomática del molino de casa se veen cimientos de una hermita que tiene —
monasterio leonés sí se recoge una donación de 22 de abril ,— passos de largo y —,—de ancho. Pudo ser que como era
de 1013 de los presbíteros Fructuoso, Servando y Abayub pequeña la poblacion fuesse esta la yglesia y la Infanta tuviesse
al monasterio de San Pedro y San Pablo en el "Monte Kau- capilla en palacio.
riense" y a su abad Servando y al prepósito Habzon, de [Al margen:]
todas las casas y heredades que tenían en Villa Zahid . Este 52
Yglesia antigua de San Pedro. Estava esta iglesia pegada a la Capi-
monasterio es sin embargo identificado por Reglero de la lla maior. Consta claramente porque en nuestros dias se an hallado
Fuente como el de San Pedro de Cubillas, actual iglesia de sepulcros en aquel rincon que ai entre dicha capilla maior y la
la Anunciada, a las afueras de u r u e ñ a (Valladolid) . Y en 53
capilla de Vega . 55
donde más tarde se erigió el monasterio, es el Tumbo la única cómo este cenobio cisterciense recibió desde sus primeros
fuente que señala su existencia y su ubicación en el lugar años el título d e Sancti Petri de Spina o San Pedro de la Espina y
que ocupa la actual iglesia o en un cerro cercano: como tal fue denominado hasta finales del siglo XV . Úni- 57
hazia la yglesia. La yglesia que avia antes de la fundacion del ingreso en la Congregación de Castilla cuando lo cambie por
monasterio se llamava San Pedro. No ay certidumbre donde estu- el de Nuestra Señora o Santa María de la Espina , aunque 59
viese sita. Pudo ser que estuviese donde esta la yglesia grande o durante algunos años, al menos hasta principios del siglo XVi
claustros. En la cumbre de la cuesta que esta junto a la presa del aparece documentado como San Pedro . 60
El Tumbo señala que el nombre le viene por las dos reli- mente por los cistercienses. Sin salir fuera de la Península tene-
quias más importantes que allí se veneraban: el dedo de San mos los ejemplos de San Andrés de Arroyo , San Isidoro de 66
nihilo cuya advocación difiere de la mariana empleada usual- Dueñas , etc . N o obstante lo normal era que lo cambiasen,
76 77
6 1 Tumbo fol.48v-n.65. CHEZ, 2000: 62, doc. 29); y en el testamento de García Fernández (20
62 YEPES, 1609.1621: III, 344 y 346; GONZÁLEZ DÁVILA, 1647: III, de octubre de 1241) el de "monasterio de Santa Maria de San Vicente
134; FINESTRES, 1753-1765: I, 29; FLÓREZ, 1761: 269; ORTEGA de Villamayor" (MARTÍNEZ DÍEZ, y GONZÁLEZ SÁNCHEZ, 2000: 88,
RUBIO, 1895: 137; FERNÁNDEZ DE BETHENCOURT, 1897: I, 545-547; doc. 50). A partir de 1250 (MARTÍNEZ DÍEZ, y GONZÁLEZ SÁNCHEZ,
YÁÑEZ NEIRA, 1951: 280 nota 20; ROLDÁN Y GUERRERO, 1961:161; 2000: 102, doc. 62) encontramos únicamente la de Santa María.
MIGUEL, 1965: 371; MARTÍN GONZÁLEZ, 1968: 82; YÁÑEZ NEIRA, 70 En 1176 Pedro de Artajona, obispo de Pamplona, dona a su her-
1959: 27-28; idem, 1973: 1562 mano Nicolás la iglesia de San Adrián de Iranzu para que funde allí un
63 ANTÓN, 1942: 115. monasterio cisterciense. Aunque el monasterio de San Adrián está docu-
64 REGLERO, 1993: 161. mentado en el segundo tercio del XI (LÓPEZ LACALLE, 1994: 38-39), en
65 MANRIQUE, 1642-1659: II, 89. aquella fecha (1176) la comunidad había desaparecido, quedando sólo
66 Según una antigua tradición el nombre deriva del hallazgo de un una iglesia (JIMENÓJURIÓ, 1982: 6; GARCÍAGAINZA, 1982: 24-25). En
imagen de san Andrés en un arroyo cercano. Al considerar entonces el los primeros documentos el nuevo monasterio recibe el título de San
sitio como consagrado al apóstol, se erigió el monasterio con ese nom- Adrián; a finales del XII (1193) aparece documentado como "Santa
bre (NAVARRO GARCÍA, 1939: III, 196-197; MASOLIVER, 1985: 7-8; María Genitricis eiu et San Adriani de Irantio", aunque todavía perdura
ARA GIL, 1990: 50-51; GUTIÉRREZ PAJARES, 1993: 24; HERRERO el antiguo; en el XIII se consolida ya el de Santa María (LÓPEZ LACALLE,
MARCOS, 1995: 143; CALVO CAPILLA, 1998; CASAS CASTELLS, 2005: 1994: 40).
500; entre otros). Aunque la estatua del santo que hoy se conserva es ya 71 Vid. la monografía correspondiente.
de mediados del XIII, puede que existiera otra más antigua por la cual las 72 Existente al menos como monasterio desde 1144 con la advocación
monjas sentían gran devoción y que hiciera que la comunidad eligiese su de San Juan y Santa María (VALLE PÉREZ, 1991: 155-156) y adscrito
nombre como advocación del nuevo monasterio (ARA GIL, 1990: 50- posiblemente ya en noviembre de 1147, en una bula de 1179 en la que
51). se dice claramente que es cisterciense está bajo la advocación de San Juan
67 La tradición afirma la existencia de un oratorio dedicado a San Isi- (VALLE PÉREZ, 1991: 138 nota 11; idem, 1992 (2): 217-218 y 221-
doro, desde donde el santo había sido trasladado a León. En efecto, en 222). Posteriormente recibirá únicamente el de Santa María.
el documento fundacional expedido por Alonso Pérez de Guzmán en 14 73 Monasterio de monjas benitas que al menos desde 1316 es cister-
de febrero de 1301, señala cómo desea "faser monasterio que sea de ciense y aparece bajo el título de San Cipriano de Renuncio (YÁÑEZ
monges de gistel en la iglesia de sant isidro que es gerca de Sevilla la vieja NEIRA, 1999: 31 y 56), y a partir de julio de 1386 aparece constatado
principalmente a honra de Dios y de Santa Maria y de toda la corte el cambio al de Santa María (Ibid: 35-36).
celestial é á honra de San Isidro (...) otorgamos que damos para este 7 4 Afiliado en 1245, sigue usando, al menos durante la Edad Media,
monasterio esta dicha iglesia con todas sus casas...", y esa fue al parecer el antiguo nombre: vid. en RODRÍGUEZ GONZÁLEZ, 1973: docs. 196 a
la causa de que recibiese tal advocación (ZEBALLOS, 1886: 206). Por su 209, en 251-266.
parte RESPALDIZA LAMA, 1996: 25 apunta que la iglesia a la que se 75 En 1 1 8 1 el monasterio cisterciense de Santa María de Rute recibe
refiere el documento fundacional no es una preexistente, sino la monás- como donación el viejo monasterio de San Prudencio de Monte Laturce
tica, terminada ya en 1309, cuando muere el fundador. con la condición de que se trasladen allí. Tras la afiliación el título que
68 Aunque asentado sobre un antiguo monasterio dedicado al Salva- prevaleció y se usó hasta la exclaustración fue el de San Prudencio (vid.
dor, en el momento de la fundación (12 de diciembre de 1181) no había GARCÍATURZA, 1992).
allí vida monástica, sino que estaba en manos de seglares. El monasterio 76 Monasterio fundado a fines del siglo X —San Miguel de Almáz-
recibirá siempre el nombre de "Santa Colomba de Arcos" (YÁÑEZ cara—, reactivado a mediados del XII por Doña Sancha (1152) y puesto
NEIRA, 1994: 267, doc. 3 de 1321, o "Santa Colonba de las Duennas" bajo la obediencia de Carracedo, en 1203 cuando éste se afilia a la Orden
(Ibid: 269, doc. 5 de 1374; 271, doc. 6 de junio de 1398). En algún otro se incorpora también a ella el de San Miguel, que mantuvo la antigua
se alude a la iglesia del Salvador de Santa Colomba (Ibidem: 243). titularidad, aunque muy posteriormente se le llamó también Nuestra
69 ANDRÉS ORDAX, 1992: 285, señala que la titulación de San Vicente Señora de la Asunción (CAVERO DOMÍNGUEZ, y GONZÁLEZ GARCÍA,
correspondiente al antiguo monasterio se mantuvo unos años después de 2000: 37).
la fundación cisterciense. De hecho, en el documento fundacional de 4 7 7 Otros monasterios como San Pedro de Gumiel, San Clemente y
de marzo de 1228 recibe el nombre de "monasterio Sancte Marie et Santo Domingo de Silos el Antiguo de Toledo o San Vicente el Real de
Sancti Vicentii de Villamaiori" (MARTÍNEZ DÍEZ, y GONZÁLEZ SÁN- Segovia, conservaron igualmente la advocación primitiva.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
100
como ocurrió en Moreruela y Montederramo . Curioso es
78 79 de una aceña en Toro . Su heredero, Alfonso IX, encargará
85
desde luego el caso de San Guillermo de Villabuena, pues de apear y amojonar dicha granja al tiempo que confirma la
llamarse santa María desde su fundación como monasterio demarcación establecida por su padre . 86
cisterciense en 1229, en torno al primer cuarto del siglo XIV Alfonso VIII contribuirá de manera importante al
cambia su advocación por la de San Guillermo al recibir las enriquecimiento del patrimonio de la Espina desde que en
reliquias del santo de Peñacorada . 80
1174, estando en Arévalo, lo recibe bajo su amparo . El 87
por destacadas y numerosas donaciones de monarcas, puedan labrar cuatro pares de bueyes en solanilla, a cambio
nobles y pequeños propietarios . 82
de una heredad en Tordehumos . El resto de privilegios
90
culares .91
78 El monasterio de santiago de Moreruela, afiliado entre noviembre fundadora y su hermano, así como de otros monarcas y personajes de la
de 1158 y abril de 1162, recibe a partir de esta última fecha —en la que nobleza de las que no conservamos el diploma original pero que sí apa-
ya consta que es cisterciense— la nueva advocación (VALLE PÉREZ, 1991: recen reflejadas en la confirmación papal de 1163.
137-139, notas 11 y 12). 82u n resumen de los privilegios y donaciones recibidos, así como de
79 Monasterio benedictino bajo la advocación de san juan que en 1163, su actividad económica durante la Edad Media, en YÁÑEZ NEÍRA, 1972:
año en que aparece ya documentado como cisterciense, lleva el título de 84-87; ÁLVAREZ PALENZUELA, 1978: 162-169; RODRÍGUEZ DE DIEGO,
Santa María (VALLE PÉREZ, 1982: I, 189; y SÍNGUL, 2002: 16). 1982: 47 y ss, y 173-184 (quien incluye una regesta de todos los docu-
80 CAVERO DOMÍNGUEZ, 1997: 384-386; CAVERO DOMÍNGUEZ, y mentos recogidos por el Tumbo); LÓPEZ GARCÍA, 1990: 20-54; REGLERO,
GONZÁLEZ GARCÍA, 2000: 112. 1993: 161-164.
81 Diversos autores (VACANDARD, 1895: II, 408; ANTÓN, 1953: 312; 83Vid. nota 40.
DIMIER, 1954 (2): 195; idem, 1969: 267; TIJBURG, 1953: 178; ; BRON- 8 4Tumbo, fols. 54r-n.76; 88v-n.171.
SEVAL, 1970: 275; ÁLVAREZ PALENZUELA, 1978: 163 y 164; PÓRTELA 85 Tumbo, fol.192-n.368 y 369; pub. por RODRÍGUEZ DE DÍEGO,
SILVA, 1981: 53-54; ARA GIL, 1986: 7; PÉREZ-EMBID, 1986: 39; entre 1982: 191-192.
otros) hablan de una difícil situación del nuevo monasterio durante sus 86 Tumbo, fol.192v-n.369.
primeros años, basándose en una carta al parecer dirigida por Abbatis SP 8 7Tumbo, fol.91v-n.177.
[ina] ad Sanctum Bernardum en torno a 1147 (MÍGNE, 1884: 182, carta 88 Tumbo, fols.198-n.380 y 381; pub. por RODRÍGUEZ DE DÍEGO,
373, col.578), es decir, el mismo año de la donación de Doña sancha. 1982: 193-194.
Igualmente, la referencia a La Espina en la carta 301 escrita por el abad 89 Tumbo, fols.108r-n.205; pub. por CASTROTÓLEDO, 1981: 13-14;
de Claraval a la Infanta en la que le recomienda el cuidado de su nueva RODRÍGUEZ DE DIEGO, 1982: 190-191.
fundación ha sido interpretada como el llamamiento de San Bernardo a 90 Tumbo, fol.358r-n.672.
la Infanta para cortar de raíz las dificultades por las que atravesaba el 91 Hacia 1179, la donación de una viña en Medina del Campo que
cenobio (recordemos no obstante que esta carta data de los primeros Domingo Negral, clérigo, había concedido (Tumbo, fols.66r-n.103 y
meses de 1153 —vid. nota 23—). Además, PÉREZ-EMBID señala que tam- 358r-n.671); en 1205 la donación que hizo Pedro Fernández de San
bién en la carta 372 escrita a Pedro, obispo de Palencia (Obras completas Salvador de Gallegos de Valdetronco (fol.210-n.403 y 404); y por
de San Bernardo, 1990: 1066-1071), las palabras "fratres nostri" aluden último, estando en Burgos en 1209, confirma al abad Arnaldo todos los
a esos malos momentos de La Espina. Lo cierto es que parece extraño términos granjas, posesiones, etc., a instancias de su hija Beatriz reyna de
que ni el Tumbo ni los antiguos cronistas comenten este supuesto episo- Francia y de don Felippe, su nieto, hijo de la dicha reyna (Tumbo, fol.88v-n.171).
dio de crisis, a lo que hay que añadir que después de 1149 —confirma- 92 Tumbo, fol.116r-n.219; MANRIQUE, 1642-1659: IV 201; pub. la
ción del emperador— se producen otras donaciones por parte de la regesta GONZÁLEZ, 1983: II, 459).
FUNDACIONES MASCULINAS • 101 •
cia cuantiosas donaciones realizadas por miembros de la tigio e influencia del monasterio durante esta época se apre-
nobleza y pequeños propietarios. Antes de 1163 Álvar cia también en las importantes misiones confiadas por
Gutiérrez y sus hermanos donaron la granja de Morlejes, ya Inocencio III a sus abades entre 1198-1216: obligar al
que en esa fecha aparece confirmada en la bula de Alejan- obispo de Oviedo a restituir los frutos debidos a la dióce-
dro III ; en 1176 Ramón Fernández donaba casas, pra-
95
sis de Salamanca; resolver la contienda entre el rey de Por-
dos, heredades y otras haciendas en Zamora: Casa Grabela, tugal y sus hermanas Sancha y Teresa; e intervenir en la
Casa Mojina y viñas de Valcavado ; hacia 1179 Domingo
96
cuestión de la primacía discutida entre Braga y Toledo. En
Negral concede una viña en Medina del Campo ; Pelayo 97
1222 será además nombrado delegado de Honorio III para
Suárez entrega en 1194 haciendas en Tejares y otras partes solucionar las disputas que se habían planteado entre el
en tierra de Salamanca ; en 1205 Pedro Fernández, mayor-
98
obispo de Segovia y el clero de Cuellar . Gregorio IX en
106
domo del rey, les da dos yuguerías en San Salvador de 1233 encomendará a los Arzobispos de Toledo y Santiago
Gallegos ; y ese mismo año Pedro Giraldo les dona el lugar
99
la defensa del monasterio frente a los que pretendan hacerle
de Bercero que a su vez le había concedido Alfonso VIII ; 100
d a ñ o y le concede que pueda heredar sin obligación de
107
en 1209 García Gómez y su mujer Gontroda ofrecen la híbe que cualquier persona reciba del monasterio servicio
heredad de Santa María de la Vega, en la villa de Hermildo, alguno ni pedido por razón de patronazgo, defensión o
término de Tordehumos ; en 1210 Martín Románez y su
102
abogacía y en un privilegio general concedido a la Orden,
mujer Jimena Ruiz donan Villafalfón y Villapiluete a cam- que prelados y legados fuercen a los monjes a excomulgar
bio de enterramiento ; y Teresa Pérez dona en 1218 diver-
103
en contra de su voluntad . 109
93 1220 Valladolid, confirma todos los privilegios concedidos por sus III, 131-133); 1237, junio, 1. Amojonamiento de Eslúa y Zofragui-
predecesores (Tumbo, fols.54r-n.76; 89r-n.172); 1220, Valladolid, los lla, hecho por mandato real por Rodrigo Gutiérrez, Alfonso Téllez,
límites de su coto (Tumbo, fol.54v-n.57); 1223, Valladolid, todas las merino tenente de Tordesillas y Pedro Guerrero, portero del rey, para
donaciones y privilegios anteriores así como las demarcaciones realiza- evitar discordias entre la Espina y el concejo de Tordesillas (Tumbo,
das bajo su mandato (Tumbo, fol.89v-n.173); 6 de marzo de 1223, Valla- fols.118v-119v-n.224 a 226; pub. por CASTRO TOLEDO, 1981: 22-23;
dolid, la heredad de Bercero, donada por Pedro Geraldo (Tumbo, RODRÍGUEZ DE DIEGO, 1982:203-204); 1239, octubre, 18. Burgos.
fol.205v-n.394; pub. por CASTRO TOLEDO, 1981: 20-21; RODRÍGUEZ Aprueba y confirma el acuerdo establecido entre el monasterio y el
DE DIEGO, 1982: 199-200; GONZÁLEZ, 1983: II, 215-216); y en 1231, concejo de San Cebrián de Mazote sobre términos, cuya demarcación
estando en Burgos, todas las posesiones que el monasterio tenía en los fue realizada por su mandato (Tumbo, fols.56v-57r-n.80 a 82; pub. por
reinos de Castilla y León (Tumbo, fol.90r-n.174; pub. por GONZÁLEZ, RODRÍGUEZ DE DIEGO, 1982: 205-206; GONZÁLEZ, 1983: III, 187-
1983: III, 481). 189).
9 4 1222, enero, 13. Tordesillas. Concordia con el concejo de Torde- 95 Vid. nota 105.
sillas sobre los límites de Eslúa (pub. por CASTRO TOLEDO, 1981: 17- 96 Tumbo, fol.359v-n.674.
20; RODRÍGUEZ DE DIEGO, 1982: 195-197); 1223, febrero, 20. 9 7En confirmación de Alfonso VIII, de 1179.
Confirma tal y como determinaron por su mandato Gonzalo Rodrí- 98 Tumbo, fol.361r-n.677.
guez y Suero Téllez, los términos que disputaba con el Concejo de 99 Tumbo, fol.210v-n.404.
Torrelobatón (Tumbo, fol.54r-n.76, 58-n.84 y 85; pub. por RODRÍ- 100 Tumbo, fol.206; confirmado por Fernando III en 6 de marzo de
GUEZ DE DIEGO, 1982: 197-198; GONZÁLEZ, 1983: III, 440-441); 1223.
Burgos, 1231 (Tumbo, fol.89v-n.173; GONZÁLEZ, 1983: III, 481) y 1 0 1Tumbo, fol.359r-n.673.
1235, marzo, 26. Talavera (Tumbo, fol.89v-n.173; GONZÁLEZ, 1983: 102 Tumbo, fols.225v-226r-n.434 y 435; pub. por RODRÍGUEZ DE
III, 63-64), confirma el monasterio y sus términos, según fueron amo- DIEGO, 1982: 194-195.
jonados por Gonzalo Rodríguez y Suero Téllez; 1235, marzo, 26. 103 Tumbo, fols. 52v-53r-n.73 y 74; 99r-n.192.
Talavera. Previa pesquisa, falla a favor del monasterio contra el concejo 104 Tumbo, fols. 305r y 359r.
de Castromonte sobre los términos de Santa María de Aborridos y 105 Tumbo, fol.82; pub. por RODRÍGUEZ DE DIEGO, 1982: 188-190.
San Juan de Casarejos (Tumbo, fol.59v-60v-n.87 y 88; pub. por RODRÍ- 106 ÁLVAREZ PALENZUELA, 1978: 28 nota 68; RODRÍGUEZ DE DIEGO,
GUEZ DE DIEGO, 1982: 200-201; GONZÁLEZ, 1983: III, 64-65); 1982: 57 nota 64; LÓPEZ GARCÍA, 1990: 33.
1237, mayo, 26. Burgos. Confirma la avenencia entre el monasterio y 107 Tumbo, fol.82v-n.158.
el concejo de u r u e ñ a sobre términos (Tumbo, fol.54v-55r-n.77 y 78; 108 Tumbo, fol.83r-n.159.
pub. por RODRÍGUEZ DE DIEGO, 1982: 202-203; GONZÁLEZ, 1983: 109 Tumbo, fol.83r-n.159.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
102
Momentos de crisis, instantes de calma des y abandonado paulatinamente las explotaciones directas
(ca.I225-principios del siglo XV) para arrendarlas . Por si fuera poco, los conflictos bélicos
122
años más tarde las propiedades de Griegos y Tiedra (Tumbo, fols.286- 69v-n.103 a 108; y Biblioteca de la Real Academia de la Historia (desde
n.541 y 292v-n.553); y en 1341 durante su estancia en Madrid pro- ahora, B.R.A.H.), Col. Salazar y Castro, N-35, fol.83; pub. por RODRÍ-
hibe cortar leña en los montes de la Espina, ni dejar pastar el ganado sin GUEZ DE DIEGO, 1 9 8 2 : 2 0 9 - 2 1 4 . E r r ó n e a m e n t e ANTÓN, 1 9 4 2 : 1 2 2 y
consentimiento de los monjes (Tumbo, fol.93r-n.180). TORRES BALBÁS, 1952: 107, fechan el testamento y muerte de Martín
116En 1351 confirma el privilegio de Alfonso XI (1332) en que con- Alfonso diez años antes.
firmaba a su vez los de Alfonso X (1278), Sancho IV (1282) y Fer- En el apartado dedicado al proceso crono-constructivo volveremos
1 2 5
nando IV (1312), ordenando a los merinos que no pidieran al sobre este documento.
monasterio ni mula ni vaso de plata ni yantar (Tumbo, fol.93v-n.181;
DÍAZ MARTÍN, 1 9 9 7 : II, 6 6 7 ) .
FUNDACIONES MASCULINAS • 103 •
construcción de la iglesia, los propios monjes consideraron Espina, la dirección de un priorato a establecer en una igle-
este momento como el inicio de la Fundación 2" y reedificacion sia denominada Beata María de Mercede, sita en la diócesis de
deste monasterio, que sería culminada años más tarde por Juan León, provista gracias a la generosidad de unos patronos
Alfonso de Alburquerque. Teresa Gil, hija de Martín Gil de de tierra, viñas, pastos y otras posesiones suficientes para
Portugal, en su testamento otorgado en Valladolid a 16 de cuatro o cinco religiosos . Ninguna otra fuente, ni siquiera
135
septiembre de 1307, donaba al monasterio 3.000 mrs. a el Tumbo, nos informa acerca de la fundación y desarrollo de
cambio de cuatro aniversarios por su alma, además de las este priorato, por lo que tal vez haya que pensar que final-
casas de Eslua e de Vega Mayor .
126 A n t e r i o r m e n t e , en 1 2 9 9 , los mente no se llevó a cabo.
monjes le habían legado en vida sus posesiones, derechos y
rentas en Eslua, así como sus casas de Tordesillas con sus
viñas y tierras, a cambio de que ella se encargara de hacer Años de recuperación (I420-I485):
la enfermería del monasterio y echar mil carretadas de pie- Fray Alonso de Urueña
dra en la pesquera de Eslua, más una renta de 2 0 0 0 mrs
para pitanzas al convento . En 1319 Pero Sánchez de
127 A principios del XV la situación económica de San
Llantada y su mujer Aldonza Álvarez dieron todo lo que Pedro de la Espina era insostenible. Pero gracias a la labor
tenían en el lugar de Casasola y en Molillas a cambio de llevada a cabo por el último abad perpetuo, fray Alonso de
una misa diaria en el altar de San Bernardo . En 1348. 128 Urueña, el monasterio pudo salir adelante. A la reorgani-
Mencía de Valverde, mujer de Juan Fernández de Valverde, zación de la hacienda monástica basada en la recuperación
dona todo lo que posee en Quintanilla del Olmo a cambio del control de molinos y granjas, la generalización de los
de enterramiento para ambos en la capilla de san Juan . 129 arriendos, el despoblamiento del coto abacial y conversión
Tres años más tarde Rui Álvarez Osorio y su familia entre- de antiguas aldeas en granjas así como la expulsión de los
gan una yuguería y dos heredades de pan llevar en Benafar- siervos que se negaban a pagar las cargas señoriales , hay 136
Alejandro IV confirma la exención de todo subsidio conce- rosos pleitos con el comendador de la Orden Teutónica, su
dida a la Orden y ordena al obispo de Zamora que se respete antiguo propietario, con resultado favorable para el monaste-
dicho privilegio , y en 1333 Benedicto XII concede al Dilec-
133 rio en parte gracias a la intervención de Juan II y Enrique IV
tisfiliis abbati et conventi Sancti Petri de Spina las gracias y mercedes que ampararon en todo momento a la abadía . 138
franciscano y por entonces profeso del monasterio de La 1433, Fernán Gutiérrez de Vega donaba en su testamento
126 Transcribe el testamento RUCQUOI, 1992: 316-323, en concreto de 1380 se ordenaba a Juan Rodríguez de Escobar a pagar el diezmo de
320-321. la iglesia de San Miguel de Grajal que le correspondía por el testamento
127 Tumbo, fol.120r-n.227; CASTRO TOLEDO, 1980: 40-41; RODRÍ- de Juan Alfonso de Alburquerque (Tumbo, fols.276v-278r — n.529 a 532;
GUEZ DE DIEGO, 1982: 139-140; RUCQUOI, 1992: 310-311. pub. por RODRÍGUEZ DE DIEGO, 1982: 214-218).
128 Tumbo, fol.52v-53r-n.73 y 74; 98v-n.191. 133 Tumbo, fol.84r-n.161.
129 Tumbo, fols. 74-n.I20 y 121, 268r-515. 134 Tumbo, fol.83v-n.160.
130 Tumbo, fol.308r-n.584. 135 CANIVEZ, 1933-41: III, 749; cit. por PÉREZ-EMBID, 1986: 617.
131 En el apartado dedicado al proceso crono-constructivo nos deten- 136 LÓPEZ GARCÍA, 1990: 45-52.
dremos en este punto. 137 Tumbo, fol.355r-n.665.
132 En 1373 el Conde Sancho y su mujer Beatriz, hija de Pedro de Por- 138 Tumbo, fol.356-n.667 y 668; RODRÍGUEZ DE DIEGO, 1982: 102-
tugal, confirmaban la donación de la martiniega (Tumbo, fol.234-n.450 106 y 180-181.
y 451) y en una ejecutoria de Juan I dada en Valladolid a 20 de marzo 139 Tumbo, fols.75r-n.122 y 236v-n.455.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
104
a La Espina 2.790 mrs de juro perpetuo de los 5.790 mara- como vesitadores de la horden de cistel en el Reyno de leon, en u n pleito
vedís que le había concedido Juan II situado en las alcaba- entre Nogales y Otero, y en 1433 era enviado junto al abad
las de peso y corrillo de Valladolid. A cambio, el monasterio de Herrera como visitador de los monasterios de la Orden,
le concedía una de las capillas de su iglesia para su enterra- debiendo encargarse especialmente de que Martín de Var-
miento . s u mujer, María de Escobar, le otorgaba en el
140 gas restituyese el monasterio de Valbuena . El mismo cargo
149
o t r o aspecto que debemos señalar del abadiato de fray como abadesa de San Miguel de Las Dueñas a quien toma
Alonso fue su labor como visitador y reformador de la posesión del cargo en 1465 . 151
140 Sobre la capilla de los Vega, vid. el apartado dedicado al análisis León y Portugal (CANIVEZ, I933-4I: III, 742-743), y como tales dan
artístico del monasterio. licencia el 4 de diciembre de I 4 0 I al monasterio de Las Huelgas de
141 Tumbo, fols.74v-n121, 75v-n123 y 341-n.645 y 646 (cit. RODRÍ- Valladolid para restituir I500 mrs. a Diego López de Zúñiga por un
GUEZ DE DIEGO, 1982: 1 5 3 y 179; LÓPEZ GARCÍA, 1990: 22); Genealo- error cometido al realizar un trueque con éste (Archivo del Monasterio
gía, armas y origen de la ylustrísima Casa de Vega, B.N. Mss.8373, fol.57r —a de Las Huelgas de Valladolid, arca I, doc. 57). Dos años después, esta
partir de ahora se citará como Genealogía y armas—); el testamento de Fer- vez solamente el abad de la Espina y fray Juan de Vega, de Valdediós,
nando Gutiérrez de Vega que en virtud de poder suyo otorgaron fray son enviados a reformar los monasterios ya encomendados más los de
Alonso de Urueña, abad del monasterio, y Gonzalo Muñoz de Madri- Navarra (CANIVEZ, I933-4I: IV 56).
gal y Fernán González de Villapadierna, criados del Señor de Grajal, se 146 Archivo del Monasterio de Las Huelgas de Valladolid, arca I, doc.
conserva en A.C.D.A., N.I96, leg.4, n.3. Dicho juro, junto con las man- 45.
das testamentarias de Fernando de Vega y María de Escobar, sería con- Archivo del Monasterio de Las Huelgas de Valladolid, arca I, doc.
1 4 7
María de Guzmán, a cuya filiación pertenecía Torquemada, y robaron parte de sus bienes, maltrataron al reformador, al
consiguió una sentencia favorable que ordenase al abad Juan nuevo abad y a algunos religiosos que se habían ocultado
abandonarlo. Éste renunció, pero fray Alonso, negándose a junto al altar mayor del templo, les encerraron en unas cáma-
dejar el monasterio, nombró como nuevo abad a fray Pedro ras y después les expulsaron del monasterio. En vista de todo
de San Andrés. Finalmente, el Capítulo General celebrado ello, los Reyes Católicos el 18 de mayo de 1485 ordenan al
ese mismo año en Valladolid condenó a los monjes y ordenó alcaide de urueña haga desalojar el monasterio para facilitar
devolver el monasterio a Las Huelgas de Burgos , nom- la reforma . Un mes más tarde el monasterio estaba desen-
152 157
brando como nueva abadesa a Catalina Martínez de Boni- castillado y los intrusos alejados, y con el consentimiento de
lla, monja de San Quirce de Valladolid . 153
fray Juan de Oyón, abad de Palazuelos, se entregó el monas-
terio a Fernando de Acuña, del Consejo Real, durante un
período de cuarenta días para facilitar la transición al nuevo
La lucha por la Reforma (1485-1486) régimen. Pero un grupo de monjes se reveló contra esta situa-
La adhesión de La Espina a la incorporación a la ción y expulsó a los escuderos de Fernando de Acuña. Los
Congregación de Castilla no fue, al igual que en otros Reyes entonces ordenan el 6 de junio a Rodrigo Vaca que
muchos monasterios, pacífica . 154 aplaque a los monjes mientras se decide cómo actuar , recla- 158
algunos monasterios que estan profanados e deshordenados, entre encomendaba al condestable Pedro Fernández de Velasco
161
ellos el de Santa Maria del Espina, cuyo abad y monjes habían y al obispo de Segovia, Juan Arias , que restituyesen al abad
162
152Archivo del Monasterio de Las Huelgas de Burgos, Leg. 6, n.196. 159 A.G.S., Registro General del Sello, 1485, julio, n.223.
Vid. apéndice documental de la monografía de San Quirce. 160 A.G.S., Registro General del Sello, 1485, agosto, n.26.
153CALVO, 1846: 49; RODRÍGUEZ LÓPEZ, 1907: I, 67 nota 1 y 279- 161 A.G.S., Registro General del Sello, 1485, septiembre, n.227.
280; MILLARUELO, 1981: 81; ESCRIVÁ DE BALAGUER, 1988: 219. 162 A.G.S., Registro General del Sello, 1485, septiembre, n.228; GARCÍA
154 El Tumbo, fol.78v-n.128 se limita únicamente a señalar que la reforma ORO, 1969: 427-428.
tuvo lugar en 1485; lo mismo señalan MANRIQUE, 1642-1659: IV 602 163 1486, enero, 21. Valladolid. Carta a García Rubio, contino, para que
(2010: 107); YÁÑEZ NEIRA, 1972: 103-105; o RODRÍGUEZ DE DIEGO, se devuelvan los frutos y rentas del monasterio a fray Juan de Cifuentes, su
1982: 169. Por su parte, PÉREZ EMBID, 1984: 175 e ídem: 1986: 646 y abad, y que fray Pedro Pimienta no los tome (A.G.S., Registro General del
679-680 se hace eco de los documentos alusivos a este período de la vida Sello, 1486, enero, n.19); 1486, enero, 21. Valladolid. Amparo a favor de
del monasterio que se conservan en el Registro General del Sello (A.G.S.) Juan de Cifuentes, abad del monasterio, en la tenencia y posesión de dicho
y que recogemos a continuación. Vid. también GARCÍA ORO y PORTELA monasterio y de sus bienes mandando a la vez a fray Pedro Pimienta, abad
SILVA, 2001: 147; e idem, 2004: 124. de Nogales, que por virtud de bula alguna hiciese innovaciones en dicho
155 A.G.S., Registro General del Sello, 1485, marzo, n.81; pub. por GAR- monasterio (A.G.S., Registro General del Sello, 1486, enero, n.10); 1486,
CÍA ORO, 1969: 421-423. marzo, 18. Medina del Campo. Comisión al contino García Rubio para
156 Monje profeso de La Espina, en los instrumentos de Nogales aparece que informe de lo tomado al monasterio por fray Pedro Pimienta y se le res-
nombrado como Pedro de Urueña (documentado por vez primera en 1473), tituya (A.G.S., Registro General del Sello, 1486, marzo, n.177); 1486,
siendo sustituido en el cargo desde 1488 por Pedro de la Vega (CAVERO mayo, 31. Valladolid. Seguro por doce días a favor de fray Pedro Pimienta
DOMÍNGUEZ, 2001: 552 y 575), si bien los abadologios de época moderna para que pueda desplazarse hasta Valladolid a entregar ciertas escrituras y
hay cierta confusión en las fechas de abadiato y nombres de ambos prelados, hacer resignación en manos de fray Diego de Frías, General Reformador, de
dislates no puestos de relieve por la historiografía contemporánea (vid. por los derechos que pueda tener sobre el monasterio de la Espina (A.G.S.,
ejemplo, DÍAZ-JIMÉNEZY MOLLEDA, 1923: 10-11; y YÁÑEZNEIRA, 1984: Registro General del Sello, 1486, mayo, n.114; pub. por GARCÍA ORO,
234-236). Erróneamente, el Tumbo (fols.81v-82r - n.135 y 136) y la Carta 1969: 429-430); 1486, junio, 26. Valladolid. Provisión a petición del abad
de Fray Antonio de Vega, fol.305v consideran a Pedro Pimienta último abad per- reformador prorrogando la comisión concedida al contino García Rubio
petuo de La Espina y a Martín Curiel de Valdarcos primer abad trienal. para entender de los desmanes cometidos por Pedro Pimienta y otros en el
YÁÑEZ NEIRA, 1972: 106-107 recoge la noticia aportada por el Tumbo y monasterio (A.G.S., Registro General del Sello, 1486, junio, n.73); 1489,
señala que el gobierno de Pedro Pimienta "debió ser muy efímero". enero, 10. Se encarga una nueva pesquisa para que el monasterio de Noga-
157 A.G.S., Registro General del Sello, 1485, mayo, n.81. les asumiera responsabilidades (A.G.S, Registro General del Sello, 1489,
158 A.G.S., Registro General del Sello, 1485, junio, n.160; pub. por GAR- enero, n.111).
CÍA ORO, 1969: 423-426.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
106
Las filiaciones tesión , si bien hasta 1485 no sería posible su incorpora-
168
señala que tuvo lugar en 1177 por orden de Fernando II, Minerva y Estefanía Ramírez el lugar de Sotnoval el 16 de
rey de León . La tradición del propio monasterio de Val-
164
febrero de 1167. En esa donación se expresaba claramente
deiglesias ha remontado sus orígenes a un grupo de ere-
165
que lo d o n a n a Didaco Martini, etfratibus tuis in Christo (...) sub
mitorios de época visigoda que habrían perdurado a orillas regula beati Benedicti secundum constitutionem cisterciensem, pero nada
del Alberche y que posteriormente fueron reagrupados por se dice de La Espina . El 2 6 de octubre del año siguiente
172
Alfonso VII y organizados bajo la regla de san Benito y la aparece documentado el abath don Gonzalo de Sancta Maria de
autoridad del abad Villelmo, el 30 de noviembre de Sompnoalis, aunque en esta ocasión no se alude a la regla ni
1 1 5 0 . En la fecha antes mencionada, 1177, se afiliarían
166 constitución bajo la que vive el monasterio y como en el
a la o r d e n del Císter a través de La Espina . Sea como
167 anterior, tampoco a La Espina . Aun así, a partir de estos
173
fuere, hasta 1437 no tenemos constancia fidedigna de la documentos muchos investigadores han datado la fundación
dependencia de Valdeiglesias respecto de La Espina: el 25 del monasterio en 1 1 6 7 o en 1168 , aunque la crono-
174 175
de septiembre de ese año Eugenio IV suprime la dignidad logía de la Orden le asigna la de 30 de enero de 1 1 7 1 y 176
abacial de Valdeiglesias, le exime de la jurisdicción de la otros siguen la de 1173 aportada por el Tumbo . En todos 177
Espina y lo somete a la autoridad del Reformador de Mon- los casos se atribuye la paternidad a La Espina. Sólo hemos
164 Tumbo, fol.67v-n.112. Vid. MANRIQUE, 1642-59: II, 58; YEPES, tradición que parte de MANRIQUE (1642-1659: 451-452) hacía de
1609-1621: III, 351; GUTIÉRREZ CUÑADO, 1913: 41-42; DIMIER, Diego Martínez monje de La Espina (la recoge, recientemente, CAVERO
1949: 171; COCHERIL, 1963: 949; idem, 1964: 237; YÁÑEZ NEIRA, DOMÍNGUEZ, 2007: 93-94), algo que a todas luces es erróneo a juzgar
1972: 94-95; idem, 1973: 1562; idem, 1978: 584-586; ÁLVAREZ por lo que sabemos de este personaje (PÉREZ RODRÍGUEZ, 2008: 88
PALENZUELA, 1978: 145; PÉREZ EMBID, 1986: 271 y 335; TEJUELA nota 178; vid. además la monografía de Palazuelos).
JUEZ, 1987: 115; idem, 1996: 727; BANGOTORVISO, 1994: 189; GAR- 173 CASTÁN LANASPA, 1981: 46-47; HERRERO JIMÉNEZ, 2003: 55.
CÍA BENITO, 1999: 54; PUENTE, 2002: 11; SAN JOSÉ NEGRO, 2002: 39; 174 MANRIQUE, 1642-1659: II, 351-353; GÓMEZ MORENO, 1925:
entre otros. 422; SAHELICES, 1992: 249-250; idem, 2005: 87-102; VVAA., 1995:
Además de la bibliografía citada en al nota anterior, se puede con-
1 6 5 I, 406; ALONSO MELCÓN, 1996: 952-953; PUENTE, 2002: 11; SAN
sultar el propio tumbo del monasterio conservado en la B.R.A.H. ( 9 / JOSÉ NEGRO, 2002: 39; HERRERO JIMÉNEZ, 2003: 9; ALONSO ÁLVAREZ,
2097) y la Relación breve y sumaria de lafundación del insigne y Real monasterio de 2007: 678-679; entre otros.
nuestra señora de Valdeyglesias, obra de Fray Bernardino de Sandoval 175 CASTÁN LANASPA, 1977: 227-228; y PÉREZ-EMBID, 1986: 47. No
(ca.1650), custodiado en ese mismo centro, y transcrito y publicado por obstante este último señala que el proceso fundacional se cierra en 1171.
TEJELAJUEZ, 1987: 111-124. BANGO TORVISO, 1994: 83; idem, 1997: 116, sigue esta idea y opina que
166 Original en la Hispanic Society of America, New York. aunque se funda en 1167 hasta 1171 no recibe el contingente de mon-
Así lo declara el Tumbo de Valdeiglesias, págs. 14 y 161. Por su parte, jes de La Espina.
1 6 7
fray Bernardino de Sandoval en su Relación Breve..., señala que fue Alfonso 176 JANAUSCHEK, 1877: 161. Le siguen PÉREZ DE URBEL, 1934: II,
VII quien en 1152 trajo monjes de La Espina para reformar el monas- 499; DIMIER, 1949: 160; COCHERIL, 1963: 949; idem, 1964: 237;
terio (TEJELAJUEZ, 1987: 115). idem, 1974: 41 y 42; YÁÑEZ NEIRA, 1971: 27; idem, 1972: 93-94 nota
168 A.H.N., Clero, libro 20.261, fols.16v-17r; Tumbo de Valdeiglesias, 45; idem, 1973: 1562; idem, 1980 (2): 32; idem, 1999 (2): 85; CASADO
págs.147-150 y 153. y CEA, 1986: 69; FERNÁNDEZ, COSMÉN Y HERRÁEZ, 1988: 106;
169 MANRIQUE, 1642-59: IV 593-594 (2010: 84-85); PEÑA, 1989: HERRÁEZ y COSMÉN, 1992: 68 (si bien en la 69 la sitúa en 1167);
443; YÁÑEZ NEIRA, 1974 (5): 283-284; idem, 1978 (2): 589; entre BANGO TORVISO, 1994: 189; MARTÍNEZ TEJERA, 2002 (4): 645; CAL-
otros. DERÓN MEDINA, 2008: 29; entre otros.
170 Tumbo, fol.67-n.111. Aunque en 1991 VALLE PÉREZ afirmaba que 177 GUTIÉRREZ CUÑADO, 1913: 41; RUIZ, 1963: 970; ARA GIL,
Sandoval había sido poblado por monjes de La Espina (1991 (3): 171 1986: 7. YEPES, 1609-1621: III, 350-51 señala que en el monasterio de
nota 101), tres años más tarde señalaba que "no hay en la actualidad la Espina había un documentos que fijaba la fundación de Sandoval en
constancia documental de la filiación" (1994: 41 nota 117). la era de 1173, es decir, año 1135; probablemente en vez de leer año de
Vid. la monografía de Palazuelos.
1 7 1 1173 leyó era, de ahí el desfase de las fechas.
172 CASTÁN LANASPA, 1981: 45-46; HERRERO JIMÉNEZ, 2003: 53-
54; SAHELICES, 2005: 89-90; PÉREZ RODRÍGUEZ, 2008: 319-321. Una
FUNDACIONES MASCULINAS • 107 •
LA ESPINA: Planta
Fig. 1.
La Espina. Planta
general del monasterio.
localizado un testimonio documental aparte del Tumbo que ciertas estas noticias, habría que concluir que Sandoval fue
arroje luz acerca de esta dependencia, la Vita Didaci. Según poblado por monjes de La Espina, ca.1171.
este poema medieval redactado poco antes de 1214 en el A pesar de que el Tumbo y otras fuentes nada dicen al
monasterio de canónigos regulares de santa María de Bene- respecto, algunos investigadores han atribuido errónea-
vívere (Palencia) y en el que se narra la vida y hechos de mente a La Espina la afiliación del monasterio zamorano
Diego Martínez, a los cinco años de estar éste al frente de de Toldanos . Éste fue fundado hacia 1149-1150 por
179
Sandoval —es decir, en 1171 si contamos a partir de la dona- Elvira, hija de Alfonso V I y Jimena Muñiz, poniéndolo
ción de 1 1 6 7 - Diego se dirigió al monasterio de La Espina bajo la sujeción del abad Florencio de carracedo. A la
buscando mayor pobreza. Allí fue acogido por la comunidad muerte de éste en diciembre de 1152, Fernando, segundo
"como un hermano más" y al poco les comunicó su deseo abad de Toldanos, se desligó de la paternidad del monas-
de que le dieran monjes para poblar sandoval, a lo que gus- terio berciano para incorporarse a la reforma cisterciense
tosamente accedieron. Tras elegir un abad, Diego y sus com- a través de Clairvaux. Las protestas de Carracedo no se
pañeros dejaron Sandoval en manos de la nueva comunidad hicieron esperar y Doña Sancha intervino su a favor ante
cisterciense y se encaminaron hacia Benevívere . De ser 178
San Bernardo. Éste, que al parecer estaba ausente cuando
178 PÉREZ RODRÍGUEZ, 2008: 266-269. En este sentido se mueve 179VANCARDARD, 1895: II, 408-409; PÉREZ EMBID, 1986: 39 (en la
FORTÚN, para quien la comunidad inicial de Sandoval, integrada por 50-51 señala su adhesión a Clairvaux a través de La Espina).
Diego y un grupo de nobles, no se adaptó bien a las pautas cistercienses
importadas por los monjes procedentes de La Espina, y terminaron por
irse (2007: 39).
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
108
se llevó a cabo la afiliación, se comprometió a no sujetar a mos en el brazo longitudinal, la central más ancha que las
Toldanos y dejó en manos de la Infanta la resolución del laterales; transepto perfectamente marcado de una sola nave
problema, y en caso de que los interesados no respeten su y dos tramos por brazo; y cabecera compuesta de una capi-
decisión, a los obispos de León y Astorga . Finalmente, 180 lla central con ábside semicircular precedido de un pro-
tras un largo pleito, Toldanos se coloca bajo la obediencia fundo tramo recto, flanqueada por cuatro capillas, dos a
de san Claudio de L e ó n . 181 cada lado, de testero recto las correspondientes al lado del
Algo similar ha ocurrido con Moreruela, considerada Evangelio y la intermedia del de la Epístola, rectangular y
tradicionalmente hija directa de Clairvaux. Pérez Embid y mucho más desarrollada la extrema de ese costado; su advo-
Vallejo, basándose en que durante el trueque realizado en cación era, de norte a sur, San Pedro (?), San Juan Evange-
enero de 1335 por este monasterio con San Clodio de lista y San Juan Bautista, San Bernardo y San Benito, y San
León, el zamorano había actuado con carta de procuración Llorente —luego de Sta. María o de los Vega—. Desde el tes-
de fray Pedro, abad de San Pedro de la Espina, señalan a tero del brazo sur del transepto se accede a una amplia capi-
este último como su casa madre . Tal pretensión ha sido
182
lla cuadrangular —Panteón de la Santa Espina—, mientras
desestimada por otros estudiosos y especialistas . 183
que en el ángulo que forman ese mismo brazo y la nave de
la Epístola se dispone una más pequeña de planta rectan-
gular —que lleva hoy por título San Rafael—.
A pesar de aquellas intervenciones, se puede recons-
truir fácilmente la configuración primitiva de la cabecera
2. ANÁLISIS ARTÍSTICO por haber mantenido una de las capillas originales y buena
Iglesia parte del perímetro y zona inferior de los muros de las
otras. Estaría entonces integrada por cinco ábsides rectan-
Planta gulares, cerrados por un muro común los laterales, sobre-
saliendo el central un tramo más hacia el este (fig. 2 ) . 184
El templo de La Espina sufrió desde el segundo Este esquema corresponde al llamado "plan bernardin",
cuarto del siglo XV y sobre todo a mediados del XVI trans- con ejemplos en nuestro país en Sobrado (La Coruña),
formaciones y ampliaciones que alteraron de modo sustan- Montederramo (Orense), Santas Creus (Tarragona) y Oya
cial su morfología, afectando estas obras en especial a la (Pontevedra), con cinco ábsides, los del último escalona-
cabecera (fig. 1). dos, y con tres ábsides en Vallbona de las Monjas (Lérida),
Orientada litúrgicamente, la abacial presenta en la Rueda (Zaragoza), Iranzu (Navarra) y tal vez Monfero (La
actualidad planta de cruz latina con tres naves de seis tra- Coruña) y Valldigna (Valencia) . 185
Fue Karl Heinz Esser el que acuñó dicha denomina- sí, brazos del transepto cubiertos también de cañones trans-
ción al relacionar este tipo de planta, tradicionalmente con- versales y capillas con el mismo sistema pero longitudina-
siderada como "plan típico cisterciense", con la figura de San les, como se puede ver por ejemplo en Fontenay— . Este t87
numerosas iglesias de su filiación construidas o al menos dise- de Clairvaux y fundada en el período de tiempo señalado— se
ñadas o trazadas entre I I 3 5 —fecha de comienzo de Clair- adoptó ese plan, y además las fuentes documentales nos
vaux II— y I I 5 3 —muerte del santo—, siguen este plan. informan de que uno de los monjes fundadores, Nivardo,
Posteriormente Hahn indicó que la influencia no se sería el encargado de elegir el sitio y dar la traza del nuevo monas-
reducía a la planta del edificio, sino que se acompañaba a terio, trafandole (...) conforme al de ClaravaP . Debemos por tanto,
9
menudo de un sistema de abovedamiento específico —nave dejando ahora de lado la intervención de monjes y conversos
central cubierta con bóveda de cañón apuntado, las latera- en la construcción de las abadías cistercienses , añadir el I90
les con una bóveda análoga pero perpendiculares al eje del nombre de Nivardo a la nómina de aquellos que, siguiendo
templo, quedando divididas en tramos comunicados entre un procedimiento habitual en el seno de la Orden, fueron
186 Por ejemplo, en I953; vid. también EYDOUX, I953 y DlMIER, se bolvio a Claraval Muchos autores a partir de entonces recogieron la noti-
I964: I0I-I02; idem, I966: 697-70I. cia (YEPES, I609-I62I: III, 346-347; ARGAIZ, I675: 348v-349r; FLO-
187 HAHN, I957: 78-82 y 257-258. Un buen resumen de estas teorías REZ, I76I: 269; MANRIQUE, I642-I659: II, 87; ORTEGA RUBIO, I895:
en ROMANINI, I992: 4 I 7 - 4 I 8 y ASCANI, I993: 8I7-820. I38; FERNÁNDEZ DE BETHENCOURT, I897: I, 546; GUILLÉN ROBLES,
188Véase por ejemplo, BENÓIT, I992 y STALLEY, I994: I7-I9. I887: I2; GUTIÉRREZ CUÑADO, I9I3: 3I; o YÁÑEZNEIRA, I95I: 280
189 Tumbo, fol.47v-n.63; también en el fol.50v-n.69 se dice: Edificado nota 20).
el monasterio y venidos los monjes, el Santo padre Nibardo hermano de nuestro padre San Sobre este particular, vid. lo que se comenta en la introducción
I90
Bernardo, que avia venido con la infanta, y estuvo aca mientras se edificó el monasterio,
artística.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
110
y cegado el sobreclaustro las de la nave del Evangelio. Pero a
pesar de las reformas bajomedievales y modernas se puede
reconstruir fielmente la organización de estas zonas, gracias
a los restos conservados, a los datos aportados por las fuen-
tes y a su comparación con otros monasterios de la orden.
La configuración que presentan hoy día la capilla
mayor y colaterales contiguas es resultado de la gran reforma
que tuvo lugar en el templo a mediados del siglo XVI. En
1546 el abad Lorenzo de Horozco mandó derribar la anti-
gua capilla mayor de la iglesia porque era vieja, pequeña, obscura
y baja , al tiempo que las capillas colaterales de San Juan
193
191 Por ejemplo, Roberto a Noirlac, Burchard a Balerne y Gilberto a 194 Tumbo, fol.66v-n.110 a 67v-n.112; YEPES, 1609-1621: III, 349;
Fontmorigny, en Francia; Geoffrey d'Ainai a Fountains (Gran Bretaña) ORTEGA RUBIO, 1895: 140; GUILLÉN ROBLES, 1887: 19-20; GUTIÉ-
y Clairmarais (Holanda); Gerard a Alvastra (Suecia); Alberto faber a RREZ CUÑADO, 1913: 52-54; ANTÓN, 1923 (3): 61 y 69-70; idem,
Sobrado (La Coruña) o Bernardo a Oya (Pontevedra), en España; etc. 1942: 124, 127-128, 135-136; idem, 1953: 313; GARCÍA CHICO, 1940:
Además de los trabajos de Esser, Eydoux, Dimier, Hann y Benoit cita- 30; idem, 1959: 30, 32 y 36-38; YÁÑEZ NEIRA, 1972: 109; ARA GIL,
dos en las notas 3 a 5, es interesante la consulta de AUBERT, 1947: I, 1986: 11-12; idem, 1998: 227; LÓPEZ GARCÍA, 1990: 79; CASTÁN
97-99; DIMIER, 1964: 108-110; VALLE PÉREZ, 1982: I, 36, 42, 67 y LANASPA, 1998: 349-350; BANGO TORVISO, 1998 (3): 287; PUENTE,
288; así como la nota 53 de nuestra introducción artística. 2002: 25; SAN JOSÉ NEGRO, 2002: 40-41 Y 83-84.
192 TORRES BALBÁS, 1952: 107 y ARA GIL, 1986: 11, han destacado
este aspecto, relacionándolo con un claro espíritu goticista.
193 Carta de fray Antonio de Vega..., fol.305v. Por su parte, el autor del
Tumbo añade que se deshizo por ser algo escura y pequeña conforme al cuerpo de
la yglesia (fol.66v-n.110).
FUNDACIONES MASCULINAS • 111 •
195 En un trabajo previo ya analizamos la historia de esta capilla desde Más adelante, al hablar de la capilla de San Rafael, aludiremos a las
1 9 8
su fundación como panteón funerario hasta principios del siglo XVII primeras normativas que impusieron los cistercienses en cuestión de ente-
(GARCÍA FLORES y RUIZ SOUZA, 1999), en el cual se puede encontrar rramiento de laicos en sus cenobios y las consecuencias que tuvieron
noticias y abundante bibliografía sobre la familia de los Vega, su genea- sobre su arquitectura.
logía, etc. Ahora nos detendremos únicamente en el estudio de su arqui- Únicamente conocemos un caso similar a éste en el monasterio
1 9 9
tectura, para más adelante, en el apartado dedicado al proceso francés de Hautecombe: las dos capillas del lado del lado del Evangelio
crono-constructivo, ocuparnos de su cronología como de los enterra- fueron suprimidas en el siglo XIV para construir la gran capilla Savoie o
mientos que acogió hasta finales del siglo XV. de los Príncipes (CLAIR, 1 9 6 0 : 11; idem, 1 9 9 8 : 73).
Para estudiar todo el proceso medieval que lleva a la fundación de
1 9 6 El 26 de junio de 1566 el monasterio concede a Suero de Quiño-
2 0 0
estas capillas y comprender la jerarquización y compartimentación espa- nes la capilla de Santa Catalina en el lado del Evangelio para su enterra-
cial que se irá produciendo en los edificios, véase BANGO TORVISO, 1992. miento y el de su esposa, Elvira de Zúñiga. Esta capilla sería ampliada
Por ejemplo, las dos capillas meridionales de la cabecera de la cate-
1 9 7 posteriormente, tomando la contigua —la de la Santísima Trinidad— y su
dral de Lérida, serán transformadas en el XIV en vocabulario gótico, por advocación cambiada por la de los Reyes, como expresa en su testamento
la misma familia del obispo que consagró el templo en 1278. En la cate- de 11 de octubre de 1588 (sobre esta fundación y su relación con los
dral de Sigüenza, en la capilla extrema del brazo meridional del tran- Q u i ñ o n e s , vid. COLINAS LOBATO, 1 9 8 5 : 1 4 - 1 5 ; idem, 1 9 8 7 ; YÁÑEZ
septo, ocurre un proceso similar al convertirse en panteón de la familia NEIRA, 1 9 8 4 : 2 4 6 ; LLAMAZARES RODRÍGUEZ, 1 9 9 6 ) .
de los de la Cerda, primero, y de los Arce, después, realizándose obras 201 El interior se encuentra elevado respecto al nivel del resto del templo.
importantes de transformación entre los siglos XV y XVI (BANGO TOR-
VISO, 1992: 122-123).
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
112
Lámina 3.
La Espina.
Iglesia, brazo sur
del transepto
y capilla de los Vega.
Lámina 4.
La Espina.
Iglesia, arcosolio
de la capilla
de los Vega.
aquélla por la parte de la iglesia: media caña recorrida por norte y dos al sur, si bien han desaparecido los bultos de
pámpanos entre baquetones, aunque en la segunda aparece alabastro que describiera Jongelin a mediados del siglo
también un conejillo portando el blasón de la fundadora de XVII . Quedan en su interior, sin embargo, unos sillares
202
la capilla, doña María de Escobar -tres escobas-; la cuarta salientes sobre los que encajarían las piezas que conforma-
y la quinta presentan una simple combinación de molduras ban las yacijas. Junto a ellos, en el muro septentrional, un
cóncavas y convexas. El desarrollo de estas arquivoltas no es pequeño nicho acogía los de otro miembro de la familia.
completo en todos los casos. Al norte, el reaprovechamiento Las urnas descansaban sobre un zócalo liso, aunque en dos
de la jamba de la primitiva capilla y la presencia del arcoso- lucillos se han colocado unos frontales organizados en
lio adyacente, destacado del plano del muro, provoca que las arquillos apuntados de intradós trilobulado . 203
cuatro arquivoltas superiores vean interrumpido su arran- Los practicados a mediodía, casi idénticos entre sí,
que. Lo mismo sucede al sur con las dos últimas, debido en son apuntados, con la arista perfilada por una escocia -
este caso a la existencia de un contrafuerte que, situado ori- decorada con flores, tallos y cabecitas- entre boceles que
ginalmente en el extremo del brazo del transepto, fue incor- apoya en las jambas mediante una imposta formada por
porado a la fábrica de la capilla, pudiéndose observar todavía filete, surco, bocel, media caña con cuatrifolias, vástagos y
su goterón. Sin embargo, la segunda y la tercera arquivoltas pequeños rostros, y un último bocel. En el intradós, unos
apoyan sobre las jambas a través de una imposta, análoga a arcos angrelados muy mutilados con su rosca moldurada
la que observamos desde la iglesia. por baquetón entre listel y escocia, apean sobre ménsulas
En los costados de la capilla se abren los arcosolios troncocónicas invertidas ricamente decoradas: cabeza de
que alojaron los restos mortales de sus patronos, dos al hombre con tallos brotando de su boca y una arpía -arco
2 0 21640: VI, 5. lla los restos de dos sepulturas murales del claustro interior (en Resumen del documento
203 Estos frentes proceden probablemente de otros arcosolios abiertos encontrado en el muro central de la Capilla de los Vega el día 7 de julio de 1962, con-
en la galería sur del claustro reglar, en la que se han conservado otros servado en el propio monasterio), y parece que con ellos se mudaron
similares. Lo que sí es seguro es que en 1906 se trasladaron a esta capi- también sus frontales.
FUNDACIONES MASCULINAS • 113 •
204Tumbo, fol.74v-n.121; y, con ligeras variantes, B.N. Mss.8373, fol.57v. 206 B.N. Mss. 8373, fols.26v y 62v.
205 Tumbo, fol.74v-n.121; y, también con algún cambio, B.N. Mss. 2 0 7 Según el Tumbo, fol.74v-n.121, aquí estaba enterrado Hernando de
8373, fols.56r y 57v. Recoge la noticia GUTIÉRREZ CUÑADO, 1913: 73. Vega.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
114
y sus portadores tienen una fisonomía distinta (cabe- que convergen en una clave central y se unen entre sí
llo, plumaje de las alas más duro y esquemático). mediante terceletes, más otros de ligadura que enlazan a
• Los florones y seres monstruosos que adornan el éstos últimos —con los que se conectan a través de claves
conopio carecen del movimiento que presentan sus secundarias— con la clave principal. Estos nervios presentan
compañeros de enfrente. un perfil triangular formado por un baquetón con filete
entre nacelas; los de las trompas muestran una moldura-
Por lo que se refiere a sus ménsulas, las que recogen el ción diferente: listel flanqueado por dos pares de escocias.
angrelado se decoran con un monje sentado en una silla que Por su parte, los formaletes, de sección prismática, tienen
porta en sus manos un libro abierto, y con una especie de su arista abiselada. En cuanto a las claves, la central lleva las
arpía con alas de murciélago. Las que sirven de arranque a las armas de D o n Enrique Almaraz, obispo de Palencia entre
pilastras llevan un hombre barbado de cuya boca surgen hojas 1 8 9 3 y 1 9 0 7 y principal promotor de las obras de restau-
de parra y, en la otra, un racimo de uvas entre pámpanos . 208
ración del monasterio , mientras que las circundantes
210
A su derecha, en el ángulo formado por este arcoso- lucen los castillos de los Vega y las escobas de los Escobar.
lio y el paramento de la capilla, encontramos una ménsula Las claves de las trompas, de cuerpo hexagonal, llevan por
y el arranque de un arco cuya posición y características decoración dos pisos de arquillos superpuestos.
hacen pensar que estaba previsto realizar otro arcosolio Arcos y nervios de la bóveda central descansan junto
semejante, resultando, de haberse llevado a buen término, con los de las bovedillas de las trompas sobre ménsulas de
un conjunto similar al del muro frontero. En su lugar halla- forma troncopiramidal invertida, ricamente labradas: hom-
mos un lucillo de formas clasicistas y bajo éste un pequeño bre barbado y encogido, cubierto con gorro y con una
nicho de medio punto con la arista matada en escocia y jarrita o bolsa entre sus manos; dragón; ave con la cabeza
decorada con bolas y diamantes . 209
sobre el pecho cobijando entre sus garras a sus crías; borri-
Se ilumina la capilla por medio de dos vanos. En el quito con alforjas cargadas de cántaros; leones afrontados;
costado meridional, sobre el alfiz que cobija los lucillos, se ¿animal híbrido?; armas de los Vega sobre un lecho de hojas;
abre una ventana compuesta por tres arquivoltas apuntadas, y armas de los Escobar también sobre fondo vegetal. Todas
con su arista perfilada por un bocel flanqueado por esco- están coronadas por cimacios poligonales compuestos de
cias, que se prolongan por las jambas a modo de columni- listel y media caña salpicada de flores y hojas de vid que se
llas provistas de capitel de faja con motivos vegetales y basas prolongan en imposta por todo el perímetro de la capilla.
facetadas. En su interior presenta una tracería formada por Los nervios y formaletes de las trompas que nacen en
tres arquillos apuntados de intradós trilobulado sobre los los ángulos descansan sobre grupos de tres columnillas —más
cuales se abre un rosetón de seis lóbulos inscritos en un cír- gruesa la del medio— provistas de capiteles decorados con
culo; los maineles muestran capiteles y basas idénticas a las tallos entrelazados (S.o.), un negro encogido (S.E.), tres care-
columnas de las jambas. tas (N.o.) y un dragón (N.E.). Estos haces, en el caso de los
En el testero, encima de la línea de imposta que marca occidentales, se interrumpen a la altura de la imposta señalada
el arranque de la cubierta, se dispone un óculo de doble en ménsulas de estructura también similar a las ya vistas 211
rosca anacelada, la exterior recorrida por un fino baquetón, decoradas con grandes máscaras de cuyas narices salen tallos.
con rica tracería en su interior: siete círculos en torno a otro En los orientales, las columnillas bajan hasta el suelo —si bien
central, todos de intradós lobulado. presentan a aquella misma altura amplios capiteles ornamen-
La capilla se cubre con una bóveda nervada de base tados con un mascarón con tallos brotando de su boca (S.E.)
octogonal, empleándose para pasar de la planta cuadran- y con carnosos pámpanos (S.O.)— y descansan en unas basas
gular de la capilla a la ochavada de la cubierta un sistema de formadas en dos cuerpos facetados superpuestos . 212
trompas de esquina provistas en su interior de bovedillas La única capilla de la primitiva cabecera que subsiste
de tres nervios (lám. 5). Se trata de una bóveda estrellada en su forma íntegra es la extrema del lado del Evangelio (láms.
de ocho puntas, compuesta por igual número de nervios 1 y 2). De planta cuadrada , se accede a ella a través de un
213
2 0 8Tanto la estructura de los arcosolios, el empleo de ángeles en las 2 1 1En esta ocasión los cimacios son en forma de cuarto de círculo.
enjutas o el empleo de ciertos elementos decorativos recuerdan al reper- 2 1 2Encontramos la misma tipología de bóveda en las salas capitulares
torio desarrollado en la capilla del contador Saldaña, en Santa clara de de las catedrales de Burgos, Pamplona, Valencia o Barcelona, el capítulo
Tordesillas. Volveremos sobre ello en el apartado dedicado al proceso de la colegiata de Roncesvalles o el presbiterio de la iglesia abacial de
crono-constructivo. Oña. Nos ocuparemos detenidamente de estos conjuntos en el apartado
2 0 9 GARCÍA FLORES y RUIZ SOUZA, 1999: 86. dedicado al proceso crono-constructivo.
La capilla había sido restaurada en 1906 durante el episcopado de
2 1 0 2 1 3Erróneamente, algunos autores sostienen que es rectangular, como
Almaraz. Sobre la labor restauradora de este obispo, vid. REVUELTA por ejemplo EYDOUX, 1954: 197 y VALLEJO, 1995: 53.
GONZÁLEZ, 1990, 637-639.
FUNDACIONES MASCULINAS • 115 •
sencillo arco ligeramente apuntado de sección prismática y en la capilla de San Bernardo y San Benito, la mitad inferior
aristas vivas, que descansa sobre las jambas mediante una del testero y del costado meridional primitivos, presentando
imposta de nacela lisa. Esta moldura se prolonga por el inte- en este último lado una credencia de características similares
rior de la capilla —excepto en el testero— señalando el arran- a la que vimos arriba; en la de San Juan Evangelista y San Juan
que de la bóveda de cañón apuntado que la cubre; y también Bautista también se pueden ver las primeras hiladas del cos-
se extiende por el frente del muro, quedando interrumpida de tado norte y una pequeña parte de las del testero . 218
un lado, por el pilar que separa los tramos de este brazo del
Respecto a la capilla mayor, que ocupaba el área del
transepto y de otro, por el vano situado en el extremo orien-
actual tramo recto , indudablemente sería más alta que las
219
trata, pues, de una credencia para abluciones y lavado de de cañón apuntado que arrancarían de unas impostas que
manos que, como sucede siempre, se ubica en el lado de la enlazarían con las que veíamos bajo el arco de acceso. En el
Epístola . Por su parte, en el lado opuesto se abre una puerta
214
testero se abrirían una serie de vanos seguramente dispues-
adintelada muy moldurada que, como la vista en el testero, no tos en dos registros superpuestos: el llamado triplet —tres
corresponde a los planes originales y da paso a una pequeña ventanas alineadas— en la parte inferior, y un rosetón en la
estancia de servicio en esviaje excavada en el muro. superior, como ocurre en Noirlac, Silvacane, Fossanova,
Santes Creus, Oya e Iranzu . 221
Lámina 6.
La Espina. Iglesia,
brazo norte del
transepto.
Lámina 7.
La Espina. Iglesia,
brazo norte del
transepto
(costado occidental).
Los nervios de las bóvedas presentan dos tipos de tral. Lo encontramos en el tramo extremo del
es: brazo norte . 224
1. de sección rectangular, con las aristas perfiladas por Sus claves están constituidas en todos los casos por un
baquetones y los ángulos del intradós abiselados. sencillo disco liso, sin ningún motivo esculpido. Sí presenta,
Se localiza en los dos tramos del brazo sur y en el en cambio, la del tramo más meridional del brazo sur res-
contiguo al crucero del brazo norte . 223
tos de pintura roja, verde y negra que representan una flor
2. de sección triangular, están formados por un haz inscrita en un círculo, extendiéndose la decoración a los
de tres baquetones, más grueso y saliente el cen- nervios, en este caso sencillos diseños geométricos . 225
223 Sobre este tipo de nervio, vid. más abajo lo que se dice al estudiar 1 9 8 6 : 5 8 ) —sobre la c r o n o l o g í a d e los Capitula e Instituta, vid. los
los perfiles de nervios de las naves. comentarios expuestos en la nota 38—. Por su parte, PARK hace un
u n fragmento de este tipo de nervadura se conserva en el claustro
2 2 4 repaso a toda la normativa relativa a la presencia de pinturas en casas
del monasterio, tal vez procedente del desmonte de alguna de las bóve- de la Orden y ofrece numerosos ejemplos en que aparecen decorando
das de esta zona del templo. Perfil semejante encontramos en los hemi- iglesias y dependencias, señalando que los primeros motivos geomé-
ciclos de la cabecera de Sandoval; naves de Rueda; transepto, nave central tricos coloreados —semejantes a los de La Espina— se localizan desde
y galería del capítulo y mandatum de Veruela; capilla mayor de San finales del siglo XII (1986: 189-197). En nuestro país encontramos
Andrés de Arroyo; sala capitular de Fitero; galería del mandatum y tra- restos de pinturas con motivos geométricos, por ejemplo, en la capilla
mos septentrionales de la del capítulo de Iranzu; etc. de San Pedro de Valbuena (mediados del siglo XIII), en la nave norte
La legislación de la o r d e n desde muy temprano prohibió expre-
2 2 5 de la iglesia de Las Huelgas de Burgos —acompañadas aquí por moti-
samente la presencia de pinturas en sus monasterios. Las primeras refe- vos heráldicos— (ca. 1279) o en las capillas de San Martín y La Mag-
rencias las encontramos en uno de los Capitula —el X X V I ; su dalena, en Huerta (finales del XV o principios del XVI).
equivalente en los Instituta es el número XX— fechados por HOLDS- Aunque centrado en el empleo del color en el hábito y la teoría estética
WORTH (1986) y NORTON (1986: 324) entre 1122 y 1135, si bien de Bernardo sobre la luz y el color, hace alusión al empleo del color en
aquél señala que puede ser algo anterior (Ibid: 54; también TALBOT, la iglesia PASTOUREAU, 1998: 26.
FUNDACIONES MASCULINAS • 117 •
Lámina 8.
La Espina. Iglesia, brazo
sur del transepto.
Lámina 9.
La Espina. Iglesia,
brazo sur del transepto
(costado ocidental)
Los formaletes, excepto los adyacentes a las capillas brazo norte sigue la misma decoración que aquéllos, la del
intermedias —reformadas en el siglo XVI—, presentan perfil brazo opuesto lleva hojas finas con nervio central marcado
rectangular con su arista recorrida por un baquetón. rematadas en una sencilla y estilizada hoja nervada. Los
Los perpiaños intermedios —los torales son obra de collarinos son aplastados y están recorridos por una inci-
mediados del XVI —, son doblados y apuntados, ambos de sión. Por último, los fustes descansan mediante moldura de
perfil prismático y con las aristas suavizadas por baqueto- nacela sobre una pieza cónica inversa —lisa en el caso de las
nes. Hay, no obstante, una ligera diferencia entre los dos situadas en el brazo sur, decorada con hojas de múltiples
brazos: los boceles que recorren las aristas del arco del lóbulos las correspondientes al brazo norte— y rematada
brazo norte son considerablemente más gruesos que los del por un disco ornado con florones en su base, excepto en la
brazo opuesto y además originan en la rosca e intradós sen- occidental del brazo norte, en donde muestra un junquillo
das escocias. y un cilindro liso rematado en forma de embudo.
Apoyan éstos sobre columnas entregas que no bajan Los nervios voltean, de un lado, sobre las pilastras en las
hasta el suelo sino que se interrumpen a gran altura, espe- que se entregan esas columnas. Dichas pilastras están provis-
cialmente las situadas a oriente, cuyo fuste se reduce a un tas de capiteles prismáticos, todos lisos excepto los occiden-
solo tambor. Sus capiteles, coronados por cimacios de tales del brazo sur, que se ornamentan con hojas nervadas muy
nacela lisa, presentan a oriente cesta troncocónica invertida estilizadas dispuestas en la zona superior; sus cimacios son de
decorada con crochets de nervios marcados dispuestos en nacela lisa. Las situadas a oriente se levantan sobre un basa-
los ángulos, dejando libre el resto de la cesta, mientras que mento rematado en talud que se continuaba por el muro hasta
a occidente la cesta es troncopiramidal y si la columna del llegar a la embocadura de las capillas . A occidente estas
226
mento hasta interrumpirse de modo limpio zalo de Sobremazas, quien se compromete en 1 5 5 4 a cons-
aproximadamente 1 metro antes de llegar al ángulo truir de nueva planta el cimborrio, sin que en las
S.O. (lám. 9 ) . 227 condiciones se aluda a un posible reaprovechamiento de una
fábrica preexistente.
De otro lado, los cruceros arrancan en los ángulos
N.E. y N.O. del brazo norte del transepto de pequeñas pie- La primitiva configuración de los pilares torales occi-
zas troncopiramidales invertidas, decoradas sus tres caras dentales —los orientales fueron remozados por completo
con motivos vegetales estilizados, con largas hojitas rema- durante la intervención renacentista—, con núcleo cruci-
tadas por tres lóbulos picudos que nacen de un tallo común, forme y una columna entrega en cada frente más otro codi-
mientras su base se orna con una flor de múltiples pétalos; llo intermedio, nos hace pensar que posiblemente ese
estas mensulillas están coronadas por cimacios poligonales codillo dispuesto en el ángulo que mira hacia el crucero sir-
—de tres lados— de nacela lisa. En los ángulos S.E. y S.O. del viese de apeo a las nervaduras de una bóveda de crucería,
brazo sur lo hacen sobre ménsulas-columnilla acodilladas solución empleada de modo asiduo en los templos de los
que aparecen suspendidas a elevada altura: presentan capi- cistercienses230.
230
teles de cesta troncocónica decorados con sencillos crochets La organización de los testeros del transepto difiere
dispuestos en uno (S.O.) o dos (S.E.) pisos con cimacios como es lógico de un lado a otro. El del brazo norte presenta
poligonales de nacela lisa y corto fuste que apea a través de en su parte inferior tres vanos (lám. 6 ) . Próxima al
231
una moldura anacelada sobre una pieza troncocónica inver- extremo occidental y a metro y medio del suelo, se abre una
tida lisa, rematada por un disco decorado con flores de puerta con arco rebajado de sección prismática y arista viva
pétalos redondeados . 228
que descansa sin mediación de impostas sobre las jambas,
2 2 7El zócalo no aparece cortado de forma brusca o chapucera, tal y brazos; lo mismo apunta MARTÍNEZ TEJERA, 2002: 149. Volveremos
como podría pensarse en una primera aproximación especialmente sobre el tema en el apartado dedicado al proceso crono-constructivo.
debido a la apertura en el ángulo mencionado de un paso hacia la capi- 2 2 91923 (3): 65; idem, 1942: 128, 130 y 136; idem, 1953: 313.
lla de las reliquias, sino que está bien rematado, con la molduración 2 3 0Santes Creus, Rueda, Bujedo, Huerta, etc (vid. al respecto la mono-
haciendo esquina. En el apartado dedicado al proceso crono-construc- grafía de Palazuelos).
tivo trataremos de dar una explicación a estos hechos. 2 3 1Hay que hacer notar el menor grosor que se aprecia en el muro
2 2 8ANTÓN (1942: 138) pensaba que las anomalías que presentan los aproximadamente a partir de media altura. Más adelante, al hablar del
apeos de las bóvedas del transepto podían tener su origen en el hecho de proceso crono-constructivo, trataremos de aclarar las causas de esta ano-
que en realidad estaban previstas bóvedas de cañón apuntado para los malía.
FUNDACIONES MASCULINAS • 119 •
para acceder al dormitorio después de Completas y para bajar desde ron en ella y los altares y reliquias que guardaba, vid. Tumbo, fols.400-420
aquel a la iglesia para los oficios que le dan su nombre. - n.721-760; ORTEGA RUBIO, 1895: 140; GUTIÉRREZ CUÑADO, 1913:
233N o obstante, el banco de madera que se adosa a lo largo de estos 77-86; J.D.B., 1937: 260; ANTÓN, 1942: 124, 128 y 137; GARCÍA
paramentos impide comprobar eficazmente este supuesto. CHICO, 1959: 32; MARTÍN GONZÁLEZ, 1968: 84-85; YÁÑEZ NEIRA,
ANTÓN señala que el vano es apuntado (1942: 34). Sin embargo,
2 3 4 1972: 116, 118 y 120; RODRÍGUEZ DE DIEGO, 1982: 170; BUSTA-
nada hace pensar que aquél haya sufrido una reforma en época reciente, MANTE, 1983: 479; ARA GIL, 1986: 12; LÓPEZ GARCÍA, 1990: 114 y
pues todas sus dovelas están bien situadas en ese lienzo de muro y no pre- 131-132; FERRERO MAESO, 1995: 134 y 202; SAN JOSÉ NEGRO, 2002:
sentan huellas de haberse retallado. 41y 81; etc.
235Monsalud, La Oliva, Piedra, Santes Creus y Benifassá, en España;
Obazine y Pontigny, en Francia; Altenberg y Marienstatt, en Alemania; etc...
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
120
El brazo longitudinal de la iglesia está formado por
tres naves de seis tramos cada una, más ancha y alta la cen-
tral que las laterales (lám. 10). A los pies se levanta el coro
en alto, construido probablemente coincidiendo con la
reforma de la cabecera y crucero . o c u p a los dos últimos
238
241 Así son los segundos pilares exentos del cuerpo de naves de San- 2 4 2También los encontramos en la iglesia de San Nicolás de Pamplona,
doval y sus responsiones traducen esta misma organización, mostrando relacionado por otros aspectos (organización de los tramos de los bra-
una columna adosada a una pilastra flanqueada por sendos codillos. En zos del transepto) con Sandoval y Valdediós (ECHEVARRÍA y FERNÁN-
Gradefes encontramos este modelo de pilar únicamente en lo que hubiera DEZ GRACIA, 1987: 722 y 734; GARCÍA GAINZA, 1997: 147-149; o
sido, de haberse completado las naves, el segundo soporte exento de la MARTÍNEZ ÁLAVA, 2007: 383 y 390, el cual pone en relación la estruc-
nave de la Epístola; únicamente se aprecian los lados que dan hacia lo que tura de este pilar con la catedral vieja de Salamanca o modelos borgo-
sería nave lateral y parte del que da a lo que hubiese sido nave central, ñones como Pontigny o Vezelay, datándolo en la segunda década del
mostrando idéntica solución a la del cenobio vallisoletano. Respecto a XIII), aunque no en todos los casos se desarrollan por igual: en el toral
los pilares de Valdediós, cuya relación con los de La Espina fue señalada S.O. aparece completo, más en el N.O., en los segundos pilares exentos
por TORRES BALBÁS (1952: 107) y SOWELL (1987: 180), no difieren en y en el tercero de la Epístola sólo parcialmente; las causas de estas ano-
su estructura pero sí en otros aspectos que más adelante comentaremos; malías hay que buscarlas en el largo proceso constructivo y en las refor-
sus responsiones en los muros siguen el modelo del monasterio femenino mas sufridas desde el siglo XIV.
leonés, una simple columna. 243 Núms. VIII y XI.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
122
Lámina 12.
La Espina.
Iglesia, basamento
y basas del pilar
núm. XIV.
Lámina 13.
La Espina.
Iglesia, basamento
y basas del pilar
núm. IX.
una pilastra en cuyo frente se adosa una columna, más otra trando el del Evangelio y unos centímetros en el extremo
acodillada a cada lado . Por último, en los ángulos N.O. y
244 norte de la fachada occidental el tipo 2, mientras que en la
S.O. se disponen simples columnas de esquina (figs. 3 y 4). de la Epístola y resto del cierre oeste se emplea el tipo 4; a
Los basamentos sobre lo que se elevan los soportes lo largo del costado sur y tramo más meridional de la
exentos son octogonales, en forma de T los adosados y fachada, entre pilar y pilar, se dispone un banco corrido de
simples cubos los angulares. Dependiendo de su configu- piedra cuya anchura coincide con la de los podios de las
ración y de la molduración empleada podemos distinguir columnas acodilladas. La diferencia de altura entre los basa-
tres modelos : 245
mentos y zócalos de ambas naves se salva de una manera
un tanto "chapucera" a lo largo de la fachada occidental:
1. con la arista anacelada; en los exentos la hilada disminuyendo progresivamente su altura de Sur a Norte.
superior de los lados oblicuos está constituida por
resaltes esquinados que se corresponden con los Columnas y codillos presentan basas de tipo ático con
codillos que integran el pilar (lám. 12) . 246
toro inferior en forma de cuarto de círculo -algo aplastado
en los pilares exentos situados a mediodía y occidente-,
2. con la arista rematada en bocel, muestran la última escocia alta y fino toro superior, elevadas sobre plintos para-
hilada dispuesta como el grupo anterior (lám. lelepípedos que en el caso de los primeros pilares adosados
13) . 247
del lado del Evangelio van decorados con una banda de
249
3. formados por dos cuerpos superpuestos, el infe- flores de ocho pétalos o cadenas de círculos (lám. 15) . 250
rior lleva la arista abocelada y el superior, algo Las correspondientes a las columnas llevan voluminosas
retranqueado respecto a aquél, anacelada. Estos garras en las esquinas, adornadas en ocasiones con bolas,
basamentos son considerablemente más altos que cogollos o simples incisiones.
los otros (lám. 14) . 248
modo de zócalo por los paramentos de las naves, mos- los motivos decorativos que presentan, lo cual nos ayudará
2 4 4 Núms. XIII, XVI, XVII, XX, XXI, X X I V X X V XXVIII, XXIX, 2 5 0La mitad derecha del correspondiente al núm. XI y todo el núm.
XXXII, X X X I V y X X X V En el pilar X V I la columna acodillada a X X son producto de la restauración llevada a cabo en los años 50 del
occidente fue casi por completo eliminada a raíz de la apertura de un siglo XX. En la cabecera del monasterio de Sandoval, con el que ya hemos
paso en esviaje hacia la llamada capilla de San Rafael, conservando sola- visto más puntos de contacto, también se emplean plintos con decora-
mente parte del capitel original. ción semejante, aunque más barroquizante.
2 4 5 El tipo 1 corresponde al visto en la cabecera y parte del transepto. 2 5 1En Sandoval -excepto el que recoge la segunda dobladura del for-
2 4 6 Núms. XI, XIII, XX, XXI, XXVIII, XXIX y X X X V I -adosa- mero- y Gradefes, los codillos también van provistos de capiteles, en
d o s - y XIV, XV, XVIII, XIX, XXII, XXIII, XXVI, XXVII, X X X y cambio en Valdediós únicamente aparecen en las embocaduras de las
XXXI -exentos-. capillas laterales de la cabecera. En San Nicolás de Pamplona el codillo
2 4 7 Núms. IX y X. Zócalos semejantes los podemos ver en Sandoval, intermedio que mira a la nave central lleva capitel, pero no el corres-
Valdediós, Gradefes o Matallana. pondiente al núcleo del pilar; los codillos bajos llevan todos capitel.
2 4 8 Núms. VIII, XVI, XVII, X X I V X X V XXXII a XXXV. Con el Este mismo "embellecimiento" de codillos lo encontramos en la nave
fin de que los arranques de los perpiaños y formeros estuvieran a la de Fitero, en la cabecera y primer tramo de las naves de Valbuena (vid.
misma altura se redujo la del fuste de estos soportes. la monografía correspondiente), Fontenay, entre otras iglesias cister-
249 Núms. XI, XIII y quizás el XX. Este último es producto de las res- cienses. También los localizamos en algunos templos zamoranos, como
tauraciones de mediados del siglo XX, por lo que no podemos asegurar si Santa María del Azoque, en Benavente, o la colegiata de Toro, y en la
fue tallado basándose en restos anteriores o simplemente fue inventado. catedral de Salamanca.
FUNDACIONES MASCULINAS • 123 •
T I P O II:
11.1. Cesta lisa, sin decorar . 256
252 A la hora de numerar los capiteles de los pilares exentos se han 259 Núm.67 (XVIII).
agrupado en un único número los respectivos grupos de tres codillos — 2 6 0Núm. 3I alto (X).
cuatro por pilar—, especificando en el caso de que los orientados a la 2 6 !Únicamente los núms. 98 y I00 (XXIII), I05 (XXIV) y I08
nave central muestren entre sí distintos motivos decorativos, si están (XXV) presentan un desbastado troncocónico.
situados en la parte inferior o superior del pilar. A continuación del 262 Núms. I9 (VIII) y 40 (XI).
número de capitel aparecerá entre paréntesis el del soporte. 263 Núms. 22 (IX); 32 y 34 (X); ); 4I a 43 (XIII); 44, 48 y 50 (XIV);
253 Núms. 109 (XXV); 113 a 115 (XXVI); 121 a 123 (XXVII); y 52 y 56 (XV); 78 y 80 (XIX); 82 a 84 (XX); 85 a 87 (XXI); 88, 92
128 a 158 (XXVIII a XXXVI). y 94 (XXII); I I 6 (XXVI) - d e escayola-; I I 8 (XXVII); I20 (XVII)
En el caso de los núms. 97 y 99 (XXIII) y I I I (XXVI), los capi-
2 5 4 - d e escayola— y I 2 7 (XXVIII); el núm. 90 (XXII) lleva la parte infe-
teles están colocados al bies, aspecto ya señalado por ANTÓN, I923 (3): rior surcada por una banda rematada en zig-zag. Ejemplares similares
67 I942: I32 y I39; LAMBERT, I93I: 83; TORRES BALBÁS, I952: I07 los encontramos en el deambulatorio y puerta de monjas de la iglesia de
y ARA GIL, I986: I I . Gradefes; en la puerta del brazo norte del transepto de Carrizo; tran-
Núms. 2I, 23 y 25 bajos (IX); 3I, 33 y 35 bajos (X); 45, 47, 49
2 5 5 septo y nave meridional de Sandoval; nave de Valdediós; monasterios
y 5I bajos (XIV); 53, 55, 57 y 59 bajos (XV); 69 - d c h a - y 73 bajos cuya decoración ha sido relacionada entre sí (por ejemplo por FERNÁN-
(XVIII); 75, 77, 79 y 8I bajos (XIX); 95 bajo, 89 alto y bajo y 9I alto DEZ GONZÁLEZ, I982: 402, 4 I 0 - 4 I 2 ; FERNÁNDEZ, COSMÉN y
(XXII); I I 9 y I25 bajos (XXVII). Ejemplos similares los encontramos HERRÁEZ, I988: 77; VALLE PÉREZ, I99I (3): I56, I68 nota 79, I69
en el primer tramo de las naves de Sandoval. notas 87, 88 y 90; GARCÍA CUETOS, I992: 206, 208 y 209; ÁLVAREZ
256 Núms. 25 alto (IX), 7I alto (XVIII), 9I bajo y 93 (XXII). Este MARTÍNEZ, I999: 2 I 6 - 2 I 7 y 2I8; CASAS CASTELLS, 2005: 443 y 454;
mismo tipo se utiliza en el transepto (núms. I y 3 (II), I0 y I2 (V), 35 PANDO MACÍAS, 2006: I020, I022, I025, I026 y I028). Tal vez a este
alto (X), 36 y 38 (XI)). modelo de capitel se refiera VALLE PÉREZ, I 9 9 I (4): 775, cuando
Núms. 45 y 47 (XIV), 57 y 59 (XV), 73 (XVIII) y 75 y 77
2 5 7 comenta que determinados capiteles de la nave del Evangelio responden
(XIX), todos altos. Análogo lo encontramos en la zona occidental del a prototipos acreditados en Borgoña desde mediados del siglo XII (San
brazo sur del transepto ( I 5 y I 7 —VIII—). Lorenzo de Avallon o Vezelay).
258 Núms. 69 —izqda— bajo (XVIII)-, 97, 99,I0I y I03 altos y bajos
(XXII); y I I I y I I 7 bajos (XXVI).
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
124
Lámina 15.
La Espina. Iglesia,
basamento (tipo 2)
y basas del pilar
núm. X I I I .
Lámina 16.
La Espina. Iglesia,
capiteles núms.
48 a 50.
1.3. Hojas planas y lisas que se vuelven en sus TIPO II: Capiteles de crochets, de amplios tallos
extremos y recogen simples bolas . 264 pegados a la cesta y nervios marcados. Se
1.4. Con hoja intermedia rematada en peque- distinguen algunas variantes:
ños lóbulos . 265 11.1. El modelo más sencillo, constituido por
1.5. Mayor número de hojas lisas y carnosas dis- u n o o dos niveles de hojas de tallos sua-
271
puestas en uno o dos pisos, que se despegan vemente recorridos por nervaduras (lám.
de la cesta y se vuelven para recoger frutos 19) . 272
1.6. numerosas hojas finas con nervio central con nervios marcados y recorridos por
marcado rematadas en una sencilla y esti- tallos de los que nacen hojitas de múlti-
lizada hoja nervada —análogos a la hoja ples lóbulos . 276
vista en el tipo II.2 de los codillos—, todo TIPO III: Cestas con grandes hojas carnosas de
ello muy grosero (lám. 17) . 269 múltiples lóbulos lanceolados, con ner-
1.7. Grandes hojas dispuestas en un solo piso, vios muy marcados —análogo al tipo III
con nervios verticales fuertemente marca- de los codillos— . 277
dos, alternadas con una sencilla pica en su TIPO IV: Capiteles con decoración vegetal natura-
base . 270
lista
den por la superficie de la cesta y se unen maletes reiteran los modelos vistos en el brazo sur del tran-
en una palmeta (lám. I 8 ) . 278 septo: de sección prismática, molduran sus aristas con
IV2. Altas y estrechas hojas de acanto de múl- baquetones ; y al igual que sucedía en el transepto, las cla-
286
tiples y finos lóbulos con nervio central ves de las nervaduras están resueltas simplemente mediante
perlado, rematadas en cálices o flores de un disco plano, mostrando la correspondiente al primer
lis , acompañadas a veces por otras hojas
279
tramo restos de pinturas semejantes a las que vimos en el
variadas de menor tamaño . 280
brazo sur del transepto (lám. 23). Por lo que respecta a los
perpiaños, excepto el toral, presentan el mismo perfil que
Sobre los capiteles se disponen cimacios que respon- veíamos en el brazo meridional de la nave transversal —rec-
den en grandes líneas a dos modelos bien definidos: por un tangulares con aristas aboceladas—, acompañados por
lado, el más simple, de nacela lisa —únicamente en una oca- dobladuras de perfil semejante; el toral, en cambio, sigue la
sión aparece decorado con flores— , extendido por casi
281
molduración empleada en el brazo norte: los boceles de las
todo el cuerpo de naves , si bien debemos hacer notar un
282
aristas, muy gruesos, provocan en rosca e intradós sendas
pequeño detalle que afecta a los situados en la parte baja de escocias , y carece de dobladura hacia el crucero .
287 288
La nave central, considerablemente más alta que las siguiendo un procedimiento ampliamente utilizado en las
laterales, se cubre con bóvedas de crucería cuatripartita de iglesias de los cistercienses . Éstas presentan un capitel de
290
o en el transepto y naves de Valdediós. Recordemos que el resto de los torales desaparecieron a mediados
2 8 8
279 Núm. 39 (XI). del siglo XVI durante las obras de remodelación de la cabecera y crucero;
2 8 0Núm. 18 (VIII). Tanto este ejemplar como el anterior puede rela- la ausencia de dobladura hacia el transepto puede deberse a esas inter-
cionarse con los empleados en la capilla mayor de Gradefes (vid. foto- venciones.
grafías en págs. 32 y 33 del libro de CASADO y CEA, 1987). 289 Las correspondientes a los pilares XXII y XXIII están situadas una
281 N ú m . I 0 2 (XXIII). hilada por debajo de las restantes.
282 Soportes VIII a XXII, XXVII y XVIII completos - n o obstante Así sucede o sucedía, por ejemplo, en Valbuena, Matallana, San-
2 9 0
recordemos que estos dos últimos fueron mutilados parcialmente con la doval, Moreruela, Valdediós, Meira, Sacramenia, Bujedo, Monsalud,
construcción del coro alto-, núms. 101 a 103 altos (XXIII) y 115 a 117 Veruela, Rueda, Poblet, Santes Creus, etc., por mencionar únicamente
altos (XXVI). Es el mismo modelo empleado en los brazos del transepto. casos españoles. Las causas que originan esta amputación de las colum-
283 Soportes VIII a XX. nas hay que buscarla en la necesidad de facilitar un adosamiento correcto
2 8 4Núms. 107 a 115 bajo y 117 bajo (XXV y XXVI), 140 a 142, a las sillerías de los coros (AUBERT, 1 9 4 7 : I, 2 7 7 ; COCHERIL, 1972: 77-
147 bajo, 148 y 149 (XXXI y XXXII). 79).
2 8 5Las correspondientes a los tramos quinto y sexto fueron reforma-
das entre I766 y I767 con motivo de las obras llevadas a cabo en el
coro alto, recibiendo entonces bóvedas de arista.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
126
Lámina 19.
La Espina.
Iglesia, capiteles
núms.111-112.
Lámina 20.
La Espina. Iglesia,
capiteles de codillos
(tipo III).
cesta troncocónica provista de cimacio circular compuesto mientras que nervios y formaletes descansan por su parte en
de filete, surco y nacela, y de un delgado collarino, que el codillo dispuesto en los ángulos del pilar . 293
transepto: estrechas hojas lanceoladas que parten de un ventanas con amplio derrame interno que repiten las
único tallo (XIX, lám. 21), a veces rematados en frutos características ya comentadas para las ventanas de los bra-
(IX), en ocasiones separados cada ramillete por sencillas zos del transepto , si bien hay que hacer notar que el
295
hojas alargadas (X y XV). Otros modelos son los que por- arco que forma el vano tiende ahora a apuntarse, mien-
tan hojitas trilobuladas con nervio central perlado unidas en tras la arquivolta sigue el medio punto. La iluminación de
su base (XIV); grandes hojas carnosas de múltiples lóbu-
la nave se completa con el amplio vano rectangular prac-
los afilados, con nervios muy marcados (XXIII), que puede
ticado en la fachada occidental, que no corresponde a la
llevar también una suerte de mora como remate (XXII); o
fábrica original del templo, sino a la época de las reformas
simples hojas planas y lisas ( X V I I I ) . Por otro lado,
292
291 Análoga disposición muestran algunas de las ménsulas de Valde- mente retranqueadas respecto al resto del lienzo en ambos costados del
diós, en concreto las correspondientes a los dos primeros pilares exen- primer tramo; al mismo tiempo, los elementos que conforman los pila-
tos, monasterio con el que ya hemos señalado otros puntos de contacto. res que delimitan este tramo muestran una reducción de su sección en
Ignoramos si en los cuatro últimos pilares (XXVI, XXVII, X X X
2 9 2 esas mismas hiladas. Al hablar del proceso crono-constructivo trataremos
y XXXI), reformados en el siglo XVI, se siguió este mismo sistema. de aclarar este punto.
293 La dobladura del perpiaño, muy fina, apoya prácticamente por 295 Erróneamente, ANTÓN comenta que "se abren en arco agudo" (1942:
completo sobre la columna, y lo mismo hacen los formaletes, que vol- 134). De otro lado, las correspondientes a los dos últimos tramos presen-
tean sobre el codillo; en cambio los nervios de las bóvedas aprovechan tan la parte inferior de sus vanos cegada y no apoyan sobre imposta, ya que
el espacio que les queda libre, abarcando codillos y pilastras. ésta debió desaparecer con las reformas que afectaron a esta zona.
Debemos señalar que las dos últimos hiladas de los paramentos de
2 9 4
flanqueado por dos cavetos. Se localiza en los dos relieve, su talla es fina y cuidada . 304
I. Sobre un disco plano se dispone una flor de múl- 4. Corona de hojas carnosas de múltiples lóbulos y
tiples pétalos, rodeada por una orla de hojitas lan- nervios someramente marcados, en una composi-
ceoladas de nervio central saliente , o inscrita en
302 ción muy movida, tanto por el movimiento de las
2 9 6Los cinco primeros formeros del costado norte y el primero y ter- ria; girola y naves laterales de San Lorenzo de Carboeiro; presbiterio de
cero a quinto del sur. la catedral de Orense, etc.. (VALLE PÉREZ, I982: I, I23, nota 222).
2 9 7El segundo del costado meridional y el sexto de ambos flancos. El correspondiente al cuarto tramo del Evangelio, al igual que los
3 0 1
2 9 8Recordemos que las bóvedas de los tramos quinto y sexto de ambas plementos, aparece recubierto por una gruesa capa de enlucido, desco-
naves desaparecieron durante la reforma que sufrió el coro alto en los nociendo si se trata de una reconstrucción hipotética llevada a cabo
años I766-I767. durante las restauraciones o si se realizó en base a restos que pudieran
299 Perfil análogo encontramos en los cenobios de Sandoval (nervios conservarse.
del crucero, brazo norte del transepto y primer tramo de la nave central); Este tipo de perfil lo podemos encontrar también en los monasterios de
Gradefes (nervios del presbiterio y hemiciclo de la capilla mayor, y algu- Carracedo (fajones de la sala capitular); Sobrado (fajones de la sala capi-
nos tramos de la girola); Valdediós (transepto y nave central); Carrizo tular); Melón (los dos fajones extremos de la girola); Osera (fajones del
(nervios del tramo recto de la capilla lateral de la Epístola); La Oliva hemiciclo de la girola y nervios de la cúpula del crucero); La Oliva (pri-
(fajones de las salas capitular y de monjes); Fitero (nervios del tramo mer tramo de la nave central); entre otros. A estos habría que añadir los
recto del presbiterio, del crucero y de los tres primeros tramos de la nave de las catedrales de Orense y Tuy o de San Vicente de Ávila (VALLE
central); Iranzu (fajones de la nave central); Piedra (nervios del tramo PÉREZ, I982: I, I39, nota 238).
recto de la capilla mayor); Melón (los cuatro fajones intermedios de la Primer tramo del Evangelio.
3 0 2
girola); Osera (fajón de acceso al hemiciclo absidal); etc... 303 Tercer tramo del Evangelio.
3 0 0Como el tipo I de las galerías claustrales de Valbuena, se halla en La clave del cuarto tramo del Evangelio, decorada con los símbo-
3 0 4
otros muchos monasterios de la Orden, como en Carracedo (nervios de los de la Pasión de Cristo, pertenece a las labores de restauración lleva-
la sala capitular); Monsalud (nervios y fajones de la sala capitular); Melón das a cabo en este tramo.
(nervios de las naves laterales); Osera (nervios del hemiciclo absidal); Segundo tramo de la Epístola.
3 0 5
entre otros. También lo encontramos en la cripta del Pórtico de la Glo- Segundo tramo del Evangelio.
3 0 6
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
128
Aquellos voltean sobre columnas adosadas a los fren-
tes de pilares exentos y pilastras de las responsiones, mien-
tras que los doblados lo hacen en el primer caso sobre el
núcleo del pilar y en el segundo sobre la columna central de
los adosados. Por su parte los nervios apean de un lado
sobre los codillos angulares de los pilares centrales y de otro
en las columnas acodilladas de las responsiones.
u n último detalle debemos resaltar del aboveda-
miento de las naves laterales. El hecho de que los formeros
sean apuntados y los perpiaños de medio punto y más bajos
que aquéllos provocó que fuera necesario trasdosar a éstos
últimos con una hilada de sillares —alguna más a partir del
quinto perpiaño—, para poder lograr la curvatura apropiada
de los plementos . 311
hojas como por el juego de luces y sombras creado tola carece de aperturas, y en el segundo la que hay se encuen-
a través del empleo del trépano (lám. 2 6 ) . 307
tra desplazada hacia occidente y su arco presenta una curiosa
forma de cuarto de círculo, condicionado seguramente por la
5. o c u p a el centro de la composición una flor de cua- construcción en ese lado de la capilla de San Rafael. En el
tro pétalos, rodeada por dos coronas de hojas de tres quinto tramo de este mismo costado se abrió en la parte baja
lóbulos y nervio central marcado, muy carnosas . 308
del muro un ventanuco con arco rebajado tras la construcción
Los perpiaños que delimitan los tramos son de medio del coro alto. Tal vez se abriesen también vanos en los lien-
punto y doblados, de sección prismática, pero al igual que zos occidentales, como ocurre por ejemplo en Palazuelos,
veíamos en los formeros se pueden distinguir dos tipos: con aunque no queda huella alguna de ellos.
las aristas vivas o cortadas a bisel . Respecto a las dobla-
309
En cuanto a las puertas, de la fábrica original sólo
duras, encontramos también dos modelos diferentes: las subsiste la de monjes, contigua al transepto en el primer
que se perfilan con bocel o las que están anaceladas . 310
tramo de la nave norte. Presenta por este lado arco de
delación del coro y estancias anejas alteró sustancialmente los pies de la 1942: 133; idem, 1953: 312.
iglesia, eliminando prácticamente cualquier vestigio de los dos últimos ANTÓN, 1923 (3): 68; idem, 1942: 133-134.
3 1 2
tramos), los cuatro primeros y el último de la nave del Evangelio y los Desapareció la correspondiente al quinto tramo de la nave norte
3 1 3
dos primeros y el cuarto de la de la Epístola. Al segundo tipo pertenece con la construcción de las estancias adyacentes al coro alto, mantenién-
el tercero de esta última nave. dose la del sexto tramo algo maltrecha.
310 El primer modelo está presente en los cuatro primeros de la nave de El que se abran ventanas en el costado adyacente al claustro no es
3 1 4
la Epístola, en los tres primeros y el último del Evangelio (de este arco sólo algo extraño, y así las podemos ver en Valdediós, Meira, Sierra, Sacra-
se ha conservado el lado oeste. El segundo aparece en el quinto de la Epís- menia, Iranzu, Santes Creus, etc.
FUNDACIONES MASCULINAS • 129 •
Lámina 23.
La Espina. Iglesia,
clave de bóveda
(primer tramo
de la nave central).
Lámina 24.
La Espina. Iglesia,
clave de bóveda
(primer tramo
de la nave de la epístola).
en el lienzo occidental de la nave norte. ¿Se realizaría enton- plano de Anselmo Arenillas de 1953 aparece reflejado que la
ces la entrada por la portada central? En principio todo hace puerta mencionada es la que ejercía esa función. De planta
pensar que así fuera . 318
cuadrangular, con contrafuertes prismáticos escalonados y
sucediera lo mismo, pues tampoco encontramos la mencionada puerta mos sobre este asunto, y en el apartado dedicado al proceso crono-cons-
en el séptimo tramo, si bien éste fue parcialmente reformado en el siglo tructivo lo retomaremos.
XVII con motivo de la construcción de la nueva fachada. 1942: 126.
3 1 9
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
130
que actuara como sacristía 320 . tramo extremo del lado oriental -el anejo a la capilla mayor
Del primitivo alero de estas capillas quedan única- fue reformado y tapado por la capilla de San Juan-, mien-
mente las huellas dejadas por los canecillos, que fueron tras que por occidente es el tramo contiguo al crucero el
cepillados, sobremontado por el lienzo de muro que corres- que, aunque oculto por el tejado que cubre las tres naves
ponde a la elevación de la intermedia y a un comparti- del templo, se conserva en buen estado. En cuanto al brazo
miento estanco elevado sobre la extrema. sur, únicamente son perceptibles los dos tramos del lado
En el brazo sur destaca la enorme fábrica de la Capilla oeste - e l extremo desde el exterior, el intermedio bajo la
de los Vega. Se eleva sobre un alto rebanco de arista superior cubierta mencionada-, ya que el oriental queda oculto por
achaflanada . Sus muros están reforzados por gruesos con-
321 las capillas de San Bernardo y de los Vega.
Santa Espina.
FUNDACIONES MASCULINAS • 131 •
Láminas 26 y 27.
La Espina. Iglesia,
clave de bóveda
(tercer tramo de las naves
de la epístola y del evangt lio).
Cada brazo estaba dividido en dos tramos por un gruesos contrafuertes prismáticos rematados en talud que
contrafuerte prismático que llegaba hasta el alero rema- llegan hasta el alero y se corresponden con los perpiaños
tando en talud y que se corresponden con los perpiaños del interiores (fig. 6) . 330
Tampoco hay restos del macizo, seguramente prismático, Por lo que se refiere a las naves laterales, de la de la
que alojaba la escalera de caracol de subida a cubiertas, y Epístola son visibles por completo los cuatro últimos tra-
que se situaba en el extremo oriental del brazo norte, entre mos y una pequeña parcela del segundo. Lo que resta, es
las capillas de la cabecera y el pabellón de monjes . 329
decir, mitad oriental del segundo tramo y todo el primero,
La nave central, más elevada que las laterales pero de queda oculto por la capilla de San Rafael.
igual altura que el transepto, permanece oculta desde el Aparece esta nave jalonada por cuatro gruesos con-
siglo XVIII por unos compartimentos construidos sobre las trafuertes que marcan la compartimentación interior en tra-
colaterales (lám. 30). Aparece dividida en seis tramos por mos (lám. 31). Son prismáticos y lisos —el goterón que
íntegro, en cambio su compañero del brazo norte está desmochado. Al de San Juan, San Bernardo y de los Vega; y del occidental, la del tramo
este no se han conservado en ninguno de los brazos. extremo.
Se conservan la parte inferior del situado en el lado occidental del
3 2 6 329 Los husillos de Monsalud y La oliva, por ejemplo, están insertos
brazo sur, visible desde la capilla de San Rafael, y la superior del lado en bloques prismáticos de tamaño considerable que destacan y sobresa-
oriental de este mismo brazo, embutido en la capilla de los Vega. len respecto a la fábrica del templo.
Desconocemos la razón por la cual el tramo contiguo al crucero del
3 2 7 Prácticamente todos ellos están desmochados.
3 3 0
brazo sur carece de este elemento, ya que el extremo sí lo tiene. El corres- De los correspondientes al costado norte han sido cepillados casi
3 3 1
pondiente al lado oriental del brazo norte quedó oculto por el recreci- en su totalidad, conservándose algunos en el quinto tramo, y los del sexto
miento del muro de las capillas. tramo del lado opuesto llevan la arista central biselada.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
32
En cada uno de los tramos -salvo en el primero-, se
abre una ventana, con la peculiaridad de que la situada en
el segundo tramo en lugar de estar centrada como el resto
aparece desplazada hacia occidente y arranca una hilada
más abajo que las restantes. Ésta presenta además unas
características que no encontramos en el resto (lám. 32).
Consta de un vano en arco de medio punto -tallado en un
solo sillar- con la arista recorrida por un fino baquetón
que provoca en la rosca una escocia, que voltea directamente
sobre unas jambas que continúan su molduración. Lo tras-
dosa una arquivolta apuntada, de sección prismática, que
perfila su arista con un grueso bocel provocando tanto en
la rosca como en el intradós una escocia de remate redon-
deado, cuyo desarrollo no es completo: del lado derecho
queda interrumpido por el cierre occidental de la capilla
de San Rafael, pero de tal manera que su última dovela está
labrada en un sillar que forma también parte de las hiladas
del paramento de la capilla; y del izquierdo, por el propio
lienzo del tramo, que hace las veces de jamba. Una cham-
brana muy deteriorada e igualmente incompleta la corona.
Las razones de esa alteración habrá que buscarlas, sin duda,
en la construcción de la capilla de San Rafael . 335
tra un adelgazamiento progresivo en curvatura. Del situado áticas elevadas sobre plintos paralelepípedos lisos - l a del
en el extremo occidental permanece su parte inferior, ya sexto tramo con la escocia más elevada, las del tercero y
que la superior fue cepillada durante la construcción de la quinto decoradas con perlas-, fustes monolíticos y lisos,
fachada dieciochesca. salvo los de la ventana del sexto tramo que son, facetado y
llevadas a cabo a mediados del siglo XX, estos remates fueron renovados, y al proceso crono-constructivo, trataremos de aclarar este problema.
eliminando toda huella de los mencionados florones. Los correspondientes a los dos últimos tramos fueron repuestos
3 3 6
nota 42); claustro de Veruela (también decorados con florones, puede tanas de las capillas mayor y septentrional, y puerta sur); Piedra (portada
verse una fotografía de ellos en TÓRRALBA SÓRIANO, I982: fots.I5 y occidental de la iglesia); Las Huelgas de Burgos (ventanas bajas de la
I6); los que hasta los años cuarenta mostraba el claustro de San Andrés capilla mayor); catedrales de Cuenca y Burgo de Osma (capillas mayo-
de Arroyo, con remates de castillos y leones (ARA GÍL, I990: 58, nota res); etc...
FUNDACIONES MASCULINAS
• 131 •
Lámina 28.
La Espina. Iglesia
capilla mayor
(exterior).
Lámina 29.
La Espina. Iglesia
capillas laterales
septentrionales
(exterior).
surcado por flores de cuatro pétalos el de la derecha, y con Tipo 3. De hojas planas y lisas pegadas a la cesta
canaladuras el de la izquierda (lám. 33) , y capiteles de
338 ordenadas en dos niveles, con nervio central
cesta troncocónica decoradas con motivos vegetales que rehundido, que en su extremo superior se
varían de unas ventanas a otras, pudiéndose distinguir cua- vuelven hacia fuera formando caulículos y 34I
338 Este modelo de fuste, decorado con acanaladuras ya sean verticales 339 Se localizan en las ventanas del tercer y quinto tramo. Análogos al
como helicoidales o en zig-zag, y decorados o no con pequeñas flores, las tipo II.I del interior de la iglesia.
encontramos en multitud de edificios repartidos por toda la geografía 3 4 0Aparecen en la ventana del cuarto tramo. Pertenecen al tipo III de
española, como por ejemplo, en los ángulos S.O. y N.O del claustro de San l interior del templo.
Andrés de Arroyo y la portada de Santiago de Carrión, en Palencia; inte- 3 4 1capitel derecho de la ventana del sexto tramo.
rior de los ábsides de Santillana del Mar y ventana del presbiterio de 3 4 2capitel izquierdo de la ventana del sexto tramo. Éste tipo, que no
Bareyo, en cantabria; puerta occidental de San Esteban de corrullón, en se corresponde exactamente con ninguno del interior del templo, aun-
León; sepulcro y baldaquinos de la Magdalena de zamora, puerta sur de que recuerda a alguno del tipo I.5 del interior, lo encontramos también
S. Juan del Mercado de Benavente, en zamora; portada de colina de Losa, empleado en la columna central de la jamba izquierda de la portada occi-
en Burgos; puerta septentrional de la abacial de Acibeiro, en Pontevedra; dental de Wamba.
etc..., por exponer únicamente ejemplos españoles (por su parte, ANTÓN, 343 Se corresponde con la segunda tipología de cimacios que veíamos
1942: 144-145, acude a precedentes borgoñones). en el interior.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
134
Fig. 7.
La Espina. Alzados
de las pandas oriental
y meridional
del claustro.
Todo el conjunto aparece rematado por una chambrana correspondiente a los dos últimos tramos, que vio como
que se prolonga unos centímetros por el frente del para- era elevada por encima del vierteaguas de la nave central,
mento. La del sexto tramo presenta un perfil muy simple de habiendo quedado las huellas de la nueva vertiente tanto
gola lisa, mientras que en el resto de las ventanas es más com- en sus paramentos como contrafuertes vecinos.
plicado: cuarto bocel, filete, escocia y gola, todo ello liso. De la nave norte, únicamente es visible su parte inferior
Bajo la ventana del quinto tramo se sitúa otro vano, por encontrarse adosado a este flanco el claustro reglar (fig. 7).
adintelado y de escasas proporciones, abierto en época Libre de contrafuertes, en el extremo oriental se abre la puerta
moderna para permitir la entrada de luz al sotocoro. de monjes, que comunica el claustro con la iglesia y a la que
La cornisa presenta un perfil de nacela lisa, orna- se accede a través de siete escalones que salvan el desnivel exis-
mentada con crochets y otros motivos decorativos, siendo
344
tente entre ambas zonas (lám. 34).
estos últimos producto de una reciente restauración . 345 Se trata de una portada compuesta por cuatro arqui-
Debemos, no obstante, hacer notar las diferencias que se voltas de medio punto, de sección prismática molduradas por
aprecian en la talla de los crochets originales: por un lado, un bocel en su arista, excepto la tercera, cuya arista biselada
en los tramos segundo y cuarto, muestran anchos tallos con provoca en la rosca un cuarto de bocel. La inferior descansa
dobles nervios fuertemente marcados y cogollos de a través de una imposta sobre las jambas, que presentan su
pequeño tamaño; y por otro, en los tramos quinto y sexto, arista baquetonada rematada en congés; las restantes apean
los tallos son más estrechos, con un solo nervio central des- sobre columnas acodilladas de las que únicamente se man-
tacado - a veces con dos-, y dos bolas a modo de remate . 346 tienen sus capiteles y basas, puesto que los fustes han sido
La cubierta original a un agua desapareció en el siglo XVIII repuestos sólo hace unos meses. Las basas, muy deteriora-
al recrecerse el muro y construir la fachada occidental, pero das, son áticas, con toro inferior aplastado, escocia y junqui-
las obras del trascoro modificaron previamente la parte llo superior, y descansan sobre un plinto paralelepípedo liso.
Lámina 30.
La Espina. Iglesia,
costado sur de la nave
central.
Lámina 31.
La Espina. Iglesia,
costado meridional.
Los capiteles llevan cestas troncopiramidales rematadas por parte de laicos o seglares, sino que están hechos al tiempo
un ábaco liso y por un junquillo en el astrágalo; la interme- que el paramento en que se disponen. Ello implica que
dia del lado izquierdo y las extremas del derecho son com- desde el mismo instante en que se planifica el alzado de las
pletamente lisas, sin ningún tipo de ornamentación; la central naves de la iglesia, en San Pedro de La Espina se había
de éste último lado y la exterior del opuesto hojas muy pla- tomado la decisión de destinar al que iba a constituir el cie-
nas en los ángulos con el borde marcado y redondeado y que rre meridional del claustro como un espacio funerario rele-
se vuelven en su parte alta formando caulículos; la extrema vante, siguiendo un esquema que se había practicado en la
interior del lado izquierdo se decora simplemente con un catedral de Salamanca y San Pedro de Soria y que se iba a
tallo central que se bifurca y del que nacen hojitas lobuladas desarrollar en las seos de Burgos, León, Oviedo, etc . 349
estrechas y alargadas que se enroscan en sí mismas. Se coro- La fachada occidental sufrió entre 1782 y 1790
nan con cimacios que exhiben una combinación de moldu- importantes transformaciones al ver cómo era parcialmente
ras cóncavas y convexas: filete, surco, bocel y nacela con derribada y se le adosaba una nueva con dos imponentes
extremo inferior redondeado. Esta articulación se continúa torres en sus costados . N o obstante, los restos conserva-
350
por las jambas a modo de imposta. dos de la obra primitiva permiten plantearnos una recons-
Al oeste de esta portada y ocupando todo este flanco trucción fiable de su estado original.
del templo se abren nueve arcosolios funerarios agrupados Se componía de tres calles delimitadas por gruesos
en dos grupos, el primero integrado por cuatro y el segundo contrafuertes prismáticos que quedaron embutidos en la
por cinco (lám. 3 5 ) . Todos presentan arco apuntado de
347 nueva fábrica y que se pueden observar desde los cuerpos
sección prismática con su arista baquetonada; el segundo, intermedios de la fachada y compartimentos de las naves
cuarto y quinto en sus frentes frisos de arquillos apuntados laterales. En la parte inferior de la central se abre la portada
con intradós trilobulado que descansan sobre columnillas, original del templo, de amplio derrame, resguardada bajo
completándose el segundo con una sucesión de tetrafolias un portalón dieciochesco (lám. 36).
en su remate superior y derecho . Lo realmente intere-
348
Aunque toda la estructura interna fue transformada a
sante es que estos lucillos no se fueron abriendo en distin- comienzos del segundo tercio del siglo XVIII , se mantie- 351
tas épocas según iban llegando las peticiones de sepelio por nen dos arquivoltas peraltadas y apuntadas, de sección
Lámina 32.
La Espina. Iglesia,
ventana del segundo
tramo de la nave
de la epístola.
Lámina 33.
La Espina. Iglesia,
ventana del sexto
tramo de la nave
de la epístola.
triangular la inferior y prismática la superior, baquetones con las armas del monasterio —las llaves de San Pedro y la
en sus aristas que provocan en la rosca una sucesión de esco- corona de espinas- enmarcadas en un marco cuadrado
cias y boceles con filetes; la superior llevaba en el vértice decorado con tres escudos lisos en cada uno de los lados
una cabecita humana, hoy prácticamente perdida. Ambas mientras en los ángulos se disponen los símbolos antropo-
arquivoltas apoyan sobre columnillas acodilladas, mos- zoomórficos de los cuatro Evangelistas portando filacte-
trando los codillos su arista recorrida por media caña. Los rias, inserto a su vez en un tetralóbulo; completan la
capiteles, de cesta troncocónica, están decorados con pám- composición una suerte de gabletes con un trilóbulo ins-
panos los correspondientes al lado izquierdo y hojas de lau- crito y trasdosados por pequeños motivos vegetales y rema-
rel en el derecho, y se coronan con cimacios poligonales tados por macollas. Este tímpano descansa sobre un dintel
compuestos de filete, escocia y bocel, prolongándose ambos en forma de arco deprimido rectilíneo, muy moldurado -
elementos unos centímetros por el muro a modo de obra moderna—, y jambas de aristas biseladas . 352
imposta. Sus basas, muy aplastadas, se elevan sobre plintos Sobre esta puerta se abriría sin duda un gran óculo o
poligonales de dos cuerpos, y a su vez sobre un altísimo amplia ventana que posibilitaría la iluminación de la nave
basamento. Éste consta de dos cuerpos superpuestos, el central desde occidente, rematándose la calle con un piñón.
inferior rematado en grueso bocel y el superior completa- En cuanto a las naves laterales, tal vez se abriesen
mente liso, retranqueado respecto al interior pero sobresa- vanos análogos a los que se practican en el costado meri-
liendo respecto a él en la zona interna de la portada. dional, y rematarían a un agua, siguiendo la vertiente del
Cobijan estas arquivoltas un tímpano decorado en relieve tejado que las cubría . 353
das semejantes (catedrales de León y Burgos, por ejemplo), las caracte- reconstruyendo la parte superior, a mediados del siglo XVIII (VALLE
rísticas de las impostas de las jambas y el dintel obligan a fechar estos PÉREZ, I982: I, 285).
elementos en época moderna, seguramente en I735 (vid. nota anterior).
FUNDACIONES MASCULINAS
• 135 •
Interior
De planta rectangular y pequeñas dimensiones (4,20
x 7,50 m), está cubierta con una bóveda de cañón apun-
tado que voltea directamente sobre los costados norte y sur
de la misma . En el testero - q u e se corresponde con el
354
vano también de medio punto y ligero derrame interno que de ella muestra arco de medio punto doblado, muy simple,
permite la iluminación del recinto (lám. 37). sin molduración alguna. El remate del hastial occidental, muy
restaurado, viene determinado por la vertiente a un agua del
Exterior tejado que cubre esta capilla (lám. 38).
Al exterior, se cubre la capilla con tejado a una sola ver- Respecto a la finalidad original de la capilla, para
tiente que apoya sobre una cornisa provista de canecillos de unos se trata de la antigua capilla del abad , mientras que
357
proa, unos lisos, otros decorados con botones. u n o s mensu- para otros era una simple sacristía de época moderna . Lo 358
lones en forma de cuarto de círculo y las huellas dejadas por cierto es que carecemos de noticias documentales que cla-
otros que han desaparecido indican la existencia de un pór- rifiquen este punto. Sin embargo, la presencia en su interior
la única que refleja este hecho (AGA, Educación 6007). mina "antigua capilla del abad" aunque no descarta tampoco que fuera
Actualmente están ocupados por dos urnas en las que descansan los
3 5 5 una "segunda sacristía".
restos mortales de D. Rafael Cavestany y su mujer.
Aunque no hay huellas evidentes de una posible alteración de la
3 5 6
359 AUBERT, 1947: I, 213, nota 2; VALLE PÉREZ, 1982: I, 119-120; siones a variar la ubicación de los claustros, e incluso en determinadas oca-
idem, 1986 (2): 96-97; BANGOTORVISO, 1992: 124-125; idem, 1998 siones, del templo. En la Península por ejemplo, además de La Espina, se
(4): 322-323. Véase también los capítulos dedicados a estas capillas en disponen al norte los claustros de Oya, Moreruela, Huerta, Herrera, Bona-
las restantes monografías. val, La Oliva, Poblet, San Vicente de Segovia o Santa Ana de Ávila. Sobre
AUBERT, 1947: I, 330-332; VALLE PÉREZ, 1986 (2): 98-99;
3 6 0 estos aspectos, vid. AUBERT, 1947: I, 112-116 y II, 1; BANGOTORVISO,
BANGOTORVISO, 1992: 110; etc... 1 9 9 8 (5): 102; KINDER, 1998: 129; KINDER y BELL, 1999: 5 3 0 , entre
Solamente permanecen la imposta y arranque de la bóveda de
3 6 1 otros. Curiosamente, fray Hernando de Aedo atribuye esta disposición del
cañón que la cubría en el exterior del primer tramo de la nave norte y la claustro a la filiación del monasterio: ...tiene los claustros y dormitorios y toda la
huella de aquélla en el husillo. casa a la mano izquierda de layglesia, respecto del oriente, porque los monasterios que estan
Situada en el ángulo formado por el brazo norte del transepto y la
3 6 2 a mano derecha de la yglesia estan edificados a la trafa del monasterio de Cistel, aunque no
nave, se abría únicamente hacia el exterior, correspondiendo la puerta se sigue por esto sean susfiliaciones (Tumbo, fol.47v-n.63).
que comunica con el templo a una reforma moderna (MARTÍNEZ BUÉ- En la actualidad, las pandas del mandatum, refectorio y cilla se
3 6 6
NAGA, 1 9 9 4 : 146). encuentran un metro por debajo del nivel del templo, mientras que la del
363 Véase lo que se dice de estas capillas en la monografía de Mata- capítulo es todavía más baja que aquéllas. Probablemente en origen estu-
llana. vieron todas a ese último nivel, ya que así parece indicarlo la altura de los
Sobre estas tres capillas, vid. VALLE PÉREZ, 1982: I, 71-73, 116-
3 6 4 vanos que se practican en las distintas salas abiertas en su entorno. Este
120 y 224-226; idem, 1986 (2). fuerte desnivel, provocado por la orografía del lugar donde se asienta la
365 Aunque las dependencias monásticas suelen situarse al sur del tem- abadía, no es tampoco extraño, y se pueden encontrar algunos paralelos,
plo debido a que por este lado reciben más luz solar, la topografía del como por ejemplo el caso de Thoronet.
terreno y especialmente la situación de los cursos de agua obligan en oca- MARTÍN GONZÁLEZ, 1967: 170; idem, 1968: 85.
3 6 7
FUNDACIONES MASCULINAS •137•
tipo ático, con fino toro superior, escocia estrecha y formaletes, pero a pesar de su deterioro, se puede
toro inferior en forma de cuarto de círculo con peque- apreciar todavía cómo las nervaduras van provistas de
ñas garras en las esquinas, elevadas sobre altos plintos
"congés" en sus arranques.
paralelepípedos ornamentados con tres acanaladuras
horizontales en su parte superior. Las arquivoltas exte- El perpiaño apea en sendas columnas embutidas en los
riores, perfiladas por dos nacelas lisas, también apean frentes de unas pilastras. Sus capiteles son facetados 385
directamente sobre unas jambas de idéntica moldura- y están coronados por cimacios en nacela tallados en
ción que en su terminación presentan unos remates en una misma pieza con la cesta; presentan fustes lisos,
373 Sobre los armaria y bibliotecas cistercienses, su disposición, evolu- Aunque la sacristía medieval fue derribada y ampliada hacia oriente
3 7 9
ción y uso, véase AUBERT, I947: II, 29-30 y 39-47; MASSON, I964; durante el siglo XVI, se ha conservado del primitivo armarium el acceso
BONDÉELLE, I989; ABAD CASTRO, I998: I 8 8 - I 8 9 ; KINDER, I998: desde el claustro, muros de cierre y la imposta sobre la que volteaba una
I 3 I - I 3 2 y 242-243; entre otros. Recientemente se ha sugerido que este bóveda de cañón (TORNÉ CUBELLS, I999: I083) Erróneamente GAR-
espacio, cuando era lo suficientemente amplio, podía servir ocasional- CÍA CUETOS, I996: I 6 2 identificaba el espacio del lavatorio clasicista,
m e n t e de scriptoria (BELL, 2 0 0 6 : 59). situado más hacia el sur, con el que ocupaba el armarium medieval; dos
Flaran, Le Thoronet, Bonport, Boquen, Noirlac, Obazine, Vauclair,
3 7 4 años más tarde, en I998: 74, se hacía eco de las últimas intervenciones
Longpont, La Grace-Dieu, Valcroissant o Clairvaux, en Francia; Valle realizadas en el monasterio y señalaba que "es ahora visible la portada
Crucis, Margam, Florida Strata, Hulton, Croxden o Kirkstall, en el Reino del armarium".
Unido; Boyle, Abbeyknockmoy, Hore o Grey, en Irlanda; Villers, en Bél- En origen constituía un único ámbito destinado exclusivamente a
3 8 0
gica; Tre Fontane (aunque esta configuración responde a una ampliación sacristía, ocupando el armarium un pequeño nicho en el muro occidental
y reforma de la primitiva sacristía de hacia mediados del XIII —PlSTILLI, del brazo norte del transepto (BANGOTORVISO, I988: 99-I0I). Fue
I992: I63-I65; ROMANINI, I994: 54-57-), San Galgano, Fossanova o hacia el siglo XVII cuando se levantó el muro divisorio para poder sopor-
Casamari, en Italia; Soro, en Dinamarca; Alcobaga, en Portugal; Suje- tar el tiro de una nueva escalera de maitines (MIGUEL HERNÁNDEZ,
low y Koprzywnica, en Polonia; Kappel, Montheron y Wettingen, en 2008: 247).
Suiza; etc. 38 * Así lo sugieren FERNÁNDEZ, COSMÉN y HERRÁEZ, I 9 8 8 : I I 5 ;
Al oeste de la sacristía -estancia cubierta con bóveda de cañón
3 7 5 CANASAPARICIO, I997: I08; MUÑOZPÁRRAGA, I998: I I 7 nota I4; y
apuntado-, se encontraba el armarium, pequeña pieza de apenas 2 m. de SAHELICES, 2 0 0 5 : 3 4 I , mientras que CARRERO SANTAMARÍA, I 9 9 8 y
profundidad con nichos excavados en los laterales y separado de aquélla MARTÍNEZTEJERA, 2002 (4): 656, rechazan este supuesto y sitúa el
por un muro. Fue reformado en época moderna (VAUBOURGOIN, I990: armarium en el ángulo N.E., donde actualmente se dispone un altar del
65; MARTÍNEZ BUÉNAGA, I 9 9 8 : 2 3 3 ; IBARGÜEN SOLER, 2 0 0 3 : 49). siglo XVI. Únicamente una excavación arqueológica en esta zona resol-
También aquí la sacristía está separada por un muro del armarium.
3 7 6 vería el problema, mas la relación que hemos visto guarda este monaste-
Mientras aquélla se cubre con bóveda de crucería, éste lo hace con otra rio leonés con La Espina (vid. más abajo en el texto y nota siguiente) nos
de medio cañón. Esta pequeña "biblioteca" pasó a ser con el tiempo una hace inclinarnos a favor de la primera postura.
capilla, primero bajo la advocación de los santos Martín y Nicolás y des- u n a configuración análoga en la apertura del armarium la encon-
3 8 2
pués de la Asunción (MARUNELL, I929: I 6 8 y 233; idem, I959: I24- tramos en el monasterio de Sandoval y, con alguna variante, en los de
I25; FERNÁNDEZARENAS, I99I: I9). Bonport, Silvacane, Le Thoronet y Chaalis (Francia). A las sacristías de
La sacristía, cubierta con bóveda de medio cañón, está precedida al
3 7 7 Silvanes y L'Epau se accedía también a través de doble vano.
oeste por una pieza de reducidas dimensiones con acceso directo desde El deterioro sufrido por la piedra, unido a la "reconstrucción" con
3 8 3
el claustro y abovedado con crucería que ONOFRE LARUMBE, I930: I3, mortero de algunas de las zonas más perdidas dificultan la correcta apre-
y PÉREZ LERENDEGUI y HERNÁNDEZ BASURKO, 2 0 0 0 : 3 9 han identifi- ciación de este detalle cuya función es análoga a la del ya mencionado
cado como el armarium. CROZET sin embargo señala que los dos tramos congé.
sirven como sacristía, estando los armaria flanqueando a la puerta que da Sobre este perfil de nervios véase el apartado dedicado a la sala
3 8 4
con tambores de altura idéntica a la de los sillares que posibilidad de que en el proyecto original se hubiese
forman las pilastras y los muros, y las basas y plintos concebido cerrar este espacio con una bóveda de
repiten el modelo visto en los vanos de entrada aun- cañón . Sin embargo, ya advirtió Torres Balbás que
386
que sin las garras ni las acanaladuras del zócalo. Por su el hecho de que no haya un soporte que acuse en
parte los nervios apoyan, de un lado, sobre las men- planta el sistema de abovedamiento "no deberá siem-
cionadas pilastras, que están provistas de capiteles pris- pre interpretarse suponiendo que se proyectó cubrirlo
máticos lisos, con cimacio, tallados en el mismo bloque con bóvedas románicas" ; y más aún teniendo en
387
de piedra que los de la columna, y de basamento que cuenta que éste era un procedimiento empleado de
continúa la molduración de la basa adyacente; y de forma frecuente en la arquitectura de los cistercienses,
otro, se enjarjan en los ángulos de la estancia quedando bien por razones puramente prácticas como puede ser
suspendidos en el aire, sin apoyo alguno. la del ahorro económico o por ese deseo de austeri-
dad y simplificación que envolvía todos los aspectos
La ausencia de soportes preparados en los ángulos
de la vida de la Orden .388
Así piensan ANTÓN, 1923 (3): 78; idem, 1942: 147, ARA GIL,
3 8 6 3 8 8TORRES BALBÁS, 1952: 14-17; VALLE PÉREZ, 1982: I, 107-108 y
1986: 9; VALLEJO, 1995: 22; ABAD CASTRO, 1998: 189; POZA YAGÜE, 160-161; idem, 1986: 81-82; idem, 1990 (3): 44. Volveremos sobre
1998 (17) y (18); y MARTÍNEZTEJERA, 2002: 151. ello en el apartado dedicado al proceso crono-constructivo.
TORRES BALBÁS, 1952: 17.
3 8 7
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
42
ques, descansa directamente sobre una simple pilastra,
lisa, mientras que los nervios - q u e terminan en una
moldura en forma de punta de flecha invertida aná-
loga a la que veíamos en el armarium-, lo hacen en sen-
cillos codillos, carentes de molduración.
También en este caso Antón opinaba que dicho abo-
vedamiento no estaba previsto en origen, sino que tal
vez se planeó con una bóveda de cañón reforzada por
un fajón provisto de dobladuras a ambos lados,
actuando como soporte de estas últimas los resaltes
acodillados a la pilastra sobre la que aquél apea . Sin 392
Lámina 37.
La Espina. Capilla de
embargo, la existencia de otros resaltes en los ángulos
San Rafael (interior). de la sala como apoyos de los nervios cruceros hacen
pensar que este era el sistema de cubiertas elegido desde
un principio, aunque dichos codillos podrían también
servir de apeo a los formeros de aquel posible cañón.
En el costado sur del tramo occidental se abre una
molduración, siendo más bajo el correspondiente al vano que comunica con la iglesia y muestra análoga
tramo meridional . A través de estas puertas,
389
ordenación a la que veíamos desde aquélla . El des- 393
aristas perfiladas por finos baquetones e intradós En el costado norte del tramo oriental, actualmente a
recorrido por media caña (lám. 40). Se cubre cada escasa altura del suelo, se sitúa un gran nicho con arco
uno de estos tramos mediante bóvedas de crucería apuntado de aristas aboceladas, que cerrado por batien-
cuatripartita, de plementos despiezados a la manera tes de madera hace hoy las funciones de alacena . Su 395
francesa y nervios de sección prismática con boceles forma y grandes dimensiones descartan un posible
396
tes. El perpiaño, provisto de "congés" en sus arran- última más lógica dada su analogía con los conservados
389 La ausencia de molduración en estos vanos en relación con la emple- Erróneamente ANTÓN los describe como "haces de tres nervios"
3 9 !
ada en el acceso desde el claustro puede hacer pensar que estas aperturas sean (I942: I46). Este modelo de nervadura lo encontramos también en el
resultado de una intervención posterior, aunque todavía medieval. Sin templo (tipo I), si bien en el caso de la sacristía los nervios son más
embargo la existencia de otros vanos de comunicación interior que se loca- robustos y los boceles que recorren las aristas muy finos, resultando la
lizan en este mismo pabellón, como pueden ser las puertas de la iglesia a la zona intermedia mucha más desarrollada. Respecto a la clave, la coloca-
sacristía o la que da paso a la estancia situada tras la escalera al dormitorio ción de unas lámparas en la intersección de los nervios con su consi-
y locutorio, provistos de igual modo de perfiles aristados nos sugieren en pri- guiente destrozo impide verificar la inexistencia de claves destacadas,
mer lugar su coetaneidad a la construcción de ambos espacios y en segundo pero el ejemplo ofrecido por las bóvedas del armarium nos hace pensar
lugar el empleo exclusivo de vanos ricamente moldurados en los accesos en esa posibilidad.
desde la galería claustral, mientras que en los que podríamos llamar vanos I942: I46 y I47.
3 9 2
secundarios se decanta por la austeridad de líneas —además de los ejemplos Tanto el color de la piedra como la talla que presenta delatan ser
3 9 3
mencionados, hay que añadir la puerta que comunica con la sala de mon- obra de la restauración del siglo XX, aunque seguramente en origen pre-
jes, que muestra simplemente su arista achaflanada—. sentase esta configuración.
El desnivel que hay en la actualidad entre una y otra zona es de casi
3 9 0 AUBERT, I947: II, 49, habla de la existencia de desnivel entre igle-
3 9 4
un metro (0'84 m). Seguramente en origen no había esta diferencia — sia y sacristía debido a que aquella se construye siempre en el lugar más
ANTÓN, por ejemplo, no la menciona cuando describe estas dependen- elevado del terreno, descendiéndose a ésta a través de varios peldaños,
cias ni aparece reflejada en la planta que publica y tampoco en la dibujada como en Thoronet, Signy, Silvacane...
por Anselmo Arenillas en I953—, respondiendo esta sobreelevación del Su interior aparece enyesado y provisto de estantes.
3 9 5
piso, sin duda realizada en el curso de las restauraciones, a una doble Muestra dos metros de luz y flecha y uno de profundidad.
3 9 6
necesidad, la de facilitar un cómodo acceso desde esta zona tanto a la Así lo creían también ANTÓN, I923 (3): 78; idem, I942: I46;
3 9 7
iglesia como al exterior. SAN JOSÉ NEGRO, 2002: 85; y HERNANDO GARRIDO, 2003: 203.
FUNDACIONES MASCULINAS •141•
Por otro lado, no debemos olvidar que la sacristía de La Oliva sí tiene cuentemente, como por ejemplo en Fontenay, Noirlac, Boquen, La Prée,
puerta al exterior, aunque parece que fue abierta con posterioridad a la Léoncel, L'Épau, Valcroissant, Silvacane y Mortemer (Francia); Casa-
fábrica medieval original. mari (Italia); Eberbach (Alemania); Óvila, Sandoval, Vileña, Las Huel-
Solamente PÉREZ-EMBID WAMBA señala que "A la sacristía inme-
4 0 0 gas de Burgos, Huerta, Piedra, Rueda, Santes Creus, Poblet y Benifassá
diata se le añadió con posterioridad al siglo XIII una capillita particular" (España); Alcoba^a (Portugal); etc.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
44
Los vanos laterales presentan tres arquivoltas que repi-
ten la molduración ya vista en la puerta de acceso: la
exterior lleva un baquetón tallado en su arista y una
moldura cóncava en la rosca, como la que ostenta
idéntica posición en el vano central; por su parte, las
inferiores muestran su arista tallada con un bocel entre
escocias, análoga a la segunda y tercera de aquél. Y al
igual que sucedía en aquéllas todas llevan congés en sus
arranques. La inferior descansa sobre jambas que mol-
Lámina 39.
La Espina.
duran sus aristas con gruesos baquetones flanqueados
Vista general de la por escocias, rematados también por congés, mediando
panda del capítulo. entre arco y jamba una imposta con perfil de listel,
surco y nacela lisa, prolongación de los cimacios de
las columnas que apean las restantes arquivoltas y que
a su vez se extiende por la cara interna del vano. La
intermedia lo hace sobre sendos pares de columnas. Y
la tercera apoya en parte sobre los anteriores grupos de
columnas y las situadas en los frentes - q u e en el caso
de los extremos es única, estando acodillada junto con
el par correspondiente entre las jambas y el muro del
claustro- y, como también ocurría en el vano central,
sobresale por encima de ellas.
Lámina 40.
La Espina. Sacristía,
Todas las columnas poseen capiteles de cesta lisa, sin
interior hacia occidente. ningún tipo de decoración , coronados por cima-
403
moldura cóncava. Todas ellas muestran en sus arran- de escasa altura cuya arista superior aparece rematada
ques los característicos congés, rematando en pico en por bocel y caveto invertido.
las molduras convexas y escocias de las aristas de la Los vanos laterales cobijan bajo un tímpano liso gru-
primera arquivolta, y en medio punto en el resto de las pos de dos arcos de medio punto, de sección prismá-
cóncavas. Descansan las tres primeras arquivoltas tica y aristas matadas por escocias provistas de conges
sobre medias columnas pareadas dispuestas en triangulares en sus arranques, que voltean sobre
derrame, tangentes unas a otras, sin mediar codillos columnillas pareadas. Éstas presentan basas áticas aná-
entre cada grupo. La cuarta apoya sobre las que reci- logas a las de las columnas de los machones, y sus plin-
ben el volteo de la tercera arquivolta y al mismo tos son lisos en el caso de las columnas adosadas y con
tiempo en otros pares de columnas dispuestos en los una sola acanaladura en el de las exentas; fustes mono-
frentes de los machones -destinadas seguramente a líticos ; y capiteles de cesta facetada con cimacios de
405
servir de apeo a los arcos y nervaduras del primitivo perfil de filete y nacela. Los capiteles de las columni-
claustro-, sobresaliendo además por encima de ellas. llas adosadas interrumpen el desarrollo de la imposta
403 Este modelo de capitel, por su sencillez y total ausencia de orna- Detalle este último que veíamos en el acceso al armarium.
4 0 4
mentación, lo encontramos empleado en numerosos monasterios de la 405 Las columnillas centrales del vano derecho muestran fustes despieza-
Orden: templos de Pontigny, Fontfroide, Senanque, Obazine, Aiguebe- dos en dos tambores, obra de la restauración de mediados del siglo XX.
lle en Francia; o iglesias de Moreruela, Sandoval, Valdediós, Fitero o
Poblet en España.
FUNDACIONES MASCULINAS
• 143 •
presenta una complejidad y belleza acorde con la cubren con bóvedas de crucería cuatripartita que, al
importancia del recinto en el conjunto de la vida igual que en las estancias precedentes, carecen de clave
monástica, siendo por esta razón una de las depen- destacada y formaletes, y muestran nervios de perfil
dencias a las que mayor atención se les presta desde el triangular formado por un grueso baquetón entre
punto de vista artístico . 408 nacelas y cuartos de bocel °. Separan a cada uno de
4I
en aquellos casos las columnas son más rechonchas y se elevan sobre altísi- tercienses de Sobrado (sala capitular) y Moreruela (girola y sala capitu-
mos zócalos. Mayor relación guarda con Fontenay, con la que se ha conec- lar) o la catedral de Zamora (nave central), en España; y Fontenay (sala
tado frecuentemente (Ibidem; ANTÓN, I953: 3I4; ANTÓN, I923 (3): capitular), en Francia. VALLE PÉREZ ha destacado la filiación borgoñona
82-83 y 85; BRONSEVAL, I970: 274 nota 9I; JIMÉNEZ LOZANO, I980: de este tipo de nervio (I982: I, 78; idem, I 9 9 I (3): I52, I54 y I65,
32; o ARA GIL, I986: I0), y habría que añadir también los ejemplos de nota 6I; idem, I99I (4): 774-775; idem, I992: I4; idem, I994: 24, 28
Noirlac (Francia) o Fountains (Inglaterra), filiales igualmente de Clairvaux. y 38 nota 70), modelo también presente en otros edificios como San-
AUBERT, I947: II, 68-70; BRAUNFELS, I975: I54-I56; VALLE
4 0 8 tiago de Compostela (cripta), Ávila (girola) o Carboeiro (girola), con
PÉREZ, I982: I, 77; ABAD CASTRO, I998: I 8 9 - I 9 I ; KINDER, I998: clara raigambre de Borgoña (VALLE PÉREZ, I99I (3): I54, I55 y I66,
247; entre otros. nota 69). Por otra parte, STRATFORD señala su presencia en los prime-
409Análoga compartimentación muestran los capítulos de Sobrado, ros monumentos góticos de Ille-de-France ( I 9 9 I : 57-58), así como su
Osera (reformado en el siglo XVI como sacristía pero manteniendo la difusión por tierras borgoñonas en las décadas centrales del siglo XII
estructura primitiva), Carracedo, Moreruela, Monsalud, Sacramenia, (Ibidem.: 54-55 y 58), aspecto este último considerado también por
Rueda, Piedra, Fitero, La Oliva, Poblet, Las Huelgas de Burgos, en otros investigadores (VALLE PÉREZ, I994: 30 y 38-39, notas 73 y 74).
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
146
garras en las esquinas y extendido sobre plintos embu-
tidos en el pavimento ; fustes monolíticos lisos
411
capitular, interior
hacia oriente
los nervios apean sobre una columna acodillada. Lle-
van éstas capiteles cuya cesta se presenta totalmente
lisa (costado norte), facetada (costado sur, oriental y
occidental) o con motivos vegetales —grandes hojas
estos tramos arcos que poseen idéntico perfil al que lisas con tres nervios marcados que se vuelven ligera-
ofrecía el perpiaño de la sacristía: de sección rectan- mente al llegar al ábaco alternadas con picas que
gular, con aristas aboceladas y el intradós recorrido nacen del collarino— (ángulo N.O.) , ábacos reco- 415
por media caña. Tanto éstos como los cruceros no rridos por una fina incisión y cimacios con perfil
muestran desde sus arranques esa molduración, sino achaflanado cuya superficie inferior es más pequeña
que rematan en congés. Arcos y nervios descansan en el que la del capitel ; fustes compuestos por cuatro
416
centro de la sala sobre las cuatro columnas exentas. tambores; y en lugar de basas, simples prismas rema-
Presentan basas áticas de toro inferior aplastado con tados por congés . Estas columnillas se elevan sobre
417
capiteles de las situadas en los ángulos N.E., S.E. y S.O. están muy dete-
riorados, siendo imposible apreciar su decoración original.
FUNDACIONES MASCULINAS
• 145 •
sección prismática, moldura su arista con un baque- los codillos excepto el exterior de la jamba derecha
tón que origina en la rosca una escocia, y voltea sobre muestran sus aristas vivas, habiéndose tallado en éste
una columnilla acodillada. Muestran éstas amplios una escocia. Hacia dentro de la sala, el arco no pre-
capiteles de cesta facetada, ábaco liso y cimacio for- senta molduración alguna, apeando directamente
mado por listel y nacela, que ocultan parcialmente el sobre el muro.
desarrollo de las molduras del vano; fustes monolíti- Se trata de una sala de planta rectangular estrecha y
cos lisos ; y basa ática sobre plinto liso. La segunda
4I9
alargada (6 x 2 m), perpendicular a la galería claustral
presenta idéntica molduración, pero en este caso se
pero sin ocupar toda la profundidad de la panda, que
continúa por las jambas rematando el bocel en una
pequeña basa. Bajo las ventanas corre una imposta en la actualidad está compartimentada por un tabique
integrada por escocia y bocel que, tallada a ras del en el que se ha practicado un vano adintelado . 422
paramento, se extiende por toda la sala y enlaza con La zona occidental presenta a su vez dos tramos des-
el remate moldurado de los bancos que cierran los iguales separados por un arco fajón de sección pris-
vanos laterales abiertos a la galería del claustro. mática y aristas vivas hacia el claustro y achaflanadas
hacia el interior, que voltea sin transición sobre el
Al exterior, las tres ventanas muestran arco ligeramente muro. Dicho arco está situado a poca distancia de la
apuntado con la arista recorrida por un baquetoncillo puerta de acceso, por lo que el tramo del oeste,
que provoca una escocia en la rosca, molduración que cubierto con bóveda rebajada, es de reducidas dimen-
se continúa sin interrupción por las jambas. siones. El otro tramo, más largo y alto, se cubre con
> Escalera al dormitorio bóveda de cañón apuntado que, al igual que la inme-
A continuación de la Sala Capitular encontramos una diata, apoya directamente en el muro aunque en este
estancia a la que se accede a través de una puerta de caso no enrasa con él sino que sobresale un poco res-
arco apuntado, de sección rectangular, con su arista pecto a él. En el costado norte se abre un paso de
perfilada por un bocel que origina en rosca e intradós época moderna que comunica con la sala adyacente:
otros dos, a los que se añade una moldura cóncava posee arco de medio punto, de sección prismática y
como remate de la rosca. Apoya este arco directa- arista viva, que reposa mediante una imposta de nacela
mente sobre las jambas, en cuyas aristas se ha tallado sobre las jambas, lisa la derecha y de arista perfilada
un grueso baquetón a modo de columnilla acodillada, con baquetón la izquierda.
419 En algunos casos están fragmentados. esta compartimentación, y tampoco la escalera que se construyó en la
Falta en la de la derecha.
4 2 0 mitad oriental de la estancia. Todo ello hace pensar que la distribución
La parte inferior de estas "columnillas" ha sido reconstruida, por lo
4 2 1 actual responde a reformas llevadas a cabo durante las restauraciones de
que es imposible discernir si llegaron a tener basas o remataban en congés. los años 50, siendo en ese momento una estancia diáfana.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
148
se dispone una escalera que sube a unas pequeñas salas
habilitadas para alojar maquinaria de proyecciones.
Aunque se ha calificado a esta dependencia como de
simple pasadizo o antelocutorio y a pesar de las
425 426
> Locutorio
Contigua a la anterior encontramos otra sala a la que
se accede por una puerta provista de tres arquivoltas
apuntadas, de sección prismática y variada moldura-
ción: la inferior muestra sus aristas exterior e interior
perfiladas por grueso bocel que desarrolla en la rosca
sendas escocias; la segunda únicamente presenta un
bocel recorriendo su arista; y en la superior ese bocel
aparece flanqueado en rosca e intradós por sendas
escocias. Todas poseen congés en sus arranques, y vol-
tean sobre las jambas a través de impostas moldura-
das con alto listel partido por un surco y seguido de
nacela . Las jambas llevan sus aristas perfiladas por
428
M
ángulo N.E. del tramo oriental: aunque maltrecho, se
aprecia todavía el congés que remataba la escocia. Vol-
teaban éstos sobre ménsulas, conservándose práctica-
mente irreconocibles las de los ángulos N.E. y S.E., e ••M
intacta la del N.O. Muestra una cesta prismática lisa
con ábaco igualmente sobrio, que recuerda a las
' ^ i
empleadas en las pilastras del armarium, y está coro- 7 + *+ . +• , + + t + ^ + + +
t
nada por un cimacio compuesto por banda alta, surco
y nacela, todo ello —cesta y cimacio— tallado en una
sola pieza; como ocurría en la sala capitular, este
cimacio no enlaza correctamente con la imposta del
vano de entrada, sino que ésta es algo más estrecha.
En el costado sur del compartimiento occidental se Lámina 46.
practica un paso hacia el hueco de la primitiva esca- La Espina.
lera, y otro que se abría en ese mismo flanco del Tramo oriental
del locutorio
tramo más oriental ha sido cegado y el enlucido que
alicatado, pero se conservan los ventanucos rectangu-
cubre el paramento impide conocer su traza, pero por
lares de acentuado derrame abiertos al este —con
el plano publicado por Antón sabemos que era más
arista biselada por el exterior— y la cubierta con
estrecho. Aunque en ocasiones encontremos en otros
bóveda de cañón apuntada que, según Antón, arran-
monasterios cistercienses puertas de época medieval
caba de impostas . 433
En el testero del tramo oriental del locutorio se abre los condicionantes del terreno motivaron que el come-
un pequeño paso en arco apuntado, de perfil rectan- dor se dispusiera paralelo a la iglesia y el calefactorio en
gular y aristas vivas que reposa directamente sobre el pabellón de monjes, pero no como una estancia inde-
unas jambas de análoga sección (lám. 46). A través pendiente sino incluido dentro de la sala de los mon-
de él se accede a una sala rectangular (6 x 3 m.) que, jes , como también ocurrió en Silvacane . Podría
436 437
dispuesta en sentido norte-sur, ocupa el ancho de la pensarse entonces que el caso de La Espina es seme-
escalera y el locutorio. utilizada en la actualidad jante y que la existencia de un refectorio no perpendi-
como aseos, sus paramentos están cubiertos por un cular a la panda, como se ha supuesto que tuvo, obligó
Ibidem.
4 3 1
AUBERT, I947: II, 85 y 99.
4 3 6
433 I923 (3): 86; idem, I942: I56. Rievaulx el calefactorio estaba integrado en el pabellón de monjes, y
I923 (3): 86-87; idem, I942: I56 y I57; idem, I953: 3I3. Le
4 3 4 según JANSEN esto era algo habitual antes de I I 5 0 - I I 6 0 , momento en
sigue AUBERT, I947: II, 7I nota 4. De forma inexplicable MARTÍNEZ que pasa a ocupar su lugar "tradicional" al variar la orientación del refec-
TEJERA, 2002: I52, sostiene que "podemos ver todavía la chimenea torio de paralela a perpendicular (I998: 85 nota I3).
situada entre dos vanos de amplio derrame".
AUBERT, I947: II, I I 6 . Para el caso de Cíteaux, vid. además, PLOU-
4 3 5
Las reformas efectuadas en el edificio durante el siglo En el costado sur se abren dos pasos hacia los tramos
XX eliminaron todo rastro de la chimenea que viera del antiguo locutorio, y en el flanco opuesto se prac-
Antón, de ahí que no podamos comprobar si corres- tican también dos puertas cuya estructura es idéntica
pondía efectivamente al plan original o se trataba de entre si: arco apuntado de sección rectangular con
una intervención de época moderna, opción esta última arista anacelada que reposa directamente sobre unas
que a tenor de lo dicho arriba parece más probable. jambas que muestran igual molduración. Ambas
¿Cuál era entonces la funcionalidad de esta dependen- puertas dan paso a la sala de monjes, pero sólo la
cia? Recientemente se ha interpretado este espacio situada a occidente es la original, ya que la otra debió
como prisión . En 1206 el Capítulo General autori-
438 abrirse durante la restauración llevada a cabo en el
zaba la instalación de una cárcel para encerrar a los conjunto monástico en los años cincuenta del siglo
monjes que cometieran faltas muy graves o a conversos pasado . En el testero se practica la puerta que
444
y vasallos criminales, pasando en 1229 ó 1230 a dic- comunica con el exterior, apuntada, simple y trasdo-
tar la obligatoriedad de estos recintos. Según Aubert, la sada hacia el interior por un arco rebajado.
estancia situada bajo el tiro de la escalera de subida al
dormitorio y a la que se accedía desde el pasadizo con- > Sala de monjes
tiguo, fue en un principio utilizada como locutorio y Desde el pasaje colindante se penetra en esta depen-
desde el siglo XIII como cárcel , y así lo señalan la
439
dencia a través de las dos puertas arriba descritas, que
mayoría de los investigadores. Otros sin embargo al interior presentan un arco muy rebajado aristado
comentan como en ocasiones se sitúa aquí el tesoro, el de mayor luz.
archivo o incluso el armarium (Rievaulx en Inglaterra Su configuración actual responde a las restauraciones
y Mellifont en Irlanda), llevando los "calabozos" junto acometidas a mediados del siglo pasado. Se trata de una
a las porterías (Pontigny, Francia) . Sea lo que fuere,
440 estancia rectangular totalmente diáfana (20 x 11 m),
generalmente se trataba de una sala de pequeñas dimen- resultado de la ampliación hacia el norte del primitivo
siones instalada en el hueco de la escalera , mientras
441 espacio de la sala de monjes (17 x 11 m), englobando
que en La Espina ocupa éste y la zona oriental de la en ella el extremo del pabellón que, a juzgar por los
dependencia vecina, con una disposición similar a los comentarios y las plantas que publica Antón, se cerraba
de Le Thoronet (Francia) y Haina (Alemania) . 442 con un potente muro. De su compartimentación interna
sólo conserva, como elementos decorativos, las respon-
> Pasaje
siones de las bóvedas de crucería en los muros laterales,
Situado inmediatamente después del locutorio, se
pero gracias a fotografías y planos antiguos así como
ingresa desde el claustro a través de una puerta de arco
por la descripción que de ella hace Antón se puede
profundo y apuntado, con arista cortada en escocia
reconstruir con fiabilidad (lám. 48).
rematada por un congés en el que se han tallado unas
volutas. Descansa éste sin mediación alguna sobre el Dividida por dos soportes centrales en dos naves de
muro que, a modo de jambas, presenta hacia la gale- tres tramos cuadrados cada una, seguía la tradicional
ABAD CASTRO, 1998: 197; POZA YAGÜE, 1998 (21); SAN JOSÉ
4 3 8 1995:24), hace poco se le ha denominado "parloir, bureau ou salle des
NEGRO, 2002: 89. archives" (MOLINA, 1999: 41). Respecto al segundo, sólo conozco la
439 AUBERT, 1947: 72-73. planta que presenta EYDOUX, 1952: 152. Erróneamente ABAD CASTRO,
KINDER, 1998: 269 y 361-362; STALLEY, 1987:162. También
4 4 0 1998: 203 nota 44, compara la estancia de la Espina con la de Fonte-
LEROUX-DHUIS, 1999: 66. En Val-Saint-Lambert la presencia de nichos nay (?).
ha motivado que COOMANS se incline por la opción de archivo-tesoro Según ARA GIL se trata del "pasillo llamado parlatorio que condu-
4 4 3
sala: de arco de medio punto y jambas sin moldurar esta ceremonia, que se llevaba a cabo al final de la jor-
y amplio derrame interno —hacia el exterior son altas nada, después de la cena y antes de completas y que
y estrechas, con la arista biselada, aunque en las dos consistía en la lectura de las Collationes de Juan
más meridionales el biselado es más estrecho y está Casiano, la Vida de los Padres u otros textos edifica-
enmarcado por sendos surcos—. El flanco opuesto se tivos , se llevaba a cabo siempre en la galería del
451
445 AUBERT, 1947: II, 75 y ss; ABAD CASTRO, 1998: 198-199; KIN- 450 1923 (3): 88 y 89; idem, 1942: 159, 160 y 161; idem, 1953: 313-
DER, 1998: 269-271. Las salas de monjes de Moreruela, Sandoval, 314, siendo el segundo trabajo el que señala desde dónde se accedía a la
Rueda, Veruela, Santes Creus o La Oliva, en España; Obazine, Silvacane, tribuna. otros autores que le siguen y mencionan su existencia son, entre
L'Epau, en Francia; Haina, en Alemania; muestran una organización otros, AUBERT, 1932: 200; idem, 1947: II, 74 nota 3; TORRES BALBÁS,
similar. 1952: 108; EYDOUX, 1954: 197; GARCÍA CHICO, 1959: 36; BRONSEVAL,
446 Perfil semejante encontramos en la sala de monjes de Sandoval (cru- 1970: 274 nota 91; JIMÉNEZ LOZANO, 1980: 32; BANGO TORVISO,
ceros y perpiaños), el crucero de La oliva o el formero del primer tramo 1982: 570; ARA GIL, 1986: 10; VALLEJO, 1995, 53; POZAYAGÜE, M.,
del lado sur de las naves de la iglesia de Rueda. 1998 (24); MARTÍNEZ TEJERA, 2002: 153; SAN JOSÉ NEGRO, 2002:
4 4 7ANTÓN, 1923 (3): 89; idem, 1942: 159. 89; HERNANDO GARRIDO, 2003: 202.
448 La correspondiente a la zona central del costado norte desapareció 451 R.B., 139-140, cap. XLII, 3-5; Ecclesíastica Officía, 210-213, n.71 y
con la ampliación del recinto. 232-235, n.81.
449 Las de los ángulos S.O, N.O. y S.E., más la inmediata a ésta última
en el flanco oriental.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
52
claustro pegada a la iglesia, en donde para tal fin se planta, a partir de las obras de restauración de los
disponían bancos corridos y un pupitre para el lec- años cincuenta de esa misma centuria se convirtió en
tor . N o he localizado nada semejante en ningún
452 una entreplanta de metro y medio aproximado de
otro monasterio cisterciense - A n t ó n y Aubert ya altura recorrida por tuberías y vigas de hormigón.
habían señalado su excepcionalidad-, en cambio sí en Únicamente se conservan el lienzo que da al templo
uno premonstratense: en la sala de monjes de Aguilar con la puerta de maitines, que por este lado muestra
de Campoo, en el tramo del ángulo N.O., se practica arco rebajado de sección prismática y aristas vivas que
en alto una puerta en arco apuntado que conduce a un descansa sin intercesión sobre jambas de análoga sen-
pequeño espacio abovedado y cuya función no ha cillez, y las primeras hiladas de los muros oriental y
sido definida . Sin embargo debemos tener en
453 occidental, conservándose en aquel la parte inferior
cuenta dos factores. En primer lugar, que todavía hoy de tres vanos cegados, de un metro de luz, que pre-
no está clara la función específica que cumplía esta sentaban vivas sus aristas y fuerte derrame interno; se
dependencia dentro el conjunto monástico -tradi- elevaban estas ventanas aproximadamente a un metro
cionalmente se ha venido hablando de que servía en del suelo - e n la actualidad a 80 cm-, mediando entre
origen como noviciado y más tarde de sala de trabajo sí poco más de metro y medio (I'63 m).
de los monjes- , y puede que fuera utilizada para
454
A pesar de los escasísimos restos podemos hacernos
diferentes usos (noviciado, scriptorium, etc) según el una idea de la configuración del antiguo dormitorio de
monasterio o incluso que fuera una dependencia
455
monjes a partir de las noticias proporcionadas por el
polifuncional; se podría pensar entonces que si en La Tumbo referidas a la remodelación del por entonces lla-
Espina actuó como noviciado la tribuna sería utili- mado "Quarto de oriente" o "de las Vínculas", entre
zada por el maestro de novicios. En segundo lugar, el abril de I707 y diciembre de I 7 0 9 . Dedicado en
457
hecho de que no haya ni rastro de dicha tribuna, ni esas fechas a noviciado, contaba entonces con un pasi-
siquiera fotografías o dibujo alguno de ella, y el que llo central al que se abrían I8 celdas, nueve a cada lado,
el acceso se realizase desde otra sala, nos impide con- cubiertos aquél y éstas mediante bóvedas "de pan-
firmar su datación en época medieval, pudiendo tal dero". Estas celdas se iluminaban mediante ventanas
vez responder a una reforma moderna, aunque tam- que a juzgar por la descripción que hacen de ellas -eran
poco esta hipótesis sea definitiva. unos arcos de medio punto, que por los estremos de la pared tenían
Por lo que se refiere al costado norte, sabemos tam- tres pies de ancho y seis de alto, y éstos y tan en disminución asta
bién por Antón que dos arcos apuntados y ciegos que el zentro de la pared, dejando solo un pie de latitud y pie y medio
"voltean sin columnas solo sobre retallos" aligeraban de altura-, se puede afirmar que eran los vanos medie-
el muro, situándose bajo el más oriental una puerta, vales, de medio punto y acusado derrame interno.
más bien "paso o cañón", que atravesaba el gran espe- Antón llegó a ver algunas de ellas en el lienzo que daba
sor del muro y llevaba al exterior . 456
al sobreclaustro y que identifica como pertenecientes
a la celda abacial, si bien no las describe . Tampoco
458
456I923 (3): 89-90; idem, I942: I60. Aunque Antón no indica exacta-
mente que este paso permitía la comunicación con el exterior, los planos que
FUNDACIONES MASCULINAS
• 151 •
(... ) Incautamente se deshizo la entrada de la escalera, que estaba Así sucede en Beaulieu, l'Epau, Royaumont, Le Val etc.,
labrada con todo primor con variedad de conchas y ojas . 460
en Francia ; Wachock , en Polonia; Chiaravalle di
462 463
En muchos cenobios se construía una pieza destinada Milano , en Italia; Hauterive , en Suiza; Santes
464 465
a albergar el archivo y tesoro (plata, vasos sagrados, reli- Creus , Poblet , Rueda y Huerta , en España;
466 467 468 469
quias) de la comunidad. Generalmente se trataba de etc. Resulta extraño pues que en La Espina se disponga
una estancia de pequeñas dimensiones, aislada y a en el costado opuesto, así como la presencia en este
menudo de difícil acceso para salvaguardarla de posi- lugar de una escalera que conducía al exterior . Poco 470
bles robos o incendios, situada bien en saledizo o bien más podemos decir, ya que ningún resto se conserva de
sobre el tramo más oriental de la sacristía (cuando su ello, aunque sí de la llamada fuente vieja, a unos diez o
testero no está en línea con el de las dependencias que quince metros del ángulo N.E. del pabellón en direc-
la siguen, sino que destaca sobre ellas), capilla del abad ción Este, bajo las actuales pistas de tenis.
459 Así se cubrían los dormitorios de Fontfroide y Mortemer en Fran- 466 Situado sobre las capillas meridionales de la cabecera de la iglesia,
cia; San Galgano en Italia; y Poblet, Santes Creus, Vallbona, Huerta, se accede a través de la escalera de caracol que, en el ángulo N.E. del
Óvila, Monsalud, Veruela, etc., en España. ANTÓN, basándose en que dormitorio, conduce a la Torre de las Horas (MARTINELL, 1929: 240;
los contrafuertes exteriores no subían hasta la segunda planta, ya sugi- idem, 1959: 126).
rió que se emplease la madera en su cubierta (1923 (3): 90; 1942: 161); Construida en el siglo XIV sobre la parte oriental de la sacristía y
4 6 7
y SAN JOSÉ NEGRO, 2002: 88, señala que era "una sala diáfana, ilumi- sala capitular, servía al parecer de archivo (ALTISENT, 1974: 172).
nada mediante ventanas abiertas a escasa altura del suelo y cubierta con 468 Arruinada hace ya muchos años, se ha supuesto que era la celda
armadura de madera a dos aguas". abacial (VAUBOURGOIN, 1 9 9 0 : 70; JIMÉNEZ ZORZO et alii, 1 9 8 6 : 172),
460 Tumbo, fol.419v-n.759. Aunque el autor de este pasaje lo considera aunque la forma en que se acometió el acceso desde el dormitorio -rom-
parte del supuesto palacio de Doña Sancha, señala que el P. fr. fernando piendo una de sus ventanas- ha hecho pensar recientemente que es de
alzedo dize que este quarto fue fabricado por los Sres. Alburquerques. una época ya avanzada y que su destino pudo ser también el de enfer-
461 AUBERT, 1947: I, 327 y II, 38 y 91-93. Otros autores, sin embargo, mería (ÍBARGÜEN SOLER, 2003: 80).
lo sitúan en otros ámbitos (vid. nota 440). 469 En origen comunicada directamente con el dormitorio, a fines del
462 En Noirlac, Peyrouse y Cadouin se construyeron en época s. XVI se construye la sacristía nueva y se abrió en el espesor del muro de
moderna, pero con idéntica función (Ibidem). la entrada a ésta desde la iglesia una escalera que conducía hasta aquella
4 6 3 BIALOSKÓRSKA, 1 9 6 3 : 3 4 2 . (ROMERO et alii, 1995: 134; ABAD CASTRO, 1998: 201; idem, 1998
4 6 4 ANTÓN, 1 9 4 2 : 38. (5)).
465Probablemente se destinase a este efecto la pieza rectangular eri- 470 Por otro lado, tal vez no deba identificarse ese labatorio con el "lava-
gida en el siglo XVIII sobre las capillas laterales de la Epístola (WAEBER- torium" o lavabo situado en el claustro, sino con la pila donde se lava-
ANTÍGLÍO, 1978: 88 nota 36, si bien esta autora no dice nada al ban los cadáveres de los monjes en la enfermería (DlMIER, 1972-1982-:
respecto). 836, la denomina de ese modo).
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
54
Únicamente mencionar que la extraordinaria poten- izquierda de un arco de medio punto y su jamba
cia del muro de cierre septentrional de este pabellón correspondiente; ambos elementos presentan perfil
de monjes puede tener su explicación en condiciona- prismático y aristas vivas, sin mediar imposta entre
mientos del terreno que obligaron, entre otras cosas, ellos. Este pequeño vano fue seccionado y parcial-
a reforzar esta zona, y que aprovechando tal circuns- mente cegado cuando abrieron la portada descrita
tancia se realizaran en época indeterminada —quizás anteriormente, perteneciendo a la fábrica original de
finales de la edad media y principios de la moderna, la panda, como lo indica la correcta posición de sus
a juzgar por la decoración esculpida que presenta- dovelas y sillares de la jamba con respecto a la fábrica
ban—, esa escalera y el archivo. del lienzo donde se abría. Su situación en ella nos
Al exterior, el primitivo pabellón de monjes sólo man- lleva a pensar que estamos ante la puerta del primitivo
tiene la configuración original de la planta baja, calefactorio, estancia modificada ya antes de la gran
correspondiendo los pisos superiores a las reformas reforma del siglo XVII, como lo demuestra la factura
de mediados del XX ^ Aparece jalonado por once
47
de la gran portada, propia de fines del XV o incluso
contrafuertes de sección rectangular que rematan en del XVI. Ignoramos la ulterior funcionalidad que tuvo
talud y suben hasta una moldura moderna que marca este espacio, aunque podría pensarse que alojó una
la separación con la obra nueva. Dichos estribos mar- escalera monumental que comunicaba el claustro bajo
can la compartimentación interior de las distintas con el alto como sucedió en otros muchos monaste-
dependencias y sus tramos. rios a partir del XVI, aunque el Tumbo menciona que
no h u b o claustro altos.
> La panda del refectorio (fig. I0) La otra dependencia, de planta rectangular y paralela a
Las obras acometidas en las dependencias de esta la panda, es la bodega . Situada actualmente a un nivel
473
panda septentrional durante los siglos XVII y XVIII algo más bajo que el claustro, consta de cinco tramos
—bodega y refectorio entre I665-I668 y cocina entre cubiertos con bóveda de cañón sobre finos fajones que
I760-I763— alteraron sustancialmente su estruc-
472
apoyan en pilastras. Su ingreso se realiza no desde el
tura, permaneciendo de época medieval únicamente claustro, sino desde un pasaje contiguo situado a occi-
el lienzo de muro que mira al claustro, ya que por el dente. Bóveda y paramentos están realizados en mam-
interior —excepto su extremo occidental— fue refor- postería, presentando la particularidad de haber
zado, y el muro de cierre exterior data de la época de reaprovechado en su fábrica un elevado número de tam-
las mencionadas reformas. bores de columnas, fragmentos de nervios —de perfil
En la actualidad, la longitud de la panda está ocupada triangular, con grueso bocel facetado enmarcado por
por dos salas. La oriental, de planta rectangular de nacelas y sendos boceles más finos— y otras piezas mol-
pequeñas dimensiones, sirve como cuarto de calde- duradas por baquetones lisos. En el costado norte se
ras, mostrando sus paramentos interiores alicatados abren cuatro vanos adintelados —al exterior sólo se ve
de arriba a abajo. Se accedía a ella desde el claustro a su remate, en arco los centrales y el más oriental—,
través de una puerta de carácter monumental —muy mientras que hacia la mitad del opuesto se aprecia del
maltrecha—, provista de dos arquivoltas de medio lado de la galería claustral —que es de sillería bien escua-
punto cuyas aristas aboceladas provocan en rosca e drada como el resto de los muros perimetrales del
intradós un juego de molduras cóncavas y convexas claustro—, lo que parece haber sido un gran vano de
muy animado; voltean sobre una fina imposta y las poco más de tres metros de ancho y otros tantos de
jambas continúan la molduración de los arcos adqui- alto, cegado con mampuesto . Situado no en el cen-
474
riendo los boceles de las aristas apariencia de colum- tro de la panda, sino desplazado hacia el Este, puede
nas al ir completadas por capiteles y basas facetadas. haber sido el ingreso al antiguo refectorio. Pero ¿cómo
Al oeste de la portada pero inmediata a ella se con- era esta dependencia en origen? Recientemente se ha
servan los restos de otra puerta: casi la mitad planteado la posibilidad de que fuese paralelo a la
Cuando Antón visitó el monasterio había desaparecido la planta 4 7 3Fue construida junto con el refectorio que se sitúa sobre ella,
alta del pabellón. durante el abadiato de Rafael Rodríguez (I665-I668) (Tumbo, fol.86r-
4 7 2 Tumbo, f o l s . 8 6 r - n . I 4 4 y 9 0 v - n . I 5 3 ; cit. p o r YÁÑEZ NEIRA, I 9 7 2 : n.I44).
I 2 2 y I30 respectivamente; y Libro de Obras (A.H.N., Clero, libro I7.948, 4 7 4El aspecto que hoy presenta —una puerta apuntada sin clave— es
fol.94, para las obras de la cocina). resultado de una reciente intervención.
FUNDACIONES MASCULINAS •153•
Fig. I0.
La Espina. Alzados
de las pandas septentrional
y occidental del claustro.
panda, si bien no se descartaba que fuese fruto de una (Pontigny, Senanque, Silvacane, por ejemplo) o incluso
reestructuración moderna . 475 económicos, obligan en ocasiones a elegir la primera
N o es extraña la presencia de refectorios paralelos en solución o a no modificarla . Por lo que respecta a la
477
los monasterios cistercienses, aunque lo habitual era que Espina, es difícil dar una respuesta concluyente, ya que
se dispusieran perpendiculares al claustro. De hecho, los el muro de cierre septentrional parece fruto de las obras
primeros refectorios construidos por los monjes blancos del XVII y no reaprovecha, como ocurre en el lado con-
siguieron el esquema benedictino de colocarlo paralelo, trario, parte del primitivo. El gran desnivel de terreno
si bien a mediados del siglo XII diversos motivos les lle- existente entre el ala norte y el exterior -éste muy ele-
varon a cambiar su orientación (Clairvaux, Fontenay o vado con respecto al claustro-, pudo haber determinado
Reigny, en Francia; Rielvaux, Fountains, Kirkstall, Tin- la posición paralela, aunque en este caso sus dimensio-
tern, Cymmer, en Gran Bretaña; Alcobaga, en Portu- nes resultarían algo reducidas, como también sucede en
gal) . N o obstante, condicionamientos del terreno
476 Thoronet u Obazine.
4 7 5 ABAD CASTRO, I998 (4): 240 y 245 nota 7. En efecto, la recons- quien apunta que ese aumento de monjes no afecta en cambio a las salas
trucción de época moderna no tiene porqué ceñirse a la estructura pre- capitulares, dormitorios e incluso iglesias, siendo la principal causa la
existente. Así por ejemplo, el refectorio medieval de Bujedo de Juarros era necesidad de acercar al claustro la cocina y calefactorio, y dejar sitio para
perpendicular a la panda, mientras que la obra efectuada a finales del el pabellón de los conversos (vid. también STALLEY, I987: I69-I70;
siglo XVIII dispuso los edificios paralelos al claustro (VALLE PÉREZ, KINDER, I998:
I986: I39 y I 4 8 - I 4 9 notas 47-48) y lo mismo parece que sucedió en En España presentan esta disposición los de Benifassá (MARTÍNEZ
4 7 7
Valdediós en el XVI (VVAA., I 9 9 6 (2): I9). En Valldigna, el refectorio BUÉNAGA, I997: 533-34, construido a mediados del siglo XV por el
construido durante el abadiato de Juan de Aragón (I460-I475) era tam- abad Juan de Aragón), Casbas (MARTÍNEZ BUÉNAGA, I998: 365, datado
bién paralelo a la panda (MARTÍNEZ GARCÍA, 200I: I82). por este autor en el XVI), y tal vez Sandoval, Carrizo y Arroyo (ABAD
4 7 6 La teoría tradicional esgrimida por AUBERT (I947: I, I I 8 ; II, 98- CASTRO, I998 (4): 240).
I 0 I ) que señalaba que ese cambio se debía a un incremento de la pobla- 283 y ss). N o obstante, algunos autores siguen aceptando la vieja hipó-
ción monástica, fue desestimada hace tiempo por FERGUSSON (I986), tesis (BUTLER, I994: 6).
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
156
Por lo que respecta a su alzado, poco podemos decir. La monumental escalera ocupa casi la totalidad de
Únicamente sugerir la posibilidad de que aquéllas pie- la panda. El lienzo de muro que mira al claustro
zas reutilizadas en la bodega dieciochesca procedieran reglar está construido en buena sillería, como el resto
—dadas sus características y la frecuente costumbre de de las pandas; en su extremo meridional se puede ver
aprovechar elementos de la fábrica anterior en la cons- la parte derecha de un arco, con tres dovelas que
trucción de la nueva— del refectorio medieval, con
478 muestran su arista abocelada, que pueden corres-
lo que estaríamos ante una sala dividida en dos naves ponder a un lucillo funerario ; y repartidos a lo
485
vivas, que voltea directamente sobre jambas también nican los dos claustros. Frente a la entrada meridio-
aristadas. Sus dimensiones son análogas a las que ten- nal de la escalera, en el muro que constituye la
dría el vano cegado que veíamos en el extremo opuesto, prolongación del cierre de la nave del Evangelio, se
y su situación en el plano monástico nos hace pensar ha descubierto hace pocos años una puerta cegada
que corresponda al ingreso a la antigua cocina. En la elevada 1,30 m del suelo, con arco apuntado de sec-
actualidad permite salir el exterior a través de un pasaje ción prismática y aristas biseladas que reposan sin
que a la derecha da paso a la bodega, y a la izquierda a transición sobre unas jambas de idéntica talla.
unos cuartos de mantenimiento y vestuarios . 480
Tanto esta puerta, como el resto del arcosolio y los
> La panda occidental (fig. 10) nichos pertenecen sin duda a la fábrica original, como
Como la anterior, ha sufrido desde el último cuarto lo demuestran sus marcas de cantero y la correspon-
del siglo XVI numerosas transformaciones. En 1578 se dencia de los sillares que las conforman con las hilas
adjudicaron las obras del claustro de la hospedería y de los paramentos en los que se abren. Pero ¿qué
escalera que separara a éste del reglar, siendo realiza- dependencias se disponían en esta zona antes de las
das por Juan de Ribero Rada, Juan de Nates y Juan de reformas modernas?
Nates Naveda, con la participación de los hermanos El hecho de que en otros monasterios cistercienses
Hernando y Pedro del Río, estando rematadas no se aprovechase el hueco del callejón de conversos
mucho después de 1586 . Posteriormente la escalera
481 para levantar una escalera en época moderna, como
tuvo que ser reconstruida en tiempos de fray Plácido de ocurrió por ejemplo en Huerta, ha provocado que
Mendoza (1660-1662) ; años más tarde, durante el
482 algunos investigadores piensen que lo mismo ocu-
abadiato de fray Andrés de Campos (1671-74), se rrió en La Espina, añadiendo que dicho callejón des-
reparó de nuevo ; y otra vez entre 1766-1767 .
483 484 embocaba en el exterior de la iglesia a través de la
n
0 o Q D 0 L-
Fig. I I .
La Espina. Alzado
del pabellón de monjes
(exterior)
mencionada puerta elevada, y que los conversos poniente no avia aposentos, sino una escalera por do se baxaba al
entrarían en el templo por su portada occidental . 487 patio, en el qual avia una puerta hazia el poniente grande y muy
u n a objeción hay que hacer a la primera parte de bien labrada, con dos grandes leones de piedra a los lados, por lo
esta teoría: el muro de cierre occidental de la esca- qual la llamavan la puerta de los leones por la qual se salia a la
lera no es de fábrica de sillería sino de mampostería, compaña y a la portería . 491
Según el Tumbo, el abad fray Miguel Ángel ( I 5 7 8 - Gracias a estos textos podemos afirmar que hasta la
I 5 8 I ) desizo la portería antigua y hospedería y hizo buena parte reforma del último cuarto del siglo XVI la zona occi-
de la que al presente ay . Esta misma fuente facilita más
490
dental del claustro estuvo ocupada por una serie de
detalles acerca de dichas estancias. Al describir el dependencias organizadas en torno a un patio y dis-
supuesto "Palacio de Doña Sancha" señala que se puestas en dos pisos: portería interior y palacio aba-
situaba en el lugar que hoy ocupa el claustro de la cial al sur - a la primera pertenecería la puerta
hospedería y lo describe del siguiente modo: conservada antes aludida-, habitaciones de servicio y
hospedería al este y norte, y la escalera de subida a la
Tenia sus quatro quartos con su patio y corredores que salian a planta alta al oeste. Esta configuración de la zona
el. El quarto mas principal estava en el quarto de la porteria hazia occidental no es anómala, especialmente a fines de la
el mediodía, donde al presente es quartoy celia de los padres Abba- edad media, cuando el número de conversos había
des y sirvio desto mismo desde la reedificacion desta casa que fue descendido y sus estancias son sustituidas por otras
año de 1280 hasta el de 1579 que se derribo para hazer la hos- nuevas: además de la portería exterior situada en la
pederia que al presente es. A las espaldas deste quarto avia otros cerca -más abajo hablaremos de ella-, los cistercien-
aposentos, cuyas puertas salian al corredor del patio. En el quarto ses solían contar con otra interna próxima a las estan-
frontero deste hazia el norte, y en el del lado hazia el oriente, avia cias claustrales, lo mismo que la hospedería - e n 493
sala y aposentos que servian de hospedería, y en lo baxo oficinas San Andrés de Arroyo, por ejemplo, se dispone en
y aposentos para gente de servicio. Solo en el quarto de hazia el ángulo recto con el extremo meridional de la cilla- ; 494
construcción ya en el siglo XVI. LÓPEZ DE GUEREÑO, I998 (3): 27I; idem, 2003: 97. En Jerpoint, Boyle
489ANTÓN había señalado que en el lugar de la escalera habría "acaso o Dunbrody (Irlanda), la portería también se sitúa en el pabellón occi-
algunas paneras y por alto el dormitorio de conversos" (I923 (3): 9I; dental del claustro (STALLEY, I987: I72).
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
58
igualmente encontramos ejemplos de palacios aba- Por último, el Tumbo refiere cómo en I573-74 cuando
ciales anejos a la cilla y estancias de conversos , 495 se comenzó a construir la gran cerca que rodea el con-
como en Benifassá o Iranzu . 496 497
junto, se derribó para levantar la monumental puerta
> Otras dependencias de ingreso una torre con un arco grande por do se entrava y
Aunque en la actualidad no queda rastro de ella, Fran- encima avia aposentos donde se recogían los montaneros —asala-
cisco Antón aún pudo contemplar los restos de una riados que estaban al cuidado de la caza en el coto
dependencia situada al este del conjunto y paralela a monástico— . Esta descripción nos trae a la memo-
504
la panda del capítulo. A juzgar por la fotografía que ria la portería-torre que da acceso al recinto monás-
tomó de ella, se trataba de una edificación de planta tico de Veruela, construida bajo el abadiato de Pedro
rectangular, realizada en mampostería, de un único Garcés ( I 2 8 8 - I 2 9 2 ) y recrecida a partir de I 5 5 9
piso, al que se abrían dos puertas bastante separadas bajo el abad Marco . 505
ción de su fábrica:
gua que tenemos acerca de esta dependencia es el
compromiso que adquirió en I299 Teresa Gil para • Un primer estadio constructivo se iniciaría en II43,
construirla ; y las de época moderna, junto a pla-
502 fecha en que Doña Sancha se entrevista con San Ber-
nos antiguos del conjunto, hacen pensar en un edifi- nardo con el fin de fundar un monasterio. Desde
cio perpendicular al pabellón de monjes . En cuanto 503 entonces hasta el momento de la dotación oficial del
a la otra alternativa, bien pudiera ser una dependen- cenobio en I I 4 7 se haría todo el acopio de mate-
cia de servicio cualquiera, dentro del compás del riales ; en esta última fecha darían comienzo las
506
495 Sobre esta dependencia, vid. AUBERT, I947: II, I47-I48; KINDER, atraviesa desde la esquina de la enfermería (que aora es noviciado) hasta la esquina del
I998: 356-360; y para nuestro país, LÓPEZ DE GUEREÑO, I998 (3): dormitorio nuevo junto al molino (Tumbo, fol.49r-n.66).
265-266; idem, 2003: 93-95. Para el ámbito de la Corona de Aragón, Tumbo fol.52v-n.73. Recogen la noticia, GUTIÉRREZ CUÑADO,
5 0 4
vid. ESPAÑOL BERTRÁN, 2003 (2). I9I3: 67-68; ANTÓN, I923 (3): 9I-92; idem, I942: I62-I63; YÁÑEZ
496 Construido durante el abadiato de Bernardo Pallarés ( + I 3 4 7 ) NEIRA, I972: I I 8 ; ARA GIL, I986: I2; SAN JOSÉ NEGRO, 2002: 47
(MARTÍNEZ BUÉNAGA, I994: I73-I74). (quien señala además que pudo servir como portería); entre otros.
4 9 7Erigido probablemente en tiempos del abad Pedro Martínez de MARTÍNEZ BUÉNAGA, I998: I02; CRIADO MAINAR, I995: 6I.
5 0 5
Lerate (I320-60) (LÓPEZ LACALLE, I994: I52; LÓPEZ DE GUEREÑO, 5 0 6... y aquellos tres años y medio se gastaron en hazer hornos y cozer ladrillo y teja
2004: 783). y labrar piedra y aparejar los demas materiales y quando estuvo todo aparejado y se uvo
498 I923 (3): 90-9I. de comenzar la obra se hizo la donacion (fol.48v-n.65).
499 I942: I62. 5 0 7 Así aparece reflejado en diversas partes del Tumbo:
5 0 0I953: 3I4. Le sigue MARTÍNEZTEJERA, 2002: I54. —De las propias palabras desta donacion de Doña Sancha, adonde dize Quatinus ibi-
5QI Cíteaux, Clairvaux, Longpont, Ourscamp, La Ferté, en Francia; Beau- dem me opitulante aedficatus monasterium et cet , se echa claramente de ver que el dia
a
lieu, Buildwas, Byland, Fountains, en Gran Bretaña; Holy Cross, en Irlanda; de la data desta donacion (quefue a tres de Hebrero año de 1147) no estava edificado
Eberbach y Maulbronn, en Alemania; La Oliva, Iranzu, Poblet y Santes este monasterio (fol.48v-n.65).
Creus, en España; etc (vid. AUBERT, I947: II, I50-I53; DlMIER, I982; —Acabado de edificar el monasterio (que a buena conjetura) seria año de milly ciento y
REINBOTH, I995; BELL, I998; KINDER, I998: 362-366; LÓPEZ DE GUE- quarenta y ocho, vinieron los monjes de Claraval embiados por nuestro padre San Ber-
REÑO, I998 (3): 267-269; idem, 2003: 9I; idem, 2004: 782-783; HALL, nardo (fols.49r-n.66).
2004: I99-200, 207 y 2 I I ; CARRERO SANTAMARÍA, 2006: 554-556). —Este dicho año de 1147 se comenp lafundaciony edificio del dicho monasterio, y no
Vid. nota I27.
5 0 2 antes, como consta en la dicha donacion; tardose en edificar cerca de dos años, quefue en
503 Al hablar del primitivo dormitorio de monjes dice: Las dos paredes del fin del año de 1148 quando se acabo todo su edificio (fol.50r-n.68).
dormitorio (...) está en pie oy día, y es el quarto primero desta casa hazia el oriente, y
FUNDACIONES MASCULINAS
• 157 •
• El segundo gran momento abarcaría de 1275 a lle . En ninguno de los casos aludidos se marcan o deli-
515
1285. Durante estos años y gracias a la generosidad mitan las distintas campañas de la fábrica eclesial.
de Martín Alfonso, considerado patrón y "segundo Fue Francisco Antón el primero en diferenciar clara-
fundador del monasterio", se lleva a cabo práctica- mente una serie de estadios constructivos y asignarles una
mente la construcción de la iglesia que hoy vemos, cronología que, en grandes líneas, han seguido otros investi-
a falta de algunos tramos para terminarla . 508
gadores. Según este autor, en el último cuarto del siglo XII se
• Finalmente, tras aproximadamente cincuenta años levanta la cabecera, siguiendo la obra por el transepto y muros
de inactividad en la cantera monástica, Juan Alfonso perimetrales de las naves, a principios del siglo XIII. La obra
de Alburquerque ( + 1 3 5 4 ) concluye las obras del avanzará ahora por los pilares exentos, aunque dificultades
templo y levanta el claustro con sus dependencias . 509
económicas impedirán que se lleguen a cubrir las naves hasta
el último cuarto del XIII, cuando toma el patronato del
A partir de entonces, una parte de la historiografía monasterio Martín Alfonso. A éste, que testó y murió según
ha venido señalando que el conjunto monástico, incluida Antón en 1275, se debe atribuir también la cornisa y con-
la iglesia, se había construido entre la mítica fecha de 1143 trafuertes de la nave de la Epístola, aunque aquélla también
y la de 1147 ; y otra que Martín Alfonso inició el tem-
510
la adjudica a época de Juan Alfonso de Alburquerque. Éste
plo que hoy vemos en 1275 y que no se concluiría hasta último remataría la obra al abovedar los tramos de los pies.
bien entrado el siglo XIV de mano de Juan Alfonso de A finales del XIV se erige la capilla de los Vega, cuya cons-
Alburquerque, quien también contribuye a la obra del claus- trucción se prolonga durante la siguiente centuria . 516
tro . Por otra parte, hay quienes mantienen que las obras
511
del templo comenzaron a finales del siglo XII y que avan- Para Torres Balbás la construcción de la cabecera hay
zaron lentamente hasta que bajo el patrocinio de Martín que llevarla al siglo XIII, mientras que las obras de las naves,
Alfonso y el de Alburquerque consiguieron finalizarse . 512 especialmente las de la Epístola, a juzgar por la cornisa de
Otros señalan simplemente que se inició a fines de la duo- crochets y la flora avanzada de algunos capiteles, no debe ser
décima centuria , que data de la primera mitad del XIII
513 514 anterior al segundo cuarto del XIII; las obras proseguirán
o genéricamente la fechan en ese último siglo, sin más deta- en los dos siguientes . Eydoux y Martín González
517 518 519
5 0 8- A ñ o de 1275 comenfo este cavallero el edificio desta yglesia y el murio en -Don Martin edifico la yglesia y dexo mandado por su testamento se acabasse lo quefal-
Qamora año de 1285 y segun es tradicion no quedo acabada porque le faltavan dos o tava a costa de su hazienda (...) La donacionfue hecha año de 1285. Su sobrino Don
tres capillas de la nave mayor ( f o l . 6 5 v - n . 1 0 0 ) . Juan Alfonso acabo de edificar la casa y dexo a este monasterio las tercias de Grajal y
-Año de 1275. Siendo Sumo Pontífice Gregorio decimo, Emperador de Alemania la martiniega de Villagarcia ... ( f o l . 7 4 r - n . 1 2 0 ) .
Rodufo, Reynando en España Don Alonso decimo llamado el Sabio, siendo Abbadper- 5 1 0FLOREZ, 1761: 2 7 0 ; FERNÁNDEZ DE BETHENCOURT, 1897: I, 5 4 5 ;
petuo desta casa Don Abril, el muy ilustre cavallero Don Martin Alfonso hijo de Don GUILLÉN ROBLES, 1 8 8 7 : 15; GUTIÉRREZ CUÑADO, 1 9 1 3 : 36.
Alfonso Tellez de Alburquerque (que edifico a Palafuelos) comenfo a labrar a su costa esta 5 1 1 Carta de Fray Antonio de Vega..., fol.304r; YEPES, 1 6 0 9 - 1 6 2 1 : III, 3 4 9 ;
yglesia; y prevenido de la muerte no la pudo acabar, por lo qual mando a sus testamen- ORTEGA RUBIO, 1 8 9 5 : 139; GUILLÉN ROBLES, 1 8 8 7 : 1 5 - 1 7 ; GUTIÉ-
tarios la acabassen a costa de sus bienes; y alcanfo licencia del Rey Don Sancho 4° el brabo RREZ CUÑADO, 1913: 42-44 y 46-47; MAÑUECO y ZURITA, 1920: 433;
(que Reinaba en Castilla quando Don Martin hizo su testamento) para que le diessen GARCÍA CHICO, 1 9 5 9 : 2 9 - 3 0 ; ROLDÁN Y GUERRERO, 1 9 6 1 : 1 6 1 ;
sepultura en la capilla mayor de la dicha yglesia, y el Abbad y convento le hizieron escrip- YÁÑEZ NEIRA, 1 9 7 2 : 1 1 8 ; BANGOTORVISO, 1 9 9 4 : 189; idem, 1 9 9 7 :
tura dello, y le dieron el renombre de patron della como consta por su testamento retro 284; MARTÍNEZ TEJERA, 2002: 144, 147 y 151; entre otros. De todos
escripto ( f o l . 6 6 r - n . 1 0 9 ) . ellos, únicamente Yepes habla de la primera iglesia, señalando que "la
Repite la misma idea en términos similares en el fol.74r-n.120, y en el vieja era pequeña y angosta".
fol.66v-n.110, señala que tanto Martín Alfonso como Juan Alfonso de 5 1 2 QUADRADO, 1 8 8 5 : 2 6 9 ; LAMPEREZ, 1 9 3 0 : III, 2 0 2 ; JIMÉNEZ
A l b u r q u e r q u e estuvieron sepultados en la capilla mayor que ellos avian hecho. Por LOZANO, 1980: 31; Monumentos españoles, 1984-1987: III, 212;
otro lado, en el primer abadologio se apunta que un abad de nombre LÓPEZ GARCÍA, 1 9 9 0 : 3 4 - 3 5 ; CASTÁN LANASPA, 1 9 9 5 : 8 8 ; V V A A . ,
Abril, cuya prelatura parece se inició en 1271, edifico la yglesia, y que su 1995:II, 890; HERRERO MARCOS, 1997: 107 y 108; ARA GIL, 1998:
sucesor, Fernando I prosiguió el edificio en 1279 (fol.65v-n.96). 227; PUENTE, 2002: contracubierta, 14-15 y 25; SAN JOSÉ NEGRO,
5 0 9-... estuvo el edificio [sin terminar] mas de cinquenta años hasta que Don Joan 2002: 79.
Alfonso de Alburquerque hijo del infante su sobrino puso la mano en ello. Este murio año 5 1 3 YARZA: 1 9 9 4 : 3 3 8 .
de 1354 y ansi uvo sessenta y nueve años de muerte del uno [ M a r t í n A l f o n s o ] a 5 1 4 MARTÍN GONZÁLEZ, 1 9 7 0 : 153.
la del otro; y quando le demos que tardo diez y nueve años en acabar el edificio, quedan 5 1 5 DIMIER, 1 9 4 9 : I, 106; SOWELL, 1 9 8 7 : 151; HERBOSA, 2 0 0 3 : 17.
los cinquenta años de vacante ( f o l . 6 5 v - n . 1 0 0 ) ANTÓN, 1923 (3): 59, 70-71 y 77; idem, 1942: 122, 123-124,
5 1 6
-Hizo este cavallero las tres capillas ultimas que faltavan de la nave mayor y las otras 137 y 145-146; idem, 1953: 312-313 (La cronología asignada por otros
dos naves collaterales de la yglesia; y los claustros baxos con sus oficinas (fol.n.102). investigadores a la capilla de los Vega será estudiada más adelante). Le
-Don Juan Alfonso de Alburquerque hijo del infante de Molina sobrino de Don Mar- siguen YÁÑEZ NEIRA, 1972: 117-118; POZAYAGÜE, 1995 (25); MAR-
tin acabo el edificio de la dicha yglesia y hizo los claustros y oficinas y dormitorio viejo TÍNEZ TEJERA, 2002: 150; PUENTE, 2002: 25; FERNÁNDEZ GARCÍA,
de los bienes que para ello quedo por su testamento Don Martin (segun se collige) por 2009: 31..
que darle sepultura en la capilla mayor, fue por la martiniega de Villa Garcia y tercias 5 1 7 TORRES BALBÁS, 1 9 5 2 : 107.
de Grajal que dio a este monasterio segun se collige de la executoria de las dichas tercias 5 1 8 EYDOUX, 1 9 5 4 : 197.
dadas contra Juan Rodriguez de Escobar... ( f o l . 6 6 r - n . 1 0 9 ) . 5 1 9 MARTÍN GONZÁLEZ, 1 9 6 8 : 82.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
160
diferencian dos grandes etapas, la cabecera de finales del XII De este modo será el análisis de la fábrica del edifi-
y las naves, de la primera mitad del XIII para el primero, y cio, tanto de las soluciones arquitectónicas empleadas como
de bien avanzado ese mismo siglo para el segundo. Ara Gil de sus fórmulas decorativas, y su relación con otros con-
considera que la cabecera pertenece al último cuarto del juntos monumentales de cronología más o menos cierta, lo
XII, quedando interrumpidas las tareas constructivas a la que nos permitirá datar de manera aproximada la cons-
altura del transepto para dedicarse a las dependencias de la trucción del templo de La Espina.
panda del capítulo. Poco a poco se irán levantando los
muros del transepto y las naves laterales, y en una fase pos- 1. Primera etapa
terior, la cubierta del transepto y de todo el cuerpo de la
iglesia. Las obras, que se han dilatado bastantes años en el Se levanta en esta primera fase íntegramente la cabe-
tiempo, recibieron un impulso con Martín Alfonso (1275) cera . Del transepto se construiría tal vez todo su costado
521
y se terminaron gracias a Juan Alfonso de Alburquerque, a oriental, conservándose únicamente el paño situado por
mediados del XIV . 520
encima de la embocadura de las capilla norte y parte del
correspondiente a la capilla de los Vega, incluyendo lógica-
A dos problemas nos enfrentamos a la hora de preci- mente las pilastras que iban a servir de apeo a los fajones de
sar tanto las etapas constructivas como su cronología. En las cubiertas ; del brazo sur poco puede decirse ya que los
522
primer lugar la casi total ausencia de datos documentales de dos tercios inferiores del hastial desaparecieron prácticamente
primera mano y contemporáneos a la fábrica de la iglesia: con la apertura del gran vano que se abre hacia la capilla de la
tenemos que esperar hasta 1285 para encontrar la primera Santa Espina y los dos pequeños pasos que lo flanquean, pero
mención a obras, cuando Martín Alfonso informa en su la aparición en el costado occidental de un nuevo modelo de
testamento de que ha tomado a su cargo las obras del tem- basamento cercano al ángulo S.O. nos hace pensar que se
plo y que no falta mucho para su terminación; y hasta las había levantado la parte inferior del hastial comprendiendo la
últimas voluntades de Fernán Gutiérrez de Vega ( 1 4 3 3 esquina occidental del mismo, pero poco más ; respecto al 523
aprox.) no volveremos a tener noticias semejantes. En brazo norte, la construcción de las partes bajas del hastial
segundo lugar, las reformas sufridas en época moderna, —hasta dos hiladas por encima de la línea marcada por la clave
especialmente las que afectaron a los pies del templo, difi- del paso al husillo— posibilitarían el rápido inicio de las depen-
cultan la confirmación de los datos aportados por fuentes dencias orientales del claustro , pero del costado oeste sola-
524
tardías como el Tumbo, en especial en lo que concierne a la mente se lanzaron las hiladas que conforman el zócalo —sin
labor de Juan Alfonso de Alburquerque. llegar a trazarse, al igual que ocurrió en el brazo opuesto, el
ARA GIL, 1986: 8 y 11; idem, 2002: 66-67. Por otro lado, VALLE
5 2 0 haciendo recodo las molduras que lo integran; ello sugiere la existencia
PÉREZ, 1992 (2): 227 nota 59, alude a las diversas fases constructivas previa de esa esquina S.O. del brazo y que hasta una segunda fase no se
del templo señalando que entre la primera y la última median más de cien levante la parte norte de ese costado en la que se incorpora ya ese hasta
años. ahora inédito tipo de zócalo.
Así lo sugieren la identidad del material empleado en la capilla
5 2 1 5 2 4 A partir de la línea mencionada el tamaño de la sillería varía, emple-
original y en los restos conservados de las otras, el mismo tipo de cre- ándose sillares de mayor tamaño, análogos a los que vemos en las partes
dencias y el empleo del zócalo 1 que se puede ver flanqueando el altas del costado oriental del transepto y que no se corresponden con las
acceso a dicha capilla como en el extremo oriental del brazo sur del hiladas inferiores de ese mismo costado. N o obstante, la mitad occi-
transepto en torno a lo que sería la embocadura de la capilla extrema dental de esta zona del hastial presenta sillares muy grandes en relación
de la Epístola. con los de la mitad oriental y sus hiladas enlazan correctamente con las
El límite de esta campaña por este lado viene marcado por el cam-
5 2 2 del costado oeste que, como veremos luego, pertenecen a una segunda
bio de tamaño de los sillares a partir de la séptima hilada contando desde campaña constructiva, por lo que en este momento no se termina la parte
la clave de la capilla extrema septentrional, apreciándose además en este baja de este testero. Ello no implica que el paramento exterior sí se com-
punto la existencia de un mensulón junto a la pilastra que delimita por pletase hasta la mencionada altura para dar luego prioridad a la elevación
el sur este tramo y que debe relacionarse sin duda con algún tipo de cie- del pabellón de monjes, que se adosa a este hastial.
rre provisional de madera para esta zona mientras no se cubría con pie- o t r o detalle a señalar es la ausencia de zócalo en este hastial. Este hecho
dra. En cuanto al lienzo situado por encima del acceso a la capilla puede hacer creer que la diferencia de grosor entre la mitad inferior y
meridional extrema, y a pesar de la ampliación de ese vano en el siglo XV, superior del mismo se deba a un recrecimiento del lienzo que ocultó el
se ve claramente cómo a la misma altura que veíamos en el brazo opuesto mencionado zócalo. Sin embargo ni en el paso al husillo ni en el de la
se produce ese mismo cambio en las dimensiones de los sillares. Por otra sacristía se aprecia la unión de dos fábricas que se tendría que observar
parte, nada podemos decir del avance de las obras por el exterior de esta de haber sucedido ese supuesto, y además la sillería que forman las jam-
zona del templo debido a las reformas modernas. bas de la puerta del dormitorio coincide con la del costado occidental,
El nuevo modelo de zócalo (tipo 4) arranca a un metro aproxima-
5 2 3 lo que parece indicar la coetaneidad constructiva de ambos paramentos.
damente del ángulo formado por el hastial y este costado occidental, Difícil es, por tanto, precisar las razones que expliquen esa anomalía.
FUNDACIONES MASCULINAS
• 159 •
soporte occidental- y tres o cuatro hiladas más por el extremo que parece seguía la iglesia Clairvaux erigida en tiempos de
norte . Las obras se interrumpirían sin llegar a concluir en
525
San Bernardo (Clairvaux II) y cuya tipología encontra-
529
modo de capillas pero comunicados entre sí-, disposición cualquier referencia a construcciones de su entorno . 533
5 2 5Del zócalo del transepto sólo se asentó hasta el lugar en que debía gen los trabajos centrados en el estudio de las construcciones industria-
proyectarse la citada pilastra, interrumpiéndose en ese punto. En cuanto a les de la abadía llevados a cabo por P. Benoit, los de AUBERT, I928, OUR-
la elevación que se alcanzaría, se aprecia hacia el centro del paramento entre SEL, I954, GREGOIRE, I992, CAILLEAUX, I 9 9 8 y BAZIN o
la tercera y cuarta hilada una fractura vertical y una desigualdad en la altura CHAMPOLLION, I999) y otras muchas iglesias dentro y fuera de Fran-
de los sillares situados a uno u otro lado de dicho corte, aspecto que se cia, como l'Escale-Dieu, Silvanes o Trois Fontaines en ese último país,
corrige a partir de la siguiente hilada; la altura de los sillares meridionales Bonmont y Hauterive en Suiza, Alvastra en Suecia, Fountains y Rievaulx
coinciden con los tambores de la columna de ese pilar XI, lo que indica en Inglaterra, Tarouca y Salzedas en Portugal, etc (Vid. nota siguiente).
una contemporaneidad con ella y por tanto una cronología posterior a los VALLE PÉREZ, I982: 40, 69, 286-287 con sus respectivas notas (en
5 3 0
situados hacia el norte, colocados sin duda, como las dos primeras hiladas, estas páginas el autor estudia con detenimiento en las características de
en esta etapa. este sistema de abovedamiento, sus orígenes en la Borgoña de comienzos
5 2 6Aunque esta interrupción de las tareas del templo, habitual en los del siglo XI, las ventajas constructivas que presenta su empleo, así como su
monasterios de la Orden, es más habitual que se produzca a partir del pri- afinidad con la sobriedad, sencillez y austeridad preconizados por la Orden
mer tramo (vid. los ejemplos comentados al respecto en la monografía de y especialmente por San Bernardo); idem, I994: 24.
Valbuena), no son extraños los casos en que la paralización de las obras se En I I 7 4 era consagrada la cabecera, y cuatro años más tarde se colo-
5 3 1
produce más hacia oriente: en la primera campaña de Valdeiglesias sólo se caba la cubierta de plomo (KINDER, I99I: 2I5-2I8). Sobre la posibili-
levantó la cabecera y en la de Benifassá cabecera y partes bajas del transepto. dad de que la ampliación de la cabecera de Clairvaux se planease o incluso
5 2 7Este aspecto ha sido destacado por VALLE PÉREZ en diversas publi- comenzase en vida del santo, vid. ROMANINI, I983: I6-2I y 25-26 (cfr.
caciones (I982: I, 26I; I992 (2): 22I; etc). VALLE PÉREZ, I994: 38 nota 65); y GAJEWSKI, 2004 y 2005.
5 2 8Recordemos, no obstante, que este argumento no siempre es defini- Vid. al respecto lo que se dice en el apartado dedicado al estudio de
5 3 2
tivo (vid. lo que se dice al respecto en el análisis del armarium y sacristía). la planta del templo. En cuanto a la diferencia cronológica entre ambos edi-
5 2 9Iniciada entre I I 3 3 y I I 3 5 -algunos autores adelantan sus inicios ficios, no debemos olvidar que la abacial de Oya, afiliado a Clairvaux en
a la década de los 20 (vid. en último término, GAJEWSKI, 2005: 6 3 - 7 I ) - II85, comenzaría a construirse en torno a I I 9 0 repitiendo ese mismo
y consagrada en II45, la elevación interior sigue siendo hoy por hoy un esquema (VALLE PÉREZ, I982: I, 287).
misterio y son varias las opciones que ha barajado la historiografía (KIN- Al margen de las cabeceras tripartitas de Wamba (Valladolid) -del
5 3 3
DER, I99I: 209 hace un breve repaso de ellas). A pesar de que la des- siglo X (ABAD CASTRO, I992: VI y 22; HERRERO MARCOS, I997: 87-
cripción localizada en un documento fechado en octubre de I808 sugiere I05)-, o las zamoranas de San Cipriano, San Esteban, San Juan de Por-
un alzado tripartito integrado por los formeros que separan las naves, tanova, Santiago del Burgo o Santo Tomé -con cronologías que oscilan
unos pequeños vanos de aireación abiertos al trasdós de las bóvedas de entre finales del XI y mediados del siguiente (RAMOS DE CASTRO, I977:
las naves laterales y grandes vanos altos de iluminación (Ibidem: 2 I I ; I44, I62-I65, I73-I79, 2 0 3 - 2 I I y 222-230, respectivamente)-, o las
MIGUET, I 9 9 I : 235), como se puede ver en La Bennison-Dieu, Vaux- más alejadas en la geografía y en el tiempo como Santa María de Villa-
de-Cernay y Breuil-Benoit (Francia) o Fossanova y Casamari (Italia), muriel de Cerrato (ARA GIL, I 9 9 2 (2) o Santa Cecilia en Aguilar de
entre otros (vid. más ejemplos en AUBERT, I947: I, 285-286), VALLE Campóo (HERNANDO GARRIDO y NUÑO GONZÁLEZ, I990), o el
PÉREZ (I982: I, 88 nota I22; I994: 35 nota I9) estima que dicho alzado de la también lejana y palentina iglesia de Santa María de Mave,
alzado es consecuencia de una intervención relacionada con la amplia- que ya estaría avanzado, pero no terminado, hacia I200 (GARCÍA GUI-
ción de la cabecera en el tercer cuarto del siglo XII, y que el alzado ori- NEA, I96I: I76-I79; BANGOTORVISO, I994: I06), no encontramos
ginal se correspondería con el que vemos en Fontenay, comenzada en templos que presenten semejante tipología de cabecera ni ese hipotético
I I 3 9 y consagrada el 2 I de septiembre de I I 4 7 por el papa Eugenio III alzado en la arquitectura del momento de su ámbito geográfico, debiendo
en presencia de San Bernardo (sobre este monasterio, sigue siendo útil recurrir por tanto a la importación de tales soluciones foráneas para
el trabajo de BEGULE, I 9 I 2 ; también puede consultarse, dejando al mar- explicar su presencia en tierras vallisoletanas.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
62
Pero ¿cuándo comenzó la obra del templo? Aunque en bios tanto constructivos como decorativos en relación a la
alguna ocasión se ha comentado que los difíciles tiempos que anterior (utilización de sillares de un módulo más grande, apa-
sucedieron a la fundación provocaron sin duda cierta lentitud rición de nuevos tipos de soportes y perfiles para basamentos
en las tareas constructivas , la confirmación de Alejandro III
534 y zócalos) causados por la intervención de talleres que nada
en I I 6 5 de todas sus propiedades (las villas donadas por tienen que ver con lo visto hasta el momento. N o obstante, el
Doña Sancha en I I 4 7 —San Pedro de la Espina y Santa María hecho de que en los pilares exentos y sus responsiones se apli-
de Aborridos—, y las granjas de San Juan de Casarejos, San quen a su vez diferentes soluciones estructurales permite dis-
Andrés y Eslúa, los propiedades en Castellanos y Santiago, tinguir dos etapas que se suceden sin interrupción.
viñas en Toro y otras heredades entregadas con posterioridad En un primer momento se procede a cerrar el perí-
a I I 4 9 por el Emperador, la propia fundadora, Sancho III y metro del cuerpo de naves levantando los costados norte y
algún particular) nos informa de que por esas fechas el monas- sur con sus respectivas responsiones hasta el arranque de
terio estaba en posesión de un rico patrimonio, lo que sin los capiteles , marcándose ya la estructura y dimensión de
537
tándose así el período de tiempo que por norma general suele que se emplea un tipo de capiteles y cimacios desconocidos
transcurrir desde la fundación de un monasterio hasta el ini- hasta entonces y que, por otro lado, no volveremos a encon-
cio de su fábrica . u n o s años más adelante, coincidiendo
536
trar ; y al mismo tiempo se iría avanzando poco a poco
539
seguramente con el aumento de donaciones que se produce a por los hastiales del transepto y sus costados occidentales.
partir de I I 7 6 , se dará por concluida esta primera campaña
del templo y la actividad edilicia pasará a centrarse en las El que a lo largo de todo el perímetro de la iglesia se
dependencias que conforman el pabellón de monjes. utilice un único tipo de soporte, un robusto pilar con tres
columnas —la central considerablemente más grande que las
acodilladas— preparado seguramente para recibir arcos
2. Segunda etapa doblados, nos está hablando por un lado de cierta rapidez
u n a vez que las principales dependencias de los mon- en su construcción y por otro de un proyecto anclado en la
jes están lo suficientemente adelantadas se reanudan las obras tradición románica que en las fechas en que nos movemos
de la iglesia. En esta nueva etapa se detectan importantes cam- (finales del siglo XIl) no debemos considerar extraño . 540
ÁLVAREZ PALENZUELA, I978: I63 nota 63. Sobre esta "crisis", vid.
5 3 4 5 3 7 Las cestas de estas columnas se decoran con idénticos motivos a
lo que se comenta en el apartado histórico (nota 8I). los que vemos en los pilares exentos, lo que indica una misma cronolo-
La cronología de ca. I I 5 0 asignada por VALLE PÉREZ a los comien-
5 3 5 gía para ambos y, por tanto, una posterior colocación en los primeros.
zos de Sobrado (I982: I, 49 y 7I), adelantando en varios años la fecha 5 3 8 La distancia entre soportes oscila de los 3'95 m. del último tramo
en que se colocaba la introducción de esta tipología de cabecera en nues- a los 4 ' I 5 m. del segundo.
tro país (por ejemplo, TORRES BALBÁS, I 9 2 4 : I I 9 , AZCÁRATE RISTÓRI, 5 3 9 ANTÓN, I942: I44, señala que esta portada es coetánea a las ven-
I974: 39; idem, I990: I6, que la sitúan a partir de I I 7 5 - I I 8 0 ) , incluso tanas de la nave de la Epístola, sin embargo, ni la molduración de arcos
la presencia en la cabecera de Armenteira de arcos y bóvedas apuntados y cimacios, ni la decoración de los capiteles son semejantes; dichas ven-
en fechas no muy lejanas de I I 6 7 —año en que se inicia la abacial— tanas son de una cronología claramente posterior. Además, la correcta
(VALLE PÉREZ, I982: I, 26I), soluciones importadas que nada tenían inserción de todos sus componentes en relación con la sillería del muro
que ver con lo que se estaba haciendo entonces en esa zona (VALLE en que se abre denota una misma campaña constructiva.
PÉREZ, I994: 24), y que también se documentan ya en la primera cam- 5 4 0Análoga configuración de responsiones encontramos en San Juan de
paña de Moreruela (sobre su cronología, vid. nota siguiente), vienen a Ortega, San Vicentejo de Treviño, Butrera o Moradillo de Sedano (Burgos);
corroborar la datación propuesta para la cabecera de La Espina. Moarves, Santa Cruz de Rivas y Santa Eufemia de Cozuelos —aunque en
Aunque por regla general se ha estimado que dicho intervalo de
5 3 6 las dos últimas se adaptó posteriormente para crucería— (Palencia); cate-
tiempo oscila entre 30 y 40 años (AUBERT, I947: I, 2 y I00-I04; dral de Zamora; muro de cierre de la girola de Santo Domingo de la Cal-
EYDÓUX, I958: 66 y 99; COCHERIL, I969: 454; entre otros), en deter- zada; etc., todos ellos fechados desde la segunda mitad del siglo XII hasta
minadas ocasiones el rápido enriquecimiento del nuevo monasterio o el entorno de I200 (La cabecera y partes bajas del transepto de San Juan
incluso la herencia del importante patrimonio del monasterio precedente, de Ortega se realizarían en el último tercio del siglo XII —ANDRÉS ÓRDAX,
especialmente en el caso de las afiliaciones, permite una reducción de ese I995: I 4 y I6—, San Vicentejo está fechado en I I 6 2 —PÉREZ CARMONA,
período . Así sucede por ejemplo en Sobrado, fundado en I I 4 2 y comen- I959: 38 y I2I—; Butrera en el último cuarto del XII —PÉREZ CARMONA,
zado ca. I I 5 0 (VALLE PÉREZ, I982: I, 49, 66-67 y 7I); Moreruela, afi- I959: I23—, y Moradillo en I I 8 8 —PÉREZ CARMONA, I959: 44 y I26);
liada en I I 5 8 / I I 6 3 , iniciada en I I 6 2 (VALLEPÉREZ, I998: 39; CALVO Moarves se fecha ca. I I 8 5 —GARCÍA GUINEA, I96I: I67; para Rivas se
CAPILLA, I998 (3): I34), o II76, según la lectura que hace de la lápida barajan las fechas cercanas a I200 —LÓPEZ DE GUEREÑO, I997: II, 508—;
situada en el absidiolo central de la girola GRANJA ALÓNSO, I998:475 y la nave de Cozuelos, en donde se sitúan estos pilares, debe ser posterior
nota 2; Sandoval, fundado en I I 6 7 e iniciado a fines del XII (vid. tanto a I I 8 6 —HERNANDO GARRIDO, I993: 46-47—; en cuanto a la seo zamo-
para éste como para el anterior lo que se dice más adelante en el texto); rana, en I I 7 4 ya estaba construido todo excepto el cimborrio y bóvedas
Valdediós, fundada en I200 e iniciada en I 2 I 8 (por ejemplo, GARCÍA de la nave central, aunque tal vez las obras se prolongaron un poco más —
CUETOS, I998: 7I; volveremos de nuevo sobre esta cronología); La Oliva, RAMOS DE CASTRO, I977: I00 y I29; idem, I982: 24; para terminar, la
fundada en I I 5 0 e iniciada hacia I I 6 4 (entre otros, MARTÍNEZ ÁLAVA, seo calceatense se inició en I I 5 8 —BANGO TÓRVISO, 2000: 35).
2007: II); Veruela, fundado en I I 4 5 / I I 4 6 y comenzada en la década
de I I 6 0 (MARTÍNEZ BUÉNAGA, I998: I00); etc.
FUNDACIONES MASCULINAS
• 161 •
Antes de seguir debemos tratar de explicar algunos dos modelos de zócalos se optará por ir reduciéndola pro-
aspectos: gresivamente hacia el norte hasta quedar igualados, elimi-
En primer lugar, la existencia de dos tipos de zócalos nando en el tramo central y en el del Evangelio el banco
diferentes en una misma fase constructiva, uno (tipo 2) que pétreo que aparece a lo largo del costado sur.
encontramos en la nave del Evangelio y otro (tipo 3) que se Y en tercer lugar, la diferente solución adoptada en la
utiliza en el costado occidental del brazo sur del transepto, cara oriental de los pilares VIII y XI: en este último caso no
nave de la Epístola e interior de la fachada occidental. Tanto se ha previsto desde el suelo ningún apeo para la cubierta
la tipología de las basas —dejando de lado la presencia de del transepto, cuando hacia oriente sí se había levantado
plintos decorados en las dos primeras responsiones del cos- durante la etapa anterior una pilastra que recibiría el fajón
tado norte (XI y XIII)— , como las marcas de cantero loca-
541
de la bóveda; en el primero, sin embargo, sí se levantó un
lizadas en estos basamentos, las columnas y lienzos murales basamento en la línea del que presenta hacia la nave lateral,
de ambos flancos nos hablan de un único momento cons- pero en lugar de basa aparece un macizo prismático y sobre
tructivo. Tal vez haya que buscar la respuesta a esta anoma- él, en vez de una columna gruesa como parece lógico que
lía en la existencia de problemas de cimentación provocados fuese, tres finos fustes cuyos tambores se corresponden con
por la difícil topografía sobre la que se asienta el monaste- los de la columna vecina y con las hiladas del paño inme-
rio , la cual obligó a reforzar los basamentos septentrio-
542
diato. N o es fácil encontrar una respuesta adecuada que
nales con una "capa" suplementaria de sillares terminados en explique estas irregularidades. Posibles cambios en el plan-
bocel para suavizar y aligerar su aspecto ya de por sí volu- teamiento de las cubiertas del transepto que permitieran en
minoso al tiempo que se reducía el espacio destinado a fuste, un primer momento prescindir de un apoyo occidental
llegando incluso a situar entre las responsiones bancos desde abajo (XI) y una posterior pero pronta rectificación
pétreos que afianzasen aún más ese costado . 543
acentuada por los problemas de cimentación que venimos
En segundo lugar, la longitud del templo y el modo de señalando (VIII), pueden ser los motivos de este anomalía,
cerrar su perímetro. La iglesia fue planeada para tener al proceso que por otro lado es explicable debido a la priori-
menos un tramo más de los que posee, como lo demuestra el dad constructiva del costado norte respecto al sur.
que en el basamento del soporte angular N.O. ( X X X V I )
—actualmente una simple columna de esquina— se llegase a 3. Tercera etapa
colocar el resalte que corresponde a la columna central en las
otras responsiones, e incluso que su basa esté cortada como Cuando se está trabajando el perímetro de las naves se
para flanquear a la basa central. Cuando se iba a llegar a este introducen los pilares exentos, que traen consigo el aban-
punto en el costado sur —el norte estaba más adelantado con dono definitivo del alzado previsto en origen —el "bernar-
el fin de ir delimitando el espacio claustral—, se decidió ace- din"— si es que no se había descartado ya antes . 544
lerar la construcción y como consecuencia de ello reducir el En efecto, este soporte de núcleo cruciforme con
número de tramos previstos; en ese momento se cierra la igle- cuatro medias columnas en los frentes presenta además de
sia por occidente con el modelo de basamento que se estaba los codillos propios del pilar que reciben las dobladuras
utilizando por entonces en el flanco meridional, de ahí que de formeros y perpiaños, otro resalte intermedio que
el de la columna S.O. (XXXIII) esté ya trazado correcta- recoge los nervios de las bóvedas de crucerías. Sin embargo,
mente para situarse en esquina —aunque no su basa, que tal y el que las nervaduras ocupen en su arranque mayor super-
como sucede en la del ángulo contrario se talló para formar ficie de la que les corresponde, las irregularidades detecta-
grupo con otras—; para salvar la diferencia de altura entre los das en los ejemplos leoneses, asturianos y navarros en los
N o creemos que este detalle sea tan significativo como para plan-
5 4 1 templo (MARTÍNEZ BUÉNAGA, 1998: 198 y 260) y que los basamentos
tear una posible "subfase", sino más bien se puede pensar que si en un de los pilares exentos y responsiones de la nave de la Epístola fuesen más
principio se quiso aplicar decoración a estos elementos inmediatamente altos y robustos que los del flanco opuesto. También el de Valdediós
se abandonó esa idea con el fin de agilizar y, por qué no, abaratar el pro- sufrió problemas de inestabilidad semejantes —consecuencia de los cua-
ceso constructivo. les es, por ejemplo, la rotura del tímpano de la puerta de muertos—, por
Recordemos la gran diferencia existente entre el nivel del claustro
5 4 2 lo que encontramos que los basamentos de los pilares meridionales son
y el de la iglesia, y entre el interior de ésta y el exterior de la misma, sal- más elevados que los del norte.
vándose el desnivel entre unas zonas y otras a través de un elevado Vid. arriba en el texto.
5 4 4
número de escalones.
En el monasterio de Rueda, por ejemplo, esos mismos problemas
5 4 3
cia), en los que tales pilares se destinan para bóvedas de encontramos mayoritariamente uno de esos tipos de capite-
aristas , puede hacer pensar en una alteración del pro-
546
les (I.2), incluyendo las ventanas, todas de medio punto . 549
yecto. Francisco Antón planteó la posibilidad de que fuese En cuanto al costado sur, no se llegan a colocar más que los
un cambio constructivo el introductor de la crucería en las capiteles del primer pilar adosado (VIII) y quizás el más
naves debido a esa "desarmonía entre los apoyos y arran- oriental del segundo (60, XVI), quedando el resto sin ter-
que de dobladuras, formeros y ojivas" y que tales pilares minar: aunque no es bien visible desde el interior, por fuera
estuviesen previstos para aristas, pero finalmente descartó se aprecia claramente un cambio en la tonalidad de la piedra
esta idea y apuntaba como culpable de esas irregularidades dos hiladas por debajo de los vanos; tal vez se cerró el primer
al considerable grosor que muestran dichos arcos . Por 547
tramo y parte del segundo, incluyendo su ventana de medio
nuestra parte, y a tenor de las razones expuestas más arriba, punto y el contrafuerte que hoy vemos más a oriente, asen-
creemos que en efecto estos soportes estaban previstos para
tándose el resto de capiteles y levantando sus muros con ven-
recibir bóvedas de aristas, pero que el lento proceso cons-
tructivo que sufre el templo hizo que en una etapa poste- tanas ya apuntadas en una fase posterior.
rior se optase por la crucería y que esos defectos detectados Este avance de la fábrica por el norte responde de
en los arranques de las nervaduras, se debe precisamente a nuevo a un deseo de tener delimitado el ámbito claustral,
la falta de espacio suficiente para recibirlas. protegiendo además el acceso al mismo desde la iglesia.
Al tiempo que se están levantando los pilares exentos Mientras tanto, las obras avanzaban por el transepto
(IX, X, XIV, XV, parte del XVIII, XIX y parte del XXII y con el fin de ir cerrando poco a poco la zona oriental del
5 4 5En Sandoval, por ejemplo, el codillo intermedio que da a la nave la que el soporte empleado es el típico cruciforme con semicolumnas
central no sube hasta arriba sino que apea una segunda dobladura del for- adosadas en sus frentes, se incorpora en el último cuerpo de la nave cen-
mero, introduciéndose el nervio de la bóveda de modo forzado entre la tral un resalte o columnilla complementaria que sirve para recoger el for-
dobladura del perpiaño y el muro; y esto último se repite igualmente en malete de la bóveda de arista, mientras que la columna recibe el fajón y
sus naves laterales, a pesar de contar con responsiones provistas de un el codillo del núcleo del pilar su dobladura.
resalte para la dobladura y otro para el crucero. En Valdediós sucede eso TORRES BALBÁS, 1952: 14-15, señala cómo en muchos casos la exis-
mismo en el transepto y nave central, si bien en el caso de las laterales tencia de codillos o columnas de rincón no están preparadas para arran-
las responsiones son, como en Gradefes, sencillas columnas. Por lo que que de nervios cruceros, como por ejemplo en la cripta de la catedral de
a San Nicolás de Pamplona se refiere, poco podemos decir, ya que los Santiago de Compostela o las naves laterales de San Martín de Sala-
abovedamientos que recibe son tardíos -los de la nave central y tran- manca, sino para el apoyo de las aristas; esa misma función tendrían las
septo del siglo XIV- y los de las naves laterales -bóvedas de cañón- nada de los pilares de las naves de la catedral de Salamanca (de la misma opi-
tienen que ver con los soportes previstos. nión es ENRÍQUEZ DE SALAMANCA, C., 1989: 18), debiendo desesti-
5 4 6En la catedral de Jaca encontramos un pilar de sección análoga hacia marse de modo rotundo la teoría de LAMBERT, el cual había indicado que
la mitad del cuerpo de naves y si bien no se llegó a rematar por completo las columnillas acodilladas de Salamanca se colocaron expresamente para
- c o n toda seguridad debido a un cambio de planes-, quedando inte- recibir bóvedas de crucería (1931: 68). Respecto al caso salmantino,
rrumpido a media altura el desarrollo de los resaltes intermedios que debemos mencionar que los pilares torales de su catedral muestran una
miran a la nave mayor -la cubierta actual data del siglo XVI, siendo la pre- configuración análoga a la de los pilares que venimos tratando, sustitu-
cedente de madera-, las naves laterales - q u e también presentan bóvedas yendo una columna al codillo central a partir del segundo tramo; res-
de la decimosexta centuria-, sí parece que se llegaron a cubrir con aris- pecto a sus remates, los codillos bajos llevan capitel mientras que hacia
tas (LACARRA DUCAY, 1993: 18; p o r su parte, ESTEBAN LORENTE, el transepto y nave central carecen de ellos.
2000: 257 nota 42, señala que "la hipótesis de realizar bóvedas de arista 5 4 7ANTÓN, 1942: 133-134 y 139-140.
no tiene ningún soporte técnico ni posibilista", añadiendo en el texto que 5 4 8En el paramento interior de los dos primeros tramos de este cos-
el porqué de la elección de este tipo de pilar es una incógnita); esta zona tado se aprecia a la altura de los cimacios de las responsiones una hilada
de las naves se fecha durante el reinado de Alfonso el Batallador, ca.1104- de sillares mucho más estrecha que las restantes que componen el paño
1134 (LACARRA DUCAY, 1993: 22). Y en Notre Dame de Montreal, y que al llegar a la ventana se quiebra y la rodea por la parte inferior.
cuya primera campaña que abarca cabecera, transepto y primer tramo de Este detalle, que no encontramos en los restantes, nos lleva a creer que
naves se fecha hacia 1170-1180 el codillo intermedio recoge en las naves en principio se pensó colocar una imposta y que más tarde se desestimó
laterales las aristas de una bóveda, mientras que hacia la nave central se tal idea (no hay huellas de que se llegase a labrar y posteriormente haya
introduce más tarde y variando el proyecto original la crucería; en la sido repicada), lo que no quiere decir desde luego que estemos ante dos
segunda campaña, ya del XIII, en la que se completan las naves con dos fases constructivas distintas.
tramos más, ese resalte intermedio es sustituido en la cara que da a la nave Aunque la ventana del quinto tramo desapareció durante las obras
5 4 9
central por una columnilla (SALET, 1959: 333-334). Por otra parte, de época moderna, la del sexto tramo es de medio punto, por lo que asig-
tanto en Saint-Lazare de Avallon como en la Magdalena de Vezelay, en namos a esta misma fase la terminación de todo este flanco del templo.
FUNDACIONES MASCULINAS
• 163 •
templo, siendo ahora cuando se definen y comienzan a mate- sias de los también monasterios cistercienses de Sandoval,
rializarse los macizos que marcan por occidente la separa- Gradefes y Valdediós— nos dará pistas para fijar una data-
550
ción de los tramos de sus brazos. La amplitud de los pilares ción aproximada . 551
exentos, muy largos en comparación con las responsiones, y En el templo de Sandoval se vienen tradicionalmente
la necesidad de que sus columnas quedasen enfrentadas con identificando dos etapas constructivas: una primera que
las de aquéllas para evitar problemas de alineamiento a la hora abarcaría la cabecera, transepto y primer tramo de naves, y
de lanzar arcos y bóvedas, provocaron que los torales occi- una segunda en la que se harían los dos tramos restantes
dentales se introdujeran de forma destacada en el área del del cuerpo de naves , si bien en los últimos años algunos
552
transepto. Por ello fue preciso introducir en altura un soporte investigadores han añadido una intermedia que correspon-
que sirviese de apeo a los arcos de la cubierta que se pensaba dería a los abovedamientos con crucería del transepto y
proyectar. Al mismo tiempo que se construyen estos macizos tramo más antiguo de las naves . Por lo que a su crono-
553
se voltean los arcos de embocadura de las naves laterales, logía se refiere, la última etapa está datada por una inscrip-
como lo indica el hecho de que los sillares situados por ción que señala cómo fue iniciada por el abad Pedro de la
encima de los cimacios de los capiteles orientales forman una Vega el 28 de marzo de 1462 , mientras que la primera
554
pieza única con lo que sería el salmer y segunda dovela de las se viene fechando dentro de los últimos veinte años del siglo
dobladuras de dichos arcos. XII , llevando en unos pocos casos las bóvedas referidas
555
Las obras discurrirán a partir de ahora por las naves más arriba a la centuria siguiente . Lo cierto es que las
556
lanzando los siguientes perpiaños y dejando sin concluir soluciones arquitectónicas y escultóricas aplicadas en esa
el transepto, del que tendríamos construido un poco más primera fase no son tan homogéneas como en un principio
de la mitad del hastial norte —hasta la línea marcada por podría parecer, sino que se puede distinguir a su vez dos
el retranqueamiento del muro— y el costado oeste de ese momentos sucesivos, tal vez interconectados, pero en los
mismo brazo hasta justo por encima del arco de comuni- que encontramos algunos ingredientes muy diferentes entre
cación con la nave; en cuanto al brazo meridional, el sí. De este modo, creemos que en una etapa inicial se aco-
hecho de que la tipología de la ménsula en que descansa metería la elevación de las capillas de la cabecera tanto al
la columna del correspondiente macizo varíe con respecto exterior —cornisas incluidas— como al interior —en el que
a la empleada en el del brazo opuesto y primeros pilares se emplean soportes columnarios con altísimos basamentos
exentos hace pensar que se completaría en una campaña muy decorados en algunos casos y provistos de capiteles
posterior. lisos con dados en su ábaco, aunque tal vez no se llegasen
A la hora de establecer la cronología de esta etapa a completar los pilares de la embocadura de la mayor, en
debemos tener en cuenta que seguimos sin poseer datos donde aparecen nuevos modelos de cestas—, gran parte del
documentales relativos a la marcha de las obras, por lo que brazo sur del transepto —el exterior de su hastial está reco-
sólo el análisis comparativo con otros edificios de formas rrido, al igual que los ábsides, por columnillas—, incluyendo
y cronologías más o menos afines —en nuestro caso, las igle- las partes bajas del primer pilar adosado de la nave de la
Las relaciones estilísticas entre estos tres edificios han sido estu-
5 5 0 PÉREZ, 1991 (3): 155; idem, 1992: 19; idem, 1994: 33; BANGOTOR-
diadas detenidamente por VALLE PÉREZ, 1991 (3): especialmente 155- VISO, 1994: 84; MARTÍNEZTEJERA, 2002 (4): 652 y 655.
157, por lo que a él remito para aquellos puntos ajenos a su conexión con 553BANGOTORVISO, 1997: 117; CARRERO SANTAMARÍA, 1998 (2): 140.
La Espina. Únicamente señalamos algunos trabajos que han visto la luz La publican, por ejemplo, CASADO Y CEA, 1986: 80-81.
5 5 4
después de aquél y que reiteran estas concomitancias: VALLE PÉREZ, u n a parte de la historiografía fecha los inicios en la última década
5 5 5
1992: VII, 20 y 22; GARCÍA CUETOS, 1992: 200, 201, 204, 206, 208 (GÓMEZ MORENO, 1925: I, 422; TORRES BALBÁS, 1952: 23; FERNÁN-
y 209; idem, 1993: 20, 21 y 22; idem, 1998: 75; VALLEJO, 1995: 62; DEZ GONZÁLEZ, 1982: 404 nota 57; CASADO Y CEA, 1986: 76; AZCÁ-
CASAS CASTELLS, 1998 (2): 1210-1213; idem, 2005: 386-387 y 414; RATE, 1990: 16; VALLEJO, 1995: 62), mientras que otra los adelanta a
o ÁLVAREZ MARTÍNEZ, 1999: 217-218. 1180 o poco después (EYDOUX, 1954: 204; VALLE PÉREZ, 1991 (3):
N o pretendemos de ningún modo estudiar aquí detenidamente el
5 5 1 155; idem, 1992: 19 y VI; idem, 1994: 34; BANGOTORVISO, 1994: 84;
proceso crono-constructivo, bastante complejo por cierto, de cada uno CARRERO SANTAMARÍA, 1998 (2): 140). VALDÉS FERNÁNDEZ,
de estos templos, sino repasar las teorías propuestas al respecto y en su HERRÁEZ y COSMÉN ALONSO, 2001: 147, sitúan su inicio ca. 1200; y
caso, añadir algunos matices, destacar algunos detalles que creemos no MARTÍNEZTEJERA, 2002 (4): 652, enmarca su construcción entre fines
han sido suficientemente explicados, con el fin de que nos sirvan de del XII y principios del XIII.
marco para definir correctamente el desarrollo de la fábrica de La Espina BANGOTORVISO, 1994: 84; idem, 1997: 117; CARRERO SANTA-
5 5 6
ciforme con semicolumnas en los frentes y un resalte inter- cido las columnillas que recorrían los paramentos; si bien
medio que aparece plenamente desarrollado en los los vanos altos del transepto mantienen la tipología de ven-
segundos pilares exentos y adosados de las naves ; se 558 tana que vemos en la parte inferior de esta misma zona y la
siguen empleando capiteles lisos, pero ahora sin escotadu- capilla mayor, varía en las naves; etc. . 56I
altas de los pilares divisorios de tramos del brazo norte del poco después del primer tramo para dedicarse a partir de
transepto, con el generalizado en el resto del templo-; entonces a las dependencias claustrales, la iglesia quedará
vemos nuevos perfiles de nervios -todos prismáticos, bien inconclusa hasta la segunda mitad del siglo XV.
5 5 7En líneas generales los elementos tanto estructurales como deco- ción-, y desde I I 8 6 a I 2 I 8 las recibe en menor cuantía pero se dedica a
rativos remiten a tierras zamoranas, especialmente a Moreruela (bóvedas adquirir propiedades en su entorno; así, hacia I 2 I 5 - I 2 2 0 el patrimonio
de los ábsides, incluyendo el perfil de los nervios y el sistema de apeo) monástico estaba ya consolidado, alcanzando entonces la estabilidad eco-
o a la catedral de Zamora (capiteles lisos con ábaco de dados y el carac- nómica, "un equilibrio duradero" (CASTÁN LANASPA, I98I: I3 y I4; ante-
terístico canecillo empleado en la Puerta del Obispo). Vid. VALLE PÉREZ, riormente este autor - I 9 7 7 : 232 y 240-, indicaba que "cuando las
I 9 9 I (3): I55, incluidas notas. compras empiezan a tener ya una cierta importancia [II86], el monaste-
5 5 8Las anomalías detectadas en la configuración del toral N.O. y pri- rio estaba ya afianzado, dedicándose a partir de I2I5-I220, momento a
mer soporte adosado del lado del Evangelio, en los que los codillos de partir del cual bajan de forma notable las adquisiciones, a la administra-
la mitad inferior son sustituidos en alto por columnas, no creo que se ción del propio cenobio). Pensamos por ello que habría que retrasar en
deban como pensaba GÓMEZ MORENO (I925: I, 423) a que las zonas algunos años, más cercanos a ese momento de expansión máxima, de equi-
bajas se dejaron sin tallar para hacerlo posteriormente sin necesidad de librio, la apertura de su fábrica. Además, si aceptamos la procedencia more-
andamio (VALLE PÉREZ, I994: 40 nota I I I , se hace eco de esta noticia rolense para el taller activo en esta primera fase debemos situar su actividad
y señala que los torales se quedaron sin terminar), ni siquiera a una alte- en Sandoval al menos cuando debía estar construida o estaba muy avan-
ración, un cambio sobre la marcha del proyecto inicial. A este mismo zada toda la cabecera y transepto de Moreruela, cubiertas incluidas (son
factor se ha atribuido el que ambos torales y los primeras responsiones precisamente las partes altas de estas dos parcelas las que ejercen influen-
de las naves presenten una sección mucho mayor que la de los pilares de cia sobre Sandoval). Controvertida es la definición de etapas, cronologías
la cabecera y resto de las naves (FERNÁNDEZ GONZÁLEZ, COSMÉN y equipos que trabajan en las zonas orientales de Moreruela (Vid. las teo-
ALONSO y HERRÁEZ ORTEGA, I988: II5, apuntan hacia esta dirección rías de BANGOTORVISO, I988: 80-88 y VALLEPÉREZ, I994: 24-33; idem,
y señalan que su causa está en que se "ensayan soluciones distintas sin I998: 39; un resumen en CALVO CAPILLA, I998 (3): I34-I35). Mientras
criterio unitario). Creo, sin embargo, que no se deben descartar proble- para BANGO el segundo taller activo en Moreruela -del que deriva el pri-
mas de estabilidad. Por otra parte, el que hasta el segundo tramo de las mero que actúa en Sandoval-, trabajaría a partir de I200, para VALLE ini-
naves no aparezca "completo" el pilar del que hablamos en el texto nos cia su andadura ca.II70 llevándola a cabo con gran celeridad, lo que
hace pensar que sí se produce en este punto un replanteo tal vez moti- posibilita que hacia I I 8 0 encuentre eco en tierras leonesas; debemos recor-
vado por la llegada de nuevos maestros. dar, no obstante, que si es cierta la lectura que hace GRANJA ALONSO
Se ven también en Moreruela.
5 5 9 (I998: 475 nota 2) de la datatio de la cabecera - I I 7 6 - (esta inscripción
La que hoy vemos, al igual que la que corona el transepto, es obra
5 6 0 fue descubierta por MIGUEL HERNÁNDEZ, quien leyó en ella "E MCC",
moderna. es decir, año II62, I994: 63-64), el comienzo de las obras estaría más
La casi totalidad de ingredientes que caracterizan a esta segunda
5 6 1 cerca de la teoría de BANGO que de la de VALLE. Por nuestra parte, aun-
fase no los encontramos en Moreruela, pero la bóveda de ocho nervios que nos acercamos más a la cronología de BANGO, el hecho de que los ple-
del crucero sí remite a este cenobio, lo mismo que la manera de enjarjar mentos de la bóveda del hemiciclo sean ligeramente cóncavos pero
las nervaduras en el ángulo formado por el perpiaño y el muro, o el tipo mantengan todavía los nervios unidos a la clave del arco de ingreso nos lleva
de ventanas de la nave central. a situar su conclusión, y por tanto la labor de ese segundo taller, hacia la
VALLE PÉREZ sitúa el inicio de las obras de Sandoval hacia I I 8 0 o
5 6 2 última década del XII, tal vez un poco antes (sobre este tipo de aboveda-
poco después basándose en su evolución económica ( I 9 9 I (3): I67 nota miento y su evolución, vid. el estudio de Valbuena), y la del crucero, por
72). Entre I I 7 8 y I I 8 6 el monasterio leonés recibe una ingente cantidad el lógico proceso constructivo, algo más tarde. De ese modo, será ya en
de donaciones -anteriormente sólo se constata la realizada para la funda- torno a I200 cuando comience a notarse la influencia de esta obra.
FUNDACIONES MASCULINAS
• 165 •
Otra inscripción viene a fechar el inicio de las obras buir la cornisa de la girola y los capiteles figurados del inte-
en Gradefes, según la cual en marzo de I I 7 7 la abadesa rior. La llegada de un nuevo equipo al monasterio intro-
Teresa "fundó esta iglesia" . Y de nuevo a una primera
563 duce importantes cambios tanto a nivel estructural como
campaña se ha venido atribuyendo la totalidad de la cabe- decorativo: se completan los soportes del intercolumnio y
cera, partes bajas del transepto y primer tramo de la nave muros de cierre con capiteles de hojas lisas la mayoría de
meridional; en una segunda campaña, a finales del XIII o las veces terminadas en flores de lis, otros con decoración
incluso dentro del XIV se elevaría y cubriría el transepto . 564 de arquillos; se eleva la capilla mayor con ventanas rica-
Aunque algunos estudiosos han apuntado la posibilidad de mente molduradas y rematada por una cornisa en la que,
que las obras avanzaran muy despacio desde I I 7 7 o incluso junto a canecillos herederos de los anteriores talleres,
que quedaran muy pronto interrumpidas para reiniciarse encontramos otros de forma triangular; se cambia el sis-
más tarde , en los últimos años se ha incidido no solo en
565 tema de cubrición románico previsto para el deambulato-
la lentitud del proceso constructivo sino también las dife- rio por otro gótico cuyas bóvedas alternan dos tipos de
rentes transformaciones que sufrió el proyecto original a lo molduración en sus nervios, prismáticos con arista baque-
largo de casi un siglo y cuarto . 566 tonada e intradós festoneado y triangulares con un bocel
A grandes rasgos, el proceso crono-constructivo central flanqueado por escocias y cuartos de bocel; se
podría ser el siguiente. En una primera fase que daría introducen en lo que sería la nave meridional un nuevo
comienzo en I I 7 7 se levantaría parte del muro de cierre tipo de soporte cruciforme con semicolumnas en los fren-
de la girola, en concreto las tres capillas semicirculares y las tes y un resalte intermedio entre los codillos, cubriéndose
extremas, y se iniciaría la elevación de los pilares del inter- este tramo y el inmediato hacia oriente con sencillos ner-
columnio, empleándose en su fábrica una serie de elemen- vios de sección rectangular; y finalmente se cubre la capi-
tos que no volvemos a encontrar en las sucesivas etapas, lla mayor con una bóveda de nervios unidos en clave
como el tipo de ventanas —muy sencillas, estrechas, sin independiente, precedida por una crucería cuatripartita,
columnillas—, capiteles —con hojas lisas rematadas en cau- que apoyan en columnas provistas de capiteles con deco-
lículos y prismas entre las que se ve otra con el borde supe- ración de entrelazo, hojillas lobuladas alargadas rematadas
rior marcado, y coronadas por ábaco de dados—, o en lises y crochets. Los componentes utilizados en esta fase
columnas a modo de contrafuertes en el exterior. Aunque están íntimamente relacionados con los que veíamos en la
en planta se ha relacionado con Moreruela por el uso de segunda fase de Sandoval , si bien la inclusión de deter-
569
pidas durante un buen número de años, se reanudan de cuarto del siglo XIII, cuando los trabajos de la segunda fase
manos de un taller de carácter rural al que habría que atri- de Sandoval estaban terminados, coincidiendo además con
571 Como tal aparece documentado en 1240 (vid. nota siguiente), aun- PANDO MACÍAS, 2006: 1018, 1020 y 1030. Por otro lado, CID PRIEGO,
que ya aparece sin el apelativo en escrituras del cenobio desde 1239 aunque señala su terminación en 1226 no deja de extrañarse ante tal
(BURÓN CASTRO, 1998: 533, doc. 463) a 1243 (Ibidem: 550, doc. celeridad constructiva: " u n tiempo sorprendentemente corto para levan-
479). Más adelante nos detendremos en la figura de Domnus Galterius tar una iglesia cubierta con bóveda, que es la mayor asturiana de la Edad
magisterpontis de Gradefes, figura documentada en 1202 y que ha sido puesta Media" (1996: 126).
en relación con la fábrica del monasterio. 5 7 5MENÉNDEZ, 1919: 87, indica que la primera piedra se puso en
5 7 2Ibidem: 542-543, doc. 473. Ya anteriormente, mayo de 1199, junio de 1222 y que los monjes se trasladan al nuevo monasterio desde
Doña Misol, acompañada de sus hijos y nietos, había donado la heredad la basílica de San Salvador en 1238; por su parte, VVAA., 1996 (2): 16,
que poseía en Castromilanos, Nava y Valdealiso, así como la autorización lleva el remate de las obras al entorno de 1240, mientras que ESCALONA,
a extraer piedra de ese mismo lugar (Ibidem: 308-309, doc. 249). 1866: 117, debido a una mala lectura de la inscripción del tímpano de
5 7 3LAMBERT, 1931: 83; TORRES BALBÁS, 1952: 48; EYDOUX, 1954: la puerta de muertos, señala que "el artífice que echó los cimientos de
206; FERNÁNDEZ GONZÁLEZ, 1982: 394; BANGOTORVISO, 1985: 432; aquella iglesia y tuvo la gloria de verla terminada felizmente, fue Galte-
idem, 1992 (2): 337; SUREDA, 1985: 370; VALLE PÉREZ, 1991 (3): rio o Gualterio, en 18 de mayo de 1282".
156; idem, 1992: VII; GARCÍA CUETOS, 1998: 71-72; ÁLVAREZ MAR- 5 7 6Solamente VVAA., 1996 (2), que sitúa en contra de la opinión
TÍNEZ, 1999: 213-214; PANDO MACÍAS, 2006: 1024. Sobre la referida generalizada el comienzo de las obras poco después de 1200 (15 y 16),
inscripción, vid. especialmente, GONZÁLEZ GUTIÉRREZ, 1987: 421-422 ha apuntado que en 1218 estaría ya levantada la cabecera y parte del
y últimamente, DÍEGO SANTOS, 1994: 208-209. transepto (16).
5 7 4FERNÁNDEZ GONZÁLEZ, 1982: 394; idem, 1982 (2): 51-52; idem,
1988: 145; GARCÍA CUETOS, 1998: 72; TORNÉ CUBELLS, 1995: 55;
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• 167 •
puerta de monjes, de muertos y las tres de la fachada occi- En cuanto al soporte, encontramos también alguna
dental se utiliza el esquema que vemos en la puerta de mon- divergencia entre ellos. Los de Valdediós y por los restos con-
jas del femenino (¿sería semejante la puerta de monjes de servados parece que el de Gradefes también, muestran idén-
Sandoval?). Faltan sin embargo, los capiteles de entrelazos tica solución a la del cenobio vallisoletano. En cambio, los de
—los que hay de Valdediós nada tiene que ver con los mode- Sandoval presentan alguna diferencia en lo que respecta a la
los leoneses— y las nervaduras de intradós floreado. función sustentante de los codillos: en la cara que da a las
¿Qué cronología cabe asignar a Valdediós? Creo desde naves laterales el esquema es idéntico, pero hacia la central el
luego que en 1225 no estaba construida su iglesia, más aún, resalte intermedio en vez de subir a recoger los nervios de la
ni siquiera estaban terminadas las capillas laterales. Vista la bóveda como sucede en aquéllos, apea una segunda dobla-
presencia de capiteles plenamente góticos en las partes bajas dura de los formeros. Por otro lado, tanto en Sandoval —
de la cabecera —me refiero naturalmente a los crochets con excepto el que recoge la segunda dobladura del formero-
hojitas saliendo de sus tallos—, y a tenor de las fechas atri- como en Gradefes, los codillos van provistos de capiteles, al
buidas a los cenobios leoneses —el taller activo en el astu- igual que en La Espina; en Valdediós únicamente aparecen
riano deriva de los que trabajan sucesivamente en las éstos en las embocaduras de las capillas laterales de la cabe-
segundas etapas de Sandoval y Gradefes—, más lógico parece cera, desapareciendo en la mayor, transepto y cuerpo de naves.
pensar que en 1218 se comenzaron a abrir los cimientos Por lo que a las responsiones se refiere, sólo las de las naves
de la nueva obra y se coloca la primera piedra, pero hasta de Sandoval y el transepto de Valdediós traducen la misma
finales del segundo cuarto del siglo XIII no están termina- organización que los pilares exentos, mostrando una columna
das las partes orientales del templo . Las siguientes cam-
577
adosada a una pilastra flanqueada por sendos codillos; en
pañas se desarrollarían paulatinamente hasta quedar Gradefes y Valdediós son simples columnas adosadas y en
rematado en los últimos años de esa centuria. La Espina grupos de tres . 580
Llegados a este lugar debemos establecer cuáles son ¿Qué lugar de la cadena Sandoval-Gradefes-Valdediós
los puntos de contacto que unen a los templos de estos ocupa entonces La Espina? ¿En qué momento se puede situar
tres monasterios con el de La Espina. En esencia se redu- esta fase de nuestro monasterio? Debemos tener en cuenta
cen a tres: el alzado bipartito de las naves, la estructura del en primer lugar que al igual que sucede en Sandoval y Gra-
pilar exento y el modelo de cesta con hoja lisa que remata, defes, el templo de La Espina ya estaba en construcción
en ocasiones, en una flor de lis invertida . Tal vez podría
578 cuando llega el taller que erige estos soportes, pero sobre todo
añadirse el tipo de ménsula cónica que vemos unida a ese que su área de actividad en él fue bastante limitada -recor-
soporte tanto en la nave central de La Espina como en la demos que a pesar de iniciarse prácticamente todos los pila-
de Valdediós, si bien el hecho de que en Sandoval fueran res exentos, sólo se coronan con capiteles las parte bajas de
cepilladas en época moderna junto a gran parte del fuste los pilares situados al norte de la mayor y primer tramo de la
de la columna que sostenían o que en Gradefes quedara
579 meridional-, correspondiendo su elevación completa y abo-
inconcluso ese pilar, nos impide confirmar su presencia vedamientos a etapas posteriores. Eso dificulta seriamente el
también en éstos, aunque creo que se debe tomar como establecer una prioridad entre el leonés - m e refiero natural-
un elemento más de conexión entre todos estos cenobios. mente a Sandoval, considerado como el ejemplar más tem-
prano de ese g r u p o - y el castellano, máxime cuando no
581
El modelo de capitel señalado presenta unas caracte- hay más elementos de comparación que los señalados.
rísticas prácticamente uniformes en todos los monasterios.
Sólo un detalle permite hacer una pequeña distinción: en En un principio se podría pensar que la solución apli-
algunas piezas leonesas el borde de las hojas aparece reco- cada al volteo de arcos en Sandoval es resultado de la per-
rrido por una cadeneta zigzagueante y en el caso concreto tenencia a un período anterior al de La Espina. Sin
de Gradefes la parte de la cesta que sobresale entre dichas embargo, el hecho de que en otros edificios de cronología
hojas está rematada por un doble cordón liso. más antigua aparezca dicho pilar resuelto tal y como vemos
sobre la renta de la sal de Avilés ad opus et laborem ipsius monasterii (BALLES- Gradefes, los muros perimetrales de las naves estaban ya terminados o
TEROS GAIBROIS, 1 9 4 8 : I, doc. 52, 29). muy adelantados cuando se introduce este tipo de soporte. En Valdediós,
VALLE PÉREZ, 1994: 41 nota 117, comenta que hay ciertos moti-
5 7 8 en cambio, la aparición de la columna simple se debe a una elección.
vos decorativos en Sandoval - n o dice cuáles— que se encuentran en nues- 5 8 1VALLE PÉREZ, 1991 (3): 156-157; idem: 18-22.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
70
en el vallisoletano - p o r ejemplo, la catedral de Salamanca podría hacer alguna objeción a esta teoría: el Gualterio
o Montreal-, obliga a buscar las causas de esa anomalía en documentado en I 2 0 2 sabemos que trabaja en el puente
otro lado: el deseo o mejor dicho, la necesidad de poten- de Gradefes pero no en el monasterio, por lo que podrí-
ciar el grosor del muro por problemas de inestabilidad o amos estar hablando de dos personajes diferentes dado
mala cimentación - l o que explicaría además el que los que, dejando de lado su origen foráneo, dicho nombre lo
torales occidentales se presenten como macizos prismáti- encontramos documentado en los Reinos de Castilla y
cos-. Por otro lado, la propia evolución del dominio León desde mediados del siglo XII . N o obstante, las
584
monástico de La Espina nos informa que hacia el primer estrechas relaciones contempladas entre Gradefes y Val-
cuarto del siglo XIII el monasterio atravesaba un inmejora- dediós invitan a pensar en que esta identificación de maes-
ble momento económico que posibilitarían sin duda una tros es correcta, lo que no invalidaría las nuevas
importante actividad constructiva en el mismo, tras haber cronologías aplicadas a los cenobios leoneses, incluido su
rematado las partes bajas del pabellón de monjes y haber corto capítulo castellano.
trazado casi por completo el perímetro del templo. Pero la En resumen, creo que podemos hablar de un maestro
caída en picado de las donaciones y los continuos y cos- itinerante que planifica y traza algunas partes de estos cua-
tosos pleitos a los que se enfrentó el monasterio a partir de tro monasterios , todos excepto Valdediós iniciados con
585
I 2 2 2 - 2 3 provocarían la brusca paralización de los traba- anterioridad por otros artesanos, y que viaja a la cabeza de
jos y la marcha hacia otros lugares del taller que aquí tra- una o varias cuadrillas de canteros y escultores que no se
bajaba. mantienen uniformes a lo largo de los años de actividad del
Debemos barajar, por tanto, la probable intervención taller, lo que explicaría las diferencias escultóricas, pero tam-
de un mismo taller en las cuatro abaciales. Tal posibilidad bién arquitectónicas que vemos en todos ellos . 586
ha sido señalada de forma unánime para las ubicadas en el Resta averiguar la procedencia de este taller, el origen
antiguo Reino de León al identificar, dadas las semejanzas de las fórmulas aquí empleadas. Son varios los estudiosos
que presentan ambos edificios, al Gualterio del tímpano de que han advertido en las abaciales del reino de León un
Valdediós ( I 2 I 8 ) con el Domnus Galterius magister pontis de indudable carácter borgoñón , abolengo que también ha
587
Gradefes (abril de I202) que aparece como testigo en una sido atribuido al alzado bipartito y pilares de las naves de
venta entre particulares conservada entre la documentación La Espina . Pero ¿cómo se ha producido ese contacto?
588
5 8 2BURÓN CASTRO, I998: 345-346, doc. 28I. del cenobio burgalés). También un presbítero de nombre Galterius aparece
5 8 3VALLE PÉREZ, I99I (3): I57; idem, I998 (2): I83 nota 38. Vid confirmando una donación del obispo y capítulo de Sigüenza al monas-
también TORRES BALBÁS, I952: 48; FERNÁNDEZ GONZÁLEZ, I982: terio de Huerta en mayo de I I 8 2 (GARCÍA LUJÁN, I98I: 72).
395 y 4I2; idem, I982 (2): 5I-52; idem, I988: I 6 I ; VALLE PÉREZ, La solución aplicada a los transeptos de Sandoval y Valdediós -tanto
5 8 5
I992: VII, 22; BANGO TORVISO, I 9 9 2 (2): 337; CID PRIEGO, I996: en lo que se refiere a su planta como a la composición de sus bóvedas- o
I26; GARCÍA CUETOS, I998: 75-76; CASAS CASTELLS, 2005: 387-388; la tipología del pilar de semicolumnas y tres codillos que vemos en todos
entre otros. Respecto a su ascendencia transpirenaica, VALLE PÉREZ, ellos así lo confirman. Difiero por tanto de la opinión vertida por VALLE
I99I (3): I70 nota 95 le vincula a Borgoña basándose en la filiación PÉREZ, para quien "La aceptación de que un mismo equipo haya parti-
estilística que atribuye a las fábricas de estos monasterios. cipado en las dos abaciales [Sandoval y Gradefes] no implica necesaria-
Al margen de Gualterio, algunos autores han identificado al fray Sancho mente, sin embargo, que las trazas de ambas hayan sido proporcionadas
que tenie la obra que aparece documentado en Gradefes a finales del por un mismo maestro o arquitecto" ( I 9 9 I (3): I70 nota 80).
segundo cuarto del XIII con un monje de Sandoval (CALVO, I936-I944: 5 8 6Así piensa VALLE PÉREZ, I99I (3): I70 nota 95.
208 nota I; FERNÁNDEZ GONZÁLEZ, COSMÉN ALONSO y HERRÁEZ 5 8 7LAMBERT, I93I: 83 y 84; FERNÁNDEZ GONZÁLEZ, I982: 402 y
ORTEGA, I988: 74). 405; VALLE PÉREZ, I99I (3): I56-I57, I70 nota 95; idem, I99I (4):
5 8 4Gualterio se llamaba el abad que gobernó Carracedo entre I I 5 8 y 774-775; idem, I992: 20, 22; idem, I994: 33-34; GARCÍA CUETOS,
I I 8 6 (MARTÍNEZ MARTÍNEZ, I995), al igual que el prior de Santo Tori- I992: 200, 20I, 204-205; idem, I993: 20 y 2I; idem, I998: 75; etc.
bio de Liébana entre I I 8 3 y I I 9 5 (SÁNCHEZ BELDA, I948: I40- I4I, 5 8 8LAMBERT, I 9 3 I : 83. Vid. además, ANTÓN, I942: I38; EYDOUX,
doc. I I 4 ; I43-I44, doc. I I 6 ; I47, doc. I I 9 ; I 5 0 - I 5 I , doc. I22; y I954: I97; ARA GIL, I986: I I ; VALLE PÉREZ, I99I (4): 775; idem,
I53-I54, doc. I24; este autor - X X I I I - le hace originario de Oña, de I994: 4I nota I I 7 (aunque no se refiere a ninguna parte concreta del
donde llegaría coincidiendo con su transformación en priorato de manos templo); CASTÁN LANASPA, I995: 90; o VALLEJO, I995: 53.
FUNDACIONES MASCULINAS
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influjo directo de Borgoña vía monje/converso arquitecto empleando en todos los perpiaños de las naves laterales
desplazado desde la casa-madre, sino al envío desde allí de hasta su conclusión , mientras que los formeros según
593
cuadernos de diseños y planos creados por artistas de Bor- avanza el ritmo de la obra hacia el oeste —a partir del tercer
goña, o quizás más bien a la formación borgoñona de los tramo incluido éste— muestran una línea más apuntada.
maestros laicos que trabajan en este momento preciso en este
área de la Península y que difunden determinadas soluciones En cuanto a estas bóvedas, se detecta como en otros
allá donde se desplazan, tal y como ha sido señalada por Valle muchos puntos de la iglesia una prioridad constructiva al
Pérez para los ejemplos leoneses . 59I
área norte del templo, correspondiendo a un primer
momento los tramos más orientales del Evangelio y tal vez
nave central, aunque la del núm. II se decora con hojas de embargo, en el último cuarto de siglo se iba a iniciar una
múltiples lóbulos- y capiteles de cesta troncocónica deco- recuperación económica que incidiría de manera rotunda
rada con crochets, si bien las cestas de los macizos occi- en el avance de las obras del templo.
dentales quedan sin labrar, como seguramente ocurriría en El 15 de junio de 1285 redactaba en Zamora su tes-
el caso de los torales de este lado. En cuanto al brazo norte, tamento Martín Alfonso, hijo de Alfonso Téllez y Teresa
a pesar de que las ménsulas situadas en los ángulos N.E. y Sánchez. Por él, mandaba enterrarse en la capilla mayor de
N.O. muestran una tipología diferente al resto, detalles la iglesia, como patrón que era del monasterio:
como el botón inferior floreado o el cimacio poligonal Primeramente mando mio cuerpo al monasterio de San
como los del brazo opuesto, creemos que se tallarían tam- Pedro de la Espina, cuyo patron yo soy so la merced de Dios
bién en este momento. e del Rey de Castilla, que lo mando, e el Abbad e el convento
Resumiendo, podemos decir que está construida la de esse mismo lugar, que me otorgaron e me dieron sepultura
cabecera, el transepto prácticamente hasta la línea de ante el altar de Santa Maria desta misma yglesia, que me yo
imposta -excepto las zonas cercanas a los torales occiden- fize con la merced de Dios e con mio aver, e tengo de vos bona
tales- y del cuerpo de naves se han elevado hasta la cornisa carta.
todos los tramos de la nave norte y tal vez también los de Además, concedía lo que poseía en Villales para que
la sur con sus respectivas bóvedas salvo las de los últimos ardiese una lámpara sobre su sepultura:
tramos, quedando por cerrar el sexto tramo de ambas ; 595
también estaría terminada la parte inferior de la fachada E mando lo que he en Villales a la sacristia de la Espina por
occidental con su portada monumental , si bien esta 596
heredad para siempre, porque de aquella renda de aqel lugar
última ya había sido planeada anteriormente . Respecto a 597
sera ardiendo una lampara de dia e de noche sobre el mio
la nave central, las obras se interrumpen una hilada por monumento; que nunca sea tolecha de aquel lugar; esta lam-
para sera de tres marcos de plata.
encima de los formeros, detectándose de manera clara este
corte tanto por el tipo de sillares empleado, las irregulari- Y encomendaba a sus testamentarios, entre los que se
dades que se observan especialmente en el paramento del encontraban los abades de La Espina y Valdeiglesias, el
primer tramo a partir de este punto, como por las modifi- obispo de Palencia, los priores de La Espina y de los pre-
caciones tipológicas y decorativas (ventanas, perfiles de ner- dicadores de zamora y algunos vasallos y criados suyos, la
terminación de las obras del templo en caso de que él del siglo XIII . También en aquellos cenobios femeninos y
603
muriera sin acabarlo: en la catedral de León encontramos las basas con escocia
E mando a los mi mansessores que, si la yglesia de la Espina perlada de las ventanas de La Espina, sin olvidarnos que
no fuere acabada quando yo finare, que ellos ge la fagan aca- también aparecen en la galería septentrional del claustro de
bar de lo mio que les yo leixo e que paguen para labrar en ella Valbuena. Igualmente con edificios del entorno burgalés
a la razon que yo solia pagar al Abbad Don Paulo quando el debemos conectar la presencia de elementos como cima-
mandava labrar; e el Abbad e el convento de la Espina que cios poligonales y especialmente la cornisa de crochets,
cumplan aquello todo que solian cumplir del monasterio . 599
cuyas cronologías -las partes altas del templo de la cate-
dral de Burgos (terminada hacia 1260, coincidiendo con
El Tumbo señalaba que fue hacia 1275 cuando Martín su consagración) y su claustro alto (1265-70) , catedral
604 605
Alfonso tomó a su cargo las obras de la iglesia pero pun- de León (iniciada ca.1245-1250, a principios del siglo XIV
tualizando que él la comento a labrar , tal vez llevado por el
600 estaba a punto de concluirse) , Villamayor de los Montes
606
h e c h o de q u e pidiese ser e n t e r r a d o ante el altar de Santa Maria (finalizada en 1 2 8 6 ) o los pórticos de las Huelgas de
607
desta misma yglesia, que me yofize. L o cierto es que los restos con- Burgos (último cuarto del siglo XIII)— nos llevan ya a la
servados de la primitiva cabecera, como ya hemos visto, indi- segunda mitad del siglo XIII. El diseño arquitectónico de la
can claramente una cronología anterior y la noticia de la puerta occidental de La Espina se puede poner igualmente
ampliación de la capilla mayor por considerarla vieja, pequeña, en conexión con ejemplos burgaleses (portada del claustro
obscura y baja en relación al transepto y cuerpo de naves, que de la catedral y portadas del hastial norte del transepto o
como veremos a continuación sí pueden estar muy avanza- primer tramo de la nave meridional de Las Huelgas) y leo-
dos por esos años, invalidan aquel supuesto. Tal vez podría neses (portadas de la catedral), de entre I 2 6 0 - I 3 0 0 , con
608
pensarse entonces que Martín Alfonso realizó alguna inter- los que se pueden relacionar igualmente la tipología y deco-
vención de carácter no arquitectónico en la capilla mayor, ración de capiteles, cimacios y basas, incluso la presencia
dotándola con algún retablo u otros ornamentos. de emblemas heráldicos, habituales en los templos hispanos
También una de las frases contenida en el último de en torno a I 2 6 0 - I 2 7 0 , y que vemos en las portadas
609
párrafo transcrito, la que se refiere a que en caso de que él de aquellas catedrales , las del monasterio de Las Huelgas
6I0
muriera sin estar terminada la iglesia se encargasen de ello o la del Reloj de la de Toledo, esta última de ca.I280-I300;
sus testamentarios, han hecho creer a parte de la historio- hacia las más avanzadas de todas estas datas apuntaría la
grafía que no faltaría mucho para que se acabara . Lo cierto 601
presencia de filetes en los boceles de las arquivoltas de la
es que tanto el proceso constructivo como la cronología apro- portada y las chambranas de las ventanas meridionales.
ximada de cada una de las distintas etapas rechazan esta idea. A la vista de todos estos datos podemos decir que
Los capiteles decorados con crochets y hojas lobula- durante el segundo y tercer cuarto del siglo XIII las obras del
das que se incluyen dentro de la llamada flora generalizada templo de La Espina estarían estancadas o bien avanzarían
mezclados con otros similares pero tendentes hacia formas muy lentamente como consecuencia de la crisis. El despegue
más naturalistas y que, en último término, derivan de rea- económico de que disfruta el monasterio a partir de I285
lizaciones burgalesas (catedral, Las Huelgas, Villamayor
602 posibilita la agilización de los trabajos constructivos, favore-
de los Montes...), se combinan a su vez con motivos andre- cidos sin duda por la intervención de Martín Alfonso, datán-
sinos por ejemplo en las galerías norte y sur del claustro de dose el grueso de las intervenciones realizadas en esta etapa
Valbuena o en los ventanas de la cabecera de Palazuelos, a lo largo de los últimos treinta años del siglo XIII, llegando
cuyas fechas nos llevan como muy pronto al segundo tercio incluso a levantarse la portada en los primeros del siguiente.
599 Vid. nota I24. 606FRANCO MATA, 1998: 27-34, hace un repaso a la historia arqui-
Vid. más arriba en el repaso historiográfico de la cronología y eta-
6 0 0 tectónica de la sede leonesa. Además, pueden verse los trabajos de VAL-
pas constructivas del templo las referencias documentales y bibliográfi- DÉS, COSMÉN y HERRÁEZ, 1994: en concreto, 60-64.
cas correspondientes. 607CARDERO LOSADA, 1994: 134-135; VALENTÍN DE LA CRUZ, 2003:
601 ANTÓN, 1942: 122 y 145-146. III-II2.
Vid. referencias bibliográficas sobre la expansión de fórmulas góti-
6 0 2 608KARGE fecha las portadas de Las Huelgas a comienzos del último
cas a partir del foco burgalés en la monografía de Matallana. cuarto del siglo XIII (I995: I65) y la del claustro de la catedral hacia
603 Para los monasterios vallisoletanos, vid. las monografías corres- I265-I270 (Ibidem: I 8 2 y 260). Las de León oscilan entre I265 y
pondientes. I300 (FRANCO MATA, I998: 58, 64, 65, 92 y 32I-357).
604 KARGE, 1995: 109. 609FRANCO MATA, I998: 59 y 309.
605 Ibidem: I 8 2 y 260. 610Ibidem: 59-6I y 309-3II.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
74
5. Quinta etapa grandes interrupciones entre la etapa precedente y ésta, si
En esta etapa se lleva a cabo la terminación del último bien las características de los elementos que integran esta
tramo de las naves laterales al voltear los correspondientes fase denotan la llegada de un nuevo taller de carácter rural
formeros, con un perfil mucho más apuntado que los pre- y algo torpe, alejado de la finura y cuidado del anterior espe-
cedentes y diferente molduración, y sus bóvedas, ahora pro- cialmente en lo que a la talla de capiteles se refiere.
vistas de formaletes. Mientras tanto las tareas continúan La infanta Doña Blanca, Señora de Las Huelgas, en su
por las partes altas hasta cerrarse el perímetro del transepto testamento de I 5 de abril de I 3 2 I mandaba Al monesterio
y nave central, que presenta un tipo de ventana homogéneo del Espina quanto costarefazer una buelta entrel pilar e pilar, que puede
en todo esta área, lo que sugiere una misma etapa cons- costar fasta dos mill maravedis . A u n q u e en el d o c u m e n t o n o
614
tructiva; en cuanto a la ventana abierta en el hastial brazo se menciona en ningún momento el lugar al que está desti-
sur, con una tipología que nada tiene que ver con la emple- nado el donativo, y bien pudiera ser la iglesia, el claustro o
ada en las partes altas del templo y tampoco con la de la alguna de sus dependencias; y la palabra buelta puede signi-
nave sur, nos hace pensar en la reutilización o traslado de ficar tanto arco como bóveda, el hecho de que por estos
la misma, desconociendo su ubicación original. Asimismo años se está trabajando en la conclusión del último tramo
los capiteles altos, de desvastado troncopiramidal, se carac- de las naves laterales y las partes altas del transepto y nave
terizan por su rusticidad y escaso relieve, predominando los central, así como la elevada cantidad aportada para tal obra,
de hojas estrechas y lisas rematados en hojuelas nervadas y nos inclina a pensar que se refiere a una bóveda, tal y como
su variante en los codillos, aunque en alguno de los casos se se ha apuntado recientemente . 6I5
lo que se refiere a las bóvedas, el hecho de que el tramo A Juan Alfonso de Alburquerque le atribuye el Tumbo
la realización d e las tres capillas ultimas que faltavan de la nave mayor
extremo del brazo norte presente un perfil de nervios dis-
tinto al resto del transepto y naves —aunque todas las cla- y las otras dos naves collaterales de layglesia. E s t a frase p o d r í a inter-
ves siguen el mismo diseño—, y que el perpiaño que lo pretarse como que concluyó el último tramo de la nave cen-
separa del tramo adyacente es también, como el toral occi- tral y el correspondiente a cada una de las laterales, es decir,
dental, diferente, permite establecer una secuencia edilicia tres tramos o capillas de que habla el Tumbo. Ello iría bien con
que se iniciaría en el brazo norte, continuaría por el crucero las variaciones detectadas en estos tramos (perfil y moldu-
y seguiría por el brazo sur hasta concluir en la nave central, ración de los formeros, aparición de formaletes), si bien
estas dos últimas zonas con el mismo perfil en perpiaños y también podría referirse a las últimas bóvedas de las naves * 6 6
6 n Este modelo responde al tipo de crochets visto en las zonas orien- CASTRO GARRIDO, I987: 322-333, en concreto 328.
6 1 4
tales y brazo sur del transepto. BANGOTORVISO, I998: 9I; SAN JOSÉ NEGRO, 2002: 79.
615
612 Aunque faltan las bóvedas de los dos últimos tramos de las naves, Así piensa ANTÓN (vid. nota 5I4).
616
no hay razón para pensar que no se construyesen al tiempo que las otras. Tumbo, fol.276v-278r — n.529 a 532 (pub. por RODRÍGUEZ DE
6 1 7
e que ellos fizieran donacion y mandaran los dichos diezmos de su enterramiento y una misa semanal, cinco mil marave-
al dicho monasterio por quanto los dichos Don Joan Alfonso díes sobre las alcabalas de la merindad de Candemuño y la
e Doña isabel, su mujer, se entendien enterrar en el dicho escribanía de Villagarcía . Posteriormente se enterrarían
622
monasterio según que yacen ay enterrados Gutierre Quijada, su hijo (f!455); Pedro de Quijada su nieto
que el dicho Don Joan Alfonso que mando por su anima en
( f ! 5 0 1 ) y su mujer Elvira de Mendoza; el hijo de éstos
su testamento al dicho monasterio de la Espina los dichos diez-
Gutierre Quijada (f1536); y Antonio Quijada de Ocampo,
tataranieto del anterior (f1592) . Según el Tumbo en la capi-
623
mos que a el pertenescien e avia de aver en el dicho lugar de
lla no había sepulcros que sobresaliesen del nivel del suelo -
Grajar e en la dicha yglesia de San Miguel, porque escogio
sólo en el centro estaba la lápida de mármol de Antonio de
sepultura en el dicho monasterio a do yaze sepultado el e su fijo
Quijada- ni tampoco escudos de armas que adornasen el
e la dicha Doña Isabel, su muger.
recinto , aunque tal vez antes de la reforma de mediados
624
Juan Alfonso de Alburquerque, su mujer Isabel de del XVI que afectó a la capilla mayor y colaterales pudo estar
Meneses y su hijo Martín Gil ( + 1 3 6 5 ) se enterraron en la embellecida por otras lápidas decoradas con motivos figura-
capilla mayor, y Rui Díaz Cabeza de Vaca, su mayordomo, dos y epigráficos, incluso algún arcosolio.
esta tambien sepultado en el cruzero desta yglesia junto a la silla abacial Hacia 1435 tiene lugar la primera gran transforma-
de tercia del choro baxo . 618
ción de la cabecera. Pocos años antes, probablemente en
El resto de noticias que se conservan de este período 1433, Fernán Gutiérrez de Vega donaba en su testamento
son simplemente fundaciones de misas, capellanías y algún al monasterio una elevada cantidad de dinero a cambio de
que otro entierro en el templo. Así, en 1319 Pedro Sánchez una de las capillas de su iglesia para su enterramiento. Se ha
de Llantada y su mujer Aldonza Álvarez donaron todo lo conservado una copia simple de sus últimas voluntades
que poseían en Casasola y Molillas con cargo de que se les diga una sacada tras su muerte en 1435 por fray Alonso de Urueña,
missa cada dia para siempre jamas en el altar de San Bernardo de esta abad del monasterio de La Espina, y por Gonzalo Muñoz
yglesia por sus almas . Y unos años más tarde, en 1348, doña
619 de Madrigal y Fernando González de Villapadierna, criados
Mencía de Valverde, mujer de Juan Fernández de Valverde del Señor de Grajal. En una de las cláusulas se hace men-
donaba todo lo que poseía en Quintanilla del Olmo a cam- ción expresa a su enterramiento, al de otros miembros de su
bio de enterramiento para ella y su marido en la capilla de familia y a la capilla del monasterio que, destinada a servir
San Juan; posteriormente, en la década de los sesenta del de alojamiento a sus restos, iba a ser sustituida por otra de
siglo XVI, la capilla sería ocupada por la familia de Barto- mayores dimensiones:
lomé Atienza, Oidor del Consejo Real , borrando segura- 620
Ytem por quanto el dicho señorfernando gutierres al tiempo de
mente toda huella de ocupación funeraria anterior . 621
su finamiento e postrimera voluntad mando sepultar su cuerpo
en el dicho monasterio de sant pedro del espina dentro en la igle-
6. Sexta etapa sia del dicho monasterio en la capilla que se dife de sant llorente
la qual dicha capilla el mando desfafer e que se tornase a fafer
Desde mediados del siglo XIV y durante el primer ter- de cal e canto buena obra e tomo por debofion que se llamase la
cio del siglo XV no parece que se produjeran obras de gran dicha capilla de santa maria en la qual el abia grand debofion e
entidad en el templo monástico, al margen de aquellas que nos otros seguiendo su voluntad mandamos sepultar su cuerpo
se requerían con motivo del sepelio de un miembro de del dicho fernando gutierres en la dicha capilla e que la dicha
alguna noble familia local. capilla sea desfecha e que se torne a fafer mayor et de mejor obra
El 6 de octubre de 1430 Juan Quijada, señor de Villa- de la que agora esta e se llame la dicha capilla de santa maria e
garcía, fundó por su testamento una capellanía en la capilla que todo sea fecho e complido a costa del dicho fernando gutierres
de San Bernardo y San Benito por la cual donaba a cambio e de sus bienes en la qual dicha capilla mando el dicho fernando
618 Tumbo, fol. 69-núms. 101-102, y 74r-n.120. dofa; y su hijo destos Gutierre Quizada padre de Luis Quixada ( T u m b o , fol.75r-
6 1 9 Tumbo, f o l . 9 9 r - n . 1 9 2 n.122). Sobre la familia de los Quijada y su entierro en La Espina, véase
6 2 0 GARCÍA FLORES, 1 9 9 6 (2): 7 8 3 . además: Genealogía de los Quixada, con nota autógrafa referente a ella por Don Juan
Según el Tumbo, no había ni sepulcros ni armas (fols. 71r, 74r-n.120
621 Quijada de Ocampo, 1630 (B.N., Mss. 9 4 0 8 , fols.46r-51v); Relación del linaje
y 268r-n.515). y descendencia de los caballeros Quijada, señores de Villagarcía (B.N., M s s . 2 0 0 5 6 ,
6 2 2 Tumbo, fols.75r-n.122; 2 3 6 v - n . 4 5 5 . RODRÍGUEZ DE DIEGO, 1 9 8 2 : n.13); Villagarcía, Señores de Quizada, por F. Agustín Rojo (B.N., M s s . 2 2 5 9 2 ) ;
155-156; LÓPEZ GARCÍA, 1990: 105. VILLAFAÑE, 1723: 23, 81-82; GUTIÉRREZ CUÑADO, 1913: 70-72;
... en la dicha capilla estan sepultados con el dicho Joan Quixada, su hijo Gutie-
6 2 3 PÉREZ PICÓN, 1 9 8 2 : 18; y especialmente MARTÍNEZ DÍEZ, 1 9 9 8 .
rre Quixaday el dicho su nieto Pedro Quixada, y su muger deste Doña Elvira de Men- Tumbo, fol. 7 5 r - n . 1 2 2 .
6 2 4
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
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gutierres que despues quefechafuesen trasladas e puestos los cuer- que se ha de acabar en el dicho monasterio de sant pedro del Espina.
pos e huesos de lopefernandes de vega su padre e de marinayni- Por quanto la dicha capilla hemos de acabar mosen lope mi her-
gues su madre e de maria ynigues su hermana e de juan de vega mano et yo, e mando que la parte que yo herede compla la dicha
su hermano e nos seguiendo su voluntad e por virtud del dicho capilla que la complan e acaven los dichos mis testamentarios here-
poder asi lo mandamos que sefaga e cumpla . 625 deros de mis bienes.
Además de otras disposiciones relativas a las misas que Por otra parte, su hermana María, según consta en su
se debían decir por su alma, se incluía una concerniente a un testamento realizado el 26 de octubre de I 4 7 6 en Villa-
retablo y a otros objetos litúrgicos donados con anterioridad: muriel ante Lope Fernández de Vallecillo, se mandó ente-
r r a r en el M° de la Espina en la Capilla de sus Padres junto a la
...la capilla con que se defia mysa al dicho fernando gutierres
sepultura de su madre . 628
otrosy mando que mis testamentarios e herederos pagen de mis Dejando al margen la solución de trompas de semibóvedas de
bienes todo lo que esta de conplir de lo mandado por mosen fer- ojivas con un único nervio central empleada, entre otros luga-
nando mi padre e por doña maria rodriguez mi señora e madre res, en los capítulos de las Seos de Plasencia, Salamanca o
en sus testamentos e postrimeras voluntades afueras de la capilla Ávila y en el del monasterio de O ñ a , parece que tuvo
6aI
625A.C.D.A., N.I96, leg.4, n.3., fols.Ir-v (transcriben parcialmente el 630 DABROWSKA, I994.
testamento GARCÍA FLORES y RUIZ SOUZA, I999: 80; y de modo ínte- 63! El ejemplo de Plasencia, construido en el tránsito del siglo XII al XIII,
gro FRANCO SILVA, 200I: 204-2I2, en concreto para las cláusulas que lleva bóveda gótica de dieciséis plementos separados por nervios que con-
nos interesan, 205 y 206). vergen en una clave común. Sobre el capítulo salmantino, en el cual sobre
626Ibidem, Iv-2r. un tambor octogonal, se construye una bóveda de dieciséis paños apoyada
627A.C.D.A. Estado de Grajal, N.I96, leg.4, n.4 y B.R.A.H. Col. Sala- sobre una trama de igual número de nervios que, tras entrecruzarse, dejan
zar y Castro, M-3I, fol.2Ir (transcrito de modo parcial por GARCÍA el centro de la bóveda libre, véase CAMÓN AZNAR y TORRES BALBÁS,
FLORES y RUIZ SOUZA, I999: 8I-82; e íntegramente por FRANCO SILVA, I940. Para el caso de Ávila, cubierta con bóveda de ocho nervios, termi-
200I: 2I2-2I6). nada antes de I307, vid. GÓMEZ MORENO, I983: 83. En Oña, la sala
6 2 8 Genealogía, armas y origen de la Ylustrisima Casa de Vega, fols.62v-63v. B.N. capitular, de planta cuadrada, se cubre con una bóveda también de ocho
Mss.8373. Esta es la única noticia que tenemos del enterramiento de nervios sobre semibóvedas de ojivas en sus esquinas; este cerramiento, de
esta señora en la Capilla de los Vega, ya que el Tumbo del monasterio no finales del siglo XIII o primeros años del XIV, es posterior a la fábrica de
dice nada al respecto. los muros perimetrales de este ámbito y restos escultóricos románicos allí
629 Sobre estos aspectos, vid BANGO TORVISO, I985: 505, 530, 554- conservados (SENRA GABRIEL Y GALÁN, I992, 342-343).
555, 562-565, 57I; YARZA LUACES, I03-I05; MARTÍNEZ Frías, I994:
I62; entre otros
FUNDACIONES MASCULINAS
• 175 •
mayor difusión el sistema de trompas adoptado en la capilla Por otro lado, dejando al margen cuestiones pura-
de los Vega —trompas con nervios en forma de Y— . El 632 mente espaciales y constructivas, la capilla de los Vega
exponente más temprano lo tenemos en la sala capitular de comparte con todas esas fundaciones y con otras muchas
Oviedo (ca.I293-I3I4), no obstante, la bóveda que lo cubre, de la época, el afán por la ostentación y exaltación del
de ocho nervios que confluyen en una clave central, no llega linaje, que puede apreciarse tanto en el amplio despliegue
a la complejidad que alcanzarán otros ejemplos posteriores . 633 de sus armas heráldicas en la puerta, sepulcros, ménsulas
u n a solución idéntica a la de los Vega —trompas y bóveda— y claves de la bóveda , como en la riqueza decorativa que
639
la encontramos en la capilla de Santa Catalina, en la catedral se aplica a los elementos arquitectónicos, especialmente
de Burgos, iniciada en I 3 I 6 por el obispo Gonzalo de Hino- arcosolios y ménsulas. Relacionado con estos últimos ele-
josa como nueva sala capitular, y terminada antes de mediar mentos, las mayores semejanzas los encontramos con la
el siglo . En la catedral de Pamplona se repite este mismo
634 capilla Fernán López de Saldaña, contador de Juan II, en
modelo en la llamada capilla Barbazana, iniciada a fines del Santa Clara de Tordesillas , construida, según reza la
640
XIII o principios del XIV y concluida por el obispo Arnaldo leyenda que decora la imposta que corre por el interior,
de Barbazán ( I 3 I 8 - I 3 5 5 ) . También aparece en Valencia,
635 entre I 4 3 I y I 4 3 5 . La articulación de los arcosolios es
644
en donde entre I356 y I369, siendo obispo Vidal de Blanes, análoga en los dos casos, encontrando arcosolios pareados
se llevan a cabo las obras de la primera Sala Capitular . La 636 enmarcados por pináculos, aunque con la diferencia de que
encontramos además en la sala capitular de la colegiata de en La Espina se utiliza el alfiz y en Tordesillas la línea de
Roncesvalles, donde recibió sepultura el prior Juan García de imposta para formalizar el enmarcamiento superior; y en
Viguria (fI346). El capítulo de la sede barcelonesa, comen- ambos aparecen ángeles portadores de escudos en las enju-
zado ca.I404 y terminado en I4I9, sigue igualmente este tas de las chambranas conopiales . También alguna mén-
642
modelo, si bien presenta una diferencia: las trompas quedan sula de la bóveda de la capilla de los Vega presenta una
a un nivel más bajo que el del arranque de los nervios de la decoración idéntica a otras de las chambranas que llevan
bóveda . A todos estos ejemplos habría que añadir el pres-
637 los nichos de los apóstoles de la capilla Saldaña, como por
biterio de la iglesia abacial de Oña, en donde este espacio se ejemplo el ave dando de comer a sus crías, el dragón o el
convierte en una capilla funeraria en sí, cuando, hacia I332, hombre encogido. N o obstante, la calidad de ejecución
el abad Alonso decide hacer una gran cabecera y destinarla a difiere enormemente entre ambas obras: el taller que tra-
panteón real, justo detrás de la capilla mayor; las obras se baja en La Espina conoce sin duda lo hecho en Tordesillas,
dilataron y sólo se consigue cubrir en la segunda mitad del pero no está exento de cierta rudeza y zafiedad en compa-
siglo XV . 638
ración con la excelente talla que se aprecia en la capilla del
632 Al margen dejamos construcciones como algunos cimborrios o ( I 2 8 0 - I 3 I 8 ) , correspondiendo a ese momento la cripta y los muros del
torres en los que podemos encontrar análoga solución constructiva nivel inferior; será la bóveda, el coronamiento exterior y las esculturas de
(Torre del Ángel, de la catedral de Cuenca; tercer piso de la Torre de las jambas de la puerta lo que se construya bajo el gobierno de Barba-
Don Fadrique, en el Alcázar de Sevilla; sala superior de la Torre de los zán. En esta capilla reposan los restos del mencionado obispo (FER-
Leones, del Alcázar de Córdoba...) pero sin ninguna relación funcional NÁNDEZ LADREDA y LORDA, I994).
con el espacio que ahora estudiamos. 636 Obra de Andrés Juliá, sirvió además de cátedra de Teología, de ente-
633 Desde antes de que existiese la sala capitular, el ámbito ocupado por rramiento de prelados y canónigos e incluso como lugar de celebración
ésta había servido para realizar numerosos enterramientos, función que de varias Cortes reales. Posteriormente se abrió al culto, dedicándola al
se mantuvo tras la construcción del edificio actual (CASÓ FERNÁNDEZ, Cristo de la Buena Muerte y, desde I 9 I 6 , al Santo Cáliz (SÁNCHEZ
I98I: 37-68; CASO FERNÁNDEZy PANIAGUA, I999: 37-40; CASO FER- NAVARRETE, I987: I 2 y 45-48).
NÁNDEZ et alii, I999: 75-82). Disposición semejante a la ovetense 6 3 7 TERÉSI TOMÁS, I99I-93: 396-403.
encontramos en la sala capitular de la catedral de Vic; en la capilla de San 638 SILVA MAROTO, I974: I I 0 .
Blas en el claustro de la catedral de Toledo (I398-I400), realizada por 639 La proliferación de la heráldica y emblemática, como medio de glo-
encargo del arzobispo Pedro Tenorio para enterramiento suyo, bajo la rificación de la nobleza y poder del linaje durante la Baja Edad Media
dirección de Rodrigo Alfonso, maestro mayor de la catedral (FRANCO ha sido destacado, entre otros, por BANGOTÓRVISO, I985: 60I; MAR-
MATA, I992; SÁNCHEZ-PALENCIA MANCEBO, I985); o en la capilla de TÍNEZ FRÍAS, I994: I06; y YARZA LUAZES, I988: 286; idem, I992:
Leonor López de Córdoba, en San Pablo de Córdoba ( I 4 0 9 - I 4 8 3 ) I56.
(JORDANO BARBUDO, I996: 65-70 y I52). 640 Esta conexión ya fue señalada por CASTÁN LANASPA, I998: 98-99
Su uso funerario queda atestiguado por la presencia del cuerpo de
6 3 4 y ARA GÍL, I998: 235. N o obstante, las dos capillas tienen una concep-
Enrique II durante cierto período de tiempo en su recinto, antes de ser ción espacial diferente: frente al sentido centralizado de la de los Vega, la
llevado a Toledo. ANDRÉS ORDAX, I 9 8 7 (2): I00. de Saldaña consta de dos tramos cubiertos por bóvedas de terceletes.
635 Los episcopologios del siglo XVI atribuyen su construcción a don M I ARA GIL, I977: I94-205; CASTÁN LANASPA, I998: 563-565.
Arnaldo de Barbazán, adjudicación aceptada tradicionalmente por la 642 En Tordesillas los emblemas de los fundadores debían de estar pin-
historiografía. Sin embargo, parece que se inició algún tiempo antes tados, no conservándose nada de ellos en la actualidad.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
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contador . La conexión estilística entre ambas capillas se
643 A mediados de siglo, tiene lugar otro importante ente-
puede explicar, al margen de la evidente cercanía geográfica rramiento, el de la infanta Leonor, hija de Juan II, quien por
y cronológica, por la relación existente entre los personajes bula de Nicolás V otorgada entre I 4 4 7 y I450 y donando a
que están detrás de ambas fundaciones: Fernán López de cambio la iglesia de Nuestra Señora de Castellanos, en Mota
Saldaña había refrendado en I432, la facultad otorgada por del Marqués, recibe sepelio en la capilla mayor . 648
643YARZA LUAZES ha señalado en varias ocasiones cómo en ocasiones labores de cantería en el monasterio (I940: 26, nota I); sin embargo, su
los miembros de la baja nobleza o estamentos eclesiásticos inferiores, se trabajo estaría vinculado a las obras de la hospedería, cuyas trazas fue-
preocupan más por el hecho de tener una capilla o un sepulcro ostento- ron dadas por Ribero Rada y Juan de Nates, estando comenzada su
sos que por su calidad (I987: 27 y 35-36; I992: 42). Por otro lado, ARA construcción en I578 (BUSTAMANTE, I983: 93); ANTÓN, I923 (3):
GIL, I977: 296, recalcaba la pobreza y tosquedad de su decoración, 60-6I; idem, I942: I23-I24 y I34; TORRES BALBÁS, I952: 295; MAR-
reducida a "unos toscos ángeles portadores de escudos, colocados en las TÍNEZTEJERA, 2002: I48; PUENTE, 2002: 20 y 27).
enjutas", motivos vegetales en relieve y a algunas tracerías sencillas. Tam- MARTÍN GONZÁLEZ, I968: 84, la databa genéricamente en esta
6 4 7
bién CASTÁN LANASPA, I998: 99, habla de realización modesta. centuria. ARA GIL, aunque en I977: 296 incluía los arcosolios dentro del
644A.C.D.A., Estado de Grajal, n.I96, leg.4, doc. 2. conjunto de escultura funeraria realizado en la provincia de Valladolid
645GUTIÉRREZ CUÑADO, I9I3: 72 nota I; ANTÓN, I953: 3I3; durante el último tercio del XV y principios del XVI, años más tarde, en
EYDOUX, I954: I97; YÁÑEZ NEIRA, I972: I I 8 y I20. Por otra parte, I986, databa su construcción a lo largo del siglo (II), y más reciente-
GUILLÉN ROBLES: I887: 26-27 y ORTEGA RUBIO, I895: I40, la sitúan mente a principios (I995: II7; I998: 227; también FERNÁNDEZ GAR-
en I595, confundiendo este año con el de I395, que tradicionalmente CÍA, 2009: 32, la fecha a comienzos del XV). CASTÁN LANASPA, I998:
se había venido asignando a la muerte del fundador. 347 y POZA YAGÜE, I998 (26): 332, la llevan al segundo tercio de la
646GARCÍA CHICO, I959: 30 (Anteriormente, había sugerido que la centuria; mientras que SAN JOSÉ NEGRO, 2002: 82, apunta que la cons-
terminación de la capilla habría tenido lugar durante el último cuarto del trucción comenzaría después de la muerte de Fernán Gutiérrez de Vega,
XVI, trabajando en ella los hermanos Hernando y Pedro del Río, que si bien anteriormente (40) sitúa su conclusión en I434.
aparecen, según un documento del I3 de febrero de I579, haciendo 648 Tumbo, fol. 74v-n.I2I y 374v-n.664.
FUNDACIONES MASCULINAS
• 177 •
Carecemos de datos documentales relativas a la erec- dencias conservadas de la panda del capítulo a finales del
ción de esta capilla, pero a juzgar por su relación con la siglo XII o comienzos del siguiente . 653
fábrica del templo, debemos situarla cronológicamente Al igual que sucedía en la iglesia, la delimitación de fases
entre la segunda y la tercera etapa constructiva, pero sin constructivas y su asignación a un período cronológico más o
duda ya dentro de la segunda mitad del siglo XIII. menos concreto derivará entonces del análisis arquitectónico
y estilístico de las estructuras conservadas, así como su rela-
ción con otros edificios coetáneos bien o mejor fechados.
El claustro y sus dependencias
Como era habitual en los monasterios cistercienses
Al igual que ocurría al estudiar el templo, las refe- castellano leoneses , cuando ya se había levantado ínte-
654
rencias documentales concernientes a la fábrica del claustro gramente la cabecera y al menos buena parte del brazo del
y sus dependencias durante la Edad Media son práctica- transepto al que se iban a adosar las dependencias estaba ya
mente nulas, y las dos únicas que hay son muy tardías ya bastante adelantada - e n nuestro caso, la zona inferior del
que proceden del Tumbo:
brazo norte en todo su perímetro-, se procedió a la cons-
• Martín Románez y su mujer Jimena Ruiz donaron trucción del pabellón de monjes. Pero parece que éste no se
en 1210 al monasterio las heredades de Villafalfón adosa limpiamente en toda su altura al hastial del transepto
y Villapiluete con todos sus términos y vasallos y como sucede en otros monasterios , sino que a pesar de
655
parece que se enterraron en la galería oriental del que en las partes bajas el adosamiento de una zona a otra
claustro junto al capítulo . 649
es claro , la parte superior de sus muros aparecen engati-
656
•Juan Alfonso de Alburquerque ( + 1 3 5 4 ) hizo los llados torpemente, consecuencia de haber desmontado
claustros baxos con sus oficinas . 650 parte de los ángulos del brazo para unirlos a los nuevos
muros que se estaban alzando en ese momento . 657
-El primer entierro de personas notables que ay en esta yglesia de que ay noticia
6 4 9 V V A A . , 1 9 9 5 : II, 8 9 1 ; VALLEJO, 1 9 9 5 : 2 2 ; POZAYAGÜE, 1 9 9 8 ( 1 7 ) a
es el de Martin Romanezy su muger Doña Ximena Roiz donadores de Villafafony Villa (24); PUENTE, 2002: contracubierta y 27; SAN JOSÉ NEGRO, 2002: 87
Piluete y sus terminosy vasallos. No se sabe a que parte estan sepultados. Los dos sepulch- y 8 9 ; HERNANDO GARRIDO, 2 0 0 3 : 2 0 2 ; FERNÁNDEZ GARCÍA, 2 0 0 9 :
ros que estan junto al capitulo baxo son suyos (segun tradicion) ( f o l . 7 4 r - n . 1 2 0 ) . 31; entre otros.
-Estos señores de Villa fafon marido y mujer teniendo hijos y herederos se donaron a la 654 Vid. una buena aproximación a su proceso constructivo en VALLE
casa con todo lo que tenian, sin cargo alguno mas de que los encomendassen a Dios y los PÉREZ, 1992 (2): 221. También es de sumo interés la exposición de
diessen sepultura; y son los dos vultos de piedra que estan en el claustro baxo entre el cru- BANGOTORVISO, 1998: 90-91. Vid. también los comentarios al respecto
cifixoy el capitulo ( f o l . 9 9 r - n . 1 9 2 ) . en la introducción general.
6 5 0fol.n.102. E n otro lugar señala t a m b i é n que hizo los claustros y oficinas 655 Véase por ejemplo la monografía de Valbuena.
y dormitorio viejo ( f o l . 6 6 r - n . 1 0 9 ) . 656 Desde el claustro se ve cómo la jamba derecha del vano meridional
6 5 1Carta defray Antonio de Vega, fol.304v; QUADRADO, 1 8 8 5 : 2 6 9 ; GUI- del armarium está pegada directamente al ángulo N.O. del brazo del tran-
LLÉN ROBLES, 1887: 17 (aunque en la 21 dice que es obra de Martín septo, y en el interior de esta sala y de la sacristía se aprecia cómo las hila-
Alfonso); GUTIÉRREZ CUÑADO, 1913: 47 (como el anterior, en la 76 das que conforman sus muros divisorios y soportes no se corresponden
adjudica su construcción a Martín Alfonso); PUENTE, 2002: 15, aunque con lo que es el muro de cierre del transepto, estando aquéllos simple-
este último matiza que "concluyó lo que faltaba de la iglesia, el claustro mente adosados a éste, no enjarjados como en la parte superior.
y otras dependencias", fechando las correspondientes a la panda del capí- 657 Aunque el empaste de las juntas de los sillares que forman los para-
tulo, como veremos, a fines del XII o principios del XIII. SAN JOSÉ mentos del claustro impiden una correcta visión de este acoplamiento,
NEGRO, 2002: 77, apunta que fue Martín Alfonso en 1275 quién sí se ve con facilidad cómo sobre la parte derecha del vano meridional
mandó construir el claustro, y en 40, que Alburquerque hizo "los claus- de acceso al armarium no se corresponden los sillares que forman el lienzo
tros bajos". del pabellón con los del transepto. En cuanto al paramento exterior, a
QUADRADO, 1 8 8 5 : 2 7 2 ; ORTEGA RUBIO, 1 8 9 5 : 1 4 0 ; GUILLÉN
6 5 2 pesar de que toda esta zona fue sometida a una intensa restauración-
ROBLES, 1 8 8 7 : 2 1 ; GUTIÉRREZ CUÑADO, 1 9 1 3 : 76; ANTÓN, 1 9 2 3 (3): reconstrucción en el curso de la cual fueron sustituidos un elevado
61-62; idem, 1942: 125; MARTÍN GONZÁLEZ, 1968: 85; YÁÑEZNEIRA, número de sillares, se ve con nitidez cómo inmediatamente por encima
1 9 7 2 : 1 1 8 y 122; ARA GIL, 1 9 8 6 : 1 0 y 12; VALLEJO, 1 9 9 5 : 5 4 . de la jamba derecha de la puerta que da a la calle hay una fractura verti-
653 ANTÓN, 1923 (3): 78; idem, 1942: 147; idem, 1953: 314; cal y una discordancia en la altura de las hiladas y tamaño de los sillares
EYDOUX, 1 9 5 4 : 1 9 7 ; MARTÍN GONZÁLEZ, 1 9 6 8 : 8 2 - 8 3 , 8 5 ; BRONSE- situados a uno u otro lado de la misma que creo vienen a confirmar la
VAL, 1970: 274 nota 91; ARA GIL, 1986: 9-10; idem, 1998: 227; idea desarrollada en el texto.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
80
se levantaron en una misma campaña. Sin embargo el que cantero . Poco después, en una segunda etapa, se proce-
659
los cimacios de las columnillas adosadas y acodilladas del dería a ubicar los soportes en el interior de las dependen-
interior del capítulo no enlacen correctamente con la cias y abovedarlas, aunque los correspondientes a la sala de
imposta que recorre el paramento y presenten una moldu- monjes parece que estaban colocados desde un principio.
ración sensiblemente diferente a ella, detalle aquél que tam- A esta periodización edilicia no son ajenos otros
bién apreciamos en las columnillas que soportan los arcos monasterios cistercienses , pudiéndose seguir este
660
geminados de los vanos laterales -cuyas basas, por otro mismo proceso en el monasterio berciano de Carra-
lado, carecen de los plintos con acanaladuras que vemos en cedo , en algunos ejemplos franceses , y también en
66I 662
la parte inferior de su fachada-, y en las ménsulas del locu- otras salas capitulares pertenecientes a diferentes institu-
torio con respecto a la imposta del vano de entrada; y el tos monásticos asentados en la Península, como los pre-
que los capiteles y basas de los soportes interiores de estas monstratenses 663 .
salas no fueron colocados simultáneamente al resto de silla-
res que forman el muro, sino que se encajan de manera Otro aspecto a destacar es la desconexión estilística
torpe en él, permiten distinguir hasta dos fases en su cons- entre estas dependencias y el templo. A lo largo de todas las
trucción . 658 estancias que componen el pabellón de monjes no encon-
tramos ningún elemento (modelos de capiteles y basas, per-
En un primer momento se levantan los muros que
files de cimacios, impostas, arcos y nervios, tipología de
delimitan los distintos espacios y sus respectivas aperturas
vanos, etc) que guarden estrecha relación con los vistos en
al claustro - d e la fachada del capítulo quedarían sin colo-
la iglesia . Únicamente la existencia de pilastras encapite-
664
658 BANGO, I997: 284, ya sugirió la existencia de dos fases bien dife- una identidad de maestros y una consiguiente coetaneidad constructiva.
renciadas: muros y abovedamientos. En primer lugar estamos ante un perfil muy sencillo, con un amplio des-
659 Como veremos en la monografía de Valbuena, también las estancias arrollo a lo largo de mucho tiempo, incluso siglos, máxime cuando el
bajas de su pabellón de monjes se construyeron en dos impulsos. propio proceso constructivo de la iglesia nos lleva a datar esas parcelas
660 ABAD CASTRO, I998: I92, comenta en líneas generales cómo los muy avanzado el siglo XIII, algunas incluso ya dentro del XIV; y en
abovedamientos de los capítulos suelen ser más tardíos que las partes segundo lugar, ya señalamos en el apartado descriptivo las diferencias
bajas de sus muros perimetrales. existentes entre las secciones de ambos nervios (los boceles de las depen-
6ÉI La primera etapa a la que corresponderían los muros perimetrales dencias claustrales son más finos que los de la iglesia y la superficie plana
y los arcos de acceso dataría de hacia I I 7 0 o poco después, mientras intermedia más amplia). Algo semejante podemos decir de los cimacios
que para los soportes centrales, ménsulas y bóvedas habría que esperar de nacela: esta moldura es tan simple que su uso en distintas parcelas
al menos a la segunda década del siglo XIII, pudiendo relacionarse tal vez del monasterio no debe tomarse como elemento definitorio para rela-
con la data de I233 que aparece inscrita bajo la ventana norte (MIGUEL cionar unas y otras; en cambio, el hecho de que en la mitad norte de las
HERNÁNDEZ, I996: I55; VALLE PÉREZ, I 9 9 I (3): I53 y I63 nota 43; naves, incluida la puerta de monjes, el remate inferior de la nacela se
idem, I998 (2): I73 y I64-I76). Por su parte ABAD CASTRO, I998: "abocele", y este detalle no se vea en todo el pabellón de monjes es, creo,
I93, lleva el abovedamiento de esta sala a finales del XIII. sintomático; por otro lado, el que en esta última zona la superficie recta
662 Flaran, Villelongue, Silvanes o L'Escale-Dieu (BlGET, PRADALIER y de la nacela esté partida por un surco, la diferencia de la que vemos en
PRADALIER-SCHUMBERGER, I986: 34I-342). la capilla primitiva de la cabecera, totalmente lisa. Respecto a los capi-
663 Son los casos de Aguilar de Campoo (perímetro mural en torno a teles, no encontramos en ningún lugar del templo las características ces-
I209 y bóvedas hacia I2I3), Ribas (los muros datan de antes de II70, tas facetadas predominantes en la panda del capítulo, y en cuanto a los
mientras que el abovedamiento se realiza hacia I200) y Retuerta (en la lisos que vemos en la puerta de monjes, aunque su desbastado es tron-
segunda mitad del XII se realiza la caja muraría, las cubiertas en el pri- copiramidal como los del capítulo y sala de monjes, en ellos está ausente
mer cuarto de la siguiente centuria) (LÓPEZ DE GUEREÑO, I997: I, I I 8 la planitud que adquiere la cesta de aquéllos en su parte superior. Tam-
y I 3 I ; II, 4I2, 4 I 3 y 425; 504, 507 y 524, y 582, 584, 587 y 588, res- poco encontramos concomitancias con los perfiles de las basas del tem-
pectivamente). plo ni sus plintos acanalados. Hay que hacer notar igualmente que en el
6 6 4El hecho de que arcos y nervios de sección rectangular y aristas pabellón de monjes se usa exclusivamente el arco apuntado mientras que
aboceladas se empleen tanto en armarium y sacristía como en el primer en la iglesia, dejando de lado la capilla de la primitiva cabecera, aparece
tramo de la nave sur, transepto y nave central, no implica necesariamente combinado con el de medio punto.
FUNDACIONES MASCULINAS
• 179 •
suponer que estas dependencias fueron realizadas por un ser bastante lenta. Según aquéllas esta dependencia fue eri-
equipo que trabaja en el complejo monástico en un momento gida bajo el patrocinio de Juan Alfonso de Alburquerque,
posterior a la paralización de las obras de la iglesia a la altura lo que implicaría una cronología para el mismo de hacia la
del cierre occidental del transepto y que además es ajeno a su primera mitad del siglo XIV.
fábrica, al menos a las partes más orientales. La explicación a esta tardanza quizá haya que bus-
Varios investigadores han resaltado el carácter borgo- carla en el lento proceso constructivo que había afectado
ñón que presenta en especial la sala capitular, no sólo en el ya a la construcción de la iglesia.
diseño de su fachada sino en determinados elementos arqui- Paralelamente a las obras acometidas en el templo
tectónicos, como capiteles o nervaduras , a los que se 665
Relacionado con este aspecto hay que recordar su relación por el occidental, como lo demuestra la identidad de marcas de
con otras construcciones también cistercienses, bien de su cantero de estas dos pandas con las partes bajas del templo, y
entorno cercano como Moreruela, de su filiación como San- en especial con la nave norte. Al mismo tiempo se debía estar
doval o hijas también de la misma casa francesa como trabajando en su lado septentrional . En esta campaña, a dife-
672
Sobrado, y que han sido puestas igualmente en conexión con rencia de lo que veíamos en la panda del capítulo, encontramos
realizaciones borgoñonas . Como ya vimos al comentar el
667
vanos de medio punto y sin moldurar —calefactorio y cocina—
proceso constructivo del templo, esos elementos considera- , cuya sencillez debemos relacionar además con la categoría
dos originarios de Borgoña pudieron ser difundidos por los funcional de estas dos dependencias ; sólo los arcosolios del
673
reinos de Castilla y León por maestros laicos de formación mandatum —y tal vez el de la cilla—, presentan un perfil ligera-
ultrapirenaica, o bien fueron transmitidos desde la casa mente apuntado y abocelado . 674
madre a través de diseños y planos remitidos a la Península. Con motivo de la crisis económica que desde finales
Respecto a su cronología, las fechas manejadas para del primer cuarto del siglo XIII afectó a La Espina se inte-
edificios hispanos relacionados con La Espina, como la rrumpieron todos los trabajos en el complejo monástico,
segunda fase de la cabecera y dependencias orientales de pero para entonces el perímetro del claustro ya debía estar
Moreruela (hacia I I 9 0 - I 2 0 0 ) , la cabecera de Sandoval
668 completado, estando las dependencias que lo rodeaban por
(iniciada a fines del XII o principios del XIII) o la sala 669 el norte y oeste, como el dormitorio, algo adelantadas.
capitular de Sobrado (hacia I 2 0 0 o muy a principios del Tras un largo paréntesis de inactividad constructiva, las
siglo XIIl) , o la solución aplicada en la fachada del capí-
670
obras se reanudan en el siglo XIV gracias a la generosidad de
tulo, de gran efectismo plástico en sintonía con el manie- Juan Alfonso de Alburquerque, quien terminaría el dormito-
rismo arquitectónico de hacia I200 *, nos llevan a fijar su
67
rio, quizás otras estancias como el refectorio —el perfil de los
comienzo a mediados del último cuarto del siglo XII, nervios empotrados en el paramento interno de esta sala apun-
estando seguramente rematadas a finales del mismo. tan hacia una cronología avanzada—, y finalmente las galerías
Los escasísimos vestigios del dormitorio común no del claustro. El uso del ladrillo en todas ellas —al menos parece
ayudan a asignarle una data concreta, si bien lo más proba- que así fue en la primera y las últimas— evidencian, además de
ble es que se iniciara una vez se habían abovedado todas las su más que probable coetaneidad, los escasos recursos econó-
estancias de la planta baja. Sin embargo su construcción, a micos del monasterio para afrontar una construcción en pie-
juzgar por las referencias documentales que tenemos, debió dra. Asimismo hay que añadir que este lapso de tiempo pudo
665LAMBERT, I93I: 83; VALLE PÉREZ, I982: I, 78; idem, I99I (4): 6 1 Sobre este aspecto y sus repercusiones en el campo arquitectónico,
775. Vid. además nota 409. vid. BANGOTORVISO, I 9 9 I : 35.
666Vid. notas 4 I 2 a 4I4. 672 Escasas marcas de cantero hemos localizado en este paramento,
Además de las referencias contenidas en las notas precedentes, véase
6 6 7 debido en gran parte al deterioro sufrido por la piedra. N o obstante, los
especialmente VALLE PÉREZ, I982: I, 43, I99I (3): I52-I55; idem, pocos tipos que aquí hallamos aparecen también en las otras pandas,
I99I (4): 774-775; idem, I992: I2-I7, I9 y 28; idem, I994: 24, 25, aunque no con la variedad que veíamos en éstas.
28-3I y 33-34; idem, I998: 39-40; idem, I998 (2): I76. 673 Recordemos que el vano apuntado localizado en el lugar donde se
668Sobre la cronología de este templo, véase lo que se comenta al res- abriría la puerta del refectorio es un reconstrucción reciente.
pecto al analizar la tercera fase constructiva de la iglesia de nuestro Quizás sea por entonces cuando se abre en el tramo oriental de la
6 7 4
monasterio. sacristía el lucillo funerario, dadas las semejanzas que guarda con los del
669Vid. nota anterior. claustro.
670VALLE PÉREZ, I99I (3): I53; I998 (2): I76 —corrige así la cro-
nología ( I 2 I 5 - I 2 2 0 ) aplicada a esta dependencia en anteriores estudios
(I982: I, 78)—.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
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incidir en que las dependencias que canónicamente se sitúan domno Bernardo, Clarevalis Abbati, hereditatem Sancti Petri de
a occidente del claustro dedicadas a cilla y estancias de con- Spina atque hereditatem Sancte Marie de Aborridos, scilicet: ter-
versos que no se habían materializado en las primeras etapas, ras, vineas, prata, fontes, montes cultos et incultos, utriusque exi-
por no ser ya útiles en este momento dejan paso a otras como tus et ingressus, utrinque videlicet cum omnibus terminis sibi
la portería o palacio abacial . 675 pertinentibus, quatinus ibidem, me opitulante, in honore Domini
Esta demora en la conclusión de las dependencias nostri Jesu christi eiusdemquegenicitris monasterium edificetis, in
quo vestri monachi vestrisque ordinis assidue assistentes pro suis
incluso más amplia en la construcción de las galerías claus-
atque meis parentumque meorun ac omnium fidelium Christia-
trales no es algo anómalo, sino que en numerosas ocasiones
norum tam vivorum quam defunctorum peccatis Deum depre-
una vez levantadas las estancias realmente necesarias para el
centur. Si quis autem hoc meum donum tam de meis quam de
buen funcionamiento de la abadía -las de la planta baja del
extraneis, prava cupiditate compulsus, irritumfacere voluerit, hoc
pabellón de monjes y tal vez dormitorio y refectorio-, el resto
ad effectum nequaquam ducere possit; sed si contingerit (quod
se dejaba para futuras intervenciones en espera de mayores
absit), omnia illa supradicta prius in duplo reddat ac postea Regi,
medios económicos o simplemente se ejecutaban con mate-
vel cuicumque vestram comiseritis vocem, pectet in quotto mille
riales modestos sin ninguna pretensión monumental. Quizá libras auri purissimi et in super sit maledictus et uti Datan et
sean estas la razones por las que en diversos monasterios sólo Abiron eum terra absorvea atque cum luda tradditore inferni.
han llegado hasta nosotros las dependencias de la panda del
capítulo (Moreruela), incluso en determinadas ocasiones no Facta carta huius doni tertio decimo Kalendas Februarii, Era mil-
todas (Palazuelos, Carrizo) y en otros ni siquiera éstas (Pena- lessima centessima octogessima quinta, imperante Aldefonso Impe-
mayor, Villamayor), aunque no debemos dejar de lado el papel ratore cum Imperatrice Berengaria in Legione et in Toleto et in
que jugaron las transformaciones modernas (osera, Bujedo, Cesaraugusta et in Corduba et in tota Hispania.
Valdediós), incluso otras más recientes (Matallana, Herrera) Ego Sancia regina supradicta, que hanc cartam scribere iussi,
en la desaparición de muchas de estas salas . 676 coram roboravi.
( P r i m e r a c o l u m n a ) : Domnus Petrus, Palentine sedis episco-
pus, conf. Domnus Ioannes, legionensis ecclesie episcopus, conf.
Domnus Petrus, Segoviensis episcopus, conf. Gutter Ferrandez
4. APÉNDICES conf. Martinus Monioz conf. Nicolaus Pelagii conf.
( S e g u n d a c o l u m n a ) : Pontius, Comes de Cabrera, conf. Man-
Apéndice documental ric, comes, conf. Comes Amergot conf. Cid, testis, conf. Belid, tes-
tis, cof. Anaya, tetis, conf.
Documento 1
Omnes milites me Curie visores et auditores huius donationis.
I I 4 7 , enero, 20.
La Infanta doña Sancha dona a San Bernardo las here- Documento 2
dades de San Pedro de Espina y Santa María de Aborridos
para que edifique un monasterio. I I 4 9 , abril, 6. Zamora.
Tumbo de La Espina, fol. 4 8 - n ú m s . 6 4 y 6 5 . Alfonso VII confirma la donación de su hermana
Doña Sancha.
In nomine sancte et individue Trinitatis Patris et Filii et Spiritus
Sancti, amen. Quoniam escriptum est: «Declina a malo et fac Tumbo de La Espina, fol. 5 I - n ú m s . 7 0 y 7 I .
bonum» et «nom sufficit abstinere a malo nisifiat quod bonum In nomine Patris et Filii et Spiritus Sancti, amen. Cum sanctitatis
est», item «initium sapiente timor Domini» et «qui timet Deum et religionis odorem Deo certum sitgratum esse, viros sanctos et reli-
faciet bona» et «operanti bonum bene erit in extremis» , igitur giosos debet propter Deum quisquefidelis amare illorumque necces-
ego, Sancia, Aldefonsi Imperatoris Hispaniarum soror, his et aliis sitatibus misericorditer providere providensque sub venire, ut
exemplis premonita et e docta, espontanea voluntate, nullo cogente, orationum et beneficiorum eorum possit esse particeps. Huius rei gra-
pro redemptione anime mee atque parentum meorum do vobis tia ego Aldefonsus, per Dei misericordiam imperatur Hispanie, una
675Sobre la escasez de conversos a partir de mediados del siglo XIII, en LÓPEZ DE GUEREÑO, I998: 255; VALLE PÉREZ, I992: 220 y 22I; idem,
especial en los reinos castellano-leoneses, vid. ÁLVAREZ PALENZUELA, I992 (2): 28; etc. Este mismo proceso ha sido también detectado en los
I978: 6I-63; PÉREZ-EMBID, I986: 24I-243 y 334. monasterios premonstratenses castellano leoneses (LÓPEZ DE GUEREÑO,
676Estos aspectos han sido destacados, entre otros, por ABAD CASTRO, I997: I, I3I-I33). Véanse además los comentarios al respecto en el aná-
I998 (4): 237; BANGOTORVISO: I998: 9I; idem, I998 (2): I60-I6I; lisis del claustro y las dependencias occidentales de Valbuena .
FUNDACIONES MASCULINAS
• 181 •
cum filiis meis Sanctio et Fernando Deo et Clarevalensi Abbati domno como mas largamente se puede haber según las escrituras deste
Bernardo et fratibus eius monachis, in Sancto Petro de Spina moran- Monesterio, que creo que va tambien sacado que Vm. holgará de
tibus, ut beneficia et orationes eorum michi et omnibus parentibus vello, y quisiera yo que hubiera otras muchas cosas mas con que
meis communicent, dono spontanea voluntate totum hoc quod habeo poder servir a Vm. mas en esto y en todo lo demas que Vm. se qui-
vel habere debeo in Sancto Petro de Spina et in Sancta Maria de siere servir de mi que yo pueda hacer por servir a Vm. no tiene
Aborridos et infra terminos earum; et iste ville deserte iacent inter mas que mandarme, y asi por no gastar muchas palabras daré fin
Sanctum Ciprianum de Mozoth et Castromonte. Dono, inquam, a estas razones, y si hallare por aca otra cosa que valga algo o
sicut donavit eis soror mea Sanctia Infantissa et determinavit, quic pueda aprovechar a Vm. yo tendré cuidad de embialla.
quid ibi habeo et habere debeo in montibus et vallibus et in terris et Este Monesterio del Espina, fue fundado el año de mil y cineto y
in aquis et pratis te pascuis et in omnibus aliis pernitentiis suis, quo- quince años, siendo Sumo Pontifice Eugenio tercero Monje de Cla-
cumque locofuerint et eas potuerint in venire. Eo vero modo preno- raval, discipulo de nuestro Padre San Bernardo Abad que enton-
minatas hereditetes meas de Sancto Petro de Spina et de Sancta Maria ces era de Claraval, reinando en España el Rey Don Alonso el
de Aborridos prenominato Abbati et eiusfratibus dono e concedo, qua- octavo, Emperador de las Españas: fundole primeramente Doña
tinus in eis quicquid voluerint faciant; et ipsas cum edificiis que ibi Sancha hija del Conde Don Remiro de Tolosa, y de la Reyna
fecerint omni tempore absque aliqua infestatione atque gravamine pos- Doña Urraca, hermana del dicho Emperador, nieta del Rey Don
sideant, et absque omnium ominum contradicto faciant inde quicquid Alonso el sexto que ganó a Toledo. Fue esta Señora una sancta
voluerint at honorem et commodum sue ecclesie. Si quis vero in pos- muger, nunca fue casada, sino que vivio siempre en toda castidad
terum de meo vel alieno genere huius mee donationes paginam sciens y limpieza: era tan devota de las insignias de la pasion de nues-
ei contravenerit et eam viruperit, sit a Deo maledictus et in inferno tro Señor Jesuchristo que a esta causa, movida de gran devocioón
cum Iuda traditore sine fine damnatus, nisi digne emmendaverit, et acompañandose de muy sancta compañía eclesiasticay seglar, de
persolvat regie parti tria millia moravitinos et dupplatum emmendet honestas y sanctas mugeres, fue en romeria a la Casa sancta de
et restituat prefatis monachis quicquid invaserit. Jerusalem, donde estubo cinco años visitando los lugares sanctos,
donde el hijo de Dios obro nuestra redemption, y socorriendo a los
Facta carta (Remore octavo Idus Aprilis, era M CLXXXVII, pobres y necesitados con sus limosnas y otras obras de piedad que
tertio mense post mortem imperatricis Berengarie, prenominato ella mesma sirviendoles por su persona hacía; e para en testimo-
imperante in Toleto, Legione, Saragocia, Nagera, Castella, Galle- nio de sus buenas obras acontecio una vez, que el dia de Pentecostes
cia, Baetia, Almaria. una Lámpara que ella habia puesto ante el Altar del Hospital que
Ego Aldefonsus imperator hanc cartam, quam iussifieri, confirmo alli está se acendio milagrosamente sin que ninguno la encendiese,
et manu mea roboro. (Signum Imperatoris). Sanctia Infatissa, para que se entendiese que sus obras comenzaban a lucir delante
soror imperatoris. Sanctius et Fernandusfilii imperatoris. Ber- de Dios y de los hombres. Acabado el dicho tiempo de su estación
nardus, (emorensis episcopus. Berengarius, Salmantinus episco- y romería, volviéndose para España, vino en Roma donde tomó la
pus. Ioannes, Legionensis episcopus. Comes Pontius, maiordomus bendición del Sumo Pontífice Inocentio segundo, el qual le dio una
imperatorus. Comes Osorius. Comes Amalricus. Comes Rami- partecica de la Cruz o Aspa, en la qualfue crucificado el Apos-
rus Flolez. Gutter Fernandez, potestas. Nunius Pedrez, Aferez tol Sant Andres, y otro pedazo de la Cruz del Apostol Sant Pedro,
imperatoris. Velo Gutterrez. Lop Loppez de Carrione potestas. y tres artejos del dedo menique del Cuerpo del Apostol San Pedro,
Didacus Munioz, Maiorinus Carrionensis, confirmaverunt. y hasta el dia de hoy no falta cosa alguna del dicho cuerpo sancto
de Sant Pedro en Roma sino el dedo menique questá en esta Casa
Giraldus scripsit, scriptor imperatoris, per manum magistri en el Relicario deste Monesterio, según en Roma esta tomado por
Hugonis Cancellarii. testimono, y en el mismo reliquario están todas las suso dichas
reliquias, y otra de Ligno Crucis. Desde Roma la dicha Infanta
Documento 3 Doña Sancha se vino a Francia, donde se vio con nuestro glorioso
1568, octubre, 5. Monasterio de la Espina. Padre Sant Bernardo, y le comunico su buen proposito y sancto
deseo que tenia de edificar un Monesterio acá en España y Dota-
Carta de fray Antonio de Vega a Ambrosio de Mora- lle a su costa, y le pidio Monjes, y en el sirviesem a Dios. El bien
les relatando la fundación del monasterio de La Espina, sus aventurado nuestro padre San Bernardo condecendiendo a su ruego
hitos históricos y quienes fueron sus benefactores. y peticion lo hizo, y para dar orden y certificarse mejor del sitio y
B.N., mss. 5.938, fols. 301r-305v. lugar donde le queria edificar embió a Fr. Nivardo su hermano en
compañía de la dicha Ynfanta, la qual prosiguiendo su camino
Muy magnifico y muy reverendo Señor. Por no haber tenido antes
vino en Paris, donde visitando el Monesterio de Sant Dionisio en
mensagero cierto, no he cumplido hasta ahora la palabra que di a
la Capilla de los Reyes de Francia, la mostraron gran parte o la
Vm. quando desa Villa de Alcala me venia paa esta Sancta Casa;
mitad de la Corona despinas de Christo nuestro Señor, la qual
y asi agora ofresciendose tan buen mensagero como es el Padre
habia traido alli el Emperador Carlo Magno a diez dias de Agosto
fray Luis Destrada, Rector del Colegio de San Bernardo, deter-
quando fue a Costantinopla, como mas largo se escriben en el
miné de tomar un poco de trabajo por servir a Vm. con lo que le
Libro del Catalogo de los Sanctos. Esta dicha Señora por ruegos y
habia prometido, ques lafundacion desta Casa, y fundadores della,
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
84
intercesion de la Reyba de Francia, que era su Sobrina, suplicó al Alphonso de Alburquerque en Medina del Campo, Rui Diaz
Rey de Francia le hiciese merced de alguna pieza de aquella tan rica Cabeza de baca su Mayordomo mayor, le trajo por la Corte Real
Guirnalda: el Rey lo hizo ansi, que desgajando una espina de la envalsamado algunos años, acompañado de toda su Casa como si
Corona se la dio, y según se ve en la misma espina, es de las espi- fuera vivo, hasta que el Rey Don Pedro el Cruel en la Ciudad
nas teñidas de la preciosa Sangre de Jesuchristo, que traspasaron de toro se concertó con todos los Caballeros, y vino en paz y con-
su sagrado celebro. Con todas estas reliquias vino en España gozosa cordia con ellos, lo qual el dicho Don Juan Alphonso de Albur-
y con gran veneration y reverentia las trajo a este su Lugar y querque siendo vivo pretendia, y mando en su testamento que hasta
Palacio, que entonces se llamaba Sant Pedro del Espino, a donde que entre el dicho Rey y los suyos hubiese paz le tragesen de aque-
de su Casa y palatio hizo Casa de Dios y Palatio sagrado y repo- lla manera sin enterrar. Hechas ya las paces con el Rey Don Pedro
sitorio de la Sancta Espina y de las mas reliquias, edificando este y los suyos, el dicho su Mayordomo mayor con gran compañía de
Monesterio, el qual acabado y venidos los Monjes, que el glorioso caballeros le trugeron a enterrar a esta Casa del espina Moneste-
Padre Sant Bernardo embio de Claraval, les entregó la dicha espina rio de Monjes blancos, como lo dice la historia; y el dicho su
y reliquias, y dio mas su Alteza el lugar de Sant Pedro del Espino,
Mayordomo mayor está aquí sepultado junto al Crucero desta
y el Lugar de Santa Maria de Aborridos, y el Lugar de Sant Juan
Yglesia, cerca de la Silla Abacial del Coro bajo. Este Don Juan
de Casarejos, que agora estan despoblados; Yten dio todos los Mon-
Alphonso de Alburquerque fue uno de los mas estimados Caba-
tes y terminos que al presente esta Casa tiene y posee como estan
lleros destos Reynos, y fue Ayo del Rey Don Pedro: fue nieto del
marcados y confirmados por el privilegio del Rey Don Fernando
Ynfante Don Alonso de Molina, quefue hijo del Rey Don Alonso
el Sancto que ganó a Sevilla.
de Leon, y por consiguiente de Sangre real por parte de su Abuela
El edificio primero que entonces se fundó es la Caseria questá
Doña Mayor Afonso quefue de los Telles y Meneses: Su titulo y
agorafuera deste Monesterio que es agora Casa de grangeria, con
apellido fue de Alburquerque, por que el tio Don Martin Alfonso
un quarto de piedra y ladrillo que cae hacia oriente en el segundo
hermano de su Abuela, les dio a su Padre y a el la Villa de Albur-
claustro desta Casa en el qual edificio y fundacion moraron los
querque, y la fortaleza, con todo lo que en ella tenia. Todos los
Monjes por espacio de ciento y treinta años, donde el primer Abbad
dichosfundadores, la Ynfantay Caballeros suso dichos, no deja-
se llamó Arnaldo. Acabado de fundar y edificar el Monesterio
nuestro glorioso Padre Sant Bernardo, escribió una Carta a la ron a esta Casa Capellania ni cargo alguno, mas de encomendarse
dicha Ynfanta Doña Sancha, que es la trecentesima prima de sus en los sacrificios, sufragios, y orationes generales desta Sancta Casa.
Epistolas, en la qual hace mención desta Casa y de los Monjes Los dichosfundadores desta Yglesia, estuvieron enterrados hasta el año
della, encargandoselos so su amparo y favor diciendo estas pala- de mil y quinientos y quarenta y seis en una Capilla mayor que
bras. Obsecramus vos pro novella vestra plantafione: illos loquor habia vieja pequeña obscura y baja, la qual se deshizo, y se comenzó
despina ut eis viscera misericordie exibeatis quatenus vestro bene- la presente a edificar el dicho año de mil y quinientos y quarenta y
ficio sustentati inservitio dei et suo ordine perseverent. seis juntamente con las dos Capillas hornacinas o Colaterales, y el
En los dichos ciento y treinta años que los Monjes estuviero en la Cimnorio del Crucero. Acabado esto y puesto en perfecion el año de
dicha primerafundation, augmentose el numero de los religiosos e mily quinientos cincuenta y nueve, pusieron a los dichos Señores fun-
familia tanto que no podian habitar en tan estrecho lugar, y asi fue dadores donde agora estan honorificamente con sus titulos, insignias
necesario fundarse la segunda vez este Monesterio en el año de y blasones. En el año del Señor de mily quatrocientosy setenta y ocho
mil y docientos y setenta y cinco años, siendo Sumo Pontifice años, siendo Sumo Pontifice Sixto quarto, y reynando en España los
Adriano quinto, reynando en españa el Rey Don Alonso el Sabio, Reyes Católicos, habiendo sido ultimo Abbad desta Casa Don fr.
y siendo Abad deste Monesterio Don Pablo:fundole el muy Illus- Pedro Pimienta, fue reformada esta Sancta Casa, y agregada a la
tre Caballero Don Martin Alphonso Telles, hijo de Don Alonso observantia; y el primer Abad de la observantiafuefr. Martin de Val-
Telles de Meneses, que fundo el Monesterio de Palazuelos desta darcos, y desde entonces hasta hoy en este dia siempre la Religion se
Sagrada Orden, el qual Don Martin Telles de su propia volun- ha acrecentado en sanctidad, bondad y recogimiento, aumentándose
tad y a su costa, comenzó a labrar esta Yglesia, pero empedido con siempre el numero de los religiosos, con acrecentamientos de los bienes
la muerte no la pudo acabar, y mandó a sus testamentarios y espirituales y temporales, y nuebos Edificios: a Dios nuestro Señor
herederos la acabasen, y alcanzo Licencia del Rey Don Sancho el sean dadas las gracias por todo, y su divina Magestad se sirva en
quarto hijo del suso dicho Rey Don Alonso, para que le diesen en sustentarlo por largos tiempos, para consolation de sus siervos a su
ella sepoltura dentro de la Capilla mayor ante el Altar de Nues- honra y gloria amen.
tra Señora el qual fenescio viernes a quince de Julio de mil y
docientos y ochenta y cinco años. Pasados despues desto algunos Esto es Señor lo que yo he podido colegir para servir a Vm. de las
años Don Juan Alonso de Alburquerque nieto del Infante Don escrituras desta Casa: si hay otra cosa, o alguna destas que sea
Alonso de Molina, acabó de edificar esta Yglesia, conviene a saber menester aclarar mas, o otra que V.md. entienda, que de acá se la
las tres ultimas Capillas de la nave mayor, con las dos naves cola- pueda embiar, me avise, porque lo haré de muy buena voluntad;
terales, e hizo los Claustros bajos con sus oficinas, y dio a este y por que esta no es para mas ceso, y Dios con todo amen. Desta
Monesterio algunas heredades en trecha y en pobladura, y la Mar- del Espina a 5 de Octubre de 1568 años.= Besa las manos de
tiniega de Villagarcia. Muerto este dicho Caballero D. Juan V.md. su verdadero siervo y Capellan.= Fray Antonio de Vega
FUNDACIONES MASCULINAS •183•
d l H59 .
- B a l u n o , 6 7 7 - Arnaldo, I202, I205, I209, I 2 I 0 , I 2 I 3 , I 2 I 6 ,
- Tomás, I I 6 3 . 678 I 2 I 9 , I220 *. 68
des por sus nombres, sin mentar a Thomas; y ansi diremos quefue, o Thomas Balduino Arnardo desde el año de 1201 hasta el año de 1220, añadiendo que en el folio
primer Abbad, o Thomas Vuillelmo Segundo Abbad ( f o l . 7 9 v - n . I 3 I ; 4 9 v - n . 6 7 ) . 89 del antiguo calendario se indica: XVIIIKalen Septembris, que es quinze de
Por su parte, YEPES sigue el catálogo de abades redactado por Hernando agosto, obiit Donus Arnardus bone memorie Abbas de Spina IIII. D e otra parte, el
de Aedo y señala que Balduino, primer abad, ocupó dicho cargo entre primer Abadologio situa su prelatura a partir de II95, en cambio el
I I 4 3 y I I 6 0 ( I 6 0 9 - I 6 2 I : 35I). segundo (Tumbo, fol.80r-n.I32) señala que hay escrituras suyas de I202
Sea como fuere, el único documento en que aparece nombrado el abad (donación por Vicente Caniela de un huerto en Pobladura; fol.305r-
Balduino —y sólo consta con este nombre, no con uno compuesto—, es n.578); I205 (Alfonso VIII confirma la donación que hizo su mayor-
un intercambio realizado entre Doña Sancha y el prior de Wamba el 26 domo Pedro Fernández de San Salvador; fol.80r-n.I32; inserta en un
de febrero de I I 5 9 (pub. por AYALA MARTÍNEZ, I995: 243). libro mss. conservado en San Isidro de Dueñas, fol.32r, pero con fecha
678 El único documento en que aparece citado este abad es la bula de de II75); I209 (donacion de Santa Maria de la Vega por García Gómez
Eugenio III de 5 de octubre de I I 6 3 (Tumbo, fol.82-n.I57 y I58; pub. y su mujer; tb. en fol.225v-226r — n.434 y 435); I 2 I 0 (donación de
por RÓDRÍGUEZDE DÍEGO, I982:I88-I90). Vid. también nota anterior Villafalfón y Villapiluete por Martín Románez y Ximena Roiz; tb. en
y siguiente. YEPES cita este documento y le coloca en segundo lugar en fol.52v-53r — n.73 y 74); I 2 I 3 (el 2 I de mayo de este año Inocencio
la lista de abades ( I 6 0 9 - I 6 2 I : 35I). III le encarga junto al abad de Osera solucione un pleito que sostiene el
679 En el primer abadologio del Tumbo a continuación de Balduino se rey de Portugal con sus hermanas. MANSILLA, REÓYO, I955: doc. 504,
escribió 2. Villelmus, 1160, pero fue posteriormente tachado y sobrescrito 545-546); I 2 I 6 (el I 2 de enero, Inocencio III le encarga que junto con
D.Thomas (fol.65v-n.96); y en el segundo (fol.79v-n.I3I) lo siguiente: 2. el abad de Matallana presente una citación al arzobispo y cabildo de
Domnus Vuillelmus, vel Thomas Vuillelmus secundus Abbas Spinae. No ay memoria en Braga sobre el pleito del monarca portugués con sus hermanas. MANSI-
ninguna escriptura deste nombre Vuillelmo, mas de la que se cita af°49 donde le haze LLA, REÓYO, I955: doc. 534, 565-566); I 2 I 9 (concordia con el con-
segundo Abbad, yfuelo hasta el año de 1172 poco mas o menos, aunque el principio de cejo de Torrelobatón sobre la propiedd del molino de Corrisalta;
su Abbadia no se sabe de cierto, por no saber si el nombre de Thomas le tuvo este o el pri- fol.80r-n.I32). Además, en I209 Alfonso VIII le confirma los términos
mero, y ansi a vulto le demos que comenp año de 1160. Y al margen: no ai razon del monasterio, sus granjas y posesiones (fol.88v-n.7I) y en I220 Fer-
ni motivo para hazer a este Abbad de la Espina, ni la kalenda en el lugar citado mues- nando III le confirma todos los privilegios anteriores (fols.54r-n.76 y
tra aia sido Abbad, ni que el Balduino alli expresado sea el quefue Abbad de la Espina, 89r-n.I72). Extrañamente, la Carta de fray Antonio de Vega..., fol.303v, le
y si de la kalenda se infiere, se infiere fue Abbad Eugenio 3° de esta casa, lo qual ia se situa como primer abad. MANRIQUE, I 6 4 2 - I 6 5 9 : IV 20I, dice que
ve quam falso es. E n el folio 49r-n.66, se dice lo sigiuente: despues del último Arnaldo era el cuarto abad, y YEPES apunta que estuvo al frente del
capitulo de la regla que se sigue despues del Calendario, af 63 de la regla, escrito de letra monasterio desde I I 9 5 hasta I220 ( I 6 0 9 - I 6 2 I : 35I).
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
86
- Pedro I, I222, I223, I 2 3 0 . 682 - Pablo, I 2 7 3 .687
- Melior, I236, I237, I239, I 2 5 5 . 684 - Fernando I, I285, I287, I290, I 2 9 9 . 689
- Pedro II, I 2 6 7 .
685 - Haimón, I302, I 3 I 4 . 690
- Polo, I 2 6 8 .
686 - Martín, I 3 I 9 . 6SI
682 Según el primer abadolodio inició su mandato en I 2 2 I y según el (Col. Salazar y Castro, M-6I, fols.I29v-I30r).
segundo (fol.80r-n.I32), fue cantor en tiempos de Juan de la Espina y 6 8 7MAÑUECO y ZURITA, I920: II, 379 recogen una escritura de 27 de
prior en los de Arnaldo. Está documentado el I 3 de enero de I222, en enero de I273 por la que el abad Pablo de la Espina vende unas casas al
una concordia sobre términos con Tordehumos y Tordesillas y el 6 de abad de Valladolid; el cillerero se llamaba Juan. En una sentencia y par-
marzo de I223 en la donación de Berceo por Fernando III (fol.205v- tición de términos entre el monasterio de Sandoval y el concejo de Man-
n.394). Entre I 2 2 0 y I 2 2 3 Fernando III le donará Casa Grillera silla de las Mulas aparece mencionado fray Pablo, abad que fue de la Espina
(fol.I66r-n.2I9). En torno a I230, el abad de La Espina, Pedro Pardo, (HERRERO JIMÉNEZ, 2003: doc. 96, I78).
recibía de manos de María Núñez la donación que hacía de ciertas tie- 6 8 8En el abadologio de YEPES ( I 6 0 9 - I 6 2 I : 35I) y en los dos que
rras y heredades a la Orden del Cister (una regesta del documento en nos ofrece el Tumbo aparece este abad. El cronista de la o r d e n bene-
RODRÍGUEZ, I949: 8 y 88).YEPES dice que gobernó en I220 (I609- dictina declara que su abadiato finalizó en I279. Por su parte, en el pri-
I 6 2 I : 35I). mer abadologio del Tumbo se dice que toma posesión del cargo en I27I;
683 Ninguno de los abadologios conservados incluye el nombre de este en el segundo que hay escrituras de I 2 7 5 : y este año se comenfo la edifficacion
abad. Sin embargo, en un libro manuscrito que en su día perteneció a la desta yglesia que al presente es por Don Martin Alfonso. Sin embargo, su n o m b r e
Espina y que se conserva en San Isidro de Dueñas, se localiza una copia aparece tachado y sobre él aparece escrito el de Fray Fernando (fol.80v-
de un instrumento de Fernando III dirigido al abad Martín en 20 de n.I33). Por otro lado, en el testamento de Martín Alfonso (I285), no
febrero de I233, confirmándole todas sus posesiones, el cual sería rati- se cita el nombre del abad, pero sí el del prior, Pedro de Valdenebro. Lo
ficado por Alfonso X estando en Burgos el 25 de febrero de I255 cierto es que en I273 lo era Pablo y en el testamento de Martín Alfonso
(fols.33r-34r). También a él se dirige Fernando III en 26 de marzo de se hace también referencia a dicho abad como aquel que participó acti-
I235 para confirmarle todas sus posesiones (inserto igualmente en con- vamente en la construcción de las obras del templo (vid. nota anterior),
firmación de Alfonso X de 25 de febrero de I255 (BN, mss. 700, por lo que la autenticidad de la existencia del abad Abril debe ponerse
fols.286r-289r, en concreto, fols.286r-287v). También aparece mencio- al menos en entredicho.
nado en la sentencia de un pleito que tuvo el monasterio de Sandoval con 689 Tanto en el abadologio de YEPES ( I 6 0 9 - I 6 2 I : 35I) como en el
unos particulares (HERRERO JIMÉNEZ, 2003: doc. I89, 255-256). primero del Tumbo se cita a continuación del abad Abril a Fernando I, que
6 8 4 El redactor del primer abadologio marca el inicio de su prelatura comenzaría según éstos últimos en I279, ya que aquél lo sitúa, tal vez
en I232. Según el segundo abadologio (fol.80v-n.I33), aparece docu- debido a un "baile de cifras", diez años más tarde; en el segundo aba-
mentado en I233 (en un privilegio de Fernando III y en unas bulas de dologio del Tumbo, ambos nombres aparecen tachados intercambiándose
Eugenio IX), aunque como hemos visto, en esa fecha loera Martín (vid. su orden. Según este último, sacó un traslado en Tordehumos de un pri-
nota anterior). También se le menciona, continúa este último abadolo- vilegio de Sancho IV en I290, que en I299 hizo foro a Teresa Gil de
gio, en I 2 3 6 (dos bulas de Gregorio IX); I 2 3 7 (el 26 de mayo, Fer- Eslua; y cerca del año de I300, en tiempo deste Abad fue robado este
nando III confirma una avenencia con el concejo de Urueña sobre monasterio (fol.80v-n.I33). Sin embargo, aparece documentado el I6 de
términos; fol.I98-n.380 y 38I); y I255 (una confirmación de Alfonso marzo de I 2 8 7 cuando junto al resto de testamentarios de Martín
X, no indica cuál). Además, el I 8 de octubre de I239 Fernando III Alfonso, hace entrega a la abadesa de Gradefes lo que éste les había
aprueba una concordia con San Cebrián de Mazote (fol.56v-57r — n.80 legado (BURÓN CASTRO, I998: 606-607, doc. 533); por éste docu-
a 82). MANRIQUE (I642-I659: IV 465), sitúa a Melior en I233 y dice mento sabemos entonces que ya debía ejercer tal cargo en I285 cuando
que el año anterior había sustituido al abad Pedro. Por su parte YEPES es nombrado como uno de los ejecutores de las últimas voluntades del
señala que Melior fue elegido abad en I233 y que ocupó el cargo hasta de Meneses.
I253 ( I 6 0 9 - I 6 2 I : 35I). 6 9 0Según el primer abadologio, comenzó su prelatura en I 2 9 4 (?);
685 En el primer abadologio se escribe que su abadiato se inició en para el segundo (fol.80v-n.I33), murio en I3I6, habiendo una escri-
I263, y según el segundo abadologio hay escrituras de él hasta I 2 6 7 tura suya de I 3 0 2 (bajo esta fecha aparece tachada la de I297). En I 3 I 4
(fol.80v-n.I33). En ésta última fecha, el 25 de febrero, se documenta se documenta en la confirmación de Alfonso XI del privilegio de los
una concordia con Tordesillas en la que está presentes además del abad, cien vasallos (B.N., mss.700, fols.284-285), colocándolo YEPES entre
el prior García Pérez, el soprior Diego y Domingo Pérez, el cillerero I 3 0 I y I 3 I 6 ( I 6 0 9 - I 6 2 I : 35I).
(fol.I08v-I09v-n.206 a 208). YEPES afirma que su abadiato se des- 69i: El primer abadologio inicia su mandato en I 3 I 8 , y según el
arrolló entre I 2 5 7 y I 2 7 I ( I 6 0 9 - I 6 2 I : 35I). segundo (fol.8Ir-n.I34), recibió en I 3 I 9 la donación de Casasola y
686 Aparece confirmando una donación que hicieron Berenguela Gon- Molillas (tb. fol.52v-53r — n.73 y 74). YEPES comenta cómo dirigió el
zález y sus hijos al monasterio de Palazuelos en 24 de abril de dicho año monasterio entre I 3 I 6 y I 3 2 4
FUNDACIONES MASCULINAS
• 185 •
• Pedro III, I326, I332, I335, I346, I35I, I352 . 692 - Toribio, I 4 2 0 . 695
692 En los dos abadologios del Tumbo se introduce entre los gobiernos rior. En el segundo se dice que entro por abad año de 1413. Año de 1420 hizo
de Martín y Pedro III un abad más, Fernando II, que sería elegido en I324 una escriptura de prorrogacion de una vida de la granja del Andrinal y murio este dicho
y moriría en I336, aunque en el segundo abadologio (fol.8Ir-n.I34) su año de 1420 (fol.8Iv-n.I35). Además, en el fol.49v-n.66 dice que ay
nombre aparece tachado. De Pedro III, que comienza a gobernar en I336 memoria y escripturas suyas del año de 1420. E n cambio YEPES lo coloca entre
según el primer abadologio, hay escrituras según el segundo desde I326, I 4 I 0 y I420 ( I 6 0 9 - I 6 2 I : 35I).
I346 (¿apeo de Monreal?), I35I (donación de heredades en Benafarces 696 Según el segundo abadologio (fol.8Iv-n.I35), fue el decimo septimo y
por Rui Álvarez Osorio y su familia), y I352 (sentencia sobre los diezmos penultimo de los Abbades perpetuos (...) fue Abbad sessenta y quatro años como consta
de Pesqueruela). En I332 Alfonso XI le confirma la exención de pago de de su dicho y escripturas. La primera escritura es de I423 (El 30 de julio de
mula, vaso o yantar (fol.93r-n.I80) y en I335 actua en el pleito que sos- este año actúa como reformador de la Orden dando su consentimiento
tenía Moreruela con San Clodio de León (PÉREZ EMBID, I986: 45). a un trueque realizado por el monasterio de Las Huelgas de Valladolid)
693 En el segundo abadologio aparece en vez de "Fernando 2", "Fer- y la última de I 4 8 4 (por su mandato un monje fue a Urueña a tomar
nando Garcia 3". Éste mismo apunta: dize una memoria antigua quefue Abbad posesión de los bienes que pertenecían al monasterio por su legítima).
26 años, ay escripturas suyas desde el año de 1369 hasta el de 1383 en la qual saco El 9 de abril de I 4 3 I aparece como testigo en un testimonio de apela-
executoria y privillegio del Rei Don Juan el I sobre la martiniega de Villagarcia (fol.8Ir- ción del monasterio de Sandoval (HERRERO JIMÉNEZ, 2003: doc. 280,
n.I34). Por su parte YEPES ( I 6 0 9 - I 6 2 I : 35I) enmarca su abadiato entre 3I0). En I436 fue visitador de los monasterios cistercienses de Casti-
I358 y I383, a continuación de Pedro III y antes de Martín II. lla junto con D. Remon, abad de Herrera y Martín, abad de Palazuelos,
En el segundo abadologio se escribe: La primera escriptura que del se
6 9 4 comisionados por fray Juan, abad de Císter y por el Capítulo General de
halla es del año de 1394 y el de 1397 troco unas tierrras de ^amora por otras en I433. Hacia I435-6 actúa como testamentario de Fernán Gutiérrez de
Urueña, y ay diversas escripturas hasta el año de 1409 en que saco el traslado de la con- Vega. El 22 de mayo de I439 vende al monasterio de Matallana unas tie-
cordia y union que hizieron entre si los curas de Grajal, uniendo cinco parrochias en una rras, y aparecen confirmando: Juan, prior; Pedro de León, soprior; Juan
(fol.8Ir-n.I34). El I 0 de abril de I 3 9 6 aparece como testigo en un de Villalba, sacristán; Rodrigo de Carrión, cillerero; Rodrigo de Grajal,
documento de Sandoval (HERRERO JIMÉNEZ, 2003: doc. I89). En I40I cantor; Rodrigo de San Salvador, Fernando de Tordehumos, Rodrigo de
le confirma Enrique III privilegios anteriores, llamándole su capellán San Cebrián y Diego de Tiedra, monjes. Aparece también documentado
(fol.94r-n.I82), y da licencia al monasterio de Las Huelgas de Vallado- en I460, I46I, I 4 6 4 y I468 (CASTROTOLEDO, I98I: 395, 397, 422
lid para restituir una deuda a Diego López de Zúñiga (Archivo del y 473, respectivamente), I465 (nombramiento de abadesa de San
Monasterio de Las Huelgas de Valladolid, arca I, doc. 57). YEPES lo Miguel de las Dueñas). Vid. más datos sobre su labor como reformador
sitúa entre I385 y I 4 I 0 ( I 6 0 9 - I 6 2 I : 35I). en el apartado histórico. Según YEPES inicia su gobierno en I420 y lo
695 En el primer abadologio del Tumbo aparece escrito en letra poste- mantuvo durante más de sesenta y tres años ( I 6 0 9 - I 6 2 I : 352).
• 189 •
Armengol fundaba en Valbuena un monasterio y donaba a de arras en 1119, tuvo con él al menos cuatro hijos, Urraca,
su abad Martín la villa del mismo nombre y la de M o m - Martín, Sancha y Fernando, y una vez viuda contrajo nuevo
biedro, siendo confirmado todo ello por Alfonso V I I . 697 matrimonio con Rodrigo González de Lara en 113 5 . 700
A.H.N., Clero, carpeta 3440, doc. 1, doc. 2-n.1 y doc. 3-n.1 (corres-
697 CUA ECHEGARAY, 1 9 8 9 : 4 4 1 ; CASTÁN LANASPA, 1 9 9 5 : 87; MARTÍNEZ
ponden a los que denomina SUÁREZ GONZÁLEZ, 2007: 412-418 y 426- TEJERA, 2002 (4): 645; TORRES SEVILLA, 2005: 334; idem, 2007: 107;
429, Valbuena A y Valbuena C, respectivamente) ; y Códices 1484-B, CAVERO DOMÍNGUEZ, 2007: 25; FORTÚN, 2007: 35) la confunden con
n.11,12 y 28; B.R.A.H. Col. Salazar y Castro, B-10 fol.22, F-40 fols.93- doña Estefanía Ramírez, mujer de Poncio de Minerva y fundadora de los
9 5 y 0 - 7 fols.85-86 y 8 9 - 9 0 ; B.N., Mss. 887, Misceláneas históricas y polí- monasterios también cistercienses de Carrizo, Sandoval y Benavides,
ticas, fol.437. Publican el documento MANRIQUE, 1642-1659: II, siendo el hecho de que ambas condesas contribuyeran a la erección de
1 9 6 - 1 9 7 ; SUÁREZ DE ALARCON, 1 6 5 6 : 127; SALAZARY CASTRO, 1 6 9 4 : cenobios vinculados al mismo instituto religioso la posible causa de
6 5 6 ; LÓPEZ AGURLETA, 1731: Apéndice, 31, doc. 48; CANAL SÁNCHEZ- semejante error (ALONSO MELCÓN, 1 9 9 6 : 9 2 4 n o t a 1 7 y 9 2 7 ; CALDE-
PAGIN, 1984: 66-68. Este último autor considera que la confirmación RÓN MEDINA, 2008: 27-28).
del emperador que aparece al final del documento fue escrita con pos- 6 9 9 Así consta en el d o c u m e n t o fundacional: Hoc facere disposui propter
terioridad al momento de la fundación basándose en la presencia de dos salutem et pecatorum remissionem gbriosi imperatoris Hispanie, domimi mei Aldefonsi,
scriptores, Juan, canónigo de Valladolid y autor según él de la primera escri- et pie recordationis domine mee Urrace regine, matris eius, qui sua benigna uoluntate, cum
tura y Giraldo, scriptor imperatoris, escriba de la confirmación (Ibid. 66). essem mulier aliene terre, multa bona mihi fecerit, et de supradicta villa et multis aliis
P o r el contrario, RECUERO ASTRAY, 1 9 7 9 : 2 2 0 y ÁLVAREZ PALENZUELA hereditatibus, sua clementia, me hereditaverit.
y RECUERO ASTRAY, 1984: 436, piensan que la asistencia del monarca Sobre doña Estefanía y su familia puede consultarse SALAZAR Y
7 0 0
al acto fundacional viene avalada por la aparición como confirmantes CASTRO, 1696: III, 254-257; idem, 1659: 654-657; FLORANES, 1789;
de un importante número de prelados y otros personajes del séquito real, GONZÁLEZ GARCÍA-VALLADOLID, 1 9 0 0 : II, 7 - 1 1 ; MAÑUECO VILLA-
muchos de los cuales, quince días antes, acompañaban en Palencia al LOBOS y ZURITA NIETO, 1 9 1 7 : 1 2 5 - 1 5 9 y 1 6 4 - 1 7 7 ; GONZÁLEZ,
emperador con motivo de una donación al obispo y cabildo leoneses. 1984: 181; idem, 1960, I, 260-262 y 338-340; CANAL SÁNCHEZ-
Algunos autores (entre otros, SANDOVAL, 1600: 104; YEPES, 1609-
698 PAGÍN, 1984: especialmente 36-41, e idem, 1989: 120-127; SALAZAR
1 6 2 1 : III, 3 5 0 ; CORREDERA GUTIÉRREZ, 1 9 6 3 : 5 4 ; idem, 1 9 7 3 : 72; ACHA, 1991; TORRES SEVILLA, 1998: 78-94; VIADAS, 2002: 63-65;
PÉREZ-EMBID WAMBA, 1 9 8 6 : 47, 54, 2 7 1 y 2 7 7 ; idem, 1 9 9 1 : 94; PAS- y un largo etc.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
90
Frente a la casi totalidad de los autores que recono- la sitúan en I I 4 4 y I I 6 4 respectivamente. Sin
7 0 6 7 0 7
cen a doña Estefanía como la fundadora de Valbuena , 70I embargo, el documento fundacional plantea una serie de
una tradición antigua del propio cenobio hace de Alfonso problemas de contenido que han motivado que algunos
VII el fundador , opinión mantenida posteriormente por
702 investigadores pongan en duda que estemos ante un monas-
Yepes y otros estudiosos pero que no tiene fundamento
703 terio integrado en la Orden del Císter:
documental alguno. I. La condesa Estefanía procede a fundar un monas-
La historiografía tradicional ha venido considerando terio de la Orden de San Benito, sin hacer referen-
que Valbuena fue desde el momento de su fundación cia alguna a los usos cistercienses . N o obstante, 708
7QIAlgún autor apunta la posibilidad de que fuera su hermano Armen- 257; Rafael de FLORANES ( I 7 8 9 ) en su "Origen y descendencia del
gol VI el que influyó en su decisión de fundarlo (CORREDERA GUTIÉ- Conde D. Pedro Ansúrez, sus memorias e ilustres acciones", en Diserta-
RREZ, I973: 90; idem, I963: 6I-62; DALMASES y PlTARCH, I985: ciones preliminares a la Historia de Valladolid BN, Mss. I I 2 8 I , fols.53r-7Iv, en
59-60). concreto, fol.60v; JANAUSCHECK, I877: 7I; COTTTNEAU, I935-I939:
La primera mención en que se atribuye a este monarca la fundación
7 0 2 II, col.327I; ANTON, I942: I0; DIMIER en varias ocasiones (por ejem-
de Valbuena está recogida en el inventario de todas las posesiones que plo en I949: I, I7I); TIJBURG, I953: I 8 0 - I 8 I ; idem, I96:, 83; TORRES
tenía el monasterio mandado hacer por fray Martín de Vargas el 8 de BALBÁS, I924: I 2 I ; COCHERIL, I963: 950; idem, I964: 234, 235 y
junio de I 4 3 9 : Iten tiene en el valle de Xaramiel la villa de xaramiel que dio el 285; MORAL, I973: I690; GONZÁLEZ, I960: I, 5 I 2 y 5 9 I ; VALDI-
enperador don afonso quefundo esta casa... ( A . H . N . Clero, legajo 7.659, Inven- VIESO, I975:VIII, 299; ÁLVAREZPALENZUELA, I978: I40, I 4 I y I43;
tario, fol.2r —así le llamaremos a partir de este momento—, y libro I6.6I2, MARTÍNEZ, I 9 7 8 : 2 4 7 ; RECUERO ASTRAY, I 9 7 9 : 2 2 0 ; JIMÉNEZ
fol.2r —citado como Inventario II-, publicado este último por ORTEGA LOZANO, I980: I3; ORTEGA GONZÁLEZ, I983: I9-2I; CANAL SÁN-
GONZÁLEZ, I983: I 5 I - I 7 8 , especialmente I52). También se hacen eco CHEZ-PAGÍN, I984: 37 y 38-39; idem, I989: I 2 2 y I27; LINAGE
de esta noticia, por ejemplo, unas notas recogidas en la B.R.A.H., Col. CONDE, I984: 270; ARA GIL, I986: I3-I4; idem, 2002: 62; PÉREZ-
Salazar, O-7, fols.85-86, que llevan por sugestivo título el de Privilegios y EMBID WAMBA, I 9 8 6 : 2 7 I y 2 7 5 ; MASOLIVER, I 9 8 7 : 5 2 I ; VELASCO
escrituras antiguas de la casa y monasterio de Santa Maria de Valbuena. Fundación del MARTÍNEZ, I995: I7; GARCÍA GUINEA, 200I: 20; HERBOSA, 2003: 46;
Emperador Don Alonso, copiadas por Juan Ruiz de Ulibarri en I594; Fr. MARTÍNEZ SOPEÑA, 2003: 42; FORTÚN, 2007: 3I y 34; etc...
Luis de E S T R A D A en su Exordio y Progresos de nuestra Regular observancia en La fiabilidad de estas Tablas ha sido puesta en duda especialmente
7 0 5
los Reynos de Castilla y Leon, A . H . N . Clero, libro I 6 6 2 I , f o l s . I I r y 2 9 r (le por COCHERIL, I 9 6 4 (2): fundamentalmente I73-I78.
citaremos c o m o Exordio y Progresos); y Fr. Bernardo SUÁREZ en Exordio de Así lo transmiten YEPES, I 6 0 9 - I 6 2 I : III, 38I, quien afirma que
7 0 6
la Observancia de la Religion de Nuestro Padre San Bernardo, A . H . N . Clero, legajo "Fué su primera fundación en la era de I I 8 I , a I5 de febrero, que es el
7.658, cap. 3, n.5 (de aquí en adelante le llamaremos Exordio de la Obser- año de Cristo I I 4 3 ; pero hele puesto en este año de I I 4 4 porque así se
vancia). halla en el archivo de las casas del Císter en Francia", y MANRIQUE,
Por otra parte, entre los papeles conservados en el legajo 7.666 de la I642-I659: I, 466, si bien más adelante declara: "Quod de Salceda, de
sección Clero del A.H.N. se conserva un cuadernillo incompleto, de sólo Horta, de Vallebona, ex ipsius fundationonum instrumentis, non obs-
dos folios, en los que un monje anónimo de Valbuena (siglo XVIII) escribe curis indiciis demonstrabimus. Interim tamen ab eis supersedentes, ne
acerca de la fundación del cenobio. En ellos, el autor escribe: he visto algu- eadem inutiliter repetamus" (Ibid. 467). También aparece recogida esta
nos tratados en orden a sus principios, y fundacion, que algunos hijos del han hecho, y cronología en un catálogo cronológico de fundaciones perteneciente al
ninguno conviene con el otro, por que unos dizen que su fundacion es desde el año de monasterio de Veruela y que data del siglo XV (TORNÉ CUBELLS, I996
1177y otros del año 1132, unos dizen es hija de Berdones, Monasterio fundado en la (2): 853).
Gascuña en el Reyno defrancia de la linea de Morimundo, y otros lo niegan. En lo que La asumen sin más, JONGELIN, I640: VI, 6; Monumentos españoles,
convienen es que esfundacion del Emperador don Alonso el 7°; y, más tarde, concluye I984-I987: II, I932; TORRES BALBÁS, I952: 35; GÓMEZ GONZÁLEZ,
que ...se han de suponer los puntos siguientes. El primero es que la primera noticia que I956: 887; VlELVA, I976: 647; SAINZTERREROS, I979: 326 (lo fecha
ay deste monasterio es desde el año de 1143 sacada del testamento de la Illustrisima el I5 de febrero de II44); ALONSO et alii, I965: I3, si bien unas pági-
Señora Condesa doña Estephania, hija del Conde de urgel Armengol, y que todos los nas más adelante, en la I9, aceptan la fecha de I I 4 3 ; MARTÍNEZ TOMÉ,
Privilegios del Emperador que concedio a esta Casa son posteriores a dicha Escriptura.= I99I: 6I; HERRERO MARCOS, I997: I62; entre otros.
El segundo es que la sobredicha Señora primaria fundadora del y el Señor Emperador Este año también figura en la lista de monasterios que guarda el Tumbo
segundario. = El tercero es que es hija del monasterio de Berdones. de Herrera (GONZÁLEZ, I960: 5I2).
703 Argumenta esta noticia basándose en que "a quien los religiosos Así consta en la lista de monasterios que aparece en el Tumbo de
7 0 7
de Valbuena reconocen por fundador fué D. Alonso Ramón, que es lo Valparaíso, fol.I2v ofrecida por YÁÑEZ ÑEIRA, I957: I65; él mismo
mismo que D. Alonso VII, emperador, gran acrecentador y bienhechor declara que tal lista "está completamente equivocada en bastantes de
de toda la o r d e n cisterciense y en unos documentos de Juan I en los que ellos" (Ibid., I65, nota I0). Esta fecha es, sin embargo, la de fundación
se califica de señor e patrón del dicho monasterio, el cual fué fundado, del monasterio de Bonaval, filiación de Valbuena. ÁLVAREZ PALENZUELA,
edificado e dotado por los reyes" (YEPES, I 6 0 9 - I 6 2 I : III, 382 y 383). I978: 86 y ORTEGA GONZÁLEZ, I983: I9-20 recogen la noticia que da
Le siguen JONGELIN, I 6 4 0 : VI, 6, y FlNESTRES Y DE MONTALVO, I 7 5 3 - MANRIQUE (I642-I659: II, 406) acerca de la habitual confusión que
I765: I, 30). había entre la casa-madre (Vallis Bona) y la hija (Bona Vallis), error
Aceptan esta fecha como la de arranque del monasterio bajo el ins-
7 0 4 sufrido por el Tumbo del monasterio zamorano.
tituto cisterciense: MANRIQUE, I642-I659: II, I96-I97; YEPES, I959: ...mea spontanea voluntate Spiritu divino sugerente optavi animofieri operefacere
7 0 8
III, 38I; ARGAIZ, I675: I, 349r; SALAZARY CASTRO, I696: III, 256- proposui monasterium de ordine sancti benecicti in Valle Bona...
FUNDACIONES MASCULINAS • 20I
adhesión a la Orden si no se menciona ésta expre- 3. La condesa se reserva cierto patronazgo mientras
samente 709 . viva y, después de su muerte, para sus herederos .
7I7 7I8
2. El nuevo monasterio se dedica a Dios, a la Virgen, a u n a de las principales preocupaciones de los cister-
los santos confesores Martín y Silvestre y a todos cienses era que los lugares sobre los que iban a asen-
los santos . El empleo de este múltiple título frente
7I0 tar sus monasterios fuesen entregados por el donante
a la declaración expresa de la legislación cisterciense renunciando a todo derecho sobre aquéllos, con el
de que todos sus cenobios estuviesen dedicados a la fin de evitar cualquier intento de intervención por
Virgen María , hizo desconfiar a algún especialista
7II su parte o por sus descendientes en los asuntos de la
sobre la vinculación en este momento de Valbuena a abadía * . La presencia de esta cláusula, heredera
7 9
abadías pertenecientes a la Orden que presentan 4. El monasterio se coloca bajo la jurisdicción del
varios títulos u otro diferente . De ahí que este
7I4 7I5 obispo Pedro de Palencia . Es este, sin duda, el pro-
722
argumento, visto como el anterior de forma aislada, blema que más atención ha suscitado entre los estu-
tampoco es válido para esgrimir una opinión al res- diosos, ya que según Manrique hasta I I 5 I no se
pecto, sino que hay considerarlo junto con otros liberará el monasterio de esta sujeción al obispo dio-
datos más contundentes . 7I6 cesano . Esta situación iba claramente en contra de
723
que se indicara que era complicado hablar en este los monjes, con el abad Martín a la cabeza, observaban la
momento de Valbuena como monasterio cister- Regla de San Benito . 735
ciense .728
terios cistercienses de los reinos de Castilla y León tuvieron continuos fol.I4; Códices, I484-B, n.I3 y I4; B.R.A.H., Col. Salazar, 0-7, fol.9I,
altercados con los prelados diocesanos, especialmente en lo que al pago de con fecha de II37.
diezmo se refiere, llegando a suscribir con aquellos acuerdos de avenencia Así se deduce por el hecho de que la villa donada estaba desierta, sin
7 3 7
como sucedió, por ejemplo, en los casos de Monsalud (DÍAZ IBÁÑEZ, villanos (ÁLVAREZ PALENZUELA y RECUERO ASTRAY, I 9 8 4 : 4 4 6 ) . Res-
I995: 379 y ss; CHACÓN GÓMEZ-MONEDERO, I995: 3 I 3 - 3 I 4 y 3I7- pecto al título del monasterio y la regla que siguen, véase más arriba el
320) y Óvila (MILLARES CARLÓ, I933: 22-23; LAYNA SERRANO, I998: análisis del contenido de la carta de fundación.
FUNDACIONES MASCULINAS
• 20I
en el que consta claramente la adscripción a la Orden es una entre 1148 y el 19 de diciembre de 1153. Concretar una
confirmación hecha por Alfonso VII de la donación de las data segura y precisa cuando carecemos de documentos
villas de Valbuena y Mombiedro, sin fecha : el monasterio 738 esclarecedores es harto complicado. Ante la falta de argu-
vive sub regula sancti benedicti secundum instituta cisterciensium. Las mentos que puedan oponerse a ello, habrá que concluir que
investigaciones llevadas a cabo por Álvarez Palenzuela y la incorporación a la Orden se llevaría a cabo ca.1151 , 743
Recuero Astray lo sitúan entre finales de 1153, posiblemente fecha en la que, como hemos visto, se desliga de la obe-
después de la delimitación del coto hecha en diciembre de ese diencia al obispo de Palencia y recibe un contingente de
mismo año por el emperador , y principios del siguiente .
739 740 monjes enviados por el monasterio de Berdoues, en la línea
Ahora bien, el que el abad Ebrardo, a quien los antiguos libros de Morimond, con Ebrardo a la cabeza . 744
bre de 1153, hace pensar que en ese momento el monasterio guo que lo confirma es un privilegio de Alfonso VIII por el
ya estaba incorporado a la Orden del Císter. cual entrega al abad Arnaldo de Berdoues la corrección y visi-
De este modo la afiliación -ya que no se trata de una tación de los monasterios de Valbuena y Huerta, con fecha de
fundación en sentido estricto- , se habría llevado a cabo
742 2 2 de febrero de 1166 . Los restantes documentos que
746
A.H.N. Clero, carpeta 3.440, doc. 2-n.3, doc. 3-n.3 y doc. 6; Códi-
738 rencia debe ser, sin duda, la confirmación de un acto realizado con ante-
ces 1484-B, n.13 y 14. Publicado parcialmente por MANRIQUE, 1642- rioridad del que no ha llegado a nosotros testimonio documental y que con
1659: II, 197. Esta carta ha sido erróneamente fechada en 1143 por toda seguridad sería la auténtica donación a la Orden, ya que tanto Val-
ANTON, 1 9 4 2 - 1 6 5 9 : 10; ORTEGAGONZÁLEZ, 1983: 21; ARAGIL, 1986: buena como Huerta eran desde hace tiempo -ambos, curiosamente, desde
13-14; y VVA.A, 1995: 960. El yerro tiene su origen en Manrique, ya 1151-monasterios integrados en la Orden (en enero de este año, Alfonso
que sostiene que el emperador suscribió ese documento poco después de VII había concedido al monasterio de Cántavos la villa del mismo nom-
la donación de la condesa y lo transcribió a continuación (vid. nota 723). bre ut faciatis ibi Ordinem de Cistels; véase sobre el particular, VALLE PÉREZ,
Vid nota 756.
739 1991: 159, nota 93; transcribe el documento GARCÍA LUJÁN, 1981: 3-4).
1984: 448.
7 4 0
N o obstante, en la relación de privilegios concedidos por los reyes al
B.R.A.H. Col. Salazar, 0 - 7 fol.111v y 0 - 1 8 fol.243r. Aparece, sin
741 monasterio de Huerta que se conserva en uno de sus tumbos (Archivo del
embargo, n o m b r a d o c o m o segundo Abad deste Monasterio, en el Libro de Privile- monasterio de Santa María de Huerta, Tumbo, fols.213v-214r) no se hace
gios, fol.5r. mención a este privilegio, como tampoco se alude a la procedencia de los
Sobre las diferencias existentes entre ambas modalidades de incor-
742 monjes al hablar de la fundación de Cántavos (fol.111r) o del traslado a
poración a la Orden, véase VALLE PÉREZ, 1982: I, 16. Huerta (fol.213r); por su parte, la Memoria cronológica de Fray Constantino
FINESTRES Y DE MONTALVO, 1 7 5 3 - 1 7 6 5 : I, 30; MENDOZA, 1753:
7 4 3 Cordón señala a Berdoues como casa madre de Huerta (fol.40; pub. en
112; ÁLVAREZ PALENZUELA y RECUERO ASTRAY, 1 9 8 4 : 4 4 7 n o t a 64; regesta por AGUILERA Y GAMBOA, 1908: 283), pero nada dice del instru-
VALLEPÉREZ, 1991: 145; ARAGIL, 1998: 2 2 8 ; OLIVERAARRANZ, 2 0 0 2 mento de 1166.
(2): 4 0 7 ; HERNANDO GARRIDO, 2 0 0 3 : 2 0 4 ; VICENTE PRADAS y MAR- Creo que es incuestionable la autenticidad del documento. Si lo compa-
TÍN LOZANO, 2006: 4; entre otros. Por su parte ALONSO ÁLVAREZ, 2007: ramos con otro expedido el mismo día, la confirmación por parte del
656, 674 y 704, opta por 1153 como fecha de afiliación. monarca del monasterio de Valbení al de Valbuena (vid. la monografía
744MANRIQUE, 1642-1659: II, 197, y los autores que le siguen. Por su de Palazuelos), y del que hasta el momento no se ha puesto en duda su
parte, TÍJBURG, equivocadamente, la hace hija de Clairvaux (1964: 84). legitimidad, veremos que coinciden tanto fórmulas diplomáticas como
Recientemente se ha publicado una "versión" sorprendente de la afilia- confirmantes (únicamente se omite el scriptor, lo que junto a la ausen-
ción de Valbuena a la orden del Císter: en 1143 Estefanía Armengol funda cia del obispo de Calahorra y de otros dos testigos (Gómez González y
un monasterio "en el «valle bueno». En el lugar de San Román, al oeste Martín Fernández), puede deberse simplemente a un despiste del copista
del poblado de Valbuena de Duero existía un priorato de monjes clunia- moderno). Y en cuanto al abad Arnaldo, a quien se dirige la donación,
censes, dependiente de San Pedro de Cardeña (Burgos). En 1152 un grupo es preciso comentar que, en efecto, Arnaldo de Saint-Justin ostenta el
de estos monjes con los nuevos de la casa madre francesa de Morimundo, cargo de abad de Berdoues entre 1153 y 1186 (ABBÉ CAZAURAN, 1905:
se ubican en el lugar que hoy ocupa el cenobio de Santa María de Val- 78°-100°). Un último punto que debemos hacer notar es que este docu-
buena. Se pasa de monjes negros procedentes de San Pedro de Cardeña a mento originó la creencia por parte de algunos monjes del monasterio
monjes blancos dependientes de la casa francesa..." (VELASCO MARTÍNEZ, de que Valbuena era una fundación real de Alfonso VIII (sobre la pre-
2009: 68). El autor no cita la fuente de donde toma esta noticia, y por tensión de que fuese su abuelo el fundador, vid. nota 702). Así por ejem-
nuestra parte no hemos localizado en la documentación de Valbuena nin- plo, Martín de Vargas escribió en un memorial de advertencias que
gún documento que pueda dar luz sobre la misma. Lo único que tenemos entregó a sus monjes para que, en su ausencia, se defendiesen ante los
cierto es que la granja de San Román, sita en el término de Valbuena, era abades de Cíteaux, Morimond y Berdoues, lo siguiente: Yten mas; que si
desde el siglo XV, propiedad de los monjes jerónimos de La Armedilla. escritos quisieren mostrar fallaran por ellos que el rey don Alfonso en la fundación del
7 4 5 Lamentablemente el Cartulaire de Berdoues publicado en 1 9 0 5 p o r el Monasterio puso una condicion, conviene a saber, que el monasterio de Berdones oviesse
ABBE CAZAURAN no aporta ningún dato alusivo al tema. Ha llegado a nos- la paternidad, con tanto que en este Monasterio se guardasse la Observancia de la Orden
otros incompleto y las 825 cartas de que consta, comprendidas entre 1134 de Cistel insertando, al final de todo, el documento que presentamos
y 1258, aluden únicamente al dominio económico de la abadía, sus gran- (A.H.P.V. Sec. Histórica 242-20, fols.18r-23r, en concreto, fol.21v). En
jas y propiedades rurales. cambio, otro monje escribió una nota al margen en el Inventario mandado
N o se conserva el original, sino dos copias de los siglos XV y XVI
746 hacer por Martín de Vargas en la que afirmaba que Valbuena era funda-
(Libro de Privilegios, fol.22r; y A.H.P.V Sec. Histórica, 242-20, fols.23r-24v. ción de Alfonso VII, pero fue su nieto Alfonso VIII quien lo entregó a
Vid. Apéndice documental, doc. 2). El documento al que hacemos refe- Berdoues (fol.2r).
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
I94
hacen referencia a esa filiación son ya muy tardíos , espe- 747 tuviese lugar poco después de la llegada de los monjes cis-
cialmente del momento en que Valbuena se une a la Reforma tercienses. La búsqueda de la soledad y el aislamiento del
de la orden emprendida por Martín de Vargas (I430) . 748 mundo, uno de los objetivos esenciales de la Orden, había
o t r o aspecto importante al que debemos prestar motivado que sus cenobios se asentaran en lugares alejados de
atención y que ha pasado totalmente inadvertido a la his- toda aglomeración humana, ciudades, villas, etc , de ahí que,
752
toriografía es el del cambio de emplazamiento del monas- casi con toda seguridad, la tal vez excesiva cercanía del núcleo
terio. En efecto, en el privilegio concedido por Inocencio III monástico original a la villa de Valbuena determinó la nece-
en mayo de I I 9 9 aparece mencionada entre la lista de
7 4 9 sidad de un traslado a un sitio más apartado . 753
las propiedades que el pontífice confirma la domos que dici- Para concluir, podemos afirmar que en I I 4 3 Estefa-
tur sancti martini ubi prius fuit vestrum monasterium. D e a c u e r d o nía Armengol funda cerca de la villa de Valbuena un monas-
con este dato, el lugar donde se asienta en la actualidad el terio benedictino bajo la advocación de San M a r t í n que 754
monasterio no es el que ocupaba en un principio, sino que hacia I I 5 I es afiliado a la o r d e n Cisterciense a través del
éste se hallaba en la llamada "casa de San Martín", pró- monasterio de Berdoues (Francia) y poco después trasla-
xima según otros documentos a la villa de Valbuena . Así 750
dado al lugar donde se encuentra actualmente.
consta por un testimonio conservado del siglo XVI:
El monasterio de Valbuena estubo primero fundado junto al
lugar que llaman Valbuena dondesta agora una hermita de la Formación y consolidación económica
bocacion de San Martin hasta que despues fue trasladada al
lugar donde aora esta orilla del rio Duero media legua del
(siglos XII-XIII) 755
lugar de Valbuena y legua y media de Peñafiel en el valle que Durante la segunda mitad del siglo XII y todo lo largo del
aora se llama Valbuena . 75I XIII fueron numerosas e importantes las donaciones recibidas
¿Cuando y por qué se llevó a cabo el traslado a su actual por el monasterio de mano de los monarcas y de la nobleza.
emplazamiento? Tratar de dar una respuesta sólida a este inte- El primer documento real otorgado tras la incorpo-
rrogante es difícil ya que los documentos manejados no acla- ración a la reforma cisterciense es uno de Alfonso VII expe-
ran nada al respecto. Lo más probable es que el cambio dido en Medina del Campo el I9 de diciembre de I I 5 3 , 756
7 4 7La primera mención a Valbuena en los Statuta Capitulorum publica- mientos distintos. Sobre este particular, vid. lo que se comenta en la
dos por CANIVEZ, corresponde al año II93, apareciendo su nombre monografía de Palazuelos.
unido al de su casa-madre (I, año II93, def.53, I68). Hasta mediados Aunque no llegó a afirmar en ningún momento un posible traslado
7 5 4
del XV (IV: año I44I, def.54, 5II), únicamente se citan juntos en dos del monasterio, ANTÓN apuntó que "Tal vez esta primitiva iglesia de
ocasiones (I, año I208, def.48, 355; y año I209, def.9, 358). San Martín, fuera parte considerable en la dedicación que a este Santo
748 A.H.N. Clero, carpeta 3.442, doc. 2; legajo 7.666; libro 20.26I, y a San Silvestre hace del monasterio la Condesa Estefanía" (I942: 63-
fols.8v-9v y I9r; y A.H.P.V, Sec. Histórica, 242-20, fols.I8r-23r. 64 nota II). Al ocuparse de Montederramo, VALLE PÉREZ, I982: I,
749 Vid. nota 786. I90, comenta como tradicionalmente se había vinculado el traslado de
750 Por lo menos, en varios documentos como el privilegio de urbano emplazamiento del monasterio con el cambio de observancia y aunque
III de I I 8 7 (vid. más adelante nota 787) o uno de Alfonso VIII de mayo apunta que no se puede afirmar con seguridad, "Esta modificación de
de I I 8 9 (Vid. nota 766), aparece siempre asociada a ésta (villam vero que lugar, además, estaría en consonancia con los ideales perseguidos por la
vocatur Vallisbona, cum domo illa que vocatur Sanctus Martinus), y ya a m e d i a d o s Orden, dado que el nuevo solar, en el valle, se adecuaba mejor a sus anhe-
del XV aparece m e n c i o n a d a c o m o la iglesia de sant martin ferca de valbuena los y búsquedas".
(Inventario, fol.28v; GARCÍA FLORES, I 9 9 6 : 5 7 0 ) . El único estudio monográfico existente sobre el dominio del
7 5 5
751 B.R.A.H. Col. Salazar, O-7, fol.85r. monasterio de Valbuena es el de ORTEGA GONZÁLEZ, I983. Se puede
752 A este deseo se alude tanto en el Exordium Parvum (Cap. XV, I3: consultar también ÁLVAREZ PALENZUELA, I978: I 8 7 - I 9 5 y diversas
"Quia etiam beatum Benedictum non in civitatibus nec in castellis aut noticias en PÉREZ-EMBID WAMBA, I 9 8 6 .
in villis sed in locis a frequentia populi semotis coenobia construxisse Instituto Valencia de Don Juan, Madrid (en adelante, I.V.D.J.),
7 5 6
sancti viri illi sciebant, idem se aemulari promittebant"; WADDELL, I999: Manuscritos Medievales, A.2.8 (pub. por FLORIANO LLORENTE, I97I:
254 y 435; trad. castellana en HERRERA., I984-I995: VI, 7I), como en 465-466); A.H.N. Clero, carpeta 3.440, doc. 2-n.2 y doc. 3-n.2; y Libro
los Capitula (Cap. VIIII, 3: "In civitatibus, castellis, villis, nulla nostra de Privilegios, fol.5. Aunque aparece datado en Medina del Campo, a I9
construenda esse coenobia"; WADDELL, I999: I87 y 408; trad. castel- de diciembre de II43, es necesario retrasar esta carta hasta diez años
lana en HERRERA., I 9 8 4 - I 9 9 5 : V I , I 5 5 y I 5 7 ) , o los Instituta (Cap. I. después (Vid. las causas que motivan este cambio de data en B.R.A.H.,
"Quo in loco sint construenda coenobia. I. In civitatibus, castellis, villis, Col. Salazar, O - 7 , fol.90; FLORIANO LLORENTE, I 9 7 I : 4 6 5 ; RECUERO
nulla nostra construenda sunt coenobia, sed in locis a conversatione ASTRAY, I 9 7 9 : 2 3 5 ; y ÁLVAREZ PALENZUELA y RECUERO ASTRAY,
hominum semotis"; WADDELL, I999: 325 y 458). I984: 436-439).
753Otros muchos monasterios hispanos como Rioseco, Herrera, San
Prudencio, Rueda, Piedra, Fitero, etc.., tuvieron al menos dos emplaza-
FUNDACIONES MASCULINAS • 20I
por el cual delimita el coto del monasterio y confirma a su la Condesa y en mayo de I I 8 9 todas sus propiedades ;
765 766
abad Ebrardo las propiedades de Quintanilla y Torre del el I 0 de junio de I I 9 3 le permitirá cortar leña y pastar en
Rey . Este mismo monarca confirmaría poco después la
757 los montes de Cuellar ; y por último el 20 de enero de
767
donación de Valbuena y Mombiedro hecha por doña Este- I I 9 4 les confirma unas casas, viñas y otras heredades que
fanía Armengol , y en I 4 de agosto de I I 5 6 les vendería
758 habían sido donadas por un clérigo de Peñafiel . 768
junio del mismo año, con la protección real a todas sus del siglo XIII se limitarán a confirmar los privilegios otor-
posesiones 76I . gados por sus antecesores . 770
Pero será Alfonso VIII quién más contribuya al Fernando III le exime del pago de portazgo a todas las
engrandecimiento del patrimonio de Valbuena donándole compras y ventas que realizase y le concede protección real el
las heredades de Pedrosa y Ventosa el 29 de noviembre de 28 de noviembre de I 2 I 8 y lo vuelve a hacer el 20 de sep-
77I
pozo de sal en las salinas de Bonilla el 22 de enero de Villa Fruela, Villa Amando y Villa Ximeno . El resto de 773
A.H.N. Clero, carpeta 3.440 doc. 2-n.I0, doc. 3-n.8 y doc. I2;
7 6 6 por GONZÁLEZ, I983: II, doc. 247, 287-289; A.H.N. Clero, carpeta
Libro de Privilegios, fols.I7r-I9r; Códices I484-B, n.I5 y I6; B.R.A.H. 3.440 doc. 2-n.I8 y doc. 3-n.I5; Libro de Privilegios, fols.24r-25v;
Col. Salazar y Castro, 0-7, fols.92v-93r. Publ. por GONZÁLEZ, I960: II, B.R.A.H. Col. Salazar y Castro, 0 - 7 , fol.I03 y 0 - I 8 , fol.225v) y I9 de
doc. 529, 905-907. octubre de I232 (A.H.N. Clero, carpeta 3.440 doc. 2-n.27; Libro de Pri-
A.H.N. Clero, carpeta 3.440 doc. 2-n.I5; Libro de Privilegios,
7 6 7 vilegios, fols.28r-30v; Códices I484-B n.2I y 22; B.R.A.H. Col. Salazar
fols.I9v-2Ir y 78v-79r; Códices I484-B, n.20; B.R.A.H. Col. Salazar y Castro, 0 - 7 , fols.I00-I0I, con fecha de I233; pub. por GONZÁLEZ,
y Castro, 0 - 7 , fol.97v. Publ. por GONZÁLEZ, I960: III, 95-97. I983: III, doc. 503, I5-I6).
I.VD.J., Manuscritos medievales, A.3.II (Publ. por FLÓRIANO
7 6 8
las donaciones realizadas por Martín Gil, clérigo de Peña- privilegio de Inocencio III fechado el 5 de mayo de I I 9 9 7 8 6
fiel, que les dona unas casa y unas viñas ; por Gonzalo
779
repite con ligeras variantes lo estipulado en el de u r b a n o
III, mientras que el expedido el I9 de mayo del mismo año
Yáñez, señor de Aguilar, quien el I de octubre de I 2 7 0 y
hace especial hincapié en el asunto de los diezmos . Los 787
el I 5 de mayo de I 2 7 7 les entrega unas heredades junto a restantes documentos pontificios, cuatro de Gregorio I X 788
doña Justa, que le concede unas casas y un molino en Siete buena, sino al conjunto de la Orden.
Molinos el 8 de octubre de I 2 9 0 . El resto de propieda-
7 M
para volver a encontrar otro privilegio papal. En esta oca- firmaba este privilegio porque sope que los monjes deste monesterio
sión Urbano III vuelve a colocar al monasterio bajo su pro- que era agora pocos e muy pobres y lo mismo hacía Pedro I en
791
tección, les obliga a mantener y guardar la regla e instituto las Cortes de Valladolid de I 3 5 I . A esto hay que añadir
792
cisterciense, confirma todas sus propiedades, la exención de la ausencia casi total de donaciones a lo largo de este siglo.
775 El 30 de junio de I232 adjudicó la propiedad de Villa Froliella 779 Vid. nota 782.
que se disputaban el monasterio y una familia al primero (A.H.N. Clero, A.H.N. Clero, carpeta 3.440 doc. 25; B.R.A.H. Col. Salazar y Cas-
7 8 0
carpeta 3.440 doc. 2-n.I6; Libro de Privilegios, fols.26r-27v; pub. por GON- tro, 0-7, fol.I05 y 0 - I 8 , fols.230-23I (pub. por FERNÁNDEZ GON-
ZÁLEZ, I983: II, doc. 466, 536-538) y el 8 de febrero de I25I ordena ZÁLEZ, I965-67: I I 7 - I I 8 ) y A.H.N., Clero carpeta 3.44I doc. 5.
que se falle el pleito que había entre el monasterio y el concejo de Vello- ™ A.H.N. Clero, carpeta 3.44I doc. I0.
sillo (A.H.N. Clero, carpeta 3.440 doc. 22; B.R.A.H. Col. Salazar y Cas- Granjas de Valbonilla, Nueva, Talamanquilla, Malacuera; la aldea de
7 8 2
tro, 0-7, fol.I09). Villanueva de Nogayche en el Aljarafe sevillano; casas en Atienza, Aillón,
776 26 de marzo de I254 (I.VD.J., Manuscritos medievales, A.5.I0; Peñafiel, Valladolid, Palencia; viñas en diversos lugares, etc. (ORTEGA
Libro de Privilegios, fol.32v); I 4 de enero de I255 (A.H.N. Clero, carpeta GONZÁLEZ, I983: 3I).
3.440 doc. 23; legajo 7.666; B.R.A.H. Col. Salazar y Castro, 0-7, fol.98 783 ORTEGA GONZÁLEZ, I983: 32 y 45.
y 0 - I 8 , fols.2I6v-2I8); I266 (Libro de Privilegios, fol.33r); I274 (Libro de N o se ha conservado el documento, aunque dan noticia de su exis-
7 8 4
Privilegios, fol.33r); y I5 de octubre de I278 (A.H.N. Clero, carpeta tencia MANRIQUE, I642-I659: II, I97; MENDOZA, I753: II2; MIGNE,
3.441 doc. 6). El 28 de mayo de I275, el infante D. Fernando dicta I884: I80, I588; y COTTINEAU, I935-I939: II, col.327I, entre otros.
sentencia a favor de Valbuena en el pleito que éste tenía puesto contra el Según Manrique el privilegio repetía textualmente, a excepción natural-
concejo de Peñafiel sobre la entrada y corta en sus montes (I.VD.J., mente del destinatario y de otros detalles particulares, los términos con-
Manuscritos medievales, C.9.5). tenidos en el concedido al monasterio de Cántavos por el pontífice ese
7 7 7 El I de mayo de I282, siendo infante, devuelve al abad Simón el mismo día (vid. este último en GARCÍA LUJÁN, I98I: doc. 2, 5-7).
pozo de sal de Bonilla que le había quitado su padre; llegado al trono, A.H.N. Clero, carpeta 3.440, doc. 2-n.I9.
7 8 5
les confirma esta donación el 2 de diciembre de I284 (I.VD.J., Manus- A.H.N. Clero, carpeta 3.440, doc. 2-n.20.
7 8 6
critos medievales, A.I0.4; Libro de Privilegios, fols.33v-34r). El resto de A.H.N. Clero, carpeta 3.440, doc. 2-n.2I.
7 8 7
los documentos expedidos por este monarca son confirmaciones: 3 de A.H.N. Clero, carpeta 3.440, doc. 2-n.22 a 25.
7 8 8
junio de I286 (A.H.N. Clero, carpeta 3.44I doc. 8; Libro de Privilegios, 789 A.H.N. Clero, carpeta 3.440, doc. 2-n.26.
fols.36r-38v; Códices I484-B n.I7 a 20; B.R.A.H. Col. Salazar y Cas- 22 de marzo (I.VD.J., Manuscritos medievales, A.2.I0). VALDEÓN
7 9 0
tro, 0 - 7 , fols.96r-97v, con fecha de I287); 28 de mayo de I 2 8 7 BARUQUE, I974, ofrece un panorama sobre el estado demográfico de la
(A.H.N. Clero, carpeta 3.44I doc. 9) y 20 de junio de I29I (A.H.N. zona durante el siglo XIV.
Clero, carpeta 3.44I doc. I I ; Libro de Privilegios, fols.39r-40v); o inter- ™ I9 de febrero (A.H.N. Clero, carpeta 3.44I, doc. 23).
venciones en querellas: 28 de junio de I286 (I.VD.J., Manuscritos DÍAZ MARTÍN, I975; ORTEGA GONZÁLEZ, I983: 79; ARRANZ
7 9 2
Interrumpidas las concesiones provenientes de nobles y tenido lugar la perdida de numerosas posesiones (casas de
pequeños propietarios, únicamente se consignan cuatro ins- Atienza, Ayllón, Palencia, Segovia o Portillo; la granja de
trumentos reales y todos ellos concentrados en los prime- Villafruela; heredad de Lucena, etc), el despoblamiento de
ros años de la centuria y de mano de Fernando I V : 793
varias granjas (Piñuelas, Ventosa y Valbiado) y otras tantas
dispensa del pago del yantar (enero y marzo de 1303) ; 794
empeñadas (Jaramiel, Castrillo de Cisla, Piñuelas, y la casa
concesión de venta de cincuenta cahíces de sal de las sali- y ermita de Santa María de Capelludos) . 807
nas de Bonilla, confirmando además la hacienda de Sevilla Esta era la situación a finales del primer tercio del
y eliminando la obligación de sustentar un hombre de
siglo XV, consecuencia también de la mala administración
armas en Villanueva de Nogachet (noviembre de 1304) ; 795
Valbuena, Piñel) y a desprenderse de otras más alejadas estaba enterado de los planes reformistas de Martín de Var-
(Villanueva) . Si bien este hecho puede hacer pensar en
805 gas, comisionó a don Gutierre de Toledo, obispo de Palen-
cierta recuperación de la crisis en que había estado sumido cia, la investigación del caso. u n a vez cerciorados estos
el monasterio, es al mismo tiempo testimonio de que el hechos, despojaron a fray Hernando de la abadía, y con el
dominio monástico había dejado de expandirse . Pero no 806 consentimiento de fray Juan de Medina, dispersaron los
sólo eso, debemos tener en cuenta que por entonces ha monjes por varios monasterios y se dio su posesión a
793 ORTEGAGONZÁLEZ, 1983: 48-51. 802Leonor de Aragón, mujer del infante Juan (I) de Castilla: (B.R.A.H.
7 9 413 de enero (A.H.N. Clero, carpeta 3.441, doc. 14; B.R.A.H. Col. Col. Salazar y Castro, 0-7, fol.111 y 0-18, fols.241v-242v) en 17 de
Salazar y Castro, 0-7, fols.102v-103r y 0-18, fols.216v y 225 (extrac- diciembre de 1376, y Juan I en 8 (I.VD.J. Manuscritos medievales, B.6.6)
tos)) y 22 de marzo (I.VD.J. Manuscritos medievales, A.2.10). y 30 (A.H.N. Clero, carpeta 3.441-bis, doc. 6) de agosto de 1379.
795 22 de noviembre (A.H.N. Clero, carpeta 3.441, doc. 17; B.R.A.H. 80325 de mayo de 1401 (A.H.N. Clero, carpeta 3.441-bis, doc. 10)
Col. Salazar y Castro, 0-18, fols.218r-219v (extracto).) y 19 de mayo de 1406 (A.H.N. Clero, carpeta 3.441-bis, doc. 10-bis).
7 96 8 de febrero (A.H.N. Clero, carpeta 3.441, doc. 18). 26 de agosto de 1407 (A.H.N. Clero, carpeta 3.441-bis, doc. 12);
8 0 4
7 9 7Véanse algunos ejemplos en A.H.N. Clero, carpeta 3.441, docs.15, 2 de septiembre de 1408 (A.H.N. Clero, carpeta 3.441-bis, doc. 13) y
19 y 20; carpeta 3.441-bis, doc. 1. También, ORTEGA GONZÁLEZ, 1983: 7 de septiembre de 1412 (A.H.N. Clero, carpeta 3.441-bis, doc. 15).
63-65. 805A.H.N. Clero, carpeta 3.441-bis, docs.3 a 5, 9 y 11. El caso del
798 20 de noviembre de 1304 (A.H.N. Clero, carpeta 3.441, doc. 16; lugar de Villanueva ha sido bien estudiado por PÉREZ-EMBID, 1978,
B.R.A.H. Col. Salazar y Castro, 0-7, fol.99 (extracto)) VALDEÓN BARUQUE, 1980 y ORTEGA GONZÁLEZ, 1983: 58-62.
799 27 de mayo de 1326 (A.H.N. Clero, carpeta 3.441, doc. 21); 29 8 0 6 ORTEGA GONZÁLEZ, 1983: 4 7 y 5 4 y ss.
de octubre de 1329 (A.H.N. Clero, carpeta 3.441, doc. 22; pub. por Ibidem: 70 y 80.
8 0 7
GONZÁLEZ CRESPO, 1985: 265-267); 19 de febrero de 1330 (A.H.N. 808 Sobre este pleito y su desarrollo véase un traslado fechado en Valla-
Clero, carpeta 3.441, doc. 23); 26 de diciembre de 1331 (B.R.A.H. Col. dolid a 27 de Noviembre de 1433, mandado hacer por Martín de Vargas,
Salazar y Castro, 0-7, fol.101 -extracto-). en el que se incluyen tres documentos sobre la disputa entre los mencio-
800 7 de septiembre (A.H.N. Clero, carpeta 3.441, doc. 25. Pub. por nados Juan de Medina y Hernando de Benavente con fecha de 1 de Abril
DÍAZ MARTÍN, 1997-1999: I, 220-222) y 10 de diciembre de 1351 y 6 y 17 de Mayo de 1428, respectivamente. Vid. además dos breves de
(A.H.N. Clero, carpeta 3.441, doc. 26. Pub. por DÍAZ MARTÍN, 1997- Martín V de 13 y 14 de mayo de 1428, contra fray Hernando de Bena-
1999: II, 383-385); 8 de marzo de 1352 (B.R.A.H. Col. Salazar y Cas- vente y los abades de la Espina, Palazuelos y Matallana (A.H.N. Clero,
tro, 0-7, 101v-102v -extracto-). legajo 7659). También el Exordio y Progresos..., fol.5 de Fr. Luis de ESTRADA
801 8 de diciembre de 1370 (I.VD.J. Manuscritos medievales, B.6.6). y el Exordio de la Observancia..., cap. 1, n.3 de Fr. Bernardo SUÁREZ.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
I98
Martín de Vargas el 4 de marzo de I 4 3 0 , convirtiéndose 809 Primeramente tiene el monesterio de santa maria de mata
en Reformador y abad perpetuo de Valbuena. Poco tiempo llana que es cerca de fuenpudia e valverde en el obispado de
después fue enviado a Roma fray Gregorio de Medina, palencia.
monje procedente de Piedra y entonces prior de Valbuena, Iten el monesterio de santa maria de palafuelos que esta cerca
con cartas del rey Juan II para que el papa confirmase la de la villa de cabefon en el dicho obispado de palencia.
construcción de Montesión y la incorporación de Valbuena, Iten el monesterio de santa maria de Rioseco cerca la villa de
concediendo Eugenio I V el privilegio "Dudum siquidem" medina de pumar en el obispado de burgos.
el 2 5 de Enero de I432 °. Las protestas de Fray Hernando
8I Iten el monesterio de santa maria de Buena Val cerca la villa
de Santa Colomba ante el Capítulo General y la resolución de tamajon e la villa de useda en el arfobispado de toledo.
tomada por éste en I 4 3 3 de enviar a los abades de La Espina Iten en el Reino de portugal tiene el monesterio de santa maria
y Herrera a reponerle en su cargo abacial no pudieron impe- de aguiar en el obispado de lamego . 8I2
esplendor, no solo económico sino también espiritual, que paremos en sus respectivas monografías. Pasemos, pues, a
llegó a alcanzar Valbuena es el número de monasterios a él analizar los casos de los otros monasterios.
sujetos. En el Inventario de todas las posesiones de la casa El monasterio de Rioseco tuvo su primer asenta-
mandado hacer por fray Martín de Vargas ( I 4 3 9 ) aparece miento en Quintanajuar. En I I 3 9 , Alfonso VII dona esa
anotado lo siguiente: villa, entonces destruida, a Christoforo monacho etfratribus tuis .
8I4
Lo primero tiene este monesterio de Valbuena cinco moneste- Mucho se ha discutido acerca de su condición religiosa: en
rios abbadias de abbades bendichos subjetos asy porfiliacion el documento no se hace alusión a ninguna regla ni a un
segund la forma uso e costunbre de la dicha orden. abad que rigiese un monasterio, tratándose probablemente
8 0 9A quatro de marfo del anno de mill e quatrocientos e treynta annosfue tomada esta ( c a . I 4 4 3 ) : al dicho monesterio de valbuena son subjetos finco monasterios de la dicha
casa para reformar por mandado del muy esclarecido e poderoso principe don Juan rey de orden, el primero es matallana e conseguiente el monasterio de palafuelos los quales son
Castilla nuestro sennor por comision fecha al muy Reverendo padre don gutierre de toledo en la dicha diocesis e el monasterio de santa maria de ruyseco ferca de medina de pumar
obispo de palencia la qual estava mucho perdida e disipada et el dicho diafue dada la pose- en la diofesis de burgos, e el monasterio de santa maria de aguiar en la diocesis de lamego
sion della al reverendo maestrofray martin de bargas maestro en theologia bachiller en decre- (A.H.N. Clero, legajo 7.659).
tos primero abbat reformador de la observancia de sant bernardo en los reynos de Castilla Fr. Bernardo SUÁREZ en su Exordio de la Observancia recogió esta noticia:
e Leon la qual primera e nuevamente comenfo en el nuevo monesterio de Santa maria de Fueron filiaciones de este Monasterio de Valbuena segun el Estilo de Cister y sus diffi-
monte sion fuera los muros de la muy noble cibdad de Toledo (Inventario, fol.Ir). Por niciones, los Monasterios de Matallana, Palazuelos, y Rioseco y Bonabal en Castilla; y
otra parte, MANRIQUE, I642-I659: IV 592 escribe "Sequenti anno el Monasterio de Sancta Maria de Aguiar en Portugal, a los quales imbio Religiosos con
M.CCCC.XXX die IV mensis Martii, sive ut alii volunt die I6. mens. Prelados en susfundaciones como se usaba en la Orden, afirmando que así constaba tanto
Aug.,..." (20I0: 82). Desconocemos las fuentes que dan como fecha de la por el libro mandado escribir porfr. Martín de Vargas, como por un Privilegio del Rey
toma de posesión de Valbuena por Martín de Vargas el I6 de agosto de ese D, Henrrique 3: su data el Año de 1393, donde dice estas palabras: Fafemos merfed
mismo año, ya que esa data es en realidad el momento en que Juan II con- al dicho Monasterio de Valbuena y a los Monasterios de Matallana de Palazuelos y Rio-
firma las gestiones realizadas en el monasterio (así consta en los Privilegia seco y Bonabal sus fijos que sean exentos de todo pecho y tributo (cap. 4 n. 2). El
Concessa Sacrae Observantiae Ordinis Cisterciensis, de Juan Lope, publicado en mismo número de filiales es mantenido por FlNESTRES Y DE MONTALVO,
Salamanca en I 6 I 7 y que traduce PASCUAL, I996 (2): 329-357, en con- I753-I765: I, 30 y MARTÍNEZ TOMÉ, I99I: 6I.
creto, 333-334). Sobre este proceso y sus inmediatas consecuencias, vid. 813 YEPES, I 6 0 9 - I 6 2 I : III, 383. Por su parte, MANRIQUE, I642-
GARCÍA FLORES, I996: 557-558; TORNÉ, I996: 478. I659: II, I97, únicamente recoge como sus filiales a Rioseco, Bonaval y
810 Puede verse la bula en A.H.N., Clero, libro 20.26I, fols.2v-4v; y en Palazuelos. A éste le siguen, entre otros, MENDOZA, I753: II2; JANAUS-
HENRÍQUEZ, I630: 253-255. CHEK, I877: 7I; ANTON, I942: I I - I 2 ; COCHERIL, I964: 235; idem,
8 H CANIVEZ, I933-I94I: IV año I433, def. 20, 385-386. I963: 948; MORAL, I973: I690; MARTÍNEZ, I978: 247; ORTEGA
8 I 2 Inventario II, fol.Iv (pub. p o r ORTEGA GONZÁLEZ, I 9 8 3 : I 5 I - I 5 2 ) GONZÁLEZ, I983: 76-77; PÉREZ-EMBID WAMBA, I986: 335 (pero este
e Inventario, fol.Iv. Asimismo aparecen mencionadas en una carta de poder mismo autor, en la 620, añade el de Matallana al comentar cómo el
que dio Martín de Vargas a fray Pedro de Bertavillo, prior y vicario de Capítulo General de la Orden desligó, a mediados del siglo XV, de la
Valbuena, para actuar en los pleitos sostenidos con sus filiales (ca.I443): dependencia de Valbuena a sus hijas tras ser reformada por Martín de
los monasterios de lafiliación de Valbuena (...) los quales son santa maria de matallana Vargas), etc... De otro lado, GONZÁLEZ, I960: 5 I 3 nota 86, habla de
e santa maria de palafuelos, situados en el dicho obispado de palencia e santa maria de Palazuelos, Bonaval, Sierra y Aguiar. Y erróneamente OLIVERAARRANZ,
rioseco en el obispado de burgos e santa maria de aguiar en el obispado de lamego en por- 2002 (2): 407, habla de "Medina de Rioseco" (en lugar del Rioseco
tugal (A.H.N. Clero, legajo 7.659); y en el testimonio de Juan Álvarez de burgalés), Matallana, Palazuelos, Bonaval y "Aguilar" (en vez de Aguiar).
Sotillo, notario apostólico vecino de Valladolid y procurador de Val- Vid. documento completo en GARCÍA Y SAINZ DE BARANDA, I96I
8 1 4
buena en el pleito que tenía este monasterio con el de Matallana (2): doc. 2, 636-637; y CADIÑANOS BARDECI, 2003: doc. I, II0.
FUNDACIONES MASCULINAS • 20I
ocurriría, aunque la documentación no es explícita al res- Juan, abad de Cíteaux, concede a Martín de Vargas la facul-
pecto, necesariamente después de la afiliación de Valbuena tad de visitar y reformarle, como lo hacían antes los abades
a la misma siendo el primer documento que hace men-
8I7
> de Valbuena . De nuevo en el Capítulo General de I 4 4 I
822
ción expresa de la pertenencia del monasterio al instituto se hacía referencia a esta filiación , aunque se desligará de
823
cisterciense de I I 7 I 8 I 8
< la obediencia de Valbuena por mandato papal de I 7 de
Son pocos los documentos, al margen de los ya junio de I 4 4 4 . 824
comentados, que nos hablan de la dependencia de este Del monasterio de Bonaval (Guadalajara) son mínimos
monasterio respecto al de Valbuena. El primero se conserva los datos que tenemos acerca de sus primeros años . Man- 825
en el archivo del monasterio, también cisterciense, de Santa rique afirma que es fundación de Valbuena por mano de
María la Real de las Huelgas de Burgos. Según éste, el I0 Alfonso VIII llevada a cabo en II64, aunque los monjes no
de julio de I246, fray Diego, abad de Rioseco y su con- poseyesen en plena propiedad los terrenos sobre los que se
vento venden a don Ponz de Vals y a sus hermanos una casa asentaron, sino velut precarium. Once años más tarde, el 2 4 de
que poseían en término de Montes de Oca, unos molinos noviembre de I I 7 5 , el mismo rey se los cedió perpetua-
en Arlanzón y unos solares en Villamórico, todo ello con mente . Aparte de la noticia proporcionada por el Inventario
826
plazer e con otorgamiento de nuestro padre abbad de Valbuena . 8I9 La del siglo XV y otras fuentes comentadas, sólo hemos encon-
siguiente mención la encontramos en una definición del trado cuatro referencias documentales acerca de su depen-
Capítulo General de I 2 7 0 . También sabemos que el 2
820 dencia de Valbuena, la primera en una carta de poder del abad
de agosto de I 3 2 I el abad Alfonso de Valbuena actúa como de Valbuena al de Matallana de hacia la segunda década del
815 MANRIQUE, I642-I659: II, I97 piensa que se trataba de una 8 H CADIÑANOS BARDECI, 2003: doc. 227, 280-28I.
comunidad de monjes negros. GARCÍA Y SAINZ DE BARANDA, I960: 33I 822 A.H.N., Clero, legajo 7659.
cree que fue cisterciense desde el principio (aunque en I96I: 479 se 823 "Abbati Berdonarum praesens generale Capitulum committit et
contradice y afirma que "Los monjes de Quintanajuar no estuvieron iniungit, quatinus monasteria de Mataplana, de Palaciolis, de Rivo sicco
adscritos, al principio, a regla ni orden alguna"). Le siguen GONZÁLEZ, et de Bona Valle, ut pater abbas visitet et reformet, donec monasterium
I964: I28; SAENZ TERREROS, I979: 35I; VALENTÍN DE LA CRUZ, Vallis bonae ad plenam Ordinis obedientiam et subiectionem fuerit plene
I980: 40; SÁINZ SÁIZ, I996: 59. Por su parte, ÁLVAREZ PALENZUELA, reductum,..." (CANIVEZ, I933-4I: IV año I44I, def. 54, 5 I I ) .
I978 dice en un primer momento que quizá fuesen benedictinos (I2I), 824 A.H.N. Clero, carpeta 363, doc. 4 (traslado de 23 de febrero de
para después calificarlos de eremitas. Esta última idea es admitida por I445; regesta en CADIÑANOS BARDECI, 2003: doc. 39I, 509). Al igual
PÉREZ-EMBID WAMBA, I986: 273; VALENTÍN DE LA CRUZ, I990: 58, que Matallana y Palazuelos pasaría a depender de Sobrado: en efecto, en
nota 35; CALERO PALACIOS, I992: 335; y CADIÑANOS BARDECI, I999: I45I el abad del monasterio gallego confirma la elección del prior fray
325 y 326-327; idem, 2003: I9-20. Gonzalo como abad del burgalés (A.H.N. Clero, carpeta 363, doc. 8; cit.
816 MANRIQUE, I642-I659: II, I97 recoge de las controvertidas Tablas por PÉREZ-EMBID, I986: 588; y CADIÑANOS BARDECI, 2003: 27).
de Cíteaux la fecha de I I 4 7 y señala cómo la tradición del monasterio 825 Ya lo indicó ÁLVAREZ PALENZUELA, I978: I95.
sitúa la fundación en II35. DlMIER, I958: 70; COCHERIL, I964: 235 826 I642-I659: II, 406-407; ÁLVAREZ PALENZUELA, I978: 85-86;
y 285; ÁLVAREZ PALENZUELA, I978: I24 y I4I; PÉREZ-EMBID WAMBA, JANAUSCHEK, 1877: 152; TORIJA ALONSO, 1948: I 0 I ; HERRERA
I986: 27I; y VALENTÍN DE LA CRUZ, I990: 58, la colocan en II48. CASADO, I974: 68 y 85-86; DIMIER, I958: 52; COCHERIL, I964: 235
CADIÑANOS BARDECI, I999: 328 e idem, 2003: 2I la ubica en torno a y 283; PÉREZ-EMBID WAMBA, I986: 27I y 273; JURADO SERRANO,
II50. Véase también en la nota anterior la opinión de GARCÍA Y SAINZ I990: 54, 58, 6I, 65-67 y 255-256; RUIZ MONTEJÓ; FRONTÓN
DE BARANDA, GONZÁLEZ y SAENZ TERREROS. SIMÓN; PÉREZ CARRASCO., I992: 43; BRAU FORN, I999: 354 y 386-
La idea de que lo habitaban monjes cistercienses llegados de Fran-
8 1 7 387; MONTALVÁ CONESA, 2007: 32 y 34.
cia (GARCÍA Y SAINZ DE BARANDA, I960: 337) y que verían reforzados De otro lado, GONZÁLEZ, I960: I, 5I7, nota 99, toma la fecha de I I 7 5
sus contingentes por monjes procedentes de Valbuena (GONZÁLEZ, como la de fundación (publica el documento en II, 397-398. u n a tra-
I964: I28; SAENZ TERREROS, I979: 326 y 35I) es infundada. Lo ducción al castellano aparece recogida en dos confirmaciones, la primera
mismo habría que decir del pretendido traslado de monjes cistercienses de Alfonso X fechada el 27 de enero de I253 (A.H.N. Clero, legajo
desde Valbuena a Quintanajuar en torno a I I 4 8 (vid. nota 723). 7042) y la segunda de Felipe V con fecha de I 4 de febrero de I 7 I 3
818 El 9 de octubre de ese año, los hijos de Martín Martínez de Bis- (A.H.N. Clero, carpeta 583, doc. I4), transcritas por JURADO SERRANO,
jueces dieron Deo et monachis cistercienses scilicet, vobis Martino gratia Dei Abbati I990: Apéndice documental n.I0, 40I-402 y n.I27). Sin embargo, con
de Quintana Suar el monasterio de Rioseco con todas sus propiedades. anterioridad a esta fecha el monasterio de Bonaval ya pertenecía a la
Publican el doc. GARCÍA Y SAINZ DE BARANDA, I96I (3): doc. I5, 749- Orden, por cuanto en el Capítulo General de ese año (celebrado, como
750, fechado a día I0; y CADIÑANOS BARDECI, 2003: doc. I7, I23- era costumbre, en torno al I4 de septiembre), se encomienda a su abad
I24. ALONSO ÁLVAREZ, 2007: 658 y 683, recoge esta data. y al de San Andrés de Valbení resuelvan un asunto relacionado con la
819 Pub. por LIZOAINGARRIDO, I985-I987: doc. 370, I59-I6I. reina castellana ("De causa matris regine Hyspaniae iniunctumest duo-
820 "Item [querela] cum super depositionibus abbatum de Mataplana, bus abbatis de sancto Andrea et de Bonavalle ut inquirant veritatem, et
de Palatiolis et de Rivo Sicco, quos pater abbas Vallis bonae..." (CANI- in sequenti Capitulo renuntient" (CANIVEZ, I933-I94I: I, año II75,
VEZ, I933-I94I: III, año I270, def.45, 88-89). def.39, 85; cit. por JURADO SERRANO, I990: 2I9).
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
200
XIV , la segunda en una sentencia de un pleito sobre la here-
827
Respecto a la sujeción de Sta. María de la Sierra de
dad que tenía el monasterio en Villanueva (1359) , la tercera 828
que hablaba Yepes hay que decir que es muy tardía, ya de
en una definición del Capítulo General de 1441 y la última 829
fines del siglo XV . 832
mite comprobar este hecho. Además, tradicionalmente se El origen de este error parece hallarse en Layna Serrano,
ha venido considerando como filiación de Moreruela y quien señala que los monjes que vinieron a poblar el monas-
también de Valparaíso, aunque parece que en realidad lo fue terio procedían del "convento de Bolbona o Valbuena",
de Boulbonne (Francia) . 831 confundiendo al francés con el castellano . 834
213 y 216) y así aparece mencionado en el Cartulario del monasterio LINSKI, 1 9 8 2 : 7 8 6 ; BURKE, 1 9 8 2 : 87, n o t a 2 5 ; o MARTÍNEZ BUÉNAGA,
z a m o r a n o : no hay bulla ni escritura authentica que lo diga, sino solo tradición de nues- 1998: 280.
tros mayores que lo oyeron decir (cit. p o r TORRE RODRIGUEZ, 1 9 9 9 : 108). LAYNA SERRANO, 1932: 84. La filiación correcta, perteneciente a
8 3 4
Sí hay prueba documental, en cambio, en el caso de Boulbonne: Aguiar Boulbonne, es señalada por MANRIQUE, 1642-1659: III, 25; JANAUS-
aparece como dependiente del cenobio francés en un breve de Lucio III CHEK, 1 8 7 7 : 1 7 3 ; DIMIER, 1 9 5 8 : 68; COCHERIL, 1 9 6 4 : 2 3 7 y 2 8 4 ;
de 23 de noviembre de 1182, confirmado en noviembre de 1188 por ÁLVAREZ PALENZUELA, 1 9 7 8 : 114; PÉREZ-EMBID, 1 9 8 6 : 2 7 1 y 2 7 5 ;
Urbano III. Además, en 25 de marzo de 1286 el abad de Boulbonne YÁÑEZ NEIRA, 1 9 8 6 : 1 3 3 y 134; ARMENGAUD, 1 9 9 3 : 2 8 y 29, entre
se intitulaba "Abbé de Turris Aquilarum" ( T R I L H E , 1912: 1060; otros.
FUNDACIONES MASCULINAS • 20I
posee una sola nave y cinco tramos, de los cuales los extre-
mos son más estrechos. La cabecera está compuesta por
cinco ábsides escalonados: el central, más sobresaliente, y
los intermedios, semicirculares y precedidos de un tramo
recto ; los extremos, rectangulares . Su advocación era,
836 837
no encontramos ningún otro monasterio que utilice el la central y la intermedia abierta a cada brazo del transepto
8 3 7Inexplicablemente, VALDIVIESO comenta que las capillas laterales construida en torno a I I 3 5 - I I 4 0 , es decir, antes de que la Congrega-
"son planas al exterior" (I975: 30I). ción de Savigny a la que pertenecía este monasterio, ingresara en la Orden
Se pueden citar La Boissiere, Senanque y Le Thoronet en Francia;
8 3 8
cisterciense ( I I 4 7 ) .
Altenberg I, Lehnin, Dobrilugk y Georgenthal en Alemania; Ferraria en 843 Tampoco mencionamos aquí la abacial inglesa de Furness I por
Italia; Gudvala en Suecia; Zwettl I en Austria. cuanto, como ocurría en el caso de Vaux-de-Cernay, pertenecía a la Con-
839 Meira (Lugo), Bujedo de Juarros (Burgos), Sacramenia (Segovia), gregación de Savigny, y antes de su incorporación al Císter, ya se había
San Martín de Valdeiglesias (Madrid), Huerta (Soria) y La Oliva (Nava- construido la cabecera y el transepto (FERGUSSON, I984: 55-56; WlL-
rra). Todos estos monasterios han sido puestos en diversas ocasiones en SON, I986: I I 0 - I I 2 ) .
relación con la planta de Valbuena (ANTON, I942: 2I-24; TORRES BAL- Algunos autores (AUBERT, I932: I 9 6 - I 9 7 ; idem, I947: I, I96,
8 4 4
BÁS, I924: I23-I24; idem, I954: 53; HAHN, I957: 337-338; DURLIAT, nota 3; STALLEY, I987: 265, nota I5) han querido ver una relación entre
I966: I34; CROZET, I970: 292; GARCÍA GAINZA, I980: 203; SOWELL, las cabeceras de Valbuena y Fontfroide. En realidad sólo el hecho de
I982: 73; ARA GIL, I986: I6; etc.). Sin embargo, un detalle de extrema combinar dos tipos de ábsides diferentes les emparienta: el ejemplo fran-
importancia les separa del modelo empleado en Valbuena: en todos los cés presenta una gran capilla rematada en ábside pentagonal flanqueada
casos las capillas laterales están cerradas a oriente por un muro recto, si bien por una pequeña capilla rectangular y otra más grande, también con
en los casos de Valdeiglesias y Sacramenia poseen hacia el interior planta ábside de cinco paños, a cada lado.
semicircular (sobre este tipo de cabecera consúltese, AUBERT, I932: I96; AUBERT, I947: I, I78, nota 2; BEUER-SZLECHTER, I970: espe-
8 4 5
idem, I947: I, I96 nota 4; VALLE PÉREZ, I982: I, I54). cialmente 204-207; STALLEY, I980: 263-354; idem, I987: I2,I3,56-
Aunque en el monasterio segoviano, como hemos visto, las latera-
8 4 0
57 y 248; idem, I994: I3-I6.
les presenten planta semicircular al interior. Además de los citados en la nota anterior, mencionan esta identi-
8 4 6
84i:Se ha señalado en diversas ocasiones que este último modelo es bas- dad de caracteres ANTON, I942: 23 y 26; AUBERT, I932: I 9 6 - I 9 7 ;
tante excepcional en lo cisterciense (aunque muy frecuente en los monas- LAMBERT, I 9 3 I : I03, nota 4; idem, I 9 5 I .
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
202
son de planta rectangular, y las adyacentes a la mayor y las dad de planta, no sólo por el desarrollo de su cabe-
extremas semicirculares . 847
cera sino también por el número de tramos, ha sido
Fuera del ámbito de la Orden pueden encontrarse unánimemente reconocida . 850
unos pocos ejemplos de iglesias con cabeceras semejantes, 2. La Seo de Zaragoza *. Diversas construcciones
85
por no decir idénticas. Dentro de la Península contamos realizadas a partir del siglo XIV habían ido refor-
con dos : 848
mando y ocultando la primitiva disposición de la
I. La colegiata de Tudela. Edificada sobre el solar que cabecera. Las restauraciones llevadas a cabo a par-
ocupaba la antigua mezquita, lo que ocasionó una tir de I 9 8 0 han sacado a la luz diversos detalles
desviación respecto a la orientación litúrgica habi- que hacen posible, junto al estudio de los restos
tual, presenta un cabecera compuesta por un ábside conservados, una reconstrucción de su estado en
central semicircular precedido de tramo recto, que torno al I200: cinco ábsides escalonados, semicir-
cobija a cada lado a una pareja de capillas de menor culares el central y sus colaterales y los extremos
tamaño, siendo las interiores como la mayor y las rectangulares . Como vemos, la relación con Val-
852
monjes enviados por el abad francés querían construir con el monje el hemiciclo son continuos, es decir, no hay transición entre uno y otro
Roberto a la cabeza como supervisor de las obras, un monasterio que mediante un arco triunfal sobre pilastras o columnas, detalle que por el
siguiese el modelo de su casa-madre y que, debido al enfrentamiento con contrario sí aparece en Valbuena. Las diferencias también se notarán en
los monjes irlandeses —se trata de una afiliación y no de una fundación el alzado, ya que en la iglesia navarra se cubren con bóvedas de horno,
"ex novo"— que pretendían erigir una iglesia más acorde con las tradi- mientras que en la castellana lo hacen con cañón apuntado en el tramo
ciones escandinavas y benedictinas, aquéllos abandonaron Irlanda y recto y bóveda de nervios en el absidal. Sobre la iglesia tudelana, con-
regresaron a Borgoña. Por su parte, STALLEY, en I987, creía que el diseño súltese entre otros: BlURRUNYSOTIL, I936: 464-548; LAMBERT, I 9 3 I :
de la iglesia estaba basado en ideas adquiridas en Clairvaux y que las I22-I23; TORRES BALBÁS, I952: 27-28; GÓMEZ MORENO, I945: 9-
diferencias con su planta se deberían a una mala asimilación del modelo 47; URANGA GALDIANO e IÑIGUEZALMECH, I973: IV 72-77; GARCÍA
(56-57); en I 9 9 I apunta la posibilidad de que la presencia de los ábsi- GAINZA, I980: I, 238-249 y 385-386; CASTRO ÁLAVA, I987; MELERO
des semicirculares, sin precedente en Irlanda, fuese tomado de una de MONEO, I989: 52-67; idem, 2008; MARTÍNEZ DE AGUIRRE, 2006;
las casas de la Congregación de Savigny (I994: I6). Lo que resulta más idem, 2009 (2): I I 5 - I I 7 ; MARTÍNEZ ÁLAVA, 2007: 238-277.
curioso es que ninguna de las abadías de su filiación copió esa alternan- Así, lo han apuntado AÑTOÑ, I942: 2 I - 2 2 y 25; LAMBERT, I93I:
8 5 0
cia de ábsides, adoptando por el contrario el "plan bernardin".. I03 y I22; idem, I95I; TORRES BALBÁS, I952: 35; EYDOUX, I954: 206;
848 La conexión establecida por GARDELLES entre las cabeceras de HERAS GARCÍA, I966: I28; CROZET, I97I (2): 264, nota I I ; DURLIAT,
Sigena, Valbuena y Tudela (I975: 25) no parece muy acertada. La de aque- I972: 39-40 y 74; AZCARATE, I974: 48; idem, I990: 29; GARCÍA
lla comprende un gran ábside semicircular precedido de tramo recto, flan- GAINZA, I980: I, 239; BANGO, I985: 4I2; ARAGIL, I986: I6; MELERO
queado a cada lado por una capilla que sigue su mismo trazado aunque de MONEO, I989: 6I-62; OLIVERAARRAÑZ, 2002 (2): 409 (y también con
menor tamaño (la correspondiente al norte desapareció durante las refor- La Oliva); MARTÍÑEZÁLAVA, 2007: 242-243; entre otros. Aunque no se
mas barrocas al construirse una capilla funeraria cuadrada) y por una menciona al monasterio vallisoletano, otros autores como GÓMEZ
pequeña capilla de testero recto apenas sobresaliente abierta al brazo sur MORENO, I945: I3; URANGA e IÑIGUEZ, I973: IV 72, y YARZA, I990:
del transepto y otra similar en el brazo opuesto pero semicircular al inte- 28, la relacionan con "las cistercienses" o "inspirados en el Cister".
rior, que en realidad forma parte de un panteón funerario perteneciente a 8,SISobre el proceso histórico y constructivo de esta catedral arago-
la casa real aragonesa en el cual fueron enterrados la reina doña Sancha y nesa y especialmente para lo relacionado con el desarrollo de su cabecera
su hijo el rey Pedro II, y tiene carácter independiente respecto al transepto. pueden consultarse LACARRA DUCAY, I987: 307-3I0; PEROPADRE
Por lo demás, su cronología es posterior a la del resto de los edificios que MINUESA, I987: 22-27; RINCÓN GARCÍA, I987: 3-5 y 8-9; ESCRIBANO
comentamos, correspondiendo a ya bien entrado el siglo XIII. Más cercana SÁNCHEZ y CRIADO MAINAR, I989: I7-25; ARAGUAS y PEROPADRE,
a este esquema es la cabecera de la iglesia de San Miguel de Estella, que I989: 2 8 I - 2 8 2 y 289-290; y ARAGUAS, I995: I2-I3; RUIZ MALDO-
según LACOSTE (I977:I03) responde a un modelo desarrollado en la NADO, I997: 9; BIENES CALVO, CABAÑERO SUBIZA y HERNÁNDEZ
Península a fines del XII y principio del XIII por algunos monasterios cis- VERA, I996-97: 3 I 7 y 3 I 9 - 3 2 I ; BUESACONDE, I998: I I 2 - I I 3 .
tercienses como Valbuena o Huerta, por catedrales como Tarragona y Por su parte, PEÑA GONZALVO, 86-87, opina que la cabecera cons-
8 5 2
Lérida, o la colegiata de Tudela: cinco ábsides escalonados, semicirculares taría de sólo tres ábsides y que la noticia de la existencia de cinco capi-
las tres centrales, las extremas semicirculares al interior y de testero recto llas en el siglo XII no supone que fuesen todas obra tardorrománica sino
al exterior, producto por otro lado de un único impulso constructivo (SAN- que alguna de ellas, en concreto, la dedicada a San Miguel y que desde
CHO DOMINGO, I996: I68 y ss); también MARTÍNEZ ÁLAVA, 2007: 295, el XIV forma parte de la llamada "Parroquieta", pudiera corresponder a
relaciona su planta con Valbuena y Tudela. una dependencia de la antigua mezquita reaprovechada para ese fin.
Tampoco se adaptan a este esquema las cabeceras de la catedral de Evora Así lo han visto PEROPADRE MlNUESA, I987: 22; ESCRIBANO y
8 5 3
y de la iglesia de Santo Domingo de Elvas, como han sugerido ARAGUAS CRIADO, I989: 28, nota 46; ARAGUAS y PEROPADRE, I989: 290; RUIZ
y PEROPADRE MUNIESA, I989: 29I. Pertenecientes a un momento ple- MALDONADO, I997: I2-I3; o MELERO MONEO, 2008: I360.
FUNDACIONES MASCULINAS
• 20I
Fig. 13.
Valbuena.
Igles•sia, numeración
de soportes.
Fig. 14.
Valbuena.
Iglesia, numeración
de capiteles.
Francia). Fundada hacia 1112-1115, fue consa- constaba en origen de una sola nave, transepto des-
grada en 1127 por Guillermo, obispo de Saintes, tacado y un profundo ábside flanqueado a cada
857
y Girardo II obispo de Angouleme. A pesar de con- lado de dos capillas, una semicircular y otra termi-
servarse pocos vestigios debido a su estado ruinoso, nada en muro recto. Aunque guarda similitud con
se ha identificado una nave y un gran transepto al Valbuena, no solo en planta sino también en el
que se abren un ábside semicircular y dos absidio- empleo de pilares con dobles columnas en sus fren-
los alineados sobre cada brazo, el primero semicir- tes , el escalonamiento de sus ábsides es más acu-
858
Valbuena y el monasterio francés ha sido señalada únicamente por GAR- original se desconoce su forma, pero probablemente fuese semicircular.
DELLES, 1 9 7 5 : 2 5 . Para SIEFFERT, "ce monument peut etre rattaché a un groupe rela-
8 5 8
se ha dicho que la planta de Valbuena responde a una suerte los cubría , están realizados con aparejo de sillería bien
864
de compromiso entre las rígidas líneas rectangulares del escuadrada y de dimensiones regulares (lám. 4 0 ) . 865
modelo "bernardin" y la planta de tradición románica y Ya hemos comentado cómo la cabecera de Valbuena
benedictina de ábsides semicirculares . Sin embargo, la
859
consta de cinco capillas cuyas advocaciones son, de izquierda
existencia de modelos semejantes tanto coetáneos como a derecha: el Santo Cristo, Santiago, La Asunción, la Inma-
anteriores hace pensar que se trata de un prototipo genera- culada Concepción y Santa Lutgarda. La central presenta
lizado desde época románica en el oeste y sur de Francia , 860
planta semicircular precedida de un tramo recto. Las otras
cuyo exponente más antiguo conocido es el de Fontdouce cuatro se abren por parejas a cada uno de los brazos del tran-
y que asimilado por los constructores de esas zonas sería septo: las capillas intermedias siguen la misma estructura que
trasladado a diversos puntos de la Península. Por otro lado, la principal, mientras que las extremas son rectangulares . 866
amplia cabecera con un número elevado de altares de una levemente anacelada, sin ninguna ornamentación, totalmente
forma sencilla y relativamente económica . 862
lisos (Tipo I.I) y coronados por cimacios de nacela también
lisa . Sus basas están constituidas por un baquetón, una
868
859 Según ANTÓN, "presenta un cabecera de estirpe románica: tres definidor y Reformador General (1653-1656), según consta en la Tabla
ábsides semicirculares, a los que se agregaron dos capillitas cuadradas, ya de los Padres Generales que han salido de Valbuena: A este General se le debe todo el
cistercienses de abolengo. Al fin, es, modificada, la cabecera de cinco adorno que oy tiene la Yglesia deste Monasterio y esta enterrado en el ( A . H . N . Clero,
ábsides en degradación, seguida por algunos templos benedictinos" y legajo 7.658). Sobre este personaje, muerto a los 68 años el 29 de enero
"una transacción románica entre las influencias de la Orden y los resa- de 1666 y sepultado en el crucero de la iglesia, vid., VELASCO MARTÍ-
bios románicos vivientes en la región de origen y en la de asiento" (1942: NEZ, 1993: 126.
20 y 23 respectivamente) y para LAMBERT es "una especie de compro- Tampoco en origen se mostraban los paramentos desnudos, sino
8 6 5
miso entre la planta de Flaran y la planta cisterciense del tipo de Fonte- que generalmente recibían un enlucido blanco, marcándose las juntas de
nay o de Noirlac" (1931: 103). De manera semejante, la presencia del los sillares con líneas de color gris, negro o tierra (PARK, 1986), incluso
ábside central semicircular flanqueado por otras dos capillas cuadradas a veces se empleaban colores vivos, sirviendo como testimonio los res-
en la iglesia del también monasterio cisterciense de Meira se explica como tos que de ellos quedan en algunas de las bóvedas del templo de La
una persistencia del más común empleado durante el románico, y el esca- Espina (vid. la correspondiente monografía, en donde se incluyen refe-
lonamiento de la de Oya como el resultado de la adaptación del plan rencias documentales y bibliográficas al respecto) e incluso en este pro-
benedictino de capillas escalonadas al "bernardin" (VALLE PÉREZ, 1982: pio monasterio en la capilla de San Pedro.
I, 154 y 276; vid. también sobre este particular, ANTON, 1942: 21, y Su pavimento se encuentra a un nivel más alto que el del transepto
8 6 6
BANGO TORVISO, 1 9 8 5 : 4 3 3 - 4 3 4 ) . y naves, salvándose la diferencia mediante un escalón cuyos sillares mues-
8 6 0 GARDELLES, 1975: 25 localiza su invención en el siglo XII en la tran su arista superior baquetonada. Este pavimento es moderno. Consta
Francia occidental. SlEFFERT, 1 9 5 2 : 1 9 7 y 198, y THIRION, 1 9 5 3 : 1 8 7 - documentalmente que hasta el primer tercio del siglo XV la iglesia no
I 8 8 apuntan al camino de Santiago como difusor de este tipo. contaba con enlosado o empedrado. Sería a partir de la reforma llevada
8 6 1 V i d . especialmente, BANGO TORVISO, 1 9 8 8 (2). a cabo en el monasterio por Martín de Vargas (1430) cuando se proce-
8 6 2BANGO TORVISO, 1991: 33-34; idem, 2000: 32 y ss. dió a resolver ese problema: La iglesia se falla que nunca fue solada e solose fasta
863 Sin embargo, este efecto de diafanidad que hoy percibimos no es el la meytad de ladrillo e todos los presbiterios de argamasa (Inventario, fol.30r; pub.
que en origen fue concebido: en las iglesias de los cistercienses, monjes, por GARCÍA FLORES, 1996: 568. Vid. apéndice documental, doc. 8).
conversos e incluso también los fieles, ocupaban unos espacios concre- Estos capiteles, de acentuada austeridad, nos traen a la memoria
8 6 8
tos a lo largo de las naves, estando delimitado cada uno de estos com- los de las pilastras adosadas y las de los frentes de los pilares exentos de
partimentos por un sistema de cerramiento a base de rejas o muros de la iglesia de Fitero; y los de la embocadura de la capilla mayor, los fren-
sillería y mampostería, como todavía puede contemplarse en las abadías tes que miran a la nave central de los pilares exentos más orientales, y los
alemanas de Maulbronn y Haina, o la suiza de Kappel. de las naves laterales de Fontenay; entre otros.
8 6 4ALONSO et alii, 1965: 14. El enmascaramiento de yeso parece fue
realizado durante los abadiatos de Alonso Guerrero, que también fue
FUNDACIONES MASCULINAS • 20I
excepto en el pilar meridional de la capilla extrema de la Epís- Apoyan estas nervaduras sobre columnas acodilladas
tola, en donde se talló un listel bajo el baquetón (Tipo 2). en cada uno de los ángulos. Todos sus capiteles responden
Tanto los collarinos como los toros superiores y escocias de a un único modelo vegetal aunque con ligeras variantes, que
las basas se prolongan por el núcleo de los soportes, solu- llamaremos Tipo II. Se caracteriza por tener en los ángulos
ción que se repite a lo largo de toda la iglesia. hojas lisas y un tanto carnosas que nacen directamente del
Lógicamente, la organización interna de las capillas es collarino o por encima de éste que se enroscan en las
87I 872
diferente según sea su estructura. esquinas superiores en forma de volutas de las que a veces
873
Las extremas, de un solo tramo y rectangulares, se cuelgan una pieza piramidal alargada (lám. 52) , o se vuel- 874
cubren con bóveda de crucería con gruesos y sencillos ner- ven levemente rematando en bolas ; otra hoja bordeada
875
869 Carentes de formaletes, los arcos cruceros están muy poco apunta- Sandoval (tramo norte del brazo meridional del transepto; primer tramo
dos, semejando lo que AZCÁRATE ha denominado, siguiendo a Gómez de las naves laterales); y Santes Creus (toda la iglesia).
Moreno, una bóveda de ogivas: bóvedas cuyos arcos generadores son de Así ocurre en los capiteles 4, 5, 43 y 44.
medio punto, provistas de arcos cruceros también semicirculares sobre los En los 3, 6, 4I y 42.
8 7 2
que apoya la plementería y que como las de arista, carecen de formale- 873 Capiteles 3, 5 y 6.
tes (I974: 35 y 89 nota 26). Capiteles 5 y 43.
8 7 4
monasterios cistercienses en estancias dedicadas a fines utilitarios, como imposible discernir cómo se remataban en los ángulos superiores.
salas de monjes (Poblet), cocinas (La Oliva), lavabos (Santes Creus), etc., Capiteles análogos se pueden ver en la cabecera y transepto de
8 7 6
son a menudo utilizados en las iglesias, subrayando los austeros ideales La Oliva, especialmente en las capillas laterales (relación ya vista por
de la Orden. Así sucede en los monasterios de La Oliva (capilla central LÓPEZ DE GUEREÑO, 2004: 777 y MARTÍNEZ ÁLAVA, 2007: I I 3 ) ; en
y laterales, y capilla de San Jesucristo) y Fitero (capilla principal y capi- las girolas de Fitero y Santo Domingo de la Calzada y en el exterior de
lla central de la girola), ambos estrechamente relacionados con Valbuena; Agüero.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
206
Lámina 50.
Valbuena. Iglesia,
costado oriental del brazo
norte del transepto.
toro superior, ancha escocia y toro inferior alto y redonde- meridional extrema se sitúa otro nicho, esta vez con arco tri-
ado, con pequeña garra en el ángulo, sobre plinto prismá- lobulado de perfil achaflanado trasdosado por otro seme-
tico liso. Se levantan estas columnas sobre un basamento jante; la ausencia de un depósito para el agua lleva a pensar
paralelepípedo con la arista superior baquetonada —como que se trata de un simple armario que albergaría objetos de
los que veíamos en las pilastras del ingreso, con los que culto. Por lo que respecta al lado norte de la capilla extrema
empalman—, que se extiende a modo de zócalo por el inte- septentrional, éste se presenta liso, sin huellas de haber
rior de la capilla. únicamente es diferente el basamento de tenido armarios o piscinas. u n a puerta abierta en el muro
los ángulos N.E. y S.E. y el zócalo de los muros oriental y sur de la capilla meridional permite el acceso a la de San
meridional de la capilla extrema de la Epístola, que pre- Pedro. Por sus trazas —con arco rebajado que apea directa-
senta bajo el baquetón un listel . 878
mente sobre las jambas— parece que corresponde a época
En los muros meridionales de las dos capillas se dis- moderna, si bien con toda probabilidad se trata de la remo-
ponen tres pequeños nichos cuadrangulares de aristas vivas. delación contemporánea de un vano anterior . 880
En el testero se dispone un gran vano geminado. Lo de la nave del Evangelio de la abacial benedictina de Ira-
conforman dos estrechas y esbeltas saeteras rematadas en che , parte baja del refectorio de Retuerta , cabecera de
886 887
arco de cuarto de círculo -cuyos lados curvos convergen Agüero , etc. , como ya han indicado diversos estudio-
888 889
entre sí- con fuerte derrame y escalonamiento interno , 881 sos . Bajo las ventanas corre una imposta decorada con
890
separadas por un parteluz abocinado y muy desarrollado a billetes que se prolonga por los paramentos de las capillas . 891
modo de quilla, en cuyo frente se talla una columnilla pro- Las capillas intermedias constan de dos tramos, uno
vista de basa y capitel ; este último, de tipo vegetal, pre-
882
recto y otro semicircular, ambos de idéntica anchura. El
senta tres hojas de acanto ramificadas y carnosas con nervio tramo presbiteral se cubre con bóveda de cañón apuntado
central muy marcado que se vuelven hacia fuera formando que arranca de una imposta de nacela lisa, prolongación de
cogollos. Todo ello está cobijado por un arco apuntado de los cimacios de las pilastras que le dan acceso. Mientras que
sección rectangular y aristas vivas que voltea sobre peque- en los muros de la capilla meridional no hay credencias ni
ñas columnas acodilladas. Poseen éstas fuste liso cuyos tam- armarios, en el costado norte de la septentrional se abre un
bores no presentan la misma altura que las hiladas de los nicho rectangular. De perfil prismático liso, se marca a su
muros a los que se acodan; las basas siguen el modelo ya alrededor un ligero rehundido que permitiría cerrarlo con
visto, de ancha escocia y toro superior alto y redondeado puertas de madera . Este detalle, unido a la falta de pila
892
sobre plinto cúbico; en cuanto a los capiteles, responden al para el agua, indica su carácter de armario mural.
Tipo II, con gruesas hojas planas que se enroscan en las El ingreso a los hemiciclos se realiza a través de
esquinas formando volutas y ábaco taqueado. Están coro- robustos arcos apuntados de sección rectangular y aristas
nados con un cimacio de nacela simple que se extiende por vivas, que reposan sobre pilastras de características análo-
el muro en forma de imposta hasta enlazar con los cimacios gas a las que dan acceso a las mismas capillas. Las basas son
de las columnas acodilladas en los ángulos de las capillas . 883
idénticas y los podios en los que apoyan, tal y como acon-
Vanos de estructura semejante a éstos los encontramos en la tecía en los ábsides extremos, conectan con el zócalo que,
capilla de San Pedro de la catedral de Santo Domingo de la siguiendo idéntica molduración, recorren la parte baja de
Calzada , capillas laterales de La Oliva , primer tramo
884 885
los muros. En cuanto a los capiteles , son lisos los de la
893
881 Las correspondientes a la capilla meridional fueron transformadas 889 Similares a este tipo, aunque más simples, son las que aparecen en
en época moderna. Más bajas pero con mayor anchura, presentan arco los ábsides laterales y muros orientales de los brazos del transepto de
de medio punto muy moldurados. La datación tardía de estos vanos San Juan de Ortega (Burgos), capilla mayor de Santa María de Bareyo
queda avalada por el hecho de que los sillares de las jambas no se corres- (Cantabria) y en una de las iglesias de El Bayo (Zaragoza).
ponden con los que forman el derrame interno que, además, hubo de ser ANTON, 1942: 30 (Valbuena, La Oliva y Retuerta); ÍÑIGUEZ
8 9 0
rebajado al igual que el parteluz para dar cabida a las nuevas ventanas. ALMECH, 1968: 210-211 y 213 (Sto. Domingo de la Calzada, Irache,
Desconocemos si el escalonamiento fue retirado al mismo tiempo que se Agüero, La Oliva y Valbuena); JLMENO JURÍO, 1966: 29 (La Oliva y Sto.
hicieron estas reformas o con posterioridad. Domingo); URANGA GALDIANO e ÍÑIGUEZALMECH, 1973: I V 29-30;
La parte inferior de los parteluces, incluidas las basas, ha sido
8 8 2 LÓPEZ DE GUEREÑO, 2004: 777-778 nota 64; MARTÍNEZ ÁLAVA, 2007:
reconstruida siguiendo modelos presentes en las mismas capillas. 113, 192-193 y 215 (La Oliva, Sto. Domingo e Irache); CANELLAS
Desaparecidas casi en su totalidad, únicamente quedan restos de
8 8 3 LÓPEZ y SANVICENTE, 1979: 381 (Agüero, Sto. Domingo e Irache);
ella en la capilla septentrional extrema. CANTERA MONTENEGRO, 1984: 141 (Sto. Domingo, La Oliva, Val-
Dicha capilla, la única original conservada de la girola de la cate-
8 8 4 buena, Irache y Retuerta); MOMPLET MÍGUEZ, 1988: I, p.204 (Sto.
dral calceatense, exhibe tres ventanas de este tipo. La única diferencia Domingo y San Juan de Ortega); MOYA VALGAÑÓN, 1991: 48 (Sto.
con las de Valbuena estriba en la decoración de sus capiteles, en este caso Domingo, Irache, La Oliva y San Juan de Ortega); BANGO TORVISO,
figurada. 2000: 133 nota 307 (Sto. Domingo, Agüero, Valbuena y San Juan de
Sus ventanas repiten este modelo con la salvedad de que faltan aquí
8 8 5 Ortega); MARTÍNEZ DE AGUIRRE, 2008: 372 (Sto. Domingo, Agüero,
las columnillas acodilladas y el escalonamiento interno. Irache y La Oliva); etc.»
En este caso, el arco exterior describe un medio punto, en vez de ser
8 8 6 891 La correspondiente a la capilla meridional ha desaparecido en su
apuntado; está privado, como la anterior, del escalonamiento, y además, totalidad, al igual que ocurre con la de los costados de la capilla sep-
de capitel y basa en el baquetón del parteluz. tentrional. Sin embargo han quedado en los muros señales de su pre-
Seis vanos, dos por tramo, horadan el costado meridional del refec-
8 8 7 sencia. Se conserva parcialmente en el testero de la septentrional,
torio de este monasterio premonstratense, muy cercano a Valbuena. habiendo sido repuestos los faltantes durante las restauraciones.
Tapiados actualmente por el interior, en origen debieron mostrar una La forma torpe de encajarse en el muro nos hace pensar que fue rea-
8 9 2
disposición similar a la que estamos viendo (ANTÓN, 1942: 104). lizado con posterioridad, no habiendo sido previsto en los planes ini-
Las diferencias se acentúan. La capilla mayor tiene seis ventanas de
8 8 8 ciales.
medio punto, con fuerte derrame, emparejadas de dos en dos, de manera Muy deteriorados, tanto por el acoplamiento de unos retablos al
8 9 3
que las jambas interiores se unen en formando un parteluz que presenta hemiciclo como por haber sido picados durante las obras de restauración
una columnilla tallada en su frente; las jambas externas son lisas. Las que eliminaron los yesos que cubrían toda la iglesia. Tanto es así que los
ventanas dobles que iluminan las capillas laterales presentan columnas astrágalos de los pertenecientes a la capilla meridional han desaparecido.
simples en los extremos y dos en el parteluz. Ningún vano tiene escalo-
namiento interno.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
208
Los hemiciclos están ocupados en su integridad por
unos retablos barrocos que dificultan seriamente el estudio
de sus elementos y estructura original . A pesar de ello,
896
Lámina 51.
Como en el caso de las capillas extremas, bajo estos se des-
Valbuena. Iglesia, arrollaba una imposta que se prolongaba por el tramo recto
capilla del Santo y de la que hoy sólo queda su huella en los paramentos.
Cristo.
El ábside central, al igual que las capillas intermedias,
consta de dos tramos, uno recto y otro semicircular. El
ingreso se efectúa por medio de un gran arco triunfal apun-
tado y doblado únicamente hacia el crucero. Ambos poseen
capilla septentrional (Tipo I.I); el resto, muestran sus
894
perfil prismático, pero mientras el arco inferior muestra
cestas decoradas con grandes hojas planas, siguiendo el vivas sus aristas, la dobladura moldura la suya con un
modelo empleado en las columnas acodilladas de las capi- baquetón. El primero voltea sobre medias columnas geme-
llas extremas (Tipo II), pero sin rastro de volutas o bolas las embutidas en el muro, y la dobladura lo hace en una
en sus vértices (Tipo I.2) . 895 columna acodillada.
Capiteles 12 y 15.
8 9 4 GIL, 1986: 16; SOWELL, 1987: 120; BANGOTORVISO, 1994: 188-189;
Capiteles 32 y 35. Este tipo lo encontramos también en Fitero en
8 9 5 VVAA., 1995: II, 960; VALLEJO, 1995: 45; HERRERO MARCOS, 1997:
los capiteles de las primeras responsiones de las naves laterales. 166; OLIVERA ARRANZ, 2002 (2): 415; HERBOSA, 2003: 47; etc...
A esto debemos unir la capa de yeso que con carácter decorativo
8 9 6 En los capiteles (Tipo II) falta la voluta que remataba la hoja, y lo
8 9 8
cubre todos los elementos que conforman el hemiciclo, lo que acentúa mismo sucede con el cimacio de nacela que los coronaba y que se pro-
aun más la complicada observación del conjunto. longaría en imposta por el muro. De las basas se conserva prácticamente
Muchos de los autores que se han ocupado del análisis del edificio,
8 9 7 íntegra la de la izquierda, mientras que la del otro lado está totalmente
ya sea en monografías como en estudios de carácter general, han des- desgastada.
crito erróneamente el abovedamiento del hemiciclo de estas capillas, asig- Por otra parte, el vano parece fue modificado en época moderna,
8 9 9
nándoles una cubierta de cuarto de esfera, motivado en parte por la como lo demuestra el que las dovelas y sillares que lo encuadran - m u y
dificultad de visión. Véanse entre otros, ANTÓN, 1942: 16; LAMBERT, molduradas e iguales a las de las ventanas gemelas de la capilla meridio-
1931: 103; TORRES BALBÁS, 1952: 14; HERAS GARCÍA, 1966: 127; ARA nal extrema- no se correspondan con las hiladas de las jambas.
FUNDACIONES MASCULINAS • 20I
con toda seguridad se extendería a lo largo del hemiciclo. formado por un arco apuntado de sección prismática con
Además de la imposta reseñada, otra de idénticos caracte- la arista exterior perfilada por un delgado bocel entre esco-
res recorre el paramento a media altura. Sin duda, es pro- cias y por un baquetón en la interior; lo trasdosan, a par-
906
longación de la que, por el semicírculo absidal, recorría la tir de los riñones, seis arquillos también apuntados que
base de las ventanas allí abiertas. molduran su arista exterior con un fino baquetón, perma-
En el costado norte se dispone un nicho rectangular, neciendo vivas las interiores. El fondo queda libre para dejar
de aristas vivas, cuyos lados menores presentan unos rehun- el sitio necesario a un sepulcro. Apoya el arco en dos pare-
didos que servirían para encajar una puerta de madera. Se jas de columnillas de fustes monolíticos . Poseen unos907
trata pues, como ya hemos indicado en otro lugar, de un capiteles dobles de gruesas hojas carnosas en los ángulos,
armario para guardar objetos litúrgicos. En el lado opuesto con nervio central y reborde marcado que en sus extremos
los arcos triunfales de las capillas laterales descansan sobre columnas escalinata que se alza en medio del presbiterio y eleva, a partir de ese
simples, y el de la mayor sobre dobles columnas. Lo mismo sucede en punto, el pavimento de la capilla. En el de la Epístola debió existir, aun-
San Miguel de Estella, en donde las columnas geminadas de los torales que sería eliminado con la construcción de un nicho funerario.
son abandonadas en los brazos del transepto por unos soportes más sim- 905 Hallamos nichos destinados a este mismo fin y en idéntica ubicación
ples (LACOSTE, I977: I05). en Palazuelos, Matallana, Bujedo, Sacramenia, Monsalud, Bonaval, etc.
9QI Capiteles I9, 20, 27 y 28. El bocel prácticamente ha desaparecido, quedando escasos vesti-
9 0 6
Capitel 20.
9 0 2 gios de su existencia.
903 Como comentaremos más adelante, fueron ocultados y transfor- Las columnas de la derecha, a excepción de las basas, parecen obra
9 0 7
mados para instalar un retablo. reciente, inspirada en las del lado opuesto, muy dañadas y seccionadas.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
2I0
presentan cogollos entrecruzados, y ábaco liso; se coronan que trabajaron posteriormente en otros recintos del monas-
con un cimacio formado por filete, surco y baquetón entre terio .
908
escocias que se prolonga unos centímetros por el muro. Sus El hemiciclo junto con el arco triunfal que da acceso al
basas, también dobles, de tipo ático, muestran un fino toro mismo está en su totalidad ocupado por un retablo barroco
superior, alta escocia y toro inferior muy aplastado, con que se adapta perfectamente a la curva del ábside; esta estruc-
garras en las esquinas de nervio central marcado y otra más
tura se completa con un baldaquino exento erigido en el cen-
pequeña en la unión entre las dos basas; se elevan sobre un
plinto paralelepípedo liso (lám. 53). La tipología de capi- tro con la imagen de la Virgen . Como ocurría en las dos
909
teles, cimacios y basas en nada concuerdan con las hasta capillas adyacentes, el retablo impide una correcta interpre-
entonces utilizadas en la cabecera ni en otras parcelas de la tación de los elementos primitivos que lo conforman.
iglesia. Sí lo hacen, en cambio, con algunos modelos emple- El ingreso al hemiciclo se realiza a través de un gran
ados en la capilla de San Pedro y en las galerías claustrales, arco apuntado, posiblemente de sección prismática y aristas
de una cronología más avanzada a la del templo. Este hecho vivas como el de las otras capillas, que volteaba probable-
hace pensar que su apertura no fue prevista en el proyecto mente sobre dobles columnas adosadas °. Se cubriría aquél
9I
original, sino que es obra de un nuevo equipo de canteros con una bóveda formada por cuatro nervios que confluyen
Los cimacios responden al tipo I, los capiteles I.2 y las basas al I.2
9 0 8 el hecho de que en la embocadura de la capilla se haya abandonado el
del claustro (Vid. más adelante el proceso crono-constructivo). empleo de pilastras —sistema utilizado en las laterales— y se dispongan
909 A mediados del siglo XVIII, probablemente bajo el abadiato de fray columnas gemelas nos obliga a decantarnos por esta última opción. Ade-
Agustín López, se lleva a cabo la construcción de este espectacular reta- más contamos con el ejemplo de la Oliva, que presenta la solución por
blo. nosotros propuesta, no debiendo olvidar los numerosos puntos de con-
ANTÓN opina que lo hacía sobre pilastras (I942: I5). Sin embargo,
9 1 0 tacto que hay entre las dos abaciales.
FUNDACIONES MASCULINAS • 20I
en la clave del arco triunfal y delimitaban, sin duda, cinco de sección prismática y aristas vivas que descansa directa-
plementos cóncavos . Nervios y formeros tendrían, aunque
911
mente sobre unas jambas de perfil análogo. Seguramente
de los primeros sólo son visibles algunos sillares a través de apoyaban sobre una imposta que, recorriendo todo el semi-
las tablillas de madera que los recubren, perfil rectangular y círculo, enlazaría con la de nacela simple que recorre a
aristas vivas, siguiendo el modelo empleado en el resto del media altura el tramo recto.
templo. Ambos voltearían sobre columnas entregas , que 912
reiterarían los modelos de capiteles, basas y podios vistos en El transepto es amplio, perfectamente marcado tanto
los pilares que se abren al crucero. en planta como en alzado . 913
u n a ventana, con derrame interno muy acusado, se Cada brazo consta de dos tramos cubiertos con bóveda
abre en cada uno de los tramos resultantes de la comparti- de cañón apuntado de eje perpendicular a las naves, separa-
mentación del hemiciclo por las columnas que recogen las dos por arcos fajones simples de sección rectangular y aris-
nervaduras de la bóveda. Presentan arco de medio punto tas vivas (láms. 54 y 55). Descansan éstos sobre pilastras que
911 El hecho de que las capillas contiguas se cubran con este mismo sis- refuerzo, como en los templos de La Oliva, Huerta o Sandoval. Otros,
tema de abovedamiento nos lleva a pensar que en la capilla mayor, cuya sin embargo, indican que se cubre simplemente con una bóveda de horno
cubrición necesariamente se efectúa una vez construidas las bóvedas de (MARTÍN GONZÁLEZ, 1970: 304; VALDIVIESO, 1975: 301, y VVAA.,
las laterales, se siga el procedimiento indicado en el texto (Bóvedas de 1995: 960).
nervios que se unen en la clave del arco de acceso con plementos cónca- ANTÓN, 1942: 16. Por su parte, HERRERO MARCOS, 1997: 165-
9 1 2
vos las vemos también en Monsalud, capilla mayor de Fitero, capilla de 166, señala que se cubriría con una bóveda de cuarto de esfera refor-
San Jesucristo de la Oliva) y no se resuelva, como han señalado algunos zada por nervios que arrancarían de "pequeñas ménsulas ubicadas en la
autores (entre otros, ANTÓN, 1942: 16; TORRES BALBÁS, 1952: 13; base del cascarón". Desconozco las razones que le empujan a señalar esta
EYDOUX, 1954: 190 nota 40 y 206; MARTÍN GONZÁLEZ, 1961: 170; solución.
HERAS GARCÍA, 1966: 127; OLIVERA ARRANZ, 2002 (2): 415; MAR- 913Sobresale ligeramente respecto a la cabecera, mientras que lo hace
TÍNEZ ÁLAVA, 2007: 113), con una bóveda de horno con nervios de considerablemente en relación a las naves.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
212
duras lo hacen en una columna acodillada, iguales a las que
habíamos contemplado en el acceso a la capilla mayor.
Hay que señalar, sin embargo, dos diferencias entre
estos soportes. En primer lugar, el despiece de los fustes. Si
en el caso de las columnas situadas a oriente del crucero -es
decir, anejas a la cabecera- el número de tambores asciende
a veintisiete, las de occidente -contiguas a las naves- cuen-
tan con un total de veinte; por otro lado, en todas ellas su
altura concuerda con la de los sillares del pilar al que se arri-
man . Y en segundo lugar, la tipología de los capiteles. Los
916
9 1 4ANTÓN creía que se trataba de una simple columna (1942: 15). Núms. IX, X V I y XXVI; capiteles 18, 29 y 59. Modelo que halla
9 1 7
9 1 5Esta dobladura es análoga a la del toral de la capilla mayor y for- también en el acceso a la capilla mayor.
maletes del claustro. Capiteles 52 y 66.
9 1 8
9 1 6Únicamente hay una irregularidad en el pilar toral S.O. (XXVI) Capitel 51.
9 1 9
que no supone un parón de las obras, sino más bien un error de ejecu- Otros monasterios cistercienses españoles que tienen o tuvieron
9 2 0
ción. Cuando se procedió a elevar dicho pilar se construyó íntegramente cúpulas en el crucero son, por ejemplo, Armenteira, Osera, Casbas y Las
su frente oriental con las dobles columnas y codillos, y a continuación Huelgas. En Francia también fue utilizada con frecuencia, como se puede
se voltearía el primer fajón de la nave de la Epístola y luego se comple- ver en Cadouin, Obazine, Mazan, Senanque, Léoncel, Bonnecombe...
taría el muro. De ahí que no se correspondan los sillares que conforman (AUBERT, 1947: I, 241-242).
el pilar con las hiladas del paramento contiguo.
FUNDACIONES MASCULINAS • 20I
En el testero del brazo sur del transepto (lám 54), en excepto sus huellas en el muro. Lo más seguro es que fuese
su parte baja, se abre la puerta que comunica con la antigua de madera (lám. 5 5 ) . 926
sacristía (actual ante-sacristía), pero la configuración de su En el testero del brazo opuesto, actualmente tapada por
dintel y jambas responde a reformas modernas. Por encima
un retablo, se sitúa la Puerta de los Muertos que llevaba al
de ésta y a la derecha, cercana al muro occidental del tran-
septo, se encontraba la llamada Puerta de Maitines que con- cementerio situado cerca de la cabecera. Únicamente visible
ducía al dormitorio común. Tapiada desde principios del desde el exterior, presentaba hacia el transepto un perfil seme-
siglo XVIII como consecuencia de los cambios de elevación jante al que ofrecía la puerta abierta en el tercer tramo de la
de nivel sufridos por el dormitorio, probablemente se abrió nave del Evangelio: arco apuntado que voltea directamente
sobre la primitiva un balcón desde el cual se podía obser- sobre las jambas, ambos de sección prismática y aristas vivas . 927
var el interior de la iglesia, como parece indicarlo toda esta Por encima de esta puerta y apoyando sobre la línea de
zona del paramento, muy removida y con mechinales cega- imposta que recorre el paramento interior a la altura de los
dos, y los restos conservados en el dormitorio . De la esca-
925 cimacios de los capiteles de los soportes, se sitúa un gran óculo
lera que permitía el acceso hasta esa puerta nada queda cuya única arquivolta de perfil prismático liso, sin moldurar,
9 1 Cuando Francisco ANTÓN visitó el monasterio, las trompas y bóveda de crucería, de la que aún son visibles los arranques de los ner-
cúpula estaban ocultas por un revoco de yeso barroco, afirmando que el vios (VALLE PÉREZ, I982: I, I05).
cimborrio databa "del siglo XVI, sobre trompas y base antiguas, y susti- Sea como fuere, la construcción de esta cúpula implica una clara
9 2 4
tuyendo a otro primitivo" y que "En el crucero hubo siempre cimborrio infracción al espíritu austero de la Orden que prefería estructuras
sobre trompas que, bajo el revoco y los adornos actuales, deben perdu- arquitectónicas uniformes y tendentes a la horizontalidad (TORRES
rar; la linterna, ochavada (... ) es moderna, con restos, en los arranques, BALBÁS, I952: I33; VALLE PÉREZ, I982: I, I05 y 268 nota 67), res-
de la vieja" (I942: I 4 y I5-I6, respectivamente). A partir de entonces, pondiendo en gran medida la inclusión de tales elementos en sus
algunos autores han afirmado que el único resto original que persiste monasterios a la tradición románica local (ANTÓN, I942: 27-28;
son las trompas, correspondiendo la cúpula al siglo XVI (LAMBERT, LIAÑO MARTÍNEZ, I976-77: 209; VALLE PÉREZ, I982: I, 44, I36
I 9 3 I : I 0 2 - I 0 3 ; ARA GIL, I986: I6; CAÑEDO, ESPINOSA, VARONA, nota I75 y 262, nota 67; entre otros. Por otra parte, Marcel AUBERT
I988: I9; GARCÍA FLORES, I996: 564; OLIVERA ARRANZ, 2002 (2): destaca la frecuencia con que se construyeron en España, Italia e Ingla-
4 I I y 4I3). Lo cierto es que tanto las trompas como la cúpula son obra terra —I947: I, I42—.
medieval, si bien esta última fue abierta —ya lo hemos indicado en el Vid. al respecto el capítulo dedicado a las dependencias monásti-
9 2 5
ello los tenemos en Palazuelos, Meira, Monsalud o Huerta, siendo octo- sido repicada y el que también en esta zona se talló el zócalo que reco-
partita las de Moreruela, Sandoval y Valdediós (Vid. al respecto la mono- rre todo el perímetro interior de la iglesia, nos hace pensar que nunca
grafía de Palazuelos). tuvo escalera pétrea, como las podemos ver por ejemplo en Huerta, San-
923 En Osera, la cúpula sí es consecuencia de un cambio de planes en tes Creus, Poblet, Moreruela...
la cubrición del crucero, estando previsto en un principio introducir una ANTÓN, I942: I6-I7.
9 2 7
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
2I4
muestra su rosca decorada con dientes de sierra . Aparece 928 transepto tienen una pilastra a cada lado , los restantes
934
cobijado por un arco de medio punto con ligero derrame poseen columnas acodilladas . 935
interno y retranqueado respecto a las jambas sobre las que Se alzan estos pilares sobre basamentos cruciformes
apoya; tanto aquél como éstas, presentan sección rectangular (pilares exentos), en forma de T (las responsiones) o sim-
y aristas vivas929. 929
ples cubos (las columnas de los ángulos N . O y S.O), en los
En el costado occidental de este mismo brazo se dis- que podemos distinguir dos tipos según su molduración:
pone una pequeña puerta que da paso a una escalera de - arista superior baquetonada (Tipo I ) . 936
caracol ubicada en el ángulo formado por el transepto y las - lisos (Tipo 4 ) . 937
mes que presentan en todos sus frentes dobles semicolum- En cuanto a los fustes, todos son lisos y están for-
nas entregas y columnas acodilladas en los ángulos (lám. mados por tambores que, al igual que veíamos en la cabe-
5 8 ) . Son diferentes, por su situación, los dos más orien-
WI
cera, presentan una altura igual a la de las hiladas del pilar
tales , cuyas columnas orientadas hacia la nave central se
932
al que se adosan o acodan. Hay que hacer, no obstante, dos
interrumpen a media altura, y los contiguos a la fachada observaciones respecto a los tambores. En primer lugar, el
occidental, constituidos por un núcleo cuadrado con número de tambores de las columnas de los pilares adosa-
columnas gemelas en su frente y una simple, acodillada, a dos: si en la primera responsión de la nave norte (XXV)
cada lado . Sus responsiones responden a dos tipos:
933
hay once, en la primera del lado opuesto (XXVIII) son
ambos, de núcleo cúbico, llevan semicolumnas geminadas nueve y en el resto ocho. Y en segundo lugar, su diámetro
en sus frentes, pero mientras que los dos más cercanos al es menor a partir del último tramo (XXXII a XLIV).
La mayoría de los capiteles muestran motivos vegeta- En la siguiente clasificación tipológica continuamos la
les muy sencillos a base de hojas planas y estilizadas pega- numeración iniciada en la cabecera y transepto.
das a la cesta, con nervios apenas marcados y a veces TIPO I. Cesta cúbica lisa, sin decorar . 944
los dos últimos tramos de la nave central y el penúltimo de 111.2. Las hojas intermedias terminan en peque-
la Epístola o reformados junto con las cubiertas de aque-
941
ños lóbulos trasdosados por un junquillo
llos tramos , y otros parecen haber sido rehechos durante
942
(6I-E). El 56 tiene además en sus ángu-
las restauraciones . 943
los bolas y cogollos.
940 Capiteles 107, 108, 114, 115, 118 y 119. 943Capiteles 100, 113, 116, 120, 122, 126, 130, 139 y 142.
941 Vid. en último término, GARCÍA FLORES, 1996: 563. Capiteles 48, 50, 68 y 70. Idénticos los encontramos en las embo-
9 4 4
942 Capiteles 123 a 125, 127 a 129, 140 y 141 (Los 124 y 128 han caduras de las capillas laterales y soportando los fajones de los brazos del
sido reconstruidos durante las restauraciones). Se trata de capiteles de transepto.
faja decorados con tallos serpenteantes que brotan de pequeñas cabezas, Capiteles 53, 54, 57, 60, 62, 63-N y 69.
9 4 5
medias . 953
o cogollos . 956
das . 958
2. Liso . 960
Capiteles 72, 74, 76, 78, 80, 84, 86, 88, 91, 92, 94-E, 104 y 106.
9 4 7 9 5 7Capiteles 133, 134, 136 y 137.
948 Capitel 94-0. 9 5 8Capitel 105.
949 Capiteles 82, 93, 98 y 99. 959 Núms. X X V a XXVIII y XXX a XXXII.
950 Capiteles 96, 97, 101 a 103, 135 y 144. 9 6 0Núms. XXIX, XXXVI a XLIV
951 Capiteles 131, 132-E y 143. 961 Núms. XXVIII a XXXIII, XL, XLIII y XLIV.
952 Capiteles 132-0 y 138. 9 6 2Núms. XXXVII a XXXIX, XLI y XLII
953 Capitel 111. 9 6 3Falta en el segundo tramo, seguramente a causa de la construcción
Capiteles 61-0, 65, 66, 71, 73, 75, 77, 79, 81, 83, 85, 87, 89,
9 5 4 en esa zona de la escalera que comunica con el sobreclaustro.
90, 95, 109, 110, 112 y 117. 9 6 4N o es una clave destacada, sino que el entrecruzamiento de los ner-
Capiteles 51, 55 y 58.
9 5 5 vios se decora con unos sencillos motivos decorativos, como ocurre tam-
956 Capitel 49. Estos motivos son empleados en los capiteles conti- bién en la nave central de Villamuriel de Cerrato, como ha señalado ARA
guos al crucero de los pilares torales N.O. y S.O. GIL, 1992 82): 17.
FUNDACIONES MASCULINAS • 20I
decoradas con los escudos heráldicos de los Marqueses de en unas piezas tronco-cónicas invertidas que decoran su parte
Astorga y otros no identificados, y corresponden a una
965 superior con lóbulos, y al sur en unas molduras convexas
época más avanzada . 966 ornamentadas con flores de pétalos lobulados y botón cen-
tral . u n detalle a tener en cuenta y que es demostrativo del
969
Los perpiaños son apuntados, de perfil rectangular y cuidado que se ha puesto en la construcción es que el diá-
aristas vivas, estando todos doblados excepto el toral, que es metro de los fustes va disminuyendo gradualmente conforme
simple ; estas dobladuras son muy estrechas. El que efectúa
967
descienden y se acercan a esas pequeñas ménsulas, de tal
la separación entre el tercer y cuarto tramo es, al igual que manera que la transición entre unos y otras no es traumática.
éstos, obra del siglo XVI. Voltean éstos sobre las dobles Dobladuras, nervios y formaletes apean sobre las columnillas
columnas embebidas en los pilares, columnas que en el caso acodilladas en los ángulos de los pilares. o t r o aspecto a des-
de las más orientales no llegan hasta el basamento de los
968
tacar del buen hacer de los canteros es que el salmer de todos
pilares sino que se interrumpen muy por encima del arran- aquellos está labrado en un único sillar, algo que, obviamente,
que de los arcos de separación de naves y rematan, al norte no sucede en los tramos modernos . 970
Trastamara, cuarto de Villalobos y duque de Aguiar ( + I47I), había con- rar las causas que motivaron este cambio.
traído matrimonio con Leonor Enríquez, hija del infante don Fadrique, Sólo presenta dobladura, como ya hemos visto, hacia el crucero.
9 6 7
Almirante de Castilla. Sus descendientes unieron las armas de las dos Así lo intuía ANTÓN, si bien, a causa del revoco que cubría la igle-
9 6 8
casas, resultando de esta combinación un escudo como el que contem- sia, no llegó a verificarlo (I942: I5 y 64 nota I4).
plamos en la clave central de la bóveda del tercer tramo: de oro, dos lobos 969 Sobre este procedimiento véase lo dicho al respecto en la mono-
pasantes de gules, lampasados de lo mismo; campaña de azur con tres grafía de La Espina.
palos vibrados de plata; y bordura componada de diez piezas, y cada com- Recordemos, no obstante, que el primer perpiaño carece de dobla-
9 7 0
pón, mantelado: I° y 2° de gules con un castillo de tres torres de oro, dura hacia la nave, y que en el tercer perpiaño sólo ocurre hacia el
aclarado de azur, y mantel de plata con león rampante de púrpura segundo tramo, ya que en el tercero la bóveda es moderna.
(MENÉNDEZ PIDAL DE NAVASCUES, I 9 8 2 : I 5 6 ) . L o s escudos de las cla-
ves secundarias son meras indicaciones de la formación del blasón central.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
2I8
teras se accede a las cubiertas de las naves laterales. Aunque
esta estructura fue modificada seguramente cuando se cons-
truyó el coro alto y durante las intervenciones ulteriores
—tanto las históricas como las restauradoras del siglo XX—,
creemos que su origen medieval está fuera de toda duda:
estamos ante un espacio que actuaría a modo de pequeña
tribuna poniendo en comunicación el trasdós de la nave
norte —al que se accedía como hemos señalado desde la
escalera de caracol ubicada en el brazo norte del transepto—
con el de la sur, con el fin de facilitar el mantenimiento de
las cubiertas . 973
arquivoltas de idéntico perfil (media caña, baquetón y esco- san, al igual que ocurría con los perpiaños de la nave cen-
cia). Está cobijado, al igual que ocurría en el óculo del tran- tral, en dobles columnas adosadas a los frentes de los pilares
septo, por un profundo arco de medio punto rebajado que de separación de naves.
apoya directamente sobre las jambas, ambos de sección rec- Las naves laterales se cubren con bóvedas de crucería
tangular y aristas vivas. Desde el coro alto y mediante unas
cuatripartita y plementería francesa, cuyos nervios presen-
escaleras se accede a la base de este gran arco y desde aquí
y a través de dos pasos —uno al norte, otro al sur—, excava- tan sección prismática y aristas vivas. Sus claves muestran
dos en el espesor del muro e iluminados por pequeñas sae- motivos variados:
ANTÓN, I942: I7, señalaba que carecía de ellas, tal vez por la capa
9 ? I ejemplo semejante, el de Valdediós, también muy modificado. En los
de yesos que al interior cubría la iglesia y porque al exterior estaban monasterios cistercienses navarros existen pasos con semejante come-
cubiertas por los tejados de las naves laterales. Lo mismo repite LAM- tido, pero son exteriores: en Iranzu existe una suerte de paso interior en
BERT, I 9 3 I : I 0 3 . la parte alta de la fachada occidental resultado de haber macizado por el
Todas, excepto la ventana norte del primer tramo, han perdido
9 7 2 exterior un gran arco apuntado que cobijaba el rosetón y dos ventanitas
parte de su escalonamiento interno y además, la situada al sur en ese que iluminaban la nave, presentando seguramente en origen un aspecto
mismo tramo ha sido parcialmente cegada. similar al de los pasos de las fachadas de La Oliva y Fitero (JiMENO
973u n a solución análoga que aunque reformada modernamente data JURIO, I982: 29; idem, I 9 8 2 (2): 24; LÓPEZ LACALLE, I994: I42; y
de época medieval, aparece en la abacial suiza de Hauterive: sobre la PÉREZ LERENDEGUI y HERNÁNDEZ BASURKÓ, 2 0 0 0 : I 6 ; MARTÍNEZ
puerta occidental hay una tribuna desde la cual, a través de dos puertas ÁLAVA, 2007: I 2 4 - I 2 5 y I52-I53).
excavadas en los muros laterales, se accedía a los edificios conventuales Hay que tener en cuenta, sin embargo, que los últimos tramos
9 7 4
y a una escalera que comunicaba con los tejados (WAEBER-ANTIGLIO, sufrieron importantes modificaciones durante el siglo XVI, pudiendo
I978: I I I - I I 2 ) . En España, además del de Valbuena, sólo conozco otro haber desaparecido otros restos semejantes, aunque no hay huella de ello.
FUNDACIONES MASCULINAS • 20I
Este detalle provoca que los nervios de las bóvedas contiguas hecho, junto con el que la rosca de los arcos formeros y fajo-
penetren de manera forzada en el ángulo que forman la nes que delimitan el primer tramo de las naves laterales estén,
dobladura y, de un lado, el arco de separación de naves y de hacia el interior de dicho tramo, trasdosados por varias hila-
otro, el muro (láms. 60 y 62). N o sucede lo mismo a partir das de sillares, necesarias para lograr el apuntamiento ade-
del segundo perpiaño, incluido éste. El tamaño de la dobla- cuado para dar forma al plemento de la bóveda de crucería,
dura se ha reducido dejando suficiente espacio para que junto obliga a pensar que la actual cubrición de las naves no estaba
9 7 5Idéntica a la del primer tramo de la nave mayor. rrecciones, en el uso de este procedimiento a medida que avanzamos
9 7 6Responde al mismo modelo que la del segundo tramo de la nave hacia los pies de las naves, especialmente a partir del soporte XXXVII.
central. Solamente en una ocasión (XLIII) se resuelve el mencionado sistema
9 7 7Los del segundo tramo de la nave de la Epístola tienen la arista correctamente. En unos casos, formeros, dobladuras y nervios se tallan
achaflanada. individualmente desde sus arranques (XXXVII, XXXVIII, XLI y
9 7 8Las dobladuras del tercer fajón de la nave de la Epístola muestran XLII); y en otros, aun estando labrado en una misma pieza el salmer de
sus aristas achaflanadas. esos tres elementos, alguno de éstos apoya independientemente sobre el
979 Hay sin embargo una serie de excepciones, mejor sería decir inco- soporte, a veces de modo chapucero (XXXIX, XL y XLIV).
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
220
truida cuando se construyó la escalera que comunica la igle-
sia con el claustro alto y que ocupa la parte superior de este
tramo e íntegramente el segundo . Aún se puede ver la
985
Vabuena. Iglesia,
clave de bóveda En el primer tramo de la nave de la Epístola, su lugar
del tercer tramo
prevista en el plan original y que a unos soportes pensados habitual, se abre la Puerta de los Monjes que comunica con
de la nave 980
de la epístola. para unas bóvedas románicas se adecuan otras góticas durante el claustro . Consta por este lado de un arco ligeramente
989
por esas hiladas debido a que se construyó una vez adoptado el nuevo ventanas que iluminasen la nave de la Epístola (1942: 45). Por otro lado,
sistema de cubierta y, por lo tanto, más elevado que el primero. Por otro el hecho de adosarse a este lado el claustro no impide que se abran vanos
lado, volveremos a encontrar esta sobreelevación de la rosca en el tercer en este muro (vid. las monografías de La Espina y Palazuelos).
y cuarto perpiaño de esa misma nave. Responde en este caso no tanto a En su construcción se debieron reaprovechar sillares primitivos
9 8 5
un cambio de planes en la cubrición como a un error de trazado que, como parece indicarlo la presencia de numerosas marcas de cantero simi-
como veremos en el proceso crono-constructivo, se detecta en las parce- lares a las de otras parcelas del templo.
las más occidentales del templo. La primera, adintelada, parece obra reciente. Las últimas, de arco
9 8 6
981 Pensaban lo contrario, es decir, que los soportes estaban planeados de medio punto con aristas vivas que reposa sin ningún tipo de transi-
desde el principio para recibir las bóvedas de crucería LAMBERT, 1931: ción sobre las jambas y amplísimo derrame interno, serían abiertas
103; ARA GIL, 1986: 17; CAÑEDO, ESPINOSA y VARONA, 1988: 20; cuando se construyó el coro alto a los pies de las naves y se destinó el
SOWELL, 1987: 151 y 160, entre otros. sotocoro, cerrando y separándolo del resto de la iglesia mediante una
La carencia de luces en la iglesia de Valbuena ha sido puesta en rela-
9 8 2 verja, a parroquia con pila bautismal; en cualquier caso, también han
ción con la de otros edificios como Rueda, Fitero y la Oliva por VAU- sido retocadas durante las restauraciones.
B0URG0IN, 1990: 51, nota 51. VALLE PÉREZ, por su parte, ha apuntado Vid. nota 982. Sin embargo, en Valbuena tampoco se construyeron en
9 8 7
que la ausencia de vanos en parte del costado norte de la nave de Bujedo los otros tramos de la nave de la Epístola, algo que sí sucedió en aquellas
de Juarros tal vez sea debida a condiciones climáticas (1986: 108, nota abaciales, por lo que esta opción debe desestimarse en el caso que nos ocupa.
141), algo que ya había señalado CROZET para el caso de la abacial de "Les Cisterciens n'ont jamais sacrifié la solidité de l'édifice, l'équi-
9 8 8
Sigena (1970: 303). libre des voutes, la résistance des supports, a l'éclairage" (AUBERT, 1947:
983 CAÑEDO, ESPINOSA y VARONA, 1988: 21, ponen en duda su ori- I, 296). Vid. el apartado dedicado al proceso crono-constructivo.
ginalidad. 9 8 9 AUBERT, 1947: I, 300.
FUNDACIONES MASCULINAS • 20I
de las reformas efectuadas en época m o d e r n a . También 990 además de la de monjes/as y la de conversos/as, aunque son
en el cuerpo alto del tercer tramo se ubica una puerta que contemporáneas al resto del edificio, están situadas suficien-
da paso al coro alto desde el sobreclaustro. Como la ante- temente lejos de los pies del templo como para pensar que
rior, data del siglo XVI < 99I podían ser también empleadas por los conversos/as . 994
En la misma nave pero en el último tramo se abren A pesar de no contar con otros paralelos más cercanos,
dos puertas que comunican directamente con la galería la explicación más lógica a este suceso es suponer que las dos
claustral adyacente. Presentan arcos apuntados y rebajados, actuarían como Puertas de Conversos, aunque destinadas a
de perfil rectangular y aristas vivas que voltean sin inter- fines distintos : la más occidental sería utilizada habitual-
995
mediarios sobre jambas de similares características. Sólo mente por ellos al entrar o salir de la iglesia para asistir a las
hay una diferencia entre ellas: la situada a occidente es más misas y oraciones que tenían determinadas, mientras que la
baja y tiene mayor luz. Ambas están tapiadas hacia la parte oriental sólo la usarían los domingos o festivos para, desde el
del claustro. Por su localización debe tratarse de las puer- templo, acudir a escuchar el sermón que recitaba el abad en
tas utilizadas por los conversos para acceder al lugar que la sala capitular . Hacia el claustro ambas puertas estarían
996
tenían adjudicado en la parte occidental de la iglesia, aun- separadas por algún cancel que cerraría de ese modo la gale-
que extraña el hecho de que haya dos vanos en lugar de uno ría occidental al resto de las crujías, actuando aquélla como
sólo, como solía ser habitual. Además, ambas parecen estric- si fuera un auténtico callejón de conversos . 997
posición semejante, ya que en los casos de Veruela y Las ción que nos da Francisco Antón de ella, "pequeña, apuntada
Huelgas de Burgos —ambas con dos puertas en los últimos y sin decoración alguna", y la fotografía que incluye en su
tramos de la nave contigua a las dependencias monásticas—, libro, podemos afirmar que responde a la misma tipología
sólo una de ellas responde al plan original ; y en los de 993 que las otras puertas de la iglesia y, por tanto, a su plan ori-
Bujedo y San Andrés de Arroyo, en los que existe otra puerta ginal. Definir cuál era su destino es muy difícil, ya que no era
ANTÓN sospecha que fue "en lo antiguo" una ventana (I942: I7).
9 9 0 un tramo más hacia oriente, comunicaba con el claustro. La primera es,
En efecto, parece que hubo aquí una ventana pero, como hemos visto más ciertamente, la primitiva, mientras que la segunda es algo más tardía y
arriba, centrada en el tramo. desconocemos las razones por las que se abrió.
El mismo autor cree que "puede ser el antiguo ingreso de conver-
9 9 1 En el monasterio burgalés, además de la puerta de conversos situada
9 9 4
sos, desde la terraza del claustro, próxima al dormitorio de ellos, a su en el quinto tramo, se abre otra en el segundo tramo que ha sido iden-
coro, hacia los pies de la iglesia, mediante escalera" (Ibidem), como tificada como mera puerta secundaria de salida al claustro (VALLE PÉREZ,
sucede efectivamente en Fossanova y Hautecombe (CLAIR, I960: 24). La I986: 5I-53). En el palentino la puerta de conversas de dispone al final
inexistencia de estancias de conversos adosadas al ala occidental del claus- del quinto y último tramo de la nave, mientras que otra, abierta en el
tro, aspecto que trataremos detenidamente más adelante, obliga a recha- cuarto, limitando con el tercero, parece que era utilizada para enterra-
zar este supuesto. mientos de monjas en el claustro o procesiones (ARA GÍL, I990: 59,
L o s arquitectos CAÑEDO, ESPINOSA y VARONA en u n i n f o r m e rea-
9 9 2 nota I I I ; GUTIÉRREZPAJARES, I993: 5I). Por su parte YÁÑEZNEÍRA
lizado en I 9 8 8 bajo el título Restitución planimétrica y propuesta de intervención y TÓBÍO CENDÓN, 2 0 0 I : 43-45, señalan simplemente que la puerta
en el monasterio de Santa María de Valbuena. San Bernardo. Valladolid (Junta de intermedia "sirve para ingresar en el trascoro".
Castilla y León. Consejería de Educación y Cultura. Dirección General Otro motivo que provocaría la apertura de dos puertas en lugar de
9 9 5
de Patrimonio Cultural. Valladolid, VA-40, 2I), apuntan que una debía una podría ser la de que el monasterio contase con un elevado contin-
servir de entrada de los conversos, sin especificar cuál de ellas y para qué gente de conversos, dato que a la luz de la documentación conservada no
se utilizaba la otra (A partir de ahora le citaremos como Restitución plani- podemos verificar.
métrica). Sobre la vida y costumbres de los conversos, así como de las depen-
9 9 6
993En el quinto tramo de la nave de la Epístola del monasterio de dencias a ellos destinados en el complejo monástico, vid. DUCOURNEAU,
Veruela se practican dos puertas: la más occidental comunica con la cilla I929; AUBERT, I947: I, 5I-59, y II, I 2 I - I 4 0 ; LEFEVRE, I955; idem,
y la oriental con el claustro. Sin embargo, únicamente la primera, la I955 (2); MIKKERS, I962; LECLERCQ, I965; DUBÓÍS, I 9 7 I ; etc... Una
auténtica Puerta de Conversos, pertenece al plan original. La segunda completa, revisada y anotada edición de los Usus Conversorum, en WAD-
fue abierta con motivo de la reconstrucción del claustro durante el siglo DELL, 2 0 0 0 .
XIV que, junto con la ampliación de la cilla y consiguiente desaparición Valbuena no tuvo pasadizo de conversos ni tampoco estuvo previsto
9 9 7
del pasaje de conversos, motivó la apertura de un nuevo paso para éstos tenerlo. Más adelante desarrollaremos esta hipótesis. LÓPEZ DE GUE-
(CRIADO MAINAR y BORQUE RAMÓN, I 9 9 3 : 60; MARTÍNEZ BUÉNAGA, REÑ0 en I998: 259 nota I 7 y 2003: I05 nota 2I, sugiere la existencia
I998: I I 9 y I59). En el caso del cenobio burgalés, una puerta situada de canceles separando la panda occidental de las otras en el caso de que
en el octavo tramo —hoy parcialmente oculta por un coro de madera— no hubiese corredor de conversos y éstos saliesen directamente del tem-
daba paso al Corredor de las Conversas —cegado parcialmente por la plo al claustro.
construcción de unas capillas en sus extremos—, mientras que otra situada En los años veinte del siglo XX ya estaba cegada.
9 9 8
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
222
pasando por la nave central, brazos del transepto y capilla
mayor, hasta llegar a las capillas y naves laterales . I003
el carácter horizontal del edificio, alterado únicamente por el lares características a la de la central divide en dos cuerpos
cimborrio que se eleva sobre el crucero, la espadaña que horizontales el frente de estas capillas, pero a diferencia de lo
corona el hastial del brazo sur del transepto y el pequeño que ocurría en aquella, la imposta no ciñe ahora a los con-
torreón construido en el ángulo noroeste de la fachada occi- trafuertes y, en el caso de las capillas extremas, corre una
dental . Tampoco puede dejarse de lado el juego de volú-
1002 hilada más alta que en las intermedias . Por encima de la
1007
menes, escalonados, sin grandes rupturas desde el cimborrio, imposta se sitúan las ventanas. Como ocurría en el interior,
de conversos"; lo mismo piensan OLIVERA ARRANZ, 2002 (2): 411; y pales de monasterios cistercienses, como Carrizo, San Andrés de Arroyo
VICENTE PRADAS y MARTÍN LOZANO, 2 0 0 6 : 19. y Veruela, o las naves de Poblet y Santes Creus. También se localizan en
En el caso de Bujedo, VALLE PÉREZ, 1986: 53 señala ya esta ana-
1000 otros edificios románicos y góticos de Valladolid (Piña de Esgueva y
logía, mientras que para el de las Huelgas por el momento nadie ha dado Villalba de los Alcores), Palencia (Santa Cruz de Rivas), Burgos (Butrera,
una explicación. Respecto a Matallana y Palazuelos, véase sus monogra- San Pedro de Tejada y San Vicentejo de Treviño), etc...
fías. Falta, sin embargo, en el contrafuerte que enlaza con las capillas
1 0 0 5
dra, especialmente de la cabecera y partes bajas del brazo norte del tran- extrema al ser absorbidos por la construcción de la capilla de San Pedro.
septo, mostrándose en estas zonas muy deteriorada. Esta diferencia de altura no permite hablar de distintas fases cons-
1 0 0 7
Cada brazo del transepto está dividido hacia oriente de su interior . Al norte, en el ángulo formado por este
1016
en dos tramos separados por un contrafuerte prismático cuerpo y el muro oeste del brazo, se dispone un contra-
liso de escaso resalte que, como los vistos en la cabecera, fuerte prismático acabado en vertiente lisa.
suben hasta el alero y se corresponden con los arcos fajo- Ambos brazos se cubren con un tejado a doble ver-
nes de la bóveda del interior. En los respectivos extremos de tiente que apoya en una cornisa similar a la vista en la cabe-
los muros se disponen otros contrafuertes semejantes . 1015
cera. Únicamente varía en la mitad septentrional del lado
La organización de los brazos varía a occidente. En oeste del brazo norte, descansando aquí sobre una simple
este lado, el brazo sur carece de contrafuerte en su extremo imposta de nacela que se prolonga también por la torre . 1017
meridional, y el situado en el centro permanece parcial- El hastial norte del transepto está flanqueado por dos
mente oculto bajo el actual tejado que cubre la nave lateral fuertes contrafuertes prismáticos con remate escalonado en
y el sobreclaustro. En el lado occidental del brazo norte forma piramidal y culmina mediante piñón a doble ver-
falta el contrafuerte del extremo, pero en su punto medio tiente, liso, sin cornisa ni imposta . En su parte inferior
1018
se levanta una torre de planta rectangular sobre retallo pris- se abre la Puerta de los Muertos, actualmente tapiada:
mático que alberga la escalera de caracol que conducía al consta de arco apuntado y doblado, de sección prismática
trasdós de las bóvedas y cuya altura coincide con la del tran- y aristas vivas, que descansa sin transiciones sobre jambas de
septo. Dos saeteras rectangulares permiten la iluminación idéntico perfil y también sin moldurar. Sobre ésta, en la
sufrir alguna modificación, como se puede también apreciar en el des- a la obra restauradora o se trata realmente de un cambio en el plan ori-
orden que presentan sus hiladas. ginal.
u n buen número de sillares de la construcción primitiva ha sido
1 0 1 6 ANTÓN, 1942: 18, apunta la posibilidad de que en origen rematara
1 0 1 8
sustituido por un aparejo de placas durante las restauraciones de los años con una cornisa, pero el hecho de que el hastial opuesto resuelva de igual
50-60 del siglo XX. Ello nos impide saber con certeza si la forma que modo su coronamiento y que además no haya señales evidentes de
presentan actualmente los vanos es la original; y si sucede lo mismo con reforma hace pensar que sea esta la forma primitiva.
FUNDACIONES MASCULINAS
• 20I
parte superior, perfora el muro un gran óculo de una sola Los dos primeros tramos de cada lado están realizados,
arquivolta de perfil prismático y arista achaflanada. Apa- como el resto del templo, en buena sillería, bien escuadrada.
rece cobijado por dos arcos de sección rectangular y aristas En cambio, los dos últimos presentan un aparejo muy irregu-
vivas, apeados directamente sobre las jambas, que también lar, con hiladas hechas a base de sillares de distintos tamaños
carecen de molduración. y, además, están retranqueados respecto a los primeros . I023
El hastial sur está, casi en su totalidad, oculto por las En cada uno de estos tramos se abre una ventana, más
dependencias claustrales. Únicamente es visible desde el exte- altas las de los dos primeros, que responden a dos tipos dife-
rior la parte superior del piñón, en cuyo vértice se alza, como rentes. En aquéllos son de arco de medio punto doblado de
suele ser habitual en los monasterios de la Orden, una espa- sección prismática que descansa directamente sobre unas jam-
d a ñ a . Aunque en muchas ocasiones este cuerpo de cam-
IM9 bas de idéntico perfil; la dobladura muestra arco y jambas
panas es reedificado o ampliado a lo largo de los siglos, con aristas vivas, mientras que en el inferior aparecen abise-
seguramente la espadaña de Valbuena mantiene su forma pri- lados. En los otros tramos son también de arco de medio
mitiva . Se trata de una espadaña muy sencilla, rectangular,
I020 punto simple, de sección rectangular que apea sin transición
de un solo cuerpo. Lleva tres troneras de arco de medio punto sobre las jambas, y con fuerte derrame. El primer grupo per-
de sección prismática que voltean directamente sobre las jam- tenece, sin duda, a la obra primitiva. En cambio, el segundo,
bas, igualmente lisas; están dispuestas a distintas alturas, debe responder a una transformación del siglo XVII, como
siendo la central mayor y las otras del mismo tamaño. Dos parece atestiguar la inscripción conservada en la ventana del
impostas de perfil de nacela ciñen los cuatro costados de la cuarto tramo del costado norte: AN° D E I 6 7 0 . I024
espadaña, sólo interrumpidas por las campaneras superiores; En el primer tramo, flanqueando a las ventanas, se
otra imposta, esta vez achaflanada, recorre el costado sur muy disponen cuatro canzorros . I025
cerca de la base, y como en el caso anterior, también aparece El tejado, a doble vertiente, apoya en una cornisa de
cortada por la tronera inferior. Se accedía a las troneras supe- perfil de nacela sostenida por los contrafuertes y por cane-
riores mediante una escalera de madera adosada a la parte cillos de nacela en los dos primeros tramos y de talón en
norte de la espadaña, y que actualmente ha desaparecido. los ú l t i m o s . Esta cornisa no queda interrumpida a
I026
Remata el conjunto con un piñón a doble vertiente que causa del retranqueamiento de los últimos tramos de la
arranca, en los costados este y oeste, de una imposta de nave, sino que quiebra ciñendo el segundo contrafuerte
nacela, y en cuyo vértice había, en origen, una cruz I02I
<
hasta enlazar con el nuevo plano del muro.
De las tres naves que forman el cuerpo longitudinal En cuanto a las naves laterales, la septentrional consta
de la iglesia, la central destaca —más alta— sobre las latera- de cuatro tramos separados por tres contrafuertes prismá-
les y los brazos del transepto. Está dividida en cuatro tra- ticos rematados en talud escalonado y poco pronunciado;
mos por tres contrafuertes prismáticos rematados en talud el primero, más estrecho y menos saliente, presenta a media
que llegan hasta el alero y se corresponden, lógicamente, altura un goterón. En el extremo oeste se levanta, haciendo
con los perpiaños del interior. u n simple retallo, también ángulo con la fachada occidental, un cuerpo torreado que
prismático y liso, se sitúa justo en el extremo oriental de la analizaremos más abajo. Muros y contrafuertes se levantan
nave, en la unión con el primer cuerpo del cimborrio . I022 sobre un rebanco prismático terminado en arista viva . I027
IQI9 El Capítulo General de I I 4 7 había prohibido erigir estructuras de las reformas que en época moderna sufrieron estos mismos tramos por
piedra para campanas en sus iglesias (CANIVEZ, I933-I94I: I, año II57, el interior. Intentaremos aclarar este punto en el proceso crono-cons-
def. I6: "Turres lapideae ad campanas non fiant"), por lo que su uso fue tructivo.
en principio bastante restringido, mostrando los campanarios anejos, 1 0 2 4Vid. nota anterior.
como este de Valbuena, al pabellón de monjes —es el que se emplea para 1 0 2 5Falta uno en el del costado norte.
avisar a maitines y marcar las horas—, en líneas generales un tamaño redu- 1026 Gran parte de la cornisa y canecillos, especialmente los del costado
cido (vid. AUBERT, I947: I, I 4 I - I 4 2 y 369-378). meridional, son obra de las restauraciones de los años 60. Respecto al
Consta documentalmente que en el segundo tercio del XV se renobo
I 0 2 0 cambio de perfil de los canecillos, vid. nota I0I7.
la torre de las campanas e se alfo de piedra e ladrillo e sefiso nuebo tejado (Inventario 1 0 2 7El hecho de que parezca obra de las restauraciones contemporá-
fol.30r; pub. por GARCÍA FLORES, I996: 568), aunque puede que no se neas nos impide saber con certeza si la ausencia de molduración en el
refiera a esta espadaña, sino a otra torre elevada tal vez sobre el crucero. retallo empleado a partir del costado occidental del transepto (vid. nota
^ ^ Cuando ANTÓN visitó el monasterio aún se conservaba la peana I 0 I 6 ) corresponde al plan original, y por lo tanto a un cambio de pla-
(I942: 20). nes (hipótesis que resulta más probable), o es consecuencia de tales inter-
El correspondiente al costado sur prácticamente ha desaparecido.
1 0 2 2 venciones. Más adelante, al analizar las fases constructivas del edificio,
Resulta, cuanto menos, significativo que esta variación coincida con
1 0 2 3 volveremos sobre este asunto.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
226
de este tramo fue retocada y chapada durante las restaura-
ciones de los años 50-60 del siglo pasado mediante un sis-
tema de placas. Sin embargo, con anterioridad a dichas
obras esta zona presentaba un grosor considerablemente
mayor al de la mitad superior, llegando casi a alcanzar el
extremo norte del contrafuerte contiguo y estaba rematado
por un pequeño tejado . Los restantes tramos, como ya
1028
tantes tramos).
De la nave sur sólo es visible una parte del cuerpo
bajo por estar adosado a este lado el claustro y dependen-
cias monásticas . Al contrario de lo que ocurría en la otra
1030
1028 Este detalle se aprecia en las fotografías publicadas por ANTÓN en sus aquí adosada una pequeña capilla donde descansarían los muertos antes de
trabajos, si bien en el texto no comenta nada al respecto. En noviembre de enterrarlos". A la vista de las fotografías no parece desde luego que se tra-
1989 y enero de 1990 se realizaron unas excavaciones arqueológicas en el tase de una pequeña edificación sino más bien habría que pensar en un
conjunto, y en concreto, se realizó una cata en esta zona para intentar ave- pequeño saledizo para alojar un arcosolio, como ocurre en Bonaval. En
riguar qué era exactamente este resalte. Así, apareció una cimentación de Thoronet, hay también un lucillo en el exterior de la nave meridional, aun-
2'80 m de longitud por, al menos, 2 m. (ésta era la anchura de la cata), per- que es únicamente el arco el que sobresale del paramento (AUBERT, 1947:
pendicular al muro de la nave. Los arqueólogos concluyeron que aunque I, 346), y además está situado próximo a los pies del templo. N o obstante,
sin duda este bloque era la cimentación del templo por su lado norte, el tampoco se debe rechazar la idea de que se tratase de un refuerzo del muro
hecho de que sobresaliese tanto "se debe a que antes existía en el lugar una llevado a cabo en época moderna.
pequeña construcción adosada a la pared (...) y que hoy no se ha conser- 1029 La zona oriental es obra de las restauraciones.
vado" (ARRANZ MÍNGUEZ y SAN MIGUEL MATÉ, 1991: Informe sobre la 1030 Cuando se construyó el sobreclaustro se tapió la parte alta de la
excavación arqueológica de urgencia realizada en el monasterio de Santa María de Valbuena. nave con mampostería, empleando únicamente sillería en la puerta que
San Bernardo (Valladolid), Junta de Castilla y León. Servicio Territorial de comunica con el coro alto.
Educación y Cultura, Valladolid, 23 y 47-48). En este sentido, OLIVERA 1031 Corresponde también al primer tramo de la galería claustral.
ARRANZ, 2002 (2): 411, comenta la posibilidad de que "hubiera estado Tipo I de las arquerías.
1 0 3 2
FUNDACIONES MASCULINAS
• 20I
el muro. Sus basas, de tipo ático, presentan garras planas La calle central aparece enmarcada por dos gruesos
en los ángulos y se levantan sobre un plinto paralelepí-
I033 contrafuertes prismáticos rematados en talud escalonado
pedo de aristas vivas y zócalo cortado en chaflán igual- que, al igual que veíamos en las naves, no llegan hasta la
mente liso. La arquivolta exterior lo hace sobre el muro a cornisa. En su parte inferior se abre la portada principal
través de la imposta mencionada, que se prolonga unos del templo . I039
reservadas a la comunidad de monjes y conversos, no es excepcional la que componen las jambas, ha sido reconstruido durante la restauración.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
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siguiendo la misma secuencia empleada al interior; la tra-
cería, si es que la tuvo, ha desaparecido. El arco que lo
cobija, de medio punto , muestra sección prismática y
1044
1041 AUBERT, 1947: I, 364-365. Aunque no muy frecuente, hay otros ejemplos de fachadas de
1 0 4 7
1042 En las cuentas de fines de abril de 1790 a fines del mismo mes de monasterios cistercienses que carecen de vanos en sus calles laterales,
1 7 9 1 , se anota la siguiente partida: Iglesia. —Costó hacer el atrio de ella, com- entre otros, Huerta y Fitero. Sobre su apertura aquí, en Valbuena, vid
poner la cruz que llaman de San Andrés, veinte pies de cornisa en un lienzo del claus- nota 986.
tro, y el camino real que llaman el Angostillo, importó doscientos noventa y cinco r. Los correspondientes a la calle meridional fueron reconstruidos
1 0 4 8
(A.H.N. Clero, libro 16.613, Cuentas de obras y pleitos, sin foliar -desde durante las restauraciones modernas. Con anterioridad a éstas, como
ahora le llamaremos Cuentas de obras-). puede apreciarse en fotografías de antes y después de las intervenciones,
1043 Sobre los óculos bajo arcos de descarga, típicos y habituales en los el muro estaba muy recrecido, llegando a alcanzar la altura de la calle
monasterios de la Orden, vid. nota 929. central.
1044 ANTÓN, 1942: 17; y VALDIVIESO, 1975: 301, señalan que este arco 1049 Sobre la presencia de elementos de naturaleza militar en edificios
es apuntado. religiosos y su significación, tanto defensiva como simbólica e incluso
1045 N o continua, como dice ANTÓN (1942: 17), como cornisa a lo jurisdiccional, véase BANGO TORVISO, 1995: 41-48; idem, 1997-1998;
largo de la nave central, sino que se interrumpe en el punto en que se idem, 2001. Para el caso concreto de monasterios cistercienses, vid.
unen los muros de la fachada y la nave, presentando aquélla un perfil BANGOTORVISO, 1 9 9 8 (3): 2 8 5 , y M U Ñ O Z PÁRRAGA, 1 9 9 8 : 110.
diferente. Aunque el ejemplo que tratamos no es, en sentido estricto, una
1 0 5 0
1046 La cruz es moderna, aunque antes a las restauraciones se podía ver torre para campanas, su construcción contraviene igualmente el espíritu
la peana. de sencillez de la Orden.
FUNDACIONES MASCULINAS
• 20I
En el extremo opuesto, en parte destruido y oculto civiles que asolaron la Península durante el siglo XIV , como I053
por la construcción en el siglo XVIII de las nuevas depen- en Poblet , Santes Creus , Rueda , Piedra , Beni-
I054 I055 I056 I057
dencias abaciales formando ángulo recto con la fachada del fassá o Valldigna , aunque ya a finales del siglo XIII algún
I058 I059
templo, se levantaba otro cuerpo similar. De él son visibles, otro, como Fitero , contaba con fuertes sistemas defensi-
I060
tanto por el exterior como por el interior de la dependen- vos . Más singular es el caso de San Isidoro del Campo,
I06X
cia adosada, los restos del contrafuerte que remataba por fundado en I 3 0 I en una zona en que de modo continuo se
occidente la calle meridional, y en su parte alta, un pequeño sucedían incursiones de los benimerines de Granada, y donde
resto de la base moldurada del matacán . I05I
iglesia y dependencias claustrales estaban coronadas por mer-
lones y las cubiertas son aterrazadas, con carácter de auténtica
La presencia de estructuras defensivas en monasterios fortaleza . También encontramos estas estructuras defensi-
I062
cistercienses se reducen generalmente a la cerca que rodea la vas en época bajomedieval y del Renacimiento en monasterios
abadía y raramente aparecen asociados a la iglesia y depen- de Francia (La Cour-Dieu, La Bénissons-Dieu, Noirlac, La
dencias monásticas . En España contamos con algunos tes-
I052
Ferté y Flaran) ; de Italia (Setamo^ ; de Estonia (Falke-
I06S 064
timonios, y todas fueron construidas a raíz de las guerras nau) ; de Polonia (Sulejow) , etc.
I06S I(066
IASI GARCÍA GUINEA, I95I-I952: 28, relaciona este carácter defensivo con matacanes en dos de sus lados y remate almenado, obra realizada entre
con el de Villamuriel de Cerrato, templo con el que hemos visto comparte los siglos XIII y XIV como consecuencia de la situación fronteriza del
otras características. monasterio en unos años de continuos enfrentamientos entre castellanos
1052 ANTÓN, I942: 28-29; AUBERT, I947: I, I4I-I42. y aragoneses (MARTÍNEZ BUÉNAGA, I998: 326).
1053 BANGOTORVISO, I985: 429. 1058 A mediados del XIV, el abad Bernardo Pallarés fortifica la puerta de
Todo el recinto monástico está envuelto por una gruesa y alta mura-
1 0 5 4 acceso al cenobio construyendo sobre ella una torre defensiva (MARTÍNEZ
lla almenada (2 m de espesor y I I m de altura); con un perímetro de 608 BUENAGA, I994: I69-I70).
m, está salpicada con I 4 torres, practicándose una única entrada al recinto, 1059 El conjunto monástico está rodeado por una muralla cuya estructura
la Puerta Real. Su erección se debe a la iniciativa de Pedro el Ceremonioso, en talud y saeteras que lo recorren, junto a la Porta Reial o Portal Nou de
quien a finales de I368 o comienzos de I369, con motivo de las guerras entrada al recinto, única que queda de las cuatro con que contaba, indican
contra Castilla y para protegerla de la rapiña de profanadores de reliquias un claro carácter defensivo. A esto hay que unir las otras cuatro torres que
y tumbas, ordenó amurallar la abadía. Las obras avanzaban lentamente, flanqueaban la primitiva iglesia y el remate almenado de la sala capitular y
como se puede rastrear a través de las continuas peticiones del rey para del refectorio. Este sistema defensivo viene determinado por el papel que
que siga la obra de amurallamiento (septiembre de I369; marzo y octu- jugó el monasterio durante la Guerra de los dos Pedros (MARTÍNEZ BUÉ-
bre de I 3 7 I ; mayo de I376; mayo de I 3 8 I ; mayo de I382; abril de NAGA, I 9 9 7 : 5 2 3 - 5 2 4 , 526, 532, 5 3 4 y 540). Por su parte MARTÍNEZ
I385). A principios del XV el monasterio mostraba el aspecto de fortaleza GARCÍA (200I: I75-I77 y I80-I8I), apunta a las incursiones bereberes
que hoy vemos (vid., en último término, ALTISENT, I974: 296-3I3). Por del primer tercio del XVI como detonante de la erección de almenas sobre
otro lado, VIVES I MíRET, debió leer mal las inscripciones que decoran la la Puerta Real, torres de la iglesia, capítulo y refectorio, y la sobreelevación
Puerta Real (HOC OPUS INCIPIT TEMPORE PETRIREGIS ARAGO- de la muralla exterior del recinto.
NUM y QUIREGNARE CEPIT ANNO MCCCXXXVII) y afirma que fue 1060 Según un manuscrito anónimo citado por LAMPÉREZY ROMEA, en
en I337 cuando comenzaron tales obras, indicando la posible participa- I287 el monasterio estaba cercado con fuertes muros, almenas y tres torre-
ción de Reinard des Fonoll en ellas (I969: 66, 74 y I72-I73). ones (I905: 290; le siguen GARCÍA SESMA, I98I: 42; FERNÁNDEZ GRA-
Fue también idea de Pedro III, por carta del 24 de junio de I346, for-
1 0 5 5 CIA, I997: I7).
tificar el monasterio con murs, valls, torres i altres fortaleses. La obra n o fue 1061 La torre que se levanta en el extremo norte de la fachada occidental
comenzada y en sucesivas ocasiones ( I 3 4 7 y I359) el monarca ordenó de la abacial de Veruela (MARTÍNEZ BUÉNAGA, I998: I3I), o la que se
que se obedeciesen sus mandatos. Finalmente, el I de enero de I375 se ini- alza en el extremo meridional de la de Meira (VALLE PÉREZ, I982: I, I58
ció la construcción de los muros que recorren la iglesia y claustro, cesando y I68) no parecen responder a una estructura defensiva, sino más bien a
las tareas en febrero de I378. De nuevo el 26 de enero de I 3 8 4 el rey una escalera de acceso a cubiertas.
insistió en la conveniencia de la fortificación, y lo mismo hizo su hijo Juan 1062 RESPALDIZA LAMA, I996: 28-33; idem, 200I: 386.
I en enero de I390. Para algunos autores, sin embargo, la obra defensiva En el siglo XV se construye el torreón pentagonal del extremo meri-
1 0 6 3
quedó reducida a lo realizado entre I375 y I378, merlones de la parte dional de la fachada de La Cour-Dieu; en el XVI, Flarán y La Ferté fueron
superior de los muros de la iglesia y cerramiento occidental del claustro fortificadas para evitar la rapiña de las hordas de Montgomery y Gaspar
(MARTINELL, I929: I52-I58; idem, I959: I I 6 - I I 7 ; VIVES I MíRET, de Coligny, respectivamente; el encintado de Noirlac fue reforzado en
I969: 65 y 99-I00; PLADEVALL y CATALÁ RÓCA, I968: 338), mientras I423; y a mediados del XV, se construyó una gran torre cuadrada en el
que para otros el amurallamiento del monasterio y derribo de las depen- ángulo S.O. de la fachada de La Bénisson-Dieu y se levantó una enorme
dencias necesarias para llevar a cabo dicha obra se llevaría a término durante cerca salpicada de torreones y protegida por fosas (ÁUBERT, I947: I, 364
el siglo XV (ESPAÑOL I BERTRÁN, I985: I29-I30). y II, I42-I43).
1056 La fachada occidental del claustro, que coincide en altura con la de 1064 En julio de I370, la República ordenó el amurallamiento de la aba-
las naves laterales del templo, presenta su cuerpo superior recorrido por una día con muros, torres y fosas (GENTILE, I989).
serie de aspilleras, con función claramente defensiva, obra probablemente 1065 Durante el siglo XIV, el recinto monástico se rodea de un vasto encin-
acometida en torno a la segunda mitad del siglo XIV durante las guerras tado con torres defensivas y foso de agua (DlMIER, I97I: 49).
entre Aragón y Castilla (VAUBOURGOIN, I990: 54; MARTÍNEZ BUÉNAGA, 1066 El recinto fortificado data de finales del XV y principios del XVI
I998: 2I9, 25I y 263). (SWIECHOWSKI y ZACHWATOWICZ, I959: I48-I49).
1057 A occidente del conjunto monástico se levanta en el cercado la lla-
mada Torre del Homenaje, gran torre-puerta fortificada de planta cuadrada
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
230
t o s . Por su parte, los formeros muestran perfil rectan-
1068
El cuerpo de la nave aparece dividido en tres tramos En los dos primeros tramos del costado norte se
por arcos perpiaños apuntados de sección rectangular y abren dos arcosolios, uno por tramo, siendo el segundo un
aristas vivas. Se cubre cada uno de estos tramos con bóve- poco más alto que el primero . Ambos presentan arco
1074
das de crucería cuatripartita, con plementos despiezados apuntado de sección prismática con su arista perfilada por
en hiladas de sillares perpendiculares a la clave. Los ner- un baquetón y se completaban con una chambrana que ha
vios, de perfil triangular, están compuestos por tres baque- sido picada; apoya el arco directamente sobre unas jambas
tones escalonados y separados por aristas vivas, decorando carentes de molduración . En el tercer tramo se dispone
1075
sus claves con cuatro hojitas de acanto de lóbulos picudos un nicho estrecho y de elevada altura, con arco apuntado
y nervio central perlado dispuestas en forma de cruz, bajo de aristas vivas que voltea sin transición sobre las jambas,
las cuales sobresalen cuatro finos tallos rematados con fru- también sin moldurar. Tras él, hacia el Oeste, se sitúa la
lla son muy tardías (vid. nota 1098). bóvedas de la iglesia y también se verá en el claustro.
1068 Sólo se conserva intacta la clave correspondiente al segundo tramo 1073 Por ejemplo, en los ángulos N.E., S.E. y S.O.
(siempre contando de E. a O). La del tercero está bastante deteriorada, Este costado, que es en realidad el paramento meridional exterior
1 0 7 4
mientras que la del primero se muestra lisa, tal vez porque nunca se llegó de la capilla adyacente, fue reconstruido para abrir los lucillos. En la
a tallar o por ser repuesta en el curso de las restauraciones. parte inferior derecha del interior del segundo arcosolio, se aprecia la
1069 La última bóveda carece de formero a occidente. Las causas de esta unión de esta nueva construcción al contrafuerte oriental de aquella capi-
anomalía están en que el muro occidental de la capilla es en realidad el lla, también visible desde el exterior.
cierre oriental de la sacristía y dormitorio, erigido con anterioridad a El primer arcosolio cobija un sepulcro exento sin ningún tipo de
1 0 7 5
ésta. Por otra parte, el del costado sur del tercer tramo ha perdido algu- decoración; el segundo, los restos de una yacija cuyo frente aparece com-
nas dovelas del lado derecho. pletamente liso.
1070 Corresponde al Tipo 1.3 visto en el claustro.
1071 El deterioro que sufre nos impide saber si en origen recibió algún
tipo de decoración, aunque por las exiguas dimensiones que presenta
probablemente se trataba de un simple sillar cortado en chaflán.
FUNDACIONES MASCULINAS
• 20I
longa a modo de zócalo por la capilla. 2. D e hojas ramificadas enmarcadas por un cordón
liso, que se abren en la parte superior de la cesta en
Las características de estas columnas, de fuste mono- forma de cogollos . El ábaco es liso y en una
1080
lítico, son análogas a las del lucillo sepulcral de la capilla ocasión lleva la arista inferior recorrida por un finí-
mayor y a las del claustro. Las basas son de tipo ático, con simo baquetón.
fino bocel superior, alta escocia y toro inferior ancho con
pequeñas garras en las esquinas, y descansan sobre plinto En el capitel simple del costado meridional este motivo
cúbico de aristas vivas . Los capiteles, coronados por
1077
vegetal sólo decora una de las caras de la cesta; en la otra apa-
cimacios compuestos de filete, surco y bocel entre esco- rece ocupando casi toda la superficie un cuadrúpedo. De per-
cias , muestran dos esquemas decorativos diferentes:
1078
fil y cuerpo entero, en actitud de caminar, avanza hacia el
1. De hojas planas dispuestas en un solo piso, con ángulo volviendo la cabeza al lado opuesto para contemplar
reborde y nervio central marcados por incisiones, una maraña de tallos con yemas desplegadas que surge en la
1 0 7 6 Erróneamente, los arquitectos CAÑEDO, ESPINOSA y VARONA en 1080 Capitel doble del lado derecho y capiteles acodillados. N o se
su restitución planimétrica sostienen que el contrafuerte arriba mencio- corresponde con ningún tipo concreto de los analizados en el claustro,
nado pertenece a la capilla contra la cual se adosa ésta de san Pedro pero la forma de rematar de las hojas se asemeja a algún ejemplares del
(1988: 23). tipo I.2 (117) y del VI.2 (32). Por otro lado, la molduración de las ner-
Análogas al tipo 1.1. de basas del claustro.
1 0 7 7 vaduras que presentan esas hojas recuerdan también a las de los capite-
1078 Responde al tipo 1 de los cimacios vistos en el claustro. les de la Puerta de Monjes.
1079 Capitel doble del lado izquierdo. Se puede incluir en el tipo I.1 de
capiteles del claustro.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
232
zona superior: presenta grandes ojos con párpados bien defi- este perfil a las jambas; mientras que el interno, de aristas
nidos, orejas pequeñas y puntiagudas, como en estado de vivas, parece haber sido retocado en época moderna. Bajo
alerta, hocico fruncido y boca entreabierta poblada por dien- este vano se sitúa una mesa de altar. En cada uno de los
tes con aspecto feroz; cuello y lomo están cubiertos por un paños laterales se abre un arcosolio. Presentan un arco
manto de pelo realizado a base de pequeños mechones ensor- apuntado con la arista moldurada por tres baquetones con
tijados, mientras que el resto del cuerpo aparece liso a excep- escocias intermedias, trasdosado por chambranas actual-
ción del rabo que, metido entre las patas traseras y asomando mente picadas, que voltean directamente sobre jambas de
bajo el vientre, aparece surcado por leves incisiones que par- aristas vivas.
ten de una raya central al modo de una espiga; sus patas son Mención aparte merece la decoración pictórica que
vigorosas, rematadas en pezuñas voluminosas (lám. 6 8 ) . I08I
recibió la capilla, reducida en la actualidad a los pilares ado-
Sobre este arco se levanta un muro diafragma que sados que dan acceso al ábside y a tres arcosolios . I085
1084 Ménsulas en forma de cabecitas también se emplean en el monas- (2): 372 y 373; GARCÍA FLORES, I998; idem, I 9 9 8 (2); idem, 200I:
terio de Las Huelgas de Burgos (tramos I y 2 de la nave de la Epístola; 287-290; PORRAS ROBLES, 2008; y especialmente GUTIÉRREZ BAÑOS,
pórtico de caballeros y capilla de San Martín), catedrales de Burgos 2005: I, I 2 I - I 3 0 , I84-209, 396-399 y 459-462; II, 228-238.
FUNDACIONES MASCULINAS
• 20I
En el costado sur se abren dos vanos cuadrados que, lieron esas últimas estancias, se redujo la altura del segundo
como vimos al analizar el interior, no pertenecen a la obra cuerpo y eliminaron los balcones que tenía, dejando única-
original. En su extremo occidental se abría la puerta que mente como huecos de ventilación dos pequeños vanos rec-
permitía acceder a la capilla desde el exterior. Cegada con tangulares. Asimismo, se remató con una nueva cornisa . I090
mampostería y horadada por otro ventanuco cuadrado, el Desde el interior de este piso se pueden ver todavía
único resto que se conservaba de esta portada es una basa, los restos del muro que salvaba el desnivel existente entre el
sin duda perteneciente a una columnilla que flanqueaba el ábside y la nave con su rosetón , ahora inscrito en un
I09t
vano por la derecha apeando un arco. De tipo ático, lleva recuadro. En origen llevaría un remate apiñonado desapa-
escocia baja y profunda y toro inferior con gruesas garras recido con motivo de la ampliación en altura de toda la
de nervio central marcado que destaca ligeramente sobre capilla , cubriéndose la nave con un tejado a dos aguas y
I092
una segunda planta realizada con mampostería y refuerzo de En efecto, cuando se fundaba un nuevo monasterio,
sillares en la esquinas, a la que se accedía desde el dormito- éste debía poseer una serie de dependencias, entre
rio y que enlazaba con otras habitaciones levantadas sobre ellas un oratorio, que permitieran desde ese mismo
las capillas meridionales de la iglesia. Con motivo de las res- instante llevar a cabo con normalidad las pautas de
tauraciones llevadas a cabo a mediados del siglo XX, se demo- vida impuestas por la Regla . Así lo estipulaban
I094
1086 La tipología de esta basa se corresponde con la del tipo I.2 y la del la tracería se han transformado en pilares provistos únicamente de cima-
plinto con el 2 del claustro. cio.
1087 Entre una serie de documentos del monasterio copiados en I594 1092 Toda esta zona ha sufrido muchas intervenciones, tanto históricas
p o r Juan R u i z de u l i b a r r i , se m e n c i o n a que en una puerta que esta agora como restauradoras, siendo prácticamente imposible dar una respuesta
cerrada por donde antiguamente se entraba a la Capilla....esta sobre la puerta en una pie- concluyente al tipo de remate que tendría la capilla. Al margen de todo
dra la señal siguiente que segun parece dice Alfonsus, apareciendo escrito al mar- ello, la existencia de una pequeña "cámara del tesoro" sobre el ábside,
gen: no dice aqui Alfonsus sino A Omega Christus ( B . R . A . H . Col. Salazar y hipótesis mantenida por algunos autores (por ejemplo, ARA GÍL, I986:
Castro, 0-7, fols.85-86). En otras escrituras conservadas en esa misma I9), sería inviable ya que, de ser cierto, los dos estribos que refuerzan las
colección se da una explicación del significado del crismón (0-7, esquinas del ábside tendrían que haber sido más altos, lo mismo que su
fols.II3-II6 y 0 - I 8 , fols.246-250). Sobre éste y su expansión, véase alero, del que hay huellas en su emplazamiento original, es decir, a la
OCÓN ALONSO, I983; y BARTAL, I987. altura de la penúltima hilada de los mencionados contrafuertes. Sobre la
Este anagrama aparece en los monasterios cistercienses general-
1 0 8 8 denominación de "capilla-tesoro", véase a continuación en el texto el
mente asociado a portadas, como en Poblet (tímpano de la portada occi- apartado dedicado a analizar la finalidad de la capilla y las distintas opi-
dental del templo); Bujedo (flanqueando la occidental de la iglesia); La niones vertidas al respecto.
Oliva (en el tímpano de la misma puerta); Iranzu (decorando la arqui- 1093 B.R.A.H., Col. Salazar y Castro, 0-7, fol.85r. Ningún otro autor se
volta inferior de dicha puerta); Casbas (en el tímpano de la portada meri- hizo eco de esta noticia.
dional de la iglesia); Fitero (en la Puerta de Monjes), etc. 1094 Estos mismos aspectos y los que a continuación se insertan en el
1089 Probablemente fue abierto en el siglo XVI cuando se colocó en el texto han sido tratados por VALLE PÉREZ al analizar la capilla de San
testero de la sacristía una piscina (GARCÍA FLORES, I996: 564). Andrés del monasterio de Osera, considerada desde el siglo XVII por
1 0 9 0 L o s arquitectos CAÑEDO, ESPINOSA y VARONA señalan que la cor- algunos autores como la iglesia primitiva del cenobio (I982: I, I I 6 -
nisa que remata el conjunto es la primitiva (Restitución planimétrica, 8), I20, especialmente, I I 8 - I I 9 ; idem, I986 (2): 83-99, en particular,
cuando a simple vista se aprecia que es obra de las restauraciones. .90-93).
^ ^ Algunas diferencias muestra por este lado con respecto a lo visto en
el interior. Así, la rosca externa muestra su arista viva y las columnas de
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
234
los Caj>itula y se recogía posteriormente en los
109S reforma de Martín de Vargas en I430 se celebraron
Instituta .
1096 en la capilla de San Pedro un buen número de Capí-
Hay sin embargo varios aspectos de la construcción tulos Generales de la incipiente Congregación, de
de la capilla de San Pedro que, al mismo tiempo ahí que recibiese tal denominación . Desde fina- I098
que nos permiten refutar esta teoría, certifican su les del siglo XV estos Capítulos se celebraron en los
adosamiento posterior a la iglesia y dependencias distintos monasterios que se iban incorporando a la
de los monjes, aspecto que hemos venido comen- Observancia hasta que en I 5 5 I fue designado Pala-
tando a lo largo de la descripción: zuelos como sede del Reformador y lugar de reu-
nión de los Capítulos Generales. Las fechas tardías
a. La ventana que iluminaba la sacristía y una de en que se escoge este recinto como sede del Capí-
las ventanas del dormitorio aparecen cegadas, tulo de la Congregación implica, pues, la reutiliza-
y además, esta última cortada por las bóvedas ción de un espacio pre-existente, la capilla de San
de la capilla . I097
Pedro, destinado en sus orígenes a otros fines.
b. El ángulo S.E. del brazo sur del transepto de
la iglesia aparece desmochado para servir de 3. Capilla del Tesoro-Sacristía
apeo a uno de los nervios cruceros de las La aplicación del nombre de capilla-tesoro y, al
bóvedas de la capilla. mismo tiempo, sacristía, a la capilla de San Pedro
c. El costado norte está apoyado contra el data ya de principios del siglo XX. Cuando Fran-
estribo oriental de la capilla adyacente de la cisco Antón acomete el estudio del monasterio
iglesia. numerosas dependencias habían sido fuertemente
d. El análisis de los distintos elementos cons- alteradas por tabiques y revestimientos de yeso que
tructivos (arcos, nervios, capiteles, etc.) mani- ocultaban su estructura primitiva. En el caso de la
fiestan un trabajo más evolucionado al de los capilla que tratamos, todos los paramentos interio-
empleados en la iglesia y dependencias de res estaban cubiertos por capas de yeso, y los arco-
monjes, presentando incuestionables seme- solios y puerta que daba al exterior tabicados y
janzas con los de las galerías claustrales que, perforados por ventanas de amplio derrame. Igual-
generalmente, se levantan durante las últimas mente, los accesos a la sacristía y a la sala capitular
fases constructivas de un cenobio. desde el claustro estaban tapiados . Este enmas- I099
1097 Si estas dependencias se hubiesen edificado con posterioridad no comienzan a retirar yesos y tabiques, terminando la limpieza en I963
se abrían abierto estos vanos. (ALONSO et alii, I965: I4). Los correspondientes a sacristía y capítulo
...por espacio de mas de 40 años cassi siempre se tubo en este de valbuena en la capi-
1 0 9 8 fueron eliminados durante la intervención del arquitecto López de Uribe
lla que se llama de San Pedro de donde tomo el nombre de capilla de los capitulosgenerales (I982-I984).
FUNDACIONES MASCULINAS
• 20I
el capítulo estaría separado de la iglesia a través de muchos monasterios se construía una pequeña
un pasadizo que, desde ésta, comunicaba con una pieza destinada a albergar el archivo y tesoro situada
capilla-tesoro que servía al mismo tiempo de sacris- en el entorno del dormitorio . En el caso de la
1104
tía .
1100 capilla de san Pedro, sus grandes dimensiones, su
La propuesta de Antón trae a la memoria la solu- situación en planta baja y la apertura de una gran
ción adoptada en senanque en donde, por falta de puerta hacia el exterior, obligan a invalidar este
espacio, la sacristía fue construida al este del edifi- supuesto.
cio de monjes, comunicando con la iglesia mediante Por otro lado, la existencia de una cámara sobre el
un estrecho y largo pasillo situado entre la sala capi- ábside que comunicaba con el interior de la capilla
tular y el hastial del brazo del transepto . 1101 a través del pequeño rosetón propuesta por Ara Gil
sin embargo, debemos rechazar esta hipótesis por para tratar de dar una explicación al nombre de
dos razones: capilla del tesoro , ha sido descartada a la vista de
1105
1100 1942: 34, 38 y 39. dora, recibió el año 1191 en prestimonio la villa del mismo nombre de
1101 AUBERT, 1947: II, 47-48; THIBOUT, 1963: 372; DIMIER, 1974: manos del abad Juan, al mismo tiempo que mandaba ser enterrado en el
139 (planta) y 140. monasterio (A.H.N. Clero, carpeta 3.440, doc. 2-n.29; A.H.N. Códices,
1102 Sobre estas dependencias y su correcta interpretación, véase el apar- carpeta 1.484-B, n.27). Murió en Marruecos en agosto de 1214, tras-
tado correspondiente. ladándose su cuerpo a Valbuena en 1218 (GONZÁLEZ, 1980: I, 140 nota
1103 Bajo este nombre se estudia en numerosos trabajos (VALDIVIESO, 74; sobre este personaje vid. del mismo autor, 1960: I, 331-336). Su
1975: 304; ALONSO et alii, 1965: passim; JIMÉNEZ LOZANO, 1980: 17; hijo Alvar Pérez de Castro también obtuvo la misma villa en enero de
VALLEJO, 1995: 2I,HERBOSA, 2003: 47; entre otros). 1218 (A.H.N. Clero, carpeta 3.440, doc. 2-n.28; A.H.N. Códices, car-
Vid. al respecto lo que se dice de esta sala en la monografía de La
1 1 0 4 peta 1.484-B, n.25-27, cit. por PÉREZ EMBID, 1986: 319, nota 21; y
Espina. GUTIÉRREZ BAÑOS, 2005). Murió en Orgaz en agosto de 1239 y su
ARA GIL, 1986: 19; idem, 2002: 69. N o obstante, esta investiga-
1 1 0 5 hermana Elo en abril de 1250 (GONZÁLEZ, 1980: I, 140-144). Por su
dora no descarta otros fines, como el funerario (vid. más adelante). parte, REGLERO DE LA FUENTE, 1993: 104 y TORRES SEVILLA, 1998:
1106 ANTÓN, 1942: 34. Le siguen los arquitectos CAÑEDO, ESPINOSA 82, ofrecen un árbol genealógico de una rama de esta familia. Estas noti-
y VARONA, en su Restitución planimétrica..., 8 y 24. cias se pueden completar con la bibliografía citada en la nota 4. Algu-
ALONSO et alii, 1965, y a partir de entonces todos los autores que
1 1 0 7 nos autores afirman que también está aquí enterrado Armengol VI,
se han ocupado del monasterio, siendo ARA GIL una de las primeras per- hermano de Doña Estefanía (MONFAR I SORS, 1847-58: 381; GONZÁ-
sonas en indicar que a ese fin estaba destinada la capilla desde su cons- LEZ, 1960: I, 340; ALONSO et alii, 1965: 16, 19-23; CORREDERA
trucción (1986: 19; ídem, 2002: 69). GUTIÉRREZ, 1973: 92; CANAL SÁNCHEZ-PAGÍN, 1989: 129; BARTON,
1108 A.H.N. Códices, carpeta 1.484-B, doc. 27; B.N., Mss. 5.938, 1996: 93, nota 3; VIADAS, 2002: 65; etc...). Lo cierto es que la docu-
fols.299r-300r; B.R.A.H., Col. Salazar y Castro, F-40, fols.93r-95r y O- mentación consultada no alude para nada al sepelio de este personaje en
7, fols.85-86. N o obstante, la relación genealógica que establecen entre Valbuena (Sobre los panteones de los de Urgell, vid. especialmente, ESPA-
estos personajes y las fechas de sus muertes presentan errores de bulto. ÑOL I BERTRAN, 1995).
Del matrimonio de Estefanía Armengol con Fernando García nacieron Por otro lado, en las excavaciones llevadas a cabo en este recinto en la
Urraca, Martín, Sancha, Pedro y tal vez otro llamado Fernando. Su hija campaña 2004-2005 se localizaron "varios enterramientos de cierta
urraca Fernández, una vez viuda del conde Rodrigo Martínez, mantuvo prestancia, uno centrado frente al altar, compuesto por un muro de pie-
relaciones con Alfonso VII, fruto de las cuales nacería Estefanía Alfonso dras calizas y cubierto con una gran lápida, y más hacia los pies otros
(SALAZAR Y CASTRO, 1696: III, 255-256; CANAL SÁNCHEZ-PAGÍN, dos, conformados por cajeados de grandes bloques de calizas y cubier-
1984: 54). Casó ésta con Fernando Rodríguez el Castellano, teniendo tos, a su vez, con lajas de gran peso, talladas también en caliza". Agra-
por hijo a Pedro Fernández de Castro. Éste, como biznieto de la funda- dezco a Jesús Misiego, de Strato, esta información.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
236
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Fig. 16.
Valbuena.
Reconstrucción
hipotética de la planta
medieval del monasterio.
Las causas que motivaron su construcción hay que de los testimonios conservados (artísticos y docu-
buscarlas en las restrictivas normas que en cuestión mentales), podemos afirmar que el destino de la
de enterramientos habían impuesto los Capítulos capilla era servir de enterramiento a la familia de la
Generales de la Orden prohibiendo, a excepción de fundadora del cenobio.
reyes, arzobispos y obispos, enterrarse en el interior
de sus iglesias . De ese modo surgieron las capillas
1109 El claustro y las dependencias claustrales
funerarias, adosadas al transepto y colindantes con el Adosado al flanco meridional del templo abacial para
cementerio, generalmente en el extremo opuesto a las facilitar de ese modo la captación de aguas del río Duero,
dependencias conventuales . Y aunque el empla-
1110
que corre al sur del complejo, se accede a él desde la iglesia
zamiento de la capilla funeraria de San Pedro diverge a través de la Puerta de Monjes situada, como vimos, en el
del que hemos señalado como habitual , a la vista
1111
primer tramo de la nave de la Epístola (figs. 12 y 17).
1109AUBERT, 1947: I, 330-332; VALLE PÉREZ, 1986 (2): 98-99; 51). En España se conserva en Palazuelos una capilla en análoga ubica-
BANGOTORVISO, 1992: 110; etc... ción pero abierta a la sacristía (vid. su monografía). En sitio semejante
1110AUBERT, 1947: I, 213, nota 2; VALLE PÉREZ, 1982: I, 119-120; al de Valbuena, es decir, en el costado opuesto al del cementerio -aun-
idem, 1986 (2): 96-97; BANGOTORVISO, 1992: 124-125; idem, 1998 que en este caso las dependencias se disponen al norte del templo-, se
(4): 322-323. Véase también los capítulos dedicados a estas capillas en sitúa el panteón real del monasterio de Sigena (CORTÉS ARRESE, 1999:
las restantes monografías. 73-79). Tampoco hay que olvidar la Capilla del Abad del monasterio
1111Se podría pensar que en realidad se trata de una capilla particular premonstratense de Aguilar de Campoo, de evidente sentido funerario,
del abad, normalmente situada en prolongación de la sacristía, como y que parece que fue tras la ampliación de la sacristía en época moderna
ocurre en los monasterios franceses de Beaulieu, Fontenay, Thoronet, Le cuando se convirtió en capilla privada del superior (LÓPEZ DE GUE-
Val, Vauclair, Cadouin, Obazine o Royaumont (AUBERT, 1947: II, 50- REÑO, 1997: II, 381).
FUNDACIONES MASCULINAS
• 20I
- con un baquetón, en la galería oriental (Tipo I). machones angulares de un grupo de tres columnillas aco-
- con un baquetón que provoca en el intradós una dilladas, y en los tramos intermedios se enjarjan en el espe-
escocia, en las galerías norte y sur (Tipo 2). sor de los estribos, de donde parecen surgir —salvo en la
- de arista viva y con escotadura en rosca e intradós, galería occidental— a partir de impostas que constituyen
en la occidental (Tipo 3). una prolongación de los cimacios de las columnas a ellos
Por otra parte, los situados a oriente son más bajos adosadas. Hay, sin embargo, una excepción: en los arcos
que los restantes . III5
inmediatos al tramo donde se ubica el lavabo se han elimi-
nado los salmeres y dovelas próximas a los contrafuertes
Los grupos de arquillos de medio punto muestran que lo flanquean, reposando por estos lados el arco en unas
sección prismática y también presentan variados tipos de pequeñas repisas achaflanadas . III8
m 2 Vid., GARCÍA FLORES, I996: 563 y 565-566; MARÍAS, I998: 292- llos son ligeramente apuntados, guarda estrecha correspondencia en la
293. estructura de los machones, tipos de nervios, cimacios y capiteles.
m 3 Análoga estructura encontramos en los claustros de los monasterios Hasta las obras de restauración de finales de los años 60 del siglo
I I I 4
también cistercienses de Vallbona de las Monjas (galerías Este y Sur) y XX las arquerías estaban tapiadas, como se puede ver todavía en las foto-
Fontfroide (galería Este), y el de la catedral de Tarragona, con los cua- grafías de Antón. Este cerramiento se llevó a cabo entre I800 y I80I,
les se ha relacionado en ocasiones (ANTÓN, I942: 47 y 48; LAMBERT, siendo abad Gregorio Galdámez, según nos informan las cuentas relati-
I93I: I03; EYDOUX, I954: 206; ARA GIL, I986: I8; idem, I988: I04; vas a estos años: Claustros baxos.—Estos se cerraron de mamposteria y yeso, y se
VALLEJO, I995: 46; etc.). Sin embargo, las semejanzas con nuestro claus- echaron quatro rejas de hierro en quatro arcos, todo lo qual costo mil y setezientos reales,
tro se reducen a la organización general de las arquerías, acentuándose las los setezientos los dieron los monges de sus limosnas y los mil puso la caja (Cuentas de
diferencias en los detalles arquitectónicos y decorativos (configuración Obras, s / f ) .
de machones, estribos, perfiles de arcos y nervios, cimacios, basas, ócu- m 5Así lo hizo notar ANTÓN, I942: 4I-42.
los...). Mayor, en cambio, es el parentesco con el claustro del monaste- m 6Recordamos que solución semejante se empleaba en el baquetón
rio premonstratense de Aguilar de Campo (también puesto en conexión que decoraba la parte superior de las trompas del crucero de la iglesia.
con Valbuena por ANTÓN, I942: 48; ARA GIL, I988: I04; HERNANDO m 7Soportes 75, 77 y 80.
GARRIDO, I995: I66 nota 2; idem, 2003: I 9 2 y 204; LÓPEZ DE GUE- La causa de esta alteración tal vez haya que buscarla en la forma
I I I 8
REÑO, I997: II, 4 I 4 nota I98; entre otros), y con el que, a pesar de hexagonal del pabellón de la fuente, cuyos lados más próximos a la gale-
carecer éste de óculos perforando los tímpanos y que los tríos de arqui- ría irrumpirían en esos puntos impidiendo el normal apeo del arco.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
238
Fig. I7.
Valbuena. Claustro.
Alzados de las galerías
oriental y septentrional
(P. Puente Aparicio).
cortada en nacela en la sur (Tipo 3); en la de poniente tam- - óculo de intradós polilobulado a base de c u a t r o , Im
moldura como en la norte y en el opuesto como en la sur. arista de unión aparece generalmente m u e r t a , n24
La superficie que a modo de tímpano queda libre bifurcándose en una sola ocasión , n25
entre los arcos semicirculares y los apuntados aparece total- - rosa formada por un amplio orificio central liso
mente maciza en la galería de naciente. Lo mismo sucede en rodeado por otros ocho más pequeños . En otros II26
los tramos primero, cuarto y quinto de la galería meridio- casos, el hueco del centro muestra su intradós poli-
nal, y en el primero, tercero y quinto de la galería de lobulado con ocho arquitos . II27
- simple óculo que moldura su rosca con doble estructura original: levantados sobre un alto zócalo parale-
nacela .
II20
lepípedo de aristas vivas que empalma con el poyo general,
m 9 Enumeramos los tramos de Este a Oeste y de Norte a Sur. ejemplo, en el óculo situado sobre el arco triunfal de acceso a la capilla
1120 Segundo tramo de la galería sur. mayor de San Pedro de Montes (León).
Quinto tramo de la galería oeste.
1 1 2 1 Tercer tramo de la galería sur.
1 1 2 5
selve (Francia) y en la cabecera y hastiales del transepto de Casamari Contrafuertes 6, I0, I I , I 6 y 20.
1 1 2 8
Galería Sur
c / 2 5 % f
Fig. 18.
Valbuena. Claustro.
Alzados de las galerías
meridional y occidental
(P. Puente Aparicio).
¡alerta Ocsti
son prismáticos, con ligero escalonamiento en su zona supe- parece indicarlo una inscripción en el estribo que ocupa el
rior, llegando hasta la cornisa de flores y bolas que separa centro de la galería de poniente , que reza: AÑO DE
1129
este cuerpo del alto. Hay, no obstante, un par de detalles 1691, mientras que los correspondientes a las galerías norte
que permiten hacer una diferenciación entre ellos: por un y sur fueron reforzados durante las obras de restauración
lado, los situados en la galería norte muestran una moldura llevadas a cabo en los años 50 y 60 del siglo XX.
achaflanada a media altura; y por otro, tanto en éstos como Hemos comentado arriba que en el cuarto tramo de
en el correspondiente a la galería oeste el escalón es sensi- la galería meridional se situaba el pabellón del lavabo, que
blemente mayor, contando con una hilada más de sillares servía para las abluciones que se efectuaban por la mañana
que en los del sur. Los restantes estribos son también pris- y antes y después de cada comida, y se situaba generalmente
máticos y se elevan sobre bancos de análogos caracteres enfrente del refectorio . II30
lonamiento comentado y recorren los muros hasta la cor- un tramo más hacia el oeste . En cambio, sí aparece
II32
nisa mencionada, ocultándola y rematando a una vertiente. enfrentado a él un pozo de brocal cilíndrico. Se accedía al
Los correspondientes a las galerías oriental y occi- pabellón desde la crujía a través de dos arquillos de medio
dental debieron transformarse a fines del siglo XVII, como punto, de sección prismática, que molduran sus aristas con
1129 Contrafuerte 13. 1131ANTÓN, 1942: 43 y 57 (en el plano que publica también lo dibuja
1130 Sobre los pabellones de las fuentes en los monasterios cistercien- en esta posición). Le siguen LAMBERT, 1931: 104; y ARA GIL, 1986: 18.
ses, véase AUBERT, 1947: II, 24-28; LILLICH, 1982: 131-135 y 139- Desconocemos la razón exacta de esta anomalía, aunque también
1 1 3 2
1133ANTÓN, I942: 43; TORRES BALBÁS, I952: I43; BANGOTORVISO, La noticia se publicó en el número 6 de Numantia (I993-94), 373,
1 1 3 5
I985: 444; GARCÍA FLORES, I996: 574, fig.A; ABAD CASTRO, I998 (4): aunque no se especificaba detalle alguno.
224; POZAYAGÜE, I 9 9 8 (5): I 7 7 - I 7 8 y I998 (I6); VICENTE PRADAS CUADRADO BASAS y CORTÉS SANTOS, I999. Tampoco entonces se
1 1 3 6
Bonmont (Suiza); Schonau, Marienthal y Worschweiler (Alemania); el Veruela, Benifassá e Iranzu, todos ellos adosados directamente a la gale-
primitivo de Hauterive (Suiza); y Stams (Austria). Los de Senanque ría claustral, excepto el de Poblet, que lo hace a través de un pequeño
(Francia), Orval I (Bélgica) y Pforte (Alemania) presentan la misma paso. En Francia, Thoronet; en Alemania, Altzelle; en Austria, Zwettl,
planta, si bien están situados en uno de los ángulos del jardín interior, Lilienfeld y Neuburg; en Polonia, Pelpin; etc.
en vez de ocupar el centro del ala.
FUNDACIONES MASCULINAS
• 20I
vios está ocupado por una hoja de grandes lóbulos con ner-
vios marcados que nace de un anillo de cuerdas - e n
1139
(tramo recto del presbiterio), Piedra (sala capitular y galerías del claus- das del refectorio de conversos de Huerta, cuyos nervios arrancan en
tro) y Bonaval (ábside meridional). Fuera de lo cisterciense los encon- punta. u n a opinión distinta sobre este último procedimiento, su ori-
tramos además en el monasterio premonstratense de Santa María la Real gen y expansión, vid. VALLE PÉREZ, 1982: I, 160 y 179-180 (notas 94
de Aguilar de Campoo (galerías del claustro y sala capitular). Errónea- a 101).
mente, ANTÓN describe el perfil de estos nervios como de "un baque- 1146 Moreruela (sala capitular), Sandoval (sala de monjes), Huerta (igle-
tón de sección apuntada" (1942: 41). sia, claustro, refectorio y cocina), Rioseco (iglesia), Bonaval (capillas de
1142 Tramos 9, 10, 12, 13, 15 y 23 a 28. Análoga molduración la la iglesia), Fitero (sala capitular), Iranzu (sala capitular y tramos más
encontramos, por ejemplo, en Santes Creus (Sala Capitular), Poblet antiguos del claustro), etc...
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
242
4. Compuestas por un cuerpo central saliente —una
moldura en espiral—, rodeado de una corona poli-
lobulada surcada de hojas lanceoladas (lám.
I I 5 3
7 9 ) .
en buen estado hasta nuestros días presentan gran variedad Todos los formeros son apuntados y de sección pris-
de formas y motivos decorativos, pudiéndose agrupar en mática, perfilando su arista con un simple baquetón. La
los siguientes tipos: plementería está despiezada siguiendo la manera francesa,
con hiladas de sillares perpendiculares a la clave.
1. Formadas por coronas concéntricas de motivos
Hay que destacar que la altura de las bóvedas de la
geométricos muy simples, combinadas con otras
lisas . II50
galería de naciente es menor a la de las restantes. La dife-
rencia entre aquélla y las colindantes se salva trasdosando
2. Disco plano con botón central enmarcado por los fajones más orientales de las galerías norte y sur con dos
una orla de hojas lanceoladas, dispuestas en sen- hiladas de sillares.
tido helicoidal . II5I
Arcos y nervios reposan en los muros interiores sobre
3. Flor central de seis pétalos o pequeñas hojitas ménsulas, de mayor anchura las que encuadran los com-
rodeadas de una cenefa de tallos encadenados con partimentos de rincón y más estrechas las situadas en los
hojas lobuladas . n52 ángulos . Estos apoyos presentan diferentes modelos:
1161
Tramo 14.
I I 4 7 1 1 5 4 Tramos 23, 27 y 28.
1148 Tramos 8 y 10. I I 5 5 Tramo 25.
Tramos 2 y 6.
I I 4 9 1156 Tramos 15, 22, 24 y 26.
Tramo 3.
I I 5 0 1 1 5 7 Tramos I y 12.
1151 Tramo 5. 1158 Tramo 13.
Tramos 4 y 7.
I I 5 2 1159 Tramos 16 a 21.
1153 Tramo I I . La correspondiente al 9 ha sido reconstruida siguiendo 1160 Tramo 18.
este mismo esquema, si bien el objeto pinjante es una piña y la corona 1161 Las ménsulas I, 27, 28, 30 y 32 prácticamente han desaparecido.
está dividida en múltiples radios.
FUNDACIONES MASCULINAS • 20I
I . De modillones de rollos horizontales, escalona- Los cimacios que coronan a estas repisas son de dos
dos y lisos. Dentro de este tipo podemos distin- tipos: compuestos por un filete provisto de surco
guir tres grupos: en su base y un bocel entre escocias o por una
II66
1.1. con tres rollos continuos . II62 simple nacela . Estos últimos se prolongan en
II67
1.2. con cuatro rollos continuos . II63 imposta por la panda del mandatum —a excep- 1168
1.3. con tres rollos separados por escocias . II64 ción de los tres primeros tramos—, y los dos tramos
Por su austeridad y falta de decoración este modelo más septentrionales de la panda de la cilla . 1169
está en consonancia con el espíritu cisterciense, 2. Compuesto de platabanda, nacela y pieza pirami-
siendo habitual su presencia en las construcciones dal invertida. El cimacio aparece moldurado por
de la Orden . 1165 un bocel entre listeles . II70
1162 Ménsulas 1 a 10, 12 y 14 a 16. versos); Fitero (aleros del transepto y naves); Iranzu (callejón de acceso
1163 Ménsulas 17, 18, 20, 24, 25, 26, 29 y 31. al claustro desde occidente y galería norte del claustro), etc... También
1164 Ménsulas 11 y 13. encontramos este modelo en el claustro del ya mencionado monasterio
1165 TORRES BALBÁS, 1936: 135-137 e idem, 1956: 394. Armenteira premonstratense de Aguilar de Campoo (Palencia) y en el más cercano,
(penúltimas pilastras de la nave central y pilastra septentrional adosada y perteneciente a esa misma Orden, de Retuerta (Valladolid).
a la parte posterior de la fachada); Moreruela (cornisa de las capillas de 1166 Ménsulas 1 a 10 y 32.
la girola); Carrizo (aleros de la cabecera); óvila (refectorio); Bonaval Ménsulas 11 a 18, 20 y 24 a 31.
1 1 6 7
(alero de la capilla meridional de la cabecera); Veruela (sosteniendo los Interrumpida únicamente por las puertas de conversos, en el pri-
1 1 6 8
arcos que dan acceso al deambulatorio; cornisa de los absidiolos de la mero se abre la puerta de monjes y en los tramos segundo y tercero está
girola y del transepto; aleros del deambulatorio y naves laterales; sala de realizada en yeso, careciendo de ella en origen.
monjes); Rueda (refectorio); Huerta (cornisas de la iglesia y dormitorio En el segundo tramo de esta panda sólo se extiende un metro.
1 1 6 9
de monjes; pilastras de la nave central; sala de monjes; refectorio de con- 1170 Ménsulas 21 a 23.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
244
3. Ostenta dos boceles entre escocias, nacela y 1.2. A medida que avanzamos hacia occidente por
remate inferior en cuarto de círculo. Su cimacio las galerías norte y sur, el perfil de las basas
muestra también una combinación de molduras evoluciona. La escocia es más profunda, y a
planas, cóncavas y convexas . 1171 veces se decora con perlas o incisiones ;
1178 1179
machones angulares - e n donde el nervio del tramo de rin- nervio central muy marcado, ostentan en oca-
cón apea sobre una columna dispuesta en el ángulo mien- siones formas vegetales y en tres casos apa-
tras que los fajones y el resto de los nervios lo hacen en rece otra lengüeta más pequeña entre las basas
grupos de tres columnas- y en la galería occidental - e n la dobles . 1181
salen del poyo que cierra el claustro. superior más aplastado; la escocia se hace tan pro-
funda que casi llega a perder su perfil curvo, pre-
Las columnillas que sirven de apeo a las arquerías y sentando en un caso decoración de tacos ; el 1183
bóvedas de las galerías (fig. 20) se asientan sobre plintos toro inferior aumenta de tamaño y presenta un
de forma paralelepípeda de escasa altura que responden a perfil abombado; y las garras se vuelven más car-
tres modelos diferentes: nosas y ornamentadas, ocupando una amplia
1. de aristas vivas . 1172 superficie del toro.
2. de aristas superiores cortadas en nacela . 1173
3. A este grupo pertenecen las basas de las grandes
3. de aristas superiores baquetonadas . 1174
columnas interiores de la galería occidental, cons-
Todas las basas, dobles y triples, son de tipo ático. A tituidas por una sola moldura de sección prismá-
pesar de esta marcada uniformidad se aprecian algunos deta- tica y arista achaflanada . 1184
lles diferenciadores que permiten distinguir varios tipos : 1175 Los fustes son monolíticos -excepto los de las colum-
1. El primer grupo es el más abundante y se extiende nas interiores de la galería de poniente que están compues-
por las galerías de naciente, norte y mediodía, tos por varios tambores-, y lisos, con un diámetro
contando sólo con un ejemplar en la de sensiblemente mayor los correspondientes al interior de las
poniente . Responden a dos variantes:
1176
galerías.
1.1. Presentan fino toro superior, alta escocia y Los capiteles que adornan estas columnas presentan
ancho toro inferior en forma de cuarto de cír- tal diversidad de motivos que nos obliga a agruparlos en
culo con garras planas en los ángulos exte- conjuntos tipológicos:
riores. En algunos casos el toro inferior TIPO I. Capiteles de hojas lisas, con diversas varian-
aparece surcado por arquillos y en otros 1177 tes:
la lengüeta lleva una incisión a su alrededor o I.1. Capiteles de hojas planas pegadas a la
se decora con bolas. cesta dispuestas en un único p i s o o 1185
Lámina 74.
Valbuena, claustro,
panda occidental.
Lámina 75.
Valbuena. Claustro,
restos del lavabo.
señalada por dos líneas incisas paralelas uno de los capiteles las hojas sufren una
I a 6, I 3 y I7.
1 1 8 7 Esquemas semejantes los vemos en Palazuelos (ventanas de las capillas
1188 9. mayor y del Evangelio, naves, puerta de acceso a la capilla de Sta. Inés,
I0, 34 y 35.
1 1 8 9 sacristía), San Andrés de Arroyo (claustro y portada de la sala capitular),
II.
1 1 9 0 Sta. María la Real de Aguilar de Campoo (naves y ventanas del costado
" 7, I6, I9 a 2I, 23 a 26, 28 a 3I, 33 y 36 a 39.
9 I norte de la iglesia, claustro), Retuerta (nave central de la iglesia), Santi-
I 4 y I5.
1 1 9 2 llana del Mar (galería norte del claustro), etc. Una larga lista de edificios
9 a II, 23, 28 a 3I, 33, 38 y 39.
1 1 9 3 en los que encontramos tipos análogos al que analizamos, especialmente
1194 7 del ámbito palentino, puede verse en HERNANDO GARRIDO, I990: 59,
I 3 y I7.
1 1 9 5 nota 20 e idem, I995: I87, nota I 3 y 2 7 para la relación con Retuerta.
1196 Capiteles análogos los encontramos en las ventanas de la capilla
mayor del monasterio de Bujedo de Candepajares (Burgos).
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
246
Columnillas
de las galerías. TIPO II. Capiteles de vástagos entrelazados muy
torsión helicoidal , y en otros dos apa-
II98
carnosos, con dos o tres nervios marcados
recen surcadas por tenues incisiones en y yemas trepanadas, que ocupan toda la
zig-zag . Solamente en dos casos el
1199
superficie de la cesta formando un tejido
ábaco es almenado . I200
tupido en sentido horizontal o helicoidal;
I.3. Capiteles de grandes hojas lisas que com- llevan el ábaco almenado. Únicamente con-
ban sus extremos desplegándose en varia- tamos con dos ejemplos, situados en la
das ramificaciones y volutas que acogen galería oriental (láms. 84 y 8 5 ) .1205
bolas o racimos de frutos. Por encima de TIPO III. Capiteles de desbastado troncocónico, con
ellas emergen flores octopétalas, pequeños crochets de amplios tallos pegados a la
caulículos, palmetas u hojitas con bolas, cesta y nervios marcados. Dentro de este
mientras que otras hojas polilobuladas de grupo podemos distinguir tres variantes:
elevado tamaño y formas variadas ocultan III.I. La modalidad más sencilla la constituyen
los frentes de las cestas . Como en el
1201
las cestas que exhiben dos niveles de hojas,
1198 Lo mismo sucede, por ejemplo, en algunos capiteles del friso de Capiteles 83 a 88 y 90 a 96. La cesta 89 está prácticamente des-
1 2 0 4
Moarves, capilla del Abad de Aguilar de Campoo y en Sta. Eufemia de truida, aunque seguramente estaría decorada con motivos semejantes.
Cozuelos (HERNANDO GARRIDO, 1992: 72; idem, 1995: 126, aunque 8 y 22. Ejemplares similares encontramos, por ejemplo, en edificios
1 2 0 5
este autor no menciona el ejemplo vallisoletano). como Sta. María la Real de Aguilar de Campoo (machón angular N.O.
1199 Capiteles 46 y 52. del claustro), Bujedo de Candepajares (capiteles exteriores de las venta-
1200 Capitel 117 y 129. nas de la capilla mayor), Las Huelgas de Burgos (galería norte de las
1201 Capiteles 40, 41, 44, 67, 106, 108, 110, 124, 126 y 132. San Claustrillas), etc... (HERNANDO GARRIDO, 1992: 63-64; idem, 1995:
Andrés de Arroyo (iglesia y claustro), Sta. María de Mave (portada occi- 118), algunos de los cuales presentan otras similitudes con nuestro
dental), etc... monasterio.
1202 Capitel 111.
1203 Capiteles 42 y 133. Aunque en el 143 no se llegaron a tallar los
dados del ábaco, queda algún trazo inciso que permite suponer que sí se
proyectó hacerlos.
FUNDACIONES MASCULINAS • 20I
TIPO IV Capiteles de hojas carnosas de múltiples y profundo como los de la galería sur . 1216
lóbulos con nervios muy marcados, dispues- Hay, además, otras pequeñas variantes, como
tas en dos pisos. En uno de los ejemplares los el hecho de que sólo uno de los capiteles
lóbulos son grandes y redondeados , mien- 1213 tenga un desbastado troncocónico y se acom-
tras que en el resto son más pequeños y lige- pañe de pequeños tallos con fruto superior
ramente apuntados . Los ejemplares
1214 en cada uno de los frentes , y que dos lle-
1217
situados en la galería norte (lám. 8 7 ) pre- 1215 ven el ábaco almenado , mientras que en el
1218
sulas interiores del capítulo; refectorio), Iranzu (galería norte y tra- 1216113, 121 y 128.
mos más septentrionales de las de oriente y poniente); Huerta (claustro 62.
1 2 1 7
y cocina), Las Huelgas (distintos puntos de la iglesia y claustro de San 1218113 y 121.
Fernando). 1219Ejemplos semejantes a este tipo de capiteles decorados con "flora
57.
1 2 0 7
generalizada" (JALABERT, 1932: 190-208; idem, 1965: 96-98) los
1208 59, 60, 63 y 64. encontramos en Palazuelos (ventanas de la capilla mayor), La Espina
51.
1 2 0 9
(nave de la Epístola), Villamayor de los Montes (iglesia y claustro),
1210 102, 103, 112 y 115. Bujedo de Juarros (fachada occidental de la iglesia y sala capitular),
1211 114, 118,120 y 122. Huerta (claustro reglar), Vileña (sala capitular), etc...
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
248
VI.I. Capiteles de hojas de acanto con finos lóbu-
los aserrados y nervio central saliente y
calado que se abren en forma de abanico en
la mitad superior de la cesta cobijando
cogollos vegetales o piñas; otras hojas de
menor tamaño se sitúan entre aquéllas. Lle-
van ábaco almenado. Contamos con dos
ejemplos, uno en la galería de naciente (lám.
88) y otro en la septentrional^ . 22
tramos más variedad de fórmulas ornamen- VI.6. Capiteles con hojas de múltiples lóbulos
tales. redondeados, doble nervio central y extre-
que flanquean la portada de Moradillo de Sedano, así como en uno de Capiteles I2, 27 y I27.
1 2 2 5
das con el característico "báculo de TIPO VII. Capiteles que combinan temas figurados
obispo" (lám. 9 I ) . 1235
con otros vegetales (dragones afrontados
piendo tallos, etc.), labrados con cierta dían, sin duda, a enterramientos de los monjes que, en
tosquedad. Se localizan en la galería occi- época avanzada del medievo, solían sepultarse en las galerías
dental (láms. 93 y 9 4 ) . 1238 claustrales . 1248
1238 Capiteles 73 a 77 y 97 a 99. ANTÓN relacionó las capiteles de 1246 En 1981, debido al mal estado de los pisos y a la existencia de grie-
cabezas con algunos de la desaparecida iglesia de Castronuño y "un tas en las partes bajas de los muros, se efectuó una propuesta de conso-
grupo que se produce en estas tierras por hacia el primer cuarto del siglo lidación de los cimientos que incluía la realización de un nuevo
XIII" (1942: 50). pavimento a base de cantos rodados. En 1984 se había levantado el piso
1239 1 a 72, 83, 87 a 90, 106, 107, 111, 112, 117, 122, 123, 127, 128, de las cuatro galerías, pero únicamente se pavimentó la galería de
132 y 133. Idéntico perfil ofrecen los de la Puerta de Monjes. También naciente: a base de pequeños guijarros de río, de variado color, formando
se ve en la cabecera y sacristía de Palazuelos; sala capitular de Santes diversos motivos figurativos (escudos de Cíteaux, Morimond, Valbuena
Creus; lavatorio de Poblet; galería norte del claustro de la catedral tarra- y varios de la Congregación de Castilla), siguiendo un procedimiento
conense; nave de la Epístola del monasterio de Retuerta, etc... igualmente empleado en otros cenobios cistercienses castellanos: los
1240 73, 74, 84 a 86 y 91 a 99. Presentan perfil análogo los de las naves motivos más sencillos aparecen en Las Huelgas (Claustrillas y pórtico de
de la iglesia y claustro de Aguilar de Campoo; etc... los Caballeros), Bujedo (iglesia, claustro y sala capitular) y Huerta (refec-
75 a 77.
1 2 4 1
torio de conversos y, hasta hace poco tiempo, claustro reglar). En el claus-
78 a 82.
1 2 4 2
tro de Villamayor de los Montes se emplean temas figurativos, en
1243 100 a 105, 108 a 110, 113 a 116, 118 a 121, 124 a 126 y 129 a ocasiones complicados. Acerca de este tipo de pavimento, véase en último
131. término, VALLE PÉREZ, 1986: 98, nota 57.
Además, se ferco el vergel de la claostra de madera de pino de tramones y se
1 2 4 4 J. LÓPEZ DE URIBE, Proyecto de obras de restauración en el Monasterio de
1 2 4 7
blanquearon las claostras (Inventario, fol. 2 9 r ; GARCÍA FLORES, 1 9 9 6 : 5 6 8 ) . Santa María de Valbuena de Duero. Valladolid, 1 9 8 1 ( A G A 6 8 . 0 5 2 ) , 1 9 8 2 (Ins-
1245La primera noticia que tenemos acerca de este pavimento aparece en tituto del Patrimonio Histórico Español, Servicio de Monumentos y
las cuentas del período comprendido entre los meses de abril de 1776 y Arqueología, C - 7 3 1 ) y Memoria de obra finalizada. Obras de restauración en el
1 7 7 7 : Pisos. —Sentaron y repusieron la baldosa y ladrillos de los pisos de dormitorio, Monasterio de Santa María de Valbuena de Duero. Valladolid, 1 9 8 4 ( I P H E , Servi-
claustros altos y bajos y algunos retazos de la Yglesia de los seglares, gastaronse treinta y cio de Monumentos y Arqueología, C-432).
cuatro reales y medio. En las posteriores menciones únicamente se alude, al 1 2 4 8 AUBERT, 1942: II, 30; LEKAI, 1987: 4 8 7 . (vid. la introducción
igual que en esta, a su reparación (Cuentas de Obras, sin foliar). general).
• 20I
FUNDACIONES MASCULINAS•249
Lámina 83.
Claustro, capitel
núm.17 (tipo I.2)
Lámina 84.
Valbuena. Claustro,
capitel núm. 22
(tipo II).
El pabellón de monjes (figs. 12, 15, 16 y 21) arco, esta vez rebajado aunque con la misma sencillez
> Armarium decorativa, le dobla y voltea de la misma forma que el
En el extremo norte de la galería oriental del claustro, anterior . Hacia el interior de la estancia presenta
1251
junto a la Puerta de Monjes, se sitúa una gran hor- un dintel de factura moderna. Otra puerta situada en
nacina de arco de medio punto de fuerte derrame con el testero del transepto permite también el ingreso
decoración de casetones y florones, obra del siglo XVI. por la iglesia. Desde ésta se pasa a través de un arco
Probablemente ocupa el lugar que en origen tuvo el de medio punto ligeramente peraltado que descansa
armarium claustri, por lo general, un simple nicho exca- directamente sobre las jambas, mostrando ambos ele-
vado en el grosor del muro occidental del brazo del mentos sus aristas vivas.
transepto, en este caso del brazo sur . 1249
Es una estancia de planta rectangular que presenta en
> Sacristía su ángulo noroeste un entrante correspondiente al con-
Como es habitual en los monasterios de la Orden, trafuerte occidental del brazo del transepto al que se
aparece adosada al hastial del transepto . Se accede
1250 adosa. Aparece en la actualidad compartimentada en
a su interior desde la galería del claustro a través de sentido norte-sur por un estrecho tabique que prolonga,
una sencilla puerta con arco de medio punto de sec- por su parte oriental, el mencionado estribo. Se cubre
ción prismática, sin ningún tipo de molduras, que con una bóveda de medio cañón , en parte inte-
1252
apea directamente sobre jambas igualmente lisas; otro rrumpida por el desarrollo del contrafuerte del templo,
Vid. al respecto ÁUBERT, 1947: II, 39. También era frecuente que
I249 el monasterio no contaba con un espacio destinado a sacristía y que
pasado un tiempo y a medida que el número de libros aumentaba el ésta fue creada a costa de la sala capitular, "ocupando uno de sus tra-
armarium se transformara en lucillo sepulcral mos" (1988: 6-9). Sigue a éstos, VÁLLEJO, 1995: 46. Será ÁRA GÍL la
(Ibid., II, 40), como ocurrió en Moreruela, Monsalud, Huerta; o en que identifique correctamente esta dependencia, señalando que su lugar
altar, como son los casos de Rueda, Sacramenia y el que tratamos (ÁBAD "ocupa ahora la antesacristía que precede a la actual sacristía barroca"
CASTRÓ, 1998: 188-189). En el apartado dedicado al armarium en la (1986: 17).
monografía de La Espina se pueden encontrar más referencias biblio- 1251 Aunque se puede pensar que este último arco es fruto de una res-
gráfícas sobre estas piezas. tauración moderna debido a que en el resto de las puertas que se abren
1250 ANTÓN creía que la capilla de San Pedro, para él capilla-tesoro, a esta galería las dobladuras ostentan similar perfil que el interior, es
actuaba al mismo tiempo como sacristía, ocupando la sala capitular decir, semicircular, no dudamos de su originalidad. Lo que origina tal
todo el espacio que abarcan las actuales antesacristía (sacristía medie- solución es que este vano se cerraba del lado del claustro con un batiente
val) y sacristía (antiguo capítulo) (vid., lo que se dice al respecto en el de madera.
apartado dedicado a aquélla capilla). Y de modo semejante, los arqui- 1252 Algunos autores, como BÁNGO TÓRVISO, señalan erróneamente que
tectos CAÑEDO, ESPINOSA y VARONA, opinaban que hasta el siglo XVI está cubierta por un cañón apuntado (1994: 189).
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( 1 1 4 7 - 1 5 1 5 )
252
Fig. 2I.
Reconstrucción hipotética
del pabellón de los monjes.
finales del XV o principios del XVI (lám. 95) . I2S4 tado y el resto de los frentes carecen de este retallo . I257
En el muro oriental, en el lugar que originariamente Al exterior es visible, desde la capilla de San Pedro , I258
ocupaba una ventana, se acondicionó también en el vano que en origen iluminaba la sala. Se trata de
época moderna un gran nicho con piscina y, en el una esbelta ventana cuyo remate, en arco de medio
ángulo S.E., un vano en esviaje que suplía la función punto tallado en un sólo sillar, y jambas presentan sus
de la primitiva . En el costado sur se abre una
I255 aristas achaflanadas . Fue cegada a raíz de las refor-
I259
puerta del siglo XVIII que comunica con lo que en ori- mas sufridas por esta estancia en el siglo XVI.
gen fue sala capitular, y desde entonces, sacristía. A lo > Sala Capitular
largo de todo el flanco norte y parte del oriental corre Contigua a la sacristía, la entrada desde el claustro se
un banco de fábrica rematado en nacela simple inver- realizaba a través de una amplia portada flanqueada
1253 Son muchas las sacristías de monasterios cistercienses que se above- Espina, Arroyo o La Oliva—, no parece fruto de una reforma posterior
dan con cañón: Moreruela, Bujedo, Monsalud, Óvila, Sacramenia, Rueda, a su erección: la bóveda es continua de Este a Oeste, siendo interrum-
La Oliva, Poblet, Veruela, Rueda, Piedra, Sobrado y Oya (las tres últimas pida únicamente por el entrante del contrafuerte; el desarrollo de la
apeadas sobre fajones) en España; Beaulieu, Silvanes, L'Escale-Dieu, Font- imposta de cardinas es también completo, sin cortes; y tampoco hay hue-
froide, Thoronet, etc., en Francia; Bronnbach en Alemania, etc. llas en los costados norte y sur de esta zona occidental que hagan pen-
1254 GARCÍA FLORES, I996: 564. sar que en origen el muro tenía la misma anchura que en el resto del
Ibidem.
1 2 5 5
pabellón y que en época indeterminada —pero antes de fines del XV— se
1256 Corresponde al hastial sur del transepto con los contrafuertes que afeitó la parte interna del muro.
lo flanquean. Constituye, desde la construcción de esta capilla funeraria, el muro
1 2 5 8
Lámina 85.
Valbuena. Claustro,
capitel núm. 8
(tipo II).
Lámina 86.
Valbuena. Claustro,
capitel núm.115
(tipo IIÍ 3)
por dos vanos simples que servían como ventanas , I260 atender con sumo cuidado la construcción de esta
tapiadas con ladrillo y mampostería al destinarse su sala, especialmente lo referido a su decoración, en
espacio a sacristía en el siglo XVIII . Todos los vanos
I26I
gran parte motivada por la importancia que tiene esta
presentan tres arquivoltas de medio punto de sección dependencia en el conjunto de la vida monástica . I264
prismática y arista viva sin ningún tipo de moldura- El interior de la estancia, de planta rectangular, fue
ción, que apoyan directamente sobre jambas de idén- radicalmente transformado, como hemos indicado,
tica desnudez decorativa. En los vanos laterales en la segunda década del siglo XVIII: se desmontaron
prácticamente no quedan restos de los arcos inferio- las bóvedas y soportes que la compartimentaban,
res debido a las reformas dieciochescas y la rosca de construyéndose otras nuevas, mucho más altas; los
las arquivoltas superiores de todos ellos está parcial- vanos y portada que se abrían al claustro se tapiaron,
mente oculta por los formeros de las bóvedas de las aprovechando este espacio para instalar cajonerías; y
galerías claustrales. Aquellos, junto con los nervios y las tres ventanas que, situadas en el frente oriental,
fajones de éstas, voltean sobre ménsulas colocadas en
alumbraban la sala fueron ampliadas . I265
1260 Presentan este mismo tipo Sobrado, Bujedo, Monsalud, Cañas, 1262 Sobre este aspecto, véase más adelante el proceso crono-construc-
Fitero e Iranzu en España; Villelongue, Écharlis, Flaran, Fontfroide, Pon- tivo.
taut, Beaulieu, etc. en Francia; Chiaravalle de Milano, Chiaravalle di Fias- Este marcado carácter de austeridad es únicamente comparable al
1 2 6 3
tra y S. Martino al Cimino en Italia; Buildwas, Graiguenamanagh, que muestran los accesos a las salas capitulares de Monsalud y Carrizo.
Fountains, etc., en Gran Bretaña; etc... 1264Vid. AUBERT, 1947: I, 68 y 70; BRAUNFELS, 1975; 154-156;
1261 En 1711 Melchor de Renedo firmó las condiciones de la obra VALLE PÉREZ, 1982: I, 77; ABAD CASTRO, 1998: 189-191; entre otros.
(A.H.P.V, Protocolos, 15.224, año 1711, fols. 44r-45v. (vid. apéndice 1265En las condiciones para la obra de la sacristía y dormitorio (vid.
documental, doc. 9; pub. por GARCÍA FLORES, 2009: 69-71. El actual nota 1261) se establecía, entre otras, la siguiente: ...Yten me obligo a desazer
cierre de la portada y ventanas es más reciente, de las últimas restaura- las bobedas del Capitulo baxo cinbrandolas y baxando la piedra con quenta y si algo se
ciones (1999-2001). desperdiziare pagara el monasterio...
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
254
nientes del derribo del primitivo capítulo serían emple-
ados entonces como material de relleno entre el pavi-
mento original y el actual, actuando como cimientos
de las vigas de madera sobre las que se asienta ese
último. Otros fragmentos serían empleados también
como cimientos en otras zonas del complejo monástico
que estaban en obras por aquel entonces.
El novedoso perfil que muestran los fragmentos de ner-
vios respecto al utilizado hasta el momento en la igle-
sia y al empleado en las diversas salas conservadas
puede, a primera vista, hacer pensar que proceden de
alguna otra dependencia del complejo monástico trans-
formada o desaparecida. Sin embargo, el hecho de que
sea esta habitación, como hemos apuntado más arriba,
una de las más importantes del monasterio, nos empuja
Lámina 87. a creer que, si bien hacia el claustro muestra gran sim-
Valbuena. Claustro,
capitel núm.56 plicidad, al interior presentaría mayor vistosidad . 1268
(tipo IV) Por el exterior, las tres amplias ventanas que iluminan
la estancia presentan forma de arco semicircular peral-
tado, consecuencia de las mencionadas reformas die-
ciochescas. N o obstante, quedan huellas de los vanos
empleadas en la iglesia y restantes dependencias aba- originales: por encima de la clave de las actuales se pue-
ciales . También se han recuperado recientemente
1266 den apreciar las trazas de unos arcos de medio punto;
varios fragmentos de capiteles que permiten hacernos asimismo, bajo todas ellas se observa cómo la abertura
una idea clara de cómo eran: de gran tamaño, su cesta de los vanos fue cegada con sillares, siendo posible dis-
se decoraba con gruesas y grandes hojas lisas en los cernir su anchura exterior y, en el caso de la ventana
ángulos rematadas en bolas, y estaba coronada por un situada más al sur, el chaflán que presentaban las jam-
ábaco almenado. Este tipo se corresponde con otro bas interiores que conformaban tales vanos. Sin duda,
capitel rescatado, en esta ocasión casi completo, las ventanas primitivas serían semejantes a las que se
durante las obras llevadas a cabo en las antiguas salas pueden ver en la Sala de Monjes.
abaciales (primera mitad del XVIIl): únicamente hay
que añadir a la descripción señalada que entre las hojas > Escalera-Paso a la huerta-Locutorio
de los ángulos se disponen otras con doble reborde . I267
A continuación del Capítulo se disponen de forma
perpendicular al claustro y paralelas unas a otras tres
La identificación de estos fragmentos como pertene-
estrechas estancias de planta rectangular . Los 1269
cientes al capítulo estriba en gran medida en su poste- monasterios de la Orden solían contar con una serie de
rior ubicación, ya que la gran mayoría estaban dependencias como las que nos ocupan, destinadas a
localizados en lo que fue dormitorio común. Cuando locutorio, escalera de subida al dormitorio y un paso
en el XVIII se procede a renovar el espacio de la sala que conducía a la huerta o a las dependencias situadas
capitular y se construyen nuevas bóvedas, la elevada al este del conjunto, aunque el orden no era siempre el
altura de éstas obliga a que el nivel del piso del dormi- mismo . Lo cierto es que no pocos monasterios
1270
torio tenga también que subirse; los escombros prove- contaban con tres dependencias de este tipo . 1271
1266 Aparece este tipo en Sacramenia (naves laterales y sala capitular), 1988: 48; y VÁLLEJO, 1995: 46, únicamente señalan la existencia de los
Veruela (deambulatorio, naves laterales y capítulo), Fitero (deambula- dos últimos.
torio), La Oliva (sala capitular), Poblet (presbiterio, deambulatorio...), 1270AUBERT, 1947: II, 36-37; ABAD CASTRO, 1998: 195-198; KINDER,
etc. 1998: 267-268.
Modelo semejante lo encontraremos también en la sala de monjes
1 2 6 7 1271VALLE PÉREZ, 1982: I, 91, nota 185. La Ferté, Longpont y L'Es-
y en el templo (tipo III.I). cale-Dieu en Francia; Rievaulx y Kirkstall, en Inglaterra; Bronnbach,
Este contraste que apuntamos encuentra un buen ejemplo en el ya
1 2 6 8 Marienthal y Pforta en Alemania; Tiglieto en Italia; y Sobrado, La
mencionado monasterio de Monsalud de Córcoles. Espina, Moreruela, Huerta, Sacramenia, Rueda, Veruela, La Oliva, Iranzu
1269 ANTÓN, 1942: 35-36; ARA GIL, 1986: 18-19; YÁÑEZ SINOVAS, y Santes Creus en España, cuentan o contaban con ellas.
FUNDACIONES MASCULINAS • 255
Lámina 88.
Valbuena. Claustro,
capitel núm.18
(tipo VI.1).
Lámina 89.
Valbuena. Claustro,
capitel núm. 32
(tipo VI.2)
La primera fue profundamente modificada en el XVIII estancia. Al fondo se abre una pequeña ventana de
junto con sacristía y capítulo, cerrando su paso al claus- fuerte derrame y arco de medio punto de sección
tro y convirtiéndose en so-sacristía . En origen tenía
1272 prismática que voltea directamente sobre las jambas;
acceso desde la galería claustral a través de una puerta parcialmente cegada, penetra la luz por un ventanuco
con arco rebajado cuyo intradós aparece profusamente cuadrado practicado en su interior.
decorado con yesos fechados por una inscripción en Por el exterior, sobre dos hiladas de sillares que tras-
I 6 9 I . Un codillo da paso al espacio propiamente
I273
dosan el citado ventanuco queda el único resto
dicho de lo que fue en su día la escalera de subida al intacto del vano medieval: un arco de medio punto
dormitorio de monjes . I274
con sus aristas cortadas en chaflán tallado en un solo
En su interior, parcialmente enmascarado por una sillar que se corresponde con el remate de la ventana
gruesa capa de cal y mampostería y cubierto con una primitiva. Posiblemente en su estado original guarda-
bóveda de cañón ligeramente rebajada construida en ría una disposición semejante a la de la sacristía.
ladrillo, se practican próximas al cierre oriental de la Bajo el tiro de la escalera se ubicaba una pequeña
sala dos puertas: una al norte, adintelada, que comu- dependencia destinada seguramente a prisión . La I275
nica con la moderna sacristía y otra al sur, de arco existencia de esta última pieza aparece constatada por
rebajado, tabicada con mampostería, que lo hacía con el reciente descubrimiento de un cimiento que en
la sala contigua. Más cercana a la entrada y en ese dirección norte-sur recorre, hacia la mitad de la sala,
mismo costado meridional se dispone lo que parece su interior. A este recinto se accedería desde el pasaje
ser otro vano, cegado por sillería bien escuadrada, contiguo por la puerta situada más al Este. Respecto
pero en lugar de rematar en arco de medio punto lo al otro vano situado hacia occidente desconocemos
hace con uno rampante, a modo de arco de descarga. cuál era su utilidad y los únicos ejemplos de espacios
En ambos costados se aprecian además, una vez eli- de escaleras que conocemos tengan análoga distribu-
minados los revocos modernos, las zarpas donde se ción son los de Rueda, Veruela y Tiglieto . Lo I276
asentaba la escalera, que ocupaba todo el ancho de la cierto es que en nuestro caso la huella de las zancas de
1272 En las recientes restauraciones ( I 9 9 9 - 2 0 0 I ) ha recuperado el das bajo la escalera al dormitorio en la monografía de La Espina.
aspecto que tenía entonces. Para el caso de Rueda puede verse el plano en VAUBOURGOIN,
I 2 7 6
Claustro,
ipitel núm. 27 En cuanto a su interior, presentan algunas diferenciaS'
(tipo VIA).
La segunda dispone a lo largo de sus muros un banco
de ladrillo de factura moderna. En el costado norte se
distinguen dos puertas de arco de medio punto, hoy
en día tapiadas - l a occidental con buena sillería, la
situada a oriente con mampostería y muy alterada
además por reformas posteriores- . En el costado
1281
1278 Solución empleada en La Oliva, Monsalud de Córcoles, etc. quiso transformar en un vano adintelado. Con posterioridad se practi-
Al contrario de lo que ocurría en la sala precedente y en la sacris-
1 2 7 9 caría en su interior una pequeña ventanilla cuadrada que pone en con-
tía, estos pasillos no se cerraban con batientes sino que siempre estaban tacto esta sala con la que la precede.
abiertos. ANTON, 1942: 36, cree probable que se condenase el paso al exte-
1 2 8 2
1280 ANTON se equivoca al afirmar que se abovedaba con un cañón rior desde un principio.
agudo que arranca de impostas achaflanadas (1942: 35), lo mismo que
FUNDACIONES MASCULINAS • 257
Lámina 92.
> Sala de Monjes Valbuena. Claustro,
Con acceso desde el pasaje colindante se penetra en capiteles núms. 130
este recinto a través de la puerta descrita, que al inte- (tipo VL10) y 131
(tipo VL8).
rior muestra un arco rebajado de mayor luz.
De planta rectangular, está dividida por una espina
central de tres columnas en dos naves de cuatro tra-
mos cuadrados cada una (lám. 98). Resulta, pues, una
sala de dimensiones bastante superiores a la que ten-
dría el capítulo y que adopta la organización con que
tradicionalmente se concebía este espacio . Cada I286
tado. En los muros, los nervios y arcos voltean sobre miento no es privativo de este lugar de la sala, sino
ménsulas muy simples en forma de caveto y corona- que también se utiliza sobre las ménsulas: en este caso
1283 Para ANTON, 1942: 35 y 36 y ARA GIL, 1986: 18, el segundo sería CASTRO piensa al respecto del cenobio burgalés en un posible cambio de
el paso a la huerta y el tercero el locutorio. ABAD CASTRO, 1998: 197, función (l998: 197; 1998 (2) y 1998 (3)).
POZA YAGÜE, 1 9 9 8 y 1 9 9 8 ( 2 ) y VICENTE PRADAS y MARTÍN LOZANO, 1 2 8 6 AUBERT, 1 9 4 7 : II, 75; ABAD CASTRO, 1 9 9 8 : 198. E n España es el
2006: 39 y 42, piensan sin embargo que la segunda sala es el locutorio único ejemplo conservado que exhibe ocho tramos, siendo más comunes
y el pasaje al huerto el tercero. Por su parte, VALLEJO, 1995: 46, las las de seis (vid. la monografía de La Espina). Excepcionalmente, la de
denomina "armarium" (?) y locutorio. Poblet cuenta con diez, y parece que el de Huerta contó con 12. En
1284 AUBERT, 1947: II, 70-72 y 73-74, respectivamente. Francia, presenta análoga compartimentación el de Noirlac, Val-Notre-
1285 Ocurre lo mismo en Iranzu, La Oliva, Veruela y Rueda (MARTÍNEZ Dame, Maubuisson y Fontaine-Guerard; Grey Abbey, en Irlanda; etc.
BUÉNAGA, 1998: 73 señala esta circunstancia en las casas aragonesas; Repuestos durante la restauración de los años 60 del siglo XX.
1 2 8 7
para las navarras, MARTÍNEZ ÁLAVA, 2007: 164). Asimismo, en el 1288 Se pueden incluir en el Tipo III.I de la clasificación de los capiteles
monasterio de las Huelgas de Burgos, aunque sólo encontramos a con- de la iglesia, y también con los fragmentos provenientes de la sala capitular.
tinuación del capítulo dos estancias estrechas, ambas tienen salida al exte- También se puede ver esta solución en el Refectorio de Conversos
1 2 8 9
rior, si bien la más septentrional fue cegada en su parte inferior. ABAD de Huerta, en Santes Creus..
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
258
mática y aristas vivas, que voltea sin interrupción sobre
las jambas, igualmente lisas, y que en origen comuni-
caba con el exterior . El vano situado en el tramo
1292
mos excepto en el más meridional; en éste lugar aparece siglo XV, una vez que había ingresó el monasterio en
una puerta bajo arco rebajado, también de sección pris- la Congregación de Castilla, se dividió en celdas indi-
de puertas hacia otras salas adyacentes o al exterior no es extraña, como 27I y ss.
vemos que ocurre en La Espina (vid. la monografía correspondiente), en Sobre el dormitorio de Valbuena y sus etapas constructivas desde
1 2 9 6
Moreruela (MIGUEL HERNÁNDEZ, 2008: 255-256; y MARTÍN, VILLA- el siglo XIII al XX, vid. SAN MIGUEL JOSÉ, 2003.
NUEVA, MARCOS, MISIEGO y SANZ, 2008: 441-442) o La Oliva (LÓPEZ
DE GUEREÑO SANZ, 2004: 779; MARTÍNEZ ÁLAVA, 2007: 130).
FUNDACIONES MASCULINAS • 259
viduales con muros de adobes y mampostería . I297 metro. Esto provocó cambios importantes en su
Más tarde, en los siglos XVI y XVII, coincidiendo pro- organización: se cegaron los vanos originales y se
bablemente con la construcción del claustro rena- abrieron otros nuevos con balcones, así como dos
centista, las celdas se renuevan con tabiques de puertas de salida al claustro alto y la puerta de 1298
mampostería, aunque con una disposición semejante maitines fue reemplazada probablemente por un bal-
a las precedentes (lám. 99). Pero sería más drástica la cón abierto por encima de ella ; se desmontaron 1299
reforma llevada a cabo en el siglo XVIII: con motivo los arcos diafragma que sostenían la techumbre de
de la conversión de la primitiva sala capitular en madera ; se hizo una nueva compartimentación
1300
sacristía se construyeron nuevas bóvedas, más altas interior a base de amplias celdas individuales a las
que las anteriores, con lo que el nivel del suelo del que se accedía por un largo y ancho pasillo que corría
dormitorio tuvo que elevarse aproximadamente un paralelo al claustro . 1301
1 2 9 7 ... en el dormitorio sefesieron fiertas felas de adobes (Inventario, fol.29v; pub. dolos y baxando la piedra con quenta... El 15 de diciembre de 1719, fray Alonso
por GARCÍA FLORES, 1996: 563 y 568). La división del dormitorio de la Puente, monje profeso del monasterio, firma una escritura de obli-
común en celdas individuales, autorizada entre los benedictinos desde gación con el abad fray Gerónimo de Villanueba para que a su muerte se
I 4 I 9 , es adoptada por Martín de Vargas en los usos de I434, los pri- cante una vigilia y una misa con responso. En ella se expresa que el pri-
meros conservados de la Congregación (sobre este particular vid. YÁÑEZ m e r o gastó en la Redificazion del Dormitorio que mira al oriente zinquenta y zinco
NEÍRA, 1980: 438-439; idem, 1981: 130). Para conocer la actitud del mil Reales. Y en una fundación de capellanías fechada el 12 de noviembre
Capítulo General de la Orden acerca de la aparición de estas celdas, vid. de 1728, se nos dice que aviendo hallado la casa suma mente deteriorada, y empe-
el trabajo de BELL, 2004. ñada, los gaste en repararla reedificando el Dormitorio que corre de la Espadaña hasta a
1 2 9 8u n a en el primer tramo junto a la iglesia, en cuyo dintel aparece vistas del Rio (Fundación de capellanías de Alonso de la Puente ( A . H . N . Clero, legajo
grabada la fecha I7I9, y otra en el séptimo, que también lleva una ins- 7.659). La gran labor realizada por este monje se destaca en su lauda
cripción, pero muy deteriorada. En el balcón central, por el exterior, apa- sepulcral, conservada en la capilla de la Inmaculada Concepción, que con-
rece la inscripción A Ñ O D E 1718. tiene la siguiente inscripción: AQVI YACE, EL P . F . ÁL0NS0 D E LA
E 1
1 2 9 9 En Valdediós se puede ver un balcón para los enfermos, aunque el P V E N T E HIJO I D O S bEZES AbbAD D E ESTA CASSA S V RES-
acceso se realiza desde el costado occidental del brazo sur del transepto. T A V R D 0 R I SÍNGVLARISSIMO BIEN E C H O R C O LO P E-
A m O R
1300 Sobre este tipo de cubrición, vid. lo que se dice en la Espina. G O N Á N , SVS H O B R A S IA qVIEN, C O N R A Z O N SE DEBE
1 3 0 1 En la escritura de obligación firmada por Melchor de Renedo para APLICAR LO D E EL P S A L M O 68 ZELVUS, D O M V S TVAE
hacer la obra de la sacristía y dormitorio (vid. nota I 2 6 I ) se estipula que C 0 M E I D I T MIE M V R I O , A 6 D E SEPT , A Ñ O D E 1729 D E
E
se deshagan de las celdas y tambien se an de desazer los arcos que tiene el texado cinbran- EDAD 60. Sobre este personaje vid. GARCÍA FLORES, 2009.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
260
En cuanto a los paramentos interiores, de aparejo
de sillería bien escuadrada, en el costado norte se
conservaba, en su extremo occidental, la parte infe-
rior de las jambas de la primitiva puerta que con-
ducía a la iglesia, de perfil rectangular y aristas vivas,
y sobre la cual se construyó una nueva en el XVIII
(lám. 101). Resulta difícil determinar con seguri-
dad si ésta última comunicaba con la iglesia a tra-
vés de una balconada, como hemos sugerido arriba,
ya que el paramento septentrional ha sido recons-
truido no hace mucho tiempo ; no obstante, por
I302
Valbuena.
Fragmentos Las obras llevadas a cabo en los años 50 y 60 del siglo parte oriental cuando se construyen otras depen-
de arcos
a s y nervios XX echaron abajo esta compartimentación y dejaron dencias sobre la mencionada capilla y las otras dos
de la primitiva
de nuevo el dormitorio diáfano, aunque manteniendo adyacentes; aunque parece más probable que se tra-
sala capitular. tase del "tesoro" o archivo . En el ángulo N.E. se
el nivel del suelo de época moderna, cubriéndolo con
1305
Lámina 98. una cubierta de cerchas metálicas y rehaciendo en su aprecia nítidamente el entrante correspondiente al
Valbuena. totalidad el cierre meridional con mampostería y contrafuerte oriental del brazo del transepto al que
Sala de monjes.
cemento. En los años 90 se produjo una limpieza y se adosan los muros del dormitorio. N o quedan,
retirada de escombros —especialmente en la zona sin embargo, restos del contrafuerte opuesto . I306
meridional—, dejando a la vista la compartimentación Por otra parte, no hay indicios de la existencia en
en celdas de los siglos XV a XVII, y reposiciones pun- época medieval de pieza alguna destinada a celda
tuales en la cubierta. Actualmente, después de las del abad . I307
recientes intervenciones, se ha sustituido la armadura Los muros de cierre oriental y occidental presenta-
metálica por otra de madera y se ha unificado el nivel ban en cada uno de los doce tramos de que cons-
del suelo, manteniendo la cota dieciochesca. taba el dormitorio dos ventanas relativamente bajas
Igualmente, los lados interiores del vano han sido totalmente reno-
1 3 0 2 1 3 0 6 Véase más adelante el proceso crono-constructivo.
vados. 1 3 0 7 Suponían la presencia de alguna de estas cámaras CALZADA, 1928:
1303La jamba izquierda fue rehecha cuando se tapió la puerta. 8 9 6 ; ANTON, 1 9 4 2 : 3 8 ; VALLEJO, 1 9 9 5 : 4 6 ; y los arquitectos CAÑEDO,
1 3 0 4 AUBERT, 1 9 4 7 : II, 9 3 - 9 4 ; JANSEN, 1 9 9 8 : 7 8 ; KINDER, 1 9 9 8 : 2 7 2 . ESPINOSA y VARONA en su Restitución planimétrica, 2 9 .
1305 MARTÍN ANSÓN, 2008: 189. Vid. lo que se dice de estas estancias
en la monografía de La Espina.
FUNDACIONES MASCULINAS • 261
carecía de vanos.
Los tramos estaban separados por arcos diafragma
que sostenían la primitiva techumbre de madera, de
los cuales únicamente quedan como testigo las hue-
llas de los enjarjes en los paramentos y alguno de
sus arranques a escasa distancia del piso ; dichos 1313
con vanos
pareados.
1308 Esta misma disposición la encontramos en los dormitorios de 1313 ANTON, aunque no da noticia de los restos conservados, señala
Monsalud, Óvila, Huerta, Poblet, etc. que "La carencia de contrafuertes obliga a suponer que el gran dor-
1309 En los tramos segundo al sexto, contando siempre desde el tran- mitorio tuvo cubierta de madera, como la de Poblet y otros, proba-
septo. Otras cuatro habían sido parcialmente reconstruidas con sillares blemente" (1942: 38). N o se observan las huellas del tejado a doble
irregulares y cemento en el extremo meridional. Las restantes desapare- vertiente que techaba el dormitorio sobre el hastial del brazo del cru-
cieron bajo las puertas que se abren al sobreclaustro. cero al que se adosa toda la panda como ocurre por ejemplo en La
Costado occidental de los tramos segundo, cuarto y quinto.
1 3 1 0 Oliva y Bujedo.
Así sucede en una de las ventanas de los tramos primero, tercero a
1 3 1 1 1314 Desde el claustro alto se pueden ver diez y desde el patio interior
octavo y onceno, y en las dos del noveno. En el dormitorio de monjes de situado a occidente de la Sala de Monjes, tres desde la huerta sólo son
Fontenay y en los de conversos de Pontigny y Le Val encontramos tam- perceptibles dos casi completas y los remates o jambas de otras pocas.
bién algunos vanos con esta misma disposición' 1315 Recuérdese que esta misma estructura mostraban las ventanas de la
1312 Respecto a la puerta que ANTON sospecha se abría sobre una sacristía y de la cárcel.
terraza de la galería oriental del claustro, nada se puede decir al no que- Tras las restauraciones, se remató en sentido horizontal con aparejo
1 3 1 6
están presentes en el extremo sur del occidental, a Se penetra en su interior por una puerta adintelada, de
la altura del primer sillar de las ventanas, pero en la misma época que la escalera. Queda, sin embargo, el
este caso son ciertamente de época moderna y esta- primitivo acceso semioculto por el vano moderno y el
ban destinadas a soportar la viguería del segundo enlucido que cubre todas las galerías. Se trataba de una
piso de las estancias adyacentes. puerta con arco apuntado de sección rectangular, sin
moldurar, que volteaba sobre jambas igualmente lisas. A
La panda del refectorio (figs. 2 2 y 23) pocos metros de ésta se abre otra, en esta ocasión de
traza ya moderna (siglo XVI) y cegada desde la cons-
> Calefactorio trucción de la escalera interior; desconocemos si con
Situada en el extremo oriental de la panda, entre la anterioridad existió bajo ella algún vano que corres-
Sala de Monjes y el Refectorio, una monumental pondiese a la organización primitiva de esta panda . 1321
Tesoro desde el exterior...", y que junto a una serie de edificios como la ANTON, 1 9 4 2 : 5 9 ; JIMÉNEZ LOZANO, 1 9 8 0 : 15; ARA GIL, 1 9 8 6 : 19;
enfermería, noviciado y otros de carácter agrícola y de almacenamiento, VALLEJO, 1 9 9 5 : 4 8 ; GARCÍA FLORES, 1 9 9 6 : 5 6 1 ; ABAD CASTRO, 1 9 9 8
configurarían en los siglos XVII-XVIII un nuevo patio o claustro empla- (4): 239; etc.
zado al este del núcleo monástico original, conocido por el nombre de Aunque no eran muy frecuentes, si hay constancia de la existencia
1 3 2 1
"Las Claustrillas" (Restitución planimétrica..., I I ) . Las recientes excavaciones de dos puertas de acceso desde el claustro al calefactorio, por ejemplo en
arqueológicas han sacado a la luz algunos de los basamentos cuadran- Bujedo, La Oliva, Herrera, Sacramenia... (VALLE PÉREZ, 1986: 148, nota
gulares sobre las que apoyaban las columnas o postes de este pórtico, 43; ABAD CASTRO, 1998 (4); y fichas correspondientes en el catálogo
aunque no podemos asegurar que correspondan a época medieval. Monjes y monasterios ...).
La construcción de la gran escalera alteró la organiza- corroborar esta hipótesis. Por otro lado, la excavación
ción interior del espacio del calefactorio medieval pero arqueológica allí realizada (I999) ha obligado a deses-
no su planta, que en efecto se corresponde con la timar la existencia en este lugar de dos ámbitos, uno de
actual: un rectángulo con eje paralelo al claustro. Ya paso y otro el propio calefactorio, hipótesis sugerida
hemos comentado cómo el muro de cierre de la esca- hace pocos años , así como desechar la posibilidad
1323
lera, construido con aparejo de sillares regulares hasta de un hogar central . Con toda probabilidad estarí-
1324
refectorio, actuando el susodicho muro como contra- Respecto a la cubrición original, el hecho de que la
rresto de los empujes de su bóveda. La ausencia de ven- bóveda que sustenta el tramo superior de la escalera
tana en el tramo septentrional del refectorio y la sea ligeramente apuntada y que en el costado occi-
existencia de una en el tramo inmediato vendría a dental —es decir, el muro oriental del refectorio—
costado norte. quede la impronta dejada por una bóveda apuntada El acceso desde el claustro se realiza a través de una
que ha estado adosada a él y cuya altura coincide con puerta con arco apuntado, de perfil rectangular liso y
la de aquélla, hace que consideremos la posibilidad aristas achaflanadas, que carga sobre las jambas por
de que aquel tramo de bóveda es un resto de la pri- medio de impostas formadas por molduras lisas: lis-
mitiva cubierta del calefactorio, parcialmente des- tel, surco y nacela sobre un bocel ; aquéllas, aunque
I33I
truida para alojar la escalera. El que dicha bóveda esté muy deterioradas, llevan su arista cortada en chaflán.
realizada en mampostería y no con sillares como ocu- Hacia el interior, presenta un arco similar aunque reba-
rre en el resto de las estancias, no es impedimento jado, de mayor luz, con aristas vivas y sin impostas.
para afirmar que corresponde a la obra primitiva . I326 Sobre ella se dispone un pequeño rosetón : por den-1332
Queda por último señalar una peculiaridad de esta tro y por fuera muestra dos arquivoltas de perfil
I333
sala: la existencia de una segunda planta. Se accedía a prismático, la interna con la arista rebajada y la externa
ella desde el dormitorio de monjes a través de la abocelada; la tracería se compone de un círculo central
puerta que hemos comentado al hablar de esa depen- en torno al cual se disponen una serie de rayos trian-
dencia y mediante unos escalones que salvaban el gulares que conforman una estrella de ocho puntas,
pequeño desnivel existente entre ambas piezas . I327 mostrando rayada toda la superficie.
Nada sabemos de su estructura, pero debía tratarse Tanto por el interior como por el exterior da la
de un pequeño espacio cubierto con armadura de impresión de que el lienzo de muro que da al claus-
madera utilizado como calefactorio del dormitorio. tro ha sido removido: al Este de la puerta se observa
La presencia de chimeneas en el dormitorio no era la huella de lo que debió ser un arco ligeramente
habitual, siendo además prohibidas en numerosos apuntado y al Oeste, aunque en esta ocasión sólo por
1326 El primitivo calefactorio de Rueda, recientemente recuperado, 1 3 2 8 AUBERT, 1947: II, 86; JANSEN, 1998: 65.
estaba cubierto por una bóveda de cañón apuntado dividida en dos tra- 1329 Para el caso francés, AUBERT., II, 115 y 116, y para el aragonés,
mos por un fajón, con eje E-O (IBARGÜEN SOLER, 2003: 64-65). Res- MARTÍNEZ BUÉNAGA, 1998: 241 e IBARGÜEN SOLER, 2003: 65, si bien
pecto al material con que se fabricó la de Valbuena, recordemos que las este último parece sugerir que el piso alto y su conexión con el dormi-
bóvedas de la sala de monjes de Moreruela están construidas con mam- torio pertenece a época moderna.
postera mientras que el capítulo, por ejemplo, lo está con sillería. 1330 Ibid., II, 97 y 101; KINDER, 1998: 283-285; ABAD CASTRO, 1998
El vértice de la bóveda queda ligeramente más alto que la base de
1 3 2 7 (4): 237 y 240.
la puerta, por lo que la diferencia de nivel debía salvarse mediante estos 1331 ANTON afirma que carece de impostas (1942: 57).
escalones. Este hecho no debe resultar extraño, por cuanto primero se ha La apertura de vanos sobre la puerta del refectorio es relativamente
1 3 3 2
construido el pabellón de los monjes, previendo quizás que se iba a levan- común. Así aparecen en Óvila, Huerta, Rueda, Piedra, Iranzu, en España;
tar una segunda planta sobre el calefactorio, de ahí que se haga la puerta Bonport y Noirlac, en Francia; etc...
al mismo tiempo que el resto del lienzo del dormitorio sobre el que se 1333 Hasta la última restauración (2000-2001) no era visible desde el
abre; posteriormente, cuando se levanta ya el calefactorio con su bóveda, claustro, ya que la construcción de sus bóvedas, lo ocultaron (Vid. más
ésta queda más alta respecto al nivel del dormitorio, por lo que será pre- adelante el proceso crono-constructivo). En el curso de las citadas inter-
ciso salvar la diferencia de altura con un par de peldaños. venciones ha sido recuperado y es visible desde el sobreclaustro.
FUNDACIONES MASCULINAS • 265
1334 Estas huellas se encuentran a tres metros y medio aproximadamente Con anterioridad a las restauraciones llevadas a cabo en 1995 se abrían
1 3 3 7
de los extremos oriental y occidental del paramento. en los tramos tercero y cuarto de la bóveda dos lucernarios rectangulares,
Más adelante, al ocuparnos del proceso crono-constructivo, volve-
1 3 3 5 del siglo XVII, que han sido cegados en el curso de las obras comentadas.
remos sobre este particular. Basta decir ahora que este tipo de cambio en 1338 Otros refectorios cubiertos con bóveda de cañón son Senanque,
la configuración de las puertas no es único. Véase por ejemplo el caso del Valcroissant y Aiguebelle en Francia; Sacramenia, Rueda, La Oliva,
refectorio del monasterio de Huerta, cuya puerta de acceso, en origen Poblet y probablemente en origen el de Veruela y el proyectado de
similar a la que muestra hoy la cocina, fue reconstruida cuando se pro- Huerta en España; etc. Por otra parte, su estructura recuerda a la del
cedió a abovedar la galería adyacente, una vez concluido el refectorio refectorio de Valcroissant y a la del dormitorio de Senanque (ANTÓN,
(ABAD CASTRO, 1 9 9 8 (4): 245, nota 22). 1942: 60, ya señaló su parecido con este último).
1336 En las excavaciones arqueológicas llevadas a cabo en el 2000 se des- 1339 ANTON las describe erróneamente como "repisas compuestas de
cubrió que en el cimiento norte del refectorio había un pequeño mordisco molduras achaflanadas interrumpidas por cuarto de bocel y filete"
que coincidía exactamente con el eje del óculo, lo que parece indicar que (1942: 57).
en esa oquedad se encajaría el soporte central del vano geminado. En Val- 1340 Éstos últimos son fruto de las restauraciones recientes (2000).
deiglesias (España) y en Noirlac, Savigny y Bonport (Francia), encontra- Anteriormente sólo había uno grande, con arco rebajado y realizado en
mos vanos geminados dando paso al refectorio; por otro lado, en Óvila se ladrillo.
utiliza como pasaplatos un doble arco. Fuera de la Orden lo vemos tam- 1341 AUBERT, 1947: II, 112-113. Se conservan también en Huerta,
bién en el de San Pedro de Soria. Por su parte, OLIVERA ARRANZ, 2002 Rueda y La Oliva.
(2): 421, sugiere que la entrada se practicaría mediante un triple arco, en Las dos primeras fueron reconstruidas durante las restauraciones de
1 3 4 2
lugar de los dos que nosotros defendemos. los años 60, siguiendo las trazas de las conservadas intactas.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
266
exterior; en cuanto al paso excavado en dirección
norte-sur que partía del vano del muro de poniente,
estaba parcialmente relleno de piedra y cascote, resul-
tando imposible apreciar el interior.
¿Cuál era la disposición primitiva? ¿Formaba parte
aquel vano del pulpito original? Uno de los aspectos
que más ha llamado la atención a los estudiosos que se
han ocupado del monasterio es la aparente ausencia de
tribuna para el lector monumentalizada, algo que
Lámina 103. sucede también en el de Sacramenia . Como era 1345
presenta liso, sin ninguna abertura. El tercero mues- Ya Antón, aun sin aludir expresamente a la falta de púl-
tra una ventana de idéntica estructura a las descritas pito, había resaltado que "nada altera la desnudez de
en el otro lado y que, si bien carece de los curiosos los muros, lisos y rudos" del refectorio valbonense . 1347
remates en las jambas exteriores, conserva restos de Posteriormente Lambert y Aubert destacaban
1348 1349
cocina. En el cuarto tramo se abre un vano simple Sin embargo en Valbuena el púlpito se alojaba en el
con arco rebajado que apoya directamente sobre las vano arriba descrito : el lugar que ocupa es el ritual;
I35I
jambas, ambos de sección prismática, sin moldurar. una simple ventana adintelada que seguramente sus-
Las obras de restauración realizadas en 1995 han tituye a otra anterior permite el paso de luz desde el
recuperado su función de púlpito del lector: una exterior; y además un pequeño nicho de arco de
puerta adintelada practicada en el extremo occidental medio punto, del que resta tan sólo la parte superior,
del testero sur de la sala da paso a una escalera exca- horada la jamba derecha por su intradós. Más difícil
vada en el espesor del ángulo formado por los muros es definir si la escalera y plataforma de lectura serían
oeste y sur, desembocando en el vano mencionado. de madera. En el paramento interior no hay desde
Con anterioridad a dichas obras esta zona presentaba luego huellas de haber existido una estructura pétrea
un aspecto ligeramente diferente: la puerta mencio- ni tampoco señales de haber tenido adaptado un
nada, más amplia, comunicaba directamente con el armazón ligneo. Sin embargo, la restauración de 1995
1343ANTÓN, 1942: 59 lo describe así: "queda casi a ras del suelo el ven- acceso se hicieran desde fuera del refectorio. SóWELL, 1987: 104, se
tanuco de arco, abierto en el muro occidental, comunicando con la cocina". limita únicamente a reseñar que no se conserva la tribuna.
El libro de Cuentas de obras nos informa de que entre los últimos días de abril 1 3 4 6 AUBERT, 1 9 4 7 : II, 110; ABAD CASTRO, 1 9 9 8 (4): 2 4 0 ; KINDER,
de 1 7 7 5 y los finales del m i s m o mes de 1 7 7 6 para facilitar la entrada de la 1998: 286-287.
cozina a este, se demolio la ventana del servicio; hizose un cancel hacia la cocina; gastaronse 1942: 59.
1 3 4 7
cinco machones a doze r., sesenta r.; puerta y ventanas nuevas para el despacho, sesenta y siete 1931: 104.
1 3 4 8
r.; diez sobradiles para el cielo raso, a real y medio, cerradura para la puerta, cerrojos para 1932: 200.
1349
este y ventana, y las seys vandas con pernias, cuarenta i tres r.; de cinco dias para hazer el AUBERT, 1947: II, 109, nota 3; BANGOTORVISO, 1982: 570; idem,
1350
cancel, enbaldosarle, hazer poyo, hornillas, y zeneizero nuebos, gastaron los Fuentes de Peña- 1 9 8 5 : 4 4 3 ; GARCÍA FLORES, 1 9 9 6 : 5 6 1 ; POZAYAGÜE ( 1 3 ) ; etc. P o r su
fiel a onze r. los dos, i el aiudante a cuatro, setenta y cinco r,; todo doscientos sesenta r. La parte, VAUBOURGOIN, 1990: 71, nota 78 y ABAD CASTRO, 1998 (4):
última restauración le ha reconvertido a su primitiva función. 240, señalan que carece de él.
También aparecen tracerías de yeso en el óculo del hastial del brazo
1 3 4 4 Así lo a p u n t a b a n CAÑEDO, ESPINOSA y VARONA en su Restitución
1 3 5 1
sur del transepto y otra reaprovechada en una ventana de la cocina de planimétrica, 28, y lo recogen OLIVERA ÁRRANZ, 2 0 0 2 (2): 4 2 1 ; VICENTE
Sacramenia; en la capilla mayor de Piedra; en la nave central de Rueda... PRADAS y MARTÍN LOZANO, 2 0 0 6 : 4 5 .
1 3 4 5 TORRES BALBÁS, 1 9 4 4 : 6 0 . P o r su parte, MERINO DE CÁCERES,
1982: 139, apunta también la extraña posibilidad de que la escalera y
FUNDACIONES MASCULINAS • 267
pegadas a la cesta, con el nervio central marcado, cuyo Parcialmente visible desde el exterior , el refecto-
1357
astrágalo liso se prolonga también por los codillos; y rio se cubre con un tejado a doble vertiente que
cimacios análogos a los descritos en la ventana de
I 3 5 5
apoya sobre una cornisa de perfil biselado con cane-
a b a j o .
1352 ANTON erróneamente escribe que "se abre un óculo circuido de gos, en el brazo sur del transepto de la catedral de Burgo de osma.
gola y bajo él dos ventanas gemelas" (1942: 57-58). Respecto al óculo 1354 Curiosamente, OLIVERA ARRANZ, 2002 (2): 421, sugería la posi-
que menciona, véase la descripción del exterior de esta pieza más abajo bilidad de que "este lugar estuviera ocupado por una hornacina para
en el texto. albergar una imagen de la Virgen", algo que nos parece insostenible.
1353 Actualmente es imposible distinguir cómo se molduraba, debido a 1355 ANTON dice que los capiteles son lisos y los cimacios de nacela
la pérdida de dovelas y a la descomposición de las conservadas. Recorde- (1942: 58). Ésta, como tantas otras equivocaciones que comete se deben
mos que en la iglesia abacial ya vimos rosetones cobijados por arcos, en en gran medida a que toda la dependencia estaba cubierta por una gruesa
aquel caso de medio punto, en el exterior del brazo norte del transepto y capa de yeso, dificultando la observación de los detalles.
fachada occidental. Rosas bajo arcos apuntados aparecen, por ejemplo, 1356 Vid. más abajo el proceso crono-constructivo.
en las fachadas de los pies de las iglesias monásticas de Sacramenia y Sie- 1357 Una serie de estancias construidas en el siglo XVII dificultan, aun-
rra, en el cuerpo central de la fachada occidental de la Catedral de Bur- que no en gran medida, la visión completa de su área meridional.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
268
ción; estaba guarnecida por una chambrana, actual-
mente picada. La segunda presenta arco rebajado
sobre jambas también de sección prismática . Hacia1364
El hastial sur, rematado en un piñón definido por las el paramento norte muestra en su extremo oriental
vertientes del tejado, presenta al exterior la misma un pequeño nicho rectangular . En el costado Este
1366
articulación de vanos que veíamos desde el interior, se practicaba una puerta adintelada de traza moderna
aunque con importantes modificaciones estructura- que comunicaba con el refectorio —hoy reconvertida
les: en la zona superior los dos vanos son por este en pasaplatos— y que está resguardada bajo una gran
lado rectangulares y con aristas achaflanadas , y en I36I
arco de medio punto de sección rectangular y aristas
la inferior se abre un gran óculo muy deteriorado . 1362
vivas que descansa directamente sobre las jambas, de
Todo el paramento aparece muy removido, por lo que idéntico perfil . Tanto este costado como el que da
1367
no se distinguen por este lado huellas de los vanos al claustro están realizados en sillería bien escuadrada,
originales. Respecto al hastial norte, es todavía visible mientras que el occidental es obra reciente.
desde la galería meridional del claustro alto el remate El segundo ámbito aparece compartimentado en cua-
apiñonado. tro tramos rectangulares por un pilar central. Se cubre
> Cocina cada uno de ellos con una bóveda de crucería cuatri-
Dos puertas situadas a poniente del refectorio dan partita sin clave destacada ni formeros y plementería
paso a la siguiente estancia . La primera muestra
1363 despiezada en hiladas de sillares perpendiculares a la
arco apuntado de perfil rectangular y aristas vivas que clave. Nervios y perpiaños, ligeramente apuntados,
voltea directamente sobre unas jambas de análoga sec- presentan perfil rectangular con las aristas vivas.
1358 Únicamente se conserva intacto el que, por el lado oeste, recoge los 1363 Estos vanos no aparecían reflejados en el plano realizado por
empujes del tercer fajón; del opuesto a éste, sólo quedan huellas y algu- ANTÓN, probablemente por permanecer ocultos bajo la capa de cal que
nos sillares salientes. Los primeros estribos y los intermedios han des- cubría las galerías claustrales.
aparecido, o bien embebidos por otras construcciones (véase el caso del Hacia el claustro todos sus elementos parecen obra de las restau-
1 3 6 4
primero del lado oriental, absorbido por el muro de cierre del calefac- raciones de hacia 1960, pero interiormente conserva sus trazas origina-
torio) o por destrucción (el resto). les, de época moderna.
1359 Excepto en el primero del costado oriental y en los dos primeros Obra de las recientes restauraciones (2000). Durante las llevadas a
1 3 6 5
zas primitivas. Por otra parte, la ventana que se abría al tercer tramo del Aunque presenta indudables muestras de haber sido retocado y qui-
1 3 6 7
lado oeste quedó oculta por el muro de cierre de la cocina moderna, y zás ampliado, tanto en época moderna como en las últimas intervencio-
la que iluminaba el púlpito del lector es rectangular. nes restauradoras, sin duda responde a los planes originales.
1361 Responden a modificaciones llevadas a cabo en época moderna.
1362 Faltan aquí también los sillares que la circundaban, siendo impo-
sible por tal motivo averiguar cómo se cerraba.
FUNDACIONES MASCULINAS • 269
planos del Instituto Nacional de Colonización (años ser las efectuadas entre los siglos XVIII y XIX, como
50-60 del siglo XX) aparecen reflejados ocho tramos viene atestiguado por la documentación y la moldu-
cubiertos con bóvedas de crucería. Por el momento ración de carácter clasicista de los soportes de las
desconocemos qué criterios se siguieron durante esta bóvedas de crucería meridionales ' 1372
1368 La correspondiente al ángulo S.O. ha desaparecido. - D e 1 8 0 5 a 1 8 0 6 : En componer el hogar, tomar de la pared enfrente, costo ochenta
1369 Más abajo hablaremos de estas obras. y cinco reales
1370 1942: 59. - D e s d e mayo de 1 8 1 7 a mayo de 1818: Las dos ventanas que esta tenia, se hicie-
1 3 7 1 Inventario, fol.29r; pub. p o r GARCÍA FLORES, 1 9 9 6 : 5 6 8 . ron un poco mayores cuanto permitia la canteria; se compuso el fregadero; se tomo el
1372 Diversas anotaciones del libro de Cuentas de obras nos informan de poste de la cocina y otras partes de su pared, se reduxo el hogar y se hizo un horno para
ello: los asados; mudose la puerta de la despensa, para dar a este alguna luz se relleno y levanto
- D e abril de 1 7 8 0 hasta abril de 1 7 8 1 : Hicieronse en esta unos poyos y se su piso, y se tapio la antigua, y se havilito todo deforma que se pudiese usar y comer la
revocaron varios pedazos de pared, y costo todo treinta y seis reales. comunidad abajo, y todo con las dos cerraduras costo 900 r.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
270
La primitiva cocina se extendía hacia el sur hasta el De otro lado, parece que los dos grandes arcos que
lugar donde iría situado el segundo contrafuerte del descansan en el pilar central y dividen la estancia en
Refectorio. Lo demuestran varios hechos: dos ámbitos corresponden a la compartimentación
- Los dos primeros tramos del Refectorio carecen primitiva —aunque han sido muy restaurados—, reco-
de ventanas, algo lógico si pensamos que a él iba giendo el arco oriental —a modo de contrafuerte— los
a estar adosada otra estancia . En cambio, los
1373
empujes del primer fajón de la bóveda del refectorio.
dos más meridionales sí las tienen . 1374
Así, ese pilar se situaría en el centro de una cocina de
planta rectangular (12 x 9'5) que posiblemente iría
- La fábrica del muro de cierre de la Cocina, al igual cubierta con una techumbre plana de madera . El I376
que el que la delimita por el oeste, es de sillares hogar se situaría probablemente en el costado sur o en
dispuestos en hiladas irregulares y mampostería, el lienzo sudoeste . 1377
ron restos de sillares que sobresalían perpendiculares mas estructurales que comentaremos más adelante—, se
al muro norte de la sala y que correspondían segura- abren dos puertas . I38I
mente al lienzo de muro que cerraba por esta zona la La primera, situada en el séptimo tramo, corresponde
cocina, un poco más desplazado hacia oriente res- a la entrada de la gran escalera que comunica con el claus-
pecto al actual tabique. tro alto, de fines del XVI . La segunda, ubicada en el
1382
tenemos en el propio monasterio: la ventana que se abre hacia el Cale- a época medieval, y señala acertadamente que "Posiblemente se trataba
factorio desde el tramo N.O. de la Sala de Monjes. Pero este hecho tiene de una cocina con planta rectangular, como la de Poblet". VICENTE PRA-
una explicación: la existencia de este vano se debe a que primero se cons- DAS y MARTÍN LOZANO, fechan las bóvedas en el siglo XVIII (2006: 46).
truyó toda la panda del Capítulo y posteriormente, se levantó la del 1379En la cara interna de la jamba oriental aparecen inscritas dos fechas:
Refectorio, adosando sus muros a los de la otra panda. Sobre este punto junio 1564 y 1573 junio.
ver más adelante el proceso crono-constructivo. Contando desde la iglesia.
1 3 8 0
1 3 7 4 Así piensan también CAÑEDO; ESPINOSA; VARONA, 1988: 6. A pesar de que este muro ha sido removido, sus cuatro primeras
1 3 8 1
norte y oriental de la cocina. Otros monasterios, como el de Frienisberg la iluminan nos indica la fecha aproximada de su construcción, I589
en Suiza o el de Wachok en Polonia presentaban también planta cua- (GARCÍA FLORES, 1996: 565). Tal vez podría pensarse que en el lugar que
drangular y un pilar central que, en el caso del primero recogía cuatro actualmente se abre el acceso a la escalera hubo en origen otra puerta, si
bóvedas de crucería. bien este supuesto no es constatable.
En las excavaciones arqueológicas llevadas a cabo en el recinto no
1 3 7 7
octavo y último tramo, exhibe un arco apuntado rebajado, surco, nacela y bocel , todos lisos, que se prolonga unos
I384
de sección prismática y aristas vivas, que voltea directamente centímetros por el muro (lám. I08).
sobre las jambas, igualmente aristadas. Sobre el espacio donde tradicionalmente se sitúa la
Al exterior, esta última puerta muestra una serie de cilla, se levanta hoy en día un edificio de dos plantas que
elementos (marcado abocinamiento, proliferación de arqui- alberga en su extremo meridional la escalera arriba men-
voltas, molduración... ) que nada tiene que ver con los uti- cionada, todo ello del siglo XVI. Desde su interior se puede
lizados en otros vanos abiertos a las dependencias observar parte del muro de cierre occidental del claustro
claustrales, aunque sí con algunos componentes de las gale- por su zona externa, jalonado por tres contrafuertes pris-
rías. Mayor relación se aprecia, si bien ésta es más sencilla, máticos . El extremo septentrional de dicho muro, visi-
1385
con la puerta occidental de la iglesia abacial. Consta de un ble también desde el interior de una estancia alargada,
arco apuntado de sección prismática y arista abiselada, cobi- perpendicular al claustro y a la fachada principal de la igle-
jado por tres arquivoltas que siguen la misma directriz y sia, se muestra totalmente liso . La existencia de estribos
1386
perfil. La interior presenta en su arista dos baquetones entre adosados a este muro, la presencia de un único vano hacia
los que se dispone una escocia, que origina en rosca e intra- poniente con "carácter y composición de puerta exte-
dós sendas escocias. La intermedia perfila su arista con tres rior" , y la noticia dada por un documento del siglo XIV
1387
baquetones, una escocia en el intradós y en la rosca, com- de que un lienzo del claustro se encontraba hundido , I388
pletándose ésta con otro baquetón y un caveto. La exterior, hace pensar que con anterioridad a las reformas de la edad
que ostenta un intradós de mayor profundidad que las otras moderna no hubo ningún edificio adosado que hiciera las
dos, posee un grueso baquetón en la arista, dos más finos funciones de cilla y refectorio de conversos, cerrándose el
en el intradós y otro en la rosca, todos ellos alternados con claustro a occidente con un simple muro , como ocurre 1389
1383 A pesar de estar muy deterioradas, se percibe todavía este achafla- 1 3 8 9 Así lo estiman CAÑEDO, ESPINOSA y VARONA en su Restitución pla-
namiento de las jambas. nimétrica..., 5-6; y GARCÍA FLORES, 1996: 561. Los primeros, además de
1384 Tipo 5 de los cimacios de las galerías claustrales y que también las dos primeras razones esgrimidas en el texto, añaden que "el contra-
aparece en la puerta del refectorio. fuerte que remata por el Oeste el muro de la nave de la Epístola, existe
1385 El muro, aparejado con buena sillería, aparece reforzado por su íntegramente, en buena sillería, y se puede contemplar tanto al exterior
parte inferior con mampostería, y la parte alta ha sido reconstruida en como por el interior y tanto en el acceso a la Bodega como en planta baja,
el curso de las restauraciones llevadas a cabo a mediados del siglo XX lo que indica que no existía edificio adosado alguno, pues sus muros
con piedra, ladrillo y cemento. Por otra parte, los estribos están desmo- hubieran cumplido esta función y no existiría el contrafuerte, como es
chados, con lo que es imposible saber con certeza cómo se remataban. el caso del orientado al sur en su misma esquina, que no existe" y que "el
1386 Actualmente oculto a la vista, está realizado en buen aparejo de ancho de crujía del edificio actual no se corresponde con los originales
sillería, si bien debido a la construcción en el siglo XVIII de una bodega y el propio muro Oeste del claustro posee mucha menor sección que los
en esta zona no es posible comprobar si, como ocurría en el resto del restantes" (Ibid). Estos últimos argumentos no son consistentes: pri-
paramento, la parte inferior presentaba aquel refuerzo de mampostería. mero, el que exista un contrafuerte en el ángulo S.O. de la iglesia no
1 3 8 7 CAÑEDO, ESPINOSA y VARONA en su Restitución planimétrica..., 5, creen implica necesariamente que no se construyera una cilla, ya que ésta podía
que además tendría un tejaroz superior y un contrafuerte a cada lado, haberse erigido tiempo después de haberse terminado la iglesia y adosada
flanqueándola. Aparecen también este tipo de puertas principales de a ella; segundo, de haber existido un edificio medieval que hubiese sido
ingreso al recinto claustral en Sacramenia, Rueda, Benifassá, Santes sustituido en siglos posteriores por otro, éste no tendría porqué guardar
Creus, etc. obligatoriamente las mismas dimensiones que el precedente; y tercero, el
1388El 26 de julio de 1382, Juan Martínez, armador de la flota real y muro de poniente tiene el mismo espesor que el meridional.
vecino de Sevilla, cambió con el monasterio la hacienda de Villanueva de 1390 En Sacramenia el claustro se cerraba a poniente con un muro refor-
Nogache que poseía éste en el Aljarafe sevillano por doce pares de casas zado por el exterior con contrafuertes; no había pasadizo de conversos
en Valladolid, una viña y 4000 maravedís para alfar un lienfo de la claustra y la puerta que se abría en el último tramo de la nave de la Epístola no
que esta caydo en el dicho monesterio (A.H.N. Clero, carpeta 3.441 bis, doc. 9; comunicaba con el claustro sino que daba directamente al exterior
pub. por VALDEÓN BARUQUE, 1980: I I 6 - I I 8 ; cit. por GARCÍA FLORES, (TORRES BALBÁS, 1944: 208; y MERINO DE CÁCERES, 1982: 133 y 135;
1996: 562 y POZAYÁGÜE, 1998 (5): 178; entre otros). Aunque no dice idem, 2003: 104-105). Para el caso del cenobio aragonés, vid. VAU-
expresamente el documento a qué lienzo del claustro estaba destinada esa BOURGOIN, 1990: 43 y 61; JIMÉNEZ ZORZO et alii, 1986: 177; MARTÍ-
cantidad de dinero, es muy probable que haga referencia al occidental, NEZ BUÉNAGA, 1998: 251.
que debido a la inexistencia de edificios adosados que equilibrasen los AUBERT, 1947: II, 121.
1 3 9 1
1392 Aunque contamos con ejemplos de este tipo de edificios con carác- AUBERT, 1947: II, 123.
1 3 9 5
ter monumental, como pueden ser los de Huerta o Las Huelgas, los esca- Cuando en la segunda mitad del siglo XIV se reconstruyen las gale-
1 3 9 6
sos ejemplos conservados hacen pensar en la utilización de materiales rías claustrales, arrasadas durante las guerras entre Pedro I de Castilla y
perecederos más típicos de la arquitectura popular (BANGO TORVISO, Pedro IV de Aragón, se procede también a ampliar la cilla derribando
1995: 64 y 78-80), como sabemos ocurría en el monasterio benedictino el callejón de conversos (del que quedan sus huellas en el muro) y se abre
de San Román de Entrepeñas, cuya cilla, a tenor del contrato suscrito en una nueva puerta, esta vez dentro de la panda oeste del claustro (vid. en
1196 entre el abad Bartolomé y el maestro fray Martín para su cons- último término, CRIADO MAINAR y BORQUE RAMÓN, 1993: 44-45 y
trucción, tendría ...los uzos, et lasfiniestras de cal et de canto, et lasparietes de arga- 60; MARTÍNEZBUÉNAGA, 1998: 159).
massa, et de sarzos et teias complimiento (MARTÍNEZ publica el documento en, En el sexto tramo de la nave del Evangelio se practica la puerta de
1 3 9 7
1991: 170-172; cit. por BANGOTORVISO, 1995: 64 y LÓPEZ DE GUE- conversos, que da paso directo al claustro. Sin embargo estaba previsto
REÑO, 1998: 255; ; idem, 2003: 104 nota 10). En los monasterios irlan- que comunicase con el reiterado callejón: parece que en un principio se
deses de Corcomroe y Abbey Knocknoy eran de ese tipo de material había planeado que el claustro fuera más pequeño de lo que es y cuando
(STALLEY, 1987: 172). en el curso de la obras se decidió ampliar su tamaño, lo que iba a ser
1393 Es el caso del refectorio de conversos de Sacramenia (TORRES BAL- muro de cierre occidental se convirtió en poyo de la arquería de ese cos-
BÁS, 1944: 211-225; MERINO DE CÁCERES, 1982: 141; idem, 2003: tado, quedando además como testigo del primitivo proyecto dos colum-
122-124; SOWELL, 1987: 111-112; VALLE PÉREZ, 1992 (2): 224, nota nas del que iba a ser el ventanal más meridional de la galería de poniente
32; idem, 1991 (2): 104, nota 36) y las cillas de Rueda (VAUBOURGOIN, (ALTTSENT, 1974: 182-183).
1990: 73; JIMÉNEZ ZORZO et alii, 1986: 177; MARTÍNEZ BUÉNAGA, La puerta de conversos —o de San Bernardo— se sitúa en el quinto
1 3 9 8
1998: 251-252; IBARGÜEN SOLER, 2003: 76-79) y Benifassá (MARTÍ- tramo de la nave de la Epístola, con acceso directo al claustro. La obra
NEZ BUENAGA, 1994: 170-171). También en Cíteaux y Vauclair (Fran- de éste comenzó en septiembre de 1313 y se cree sustituye a otro ante-
cia), Eberbach (Alemania) y Casamari (Italia), las dependencias de rior, más reducido que el actual, y del que resta únicamente el templete
conversos estaban alejadas del cierre occidental del claustro (COURTOIS, del lavabo, las huellas que los formeros de las galerías han dejado en el
1982: 321 y 326 nota 29). Por lo que respecta a nuestro monasterio, esa paramento exterior de la iglesia y en el del capítulo, y la mencionada
idea ha sido sugerida por GARCÍA FLORES, 1996, 561 y 572 nota 17 y puerta que comunicaba con un paso descubierto (callejón) para los con-
LÓPEZ DE GUEREÑO, 1998: 256-257, 1998 (2) e idem, 2003: 91. versos (MARTTNELL, 1929: 220-222 y 235-236; idem, 1959: 122;
1394 Además de los ya mencionados de Sacramenia y Rueda (vid. nota COCHERIL, 1969: 457).
1390), en el monasterio de Benifassá tampoco existe el callejón para 1399 Este función ha sido señalada por MARTÍNEZ BUENAGA para los
conversos, pero el hecho de que el muro de la iglesia no sea adyacente al monasterios de Rueda y Benifassá (1994: 167-168). LÓPEZ DE GUE-
del claustro impide que se pueda practicar una puerta que desde éste REÑO (1998: 258 y 259 nota 17; idem, 2003: 105 nota 21) apunta
permita el paso a aquélla, realizándose el acceso a la iglesia por la puerta igualmente esta idea, señalando que tal vez "para no molestar a los mon-
occidental a través de las dependencias de conversos situadas a sus pies jes en el claustro, se levantaban unos tabiques de madera a modo de can-
(MARTÍNEZBUENAGA, 1994: 167-168). cel", independizando de este modo la galería occidental.
FUNDACIONES MASCULINAS • 273
y el hecho de que las cuatro alas del claustro fueron planea- afirmaba que el hecho de que se produzca esa variación en
das con las dimensiones actuales . 1400 los abovedamientos no implicaba necesariamente un cam-
bio de planes, haciendo notar que las capillas de la cabecera
Otras dependencias (mayor y laterales), parcela por la que tradicionalmente se
comienza la construcción de un edificio, se cubrían con
Todos los monasterios cistercienses estaban rodeados bóvedas de nervios y crucería . 1406
monástico desde el XVI no permiten siquiera hacernos una se debe a un cambio en el proyecto inicial (como en Bona-
1408
idea sobre su estructura y emplazamiento. Tampoco quedan val, Monsalud, Osera, Palazuelos, etc.).
restos importantes del cercado que, construido con mam- Respecto a Valbuena, ya lo hemos visto a lo largo de
postería y jalonado por cubos de sillería, es obra moderna. la descripción y trataremos ahora de estudiarlo cuidadosa-
mente, conviven ambas soluciones: las bóvedas de la cabe-
cera y de los brazos del transepto estaban previstas desde un
principio; por el contrario, y como pensaban Lambert y
III. PROCESO CRONO- Ara Gil, la cubrición de las naves es resultado de una alte-
ración de los planes durante el curso de las obras. De este
CONSTRUCTIVO 1403
m o d o y a pesar del carácter unitario que a primera vista
parece tener la iglesia de Valbuena, el análisis detenido del
La iglesia edificio permite señalar la existencia de diferentes etapas o
Lambert y más recientemente Ara Gil , si bien alu-
1404
campañas constructivas que responden a variaciones en las
dían a la homogeneidad de la construcción de la abacial, fórmulas empleadas tanto estructurales como decorativas
apuntaban la posible existencia de una modificación del en cada una de ellas, si bien en ocasiones determinadas alte-
proyecto original. Para ellos el que los brazos del transepto raciones o anomalías puntuales en alguna de esas campañas
se cubriesen con bóveda de cañón y el cuerpo de naves con no pueden ser explicadas más que por el trabajo simultáneo
crucería así lo indicaba . Sin embargo Antón, que tam-
1405 de dos equipos diferentes de canteros o por un replanteo
bién había incidido en la unidad de la fábrica del templo, sobre la marcha . 1409
1400 Durante las recientes excavaciones arqueológicas (1999-2000) apa- 1401 Sobre todas estas dependencias, véase AUBERT, 1947: II, 141-171;
recieron unos cimientos en la zona occidental del claustro: uno de ellos, KINDER, 1998: 333-375; LÓPEZ DE GUEREÑO, 1998 (3); idem, 2003:
del que sólo se percibe aproximadamente medio metro, sale en dirección 91-99.
sur desde el machón S.O; el otro, situado entre las dos puertas de con- 1402 Inventario, fol.29; pub. por GARCÍA FLORES, 1996: 567-568 (vid.
versos y perpendicular al muro del templo, arranca del cimiento de la Apéndice documental, doc. 8).
iglesia y llega hasta el del machón N.O. Si bien en un principio se puede 1403 Un avance de las ideas que presentamos fue publicado en GARCÍA
atribuir esta cimentación al muro de cierre de un corredor de conversos, FLORES, 1999; ARA GIL, 2002: 68-69, sigue esa misma secuencia cons-
la ausencia de evidencias del arranque de este presunto muro en el para- tructiva.
mento de la iglesia, indican que este muro o no se llegó a construir nunca 1404 LAMBERT, 1931: 103; ARA GIL, 1986: 17-18; idem, 1998: 228.
o fue derribado antes de la erección de esta zona del templo, actuando 1405 Sigue esta idea de la existencia de dos fases, POZA YAGÜE, 1998
como cierre provisional del monasterio mientras no se terminaba la igle- (4): 141.
sia y dependencias, opción ésta que nos parece más adecuada. A este res- 1406 1942: 32-33.
pecto hay que señalar que durante las recientes intervenciones TORRES BALBÁS, 1944: 221-222; idem, 1952: 12-13 y 42; VALLE
1 4 0 7
arqueológicas en la zona claustral del monasterio de Rueda, apareció un PÉREZ, 1982: I, 121 y 160; idem, 1986: 81; entre otros.
muro de encofrado de yeso en dirección N-S y paralelo a la actual cru- Ibidem.
1 4 0 8
jía occidental del claustro, que ha sido interpretado como un posible 1409 Naturalmente dejamos al margen las reformas efectuadas a partir
cerramiento provisional erigido durante un parón constructivo de cierta de época moderna.
importancia (IBARGÜEN SOLER, 2003: 37). Vid. más detalles sobre el
particular en el apartado dedicado al proceso crono-constructivo.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
274
Por lo que se refiere a su cronología, la datación exacta abat e del convento de val buena que aparece como testigo en una
de la abacial de Valbuena se ve dificultada seriamente por la compra realizada en julio de I 2 8 4 , no podemos extraer
1415
absoluta ausencia de referencias relativas a su construcción, ningún dato concluyente acerca de la cronología de la iglesia,
ya sean documentales o epigráficas, situación ésta que suele su inicio, terminación o incluso consagración . 1416
ser habitual cuando nos enfrentamos al estudio de un edi- De entre los diferentes autores que se han ocupado
ficio medieval. Así, las menciones a la ecclesia en unos ins-
del estudio artístico del monasterio, algunos fechan el tem-
trumentos que corresponden a los años I I 5 6 y I I 5 8 1 4 1 0 1 4 1 1
no creemos hagan alusión a la estructura arquitectónica en plo en la segunda mitad , último cuarto o a fines del
1417 1418
sí misma, si no a la entidad que representa. En cualquier siglo XII , sin más detalles. Otros señalan que se inició
1419
caso, de referirse a aquélla no se trataría de la iglesia que antes o hacia los mismos años que la abacial de La oliva
1420
vemos hoy en día. Más bien habría que pensar en un edifi- ( c a . I I 6 4 ) . Van der Meer la data entre I I 4 4 - I I 6 5 ;
1421
que son fechas demasiado tempranas para una iglesia de sus Antón precisa más y considera que las obras comenzarían
características e incluso para considerar que se habían ini- bajo el abadiato de Guillermo (en torno a 1165), termi-
ciado los preparativos necesarios para erigirla, especialmente nando a principios del siglo XIII ; Lambert la cree comen-
1423
teniendo en cuenta que desde que se produce el asenta- zada no antes de I I 9 0 , fechando otros su terminación
I424
miento de una comunidad cisterciense hasta el comienzo a principios del XIII . Finalmente, Torres Balbás adjudica
1425
periodo que oscila entre 30 y 40 años, y además éstas siem- El hecho de que no haya datos documentales que per-
pre son muy lentas . 1413
mitan precisar la cronología de las distintas etapas cons-
Por otro lado, de las noticias aportadas por el testa- tructivas obliga a que sean el propio análisis del edificio
mento de Pedro Fernández expresando su deseo de enterrarse —estructuras arquitectónicas y elementos decorativos—, y las
en el monasterio y que está firmado ante portam monasterii vallis parentescos que presentan con otros edificios coetáneos de
bone en julio de I I 9 I , u otras más tardías que aluden a la ilu- cronología más segura, los que nos den la clave para fechar
minación del altar del Corpus Christi en una donación de con cierta precisión la construcción de la iglesia de Santa
Fernando III de I 2 4 7 1 4 1 4 o a un don domingo obrero personero del María de Valbuena.
1410 En agosto de 1156, Alfonso VII vende a abbati ebrardo sancte marie de valle parte HERRERO MARCOS, 1997: 163 y 165, sitúa la construcción de
bona et omnibus succesoribus et ecclesie tue la heredad de Jaramiel (vid. nota 759). una cabecera de tres ábsides semicirculares y transepto en el último ter-
1411 En enero de 1158, Sancho III concede a la ecclesie Beate Marie Vallis- cio del XII, y que durante el XIII se completaría con el añadido de dos
bone et vobis abbati dompno ebrardo un privilegio sobre protección de ganados ábsides cuadrados en la cabecera y las tres naves, teoría errónea por
y libertad de pastos (vid. nota 760). cuanto la cabecera es una obra unitaria.
1412 Vid. a este respecto, lo mencionado acerca de los oratorios provi- 1419HERAS GARCÍA, 1966: 128; VALDIVIESO, 1975: 301, la cree ter-
sionales en el apartado de la Capilla de San Pedro. minada a primeros del XIII.
1413 AUBERT, 1947: I, 100-104; EYDOUX, 1954: 66 y 99; entre otros. 1420GONZÁLEZ, 1960: I, 651.
N o obstante siempre hay excepciones, como sucede en el caso de monas- 1421YARZA LUACES, 1990: 340.
terios en posesión de un amplio patrimonio desde el momento de su 1422EYDOUX, 1954: 182 nota 6, y 206.
incorporación a la orden, procedente en ocasiones del asentamiento 1423 1942: II, 25 y 32. A éste le siguen entre otros, VVAA., 1995: II,
monástico que le precedía (vid. lo que se dice al respecto en la mono- 960; Monumentos Españoles, 1984-1987; II, 404, y BANGOTORVISO, 1985:
grafía de La Espina). Se podría pensar entonces que, al tratarse Valbuena 434, aceptan la fecha de inicio, aunque nada dicen acerca de su finaliza-
de un monasterio afiliado, cuando llegaran los cistercienses ( I I 5 I ) se ción. OLIVERA ARRAÑZ, 2002 (2): 416, fecha sus comienzos entre 1170
encontrarían también con bienes suficientes como para emprender en y 1190.
un corto periodo de tiempo las tareas de construcción del nuevo monas- 1424 1931: 103. También GARDELLES, 1975: 25 y CASTÁN LANASPA,
terio. Más abajo hablaremos sobre ello. 1995: 90.
1414 Libro de Privilegios, fol.3I. 1425TORRES BALBÁS, 1952: 35; ARA GIL, 1986: 16-17 (esta última,
1415 A.H.N. Clero, carpeta 3.441, doc. 7. en 1992 (2): 17, fecha sus inicios, hacia 1190, y en 2002: 68, comenta
1416 GONZÁLEZ señala el año 1204 como fecha de consagración del cómo la construcción de su cabecera precedería a la de Tudela, consa-
altar mayor de Valbuena (1960: I, 651). El error deriva de una mala lec- grada supuestamente en 1204, y que desde principios del XIII el resto de
tura del trabajo de ANTÓN (1942: II), puesto que el dato pertenece en la iglesia se construiría progresivamente).
realidad a la supuesta consagración de la colegiata de Tudela en esa fecha. 1426 1944: 20; DIMIER, 1949: I, 34 y 171; BANGOTORVISO, 1994:
1417 MARTÍN GONZÁLEZ, 1970: 304. Anteriormente él mismo (1968: 188; GARCÍA GUINEA, 2001: 20.
16-18) señalaba el comienzo de las obras en el XII, aunque añadiendo 1427VILLALIBRE y SANZ: 1995: 67. HERNANDO GARRIDO, 2003: 204,
que proseguirían durante la siguiente centuria. sitúa su terminación hacia el primer cuarto del XIII.
1418 TORRES BALBÁS, 1924: 125; POZA YAGÜE, 1998 (4): 141;
VICENTE PRADAS, 2006: 10; FERNÁNDEZ LADREDA, 2007: 62. Por su
FUNDACIONES MASCULINAS • 275
1. Primera etapa blo que oculta el centro del paramento. Hay sin embargo
Durante esta primera etapa se levanta íntegramente una serie de detalles que nos ayudan a precisar los límites
la cabecera , iniciada seguramente por el costado s u r .
1428 1429
de la campaña. Por dentro, la mitad oriental de este primer
También se acometería en este momento una gran parte del tramo presenta un zócalo de perfil análogo al de la cabecera
transepto: se levanta el costado oriental de ambos brazos y transepto y, en cambio, el que sea diferente a partir de
por encima de la embocadura de los arcos triunfales de las entonces sugiere que al menos la primera mitad del primer
capillas laterales hasta la imposta que marca el arranque de tramo se construyó en esta campaña de obras; y, como
las bóvedas, incluyendo naturalmente las pilastras que suben vimos ocurría en el costado opuesto, también se labra ahora
a recoger los fajones de dichas cubiertas ; del brazo sur,
1430
el podio del soporte X X I X . Al mismo tiempo podemos
la casi totalidad del hastial aunque sin llegar a la imposta percibir cómo el número de hiladas situadas a oriente del
mencionada y parte baja del costado occidental ; en 1431
retablo es mayor y los sillares que las componen son más
cuanto al brazo norte, se construiría el lado oriental del pequeños y alargados que a occidente, presentando esta
hastial hasta la altura de la imposta y el tercio inferior occi- última zona menor número de hiladas y grandes sillares, lo
dental de este lado y del costado oeste . I432
que parece indicar la existencia de una fractura oculta por
la instalación de aquel retablo y, por tanto, un corte en las
En cuanto al cuerpo de naves, únicamente alcanzarían obras. Probablemente, tal y como ocurrió en el costado
las obras a una parcela del primer tramo. Se alzaría parte del opuesto, se alzaría la mitad oriental del tramo hasta prác-
muro meridional de cierre: por el paramento exterior, la ticamente la altura de la imposta que, como prolongación
mitad oriental del primer tramo y probablemente algo más del cimacio de los pilares, recorre el paramento, incluyendo
del cuerpo bajo de los restantes, tal vez de todos , y al inte-
1433
la primera responsión ( X X V ) hasta la altura de los capite-
rior, parte baja la primera responsión (XXVIII), mitad orien- les. En cuanto al exterior, ya hemos comentado que durante
tal del lienzo mural de este primer tramo hasta una altura las restauraciones de los años 60 del siglo XX el extremo
cercana al arranque del arco de la Puerta de Monjes y podio oriental y mitad inferior del paramento del primer tramo
del segundo pilar adosado (XXXII) . 1434
recibieron un placado, impidiéndonos apreciar cualquier
Más difícil resulta fijar la extensión de esta primera ruptura que ayude a marcar por este lado los límites de la
fase de trabajos por el costado norte, ya sea por las trans- primera campaña. Sin embargo parece probable que, al igual
formaciones sufridas por el paramento exterior del primer que se hizo en la nave opuesta, se ejecutara el cuerpo bajo
tramo , como por la colocación en su interior de un reta-
1435 de ese tramo y del primer estribo . 1436
1428 Únicamente quedaría sin hacerse la dobladura del arco triunfal de el tercio inferior del muro y que señala el enlace entre esta primera cam-
la capilla mayor que, con un perfil muy diferente (arista baquetonada) al paña y la segunda. También se acometería en este momento, a pesar que
empleado hasta entonces en otras parcelas de la cabecera (aristas vivas), el placado moderno impide cerciorarlo, la zona inferior del husillo dis-
se voltearía en el momento en que se decidió cubrir el crucero con la puesto en el ángulo formado por el transepto y la nave septentrional.
cúpula de ocho paños. 1433 Así, puede observarse desde el claustro la existencia de una frac-
1429 Así parece indicarlo el que únicamente se emplee el tipo de zócalo I tura hacia la mitad del tramo, —contando desde abajo, a partir de la ter-
en el costado sur y testero de la capilla extrema meridional. Además, se cera hilada—, que marca una paralización de las obras en este punto. En
construye ahora —como referimos más adelante—, una importante parcela cuanto a la Puerta de Monjes, la molduración que muestran sus com-
del brazo sur del transepto, lo que favorece sin duda la pronta realización ponentes y la decoración que reciben sus capiteles, muy alejadas de las
de la zona oriental de las dependencias monásticas. Algo semejante ocu- formas empleadas hasta el momento, hacen pensar que en esta campaña
rre en Bujedo de Juarros, donde también se comienza la construcción de únicamente se abrió el vano dejando para más tarde su ordenación final.
la cabecera por el sur, y se levanta además el muro meridional de la nave 1434 Se aprecia por dentro y aproximadamente en el mismo lugar que la
antes que el norte (VALLE PÉREZ, 1986: 78-79 y 103 nota 98) vista en el paramento exterior una fractura, un enlace de obras. A partir
1430 Al exterior, comenzaron a construir al unísono los paramentos de este corte cambia el modelo de zócalo, pudiendo interpretarse el
orientales de los dos brazos del transepto partiendo de la capilla mayor hecho de que la segunda responsión (XXXII) se levante sobre un podio
y en dirección norte y sur respectivamente, pero estas obras se inte- moldurado de manera idéntica al empleado hasta esa fractura como el
rrumpieron rápidamente, como se puede observar tanto por los cortes aprovechamiento de material labrado durante la primera campaña de tra-
en vertical que indican el lugar exacto donde se interrumpió la obra, bajos, o también como la participación de ese taller o parte de él en eta-
como por el cambio del tamaño de los sillares empleados en una y otra pas posteriores.
etapa, más bajos y alargados en esta primera campaña. 1435 Recordemos que actualmente gran parte de él está cubierto por un
1431 En el lado meridional de este costado se aprecia a partir de la cuarta aparejo de placas.
hilada, contado desde la imposta y hacia abajo, un corte en vertical que 1436 Este tramo aparece retranqueado con respecto al resto de la nave,
desciende hasta aproximadamente el tercio inferior del paramento, testi- cambiando a partir de entonces el tipo de contrafuerte y la forma del
monio de un parón en los trabajos que afectan a esta parcela del templo. retallo sobre el que se alzan los muros. En cuanto a este último, es posi-
1432 Tanto al exterior como al interior, aunque por esta parte esté par- ble que el perfil actual que presenta el resalte del primer tramo sea obra
cialmente oculta por un retablo, se puede ver con facilidad la fractura que de la intervención restauradora (lo mismo habría de decir del de los otros
desde la base oriental del vano abierto en la zona superior del hastial tramos, aunque en este caso se respetase su traza primitiva), siendo en
desciende en diagonal en dirección oeste hasta quedar interrumpida en origen como el de la cabecera y transepto.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
276
De la nave central se colocarían los podios de los pila- están perfectamente alineados con los sillares que
res X X V I y X X V I I y la mitad S.E del basamento del conforman las pilastras, núcleos de pilares y para-
XXXI y se labrarían varias basas (XXVI, XXVII, XXIX, mentos, y el zócalo que recorre el costado norte de
X X X y XXXIII), colocándose algunas de ellas en la la capilla mayor presenta un tipo de molduración
siguiente etapa. Habrá que esperar a esta segunda campaña que está en íntima relación con el de basas y plintos
para que se lleve a cabo la elevación de estos pilares: el de los pilares que le dan acceso. Sin embargo, algu-
tamaño de sus tambores y sillares - m á s grandes que los nos detalles confirman la existencia de un replante-
correspondientes a la cabecera-, la aparición de un nuevo amiento que, aunque afectó fundamentalmente al
tipo de decoración de capitel y la menor profundidad de las tipo de pilares, también provocó otros cambios:
escotaduras de los ábacos así lo indican. ausencia en la capilla mayor de una imposta de bille-
tes como la que recorre a media altura el paramento
Esta interrupción de las tareas constructivas en los interior de las capillas laterales, pasando a utilizar
primeros tramos de las naves es un hecho relativamente únicamente y a partir de ahora la de nacela, perfil
frecuente en otros monasterios de la O r d e n . Las cau-
1437
que ya se aplica en las partes altas de aquéllas; apa-
sas de este fenómeno habrá que buscarlas en la necesidad rición de un nuevo modelo de ventana en la capilla
de, una vez levantado el espacio necesario donde instalar mayor, más simple, sin columnillas acodilladas ni
el coro de monjes, se abandonen parcialmente las labores dobladura exterior ; la moldura que corre por el
1440
del templo para dedicarse a las principales dependencias paramento exterior a la altura del alféizar de los
abaciales . 1438
vanos, abraza los contrafuertes de la mayor, mientras
Antes de continuar con la siguiente campaña, con- que en las laterales quedaba interrumpida por ellos;
viene aclarar dos puntos: y abandono del tipo de capitel empleado en las capi-
1. La utilización de diferentes tipos de soportes en llas laterales (ventanas y columnas angulares) , por 1441
parcelas que hemos adjudicado a una misma cam- uno de líneas sencillas, compactas y modelado
paña de obras. El empleo de pilastras bajo los arcos menos elegante.
de ingreso a las capillas laterales o los fajones de los Ello nos obliga a diferenciar dentro de esta etapa
brazos del transepto, de dobles columnas y otra dos campañas:
simple acodillada en la embocadura a la capilla a. En una primera se trazaría el perímetro de la
mayor, o de una combinación de columnas geme- cabecera y transepto, alcanzando el muro de cie-
las con pilastras en los primeros pilares adosados rre meridional y septentrional del primer tramo
de las naves, mientras que en el resto de las naves se de las naves; comienzan a levantar toda esta
aplican las columnas gemelas en todos los frentes zona, y especialmente las capillas laterales en
de los pilares y otras sencillas en los ángulos, puede donde posiblemente se llegaría a una altura cer-
hacer pensar que alguna alteración del proceso cana al remate de sus pilares y columnas.
constructivo o una modificación posterior haya b. Cuando se va a proceder a la terminación de esas
motivado la incorporación de esas dobles columnas capillas y a la elevación de la mayor y su proyec-
en los soportes de acceso al presbiterio y los pri- ción hacia el crucero, se introducen las dobles
meros adosados . 1439
columnas y aquellas otras novedades. Probable-
A primera vista todo parece indicar lo contrario, que mente no se habría construido de esa última más
desde un principio fue prevista esta combinación de que sus partes bajas: podio de los pilares de su
soportes. En efecto, los tambores de esas columnas embocadura y de las columnas del hemiciclo,
1442
Huerta o La Oliva, a partir del primer tramo; y Moreruela, a partir del chesco sufriesen alguna modificación en su estructura, como por ejem-
primero o del segundo; etc... plo una ampliación del vano o eliminación de columnas y
1438 VALLE PÉREZ, 1982: I, 261; idem, 1992 (2): 221, etc... escalonamiento interno, las diferencias que se acusan por el exterior son
1439De ser esto cierto, estaríamos ante un caso semejante a lo ocurrido suficientemente esclarecedoras al respecto.
en la catedral de Sigüenza: un replanteamiento en la cubierta de la Me refiero naturalmente al de las ventanas y columnas angulares.
1 4 4 1
capilla mayor hizo que se dispusieran a la entrada del presbiterio grue- Quedan al margen los correspondientes a las pilastras, ya que su estruc-
sos pilares con dobles columnas en sus frentes y otras acodilladas, pero tura condiciona la de sus capiteles.
al estar ya construidas las capillas laterales no se pudieron colocar El perfil es el mismo que se emplea en las laterales e igualmente la
1 4 4 2
dichas columnas en todo su perímetro (MUÑOZ PÁRRAGA, 1987: 105- estructura cruciforme con el resalte de los ángulos.
107).
FUNDACIONES MASCULINAS • 277
dos, en los cuales faltaría únicamente encajar los La construcción comenzaría en torno a los primeros
sillares que ocupaban los frentes. El hecho de que años del último tercio del siglo XII y hacia fines de siglo
este cambio se llevase a cabo sobre la marcha estaría terminada íntegramente la cabecera, gran parte del
explicaría la perfecta adecuación que vimos pre- transepto y esa pequeña parcela del primer tramo de las
sentan las hiladas de sillares que conforman el naves. Confirman esta datación diversos aspectos.
aparejo de toda esta parcela del templo.
En primer lugar su planta, cuyo modelo encontramos
2. La coexistencia de sistemas de abovedamiento radi- también en la colegiata de Tudela o la Seo de Zaragoza,
1445
calmente distintos en el curso de una misma cam- a las que como se recordará ya aludimos al describir la tipo-
paña constructiva, en este caso, cañón apuntado en
logía del templo, estando ambas datadas en el último cuarto
los tramos rectos de las tres capillas centrales y bra-
del XII .
zos del transepto, y bóvedas de crucería y nervios en
1446
las capillas extremas y hemiciclos de aquéllas tres. La En segundo lugar, el sistema de cubrición empleado en
presencia de columnas entregas en los hemiciclos los hemiciclos de la capilla mayor y capillas intermedias, que
absidales y otras acodilladas en los ángulos de las fue utilizado con frecuencia en España durante el último ter-
capillas extremas anuncian que desde un principio cio del siglo XII y principios del XIII . A ello habría que aña-
1447
estaba previsto el tipo de cubiertas que reciben y, por dir la combinación de bóvedas de nervios, crucería y cañón
lo tanto, la convivencia con las bóvedas de cañón es que también se emplea en la cabecera de La Oliva . 1448
1443 El tipo de molduración en él empleado también conectaría de y La Vega; capilla central de la girola de Fitero; capilla de San Adrián, en
forma correcta con el perfil de basa utilizado en las capillas laterales. Iranzu; las tres capillas de Sandoval y Carrizo, todas ellas semicirculares).
1444 Vid. notas 1406 y 1407. 2) Los plementos se comban, pero se mantiene la planta semicircular
1445 Los inicios de la construcción de la colegiata navarra se llevarían a del ábside y confluyendo los nervios en el mismo lugar (Valbuena, capi-
cabo en fecha bastante alejada de la conquista de la ciudad por Alfonso lla de San Jesucristo en La Oliva, y capillas principales de Fitero, Veruela,
el Batallador (1114), en torno hacia 1168, procediéndose a la consa- Monsalud y Bujedo. En el hemiciclo de Moreruela y en la capilla cen-
gración de un altar —para unos el altar mayor, para otros de alguna de las tral de la girola de Gradefes, los plementos son ligeramente cóncavos y
capillas laterales del brazo sur del transepto— en 1188 y de otro en 1204 con hiladas horizontales).
—para unos el mayor, mientras que para otros el dato no es seguro—, 3) Las capillas adquieren planta semicircular al interior y poligonal al
momento en que la cabecera podría ya estar rematada a falta del above- exterior, para terminar siendo poligonal por dentro y por fuera, reu-
damiento de la capilla mayor; las obras avanzarían lentamente, rematán- niéndose los nervios en una clave independiente (Presbiterios de Gra-
dose bien entrada la segunda mitad del siglo XIII (Vid. bibliografía citada defes, Melón, Osera, Palazuelos).
en nota 849). En relación con Valbuena, mientras LAMBERT, 1931: 103 1448En La Oliva se emplean bóvedas de crucería en las capillas latera-
y ARA GIL, 2002: 68, defendían que la construcción de la cabecera del les, de cañón apuntado en el tramo recto de la capilla mayor y de ner-
monasterio vallisoletano —que sitúan entre 1190 y 1200—, precedería a vios en su tramo absidal. Respecto a su cronología, la historiografía
la de Tudela, MELERO MONEO, 2008: 1360, sostiene lo contrario, dando contemporánea, basándose en las noticias proporcionadas por Gregorio
la prioridad al edificio navarro. de Arizmendi y Navascués —último abad del monasterio—, en su Pron-
1446 Tras la reconquista de la ciudad por Alfonso I el Batallador en 1118, tuario histórico, osea, Antiguedades del Real Monasterio de Nuestra Señora de La Oliva,
la mezquita-aljama fue consagrada para el culto cristiano y tres años des- extraido del Archivo del mismo (1836) (Biblioteca de la Real Academia de
pués dedicada como catedral bajo la advocación del Salvador. BIENES Bellas Artes de San Fernando, Libros, 190/3), viene fechando el
CALVO, CABAÑERO SUBIZA y HERNÁNDEZVERA, 1 9 9 6 - 9 7 : 3 1 7 y 3 1 9 - comienzo de las obras del templo en 1164, cuya cabecera sería consa-
321, señalan que si bien en un primer momento, hacia 1121, se erigió un grada el 13 de junio de 1198:
templo que "carecía de ábsides y de transepto destacado en planta", entre Aunque Nro. Rmo. P.M. Bravo pone que la Yglesia grande se concluyó de hacer en 13
1175 y 1198 se le dotó de una cabecera amplia, con cinco ábsides (vid. de Julio del año 1195; el P. Ubani la da concluida en dicho día pero en el año 1198.
también HERNÁNDEZ VERA y BIENES CALVO, 1 9 9 8 : 4 2 - 4 3 ) . BUESA Yo estoy con el P. Ubani, por tener leida la cita que expresa, sobre la tradicion de los Mon-
CONDE, 1998: 112-115, apunta también la existencia de dos etapas dife- ges antiguos. No hay duda de que Dn. Sancho el Sabio, hijo de nuestrofundador Dn Gar-
renciadas, aunque éste retrasa la primera etapa hasta el tercer cuarto del XII, cia la principio; y el Nieto de este e Hijo de aquel, Dn Sancho el Fuerte, la continuó y
momento en el que se planea levantar una iglesia con tres ábsides, que en finalizó. En 1164 ya se estaba haciendo y habiendose concluido de hacer el año 1198,
el curso de las obras (último cuarto de siglo) serían ampliados a cinco. resulta que se hizo en unos 34 años (págs.31-32)
ENLART, 1894: 182. Frente a su gran difusión por la Península,
1 4 4 7 En este año 1164 consta se estaba ya construyendo la Yglesia grande y a expensas del
EYDOUX destaca la escasa respuesta que tiene en Francia, donde además rey de navarra Dn Sancho el Sabio, hijo de nuestro Fundador Dn Garcia. En 13 de
los ejemplos están muy dispersos (1954: 190 nota 40). Sobre la reper- julio de este año 1198 se concluyó de hacer la dicha Yglesia por el Rey Dn Sancho el
cusión de este procedimiento en Ile de France, vid. AUBERT, 1934: 177- Fuerte hijo de Dn Sancho el Sabio y Nieto del Rey Dn Garcia. Y siguio construyendo
178. Su evolución y variaciones fue estudiada por TORRES BALBÁS, las fábricas del claustro, capítulo, Salón para dormitorio, Refectorio, Cocina, Despensa
1952: 13-14, al que siguen, entre otros, MARTÍN GONZÁLEZ, 1961: y demás oficinas ( p á g s . 3 1 0 - 3 1 1 )
170; AZCÁRATE, 1 9 7 4 : 3 6 - 3 7 ; idem, 1 9 9 0 : 14; VALLE PÉREZ, 1 9 8 2 : I, Vid. también GARCÍA GAINZA, 1 9 8 0 : 2 0 2 - 2 0 3 ; LÓPEZ DE GUEREÑO,
123, etc., pudiéndose distinguir a grandes rasgos tres variantes que no 2004: 778; MARTÍNEZÁLAVA, 2007: 11, 69, 108, 140-141; MARTÍ-
responden necesariamente a etapas cronológicas sucesivas : NEZ DE AGUIRRE, 2008: 371.
1) Se disponen bajo las bóvedas de cascarón nervios radiales de refuerzo
que se unían en la clave del arco de ingreso (Capilla mayor de La Oliva
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
278
En tercer lugar las ventanas de las capillas extremas, de entorno geográfico durante el tercer cuarto del siglo XII. Y
cuya tipología ya vimos algunos ejemplos en otro apartado, aunque este exotismo nos puede llevar a pensar en una posi-
guardan estrecha relación con las de la capilla de San Pedro ble influencia de su casa madre, opción ésta que debemos
de la catedral de Santo Domingo de la Calzada, el primer desestimar a la vista de lo que se conoce de ella , los 1453
capiteles .1451
1449 Colocada la primera piedra de la catedral calceatense en 1158, la debiendo situar los inicios de la construcción del primero ya avanzado
cabecera estaría acabada seguramente antes de 1199 (vid. en último tér- el siglo XIII, una vez que está correctamente asimilada la adaptación del
mino, BANGOTORVISO, 2000: en especial 146-149; idem, 2000 (2): pilar románico a la cubierta gótica -aquí bien resuelto desde un princi-
19-20, 27-28, 84 y 88; MARTÍNEZ DE AGUIRRE, 2009 (2): I I 2 - I I 4 ; pio—, debiendo colocar el cierre de la nave central ya en la segunda mitad
MOYA VALGAÑÓÑ, 2008: 683 y 684). En cuanto a Irache, esta parcela de esa centuria, como lo demuestra la influencia burgalesa en sus con-
del templo está datada ca.II75-primeros años del XIII, perteneciendo a trafuertes (vid. sobre este último aspecto la monografía de Palazuelos).
su segunda fase constructiva (MARTÍNEZ ÁLAVA, 2007: 214). Vid. el apartado correspondiente en la introducción histórica.
1 4 5 2
En cuanto a la relación de Valbuena y Villamuriel de Cerrato, ARA GIL, catedral calceatense en la irradiación de "fórmulas tardorrománicas y
I 9 9 2 (2): 7, I 7 y I8, señala que la iglesia palentina probablemente fue protogóticas" por toda la Península (2000: 150; 2000 (2): 89). Recien-
iniciada en tiempos del obispo Arderico o Enrico (II84-I207), estando temente MARTÍNEZ DE AGUIRRE ha subrayado la influencia de la canó-
terminada hacia 1230. Sin embargo, las relaciones que tiene con nues- nica calceatense sobre La Oliva, sugeriendo la posibilidad de que Garsión
tro monasterio no creemos que se deban a su posible contemporanei- proyectara el cenobio navarro y la difusión de sus formas desde este
dad, sino en todo caso a la derivación de Villamuriel de Valbuena, último hacia Tudela (2008: 372, 373 y 381; 2009 (2): 114).
FUNDACIONES MASCULINAS • 279
Podemos diferenciar también aquí tres fases: dobladura de aquéllos apea sobre las pilastras o
2.a. A finales del siglo XII se procedería a terminar la columnas acodilladas . En el momento en que
1461
elevación de los hastiales y muros occidentales del se decidió cubrir estos tramos con crucería, tuvie-
transepto llegando quizás a cubrir sus brazos , 1455
ron que reducir la dobladura de los siguientes
y se completarían los muros de cierre septentrio- fajones para facilitar el apeo de los nervios cru-
nal y meridional del primer t r a m o , termi-
1456
ceros y formaletes en las columnas de los codi-
nando los pilares X X V y XXVIII, comenzados llos, como sucede ya desde el segundo perpiaño
en la campaña anterior y el primer contra-
1457
de las naves laterales. Pero al estar construido el
primer perpiaño de las laterales con sus dobla-
fuerte. Comienza asimismo la elevación de los
duras y, por tanto, no haber sitio destinado para
pilares XXVI, XXVII, X X I X a XXXII, algunos
acoger los nervios cruceros, éstos sufren un adel-
de los cuales muestran un nuevo perfil de podio gazamiento en sus extremos para alojarse de
( X X X y parte del X X X I ) y basas (XXXI y manera forzada entre la dobladura del fajón y el
X X X I I ) y variados modelos de capiteles; del
1458
formero o el muro de cierre.
primer fajón de las naves laterales con sus corres-
pondientes dobladuras. Además, como esos primeros perpiaños de las late-
rales no estaban trazados con una curvatura ade-
2.b. u n a modificación de gran trascendencia se pro- cuada para el nuevo sistema de cubiertas, las
duce en torno a I 2 0 0 o poco después: la incor- bóvedas no cargan sobre ellos sino más arriba. Lo
poración de la bóveda de crucería a la cubrición mismo sucede en el lado correspondiente a este
de las naves, que provoca importantes alteracio- tramo del segundo perpiaño del Evangelio, en
nes en los planes constructivos originales. El más donde pese a reducirse la dobladura y apear el ner-
importante de estos cambios es la adaptación que vio sobre las columnas acodilladas, la bóveda carga
se produce en unos soportes de estructura neta- por encima de él, quizás por no haber estado lo
mente románica para recibir ese aboveda-
1459
suficientemente apuntado . En cambio, en el
1462
iban erigiendo los pilares exentos y muros late- De todo ello se deduce que se acometería en este
rales de los dos primeros tramos de la nave cen- momento la construcción de la totalidad de la fachada occi-
tral, comienzan progresivamente a cerrar con dental , tal vez empezada durante la anterior campaña; la
1473
bóvedas los diversos tramos, alcanzando durante cubrición del tramo central del transepto con su cúpula
esta etapa a los tres primeros de la nave del Evan- sobre trompas ; la configuración exterior de la Puerta de
1474
gelio, tal vez todos los de la Epístola y el primero Monjes; se completarían los muros de las naves laterales y
de la central . 1467
central y cerrarían con bóvedas los tramos que anterior-
La progresiva pérdida de calidad que se va mente habían quedado sin cubrir de las naves laterales y, al
notando en la labra de capiteles según avanzamos menos, el segundo de la central . 1475
hacia los pies de las naves, especialmente a partir Sin embargo, todas aquéllas innovaciones afectan a
del segundo tramo, más toscos, de escaso relieve detalles exclusivamente ornamentales y no a la propia
y con ábacos lisos , junto con la aparición de
1468
estructura del edificio. En efecto, la utilización en el hastial
nuevos tipos, no implica necesariamente un cam- occidental del mismo tipo de contrafuerte empleado en la
bio de maestros -tal vez anclados en la tradición nave norte o del procedimiento de enmarcar el óculo bajo
o incluso no muy diestros- sino que puede arco de medio punto como ocurría en el testero del brazo
deberse también a un intento de acelerar el pro- septentrional del transepto, o de análogo perfil de nervios
ceso de construcción , llegando en ocasiones a
1469
y arcos, parece confirmarlo. Habría que pensar entonces en
caer en una cierta torpeza de ejecución . 1470
la posibilidad de que el taller que trabaja en la edificación
2.c. En torno a los años centrales del siglo XIII tiene del claustro participe en la conclusión de las obras de la
lugar la incorporación a la fábrica de la iglesia de iglesia, como lo demuestran las similitudes que hemos seña-
nuevas líneas decorativas que nada tienen que ver lado entre ambas zonas, sin que ello suponga la marcha o
con lo realizado hasta el momento en el templo, abandono del equipo que se ocupaba de las tareas de la aba-
pero que sí están en consonancia con algunas de cial . Pero no solo eso, ya que las naves del templo y las
1476
las obras llevadas a cabo en el ámbito claustral. Nos galerías claustrales - l o veremos con más detenimiento en
estamos refiriendo, por ejemplo, a la dobladura de el siguiente apartado-, se construyeron simultáneamente,
los arcos torales y a las trompas del crucero, de aris- como lo demuestra el hecho de que las ménsulas de las
tas perfiladas por un baquetón ; a la chambrana
1471
bóvedas de la galería norte están bien encajadas en la hilada
que presenta el tercer formero del costado sur de la de sillares correspondiente en el muro del templo.
1464 Esto provoca que el primer tramo quede retranqueado respecto al cen "descolocados"; desaparición de la línea de imposta en la nave del
resto de la nave. Por otra parte, los nuevos tramos rematan con una cor- Evangelio a partir del tercer tramo; sustitución ocasional de los cimacios
nisa que presenta un nuevo tipo de canes, de proa. de nacela por una simple moldura abiselada, etc...
1465 Se prescinde de la imposta que mostraba el primer estribo a media 1471Detalle que vemos en las pandas norte y sur del claustro.
altura, aunque muestran un remate semejante. Es en estas bóvedas donde aparecen claves con florones que se pue-
1 4 7 2
1466 En el momento en que se decidió abovedar las naves con crucería den poner en contacto con el tipo 11 de las del claustro (claves 15 y
ya debían estar construidos los muros de cierre del primer tramo con 22).
sus correspondientes ventanas, prescindiendo de abrir vanos en el resto 1473Sus arquivoltas exhiben una molduración análoga a la de la puerta
de los tramos. occidental del claustro.
Todas estas bóvedas muestran un mismo tipo de clave, con moti-
1 4 6 7 Incluida, naturalmente, la dobladura que hacia el interior del cru-
1 4 7 4
vos geométricos o florales muy simples y esquemáticos, muy alejados cero muestran los cuatro arcos torales.
del empleado en los restantes tramos, más naturalista. Vid. más abajo en el texto lo que se comente acerca de la cons-
1 4 7 5
PÉREZ, 1982: I, 120-126, 171-172, 183-184 (nota 209); idem, 1991 nota 63, que afirmaba que el claustro era "ligeramente posterior a la
(2): 101-102 y notas 33 y 34, 104; idem, 1992 (2): 223-224 nota 30. abacial, lo que explica que su estilo no esté representado en ella".
Así, a partir del pilar X V las columnas acodilladas son cada vez más
1 4 7 0
finas; en los últimos tramos de las naves laterales los formaletes apare-
FUNDACIONES MASCULINAS • 281
Queda únicamente tratar de averiguar si en el curso de al proyecto original , y las bóvedas —obra del último ter-
1481
esta campaña se terminó la iglesia y por tanto, la configu- cio del siglo XV o principios del siguiente—, apean sobre
ración actual de los dos últimos tramos de la nave central unos soportes que, a excepción de los capiteles de los cua-
corresponde a una reforma m o d e r n a o si, por el con-
I477
tro pilares más occidentales, conservan por completo su
trario, hasta esa fecha no se concluye la obra. estructura primitiva.
Por lo que respecta a los muros de cierre de la nave, el Lamentablemente carecemos de datos documentales
paramento interior de estos dos tramos es, sin duda en toda o indicios arquitectónicos que clarifiquen de forma incues-
su altura, coetáneo al resto de la fábrica original. Lo confirman tionable si estas bóvedas construidas en el tránsito a la Edad
el empleo del mismo aparejo de sillería, bien escuadrada, y
Moderna sustituyen a otras anteriores, opción que ha
con marcas de cantero análogas a las que aparecen en otras
parcelas del templo. Únicamente la forma de los vanos difiere venido siendo defendida hasta el momento . 1482
de los realizados en los tramos anteriores, siendo seguramente Sin embargo, el a veces largo y complicado proceso
contemporáneas de las bóvedas que cubren estos tramos. constructivo asociado a las dificultades de tipo económico
El paramento exterior, en cambio, realizado con silla- que asolaron a un gran número de monasterios desde fina-
res irregulares, sin marcas de cantero , retranqueado en
1478 les del siglo XIII, pero fundamentalmente durante el XIV,
relación a los otros tramos y con un tipo distinto de ven- motivaron que muchas de sus iglesias —por no hablar de sus
tanas —que incluso nada tienen que ver con la organización claustros o dependencias— quedaran inconclusas. Sería más
que presentan hacia el interior—, es seguramente obra de tarde, en una etapa que suele coincidir en la mayor parte de
una reforma llevada a cabo durante el siglo XVII, como lo los cenobios castellano-leoneses con su ingreso en la Con-
corrobora la inscripción grabada en la ventana del costado gregación de Castilla, cuando esos templos pudieron ter-
norte del cuarto tramo ( I 6 7 0 ) . 1479
minarse , como ocurrió en los casos de Sacramenia ,
1483 1484
Por otro lado, ya hemos visto cómo la parte superior Monsalud , M e l ó n , Sandoval , H u e r t a , Beni-
1485 1486 1487 1488
de la fachada occidental corresponde, en su integridad , I480 fassá , etc , y quizás también el de Valbuena.
I489 1490
1 4 7 7Todos los investigadores se han decantado por esta opción TORRES BALBÁS opinaba que aunque la iglesia quedó sin concluir,
1 4 8 5
(ANTÓN, 1942: 16; LAMBERT, 1931: 103; CAÑEDO, ESPINOSA, la renovación de la fachada occidental a finales del siglo XV-principios
VARONA en su Restitución planimétrica, 8 y 21; GARCÍA FLORES, 1996: 564), del XVI se debe al derrumbe de la bóveda del último tramo de la nave
afirmando que esta modificación tuvo lugar al mismo tiempo que la central, que también se reconstruiría ahora (1918: II, 12 y 16. Por su
construcción del coro alto. Sin embargo, la decoración de la rosca de sus parte, ÁBAD CASTRO piensa que las obras de las naves no se concluyeron
arcos —con casetones y flores— o la complicada articulación de sus bóve- hasta el XVl(I990: 64).
das estrelladas —de terceletes, diagonales, ligaduras y combados diago- 1486 Las bóvedas del crucero, brazo sur del transepto y nave central fue-
nales—, nada tienen que ver con las bóvedas que cierran los dos últimos ron realizadas en el XVI tras el ingreso del monasterio en la Congrega-
tramos, respondiendo ambas intervenciones a dos momentos diferentes. ción de Castilla, recibiendo hasta entonces una cubierta provisional
1478 Sólo hay dos marcas en las jambas de la ventana del costado norte (VALLE PÉREZ, 1982: II, 229).
del cuarto tramo, que nada tienen que ver con las que aparecen en otras Interrumpidas las obras en el segundo tramo, se reanudaron en
1 4 8 7
o I 9 9 2 (2): 224, nota 35, en donde recoge las diversas opiniones verti- septo (en torno a 1276), quedaron interrumpidas las obras hasta que a
das al respecto, destacando la del arquitecto restaurador del monasterio, mediados del siglo XV se comenzó a trabajar en la nave, cerrando las
MERINO DE CÁCERES, quién en el curso de esas obras descubrió algunos bóvedas del transepto ya en el siglo XVII (MARTÍNEZ BUENAGA, 1994:
mechinales y restos de vigas pertenecientes a la techumbre de madera 135-137, 139, 142-143, 145-146, 151, 180-182).
que, según este autor, cubrieron el crucero y nave central de la iglesia 1490 Este problema afectó especialmente a los monasterios de monjas
hasta finales del XVo principios del XVI (1982: I I I , 130 y 163; 1991: (MUÑOZ PÁRRAGA, 1992: 8 - I I ; idem, 1998: 116; CASAS CASTELLS,
I I 5 - I I 7 ; 2003: 19-20, 76-78). 1994: 103-104; BANGOTORVISO, 1995: 72).
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
282
3. Tercera campaña implica ni mucho menos que esta dependencia, la sala capi-
La última etapa constructiva afectará únicamente a la tular, haya sido construida. Así, para obtener la única refe-
fachada occidental del templo. En efecto, los matacanes y rencia a obras en el claustro habrá que esperar a los últimos
merlones que coronan sus calles laterales no parecen perte- años del siglo XIV, y por si fuera poco no es muy concluyente:
necer a su primitiva configuración , sino que responden
1491 el 2 6 de julio de I 3 8 2 Juan Martínez, armador de la flota
probablemente a ese deseo de proteger al monasterio de la real y vecino de Sevilla, cambió con el monasterio la hacienda
inestabilidad que asolaba el reino de Castilla durante el siglo de Villanueva de Nogachet que poseía éste en el Aljarafe sevi-
XIV o incluso tal vez podría pensarse que se construyeron llano por doce pares de casas en Valladolid, una viña y 4000
durante las luchas intestinas que durante el segundo cuarto maravedís para alfar un liento de la claustra que esta caydo . U9i
Todos estos cambios, además de alterar la ordenación han establecido su inicio a finales del primer cuarto de siglo,
original de la fachada, sin duda hubieron de transformar
si bien señalan que algunas parcelas llegarán a alcanzar fechas
las cubiertas de las naves laterales con objeto de permitir la
apertura de los "caminos de ronda" que permitieran el más avanzadas dentro de esa misma centuria . En cuanto I500
Prácticamente carecemos de noticias documentales Como ya hemos visto en el caso de la iglesia, la data-
acerca de la construcción de las dependencias monásticas y ción de las distintas fases constructivas vendrá dada tanto por
del claustro en torno al cual se ordenan. El hecho de que el el estudio de sus estructuras arquitectónicas y elementos
documento de donación de San Andrés de Valbení (22 de decorativos como por su relación con otros monumentos
septiembre de 1165) esté firmado in capituli vallis bone no contemporáneos de cronología más o menos establecida.
1491 ANTÓN creía que correspondía al plan original e indicaba "que MARTÍN GONZÁLEZ, 1968: 18; VALDIVIESO, 1975: 301; Monu-
1 4 9 7
la cerca no encerraba a la iglesia, sino que esta quedaba libre por su mentos Españoles, 1984-1987: II, 405.
fachada, por el costado norte y por parte de la cabecera" (1942: 29). 1498 EYDOUX, 1954: 206; VILLALIBRE y SANZ, 1995: 67
Su error estriba en identificar el cercado que pegado a la capilla mayor 1499 CALZADA, 1928: 896; VALLEJO, 1995: 46; VVAA., 1995: 961
se podía contemplar a comienzos de siglo con el primitivo, cuando en 1500 ANTÓN, 1942: 40-41; POZA YAGÜE, 1998 (5): 178; OLIVERA
realidad aquél fue levantado a comienzos del siglo XIX. En efecto, en ARRANZ, 2002 (2): 416; VICENTE PRADAS, 2006: 36-37, siendo para
la partida de gastos de 1805-1806 se apuntó lo siguiente: Cerca.- La que éstos la oriental la primera en construirse. Por su parte, HERNANDO
se hizo tras la yglesia, y pared de la huerta cortando hasta el camino que va a Pes- GARRIDO, 2003: 204, habla de fines del primer cuarto del XIII para las
quera, y unirla con la cerca vieja, mil nuevecientos treinta y cinco reales (Cuentas de pandas oriental y parte de la meridional, mientras que el resto de ésta y
obras). la septentrional "podrían sobrepasar perfectamente fechas mediadas del
1492 En el primer tercio del siglo XV fechan el torreón VICENTE PRA- siglo XIII", aunque apunta que la escultura de la panda norte puede ser
DAS y MARTÍN LOZANO, 2006: 24. Sobre estas rencillas que motivaron, anterior (I92).
entre otras cosas, la compra de armas y la búsqueda de protección por 1501 ARA GIL, 1986: 18, dice que se debieron construir simultánea-
parte de algunos caballeros y sus vasallos, véase el Exordio y Progreso de Fr. mente al templo, situando la sala de monjes y el refectorio en los últimos
LUIS DE ESTRADA, fols. I3r, 20r y 23v; el Exordio de la Observancia, cap. 7 años del siglo XII y principios del XIII (2002: 69).
n. 3 de Fr. BERNARDO SuÁREZ; PÉREZ-EMBID WAMBA, 1986: 663-665; 1502 EYDOUX, 1954: 206; OLIVERA ARRANZ, 2002 (2): 416.
y GARCÍA FLORES, 1996: 558, entre otros. 1503 CALZADA, 1928: 896; ANTÓN, 1942: 35 y 59 (remarcando la con-
Desconocemos, sin embargo, el alcance de tales modificaciones,
1 4 9 3 temporaneidad de iglesia, sala de monjes y refectorio). ABAD CASTRO,
tanto por las actuaciones modernas como por las restauradoras. 1998: 192, señala que las dependencias del pabellón de monjes y refec-
Vid. nota 805.
1 4 9 4
torio no son anteriores a los primeros años del XIII. Y VICENTE PRADAS
1495 VALLE PÉREZ, 1992 (2): 227. LAMBERT, 1931: 103-104 y ARA y MARTÍN LOZANO, 2006: 19, 38-39 y 53, sitúan la sacristía en la "pri-
GIL, 1986: 18, señalan que el claustro es más o menos del mismo estilo mera fase constructiva del monasterio" y el armarium y los pasajes de la
que la iglesia, apuntando esta última que es obra del "tercer decenio del panda del capítulo en las primeras décadas del XIII, mientras que el dor-
siglo XIII" (2002: 69). mitorio alcanzaría los años centrales de la centuria.
1496 HERRERO MARCOS, 1997: 163. GARCÍA GUINEA, 2001: 20, lo POZA YAGÜE 1998, 1998 (2), (8), (9), (10), (II), (12), (13) y
1 5 0 4
1505 Esta misma secuencia constructiva (cabecera y transepto exentos a 245), se ha detectado también que tras la erección de la sacristía, sala
los que luego se adosa el pabellón de monjes) la observamos en Fitero, capitular y escalera, se produce un parón en las obras, continuando pos-
La Oliva y tal vez en Moreruela. teriormente con las últimas dependencias de la planta baja y a conti-
1506 Este fenómeno —simultaneidad o continuidad en el proceso cons- nuación el dormitorio.
tructivo entre las zonas orientales del templo y el pabellón de monjes, e 1508 La separación de los dos pisos viene marcada por una hilada de
incluso algunas dependencias de las otras pandas— se detecta otros sillares más grandes que los que se emplean en planta baja, pero parece
muchos monasterios, como en Sacramenia, Bujedo de Juarros, Veruela, que al tiempo que se estaba haciendo este piso inferior se comenzó a
Rueda, Piedra, Fitero, Huerta, etc (VALLE PÉREZ, 1986: 124-125 y 128; levantar por el norte el dormitorio, ya que por esa zona no hay cambios
idem, 1991 (2): 102; idem, 1992 (2): 221; MARTÍNEZ BUÉNAGA, 1998: en el tamaño de las hiladas, continuándose el resto sin grandes inte-
141, 144-145, 262, 331, 401-404; FERNÁNDEZ GRACIA, 1997: 27). rrupciones.
En otros monasterios, como es el caso de La Espina (vid. la corres-
1 5 0 7
1509ANTÓN, 1942: 55. El resto de autores se han limitado a señalar ANTÓN, 1 9 4 2 : 5 5 . P o r otro lado, los arquitectos CAÑEDO, ESPI-
1 5 1 0
qué galerías llevaban los tímpanos sus arquerías horadados por rosas y NOSA y VARONA en su Restitución planimétrica, 25, han señalando que las
óculos y cuáles no, determinando en base a este detalle la mayor anti- variaciones que se producen en los soportes, fajones y nervios de la gale-
güedad de una panda u otra. Así, para LAMBERT, 1931: 104, ARA GIL, ría de poniente no responden a los planos originales, sino que son obra
1986: 18 y HERNANDO GARRIDO, 2003: 192 y 204, la oriental y una de una reconstrucción llevada a cabo en dicha crujía, según ellos, hacia
parcela de la meridional que carecen de aperturas en los tímpanos, serían el siglo XVI.
las primeras en erigirse. Por su parte, TORRES BALBÁS, 1952: 134; 1511 Equivocadamente, ANTÓN, 1942: 55, señalaba que "el perfil de
BANGOTORVISO, 1 9 8 5 : 4 3 8 y la Restitución planimétrica de CAÑEDO, ESPI- elementos como basas y molduras es idéntico en todo el claustro".
NOSA y VARONA (24), también aluden a la existencia de tímpanos maci- Tipos I.1, II, VI.2 y VI.4
1 5 1 2
zos en la galería este y en parte de las meridional y occidental, frente al 1513 Tipo 1.1.a
resto en que aparecen calados, si bien no asignan expresamente a nin- Tipo 1.
1 5 1 4
guna galería la primacía constructiva. BANGO TORVISO ha señalado últi- En los monasterios premonstratenses de Aguilar y Retuerta, muy
1 5 1 5
mamente que el proceso constructivo fue bastante lento (1998 (2): 164). cercano este último al de Valbuena, también sucedió lo mismo.
FUNDACIONES MASCULINAS • 285
compartían las líneas generales (tres arquillos de medio un modo u otro con Aguilar de Campoo: capilla mayor de
punto cobijados por uno grande apuntado, provistos en oca- Bujedo de Candepajares ( I I 6 8 - I 2 0 0 ) , Claustrillas de las
I526
siones de óculos en los tímpanos) . Sin embargo mayor es 1516 Huelgas de Burgos ( c a . I I 8 0 - I 2 0 0 ) , sala capitular de la
1527
el parentesco con el cenobio premonstratense de Aguilar de Vid (último cuarto del XII) , capítulo y claustro de
I528
Campoo: las similitudes no se reducen sólo a las grandes Retuerta (aquél en la segunda mitad del XII, y éste en la
líneas arquitectónicas , sino que también se perciben en la
1517 segunda mitad del XIII^ , etc. 529
1 5 1 6 Para Vallbona, cuyas galerías oriental y meridional se levantan en el 1525 Ibid: II, 4 I 3 - 4 I 4 y 426.
primer tercio del XIII, vid. GONZALVO I BOU y SANSITRAVÉ, I 9 9 8 : I I 0 - 1526 Capiteles de la jamba dcha. de la ventana 5 con los núms. I3 y I 7
I I I ; y CAMPS I SORIA, I998: 243. El claustro de la sede tarraconense de Valbuena; jambas dcha. e izqda. de la ventana 3 con los núms. 8 y 22
debió iniciarse a fines del XII, como testimonian los escudos de los arzo- de Valbuena; jamba dcha. de la ventana I y jamba izqda. de la 5 con el
bispos Ramón de Castellter^ol ( I I 9 4 - 9 8 ) y Ramón de Rocaberti núm.I2 de Valbuena (numeración de LÓPEZ DE GUEREÑO, I997: I, I67
( I I 9 9 - I 2 I 4 ) , aunque las obras se prolongaron hasta más allá de media- fig.35). Por otro lado, los cimacios empleados son análogos a los de Val-
dos del XIII (DALMASES y PITARCH, I 9 8 5 : I 0 6 ; CAMPS I SORIA, I 9 9 2 : buena. Para su cronología, vid. Ibid: I, I 8 2 - I 8 3 y I95-I96. La relación
24-25). Aguilar-Bujedo fue señalada por HERNANDO GARRIDO, I995: 27, y
Aunque en el monasterio palentino los arquillos menores tiene un
1 5 1 7 LÓPEZ DE GUEREÑO, I 9 9 7 : I, I 8 3 .
perfil ligeramente apuntado y están moldurados en las cuatro pandas. Compárense, por ejemplo, los capiteles 8 y 32 de Valbuena con un
1 5 2 7
Primer y segundo tramo de las naves del templo, las cuatro galerías
1 5 1 8 capitel doble de la galería N. y uno de los machones centrales de las
del claustro, sala capitular y de monjes, y la capilla del abad. Claustrillas, respectivamente (Esta relación Claustrillas-Valbuena y tam-
1519 El tipo I.I. del claustro vallisoletano se localiza también en las bién con Aguilar y Arroyo fue señalada ya por HERNANDO GARRIDO,
naves (interior y ventanas) de Aguilar, su claustro (excepto los núms. 26, I992: 70 e idem, I995: I32). Respecto a la cronología del conjunto
3I, 40 y machón S.O., según la numeración de LÓPEZ DE GUEREÑO, burgalés, véanse entre otros, LAMBERT, I 9 3 I : I90; TORRES BALBÁS,
I997: II, 373). I943: 239; idem, I952: 98; ANDRÉS ORDAX, I987: 54; VALLE PÉREZ,
1520 Modillones de tres y cuatro lóbulos (tipos I.I. y I.2) se emplean I990 (2): 54 nota I2; HERNANDO GARRIDO, I992: 55; idem, I995:
en la zona occidental del claustro (núms. 2, 4 a 7, I0, 23 y 24, según la I29 y ss; idem, 2003: I98; idem, 2006: I02-I03; KARGE, I995: I65;
numeración de LÓPEZ DE GUEREÑO, I997: II, 370-37I, fig.52). ABELLA VILLAR, 2008: 46 y 55; etc. Por su parte, CASAS CASTELLS sitúa
Compárense, por ejemplo, el núm.8 de Valbuena con el 24 de Agui- su erección entre I I 8 7 y I 2 I 4 (2005: I 5 8 y I72).
lar; el núm.32 de Valbuena con el 3 de Aguilar (relación esta última Capiteles izqdos. del vano norte y central e izqdo. del vano sur
1 5 2 8
apuntada por HERNANDO GARRIDO, I992: 70; idem, I995: I32; idem, (LÓPEZ DE GUEREÑO, I997: I, 248-249), como el núm. I 8 de Val-
2003: I 9 2 y 204 ). Como veremos más adelante al hablar de las gale- buena.
rías norte y sur, estos no son los únicos motivos que relacionan a Val- 1529 El capitel central de la ventana norte del capítulo de Retuerta (e,
buena con Aguilar. Sobre todas estas tallas vegetales, su difusión y según la numeración de LÓPEZ DE GUEREÑO, I997: II, 570 fig.80) es
filiación, vid. especialmente, HERNANDO GARRIDO, I990; idem, I992: semejante al núm.I8 de Valbuena. Respecto a las ménsulas de las pan-
70-73; I995: I 2 3 y ss; idem, 200I: 6 I - 6 2 y 66. das, son análogas al tipo I.I. de Valbuena, al igual que sus cimacios.
1 5 2 2 LÓPEZ DE GUEREÑO, I 9 9 7 : II, 4 0 I , 4 I 0 y 425. Recordemos que la cocina hoy en día tiene dos puertas: una apun-
1 5 3 0
1523 Ibid: II, 4 I I - I 3 y 425. tada y otra de arco escarzano, correspondiendo esta última a una inter-
1 5 2 4 Ibid: II, 4 I 2 y 425. vención de época moderna.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
286
una pequeña puerta, también de arco apuntado. La exis- mentos de estas salas al haber sido encajadas en una superfi-
tencia de comunicación entre ambas dependencias permite cie previamente construida. Pero además, su construcción
hablar de una simultaneidad en la construcción del cuerpo provocará importantes transformaciones en la dependencia
alto del calefactorio y esa parcela del dormitorio, ya que que da nombre a la panda, como veremos más abajo.
dicha puerta está realizada a la vez que el lienzo de muro en En las nuevas galerías, más altas que la oriental, se
el que se abre. Esto confirma además que la ejecución del abandona la "sequedad" precedente, imponiéndose un len-
dormitorio fue algo dilatada en el tiempo y que la obra se guaje más evolucionado, más goticista. Los poyos y plintos
cerró por la zona sudoeste, como lo demuestra el hecho de suavizan sus aristas mediante boceles o se cortan en nacela,
que se emplee en esta parcela un modelo avanzado de los arcos aparecen profusamente moldurados, en abierto
puerta y que los vanos que iluminan su interior por esta contraste con los vistos en la galería oriental; se horadan los
zona varían sensiblemente su t r a z a d o . I53I
tímpanos con rosas y óculos; hacen acto de aparición nue-
La otra dependencia que se levantó por entonces fue vos tipos de basas, cimacios y ménsulas, que se combinan
la cocina, en el lugar y con las dimensiones que se habían con los precedentes; las cestas de los capiteles se enriquecen
proyectado ya al trazar el refectorio. El cierre meridional con una gran variedad de modalidades vegetales, muy natu-
de la misma se adosó directamente al segundo contrafuerte ralistas y abarrocadas; etc.
del comedor de los monjes; en cuanto al cierre norte, el N o obstante debemos hacer notar que estas galerías, a
acoplamiento al refectorio fue algo más complicado, pro- pesar de que muestran indudables trazas de haber sido reali-
cediendo como hemos referido más arriba a romper y des- zadas en una misma etapa , difieren en algunos detalles
1533
montar los sillares inferiores del ángulo N.O. para engatillar que permiten no sólo hablar de la intervención de distintos
bien los muros de la obra antigua y la nueva; el lienzo occi- equipos de canteros, separados en el tiempo unos de otros y
dental coincidiría en parte con el actual. En el centro de la de formación dispar , sino también otorgar cierta priori-
1534
estancia se levantó un pilar prismático sobre el que descan- dad constructiva a la meridional. La obra de ambas galerías
saban los amplios arcos que sustentaban la cubierta de avanzaría de forma paralela en dirección oeste hasta llegar a
madera y que ayudaban asimismo a recoger los empujes del completar el nivel de las arquerías de medio punto; a conti-
primer fajón del refectorio, ya que el contrafuerte que ten- nuación se procedería rematar y abovedar la sur, para des-
dría que cumplir esta función no se llegó a construir pués dedicarse al pabellón del lavabo y a la galería opuesta.
I532
En efecto, la escasa apertura de rosas en los tímpanos
de la galería meridional —únicamente se practican tres y muy
3. Tercera etapa simples— frente a la profusión de la opuesta —rosas de
Comienza ahora la elevación de las galerías norte y sur, variada tracería en todos los tramos— ; y la incorporación
1535
incluyendo el templete del lavabo. El que las bóvedas se vol- de un nuevo tipo de nervios en la bóveda del ángulo S.O. y
teasen una vez construidas todas las dependencias de la panda la del lavabo, mientras que en la galería norte aparece ya en
del refectorio queda de manifiesto en el hecho de que las los tramos centrales , avalan esta hipótesis . A ello hay
1536 1537
ménsulas donde apean arcos y nervios de estas bóvedas rom- que añadir el hecho de que las dependencias meridionales
pen la regularidad de las hiladas que conforman los para- estuvieran ya terminadas mientras que el cierre norte del
1531 Un último aspecto que debemos apuntar respecto al calefactorio es "andresino" (Tipos I.2 y I.3), junto a otras de crochets o de grandes hojas
la existencia de una fractura vertical en el centro de su lienzo norte. La polilobuladas (Tipos III o IV) plenamente góticas (semejante mezcolanza
causa de este desajuste es difícil de precisar, no obstante puede deberse la encontramos también en los capiteles que adornan las ventanas de la
a algún tipo de problema estructural o simplemente a una ejecución irre- capilla mayor de Palazuelos, aunque en este caso se trate de un mismo
gular. taller que trabaja modelos vegetales de diferentes orígenes); el distinto tra-
1532 En las excavaciones arqueológicas no apareció ni rastro del cimiento tamiento plástico que recibe un mismo modelo de capiteles (Tipos III.3
de un contrafuerte en este lugar. y IV); la diversidad en la tracería de los rosetones, etc.
1533 El empleo de arquerías con idéntica molduración o el uso genera- Este aspecto ha sido ya señalado por otros autores (vid. nota 1509).
1 5 3 5
lizado de un mismo modelo de plintos (Tipo 2), basas (Tipo 1.2), mén- Tipo de nervios 2.
1 5 3 6
sulas (Tipos I.I.b, 1.2 y 1.3), cimacios (Tipo I)..., parecen evidenciarlo. El que se utilicen en la panda norte cimacios del tipo I (como en
1 5 3 7
1534 La forma de perfilar la arista del podio; el uso de diferentes tipos de la de naciente), mientras que en la sur este mismo tipo se combina con
nervios; la variedad en el número de modillones que forman las ménsulas, el tipo 5, podría hacer pensar que aquella galería se levantó primero. Sin
a veces asociados con escocias; la combinación de capiteles de tradición tar- embargo, ésto no contradice nada de lo dicho anteriormente, ya que esa
dorrománica (Tipo VI con sus variantes I, 3 y 4), con otros cuyas cestas combinación de perfiles puede deberse a la presencia de diferentes equi-
llevan hojas carnosas y lisas rematadas en frutos o cogollos, al modo pos de canteros.
FUNDACIONES MASCULINAS • 287
claustro, es decir, el costado meridional de la iglesia, fue etc.- y cuya cronología abarca prácticamente todo el primer
levantándose al mismo tiempo que las bóvedas de la panda tercio del siglo XIII y se prolonga unos años más; por último,
del mandatum, como lo demuestra la correcta correspon- otros plenamente góticos (tipos III y IV), en los que se
dencia entre las ménsulas y el resto de sillares que compo- detecta la influencia del foco artístico burgalés que, centrado
nen las hiladas del paramento correspondiente. Las obras se en las canterías de la Catedral y del monasterio de las
1546
interrumpieron cuando se iniciaba la panda occidental, Huelgas , se expande por diversas zonas de Castilla alcan-
1547
construyéndose solamente los extremos norte y sur del zando en su irradiación a otros cenobios cistercienses en los
podio -aproximadamente 1 m de cada lado-, las bóvedas que encontramos tipos similares a los de Valbuena : Pala- 1548
de los tramos angulares y se colocaron los salmeres de los zuelos (fechadas las partes bajas de la cabecera en 1226) ; 1549
dos arquillos de medio punto que arrancan de los machones cabecera de Santa Cruz de Rivas (ca.1200-1230) ; 1550
N.O. y S.O. respectivamente . 1538 segunda fase del templo y capítulo de Bujedo de Juarros
La construcción de estas galerías debió comenzar a (ca.1230-50) ; claustro (último tercio del XIII) e iglesia
1551
principios del segundo cuarto de siglo, extendiéndose hasta (ca.1250-80) de Villamayor de los M o n t e s ; iglesia y 1552
los años centrales de la centuria, e incluso quizás algunos claustro de Piedra (s. XIII) ; tramos 3 y 4 de la nave de la
1553
más. Como hemos visto conviven, en lo que a la decoración Epístola de La Espina (último cuarto del XIIl) ; etc. Se 1554
escultórica se refiere, diferentes tipos: por un lado, los que sigue empleando los mismos tipos de cimacios y basas que
siguen modelos tardorrománicos de acantos ya empleados en la panda este, aunque en los machones de la meridional
en la galería oriental ; por otro los llamados andresinos y
1539
aparece un nuevo tipo, más fino y evolucionado, al igual que
sus derivados , que tuvieron una amplia difusión por el
1540
presentan formas novedosas algunas basas - c o n perlas en la
reino de Castilla -claustro de San Andrés de Arroyo ,
1541 1542
escocia-, los perfiles de arcos y nervios, y se van abriendo
1555
rrumpieron en este punto o bien continuaron hasta cerrar la panda, res- conducen desde el templo al claustro, y la de la sacristía, fechables hacia
pondiendo la que hoy vemos a una reconstrucción tardía. comienzos del último cuarto del XIII (KARGE, 1995: 165).
Tipo VI en sus variantes 1, 3 y 4.
1 5 3 9 1548 En la monografía de Matallana se pueden encontrar referencias
Tipo I en sus variantes 2 y 3.
1 5 4 0 bibliográficas relativas a la irradiación artística del foco de Burgos.
Aquí reseñamos únicamente unos cuantos ejemplos significativos
1 5 4 1 Para la cronología de este conjunto, vid. la monografía correspon-
1 5 4 9
por su relación también en otros aspectos con Valbuena. Para el resto diente.
de los casos, vid. HERNANDO GARRIDO, 1990: 58 y ss; idem, 2001: 1550 LÓPEZ DE GUEREÑO, 1997: II, 506-509 y 524. Tanto en éste como
66-67 y otros trabajos de este mismo investigador citados en notas en el anterior se combinan. Vistas las soluciones arquitectónicas emple-
precedentes. adas en esta iglesia, así como la combinación de estos modelos góticos
1542 N o se ponen de acuerdo los investigadores en las fechas de realiza- con los andresinos, creemos que hay que retrasar la conclusión de la capi-
ción del claustro de Arroyo. Por un lado, HERNANDO GARRIDO, 1995: lla mayor al menos hasta mediados de siglo.
123; o idem, 2003: 187, coloca a Arroyo en el origen de todos estos 1551 VALLE PÉREZ, 1986: 85-89; HERNANDO GARRIDO, 2003: 196.
modelos, con una anterioridad a la década de los 90 del siglo XII. Por el 1552 CARDERO LOSADA, 1994: 134-135; PAYO HERNANZ, 1998: 178-
contrario, GUTIÉRREZ PAJARES, 1993: 65-66, lo fecha a partir de 1225- 179. Para la cronología del claustro seguimos a BANGO TORVISO, 1998
30, considerándolo como el último estadio evolutivo del taller que tra- (2): 163. HERNANDO GARRIDO, 2003: 184 y 189, lo sitúa a mediados
baja en el norte palentino. Sin embargo, más factible es la cronología e inicios del segundo tercio del XIII.
propuesta por BANGO TORVISO, 1998 (2): 163, quien lo lleva poco antes 1553 Según MARTÍNEZ BUÉNAGA (1998: 332-333) se iniciaría la cons-
del ultimo cuarto del XIII; en esta línea cronológica (tercer cuarto del trucción del monasterio no antes del primer cuarto del XIII, prolongán-
XIII) se sitúa CASAS CASTELLS, 2005: 548. dose las obras a lo largo de todo el siglo.
1543 Recordemos que entre 1200 y 1220 se realiza el cuerpo de la igle- Véase la correspondiente monografía.
1 5 5 4
sia, y las arquerías del claustro en torno a 1220-1230 (vid. notas 1522 u n a combinación de finas molduras cóncavas y convexas que vemos
1 5 5 5
a 1525) en las naves y claustro de Aguilar; cabecera, capilla de Sta. Inés y sacris-
1544 Entre 1200 y 1220 (LÓPEZ DE GUEREÑO, 1997: II, 584-585 y tía de Palazuelos; cabecera y capítulo de Arroyo; etc...
593). Recordemos, por ejemplo, que en el claustro de Rueda, con el
1 5 5 6
1545 1168-1200 (vid. nota 1526) En este caso se combinan los mode- que guardan relación los óculos de Valbuena, la galería este se terminó
los tardorrománicos con los andresinos, como en Aguilar. en 1 2 4 7 y la norte y sur en 1 2 7 6 (MARTÍNEZ BUÉNAGA, 1998: 193 y
1546 Los modelos más simples y sencillos se ven en el deambulatorio 263); y la iglesia de Castronuño (Valladolid), debe ser obra de la pri-
(1221-1230) y capilla de San Nicolás (1229-1234), mientras que los mera mitad del XIII (HERAS GARCÍA, 1966: 121-122; HERRERO MAR-
modelos de hojas abultadas y rizadas se observan en los pilares de ingreso COS, 1997: 53).
a las capillas radiales (1245-60), según KARGE, 1995: 103, 105, 214-
215 y 234-237.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
288
Poco antes, cuando se iban cerrando los distintos tra- bóveda de la galería cegó el óculo que se abría sobre la
mos de la galería norte y en la iglesia se estaba llegando a los puerta geminada, provocando que entrase escasa luz por
pies, se derribaría el cierre provisional del claustro, proce- esta zona. Ello se compensó ampliando los vanos del tes-
diéndose a levantar el muro definitivo jalonado de contra- tero meridional: las dos ventanas de medio punto y el óculo
fuertes y con una puerta de comunicación con el exterior en que las coronaba fueron sustituidas por una gran vano en
el extremo meridional que, dada la molduración de sus arqui- el cuerpo bajo y dos en el alto, todos apuntados y provis-
voltas e impostas, debe ponerse en relación con las obras de tos de elementos análogos a los empleados en la galería
la galería meridional y con la portada occidental del templo. adyacente (modelos de capiteles y perfiles de cimacios) . 1560
La erección de las galerías norte y sur tuvo repercu- incluso el tipo de piedra, mucho más porosa, de ahí el gran
siones en las otras partes ya construidas del claustro. Por un deterioro que han sufrido muchos de sus piezas.
lado, la panda oriental se recreció por la zona que da al
patio para adaptarla a la altura marcada por las nuevas cru- Únicamente queda por definir si esta última fase
jías. Y por otro, mucho más trascendental, alteró la confi- corresponde a una reconstrucción o remodelación tardía de
guración de los vanos del refectorio. C o m o ya había la galería preexistente o si se trata de una construcción ex
ocurrido antes en la panda del capítulo, cuando se proce- novo, es decir, que las obras del claustro se paralizaron
día a voltear las bóvedas de la galería meridional vieron que cuando iba a iniciarse la panda occidental y no se reanuda-
una de las ménsulas caía directamente sobre uno de los ron hasta tiempo después y con unos caracteres diferentes.
vanos de la puerta geminada que daba paso al gran come- Por el documento de julio de I 3 8 2 sabemos que en
dor. La solución aplicada en este momento fue la de des- esta fecha hay un lienp de la claustra que esta caydo. ¿Hace alusión
montar el soporte central de la puerta, cegar los vanos con este documento a la panda occidental? En principio se
sillares y abrir una nueva puerta un poco desplazada a occi- podría pensar que sí, ya que hay varios datos que apoyarían
dente. Esta nueva puerta es de arco apuntado y marca sus esta hipótesis. En primer lugar el muro de cierre tiene todo
impostas con unas molduras análogas a algunos cimacios de el aspecto de haber sido removido. Conserva aquél, además,
la galería contigua y a los de la puerta que desde la panda ménsulas análogas a las de las galerías norte y sur, bien enca-
occidental del claustro conduce al exterior . Además, la
1559
jadas con el resto de sillares que componen la hilada , I567
tal como en la meridional, y en cuanto a las cestas de los capiteles, con 1565 Tipos 3 y 4. Además, algunas piezas imitan perfiles empleados en
grandes hojas en los ángulos entre las que sobresalen otras más peque- las otras fases (83, 84 y 88 a 94).
ñas, las encontramos también en ambas galerías. N o obstante, el pro- 1566 Tipo I I .
ceso constructivo de esta zona impone hablar de contemporaneidad en Número 20.
1 5 6 7
mientras que otras —que curiosamente responden a tipos cimacios, basas, nervios, etc.) guardan estrecha relación con
nuevos—, han sido introducidas torpemente. En segundo los empleados en las galerías claustrales, en concreto con la
lugar, la existencia de cimacios, basas o plintos semejantes a meridional y septentrional. Hay que añadir además que esta
los de las otras pandas junto a otros de perfiles novedosos capilla presenta un ingrediente que no aparece en el claustro
permite hablar de una posible reutilización de piezas. De ser ni en ninguna otra zona del monasterio, como son las mén-
así, la panda occidental sufriría algún problema —ya sea por sulas-cabezas que apean los nervios en su ábside, lo que con-
causas estructurales (un desplome motivado por la inexis- firma aún más la relación de este recinto con las pandas norte
tencia de edificios adosados que equilibrasen los empujes de y sur, ya que este componente tiene su origen, al igual que
la galería contigua) o incluso naturales (incendios, etc.)—, otras fórmulas utilizadas en estas galerías, en el círculo bur-
que hizo necesario rehacerla. Para ello se aprovecharían diver- galés de la catedral y las Huelgas . Carecemos de datos
1569
sos elementos de la estructura precedente, pero otros documentales que nos ayuden a asignar una cronología segura
muchos, especialmente los más delicados (capiteles, nerva- a esta capilla , pero el análisis de su arquitectura y decora-
1570
duras, claves,... ) tuvieron que labrarse de nuevo. ción escultórica hace que debamos situar su construcción a
Hay que tener en cuenta, sin embargo, otros factores. finales del segundo cuarto del XIII, no mucho más tarde. Esta
En primer lugar, el documento aludido dice expresa y úni- data se ha visto confirmada por el completo estudio de las
camente un lienfo. Además, debemos recordar que el poyo pinturas que decoran los arcosolios, cuyas conclusiones lle-
de la galería carece de molduración, a diferencia de los de van a adjudicar a Doña Elo, ya en los años cercanos a su
las galerías norte y sur. Si la construcción de esta galería muerte ( f I 2 4 9 ) la construcción y decoración de la capilla
hubiese sido continuada por los maestros que trabajaron como panteón familiar de esta rama de la Casa de Castro . 1571
1568 HERNANDO GARRIDO, 2003: 204, indica que esta galería, que gótico desde el siglo XIII al XIV (MARTÍNEZ FRÍAS, 1998: 211-213).
"podría sobrepasar perfectamente fechas mediadas del siglo XIII", fue 1570 ANTÓN, 1942: 34, la fechó en el XIII; MARTÍN GONZÁLEZ, 1970:
"reconstruida en el siglo XIV tras un derrumbe". Esto último también 305; VALLEJO DEL BUSTO, 1987: 333; y POZAYAGÜE, 1998 (15): 333 y
había sido apuntado por ARA GIL, 2002: 70. VICENTE PRADAS y MARTÍN LOZANO, 2006: 31, en la primera mitad xM;
1569 Recordemos, por ejemplo, que la capilla de San Nicolás de la Cate- ARA GIL, 1986: 19 y OLIVERA ARRANZ, 2002 (2): 411 y 415, a media-
dral burgalesa ha sido datada por KARGE hacia 1229-1234 (1995: 234- dos (la primera, en 2002: 69, adelanta su erección al tercer decenio del
237); la segunda fase de la abacial de Bujedo de Juarros, en la que siglo); y HERNANDO GARRIDO, 2003: 192, a inicios de la misma centuria.
también se hizo uso de esta fórmula, está fechada ca. 1230-50 (VALLE 1571 GUTIÉRREZ BAÑOS, 2005: I, 205-208, 398-399, 459-461; II,
PÉREZ, 1986: 89). De todos modos es un tema muy recurrido en el arte 229-230 y 237.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
290
monasteria edificare, necessitati pauperum prouidere, maxime factum restauraverit. Insuper pectet regie dignitati duo talenta
eorum qui seculo renunciantes, Crucem Christi in suo corpore auri. Sicque testamentum firmum et indissolubile omni tempore
baiulant, iuxta illud: "Qui uult venire post me, abneget seme- perseveret.
tipsum et tollat crucem suam", mea spontanea voluntate, Spi- Facta carta in Valle Bona, era MCLXXXI, mense februario,
ritu divino sugerente, optavi animo fieri, operefacere proposui XV kalendas martii, regnanteglorioso imperatore domino Alde-
monasterium de Ordine Sancti Benedicti, in Valle Bona, secus fonso in Toleto, Legione, Galletia, Castella, Navarra, Cesarau-
Doriifluvium, in honorem Dei omnipotentis et beate Marie gusta.
semper Virginis, ac gloriosorum confessorum martini atque Sil-
Ego Stephania Armengodi, humilis comitissa, iussi fieri hoc tes-
vestri, omniumque Sanctorum.
tamentum, et, ad maiorem confirmationem, hoc meum signum
Hoc facere disposui propter salutem et peccatorum remissionem
apponi, et propria manu roboravi.
gloriosi imperatoris Hispanie, domini mei Aldefonsi, et pie recor-
dationis domine mee Urrace regine, matris eius, qui sua benigna Dompna Urraca Ferrandez, comitissa cf.
voluntate, cum essem mulier aliene terre, multa bona mihi fecerit, Martinus Ferrnadez cf.
et de supradicta villa et multis aliis hereditatibus, sua clementia, Dompna Sancia Ferrandez cf.
me hereditaverit. Hoc etiam facio pro salute anime mee et corpo- Petrus Ferrandez cf.
ris mei, atque parentum meorum, necnon omnium fidelium chris-
Raymundus, archiepiscopus Toletanus, cf.
tianorum.
Petrus, Palentinus episcopus, cf.
Igitur ego Stephania, comitissa, una cum filiis ac filiabus meis,
dono iam dicto monasterio, et iure perpetuo, post decessum meum, Petrus, Segoviensis episcopus, cf.
sub perenni testamento concedo Vallem Bonam integram cum ter- Petrus, Burgensis episcopus, cf.
minis suis, Murviedro ex integro cum terminis suis, secundum Bernardus, Seguntinus episcopus, cf.
quod mihi iure herditario pertinent. Steohanus, Oxomensis episcopus, cf.
Hoc tamen ea conditione facio, ut quandiu vixero, in mea potes- loannes, Legionensis episcopus, cf.
tate sint, et consilio voluntateque mea se habeant qui secndum
Rodericus Gomez, comes, cf.
Ordinem suum in monasterio vixerint.
Vobis ergo, domine Martine abbas, qui iam dicto monasterio auc- Ramirus Froilaz, comes, cf.
thoritate patris nostri domini Petri, Palentini pontificis, Deo dis- Ferdinandus, comes, cf.
ponente, preestis, fratibus vestris presentibus et futuris facio hoc Didacus Munioz, maiordomus imperatoris, cf.
testamentum de eodem monasterio, et iure hereditario in perpetuum
Pontius de Minerva, aferiz imperatoris, cf.
concedo, cum supradictis villis, videlicet Valle Bona et Murviedro,
ut in perpetuum totum habeatis secundum quos ad meum ius per- Gutier Ferrandez cf.
tinet, scilicet ingressus et egressus, sylvas, montes, pascua, colles, Rodericus Ferrnadez cf.
prata, fontes, piscarias, amnes, ortos, molendina, bineas, terras Garcia Garciez cf.
cultas et incultas, per sua loca et per terminos antiquos, secundum Petrus martinez cf.
quod inquiri et inveniri poterit.
Ego Aldefonsus, Dei nutu Hispanie imperator, una cum uxore
Verum quia dicitis quod consuetudo vestra non patitur villanos mea Berengaria, hanc cometisse domne Stephanie supra scriptam
tenere, ut liberius Deo possitis vacare, volo ut post obitum meum, donationem Ordini Sancti Benedicti factam, recipio et firmam
vobis et posteris vestris placendo, unus defiliis velfiliabus meis vel stabilemque permanere precipio ac in huius mee confirmationis
filiis eorum aut nepotibus, quem vos elegeretis aut abbas, qui tunc testimonium hoc signum facio.
temporis prefuerit monasterio, eos de manu abbatis sub dominio
et censu teneat, reddens monasterio per annum viginti moraveti- loannes canonicus Sancte Marie Vallis Oleti, presenti et dictante
nos vel amplius, estimata presenti et futura quantitate ville. Et domno Guilelmo, abbati Sancte Felicis, iussu domne Stephanie
ita conservet homines, qui sunt in supradicta villa, ut ad nutum cometisse scripsit.
abbatis suum rectum forum, iuxta priscam consuetudinem loannes notuit.
habeant. Quod si noluerit censum secundum presentem et futu- Giraldus, scriptor imperatoris, hanc confirmationem iussu eius-
ram ville quantitatem solvere et precepto abbatis in omnibus satis- dem scripsit.
facere, det abbas villanos, cui volverit de nostra progenie, qui sibi
obtempret, vel ipse teneat si maluerit.
Documento 2
Si quis autem mei generis, aut alterius cognationis, hoc eleemosine
testamentum irrumpere aut anullare tentaverit, sit anathema 1166, febrero, 22. Ávila.
maranatha, necnon cum luda traditore qui suspensus crepuit Privilegio del Rey don Alonso el 8° hijo del rey don Sancho el dese-
medius, et cum Datan et Abiron, quos terra absorbuit in, perpe- ado, y Nieto del Emperador don Alonso el 7° quefundo este monasterio en
tuum damnatus, si non satisfecerit Deo ac Sancte Marie male- el qual como Patron, y no fundador, entrega este dicho Monasterio y el de
FUNDACIONES MASCULINAS • 289
Huerta a la correciony visitacion del Abad de Berdones con condicion que A.H.N., Clero, legajo 7.659, Testimonio de apelación de
guarde en ellos la Orden de Cister. 8 kalendas de marzo era 1204 Fray Martín de Vargas, fols. I3r-I5r; A.H.P.V., Sección Histó-
A.H.N., Clero, legajo 7.659, Testimonio de apelación de rica, 242-20, fols. I8r-23r.
Fray Martín de Vargas, fols. I 5 v - I 5 r (copia del siglo XV); Lo primero, si por Procurador del Papa, o del Concilio, o del Capí-
copias modernas en A.H.N., Clero, libro I9.725, fol. 22r tulo General, o del Abbad de Cistel, o del Abad de Berdones, o de
y A.H.P.V Sección Histórica. 242-20, 23r-24v). qualquier comisario, o juez, o Reformador, o de otra qualquier per-
Decet reges et principes loca sancta diligere et beneficiis colere et eis sona que pretenda aver derecho, o jurisdicion, viniere alguna carta
sua iura illibata servare. Unde ego domnus adefonsus rex caste- de llamamiento, o mandamiento, o emplazamiento contra mi por
llae et strematurae, regis domni sanciifilius, berdoneii monaste- qualquier razon que sea, guardad la platica que se sigue.
rio sua integre iura conservare desiderans. vobis domno arnaldo lo primero al que hiziere, o leyere el emplazamiento, o citazion,
berdoneii abbati etfratribus eiusdem loci praesentibus, atque futu- deszilde, o requerilde por ante Notario y testigos, si ende estuvie-
ris, dono atque concedo monasterium quod dicitur de valle bona ren, que vos dee traslado de todo lo que dijiere, y leyere, y pidiere,
in perpetuum vobis et subcesoribus vestris, iure hereditario posi- y requiriere y que le responderedes en forma. En otra manera non
dendum, cum omnibus posesionibus et pertinentiis suis, quas nunc consistades en auto ninguno que sefaga ni en protestacion ninguna,
habet, vel postea habiturum est. Et habatiam de orta, cum gran- desiendo al escrivano, que so pena de su oficio, vos lo de assi por
gia quae dicitur cantavos, et cum omnibus aliis posesionibus, et testimonio.
pertinentiis suis, quas nunc habet, vel postea habebit. tali tunc lo segundo, que digades por palabra abierta, y clara, y manifies-
tenore et ac condicione, ut in praefatis duabus abaciis ordo cister- tamente, y alto,que se oya, haziendo dello testigos a los presentes,
ciensis integer, et illibatus in perpetuum custodiatur. Hoc autem que yo so ido dias ha,para el Abad de Cistel, y al Capitulo Gene-
donum, et hanc cocessionem meam quicumque irrumpere presum ral, sobre ciertas Comisiones, y otras cosas, que me mandofazer
serit, vel anullare temptaverit, sit anatepma maranatha excomu- el Abad de Cistel en este Reyno. Y que vo a darle razon dello, y
nicatus, et separatus a vivifico corpore, et sanguine domini nostri de losfechos deste Monasterio, y de la Orden en este Reyno. E que
iesu christi; et dapnatus cum iuda traditore, qui medius discrepit, vo con cartafirmada, y sellada, de los mas Abades de Castilla, y
et cum dathane, et abirone quos vivos terra absorbuit. Et petiret con Poder bastante dellos. Segun que sabedes, que es verdad. E
regiae parti miüe libras auri puri boni. Facta est carta huius doni, desde ende que me vo para el Papa, sobre algunas cosas, que cum-
atque huius concessionis, et roborata a rege domno aldefonso apud plen a su santidad, y a servicio del Rey, y reparacion de la Orden.
abulam in palacio, quod est contiguum ecclesiae sancti salvatoris. lo tercero, que pues yo so absente del Reyno, que non so obligado a rres-
Testibus domno nunio comite, et lupo diez de mena, et domno ponder, nin so tennido a dexar Procurador, pues que yo me vo per-
fruila etguterrio telez, etferdinando roderici de guzman, etgun- sonalmente alia, donde es la fuente de la justicia. E que por tanto
salvo fernandiz, et garcia garciez de montesia, cum multis alliis. non consentades en auto, ninguno, que contra mi seafecho. Pues que
Era m. cc. iiii. octavo kalendas marcii. regnante rege aldefonso in segun derecho, sin ser oido, non se puede nadafazer, y lo que se fiziere
castella et in strematura, et in toleto, et in naxera. Ego rex alde- sera en si ninguno. E qualquier sentencia, o mandamiento, ni desco-
fonsus, qui hanc cartam iussifieri manu propria roboro, atque munion, ni entredicho, que se pusiere, non ligaria, nin obligaria.
confirmo. = lo quarto, que si por ventura pro cediesen a algun auto de que a
mi o a este Monasterio pueda en qualquier manera seguirse algun
(Primera columna)
perjuicio, que entonzes por nombre mio, y del Mo nasterio apela-
loannes arquiepiscopus toletanus, confirmat. / Raimundus palen-
reis de palabra para el Papa, y protestareis de apelar por escrito,
tinus episcopus, confirmat. / sancius abulensis episcopus, confir-
y juridicamente proseguir la apelacion en el termi no y forma del
mat./ guillelmus segoviensis episcopus, confirmat./ Celebrunus
derecho.
seguntinus episcopus, confirmat. / loannes oxomenis episcopus,
confirmat./petrus burgensis episcopus, confirmat./ Yten, si alguna carta, o emplazamiento, o citacion, o requeri-
miento, fuere fecho contra el Prior solo, o contra el convento, o
(Segunda columna) contra el Prior y convento, por la qual parezca ser, algun perjui-
Comes Nunio confirmat / Comes lupus confirmat / comes vela cio. El prior como dicho es, apele, por palabra, no consintiendo en
confirmat / alvarus petrez confirmat / gomes garcias confirmat ninguna protestacion, que ninguno faga. Y diga, que requiere, que
/ gonfalvo marannon confirmat. / Roi guterrez confirmat le den traslado; y que apela para el Papa de palabra, y que pro-
testa de apelar por escrito, y juridicamente y proseguir la apela-
cion en tiempo, y forma del derecho, y que los presentes sean testigos.
Documento 3
Yten si el Abad de Morimundo, o otro alguno, dijiere, y mostrase,
ca.I434. Santa María de Valbuena. que es Comisario del Abad de Berdones, dizilde, que entre el Abad
Memorial de advertencias que fray Martín de Vargas de Cistel, y mi, a suplicacion del Rey, y instancia de sus Emba-
dejó a los monjes de Valbuena para que, en su ausencia, res- jadores que estan en el Concilio, mediante el Abad de Buena Val,
pondieran a los abades de Cíteaux, Morimond y Berdoues fue fecha Concordia, conciertos Capitulos, de los / quales es Uno,
si pretendían visitar el monasterio. que solo el Abad de / Cistel, y no otro Abad, ni persona de la
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
292
Orden, de aqui adelante, Pueda visitar al Monasterio de Val- Conzilio, o al Capitulo General de la Orden, o por qual quier
buena y de Montesion, y a los religiosos dellos. Y que sobre esto ay otra manera prover. Y es cierto, y manifiesto, que no lo fizieron
Escripturas publicas, y patentes, y nuevas Provisiones, las quales fasta el dia presente. E que el Abad y Convento de Berdones fasta
mostraredes cada, y quando, fuere necesario. el dia de oy, desque este Monasterio es reformado por el Papa, y
Yten, que yo despues desta Concordia, con esta esencion y condi- por el Abad de Cistel, nunca a mi han requerido de visitacion. E
cion, renuncie la exencion que tenemos del Papa Martino, y Euge- assi se concluie segun derecho, que por no guardar la Clausula y
nio. E que por tanto, ni el Abad de Berdones, ni otro ninguno, su condicion puesta por el dicho Rey / en el Privilegio de la funda-
Comisario, se puede de aqui adelante, entremeter del dicho Monas- cion, y por las razones sobredichas, que el dicho Abad de Berdo-
terio de Valbuena. E si por aventura el dicho Abad de Cistel, o el nes, y su Convento, no estan en posesion de poder visitar, y por
Abad de Berdones, o alguna otra persona por ellos atentare, o qui- consiguiente, non la pueden cometer a ningu no de la Orden.= E
siere hazer contra esto, que ello es Perjuicio mio, y agravio, y que sed bien avisados que si algun Abad, o Religioso, o otra qualquier
no consentides en ello, antes que apelades para el Papa. E que fasta persona por virtud de alguna Comision del Abad de Berdones, se
yo sea certificado de todo ello, que non daredes lugar a que nin- quisiere entremeter a Visitacion, que non lo consintades, y que ape-
guno visite. Pero si el Abad de berdones por su persona, o el Abad ledes para el Papa. Pero al Abad de Morimundo, como dicho es,
de Morimundo por su persona, mostrando poder suficiente, qui- porque es antiguo, si el quisiere ver la Casa, y informarse del
siere visitar, que vos plaze con tanto, que ni Monge, ni Abad Cas- Estado della temporal, y espiritual, recibidlo honrrossamente tanto
tellano, no entre en el Monasterio ni mas de un servidor seglar. Y que dentro del Monasterio Abad, ni Monge de castilla non entre,
que con toda honrra lo recibiredes, y non en otra manera. ni le sea consentido que faga auto de visitacion, ni mandamiento
Ytenfallaredes que el Abad de Cistel aprovo la mutacion del Aba- suyo, sea obedecido. Pero si buenamente quisiere enmendar, y amo-
dia en Priorazgo, ca el me llama a mi Prior de Valbuena. E asi nestar algunas cosas, que vea, y falle, que non son segun Orden
como Prior de valbuena me cometio, y fizo comision de toda la fagasse. Y asaz (sic) le basta a el, que se informe con diligencia de
visitacion del Monasterio de las Huelgas de Burgos, y de todos los personas dignas defee del Estado Espiritual y temporal de la Casa,
Monasterios de las Monjas sub jetas a las Huelgas. y de todo lo lo que a el pluguiere, porque fagan cumplida, y Ver-
dadera Relacion, al Abad de Cistel, o a quien el plugiesse.
Yten segun pareze manifiestamente y es verdad, que el Papa Euge-
nio confirmo de cierta sentencia, y aprobo, y ratifico la dicha muta-
cion de Abadia en Priorazgo, a su aplicacion del Señor rey, el qual Documento 4
es Patron del Monasterio de lo qual vos dexo traslado de la Bulla,
Privilegios y escrituras antiguas de la Casa y Monasterio Real de
y el su original esta en el Arca de Montesion. E asi en conclusion,
Santa Maria de Valbuena. Fundacion del Emperador Don Alonso.
segun lo que del Papa tenemos, del Rey, y del Abad de Cistel;
fallaredes, que ningun Abad, ni visitador, ni Reformador, non B.R.A.H., Col. Salazar y Castro, 0 - 7 , fols. 85-86.
somos tenudos a lo rezibir, ni puede visitar, ni prozeder contra mi, El monasterio de Valbuena estubo primero fundado junto al lugar
ni contra vos, ni contra el Monasterio y non prozede, ni vale segun que llaman Valbuena dondesta agora una hermita de la bocacion
derecho, ni puede ligar, ni atar sentencia suya, ni mandamiento, de San Martin hasta que despues fue trasladada al lugar donde
ni citacion, ni descomunion, que por esta razon quisiere poner, aora esta orilla del rio duero media legua del lugar de valbuena y
pues que manifiestamente non es nuestro Juez. Pero a mayor cau- legua y media de Peñafiel en el valle que aora se llama Valbuena
tela apelad para el Papa, por palabra, y despues, por escrito. . no se halla el tiempo de lafundacion primera ni de la traslacion
Yten si fuere alegado que este Monasterio es de lafiliacion de Ber- mas de tan solamente tenerse por cierto fue por el Emperador d.
dones responded que puesto que sefallasse que asifuesse, lo que non Alonso Septimo y la scritura mas antigua que el dicho monaste-
confesades. Que es cierto y manifiesto que el Monasterio de Ber- rio es de la era de 1165 como parece por las quatro cartas de
dones de grandes tiempos aca non tiene posesion de visitar. vuelta primeras deste quaderno y en una puerta que esta agora
Yten mas; que si escritos quisieren mostrar fallaran por ellos, que cerrada por donde antiguamente se entraba a la Cappilla que
el Rey don Alfonso en lafundacion del Monasterio puso una con- parece la mas antigua y la primera fundacion esta sobre la puerta
dicion, conviene a saber, que el Monasterio de Berdones oviesse la en una piedra la señal siguiente que segun parece dice Afonsus*.
Paternidad, con tanto que en este Monasterio se guardasse la [Al margen: * no dice aqui Alfonsus sino A Omega christus]
Observancia de la Orden de Cistel= Y por cierto es verdad, y [Dibujo]
notorio, que ha mas de cien años, que en este Monasterio nunca
se tovo observancia, ni se guardo Regla, ni Orden, ni Religion, a En esta Capilla que agora se llama de San Pedro a la parte del
nos notoriamente, a dios, y al Mundo, los Abades, y Monges desta evangelio y a la parte de la epistola estan en el hueco de la parez
Casa bevian peor que seglares, conmo rufianes, y mundanos, des- dos entierros los quales se hicieron abrir y no avia en ellos mas de
unas calaberas y huesos y en la pared unas pinturas antiguas.
comulgados, y yrregulares; y andaban sin Abito por los Montes,
Entre otras a la parte de la epistola en el arco estaban pintados un
y por los lugares. Y tenian manzebas, y fijos dentro en el Monas-
Rey y una Reyna con sus ceptros en las manos y sobre las cabe-
terio. E que el Abad de Berdones, y su Convento, que esto bien lo
ras parece tenian retulos los quales se an consumido con la dis-
sabian, y pudiendo lo castigar, y corregir, y clamarlo al Papa, o al
tancia del tiempo y solo se parece sobre la cabera de una que parece
FUNDACIONES MASCULINAS • 293
reyna unas letras que dicen Urracy sobre la del Rey Al cavo del pesquefo del cavallo y en el scudo que lleba que es asi mismo megro
letrero dice Tory parece que dife Impertator / / Junto a estos lleba la banda atravesada de la mano izquierda a la derecha, digo
entierros en la misma pared esta otro entierro mucho maior que de la mano derecha a la izquierda y los otros desta quadrilla lle-
los de arriba uno a la parte del Evangelio y otro al de la Epistola ban los scudos el Campo blanco, Unas fajas atravesadas como la
cubierto con una losa Grande de catorce o quince pies y en la de otra en las de Cordova y encima destos cavalleros esta pintada la
la Epistola estava enterrada una muger enbuelta en un cendal batalla y bencedores los nuestros . Laforma de la Sepulturas deste
colorado de labores a manera de mateles alemanisios y esta aun- Conde Pedro fernandez de Castro e dona Eylo son de una pro-
que algo gastada entera en partes. pia manera y trafa, y al parecer de un mismo tiempo y anbos
En el entierro de la parte del Evangelio estava otra figura que cuerpos tenian dientes aunque la doña Eylo le faltava uno de los
parecia claramente ser hombre en un ataud enbuelto en un cendal de delante
blanco y encima muchas estopas y dicen los padres ancianos que
al presente ay en este monasterio que le truxeron de la guerra de Documento 5
marruecos donde avia muerto y que se entiende ser d. Pedro fer-
Memoria de los Abades que a avido en este monasterio de Valbuena
nandez de castro, y la otra que queda dicho arriba la condesa doña
los quales se sacaron del libro Antiguo del capitulo.
Eylo su muger . este caballero tenia en la cabefa una escofia de
lienfo con unos pespuntes amarillos y unos fapatos de cordoban B.R.A.H. Col. Salazar y Castro, O-7, fol. I I I v .
verde dorados en algunas partes y las suelas de lo mismo demas Domnus Ebrardus Abbas Primus
de un quarta y puntiagudos y con algunos agujeros a manera de Domnus Garsia, 2°
red como escaqueador del tamaño de un dado.
Domnus Willelmus, 3°
[ A l m a r g e n : fapato antiguo] Domnus Garcia, 4°
[ dibujo ] Domnus Willelmus, 5°
En el arco donde estava este Cavallero estavan unas pinturas de Domnus Nunius, 6°
prophetas y en el arco donde parece estava la muger estavan pin-
Domnus Dominicus, 7
tadas lasfiguras siguientes.
Domnus Antonius, 8
[ A l m a r g e n : pinturas antiguas en el monasterio de Valbuena]
Domnus Jordanus, 9
En el dicho arco esta pintada a lo antiguo una batalla de moros y
christianos y de parte de los christianos es toda la gente de a caba- Domnus Micielus, 10
llo por quadrillas . En la una dellas lleban todos unos escudos Domnus Dominicus, 11
Campo de Sangre y banda blanca y un pendon delante angosto
como faxa el campo blanco y en el senbrados ocho roeles afules . Documento 6
Ay otra quadrilla si mismo de hombres de a caballo y lleban en
los escudos blanco el campo, y dos calderas en el y en las bande- s.a. [siglo XVI]. [Santa María de Valbuena].
ritas de las lanfas una caldera, y estos lleban un pendon muy Fundacion del monasterio de Balbuena del orden del cister.
largo y aunque muy lebantado o arrastrando por el suelo, el B.R.A.H. Col. Salazar y Castro, F-40, fols. 93r-95r.
Campo del es blanco y bareteado a manera de hebilla de jubon
Doña estephania condesa de urgel de nacion francesa hija del
aunque crucean.
Conde Armengol / / fundo y doto este insigne monasterio de
Ay asi mismo otra quadrilla que lleban escudos escaqueados como nuestra señora de balbuena en la era de mill y ciento y ochenta y
tabla de ajedrez de color blanco y sangre y las banderetas de las uno a los quince dias de mayo y entre otros muchos heredamien-
lanfas de lo mismo y un pendon delante en la misma forma. tos y posesiones le dio la su villa de balbuena de duero con todos
Ay otra quadrilla en la que va detras de todos un caballero armado sus terminos y la villa de monviedro con los suyos y la villa de
que parece Rey o Emperador el cavallo en cubertado lleba un escudo jaramiel que segun dicen las escrituras tenia asiento entre Cas-
y en medio del un leon grande en campo blanco y senbrados alre- troverdey peñafiely la villa de quintanilla tambien con los suyos
dedor unos castillos y la misma insinia en el pendon que le lleba- de los quales bienes y otros muchos siendo / / de tierra ajena como
ban delante, y en las ancas del Cavallo delante del qual va un ella dice en su testamento la dotaron en estos reinos el rey don
Alferez armado con una bandera con las mesmas armas y luego Alonso Septimo que se llamo emperador de las hespañas y doña
junto a el esta otro caballero con un scudo en el qual lleba la divisa Urraca su madre a quien esta señora doña estephania sirvio.
antigua de la cruz de santiago con veneras blancas en los remates Digo pues queste rey don Alonso confirmo por sus pribilegios todo
de la cruz, y otra enmedio y la misma divisa en el pescuefo del lo susodicho y hifo a este monasterio dotacion de ello y de otras mas
cavallo e la cubierta con escudos y divisas unas de calderas y otros cosas en su propio nombre segun parece por sus pribilegios lo qual
de vanda. se hifo en la misma era de la fundacion tres o quatro / / meses
Ay otra quadrilla de caballeros y el que mas se descubre lleba el de lafundacion . esta enterrada esta Ilustrissima Señora en la su
Cavallo cubierto de negro con una banda blanca En las ancas y capilla de Sant pedro do yacen tambien el Ylustre Señor don pedro
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
294
fernandez de castro su hijo y don Alvaro perez de castro hijo suyo divisa desta Ill(ustrisi)ma Señora fundadora, y hallamos que en
y nieto de la fundadora y la condesa doña ello hija de don Alvar una parte del Arca de piedra donde está habia con dificultad que-
perez de castro y otros cavalleros deudos y criados. dado un pedazo de un Escudo grande, con una vanda atravesada
Buscamos con diligencia las armas y divisa desta yllustrissima de tres dedos de ancho dorada con unas ondas como las de los Var-
Señora y hallamos que en una parte del arca de piedra donde esta gas en campo sangriento: hallamos que en el labio del Sepulcro a
avia con dificultad quedado un pedafo de un escudo grande con la parte de la pared habian quedado unos escudicos pequeños y
una vanda atravesada de tres dedos de ancho dorada con unas tenian en medio dos Lobos uno sobre otro como los de los Ayalas,
ondas como las de los bargas en campo de sangre . hallamos que salvo que tenia cada Lobo un Cordero atravesado en la boca: el
en el labrio del sepulcro a la parte de la pared avian quedado uos Campo del Escudo es blanco, la orla colorada sembrada por sus
escudicos pequeños y tenian en medio dos lobos uno sobre otro trechos de unas Aspas de Oro, como las de los Orozcos u Ayalas.
como los de los ayalas salvo que tenia cada lobo un cordero atra- Esto es lo que se me ofrece embiar acerca de lo que VM me dejó
vesado en la boca [ A l m a r g e n : haro ] el campo del escudo es mandado. Christo con todos.
blanco la orla colorada sembrada por sus hechos de unas aspas de
oro como las de los horozcos Documento 8
S.a. [mediados siglo XV]. Sta. María de Valbuena.
Documento 7 Relación de obras efectuadas en el monasterio de
Santa María de Valbuena y sus posesiones tras la reforma de
S.a. [siglo XVI]. [Santa María de Valbuena]. fray Martín de Vargas.
Traslado del Entierro de la Condesa de Armengol que está en el
A H N , Clero, legajo 7.659, cuad. de 49 ff., fols. 27v-3I.
Monasterio de N. S" de Valbuena.
Las obras que se han fecho e rreparado desde la fundafion de la
B.N. M s s . 5 9 3 8 . Papeles Varios. Copia de un códice del Esco- observancia aca en el monesterio e sus posesiones.
rial quefue de Ambrosio de Morales, fols. 2 9 9 r - 3 0 0 r .
Primeramente
Doña Estefania Condesa de Armengodi, francesa de nacion, hija
En Valladolid a la colafion de sant llorente se fesieron de nuebo
del Conde Armengodi, fundó y dotó este insigne Monasterio de
unas casas que costaron mas de XII mil.
nuestra Señora de Valbuena, en la era de mil y ciento y ochenta y
una a los quince dias de Marzo (Año del nacim(ien)to de mil y Iten en ensinas se fiso un molino de nuebo en el rrio de esgueva
ciento y quarenta y tres); y entre otros mucho heredamientos y que costo I mil.
posesiones le dio la su Villa de Valbuena de Duero, con todos sus Iten se fiso de nuevo el cannal del monesterio que costo fasta I
términos; y la Villa de Monviedro con los suyos; y la Villa de mil.
Jaramiel, que segun dicen las escrituras tenia asiento entre Cas- Iten se adobaron de comienfo los molinos del monesterio e otra
tro Verde y Peñafiel; y la Villa de Quintanilla tambien con los ves que se quemaron se tornaron a faser de nuebo e un soberado
suyos. De los quales bienes y otros muchos siendo de tierra agena enllos que costaron fasta II mil
como ella dice en su testamento la dotaron en estos Reynos el Rey
Iten en piñiel de yuso se fiso un nuebo lagar que costo fasta dcc
Don / / Alonso setimo, que se llamó Emperador de las Españas
(Debió de tomar motibo del Conde de Portugal, que en estos mis- Iten se puso de nuebo una grand vinna ferca del monesterio que
mos tiempos u poco antes siendo Conde se llamó Rey) y Doña costo fasta
Urraca su Madre, a quien esta Señora Doña Estefania sirvio, Iten la dicha vinna e la huerta se ferco de tapia comenfando de la
este Emperador llamado de las Españas, que ganó a Almeria, y el puerta de la madalena fasta el rrio de duero e de la huerta de los
que dio a los Ginoveses que le vinieron a ayudar en esta con- angeles que es de la otra parte entre el molino fasta el dicho rrio
quista, aquella Escudilla de esmeralda que se halló en el despojo del que costo fasta
Rey de Almeria, con la qual sola se contentaron los Ginoveses, y Iten cobrir las dichas tapias todas de nebro que costo fasta
la tienen en grandísima estima el dia de hoy, llamandola el Sacro
Iten se cercaron las vinnas de Valbuena de valladares altos que
Santo CATINO, queriendo persuadir ques el Vaso en que el Sal-
costo fasta
vador del mundo cenó la ultima cena: Digo pues queste Rey Don
Alonso confirmo por sus previlegios todo lo suso dicho, y hizo a este Iten se rreparo la capilla de todos los santos con tapias e adoves e
Monasterio dotación dello y otras mas cosas en su propio nombre, se ordeno capilla en que honestamente pueden oyr misa las gentes
según parece por sus previlegios, lo qual se hizo en la misma era que costo fasta ccc
de la fundación tres u quatro meses despues: Esta enterrada esta Iten ferca la dicha capilla se fiso un grand corral para el ganado
Ill(ustrisi)ma Señora en la su Capilla de San Pedro, donde / / fercado de tapias e cobierto de nebro e de [...] sus chibateras de ado-
yace tambien el II(ustr)e Señor Don Pedro Fernandez de Castro bes que costo fasta
su hijo, y Don Alvar Perez hijo suyo y nieto de la fundadora, y Iten rreparose la granja nueba que sefallo despoblada e poblose con
la Condesa D" Ullola hija del Alvar Perez, y otros Caballeros granjeros e rrepararonse las casas que costo fasta
deudos y criados dellos. Buscamos con diligencia las Armas y
Iten rrepararonse las casas de la granja de balbonilla e fisose de
FUNDACIONES MASCULINAS • 295
nuebo una grand casa que costo fasta I mil. Item en la enfermeria vieja se fiso una nueba e grande casa con
Iten la granja de soberado se rreparo la casa que costo fasta soberado deyuese e adobes que costo fasta
Iten en la dicha granja se fiso de nuebo una graciosa casa con Item el corral de la dicha enfermeria se ¡erco todo nueba mente de
soberado e establos que costo fasta quatro tapias en alto que primero era corral de ovejas e sefiso un
gra¡ioso vergel que costo fasta
Iten rreparose la granja de termino las casas e fisose otra nueba
que costo todo fasta Item sefesieron e rrepararon otras muy muchas cosas que proli-
xas serian de escrivir el que mas largamente se quisiere informar
Iten rrepararonse las casas de la granja de castrillo e fiso se otra
vaya a los libros de las cuentas del monasterio.
de nuebo tejada que costo fasta
Los rreparos e obras que sefesieron en la iglesia del monasterio
Iten rreparose e trastejose la iglesia de sant martin ¡erca de val- La iglesia se falla que nunca fue solada e solose fasta la meytad
buena que costo fasta
de ladrillo e todos los presbiterios de arga masa efisose el atajo de
Las obras que sefesieron de la puerta reglar adentro tras del altar mayor con su yeso e sus dos puertas morillas [sic]
Primeramente segund la orden e se atajo entre la obra e el coro de tapias e ado-
Sobre la puerta rreglar del corral donde esta el portero sefiso una besfasta en somo de las capillas mayores e sefiso en el un grande
nueva torre de quatro o ¡inco tapias en alto con su quadra e varan- arco de yeso enyesada toda la pared de alto ayuso e se cobrio el ¡in-
das aderredor que costo fasta bol de sobre el coro de madera e teja con su fermoso tejado el qual
Item dentro del dicho corral se fesieron dos grandes casas para la de cada dia se caya a peda¡os e se trastejo toda la iglesia de luengo
compannia e huespedes e lagar con su viga e pertrechos que costo en luengo e todo el monasterio asy dormitorio como rrefectorio e
fasta ostal e todo lo otro e se ¡erco el vergel de la claostra de madera de
pino de tramones e se allanaron las claostras de tierra e el dormi-
Item el dicho corral sefiso otra casa para pajar e establo que costo
torio e rrefectorio e se blanquearon las claostras e rrefectorio et se
fasta
rrenobo la torre de las campanas e se al¡o de piedra e ladrillo e se
Item el dicho corral se ¡erco todo de quatro tapias en alto e se fiso fiso nuebo tejado que pudo costar todo fasta XV mil
un atajo por la huerta de los angeles la qual huerta nueba mente Item sefiso para el altar mayor un grand rretablogra¡ioso e otros
sefiso efue el atajo de tres tapias en alto que pudo costar todo fasta tres pequeños uno para santa ana otro a la madalena otro a sant
Item del ostal fasta las necesarias se cerco todo de tapia de tres ¡ebastian que costaron fasta V mil
tapias en alto que costo
Item se costaron afonbras e tres sargas e ¡iertos afamares e fron-
Item fesieron nueba mente quatro torresillas o velas la una en el tales para los altares que costto fasta V mil
tejado de las campanas otra sobre el lagar otro en el corral de los
Item se conpraron IX rretablos de la pasion que costaron fasta
angeles otra en el corral de las gallinas que costaron fasta
Item se conpro un relox deferro que costo fasta III mil
Item sobre la claostra se fiso otra claostra e se al¡o nueba mente
Item un lavatorio de laton que costo I mil
sobre madera e sefesieron corredores que costo fasta
Item sefesieron ¡inco calices de plata que costaron fasta que en el
Item sobre la puerta reglar que entra a la claostra sefiso una gra-
ciosa camara con su rretrete que costo monasterio no sefallo mas de solo uno e este viejo VIII mil
Item se conpro un breviario en ytalia que costo I mil
Item en las espaldas del ostal a la parte de las gallinas e de la cosina
sefesieron tres ¡elas para huespedes e rretretes que costaron fasta Item otro libro [...] en rroman¡e que costo III mil
Item sefesieron puertas muy fuertes e nuebas una a la puerta de Item se conpraron fasta salas para los monjes e fasta
las gallinas otra a la del po¡o de la cosina otra a la entrada de la diurnales que costaron fasta
claostra cabo la cosina otra a la puerta de la claostra entrando a Item se se conpraron otros breviarios fasta que costaron
la enfermeria otra a la ¡ela que entra a do duerme el rreverendo fasta
maestro e otras dos al dormitorio e otra al relox subiendo de la Item se conpraron para la iglesia para el presbiterio una lanpara
iglesia e otra por casa que costaron fasta con su ba¡in e otras ¡inco lanparas defierro deflandes que costa-
Item en el dormitorio sefesieron ¡iertas ¡elas de adobes e un grande ron todas fasta
atajo por que las Item dos ba¡ines de arambre uno para la [...] el otro para lavar
¡elas quedasen defuera del dormitorio e de madera [...] que costo los corporales que costaron fasta cxxx
fasta Item otros dos ba¡ines para las barbas que costaron CL
Item reparose la bodega con fasta XX cubas que costo fasta Item para la sacristania se fesiero almaticas e camisas que costa-
Item ordenose la cosina e se fiso de adobes e se fiso un grande ron fasta
forno que pudo costar fasta Item ¡eriales para la iglesia que costaron
Item en la enfermeria sefesieron a sus ¡elas de adobes e reparo que Item dos candeleros de a¡ofargrandes e fornidos de flandes para
costo fasta el altar mayor que costaron
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
296
Item una cruz sobre dorada que costo fasta tante se a de repartir en las traspilastras por partes yguales; y
Item sabanas efaselejas para todos los altares e para mundicias e estas con su basa toscana y capitel correspondiente lebantaran asta
pamesuelos que costaron las repisas de los cercos que oy tiene y las pilastras se sacaran de
zimiento firme y atizonadas de terzio en terzio en las paredes y
Item conpraronse para el ostal e rrefectorio e enfermeria e conpa-
desde los capiteles de dichas pilastras arancaran dos arcos labra-
ñia manteles que
dos con bocelones y medias cañas al modo del de el coro desde la
costaron pared del claustro a la de el gardin; Y en las traspilastras / /
Item para en la claostra dies e ocho atriles que costaron fasta cccc jugaran las formas de tres capillas en cada lado de piedra labra-
Item lechos para el dormitorio e enfermeria e ostal e conpañia que das a la correspondenzia de los arcos; Y tambien are las formas
fueron fasta de la pared de la sacristia y escalera de piedra con la misma labor;
lechos que costaron fasta Y las capillas an de llebar sus dosyagonales de piedra a la corres-
pondienzia de los arcos labrados y en la clave hechara un jarron
Item para cada lecho un pellon que costaron
o escudo como me pareziere al modo que esta en el coro y las capi-
Item para cada uno dos mantas que eran mantas que costaron llas se an de cerrar de ladrillo yeso como la de la escalera solo y
fasta no la he de labrar sino dexarla garreada y se adbierte que dichos
Item costo faser vestimentas e rreparar lo viejo de la sacristania arcos no an de subir mas que asta el piso del claustro= Yten en
fasta el gueco del dormitorio y al nibel del claustro se hechara un suelo
Item de estas dichas menudencias sefesieron e conpraron otras de bigas de pie y quarto de gruesas desde la pared de claustro a la
muy muchas que seria muy prolixas de escrivir para el que mas del gardin; y por lo menos an de entrar en una y otra pared un
largamente quesiere ser enformado vaya a los libros de los gastos pie ronpiendo para esto lo que fuere nezesario en las canterias y
del monasterio entre biga y biga no abra de gueco mas de dos pies; Y para segu-
ridad deste suelo y que nofalle con el peso de tabiques y texado se
hecharan debaxo dos careras de bigas del mismo grueso desde la
Documento 9 pared de las campanas al dormitorio nuebo posteadas por abaxo
I 7 I I . Santa María de Valbuena. en los macizos de las paredes que atrabiesan el dormitorio y la
Escritura de obligación por la que Melchor de una carrera se hechara doze pies apartada de la pared del claustro
Renedo se compromete con el monasterio de Valbuena a y la otra en medio del gueco que queda y sobre estas bigas se a
hacer la obra de la sacristía y dormitorio. dechar un suelo de sobradiles; Y en dicho suelo desde las campa-
nas al dormitorio nuebo se a de dexar un transito a la parte de
A.H.P.V Protocolos, I5.224. Año I 7 I I , fols. 44r- claustro de doze pies de ancho y en medio su puerta de faxas de
45v. yeso al dormitorio nuevo; Y en lo restante al jardin se a de repar-
Obligazion tir en ocho o nuebe celdas las que pareziere a la comunidad con su
Sepase por esta escritura de obligazion ajuste y conzierto como yo alcoba canzely alazena de tapialejo de yeso y cascotes y las alco-
Melchor de Renedo, vecino de la villa de Curiel, me obligo a azer bas con su cielo raso de yeso y en cada una se a de ronper su ben-
y executar en este Real Monasterio de nuestra Señora de balbuena tana de zinco pies de alto y quatro de ancho en claro con sus linteles
horden de nuestro Padre san bernardo la obra del dormitorio y y pies de piedra labrados como los del quarto nuebo; Y tambien se
demas que aqui ira declarado segun tengo tratado y conforme a las rompera otra ventana del mismo genero y labor en el transito a la
condiziones siguientes parte de la bodega y en la subida de la librería una puerta con su
Lo primero he de demoler todas las zeldas de una parte y otra dintel y pies de piedra rasos; Y la / / puerta de las talegas [sic]
desde la pared de las campanas asta el dormitorio nuebo y todo el se mudara en medio del arco y se a de azer medida y labor de la
texado desde los pilares que dibiden el claustro y dormitorio ase- de la escalera y las dibisiones de transito y celdas seran de postes
gurando y apoyando el texado del claustro y si yziere alguna quie- sentados sobre sus soleras y cerrados los claros de yeso y cascotes
bra sera por mi quenta; y tambien se an de desazer los arcos que dadas de llana y labadasy se an de enbaldosar las celdas y tran-
tiene el texado cinbrandolos y baxando la piedra con quenta y si sito de baldosas de pie en quadro coxidas con baro y el alto de las
alguna se perdiere o cayere algun zerco y derrotare alguna bobeda celdas y transito a de ser al nivel del clastro alto y si para darles
he de ser obligado a conponerlo a mi costa y toda la broza asi de esta altitud fuere nezesario lebantar algo las paredes lo he de azer
zeldas texado y arcos he de hechar a mi costa por la parte que de cal y canto; Y tambien cerrar de la misma forma; los arcos de
corresponde a la bodega y la texa e de poner en los desbanes en la escalera y capitulo al claustro baxo los dare de yeso y labare
parte que no enbaraze= Yten me obligo a desazer las bobedas del como esta lo demas= que el techo de las celdas y transito a de ser
Capitulo baxo cinbrandolas y baxando la piedra con quenta y si de bobedillas un pie de claro entre biga y biga y por lo menos la
algo se desperdiziare pagara el monasterio y en dicho Capitulo mitad dellas an de alcanzar desde la pared del claustro al jardin
dibidido en tres partes sacare quatro pilastras que salgan casi dos enteras, las demas podran ser de dos piezas sentadas todas sobre sus
pies cada una; de tres pies y quarto de planta con su traspilastra soleras y clabadas labradas y acepilladas con su mocheta por la
la qual pilastra de en medio tendra dos pies menos quarto y lo res- parte de abaxo y de grueso pie y quarta; Y dichas bobedillas se
FUNDACIONES MASCULINAS • 297
cerraran de yeso y cascotes bien raspadas y labradas; Yten si los o menos oficiales de los referidos se me a de dar la porcion sueldo
pilares que tiene la pared del claustro para rezibir el texado estu- a libra segun los oficiales que tubiere. Y si la casa pagare los mate-
bieren algunos rebentados los e de azer a mi cuenta de cal y canto riales que nezesitare para dicha obra su ynporte se baxara de la
y sobre dichos pilares se asentaran sus soleras a nibel y otra a cantidad de los dichos diez y ocho mill reales, con cuias condizio-
plomo de la dibision de las celdas posteada al nible de los pilares nes dare dicha obra acabada y perficionada para el dia de san
y sobre estas soleras se asentara una caxa de tirantes de doze pies andres de este año de mill setezientos y onze y al cumplimiento de
de gueco y asentados cinco pies uno de otro; despues se sacara al todo lo que dicho es me obligo con mi persona y bienes muebles y
corriente del texado con el que queda del claustro y las anda bigas rayzes abidosy por abery doy mi poder cumplido a las justizias
que llebare dicho texado se asentaran a quatro pies una de otra en y juezes de su maguestad que me sean competentes a quien me
barbilladas a la parte del estribo y en la carrera a picadero. Y en someto para que a ello me compelan y lo rezibo por sentenzia
el texado que cae al jardin llebara dos tramos de tixeras que des- pasada en autoridad de cosa juzgada renunzio las leyes de mi
cansen sobre la carrera y estribo de la caxa de los tirantes enbar- fabor con la general del derecho en forma y lo otorgo asi ante el
billadas y por ripia se an de hechar sobradiles y se texara a texa presente escribano de su maguestady testigos en este real Monas-
doble recorriendo tambien el texado de el claustro con sus boqui- terio de nuestra señora de balbuena siendo testigos bizente xil
llas y caballete de cal= Yten es condifion que por azer esta obra vezino de la villa de peñafiel, juan estevan vezino de la orra y
asi como esta condicionada y a satisfazion deste Real monasterio manuel de renedo vezino de la villa de Curiel y el otorgante a
Abbad y monxes del y de maestros yntelixentes que podran traer quien yo el escribano doy fe conozco, no lo firmo por no saver y
a costa de ambas partes se me an de dar diez y ocho mill reales de a su ruego lo firmo un testigo=
bellon y mas las puertas y bentanas que fueren nezesarias, qua- Testigo, Manuel renedo ante mi, Antonio Lazaro Rivas
tro mill texas y todos los demas mate- / / riales asi de madera
yeso clabazon cal y piedra los he de comprar a mi costa porque la
casa solo tendra la obligazion de portearlos asta dentro della y Abadologio
donde puedan llegar los carros y de poder aprobecharme para esta
Martín, I I 4 3 , I I 4 8 . 1572 1573
de dar en dicho combento una celda con dos camas y conponerme García . I578
1572I5-II-II43, Documento fundacional del monasterio. En el Libro por Estefanía Armengol en 1143 (A.H.N. Clero, carpeta 3440, doc. 7).
de Privilegios, fol.2v se anota tras la transcripción de este documento lo 1580 29 de noviembre, donación de Alfonso VIII (A.H.N. Clero, carpeta
siguiente: Esta escriptura se otorgó en la villa de Valbuena a diez y seis defebrero año 3440, doc. 2-n.II; cit. por PÉREZ EMBID, 1986: 332, nota 3).
del nacimiento de Christo de 1143 como consta de su Era, afavor de Don Martín pri- El 22 de febrero, Diego Martínez y el maestro Pedro donan a Val-
1 5 8 1
mer Abad deste Monasterio. buena el monasterio de San Andrés de Valbení, y lo confirman al día
1573Donación de la villa de Quintanilla por Alfonso VII (A.H.N., siguiente. Aparecen como testigos, además del abad, Melendo, prior;
Clero, carpeta 3440, doc. 2-n.6 y doc. 5). Domingo, soprior; Juan de Aguilar, cillerero; Juan, socillerero; y Gonzalo,
1574En el Libro de Privilegios, fol.5r, al comentar este privilegio de Alfonso precentore (A.H.N. Clero, carpeta 3440 docs.8 y 9).
VII I9 de diciembre, se anota que fue concedido a Don Ebrardo, segundo 1582 El abad de Retuerta vende al monasterio la heredad de Castil de
Abad deste Monasterio Cisla el 17 de junio de 1166 (A.H.N. Clero, carpeta 3440 doc. 10).
El I5 de febrero se realiza un deslinde de términos de la propiedad
1 5 7 5 6 de mayo, donación y confirmación de Alfonso VIII (A.H.N.
1 5 8 3
de Murviedro entre el abad del monasterio y el concejo de Peñafiel Clero, carpeta 3440, doc. 2-n.I4).
(A.H.N. Clero, carpeta 3440, doc. 2-n.7). 1584 I de junio de 1169. Carta de venta hecha por el monasterio de la
I4 de agosto, Alfonso VII vende la heredad de Jaramiel al monas-
1 5 7 6 Vid (Burgos) al monasterio de Valbuena, de la granja de Término
terio. (I.V.D.J. Manuscritos medievales, A.3.3).
1577 Enero, Privilegio de Sancho III (A.H.N. Clero, carpeta 3440, doc. 22 de septiembre. Confirmación de la venta realizada por el abad
1 5 8 5
2-n.8 y doc. 3-n.6). de Retuerta al de Valbuena (vid. nota 1582), siendo testigos los abades
1 5 7 8 E n este p u e s t o aparece en la Memoria de los abades que a avido en este Pedro de Sacramenia, García de San Andrés de Valbení y Guillermo de
monasterio de Valbuena (B.R.A.H. Col. Salazar y Castro, O-7, fol.IIIv, y La Espina.
O-I8, fol.243r). Alfonso VIII concede al monasterio un pozo de sal en Bonilla el 22
1 5 8 6
1579El 24 de enero, Vicente Vicéntez, su hermana María Vicéntez y su de enero. (A.H.N. Clero, carpeta 3440, doc. 2-n.I3; GONZÁLEZ, 1960:
cuñado Pedro Anaya, restituyen al monasterio una heredad que poseían II, 283-284; cit. por PÉREZ EMBID, 1986: 332, nota 3). N o aparece
junto al monasterio y que había sido incluida en la donación realizada mencionado en la Memoria citada en la nota I578.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
298
Juan, I I 7 5 , 1587 II83 .
1588 I236 , I237 , I243 , I244 .
1603 1604 1605 1606
I204 . 1596
Miguel, I 2 5 6 , I 2 6 6 , I 2 7 0 .
1609 1610 1611
dir al Capítulo General; Martín moro, prior; Martín Aparicio, cillerero (A.H.N. Clero, carpeta 3440, doc. 19).
mayor; Martín de Peñafiel, sacristán; Nuño de Peñafiel, soprior; Miguel El 6 de diciembre, Juan García vende al monasterio una heredad en
1 6 0 5
de Cuellar, vestiario; y Guillermo de Bedere, cillerero menor (A.H.N. Villa Sanz (Villahoz) (A.H.N. Clero, carpeta 3440 doc. 20).
Clero, carpeta 3440, doc. 2-n.29; Códices I484-B n.27). Este abad actúa como testigo en un pleito llevado a cabo entre los
1 6 0 6
15939 de junio, privilegio de Alfonso VIII (A.H.N. Clero, carpeta 3440, monasterios de Gumiel de Izán y San Pelayo de Cerrato (A.H.N. Clero,
doc. 2-n.I5), confirmado por Fernando IV en 1304 (A.H.N. Clero, carpeta 3440 doc. 2I).
legajo 7661). Estando Fernando III en la ciudad de Valladolid, dona tres here-
1 6 0 7
15941 0 de enero. Concordia con el Obispo de Burgos sobre la hacienda dades al monasterio para aceite de la lámpara del Santísimo (Libro de Pri-
de Villahoz (Granja de Talamanquilla). Aparecen mencionados el abad vilegios, fol.3I).
Juan, 2°; Martín Moro, prior; Pedro de Castrillo, soprior; Pedro 1 4 de enero. Privilegio de Alfonso X (A.H.N., Clero, carpeta 3440,
1 6 0 8
Lorenzo, cillerero mayor; Martín de Palencia, cillerero mediano; Gui- doc. 23; legajo 7666).
llermo de Beder, cillerero menor; Miguel de Cuellar y Nicolás de Tala- Tumbo de Matallana.
1 6 0 9
manquilla (A.H.N. Clero, carpeta 3440 doc. 13; GÁRRIDO GÁRRIDO, 1610 Alfonso X actúa en una concordia sobre términos que tenía el
1983: doc. 315, 103-104). 20 de enero: Alfonso VIII aprueba y con- monasterio con Roa. N o consta el mes ni el día (Libro de Privilegios,
firma la donación que hizo Martín Coril, clérigo de Peñafiel, a favor del fol.33r)
monasterio, de unas casas, viñas y heredades en término de Peñafiel 1611 I de octubre, Gonzalo Yáñez, señor de Aguilar, dona al monaste-
(I.VD.J. Manuscritos medievales, A.3.II). rio una heredad en Lucena, cerca de Sevilla (A.H.N. Clero, carpeta 3440,
15955 de mayo, Bula de Inocencio III (A.H.N. Clero, carpeta 3440, doc. 25).
doc. 2-n.20). 5 de agosto, documento de Alfonso X. Y el 12 de noviembre se
1 6 1 2
1596Noviembre: Rodrigo Díaz, hijo de Rodrigo Pérez, vende los bienes resuelve la sentencia sobre el pleito que tenía el monasterio con el Con-
y predios que tenía en Carrascosa al monasterio por I60 mrs (I.V.D.J. cejo de Peñafiel por cuestiones de límites, derechos de pasto, corta de
Manuscritos medievales, A.4.6). leña, etc. (A.H.N. Clero, carpeta 3441 docs.I y 2).
En enero de este año, el abad Martín, fray Diego, fray Abril, fray
1 5 9 7 1613 El 24 de junio Martín Jordán realiza un apeo y amojonamiento de
Domingo cantor, fray Miguel sacristán y todo el convento dan en pres- los montes del monasterio en sus límites con los de Peñafiel, por man-
timonio y tenencia el lugar de Valbuena a don Álvar Pérez de Castro y a dato del infante don Fernando (A.H.N. Clero, carpeta 3441, docs.3 y
sus hermanos (A.H.N. Clero, carpeta 3440 doc. 2-n.28; Códices 1484- 4).
B n.25-27; B.R.A.H. Col. Salazar y Castro, 0-7, fols.I03v-I04r). El 28 15 de octubre, Alfonso X ordena amojonar los términos del
1 6 1 4
de noviembre le concede Fernando III un privilegio (A.H.N. Clero, car- monasterio con los de Piñel de Yuso y Piñel de Suso (A.H.N. Clero, car-
peta 3440, doc. 2-n.I7 y doc. 14; I.VD.J. Manuscritos medievales, peta 3441 doc. 6)
A.4.II). I de mayo, documento de Sancho IV (Libro de Privilegios, fols.33v-
1 6 1 5
1598En este año, Rui González de Valverde vende al monasterio todas 34r; I.VD.J. Manuscritos medievales, A.I0.4).
las viñas que tenía en el pago de Valdesgueva, en Piñel de Suso (I.VD.J.
Manuscritos medievales, A.4.I2).
FUNDACIONES MASCULINAS • 299
Domingo, I 2 8 4 6 I 2 8 7 .
I6I IW7 Sancho, I 3 5 0 , I 3 5 9 , I 3 6 0 .
I630 I63t I 632
Pedro, I 2 9 0 8 I 2 9 I , I 2 9 5
I6I I 6 H I 620 . Martín, I 3 7 5 , I 3 7 6 , I 3 7 7 , I 3 8 2 .
I633 I634 I635 I636
Diego , I 3 I 3 , I 3 I 5 .
I623 I624 I 625 Pedro de Valdivieso, I 4 I 6 . I644
Alfonso, I 3 2 I , I 3 2 3 .
I626 I627 Juan de Medina de Pomar, I 4 2 4 , I 4 2 6 . I645 I646
Arias, I 3 2 7 .
I 628 Hernando de Santa Colomba o de Moreruela,
Domingo, I 3 2 9 . I 629 I426 , I428 .
I647 I648
firma privilegios de sus antecesores en 20 de noviembre (A.H.N. Clero, lid el 23 de agosto de I376, tomando posesión de las mismas al día
carpeta 344I, doc. I6) y dos días más tarde confirma los cincuenta cahí- siguiente (A.H.N. Clero, carpeta 344I-bis, doc. 4).
ces de sal de las salinas de Bonilla, la hacienda de Sevilla y eliminando la 1635 El 29 de julio compra unas casas en Valladolid a Pedro y Gonzalo
obligación de sustentar un hombre de armas en Villanueva (A.H.N. López, tomando posesión de ellas el 2 de septiembre (A.H.N. Clero,
Clero, carpeta 344I, doc. I7). carpeta 344I-bis, doc. 5).
1622 Idem. 8 de febrero, privilegio de Fernando IV (A.H.N. Clero, car- Venta de una casa en Valladolid a Juan Martínez, armador de la
1 6 3 6
peta 344I, doc. I8). flota del rey, el 2 de julio. Por entonces era prior, Pedro (A.H.N. Clero,
1623 En el A.H.N. se conserva un documento fragmentado (Clero, car- carpeta 344I-bis, doc. 7, n.3). El 26 de julio el monasterio intercambio
peta 344I, doc. I3), sin fecha, en el que aparece mencionado este abad con Juan Martínez la heredad de Villanueva por doce casas en Vallado-
Diego, quien había comisionado al de Matallana para que actuase en su lid y 4000 mrs. para ciertas obras en el edificio monástico (A.H.N.
nombre en una demanda sobre la visitación de Bonaval. En el reverso Clero, carpeta 344I-bis, doc. 9).
del citado d o c u m e n t o aparece escrito lo siguiente: Si a este Poder no le hubie- El I 7 de septiembre es nombrado por el abad de Cíteaux refor-
1 6 3 7
ran quitado la firma y data, muchas cosas se podrian sacar, pero como no esta autori- mador de los monasterios de la Península Ibérica y del sudeste francés
zado no vale nada. Deste Abbad de Valbuena, fray Diego, no ay memoria en el Cathalogo (CHACÓN GÓMEZ-MONEDERO, I 9 9 5 : doc. 5, 3 2 0 ) .
de Abbades. 1638El 6 de julio, desde Toulouse, nombra al soprior del monasterio
Aparece como testigo una donación que hizo D. Juana al monas-
1 6 2 4 a García de Salabus por espacio de dos años, reformador de los monaste-
terio de Vileña, en 8 de julio (CADIÑANOS BARDECI, I990: I47). rios de Castilla francés (CHACÓN GÓMEZ-MONEDERO, I995: doc. 5,
1625 Testigo en una donación que hizo Mayor Bonifaz al monasterio 320), y como tal actuará dando licencia al abad de Monsalud para efec-
de Vileña en 8 de agosto (Ibidem, I5I). tuar un censo (Ibidem, doc. 6, 320).
1626 Testigo en el testamento de Sancha Gómez de Porres a favor del 1639El 2 I de abril de este año, actúa de testigo en calidad de reforma-
monasterio de Rioseco, el 2 de agosto (CADIÑANOS BARDECI, 2003: dor de la Orden junto al abad de Matallana, en un trueque entre el
doc. 227, 280-28I). monasterio de las Huelgas de Valladolid y Diego López de Zúñiga
22 de febrero de I323. Sentencia de apeo de las casas de Aldea de
1 6 2 7 (Archivo del Monasterio de las Huelgas de Valladolid, arca I, doc. 55).
Villanueva en término de Sevilla, dada por Fernando Ruiz de Castro PÉREZ EMBID-WAMBA, I986: 592, nota n.48. El 23 de febrero Juan
I640
(A.H.N. Clero, carpeta 344I, doc. 20). Fernández vende al monasterio un majuelo en Piñel de Yuso (A.H.N.
1628 El I 2 de enero de este año, como mayordomo que era del monas- Clero, carpeta 344I-bis, doc. I I )
terio de Las Huelgas de Valladolid y procurador de su abadesa y con- Juan II confirma el privilegio de la sal, en 2 de septiembre (A.H.N.
1641
vento, arrienda unas casas a Domingo Muñoz y Juan Vernaite (Archivo Clero, carpeta 344I-bis, doc. I3)
del Monasterio de Las Huelgas de Valladolid, arca 2, doc. II0). Ante- Aprueba una compra realizada por el abad de Matallana al obispo
1642
riormente, el 7 de noviembre de I 3 2 2 le vemos actuando como personero de Segovia (Tumbo de Matallana, fols.72v, 87v, I50r y 238r).
y el I 7 y I9 de febrero y el 4 de diciembre de I326 como mayordomo y Aparece mencionado en un privilegio pontificio de Benedicto XIII,
1643
procurador, aunque no se hace referencia en los documentos (Archivo del de 7 de junio (A.H.N. Clero, carpeta 344I-bis, doc. I4).
Monasterio de Las Huelgas de Valladolid, arca I, docs.38, 5 I y 30, res- Juan López y su mujer Olalla donan una viña en Quintanilla de
1 6 4 4
pectivamente) al cargo que ocupaba por entonces en Valbuena. Abajo (A.H.N. Clero, legajo 7666).
1629 Alfonso XI ordena que la villa de Valbuena pague el yantar al 1645I de abril a I 7 de mayo de I428. Pleito entre Juan de Medina de
monasterio (A.H.N. Clero, carpeta 344I, doc. 22). Pomar y Hernando de Santa Colomba por el abadiato de Valbuena
1630 El I 8 de octubre de este año se presenta ante el vicario general de (A.H.N. Clero, legajo 7659).
Burgos para pedir un traslado de una bula de Bonifacio VIII (Archivo del 1646Idem.
Monasterio de Villamayor de los Montes, Leg.I, doc. 3; pub. por MAR- Idem.
1 6 4 7
viejo monasterio de San Andrés Apóstol de Valbení. Esca- debio ser de monjes negros Benitos pues es 36 años antes que la funda-
sos restos de materiales sueltos (tejas, piedra caliza, ladrillos cion de Cister . Además de ésta recoge el Tumbo otra dona-
1652
macizos y cerámica relacionada con el tipo "Duque de la ción de 7 de septiembre de 1095 por la que Fernando
Victoria", datada entre los siglos XII y XIV) y las noticias Hermíldez o Hermegíldez entregaba una dehesa y solares
proporcionadas por los vecinos de San Martín que sitúan en Villacastín al monasterio de San Andrés de Valbení y a
aquí un "convento de frailes" y señalan la aparición de su abad Juan . 1653
Villua, el 26 de febrero de I I 2 7 . 1655 acabar con esta situación, expulsar a los intrusos y restau-
Desde esta última fecha hasta febrero de I I 6 5 , rar la vida religiosa . Esta labor se vería recompensada
1659
1655 Ibid., IV: 585 (trad. castellana en 2010: 62-63); B.R.A.H., Col. 1658"Turba benignorum fuit olim Valle Benigna
Salazar y Castro, O-8, fol. I47r. Posteriormente, son varios los autores dumque bonos habuit, floruit illa bonis.
que han recogido la existencia de estos documentos o bien simplemente Sunt bona lapsa sibi numero labente bonorum.
aluden a los orígenes benedictinos de Palazuelos —JANAUSCHEK, 1877: Hospita facta malis transit ad omne malum.
159; ANTÓN, 1923 (2): 177; idem, 1942: 205; COTTINEAU, 1935-39: Que modo munda fuit fit sordida, que modo clara
II, 2176; DIMIER, 1949: 114; idem, 1959: 68; VAN DER MEER, 1965: fit nigra, que sana tunc erat egra iacet.
300; VIELVA, 1976: 647 y 648; ÁLVAREZ PALENZUELA, 1978: 118, en Successit facinus pietati, crimen honori,
especial nota 199; VALLEJO DEL BUSTO, 1978: 282; JIMÉNEZ LOZANO, fraus fidei, paci prelia, praua bonis.
1980: 47; DÍEZ ESPINOSA, 1982: 23; ARA GIL, 1986: 21; idem, 2002: Qui timidis securus erat, locus iste timendus
62; CASTÁN LANASPA, 1986: 5; PÉREZ EMBID, 1986: 278, MARTÍNEZ nunc est securis; profuit, ecce nocet.
TOMÉ, 1991: 53; ARA GIL, 1998: 229; CARRERO SANTAMARÍA, 1998 Quem coluere sacri colit execrabilis. Errat
(5); MERINO DE CÁCERES, 1999: 651; idem, 2000: 4; entre otros. Por hic latro, pollutus sanguine, cede nocens"
su parte, LINAGE CONDE, 1973: 452, erróneamente sitúa al monasterio, (PÉREZ RODRÍGUEZ, 2008: 258; trad. castellana en 259).
aunque con interrogantes, en el municipio de Cármenes, lugar de Val- "Predonum rabies excluditur, exulant ensis,
1 6 5 9
verdín (León), si bien en nota escribe: "Cerca de San Martín de Valbení; pristina forma loco, pristina fama redit.
y no lejos de Cabezón de Pisuerga"; confundiéndolo además con el Religionis opes uirtute resuscitat, hornat
monasterio de canónigos regulares de Benevívere (Palencia). quantum paupertas sustinet egra locum" (Ibidem).
1656 Atribuido a Pascual Rustán, compañero de Diego y primer abad del 1660"Firmior est regis libertas facta fauore,
monasterio, por FERNÁNDEZ MARTÍN, 1961: 275-277; idem, 1962: 5 Carta sigillatur uerba fauores habens" (Ibidem).
(al que siguen, entre otros, SALCEDO, 1985: 106-107; idem, 1999: 69- A.H.N., Clero, carpeta 3.439, doc. I; B.R.A.H., Col. Salazar y Cas-
I66I
70; y PÉREZ-EMBID, 2002: 125), las más recientes investigaciones apun- tro, O-8, fol.I35; pub. por GONZÁLEZ, 1960: II, I I 4 - I I 5 ; PÉREZ
tan a que en realidad es obra de un clérigo letrado, tal vez canónigo de RODRÍGUEZ, 2008: 313-314 (vid. Apéndice documental, doc. I). El
San Agustín, dotado de una gran cultura adquirida en ámbitos universi- hecho de que la entrega la haga el rey ha hecho pensar aPÉREZ EMBID,
tarios y que, procedente del norte de Francia o Inglaterra, habría llegado 1986: 278 y a ARA GIL, 1986: 21, que seguramente se trataba de un
a Castilla a raíz del matrimonio de Leonor Plantagenet con Alfonso VIII cenobio de patronato real, algo desde luego nada extraño (sobre este
y entablado relación con Rodrigo Martínez, hermano del fundador. El último punto, vid. LINAGE CONDE, 1991: 34-35). Hacen referencia a
tercer abad de Benevívere, Juan (I206-I22I), le encargaría el poema, este documento, entre otros muchos, además de los arriba citados, MAN-
que realizaría poco antes de la muerte del monarca castellano (PÉREZ RIQUE, 1642-1659: IV 586 (2010: 63); ANTÓN, 1942: 205; GONZÁ-
RODRÍGUEZ, 2008: 186 y 189-193). La versión que utilizamos del LEZ, 1960: I, 513 y 613; FERNÁNDEZ MARTÍN, 1961: 278-279; idem,
poema es la que publica esta investigadora (Ibid., 250-30I). 1962: 23; ALTISENT, 1965: 545; ÁLVAREZ PALENZUELA, 1978: 118-
1657 Sobre la personalidad de Diego Martínez, además de los datos pro- 119; MARTÍNEZ TOMÉ, 1991: 53; ARA GIL, 1998: 229; MERINO DE
porcionados por su Vita, vid. en último término SÁÑCHEZ-PAGÍÑ, 1983; CÁCERES, 2000: 4. Por su parte, DÍEZ ESPINOSA lo fecha en 1164 (1982:
MARTÍÑEZSOPENA, 1985: 398-400; idem, 2003: 53; MARTÍNEZ DÍEZ, 23-24).
1998 (2); SAHELICES, 2005: II9-I20; ALONSO ÁLVAREZ, 2007: 678-
679; Y PÉREZ RODRÍGUEZ, 2008: 25-44.
FUNDACIONES MASCULINAS • 303
monasterio consideran a Diego Martínez abad de San en Santiago de la Tola recibiendo de Ponce de Minerva y
Andrés de Valbení . 1662 Estefanía Ramírez el lugar de Sandoval -tampoco esta vez
En la carta de donación del cenobio consta que se le denomina abad, sino que la donación se hace a Didaco
Alfonso V I I I lo entrega a domno Didego Martini, atque successo- Martini, etfratribus tuis in Christo— , y finalmente en Beneví-
1666
ribus uestris. Aunque en principio el hecho de que se le llame vere, en donde funda una abadía y hospital de peregri-
"domno" puede hacer pensar que se trata del superior de n o s , creemos poder afirmar que estamos ante una
1667
una comunidad o de un grupo de religiosos, lo cierto es empresa de carácter eremítico que hasta que se establece de
que ese tratamiento no es exclusivo de los poseedores de tal modo permanente en un paraje adecuado para los fines per-
título y además tampoco se menciona en ningún momento seguidos y siguiendo una regla y estatutos establecidos tuvo
a que regla está vinculado o qué constituciones sigue ese naturaleza itinerante.
monasterio . Podría creerse entonces que estamos ante la
1663
Ya hemos adelantado cómo el 2 2 de septiembre de
conversión del viejo cenobio en un monasterio familiar o de 1165 Diego Martínez dona junto con el Maestro Pedro el
propios que había pasado a formar parte del patrimonio monasterio de San Andrés de Valbení al abad Guillermo
privado de Diego Martínez y que a su muerte heredarían de Valbuena con la condición de que ordo cisterciensis ibidem
sus descendientes o sucesores . Sin embargo, la Vita Didaci
1664
de tiempo habita en dicho lugar junto a algunos compañe- siguiente este acto se confirma en la villa de San Andrés de
ros llevando una vida comunitaria . Si a esto añadimos el
1665
Valbení, actuando como testigos Martín Pascual, Domingo
hecho de que en el documento de entrega de Valbení al Miguel, Pelayo Pérez, Domingo Vicente, Juan Muñoz y el
monasterio de Valbuena en septiembre de ese mismo año de concejo de dicha villa . 1669
1165 se prescinde de nuevo de atribuir un cargo a Diego Valbení se convierte a partir de entonces y de mano
Martínez -aparece simplemente como domnus didacus marti- de Valbuena en monasterio cisterciense, y así lo considera
nez- y que poco después, en marzo de 1167, le encontramos un elevado número de autores . Otras fuentes, sin 1670
1662 El Tumbo, fol. 2r, señala que Valbení fue entregado por Alfonso VIII importante a la hora de explicar la elección de Valbuena como casa madre
al abadfrai Diego Martinez. P o r su parte, en u n manuscrito conservado en de San Andrés. Sin embargo, otros autores lo creen improbable (PÉREZ
la Biblioteca Nacional de Madrid (mss. 5938, fol.309), que lleva por RODRÍGUEZ, 2008: 38)
título Lafundación del monasterio de Palazuelos se escribe lo siguiente: hizo dona- 1669 A.H.N., Clero, carpeta 3.440, doc. 8; B.R.A.H., Col. Salazar y Cas-
cion el Rey Don Alonso, que en aquella era reynaba, a un Abad llamado Fray Diego Mar- tro, 0-7, fol. 95; con fecha 23 de m a s o de 1165, B.R.A.H., Col. Sala-
tínez del dicho Monesterio con sus términos, era de mil y ducientos y tres. No hay noticia zar y Castro, fol.209, incompleto (PÉREZRODRÍGUEZ, 2008: 314-315;
del origen del dicho Monesterio, mas de que se cree que el dicho Abad fray Diego le vid. Apéndice documental, doc. 2). La Vita Didaci recoge el hecho de este
comenzó, y a su instancia le dotó el dicho Rey Don Alonso. D e esta opinión son modo:
MANRIQUE, 1642-1659: IV 586 (2010: 63-64); ANTÓN, 1923 (2): "Nam uicina sibi fuerat Bona Vallis, ad illam
177; idem, 1 9 4 2 : 2 0 5 ; VALLEJO DEL BUSTO, 1 9 7 8 : 2 8 2 . se facilis transfert uota replere studens.
u n caso semejante lo encontramos en la donación por parte de
1 6 6 3 Cui datus abbatis honor est - Q u a m uexat honoris
Alfonso VII de la villa de Niencebas a la iglesia de Santa María de Yerga pondus! -Willelmo supplicat, orat opem.
y a Durango y sus compañeros que allí vivían el 25 de octubre de 1140 Anuit abbatis Didaco clementia suplex
(vid. el documento en MONTERDE ALBIAC, 1978: 356-357), cuyo carác- oranti, iustas cum uidet esse preces.
ter fundacional y testimonial de la presencia cisterciense en dicho lugar Ergo suis recitat secretum fratibus. Omnes
fue desestimada hace tiempo (vid. lo que se dice a este respecto en la pro pietate stupent et pia uota probant.
introducción histórica general). Non caret assensu tam iusta peticio iusti"
1664 Sobre los monasterios familiares, sigue siendo valioso el trabajo de (PÉREZ RODRÍGUEZ, 2008: 262; trad. castellana en 263)
ORLANDIS, 1 9 5 6 . 1 6 7 0 ANTÓN, 1 9 2 3 (2): 177; idem, 1 9 4 2 : 2 0 5 ; FERNÁNDEZ MARTÍN,
1665 "Quosdam sed paucos, sibi federat equa uoluntas 1961: 279 -lo fecha en noviembre-; idem, 1962: 24; ALTISENT, 1965:
quos doctrinali uoce magister alit. 5 4 5 ; VIELVA, 1 9 7 6 : 6 4 8 ; ÁLVAREZPALENZUELA, 1 9 7 8 : 1 1 8 - 1 1 9 , 2 0 0 ;
(... ) DÍEZ ESPINOSA, 1982: 23-24; SALCEDO, 1985: 106-107; ARA GIL,
templa renascuntur, redditur ara Deo" 1986: 21, 1165; idem, 1998: 229; idem, 2002: 62; GONZÁLEZ DÍEZ,
(PÉREZ RODRÍGUEZ, 2008: 260; trad. castellana en 261). 1986: 56; PÉREZEMBID, 1986: 2 7 1 y 2 7 9 ; MARTÍNEZTOMÉ, 1991: 53;
1 6 6 6 CASTÁN LANASPA, 1 9 8 1 : 4 5 . VALLEJO, 1995: 60-61 (no obstante, este autor señala erróneamente a
1667 Este itinerario aparece descrito en el poema biográfico al que nos Alfonso Téllez como fundador del monasterio); CARRERO SANTAMARÍA,
venimos refiriendo. Respecto a su paso por Sandoval, vid. la monogra- 1998 (5); MERINO DE CÁCERES, 1999: 651; idem, 2000: 4; GARCÍA
fía de la Espina. GUINEA, 2001: 21 (si bien sostiene erróneamente que fue fundado por
1668 Este magister petrus ha sido identificado con Pedro Fernández, hijo los Téllez de Meneses); SENRA, 2002: 187; ALONSO ÁLVAREZ, 2007:
de Fernando García de Hita y de Estefanía Armengol y primer maestre 6 7 9 ; FORTÚN, 2 0 0 7 : 35. P o r su parte, en Monumentos españoles, 1 8 9 4 -
de la Orden de Santiago (FERNÁNDEZ MARTÍN, 1962: 23 nota 20; 1987: III, 225, se apunta sin más que Valbení aceptó la reforma cister-
CANAL SÁNCHEZ PAGÍN, 1 9 8 4 : 53, 56, 6 1 y 62), lo cual sería u n factor ciense entre 1165 y 1176.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
304
embargo, han situado su afiliación —pues se trata de este en realidad estábamos ante una confirmación o ratificación
procedimiento de incorporación a la Orden— , en 1671 de la ofrecida por el mismo monarca en I I 6 6 , pero en esta
I I 5 3 , I I 6 4 o en 1169, opción esta última desesti-
1672 1 6 7 3 ocasión al propio abad de Valbení . Y tal vez pudiera ser
1678
mada ya hace años por Álvarez Palenzuela . 1674 así: la escasez de documentos conservados de esta época
El 22 de febrero de 1166 estando Alfonso VIII en sólo nos ha permitido averiguar que en 1173 el abad Gar-
Ávila, se dirige al abad Guillermo de Valbuena y le ratifica cía recibía de los hermanos Gutierre y Rodrigo Pérez todo
la posesión de San Andrés de Valbení con todas sus perte- lo que poseían en Santa Eulalia y que el 14 de mayo de
1679
cripción del monasterio a la Orden Cisterciense y todas sus efecto este último bien podía ostentar aquel cargo ya en
posesiones, aunque en esta ocasión el destinatario tal vez II75 . 1681
1671 Sobre las diferencias entre afiliación y fundación ex-novo, vid. blemas de datación en el mes y día: ÁLTISENT, 1965: 546-547, baraja las
VALLE PÉREZ, 1982: I, 16. distintas posibilidades que se pueden dar para la fecha VII nonas octubris:
1672 Esta fecha es recogida en un catálogo de fundaciones perteneciente 25 septiembre y I, 2, 7 u 8 de octubre; por su parte MANRIQUE, 1642-
al monasterio de Veruela y que data del siglo XV (TÓRNÉ CUBELLS, 1996 1659: II, 431 se decide por la primera, mientras que GONZÁLEZ, 1960:
(2): 853). II, 393 y ÁLVAREZ PALENZUELA, 1978: 120 nota 207 aceptan la del 2
1673 JÓNGELIN, 1640: VI, 7. Curiosamente este autor denomina al de octubre.
monasterio "San Andrés de Palazuelos". 1677 MANRIQUE, 1642-1659: II, 431 -aunque en IV 586 (2010: 65),
1674 La fuente más antigua que ofrece esta fecha es la lista cronológica apunta la posibilidad de que no se refiera al General, ya que en estas
de fundaciones que se leyó en el capitulo provincial celebrado en Valpa- fechas lo era Alejandro de Colonia— (en el catálogo de abades generales
raíso en 1531 y recogida en el Tumbo de dicho monasterio (YÁÑEZ publicado por MASOLIVER, 1988: 178, consta que el abadiato de Ale-
NEÍRA, 1957: 165). Posteriormente Manrique aunque sitúa en un pri- jandro de Colonia se desarrolló entre noviembre de 1168 y el 28 de julio
mer momento la adscripción a la Orden en 1166 basándose en una con- de 1178); JANAUSCHEK, 1877: 159, quien añade a continuación del
firmación de Alfonso VIII de la donación a Valbuena —arriba en el texto nombre del prelado un interrogante; FERNÁNDEZ MARTÍN, 1962: 24;
volveremos sobre este documento— (1642-1659: II, 431; y IV 586), VIELVA, 1976: 648; JIMÉNEZ LOZANO, 1980: 47; DÍEZ ESPINOSA, 1982:
posteriormente corrige la data y fija aquél hecho en 1169, asegurando 24; ARA GIL, 1986: 21, 1165; ARA GIL, 1998: 229; idem, 2002: 62;
que por motivos que se desconocen se retrasó el envío de monjes desde GONZÁLEZ DÍEZ, 1986: 57; MERINO DE CÁCERES, 2000: 572; RUC-
Valbuena (1642-1659: II, 486). Le siguen, JANAUSCHEK, 1877: 159; QUOI, 2000: 500; SENRA, 2002: 187; TORRE YUBERO, 2009: 55; por
COTTINEAU, 1935-1939: II, 2176; DIMIER, 1949: 144; idem, 1959: citar solamente algunos.
68; TIJBURG, 1953: 87; idem, 1964: 88; EYDOUX, 1954: 174; GONZÁ- De otro lado, ÁNTÓN fecha este supuesto acontecimiento en 1176
LEZ, 1960: I, 513; COCHERIL, 1963: 949; idem, 1964: 235 y 285; (1923 (2): 177-178; 1942: 206); y siguen su propuesta cronológica
TYGBURG, 1953: 187; idem, 1964: 88; VAN DER MEER, 1965: 300; VIELVA, 1976: 648; VALLEJO DEL BUSTO, 1978: 282; y MARTÍNEZ
MORAL, 1973 (2): 1616; DÍEZ ESPINOSA, 1982: 24; y MASOLIVER, TOMÉ, 1991: 54.
1987: 521; MERINO DE CÁCERES, 2000: 5 (con fecha I de marzo); 1678 ALTISENT, 1965: 547. ÁLVAREZ PALENZUELA, 1978: 120 y 200,
TORRE YUBERO, 2009: 55; entre otros. Por su parte, ÁLVAREZ PALEN- alude igualmente al carácter confirmatorio del instrumento, pero nada
ZUELA, 1978: 118, 119 y 200, rechaza esta cronología. dice del abad Juan.
1675 B.R.A.H., Col. Salazar y Castro, 0-8, fol.I35v-I36; pub. por 1679 A.H.N., Clero, carpeta 3.439, doc. 2; Tumbo, fol.4v.
MANRIQUE, 1642-1659: II, 431; GONZÁLEZ, 1960: II, I 3 I - I 3 3 ; 1680 A.H.N., Clero, carpeta 3.440, doc. 6.
PÉREZ RODRÍGUEZ, 2008: 316-317; Tumbo, 2r. Contrariamente a lo que 1681 MANRIQUE, IV: 586 coloca como sucesor del abad García a Juan.
tradicionalmente se había pensado (vid. nota anterior), ÁLTISENT, 1965: Pero no debemos dejar de lado otro posible destinatario, el abad de Val-
545 señaló que este documento era en realidad una confirmación en buena. El mismo MANRIQUE (Ibidem) señala que tal vez el destinatario
forma de donación. fuera de nuevo éste. Respecto a esta suposición, debemos indicar que en
1676 B.R.A.H., Col. Salazar y Castro, 0-7, fol.95; 0-8, fols.I4I-I42; 1172 ocupaba ese cargo Pedro y en 1183 Juan (vid. el abadologio de este
Archivo del monasterio de Poblet, armario I, caja 30; pub. por GONZÁ- monasterio en su monografía), de ahí que también éste podía haber sido
LEZ, 1960: II, 393-394; ALTISENT, 1965: 548; extracto en MANRIQUE, el receptor del documento, aunque nos decantamos por la opción de
1642-1659: II, 431; cit. en Tumbo, fol. 2v. Este documento presenta pro- Palazuelos.
FUNDACIONES MASCULINAS • 305
llana y Rioseco había depuesto a sus respectivos Por lo que se refiere al sector nobiliario y de los veci-
abades . I682 nos cercanos, éste fue más pródigo en beneficiar al monas-
- En julio de I 2 9 5 Domingo Juan y su mujer donan terio. En I I 7 3 Gutierre y Rodrigo Pérez donan todo lo
al abad Andrés todo lo que poseían en Villavelasco que poseen en Santa Eulalia ; en mayo de I I 7 9 Fernando
I690
al tiempo que mandan enterrarse en el monasterio. Ruiz dona después de su muerte una heredad en Quiño-
E n el documento se explicita que rogamos al Abad de nes, dos yuntas de bueyes, cien ovejas y tres moros, a cam-
Valbuena que pusiesse en estas cartas su seello, lo que sugiere bio de lo cual el monasterio aportaría a la explotación dos
una ratificación de la aceptación de los bienes dona- yuntas de bueyes, repartiéndose hasta la muerte del donante
dos por parte del abad padre . I683 la mitad de los beneficios ; en I I 9 9 Sancha Rodríguez,
I69I
nombra al prior de Valbuena, fray Alonso, abad de Ramiro Gil y su mujer María Rodríguez entregan la here-
Palazuelos, filialium nostrarum medietatem, por muerte dad de Santa Eulalia, desde el Pisuerga hasta la iglesia de
del anterior abad . I684
A las confirmación de 1175 arriba referenciada fue la efectuada por el noble Alfonso Téllez en I 2 I 3 .
siguieron tres privilegios del mismo monarca consistentes
en dispensas del pago de diversos impuestos pero, al menos
que conozcamos, no efectuó ninguna donación de hereda- De Valbení a Palazuelos
des, pozos de sal o cualquier otra propiedad o derechos de Alfonso Téllez, hijo de Don Tello Pérez y de Gon-
pasto y corta que incrementasen el patrimonio del monas- troda García, fue II Señor de Meneses y I de Alburquer-
terio, como sucedió con otros muchos monasterios . Así, I685
que, además de gobernador de Valladolid y ostentar el
en I I 8 9 le exime del pago de portazgo y alcabala por las señorío de diversas villas del entorno vallisoletano, como
cosas que comprara o vendiera ; el 9 de mayo de I 2 0 I
I686
Cabezón, Tudela, Portillo o San R o m á n . Su brillante I695
excusa de pagar impuestos a los vasallos de la villa de San actuación al lado del monarca en la batalla de las Navas de
Miguel ; y el I 7 de febrero de I 2 0 5 libra a las casas que
I687
Tolosa motivó que Alfonso VIII les entregase a él, su dilecto
tiene en Valladolid . I688
etfideli vassallo, y a su segunda mujer Teresa Sánchez —hija de
La intervención del papado también contribuyó a Sancho I de Portugal—, la villa de Palazuelos el 28 de julio
consolidar su patrimonio, y el I 3 de enero de I I 8 6 urbano de I 2 I 3 . Unos días más tarde, el I de agosto, el suso-
I 6 9 6
III tomaba bajo su protección al monasterio y confirma al dicho matrimonio acompañado por sus hijos y con el bene-
abad Martín todas sus propiedades . I689 plácito del rey y del obispo de Palencia, su hermano Tello,
1682CANIVEZ, I933-I94I: III, año I270, def.45, 88-89. 1688 B.R.A.H., Col. Salazar y Castro, O-8, fols.I39v-I40r; pub. GON-
1683Vid. nota I73I. ZÁLEZ, I 9 6 0 : III, 3 4 9 - 3 5 0 ; . Tumbo, fol.7r.
1684A.H.N., Clero, carpeta 3.432, doc. 7; cit. PÉREZ-EMBID, I986: 1689A.H.N., Clero, carpeta 3.439, doc. 4; Tumbo, fol.I5r-I5v. ÁLVAREZ
588. El autor del Tumbo, al hacer la regesta de este documento señala; ... PALENZUELA, I978: lo fecha el día I, aunque en el documento se expresa
y entiendo hera en tiempo que estava este monasterio sujeto al monasterio de balbuena por- claramente la data "idus de enero", es decir, I3 de dicho mes.
que fue el año de mill y trecientos y setenta y seis (fol.I7v). 1690A.H.N., Clero, carpeta 3.439, doc. 2; Tumbo, fol.4v.
1685En I I 7 5 contaba con las villas de San Andrés de Valbení, Muño A.H.N., Clero, carpeta 3.439, doc. 3; Tumbo, fol.4v.
I6Í!I
Rubio, San Martín, Fuentetaja y las iglesias de San Pedro de Quiñones, 1692B.R.A.H., Col. Salazar y Castro, O-8, fols.I47v-I48r.
San Vicente de Aranca, Axevella, Piña, San Emiliano en Duero, Santiago 1693A.H.N., Clero, carpeta 3.439, doc. 7; Tumbo, fol.4v.
del Monte y Santa María de Vellosillo, entre otras propiedades. El tra- 1694A.H.N., Clero, carpeta 3.439, doc. 5.
bajo de DÍEZ ESPINOSA, I982 es el único estudio monográfico dedi- Sobre don Tello y su familia, vid. GONZÁLEZ, I960: I, 349-35I;
I695
cado a la historia del dominio de Valbení-Palazuelos. A ello hay que MOXÓ, I969: 66-72; ARAGIL, I977: II-I3;PÉREZEMBID, I986: 339
añadir las noticias proporcionadas por BRAÑA, I903-I904: 296 nota notas 26 y 27; SALCEDO, I985: 93 y ss; idem, I999: I20 y ss; etc.
3; ANTÓN, I942: 205-208; ÁLVAREZ PALENZUELA, I978: I20 y 200- I696A.H.N., Clero, carpeta 3.430, doc. 7; B.R.A.H., Col. Salazar y Cas-
2 0 4 ; PÉREZ EMBID, I 9 8 6 : diversas páginas; REGLERO DE LA FUENTE, tro, D-I6, fol.52; pub. MANRIQUE, I642-I659: IV 30; y GONZÁLEZ,
I993: I69-I7I; o MERINO DE CÁCERES, 2000: 7-I0. I960: III, 587-588); Tumbo, fol.3r. En B.R.A.H., Col. Salazar y Castro,
1 6 8 6 Tumbo, fol.7r O-8, fols.I45-I46, lleva erróneamente la fecha de 28 de julio de I2I2.
B.R.A.H., Col. Salazar y Castro, O-8, fol.I46; pub. GONZÁLEZ,
1687
N o es Valbení el único monasterio cisterciense his- en este último caso el cambio de emplazamiento por moti-
pano al que se le dona un terreno que, pasado algún vos de salubridad . 1702
1697A.H.N., Clero, carpeta 3.434, doc. 16 —inserto en confirmación (GARCÍA Y SAINZ DE BARANDA, 1 9 6 2 : 55, con fecha 2 3 de m a z o ; CADI-
de Felipe V—; B.R.A.H., Col. Salazar y Castro, D-I6, fol.44 —incom- ÑANOS BARDECI, 2 0 0 3 : doc. 22, 127). E n 1 2 0 3 ya estaban avanzados
pleto—; pub. por MANRIQUE, 1642-1659: IV 30 (vid. Apéndice docu- los preparativos para un nuevo traslado. En una donación hecha por
mental, doc. 3). Según un manuscrito conservado en la Biblioteca Gutierre Dieguez y su mujer Elvira al abad Miguel de San Cipriano de
Nacional de Madrid (Mss. 5.938, fol.309) que lleva por título La fun- Montes de Oca, de una heredad en Rioseco, se dice que se hace ut tibí
dación del monasterio de Palazuelos, se escribe lo siguiente: Despues era de mil y faciatis abbaciam, de ordine vestro, sicuti permisere predecessores vestri (...) De fratribus
ducientos y cincuenta y uno a peticion de Don Alonso Tello de Meneses, se paso de alli a vestris de manu nostra, ut con consilio nostro, serviat ad opus eclesie, ubi nobis jusum
donde aora está, que es en la Rivera de Pisuerga, cerca del Lugar de Cabezón, hizo el Rey fuerit (GARCÍAYSAINZ DE BARANDA, 1 9 6 3 : 5 0 8 ; CADIÑANOS BARDECI,
Don Alonso donación al dicho Don Alonso Tello, de la villa de Palazuelos y el la dató a 2003: doc. 73, 163-164). Al año siguiente ya estaban en Rioseco, y en
este Monasterio con sus términos y otras cosas (vid. Apéndice documental, doc. 1207 el Capítulo General enviaba al abad de Morimond para investigar
4). las causas del traslado, que se había realizado sin permiso del Capítulo
Recogen estas fechas —aunque en ocasiones expresan únicamente el año—, (ÁLVAREZ PALENZUELA, 1978: 128 y 130). De nuevo en torno a 1235,
el Tumbo, fols.3v-4r; MANRIQUE, 1642-1659: IV 30 y 587-588; tras una tempestad ocurrida en 1216, reciben permiso del Capitulo
JANAUSCHEK, 1 8 7 7 : 159; ORTEGA RUBIO, 1 8 9 5 : 2 1 7 ; ANTÓN, 1 9 2 3 General para trasladarse al que será su asentamiento definitivo (Ibidem:
( 2 ) : 1 7 8 ; idem, 1 9 4 2 : 2 0 6 ; LAMBERT, 1 9 3 1 : 2 6 y 2 6 6 ; GONZÁLEZ, 131; CADIÑANOS BARDECI, 2 0 0 3 : doc. 153, 2 2 1 ) . V i d . también ÁLVA-
1 9 6 0 : 3 5 0 y 3 5 1 ; URREA FERNÁNDEZ, 1 9 7 4 : 5 8 ; ÁLVAREZ PALEN- REZ PALENZUELA, 1978: 35 nota 97 y 124-132; SÁENZTERREROS,
ZUELA, 1 9 7 8 : 2 0 3 - 2 0 4 ; VALLEJO DEL BUSTO, 1 9 7 8 : 2 8 3 ; ARA GIL, 1979: 3 1 7 - 3 2 2 ; PÉREZ-EMBID, 1986: 2 7 3 ; CADIÑANOS BARDECI, 1999:
1977: II; idem, 1986: 21; idem, 1998: 229; GONZÁLEZDÍEZ, 1986: 329-335; idem, 2003: 21-27.
5 7 ; MARTÍNEZ TOMÉ, 1 9 9 1 : 5 4 ; SALCEDO, 1 9 8 5 : 1 5 3 ; idem, 1 9 9 9 : El 20 de agosto de I I 8 I Diego Jiménez y su mujer Guiomar donan
1700
138-139; REGLERO DE LA FUENTE, 1993: 116 y 169 nota 88; idem, al monasterio de Santa María de Rute y a su abad Lamberto el de San
1 9 9 8 : 1 9 3 - 1 9 4 ; HERRERO MARCOS, 1 9 9 7 : 142; y CARRERO SANTA- Prudencio con una condición: Ademas desto queremos que essa abadia y convento
MARÍA, 1998 (4): 332; MERINO DE CÁCERES, 2000: 5; entre otros. Erró- se passe y se establezca en aquel lugar donde creemos que descansa el cuerpo de San Pru-
neamente QUADRADO (1885: 199) apunta que es en este momento dencio confessor (pub. p o r GARCÍA TURZA, 1 9 9 2 : 5 6 - 5 7 ) . La m u d a n z a se
cuando se produce, aprovechando el traslado al nuevo emplazamiento, la hizo rápida, por cuanto el 14 de febrero del año siguiente el abad de San
adscripción a la orden cisterciense. Cipriano de Montes de o c a vende a Lamberto abbad de San Prudencio una
1698 Benavides, Fitero, Huerta, Monsalud, Benavides o Herrera sufrie- heredad en Villamediana (Ibidem: 57-58).
ron estos cambios de asentamiento. Para llevar a cabo un traslado en un En diciembre de I I 8 I Alfonso II vendió al monasterio de Junce-
1 7 0 1
principio se requería tan sólo la autorización del abad-padre, y así consta rías la villa y el castillo de Escatrón (pub. por CONTEL BAREA, 1966:
en los estatutos del Capítulo General de 1152: "Licet tamen alicui abbati 154-155), y en mayo del año siguiente confirmaba su propiedad seña-
pro aliqua incommoditate intolerabili, consilio et assentu patris abbatis, lando que la hacía ut construatur et edificetur ibi monasterium ad honorem Dei et
abbatiam suam ad locum magis idoneum transferre" (WADDELL, 1999: beate Marie secundum forman et institutionem sancte religionis cisterciensis ordines (... )
364 y 492), aunque a partir de 1215 se necesitará del consentimiento Interim auten quosque transferatur monasterio in supradicto loco, in monasterio sancte
del Capítulo General: "Abbatiarum transmutatio vel commutatio nun- Marie de lunceria, quatuor sacerdotes celebrent missa pro me (Ibid: 1 5 4 - 1 5 5 ) . E n
quam fiet nisi de licentia Capituli generalis" (CANIVEZ, I933-I94I: I, 1202 se inaugura el monasterio de Rueda, a donde se traslada parte de
año I2I5, def.66, 448). Pero es en los Instituta en donde se permite el la comunidad de Juncerías. En 1225 este último está prácticamente aban-
traslado a otro lugar que ha sido donado a una comunidad con ese fin: donado (vid. CONTEL BAREA, 1966: 85-86; idem, 1987: 123-124;
"Si clerici vel laici locum aliquem ad honorem dei construxerint, illum- idem, 1999: 56-58; MARTÍÑEZBUÉÑAGA, 1998: 187-189).
que locum alicui cenobiorum nostrorum quatinus ad abbatiam transfe- El 2 de noviembre de 1232 Fernando III trasladaba al abad y mon-
1702
rendam profitiat concedere volverint, abbasque illius cenobii a quo jes del monasterio de Bellofonte, quod Pekasgeneraliter apellatur, al que había
consultum flagitant, locum habilem prospexerit, suscipiat illum si vol- mandado construir en el lugar de Valparaíso a causa de inaequaelitatem loci,
verit" (WADDELL, 1999: 334, XXIII). Sobre estos aspectos, vid. et aeris distemperantiasgraves corporum aegritudines (LERA MAILLO, 1 9 9 8 : 5 y
AUBERT, 1947: I, 85; KINDER, 1998: 81; y especialmente DONKIN, 1959 46-47); no obstante, en documentos de 1230 y 1231 se habla ya del
y ÁLVAREZ PALENZUELA, 1 9 7 8 : 2 5 1 - 2 5 8 . monasterio Vallis Paradisi, quod difitur Peleias (Ibidem: 4 4 - 4 5 ) , que nos hacen
1699En diciembre de 1180 Gonzalo Pérez y su esposa donaban San pensar que el instrumento de I232 constituye la certificación solemne
Cipriano de Montes de Oca al monasterio de Quintanajuar para que de un acto iniciado con anterioridad. La tradición de Santes Creus y la
mutent se adpredictum locum Sancti Cipriani etfaciant ibi caput abadie in perpetuum... historiografía que se ha ocupado del mismo también han señalado que
(GARCÍAYSAIÑZDEBARANDA, 1962 (2): 325-326, con fecha de 1186. el lugar de Ancosa fue donado al monasterio de Valldaura para remediar
Anteriormente, en I960: 338, lo fecha en 3I de enero de I I 7 I ; sobre los inconvenientes de su emplazamiento, más la documentación conser-
la cronología de este documento, vid. ÁLVAREZ PALENZUELA, 1978: 35 vada nada dice al respecto (FORT I COGUL, 1973: 31). Por otro lado,
nota 97 y 125; por su parte, CADIÑANOSBARDECI, 2003: doc. 32, 134- DIMIER, 1948: 60, recoge el caso de la abadía de Franqueveaux (Fran-
I35, lo fecha ca.II82). Cinco años antes, el 20 de febrero de II75, cia), a la que el Capítulo General de 1262 permite el traslado a causa de
Alfonso VIII al tiempo que les confirmaba unas propiedades prometía la intolerable corrupción del aire que allí se respiraba.
donarles otras si monasterium vestrum sicut dicitis in Castella Veteri mutaveritis
FUNDACIONES MASCULINAS • 307
Pero ¿cuándo se produjo el traslado al nuevo asenta- tólicas en las que no se haga mención a la Orden
miento? Algunos autores lo han situado el mismo año de la cisterciense . 1710
de Pala¡uelos totusque conventus otorgan fuero a los habi- cabo en 1217 con García Martínez y su mujer María
tantes de la villa de Palazuelos . 1707
Pérez , el monasterio no recibe de manos de particulares
1712
- En 1229 el Capítulo General concede al "Abbati de ninguna otra propiedad durante la primera mitad del siglo
placiol in Hispania" y a los restantes monasterios XIII. Los monarcas en cambio le concederán importantes
situados a la izquierda del Pisuerga autorización privilegios.
para acudir a sus reuniones cada tres años . 1708
Enrique I, además de restituir la mitad de la villa de
- El 19 de mayo de 1231 Fernando III confirma al Quiñones siguiendo las mandas testamentarias de Alfonso
abbas et monachi Sancte Marie de Palaciolos la exención del V I I I , le confirma en 1216 la exención de portazgo que
1713
pago de tributos por las casas de Valladolid pero le había dado su padre de lo que comprasen o vendiesen y 1714
vilegio dirigido al Abbati et conuenti de palatiolis, por el nando III le otorgará nuevas dispensas: el 29 de enero de
cual éste no puede ser obligado a acatar letras apos- 1218, estando en Molina, le concede libertad de pastos en
exención de pecho y otros tributos a las casas que tenía en zález Girón, viuda de Juan Alonso de Meneses, Señor de
Valladolid, pero prohibiéndole adquirir más casas en dicha Alburquerque, y sus hijos Rodrigo Yáñez, Gonzalo Yáñez
ciudad . I7I8
y Tello Alfonso, donaban la pesquera de Gozón ; el 4 de 1728
Ya mediada la centuria, Alfonso X otorgará a Pala- abril de 1284 Rui Gómez de Camargo se comprometía a
zuelos, Matallana, Valbuena y La Espina un privilegio con- entregar I 5 0 0 mrs. anuales a cambio de una misa diaria y
junto: el 16 de junio de 1259 les exime del pago de mula y un aniversario anual el día que muera, por él, por su primera
vaso a los adelantados y merinos . Por su parte Sancho
1719
mujer Toda López ya difunta y por la segunda Urraca Fer-
IV, el 3 de mayo de I384, le libera de todo pecho y pedido nández, delante del altar dedicado a Santa Catalina que
así como de la ayuda que había pedido para ir a la frontera manda construir ; el 15 de junio de 1285 recibía de Mar-
1729
por ruego de doña maria la Reyna mi muger por que me dixo que su tín Alfonso Téllez todo lo que éste tenía en Quiñones,
madre yafe enterrada en el monesterio de palafuelos . Y el 8 d eI720
Villavelasco y G o z ó n ; el 10 de julio de 1295 Domingo
1730
marzo de 1294 manda a los merinos de Campos no pren- Juan, criado de la reina Isabel de Aragón, dona todo lo que
der a sus vasallos, ni sus ganados, etc, sin que haya causa tiene en Villavelasco ; el I de agosto de 1313 Doña
1731
niones que sobre la tutoría del monarca tuvieron su abuela N o obstante, el monasterio se había visto envuelto en
María de Molina y sus tíos los infantes Pedro y Juan . 1726 pleitos desde comienzos del siglo XIII por cuestiones de
1716A.H.N., Clero, carpeta 3.439, doc. 12; pub. GONZÁLEZ, 1983: II, salvo cuando vaya el rey personalmente a comer (A.H.N., Clero, carpeta
27-28). Tumbo, fol.7v. 3.431, doc. 18; Tumbo, fol.8r.); 1331, diciembre, 31. Valladolid. Con-
1717A.H.N., Clero, carpeta 3.430, doc. II; B.R.A.H., Col. Salazar y firma los privilegios reales de sus antecesores (A.H.N., Clero, carpeta
Castro, 0-8, fols.I43-I44v; pub. GONZÁLEZ, 1983: III, 152-154; 3.432, doc. I; Tumbo, fol.I0v.); 1332, enero, 16. Alfonso XI confirma el
Tumbo, fol.7v. privilegio otorgado por su bisabuelo a los abades de Palazuelos, Val-
1718A.H.N., Clero, carpeta 3.430, doc. 9; pub. GONZÁLEZ, 1983: II, buena, La Espina y Matallana de no pagar tributos a adelantados ni meri-
387-389. nos (A.H.N., Clero, carpeta 3.432, doc. 2.); 1333, febrero, I. Exime a
1719Vid. monografía de Matallana. los vasallos del monasterio, que no podían exceder de veinte, de todos los
1720A.H.N., Clero, carpeta 3.431, doc. 2; Tumbo, fol.8r. pechos y derechos salvo el de moneda forera (en confirmación de Pedro
1721A.H.N., Clero, carpeta 3.431, doc. 7; Tumbo, fol.8r. I de 17 de septiembre de 1351).
I282, abril, 20: exención de demanda de mula, asno o dinero por
1 7 2 2 1725 1 3 1 3, diciembre, 22. Valladolid. Reduce la cabeza de pecho a los
parte de los merinos (A.H.N., Clero, carpeta 3.431, doc. 2); 6 de diciem- pobladores de la granja de Palazuelos (A.H.N., Clero, carpeta 3.431,
bre de I 2 8 4 , Valladolid, por ruego de la reyna doña maria mi mujer e por que su doc. 16; Tumbo, fol,8r.).
madre yafe enterrada en este monesterio, todas las mercedes que sus antecesores Aluden a este acontecimiento ORTEGA RUBIO, 1895: 217-218;
1726
y él mismo cuando era infante le habían otorgado (A.H.N., Clero, car- ANTÓN, 1923 (2): 179; idem, 1942: 207; VIELVA, 1976: 648-649;
peta 3.431, doc. 3; Tumbo, fol.I0r), siendo convertido en privilegio en DÍEZ ESPINOSA, 1 9 8 2 : 14, 5 8 y 80.
1288 (Tumbo, fol.I0r.); 27 de abril de 1288, Valladolid, confirma el Erróneamente ÁLVAREZ PALENZUELA, 1978: 2 0 3 apunta que a par-
1 7 2 7
documento anterior (A.H.N., Clero, carpeta 3.431, doc. 4). tir de 1219 no se conocen más donaciones. DÍEZ ESPINOSA, 1982: 33
1723 1298, enero, 4. Confirma el privilegio de Sancho IV de 1288 y 42, también comenta cómo entre I225 y I285 no hay donaciones.
(A.H.N., Clero, carpeta 3.431, doc. 9; Tumbo, fol.I0v.); 1298, enero, 10. 1728 B.R.A.H., Col. Salazar y Castro, M-6I, fols.I29v-I30r.
Valladolid. Confirma los privilegios y mercedes concedidas al monaste- 1729 A.H.N., Clero, carpeta 3.431, doc. I; Tumbo, fols.5r. y 46.
rio, según las gozaba en tiempos de Sancho IV (A.H.N., Clero, carpeta Tumbo d e L a Espina, f o l . 6 7 v - n . I 0 4 ; p u b . p o r RODRÍGUEZ DE
1 7 3 0
3.431, doc. 10; Tumbo, fol.I0r; pub. por BENAVIDES, 1860: II, 152-153). DIEGO, 1 9 8 2 : 2 1 0 .
Valladolid. Confirma el privilegio de Fernando IV sobre el pago de
1 7 2 4 1731 B.R.A.H., Col. Salazar y Castro, M-6I, fols. I30r-I3Iv.
los vasallos del monasterio excepto la moneda forera (GONZÁLEZ 1732 A.H.N., Clero, carpeta 3.431, doc. 15.
CRESPO, 1985: 108); 1329, junio, 10. Madrid. confirma los privilegios 1733 B.R.A.H., Col. Salazar y Castro, D-I6, fol.72; M-6I, fols. I28v-
de Fernando IV y Sancho IV de exención de pecho, pedido o yantar, 129.
FUNDACIONES MASCULINAS • 309
para confirmar los privilegios concedidos por sus antece- años más tarde, el I 4 de septiembre de I434, el abad de
sores: Pedro I , Enrique I I , Juan I , Enrique I I I
I738 I739 I740 I74J
Cíteaux concedía a Martín de Vargas la facultad de visitar,
reformar, corregir y llegado el caso destituir y nombrar aba-
y Juan I I . I742
llevada a cabo hacia I376-77 por la que entrega la mitad de Valbuena recibía de Roma privilegios que reconocían su
Villavelasco y la mitad de sus términos, pastos, prados y nueva situación e iban consolidando la reforma, aunque en
I743 otros limitaba el alcance de las exenciones concedidas
1734 En una fecha indeterminada pero posterior a I22I, por cuestiones DÍAZMARTÍN, I997-99: I, 287-290); I35I, noviembre, 6. Cortes de
de diezmos sobre las iglesias de Gozón, San Martín de Muedra, Santa Valladolid: libera a sus vasallos del monasterio de pechos y derechos
María de Quiñones, Santa María de Boada y San Miguel de Valbení, se salvo de moneda forera (A.H.N., Clero, carpeta 3.432, doc. 4; pub. por
acuerda que actúen como árbitros los abades Pedro de La Espina, Jordán DÍAZMARTÍN, I 9 9 7 - 9 9 : II, 2 7 9 ; Tumbo, fol.I0v).
de Valbuena y el Arcediano de Campos (A.H.N., Clero, carpeta 3.439, 1739 I37I, septiembre, I5. Confirma todas las donaciones y privilegios
doc. I3). del monasterio (A.H.N., Clero, carpeta 3.432, doc. 6); I374, junio, I9.
1735 El 25 de agosto de I 2 7 7 llegan a un acuerdo con el monasterio exención del pago de tributos a cinco de sus vasallos (Tumbo, fol.8v).
palentino sobre las pesqueras del Pisuerga en Aguilar y Rayuela (A.H.N., 1740 I379, agosto, I0. Confirmación del privilegio de Enrique II de
Clero, carpeta 3.430, doc. I7). I374 (A.H.N., Clero, carpeta 3.432, doc. 8; Tumbo, fol.8v). En esa misma
E l 24 de febrero de I 2 9 I el abad Alvaro toma información con el
I736 fecha confirma otros dos: la exención del pago de mula, vaso y yantar a
concejo de Fuentetaja a fin de averiguar cuáles eran las tierras del monas- Valbuena, La Espina, Matallana y Palazuelos (A.H.N., Sigilografía,
terio y cuáles las de Juan Peña y Fernán Ruiz (A.H.N., Clero, carpeta 2 0 / I 8 ; Tumbo, fol.8v.) y el de pecho, pedido y yantar otorgado por San-
3.43I, doc. 6); El I 5 de abril de I 3 I 2 Rodrigo Álvarez de las Asturias cho IV en I 2 8 4 (A.H.N., Clero, carpeta 3.432, doc. I0. Tumbo, fol.I0v-
renuncia al pleito que tiene con el monasterio sobre la propiedad de IIr.). En I389 concede las alcabalas y pechos reales de la villa de
algunos bienes en Villavelasco (B.R.A.H., Col. Salazar y Castro, M-6I, Palazuelos (Tumbo, fol.8v).
fol.I32). 1 7 4 1I392, febrero, 20. Confirma los privilegios de sus antecesores
DÍEZ ESPINOSA, I982: 30. I274, mayo, I2. Palencia. Se da en prés-
1 7 3 7 (A.H.N., Clero, carpeta 3.432, doc. I I ) . I40I, mayo, I5. Confirma el
tamo al clérigo García Gutiérrez, mientras viva, la casa de San Millán, a privilegio de exención a los vasallos del monasterio de pechos y dere-
orilla del Duero junto a Peñalba, a cambio de 800 mrs. (A.H.N., Clero, chos salvo el de moneda forera (A.H.N., Clero, carpeta 3.432, doc. I2;
carpeta 3.430, doc. I6); I287, marzo, 27-junio, 4. El monasterio con- Tumbo, fol.IIr). I40I, mayo, 20. Confirma los documentos de Enrique
cede a Ruy Díaz, abad de Valladolid, por los días de su vida la granja de II y Juan I sobre las donaciones y privilegios concedidos al monasterio
San Millán, cerca de Peñalba de Duero a cambio de que "nos dedes cada (A.H.N., Clero, carpeta 3.432, doc. I3).
anno un dia a comer pan et vino et pescado et carne pora los omnes, 1742 I408, julio, 6. Confirma privilegios de sus antecesores (A.H.N.,
quando fueremos a la dicha casa el Abat con dos Monges" (pub. por Clero, carpeta 3.432, doc. I4. Tumbo, fol.IIr-v), ratificado por él mismo
MAÑUECOy ZURITA, I920: III, I05-I06); el 9 de julio de I290 arrien- en I 8 de enero de I420 (A.H.N., Clero, carpeta 3.432, doc. I6; Tumbo,
dan a Tello Gutiérrez, alguacil mayor del rey, y su mujer Sancha Gil, una fol.IIv). En I 4 I 2 ordena realizar una pesquisa para deslindar los tér-
casa en Torre del Pino, con sus huertos y viñas por veinte años (A.H.N., minos de San Andrés y otros pueblos (Tumbo, fol. 3v-4r; fue confirmado
Clero, carpeta 3.43I, doc. 5); en I 2 9 8 Teresa Sánchez Fiz intercambia en I453). I420, marzo, 4. Confirma el instrumento de Alfonso XI de
con el monasterio tierras en Villavelasco, la Vega y La Morena a cambio I333 (A.H.N., Clero, carpeta 3.432, doc. I7). I420, confirma privile-
de 60 obradas de tierra en Trigueros y Quintanilla (A.H.N., Clero, car- gios de sus antecesores (Tumbo, fol.IIv.).
peta 3.43I, doc. I2); y el 20 de julio de I 3 5 I arrienda varios bienes a 1 7 4 3 Tumbo, fol.5r. y 35v.
Pedro García de Padilla (B.R.A.H., Col. Salazar y Castro, M-6I, fols.6I- A.H.N., Clero, libro 20.26I, fols.2v-4v, resumen en 8v; HENRÍ-
1744
pecho, pedido y yantar (A.H.N., Clero, carpeta 3.432, doc. 3; pub. por marzo de I435, Valladolid.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
310
anteriormente, como en la bula Etsi pro cunctorum, de 25 de gaba la visitación de los mismos al segundo . Resulta 1750
septiembre de I437. Por ésta, Eugenio I V si bien confir- extraño por tanto que hasta 1456 el Capítulo General no
maba todo lo ejecutado hasta el momento —expulsión de recogiese en sus definiciones que privaba a Valbuena de la
fray Hernando de Santa Colomba, incorporación del paternidad sobre Palazuelos y sus otras filiales , sobre I75I
monasterio a la reforma, exención de la sujeción a Berdoues, todo cuando dos años antes, el I 0 de octubre de I454, el
facultad para fundar seis nuevos eremitorios, etc.—, limitaba abad Rodrigo de Sobrado se intitulaba padre abbad del mones-
alguna de las exenciones obtenidas con anterioridad, tras- terio de Santa Maria de Palafuelos y daba poder a este último
pasando la tutela del monasterio del abad de Poblet al de para actuar en el litigio que mantenía contra la colegiata de
Cíteaux y sobre todo permitía a sus filiales eximirse de
1746
Valladolid sobre el pago de diezmos . 1752
de los monasterios subiectos a Valbuena sin sentiesen por graves ser subietos a abbad trie- febrero, 23. Valladolid.
nal quel P. Reformador con conseio y consentimiento de algunos abades y monjes de la 1751 "Quia a diebus multis monasterium de Valle bona in regno Caste-
observancia los puedan eximir de la subieccion de valbuena y subietarlos a otros monas- llae se substraxit et divisit ab unitate ordinis, licet magna industria labo-
terios e lugares de la orden (fols.8v-9r). L o publica HENRÍQUEZ, 1 6 3 0 : 2 6 0 - ratum sit, et plurima sollicitudine et diligentia quaesitum et procuratum,
263, en concreto, 261: "Et si dilectis filiis Abbatibus Monasteriorum quatinus reverti curarent religiosi ipsius monasterii ad eiusdem ordinis
quorumcumque praefato Monasterio Vallis-bonae subiectorum illius unitatem, qui in sua pertinancia et singulari opinione perdurantes reverti
Abbati triennali subiici vel subesse graue sen onerosum existeret, gene- contempserunt, propter quod veniunt apud Deum et homines nimium
rali omnium professorum dictae Observantiar Reformatori, praefata culpandi et puniendi, ac iuribus, libertatibus, honoribus et dignitatibus;
subiecta Monasteria Abbatialia, cum consilio & assensu aliquorum dic- quibus in ipso Ordine temporibus, quibus in ipso dum unanimiter vive-
tae Observantiae Prelatorum & Monachorum a subiectione huiusmodi bant, gravisi sunt et gaudebant, merito privandi; hinc est quod generale
separandi, ac illa aliis Monasteriis & locis dicti Ordinis subiiciendi, motu Capitulum ipsos rebelles et inobedientes de Valle bona, et monasterium
simili licentiam concedimus & etiam facultatem". ipsum a iure paternitatis, quod habeant et habere praetendebant in
Copia manuscrita del Cronicón, manuscrito igualmente, de Santa María de
1 7 4 8 monasteriis de Mathaplana, de Palatiolis et aliis quibuslibet, ipsos pri-
Sobrado, compiado por Fr. Mauricio Carbajo, p o r Benigno Cortés y García (Uni- vat et excludit, et curae ac regimini domini Cistercii per omnia suppo-
versidad de Santiago de Compostela, Biblioteca General, Mss. 587; en nit, salvo iure domini Morimundi, inhibendo omnibus abbatibus et
adelante le llamaremos Cronicón de Sobrado): Año de 1437 Don Martin personis regularibus dicti ordinis in virtute salutaris obedientiae et sub
Abad de Palazuelos quinto de este nombre se sujeto asi y a todo su Monasterio al Abad excommunicationis poena, ne absque licentia ipsius domini Cistercii aut
y Monasterio de Sobrado, constituyendose aquel Monasterio por filiacion de este generalis Capituli, paternitatem in aliquo eorundem monasteriorum aut
(fol.493); MANRIQUE, 1642-1659: IV 593 (2010: 84). visitationem exercere praesumant" (CANIVEZ, I933-I94I: IV, año 1456,
1749 "Abbati Berdonarum praesens generale Capitulum committit et def. 90, 744-745). JANAUSCHEK señala que a partir de entonces Pala-
iniungit, quatinus monasteria de Mataplana, de Palaciolis, de Rivo sicco zuelos se incorpora a la órbita de Cíteaux (1877: 159).
et de Bona valle, ut pater abbas visitet et reformet, donec monasterium Documento inserto en otro de julio de I455 de concordia con
1 7 5 2
Vallis bonae ad plenam Ordinis obedientiam et subiectionem fuerit plene dicha Colegiata (A.H.N., Clero, carpeta 3.433, doc. 5). N o hemos loca-
reductum, mandando abbati de Spina sub poena depositionis, quatinus lizado ningún otro instrumento en el que el superior de Sobrado apa-
nullum tractatum habeat aut ineat cum Martino super praedictis monas- rezca como padre inmediato de Palazuelos.
teriis sibi subiiciendis, decernens per praesentes quidquid in contrarium
FUNDACIONES MASCULINAS • 311
tasen al abad de Cíteaux, lo que ejecutan en 6 de marzo del abad Juan de Oyón todas las tierras de pan llebar que
año siguiente 1753 . poseen en los términos de Cigales y Cabezón, con las con-
diciones de ser recibidos como familiares y que nuestros cuer-
pos despues de nuestros dias an de ser e sean sepultados en el cuerpo de
La crisis se acentúa durante el siglo XV la iglesya de dicho monesterio a dondefuere acordado por el dicho sennor
Se produce en este momento un acontecimiento de abad eprior e monjes e conbento ; y en 1 5 0 0 recibe del hijo de
1761
extrema importancia para Palazuelos y que es testimonio Pedro de Acuña la granja de la Veguilla que había sido
del declive económico en que estaba sumido el monasterio donada por aquél en su testamento . En cambio los plei- 1762
Martín de Yangüas vende a Pedro de Acuña, Conde de I V nombraba jueces conservadores al Obispo de Palencia,
Buendía y Señor de Dueñas, las granjas de Palazuelos y a los monjes de San Zoilo de Carrión y a los de San Satur-
Villavelasco a cambio de 13.000 mrs de juro de heredad nino de Medina del Campo para que defendiesen al monas-
en T o r q u e m a d a , edemas que daria para reparacion del dicho mones- terio frente a aquellos que ocupaban sus tierras, ganados y
terio diez mil maravedis en dineros con todos e par comprar un relox para se apropiaban de sus diezmos y frutos ; entre los días 12 1764
heredades de Casa Nueva, Torre del Pino y Villacastín, reci- de Campoo por las aceñas del Pisuerga proseguían en
biendo por ellas 15.000 mrs de juro perpetuo cada año 1 4 6 5 ; y los pleitos sobre diezmos eran continuos con
1766
sobre las alcabalas de Torquemada y Villamediana y reser- los clérigos de los pueblos vecinos (Cabezón y Cubillos) . 1767
Estos negocios fueron confirmados posteriormente por En 1469 tiene lugar otro acontecimiento que mues-
Juan II, Enrique I V y los Reyes Católicos . 1757 tra el declive de la Orden en la Baja Edad Media, ejempli-
Las donaciones son escasas: el 28 de enero de 1442 ficado esta ocasión en el nombramiento de abades por el
Pedro y Alfonso Fernández, vecinos de Cabezón, donan en papado . Paulo II encargó al abad de Sahagún que eli-
1768
dicha villa una heredad con sus sotos y huertas ; en 1468 1758
giese por abad del monasterio al que por entonces era prior,
Gutierre de la Cueva, Obispo de Palencia, les cede una serna Juan de Oyón, mientras que Alonso de Dueñas que hasta
en Cigales ; el 31 de marzo de 1473 el pontífice une per-
1759 ese momento había ejercido como superior era enviado al
petuamente a Palazuelos la iglesia y beneficio de Mue- año siguiente a ocupar dicho cargo en el de Matallana , 1769
1753 A.H.N., Clero, carpeta 3.433, doc. 7. Este suceso aparece expuesto otorgó Juan II confirmando al monasterio la posesión de los juros (vid.
brevemente en el Tumbo de Palazuelos: Yten otra Bulla de pio segundo en que exi- nota siguiente).
mio a este monesterio de pala¡uelos y al de matallana de la jurisdicion y obediencia del 17571453, septiembre, 9 y 1454, junio, 20 -Juan II-; 1455, noviembre,
monasterio de sobrado a quien estavan sujetos por Eugenio quarto que los exento de bal- 30 y 1456, junio, 24 -Enrique IV-, y 1470, Isabel y Fernando (A.H.N.,
buena y los sometio a la obediencia del abad de sobrado (fol.17r). El Tumbo de M a t a - Clero, carpeta 3.433, docs.4 y 6; Tumbo, fol.11v-12v).
llana en cambio es más explícito (vid. la monografía correspondiente). 1758A.H.N., Clero, legajo 7.625.
Por su parte, el Cronicón de Sobrado, fol. 493, yerra en el año y afirma: 1 7 5 9 Tumbo, fol.32v.
Año de 1468 Alfonso de las Dueñas Abad tercero de este nombre de Palazuelos consi- 1760A.H.N., Clero, carpeta 3.433, docs. 9 y 10; Tumbo, fol.17r.
guio de Julio II el que el y su Monasterio fuesen exemptos de Sobrado y estuviesen suje- 1761A.H.N., Clero, legajo 7.625, y Tumbo, fols. 33r. y 47v-48r. En este
tos a Cister. MANRIQUE, 1642-1659: IV 598-599 (2010: 99), relata este último folio, al indicar cuántas misas se rezaban por ellos, señala: sobre sus
acontecimiento. sepulturas, que han de ser en el cuerpo de esta Yglesia.
1 7 5 4 DÍEZ ESPINOSA, 1 9 8 2 : 8 5 - 8 8 . Tumbo, fol.43r.
1 7 6 2
tomado posesión del mismo, pero que el nuevo abad Fran- lla de Cabezón (1808), que prácticamente lo había dejado
cisco de Valladolid lo había expulsado y se había encasti- reducido a cenizas , fue reconstruido de inmediato por los
1774
llado en él. Éste, sin embargo, los días 6, 9 y I I de mayo monjes . Pero los decretos desamortizadores de 1835
1775
apelaba al Consejo indicando que incluso antes de que traerían consigo la venta y posterior demolición de las
muriese Juan de Oyón el mencionado doctor le había dependencias monásticas. De éstas, que se distribuían en
importunado acompañado de hombres armados con el fin torno a dos claustros, únicamente se salvaron la sacristía y
de que renunciase a la abadía, que tras su muerte y no haber su capilla aneja. La conversión del templo abacial en parro-
sido elegido abad el candidato que quería marchó a La quia permitió su conservación y la de la capilla de Santa
Espina para que su abad lo reformase, y que el supuesto Inés, más la desidia que sobrevino a su abandono a finales
documento de cesión del monasterio era en realidad una de los años 60 del siglo XX ha motivado que en enero de
falsificación perpetrada por aquel individuo. En realidad, I998 se hundieran las bóvedas del crucero, brazo sur del
Francisco de Valladolid estaba dispuesto a ceder su cargo transepto y tramos rectos de las capillas mayor y de la Epís-
para bien de la Observancia si así lo requería la reina, pero tola, así como el pilar toral sudeste y el lienzo de muro que
no a ser despojado por alguien que no tenía jurisdicción ni separaba dichas capillas . Entre 1999 y 2001 se ha cons-
1776
1771El proceso se puede seguir a través del expediente conservado en el 1774Así consta en el informe emitido por Miguel José de Azanza,
A.G.S., Cámara de Castilla, Pueblos, legajo 15 (pub. por GÁRCÍA ORO Ministro de Negocios Eclesiásticos, de 12 de julio de 1809, dirigido al
y PÓRTELA SILVA, 2004: 406-417; cit. por PÉREZ EMBID, 1986: 647 y rey y en el que proponía la supresión del monasterio. El 26 de junio le
684-685), las noticias aportadas por el Tumbo, fol.I4 y la información había escrito el Colector General de Conventos relatándole esto mismo
proporcionada por MANRIQUE, 1642-1659: IV 609-611 (2010: 129 (A.G.S., Gracia y Justicia, Gobierno intruso, asuntos eclesiásticos, Legajo
y 133), y también p o r PASCUAL, 1 9 9 6 (2): 3 4 1 y GÁRCÍA ORÓ y POR- 1.247). En un acta de la reunión celebrada ante el General de la Orden,
TELA SILVA, 2001: 152; e idem, 2004: 129. Clemente Barbajero, en 2 de mayo de 1818, se dice que este Real Monas-
Curiosamente este prelado fue anteriormente abad comendatario de
1 7 7 2 terio fue destruido y quemado muy a los principios de la pasada lucha, de tal modo que
Sobrado y en 1498 había renunciado a la abadía en manos de Alejandro solo quedaron las paredes de el, y aun la mayor parte de estas arruinadas enteramente
VI, pasando a continuación dicho monasterio a formar parte de la (A.H.N., Clero, legajo 7.625). Las actas de los capítulos generales e
reforma de Martín de Vargas (YÁÑEZ NEÍRA, 1991: 90) . El Cronicón de intermedios anteriores a esta fecha habían ya incidido en la ruina del
Sobrado relata este acontecimiento, fol.493: El cardenal Antonioto, que fue monasterio.
Abad comendatario de Sobrado, y por aver cedido la Abadia, se unio Sobrado a la Con- 1775En el Libro de obras (al que llamaremos así en adelante) y en el legajo
gregacion año de 1498, fue despues Abad de Palazuelos, y aviendo cedido también, se 7.627 de la sección Clero del A.H.N., se puede seguir el proceso de
unio Palazuelos a la Congregacion año de 1502. Pero c o m o se p u e d e ver, de reconstrucción del claustro reglar que duró de mayo de I824 al mismo
nuevo esta fuente se equivoca al poner la data de anexión a la Congre- mes de I832.
gación de Castilla. El cardenal Antonioto murió el 10 de septiembre de MERÍNO DE CÁCERES, 2000: 12, efectúa una reseña de los intentos
I776
1 5 0 7 (EUBEL, 1 9 1 4 : 2 1 ) . realizados por algunas personas e instituciones para salvar el edificio pre-
1773 HUERTAÁLCALDE, 1990: 288-289. vios a su ruina.
FUNDACIONES MASCULINAS • 311
desaparecido y sirve de apoyo a la estructura de la nueva la central más ancha que las laterales y el primer tramo más
cubierta de madera que cubre todo ese área (lám. I 0 9 ) I 7 7 7 profundo que los restantes. El transepto no sobresale ni
y a principios de 2 0 0 2 entre otras obras, se han sustituido destaca en planta —sus dimensiones son idénticas a las del
el resto de sus tejados, abierto algunos vanos que estaban primer tramo del brazo longitudinal—; consta de una sola
cegados, eliminado el revoco que cubría el costado meri- nave y tres tramos, el central más uno por brazo. La cabe-
dional del templo y rebajado el terreno circundante hasta la cera se compone de tres capillas escalonadas, la central con
cota original . I778 ábside poligonal de cinco p a ñ o s y las laterales semicir-
I779
La planta (fig. 24) sada a la mitad oriental del hastial del brazo norte del tran-
La iglesia de Palazuelos, orientada litúrgicamente, septo y al tramo recto de la capilla adyacente se levanta la
muestra una planta basilical de tres naves de cuatro tramos, capilla de Santa Inés.
I777 Junta de Castilla y León, Consejería de Educación y Cultura, Dir. 1779Erróneamente, ANTÓN, I923 (2): I 8 I ; idem, I942: 2 I 0 ; JIMÉ-
G e n . de P a t r i m o n i o Cultural, V A - 3 8 6 : Memoria y presupuesto para la inter- NEZ LOZANO, I980: 47; ARA GIL, I986: 22; y CARRERO SANTAMARÍA,
vención de emergencia en la cubierta de la iglesia del monasterio de Santa María de Pala- I998 (2): I36, entre otros, lo describen como un ábside de siete paños.
zuelos. Aguilarejo (Corcos), por los arquitectos Ana Montoya García y José 1780El 28 de marzo de I 5 5 4 se consagraron los altares de la iglesia
Manuel Horno Hernández, de noviembre de I999. La Memoria final de bajo esta advocación (Tumbo, fol.I8v-I9r.). Sin embargo, documentos
obra (febrero de 2 0 0 I ) se puede consultar en el Servicio Territorial de posteriores nos hablan de otras advocaciones en distintas capillas del
Educación y Cultura de Valladolid. templo: en las cuentas de mayo de I784-mayo de I785 se anotó el gasto
Agradezco a los arquitectos Ana Montoya y José Manuel Horno el
I 7 7 8 de reparar el tejado de la capilla del Ángel, y en las de mayo de I790-
haberme facilitado en todo momento el acceso al templo monástico mayo de I79I, el de la capilla de San Miguel; y en mayo de I796-mayo
durante el curso de las obras. de I799, se compusieron las vidrieras de la capilla del Christo (A.H.N.,
Clero, L i b r o I 6 . 5 I 6 , Libro de Obras; en adelante citado Libro de obras).
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
314
El modelo de planta empleado en Palazuelos ha sido
relacionado en diversas ocasiones con el esquema tradicio-
nal románico de tres ábsides semicirculares que sería utili-
zado de forma asidua por los cistercienses dentro y fuera de
la Península Ibérica (Valdediós, Vega, Carrizo, Sierra, Mon-
salud, Sandoval, Armenteira o San Clodio, por citar sólo
algunos ejemplos hispanos) . Sin embargo, la tipología
1781
Palazuelos - Planta
general del conjunto.
idem, 1985: 4 3 3 ; MERINO DE CÁCERES, 1999: 655. 1789 ANTÓN (1942: 220) había señalado cómo la capilla de la sacris-
1783Respecto al primero sabemos que dependía ya en 1188 de Carra- tía, las tres del templo, más la funeraria de Santa Inés, formaban un con-
cedo, que en I 2 0 3 era una granja suya y que hasta I225 no se erige en junto homogéneo, equilibrado, resultando un esquema que ha sido
abadía (VALLE PÉREZ, 1995: 2 4 5 ; FERNÁNDEZ DE VlANA, 2 0 0 0 : 2 0 4 - puesto en relación con la cabecera de Valbuena por diversos investiga-
208), comenzando las obras mucho antes de este último acontecimiento, dores (LAMBERT, 1931: 266 nota 18; ARA GIL, 1986: 22; VALLEJO,
ca. 1175-80 (VALLE PÉREZ, 1995: 247; también, FERNÁNDEZ DE 1995: 61; SENRA, 2002: 188). El propio Francisco ANTÓN (1923 (2):
VlANA, 2000: 226). Para el caso de Acibeiro, parece que fue fundado en 189 y 190; 1942: 219) calificó como "pariente" de Palazuelos la planta
1135, iniciado su templo dentro de la segunda mitad del siglo XII y afi- de San Miguel de Palencia, y posteriormente algún autor la puso tam-
liado a la o r d e n en I225, presentándose los absidiolos laterales poligo- bién en relación con nuestro monasterio (TORRES BALBÁS, 1946: 303;
nales al interior (BANGO TORVISO, 1 9 7 9 : 3 0 y 152; FERNÁNDEZ o MARTÍNEZ, 1989: 74). Sin embargo, en el caso palentino los tres ábsi-
CORTEZO, 2000: 152-153 y 177-178). des son poligonales y su alzado poco tiene que ver con el del templo cis-
La relación de la planta de la cabecera de ambos monasterios fue
1 7 8 4 terciense (Vid. sobre esta iglesia, ANDRÉS ORDAX, 1989: 234-235;
vista por ALONSO ÁLVAREZ, 2007: 69, más esta investigadora señala que MARTÍNEZ, 1989: 57-76; MARTÍNEZ FRÍAS, 1994: 156, si bien este
"su formulación estilística, correspondiente a un lenguaje tardorromá- último autor afirma erróneamente que los ábsides laterales son semicir-
nico, así como la apertura de un cuerpo único de ventanales en el san- culares, y como tal aparecen en la planta representada en la pág. 144).
FUNDACIONES MASCULINAS • 311
1790 Fue ANTÓN el primero en insistir en esta semejanza (1923 (2): cronología del edificio-, las relaciones que guarda con determinados ele-
189 y 190; idem, 1942: 219). Sobre este edificio, vid. CABALLERO, A., mentos de la fábrica de Palazuelos e incluso el hecho de que en el men-
1992; CABALLERO BASTARDO, A; CABALLERO CHACÓN, 1987; ANDRÉS cionado dibujo se represente la capilla mayor de la vecina iglesia de La
ORDAX, 1989: 260-261. Antigua -poligonal- de modo semejante a la de la colegiata, nos hace
1791 Escasos restos permanecen en pie de la segunda colegiata de Valla- pensar que la cabecera de esta última constaba de un ábside central poli-
dolid, pero a través de un dibujo del siglo XVIII dado a conocer por AGA- gonal y laterales semicirculares, si bien únicamente una intervención
PÍTO Y REVILLA (1943), se reconoce la planta de tres naves de cinco arqueológica puede confirmar o desmentir esta hipótesis.
tramos cada una, transepto destacado y cabecera de tres ábsides escalo- 1792 GÓMEZ MORENO, 1925: 432-433 y 436-437, respectivamente; su
nados que han sido interpretados tradicionalmente como semicirculares fecha, entre fines del XII y principios del siguiente.
(CHUECA GOITIA, 1947: 211; RIVERA, 1992: 76; CASTÁN LANASPA, 1793 La actual cabecera con girola responde a la reforma efectuada en el
1998: 185; PUENTE APARICIO, 1998: 193; entre otros), si bien en los siglo XVIII. Vid., LAMBERT, 1931: 249-256; TORRES BALBÁS, 1952: 77-
últimos tiempos se ha puesto en duda dicha traza, aunque sin ofrecer 79; MARTÍNEZ FRÍAS, 1980: 75-137; idem, 1994: 148-149; idem,
alternativas (BLANCO MARTÍN, 2000: 474). En el mencionado dibujo, 1998; BANGOTORVISO, 1985: 477-478.
la capilla de San Pedro Regalado -lado del Evangelio- presenta planta 1794 Aspecto destacado por EYDOUX, 1954: 181 nota 22.
rectangular -aunque sus dimensiones en relación con la mayor y la otra 1795 TORRES BALBÁS, 1924: 123; idem, 1952: 13-14; BANGOTORVISO,
colateral nos hacen pensar en una ampliación o reforma de la primitiva— 1982: 568; idem, 1985: 433; MERINO DE CÁCERES, 1999: 655.
mientras que la opuesta, dedicada a la Virgen de las Nieves, muestra un 1796 ANTÓN, 1923 (2): 190; ANTÓN, 1942: 219 y 220; EYDOUX,
tramo recto rematado en semicírculo; en cuanto al ábside central, parece 1954: 202; HERAS GARCÍA, 1966: 128.
que constaba de un profundo presbiterio dividido en dos tramos a dis- Más adelante, en el proceso crono-constructivo, volveremos sobre
1 7 9 7
a partir del primer cuarto del siglo XIII -más adelante hablaremos de la y / o tradición local".
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
316
Figura 26.
Palazuelos
esia-numeracion
de capiteles.
Lámina 110.
Palazuelos. Iglesia,
interior hacia el este.
e interesantes conjuntos medievales de los reinos de Casti- prismática y aristas vivas. Aquél voltea sobre medias dobles
lla y León, importante no sólo para ampliar nuestros cono- columnas adosadas a una pilastra, mientras que la última
cimientos acerca de las fórmulas arquitectónicas empleadas lo hace en simples columnas acodilladas (lám. I I I ) .
por los cistercienses en la provincia de Valladolid y sus pro- Elevadas sobre un alto basamento poligonal con tenue
cesos constructivos, sino también para comprender mejor el resalte en el frente y arista superior perfilada por un bocel
modo en que fueron asimiladas las nuevas corrientes góti- —que se prolonga a modo de banco por el interior de la
cas emanadas del foco burgalés al sur del antiguo Obispado capilla—, estas columnas presentan fustes lisos compuestos
de Palencia. N o obstante, gracias a las fotografías y notas por elevado número de tambores que muestran una altura
tomadas del edificio antes de la ruina podremos describirlo
coincidente con las de los sillares de las pilastras en las que
tal y como se encontraba entonces, dejando de lado las
se embuten. Sus basas son áticas, de escocia profunda y toro
recientes actuaciones restauradoras (lám. 110).
inferior algo aplastado con amplias y planas lengüetas sur-
La cabecera de Palazuelos consta, como hemos seña- cadas por nervios, completándose con una intermedia las
lado, de tres capillas: la central con ábside poligonal de correspondientes a las columnas de los frentes, y están ele-
cinco paños precedido de profundo tramo recto, semicir- vadas sobre sencillos plintos cúbicos. Los capiteles que las
culares las laterales y provistas igualmente de tramo recto coronan responden a un modelo de cesta vegetal que se
abierto a cada uno de los brazos del transepto. extiende por toda la cabecera, transepto y primer tramo de
El ingreso a la capilla mayor desde el crucero se prac- las naves aunque con diversas variantes, extendiéndose sus
tica a través de un amplio arco triunfal apuntado y provisto collarinos por el núcleo del pilar. Se trata de capiteles de
de dobladura escasamente pronunciada, ambos de sección sencillas hojas lisas, unas veces totalmente planas , las
1799
1799 1 0.
FUNDACIONES MASCULINAS • 311
vado . I806
En los laterales, nervios y perpiaño comparten soporte: En primer lugar señalar que sus fustes presentan a
columnas entregas cuyos componentes, salvo los detalles gran altura, cerca ya de los capiteles, unos gruesos anillos
que vamos a tratar a continuación, en nada difieren de los decorados con densas composiciones florales de carácter
ya vistos (láms. I I 2 y I I 3 ) : I 8 n
simétrico, a base de vástagos entrelazados cuyos extremos se
Santa María la Real de Aguilar de Campóo, Retuerta, etc (vid lo que se radas.
dice sobre ellos en la monografía del primero). I2.
1 8 0 8
Lámina 112.
Palazuelos.
glesia, costado sur
del presbiterio.
"entrego" de estos soportes, aspecto que creemos explica el sucede lo mismo. En esta ocasión los tambores situados en
porqué de la presencia de esos anillos. En cuanto al soporte la mitad inferior de la columna no presentan la misma
del costado norte, tanto el basamento —que mide aquí 0,70 altura que las hiladas de sillares que componen el para-
x 0,40— como la basa y tambores del fuste están embebidos mento al que únicamente se adosan; además, su basamento
en el lienzo de muro , el anillo presenta la parte inferior
1814 —que aquí es más profundo que el del costado opuesto
más próxima al muro amputada y sobresale de forma noto- (0,70 x 0,50)— y primeros tambores ciegan parcialmente lo
ria respecto al fuste y los dos últimos tambores se despegan que parece haber sido un arcosolio, sí coincidiendo aquí la
1812 24. Erróneamente Francisco Antón comenta que a medida que asciende
1 8 1 4
1813 13. Composiciones semejantes encontramos en el monasterio de el fuste, la sección de los tambores sufre una progresiva disminución
Las Huelgas de Burgos: ménsulas de las columnillas de las capillas late- (1942: 223).
rales y ángulo N.E. del transepto del templo, y también algunas ménsu- 1923 (2): 185 y 192; 1942: 214 y 222-223.
1 8 1 5
Lámina 114.
pendidas antes de llegar a la línea de imposta y terminan en Palazuelos. Iglesia,
ménsulas . Éstas últimas están formadas por un florón
1819
capitel y anillo de
del que parten varias ramificaciones para abrazar el fuste. columna, costado norte
Los capiteles exhiben cestas vegetales que siguen el modelo del presbiterio
generalizado de hojas lisas rematadas en voluminosos con-
juntos florales, excepto la situada más a oriente en el cos- ábside poligonal. El costado norte se muestra totalmente Lámina 115.
tado norte, que exhibe una decoración de hojitas lobuladas liso, conservando restos de pintura mural de época Palazuelos. Iglesia,
capitel y anillo
y tallos en espiral que se abren y dejan descubrir sus frutos, moderna: el escudo imperial en el tramo oriental y el de la de columna, costado
semejante a la del anillo que veíamos en este mismo lado; Orden en el occidental. En este último tramo, cuya parte sur del presbiterio.
inferior aparece recorrida por un banco de fábrica moderno
los cimacios que los coronan son de dos tipos: uno for-
en el que se han aprovechado fragmentos esculpidos de
mado por filete y caveto entre boceles , y el otro, más 1820
hemos comentado, continúa la molduración del basamento la lápida conmemorativa de la construcción del altar de
de los pilares torales y enlaza con los que marcan el paso al Santa María (lám. 1 1 6 ) : 1823
1819 Aunque no es extraña la utilización de columnillas suspendidas para REZ, 1 9 0 8 - 1 9 0 9 : II, 4 4 5 ; ANTÓN, 1 9 2 3 (2): 186; ANTÓN, 1 9 4 2 : 2 1 5
recoger arcos y nervios -véase por ejemplo las capillas laterales de Las (dibujo); ARAGIL, 1 9 8 6 : 2 1 ; M A R T Í N E Z D E L A 0 S A , 1 9 8 6 : 96; SENRA,
Huelgas de Burgos, el refectorio y cocina de Huerta, la cabecera y tran- 2002: 194; TORRE YUBERO, 2009: 55. Por otro lado, resulta extraño
septo de Bonaval o el refectorio de Rueda- son pocos los casos en que que GARCÍA LOBO y MARTÍN LÓPEZ, 1 9 9 8 ni la recojan ni hagan alu-
las vemos apeando formaletes. Además de en Palazuelos los encontramos sión a ella.
en los ángulos del capítulo de San Andrés de Arroyo o en el transepto
y primer tramo de la nave central de la catedral de El Burgo de Osma.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
320
Epístola nos hace pensar que actuara como credencia y, 1824
Lámina 116.
;<)) ! ; ¡Júm *
tral y parte baja fueron macizadas con sillares para permitir
la elevación de la columna que divide los tramos, mientras
Palazuelos.
*
que la mitad occidental fue desmontada para construir el
Iglesia, !y J monumental arco que, situado en el tramo más cercano al
Monumentum
aedificationis. M -t ! " ; . n .i crucero, comunica con la capilla adyacente (lám. 1 1 7 ) . 1825
un profundo nicho en arco de medio punto de sección rec- mentales conservadas permiten precisar su funcionalidad, la
tangular y aristas vivas que voltea directamente sobre unas de contenedor de sepulcros. Tanto el Tumbo del monasterio
jambas de idéntico perfil. Aunque en la actualidad no hay como otras fuentes nos informan de que en la capilla mayor
huellas de que haya tenido en el fondo depósito alguno para se situaban los sepulcros de Alfonso Téllez de Meneses —
el agua de abluciones y lavado de manos —una capa de en el lado de la Epístola—, su segunda mujer Teresa Sán-
estuco impide aclararlo—, su disposición en el lado de la chez, sus hijos Tello Alfonso, Alonso Alfonso y Teresa
Alfonso y de sus nietos al menos Mayor Alfonso —en el del
1825 Volveremos sobre ello en el apartado del proceso crono-construc- cesta es sencillo.
tivo. 1828 ANTÓN, 1923 (2): 188; idem, 1942: 217.
1826 En la actualidad sólo se conserva el arranque oriental.
FUNDACIONES MASCULINAS • 311
Apéndice documental, doc. 5), o en otra de la Biblioteca Nacional de el "arco" se dispone en el flanco norte del presbiterio.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
322
ponden con las hiladas que conforman los codillos y el
muro, presentando las basas un delgado y estrecho toro
superior, una escocia profunda y toro inferior aplastado con
garras en las esquinas que sobresale ligeramente del plinto
paralelepípedo sobre el que se asienta. La diversidad de
motivos que muestran las cestas de sus capiteles permiten
Lámina 121. hablar de dos grupos:
Palazuelos.
Iglesia, capiteles - Capiteles compuestos por un único piso de crochets
de la capilla de tallos anchos y nervio central muy marcado,
mayor (núm.18
y ventanas 2 y 3).
acompañadas de pequeñas hojitas lobuladas u 1834
Iglesia, capiteles
de la capilla un desbastado troncopiramidal excepto en dos de
mayor (núm. 17 los casos, que son troncocónicos (lám. I 2 2 ) . I838
y ventanas 1 y 2).
Sus ábacos son lisos y los cimacios ostentan la ya
conocida combinación de boceles y escocias . I839
voca en rosca e intradós sendos boceles y escocias, y la supe- En los paños segundo y cuarto se abren por debajo de
rior con bocel perfilando su arista flanqueado por escocias. estas ventanas unas puertas adinteladas que dan paso a la
Las dos arquivoltas descansan sobre columnillas acodilladas chirola, estancia de planta quebrada adosada a la capilla en el
de fustes despiezados en numerosos tambores que se corres- siglo XVI y que servía como capilla-sagrario . 1840
1833 Así lo señala SENRA, 2002: 193-194. En numerosos monasterios monasterios. También CASAS CASTELLS, 2005: 536), y también en las
cistercienses encontramos arcosolios funerarios en esta misma situación: naves de Santa María la Real de Aguilar de Campóo. En cambio, la iden-
Valbuena, Matallana, Sacramenia, Bujedo de Juarros, Monsalud, etc. tidad es casi completa con las de la capilla mayor de la parroquial de
1834 Ventana 4, capiteles dcha. (Las ventanas se han numerado de Norte Dueñas, que si bien están ocultas por un retablo, al exterior muestran la
a Sur). Los vemos también en la iglesia y capítulo de Aguilar de Cam- misma configuración. Nada tienen que ver, sin embargo, con los vanos
póo. de la capilla mayor de las Huelgas, ni por el interior ni por el exterior,
1835 Ventana 2, capiteles dcha. Similares los encontramos en el claustro con los que tradicionalmente se han venido relacionando (ÁNTÓN, 1923
de Villamayor de los Montes, claustro de Valbuena, etc. (2): I 9 0 - I 9 I ; idem, 1942: 221; GUTIÉRREZ PAJARES, 1993: 38).
Ventana 3, capiteles izqda. Catedral de Burgos, templo de Villa-
1 8 3 6 Construida con mampostería, está cubierta por bóvedas estrella-
I 8 4 0
mayor de los Montes, claustro de Valbuena, etc. das con terceletes, combados y claves pinjantes realizadas en yeso, deco-
Ventana I; ventana 2 izqda; ventana 3 dcha; ventana 4 dcha; y ven-
1 8 3 7 rándose sus paramentos con grisallas del pintor italiano Antonio Stella,
tana 5. realizadas en los años 80 del XVI (FERNÁNDEZ DEL HÓYO, 1980: 512-
Ventana I capiteles dcha; y ventana 5 capiteles dcha.
1 8 3 8 513; URREA FERNÁNDEZ, 1974: 61; VVAA., 1995: 889; MERINO DE
1839 En la cabecera de San Andrés de Arroyo encontramos esta misma CÁCERES, 2000: 30-31). Respecto a su funcionalidad, diversos autores
tipología de ventanas, aunque en este caso difiere del vallisoletano la la han identificado como sacristía (ORTEGA RUBIO, J., 1895: 221;
molduración de cimacios y arquivoltas, el empleo de fustes monolíticos MARTÍ Y MONSÓ, J., I898-I90I: 539; BRAÑA, 1903-1904: 292; COS-
o la tipología de sus capiteles, todos troncopiramidales y la decoración SÍO, 1922: 187; HERRERO MARCOS, 1997: 146; y SENRA, 2002: 188;
de sus cestas, más abigarrada y ornamental (TORRES BÁLBÁS, 1952: 110, entre otros), si bien los rituales y libros de usos de la Congregación de
señalaba que algunos de los capiteles de Arroyo estaban relacionados Castilla nos hablan de un uso relacionado con el culto eucarístico
con los de Palazuelos; por su parte, EYDOUX, 1954: 202, ÁRA GÍL y (CARRERO SANTAMARÍA, 2006: 514-515). Por su parte, MERINO DE
MARTÍN GONZÁLEZ, 1984: I, 316 y ARA GIL, 1986: 22, hablan gené- CÁCERES, 2000: 30, la denomina "capilla de Nuestra Señora", sin que
ricamente de la relación existente entre las capillas mayores de ambos sepamos en qué se basa para ello.
FUNDACIONES MASCULINAS
• 311
Se cubre el hemiciclo, pentagonal y de poco profun- ponen de modo forzado en los ángulos formados por el
didad, con una bóveda de seis nervios que delimitan cinco muro y las columnas del arco de acceso: en el meridional
plementos cóncavos y otro nervio ligazón que une la clave fueron recortados y eliminados los sillares del paño para
central común con la del arco de acceso al ábside . Estos 1841 dar mejor cabida a la columnilla, mientras que en el opuesto
nervios presentan idéntico perfil al que vemos en el tramo ésta sobresale más al acodarse directamente al hueco exis-
recto, es decir, un grueso bocel entre escocias, habiendo tente; en este último caso, además, se rompieron las cuatro
perdido como en aquel caso la clave . Las cuatro nerva-
1842 primeras dovelas del arco para facilitar el arranque del ner-
duras centrales descansan sobre columnas embebidas en las vio (láms. 119 y 1 2 0 ) . Tanto las ménsulas como los
1848
aplastado con lengüetas con nervios marcados, separados bores; y las basas siguen el referido modelo ático.
por una escocia profunda; los tambores de los fustes pre- Por su parte los formaletes, de medio punto y arista
sentan una altura igual a la de los sillares del muro; y los anacelada, descansan sobre pequeñas columnillas carentes
capiteles son en esta ocasión poligonales, lo mismo que sus de basas y cuyos capiteles llevan collarinos estrechos y ces-
cimacios, repitiendo aquéllos los tipos generalizados de tas decoradas con hojas lisas rematadas en enormes, casi
hojas carnosas y éstos la habitual combinación de moldu- desproporcionados, bayas y cogollos y no se completan con
ras. Solamente hay que destacar un detalle, y es que dichos cimacios . Dichas columnas apoyan directamente sobre
1850
capiteles se encuentran a un nivel más bajo que los de las una imposta que recorre los paños absidales muy por
ventanas, no enlazando por tanto sus cimacios, como suele encima de los vanos, siendo interrumpida por el desarrollo
ser lo habitual . 1845
de los nervios de la bóveda; su molduración, la misma que
Esta "imperfección técnica" se puede ver también en se emplea en los cimacios ' 1851
la solución aplicada a los apeos de los nervios extremos . 1846 El acceso las capillas laterales se realiza, al igual que
En esta ocasión voltean sobre pequeñas columnitas sus- veíamos en la capilla mayor, bajo arcos apuntados y dobla-
pendidas que descansan sobre ménsulas-capitel y se dis- 1847 dos de perfil prismático y aristas vivas, aunque en este caso
anterior (EYDOUX, 1954: 2 0 2 ; ARA GIL, 1986: 22; o VALLEJO, 1995: terios cistercienses, como Osera, Melón, vid. VALLE PÉREZ, 1990 (3).
61, señalaron la influencia del cenobio burgalés en Palazuelos, aunque sin 1848 En la parroquia de Dueñas la solución es distinta: esos mismos ner-
aludir a aspectos concretos como sus bóvedas, tal y como había hecho vios se incrustan en el ángulo formado por arco y muro por encima de
ANTÓN, 1923 (2): 193; idem, 1942: 227; por su parte LAMBERT, 1931: la línea de imposta que marca el arranque de los formaletes.
226 comenta que en estas bóvedas se ven influjos de los monumentos de 1849 Éste constituye una pieza esquinada, mientras que el del norte está
Burgos). colocado en chaflán.
1 8 4 2 Erróneamente ANTÓN, 1 9 2 3 (2): 185; ANTÓN, 1942: 213, apunta 1850 Los capiteles de las columnillas E y F están destrozados.
que la clave está unida a la del triunfal y a su misma altura, y que los 1851 En los ábsides de Arroyo o Ribas, por ejemplo, no se emplean. Sí
nervios están compuestos por haces de tres baquetones. Le sigue HERAS en cambio en la parroquia de Dueñas -cuya ordenación es de nuevo
GARCÍA, 1966: 128. idéntica a Palazuelos-, sala capitular de Arroyo, capilla mayor de Las
Hay que hacer una puntualización: los dos nervios centrales ascien-
1 8 4 3 Huelgas de Burgos (que según TORRES BALBÁS, 1952: 110, influiría en
den en vertical, pegados al muro, desde su nacimiento hasta la altura Palazuelos), catedrales de Cuenca (capilla mayor y transepto), El Burgo
donde arrancan los formaletes, iniciando a partir de este punto su vuelo; de Osma (tramo occidental del presbiterio, transepto y nave central) y
los restantes, por el contrario, inician su curvatura desde abajo. Algo Sigüenza (capilla mayor y transepto), si bien en estos ejemplos las colum-
similar sucede en San Andrés de Arroyo y Santa Cruz de Rivas, en donde nillas descansan por lo general sobre los capiteles que sirven de arranque
aunque no es tan exagerado como en Palazuelos todos los nervios tardan a arcos y nervios.
en despegarse del muro.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
324
ra
Lámina I23.
Palazuelos.
Iglesia, transepto
y capillas laterales la dobladura presenta una sección más importante (lám. y se extienden por el núcleo que queda libre del pilar, y los
(fot. Aitana Mongt cimacios que los coronan se molduran con boceles y esco-
Zapata).
I 2 3 ) . Su apeo se resuelve de la misma forma: el inferior
1852
sobre dobles columnas que se entregan en pilastras y el cias siguiendo el modelo generalizado. Los fustes, lisos, se
superior sobre otras simples acodilladas. Sus componentes despiezan en tambores de altura idéntica a la de los sillares
apenas difieren de los ya vistos. Los capiteles llevan cestas que forman la pilastra y m u r o . Sus basas áticas, elevadas
1856
troncopiramidales decoradas con hojas carnosas cuyos sobre plintos prismáticos lisos, llevan garras con nervios
extremos se comban y despliegan en cogollos, algunas veces marcados en los ángulos del toro inferior, más otra inter-
partidos y anudados con los vecinos (lám. I 2 4 ) , entre 1853
media en el caso de las dobles, y el superior, del que se
separa por una escocia profunda, se desarrolla por el núcleo
los que emergen, en otros casos, otras más finas rematadas del pilar de manera semejante a la de los collarinos. Final-
en frutos ; sólo varía en el único capitel doble conser-
1854
mente, los basamentos, cuya arista superior es baquetonada
vado de la capilla meridional, en el que las hojas son algo y se prolongan a modo de zócalo por el tramo recto, difie-
más planas y se bifurcan y solapan unas con otras en la ren en parte de los vistos en el ingreso a la capilla central:
mitad superior de la cesta . Sus collarinos son estrechos
1855
1852 Recordemos que en el caso de la capilla de la Epístola sólo per- Únicamente debemos hacer notar que los tambores segundo y ter-
1 8 5 6
manece el pilar meridional de la embocadura, habiendo desaparecido su cero —empezando a contar desde abajo— de la columna simple del pilar
compañero junto con buena parte de la bóveda del tramo recto, en el I no se corresponden exactamente con los sillares del paramento conti-
trágico derrumbe sufrido por el edificio en 1998. guo, ya que en éste en lugar de las dos hiladas hay una sola con sillares
1853 I, 2 y 36. de gran tamaño.
8 y 9.
1 8 5 4
35.
1 8 5 5
FUNDACIONES MASCULINAS
• 311
del arco, servía de cimacio a las columnillas de sus ángulos se practica un ventanuco cuadrado hecho en parte de ladri-
y continuaba unos centímetros por el paramento. llo, probablemente también de la segunda mitad del siglo
tras que el resto lo hace entre dicho núcleo y el muro. labrose un arco nuebo de piedra (Libro de obras) (cit. p o r MERINO DE CÁCERES,
3 a 6.
1 8 5 9
2000: 11).
33.
1 8 6 0
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
326
XVIII, que permitía observar el templo desde las salas dis-
puestas sobre la capilla de la sacristía . I864
1 8 6 4 Vid. el apartado dedicado al análisis de las dependencias monásti- Este ejemplar, que veremos de nuevo en algunos ejemplares del exte-
1 8 6 8
cas. rior de la capilla mayor, se corresponde con el tipo III del claustro de Val-
1865 En el de la capilla norte han desaparecido los sillares que definen buena (vid. otros ejemplos semejantes en dicha monografía).
el vano propiamente dicho, las basas de las columnillas internas, los cima- 1869 La configuración de estas capillas es exactamente igual a la de la
cios de todas, el capitel interno de la derecha, la mitad superior del capilla norte de la parroquia de Dueñas, única que se conserva por
interno de la izquierda y buena parte de los otros. En cuanto a la capi- haberse eliminado la meridional para construir una sacristía moderna.
lla sur, falta también el vano, la mitad de los capiteles de las columnas Coinciden la embocadura, el tramo recto cubierto de igual modo y con
interiores junto a sus fustes y las basas de todas. idéntico perfil de nervios y formaletes, el hemiciclo —en el que también
Vid. nota anterior.
1 8 6 6 la imposta corre más alta que la del tramo anterior— y el modelo de ven-
El exterior dcha. de la capilla sur difiere a su vez del resto del grupo
1 8 6 7 tana, que también aquí presenta cimacios de nacela mientras los del resto
en que su desbastado es troncocónico. de la capilla están formados por boceles y escocias.
FUNDACIONES MASCULINAS
• 311
y las garras son ahora más amplias. que apoyan sobre las columnas acodilladas en los pilares,
Se cubría este tramo con una bóveda de crucería cua- presentan un perfil triangular formado por tres boceles,
tripartita con ligaduras longitudinal y transversal , I875 sobresaliente el central ; las ligaduras, de sección más fina
1877
situada a la misma altura que las de la nave central, pero que aquéllos, están constituidas por una moldura convexa.
1870 Tras el derrumbe ocurrido en 1998 se conserva prácticamente ínte- cuyas fórmulas se les ha hecho derivar de él, entre los que mencionamos
gra la bóveda del brazo norte y sólo una pequeña parte de la del sur; la por estar relacionados con Palazuelos en otros aspectos, Santa Cruz de
del crucero desapareció junto con el pilar toral S.E., aunque se conser- Rivas o Villalcázar de Sirga.
van los arranques de sus nervios. 1876 Erróneamente ANTÓN (1923 (2): 188, y 1942: 217 y 221) pen-
1871 Capitel 9. A este misma variante pertenece el núm. 10, que ya vimos saba que "Encima del toral [de la capilla mayor], en el muro que lo tras-
al hablar de la capilla mayor. dosa, está tapiada la ventanita de medio punto que muy claramente se
Capiteles 44, 45 (con desbastado troncocónico) y 59.
1 8 7 2 aprecia afuera, bajo el asiento del campanario". Dicho vano, como vere-
1873 Capitel 52. mos al hablar del exterior, iluminaba simplemente el trasdós de las bóve-
1874 ANTÓN, 1923 (2): 187; ANTÓN, 1942: 216 hace alusión a este das.
cambio de imposta. Análoga molduración la encontramos en el tramo recto de la capi-
1 8 7 7
1875 N o es, aunque se ha dicho en ocasiones (por ejemplo, ARA GIL, lla mayor y transepto de Huerta; hemiciclos de las capillas de la cabecera
1986: 23), una bóveda octopartita como ocurre en Moreruela, Sando- de Sandoval; capilla mayor, crucero y naves laterales de Moreruela; naves
val o Valdediós. Bóvedas con ligaduras encontramos dentro de lo cister- de Rueda; transepto, nave central y pandas del capítulo y mandatum de
ciense en los cruceros de Monsalud y Piedra, los presbiterios de Veruela; sala capitular de Fitero; nervios y perpiaños de la panda norte
Villamayor de los Montes, Bujedo de Juarros y Bonaval, si bien en los dos y tramos más septentrionales de la oriental, del claustro de Iranzu; etc.
últimos casos solo existe ligadura longitudinal. Este tipo de nervio lo También lo vemos en la sala capitular y refectorio del monasterio pre-
encontramos además en la catedral de Burgos y otros muchos edificios monstratense de Retuerta.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
328
tallos entrecruzados y abiertos en sus extremos. Todos ellos
se coronan con cimacios en forma de cuarto de círculo que
enlazan con las impostas que recorren los paramentos. Los
fustes son lisos y despiezados en tres o cuatro tambores, y
las basas siguen el clásico modelo ático. Descansan estas
columnas sobre ménsulas que en el caso de las situadas a
oriente y responden al modelo de ménsula-capitel que
vimos utilizado en el hemiciclo de la capilla mayor. La ero-
sión sufrida por la piedra en las primeras impide apreciar
los motivos que las decoraban, mas la situada en el ángulo
N.O. presenta grandes hojas planas que terminan en cogo-
llos desplegados alternadas con estilizados tallos y com-
pletadas con racimos de frutos que nacen del florón que
sirve de remate a la ménsula; la del ángulo S.O. por su parte
es una pieza troncocónica invertida ornamentada, a juzgar
por los escasos restos que presenta, con hojas lobuladas de
diferentes tamaños que nacen, las más grandes de la base, las
pequeñas de la cima.
En cuanto a la organización de los testeros, en el
correspondiente al brazo norte se abre en la parte inferior,
en su mitad oriental, una puerta que comunica con la capi-
lla de Santa Inés (lám. 130). Se compone por este lado de
Lámina 129. un vano en arco apuntado de sección prismática y aristas
Palazuelos. Iglesia, vivas que descansa sobre jambas de análogo perfil mediante
columnilla del ángulo
N.O. del transepto
una imposta en forma de cuarto de círculo. Lo trasdosan
(núms. XIX y 39). dos arquivoltas también apuntadas, pero ahora presentando
una combinación de molduras cóncavas y convexas como la
que muestran las ventanas de los ábsides: la inferior con
una escocia flanqueada por sendos boceles y escocias, y la
superior con bocel entre escocias. Descansan éstas sobre
Por su parte los brazos se cubren con bóvedas de columnillas cuyos capiteles reiteran el tipo vegetal de hojas
cañón apuntado de eje perpendicular a las naves, con for- carnosas que venimos viendo en la parte oriental del tem-
maletes de sección rectangular y aristas vivas en los testeros plo: los de la izquierda con cogollos entrelazados y los de
que apoyan en ménsulas columnilla (lám. 1 2 8 ) . Los 1878
la derecha, ahora troncocónicos, con bolas de hojas super-
capiteles de las del brazo septentrional están decorados puestas de múltiples lóbulos; sus cimacios, en forma de
siguiendo el modelo generalizado de hojas lisas y gruesas: cuarto de círculo, enlazan por un lado con la imposta del
las de ángulo N.O., de desbastado troncocónico, termina- vano interno mientras por el otro se extienden unos centí-
das en bayas y bolas con finos tallos intermedios de frutos metros por el muro. Los fustes son monolíticos y áticas sus
(lám. 129); las del N.E. prácticamente perdidas. En cuanto basas, con anillo estrecho, escocia alta y poco profunda y
a las del brazo meridional, el del ángulo S.E., decorado a toro aplastado decorado con arquillos y garras en las esqui-
base de roleos y hojitas lobuladas, reitera el modelo visto en nas sobre plintos paralelepípedos. Se alzan sobre un alto
los anillos y alguna de las ménsulas columnilla del presbi- basamento abocinado y rematado por baquetón que
terio; el del S.O. presenta un nuevo tipo a base de largos conecta con el zócalo que recorre el paramento . 1879
Lámina 130.
Palazuelos. Iglesia,
puerta de la capilla
de Santa Inés.
Lámina 131.
Palazuelos. Iglesia,
brazo sur del tran-
septo.
1880En Valdeiglesias la puerta se sitúa en el lado occidental del brazo vez se deba a que esta parcela del templo se construyó con anterioridad
norte y en Arroyo un vano dispuesto en ese mismo costado comunica a su afiliación a la Orden. Igualmente carecen de ella algunos monaste-
con el llamado "vestíbulo de fieles". rios franceses, como Pontigny, Silvanes, Thoronet o Senanque (ÁUBERT,
1881Tampoco la encontramos en Melón y Sobrado (la puerta que se 1947: I, 300), mientras que en Fontfroide ocurre lo mismo que en los
abre da paso como en Palazuelos a una capilla funeraria), Rioseco, San ejemplos vallisoletano y gallegos.
Martín de Castañeda o Penamayor, si bien en los dos últimos casos tal
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
330
tines, que comunicaba con el dormitorio común . En el 1882
y del evangelio.
ginal, aunque por el interior la nave central adquiere ahora
mayor anchura. Se cubre ésta con bóveda de cañón con
lunetos decorada con motivos geométricos, abriéndose en
cierran el vano llevan su arista biselada, sin mediar entre cada tramo sencillos vanos termales y un óculo en la cen-
ellos moldura alguna. tral; las naves laterales llevan bóvedas baídas con motivos
decorativos también geométricos y sus ventanas han sido
Ningún otro hueco se practica en este muro, ni hay cegadas. Fajones y formeros son de medio punto. Los pila-
huellas de haberlo tenido. Este hecho es algo extraño en un res exentos son cuadrados y sus responsiones rectangulares,
monasterio cisterciense masculino, ya que normalmente se todos ellos con pilastras dobles en sus frentes. Los dos últi-
ubicaba en este testero —el contiguo a las dependencias que mos tramos están ocupados por el coro alto, elevado sobre
conformaban el pabellón de los monjes— la puerta de mai- arcos rebajados, que se prolonga por el segundo tramo al
1882 En España, ocurre lo mismo en Valldigna, Benifassá, Junquera de únicamente en que en las condiciones para la nueva obra se expresa que
Espadañedo, La Franqueira, San Isidoro del Campo o Rioseco (en el los nuevos cimientos serían más amplios que los antiguos y que no se
caso de Penamayor o Acibeiro, esta carencia responde a que fueron cons- empezaría hasta no hallar una capa de tierra resistente donde asentar las bases.
truidos antes de su ingreso en la Orden, mientras que en Osera la puerta Pub. por GARCÍA CHICO, 1941: 93-97. Vid. también PÓRTELA
1885
se dispone en el lado oriental del brazo sur). En Reigny, Preuilly o Pon- SANDOVAL, 1977, 29 y 328-329.
tigny (Francia), en Tiglieto y Chiaravalle di Fiastra (Italia) o en Valle Publica la escritura GARCÍA CHICO, 1940: 69-72. Sobre esta inter-
1886
Crucis (Inglaterra), la escalera desembocaba en una de las capillas abier- vención vid. URREA FERNÁNDEZ, 1 9 7 4 : 59; BUSTAMANTE, 1 9 8 3 : 2 5 2 -
tas al brazo del transepto (AUBERT, 1947: I, 300 y 304; PlSTILLI, 1990: 254; y MERINO DE CÁCERES, 1999: 655-659; idem, 2000: 13-15.
135-136). 1887Así consta en la citada escritura de concierto: derribar los dos pilares que
Volveremos sobre estos aspectos al ocuparnos del análisis de las
1 8 8 3 quedaron en pie con las tres capillas de canteria.
dependencias monásticas. Yten se han de mafifar las puertas que agora estan abiertas que no han de servir
1 8 8 8
1884 MANRIQUE, 1642-1659: IV 644 y 654. Erróneamente MERINO dejando en la puerta del cercado una bentana para la luz del choro bajo de silleria y se a
DE CÁCERES (1999: 655; idem, 2000: 13) señala el hundimiento hacia de abrir otra puerta para la entrada del coro segun y de la manera que va en la traza
1580 y como causa un fallo en la cimentación del edificio, basándose señalada.
FUNDACIONES MASCULINAS
• 311
dos variantes: por un lado, aquellos de hojas carnosas que tos ; por otro, grandes hojas planas que nacen del colla-
1895
llevan por remate múltiples combinaciones vegetales —bayas rino y se sitúan en los ángulos, acompañadas por otras
y bolas, cálices, caulículos, hojas lobuladas u otras que se semejantes que sobresalen entre ellas —ambas con los mis-
bifurcan y anudan con sus compañeras, etc. (lám. 133)— mos remates florales que el modelo anterior— , que en la1896
1889 Tras la intervención de Nates apenas hubo actuaciones en esta zona cortan a partir de los segundos pilares exentos. Sin embargo, aunque
del templo: entre 1688 y 1689 se hicieron de nuevo los antepechos, un aquello suele ser lo habitual, hay monasterios en los que las columnas o
nuevo asiento de la sillería y se reforzó el piso con vigas; entre 1745 y pilastras bajan hasta el suelo, como en Osera, Rueda, La Oliva o Fitero;
1746 se compuso la escalera y se mudó el órgano de sitio; y entre 1773 en Huerta parece que el aspecto que muestran los dos primeros pilares
y 1775, con motivo de unas obras realizadas en el claustro y dependen- exentos es resultado de una reforma moderna.
cias anejas se demolio parte de una bobeda de la nabe coletoral de dicha yglesia por la 1891 Núms. XXII, XXIII, XXVI y XVII. Zócalos semejantes los vemos
parte del claustro (Libro de Obras). en San Andrés de Arroyo, Matallana, Retuerta, Aguilar de Campóo, etc.
1890 ANTÓN pensaba que al carecer los dos primeros pilares exentos de 1892 Recordemos que la zona occidental de los pilares X X V a XXVIII
las típicas columnas orientadas a la nave central interrumpidas a media fue reformada en la decimosexta centuria. Por otro lado, hay que anotar
altura para posibilitar el emplazamiento del coro, éstas se localizarían que estas columnas acodilladas presentan el mismo diámetro que las de
"en los pilares desaparecidos" (1942: 225). De ser cierto sería algo seme- las embocaduras de las capillas de la cabecera.
jante a lo que sucede en Armenteira, en donde únicamente las pilastras 1893 Así ocurre en la columnas núms. 56 y 57 (XXIII), 47 y 48 (XXII).
de los últimos pilares exentos quedan interrumpidos a media altura des- 1894 Núms. 41, 43 a 47, 49, 50, 53, 57, 60 a 63, 65, 66, 67, 69, 71,
cansando sobre ménsulas de rollos o en Iranzu o Sacramenia (las corres- 72, 74, 75 y 78.
pondientes a los pilares torales, hoy amputadas, en origen llegaban al 1895 Núms. 51, 58 y 77.
suelo; VALLE PÉREZ, 1991 (2): 103 nota 8), en donde las columnas se 1896 Núm. 64 y 76.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
332
mayoría de los casos llevan otras lobuladas superpuestas . 1897
Lámina 136.
Palazuelos. Iglesia,
Bajo ellas se sitúan los arcos formeros de separación
primer tramo de la nave de naves, cuya clave destaca considerablemente por encima
central, costado sur del arranque de perpiaños y cruceros de la nave central . 1905
1898 Núm. 68. están tallados los tres boceles en una misma pieza junto con la dobladura
1899 Núm. 73. del toral y el formalete, pero en los correspondientes a los ángulos occi-
1900 Núm.55. Se puede poner en relación con el capitel de la columni- dentales el salmer de todos ellos lo constituye una simple pieza prismá-
lla del ángulo S.O. del transepto. tica sin moldurar.
1901 Núms. 41, 50, 60 a 62, 66, 69, 71 y 77; en los núms. 68 y 70 la La de mediodía tiene cegada la mitad inferior; la opuesta sólo un
1 9 0 4
pero todavía se conserva en ese mismo tramo del costado opuesto; el espacio entre arco y ventana es mayor.
resto desapareció oculto bajo el piso del coro.
FUNDACIONES MASCULINAS
• 311
1906 Volveremos sobre este punto al trazar el proceso crono-construc- 1909El capitel de la columna meridional del perpiaño del lado del Evan-
tivo. gelio está muy deteriorado, aunque creemos que seguiría el modelo
1 9 0 7 ANTÓN, 1942: 216 señala que estos arcos no están doblados. empleado en las otras columnillas.
1 9 0 8 Faltan en las columnillas de la nave norte.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
334
Lámina 139.
Palazuelos. Iglesia,
primer tramo de la
nave de la epístola
hacia la cabecera.
Lámina 140.
Palazuelos. Iglesia,
primer tramo de la
nave de la epístola
hacia los pies.
formaletes y columnitas se levantan sobre una pieza cúbica tro alto por este lado. La consiguiente apertura en el tercer
a modo de salmer, en cambio en la de la Epístola cruceros tramo de una nueva puerta hacia el sobreclaustro hizo que
y formaletes son independientes y están moldurados desde se removiera el muro en el que se horada, por lo que no
la base. Por otro lado, el segundo perpiaño de la nave sep- podemos asegurar que en origen hubiese aquí una ven-
tentrional es más apuntado y elevado que el anterior, no tana . Si la hay, en cambio, en el costado occidental del
1912
está trasdosado por esas hiladas y su dobladura apoya direc- cuarto tramo: rematada también en arco de medio punto
tamente sobre las columna acodadas en los pilares, com- pero más esbelta y estrecha que aquélla, sus aristas están
partiendo el salmer —constituido por un simple prisma ahora rebajadas por una escocia. El ventanuco cuadrado
liso—, con nervios y formaletes (lám. 1 4 2 ) . 1910 situado bajo el coro en este mismo lado es moderno.
Varias ventanas iluminaban las naves laterales del tem- En el primer tramo de la nave septentrional, apo-
plo, todas ellas cegadas en el siglo XVI. En el segundo tramo yando sobre la imposta que recorre el paramento, se dis-
de la meridional se conserva una en arco de medio punto pone una ventana de configuración semejante a la del brazo
con la arista recorrida por un fino baquetón que se pro- norte del transepto: muy alta y abocinada, con arco de
longa sin interrupción por las jambas y con amplio derrame medio punto de perfil rectangular y aristas vivas que des-
interno; bajo ésta, a la izquierda, se ven las huellas de un cansa directamente sobre jambas también aristadas. Nin-
vano adintelado cegado cuya altura hace pensar que antes de guna se abría en los dos siguientes tramos. Sin embargo en
la remodelación llevada a cabo en la escalera del coro a el cuarto se abren dos que siguen el modelo que hemos
mediados del XVIII se accedía desde el templo al claus-
1911 visto en el segundo tramo de la nave sur: de arco de medio
Lámina 141.
Palazuelos. Iglesia,
solución de apeo
de arcos y nervios
en el soporte XXIV
Lámina 142.
Palazuelos. Iglesia,
primer tramo de la
nave del evangelio
hacia los pies.
punto —la del costado oeste ligeramente apuntada y más apoya, sin mediar imposta, sobre unas jambas carentes
alta— con su arista perfilada por baquetoncillo; el pequeño como aquél de molduración . I9I3
vano cuadrado abierto en la parte baja del costado norte Por lo que respecta al cuerpo inferior de la fachada
será contemporáneo a la obra del coro. occidental, se sitúa una portada tapiada que por este lado
En cuanto a las puertas, en el primer tramo de la nave consta de un sencillo arco rebajado que descansa sobre las
meridional se abre la de monjes que conducía al claustro. jambas sin mediar imposta alguna, uno y otras sin ningún
Actualmente tapiada, consta por este lado de un arco reba- tipo de molduración.
jado de perfil rectangular y aristas vivas doblado por otro En la nave norte se disponen tres puertas. Una
de iguales características, aunque en esta ocasión es apun- pequeña puerta situada en el extremo oriental del primer
tado, volteando ambos directamente sobre jambas de aná- tramo permite el acceso al husillo de subida a cubiertas. Se
loga configuración (lám. 136). En el extremo oeste del trata de un vano adintelado con mochetas de perfil de
último tramo de esta misma nave se practica la puerta de nacela, sin molduración alguna, trasdosado por un arco de
conversos, así llamada por ser utilizada por aquéllos para descarga (lám. I 3 7 ) . La escalera de caracol se ilumina
1914
acceder a la iglesia desde la zona occidental del complejo por una sola aspillera abocinada y se cubre con una cúpula
monástico que les estaba destinada: parcialmente cegada, apuntada reforzada por dos nervios de sección rectangular
posee un solo arco rebajado de sección prismático que y aristas vivas que se cruzan sin clave destacada y descansan
1913Erróneamente LÓPEZ DE GUEREÑO, 1998: 258 e idem, 2003: 105 1914 La parte superior del vano fue cegada en época moderna para adap-
nota I9, señalaba que no había puerta de conversos y que éstos entrarían tar el batiente de madera que cerraría la puerta.
a través de la portada occidental. Tampoco ÁNTÓN, 1942: 210 ni
CARRERO SANTAMARÍA, E., 1998 (2): 136 mencionan esta puerta al
señalar las existentes en el templo.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
336
sobre jambas de semejantes características. Resulta extraña
la apertura de un vano en esta zona de la nave , aunque 1916
seco se dispone el husillo en la zona oriental de la nave del Evangelio, sufrido para instalar la escalera de subida al coro.
como en Palazuelos; en Castañeda en cambio lo hace centrado en el N o son raros los altares, piscinas y armarios dispuestos a lo largo
1 9 1 9
último tramo de la colateral norte. de las naves en monasterios cistercienses (véanse por ejemplo en Noir-
1916 Recordemos que en Valbuena, Bujedo de Juarros y, como más ade- lac, Loc-Dieu, Beaulieu o Valmagne), que confirma la presencia en las
lante veremos, también en Matallana se abría una puerta en los tramos colaterales de altares desaparecidos (AUBERT, 1947: I, 320). Sin embargo,
de los pies del costado septentrional, y que en aquél caso hemos identi- el armario situado en el costado norte del cuarto tramo debe relacio-
ficado con una puerta de muertos para uso de los conversos. narse sin duda con la colocación en este lugar de una pila bautismal ya
Así opina ARA GIL, 1986: 24. Debemos señalar, aunque más ade-
1 9 1 7 en el siglo XVI.
lante hablaremos sobre ello, que la puerta que conduce a la mencionada Desconocemos quienes descansaron en esos lucillos.
1 9 2 0
capilla de Santa Inés es coetánea a la fábrica de ese recinto y al propio 1921 Sobre estos aspectos, afines a otros monasterios de la Orden, vid.
templo, por lo que no hay que pensar que la primitiva puerta de muer- lo que se dice en la monografía de Valbuena.
tos cambió de función al construirse la capilla. MERINO DE CÁCERES,
FUNDACIONES MASCULINAS • 311
decorativos empleados en los capiteles interiores aparecen solo, acompañados en este último caso por peque-
aquí nuevos modelos, por lo que distinguimos: ñas hojitas lobuladas que nacen del collarino . El 1930
- Capiteles de amplias hojas lisas y carnosas remata- desbastado de todos ellos es troncocónico, marcán-
das en brotes vegetales que cobijan bolas, alternando dose en la parte superior de la cesta un ancho
con tallos . Presentan todos un desbastado tron-
1926 reborde.
1922 Algunos autores (LAMBERT, 1931: 266, nota 18; ANTÓN, 1942: ENRÍQUEZ, MARTÍN y CRUZ, 2009: 29. También se ha incidido, dejando
213; ARA GIL, 1986: 22; o VALLEJO, 1995: 61) han incidido en la seme- de lado naturalmente el hecho de que sea poligonal, en su relación con
janza que presenta el escalonamiento de las tres capillas de la cabecera al el de Las Huelgas de Burgos (ANTÓN, 1 9 2 3 (2): 190; ANTÓN, 1 9 4 2 :
que se añaden en sus extremos las de la sacristía y Santa Inés, con el que 220 y 222; GUTIÉRREZ PAJARES, 1993: 38); no obstante ni la tipología
muestra las cinco que integran la cabecera de Valbuena. de vanos, que se disponen en dos pisos -aspecto ya apuntado por
El correspondiente a la capilla meridional es más alto que el de las
1 9 2 3 Antón-, contrafuertes, cornisas o capiteles del templo burgalés tienen
otras dos capillas. que ver con los empleados en Palazuelos. En cambio, sí encontramos de
Muy alteradas, han desaparecido en todas ellas parte de las jambas
1 9 2 4 nuevo extraordinaria identidad con la cabecera de Dueñas (también seña-
y arcos que forman el vano. Por otro lado, LAMBERT, 1931: 266, seña- lada por ANTÓN, 1923 (2): 190; idem, 1942: 219), aunque presenta
laba que el ábside central de San Andrés de Arroyo, por el exterior, era algún detalle, como la imposta que recorre paramentos y contrafuertes
una réplica exacta al de Palazuelos, matizando ANTÓN, 1942: 222 y a la altura del alféizar de las ventanas, que no vemos en Palazuelos (la
ARA GIL, 1990: 54, que las proporciones del vallisoletano son "un poco sobre elevación del ábside central es fruto de una intervención moderna).
más esbeltas". Sin embargo, a pesar de que en líneas generales - m e refiero 1925 Este detalle falta tanto en San Andrés de Arroyo como en Dueñas.
a que en ambos casos son poligonales- y en determinados elementos - Capiteles izquierdos de las ventanas 1, 2 y 5.
1 9 2 6
como puede ser el tipo de vanos o algunos modelos de capiteles- guar- Ventana 2.
1 9 2 7
dan estrecha relación, difieren tanto en su estructura (recordemos que el Ventana 3, capiteles izquierdos.
1 9 2 8
hemiciclo de Arroyo tiene siete paños y es más amplio) como en otros Ventana 3, capiteles derechos.
1 9 2 9
Lámina 148
Palazuelos. Iglesia, capiteles
dchos. de la ventana de la
capilla sur.
- Capiteles de grandes hojas de múltiples lóbulos, El tramo recto, que presenta la misma altura que el
muy carnosas y con nervios muy pronunciados, dis- hemiciclo y su cornisa es una prolongación de la de éste,
puestas en dos niveles. Mientras en unos de los sobresale bastante en planta respecto a las capillas laterales.
ejemplos los lóbulos son poco numerosos y apun- Este hecho, unido a que se marque el paso hacia éstas
tados y su desbastado es troncocónico , en los 1931
mediante un codillo que en la parte alta del presbiterio se
otros el modelado es más suave y redondeado, de convierte en un fino contrafuerte —similar a los del ábside—
las hojas emergen cabecitas humanas, entre los dos que divide este tramo en dos partes —más estrecha la orien-
capiteles aparece una máscara grotesca y su desbas- tal—, provoca que el hemiciclo adquiera el aspecto de un
tado es troncopiramidal (lám. I 4 6 ) . 1932
polígono de siete paños en lugar de los cinco de que en rea-
- Capiteles figurados. En uno de los casos se dispo- lidad consta . I935
nen parejas de dragones afrontados que cruzan cue- Las capillas laterales presentan hemiciclos más estre-
llos y sus colas, abriendo sus fauces para chos que su tramo recto, mostrando únicamente el del norte
morderse . En el otro, dos sirenas-pájaro provis-
1933
un codillo en la unión de una y otra zona. Las ventanas que
tas de caperuza y con largas colas de serpiente entre- en ellos se abren reiteran el esquema desarrollado en el inte-
lazadas, una de ellas soplando un cuerno . Entre 1934
rior, aunque de nuevo tenemos que hacer notar ciertas sal-
cada grupo sobresale el remate acogollado de un cro- vedades y detalles diferenciadores también con respecto a
chet (lám. I47). las de la capilla mayor . I936
parte inferior de sus ventanas, que recientemente ha sido - u n solo piso de crochets de nervio central muy pro-
recuperada. fundo y base redondeada . I938
Ventana 2.
1 9 3 1 1 9 3 4 Ventana 5, capitel exterior derecho. Sobre la iconografía de las sire-
1932 Ventana I, capiteles derechos. Semejantes los encontramos en Santa nas-pájaro, vid. MATEO y QUIÑONES, 1 9 8 7 ; PÉREZ SUESCUN y RODRÍ-
Cruz de Ribas (capitel derecho de la embocadura de la capilla mayor) o GUEZLÓPEZ, 1997: 60-63.
Villalcázar de Sirga (cabecera y naves). Posiblemente sea esta la causa que ha originado que algunos estu-
1 9 3 5
derecho del exterior del ventanal del hastial meridional del transepto de del vano. Asimismo, mientras las basas de la ventana sur han sido par-
Dueñas (MARTÍNEZTEJERA, 2002 (5): 1241, comenta cómo los capi- cialmente amputadas, las del norte han desaparecido ocultas por un
teles del templo palentino "recuerdan la cabecera de Palazuelos", sin nuevo alféizar.
especificar nada más) y en uno de los capiteles exteriores izquierdos del Ábside sur.
1 9 3 7
vano de la capilla sur de Santa Cruz de Ribas. Ábside norte, capiteles izquierdos.
1 9 3 8
FUNDACIONES MASCULINAS
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Los tramos rectos de estas capillas están práctica- en relación con la nave central, ya que ambos poseían idén-
mente ocultos por la capilla de Santa Inés y la de la sacris- tica altura y la una parecía prolongación del otro . Sal- 1943
tía, percibiéndose por encima de ellas la cornisa con vando la diferencia de altura entre éste y la capilla mayor se
canecillos que, como extensión de la de los ábsides, reitera disponía un muro diafragma que se elevaba muy por encima
el modelo ya visto en la mayor. de la cubierta a doble vertiente del crucero —asentada a su
Por lo que respecta al transepto, el crucero destacaba vez sobre una cornisa de nacela con canecillos de proa— , 1944
en alzado sobre la cabecera y sus propios brazos, pero no adquiriendo el aspecto de una espadaña . En efecto, en la
1945
tramos en el capitel exterior derecho de la ventana de la capilla norte de del brazo sur desaparecieron durante el derrumbe de 1998.
Dueñas y sala capitular de Bujedo de Juarros. 1944Al sobresalir los canecillos respecto a la cornisa, muchos de ellos
En los dos ábsides la moldura cercana a la capilla mayor bien ha
1 9 4 0 han sido parcialmente cepillados.
perdido parte de su volumen o sufre un gran deterioro. La capilla norte 1945En San Andrés de Arroyo, edificio con el que ya hemos señalado
de Dueñas presenta estas mismas características. numerosos paralelos, sucede algo semejante, aunque en este caso el muro-
En la parroquia de Dueñas el ábside meridional desapareció al
1 9 4 1 diafragma no se eleva tanto como en Palazuelos y carece de campaneras,
construirse en época moderna una monumental sacristía, aunque per- situándose en él la espadaña sobre el cierre meridional del crucero. N o
manece casi intacto el norte, cuya ventana carece de chambrana. conocemos, sin embargo, ejemplo alguno similar al que estudiamos —en
Volveremos sobre estos aspectos al estudiar el proceso crono-cons-
1 9 4 2 Silvanes (Francia), el cuerpo de campanas se eleva el mismo lugar que en
tructivo del templo. Palazuelos, pero su estructura es cuadrangular—.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
340
punto con la arista achaflanada que apea sobre unas jambas
también biseladas; lo trasdosan dos arquivoltas - l a inferior
profunda, abocinada y con la arista rebajada, la superior
sencilla y aristada- que descansan en las jambas a través de
una moldura convexa. Remata el hastial un piñón agudo
destacado sobre el tejado . 1948
vano de pequeñísimo tamaño en arco de medio punto. tramos restantes permaneció la parte inferior de los muros,
Remataba de forma apiñonada con una cornisa de nacela, de buena piedra sillería, así como parte de los contrafuer-
en cuyo vértice se disponía una cruz patada de piedra . 1946
tes prismáticos que marcaban la compartimentación interna
Cada brazo, más bajo que el crucero y capilla mayor, en tramos; éstos estaban provistos de un goterón a media
se cubre con un tejado a doble vertiente soportado por una altura que se prolongaba en imposta por los paramentos
cornisa sobre canecillos análoga a la ya vista. sirviendo de arranque a las ventanas y situándose el apoyo
de las cubiertas un par de hiladas por debajo.
El hastial norte está parcialmente oculto por la capi-
lla de Santa Inés y el macizo de la escalera de subida a Separando el hastial del transepto del primer tramo
cubiertas, quedando libre la parte superior, en donde se de la nave norte, y a modo de monumental contrafuerte, se
abre una esbelta y estrecha ventana, muy abocinada, com- levanta un macizo prismático que sobrepasa la altura de
puesta por un arco de medio punto apeado directamente dicha nave y que alberga en su interior el husillo de subida
sobre las jambas, uno y otras de sección rectangular y caren- a cubiertas. Presenta en el tercio inferior un goterón que
tes de molduración. Termina el muro horizontalmente abraza todo su perímetro, y sobre éste, en el frente, se dis-
mediante una sencilla cornisa de nacela . 1947
pone una pequeña ventana en arco de medio punto, de sec-
En cuanto al meridional, tampoco se puede obser- ción prismática aristada, que descansa sin intermediarios
var en su totalidad al haberse adosado por este lado las sobre unas jambas de idénticos caracteres, y provista de
dependencias monásticas, destacando únicamente la zona fuerte derrame. Culmina bruscamente, sin cornisa,
superior por encima de la sacristía. En ella se dispone una mediante un casquete semiesférico.
ventana, parcialmente oculta por el tejado de esa última Consta la nave septentrional de cuatro tramos, más
construcción y cegada, que difiere de la abierta en el testero alto el primero, separados por robustos contrafuertes pris-
opuesto: en este caso se trata de un estrecho vano de medio máticos, sensiblemente más estrechos a medida que nos des-
1946Sobre la presencia de campanarios de piedra en monasterios de la de Bujedo de Juarros y Villamayor de los Montes (VALLE PÉREZ, 1986:
Orden, vid. la monografía de Valbuena. 77 y 86; CARDERO LOSADA, 1994: 133). N o obstante, debemos remar-
ANTÓN, 1923 (2): 182; idem, 1942: 237 nota 16, dice que el pri-
1 9 4 7 car que el de Palazuelos no es tan agudo como los empleados en los tem-
mitivo remate apiñonado "ha sido tajado horizontalmente", si bien no plos burgaleses.
hay huellas de una posible remodelación ni razones aparentes para pen- 1949El marco de yeso que presenta es moderno.
sar que no fuese así desde un principio.
1948ANTÓN, 1942: 221, relacionó este piñón con los de Las Huelgas
de Burgos, que por otro lado han sido señalados como precursores de los
FUNDACIONES MASCULINAS
• 311
1950 Si el primero presenta una anchura de I ' 7 7 m. el situado en el Santa Cruz de Ribas, etc. Y también se emplean en portadas: las del
extremo occidental mide I'56 m. claustro de las catedrales de Burgos y León, la meridional de Nuestra
Parte de los sillares del remate han sido sustituidos por ladrillo.
1 9 5 1 Señora de las Fuentes, de Amusco, y tal vez —aunque su deterioro no
1952 También en el resto de los casos la última hilada de sillares ha permite afirmarlo con seguridad, en la que da paso al vestíbulo de San
dejado paso al ladrillo. Andrés de Arroyo; por otro lado una cabecita también veíamos en el vér-
1953 Este último modelo de contrafuerte lo encontramos en numero- tice de una de las arquivoltas de la portada occidental de La Espina.
sos edificios góticos, en concreto en algunos con los que ya hemos visto En la sesión celebrada el 17 de junio de 1888 de la Comisión Pro-
1 9 5 7
otros puntos de contacto: catedrales de Cuenca y El Burgo de osma, vincial de Monumentos de Valladolid se leyó un informe redactado por
Las Huelgas de Burgos, Villamayor de los Montes o Villalcázar de Sirga. el Sr. Blanco y Labradilla en el que se decía de esta puerta lo siguiente:
1954 En los planos de MERINO DE CÁCERES (1999: 656; idem, 2000 ...elprimitivo ingreso del templo está completamente tapiado; pero queda al descubierto el
(2): A H - I y AH-2) se reflejan, además del arco que forma el vano, dos archivolto, deteriorados fustes y cabezas humanas sobre las que arrancaba el arco con
arquivoltas más. severa gallardía, resguardado por saliente cornisa y laboreadas ménsulas... (A.H.P.V,
El cimacio de la columna de la derecha ha desaparecido.
1 9 5 5 Sección Histórica 271, n.9-96; transcrito por ORTEGA RUBIO, 1895:
1956 En diversos edificios que recogen influjos de la catedral de Burgos 219). Por su parte ÁLVAREZ DE LA BRAÑA, 1903-1904: 292, señala que:
aparecen ventanas cobijadas por chambranas que apean en ménsulas con "Queda al descubierto del muro su arco apuntado, cuya archivolta mues-
cabecitas humanas: capilla mayor de Villamayor de los Montes, fachada tra en sus arranques dos informes cabezas humanas y otra más en su vér-
occidental de Bujedo de Juarros, paño central de la capilla mayor de tice".
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
342
tambores; y capiteles troncopiramidales que presentan un
nuevo esquema decorativo muy sencillo: hojas lisas y muy
planas, con nervio central marcado, con estilizadas hojas
nervadas en los ángulos superiores, que parecen una reduc-
ción, una esquematización de los tipos desarrollados en la
cabecera ; se coronan éstos con cimacios de nacela que se
1958
Lámina 154. oriental está realizado en buena sillería, al igual que las par-
Palazuelos. tes bajas de la nave, apreciándose en el resto algunas zonas
Iglesia, vista en que la sillería fue sustituida en tiempos pasados por
exterior
del costado ladrillo (lám. I 5 4 ) . 1962
el paramento, consta de un vano estrecho y alargado rema- En el primer tramo —como en la nave opuesta, más
tado en arco apuntado, de perfil rectangular y chaflán en alto que los restantes—, se abre la Puerta de Monjes, en la
las aristas, que reposa sobre unas jambas de idéntica sec- actualidad cegada (lám. 155). Presenta por este lado doble
ción. Lo trasdosan dos arquivoltas también apuntadas y arco ligeramente apuntado de sección prismática: el infe-
molduradas a base de un grueso baquetón en la arista que rior moldurado por un grueso bocel más una escocia y
provoca sendas escocias en rosca e intradós. Voltean éstas media caña en la rosca, y el superior con un grupo de tres
sobre parejas de columnillas acodilladas de características baquetones en la arista flanqueados por sendas escocias.
parecidas a las que veíamos en la zona oriental del templo: Voltean ambos mediante una imposta repicada sobre las
basas áticas, ahora con voluminosas garras en los ángulos, jambas, las exteriores con aristas vivas, mientras que las inte-
sobre plintos cúbicos; fustes lisos compuestos por diversos riores continúan la molduración baquetonada de su arqui-
1958 Decoración análoga podemos encontrar en la iglesia de La Espina 1961 Secretaría de Estado de Cultura. Archivo central, Tesoro artístico,
(Tipo II de los codillos y I.5 de los capiteles de las columnas). Vid. ade- C / 88. 639 y 87.406.
más la nota siguiente. Debemos añadir además que el terreno se encuentra por este lado
1 9 6 2
1959 Las ventanas que se practican en la nave norte de Santa María de fuertemente sobreelevado y con abundante vegetación, lo que impide un
Dueñas o en la cabecera de Santa María la Blanca, de Villalcázar de Sirga, correcto análisis de los paramentos.
son prácticamente iguales a esta de Palazuelos (tipología, molduración 1963 Aunque en Valbuena, La Espina, Matallana y otros monasterios no
de arquivoltas y cimacios, modelos de capiteles y basas). Únicamente se llegaron a construir nunca contrafuertes del lado del claustro, en algu-
difieren en que en nuestro caso el cimacio se prolonga un poco más por nos sí los vemos, por ejemplo, en Fitero, Osera, Armenteira o Meira.
el muro.
1960 A ello hay que añadir que los sillares que conforman la última
hilada del muro del cuarto tramo son muy irregulares, debiendo corres-
ponder igualmente este remate a la decimosexta centuria.
FUNDACIONES MASCULINAS • 311
de estas sepulturas. El 4 de abril de 1284 Rui Gómez de Camargo se cegó la puerta, mientras que un par de dovelas del lado izquierdo lo están
comprometía a entregar 1.500 mrs. anuales a cambio de una misa dia- por un amplio arco del claustro moderno.
ria y un aniversario anual el día que muriese, por él, por su primera mujer
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
344
Aparece dividida en tres calles, la central mucho más
ancha y destacada sobre las laterales, traduciendo la distri-
bución interior de la iglesia, por potentes contrafuertes pris-
máticos que siguen el modelo empleado en el último tramo
de la colateral norte, algo más elevados los que ciñen la cen-
tral (lám. 1 5 6 ) . 1971
La fachada occidental, a pesar de las reformas e inter- minar en un piñón que, siguiendo el diseño utilizado en el
venciones sufridas desde finales del siglo XVI, es testimonio brazo sur del transepto, destacaría por encima del tejado a
de una sencillez estructural afín a la de otros templos de la doble vertiente de la nave o de forma horizontal, como
1977
sido ampliado a lo ancho y el arco apuntado sustituido por sillares seme- en el caso del situado a oriente con importantes faltas de material.
jando un arco rebajado.
1980 Erróneamente ARA GIL, 1986: 24 apunta que "Comunicaba esta
capilla con el exterior por una puerta situada a los pies, hoy cegada".
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
346
proa (lám. 159). El costado norte aparece compartimen-
tado por un contrafuerte prismático, algo resaltado, que
sube hasta la cornisa interrumpiendo el recorrido de los
canecillos. En los ángulos se disponen potentes contra-
fuertes de esquina que hacia el norte llegan hasta el alero
mientras que hacia el este y oeste respectivamente rematan
en talud. En estos dos lados encontramos las ventanas, que
muestran los mismos rasgos que veíamos por el interior.
Las arquivoltas están molduradas por combinaciones de
escocias y boceles. Las columnillas llevan basas áticas, fus-
tes despiezados en cinco tambores y capiteles de desbas-
tado troncocónico provistos de gruesas hojas lisas con
complicadas terminaciones vegetales, en alguna ocasión con
tallos intermedios ; sólo en el caso de los capiteles dere-
1986
inferior a base de dos boceles separados y flanqueados a su llevan todos ábacos lisos y están rematados por cimacios
vez por escocias, la superior con un único bocel también convexos que se prolongan en imposta por el paramento.
entre escocias. Cargan éstas sobre columnillas de basas áti-
cas con lengüetas en las esquinas y capiteles de desbastando Cuando Melchor Gaspar de Jovellanos visita el 2 7 de
troncocónico —al menos son así los de la ventana oriental— septiembre de 1791 el monasterio de Palazuelos señala que
decorados con hojas carnosas de remates acogollados, con en una capilla situada en la iglesia "del lado del Evangelio,
tallos intermedios en algunos casos , ábaco liso y cima-
I983 hay muchos sepulcros de piedra con esculturas del gusto
cio convexo que se prolonga por el paramento a modo de gótico y algunas con armas", aunque no la describe ni
imposta y se detiene al llegar a los formaletes . 1984 comenta nada sobre su advocación . Lo mismo habría 1988
mente sobre unas jambas de idéntica sección. los de Martí y Monsó, quien al hablar de algunos de los
sepulcros indicaba que algunos de ellos estaban "en lamen-
A lo largo de los muros y mitad oriental del recinto table estado arrinconados en un cuarto húmedo y obs-
se encuentran arrumbados los restos de siete sepulcros . I985
curo" . Habrá que esperar ya a principios del siglo XX a
1990
Por el exterior, presenta menor altura que la capilla que Álvarez de la Braña sugiera que esta capilla es la que
contigua y está cubierta con un tejado a una sola pendiente bajo la advocación de Santa Inés y con finalidad funeraria
que asienta sobre una cornisa anacelada con canecillos de aparece mencionada en un documento de I 2 9 5 . Desde 1991
angulares de las capillas. Este detalle ha hecho pensar a LÓPEZ DE GUE- Ejemplos similares los vemos en el monasterio de Valbuena (capi-
1 9 8 7
REÑ0 (1997: II, 507 nota 6) que en esos casos se alteró la primitiva lla de San Pedro, puerta de monjes y claustro —tipo VI—), en donde ya
altura de los ábsides para hacerlos más esbeltos. Sin embargo ni en Pala- apuntamos relaciones con otros conjuntos.
zuelos ni en esos dos ejemplos hay indicios claros y ciertos que permi- 1 9 8 8 JOVELLANOS, 1 9 1 5 : 4 7 .
tan tal suposición. 1989"Arrimadas a las paredes de los muros y en una capilla yacen (...)
1985 En septiembre de 1986 para evitar la entrada de saqueadores y pro- no escaso número de sepulcros..." (ORTEGA RUBIO, 1895: II, 220)
fanadores en el templo, se cegaron las ventanas de la capilla, se cerró el 1990MARTÍY MONSÓ, I 8 9 8 - I 9 0 I : 539.
acceso a la iglesia y se trasladaron a su interior los tres sepulcros que 1991ÁLVAREZ DE LA BRAÑA, 1903-1904: 292 y 295.
FUNDACIONES MASCULINAS
• 311
entonces todos aquellos que se han aproximado a su estu- fernandez los sobredichos nos obligamos todos quatro e cada
dio coinciden en atribuirle ese título y el carácter mortuo- uno de nos por si que doquier que se nos acaesca nuestro
I992 finamiento seyendo en nuestro poderio que nos mandemos
El 2 6 de marzo de I 2 9 5 el abad Andrés de Palazue- traer a enterrar al monasterio dicho a estas sepolturas dichas
los asignaba sepulturas en la iglesia a Francisco García Del- i quales quier de nos que lo asi non fi¡iese que peche la pena
gadiello y a sus cuatro hijos en atención a los servicios de los mil mrs. a vos el abbat i convento...
prestados al cenobio : I993 De este modo, según este instrumento algunos miem-
...por que vos fernando garcia el dicho avedes fecho muchas
bros de la familia García Delgadiello se enterrarían en la
capiella por entran a la vid et esta el altar de santa Ignes en s e p u l t u -
ayudas al monesterio de santa maria de palazuelos (...)
ras dispuestas en la pared de la yglesia so la puerta de la vid y en
rebebimos el vuestro cuerpo e de vuestrosfijos que dichos son
otras de la parte del coro. Además el altar dedicado a la santa
a sepoltura en el nuestro monesterio dicho las quales sepol-
se m u d a r í a a la otra parte contra el coro.
turas son estas. En la capiella poro entran a la vid et esta
el altar de santa Ignes. Et nos el abat i el convento sobre- Identificar entonces la capilla del documento con la
dicho nos obligamos de mudar el dicho altar a la otra parte construcción que venimos estudiando es complicado. En
contra el coro. Et defa¡er dos sepolturas de la parte del coro primer lugar hay que dejar claro que el término capiella no
fasta el dia de san martin de noviembre primero que viene. alude necesariamente a una estructura arquitectónica con-
E deste dia de san juhan primero que viene que en la pos- creta y específica sino que bien puede referirse a un tramo
tremera semana de junio primero que viene a un año que cualquiera del templo. Además, esa puerta de la vid, por su
fagamos otras dos sepulturas de la otra parte en la pared de cercanía al lugar donde se instalaría el coro de monjes, cre-
la yglesia so la puerta de la vid dicha de dos adobes en par; emos que debe corresponderse con la abierta en el segundo
las otras dos sepolturas dichas eso mismo, i estas que sean tramo de la nave del Evangelio y que conduce al exterior,
tales como es la sepoltura de Ruy Gomez de Camargo que
bajo la cual y en el suelo, recibirían sepultura algunos de
es en este mismo monesterio. E si por aventura a estos pla-
los miembros de esta familia, mientras que otros lo harían
zos dichos nos el dicho don Abbaty el convento nonfi¡iere-
de la parte del coro, tal vez en junto al intercolumnio. El altar
mos estas sepolturas dichas en estos dichos logares y mudar
de santa Inés, situado hasta entonces en el muro del Evan-
gelio, sería trasladado junto a la sillería del coro.
el dicho altar asi como dicho es que nos pechemos a vos fran-
cisco garcia sobre dicho o a quien esta carta mostrar por vos Así pues, la capilla de Santa Inés se situaba en 1295
o por vuestros fijos los sobredichos mil mrs. de la moneda en el segundo tramo de la nave norte del templo, descono-
nueva que fa¡e die¡ dineros novenos el mrs; fa¡er por fa¡er ciéndose la advocación bajo la cual estaría la que estudia-
las sepolturas dichas y coger a todo tiempo del mundo en ellas mos. N o obstante, en época moderna sí que tuvo aquella
a vosfrancisco garcia y a los vuestrosfijos. Et que otro nin- intitulación, tal y como parece confirmarse por otros testi-
guno non sea enterrado en esta capiella dicha sino los que monios documentales:
fueren de nuestro linage ellos queriendo i el enterramiento Cuando en el Tumbo se alude a la consagración reali-
sea en esta guisa so la tierra lanamente sin erguamiento de zada del templo y claustro del monasterio en I 5 5 4 durante
otra sepoltura. Et si por aventura nos o otros algunos que el abadiato de Marcos del Barrio, tras señalar la capilla del
vinieren despues de nos non nos quisieremos coger en estas evangelio a p u n t a q u e se c o n s a g r ó otro altar ynmediato a este a
sepolturas dichas o cogieremos en la capiella otro alguno que santa ynes I994 .
non sea de nuestro linage, que nos pechemos la pena de los En un manuscrito de la Biblioteca de El Escorial se
mil mrs. dichos i la sepoltura que y fi¡ieremos o mandase- conserva una noticia relativa a los sepulcros que albergaba
mosfa¡er ofi¡iesen a otros algunos quales quier que no nos nuestro monasterio que data del siglo XVI, en la que tras
vala y coger que coger vos con las dichas sepolturas. E nos hablar de los dos principales de la capilla mayor agrega: ...
francisco garcia, garcia fernandez, martin garcia e gonzalo todos los demas [sepulcros] que en esta capilla [ m a y o r ] estan y en la
ANTÓN, 1923 (2): 181, 184, 189 y 190; idem, 1942: 210, 212,
1 9 9 2 1993A.H.N., Clero, carpeta 3.431, doc. 8. Erróneamente AÑTÓÑ,
2 1 8 y 2 2 0 ; MENDIZÁBAL, 1925; EYDOUX, 1954: 2 0 2 ; URREA FER- 1942: 235 comenta que los personajes del documento son los Ruiz de
NÁNDEZ, 1974: 59; ARA GIL, 1977: 34, 39, 41 y 44; idem, 1986: 24; Camargo; éste personaje, en efecto, se mandó sepultar en el monasterio,
idem, 1998: 229; HERRERO MARCOS, 1997: 146; BANGOTORVISO, pero ante el altar de Santa Catalina.
1998 (4): 323; CARRERO SANTAMARÍA, 1998 (4): 332-333; idem, 1998 1994fol.I9v.
(5); MERINO DE CÁCERES, 1999: 655; idem, 2000: 13; entre otros.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
348
capilla de santa ines sepultados todos son parientes y sufesores de los fun- tra el tratamiento decorativo que recibe la portada de
dadores... 1995
acceso.
Aunque, como vemos, el testimonio que tenemos
acerca del destino funerario de esta capilla es algo tardío, su
situación en el templo y respecto al cementerio de la comu- El claustro y las dependencias monásticas
nidad obliga a pensar que desde el momento de su cons- En el informe realizado el 20 de octubre de 1842 por
trucción —coetánea a la cabecera y transepto— fue un 1996
el arquitecto Matías Rodríguez Hidalgo para tasar el con-
espacio funerario, tal vez destinado a la familia de los fun- junto monástico y proceder a su venta, se describía éste del
dadores del monasterio . Avalan esta hipótesis además
1997
siguiente modo:
de la presencia de sepulcros en su interior —si bien esta cir- ...la fabrica del edificio consiste en cimientos vaciados de
cunstancia no es del todo concluyente—, la existencia en mamposteria, zócalos y alguna parte de cantería sillar, rajas
otros monasterios de capillas funerarias erigidas en torno al de ladrillo entrepañadas de tapias de tierra; el primer claus-
brazo del transepto contiguo al cementerio y cuyo origen tro con arcos de piedra sobre zócalo de lo mismo en la planta
hay que buscarlo en la necesidad de dotar espacios privados bajay de ladrillo en la principal. El claustro segundo tiene
de enterramiento ante las fuertes restricciones impuestas columnas aisladas en la 1"y 2 altura con una gola de
a
por la Orden a que personajes ajenos a ella se sepultaran en alero, sobre cuyos capiteles se voltean arcos de canteria; los
el interior de sus templos . En España encontramos en
1998
pisos se hallan atirantados y solados; cielos rasos y de bobe-
lugar semejante las de San Juan de Sobrado, San Andrés
1999
dillas; armaduras, entabladas y tejados, biga bajo la linea de
de Osera o Santo Cristo de Melón , y tal vez las hubo en
2000
tierra, lagar, puertas, ventanas... .2008
hecho de que la capilla de Palazuelos no tenga comunica- principios del siglo XX, "sobre el suelo que ocuparon dichos
ción con el exterior no invalida este supuesto, ya que
2006 claustros, dispersos trozos de arcos, fustes y otros materia-
otras como la de Sobrado, cuyo finalidad está fuera de toda les procedentes de los mismos" . 2010
1995 Biblioteca de El Escorial, L.I.13, fol.18v. 2002 p o ejemplo, YÁÑEZ NEIRA, 1978 (2): 599; VALLE PÉREZ, 1986:
r
o CARRERO SANTAMARÍA, 1998 (4): 332. AUBERT, 1947: I, 115, 167, 204 y 213.
2 0 0 4
1999 Sobre las dispuestas en el ángulo formado por el transepto y la Aunque el acceso actual data del primer cuarto del siglo XVII, dicha
2 0 0 7
nave, vid. las monografías de la Espina (Capilla de San Rafael) y de portada fue seguramente construida en sustitución de otra anterior
Matallana (Capilla del Santo Cristo). (VALLE PÉREZ, 1982: I, 71; idem, 1986 (2): 101).
2000 Sobre estas tres capillas vid. VALLE PÉREZ, 1982: I, 71-73, 116- A.H.P.V, Hacienda, Desamortización, Leg.740.
2 0 0 8
120 y 224-226; idem, 1986 (2). 2009 ÁLVAREZ DE LA BRAÑA, 1903-1904: 293 nota 1.
2001 MARTÍNEZ BUÉNAGA, 1998: 288, comenta cómo en la capilla Ibidem, 290 nota 5.
2 0 1 0
barroca adosada al testero del brazo norte del transepto de Piedra se 2011 ANTÓN, 1923 (2): 181, hablaba de ; "señales en el muro sur de los
emplea en sus partes bajas piedra reutilizada, comentando que tal vez se formeros de la galería claustral adyacente", mientras que en 1942: 209,
aprovecharan de una construcción previa que podría ser una capilla fune- hablaba sólo de "arranque de perpiaños". CARRERO SANTAMARÍA, por su
raria. Este mismo autor (Ibidem: 62 y 115-116), señala que la capilla del parte, señala la existencia de huellas de arcos apuntados que se correspon-
abad Lope de Marco de Veruela reaprovecha sillares anteriores, pudiendo dían con las arquerías del claustro (1998 (2): 136; idem, 1998 (5)),
sustituir a otra anterior. cuando los arcos a los que se refiere son en realidad arcosolios funerarios.
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mortero, o incluso del arranque del cierre occidental del recinto claus- con crucería, lo mismo que la de Gradefes, aunque de esta última solo
tral. se han conservado unos restos de los soportes angulares, no la bóveda.
2019 En el apartado dedicado al proceso crono-constructivo volveremos El deterioro sufrido por la piedra impide apreciar correctamente
2 0 2 4
chas, son áticas y descansan sobre plintos paralelepípedos bas, se levantan sobre un banco terminado en baquetón,
lisos. En cuanto a los capiteles, encontramos dos tipos de que hacia la capilla se extiende como zócalo y hacia la
decoración en sus cestas: la de hojas lisas y carnosas termi- sacristía enlaza con el que recorre su paramento oriental . 2029
nadas en cogollos vegetales (N.E. y N.O., este último de Esta capilla, de un único tramo rectangular, se cubre
desbastado troncocónico y parte inferior del ábaco den- con una bóveda de cañón rebajada, hecha en sillería, que no
tada) y la de hojas ramificadas también terminadas en deli- responde a los planes originales, sino que corresponde segu-
cadas formas vegetales —ahora racimos de moras—, ramente a una remodelación llevada a cabo entre 1 7 7 1 y
alternadas en su base con otras más pequeñas pentalobula- 1 7 7 2 con motivo de las obras llevadas a cabo en un gabi-
das (lám. 162) ; sus collarinos parecen más redondeados
2025
nete que se había construido sobre ella . En origen se 2030
que los del templo (S.E. y S.O.). Los cimacios que com- cubría como la sacristía con una bóveda de crucería cuatri-
pletan el conjunto pertenecen a dos de los tipos ya vistos en partita, testimonio de lo cual se han conservado las cuatro
otras zonas: aquellos compuestos por una sucesión de mol- columnas angulares que recibían el apeo de nervios y for-
duras cóncavas y convexas (N.E., N.O. y S.E.) y el que maletes , así como las huellas dejadas por estos últimos
2031
retranqueamiento. En el opuesto, además de la puerta que por cimacios del tipo que combina molduras cóncavas y
da paso a la iglesia —por este lado adintelada, fruto de las convexas. Los altos basamentos sobre los que se levantan
reformas modernas—, quedan restos de una alacena. A occi- responden al modelo de dos pisos que veíamos en los
dente, a pesar de que la parte inferior de este lienzo mues- soportes meridionales de la sacristía, el inferior con su arista
tra evidencias de haber sido removido —la superior en rebajada y el superior abocelada.
cambio mantiene su fábrica de sillería bien labrada y escua-
drada—, se aprecia en la mitad norte la existencia de un vano En el flanco norte se abrió entre 1752 y 1753 una
de medio punto cegado, que se corresponde al exterior con puerta en arco rebajado que comunicaba con la capilla meri-
un monumental nicho; aunque se ha puesto en relación con dional del templo —hoy cegada—, y en el opuesto se labró un
la primitiva puerta de acceso desde el claustro , la remo- 2027 aguamanil . Recibía iluminación a través de una ventana
2033
delación sufrida por toda la parte baja del muro impide abierta en el testero oriental que en la actualidad está
pronunciarnos al respecto, si bien efectivamente debía exis- cegada, y cuya parte superior fue amputada por la cons-
tir en origen un paso hacia la galería claustral contigua. trucción de la bóveda que cubre el recinto; sus característi-
A oriente se practica un gran vano que comunica con cas, semejantes a las desarrolladas en la cabecera del templo
una capilla aneja (lám. 161). Consta por los dos lados de y capilla de Santa Inés, son bien apreciables por el exterior.
un arco apuntado y doblado , ambos de sección prismá-
2028 En efecto, consta de un vano en arco de medio punto
tica y aristas vivas, que voltean sobre las jambas, también que voltea directamente sobre las jambas, ambos de sección
sin moldurar, a través de una imposta formada por listel, prismática y aristas achaflanadas, trasdosado por dos arqui-
escocia, bocel y escocia, que por un lado enlaza con la que voltas muy molduradas: la inferior por tres boceles flan-
recorre el paramento este de la sacristía y por otro se pro- queados y separados entre sí por escocias, la superior, por
longa por todo el interior de la capilla. Respecto a las jam- un solo bocel también entre molduras cóncavas. Apean éstas
ambos arcos hacia el interior de la capilla están ocultos por la bóveda que labrose un arco nuebo de piedra (...) apeose el agua-manil= labrose la pila para el agua
cubre este último espacio. que estaba quebrada la que tenia... (Libro de Obras).
Debemos indicar, no obstante, que por el lado de la sacristía la
2 0 2 9
sobre plintos cúbicos -únicamente apreciables desde el inte- El cierre occidental, por su parte, está realizado en
r i o r - , fustes lisos -excepto el extremo derecho del exte-
2034
mampostería y revoco de mortero de cemento -mitad infe-
rior, monolíticos-, y capiteles cuyas cestas se decoran con rior-, y buena sillería -mitad superior-. En aquella se dis-
hojas lisas carnosas que recogen en sus extremos brotes pone una gran hornacina de época moderna, compuesta
vegetales, a veces acompañadas con otras de menor sección por un arco de medio punto protegido por un guardapol-
o tallos frutales o bien son más estrechas y llevan hoji-
2035
vos adintelado, los dos abocinados y muy moldurados, y
llas lobuladas alternadas en su base ; sus cimacios, com-
2036
que veíamos se correspondía por el interior con la traza
puestos de listel y baquetón entre escocias, se prolongan un de un arco también de medio punto. Rematado como a
buen trecho a modo de imposta por el paramento. oriente por un tejaroz de madera, se pueden ver también
Por encima de esta ventana se practica otra adinte- por este lado cómo por debajo de ella, donde termina la
lada que corresponde, como toda la parte superior de la sillería, las huellas dejadas por los canecillos de la cornisa
capilla, a la ampliación en altura que sufrió ésta durante el primitiva.
siglo XVIII, época a la cual pertenece también la puerta que La presencia de esa capilla aneja a la sacristía motivó
en ese segundo piso se abría en el costado sur. que una parte de la historiografía se preguntase acerca de su
En cuanto a la sacristía, de una sola altura , queda 2037 finalidad. Mientras Eydoux la describía simplemente como
libre el extremo meridional del testero oriental, que mues- una sacristía "a deux pieces accolées" , Antón y después
2039
tra fábrica de sillería a excepción del remate superior y una Ara Gil la llamaron "capilla-tesoro" -denominación 2040
franja que recorre de arriba abajo el paramento que son de también aplicada por ellos a la capilla de San Pedro de Val-
mampostería, y en el que se practica la ventana adintelada b u e n a - . Por su parte, Bango también la pone en rela-
2041
que vimos al hablar del interior. Remata por este lado con ción con esa misma capilla de Valbuena, aunque para
una sencilla cornisa lígnea, pero aproximadamente un metro apuntar un posible carácter funerario . Finalmente, otros
2042
por debajo de ella se aprecia con relativa claridad las hue- han hablado de "oscura finalidad" y de "dudosa signi-
2043
llas dejadas por los canecillos del cornisamiento primitivo ficación" . 2044
y que fueron cepillados en época incierta. El costado sur Aunque no se han conservado en monasterios espa-
presenta una fábrica de mampostería, la parte inferior alter- ñoles otros recintos similares, en Francia sí hay numerosos
nada con hileras de ladrillo, con sillares en los ángulos - ejemplos de sacristías terminadas a oriente por un ábside,
excepto el occidental, en donde buena parte de ellos son ya sea de testero recto (Clairvaux, Beaulieu o Bonport, en
sustituidos por ladrillo-. En el extremo oriental se ve un Francia; Pilis o Zirc, en Hungría) o poligonal o semicircu-
arco apuntado de sección prismática y arista achaflanada lar (Obazine, Cadouin), que en ocasiones adquieren el
trasdosado por una chambrana de nacela lisa, que volteaba aspecto de una auténtica capilla como en Palazuelos, y que
a través de imposta sobre jambas con sus aristas también han sido interpretadas como capillas privadas del abad . 2045
rebajadas. Actualmente cegado, sus casi dos metros de lon- Sí existen sin embargo en algunas abadías premonstratenses
gitud y su situación en lo que sería el paramento interno de hispanas unas construcciones situadas en este mismo lugar
la sala capitular, que con seguridad se dispondría como es que se conocen como "capilla del abad" y que podían tener
habitual en los monasterios de la Orden a continuación de además una finalidad funeraria , si bien en este caso el
2046
esta dependencia, nos hacen pensar que estamos ante un acceso a las mismas no se realizaba desde la sacristía.
base de la ventana y la sillería que se extendía bajo ella, que fue sustituida ANTÓN, 1942: 220; ARA GIL, 1986: 22.
2 0 4 0
por tapial. Vid. lo que se dice sobre los "tesoros" en la monografía de Val-
2 0 4 1
tana, aunque aludía a su "extraña ubicación, si consideramos que en sus del capítulo y comunicado con él, la encontramos en Maulbronn y
inmediaciones se ubicarían las restantes dependencias del pabellón de Bebenhausen (EYDOUX, 1952: 13 y 42).
monjes", y SENRA, 2002: 191-193 con "un arco de paso a otra depen- Aguilar de Campóo, Bujedo de Candepajares o Urdax (LÓPEZ DE
2 0 4 6
dencia conventual". Por otro lado, en Carracedo, Carrizo, Gradefes, GUEREÑO, 1997: I, 109-110).
Nogales, Perales, Bujedo o Veruela, por poner solo algunos ejemplos de
nuestro país, hubo o se conservan todavía lucillos funerarios en sus capí-
tulos.
FUNDACIONES MASCULINAS • 311
Lo cierto es que ni los Ecclesiastica Oficia ni en las nor- gida en el último cuarto del siglo XV no se levantó ninguna
mas emitidas por los Capítulos Generales de la Orden sala . 2049
hemos localizado noticia o alusión alguna que permita En Benifassá, por otro lado, se ha identificado el pri-
suponer la existencia de una capilla destinada al uso pri- mitivo dormitorio con un edificio situado en el ángulo nor-
vado de los abades en los monasterios cistercienses; tam- oeste del recinto monástico, cuya planta baja se dedicaría a
poco en la documentación de Palazuelos se la denomina de cilla; en época moderna el dormitorio se elevaría sobre el
otra manera que no sea sacristía. Las causas de su edifica- refectorio . 2050
rio. Recordemos que cuando analizamos el hastial sur del las obras del pabellón de monjes quedaron interrumpidas
transepto, adyacente en Palazuelos a las dependencias con- cuando se estaban terminando las dependencias de la planta
ventuales, señalábamos la ausencia de puerta de maitines, es baja, impidiendo que el dormitorio llegara a monumenta-
decir, de un acceso directo desde la iglesia al dormitorio lizarse y motivando su construcción en otra zona del com-
común de monjes situado en la planta alta de las depen- plejo y a lo mejor con materiales pobres.
dencias reglares orientales. Pues bien, a este dato hay que En cuanto a los monasterios femeninos hispanos, en
añadir otros dos más: por un lado, el hecho de que la sacris- los que también se detecta la ausencia de puerta de maitines
tía se presente como una construcción muy elevada, de un en el transepto , las razones para esta falta hay que bus-
2052
solo piso y provista de cornisa, y por otro, la ausencia en el carlas en los usos litúrgicos y, por consiguiente, en la distri-
paramento exterior del testero de ese brazo del transepto de bución de los espacios de las iglesias de monjas cistercienses
la huella dejada por el tejado de una posible segunda planta, para las distintas ceremonias religiosas, en la que transepto
lo que demuestra que el dormitorio de Palazuelos no se y capillas de la cabecera estaban destinados exclusivamente
levantaba sobre la sacristía. a los capellanes. Así, no había necesidad de construir el dor-
¿Dónde se localizaba entonces? Otros monasterios mitorio sobre sacristía y capítulo, sino que probablemente lo
masculinos españoles de la orden, como Valldigna, Beni- hicieran en el extremo opuesto del pabellón . 2053
(señalado en la planta del conjunto monástico), si bien el claustro viejo lo ABAD CASTRO, 1998: 195 y 200; vid. además MUÑOZ PÁRRAGA,
2 0 5 3
rían con posterioridad a la donación de Alfonso Téllez último que se hizo serían los abovedamientos del crucero y
( I 2 I 3 ) , pero cuando se consagra el altar mayor —para él,
2059 naves, al tiempo que la fachada occidental . 2068
1228— no debían estar construidas más que las partes bajas Herrero Marcos, siguiendo en parte la propuesta cro-
de la cabecera y brazos del transepto . Asimismo señala
2060
nológica de Antón, coloca la erección de las partes orien-
que la capilla central fue sobreelevada basándose en "las tales entre 1216 y 1226; tras un pequeño parón se
columnas adosadas que sostienen los arranques de los arcos concluirán los tres últimos tramos a mediados de siglo . 2069
Honorio III en la cual, según él, se dirige a los "fratibus ha detenido en esa parcela del templo: para este arquitecto
Monasterii Palaciolensis"— , y cuando tiene lugar la
2062
el proyecto original contemplaba una cabecera de tres ábsi-
"consagración" del altar mayor no debía quedar mucho para des semicirculares precedidos de tramo recto, cubriéndose
acabarse (ca.I230) . Por lo que se refiere a las fases cons-
2063
el correspondiente a la capilla mayor con bóveda de cañón
tructivas, en primer lugar niega la posibilidad de una sobre- apuntado —los de los laterales, según la planta que presenta,
elevación de la capilla mayor, aunque habla de cierta lo harían con crucería—; estos últimos se levantarían según
"improvisación" a la hora de voltear los formaletes ; de 2064
el plan primitivo, pero al ir a "cerrar" el central se modifi-
los anillos florales de las columnas del presbiterio aunque caría su trazado convirtiendo en poligonal su ábside y divi-
afirma que su misión es simplemente la de disimular la diendo el presbiterio en dos tramos mediante la inserción
estrechez que adquieren los fustes en la parte alta , no 2065 de columnas adosadas en los costados que recibirían los
descarta la posibilidad de que en un principio se pensara nervios de unas bóvedas de crucería . 207I
su parte, BANGOTORVISO, 1994: 190; idem, 1997: 283, sitúa este acto Ibidem: 222-223.
2 0 6 5
en 1228, siguiendo el error en la data cometido por LAMBERT, 1931: Ibidem: 224.
2 0 6 6
226. ÁUBERT fecha este acontecimiento en 1264, tal vez equivocando Ibidem: 224-225.
2 0 6 7
esa data con la del supuesto año que se ha venido considerando desde Ibidem: 225.
2 0 6 8
Manrique como de traslado definitivo al nuevo asentamiento que, por 1997: 142 y 147.
2 0 6 9
otro lado, es 1254, no la que él apunta (1947: I, 205 nota I). 1997: 283-284.
2 0 7 0
1 931: I I 2 - I I 3 .
2 0 5 9 1999: 655; 2000: 12-13. Vid. reconstrucción del plan original del
2 0 7 1
Ibidem: 226.
2 0 6 0
templo en 2000 (2): AH-2.
2061 Idem. VALLEJO, 1995: 62, le sigue en la idea de la sobre elevación
de la capilla central.
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Por lo que respecta a la capilla de Santa Inés, todos cuyos hemiciclos se cubren con bóvedas de cuarto de esfera
los investigadores que se han acercado a ella la consideran y los tramos rectos con cañones, recogiendo las columnas
contemporánea de la iglesia . 2072 situadas en sus ángulos las dobladuras de los arcos de
A lo largo de la descripción del edificio hemos ido embocadura a la capilla y al hemiciclo . Sin embargo casi
2073
viendo cómo la fábrica templaria de Palazuelos no es desde el comienzo de las obras, sin haber llegado a mate-
homogénea en todas sus partes, sino que presenta diferen- rializarlo por completo, el diseño previsto fue alterado sus-
tes soluciones tanto estructurales como decorativas en las tancialmente en algunas de sus partes, incorporando
soluciones más modernas, ya góticas, acordes con los tiem-
zonas orientales respecto a las occidentales, por lo que se
pos en los que se estaba realizando.
podrían señalar a grandes rasgos dos grandes etapas en su
construcción: a una primera habría que asignar la cabecera, La construcción de la cabecera se iniciaría por el sur,
transepto y primer tramo del cuerpo de naves, mientras que algo lógico si pensamos que a este lado se iban a disponer
el resto se situaría en una segunda y última etapa. N o obs- las más importantes dependencias monásticas . Cuando 2074
tante, en aquella parcela observamos ciertas anomalías cons- el ábside meridional estaba ya algo adelantado, con una sen-
tructivas y cambios en detalles ornamentales que responden cilla ventana abocinada abierta en su centro y su tramo recto
sin duda a alteraciones del proyecto original introducidas en con las cuatro columnas angulares, pero todavía no se había
el curso de las obras, lo que obliga a establecer a su vez fases comenzado a elevar la capilla mayor , se abandona el pro-
2075
sucesivas dentro de ella; y lo mismo pasa con la segunda. yecto previsto que contemplaba para esta última un semi-
Tampoco debemos olvidar que de los tres últimos tramos círculo, bien simple o, por qué no, con columnas para una
sólo han llegado a nuestros días los muros perimetrales de las bóveda de nervios , y se opta por un polígono con
2076
naves laterales y una muy pequeña parte de la central, lo que columnas en las aristas interiores . 2077
impide un completo y riguroso estudio de las fases finales y Se aborda entonces la erección conjunta del ábside
conclusión, y motiva que únicamente podamos ofrecer una central y del norte, como lo demuestra el hecho de que las
visión parcial del proceso crono-constructivo del templo. hiladas que conforman tanto sus rebancos como sus para-
mentos se correspondan entre sí, empleándose unos muros
algo más delgados que en el del sur. Mientras, en este
1. Primera etapa último colocan columnillas y arquivoltas en el vano que se
Cuando se proyecta el templo de Palazuelos se hace había abierto anteriormente —de ahí las anomalías que
siguiendo soluciones totalmente románicas, con una cabe- observamos en esta ventana tanto al interior como al exte-
cera de tres ábsides escalonados semicirculares precedidos rior—, interrumpiéndose los trabajos a partir de la cham-
de tramo recto —al menos así se trazaron los laterales—, brana —así lo indica el retranqueo que sufre el muro por
sugerir esta misma idea al señalar que presenta características similares al solían ser habituales (Huelgas de Burgos, Arroyo, Matallana, Villama-
templo. yor), prescindiendo así de los paños extremos que forman una suerte de
Así parece que estaba previsto en la catedral de Lérida, si bien el
2 0 7 3 tramo recto dentro del propio hemiciclo (el central de Cañas tiene como
proyecto no se llegó a materializar y bóvedas de crucería cuatripartita Palazuelos cinco lados, más los dos extremos son perpendiculares, en
sustituyeron a los cañones (BANGOTÓRVISO, 1991: 36 y lám.IV fig.6). una solución próxima a la de las capillas heptagonales referidas; en el
En San Juan de Ortega (Burgos) las columnas acodilladas en los ángu- caso de Benifassá, el hemiciclo también es cinco paños, pero tanto éste
los del tramo recto de la capilla mayor tienen la función de la que habla- como el tramo recto que le precede están cubiertos por una sola bóveda
mos en el texto, pero en los laterales mientras las situadas a occidente si de ocho nervios), motivaron que en los soportes que dan paso al mismo
recogieron la dobladura interna del arco de entrada, las orientales apean desde el presbiterio se eliminase tanto el codillo oriental de la pilastra,
la embocadura del cascarón al prescindir en este punto del doblado. como la columna que "canónicamente" debería acodillarse hacia ese lado,
Vid. al respecto lo que se comenta en la monografía de Valbuena.
2 0 7 4
mostrándose la columna más orienta de las dobles que ocupan el frente
Al exterior se puede ver cómo las hiladas inferiores de esta capilla
2 0 7 5 de dichos soportes tangencial a los paños extremos del polígono. N o
sur —por debajo de la línea de imposta que recorre el paramento como sería extraño, dadas las irregularidades que se observan aquí y en otros
prolongación de los cimacios de las columnas de la ventana— no se distintos puntos del templo, que el resultado obtenido en Palazuelos sea
corresponden con las del codillo que le une a la mayor, y el zócalo sobre debido a una mala comprensión de un proyecto para ábside heptagonal
el que se levanta, aunque presenta el mismo perfil, es más alto que el de que finalmente fue desechado antes de ponerlo siquiera en práctica, aun-
la central y la norte. que todo ello no deje ser una mera conjetura.
En Valbuena los tres ábsides semicirculares llevan estas columnas y
2 0 7 6
dentales se introdujo una columnilla para los nervios extre- cio , alcanzando las obras a la primera responsión de la
2083
mos, aunque en el caso de la meridional se hizo hueco para nave del Evangelio (XXIV) y poco m á s . En cuanto al2084
ella a costa de unos cuantos sillares del polígono; como en flanco norte, se trabaja en las partes bajas del hastial y el
el lado contrario no se había generado este espacio, se rom- perímetro de la capilla de Santa Inés —no se terminan en
pieron las primeras dovelas del arco de acceso para facilitar esta fase la puerta, soportes interiores o ventanas—, pero las
el volteo del nervio . 2082
obras quedan interrumpidas en la mitad occidental del tes-
En cuanto al presbiterio, la columna que estaba des- tero a la altura de la séptima hilada, incluido el zócalo, aun-
tinada a recoger en el costado norte el perpiaño no presen- que a nivel de éste pudieron prolongarse un poco más hacia
taba la suficiente superficie de apoyo para recibir a éste y a occidente, hasta llegar tal vez a iniciar el soporte X X I . 2085
los nervios, por lo que hubo que idear una solución que Del mismo modo, se pudieron colocar los basamentos de
corrigiese el problema: un anillo floral a partir del cual los los primeros pilares exentos (XXII y XXIII) y labrar algu-
tambores sobresalen, casi mejor habría que decir se despe- nas de sus basas, ya que a excepción de unas pocas situadas
gan del muro, de tal modo que el capitel puede apear ya sin a occidente que presentan garras más gruesas y decoradas,
problemas de espacio arco y nervaduras; la columna del el resto sigue el esquema empleado en la cabecera; no obs-
flanco sur tiene una sección algo superior a la del norte tante, perfectamente se podrían asignar a la siguiente fase.
(0,10 m más), de ahí que el anillo no presente las irregula- U n último aspecto que debemos señalar es que las
ridades que vemos en el opuesto. Tampoco había espacio columnas acodilladas que vemos en los soportes del tran-
para el apeo de los formaletes, por lo que éste se resolvió septo y naves presentan el mismo diámetro que las de la
mediante el empleo de columnitas suspendidas. capilla sur y zona oriental de la norte, es decir, son más
Al tiempo que se trabaja en la cabecera se levanta una gruesas que las empleadas en el presbiterio de la mayor y
pequeña parte del transepto y naves. De los costados orien- parte occidental de la capilla septentrional. ¿Por qué el cam-
tales de ambos brazos, por encima de las embocaduras de bio que se produjo en estas zonas no afectó al resto del tem-
las capillas laterales, se llega a labrar la imposta que señala plo? Se podría pensar que el avance estructural que
el arranque de los cañones. Se alzaría también algo más de observamos en la zona oriental de la iglesia es consecuen-
la mitad inferior del hastial del brazo sur y se colocaría la cia de una posterioridad constructiva respecto a las naves.
columnilla del ángulo S.E. aunque sin rematarla con cima- Sin embargo, hemos visto cómo el resultado final de la
nas situadas en las quiebras del polígono queden más bajos que los capi- núm.I9, contando desde el suelo, un corte vertical que llega hasta el
teles de las ventanas y sin embargo presenten la misma altura que los del capitel de la columna mencionada y que, junto a la diferencia de tonali-
soporte que comunica con el presbiterio. La respuesta a este problema dad apreciable en los sillares situados a uno y otro de dicha fractura, es
ha de buscarse sin duda en el propio proceso constructivo de esta par- indicativo del lugar en que se interrumpió la obra.
cela del templo. Los muros del presbiterio y del hemiciclo se fueron En este pilar se utiliza todavía el modelo de cimacio más extendido
2 0 8 4
construyendo al mismo tiempo como lo prueba la altura de las hiladas en la cabecera, pero sólo se prolonga en imposta con esa misma moldu-
que conforman sus paramentos, pero en un momento dado se dio prio- ración aproximadamente un metro y medio, cambiando a partir de ese
ridad al polígono absidal, que vio elevar sus muros hasta por encima de punto su perfil. Asimismo, aunque a ambos lados de la puerta de mon-
sus ventanas. Cuando se procedió a completar el tramo recto, la línea de jes el zócalo de todo este primer tramo es idéntico, varía el número de
imposta y los capiteles de sus arcos triunfales quedaron por debajo de la hiladas en cada uno de éstos, lo que sugiere que el parón tuvo lugar
que marcaban los capiteles de los vanos del hemiciclo, tal vez debido a cuando se estaba alzando este vano.
un error de cálculo o como consecuencia de la adaptación de los nuevos Las hiladas que conforman los muros de la capilla de Santa Inés se
2 0 8 5
abovedamientos que se iban a introducir en esta zona; sea como fuere, corresponden de modo impecable con las de la capilla septentrional y
ello obligó a "bajar" los capiteles de las columnas angulares y colocar- zona del hastial del transepto que queda visible, lo que indica una coe-
los de modo forzado casi una hilada más abajo para que estuvieran a la taneidad de sus fábricas, no debiendo interpretarse la variación del zócalo
altura de los de la embocadura y así arcos y nervios de uno y otro lado en interior de la primera —remata con un sencillo biselado, en lugar del
volteasen a la misma altura. Por otro lado, la diferente forma en que se bocel empleado en el templo—, como indicativo de su pertenencia a otra
encastraron las columnillas colgantes invita a pensar que lo fueron en etapa, a un momento constructivo posterior. Por el contrario, sí debe
sucesivos momentos: la del norte, al menos su capitel y alguno de los tomarse como eso último la modificación en el perfil de cimacios e
tambores superiores —el capitel— ménsula sobre el que reposa está recor- impostas de la capilla funeraria, ya que el cambio viene asociado ade-
tando los tambores de la columna aneja, es decir, una vez que éstos esta- más a una fractura y variación en el tamaño de los sillares que vemos —
ban encajados en el muro-, tal vez cuando todavía no se había coronado tanto al interior como al exterior— inmediatamente al oeste de dicha
el soporte adyacente (aunque no se aprecia con nitidez, parece que ambos capilla y antes de alcanzar a los mencionados elementos.
capiteles están tallados de forma conjunta) y la del sur una vez termi-
nados éstos, de ahí la necesidad de "romper" el muro para su mejor aco-
plamiento.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
358
cabecera de Palazuelos es consecuencia de sucesivas trans- levantarse una iglesia con un esquema planimétrico romá-
formaciones del proyecto original, mientras que para las nico de cabecera de tres ábsides semicirculares precedidos
naves sí se mantuvo, al menos en un principio. Además, el por un tramo recto , pero que en el curso de las trabajos
2088
análisis de otros elementos, tales como modelos de impos- sufre diversos y sucesivos cambios estructurales, destacando
tas, tipos capiteles, apertura de vanos, etc, sugieren efecti- la sustitución del semicírculo de la capilla central por uno
vamente un avance Este-Oeste de las obras . 2086 poligonal precedido por un amplísimo presbiterio y la
Ya comentamos al principio de este epígrafe cómo la introducción de abovedamientos más en consonancia con
historiografía ha venido señalando los inicios de la cons- dicho proyecto, todo ello en la órbita de los que presentan
trucción poco después de la donación de la villa de Pala- el monasterio de Las Huelgas de Burgos y las catedrales de
zuelos en I 2 I 3 y la conclusión de al menos la cabecera en Cuenca y Burgo de O s m a . 2089
1226, fecha considerada como la de consagración de la Pero si en planta la capilla mayor de la iglesia de Pala-
capilla mayor. Al margen de la siempre problemática impre- zuelos remite a estos modelos, cuyas fórmulas ya plena-
cisión del término "consagración" durante la Edad Media mente góticas comienzan a expandirse por los reinos de
aplicado a un estadio concreto del proceso constructivo de Castilla y León a partir del segundo cuarto del siglo XIII , 2090
se produce ya debía estar adelantada la edificación de la La cabecera de Dueñas es, como hemos visto a lo
iglesia, ya que dos años más tarde contamos con el valioso largo de la descripción, una réplica de la de nuestro monas-
testimonio del monumenta aedificationis en el costado norte del terio en la que se copian sus elementos tanto arquitectóni-
presbiterio. Esta inscripción nos informa de que en 1226 cos como escultóricos, si bien se incorporan en ella algunos
fue construido hoc altare en honor de Santa María. ¿Se refiere nuevos —como el vierteaguas que recorre paramentos y con-
a un altar o está haciendo alusión a la capilla mayor? Y en trafuertes por debajo de las ventanas— o elimina y modi-
caso de referirse a esta última ¿quiere decir que ya estaba fica otros —aquí no aparecen los anillos florales del
terminada, bóvedas incluidas, o que hasta ese año no se presbiterio y se soluciona de mejor forma el apeo de los
había iniciado? Por nuestra parte creemos sin duda alguna nervios extremos del hemiciclo—; es obra de un equipo de
que el epígrafe debe referirse al marco arquitectónico, pero calidad inferior al que trabaja en Palazuelos —apreciable de
nunca al fin de las obras, sino más bien al cierre de los modo especial en la talla de los capiteles— , y que repro-
2092
muros perimetrales de esta parcela del templo en sus par- duce su cabecera una vez concluida ésta, con sus diferentes
tes bajas, o incluso al comienzo de las mismas. Así, podrí- y sucesivas soluciones aplicadas ahora de modo uniforme,
amos decir que unos años después de la donación de debiendo situar su construcción no antes de mediados del
Palazuelos, a finales del primer cuarto de siglo, comenzó a siglo XIII .2093
MERINO DE CÁCERES, 1999: 655; GARCÍA GUINEA, 2001: 21-22. en cuya cabecera perviven elementos de tradición románica —planta,
2089 Sobre estos edificios cuya cronología oscila entre los últimos años alzado del ábside norte, perfil de los vanos— combinados con otros goti-
del siglo XII (Cuenca) y los primeros del segundo tercio del siguiente cistas —diseño de los capiteles y altura de las ventanas, proporciones del
(Burgo de Osma), véase la monografía de Matallana. ábside central— (MARTÍY MÓNSÓ, 1903: 166; CABALLERO BASTARDO
Vid. nota anterior.
2 0 9 0 y CABALLERO CHACÓN, 1987: 83; y CABALLERO, 1992: 21. ARA GIL y
2091 Nuestra Señora de la Asunción de Tuesta, a la que hemos aludido MARTÍN GONZÁLEZ, 1984: 317; y MARTÍN GONZÁLEZ, 1984: 67, la
para referirnos al abovedamiento previsto en principio para el hemiciclo fechan sin más en esta centuria; MARTÍNEZTEJERA, 2002 (5): 1239, la
poligonal de la capilla mayor está datada dentro de la primera mitad del sitúa dentro del primer cuarto del XIII). Por otra parte, resulta extraño
XIII (LÓPEZ DE OCÁRIZ, 1986: 8). que ANDRÉS ORDAX se refiera al ábside norte como una construcción del
Los modelos de cestas historiadas que veíamos en la capilla mayor
2 0 9 2 siglo XII conservada e integrada en otra de la primera mitad del XIII
de Palazuelos aparecen en Dueñas empleados en el gran ventanal abierto (I989: 260), cuando la propia contemplación de la cabecera por den-
en el brazo sur del transepto; dejando al margen su grosera realización, tro y por fuera indica claramente que es una obra homogénea.
FUNDACIONES MASCULINAS
• 311
En Arroyo las similitudes con Palazuelos no hay que decididamente góticos, o la solución aplicada a sus cubier-
buscarlas tanto en detalles concretos (aunque no debemos tas, sugieren cierta prioridad para el palentino (ca.1220-
olvidar los modelos de capiteles de hojas lisas rematadas en 1 2 2 5 ) . En cuanto al claustro del femenino, todo hace
2099
nervios) como en las líneas generales (estructura poligonal Los elementos del monasterio premonstratense de
con columnas en las aristas, tipo de vanos, contrafuertes, Aguilar que lo relacionan con Palazuelos son básicamente
bóvedas, etc) . Desechada la fecha de 1222 que se había
2095
la tipología de vanos -aunque no son tan rasgados como los
venido leyendo en una lápida situada junto a la puerta norte del vallisoletano-, cimacios, capiteles -los de hojas lisas y
por el exterior y que se relacionaba con la consagración de carnosas y de crochets con hojitas pentalobuladas- y 2101
vegetales de sus capiteles y su relación con los desarrollados nos de los modelos de cestas que vemos en Palazuelos,
en otros edificios mejor fechados como Moradillo de como los de crochets con ramificaciones o grandes hojas
Sedano (1188), Gama (1190), Cabria (1222) o el propio lobuladas, o bien éstas solas, pero que sí encontramos y
monasterio de Aguilar (naves del templo y terminación del combinados con los esquemas anteriores en las galerías
claustro y capítulo, entre 1209 y 1222), ha sido el princi- norte y sur del claustro de Valbuena, en las que además
pal argumento esgrimido por algunos investigadores para vemos el mismo modelo de cimacio. La cronología de estas
adelantar las cronologías hasta casi el momento de la fun- zonas debe situarse, como hemos señalado en su monogra-
dación del cenobio (ca.1181) al elegir al monasterio feme- fía, hacia el segundo tercio del XIII. ¿Quiere decir esto que
nino como origen de esos repertorios ornamentales , por 2098 los maestros que intervienen en el claustro de la casa madre
nuestra parte creemos que el barroquismo y estilización lo hacen también en el templo de la hija? N o sería desde
alcanzado por los canteros que trabajan en Arroyo indican luego extraño, dada la relación entre las dos abadías. Pero
precisamente lo contrario, es decir, que San Andrés es el en Valbuena vimos cómo el proceso constructivo de esas
último eslabón de esa cadena, el cúlmen, el punto final de dos galerías fue algo lento, encontrando una yuxtaposición
toda esa corriente estilística. Así, la iglesia de Arroyo debe de talleres y fórmulas podríamos decir locales - m e refiero
comenzarse hacia los mismos años que la cabecera refor- naturalmente a los modelos "andresinos"- con otras llega-
mada de Palazuelos, si bien la altura que alcanza esta última, das del foco de la catedral de Burgos y Las Huelgas más
la esbeltez de las ventanas y sus capiteles, muchos de ellos modernas cronológicamente hablando . Por el contrario,
2103
sino que son bastante planos. Por su parte GUTIÉRREZ PAJARES, 1993: 87-90 recoge un elevado
Así lo señalaba GUTIÉRREZ PAJARES, 1993: 38, 51 y 55.
2 0 9 5 número de edificios cuya escultura guarda estrecha relación con la de
NAVARRO GARCÍA, 1939: III, 202, y los que le siguen. En cuanto
2 0 9 6 Arroyo, algunos de los cuales pudieron servir de modelo a los esculto-
a la nueva datación de la inscripción (1334), que responde en realidad res del monasterio.
a un monumenta aedificationis probablemente del llamado "salón" que pre- TORRES BALBÁS, 1952: 110, consideraba que la iglesia de San
2 0 9 9
cede al vestíbulo de fieles, vid. MARTÍN LÓPEZ, 1998: 500-503 y 507. Andrés de Arroyo y "la parte más vieja de Palazuelos" eran obra de un
Mientras que para unos las obras habían dado comienzo a fines
2 0 9 7 mismo maestro, señalando LAMBERT que el primero era una réplica del
del siglo XII (LAMPÉREZ, 1908-1909: II, 442 y 444; GARCÍA GUINEA, segundo (1931: 266). Hace pocos años HERNANDO GARRIDO invertía
1961: 201; idem, 1991: 12-13; MASOLIVER, 1985: 20; HERNANDO ese esquema, dando prioridad al palentino (1995: 126), mientras que
GARRIDO, 1990: 59-60; idem, 1992: 72; idem, 1995: 123, 126; idem, GUTIÉRREZ PAJARES indicaba su contemporaneidad y su pertenencia a
2003: 187 y 194; HERRERO MARCOS, 1995: 146; VVAA., 1995: 500; "la misma escuela" pero negando su identidad (1993: 55). Por su parte
), otros las sitúan ya dentro del siglo XIII (TORRES BALBÁS, 1952: 110; CASAS CASTELLS, 2005: 541-542, sigue textualmente lo expuesto por
AZCÁRATE, 1988: 23 y 25; ARA GIL, 1991: 56-57; MUÑOZ PÁRRAGA, nosotros en el texto y que ya avanzamos en 2002 y 2003.
1992: 30; GUTIÉRREZ PAJARES, 1993: 33, 36, 54, 63 y 91; KARGE, Vid. nota 1542.
2 1 0 0
1995: 166; VALLEJO, 1995: 81; CASAS CASTELLS, 2005: 542; etc). En 2101 Los primeros presentan el volumen y carnosidad que, ausente en
cuanto al claustro, unos lo sitúan a fines XII y principios XIII (GARCÍA Arroyo, encontramos en Palazuelos.
GUINEA, 1991: 20; HERRERO MARCOS, 1995: 146; VALLEJO, 1995: 82; Para la cronología de Aguilar, vid. notas y bibliografía en la mono-
2 1 0 2
CALVO CAPILLA, 1998 (6): 167; HERNANDO GARRIDO, 2003: 187), grafía de Valbuena.
otros lo llevan al segundo cuarto del XIII (LAMPÉREZ, 1908-1909: II, Véase también para los aspectos cronológicos las monografías de
2 1 0 3
444; GUTIÉRREZ PAJARES, 1993: 63 y 91). Vid. nota 1542. Valbuena y Matallana.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
360
en Palazuelos las dos corrientes conviven, son obra de un la elevación de los hastiales del transepto hasta la línea de
mismo equipo de gran calidad técnica en el que junto a las imposta. Al tiempo que se alzan la primera responsión
recetas tradicionales y conservadoras —a este carácter debe- norte y los torales occidentales, en los que vemos cómo
mos atribuir también el empleo del medio punto en las continúan vigentes las cestas vegetales de hojas carnosas con
arquivoltas de las ventanas o la bóveda de horno en las capi- remates prominentes, se voltean los arcos de embocadura de
llas laterales—, se desarrollan otras vanguardistas, mostrando las naves, que sólo aparecen doblados hacia los brazos del
además en otros elementos, como los collarinos, un claro transepto; éstos a su vez se rematan también por este lado.
avance sobre el monasterio del D u e r o . Ello implica
2104
En las naves se interviene en el primer tramo, que aparece
hablar de una cronología muy avanzada para los muros peri- definido cuando se cierra su perímetro —aunque al menos
metrales de las capillas de Palazuelos, tal vez completados en la lateral norte no se llega a subir por encima de la línea
en los años centrales del XIII . 2105
de imposta—, y se levantan los pilares X X V I y X X V I I con
Poco tiempo después se cubrió la capilla mayor. En sus respectivas responsiones ( X X V y XXVIII), llegándose
ella encontramos de nuevo elementos provenientes de Bur- a lanzar el segundo perpiaño de la nave sur. Poco se hará del
gos: por un lado, las finas columnillas colgantes, los capi- segundo t r a m o , dedicando los siguientes esfuerzos a
2109
teles de crochets y hojitas lobuladas con cimacios rematar las partes altas de transepto y primer tramo de
poligonales, la decoración de entrelazo y la molduración de naves.
perpiaños, de la cabecera de Las Huelgas, y por otro, el ner- En efecto, ahora se proyectan los arcos torales norte
vio ligazón, de la capilla mayor, transepto y nave central de y sur y comienzan a rematar los hastiales con un tipo de
la catedral de Burgos . La llegada de la mayoría de estos
2106
ventana que nada tiene que ver con las vistas hasta el
ingredientes a San Andrés de Arroyo —en concreto al tran- momento (se han abandonado las arquivoltas molduradas
septo y bóveda de la sala capitular—, ya en la segunda mitad y las columnillas acodilladas) y seguidamente a cubrir con
de siglo , permiten situar hacia el tercer cuarto del XIII las
2107
cañones los brazos. Las diferencias existentes entre los vanos
bóvedas de Palazuelos. de los dos testeros —el septentrional es más esbelto y carece
de la imposta moldurada que vemos en el costado opuesto—
2. Segunda etapa tal vez se deban a una cierta prioridad constructiva de la
meridional, simplificándose a partir del hastial norte el
N o debió transcurrir mucho tiempo desde la parali- esquema de los vanos, ya que éste se repetirá en el tramo
zación de los trabajos hasta que se reanudan, ya que el único más oriental de las naves, incluido el del husillo.
cambio que en un principio se introduce es meramente
ornamental: un nuevo modelo de imposta . Se procede 2108 Se eleva hasta la cornisa el primer tramo de la nave del
por entonces a completar la capilla de Santa Inés, en la que Evangelio y en él se abre una ventana que responde al
se sigue el mismo tipo de ventanas —incluida la molduración modelo simplificado que veíamos en el brazo norte. Se rea-
de las arquivoltas y esquemas decorativos de los capiteles— liza el segundo perpiaño de este lado, que es bastante más
y el perfil de las nervaduras que veíamos en la cabecera, y a alto y apuntado que el precedente, y los dos arcos de sepa-
Burgos-Valbuena. incluso a finales del mismo, ARA GIL, 1991: 60; GUTIÉRREZ PAJARES,
Recordemos que algunos de los modelos de cestas "góticas" pre-
2 1 0 5 1993: 74; ABAD CASTRO, 1998: 195; y CALVO CAPILLA, 1998 (5): 224.
sentes en Palazuelos las encontramos también en otros edificios estre- Así lo pensaba ANTÓN (vid. más arriba en el texto).
2 1 0 8
chamente relacionados con la difusión de fórmulas empleadas en la A mediodía se observa una fractura vertical a un metro escaso del
2 1 0 9
catedral de Burgos y Las Huelgas y cuyas cronologías se sitúan entre el pilar XXVIII a partir de la cual, hacia occidente, varía el tamaño de los
segundo y tercer cuarto de la decimotercera centuria: iglesia de Villama- sillares y además, la ventana que se abre en este tramo lo hace muy por
yor de los Montes (ca.1250-1280; CARDERO LOSADA, 1994: 134-135; encima de la línea de imposta y además con unas características tipoló-
CASAS CASTELLS, 2005: 336) y claustro (último tercio del XIII -BANGO gicas que encontramos sólo en los tramos finales del templo. En cuanto
TORVISO, 1998 (2): 1 6 3 - o segunda mitad de la misma centuria -CASAS al costado norte, una cicatriz similar la encontramos junto a la jamba
CASTELLS, 2005: 3 4 1 - ; sin embargo, trabajos recientes como el de oriental de la puerta primitiva de acceso a la iglesia: hacia el interior se
VALENTÍN DE LA CRUZ, 2003: 65, siguen apuntando para este conjunto observa cómo los sillares que conforman dicha jamba no se correspon-
una cronología anterior a la fundación cisterciense); fachada occidental den con los de las hiladas del lienzo contiguo, mientras que en la jamba
y capítulo de Bujedo de Juarros (ca.1250; VALLE PÉREZ, 1986: 90 y opuesta sí concuerdan; al exterior ese corte es visible sólo por encima
135); portada occidental del templo, claustro, cocina y refectorio de del alero de la puerta, aunque se aprecian también ciertas irregularida-
Huerta (bien avanzado el XIII; ABAD CASTRO, 1998 (4): 242-243 y 245 des en la conexión de la jamba oriental con el lienzo de muro y las hila-
nota 22); iglesia, claustro, capítulo y refectorio de Piedra (a partir de das dispuestas uno y otro lado de la puerta no son tampoco homogéneas.
1225; MARTÍNEZ BUÉNAGA, 1998: 333), etc.
La capilla mayor estaba rematada en torno a 1230 (KARGE, 1995:
2 1 0 6
103-109).
FUNDACIONES MASCULINAS • 311
ración de naves, también muy altos. A continuación se pro- el trazado de la bóveda —superficie que en origen iba a ser
cederá a cubrir estos tramos con bóvedas de crucería cuyos ocupada por los formaletes— y recrecer todo el paño hasta
nervios mantienen el perfil aplicado en las zonas orientales alcanzar la elevación deseada; en el lado contrario no se pro-
del templo, capilla de Santa Inés y sacristía pero que se duce esta variación. Como consecuencia de este último
completan aquí con ligaduras longitudinales y transversales. cambio tanto el arco toral como el siguiente perpiaño son
La original fórmula empleada para el apeo de las dobladu- muy peraltados y la bóveda del crucero, que al igual que la
ras interiores de los perpiaños que habían sido construidos de este primer tramo se introduce ahora con un nuevo per-
anteriormente —situadas muy por encima de ellos y más fil de nervios y ligaduras longitudinales y transversales, se
delgadas que las existentes por el lado del transepto, voltean sitúa muy por encima de los cañones de los brazos y del
sobre columnillas situadas en el ángulo formado por el presbiterio, salvándose la diferencia de altura mediante
lienzo que se eleva sobre el perpiaño y las nervaduras, cuyos muros diafragma ciegos.
capiteles, por otro lado, mantienen los esquemas decorati- En este punto la obra sufre un nuevo parón, llevando
vos habituales—, puede hacer pensar que no estaba previsto hasta el momento construido la cabecera, transepto, el pri-
este sistema de cubrición en el plan original y que fue en mer tramo del cuerpo de naves —la central incluida— y algo
este momento cuando se decidió abovedar con crucería. Así de las partes bajas del segundo tramo de las laterales.
parece que sucedió, pero el hecho de que las dobladuras
Al igual que ocurría en Valbuena y en otros muchos
internas de los primeros perpiaños y las del segundo de la
monasterios, los trabajos se paralizan en este punto para
nave sur no se llegasen a construir sugiere que cuando se
dar a partir de ahora prioridad a las dependencias claustra-
alzaron éstos ya se había optado por las cuatripartitas y des-
les . 2112
fue necesario rellenar con sillares los extremos que perfilan adquieren un aspecto más estilizado en base a volúmenes
recogería dicha dobladura para apeo de los nervios de una bóveda de tramos a partir del segundo.
crucería (BANGOTORVISO, 1991: 36). En Valbuena no aparece tampoco
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
362
escalonados y líneas diagonales. N o obstante, algunos deta- torpe a las columnas que lo flanquean y por el lado de la
lles como la imposta en cuarto de círculo que recorre el capilla meridional las hiladas que constituyen el paramento
paramento del segundo tramo del costado norte o el zócalo no se continúan con las de las columnillas angulares e intra-
mural rematado en baquetón que se emplea por todo el dós del arco sino que aparecen rotas por esas últimas. Por
perímetro templario pueden ser indicio bien de un reapro- otro lado, la molduración que presentan cimacios, imposta
vechamiento de piezas dejadas por los talleres precedentes, y chambrana, análoga a las que muestran esos mismos ele-
bien al deseo de mantener la idea ornamental general, de mentos en las portadas norte y oeste nos empujan a situar-
dar cierta unidad a la obra por parte de miembros del los en el mismo entorno constructivo.
equipo anterior o de un taller heredero de éste. ¿Qué cronología debemos asignar a esta etapa? Las
Poco a poco se irán cerrando los muros perimetrales relaciones establecidas en base a los principales elementos
de las naves laterales y parte baja de la fachada occidental, arquitectónicos y escultóricos nos llevaba también en esta
cuya portada presenta ciertos detalles que la emparentan etapa, como hemos visto a lo largo del análisis descriptivo,
con la abierta en el costado norte (molduración de arqui- a situar su origen en el foco burgalés. Sin embargo, es en el
voltas, chambrana, cimacios...). Las ventanas de este último entorno palentino —derivado a su vez de los monumentos de
tramo, ahora además apoyadas sobre una imposta biselada, Burgos— donde encontramos un estrecho vínculo con las
son radicalmente distintas a las que vemos tanto en las par- formulas aquí empleadas, en concreto en la cabecera de
celas más orientales como en el transepto y primer tramo: Villalcázar de Sirga (ventanas y contrafuertes) y la nave de
de nuevo encontramos vanos con dos arquivoltas sobre Dueñas (ventanas), obras de talleres locales de cierta cali-
columnillas acodilladas, pero aquí son apuntadas, con arcos dad. A la vista de la datación de estos dos templos y del 2115
y cimacios de perfiles más simples y capiteles vegetales muy propio proceso crono-constructivo de nuestro monasterio,
sencillos, casi esquemáticos, mostrando hacia el interior un debemos situar esta zona a finales del último cuarto del siglo
sobrio bocel recorriendo su arista; tal vez la ventana del XIII, cerca ya de 1300. Esta datación es adecuada para el gran
segundo tramo sur, cegada por el exterior, presentase un arcosolio del presbiterio, teniendo en cuenta que por estos
aspecto semejante . 2II4
años se están labrando la mayoría de los sepulcros que aco-
Al mismo tiempo se alzarían los pilares exentos occi- gería la iglesia de Palazuelos y que la apertura de dicho
2116
dentales y muros de cierre de la nave central —en los que arco contribuiría sin duda a organizarlos y a despejar la capi-
encontramos a partir del segundo tramo una imposta simi- lla mayor de una posible acumulación de túmulos.
lar a la que vemos en el tramo más occidental de las latera-
les y, seguramente, unos contrafuertes semejantes—, hasta
rematar con bóvedas el conjunto y finalizar así las obras del El claustro
templo. Poco podemos decir del proceso de construcción de
Debemos atribuir también a esta etapa el gran arco las dependencias claustrales. La sacristía con su capilla aneja
"contenedor de sepulcros" de la capilla mayor, aprecián- se inician cuando ya están avanzadas las partes altas de las
dose cómo fue abierto con posterioridad a la hechura del capillas laterales: el muro de cierre oriental de aquella última
muro en el que se dispone: su chambrana se adosa de modo se adosa al tramo recto de la capilla meridional y los cima-
cios de su ventana y todos los interiores de la "capilla del quod carta resonat pectet M libras auri regi terre.
abad" presentan el modelo que se generaliza en las partes Facta carta in II die Febroarii, era M" CCIII". Regnante
altas de la cabecera. En cambio, el muro occidental está rege in Castella et in Extrematura et in Nazera.
construido al tiempo que el de la nave de la Epístola . 2117
Ego rex Adefonsus, qui hanc cartam fieri iussi, manu pro-
Cuando aún no se han completado todas columnas angu-
pria roboro et confirmo.
lares de la sacristía, se produce la incorporación del tipo de
cimacio en cuarto de círculo, procediendo a continuación (Primera columna)
a su abovedamiento, cuyo perfil de nervios es análogo al Iohannes, Toletane sedis archiepiscopus, conf.
empleado en la cabecera y capilla de Santa Inés. Ya enton- Raiumundus, Palentinus episcopus, conf.
ces, aunque se desconocen las razones, se había renunciado
a situar el dormitorio sobre esta dependencia, lo que posi- Petrus, Burgensis episcopus, conf.
bilitó elevar a gran altura su bóveda. En cuanto a su cro- Comes Amalrricus, conf.
nología, Antón y Ara Gil señalaron la contemporaneidad Comes Lupo, conf.
con la obra de la iglesia y por tanto su erección entre I 2 I 5 Comes Nuno, conf.
y I 2 3 0 . Sin embargo, visto el proceso constructivo del
2118
muro oriental de las dependencias adosado al extremo Este del hastial del 1986: 21.
transepto, mientras el occidental está hecho al mismo tiempo que su
extremo oeste.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
364
sequator me propterea ego dompnus didacus martinez et ego Rege Alfonso, qui inter caeteros actus suos magnificos Regem
magister petrus, propter amorem dei et nostrorum remis- Miramomelinum Campestri bello deuicit, et pro seruicio
sionem peccorum necnon et omnium fidelium xpristiano- sufficienti et congruo quod ei in bellofeci ab illo praedictam
rum facimus cartam donationis et damus uobis dompne Villam accepi. Damus inquam et concedimus praedictam
Uillelme abba monasterii sancte marie uallis bone succes- Villam cum collatiis, cum terminis suis tali conditione quod
soribusque, uiris etfratribus eiusdem loci presentibus atque Monasterium illud quod nunc est in loco qui dicitur sancti
futuris monasterium quod dicitur sanctus andreas de ualle Andreae de Valle B. totaliter commutetis in locum praedic-
ueni cum terminis suis et omnia ad ipsum pertinentia, sci- tum qui dicitur Palazuelos, ut Monasterium Cisterciensis
licet decanias, montes, pascua, dehesas, colles, prata, fontes, Ordinis semper ibidem vigeat et Ordo Cisterciensis in per-
piscarias, amnes, ortos, molendina, uineas, solares, denique petum observetur. Facta charta apud Palentiam prima die
terras omnes cultas et incultas per sua loca et per terminos mensis Augusti, Era M. CC. L. I.
antiquos; secundum quod inquiri et inueniri poterit. Tali
tam tenore et hac conditione ut ordo cisterciensis ibidem
Documento 4
integer et illibatus custodiatur et sit abbatia in perpetuum.
Hoc autem nostre humilitatis donum quicumque; irrum- Siglo XVI'
pen presumpserit, vel annullare temptauerit, sit anathema Memoria de la fundación y enterramientos que hay en la capilla
maranatha, excomunicatur et separatur a uiuifico corpore mayor del monasterio de Palazuelos.
et sanguine domini nostri iehsu xpristi, dampnatus cum
Papeles Varios, Copia de un códice de El Escorial que
iuda traditore qui medius discrepuit et cum datam et abi-
fue de Ambrosio de Morales.
ron quos uiuos terra obsorbuit et pectet regie parti m libras
auri purissimi. Facta est carta huius donationis et roborata B.N., mss. 5938, fol. 309.
a dompno didaco in capitulo uallis bone in presentia dompni Este Monesterio de Palazuelosfue primeramente fundado en
Uillemi abbatis. Testibus melendo priore et Dominico sup- un lugar que agora se llama la Granja de Sant Andres de
priore et Iohane de aguilar cellarario et Gonsaluo precen- Balbeni, que esta poco mas de media legua de Pisuerga a la
tore et Iohane subcellerario et ipso monachorum conuentu. parte de Oriente: hizo donacion el Rey Don Alonso, que en
Era m" cc" iii" x° kalendas octobris. Regnante aldefonso rege aquella era reynabam a un Abad llamado Fray Diego Mar-
in castella et extrematura et Raimundo episcopo in palen- tinez del dicho Monesterio con sus terminos, era de mil y
cia. Iterum hec carta est roborata a dompno didaco et a ducientosy tres. No hay noticia del origen del dicho Mones-
magistro petro apud sancti andream de ualle ueni, uiiii terio, mas de que se cree que el dicho Abad Fray Diego le
kalendas octobris. Testibus martino pascal, Dominico comenzo, y a su instancia le doto el dicho Rey Don Alonso.
michael, Pelagio pedrez, Dominico uincent, Johane munioz De la dotacion consta por un Privilegio, el qual en subs-
et ipso concilio ville sancti andree de ualle ueni. tancia dice que dona al dicho Fray Diego y sus Monjes el
Monasterio de Sanct Andres con sus terminos. Despues era
Documento 3 de mil y ducientos y cincuenta y uno a peticion de Don
Alonso Tello de Meneses, se paso de allo a donde aora esta,
1213, agosto, 1. Palencia.
que es en la Rivera de Pisuerga, cerca del Lugar de Cabe-
Alfonso Téllez y su esposa Teresa Sánchez donan la zon, hizo elRey Don Alonso donacion al dicho Don Alonso
villa de Palazuelos al monasterio de San Andrés de Valbení Tello de la Villa de Palazuelos y el la doto a este Moneste-
con el fin de que se trasladen a dicho lugar. rio con sus terminos y otras cosas. Este Don Alonso Tellez
Manrique, 1642-1659: I V 30. de Meneses y su Muger Doña Theresa Sanchez de Castro,
fundaron este Monesterio como dicho es aqui donde aora
Quoniam multi sunt falsitatis insertores et pauci ueritatis
esta y despues de sus dias hizo mucho en el Doña Mayor
defensores, eapropter dona Regum, siue Ducum siue prin-
Afonso su hija Muger que fue del Ynfante Don Alonso de
cipium memoriae litterarum sunt commendanda. Eaprop-
Molina, hijo del Rey Don Alonso Hernandez de Leon, y de
ter ego Alfonsus Telli una cum uxore mea Domina Teresa
la Reyna Doña Berrenguela, y hermano del Rey Don Her-
Sanctii etfiliis meis Tello Afonsi, Alfonso Afonsi, Maiore
nando el Sancto. Esta enterrado el dicho Don Alonso Tellez
Afonsi et Teresia Afonsi, annuente Rege Alfonso Castel-
lae et Toleti, una cum uxore sua Alionore Regina, cum filio y su mujer, y esta señora su hija en la Capilla mayor y
suo Domino Henrico, ex beneplacito D. Telli Palentini muchos de su linage en la Yglesia.
Episcopi et ex essensu totius Capituli Palentini, pro reme-
dio animarum nostrarum, patrum et parentum nostrorum Documento 5
facimus chartam donationis Deo et Monasterio Sancti
Andreae de Valle B. et uobis Dominico instanti Abbati et Siglo XVI'
sub Cisterciensi Ordine ibidem Deo seruientibus de Villa Memoria de los enterramientos que hay en la iglesia del monas-
quae dicitur Palazuelos quam obtinuimus a Serenissimo terio de Palazuelos.
FUNDACIONES MASCULINAS
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Biblioteca de San Lorenzo de El Escorial. L.I.13, fol. tados porque fue muger del infante don Alonso de molina
18r-19v. fijo del Rey don Alonso fernandes de leon y de la bendita
Aqui estan dos traslados de dos sepulturas que estan en el Reyna doña berenguela y hermana del Rey don fernando
monesterio de Palazuelos que es por ¡ima de cabepn dos el santo este infante tubo desta su muger doña mayor
leguas de Valladolid y quatro de dueñas. Alfonso una hija que se llamo doña maria y fue casada con
Por que sepan los presentes e los que estan por venir cuyas el Rey don sancho el 4 y esta Reyna fue madre del Rey don
son las sepulturas que estan ante el altar mayor en este fernando el quarto que murio emplazado de los caballeros
monesterio de Palazuelos de que generaron vinieron digo carvajales y por enterzesion de esta Reyna doña maria y
que la primera sepultura y prinzipal es de don Alonso Tellez por estar sepultada su madre doña mayor Alfonso en esta
Señor de meneses e fue este uno de los magnificos e nobles capilla los Reyes suzesores hizieron muchas libertades a este
de castilla y leon en su tiempo el qual fue en la vatalla de monasterio como pareze mas largamente por los privilegios
las navas de tolosa don alonos Rey de castilla su Señor este Reales y confirmaziones de ellos que con su liberalidad
defendio des pues verilmente de los condes don Alvaro e don otorgaron a este monesterio todos los demas que en esta
fernando de lara en montealegre en el tiempo que los dichos capilla estan y en la capilla de santa ines sepultados todos
condes de lara tenian la tutela e governazion de castilla por son parientes y suzesores de los fundadores y puesto que
la tierna edad en que estaba don enrique Rey e señor. Fue todos ellos fuesen magníficos y generosos hombres los títu-
este don Alonso Tellez en prender zerca de la villa de val de los todos destosy sus nombres estan escondidos delante del
cañas al dicho conde don Alvaro de lara que hazia grandes mayor.
danos en el Reyno. Este don Alonso tellez caso una hija con
el infante don Alonso de molina el qual infante esta ente-
rrado en el monesterio de matallana. Abadologio
En esta sepultura estan escondidos los huesos de doña García, 1170 , 1173 .
2119 2120
mayor afonso cuya anima por la misericordia de dios y por Juan, 1175 , 1181 .
2121 2122
las buenas obras que fizo posee la gloria del parayso esta Martín, 1186 , 1189 .
2123 2124
señora fue hija de don Alonso tellez de meneses y doña Domingo, 1199 . 2125
teresa sanchez de castro su muger muy nobles fundadores Godofredo, 1200 , 1203 . 2126 2127
que sus hermanos y otros de su linaje que aqui estan sepul- Domingo, 1 2 1 3 . 2130
2119 El 22 de septiembre de este año, actúa como testigo junto a los 2126 Junio, 4. Benevívere. Urraca García y sus hijos venden la villa de
abades Pedro de Sacramenia y Guillermo de La Espina en la confirma- San Martín de Muedra, con su iglesia y las heredades que poseían en
ción de una venta realizada por el abad de Retuerta al de Valbuena Gramales, Gozón y Muedra por 2300 mrs. (A.H.N., Clero, carpeta
(A.H.N. Clero, Carp.3440 doc. 10). MANRIQUE, 1642-1659: IV 586 3.439, doc. 5).
(2010: 65) señala que fue éste el primer abad cisterciense de Palazuelos. 2127 Ramiro Gil y su mujer María Rodríguez dan la heredad de Santa
2120 Gutierre y Rodrigo Pérez le dan todo lo que poseen en Santa Eula- Eulalia, con la presencia de Domingo, prior; Juan, cillerero; Juan, soprior;
lia (A.H.N., Clero, carpeta 3.439, doc. 2; Tumbo, fol.4v). y Antonio, portero (A.H.N., Clero, carp. 3439, doc. 7; Tumbo, fol.4v). Este
2121 Alfonso VIII confirma la adscripción del monasterio a la Orden mismo año el monasterio concede fuero a Fuentetaja, apareciendo como
del Císter y todas sus posesiones (Archivo del monasterio de Poblet, testigos Domingo, prior; Gonzalo, soprior; y Juan, cillerero mayor (A.H.N.,
armario I, cajón 30). Clero, carpeta 3.439, doc. 6; pub. por GÓNZÁLEZDÍEZ, 1986: 121-122).
2122 j 4 j e mayo. Venta de María Díaz al abad Pascasio de Benevívere, Erróneamente en el Tumbo, fol.26, aparece fechado en el año 1241, cuando
de algunas heredades (A.H.N., Clero, carpeta 3.440, doc. 6). en realidad esa fecha corresponde a la era y no al año; y como aquél lo sitúa
2123 Enero, 13. Verona. Urbano III toma bajo su protección al monas- sin darse cuenta de la incorrección PÉREZ-EMBID, 1986: 312.
terio y confirma sus posesiones (A.H.N., Clero, carpeta 3.439, doc. 4; MANRIQUE, 1642-1659: IV 587 (2010: 67).
2 1 2 8
Tumbo, fol.15r-15v). MANRIQUE, 1642-1659: IV 506-507 apunta a que 2129 Idem (2010: 68).
lo era en 1187 y 1189. 2130 Agosto, 1. Palencia. Alfonso Téllez y su mujer donan la villa de
Abril, 27. Testigo en el acto de sujeción a las Huelgas de Burgos de
2 1 2 4 Palazuelos (A.H.N., Clero, carpeta 3.434, doc. 16; inserto en confir-
los monasterios de Cañas, Carrizo, Fuencaliente, Torquemada, Arroyo y mación de Felipe V).
Santa Colomba (pub. por LIZOAIN GARRIDO, 1985: 84-85).
2125 Aparece como testigo en el acto por el que Guido, abad de Cíteaux,
ordena a los monasterios de Perales, Gradefes y Cañas se sometan a las
Huelgas de Burgos (pub. por LIZOAIN GARRIDO, 1985: 48-51).
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
366
Juan, I 2 I 6 , I 2 I 7 , I 2 I 8 , I 2 I 9 .
2131 2132 2133 2134 I29I .
2143
2131 Valladolid. Enrique III le confirma la exención de portazgo que difunta mujer Toda López y su segunda mujer urraca Fernández (Tumbo,
había dado su padre Alfonso VIII de lo que comprasen o vendiesen fol.5r; A.H.N., Clero, carpeta 3.431, doc. I); 3 de mayo, Toledo. San-
(A.H.N., Clero, carpeta 3.439, doc. 10; B.R.A.H., Col. Salazar y Cas- cho IV exime al monasterio de todo pecho y pedido así como de la ayuda
tro, 0 - 8 , fols.I40-I4I; pub. GONZÁLEZ, 1960: III, 713-714; Tumbo, que él había pedido para ir a la frontera; A.H.N., Clero, carpeta 3.431,
fol.7v); el 14 de julio de este mismo año confirma todas las posesiones doc. 2; Tumbo, fol.8r).
del monasterio (A.H.N., Clero, carp. 3.439, doc. 9; B.R.A.H., Col. Sala- Marzo, 27-junio, 4. El monasterio concede a Ruy Díaz, abad de
2 1 4 1
zar y Castro, 0-8, fols. I36v-I38; pub. GONZÁLEZ, 1960: III, 728-729; Valladolid, por los días de su vida, la granja de San Millán, cerca de
Tumbo, fols.2r-3v). Peñalba de Duero (pub. por MAÑUECO y ZURITA, 1920: III, 105-106).
García Martínez y María Pérez venden al monasterio unas hereda-
2 1 3 2 Aparecen junto a él, Juan, prior; Pedro, soprior; Ovieco; Salvador, sacris-
des en Fuentetaja y Valdecelada (A.H.N., Clero, carpeta 3.439, doc. II). tán; Diego, cantor; Juan Martín, hospedero; García, camarero; Pedro,
Enero, 29. Medina. Fernando III le concede libertad de pastos en
2 1 3 3 portero; Juan, cillerero (cit. por ANTÓN, 1942: 208; PÉREZ-EMBID,
todo el reino, protección para sus ganados y amparo para sus heredades, 1986: 333 nota 4)
reiterando la exención de portazgo (A.H.N., Clero, carpeta 3.439, doc. Julio, 9. Arriendo a Tello Gutiérrez, alguacil mayor del rey, y su
2 1 4 2
12; pub. GONZÁLEZ, 1983: II, 27-28; Tumbo, fol.7v-). mujer Sancha Gil, de la casa de Torre del Pino. Son testigos: Juan, prior;
Julio. Donación por parte de Pedro Rodríguez y sus hermanos de
2 1 3 4 Rodrigo, soprior; Pedro Anacleto, portero mayor; Pedro Guillermo;
un palacio en Galera (B.R.A.H., Col. Salazar y Castro, 0 - 8 , fols.I42v- Diego, cantor; Pedro, sacristán; Rodrigo, enfermero; García, camarero;
I43v). Pedro, de las aceñas; Juan, bodeguero; y Juan, cillerero (A.H.N., Clero,
Enero, 30. Concesión de fuero a los habitantes de Palazuelos
2 1 3 5 carpeta 3.431, doc. 5).
(A.H.N., Clero, carpeta 3.441, doc. 13). N o consta en el catálogo de Febrero, 24. Información en el pleito con el concejo de Fuentetaja
2 1 4 3
abades de Manrique. Algunos autores (ÁLVAREZ PALENZUELA, 1978: (A.H.N., Clero, carpeta 3.431, doc. 6). MANRIQUE, 1642-1659: IV
204; DÍEZ ESPINOSA, 1982: 52-53) han fechado entre 1208 y 1216 un 589 (2010: 71), indica que gobernó el monasterio hasta 1298.
pleito que tuvo el monasterio con el Obispo Tello de Palencia sobre las Abril, 26: asignación de sepulturas a Francisco García Delgadiello
2 1 4 4
iglesias de Gozón, Muedra, Quiñones, Boada y San Miguel de Valbení y sus hijos (A.H.N., Clero, carpeta 3.431, doc. 8). N o aparece en el aba-
(A.H.N., Clero, carp. 3439, doc. 13), argumentando que todavía se nom- dologio de Manrique. Julio, 10: donación de lo que tienen en Villavelasco
bra a Domingo abad de Valbení. Sin embargo, en él actúan como testi- Domingo Juan y su mujer, siendo testigos el prior Diego y los monjes
gos los abades Jordán de Valbuena y Pedro de La Espina. Este último Gonzalo del Moral, Juan de Cabezón y Rodrigo Portero (B.R.A.H., Col.
aparece documentado en 1222-1223, ostentando anteriormente (1220) Salazar y Castro, M-6I, fols.I30r-I3Iv).
dicho cargo Arnaldo; y en el caso de Valbuena, Jordán aparece docu- Teresa Sánchez Fiz intercambia tierras y viñas. Es testigo García,
2 1 4 5
mentado a partir de I228, pero su predecesor, Martín, aparece por cillerero (A.H.N., Clero, carpeta 3.431, doc. 12). N o aparece en el catá-
última vez en 1221, por lo que puede haber sido abad algún año antes. logo de abades de MANRIQUE (1642-1659: IV 589).
Así pues, antes de 1222 no pudo tener lugar el acuerdo, realizándose el MANRIQUE, 1642-1659: IV 589 (2010: 71), coloca a este abad a
2 1 4 6
traslado del monasterio al nuevo asentamiento entre esta fecha y 1224. continuación de Álvaro, e indica que hay memoria suya en el año 1308.
Marzo, I5. Valladolid. Fernando III le concede libertad para pas-
2 1 3 6 Nosotros no hemos encontrado ningún documento en que aparezca su
tar sus ganados donde pasten los reales y exención de portazgo en el nombre.
reino para todas sus propiedades (A.H.N., Clero, carpeta 3.430, doc. Marzo, 18. Fuero concedido a los vecinos de Palazuelos (A.H.N.,
2 1 4 7
I I ; B.R.A.H., Col. Salazar y Castro, 0-8, fols.I43-I44v; pub. GONZÁ- Clero, carpeta 3.431, doc. 14). Agosto, I. Doña Mayor, viuda de Gar-
LEZ, 1983: III, 152-154; Tumbo, fol.7v). MANRIQUE, 1642-1659: IV cía Martín de Muedra, dona la casa de Torre del Pino y los derechos
588 (2010: 70) apunta que ya lo era en 1234. que tenía en la aldea de Boada y su iglesia (A.H.N., Clero, carpeta 3.431,
28 de febrero. Actúa como testigo en el reparto de herencia hecho
2 1 3 7 doc. 15).
a la priora del monasterio de Villamayor de los Montes (MARTÍNEZ Febrero, I. Donación de la casa de Torrecilla a Juan Ruiz durante
2 1 4 8
DÍEZ y GONZÁLEZ SÁNCHEZ, 2000: doc. 70, I 2 0 - I 2 I ) . los días de su vida. Son testigos, Benito, prior; Juan, soprior; Munio,
Mayo, 12. Palencia. Préstamo a García Gutiérrez, clérigo del deán
2 1 3 8 criado; Gonzalo, portero; Domingo, sacristán; García, cantor; y
de Palencia Juan Alfonso, de la casa de San Millán. Aparecen como tes- Domingo, bodeguero (A.H.N., Clero, carpeta 3.431, doc. 17). Por su
tigos, Gil, prior; Pedro Bernalt, portero; Fernando, enfermero; Salvador, parte, MANRIQUE, 1642-1659: IV, 589 señala que un García aparece
sacristán; Pedro Guillermo, soprior; Diego, hostalero; Pedro Caro, cille- documentado como abad en esos mismos años y hasta I329, cuando
rero; García, vestiario; y Juan Pérez, abad de Matallana (A.H.N., Clero, recibe el monasterio un privilegio de Alfonso XI. Sin embargo, en este
carpeta 3.430, doc. 16). último documento no se menciona el nombre del abad, y en los ante-
Agosto, 25. Acuerdo con el monasterio de Aguilar de Campoo
2 1 3 9 riores aparece claramente Martín.
sobre las pesqueras del Pisuerga en Aguilar y Rayela (A.H.N., Clero, MANRIQUE, 1642-1659: IV 589 (2010: 72) lo sitúa inmediata-
2 1 4 9
carp. 3.430, doc. 17). mente después de el García del que hablábamos en la nota anterior, y en
Abril, 4. Rui Gómez de Camargo dona 1500 mrs anuales para que
2 1 4 0 este año.
digan una misa diaria y un aniversario anual el día que muera, por él, su
FUNDACIONES MASCULINAS • 311
I444 166. 2
Emiliano .2156
I456 , I462 . 2I70 2I7I
hacia él y sus monjes (DÍAZ MARTÍN, 1997-99: I, 140). zuelos se sujetó al cenobio gallego (Universidad de Santiago de Com-
Septiembre, 13. Concierto con el párroco de la iglesia de San
2 1 5 2 postela, Biblioteca General, Mss.587, fol.493).
Miguel de Valladolid, sobre una casa en Valladolid (A.H.N., Clero, car- Los días I y 4 de diciembre de 1441, Juan de San Prudencio, monje
2 1 6 5
peta 3.432, doc. 5). cisterciense en nombre del monasterio pide que se copie una bula de
MANRIQUE, 1642-1659: IV 589 (2010: 73).
2 1 5 3 Eugenio IV sobre exención de diezmos que había sido emitido a peti-
Vid. nota siguiente.
2 1 5 4 ción del monasterio de Palazuelos y su abad Martín, en enero de 1441
El I8 de abril Martín, abad de Valbuena, nombra al entonces prior
2 1 5 5 (Archivo del Monasterio de Las Huelgas de Valladolid, cajón I, doc. 8).
de Valbuena, Alfonso, abad de Palazuelos, por muerte del anterior abad, Mayo, 13 a 19. Trueque con Pedro de Acuña, Conde de Buendía,
2 1 6 6
de nombre Martín (A.H.N., Clero, carpeta 3.432, doc. 7). Este mismo de las granjas de Palazuelos y Villavelasco por un juro en Torquemada.
años Garci Alfonso de Noreña dona la mitad de Villavelasco y la mitad Son testigos: Martín de Villaverde, prior; Andrés de Valderodel, soprior;
de todos sus términos, pastos, prados, y río (Tumbo, fol.5r. y 35v). Erró- Juan de San Prudencio, confesor; Pedro de Curiel, cillerero; Pedro de
neamente señala MANRIQUE que en 1371 le fueron confirmados todos Corbera, cantor; Bernardo de Castellón, sacristán; y Sancho de Laguni-
los privilegios (1642-1659: IV 590 (2010: 73-74). lla, Bartolomé, Miguel y Lorenzo, monjes profesos (A.H.N., Clero,
Sucesor según MANRIQUE de Alfonso, este mismo autor indica que
2 1 5 6 legajo 7629).
no hay instrumentos en los que aparezca como poseedor del cargo aba- Marzo, 26. Pago de la media annata (A.H.N., Clero, carpeta 3l433,
2 1 6 7
en el trueque y cambio hecho por la abadesa del Monasterio de las Huel- gio con la Colegiata de Valladolid sobre diezmos. Son testigos Juan de
gas de Valladolid a Diego López de Zúñiga del lugar de Ziadocha por Oyón, prior; García de Rioseco, soprior; Diego de Villaseca, cantor;
4000 mrs de juro sobre las alcabalas de pescado de Valladolid, más 5000 Martín de Rioseco, cillerero; Juan de Olmos, sacristán; Rodrigo, bode-
mrs de gracia y 5000 que les presta para "proveymiento i mantenimiento guero; y Diego de Águeda, enfermero (A.H.N., Clero, carpeta 3l433,
del dicho monesterio" (Archivo del Monasterio de las Huelgas de Valla- doc. 5).
dolid, arca I, doc. 55). 2169 Julio, 16, y Agosto, 12. Actuaciones en el litigio señalado en la nota
Mayo, 15. Enrique III confirma el privilegio de Alfonso XI de los
2 1 5 8 anterior.
veinte vasallos; inserto en doc. de Juan II de 4 de marzo de 1420 MANRIQUE, 1642-1659: IV 598 (2010: 96).
2 1 7 0
(A.H.N., Clero carpeta 3.432, doc. 17); Mayo, 20. Este mismo monarca 2171 Diciembre, 21. Iñigo de Zúñiga, alcaide del castillo de Burgos, se
le confirma privilegios concedidos por sus antecesores (A.H.N., Clero obliga y hace juramento condiciones que hizo el convento con Pedro de
carpeta 3.432, doc. 13; incluido en privilegio de Juan II de 6 de julio de Acuña cuando le vendió las granjas, ya que aquel se las había comprado
I408). ahora a éste. Le acompañan Miguel de Miranda, prior; Juan de olmos,
2159 MANRIQUE, 1642-1659: IV 590 (2010: 74), opina que en este soprior; Martín de Rioseco, cillerero; Juan de Palencia, cantor; Juan de
año seguía ostentando el cargo abacial. Valladolid, sacristán; Martín de Burgos, sosacristán; Pedro de Salcedo,
Ibidem.
2 1 6 0 bolsero; Pedro de Gamara, socantor; Juan de Allorigo, camarero (A.H.N,
2161 I I de octubre, confirmación del privilegio de Alfonso XI de los Clero, libro I6l527, fol. 20v-2Ir).
veinte vasallos; inserto en documento de Juan II de 4 de marzo de 1420 Octubre, 3. Pío II encomendó al arcediano de Cerrato, a Rodrigo
2 1 7 2
(A.H.N., Clero carpeta 3.432, doc. 17). MANRIQUE, 1642-1659: IV Rodríguez de Dueñas, licenciado en decretos y prior, y Juan Rodríguez
590, señala que un abad de nombre Juan es mencionado en un privile- de Fuenpudia, tesorero de la Colegiata de Santa María de Valladolid,
gio del rey Juan II fechado en 1408, y que probablemente los privilegios que se dirigieran a dichos monasterios y los liberasen de la obediencia
de 1412, 1417 y 1420 fueron obtenidos durante su abadiato. Sin que prestaban al abad de Sobrado y los sujetasen al abad Cíteaux, lo que
embargo, en I407 está documentado Pedro de Valdivieso ostentando ejecutan en 6 de marzo del año siguiente (A.H.N., Clero carpeta 3.433,
ese cargo, por lo que tal vez estemos ante un error del cronista. doc. 7).
Julio, 19. Instrumento relativo a los problemas que tenía el monas-
2 1 6 2
Juan Rodríguez de Fuenpudia de la bula de Pío II de 3 de octubre de de diezmos. Actúan como testigos los monjes Francisco de Valladolid,
I463 (A.H.N., Clero, carpeta 3.433, doc. 7); Marzo, 2I. Sentencia del Juan de Pertusa, Juan de Savando y Alonso de Trigueros (A.H.N., Clero,
pleito que sostenía con el monasterio de Aguilar acerca de unas aceñas legajo 7.625).
(A.H.N., Clero, carpeta 3.433, doc. 8). Agosto, 24, Cabezón. Mandamiento y ejecutoria del privilegio que
2 1 7 8
Vicente el Viejo de la granja de Palazuelos (A.H.N., Clero, carpeta 3.433, bre del Cardenal.
doc. I I ) . Julio, I. Julio II entrega del monasterio a fray Pacífico de Liaño
2 1 8 3
Orígenes del monasterio embargo, este autor llegó a plantear la posible existencia de
A partir de la noticia que dio Argaiz sobre la exis- "un monasterio benedictino desaparecido cuando la inva-
tencia de un monasterio en Matallana desde 950 y que en sión de los árabes" en el lugar donde luego se asentaría la
torno a 1002 estaba habitado por monjas , numerosos 2184
casa cisterciense, aunque él mismo apuntó que "esto no
estudiosos la dieron por válida y remontaron los orígenes de pasa de conjetura sin prueba alguna documental" . 2189
Santa María de Matallana a la décima centuria . Fue 2185 Lo único seguro es que a mediados del siglo XII exis-
Francisco Antón el encargado de desbaratar el error en que tía en este paraje una aldea con dos iglesias, "Sanctum Sal-
había caído el cronista benedictino y sus seguidores, seña- vatorem de Mathaplana" y "Sancto Martino de
lando que tanto el de Matallana cuyo abad Cixila aparece Mathaplana", con sus respectivos infantazgos, pertene-
confirmando en unos documentos del monasterio de Saha- cientes al dominio de Santa María de Bamba y que fueron
gún , como el monasterio de sorores de Mataplana que se cita entregados por la infanta doña Sancha junto con este
2186
en una donación de Froilán II de 21 de diciembre de 1002 monasterio a la Orden de San Juan el 10 o 13 de junio de
a la Iglesia de L e ó n , o la Ecclesiam Sancti Salvatori de Mata-
2187 1140 . 2190
1675: I, fol.341r
2 1 8 4 Arqueológico de Valladolid, se indica que el lugar sufrió una ocupación
QUADRADO, 1885: 273-374; ORTEGARUBIO, 1895: 93; SIMÓNY
2 1 8 5 durante la Edad del Bronce, continuada posteriormente en época tardo
NIETO, 1895: 149; DIMIER, 1949: 133; idem, 1959: 65; VAN DER romana, pudiéndose localizar la aldea medieval de "Mataplana" en el
MEER, 1965: 287, entre otros. sector más oriental del yacimiento (vid. también el Informe del Segui-
2186 MÍNGUEZ FERNÁNDEZ, 1976: doc. 167, 208 y doc. 168, 211 (1 miento arqueológico de las obras de rehabilitación, pág.30, realizado por
de diciembre de 959); doc. 197, 243 (16 de marzo de 162). L.C. San Miguel Maté en diciembre de 1995). Por su parte M. Crespo,
RUIZ ASENCIO, 1987: doc. 629, 163.
2 1 8 7 en el informe presentado con motivo de las excavaciones realizadas entre
ANTÓN, 1923 (4): 97-100; idem, 1942: 167-170 (no obstante en
2 1 8 8 julio y agosto de 1999, señalaba un asentamiento rústico romano en el
1919: 269, había dado por buenas las referencias facilitadas por Qua- pago del "Picón entre caminos", a 300 m. al norte del monasterio, loca-
drado). Le siguen Aurelio García del Río en su historia manuscrita sobre lizando el verano del año siguiente, junto a R. San José Miguel y M.
Villalba de los Alcores (1955), 47-49 (conservada una copia en el Ayun- Gallardo, un posible vertedero asociado a la aldea altomedieval de Mata-
tamiento de Villalba de los Alcores, será citado como Historia de Villalba); plana (Tanto la ficha como los informes mencionados pueden consul-
YÁÑEZ NEIRA, 1974 (1): 311-313; YÁÑEZ NEIRA, 1974 (2): 53-54; tarse en el Servicio Territorial de Educación y Cultura de Valladolid);
SENRA, 2002 (2): 485; CRESPO, HERRÁN y PUENTE, 2006: 43. vid. además, CRESPO, HERRÁN y PUENTE, 2006: 46, la aldea se locali-
2189 ANTÓN, 1923 (4): 100; idem, 1942: 170; YÁÑEZ NEIRA, 1974 zaba al Este del monasterio, extendiéndose bajo el emplazamiento actual
(1): 313. del monasterio.
2190 BARQUERO GOÑI, 1995: 208 y 407; pub. por AYALA MARTÍNEZ,
1995: 187-190. En la ficha correspondiente a Matallana del Inventario
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
370
La fundación: algunos problemas de cronología el infantado de Matallana, y se lo concede como lo habia
comprado de el gran prior de el orden de el hospital de Hyeru-
Algo compleja es la cuestión de la data de fundación salem . Anteriormente, el 2 8 de enero de ese
2196
del monasterio. En primer lugar son pocos los pergaminos mismo año, le había concedido la granja de San-
originales conservados para esta primera época del monas- drones y otras propiedades . 2I97
terio (los más antiguos son ya de los últimos años del siglo
XIV), debiéndonos servir de las copias modernas o de las • En diciembre de II75, estando el rey en Burgos, da
regestas que de ellos se recogen en el Tumbo o en el Car- 2191
poder a Tello Téllez y a su mujer para que en su nom-
tulario . A ello hay que añadir que estos documentos plan-
2192
bre done el monasterio de Matallana, según ya le tenia
tean problemas de datación, ya que en ocasiones no edificado, al monasterio de La Crete y a Roberto, pri-
coinciden las referencias cronológicas que aportan, un mer abad de Matallana. Alfonso VIII aprueba enton-
mismo documento es fechado de forma distinta por dife- ces la fundación, volviendo a concederles el lugar de
rentes autores, etc. Matallana y tomándoles bajo su protección < 2I98
rio comenzado en I 6 3 0 por fray Basilio Duarte: sencia del abad francés se explica bien por haber
• El 2 4 de agosto de I I 7 I , día de San Bartolomé, permanecido en el monasterio durante todo este
Alfonso VIII intercambiaba con los Hospitalarios el tiempo o por que vino a visitarlo . 220I
VIII entregaba en Burgos a Tello Pérez y su mujer ción por el monarca de este lugar a Tello Pérez y Guntroda
de Henares la Transcripción del Tumbo de Matallana. Desde aquí le agradezco I972: 40I-402) y 236v.
el haberme facilitado una copia de su texto. Por nuestra parte, para las 2 M I Suppuesto que el abbad del monasterio de crista willelmo se hallo al otorgar las dos
citas y extractos de esta fuente hemos utilizado una transcripción pro- donaciones que e referidofechas una el mes de diciembre del año de milly ciento y setenta
pia que respeta fielmente las grafías del original, así como su foliación. y cinco y otra el año de mill y ciento y ochenta y cinco, abremos de decir que todo este
2192A.H.N., Clero, legajo 7.538. Desde este momento le denominare- tiempo asistio en matallana aquel abbad de crista, o que algunas veces y en particular este
m o s simplemente Cartulario. año mill y ciento y ochenta y cinco vino a visitar este monasterio, por particular aficion
2193 MORALES, I765: I94. que a el y a su abbad y monges como proprios hijos suyos tenia o por haber sido concierto
2 1 9 4 Tumbo, fols.7Ir, I63v y 236r. y condicion de lafundacion por los dias del abbad willelmo, o por particular es commis-
... de suerte que este año en hacimiento de gracias de esta victoria comenfo a edi-
2 1 9 5 siones recibidas de el abbad de cister nuestro general (Tumbo, fol. 74v).
ficar este monasterio a lo menos compro para eso este sitio por lo qual se quenta por el MANRIQUE, I642-I659: III, I2. Recogen también el documento,
2 2 0 2
primero de la fundacion de este monasterio (Tumbo, p o r t a d a y f o l . 7 I r ) . T a m b i é n NÚÑEZ DE CASTRO, I665: 87 y I57; ZAPATA, I665; DELAVILLE LE
en Cartulario, fol.249v. ROULS, I894-I906: IV 602 bis; GONZÁLEZ, I960: II, 654-656; FER-
2196 Tumbo, fols. 72r, I63v-I64r y 236r. NÁNDEZ, I972: 396; y BARQUERO GOÑI, I995: I093.
FUNDACIONES MASCULINAS • 311
mismo y su mujer el 17 de noviembre de 1173 a Tello Pérez data recogida por Manrique y proponía atrasarla
y Guntroda por el cual les concedía todo el Infantazgo y dere- una decena de años basándose en la presencia de la
chos que pertenecían a la Corona Real en el lugar de Matallana, y el infanta Berenguela —nacida en la primera mitad de
segundo en diciembre de I I 7 5 en el cual daba licencia a I I 8 0 — y en el itinerario del rey , razones ya
2218 2219
Tello y su mujer para que cediesen dicho lugar a Roberto, esgrimidas por Delaville Le Rouls . También 2220
primer abad de Matallana, confirmaba la fundación del Fernández había señalado la dificultad cronológica
monasterio y lo tomaba bajo su protección . 2207
del documento, y a las razones aportadas por Gon-
Siguiendo a Manrique, la mayoría de los autores que zález para modificar la fecha tradicional él añadía
se han ocupado del monasterio aceptaron las fechas que dio otra, la mención a la recuperación del infantazgo,
2203 MANRIQUE, 1642-1659: III, 12; GONZÁLEZ, 1960: II, 317; FER- cronología en un catálogo cronológico de fundaciones perteneciente al
NÁNDEZ, 1972: 397 monasterio de Veruela y que data del siglo XV (TORNÉ CUBELLS, 1996
B.R.A.H., Col. Salazar, D-I6, fol.43; pub. por MANRIQUE, 1642-
2 2 0 4 (2): 853).
1659: III, 12-13; FERNÁNDEZ, 1972: 398 (Vid. Apéndice documental, 2210 MENDOZA, 1753: 15. Según ÁLVAREZ PALENZUELA, 1978: 108
doc. I). confundía este autor el intercambio del lugar con la fundación, algo que
B.R.A.H., Col. Salazar, D-I6, fol.43; pub. por MANRIQUE, 1642-
2 2 0 5 ya hemos visto se hacía también en el Tumbo.
1659: III, 13; FERNÁNDEZ, 1972: 399 (Vid. Apéndice documental, doc. 2211 IBÁÑEZ DE SEGOVIA, 1783: 66 y 225-226; ANTÓN, 1923 (4):
2). 100-102 y 103; ANTÓN: 1942: 170-172 y 173; GARCÍA CHICO, 1959:
2206 A.G.S., Mercedes y privilegios, legajo 400; pub. por ANTÓN, 1942: 172; ÁLVAREZ PALENZUELA, 1978: 109, 110 y 240 (quien señala que
309-314, en concreto, 310-311. aunque la fundación tuvo lugar en noviembre o diciembre de II73,
El contenido de este segundo documento coincide a grandes ras-
2 2 0 7 "inmediatamente de la de Alfonso VIII o a lo sumo con unos días de
gos con el transcrito por Manrique (vid. nota 2203), y el del primero, diferencia", tal vez los monjes llegaran en 1174); VALDEÓN BARUQUE,
aunque con la diferencia de siete días de un doc. a otro, con otro publi- 1983: 46; PÉREZ EMBID, 1986: 277; VVAA., 1995: II, 972; VALLEJO,
cado también por el cronista de la orden (vid. nota 2202). 1995: 64; HERBOSA, 2003: 10; FORTÚN, 2007: 35.
JANAUSCHECK, 1877: 170; COTTINEAU, 1935-39: II, 1787;
2 2 0 8 2212 GARCÍA ESCOBAR, 1852 (2): 347; LAMBERT, 1931: 26; GONZÁLEZ,
DIMIER, 1949: 133; idem, 1959: 65; CANIVEZ, 1953: 1032; TIJBURG, 1960: I, 348, 520, 696; idem, 1984: 192; SALCEDO, 1985: 109-110;
1953: 187; idem, 1964: 88; EYDOUX, 1954: 174; COCHERIL, 1963: idem, 1999: 82; Monumentos españoles, 1984-87: II, 392; FRANCIA
949; idem, 1964: 237 y 284; YÁÑEZ ÑEIRA, 1973 (2): 1595; YÁÑEZ LORENZO, 1995: 181; SENRA, 2002 (2): 485; GARCÍA DE LA BORBOLLA,
ÑEIRA, 1974 (I): 318 y 323; idem, 1974 (2): 59; idem, 1974 (3): 73; 2005: 290-291; o GARCÍA DEL RÍO en su Historia de Villalba..., 49-50.
idem, I974 (4): I 4 (aunque señala que también pudo llevarse a cabo en 2213 REGLERO DE LA FUENTE, 1993: 164; ARA GIL, 2002: 63; CRESPO,
los primeros meses de 1175); MARTÍNEZ, 1978: 417; ARA GIL, 1986: HERRÁN y PUENTE, 2006: 48; ALONSO ÁLVAREZ, 2007: 669; ARA GIL,
25; MASOLIVER, 1987: 522; BANGOTORVISO, 1994: 189; RUIZSOUZA, 2009: 9.
1998 (2): 486; GOBRY, 1997: 118; GARCÍA GUINEA, 2001: 23. Por su KARGE, 1995: 166, señalando además que era un monasterio de
2 2 1 4
parte, VAN DER MEER, 1965: 287, señala que fue fundado "1147-75", monjas.
debiendo corresponder la alteración en la primera fecha a un error de 1923: 103-104 y 1942: 173.
2 2 1 5
imprenta, queriendo seguramente haber escrito 1174-75. 2216 1978: 108-109 nota 158 y 212 nota 284
2209 El autor del Tumbo de Valparaíso (YÁÑEZ ÑEIRA, 1957: 165) y 1960: I, 196, 562 y 697; II, 654-656
2 2 1 7
JONGELIN, 1640: VI, 7. Ya MANRIQUE, 1642-1659: II, cap. XI, I, año Ibid: I, 197.
2 2 1 8
1150, señala cómo la Cronología cisterciense dice "Eodem anno [fun- 2219 En 1984: 201, sitúa sin embargo el intercambio en I I 7 I .
data este] Abbadia de Mataplana in Hispania", expresando más adelante 2220 1894-1906: IV 258-260.
que esta fecha es anticipada y equivocada. También aparece recogida esta
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
372
que se ha fechado en I I 8 I ; sin embargo, final- falsificación realizada en el monasterio con el fin de ade-
mente acepta la de I I 7 I en base a que en la dona- lantar la data de fundación del mismo . Se basa para ello
2231
mantienen la fecha tradicional Yáñez N e i r a y 2222 • La donación de Sandrones a Tello Pérez por el
Barquero G o ñ i , mientras que Reglero de la
2223 monarca no tuvo lugar en I I 7 3 como señala el
Fuente aboga por la de I I 8 I . 2224 Tumbo, sino el 3 de enero de I I 8 I , conservándose
el documento ori ginal . 2233
mento y su fecha era que se hacía referencia a la • dotación del monasterio por Tello y familia que lo
incursión a Pamplona que tuvo lugar ese mismo entregan a La Crete, de contenido idéntico al trans-
año, y como además se citaba la permuta con los crito por Manrique y fechado en 1175.
sanjuanistas, ésta tuvo que ocurrir necesariamente • confirmación y aceptación por Guillermo, abad de
en I I 7 I . Por su parte, Reglero de la Fuente piensa La Crete y Roberto, abad de Matallana.
que se debe tratar de una falsificación, por cuanto
para este autor el cambio con el Hospital se llevó • confirmación de Alfonso VIII, cuyo texto también
a cabo en I I 8 I . 2229
coincide según este investigador con el que publica
Manrique con fecha 1175.
3. Los documentos de II75, por su parte, hasta hace
pocos años han sido unánimemente aceptados como Al analizar y revisar las noticias transmitidas por el
válidos por la historiografía, salvo la objeción puesta Tumbo —la de 1175 y la de 1185—, los documentos publica-
por Álvarez Palenzuela de que la concesión que dos por Manrique y los comentados en la cédula de Felipe V
hacen Tello y Guntroda a La Crete no es como se ( I 7 I 3 ) lo primero que apreciamos es la similitud y coinci-
había creído la primera donación y, por tanto, la fun- dencias existentes entre todos ellos, pudiéndose pensar que
dación del cenobio, sino que es al mismo tiempo una estamos ante un mismo documento del que únicamente habría
donación —la de Sandrones— y la confirmación de que definir cuál es su data verdadera. Pero hay otra serie de
algo ya entregado —la de Matallana— . 2230 diferencias sustanciales al margen de las ya comentadas:
Por su parte, Reglero de la Fuente ha apuntado en • En primer lugar, en el relato de 1185 se intuyen como
fechas recientes que estos documentos son en realidad una efectivamente comentó Reglero de la Fuente tres
NEIRA, 1974 (I): 314-315; idem, 1974 (2): 55-56, idem, 1974 (4): 19 9 3: I I 2 - I I 3 nota 50.
2 2 3 1
II-I3. Esta idea la mantiene también en 1994: 267 nota 26, añadiendo
2 2 3 2
1995: 210, 351 y 1093; idem, 1995 (2): 85; idem, 1997: 326 y
2 2 2 3 que la permuta tuvo lugar después de la paz de Medina de Rioseco y
507. consiguiente incorporación del infantazgo a Castilla ( I I 8 I ) .
1993: 113 nota 53 y 164. Le siguen CRESPO, HERRÁN y PUENTE,
2 2 2 4 A.H.N., Sigilografía, 4-1; pub. por GONZÁLEZ, 1960: 601-603;
2 2 3 3
2226 Erróneamente, VIELVA, 1976: 649, señala que fue en noviembre de Vid. Apéndice documental, doc. 3. Seguía esta idea de la confir-
2 2 3 5
1174 cuando Alfonso VIII donó Matallana a Tello Pérez. mación YÁÑEZ NEIRA, 1974 (I): 318.
1972: 392.
2 2 2 7 1993: 164.
2 2 3 6
documentos, mientras que en el de 1175 solamente trumento parece fuera de toda duda, lo que vendría
dos, por lo que la identidad quedaría ya descartada. a reafirmar la validez de la fecha de agosto de 1181
• En segundo lugar, aunque las dotaciones del matri- para el intercambio de Matallana por Alcubilla.
monio Téllez parecen ser en todos los casos el • Según la secuencia cronológica de los abades de La
mismo documento, las confirmaciones del monarca Crete, Guillermo no ostentó ese cargo hasta por lo
son distintas. En la regesta de 1175 se aprecian menos 1183 , y por lo tanto nunca pudo estar en
2238
como hemos dicho dos acciones: una, la licencia a Burgos en 1175 como se afirma en el Tumbo y en
Tello y Guntroda para donar el lugar al monaste- los documentos que presenta Manrique, pero sí en
rio, y dos, la confirmación de la donación y acogida Matallana diez años más tarde.
bajo su protección, y así aparece en el publicado por
Manrique con la misma fecha y en la real cédula de Si a estos testimonios unimos el apuntado por Reglero
1713. La confirmación que aparece sin embargo en de la donación de Sandrones en 1181 , deberemos consi-
2239
el relato de 1185 comprende sólo la ratificación de derar entonces la fecha de 1185 como la de fundación del
lo hecho por Tello y la recepción bajo el patronazgo monasterio.
real y, en contra de lo que decía Reglero, ninguna Respecto a los fundadores, el Tumbo siempre consi-
relación tiene con el publicado por Manrique. deró que el monasterio esfundacion real y proprio patronazgo de el rey
• En tercer lugar, uno de los privilegios de 1175 don alonso octabo llamado el bueno, como puede verse repetidas
transmitidos por la cédula de Felipe V aunque veces a lo largo de sus páginas . Manrique también pre-
2240
guarda estrecha relación con el transcrito por Man- fiere considerar al monarca como fundador por haber sido
rique se diferencia de aquél en que no aparece men- éste el que proporcionó a los Téllez los lugares que luego,
cionado en ninguna ocasión el monasterio de La por indicación suya, constituirían la dotación inicial del
Crete ni su abad Guillermo, y que la donación de nuevo centro monástico . Sin embargo, el resto de auto-
2241
Matallana se hace directamente a Roberto. res que se han ocupado del monasterio siempre han hablado
de Tello Pérez, primer Señor de Meneses, y Guntroda Gar-
N o creemos factible determinar a partir de estos cía, su mujer, como fundadores del monasterio , siendo 2242
datos qué documentos son falsos y cuáles verdaderos, sobre elegido por ellos y algunos de sus descendientes como lugar
todo teniendo en cuenta que en ninguno de los casos esta- de descanso eterno . 2243
mento, además de Bamba y otras villas citadas en cisterciense sita en la diócesis de Langres (Francia) e hija de
aquélla primera donación aparece también nom- Morimond , como queda atestiguado en el documento de
2245
brada Matam Planam. La autenticidad de este ins- 1185 por el que la Tello Pérez y su familia donaban dicho
2005: 339, comenta que en esta fundación se aprecia "un estrecho lazo 1974 (1): 391-395; YÁÑEZ NEIRA, 1974 (3): 73-78.
de unión que hermanaba en esta iniciativa al monarca castellano y a la Sobre el monasterio de La Crete, vid. CANIVEZ, 1953.
2 2 4 5
pareja noble".
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
374
lugar a su abad Willelmo . Infundadas son, por tanto, las
2246 —este último y el vallisoletano hijos del francés—, al
fuentes que le hacen hija de Sacramenia . 2247 monasterio a tratar de descubrir lo ocurrido y el
Algo grave debió suceder entre madre e hija, porque estado de la casa, y a corregir todo lo necesario *. 225
seguía sin resolverse, ya que la sentencia de la reclamación • E n I 2 5 6 don Miguel abbad de valbuena admitio una dona-
presentada por el abad de La Crete sobre Matallana se cion que a este monasterio se hizo como superior que era deste
aplazaba para el siguiente capítulo y se encargaba a los monasterio. Se trataba de la concesión que hizo un tal
abades de Morimond y La Ferté investigar el caso . 2249
Juan de la granja de Villamuriel y 300 mrs. para el
Tampoco tenemos constancia de cuál fue la resolución. arreglo de las casas de Valladolid . 2253
Lo único cierto es que en I 2 0 5 el abad de La Crete se • En I270 los abades de Matallana, Palazuelos y Rio-
querellaba ante el Capítulo General contra el de Valbuena seco fueron depuestos por su "pater abbas Vallis
por la abadía de Matallana, encomendándose el caso al bonae", encargando el Capítulo a los abades de Sacra-
abad de Cíteaux y a los cuatro primeros abades (La Ferté, menia y Bujedo informasen sobre las causas y modo
Morimond, Clairvaux y Pontigny) y que a partir de 2250
en que aquéllos habían sido destituidos de su cargo . 2254
pado de langues, en el reyno de francia, de el qual monasterio de Crista es filiacion de Mataplana, committitur Domino Cistercii et quatuor primis abbati-
este de Santa Maria de Matallana—, o en otras m u c h a s ocasiones: Estos trece bus terminanda in Divione" (CANIVEZ, I933-I94I: I, año I205, def.
monges vinieron de el monasterio de Sancta Maria de Crista de esta misma orden de 68, 320).
cister, en el reyno de francia en el obispado de langres o lingonense, del qual monaste- 2251 CANIVEZ, I933-I94I: I, año I208, def. 48, 355-356. N o debie-
rio de santa maria de crista que esta en el obispado de langres es derecha filiacion este ron ser muy explícitos los abades de Berdoues y Valbuena relatando al
de matallana (fol.72r); Desde el año mill y ciento y setenta y uno que sefundo este Capítulo General lo sucedido en Matallana, por cuanto al año siguiente
/ monasterio y le vinieron a habitar abbad y monges de el monasterio de santa maria se les condenaba a tres días en leve culpa (Ibid., I, año I209 def. 9, 358-
de Crista cuya filiacion es este / de matallana (fol.92v); etc. Esta insistencia 359). En I 2 I 0 de nuevo el Capítulo General enviaba a los abades de
se explica por la negativa del monasterio, desde el siglo XV, a conside- Valbuena y Huerta a averiguar los excesos cometidos por el de Matallana,
rarse hijo de Valbuena. y aunque no se haga referencia directa a su papel como padre-abad, el
Esta filiación fue apuntada por JÓNGELIN, I640: VI, 7. El Tumbo
2 2 4 7 hecho de que se le envíe otra vez junto a Huerta, su "hermana", hace
de Sacramenia (A.H.N., Clero, Códices I04-B, fol.83r) recoge la noti- pensar que a estos dos monasterios se les encomienda esta misión por ser
cia y señala que Los Monasterios de Matallana en el Obispado de Palencia; y el de de su familia directa (CANIVEZ, I933-I94I: I, año I2I0, def. 4I, 377).
Rute de San Prudencio en el de Calahorra, son filiaciones de Sacramenia. MANRI- Años más tarde, en I274, aparece junto con sus hermanos Palazuelos y
QUE, I642-I659: I, 4I3; IV I2, y JANAUSCHECK, I877: I70 rechaza- Bonaval actuando como testigos en un asunto relacionado con el abad de
ron esta supuesta filiación, y les sigue YÁÑEZ NEIRA, I974 (I): 3 I 7 e Armenteira (Ibid: III, año I274, def. I7, I30).
idem, I974 (2): 58. En la documentación de Matallana no hay rastro de Tumbo, fols.53v-54r, 72v, 8Iv, 82v-83r, 238r
2 2 5 2
una posible vinculación entre estas abadías. Tumbo, fol.72v, 238r, 308.
2 2 5 3
Crista qui litteris domini Cisterciensis irreverenter in Capitulo contra- 2255 A.H.N., Clero, carpeta 3.44I, doc. I3. Se trata de un documento
dixit, tribus diebus sit in levi culpa, uno eorum in pane et aqua" (CANI- fragmentado, sin fecha, en cuyo reverso aparece escrito lo siguiente: Si a
VEZ, I933-I94I: I, año I I 9 7 def. I8, 2I3). YÁÑEZ NEIRA da noticia este Poder no le hubieran quitado la firma y data, muchas cosas se podrian sacar, pero
del contenido de esta y las siguientes definiciones (I973 (2): I595; I974 como no esta autorizado no vale nada.
• 311
FUNDACIONES MASCULINAS•373
• E l 3 de marzo de 1360, don Sancho abad de Val- Resumiendo, podemos decir que el monasterio de
buena da poder a Martín abad de Matallana para Matallana fue fundado con monjes provenientes de La
que arriende la heredad de Villanueva . 2256 Crete pero que desconocidas circunstancias hicieron que se
• En un privilegio de Enrique III de 1393 se decía: desligase de éste y pasase por orden del Capítulo General a
Facemos merced al dicho Monasterio de Valbuena y a los Monas-
depender de Valbuena, situación que, por otro lado, aunque
no debía ser muy frecuente, no fue desde luego la única
terios de Matallana, de Palazuelos y Rioseco y Bonabal sus
planteada en la Península Ibérica a fines del XII y principios
fijos, que sean exentos de todo pecho y tributo .
del siglo XIII. Otros monasterios hispanos se vieron envuel-
2257
• En 1410 el abad de Valbuena Pedro de Lezana tos por entonces en una serie de disputas por el control de
aprobó el trueque realizado entre Matallana y el sus filiales, como por ejemplo Carracedo y Clairvaux por
Obispo de Segovia, por el que a cambio de un juro Montederramo , Sobrado y Carracedo por M o n f e r o
2260 226I
de 2000 mrs se desprendió de la granja de Otea. En o Tulebras y Las Huelgas de Burgos por las hijas de aqué-
unas partes del Tumbo que aluden a este documento lla2262,
el abad de Valbuena aparece como superior deste monas- aunque en algún caso no parece que hubiese enfren-
terio , pero en otra se indica que es visitador de este
225&
tamiento alguno, como La Oliva y Veruela que, según
algunos autores, estuvieron sujetos en un principio a Nien-
monasterio por comission de el abbad de cister general de toda
cebas-Fitero pasan luego a depender de L'Escale D i e u . 2263
la religion y por autoridad de el obispo de tortossa legado en Los conflictos entre Matallana y Valbuena comen-
españa de el papa Benedicto terciodecimo . 2259
zaron con motivo de la incorporación de este último a la
2256 A.H.N. Clero, carpeta 3.44I-bis, doc. 2. que en el capítulo celebrado en 27 de abril de I I 8 9 estaban todas las
2 2 5 7 Fr. Bernardo SUÁREZ., Exordio de la Observancia de la Religion de nuestro abadesas, dispensadas por la de Tulebras, hasta I I 9 9 ésta no renunció a
Padre San Bernardo..., cap. 4 n. 2 (A.H.N. Clero, legajo 7.658) sus filiaciones castellano-leonesas (RODRÍGUEZ LÓPEZ, 1907: I, 57-69
Tumbo, fols.72v, I50r, 238r
2 2 5 8 y 75-76; GARCÍA M. COLOMBAS, 1987: I07-II7; CONNOR, 1988: 132-
2259 Ibid. 87v. Recordemos no obstante, que no conservamos los docu- 136 y 140-142; BAURY, 1999: 240-242; o CAVERO DOMÍNGUEZ, 803-
mentos originales correspondientes a éste intercambio ni a la permuta de 808. Más referencias bibliográficas sobre este contencioso pueden verse
1251 y la donación de 1256, sino sólo las regestas que de ellos se hacen en la introducción general histórica).
en el Tumbo, y que a lo largo de todo él se hace hincapié, como veremos 2263 Asunto espinoso es éste. Hace años Dailliez publicó un documento
más abajo, en que Matallana es filiación de La Crete y no de Valbuena, de 27 de mayo de 1145 por el que García Ramírez, rey de Navarra,
y que estuvo sometido a Cíteaux. Por su parte YÁÑEZ NEIRA, haciéndose donaba a Santa María de Niencebas —primera sede de Fitero— los luga-
eco de los airados comentarios del redactor del Tumbo contra Valbuena, res de Veruela y La Oliva (vid. sobre el particular lo que se dice en la
niega una posible dependencia entre ambas casas, insistiendo en que Val- introducción general histórica. Para el caso de La Oliva vid. además
buena sí quiso tener sometido a Matallana (por ejemplo, en I973 (2): MUNITALOINAZ, 1991: 431-432, en donde descarta por falsa la dona-
1595, o 1974 (3): 82). ción de García Ramírez del lugar de Encisa a L'Escale-Dieu fechada en
2260 VALLE PÉREZ, 1990: 135-136, señala que la causa de la disputa II34, poniendo también en duda la autenticidad del documento de
no es tanto una dependencia de la casa gallega a la leonesa antes de que junio de 1149 por el que Ramón Berenguer IV donaba al abad de Scala
ésta se afiliase a la Orden en 1203, ya que Montederramo aparecía como Dei la villa de Oliva con todas sus propiedades, etc —MUNITA LOINAZ,
cisterciense en 1163 en una bula de Alejandro III y el enfrentamiento se 1991: 433; idem, 1995: 357-358; idem, 1995 (2): I03-II3). Y aunque
produce casi medio siglo después, aunque no descarta del todo ese este documento ha sido juzgado de falsificación (vid. la introducción
"hipotético dominio". Vid. también VALLE PÉREZ, 1982: I, 199 nota 32. general histórica), lo cierto es que en la bula que extiende Eugenio III en
La disputa viene reflejada en las definiciones 44 de 1214 y 63 de 1216 Cíteaux el 17 de septiembre de 1147 a Raimundo, abad de Niencebas,
(CANIVEZ, I, 424 y 462-463, respectivamente), entre otras. aparecen de nuevo entre sus posesiones Veruela y Oliva (pub. por MON-
2261 Durante varios años Sobrado y Carracedo se disputaron esta ane- TERDE ALBIAC, 1978: 362-363; y DAILLIEZ, 1987: 175-176; cit. por
xión, resuelta definitivamente a favor de Sobrado en 1214. Fueron nom- DAILLIEZ, 1987: 169-170; MUNITA LOINAZ, 1991: 432; idem, 1995:
brados jueces los abades de Meira y Osera. El motivo fue que los monjes
benedictinos de Monfero procedían de Santa María de Valverde —luego 357; idem, 2006: 123; OLCOZYANGUAS, 2005: 47; etc.). Así, los auto-
Carracedo—, y habían sido afiliados por el gallego (VALLE PÉREZ, 1982: res que siguen a Dailliez, dan por confirmada la veracidad histórica del
I, 65 y 84-85 nota 69; LÓPEZSANGIL, 1999: 33-35). documento de II45, mientras que los que lo rechazan apuntan a que la
2262 Tras la fundación de Las Huelgas de Burgos Alfonso VIII se diri-
gió al Capítulo General con el fin de que todos los monasterios femeni- vinculación de esos dos lugares a Niencebas se debería tan sólo a "una
nos de los reinos de Castilla y León reconocieran a Las Huelgas como tutela provisional en los primeros años" de su existencia, pues la verda-
casa madre, desligándose así de Tulebras. Aprobado en 1187, las filiales dera casa madre era la francesa (MONTERDE ALBIAC, 1978: 255; CABA-
del cenobio navarro se negaron a someterse sin el consentimiento de su NES PECOURT y RODRÍGUEZ LAJUSTTCIA, 2006: 53-56; RODRÍGUEZ
verdadera madre. En 1188 el Capítulo General reiteraba la disposición
del anterior y al año siguiente se reunieron a capítulo en Las Huelgas, LAJUSTICIA, 2006: 2006: 255), explicación que, a nuestro juicio, resulta
pero las abadesas de Perales, Gradefes y Cañas se negaron a acatar al bur- algo ingenua. Pero, curiosamente, en la bula que aquel mismo pontífice
galés como nueva casa madre hasta que lo consultasen con Tulebras. Aun- otorga a Fitero en I I 5 2 confirmándole sus posesiones y colocándolo
bajo su amparo, ya no aparecen dichos lugares (MONTERDE ALBIAC,
1978: 378-379). Sea como fuere, para Dailliez y sus seguidores el Capí-
tulo General de 1150 hará a Veruela y La Oliva abadías autónomas —de
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
376
reforma de Martín de Vargas en I 4 3 0 . Cuatro años más
2264 tulo General encomendaba al abad de Berdoues, "ut pater
tarde, el 2 6 de septiembre de I434, el abad de Cíteaux abbas", la visita y reforma de los monasterios de Matallana,
concedía a Vargas la facultad de visitar, reformar, corregir Palazuelos, Rioseco y Bonaval en tanto que Valbuena no
e incluso destituir y nombrar abades en los monasterios guardara obediencia a la o r d e n y se sometiese a ella . 2267
de Matallana, Palazuelos, Rioseco y Bonaval, como lo El monasterio de Valbuena insistía en visitar y corre-
había venido haciendo el abad de Valbuena. Mientras tanto gir él mismo a sus filiales por lo que fray Lope de o ñ a ,
este último monasterio recibía del pontífice Eugenio IV abad de Matallana, emprende en 1443 un pleito contra
privilegios que reconocían su nueva situación e iban con- aquél, actuando como juez conservador fray Alonso, abad
solidando la reforma, aunque en la bula Etsi pro cunctorum, de Benavides . El de Valbuena había dado poder el 2 7 de
2268
de 2 5 de septiembre de I437, limitaba el alcance de las abril a fray Pacífico de Santander, Juan Álvarez Sotillo y
exenciones concedidas anteriormente al permitir a sus filia- Pedro Sánchez de Deza —estos dos, notarios apostólicos
les eximirse de esa sujeción y anejarse a otros monasterios vecinos de Valladolid—, para que como procuradores del
de la o r d e n si así lo querían. A partir de entonces comen- monasterio actuasen en el pleito, por quanto el monasterio de
zará la lucha de las hijas por desvincularse de su casa santa maria de matallana de la dicha orden e diocesis es iure filiacionis
madre. subjecto al abbat e monasterio nuestro de valbuena e al que fuere abbat
El Tumbo de Matallana insiste repetidas veces en que de nuestro monasterio pertenece la visitacion, correpcion, institucion e
fue durante 1440, bajo el abadiato de fray Lope de Oña, distitucion e jurisdicion del abbat monjes e convento del dicho monaste-
cuando obtuvo de Eugenio IV la exención de Valbuena. rio de matallana, y habían sido citados a declarar. Por su parte,
Según la misma fuente en dicho instrumento pontificio se Matallana seguía diciendo que aunque sí hubo un tiempo
relataba ampliamente cómo el monasterio de Matallana en que fueron visitados por los abades de Valbuena, éstos lo
estaba sujeto directamente a Cíteaux y que éste, dada la leja- hicieron por mandato del abad de Cíteaux, al que en reali-
nía, había dado poder al de Valbuena para visitarlo en su dad estaban sujetos. Las apelaciones presentadas por Val-
nombre, y ahora el papa ordenaba al abad de Benavides la buena fueron rechazadas por el juez, quien además
ejecución de esta bula, poniendo de nuevo a Matallana bajo amenazaba a Martín de Vargas con acabar el juicio a favor
la jurisdicción directa de Cíteaux . N o conservamos el
2265 de Matallana, por lo que no les quedó más remedio que
documento citado, por lo que no podemos decir nada al res- recurrir a la Santa Sede. Mientras tanto se suceden las
pecto . Sea como fuere, lo cierto es que en 1441 el Capí-
2266 mutuas excomuniones, fray Alonso y fray Lope lo fueron
ahí su ausencia en la bula de 1152— afiliadas a Fitero (DAILLIEZ, 1987: este monasterio a peticion de don lope de oña Abbad deste monasterio en la qual bulla
169, doc. en 176, con fecha de I I 5 I ; idem, 1988 (2): 33-34; OLCOZ refiere, como estando los abbades de Cister en antigua posesion de visitar este monaste-
YANGUAS, 2002: 37; 2005: 47-48) y en I I 6 I - I I 6 2 , debido al aban- rio de matallana, y ni otro alguno, los Abbades de el monasterio de Valbuena se habian
dono de Fitero por parte del abad Raimundo para ir a Calatrava, el entremetido a visitarle sin tener derecho ni titulo para ello sino tan solamente el de haber-
mismo Capítulo General ordenará el cambio de filiación a L'Escale-Dieu les algunas veces cometido el abbad de cister como a mas cercanos que le visitasen en su
(DAILLIEZ, 1 9 8 7 : 172; MUNITA LOINAZ, 1 9 9 1 : 4 2 9 y 4 3 6 ; idem, 1995: nombre del dicho Abbad de Cister a este monasterio y el de palazuelos y otros cercanos al
360; idem, 1995 (2): 124-125, 129 y 140; idem, 2006: 124; OLCOZ de valbuena y con solo este titulo de visitar los dichos monasterios siempre y aun presu-
YANGUAS, 2005: 82; idem, 2008: 32; LÓPEZ DE GUEREÑO, 2004: 776; mian affirmar que estos dichos monasterios eran filiaciones suyas y que les debian estar
MARTÍNEZ ÁLAVA, 2007: 107; MELERO MONEO, 2007: 72 nota 10; subiectos no debiendolo ni siendo filiafiones suyos; por lo qual el dicho papa eugenio 4°
etc.),. Lamentablemente, al igual que ocurrió con el documento de II45, commete al abbad del monasterio de venabides la execucion desta bulla, y le exempta a
tampoco se ha podido revisar el estatuto que Dailliez publica de II50, este monasterio de matallana de la subiecion del Abbad de Valbuena, y le ponga conforme
perteneciente a una colección de estatutos de los Capítulos Generales a derecho en la jurisdiccion y obediencia del Abbad de Cister, general de toda nuestra
de entre 1149 y I I 6 I conservada, según él, en la Bibliotheque d'Arse- orden, como siempre habia estado. YÁÑEZ ÑEIRA, 1 9 7 4 ( I ) : 3 1 7 , 3 2 2 , 333,
nal de Paris, y que no aparece recogida en la edición que de los estatu- 335-336, y en I974 (3): 82-83, recoge y defiende la validez de esta
tos del siglo XII hizo Waddell (2002). Por su parte, algunos estudiosos noticia.
de Veruela y La Oliva han hecho caso omiso de la documentación apor- Más abajo volveremos sobre ello.
2 2 6 6
tada por Dailliez y mantienen la filiación originaria y directa a L'Escale- En la monografía de Palazuelos hemos transcrito la definición
2 2 6 7
rios de VALLE PÉREZ sobre las fundaciones de estos dos monasterios en tos relativos a este pleito y en el legajo 7.658 las preguntas del interro-
1991: 152-153 para La Oliva y 158-159 para Veruela. gatorio redactadas por los procuradores de Valbuena que se iban a leer
Los datos que ofrecemos a continuación en este párrafo han sido
2 2 6 4 a los testigos que actuaran en dicho auto. Los datos que ofrecemos a
también estudiados en la monografía de Palazuelos, de ahí que prescin- continuación están extraídos de ellos. Por otro lado, debemos señalar
damos aquí de referencias documentales y críticas a pie de página y remi- que no todos estos documentos llevan data y que los que la tienen abar-
tamos a dicho estudio para localizarlas. can un período comprendido entre el 27 de abril y el I3 de octubre de
fols.72r-v, 89r, 92v, 238r, y especialmente en 20v-2Ir, de donde
2 2 6 5 I443, si bien por las referencias de los que no llevan fecha, se deduce que
t o m a m o s el siguiente texto: Año 1440 el papa Eugenio 4° concedo una bulla a éstos no se alejan demasiado de ellas.
FUNDACIONES MASCULINAS • 377
por haber robado, injuriado y prendido a fray Pacífico, pro- molestos con el abad gallego pedían ahora se les liberase de
curador de Valbuena , y aquéllos a su vez amenazaban
2269 su jurisdicción y los sujetase al abad general de la Orden. El
con lo mismo a Martín de Vargas por presentarse fuera de 3 de octubre de 1463 el pontífice encomendaba al arce-
los plazos indicados sin alegar razones oportunas . La 2270 diano de Cerrato, a Rodrigo Rodríguez de Dueñas, licen-
escasez de noticias impiden precisar más sobre el particu- ciado en decretos y prior, y Juan Rodríguez de Fuenpudia,
lar, aunque parece que el juicio no debió ser favorable a Val- tesorero de la Colegiata de Santa María de Valladolid, libe-
buena ya que el 17 de junio de 1444 Eugenio IV liberaba rasen a ambos monasterios de la obediencia que prestaban
a Matallana y a sus "hermanas" de su jurisdicción y encar- al abad de Sobrado y los sujetasen a Cíteaux, lo que ejecu-
gaba la visitación de los mismos a Sobrado . 2271 tan en 6 de marzo del año siguiente . 2274
zuelos se dirigieron a Pío II con la siguiente petición: tras Tras la confirmación de la fundación, habrá que espe-
la incorporación de Valbuena a la reforma de Martín de rar a 1199 para encontrar un nuevo documento de Alfonso
Vargas Eugenio I V los había eximido de su obediencia a VIII a favor del monasterio. El 10 de diciembre de ese año,
este monasterio y los había sometido al de Sobrado, pero estando en Palencia, lo recibe bajo su protección con todos
nitatis in eodem monasterio habeant, generali Capitulo et eidem domino cipales privilegios y donaciones puede verse en ÁLVAREZ PALENZUELA,
Cistercii ostenderint" (CANIVEZ, 1933-1941: IV año 1454, def. 73, 1978: 212-213; y REGLERO DE LA FUENTE, 1993- 165-169; CRESPO,
708-709). HERRÁN y PUENTE, 2006: 49-62. Vid. además PÉREZ-EMBID, 1986 y
Recogemos esta definición en la monografía de Palazuelos.
2 2 7 3 las noticias extraías del Tumbo por YÁÑEZ NEIRA, 1974.
A.H.N., Clero, carpeta 3433, doc. 7. Este suceso aparece expuesto
2 2 7 4
casas heredades y viñas y cuanto tenía en Valladolid, Siman- maciones o intervenciones en pleitos .
2287 2288
cas, Montealegre, Castromonte, Urueña, Tordehumos, En I279, el aún infante Sancho IV concederá la exen-
Medina de Rioseco y Palacios, eximiéndoles de pago de tri- ción del pago de tributos a los que quieran poblar su aldea
butos en esas villas . 2277
de Portillejo y en septiembre de I286, libertad de pasto
2289
Más privilegios recibirá de Fernando III. En I220, a sus ganados y que puedan cortar leña 2290
estando en Moral de la Reina, toma bajo su protección el Las donaciones particulares también fueron cuantio-
ganado del monasterio como si fuera el suyo propio y le sas, debiéndose resaltar las realizadas por la familia de los
concede libertad de pastos , excusa del pago de portazgo
2278
fundadores y sus descendientes. Tello Téllez, obispo de
en todo el Reino y le confirma todos los privilegios que
2279
Palencia, les donó diversos bienes en Fuensaldaña en fecha
Alfonso VIII dio tanto a Tello Pérez como a Matallana . 2280
desconocida *; otros en Fuenteungrillo en I 2 3 0 ; y
229 2292
En abril de I 2 2 2 confirma la concordia establecida por el numerosos bienes junto con su hermano Suero en Sandro-
abad y don Juan del Corral entre los vecinos de Ampudia nes entre I 2 0 2 y I 2 0 3 . En I 2 4 4 Alfonso Téllez y su
2293
familia se aprecia además en la ingente cantidad de santas de I 2 6 2 Martín Alfonso y su mujer María Meléndez les
reliquias que ofrecieron al monasterio, pero sobre todo en donarán también lo que tienen en Fuenteungrillo . 2296
la participación de Beatriz de Suabia y su suegra Berenguela Alfonso Téllez, hijo del infante de Molina y su mujer Teresa
en la construcción del templo abacial . 2284
Pérez, donan el 2 7 de marzo de I 2 8 5 el monte y casa de
Alfonso X también le beneficiará con algunos privi- Navillas junto con las demás posesiones radicantes en dicha
legios. En I 2 5 5 confirma al abad Isidro la propiedad de comarca, tal como se lo había concedido su abuelo Alfonso,
Altrín y exención de tributos a sus moradores que les había rey de León . Por último, en I 2 9 5 Teresa Alfonso, hija de
2297
otorgado cuando todavía era infante y en I259 concede2285 Alfonso Téllez y María Ibáñez, les concede los vasallos que
236v-237r. (Tumbo, fol.243r; pub. por FERNÁNDEZ, I972: 4I3). I255, julio, 4.
Tumbo, fols.76r y 237v (pub. por FERNÁNDEZ, I972: 403-404).
2 2 7 7 Medina de Rioseco, confirma el privilegio de Fernando III de septiem-
Tumbo, I66v; pub. por FERNÁNDEZ, I972: 404.
2 2 7 8 bre de I220, por el que excusa al monasterio del pago de portazgo (Car-
septiembre, 6. Tumbo, fol.78r y 244r; Cartulario, fol.257, en confir-
2 2 7 9 tulario, fol.257r; pub. por FERNÁNDEZ, I972: 4 I 0 - 4 I I ) . I255, julio, 4.
mación de Alfonso X de 4 de julio de I255. Pub. por FERNÁNDEZ, Medina de Rioseco, confirma un privilegio de Alfonso VIII y dos de
I972: 404; GONZÁLEZ, I983: II, I53. Fernando III, sin mencionar cuáles (Cartulario, fols.250v-25Iv; pub. por
septiembre, 6. Tumbo, 77v; Cartulario, fols.247v-248v (pub. por
2 2 8 0 FERNÁNDEZ, I972: 4 I I - 4 I 2 ) .
FERNÁNDEZ, I972: 404-406 y GONZÁLEZ, I983: II, I 5 I - I 5 3 ) . Según I258, mayo, 4. Valladolid. Sentencia a favor del monasterio sobre
2 2 8 8
este documento, Tello Pérez les había dado, además de Matallana y San- el pleito que tenía con San Benito de Sahagún por unas casas donadas
drones, una iglesia en el alfoz de Cea entre Villaverde y Pobladura, Quin- por Tello de Meneses en la villa de Sahagún (A.H.N., Sigilografía, Arma-
tanilla, cerca de Población de Lanchares, con sus iglesias de San Andrés rio I, Caja 6-n.I0; pub. por FERNÁNDEZ, I972: 4 I 2 - 4 I 3 ; GUGLIERI
y Santa María, casas en Valladolid, posesiones en Montealegre y Quin- NAVARRO, I974: 85).
tanilla, etc. diciembre, I5. Cartulario, fol.252r; pub. por FERNÁNDEZ, I972:
2 2 8 9
406-407; GONZÁLEZ, I983: II, I 5 I - I 5 3 ; y Tumbo, I66v, pub. por FER- Ibid., fols.255-256.
2 2 9 3
NÁNDEZ, I972: 407-408. Tumbo, 24Iv; pub. por FERNÁNDEZ, I972: 409, si bien errónea-
2 2 9 4
409-4I0. Tumbo, fol.84r y 224r; A.H.N. Clero, legajo 7.538; pub. por FER-
2 2 9 7
junio, I6. Toledo. Tumbo, 242v; pub. por FERNÁNDEZ, I972: 4I3.
2 2 8 6 NÁNDEZ, I972: 4 I 5 - 4 I 6 .
FUNDACIONES MASCULINAS • 379
ella anteriormente había recibido del abad Domingo en y Meneses una tal María y su hija Sancha en I 3 6 2 , y la 2306
y Castromembibre, cedidos por Pedro Álvarez . 2300 numerosos pleitos con los concejos vecinos, en especial
Como vemos, a finales del siglo XIII Matallana con- Villalba de los Alcores, a causa de su obstinación en bene-
taba con un rico patrimonio que se extendía por los Mon- ficiarse de pastos, aguas y madera pertenecientes al monas-
tes Torozos y valle del Esgueva . 2301
terio, lo que debilitará sustancialmente la economía del
cenobio. Además, a finales de esta centuria, se produce el
Mención aparte merece la intervención del papado. despoblamiento de aldeas propias del monasterio, como
El primer instrumento conservado es de Honorio III, quien Fuenteungrillo . Todo ello provocó que el cenobio acu-
2308
en 1222 tomaba bajo su protección la abadía y le confir- diera tanto a los monarcas como a los grandes nobles para
maba todos sus bienes y posesiones . El 2 6 de septiem-
2302
que les confirmen sus privilegios o les defiendan frente a
bre de 1250 Inocencio IV concedía una bula por la cual los abusos de sus adversarios: Alfonso, hijo del Infante de
exentaba al monasterio de pagar subsidio y vigésima al Molina ; Fernando I V ; María de Molina y los Infan-
2309 2310
de donaciones reales y la práctica ausencia de las de la ñada por este prelado y su sucesor García de Villanueva de
nobleza y pequeños propietarios, contabilizándose única- los Infantes consiguió sacar adelante el monasterio: aunque
mente las de una hacienda y tierras que poseían en Villerías las donaciones son escasas durante la primera mitad del
2 2 9 8 Tumbo, fols.84v-85r. Matallana (Tumbo, fols. 85r y 24Iv-242r; pub. por FERNÁNDEZ, 1972:
El 9 de marzo de I I 8 I Martín Pérez recibía de Alfonso VIII la
2 2 9 9 4I8). En I 3 I 4 confirmará unos privilegios que tenía el monasterio sobre
villa de Hijar en el alfoz de Cabezón, y en fecha desconocida aquél la aprovechamiento del Monte y Fuenteungrillo (Tumbo, 85r y fol.242r;
donará al monasterio (Inserta en cédula de Felipe V por la que confirma pub. por FERNÁNDEZ, 1972: 419-420).
al monasterio todos sus privilegios anteriores, A.G.S., Mercedes y Privi- 1298, septiembre, 17 y 1300 (Tumbo, fol.85r). 1305, enero, 22.
2 3 1 0
legios, legajo 400; pub. por ANTÓN, 1942: 3 I I - 3 I 2 ; FERNÁNDEZ, M a d r i d (Tumbo, fol.240r; pub. p o r FERNÁNDEZ, 1972: 419).
1972: 399-400). 2 3 1 1 En I 3 I 6 defienden al monasterio frente a los de Villalba del Alcor
1285, febrero, 25. Soria. Sancho IV cede a Pedro Álvarez y éste
2 3 0 0 (Tumbo, fols.85v y 2 4 2 ; pub. p o r FERNÁNDEZ, 1972: 4 2 0 ) , reiterando el
posteriormente al monasterio los lugares de Tierra, Pobladura, etc. Infante Pedro esa defensa en 1318 (Tumbo, fols. 85v y 242v; pub. por
(Inserta en cédula de Felipe V— A.G.S., Mercedes y Privilegios, legajo FERNÁNDEZ, 1972: 420).
400; pub. por ANTÓN, 1942: 312-313; FERNÁNDEZ, 1972: 414-415) 2 3 1 2 1329, diciembre, 2 (Tumbo, 85v); 1332, enero, 26. Valladolid
2 3 0 1 VALDEÓN BARUQUE 1983: 4 6 (Tumbo, 2 4 3 r ; pub. p o r FERNÁNDEZ, 1 9 7 2 : 4 2 1 ) ; 1335, agosto, 3 (Car-
2 3 0 2 Tumbo, fols.I9 y 76r-78r. tulario, f o l . 2 5 7 v - 2 5 8 r ; pub. p o r FERNÁNDEZ, 1 9 7 2 : 4 2 2 ) .
2 3 0 3 Tumbo, fol. I9v. 2 3 1 31 3 5 1 , septiembre, 15 (Tumbo, fol.243v; pub. p o r FERNÁNDEZ,
2 3 0 4 Tumbo, I 9 v y 82v. 1972: 422-423).
VALDEÓN BARUQUE, 1983 ha consagrado este estudio a la situa-
2 3 0 5 1371, septiembre, 6. Cortes de Toro (Cartulario, fol.258v-260r; y
2 3 1 4
ción del monasterio durante la Baja Edad Media. Tumbo, 243v; pub. p o r FERNÁNDEZ, 1972: 4 2 2 y 4 2 3 ) .
2 3 0 6 Tumbo, 86r. 1379, agosto, 10. Burgos (Cartulario, fol.260r-264r; pub. por FER-
2 3 1 5
2 3 0 7 A.H.N. Clero, legajo 7542. NÁNDEZ, 1972: 423); 1379, agosto, 12. Burgos (Cartulario, fol.264v-
2 3 0 8 VALDEÓN BARUQUE, 1982; REGLERO DE LA FUENTE, 1998: 195- 266v; pub. por FERNÁNDEZ, 1972: 423-424).
I99. Numerosos pleitos tuvo que sostener el monasterio a lo largo de su La primera noticia que se tiene de Lope de o ñ a como abad es de
2 3 1 6
(Otea, Belmonte) y heredades (Pedrosa, Torrepesquera, De mano de García Laso de Mendoza, hijo del II
Fuensaldaña, Mucientes) a cambio de juros, y las restantes Marqués de Santillana y de su segunda mujer Brianda de
dejaron de ser explotadas directamente por los monjes Luna, Señor de Yunquera, Protonotario de la Santa Iglesia
(Portillejo, Sandrones, Villavellid). de Roma, Abad de Santillana y Santander , y ahora admi- 2330
1438 de Enrique IV una bula por la que mandaba so pena Murió en 1506, según rezaba en su sepultura . 2332
d e e x c o m u n i ó n que ninguna persona de qualquier estado, condicion, Según Manrique, la comunidad quiso entonces unirse
o dignidad que sea, presuma de se llamar protector, ni defensor ni com- a la reforma, más el nuevo abad no lo consentiría . Los 2333
mendatario de este monasterio, sino tan solamente lo sea el Rey de Cas- monjes eligieron a fray Juan de Matallana —también lla-
tilla, cometiendo al obispo de Palencia y al abad de San mado de Boada—, quien el 2 4 de abril de 1509 se dirigía a
Benito de Sahagún la ejecución de la pena si fuera necesa- la reina Juana para pedirle protección por la intromisión de
rio . Sin embargo, no sirvió de mucho por cuanto al año
2325
Francisco Enríquez, sobrino del Almirante de Castilla,
Villalba, entrega una heredad en el coto de Matallana (A.H.N. Clero, 270v; pub. FERNÁNDEZ, 1972: 426 y 427); 1419, septiembre, 14. Valla-
legajo 7.538 y Tumbo, fol.90r); 1448, agosto, 10: Juan González de Val- d o l i d (Cartulario, f o l . 2 7 0 v - 2 7 3 r ; p u b . FERNÁNDEZ, 1 9 7 2 : 4 2 7 ) ; 1 4 2 0 ,
denebro, Oidor de la Audiencia Real y refrendario de Juan II, les da casas, enero, 16. Valladolid (Cartulario, fol.273r-275r; pub. FERNÁNDEZ, 1972:
viñas, sotos, etc. en Fuenteungrillo (A.H.N., Clero, legajo 7.542); 1449, 422). El 30 de noviembre de 1453, estando en Valladolid, extendió una
marzo, 8: Fadrique Enríquez concede un juro de 3000 mrs. situados en provisión y carta de amparo frente a Enrique de Acuña y sus vasallos de
la villa de Palacios, siendo confirmado por Juan II el 28 de ese mismo Villalba (A.H.N., Clero, legajo 7543; pub. por FERNÁNDEZ, 1972: 430-
mes (Tumbo, fol.I5r; pub. por FERNÁNDEZ, 1972: 428-429); 1458, Inés 432).
de Guzmán, renuncia a favor del monasterio a un juro situado en la villa 1455, abril, 30 (Tumbo, fols. 9Iv, I 5 I r y I52r; pub. por FERNÁN-
2 3 2 3
de Belmonte de Campos (Tumbo, fol.I52v; pub. por FERNÁNDEZ, 1972: DEZ, 1972: 432); 1456, junio, 24. Medina del Campo (Tumbo, 9Iv-92r
433); 1461, Garci Sánchez de Valladolid renuncia a un juro a favor del y I50v; pub. por FERNÁNDEZ, 1972: 432-433).
m o n a s t e r i o (Tumbo, f o l s . I 5 2 v - I 5 3 r ; p u b . p o r FERNÁNDEZ, 1 9 7 2 : 4 3 3 ) ;
FUNDACIONES MASCULINAS • 381
quien ayudado por éste y otros familiares, y con el apoyo ese m o n a s t e r i o entre en la oservancia e comunidad de vuestra orden y
papal, impetraba la abadía . 2334 encargándole vayais a la dicha abadia y conforme a los estatutos de la
N o obstante, la muerte de éste último iba a complicar orden, se elija e nombre persona della para que tenga la dicha abadia y de
aún más el asunto. Parece que el pontífice nombró para ocu- aquí adelante sea trienal . Entretanto fray Juan de Matallana
2338
par la silla abacial a Pedro de Santillana, prior de Valladolid, renunciaba en manos de Julio II a la abadía a cambio de una
protonotario apostólico de Roma y Cardenal de San Ciriaco elevada pensión vitalicia y el 22 de septiembre de 1511
2339
in Thermis, quien nunca llegaría a pisarlo . Mientras tanto, 2335 moría Pedro de Santillana. Cuatro días más tarde el Papa
el rey Fernando, deseoso de despojar al monasterio del régi- entregó el monasterio a Juan de Loaysa, doctor en derecho y
men de abades comendatarios , se había dirigido al Refor-
2336 abreviador de bulas y más tarde obispo algarense , 2340
mador de la Orden para que tomase posesión de Matallana debiendo pagar por ello una pensión a Bartolomé de la
y fuese elegido e puesto abad trienal y se pusiese en regular observancia, Puente, a Pedro de Urrea y Lucas Dalagón, estos dos últimos
pero al enterarse de que otras personas habían impetrado clérigos de zaragoza y zamora respectivamente; tampoco
bulas para hacerse con el control del monasterio escribió el este abad comendatario estuvo en el monasterio, sino que
15 de marzo de 1510 a su embajador en Roma Jerónimo de actuó en su nombre y como presidente fray Juan de la Parra . 2341
Vich para que tratara de impedirlo. u n año más tarde, el 15 El General Reformador fray Valeriano de Olivenza suplicó a
de enero de 1511 el rey escribía al Condestable de Castilla Loaysa que renunciase a Matallana; este accedió a ello, más
para informarle de sus deseos de que se llevase a cabo la reclamó una pensión desorbitada, por lo que el rey Fernando
reforma de Matallana , y ese mismo día se dirigía al Gene-
2337 el 30 de marzo de 1515 se dirigió a su embajador en Roma
ral Reformador de la Orden manifestando su interés en que para que pactase con él una rebaja . Finalmente aceptó y el
2342
El autor del Tumbo nos lo describe así: Por este tiempo andaba la tyrania
2 3 2 4 rio vaco por muerte de Pedro, cardenal del titulo de San Ciriaco in Thermis, que habia
en españa tal que quien mejor lanfa y mas fuerfa tenia seguraba mas su hacienda y se sido abbad commendatario deste monasterio, y el dicho papa Julio 2° proveyo esta abba-
lebantaba con la ajena, y los monasterio perdian mucha de la suya por no tener fuerfa dia en un criado suyo llamado don Juan de Loaysa, doctor en derechos, abreviador de letras
para defenderla y con este miedo se encomendaban en manos de el señor mas poderosso apostolicas en la corte romana... (fol.22v), lo que nos lleva a pensar que Pedro
que hallaban en la comarca al qual hacian su protector, defensor y commendero, o com- de Santillana llegaría a ser abad de Matallana únicamente tras la muerte
mendatario, y estos tales bien que tal vez defendian los monasterios de otros tyranos, pero del sobrino del Almirante de Castilla (EUBEL, 1914: 24 y 222; e idem,
despues solian ellos ser mayores tyranos para los monasterios (fol.88v). Sobre la 1923: 7 y 62, señala la existencia de un Petrus Isvalies o Isuagles, pro-
encomienda monástica, vid. SANTOS DÍEZ, 1 9 6 1 y HERRERA, 1962. tonotario apostólico y cardenal de San Ciriaco muerto en Roma en sep-
Tumbo, fols.20v y 88v.
2 3 2 5 tiembre de 1511, y aunque nada dice acerca de su título de prior de
2326Ibid, fols. 88v y 90r. Valladolid o de abad de Matallana, tanto la cronología como el nombre
Para este período vid. YÁÑEZ NEIRA, 1974 (1): 337-341 y 345-
2 3 2 7 Pedro sugieren que se trata del mismo personaje del que hablamos). Ade-
346; idem, 1974 (2): 61-62; PÉREZ EMBID, 1986: 590 y 689-690; más un despacho del rey Fernando a su embajador en Roma firmado en
GARCÍA ORO y PÓRTELA SILVA, 2001: 152; e idem, 2004: 129 y 333- Sevilla el 10 de marzo de 1510 ya nos habla de sucesos ocurridos tras
367; CRESPO, HERRÁN y PUENTE, 2006: 62-65. la muerte de Francisco Enríquez (GARCÍA ORÓ, 1969: 221-222).
fol.181r.
2 3 2 8 2336 Los Reyes Católicos apoyaron decididamente a la reforma de la
2329fol.95v. Orden y a la Congregación, como ha señalado GARCÍA ORÓ, 1969: 59-
2 3 3 0 LAYNA SERRANO, 1 9 9 4 : II, 2 3 1 . 61, 85 y 104-110; idem, 1971: 152-155
2 3 3 1 Tumbo, fol.96r. 2 3 3 7 GARCÍA ORO, 1 9 6 9 : 5 6 4 .
2332 Véase el apartado dedicado al proceso crono-constructivo. GARCÍA ORO, 1969: 565. Este mismo año la reina Juana concedía
2 3 3 8
2333 MANRIQUE, 1642-1659: IV 613 (2010: 139). Este suceso ha al monasterio una serie de privilegios para que nadie menoscabase sus
hecho que algunos estudiosos sitúen la unión a la Congregación en esta rentas y posesiones, y encomendándoles se nieguen a aceptar a quien
data, aunque también la coloquen en la correcta (MARTÍN, 1953: 28; fuese con bulas a posesionarse de la abadía (A.G.S., Cámara de Castilla.
COCHERIL, 1963: 955; entre otros). Pueblos, legajo 11, núms. 329 al 332).
A.G.S., R.G.S., 1509, abril, 24. Valladolid. Según el Tumbo, fols.23v
2 3 3 4 L o s bienes que recibió Juan de Boada fueron la media plafa de valla-
2 3 3 9
y 97r, Francisco Enríquez era hijo del Almirante., pero en la documen- dolid q(ue) se llama corral de las ovejas, y lagranxay casa de Palacios con todas las tie-
tación mencionada en la nota siguiente se le nombra sobrino. rras, viñas, rentas y censos q(ue) a ella pertenecen, y doce carretadas de leña del monte
Las fechas de abadiato de Francisco Enríquez y de Pedro de San-
2 3 3 5 cada Año, y mas las veinte cargas de trigo, cevada, y avena q(ue) el monasterio tiene de
tillana han sido controvertidas. El Tumbo (fol.23v, 97r-98r) y los auto- renta cada Año en el lugar de Zigales ( T u m b o , fols.97v-98r y 23v, y A.H.N.,
res que le han seguido (YÁÑEZ NEIRA, 1 9 7 4 : 3 3 8 - 3 3 9 ; PÉREZ-EMBID, Clero, legajo 7.542)
1986: 590, aunque unas páginas después se contradice), fechan estos 2 3 4 0 E l Tumbo ( f o l . 9 8 r ) y los autores que le siguen (YÁÑEZ NEIRA,
acontecimientos entre 1506 y 1511, colocando en primer lugar al car- 1974: 340-341; PÉREZ-EMBID, 1986: 590) distinguen entre Juan de
denal de San Ciriaco. Sin embargo, por un lado unas cédulas de doña Loaysa y Juan, obispo algarense, cuando los dos son en realidad la misma
Juana (A.G.S, R.G.S, 1509, abril, 24) sugieren que la toma de posesión persona (vid. FRAIKIN, 1914: 433-434; EUBEL, 1923: 104 y 245).
del Enríquez tuvo lugar a comienzos de 1509, dos años después de que 2 3 4 1 Tumbo, fols.22v y 98r.
ocupase el cargo Juan de Matallana, y por otro, el propio Tumbo en el GARCÍA ORO, 1969: 236-239, en concreto 238-239; PÉREZ-
2342
apartado dedicado a las Bulas, señala lo siguiente: Año 1511, a 26 de sep- EMBID, 1986: 690, nota 121.
tiembre: el papa Julio 2° concedio una bula en que refiere que la abbadia deste monaste-
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
382
29 de septiembre de I 5 I 5 León X incorporaba el monaste- longitud era de doscientos diez pies castellanos, con ciento
rio de Matallana a la Congregación de Castilla . 2343
veintitrés de anchura y proporcional altura" . Pedro 2347
han conservado del monasterio de Matallana. Tras la des- En la actualidad los muros perimetrales del amplio
amortización de I 8 3 5 comienza un largo y tortuoso pro- templo, construido con aparejo de sillería bien escuadrado y
ceso de vicisitudes para el antiguo centro religioso que lo de dimensiones regulares, alcanzan poco más de tres metros
llevaría a la ruina y a la casi total desaparición. Arrendado de altura, aunque en algunas zonas no queda más que el basa-
por el Estado a diversos particulares, en I 8 4 4 el monaste- mento (costados oriental y norte de la capilla extrema del
rio incluido el templo era empleado como Hospital Gene- Evangelio, ábside de la capilla mayor y segundo tramo de la
ral del Presidio del Canal de Castilla. Al año siguiente la nave del Evangelio) y en otras están arrasados hasta el nivel
empresa del Canal se hacía con la propiedad del edificio del suelo (testeros y costado occidental del brazo sur del tran-
con el fin de utilizar sus materiales como cantera para las septo, primer tramo de la nave de la Epístola y tercero de la
obras de construcción del ramal de Campos. En I865 poco del Evangelio) y los sillares que formaban el revestimiento
quedaba ya de lo que había sido uno de los monasterios exterior de los muros han desaparecido casi en su totalidad.
más importantes de Castilla y, a juzgar por los escasísimos En cuanto a los soportes, permanecen la parte inferior de los
vestigios que todavía se mantienen en pie y las referencias
documentales, de una monumentalidad digna de elogio . 2344
pilares de separación de naves, los adosados a ellas y los aco-
dillados en los ángulos N.O. y S.O.; los esquinados del tran-
septo (excepto el del ángulo S.O.), los de las embocaduras de
los ábsides, así como las columnillas adosadas y acodilladas
La iglesia de las cinco capillas (aunque de estas últimas solo mantie-
Ambrosio de Morales, que visitó el cenobio en I573, nen sus basamentos los situados en el hemiciclo de la capilla
quedó asombrado ante su "templo harto hermoso y central, costado norte de la extrema del Evangelio y costado
grande" . Casi un siglo más tarde, Manrique lo elogiaba
2345
sur de su compañera de la Epístola). De los capiteles que
con estas palabras: "certe inter prima Hispaniae (& pauca coronaban estos soportes quedan escasos vestigios y de las
excipias ex cathedralibus) nullo fortasse inferius connu- bóvedas únicamente se han conservado algunos fragmentos
meratur" . En I 8 5 2 García Escobar escribía lo siguiente:
2346
de sus nervios.
"Lo más notable del edificio era la iglesia, perteneciente a
la escuela gótica, dominante en aquellas épocas. Era un A pesar de todo ello, los restos que han llegado hasta
hermoso crucero, con manojos de columnas, que daban hoy son suficientes como para permitir un reconstrucción
arranques a elegantes arcadas y bóvedas elípticas. Además de las trazas generales del templo, no sólo en planta sino
de las naves principales, que formaban el crucero principal también en alzado, contando además para ello con el apoyo
del templo, corrían paralelas a ellas otras zonas secunda- puntual de la documentación y de la comparación con otros
rias también con haces y detalles de germánico estilo. Su edificios coetáneos.
2343Tumbo, fols.22v-23r, 98r y I0Iv-I02r. Vid también MANRIQUE, 2 3 4 7 GARCÍA ESCOBAR, I852 (2): 348-349.
I642-59: IV 6 I 8 (20I0: I55); PEÑA, I989: 44I; y PASCUAL, I996 2 3 4 8 Archivo de la Parroquia de Montealegre, Libro deynbentario de los vie-
(2): 347 nes, alajas e instrumentos de la yglesia parroquial de el sr. S. Pedro apostol de la villa de
Archivo General. Confederación Hidrográfica del Duero, ACC —
2 3 4 4 Montealegre, año de 1792. Y libro de confirmados que dio principio año de 1673,
0064 - 29; A.H.P.V Hacienda, 740; Archivo Diocesano de Palencia, fols. 57v-59v, en concreto, 57v. A partir de ahora citaremos Recuerdos his-
Desamortización, legajo I, n.3-9 y n.5-25. Sobre las consecuencias de la tóricos.
desamortización sobre el edificio y objetos artísticos que custodiaba, 2349únicamente el segundo tramo no presenta hoy esta disposición
vid. GARCÍA FLORES, . debido a la construcción en el siglo XVI de una escalera de comunicación
2 3 4 5 MORALES, I765: I94. con el claustro alto.
2346 MANRIQUE, I642-I659: III, I4.
FUNDACIONES MASCULINAS • 383
modelo de planta así como su relación con el que comentamos en el bibliografía de este monasterio burgalés puede verse en el apartado
texto vid. AUBERT, 1932: 196 ; idem, 1947: I, 196 nota 4; LAMBERT, correspondiente del "Catálogo de monasterios" incluido en Monjes y
1951; y especialmente VALLE PÉREZ, 1982: I, 154, quien además refuta monasterios...., 499-500. Habría que añadir únicamente los trabajos de
la idea que aquéllos y otros muchos mantuvieron de que estos modelos CASAS CASTELLS, 1998; IBÁÑEZ PÉREZ, 1998; PAYO HERNANZ, 1998;
de cabecera derivaban o se inspiraban en la de Morimond, la cual como MARTÍNEZ DÍEZ y GONZÁLEZ SÁNCHEZ, 2000; y VALENTÍN DE LA
había demostrado EYDOUX (1958: 55 y ss) contaba con una capilla CRUZ, 2003.
mayor rectangular a la que rodea un deambulatorio con doce capillas Sobre este monasterio, además de los títulos incluidos en la biblio-
2 3 5 5
igualmente rectangulares. También ANTÓN, 1942: 181, había señalado grafía aparecida en el catálogo Monjes y monasterios..., 472, vid. las corres-
que la planta de Matallana "es propia de la orden, por las capillas cola- pondientes fichas allí incluidas y la reciente monografía de YÁÑEZ ÑEIRA
terales en línea". y TOBÍO CENDÓN, 2001.
Sobre la arquitectura de este monasterio alcarreño, vid. además de
2 3 5 3
Montruil-sous-Laon (Francia).
• con cuatro capillas: Lucelle II, Bonrepos II, La Cha- El interior
lade, L'Isle-en-Barrois, Loroy y Loc-Dieu (Francia); Como hemos visto, la cabecera de Matallana consta
Kerz (Hungría); San Martino sul Monte (Italia); de cinco capillas: la central heptagonal precedida de un
Chorin, Eldena, Himmelpfort y Himmelwith (Ale- tramo recto y las otras cuatro, rectangulares, abiertas por
mania); Val-Dieu (Bélgica); Cirta (Rumanía); etc . 2360
parejas a los brazos del transepto.
• con seis capillas: Obazine y Dalon (Francia); Des Se accedía a las laterales, teniendo en cuenta los
Dunes, Val-Saint-Lambert, Villers y Saint-Bernard- soportes conservados, a través de robustos arcos apuntados
sur-l'Escaut (Bélgica). y doblados. El inferior volteaba sobre dobles columnas,
mientras que la dobladura lo hacía sobre simples columnas
De todos los ejemplos hispanos con el que mayor
acodilladas. Éstas y aquéllas se elevan sobre un alto basa-
puntos de contacto guarda nuestro monasterio es con Las
mento poligonal provisto de resalte frontal y retallos esqui-
Huelgas, tal y como se ha venido tradicionalmente expo- nados conformando la hilada superior de los lados
niendo : coinciden el número de paños que conforman
2361
oblicuos; su arista está perfilada por un talón inverso pro-
el ábside central y la escasa amplitud que se concede al tran- longado en bocel, molduración que se extiende a m o d o de
septo. Pero estas analogías no se reducen solo al tipo de banco por el interior de las capillas. Presentan basas de
planta, sino que se extenderán a otras áreas, como los abo- tipo ático con fino bocel superior, escocia estrecha y toro
vedamientos . 2362
inferior en forma de cuarto de círculo con garras amplias
Por otro lado, no debemos olvidar que estas cabece- y planas que sobresale por encima de unos plintos parale-
ras pertenecen a un período avanzado en los que se emplean lepípedos que llevan las aristas superiores cortadas en
ya soluciones típicamente góticas y que se trata de un nacela.
MONTEJO, FRONTÓN SIMÓN y PÉREZ CARRASCO, 1992: 51). La igle- A pesar de que estamos ante una fundación en sentido estricto, con
2 3 6 3
sia construida en el siglo XVI mantendrá el mismo tipo de cabecera, aun- lo que ello suele conllevar desde el punto de vista de la construcción de
que sólo se abrirá una capilla a cada brazo del transepto. Vid. también los edificios monásticos (VALLE PÉREZ, 1982: I, 36-37), lo tardío de la
LAYNA SERRANO, 1932. fecha y el consecuente retraso en el inicio de las obras provocó que pre-
La fórmula que presenta la cabecera de Kolbacz (Polonia) se aco-
2 3 6 0 dominasen los ingredientes locales frente a las fórmulas importadas
moda a este grupo, más la presencia de un ábside poligonal se debe a directamente desde la casa madre (VALLE PÉREZ, 1991 (4): 776-778;
una reforma tardía (siglo XIV) de la capilla mayor. idem, I998: 40-4I). Vid. al respecto el apartado dedicado al proceso
2361 ANTÓN, 1919: 272; idem, 1923: 109; idem, 1942: 181; TORRES crono-constructivo y la introducción general.
BALBÁS, 1924: 123 y 124; idem, 1952: 98 y 104; CALZADA, 1928: 898;
FUNDACIONES MASCULINAS • 385
estaba prevista, una cubierta más complicada (láms. 164 a como en las salas capitulares de las seos de Plasencia, Sala-
166): además de las sencillas columnas angulares se dispo- manca o Ávila y la del monasterio benedictino de Oña,
nen ahora dos columnillas en el testero y otras dos en cada entre otros lugares . 2372
existe esa columna (X) debido a la apertura en ese lado de un gran arco le siguen.
funerario que comunicaba con la capilla mayor, descansando segura- 2371 Esta semejanza fue apuntada por ANTÓN, 1942:182-183; LAM-
mente el nervio y arco correspondiente sobre una ménsula. BERT, 1931: 1 9 0 y 270; TORRES BALBÁS, 1943: 2 4 9 nota 1; idem, 1952:
ANTÓN, 1919: 271; idem, 1923: 108; idem, 1942: 179; le sigue
2 3 6 5 104; BANGOTORVISO, 1985: 435; ARA GIL, 1986: 27; idem, 2002: 72;
ARA GIL, 2009: 12. La relación de este cenobio burgalés con Matallana idem, 2009: 12-13; KARGE, 1995: 166; idem, 1999: 35; SENRA, 2002
en este punto fue señalada ya por ANTÓN, 1942: 183. (2): 489; CASAS CASTELLS, 2005: 179; entre otros.
En la sede conquense se emplea la sexpartita en los tramos rectos
2 3 6 6 Al margen dejamos ahora el sistema de trompas con nervios en
2 3 7 2
del presbiterio, brazos del transepto y dos primeros tramos de la nave forma de Y (vid. el capítulo dedicado a la Capilla de los Vega en la mono-
central; en la catedral alcarreña, en el presbiterio y transepto; en el tramo grafía de La Espina). Sobre la capilla Talavera, antes del Salvador, de la
este del presbiterio de la catedral abulense; y nave central de Roncesva- catedral de Salamanca, vid especialmente CAMÓN AZNAR y TORRES
lles. BALBÁS, 1940; Para Oña, SENRA GABRIEL Y GALÁN, 1992: 3 4 2 - 3 4 3 .
J0RDAN0 BARBUDO, 1996: 27, incide en este aspecto y sugiere que
2 3 6 7 Sobre el origen de esta tipología, ya STREET, ENLART y LAMBERT, 1931:
tal vez las capillas del cenobio vallisoletano se cubrirían con este sistema 190; MUSSAT, 1963: 223-239, 264-267 y 331-365; y recientemente
que también se emplea en las capillas laterales de San Lorenzo de Cór- KARGE, 1999: 32-33, lo habían localizado en edificios aquitanos como
doba. Por su parte, LAMBERT, 1931: 270 opinaba que estas capillas Sainte-Radegonde de Poitiers, Saint-Jean de Saumur o Saint-Jean de
"estaban cubiertas por dos bóvedas de crucería alargadas o una bóveda Amboise, si bien para otros autores como BANGO TÓRVISO "resulta muy
sexpartita", no decidiéndose por ninguna de las dos opciones. Tampoco difícil asegurarlo; dado lo reducido de su tamaño y su función más deco-
clarifican su posición CRESPO, HERRÁN y PUENTE, 2 0 0 6 : 83. rativa que arquitectónica, nos inclinamos a creerla más una creación
Si en aquellas los basamentos medían en torno a 25 cm, en este
2 3 6 8 espontánea que no la reproducción de un modelo arquitectónico de
caso los situados junto al testero miden 18 cm. mayor tamaño" (1985: 505).
El occidental mide de largo en torno a 1'70 m, mientras que el
2 3 6 9
equivocarnos, que se trata de un cambio sobre la marcha en De la capilla extrema del lado del Evangelio sólo se
el sistema de abovedamientos de la capilla. Si nos fijamos en mantiene en pie el costado sur. En la zona oriental se abren
las dimensiones de los dos tramos de que consta y la com- tres pequeños nichos cuadrangulares de aristas vivas, de los
paramos con las que presentan las capillas de Las Huelgas cuales dos servirían como armarios y el tercero, provisto de
de Burgos, observamos que en ambos casos el tramo occi- cubeta con orificio en el fondo para la salida del agua, como
dental —cubierto con crucería— es más corto, casi la mitad credencia . Otro armario se sitúa en el tramo occidental:
2378
que el oriental —cubierto con bóveda de nervios sobre trom- en esta ocasión presenta forma de arco trilobulado de aris-
pas— . En el caso de Matallana, al desplazar el soporte que
2373
tas vivas doblado por otro similar con incisiones lineales en
marca la separación de tramos, éstos adquieren una dimen- la rosca (lám. I 6 7 ) ; curiosamente comunica con la capi-
2379
partir de la basa quedan restos de la talla de un tambor. Sin embargo no Recordemos cómo en Valbuena se conservan grupos de credencias
2 3 7 8
parece que se llegase a subir mucho más: así lo indica la presencia en el y armarios como éste en las capillas extremas de su cabecera.
lugar por donde debía ascender el fuste de restos de la imposta que reco- En la capilla meridional extrema de Valbuena encontramos un
2 3 7 9
rre el perímetro interior a la altura de la base de la ventana del testero y modelo semejante.
que en otras zonas se interrumpía al llegar a las columnas.
FUNDACIONES MASCULINAS • 387
crucero a través de un gran arco triunfal apuntado y doblado tras el hundimiento del cimborrio en junio de I 6 I I parecio
que volteaban, aquél sobre dobles columnas y la dobladura necesario quitar de en medio de la capilla mayor quatro sumptuossos sepulch-
sobre sencillas columnas acodilladas, todas ellas con carac- ros que se pusieron en un arco de la misma capilla al lado de la epistola . 2384
2380 Hablaremos de él cuando tratemos la capilla mayor. 2383 GARCÍA ESCOBAR, 1852: 101, habla de "Un arco apuntado, sin
2381 Tanto los vanos de las capillas laterales de Las Huelgas de Burgos orla ni filete, incrustado en la sillería del presbiterio", que cobijaban dos
como las de Villamayor se muestran hacia el interior totalmente lisas, sepulcros, si bien situaba este nicho en el costado del Evangelio. En
sin ningún tipo de molduración. Sin embargo otras construcciones que efecto, tal y como puede verse en las fotografías de Francisco Antón,
se han relacionado con Las Huelgas y Matallana sí presentan vanos arti- bajo el arco situado a este lado del que hablaremos ahora en el texto se
culados con columnillas, ya sea una —como Bonaval—, o grupos de dos situaban dos sarcófagos, pero en este caso sí está moldurado. Tal vez
—como Palazuelos, San Andrés de Arroyo o Santa Cruz de Rivas—. En García Escobar se equivocó al hacer referencia a este arcosolio y en lugar
el caso del ventanal de la fachada occidental de la abacial cisterciense de de hablar de uno habló del otro.
Bujedo de Juarros encontramos que, por su parte exterior, además de fol. I I I r . Cit. por ARA GIL, 1977: 45. Años más tarde de nuevo
2 3 8 4
llevar una columna acodillada, la jamba está animada por molduras cón- fueron removidos los sepulcros de sus sitio, aunque la noticia transmi-
cavas y convexas, como en Matallana; esa misma molduración la vemos tida p o r el Libro de obras (mudar los sepulcros y componerlos) n o es n a d a signi-
en la puerta que se abre en el sexto tramo de la nave de Santa Catalina ficativa. El mismo destino funerario le adjudican CRESPO, HERRÁN y
de Las Huelgas. PUENTE, 2006: 85.
2382 Molduración semejante la encontramos en la capilla mayor de Las
Huelgas de Burgos, refectorio de Huerta, sala capitular de La Espina, etc.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
388
A pesar de lo tardío de la noticia, es indudable que este arco-
solio existía con anterioridad al trágico suceso y que su fun-
ción fue desde un principio la de acoger el sepulcro o
sepulcros de algún miembro de la familia fundadora . 2385
todavía permanecían cuando Francisco Antón visitó el monasterio (vid. 2391 A.H.N., Clero, libro 16264, Libro de obras, fol.87r. A partir de ahora
nota 2383). Aunque la noticia transmitida por el Tumbo nos habla del será citado Libro de Obras.
FUNDACIONES MASCULINAS • 389
por el Taller de Estudios Medioambientales y Arqueológicos (TEMA) Vid. al respecto lo que se dice de este sistema en la monografía de
2 3 9 5
aparecen cegados (una foto de la misma, en la portada del libro de estos posibilidad de que existiese una sexpartita en el tramo recto de la capi-
últimos autores; y en www.arbotante.com/mat_sp.htm). lla mayor de Matallana.
2393 ANTÓN, 1942: 179 y dibujo en ella incluido. Este mismo sistema
de cubiertas aparece propuesto en la planta publicada en el Catálogo
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
390
sobre unas jambas que llevaban sus aristas vivas, no se
encontraba situada en el centro del testero sino algo des-
\ xviN Y
i j /hv *vn\ •. plazada hacia el oeste . Nada se puede decir por el
2397
Ixt!t KVmi momento de la organización del brazo sur y las puertas que
allí se abrirían: la que daba paso a la sacristía y la de maiti-
i ' l J l
nes que conducía al dormitorio, aunque una excavación
arqueológica llevada a cabo en 2 0 0 1 sacó a la luz los
cimientos de la caja de la escalera que, adosada al costado
occidental de este brazo ocupando toda su longitud, subía
al dormitorio . 2398
Figura 28. obstante, la columna que apeaba el fajón del brazo meri-
Matallana. Iglesia,
numeración de soportes. dional por el oeste quedaba interrumpida antes de llegar al
de los soportes, sólo ha llegado a nosotros el lienzo occi- suelo para dejar sitio a la escalera de maitines. Los torales
dental del brazo norte y, gracias a las excavaciones arqueo- llevan dobles columnas en los frentes y otras dos acodilla-
lógicas que se están llevando a cabo, las trazas de la puerta das. Los basamentos de estos soportes son análogos a los de
de muertos que se abría en el testero de ese mismo brazo: la cabecera, excepto los núms. XXXVIII y XXXIX: además
de arco tal vez apuntado y con dobladura que volteaban de eliminarse los resaltes esquinados de los lados oblicuos,
existencia si se abriera paso al transepto bajo el tiro de la escalera de mai- hacia el norte, y la tercera columnilla del costado sur del soporte
tines (CRESPO, HERRÁN y PUENTE, 2006: 87). XXXVIII ha desaparecido.
FUNDACIONES MASCULINAS • 391
cambia sensiblemente el modelado de la arista superior, en parece algo un cimborio que tiene la yglesia cathedral de Burgos .
2409 Una
esta ocasión perfilada por una nacela invertida seguida de noticia tenemos de su estructura gracias a la extensa relación
un bocel y una escocia; al igual que ocurría en la cabecera, contenida en el Tumbo relativa a su hundimiento en
esa moldura se prolonga por los muros a m o d o de 1 6 1 1 . E l 2 d e j u n i o d e ese a ñ o dio el cimborio un estallido y
2 4 1 0
más anchas y en algún caso más gruesas; además, las situa- lugar la r u i n a definitiva y quatro cubos muy fuertes y vistosos que
das en este lado no sobresalen del plinto, ahora liso y de fortificaban y hermoseaban los quatro costados de el cimborio se
2412
aristas vivas, a diferencia de las orientales que lo llevan ana- vinieron abajo, cayendo sobre la capilla mayor y las colate-
celado y lo rebasan. rales de San Juan, San Bernardo y Santa Marina, destro-
Respecto a los abovedamientos lo más lógico es pen- zando sus bóvedas. El desastre también afectó a otras zonas
sar, como ya señaló Antón, que los brazos se cubriesen con del templo, como la fachada occidental: y pasando solo el ayre
crucería simple estando separados los tramos por arcos por el choro alto, hifo retirar la pared de la yglesia que mira a poniente
apuntados y doblados, aquellos apeando sobre las colum- de suerte que temiendo su cayda hicimos el officio divino vajo en el capi-
nas frontales y los otros en las acodilladas. Las nervaduras tulo vajo, y despues en el alto por muchos meses asta que se fortifico la
lo harían aquí sobre la siguiente columna acodada, y en los pared por los cimientos y estribos y s e g u r a m e n t e a alguno d e los
2413
rrio que, según el autor del Tumbo, constituía todo el lustre de la que se ha venido adjudicando a los templos monásticos de
esta insigne yglesia por el ornato y magestad que el tenia y a ella causaba Santo Domingo de Silos y San Benito de Sahagún : una 2415
tal que ninguno le vio que juzgase tener españa ygual piefa, si bien se le cúpula elevada por un tambor sobre trompas o pechinas que
2406 La desaparición del muro occidental del brazo sur impide precisar LEZ, 1943; CAMÓNAZNAR, 1958; SÁNCHEZ SÁNCHEZ, 1991: 53-57 y
si la molduración empleada seguía el modelo impuesto desde la cabecera 64-66; CASASECA CASASECA, 1993: 15; RODRÍGUEZ G. DE CEBALLOS,
o, por el contrario, incorporaba el nuevo perfil que veíamos en el soporte 1994: 149-150; entre otros.
núm. XXXIX. YARZA, 1994: 258-259. Respecto a la cubrición del crucero de
2 4 1 5
debe entenderse no sólo como consecuencia de la tradición local sino impide que se abran vanos en esta zona. Así sucede, por ejemplo, en
también por lo avanzado del tiempo en el que se construye y el consi- Palazuelos, Huerta, Sandoval, etc (vid. lo que se comenta del primero en
guiente alejamiento de los ideales primitivos de la Orden. su monografía). Por otra parte, en la maqueta del monasterio (vid. nota
Entre otros, ARA GIL, 1992 (2): 24. Esta misma autora en 2009:
2 4 1 7 2392), se han reconstruido en el testero norte del transepto y en el has-
I4, recoge nuestra propuesta. Por su parte, la maqueta del monasterio ya tial occidental del templo sendos rosetones con tracería, pudiéndose leer
mencionada (vid. nota 2392) ofrece una interpretación del cimborrio en la web de la empresa que la realizó, al pie de una imagen, lo siguiente:
que copia al que se puede contemplar en la actualidad en Valbuena, con "tanto el rosetón de los pies como éste se obtuvieron de una pequeña pie-
el cuerpo octogonal inferior de época medieval y una linterna de ladri- dra caliza con esos diseños encontrada durante las excavaciones en el
llo moderna. interior de la iglesia" (www.arbotante.com/mat_sp.htm). Por nuestra
Vid. lo que se dice al respecto en la monografía de Valbuena.
2 4 1 8 parte pensamos que la sola presencia de un sillar con unos diseños de
Para los cimborrios catalanes, vid. LlAÑO MARTÍNEZ, 1976-77; y
2 4 1 9 rosetas grabados en él, no es un dato concluyente como para pensar que
BASSEGODA ÑONELL, 1982: 23-40. se trata del trazado de unos posibles rosetones del templo.
Tal vez haga referencia al vano abierto en el costado occidental del
2 4 2 0 Núms. XXXVII, XXXVIII, XLII y XLIII. Sobre este procedi-
2 4 2 2
brazo norte la reparación en 1772-73 de la vidriera de enfrente de San Juan miento, habitualmente empleado en los monasterios cistercienses, vid.
(Libro de obras, fol.24v). lo comentado en las monografías de La Espina o Valbuena.
FUNDACIONES MASCULINAS • 393
todas las responsiones de las naves laterales excepto las más orientales. LIII y LVI. Es el modelo que veíamos empleado en la cabecera, zona
Aparece este pilar parcialmente desarrollado en el toral N.E, aun-
2 4 2 4 oriental de el transepto y zona occidental del brazo norte. zócalos de
que sólo hacia la capilla absidal norte y transepto: dobles columnas, flan- este tipo lo encontramos por ejemplo en La Espina.
queadas hacia la capilla del evangelio por otras tres, más otras dobles en Núms. XXXVIII, XXXIX, XLIII, X L I V XLVII, XLVIII, LI y
2 4 2 9
el frente que recoge al arco de acceso a la misma; en cambio, hacia el LII. La zona occidental del basamento del soporte núm. XLIV fue cepi-
lado de la capilla mayor, solo hay dos acodilladas, y el arco de emboca- llada en el siglo XVI para facilitar el acceso a la escalera de subida al claus-
dura a esta capilla es recogido por una única columna. El pilar izquierdo tro alto, y la meridional del núm. XXXIX sufrió una reforma durante
de la capilla del evangelio, lleva también dobles columnas en el frente, la instalación de la escalera de maitines. zócalos octogonales los vemos
pero hacia el interior y al brazo del transepto, solo lleva dos, una para la en Palazuelos, Retuerta, Aguilar de Campóo, San Miguel de Palencia,
dobladura, y otra para la crucería (aunque en el caso del interior es una Villamuriel de Cerrato, entre otros.
ménsula). El muro de cierre de estas "capillas" queda totalmente liso.
2 4 3 0
que poseen. su construcción se dilataba durante muchos años, a veces más de un siglo,
2 4 2 7 LAMBERT, 1931: 113 y 121; ANTÓN, 1942: 184; TORRES BAL- lo cual provocaba que en ocasiones los planes originales no se termina-
BÁS, 1946: 285 y 288, idem, 1952: 104; EYDOUX, 1954: 199; ARAGIL, sen como estaba pensado. Vid. a este respecto lo comentado para las
1986: 27; MUÑOZ PÁRRAGA, 1987: 1 0 7 y 176; VALLEJO, 1995: 65; iglesias de La Espina y Valbuena.
LÓPEZ DE GUEREÑO, 1997: I, 182-183 nota 53; BAUFORN, 1999: 392,
393, 395 y 411; SENRA, 2002 (2): 489; entre otros.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
394
dobles columnas de los frentes y las dos sencillas que le
siguen recogerían los perpiaños y formeros con sus respecti-
vas dobladuras, quedando las intermedias de las diagonales
destinadas al arranque de las nervaduras de una bóveda de
crucería . La existencia de ligaduras planteada por
2434
aparición2437. 2437
2 4 3 4 ANTÓN, 1 9 4 2 : 183. largo de la nave de la Epístola (ALTISENT, 1974: 206). Fuera de la Penín-
Ibidem.
2 4 3 5
sula podemos citar el caso de Silvanes, cuya nave única está flanqueada
ANTÓN, 1919: 27; idem, 1923: 105; 1942: 176. Por su parte ARA
2 4 3 6 por pequeñas capillas de metro y medio de profundidad entre contra-
GIL, 1986: 27, habla de "pequeñas capillas". Un modo semejante de fuertes interiores, análogas a las de Matallana, siguiendo la tradición
articular los muros para albergar sepulturas lo encontramos en diversos constructiva del Midi (AUBERT, 1947: I, 167-168; DIMIER, 1974: 145),
claustros hispánicos, tanto monásticos —Rueda, Oña...—, como catedra- o el de Valmagne, también en Francia, a cuya nave septentrional se abren
licios —Salamanca, Burgos, Santo Domingo de la Calzada...— y en cole- siete capillas, una por tramo (PAUL, 1986: 640, 641 y 643), siendo en
giatas -Santander, San Esteban de Burgos...- (CARRERO SANTAMARÍA, ambos casos coetáneas a la fábrica del templo. En Alemania, sin embargo,
2006). las capillas abiertas a las naves meridionales de Maulbronn y Eberbach
En España, encontramos una solución semejante en Poblet, pero no
2 4 3 7 son posteriores a la obra original (EYDOUX, 1952: 12 y 50).
es contemporánea a la fábrica original de la iglesia: durante el abadiato Únicamente una excavación completa del recinto confirmaría este
2 4 3 8
del abad Copons, entre 1330 y 1333 se construyeron siete capillas a lo supuesto.
FUNDACIONES MASCULINAS • 395
baquetón; su presencia en esta zona del templo, aunque a principios de siglo tres de los sepulcros que hoy día se
2439 Más adelante, en el apartado dedicado al proceso crono-construc- de monjes mide 2'20 de ancho, alcanzando la externa casi los 3 m. Son
tivo, volveremos sobre este tema. ARA GIL, 2009: I6, se hace eco de esta de esta misma opinión CRESPO, HERRÁN y PUENTE, 2006: I3I.
hipótesis. 2 4 4 3 ANTÓN, I 9 4 2 : I 7 8 .
Según el Tumbo, al menos en tiempos de Villanueva de los Infantes
2 4 4 0 Este tipo de molduración fue muy utilizado en diversas zonas de
2 4 4 4
los monges entraban en la yglesia por una puerta que oy se ve cerrada en el claustro vajo La Espina.
que llamamos de la lection (fol.93r). 2 4 4 5 Tumbo, fol.I07v.
2 W IANTÓN, I923 (4): I08; idem, I942: I78. Anteriormente ( I 9 I 9 : AUBERT, I947: I, 3 I 5 nota I. Vid. por ejemplo el armario conser-
2 4 4 6
27I), señalaba simplemente que se trataba de una puerta de la iglesia, sin vado en la nave meridional de Palazuelos. CRESPO, HERRÁN y PUENTE,
especificar cuál, incluso en I 9 I 8 : 2 I 5 apuntaba la posibilidad de que 2006: 96, comentan que la presencia de credencias "parece señalar el
fuese un lucillo. uso de este espacio como capilla" y apuntan a que su uso litúrgico cam-
La luz de las arquivoltas de la puerta de la "capilla" es de 2'I0 m
2 4 4 2 bió "en las etapas finales de la vida del monasterio", dada la presencia
la superior y I'55 la inferior, mientras que la parte interna de la puerta en él de sepulcros (vid. arriba en el texto).
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
396
encuentran en el Museo Nacional de Arte de Cataluña, aun- el testimonio de algún erudito del siglo XIX, que si bien son
que se desconoce si ésta era su ubicación original. parcas en detalles, nos permiten hacernos una idea más o
En el último tramo de este costado se disponía otra menos aproximada de su estructura y decoración.
puerta que, por su situación, debía ser la utilizada por los La noticia más antigua procede del Tumbo: la puerta de
conversos para acceder al templo desde la zona occiden- la misma yglesia, que esta a los pies de ella en la nave collateral de hafia
tal del claustro ; mutilada su parte izquierda y la cara
2447
el norte, la qual puerta mira al norte, y esta este año de mill y seiscien-
que daba al claustro, y a falta de una excavación arqueo- tos y treinta en que esto escribo, abierta para que entren por ella los segla-
lógica en esta zona, nada podemos decir acerca de su con- res . Más adelante, al comentar brevemente las distintas
2451
parte de los basamentos de sus jambas, lo que permite defi- Anno Domini 1228 Regina beatrix bonae memoriae coe-
nir la luz que tenía —casi todo el ancho del tramo— y averi- pit edificare eclesiam, et obiit scilicet anno 1273. Et ex
guar que presentaba abocinamiento externo. Sin embargo tunc Regina Berengaria coepit etiam fabricare
contamos con las descripciones que de ella se hacen tanto ab bas
en el Tumbo como en el Cartulario, a las que hay que añadir egi dius
algunos de los autores que le siguieron, como LAMBERT, 1931: 270; o MORALES, 1765: 194: "Anno Domini 1229. Regina Beatrix bonae
2 4 5 6
Monumentos españoles, 1984-1987: II, 392-393, señaló que carecía de memoriae cepit edificare Ecclesiam, & obiit Era 1273. & ex inde Domina
puerta occidental. Sin embargo ANTÓN, en la edición de 1942: 172, berengaria cepit eam fabricare"
señalaba que esa puerta sí existía, y que había estado oculta hasta ese MANRIQUE, 1642-1659: III, 14: "Anno Domini millesimo ducen-
2 4 5 7
momento bajo los escombros, si bien señala que "tal vez no sea primi- tesimo vigesimooctavo Regina Beatrix bonae memoriae coepit aedificare
tiva"; le sigue ARA GIL, 1986: 28. CRESPO, HERRÁN y PUENTE, 2006: Ecclesiam hanc, et obiit Aera millesima ducentesima septuagesima ter-
93, no dudan de la contemporaneidad de este vano respecto al muro en tia, et ex tunc Regina Berengaria coepit Ecclesiam fabricare".
el que se abre. AB BAS
2 4 5 0 los seglares entraban por la que mira a poniente que ahora esta cerrada (fol.93r). AEGI DIUS
Sobre la apertura de puertas en esta zona del templo, vid. los comenta-
rios apuntados en la monografía de Valbuena.
FUNDACIONES MASCULINAS • 397
También Ambrosio de M o r a l e s y M a n r i q u e
2456 2457
RUBIO, 1895: 94; ANTÓN, 1918: 211; idem, 1919: 270; idem, 1923: 2461 Vid. nota 2265. Por su parte ANTÓN, 1919: 271 señala que ser-
102-103; idem, 1942: 172 y 173; YÁÑEZ NEIRA, 1974 (I): 341-342; vía "acaso para el público".
idem, 1974 (2): 63; YÁÑEZ NEIRA, 1974 (3): 80; BANGOTORVISO, Así aparece recogido en el Cartulario.
2 4 6 2
1994; 189; SUERO SOSA, 1997: III, I I 9 6 - I I 9 7 ; GARCÍA L0B0y MAR- Este último sí aparece documentado por el Tumbo: al relatar las caída
2 4 6 3
TÍN LÓPEZ, 1998: 50-51 y 61; idem, 2008: 100 nota 22; SENRA, 2002 del cimborrio señala cómo la fachada occidental se vio resentida, al igual
(2): 487; CRESPO, HERRÁN y PUENTE, 2006: 88-89; Historia de Villalba..., que la ymagen de la Reyna del cielo y de su precioso hijo, que estaban pintadas en la
51-52; entre otros. bidriera del choro alto (fol.IIIr.).
2459 1852 (2): 349. Copia la descripción con idénticas palabras
ORTEGA RUBIO, 1895: 96.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
398
rior está recorrido por un zócalo cuya molduración es idén-
tica a la que hemos visto en la parte oriental del templo y
nave contigua: talón inverso rematado en bocel (lám. 177).
En el costado norte se sitúa un armario litúrgico rectangu-
lar, de aristas vivas, mientras que en el opuesto, en el macizo
de la escalera de caracol, se disponía una credencia de la
que solamente queda la parte inferior con la cubeta para
evacuación del agua; el bloque de piedra en el que está
labrada muestra su arista baquetonada. N o queda rastro
alguno de la existencia de vanos que iluminasen esta estan-
cia y tampoco sabemos nada del sistema de abovedamiento
Lámina 177. empleado en esta capilla: ante la falta de apoyos previstos
Matallana. Iglesia,
capilla del Santo desde el suelo, se puede pensar que iría cubierta con un
Cristo. cañón apuntado, aunque podría haberse cubierto con
u n o o dos tramos de crucería —más reducido el oriental—
2464
posiblemente presentarían un aspecto semejante a los que atribuido una función específica, la funeraria . 2467
La capilla del Santo Cristo gún monasterio cisterciense de la Península Ibérica que pre-
sente esta disposición , ni siquiera el aludido caso de las
2469
En el ángulo formado por el brazo norte del tran- Huelgas. En éste la torre se levanta adosada al muro norte
septo y la nave del Evangelio se localiza la capilla del Santo de la capilla extrema del lado del Evangelio, es decir, a
Cristo. Se accedía a su interior, a tenor de los restos con- oriente del testero del transepto, y en su parte baja no se
servados y de las fotografías antiguas, a través de un arco ubica ninguna capilla sino que dicho espacio sirve simple-
apuntado y doblado de sección prismática y aristas vivas mente de pórtico a la de San Juan. En el caso de Matallana,
que apeaban directamente sobre unas jambas tratadas de las escasas noticias documentales que tenemos sobre la capi-
igual modo. Es un pequeño recinto de planta rectangular lla del Santo Cristo al hablarnos entre otras cosas de su
cuyo ángulo S.E. está ocupado por la caja de la escalera que tejado, invalidan totalmente la posible existencia de una torre
conduce al trasdós de las bóvedas. Todo el perímetro inte- sobre ella . Además, debemos recordar que en Veruela
2470
185; LAMBERT, 1 9 3 1 : 2 7 0 ; ARA GIL, 1 9 8 6 : 2 8 ; RUIZ SOUZA, 1 9 9 8 . lo siguiente: Se desmontaron los tejados de la Capilla del Santísimo Cristo y de la nave
ANTÓN, 1919: 271. Por su parte, ARA GIL, 2009: 15, señala que
2 4 6 7 de la yglesia que corresponde a esta Capilla; y en las de 1 7 9 7 a 1 7 9 8 : Por compo-
se desconoce la finalidad original de la capilla, "que con el paso del ner el estribo de la Capilla del Santo Christo que se caio sobre el mismo tejado, y rete-
tiempo llegó a tener una función funeraria". jarlo, 92 (Libro de Obras, fols.52v y 65v, respectivamente).
2 4 6 8 V i d . CARRERO SANTAMARÍA, 1 9 9 7 ; ESPAÑOL I BERTRÁN, 1 9 9 6 .
FUNDACIONES MASCULINAS • 399
existe otro recinto en idéntico lugar, el llamado "pudridero", la advocación del Santo Cristo aparece documentada ya en
de similares dimensiones y un único piso, y que también el siglo XVIII . 2472
alberga en el ángulo sudeste la caja de un husillo. A pesar de que el testimonio que revela su sentido
En cuanto a su función, la referencia más antigua nos funerario es muy tardío, que carecemos de cualquier otra
la proporciona el Tumbo. Según dice éste, el abad Nicolás de prueba documental al respecto y que, a tenor de lo conser-
A y l l ó n ( + 1 5 6 9 ) h i z o el Santo Crucifixo que esta en la capilla de vado, no poseyó lucillos mortuorios en las paredes, cree-
la nave colateral contra el norte enluciendola y adornandola con las estre- mos que desde sus orígenes tuvo aquella función. Apoya
llasy letras doradas que oy se ven; hi¡o para el mismo altar elfrontal de nuestra hipótesis la existencia de capillas de carácter fune-
raso carmesi con frontaleras bordadas: y finalmente le enterraron en la rario anejas a las iglesias, generalmente construidas junto al
misma capilla enfrente del mismo altar debaxo de la lapida llana que esta brazo del transepto que linda con el cementerio de la comu-
en el suelo en medio de la capilla . C o m o se p u e d e observar, el
2471 nidad como consecuencia de las restrictivas normas impues-
escriba se refiere a esta capilla por su ubicación en el tem- tas por los cistercienses en materia de enterramientos , 2473
plo no por una advocación concreta. La mención expresa a algunas de ellas con el mismo tipo de planta y ubicación en
2471fol.I06v (cit. por YÁÑEZ NEIRA, 1974: 353). 2473 Sobre estas capillas y las causas que motivaron su erección, vid. las
2472Bajo este nombre aparece en diversas partidas del Libro de Obras (vid. referencias emitidas al hablar de la Capilla de San Rafael en la mono-
por ejemplo, la nota 2470). Debemos recordar, sin embargo, que el grafía de La Espina.
grueso de la documentación conservado es mínimo, especialmente la
medieval, por lo que no podemos afirmar con rotundidad que el título
de Santo Cristo fuese impuesto en época moderna.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
400
Fig. 31.
Matallana. Planta
general del monasterio
(croquis del siglo
XVIII).
el ángulo formado por el transepto y las naves: capilla de los de Palazuelos o la de San Juan de S o b r a d o 2477 se abren
Valcárcel, en Carracedo ; del Santo Cristo, en Rueda ;
2474 2475 exclusivamente a dicha nave transversal.
y posiblemente la de Veruela . 2476
cada en su costado meridional. Construida probablemente en la segunda nado tradicionalmente "pudridero" y al que por el momento no se ha
mitad del siglo XIII, sufrió una importante renovación en el segundo dado una explicación concluyente. De planta rectangular y con la caja del
cuarto del XIV. Véanse BARCIA MERAYO, 1990; GONZÁLEZ GONZÁLEZ, husillo ocupando el ángulo S.E. como en Matallana, presenta en sus
1993: I 3 I - I 3 2 y nota 122; MIGUEL HERNÁNDEZ, 1996: 152; CASAS lados norte y oeste tres amplios lucillos rehundidos en el suelo, y la pre-
CASTELLS, 1998; por sólo, citar los trabajos que más recientemente se sencia de pilas en dicho lugar ha motivado que se piense que actuaría
han ocupado de esta capilla. como lugar destinado a la preparación de cadáveres antes de proceder a
En el segundo tramo de la nave del Evangelio se dispone una capi-
2 4 7 5 la inhumación, descartando la posibilidad de que fuera, aun en origen,
lla rectangular cuya advocación es, como en Matallana, del Santo Cristo. una capilla funeraria del tipo de las anteriores (CRIADO y BORQUE, 1993:
Abierta la nave a través de un gran arco, en el costado occidental se dis- 41; MARTÍNEZ BUÉNAGA, 1998: 62 y I I 6 - I I 7 ) .
pone un arcosolio donde reposaban los restos de Juan Gil Tarín, Justicia Vid. en la monografía de Palazuelos lo que se comenta al respecto.
2 4 7 7
FUNDACIONES MASCULINAS • 401
El primitivo claustro reglar fue construido, según el todavía se conservan de los pilares sobre los que volteaban
redactor del Tumbo, en tiempos del abad García de Villa- las arquerías del cuerpo inferior (lám. 1 7 8 ) . Este claus- 2484
siendo conocido a partir de entonces bajo el nombre de tran que ese era su límite por este lado; el cerramiento
"Claustro nuevo" . También se le conocía como el
2480 oriental venía marcado por el muro oeste del brazo sur del
"Claustro de la taza", por la grandiossa y tan celebrada pila transepto y el de las estancias de la panda del capítulo, que
pétrea que se instaló frente al refectorio en tiempos de Gar- estaban a su mismo nivel, y del que únicamente permane-
cía de Villanueva , años más tarde enriquecida con un
2481 cen unos pocos sillares; del cierre meridional no queda resto
hombrecillo y tafa de bronce bajo el abadiato de Nicolás de visible alguno, pero la situación en el croquis dieciochesco
Ayllón ( 1 5 6 6 ) . 2482 del refectorio - q u e como veremos no parece sufrir grandes
destaca que "es gran piedra la pila de la fuente del Claustro". noroeste del claustro, en el curso de las cuales salió a la luz el basamento
... aderefo y encaño la fuente de nuebo, poniendo arcadufes de barro y quitando
2 4 8 2 del pilar moderno de ese ángulo y diversos enterramientos, permitieron
los de plomo que habia puesto el abbad que primero la encaño y sobre la pila de piedra comprobar la ausencia de esta estructura, abriéndose la puerta de con-
que esta en el claustro Reglar en frente de el Refectorio, puso el hombrecillo y tafa de versos del templo directamente al claustro.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
402
modificaciones estructurales hasta fines de la edad gobierno de la casa entre I 5 7 8 y I602, edificaron sacristia,
moderna—, y la anchura que presentaban las otras galerías capitulo vajo, bodega y claustro nuebo que esta sobre ella que todo es de
(3'75 m), nos hace pensar que el haber conservado esta lo mejor de la orden . 249I
dependencia medieval provocó que se mantuviese también Respecto a la sacristía, efectivamente la de Palazuelos
el límite primitivo por este costado. N a d a sabemos de la presenta también planta cuadrada y una capilla adyacente.
estructura de las pandas medievales . 2486
Sin embargo, el tamaño de la de Matallana —tal y como apa-
rece dibujada en el croquis dieciochesco— es excesivamente
El pabellón de monjes grande, sobre todo si lo comparamos con el de la sala capi-
La primera estancia de la panda del capítulo, de la tular. La sacristía medieval sería de menor tamaño y fue reno-
que se conserva como hemos dicho parte de un pasaje y las vada en esas fechas incorporando a su fábrica parte del
líneas de cimientos que se corresponden con los primitivos espacio del antiguo capítulo. De su cubrición moderna sólo
s a b e m o s que la bóveda estaba cubierta de catorce estrellones dorados de
muros de cierre oriental y occidental, es la sacristía . 2487
cuadrada de gran tamaño, con soportes en los ángulos, ado- sar en un espacio muy elevado provisto de una bóveda estre-
sada al testero del brazo sur del transepto; a oriente comu- llada cuyas claves estaban adornadas con pinjantes, y tal vez
nicaba con un pequeño espacio cuadrangular que enrasaba la central horadada. Al mismo tiempo que se reformó la
con el testero de las capillas laterales del templo y que ser- sacristía se debió levantar una pequeña pieza auxiliar. De ésta
vía como Sosacristía. A continuación se disponía el Capítulo se ha conservado una de sus ménsulas empotrada en el muro
bajo, una sala rectangular algo reducida, seguido de un pasaje de la bodega que le servía de cierre por el costado sur, así
estrecho que parece comunicaba el claustro reglar con el de como el arranque de su testero. Éste muestra un aparejo de
la hospedería y una escalera de tres tiros. Remataba la panda sillares de tamaño desigual labrados toscamente que nada
un patio de servicio de la cocina y unas habitaciones de fun- tiene que ver con la buena sillería empleada en las construc-
ción desconocida. ciones medievales y las características de aquella ménsula res-
ponden a una época avanzada del siglo XVI.
Antón relacionó la curiosa disposición en dos ámbi- De la sala capitular tenemos menos noticias y bas-
tos de sacristía y sala aneja con lo que ocurría en Palazue- tantes imprecisas. En una escritura de trueque y permuta
los , señalando que la primera estaba provista de "pilares
2488
que se hizo con doña Inés de Guzmán el 4 de febrero de
esquinados para bóvedas de ojivas" , y datando todo el
2489
I 4 5 8 se dice lo siguiente:
conjunto en el siglo XIII . Las mismas fechas otorgaba a
2490
la sala capitular —que identificaba con el Capítulo bajo del ... estando en uno en su capitulo capitularmente dentro del
croquis—, y al pasaje, al que definió como "pasillo-locuto- dicho monasterio en la casa donde acostumbran faser capi-
rio". Sin embargo los restos conservados, las noticias docu- tulo el abad e prior e convento (... ) segund que lo han de
mentales y la comparación con la organización de estas uso e de costumbre de se ayuntar en su capitulo en el cons-
dependencias en otros monasterios obliga por un lado a ystorio del dicho monesterio... . 2493
rechazar aquellas fechas y asignar la construcción de algu- Y en otra de 9 de febrero de I 4 9 3 esto otro:
nas de esas piezas al último cuarto del siglo XVI, y por otro Sepan quantos este publico instrumento vieren como
a señalar que durante esas obras se modificó el trazado de estando en el Monasterio de Santa Maria de Mattallana de
las primitivas con el fin de servir a las nuevas necesidades. la Orden del Cister de la Dio^esis de Palenpa (...) dentro
Según el Tumbo los abades Antonio de Cuesta y Bar- en el capitulo del dicho Monasterio, que esta junto a una de
tolomé de la Canal, que se repartieron alternativamente el las naves de la Claustra del dicho Monasterio... . 2494
2486 Durante las excavaciones arqueológicas de I993 se descubrió en 24Í!Ifol.I07v (cit. por CRESPO, HERRÁN y PUENTE, 2006: I0I). El
los cimientos del claustro neoclásico un fragmento de fuste de una claustro nuebo referenciado no es el reglar sino el de la hospedería, ya que
columnilla de I5 cm. de diámetro que, tal vez, podría haber pertene- cuando se escribe esta nota (I630) no hacía muchos años se había ini-
cido al medieval, aunque no podemos asegurarlo. Parece que en esta obra ciado aquél. Por otro lado, en los Recuerdos históricos..., fol.59r. se anota
se aprovechó la cimentación del claustro medieval (CRESPO, HERRÁN y que durante el abadiato de Antonio de la Cuesta Se hizo la escalera, el capi-
PUENTE, 2006: 98 y 99). tulo viejo, la bodega y el Claustro de la hospederia, y en la Historia de Villalba...,
RUIZSÓUZA, I998 (3) realiza una rápida enumeración de las estan-
2 4 8 7 6 2 se habla de la escalera del capítulo viejo, la bodega y el claustro de la hospede-
cias que aparecen en el croquis del XVIII así como los datos extraídos ria.
por Antón. Historia de Villalba..., 5 5 (cit. p o r CRESPO, HERRÁN y PUENTE, 2 0 0 6 :
2 4 9 2
por dos hileras de bolas—, tallado para formar parte de un flanco norte sugiere que en origen estaba precedida por la
vano, nos hace pensar en una puerta provista de, al menos, escalera al dormitorio y la cárcel o archivo, abriéndose aquel
una columna acodillada. Respecto al cierre oriental de esta vano a este último espacio ; sin embargo, no hay huellas
2500
sala, en él se abría una puerta que en un principio comuni- en el lienzo conservado ni del tiro de la escalera ni del muro
caba con el exterior y en época moderna, tal y como aparece divisorio de ambos espacios. Respecto a la puerta del lado
reflejada en el croquis del XVIII, con el claustro de la hospe- opuesto, que al contrario que la anterior sí se señalaba en el
dería (lám. 180). croquis dieciochesco, en caso de pertenecer al plan primitivo
N o es fácil averiguar cuál era el destino de esta depen- del monasterio comunicaría con la sala de monjes, actuando
dencia, que tradicionalmente se ha identificado como el paso al mismo tiempo este pasillo como locutorio y pasaje . 250I
ABAD CASTRO, 1998: 192, señala que a juzgar por el croquis del
2 4 9 5 toda la caja de la escalera estaba cubierta de bóveda (Historia de Villalba..., 61; cit. p o r
XVIII "se adivina una planta cuadrangular en el espacio de la sala capi- CRESPO, HERRÁN y PUENTE, 2006: 105-106).
tular". 2 4 9 9 ANTÓN, 1 9 4 2 : 1 8 0 y ARA GIL, 1 9 8 6 : 2 9 .
2496 En un documento de 1784 (A.H.N. Clero, legajo 7.541) se dice: 2500Vid. en la monografía de La Espina lo que se dice al respecto de la
...estando juntos en su Sala Abacial donde nos solemos juntar para tratar y conferir cosas funcionalidad de las estancias ubicadas bajo el tiro de la escalera.
tocantes al servicio de Dios nuestro Señor, vien y utilidad, de este dicho Monasterio.... 2501Como en Bujedo, Sandoval, etc (sobre estas dependencias, vid.
Para su completa descripción nos basamos en fotografías tomadas
2 4 9 7 AUBERT, 1947: II, 36-37; ABAD CASTRO, 1998: 195-198). CRESPO,
poco antes de su ruina. HERRÁN y PUENTE, 2006: 103, lo identifican con el locutorio.
La subida a los claustros superiores se hacía por una escalera de piedra sillería con
2 4 9 8
lizaba a finales de la Edad Media al oeste del claustro. y I 7 9 9 se intervendrá de nuevo en este ámbito y en la
cocina, aunque no sabemos en qué consistieron las
La panda del refectorio obras . Por uno de los inventarios realizados tras la des-
25t3
dos ventanas y una vidriera y por otra puerta se salía al tránsito que daba
en el siglo XVIII por la cocina . Ésta se había trasladado a
2504
de la portería y otras dependencias al Este del complejo Embutidos en un vallado moderno que, paralelo a la
monástico , resultando sugerente la idea de que la ordena-
2505 iglesia, discurre por la zona sur del conjunto, se descubren
ción de este espacio, de planta cuadrada y hogar central, res- los restos de dos contrafuertes construidos con aparejo de
petase la del primitivo calefactorio . Posteriormente se 2506
sillería ( I ' 5 0 m de largo x I ' 2 0 de ancho) del refectorio
llevaron a cabo en el recinto diversas obras . 2507
medieval —los que separaban los dos primeros tramos—, así
Al oeste se disponía el refectorio, construido según como los fragmentos de muro a los que estaban adosados
el Tumbo por el abad García de Villanueva de los Infantes (I m de espesor) y, en el caso del correspondiente al lado
( I 4 4 5 - 6 9 ) . A juzgar por la silueta dibujada en el croquis
2508 este, parte del soporte que interiormente lo dividía en tra-
que venimos comentando, se trataba de una amplia sala rec- mos: se trata de una semicolumna embutida en una pilas-
tangular, perpendicular a la panda, dividida en tres tramos tra flanqueada por sendas columnas acodilladas, provistas
cubiertos seguramente con bóvedas de crucería , como 2509 de basas áticas con escocia poco profunda y toro inferior en
parece indicarlo la presencia de contrafuertes esquinados forma de cuarto de círculo y elevadas sobre altos basamen-
en los cuatro ángulos . En el costado oeste del primer
25I(0 tos (lám. I 8 I ) .
2502 Según el Tumbo, antes de que hiciese el segundo claustro: la vivienda 2509 Así lo pensaban también ANTÓN, I942: I88; y ARAGIL, I986: 29.
de los monges estaba partida y derramada por el sitio que al presente ocupa el cercado del Con cuatro tramos de crucería cuatripartita se cubría el refectorio
2 5 1 0
colmenar, bodega y claustro nuebo, todo en vajo, y el horno persevero asta nuestra edad de Óvila, mientras que los de Huerta y Piedra, de cuatro y tres tramos
en medio de el patio que hace ahora el claustro nuevo (fol.93r). R e c o r d e m o s que respectivamente, lo hacen con sexpartitas; el de Iranzu, de siete tramos,
en Palazuelos el dormitorio no se disponía al menos sobre la sacristía, se cubría también con crucería, aunque se desconoce si eran cuatriparti-
pudiendo suceder aquí lo mismo. tas o sexpartitas. Fuera de España encontramos también refectorios de
2503 AUBERT, I947: II, II4; ABAD CASTRO, I998: 237-239. nave única cubiertos con crucería: Bonport, Obazine, Silvacane, Belle-
Desconocemos a que zona del monasterio fue mudado el calefac-
2 5 0 4 perche o Villelongue, en Francia; Chiaravalle di Milano o Staffarda, en
torio, que según el Tumbo fue realizado bajo Martín de Compludo Italia; Wachock, en Polonia; etc.
( I 6 0 2 - 3 ) y era la mexor pieza que ay en las Religiones ( f o l . I 0 9 r ; cit., p o r 2 5 1 1 la cocina, desde la qual serbian la comida al Refectorio por una ventana que
YÁÑEZ NEIRA, I974: 358-359). se vee ahora mal cerrada en la pared de el Refectorio que mira al poniente en la ultima
2 5 0 5 Tumbo, fol.93v. capilla junto a la puerta de el (....) quando se hip la cocina que al presente tenemos, subie-
2506 Aunque eran más frecuentes los calefactorios con chimeneas ado- ron la ventana mas arriba y la pusieron al lado contrario (Tumbo, fol.93v).
sadas, encontramos el hogar central en Francia en Longpont y en Ingla- E n I 7 8 7 - 8 8 , Se abrio la pared maestra correspondiente al refectorio y ogar de
2 5 1 2
terra en Tintern (AUBERT, I947: II, II6). la cozina, se puso una ventana y contraventana, con su medianil y puerta para el mejor
Durante el abadiato de Jacinto Lopez (I733-38) se repararon entre
2 5 0 7 servicio de los monges y enfermos (Libro de obras, fol.45v).
otras estancias la cocina y la despensa (Recuerdos históricos... , fol.59r; His- 2 5 1 3 En las cuentas recogidas en el Libro de obras, únicamente se apunta:
toria de Villalba..., 62; ANTÓN, I 9 4 2 : 3 2 0 ; YÁÑEZNEIRA, I 9 7 4 : 3 8 I ) ; en En la obra del refectorio, cocina, vidrieras, mesas, tarimas, respaldos, mantelería y ser-
I800-I80I se fabrica la chimenea sobre cuatro columnas de piedra y villetas, cancel y puerta y celda de dispensa, 49.271 r. (Libro de obras, fol.66v;
cinco años más tarde se reconstruye por completo la dependencia (Libro CRESPO, HERRÁN y PUENTE, 2 0 0 6 : I I 0 ) . P o r su parte, Recuerdos históri-
de obras, fols.68r y 76r). Recogen estos y otros datos CRESPO, HERRÁN cos..., fol.59v; Historia de Villalba..., pág.64; ANTÓN, I 9 4 2 : 3 2 I ; YÁÑEZ
y PUENTE, 2006: I07-I08. NEIRA, I974: 385, fechan esta obra en I795.
2 5 0 8fol.93v; cit. YÁÑEZ NEIRA, I 9 7 4 : 3 9 7 . También en Recuerdos históri- 2 5 U Historia de Villalba..., pág.60; cit. p o r CRESPO, HERRÁN y PUENTE,
cos..., fol.58v; Historia de Vllalba..., pág.60; ANTÓN, I 9 4 2 : 3 I 9 . E n el apar- 2006: I08-I09.
tado dedicado al proceso crono-constructivo volveremos sobre este punto.
FUNDACIONES MASCULINAS • 405
Lámina 181.
Matallana.
Refectorio, restos de
uno de sus pilares.
Lámina 182.
Matallana.
Puerta de acceso
a la cilla medieval.
La posición que presentan estos restos en el terreno laje descansa sin transición sobre jambas aristadas, el cos-
y su traspolación al croquis del XVIII, permiten conocer las tado occidental está surcado a nivel del suelo por una serie
dimensiones aproximadas del refectorio: 9 m de ancho por de respiraderos y al sur se localiza otra puerta de menores
2 4 m de largo . 2515
dimensiones: constaba de arco tal vez apuntado y doblado,
A continuación del refectorio, se disponían en el siglo ambos de sección prismática y aristas vivas, que volteaban
XVIII dos estrechas salas paralelas al claustro, una de las cua- directamente sobre unas jambas carentes de molduración, y
les aparece definida en el croquis como Tránsito. Era el lugar estaba guarnecida por una chambrana hoy prácticamente
ritual de la cocina, de la que ya hemos hablado al analizar perdida (lám. 182); por el interior, a la derecha de esta
las dos dependencias anteriores. puerta aparecen unos sillares que sobresalen del plano del
muro, a partir de los cuales se abandona la sillería empleada
La panda occidental en todo este flanco por el mampuesto; los lienzos norte y sur
muestran al exterior un banco con arista superior biselada.
Ocupando todo lo largo de la panda se alzaban dos
alas paralelas de las que sólo permanecen una parte en pie. Estos espacios, tal y como los vemos hoy día, responden
Están construidas con un aparejo de mampostería excepto a una reforma efectuada poco después de la construcción del
el muro que da al claustro y parte de los cierres septentrio- nuevo claustro reglar y en la que se destinó el piso alto a Dor-
nal y meridional que lo están con sillería. La situada hacia mitorio de poniente y el bajo a cuadras ( I 7 8 3 - I 7 8 6 ) . Es difí-
2516
oriente presenta en su costado norte un pequeño ventanuco cil definir cómo y cuántas eran las dependencias originales
casi a ras del suelo, junto a la fractura que marca la unión de organizadas entorno a esta panda. A tenor de los restos con-
dos fábricas: la de sillería, que corresponde en realidad al servados y en espera de unas necesitadas excavaciones, por el
contrafuerte situado en el extremo sur de la fachada occi- momento podemos afirmar que Matallana no contó con
dental de la iglesia, y la de mampostería; en el costado sur se corredor de conversos, sino que éstos accedían desde la igle-
practica una pequeña puerta cuyas jambas muestran vivas sia directamente a la galería occidental del claustro a través de
sus aristas. La estancia occidental, más amplia, presenta al una puerta abierta en el último tramo de la nave de la Epís-
norte una gran puerta con arco de medio punto cuyo dove- tola . En segundo lugar, se constata la existencia de una gran
25I7
2 5 1 5 CRESPO, HERRÁN y PUENTE, 2 0 0 6 : 110. indicando que su duración fue de 129 semanas de trabajo efectivo (fol.44r).
2516 Según los Recuerdos históricos..., fol.59r: este dormitorio se hizo en Sobre las intervenciones modernas llevadas a cabo en este espacio, vid.
1 7 8 3 ( L o m i s m o en Historia de Villalba..., pág.63; ANTÓN, 1 9 4 2 : 1 8 0 y CRESPO, HERRÁN y PUENTE, 2006: I I 2 - I I 8 .
leyenda del esquema del croquis; YÁÑEZ NEIRA, 1974: 385) si bien en N o apareció ningún vestigio del mismo en las excavaciones reali-
2 5 1 7
el Libro de obras las cuentas relativas a esta intervención, cuya traza se debía zadas en el ángulo N.O. del claustro.
al maestro Gregorio Godos, se anotan junto a las cuentas de 1786-1787,
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
406
arranque de un muro que servía de cierre a esta sala por occi-
dente . Por otro lado, el redactor del Tumbo señala cómo en
25I9
Restos dispersos
Entre las ruinas yacían hasta hace poco tiempo una
gran cantidad de piezas procedentes seguramente del pro-
pio templo, como tambores de columnas, fragmentos de
Lámina I83. basas, sillares sueltos. Además del capitel encontrado
Matallana. durante el desescombro del pasaje- locutorio, destacamos la
Capitel. presencia de:
• Fragmento de nervio: de perfil prismático, muestra
sus aristas perfiladas con dos boceles disponiéndose
entre ellos una media caña, y flanqueados por sen-
das 252I
medidas de CRESPO, HERRÁN y PUENTE, 2006: 113. (fines del siglo XIII), cimborrio de Villamuriel de Cerrato, cabecera y
2519En recientes intervenciones arqueológicas (verano 2000) se hicie- naves de Villalcázar de Sirga, entre otros.
ron una serie de catas en el interior de la estancia occidental, localizán- Este tipo de decoración la encontramos en la iglesia de Valbuena
2 5 2 2
dose en una de ellas el cimiento de lo que podía ser un muro que corría (con sus múltiples variantes), las parroquias de San Miguel de Palencia
paralelo al claustro cercano al paredón divisorio actual. Por el momento, o Villamuriel de Cerrato.
y mientras no se excave de modo sistemático todo este espacio, nada Mi más sincero agradecimiento a Aitana Monge Zapata por
2 5 2 3
podemos decir al respecto. haberme facilitado una fotografía de esta pieza, así como de las tres ante-
... del qual [se refiere al claustro] se salia para la porteria que estaba en el arco
2 5 2 0 riores en su ubicación actual.
que mira al norte a la parte del soto debajo de el transito por donde se entra a las secre-
FUNDACIONES MASCULINAS • 407
r ~J L- J L-
3. PROCESO CRONO-
CONSTRUCTIVO 1
Cuando los monjes cistercienses tomaron posesión
del lugar de Matallana se encontraron, según el Tumbo, con
una iglesia y construcciones levantadas por los hospitala-
Hf •H
rios que aprovecharían hasta que decidieron o, mejor dicho,
pudieron construir un templo y dependencias más acorde
con sus necesidades. La citada fuente situaba a la iglesia HL OI O < V :
sanjuanista al norte de la que hoy vemos, bajo las ruinas del
palomar:
Este coto llamado de matallana solia ser proprio de la orden de
San Juan, que antiguamente se solia llamar del hospital de Jeru-
salem, y dentro del estaba hedficado un monasterio de la dicha
orden cuyayglesia principal estaba en el sitio donde este año de
1630 se ve edificado un palomar, desde el qual hacia el sitio
donde esta la yglesia que al presente tenemos, se extendia a lo
ancho, y el vallado del cimenterio de la yglesia tenian hacia la
O
parte del monte, y asi vi yo el año de 1615 que habriendo o
unos cimientos para estender mas el dicho palomar, se hallaban
muchos huesos de difuntos, y aun algunos sepulchros curiosos
debajo de tierra de personas principales, que en el dicho cemen- o
terio se habían sepultado, lo qual podra experimentar con poco Fig. 32.
que trabaje quien quisiere cabar dentro del dicho palomar a la Matallana.
mitad de el y hacia la puerta que mira a nuestra yglesia . 2525 , W - Plantas superpuestas
~u u
de Matallana I
Señala el cronista, además, que dicho templo era de LT y Matallana II .
fundación era pequeña la que entonzes tenian, o porque se estaban con la ciones arqueológicas han confirmado la existencia de un
que aquí allaron que tenian los cavalleros y freiles de Sant Juan o por ven- templo situado no donde indicaba el Tumbo sino bajo la
tura si al principio se hizo alguna no era suficiente o a gusto de Reies . 2527 iglesia actual: se trataba de una iglesia de planta basilical de
teriores describiría la clave como "de hojarasca gótica, fina" (idem, 1923: MANRIQUE, 1642-1659: III, 12 (quien lo atribuye a Tello Pérez y
2 5 2 8
113). Guntroda); ANTÓN, 1923 (4): 102 y 103; idem, 1942: 171 y 172;
fol.I63r; repite la misma idea en fols. 69v, 72r y I37r. Lo recogen
2 5 2 5 YÁÑEZ NEIRA, 1 9 7 4 ( I ) : 3 2 4 y 3 4 1 ; ARA GIL, 1 9 8 6 : 2 5 ; VALLEJO,
CRESPO, HERRÁN y PUENTE, 2 0 0 6 : 4 7 . 1994: 65.
... era muy pequeñayglesia la que tenian, que era la que losfreyles del hospital les
2 5 2 6
2 5 2 9 BANGO TORVISO, I 9 8 9 : 96. ^ ^ Debe tenerse en cuenta que las etapas aquí señaladas correspon-
2530 Aunque los primeros indicios salieron a la luz en las excavaciones den sólo a las partes bajas del edificio, por lo que posibles alteracio-
dirigidas por L.C. San Miguel Maté en I993, han sido las realizadas nes o cambios de planes en altura lamentablemente no pueden ser
durante los veranos de I999 a 2002, dirigidas por M. Crespo, M. definidos.
Gallardo, M.J. Puente y R. San Miguel, cuando se han reconocido sus tra- Desaparecidos en la actualidad, la elevación de esta zona posibili-
2 5 3 2
zas (además de las memorias de las excavaciones que se conservan en el taría un más rápido comienzo para las dependencias orientales del claus-
Servicio Territorial de Educación y Cultura de Valladolid, vid. CRESPO, tro, como veíamos ocurría en Valbuena. N o obstante, el soporte núm.
HERRÁN y PUENTE, 2006: 46-47 y plano en 44; su interpretación tipo- XXXIX presenta un perfil de basamento y basas ya diferente al emple-
lógica y funcional sigue fundamentalmente lo presentado por nosotros en ado en la cabecera, por lo que debemos adjudicar su construcción a la
2002 y 2003; vid. también ARA GIL, 2002: 7I-72; idem, 2009: 9-I0). segunda etapa.
FUNDACIONES MASCULINAS • 409
Lámina I86.
Matallana. Restos
de la cabecera
de Matallana I.
Lámina I87.
y al comprobar la dificultad que suponía el realizar de la capilla el zócalo sea continuo sugiere que aque- Matallana. Restos
del muro norte
dicha cubrición decidieron dejarla de lado y elegir una lla solución quedó abortada cuando todavía no se del cuerpo de naves
más simple. Avala además esta hipótesis el hecho de había terminado de colocar los sillares que confor- de Matallana I.
que en la capilla de San Juan (intermedia del lado del man zócalos y basamentos.
Evangelio) parece que también se inició aquella solu- A partir de entonces aparece un nuevo tipo de plinto,
ción: en su costado norte se observa cómo poco más las basas dobles presentan el toro inferior más redon-
de medio metro a la izquierda del soporte central las deado y decorado con garras estrechas. Por otro lado,
hiladas que componen el zócalo están alineadas en la piedra empleada es más dura.
vertical, coincidiendo exactamente ese punto con el En esta misma etapa se construye la capilla funeraria
que en la capilla de San Bernardo marca el arranque del Santo Cristo .
2533 Lo demuestra el hecho de que las
de los basamentos aislados; el hecho de que en el resto hiladas de sus paramentos interiores 2534 y puerta se
2. Segunda etapa. Se levanta ahora el costado meridio- Tradicionalmente se ha venido hablando, en el marco
nal del cuerpo de naves, con un nuevo modelo de basa- de la expansión de las nuevas formulaciones góticas ema-
mento y zócalo (tipo 2), pero cuyas basas presentan nadas del foco de Burgos —centrado en las canterías de Las
toros inferiores y plintos análogos a los empleados en Huelgas y, en un momento más avanzado, de la catedral—
el costado opuesto; únicamente las basas de los pilares 2536, de la influencia de la iglesia del monasterio burgalés en
adosados muestran una pequeña diferencia con res- la configuración de la cabecera y abovedamientos (espe-
pecto a las otras, y es que la garra es más gruesa y alta. cialmente el proyectado para la capilla de San Bernardo) de
Matallana . 2537
cienses mantuvieron el culto en el templo preexistente. La efecto, el hecho de que ambas abaciales compartan el mismo
planta de éste abarcaba la parte central y meridional de esquema de capilla mayor poligonal y laterales de testero
lo que iba a ser la nueva iglesia, por lo que la construcción recto, la solución prevista del abovedamiento sobre trompas
pudo comenzar como suele ser habitual por la cabecera. de las capillas laterales y tal vez el de otras zonas —sexpar-
Cuando ésta ya estaba lo suficientemente avanzada se eli- tita en la capilla mayor, por ejemplo—, incluso el perfil de
minaría la parte oriental del antiguo templo, pero mante- algunas impostas o la molduración de las jambas, puede en
niendo todavía sus naves; mientras, las obras continuaban un principio hacer suponer ese origen. Sin embargo, no se
por el costado que estaba libre de edificaciones —el encuentran en la iglesia burgalesa ni nada tienen que ver con
norte—, y una vez levantadas las partes bajas de la fachada ella el tipo de soporte empleado en la embocadura de las
occidental se procedió a derribar lo que quedaba de la capillas, transepto y naves, los grupos de tres columnas en
iglesia anterior. El cierre meridional de la nueva iglesia se los ángulos del transepto y naves, la estructura que posible-
había adosado al del viejo templo, lo que originó una dife- mente tendría el cimborrio o la de la puerta geminada de la
rencia de anchura entre las dos naves laterales. Esto, a su nave del Evangelio, ni siquiera la decoración de los capiteles
vez, hizo que se buscase una solución para resolver este o el perfil de los nervios. Alguno de estos elementos en cam-
problema e igualarlas, surgiendo así la idea de las capillas- bio sí los localizamos en la catedral de Sigüenza o más tími-
hornacina que, por otro lado, reutilizaron los cimientos de damente en el monasterio también cisterciense de
la estructura preexistente. Bonaval , edificios que han sido asimismo puestos en rela-
2539
pensar en que una vez estuvieron dispuestos todos los basa- componente de aquéllas construcciones —sobre todo de
mentos centrales comenzó su elevación. Sigüenza— y de Matallana, el pilar con dobles columnas en
cen, ya que el análisis siempre será parcial. VALLE PÉREZ, 1990: 56 nota 32. En las catedrales de Sigüenza y
2 5 4 0
los frentes y tres acodilladas a cada lado, es algo ajeno a las plenamente gótico, con esquema poligonal para la capilla
innovaciones introducidas por dichos talleres y parece que mayor, soportes preparados desde su base para recibir bóve-
constituye el final de la evolución de un tipo de soporte das de crucería, capiteles con desbastado tronco-cónico o la
extendido hacía tiempo por Castilla . De este modo, se
254I
elevada altura que por la situación del alféizar de los vanos
ha hecho derivar al vallisoletano del seguntino, diferencián- de la cabecera se denota que alcanzaría . 2547
dose únicamente en que en Sigüenza la columnilla acodi- Debemos acudir a fuentes tardías como el Tumbo y el
llada que recibe los nervios presenta mayor grosor que las Cartulario para obtener noticias sobre la construcción de la
que soportan las dobladuras . Según Torres Balbás la igle-
2542
aunque mantiene el influjo burgalés para la cabecera, señala informe acerca del desarrollo de las obras, maestros, o cual-
para las naves y los pilares realizaciones vecinas como Val- quier otro dato que permita establecer con seguridad su cro-
buena —algo anterior— o Palazuelos —coetánea— . 2544
nología. Como ya comentamos en el anterior apartado,
sobre la puerta abierta en la nave del Evangelio se disponía
Por nuestra parte creemos que el templo de Matallana una lápida que indicaba cómo la reina Beatriz de Suabia
es obra de un equipo que, si bien conoce las experiencias había mandado edificar la iglesia en I228, siendo conti-
desarrolladas por entonces en Burgos, tal vez porque ha reci- nuada a su muerte en I235 por la reina Berenguela, su sue-
bido las trazas de un maestro que ha participado en Las gra , bajo el abadiato de Egidio (ca.I223-I243). Por lo
2548
Huelgas —favorecido sin duda por la vinculación que ya que respecta al proceso constructivo, es únicamente el Tumbo
hemos comentado con Beatriz de Suabia y Doña Berenguela, el que aventura la existencia de dos fases: comento el edificio de
madre de Fernando III—, carece de la pericia y experiencia la yglesia la Reyna doña beatriz, y muriendo ella al tiempo que llegaba la
necesaria para realizar complejos abovedamientos —recorde- obra a la parte donde esta la piedra que e referido [es decir, a la altura
mos la renuncia a las bóvedas sobre trompas— y prescinde de la puerta de la nave norte] el año de mill y docientos y treinta y
además de los esbeltos soportes de la abacial burgalesa para cinco, comenp a proseguir el edificio su suegra la Reyna doña Berenguela
adoptar fórmulas ya conocidas y tradicionales en el hija de nuestro fundador siendo abbad de este monasterio don fray egidio
entorno . Y esto se puede observar no solo en lo que a la
2545
o fray gil, el qual puso alli su nombre como firma y como afirmando la
estructura arquitectónica se refiere, sino también en los mucha obligacion en que este monasterio estaba a estas dos Reynas . 2549
los capiteles de crochets burgaleses en favor de unos mode- Así pues, tendríamos el año I 2 2 8 como fecha de
los muy sencillos que encontrábamos en Valbuena y se man- comienzo del edificio, momento en el cual las fórmulas
tienen en construcciones como Villamuriel de Cerrato o San empleadas en las iglesia de las Huelgas —bastante adelan-
Miguel de Palencia. N o obstante, el resultado es un edificio tada por entonces— , habían comenzado a difundirse,
2550
^ LAMBERT, I3I: I I 3 y II4; ANTÓN, I942: I84; TORRES BALBÁS, I985: 435; idem, I994: I89; idem, I997: 285; ARA GIL, I977: 9; idem,
I946: 303; GUTIÉRREZ PAJARES, I993: 43. I986: 25 y 27; idem, I998: 229; idem, 2002: 72; idem, 2009: I0-II;
2542 TORRES BALBÁS, I946: 303; MUÑOZ PÁRRAGA, I987: I76. PÉREZ EMBID, I986: 298; idem, I99I: 54; AZCÁRATE, I990: 17;
2543 TORRES BALBÁS, I946: 303. VVAA., I995: II, 972; RUIZ SOUZA, I998: I3I; GRAU LOBO y MAR-
ANTÓN, I942: I86.
2 5 4 4 TÍN LÓPEZ, I998: 50-5I y 6I; GARCÍA GUINEA, 200I: 23; SENRA, 2002
En esta línea se mueve TORRES BALBÁS, I952: I04.
2 5 4 5 (2): 487 y 489; HERBOSA, 2003: I0; D'EMILIO, 2005: 243; CRESPO,
2546 TORRES BALBÁS, I946: 249, nota 232. HERRÁN y PUENTE, 2006: 8I; ALONSO ABAD, 2007: 222; FERNÁNDEZ
Disentimos por tanto de la atribución de "pesadez y aspecto romá-
2 5 4 7 LADREDA, 2007: 65; entre otros. VALLEJO, I995: 65, sitúa la fecha de
nicos" aplicada por TORRES BALBÁS, I946: 296. comienzo, seguramente por un error de imprenta, en II23.
2548 Tumbo, fols.78v-79v, I37r, I77v y 240v; Cartulario, fols. 249v-250r 2549 fol.79v.
y 250v. Les siguen, MANRIQUE, I642-I659: III, I4 y I53; MORALES, 2550 Aunque no es nuestro propósito estudiar ahora con detalle la cro-
I765: I94 [aunque dice que Berenguela es su hija, la abadesa de las Huel- nología de la iglesia de Las Huelgas, vamos a repasar brevemente las teo-
gas]; FLÓREZ, I76I: 447; GARCÍA ESCOBAR, I852 (2): 437; QUADRADO, rías que hay al respecto. Por un lado, tendríamos aquélla que, retomando
I885: 274; ORTEGA RUBIO, I895: 94; ANTÓN, I9I8: 2 I I ; idem, I9I9: los trabajos de TORRES BALBÁS (I943: 239, 243-244, 248-249, si bien
270; idem, I923: I02-I03; idem, I942: I72 y I73; LAMBERT, I93I: en esta última página sugiere la posibilidad de que se hubiese empezado
26, I I 3 y 267; DIMIER, I949: 35 y I33; SALCEDO, I949: I6 nota 5; poco antes de la muerte de Alfonso VIII; I952: 98), LAMBERT (I93I:
idem, I999: 83; TORRES BALBÁS, I943: 247 y 249; idem, I952: 98, I04 I95) y seguidos entre otros por BANGÓTORVISO (I985: 434) o ANDRÉS
y I 5 I ; EYDOUX, I954: I99; GARCÍA CHICO, I959: I72; VAN DER ORDAX ( I 9 8 7 (2): 88), sitúa los inicios de su construcción en tiempos
MEER, I965: 300; FERNÁNDEZ, I972: 392; YÁÑEZ NEIRA, I973 (2): de Fernando III, a finales del primer cuarto del siglo XIII -ca.I220-25—;
I595; idem, I974 (I): 327 y 34I-342; idem, I974 (2): 59 y 63-64; este supuesto ha sido defendido últimamente por MUÑOZ PÁRRAGA
idem, I974 (3): 80; idem, I974 (4): I5; VIELVA, I976: 649; MARTÍ- (I992: III, 22 y 24; I998 (2)), y especialmente por VALLE PÉREZ
NEZ, I978: 4I7; Monumentos españoles, I984-I987: 392; BANGOTÓRVISO, (I986: 88; I990: 5I), quien se basa en el abovedamiento angevino de las
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
412
favoreciendo así su llegada hasta Matallana por estas A la muerte de Doña Berenguela (1246) los trabajos
fechas . Avalan también esta cronología la de algunos
2551
debían estar muy adelantados, siendo consagrado en I 2 5 4
conjuntos con los que hemos establecido paralelos, como el altar de San Juan (capilla intermedia del Evangelio) por
la catedral de Sigüenza , Sta. María de Villamuriel de
2552
Benito, obispo de Ávila, como consta de un epitafio questa en la
Cerrato , San Miguel de Palencia e incluso los cim-
2553 2554
misma capilla de letra gotica en una lapida al lado del evangelio .
2557
capillas laterales (cuyos antecedentes —Poitiers, Saumur o Angers— están rrumpido durante el reinado de Fernando III, los trabajos se reanudarían
datados entre I 2 I 0 y I225), la evolución económica del dominio y rematarían en el tercer cuarto del XIII en el cuadro de una escenogra-
monástico, la expansión de sus soluciones constructivas y decorativas fía funeraria relacionada con el solemne traslado de los sepulcros reales
(Palazuelos, "consagrado" en 1226, Matallana iniciada en 1228 y Hos- desde Claustrillas a la iglesia abacial (2007: 26-39). ALONSO ABAD,
pital del Rey a principios de la tercera década del siglo (Ibidem, 55 notas 2007: 166-168 y 215, enmarca la construcción de la cabecera y tran-
2I a 23), e incluso la presencia de elementos figurados en las claves de septo ca.II85-I2I5 y el remate de toda la obra en 1279; y finalmente
las trompas de las capillas laterales o en las ménsulas del cimborrio y ABELLAVILLAR, 2008: 45, 56 y 61, apunta que debió comenzar a cons-
primeros tramos de las naves laterales (Ibidem, 56 nota 26); para este truirse en II90-I200, estando muy avanzada para la muerte del monarca
mismo investigador, las alusiones en la documentación del cenobio y castellano (1214).
crónicas de la época tanto a la participación de los fundadores en las 2551 En Bujedo, por ejemplo, se detecta su influencia en la segunda cam-
obras del monasterio como las propias donaciones ad opus (Ibidem, 54 paña de la iglesia, datada entre 1230 y 1250 (VALLE PÉREZ, 1986: 88-
notas 13 a 15) no se refieren a la iglesia que hoy vemos, sino que las 89); en Villamayor de los Montes es más tardía, ya que su templo se inicia
construcciones más antiguas corresponden al conjunto ubicado en torno ca. 1250 (CARDERO LOSADA, 1994: 134-135; VALENTÍN DE LA CRUZ,
a Claustrillas (Ibidem, 54 nota 12; sobre este recinto, especialmente 2003: I I I - I I 2 ; HERNANDO GARRIDO, 2006: 118); en Bonaval, a par-
sobre la Capilla de la Asunción, situada en el tercer cuarto del XIII en lo tir del segundo tercio del XIII (BAU FORN, 1999: 411); Piedra, no antes
que fue cabecera de la primitiva iglesia monástica, vid. en último tér- del primer cuarto de siglo (MARTÍNEZ BUÉNAGA, 1998: 333); etc.
mino, RUIZ SOUZA, 2000: I, 407-422). Vid. del mismo autor, 2005: La introducción de pilares con dobles columnas en el presbiterio se
2 5 5 2
43-45, en donde reafirma que la iglesia se iniciaría después de 1214, ha fechado a finales del XII, mientras que en las naves ya dentro del pri-
tras la muerte de Alfonso VIII, tal vez ca.I220, y se concluiría en 1279; mer cuarto del XIII (MUÑOZ PÁRRAGA, 1987: 105-107 y 176-178;
le sigue CASAS CASTELLS, 2005: 225 y 227. Otros, sin embargo, llevan sobre los grupos de tres columnas del transepto, vid. nota 2540). En
su comienzo unos años antes: por ejemplo, LAMPÉREZ (1908-1909: 55, Bujedo de Candepajares los encontramos en torno a 1200. (LÓPEZ DE
429 y 432) sitúa la cabecera entre 1180 y 1215; ANTÓN (1942: 182) GUEREÑO, 1997: I, 182-183), y en Tuesta (LÓPEZ DE OCÁRIZ, 1986:
y ARA GIL (1986: 27), entre 1199 y 1214; KARGE (1995: 164-166; 8; GÓMEZ, 1996: 75-77) y Vallejo de Mena (RODRÍGUEZ-ESCUDERO,
1999) fecha la construcción de la abacial, "en lo esencial", entre 1206 1986: 75) en la primera mitad del XIII.
y 1220, basándose en la donación en 28 de junio de 1203 de Alfonso Iniciada en tiempos del obispo Arderico o Enrico (II84-I207),
2 5 5 3
VIII al monasterio de una renta anual de 300 mrs en las salinas de poco después de 1190, ARA GIL, 1992 (2): 17-18 la cree terminada
Atienza para su construcción (sin embargo, este documento —pub. por hacia I230, aunque tal vez haya que retrasarlo unos años más.
LIZOAIN GARRIDO, 1985: 120-122-, no se refiere a Las Huelgas, sino De la primera mitad del XIII (MARTÍNEZ, 1989: 74).
2 5 5 4
a Cíteaux, como ya muy bien había indicado RODRÍGUEZ LÓPEZ, 1907: 2555 El de la catedral de Zamora ha sido considerado la primera reali-
I, 55 y D'EMILIO, 2005: 221-222; donación que volverá a repetir en su zación del grupo, y aunque se ha venido fechando en el tercer cuarto del
testamento de 8 de diciembre de 1214 -GONZÁLEZ, 1960: III, 341- XII (RAMOS DE CASTRO, 1977: II9-I20; idem, 1982: I I 4 - I I 5 ) , debe
347, en concreto 346; repite el error de Karge, ALONSO ABAD, 2007: 99 ser posterior a la consagración de 1174 (BANGOTORVISO, 1994: 152).
y 100), la concesión de un prado y un heredad de Solarzal al maestro El resto se han datado dentro del primer cuarto del XIII: para Toro,
Ricardo en 9 de julio de I203 por sus trabajos en el monasterio (pub. BANGO, 1994: 155-156; para Salamanca, SÁNCHEZ SÁNCHEZ, 1991:
por LIZOAIN GARRIDO, 1985: 122-123) y la mención que hace Fer- 53-57; CASASECA CASASECA, 1993: 15; RODRÍGUEZ G. DE CEBALLOS,
nando III en 21 de diciembre de 1219 a que Alfonso VIII y Leonor 1994: 149-150; BERRIOCHOA SÁNCHEZ-MORENO, V, 1994: 262; o
habían fundado, edificado y acabado el monasterio, donde además él fue BANGOTORVISO, 1994: 195. Para Irache, BIURRÚNYSOTIL, 1936: 227,
armado caballero ante el altar de Sancta Maria Regalis (pub. por LIZOAIN 229, 291; MARTÍNEZ ÁLAVA, 2007: 201-206 y 214; y para Armentia,
GARRIDO, 1985: 226-228), que el investigador alemán identifica con el AZCÁRATE, 1984: 15-16.
altar mayor de la iglesia que vemos; SÁNCHEZ AMEIJEIRAS (1998: 78) AUBERT, 1947: I, 72 y 100-104; EYDOUX, 1958: 66 y 99.
2 5 5 6
sigue a KARGE y fecha los comienzos de la iglesia actual en 1206; La noticia aparece escrita en las confirmaciones de un privilegio de
2 5 5 7
HERRERO MARCOS, 1999: 15 y HERNANDO GARRIDO, 2006: 100, en Alfonso X firmado en Medina de Rioseco el 4 de julio de 1255 trans-
el primer tercio y primer cuarto del XIII, respectivamente. Recientemente, crito por el Cartulario (fols.250v-25Iv; pub. el regesto con esta nota FER-
D'EMILIO, 2005: 224, sitúa los comienzos de la construcción en la NÁNDEZ, 1972: 412), aunque sin referir el año exacto. También se hacen
década de los 90 del siglo XII de manos de Ricardo. También PALOMO eco de ello, CRESPO, HERRÁN y PUENTE, 2006: 81 y 151; y ARA GIL,
FERNÁNDEZ y RUIZ SOUZA adjudican a Ricardo el papel de tracista del 2009: I I . Por su parte, GRANDE MARTÍN, 1972: 301, apunta que apa-
templo, el cual se comenzaría a construir, según ellos, en vida de Alfonso rece este obispo "como oficiante en la consagración del altar de San Juan
VIII, estando muy avanzadas las obras (cabecera completa, transepto y en el monasterio cisterciense de Matallana en I254", sin indicar la fuente
esqueleto de las naves, algunas bóvedas de las laterales....) en 1214; inte- de la que toma el dato.
FUNDACIONES MASCULINAS • 413
Sancti Joannis Baptiste, a domino Benedicto, Durante el siglo XV no parece que se lleven a cabo
Venerabili episcopo abulenso, in quo reliquiae obras de envergadura en el templo monástico, ya que úni-
Praedicti Baptistae, sanctorum apostolorum camente tenemos noticias acerca de sus retablos, ornamen-
Simonis et Mathaei, Ligni Crucis salutiferae, tos y sepulturas.
Petrae Mensae domini, Laurentii martyris, Poco antes de morir, Lope de Oña (1393-1443)
Mancii martyris, Chrysanthi et Dariae martyrum, encargó la realización de un retablo para el altar mayor, man-
Agnetis virginis, honorifice positae conservantur, dando retratarse en el lado de la Epístola, con su cogulla y baculo
Ipsumque pro patrocinio vendicantes abbacial, junto a San Andrés, patrón y abogado suyo. Otra de
in signum suae praesentiae sanctitatis . 2558
las escenas que estaban representadas era la de María hilando
A pesar de la imprecisión del término "consagración" con el Niño, motivo de especial cariño para el monasterio,
en la Edad Media para determinar de forma precisa del ya que en él se conservaba, según la tradición, la sacrantissima
estado de la construcción de un templo , parece induda- 2559 Reliquia de la preciossissima madeja de hilo que hilaron los virginales dedos
ble que por estas fechas y gracias al apoyo real, la obra de de aquella soberana Reyna de el Cielo. L a i n s c r i p c i ó n del b a s a -
la iglesia avanzaba a buen ritmo. mento indicaba que a él se debía su ejecución: Este Retablo
La siguiente noticia que tenemos referente a la iglesia mando facer Don Lope de Oña abbad de este monasterio, e fifose el año
es que fue dedicada el 23 de abril —no se sabe de qué año— de el Señor de mill y quatrocientos y quarenta y tres " . C o n m o t i v o
2 563
, día d e S a n Jorge mártir, y en este dia esta puesta esta fiesta de su d e la r u i n a del c i m b o r r i o , el Retablo Riquissimo y virtuossissimo,
dedicacion en los chalendarios de los libros antiguos deste monasterio y en en que ella [la V i r g e n M a r í a ] estaba de bulto compitiendo en hermo-
el psalterio y lectionario dominical antiguo de mano escrito en pergamino, sura y gracia con las pinturas de ella misma que en el mismo retablo esta-
uso de torres y collectaneo . Antes de acabar el siglo debe darse
2560
ban, quedó prácticamente destrozado . 2564
2560Tumbo, fols.79v y 80v-8Ir; también en el Cartulario, fol.250r. Erró- CRESPO, HERRÁN y PUENTE, 2 0 0 6 : 6 2 ) . MORALES, 1 7 6 5 : 1 9 4 - 1 9 5
neamente SENRA, 2002 (2): 487, indica que "El día 23 de abril del destacó ésta entre todas las reliquias que guardaba el monasterio: "y entre
mismo año de 1235, día de San Jorge, se producía una primera consa- ellas una que si como es insigne, fuese cierta, era estremadamente pre-
gración". Las fuentes son muy claras en cuanto al desconocimiento del ciosa: es una madegita de hilo y seda cruda, que dicen fue hilada y tor-
año exacto de consagración del templo: ...quedabamos pues en el año de mill y cida por mano de la Sacratisima Virgen Maria nuestra Señora. No tienen
docientos y treinta y cinco y deciamos que habiendo muerto la Reyna doña Beatriz, fun- mas testimonio que la tradicion, y tambien que en el Retablo, que es
dadora de los principios desta yglesia, comenfo luego a proseguir su edificio la Reyna doña antiguo, está a un lado Nuestra Señora torciendo con un uso de una
Berenguela su suegra y la perficiono aunque no se sabe en que año y la hifo consagrar a mazorca, que le tiene una Doncella con diadema, y puede parecer se
veinte y tres de abril..." (Tumbo, f o l s . 8 0 v - 8 I r ) . pintó aquello por la Reliquia que alli habia".
2561 GONZÁLEZ, 1984: 201, dice que "todavía en la segunda mitad del 2 5 6 4 Tumbo, fol. I I 0 v (cit. p o r YÁÑEZ ÑEIRA, 1 9 7 4 : 3 6 1 ) .
XIII estaban sin hacer los dos últimos tramos de la bóveda", aunque no
sabemos de qué fuente ha extraído el dato.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
4I4
• También se le atribuyó el retablo de la capilla de San en las semejanzas estilísticas que presentaba con el refecto-
M a r t í n : y aun pienso que si descubriesemos el pedestal que cubre rio: y quando veo lo mucho que se parece la obra de el edificio de el claus-
la ara de el altar de San Martin obispo, y le leyesemos hallaría- tro vajo que esta pegado a la yglesia, a la obra de el Refetorio y de sus
mos que el lo habia mandado hacer y que era suyo el Retrato que ventanas y a la portada de el, me persuado a que este abbad Don garcia
en el pie de el esta pegado con San Juan Bautista .
2 5 6 5
de villanueba hi¡o este claustro vajo que llamamos Reglar . D e ser
2570
torio que al presente tenemos. E n el croquis dieciochesco por lo cual no debemos descartar la posibilidad de que el
aparecen dibujados contrafuertes en sus cuatro ángu- proceso constructivo de las galerías claustrales fuese muy
los, lo cual indica que cuando esta dependencia se lento y que gran parte de sus arquerías se realizase ya bien
levanta lo hace como un espacio independiente y ais- entrado el siglo XV, presentando lógicamente unas formas
lado . Se podría pensar entonces que hasta media-
2568
muy avanzadas y en consonancia con las que a mediados
dos de la decimoquinta centuria no contó el de dicha centuria se remoza el refectorio . 2572
claustro mediante arcaduces de plomo y colocación recibió enterramiento en el interior del templo . 2574
frente al refectorio de una fuente con una taza de Desde entonces no tenemos constancia documental
piedra de grandes proporciones: ... y traxo encañada la de que se realizasen intervenciones de entidad en el con-
fuente asta dentro del monasterio (que entonces se iba por agua junto monástico. Las únicas noticias que tenemos son las
a su nacimiento) y la traxo al claustro Reglar como agora la del enterramiento en el templo de dos de los abades comen-
gomamos en frente de el Refetorio y puso la grandiossa y tan datarios:
celebrada pila en que al presente cae el agua...
• En I 5 0 6 moría García Laso de Mendoza ( I 4 7 6 -
Pero además, el redactor del Tumbo atribuye a este I 5 0 6 ) , siendo enterrado en mitad del crucero junto a la
mismo abad la construcción del claustro reglar basándose grada de el presbiterio, en frente de la capilla mayor debajo de
Tumbo, fols. 93v y I I I r . (cit. por YÁÑEZ NEIRA, I974 (I): 397;
2 5 6 5 se conservaron, aunque transformados, la puerta de acceso con el claus-
idem, I974 (3): 85-86; y CRESPO, HERRÁN y PUENTE, 2006: 62). tro y el pasaplatos de la cocina (VALLE PÉREZ, I982: I, 78).
2566 Más abajo hablaremos de su sepultura. Tumbo, fol.93v.
2 5 7 0
2569 ANTÓN no estaba seguro de si se trataba de un "refectorio nuevo trales, vid. la monografía de Valbuena.
o reforma del viejo" (I942: 323); por su parte, CRESPO, HERRÁN y Tumbo, fol.93v-94r (cit. por YÁÑEZ NEIRA, I974: 397).
2 5 7 3
PUENTE, 2006: 97, creen que debió de tratarse únicamente de repara- Ibid., fol.93v. Sobre el lugar de enterramiento de los abades cister-
2 5 7 4
ciones, dado que los restos conservados lo desmienten. En Sobrado, por cienses, vid. AUBERT, I947: I, 33I-332 y 349; DABROWSKA, 2000: 225-
ejemplo, a finales del siglo XV fue reformado casi en su totalidad, pero 228.
FUNDACIONES MASCULINAS • 415
el cimborio. Sobre su sepultura se colocó una lapida de Et placet mihi et mando quod idem abbas et successores sui et
pifarra negra y alrededor una orla de alabastro en la q u e se monachi tam presentes quam futuri omnia que supra dicta sunt
leía esta inscripción: Aqui iace sepultado el Señor D. Gar- iure hereditario in perpetuum habeant et irrevocabiliter possideant.
cia Laso de Mendoza hijo del Ilustre y mui Magnifico Señor D. Et recipio sub custodia et protectione atque defensione et in domi-
Diego Hurtado de Mendoza Duque del Infantado, Abad que nio meo monasterium de mataplana cum omnibus rebus suis tam
fue de la Abadia de Santillanay de este Monasterio de Mata- mobilibus quam inmobilibus et de cetero sit de omnibus Regibus
llana treinta años. Fallecio a dos dias del mes de Diciembre año successiribus meis et quos nullius de genere Telli Petri et uxoreis
del Señor de 1506 años . Fue destruida cuando la
2575 eius Guntrude possit ibi accipere prandium nec servitium nec
ruina del cimborrio. equum mulum nec aliquod donum nec inquietare nec perturbare
• Francisco Enríquez, muerto ca. 1510, fue enterrado monasterium nec per violentiam aut superbiam aliquid inde acci-
j u n t o al anterior b a j o u n a lapida de pifarra negra, y con pere nec de grangiis nec cellariis seu de ganatis vel de omnibus
un escudo en que se veen dos castillos y un leon, que son las rebus suis aliquid inde abstrahere vel accipere aut Abbati vel
armas de los Enrriquez Almirantes de Castilla . 2576
monachis vel conversis aliquem in honorem vel iniuriam ver per-
cussionem facere. Concedo itaque et confirmo ut ematis de propiis
denariis vel de eleemosinis de convicinis aut definibus eorum tam
de realengo quam de benefactura et infantatico viginti iugarias
terrae ad anni vicem et trecentas aranzatas vinearum in monas-
4. APÉNDICES terii termino iure hereditario habendas et possidendas.
Apéndice documental Et ob maiorem gratiam vobis faciendam mandando precipio et
precipiendo mando quod nullus rex aut infans sive regina vel
Documento 1
infantidda petat vel extorqueat de vestro vel a vestris aliquod
[1185], diciembre. Burgos. donum vel servitium. Et hanc donationem et elemosinam ne quis
Alfonso VIII confirma la fundación y dotación del heredum Telli Petri et uxoris eius Guntrude autfiliorum eorum
monasterio de Matallana. vel aliquis alius possit infringere vel diminuere vel aliquo modo
inquietare aut aliquid de omnibus supradictis ab eis postulare
Manrique, 1642-1659: III, 12-13 (con fecha 1175).
quasi iure hereditario. Et si presumpserit iram Dei omnipotentis
In Dei nomine, amen. Regali siquidem convenit Maiestati bene et plenarie incurrat et cum Iuda Domini traditore poenas patiatur
fideliter sibi servientes donis regalibus ditare. Ego Aldephonsus eternas et insuper regie parti mille marapetinos de auro in cauto
Dei gratia rex Castellae et Toleti una cum uxore mea Aleonor persolvat et damnum quod eis intulerit duplicatum restituat. Facta
regina concedo tibi Tello Petri et uxori tue Guntrude etfiliis ves- charta Burgis, era millesima duecentesima decimatertia, mense
tris ipsam Mataplanam dari Deo et beate Marie et domui de decembri, regnante me rege Alphonso in Castella et Toleto, qui
Crista Cisterciensis Ordinis et domino Roberto primo abbati hanc chartam mea manu propria roboro et confirmo
Mataplane et successoribus suis et monachis habitantibus ibi tam
presentibus quam futuris secundum regulam sancti Benedicti
viventibus et confirmo monasterium de Mataplana eiusdem Documento 2
monasterii abbati et conventipresenti etfuturo in perpetuum vali- [1185], diciembre. Burgos.
turum. Concedo itauqe et confirmo domino Roberto primo abbati Tello Pérez, con su mujer Guntroda y sus hijos, con-
Mataplane et successoribus suis ipsum monasterium Mataplane firman la donación del lugar de Matallana y conceden la
quod Tellus Petri cum uxore sua Guntrude etfiliis suis cum con-
granja de Sandrones a Guillermo, abad de La Crete y a
silio et mandato meo vobis dederunt cum omnibus directuris et
Roberto, abad de Matallana.
pertinentiis suis, cum terminis etfrontariis, cum ingressibus et
egressibus, cum domibus et solariis, cum cultis et eremis, cum Manrique, 1642-1659: III, 13 (con fecha 1175).
terris et aquis, cum hortis et vineis, cum arboribusfructuosis et Ego Tellus Petri e uxor mea Guntruda laudantibus filiis et filia-
infructuosis, cum rivo que venit de Villalba, etc. cum molendinis, bus nostris, Alfonso Telli, Garsia Telli, et tello Telli et Suero Telli
pressis et poscariis, cum montibus, collibus et vallibus ex utraque et Tarasia Telli donamus et concedimus Deo et Beate Marie et
parte monasterii, cumfontibus qui sunt supra monasterium in via domui de Crista et Domno Roberto primo abbati de Mataplana
inferiori versus Villam albam, etc. et sucessoribus eius et monachis tam presentibus quam futuris
2 5 7 5Tumbo, fol.97r. (cit. p o r YÁÑEZ ÑEIRA, 1 9 7 4 : 3 3 8 ) . T a m b i é n en Zorita en la Orden de Calatrava de la Camara de S.M. y su chronista maior
Epitafios y memorias que se hallan en los sepulcros i en las capillas de muchos ilustres (B.R.A.H., Col. Salazar y Castro, D-I7, fol. 6r).
personajes de España, recogidos por Don Luis de Salazar y Castro Comendador de 2 5 7 6 Tumbo, 97v. (cit. p o r YÁÑEZ NEIRA, 1 9 7 4 : 3 3 9 ) .
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
4I6
secundum Ordinem Cisterciensem viventibus locum predictum sandrones como la habían recibido del Rey don alonso octavo el año
Mataplane cum omnibus pertinentiis suis cum ecclesiis et agris, 1173 a 28 de henero y dicen que pues el Rey se la habia dado
cum omnibus fontibus qui sunt ex utraque parte monasterii, cum para que la diesen a este monasterio, se la dan al dicho monaste-
puteis et aliis aquis, cum pratis, hortis, cum vineis et montibus, rio con sus tierras, terminos, segun lo a el demarcado y amojo-
cum collibus et vallibus, quae sunt ex utraque parte prope monas- nado, y para que ninguno de sus hijos o herederos pueda jamas ir
terium et cum grangia de Sandrones et cum omnibus quae perti- contra esta carta de donacion, dice que todo lo susodicho pone en
nent ad ea. Et insuper in manu Domini Alphonsi Regis Castellae manos del mismo Rey de quien lo Recibio y a cuya costa y en
et Toleti cuius dono et gratia prenominata abbatia fundata est et cuyo nombre habia sido edificado este dicho monasterio y abbadia,
in manu omnium regum successorum eius, reponimus et com- para que su magestad y los Reyes sus succesores tengan este monas-
mendamus eam ut ipse quasi suam defendat et tueatur ab omni- terio por patronazgo Real y como suyo proprio le augmenten y
bus ut sit munita et defensa sicuti in privilegio Illustrissimi regis amparen. Y en el mismo año 1185 el mismo dia habiendo hecho
Aldephonsi continetur. Facta charta apud Burgos sub era milles- los dichos señores la dicha donacion a este monasterio dentro de el
sima duecentessima tertiadecima, mense decembri, regnante rege estando presentes Vvillemo que a la sa¡on era Abbad del monas-
Aldephonso in Castella et Toleto. Huius rei testes et confirmato- terio de crista (de donde habían venido don Roberto primer abbad
res sunt Frater Vvillelmus, tunc temporis abbas de Crista et de matallana y doce monges a fundar este de matallana) y abia
Robertus abbas predicti loci de Mataplana et ego Tellus et Domna venido a visitar este monasterio, y estando tambien presente el
Guntruda ipsis manibus propiis nostris roboramus et confirma- dicho don Roberto primer abbad de matallana y todos los monges
mus deste monasterio admitieron y confirmaron esta dicha donacion
Roberto como abbad deste monasterio, y Vvillelmo como superior
Documento 3 deste monasterio por ser filiacion de el de crista cuyo Abbad era
el. Y el mismo dia, mes y año dentro deste monasterio el Rey don
1185. Matallana. Alonso octavo, nuestro fundador con su muger doña leonor, por
Breve relación de la donación que hicieron Tello si y sus hijos y sus succesores, con consejo y Ruegos del dicho don
Pérez, con su mujer Guntroda y sus hijos al monasterio de tello perez y su muger doña guntroda y de sus hijos, admitio debajo
Matallana del lugar del mismo nombre y la granja de San- de su protection y Real patronazgo y de su amparo la dicha abba-
drones, y de la toma de protección por parte de Alfonso dia de matallana y la dicha granja de sandrones y todo lo que este
VIII del citado monasterio. monasterio de alli adelante adquiriese, y prometio de tenerlo siem-
Tumbo, fols. I65v-I66r. pre como patronazgo Real y que como tal y como propria posesion
Real miraria por el, y lo defenderia y ampararia, etc.
Año 1185 Don tello perez y su muger doña guntruda y sus
hijos hicieron donacion a este monasterio y a su primer Abbad
don Roberto y a los monges que alli viviesen segun el orden cis-
terciense, a todos estos lo conceden y al monasterio de Crista y lo Abadologio
que conceden es este dicho sitio de matallana con sus pertinencias, Roberto: I I 8 5 . 2577
labradios, prados, huertas, viñas, montes, etc., para que alli se edi- Isidro: 1198, ZZ99 . 2578
ficase una abbadia del orden de cister, mas les dan la granja de Gómez: 1202, 1203, 1206, I 2 I 3 2579 .
2 5 7 7 Primer abad del monasterio, no se conservan más instrumentos de que las fechas por él elegidas del comienzo y fin del mandato respon-
su m a n d a t o que los fundacionales. Según el Tumbo, como santo esta puesto en den a "un cómputo aproximado", siguiendo los datos ofrecidos por el
el martyrologio antiguo de este monasterio a diez y nuebe de abril, que es en el que el santo Tumbo.
abbad salio de esta vida, donde dice: obiit domnus Robertus bonae memoriae primus abbas 2579 Según el Tumbo, aparecía ya mencionado el año 1202, cuando se
Mataplana: de la misma manera esta puesto en los calendarios de los libros antiguos deste hacen al monasterio cinco ventas de haciendas en Sandrones, y en 1203,
monasterio, como es en un psalterio viejo, y en un lectionario dominical viejo de perga- en otras siete escrituras de venta de haciendas en el mismo lugar y por
mino (fols.74r-75v). YÁÑEZ NEÍRA, 1974: 67; idem, 323-324, dando una compra a Pedro Martín, vecino de Toro, de unas casas con corrales
por válidas las falsificaciones de los documentos fundacionales fecha su a la puerta del mercado de dicha ciudad por 290 mrs (fol.76r; le sigue
abadiato entre I I 7 4 y I I 8 5 YÁÑEZ NEÍRA, 1974: 68; idem, 325, quien da el primer año como ini-
Según el Tumbo procedía de monasterio de La Crete y aparecía
2 5 7 8 cio de su abadiato). El 8 de septiembre de 1206 el abad de Matallana y
documentado en dos ocasiones: en una donación de I I 9 8 hecha por el maestro Lanfranco, canónigo, con ocasión del término de una disputa
Guillermo, su sobrino "el ferrero" y su mujer María, de una casa en entre el cabildo palentino y el obispo, proceden al reparto de beneficios
Palacios en la calle de Mediavilla, y el 10 de diciembre de 1199 cuando entre la mitra y la mesa capitular y asignan rentas a los integrantes de ésta
recibe de Alfonso VIII un privilegio por el cual volvía a tomarle bajo (ABAJO MARTÍN, T., 1 9 8 6 : Documentación de la catedral de Palencia (1035-
su protección (fols.75v-76r y 236v-237r). YÁÑEZ NEÍRA, 1974: 67; 1247), Palencia, 238-241) y en 1213 se lleva a cabo una estimación de
idem, 324, le sitúa como sucesor de Roberto, y coloca su mandato rentas del cabildo palentino mandada hacer por el abad de Matallana,
entre 1185 y 1202. N o obstante hay que señalar que este autor señala Gómez, y el maestro Lanfranco (ABAJO MARTÍN, 1986: 256-262).
FUNDACIONES MASCULINAS
• 415
Egidio: I223, 1230, I237, 1238, 1239, 1242, Juan Pérez: I 2 7 4 .2585
1243 . 2SÍ1
Simón: I 2 7 7 .
2586
2580 El 2I de septiembre de I 2 I 4 Alfonso VIII concede al abad Jordán dores que les había otorgado cuando todavía era infante (Tumbo, 240v y
todas las casas heredades y viñas y cuanto tenia en Valladolid, Simancas, 82r; Cartulario, fol. 250v; pub. por FERNÁNDEZ, I972: 409-4I0). Según
Montealegre, Castromonte, Urueña, Tordehumos, Medina de Rioseco y el Tumbo, el 4 de julio de ese mismo año, estando Alfonso X en Medina
Palacios, eximiéndoles de pago de tributos en esas villas (Tumbo, fols.76r de Rioseco concede un privilegio por el que confirma uno de su padre
y 237v; pub. por FERNÁNDEZ, I972: 403-404). El I2 de enero de I 2 I 6 de I220 (Tumbo, fols.82r, 239r y 244r); también les confirmará otros
Inocencio III le encarga que junto con el abad de Matallana presente privilegios de Alfonso VIII de I 2 I 4 y Fernando III de I220, I223 y
una citación al arzobispo y cabildo de Braga sobre el pleito del monarca I25I (Tumbo, fols.82r-v); compra Sancha Álvarez, hija del conde don
portugués con sus hermanas; el mismo pontífice emitirá otros docu- Álvaro y de sus hijos, y de fray Pedro Ruiz, una serie de bienes en Bel-
mento semejante al anterior el I0 de febrero del mismo año (MANSILLA, monte; y se documenta en una comisión de Alejandro IV al abad de
REÓYO, I955: docs.534 y 545, 565-566 y 57I respectivamente). El 6 Sahagún para que compeliese al concejo y vecinos de Villanueva de Val
de septiembre de I220, estando en Moral de la Reina, Fernando III con- de Esgueva a pagar al monasterio de los diezmos y otras rentas que les
firma al abad Jordán todos los privilegios concedidos por Alfonso VIII solían pagar, otorgando además una bula por la exentaba al monasterio
y le exenta del pago de portazgo (A.H.N., Clero, legajo 7.538, fols.247v- de la visita diocesana (Tumbo, fols.I9v y 82v). En I256 Don Juan dona
248v; pub. por FERNÁNDEZ, I972: 405-406 y GONZÁLEZ, I982: II, al monasterio 300 mrs. para reparar las tiendas que tenían en Valladolid
I5I-I53). El Tumbo sitúa bajo su abadiato la concesión de una bula por con la condición de que de lo que rentasen se empleasen 30 mrs en pes-
parte de Honorio III en I222, confirmando las posesiones y bienes de cado para los religiosos en cuaresma; también dio la granja de Villamu-
la abadía (fol.76r-78r). YÁÑEZ NEIRA, I974: 68; idem, I975: 325, lo riel con la condición de que se gastasen 20 mrs. para los enfermos y
coloca entre I 2 I 3 y I223. flacos (Tumbo, fols.82v-83r) y al año siguiente junto a su mujer e hijo
25SI En Valladolid, el I 4 de enero de I223, Fernando III acota y amo- renunciaron a la propiedad de un suelo en el término de Palacios en el
jona el término del monasterio (A.H.N., Clero, legajo 7.538, fols.248v- pago de una carbajosa que les había sido prestada por el abad Gil, y
249v; cit. por Tumbo, fols.78 y 237v; pub. por FERNÁNDEZ, I972: piden que de nuevo se la presten (Tumbo, fol.83r). El 22 de febrero de
406-407; y GONZÁLEZ, I982: II, 2 I 0 - 2 I I ) . Y en marzo de I237 inter- I260 se efectúa la donación de Rodrigo Gómez y Mayor Alfonso, hija
cambia con el monasterio de Gradefes una serie de fincas (BURÓN CAS- de Alfonso Téllez y Elvira Ruiz, de todo lo que poseen en Fuentes de
TRO, I998: 523-524, doc. 454). Ungrillos, a cambio de un aniversario anual por sus ánimas y las de sus
El Tumbo documenta su presencia en otras escrituras: donación del obispo padres, y en el día que se hiciera se dará una buena pitanza a los monjes
de Palencia, don Tello, de unos bienes en Fuentes de Ungrillos, el año de la renta de aquella heredad (A.H.N., Clero, legajo 7.542.). Y el 22 de
I230; venta a Lope y Urraca de ciertas heredades en San Cebrian de agosto de I262 encontramos la donación hecha por Martín Alfonso y
Cuenca, Población de Lanchares y Varbolena de Valdetoranza, por 2000 su mujer María Meléndez, al abad Isidro, de lo que tienen en Fuentes de
mrs en I232 (fol.79r); pleito con las Huelgas de Burgos en I238; dona- Ungrillos (traslado del 3 de agosto de I603: A.H.N., Clero, legajo
ción de Fernando Gutiérrez y su mujer Urraca González de todas las tie- 7.542; cit. por Tumbo, fol.83v). El Tumbo atribuye además a este abad un
rras y viñas que poseían en Belmonte de Campos, el año I239; y la venta privilegio de Alfonso X ( I 4 de mayo de I274) (fol.243r) y otro del
hecha por Pelayo, vecino de Toro, de diez alanzadas de viñas, en I242; infante don Sancho (I279) por el que exentaba de pagar ciertos tribu-
habiendo fallecido según el martirologio del monasterio en I243 tos a su aldea de Portillejo (fol.24Iv), si bien ninguno de los dos pudo
(fol.8Ir). YÁÑEZ NEIRA, I974: 68; idem, I975: 326-327, lo coloca ser dado a éste abad porque tanto en I268 como en I277 aparecen
entre I223 y I243. documentados otros prelados. YÁÑEZ NEIRA, I974: 68; idem, I975:
2582 Según el Tumbo solo se conoce el día de su muerte, I0 de diciem- 328-329, lo coloca entre I244-I285.
bre, y es tenido por santo en el martirologio (Tumbo, fol.8Iv). YÁÑEZ Aparece confirmando una donación que hicieron Berenguela Gon-
2 5 8 4
NEIRA, I974: 68; idem, I975: 327-328, lo sitúa en I243. zález y sus hijos al monasterio de Palazuelos el 24 de abril de dicho años
2583 Alfonso Téllez y su mujer María Ibáñez dan en I244 al abad Isi- (Col. Salazar y Castro, M-6I, fols.I29v-I30r).
dro el monte de Navatomada con el lugar de Foyos de Galindo y el Car- Confirma el préstamo que hizo el monasterio de Palazuelos a Gar-
2 5 8 5
menal (Tumbo, fols.8Iv y 24Iv; pub. por FERNÁNDEZ, I972: 409, si bien cía Gutiérrez, clérigo del deán de Palencia Juan Alfonso, de la casa de San
erróneamente lo fecha en I224). En junio de I249 se produce la venta Millán, el I 2 de mayo de ese año (A.H.N., Clero, carpeta 3.430, doc.
de Tello García, arcediano del Alcor y Martín, clérigo de Villacesmino, I6). N o aparece en otros abadologios.
de las heredades, vasallos y divisas que Diego Ruiz Calonge tenía en 2586 San Pedro de Gumiel, 3 de mayo. Aparece como testigo en una
Fuentes de Ungrillos por 5000 mrs, al abad don Isidro (traslado hecho venta del monasterio de Gumiel (AYALA, I995: 568-570). YÁÑEZ
el 2 de agosto de I603: A.H.N., Clero, legajo 7.542; cit. por Tumbo, NEIRA no lo cita en sus abadologios.
fol.8Iv). Según el Tumbo el 26 de septiembre de I250 Inocencio IV le El 27 de marzo de I285, donación de la casa y monte de Navillas,
2 5 8 7
concede una bula exentando al monasterio de pagar a los obispos subsi- hecha por Alfonso, hijo del infante don Alfonso de Molina, y su mujer
dio y vigésima (fols.I9v y 8Iv). En I25I, Fernando, prior comendador Teresa Pérez (copia del XVIII. A.H.N., Clero, legajo 7.538; pub. por
de la orden del Hospital de San Juan dio una serie de propiedades en FERNÁNDEZ, I972: 4I5-4I6; erróneamente el Tumbo, fols.84r y 244r lo
Verrueces. Da su conformidad en esta ocasión el abad de Valbuena fecha un año antes). Según el Tumbo el 3 de septiembre de I286, estando
(Tumbo, fol.8Iv). Ese mismo año, el día 8 de julio, Fernando III, su mujer Sancho IV en Valladolid otorgó un privilegio por el cual todos los gana-
Juana y sus tres hijos, Alfonso, Federico y Enrique, concedió un privile- dos del monasterio pueden pacer libremente por todo el reino, con tal
gio confirmando otro de Alfonso VIII de I 2 I 4 (Tumbo, fols.8Iv-82r y de que no hagan daño en viñas, mieses, huertas y prados de guadañas, y
238r). En I252 compra a Roy Gómez todos los vasallos, iglesias y juris- por el que los pastores tienen libertad para cortar leña y otros amplios
dicción de Fuentes de Ungrillos (fol.82r). En I255 Alfonso X confirma privilegios (fols.239v-240r). YÁÑEZNEIRA, I974: 68; idem, I975: 330,
al abad Isidro la propiedad de Altrín y exención de tributos a sus mora- apunta su abadiato entre I285 y I287.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID (II47-I5I5)
4I8 •
Martín: I 3 6 0 . 2592
septiembre de ese año Fernando IV confirmaba un privilegio de su padre abad de Matallana para que arriende la heredad de Villanueva (A.H.N.
(I285), en el cual concede libertad para no pagar ningún tributo, con- Clero, carpeta 3.44I-bis, doc. 2). N o aparece ni en el abadologio del
firmándolo de nuevo el I 0 de enero de I300 (fol.85r). En I303 se dirige Tumbo ni en los de YÁÑEZ NEIRA.
una queja al señor de Villalba por el daño que hacían sus vasallos en el Palencia, 30 de abril. Sobre los pagos de diezmos de Montealegre
2 5 9 3
Monte, mandando que no lo volviesen a hacer bajo graves penas (fols.85r (A.H.N., Clero, carpeta 3.4I7, doc. I). Al igual que el anterior prelado no
y 24Iv-242r). Dos años más tarde se produce un pleito con Villalba sobre se menciona su existencia en los abadologios del Tumbo y de Yáñez Neira.
quien había de llevar el agua de Fuenteungrillo (fol.85r). En I 3 I 4 Según el Tumbo sucedió en I 3 7 0 al abad García, y el I 3 de sep-
2 5 9 4
Alfonso, señor de Villalba confirmó unos privilegios de Tello Téllez, tiembre de I 3 7 I , Enrique II en Toro, confirma un privilegio de su padre
Alfonso VIII, el infante don Sancho (IV) y Fernando III que les mostró Alfonso XI; el 30 de abril del año siguiente este abad Juan sacó una
fray Domingo acerca del Monte y Fuentes de ungrillos para que nadie ejecutoria relativa a Montealegre y el I 0 de agosto de I379 Juan I con-
se atreva a cortar, pacer, rozar y sacar leña (fols.85r y 242r). En I 3 I 6 el cedió un privilegio en Burgos confirmando otros de sus antecesores
infante don Pedro, señor de Villalba y tutor de Alfonso XI, ordenó a sus sobre la libertad de pagar mula y vaso (fol.243v-244r), y el I 2 de agosto
vasallos que no hiciesen daño al Monte de Matallana (fol.242), repitién- el de su padre Enrique II y de sus antecesores (fols.86 y 244r). Añade
dolo en I 3 I 8 (fol.242v). Por último, el 23 de diciembre de I325 se efec- que En el lib.2. fol.22 se dice que este abbad donfray Juan defendio por pleyto los vasa-
túa la lectura de una carta de donación hecha por Alfonso Téllez y María llos que este monasterio tenia en fuensaldaña lugar cerca de Valladolid y saco sentencia
Ibáñez, del monte Navacavada y del lugar de Hoyos de Galindo, en pre- enfabor difinitiva dada por dos juezes puestos por el Rey don Juan el primero en el año
sencia de Domingo, abad, y Pedro, prior (A.H.N., Clero, legajo 7.538). de mill y trecientos y setenta y seis, se conoce claro que su autor se equivoco, porque el
Este mismo año y también en presencia del prior Pedro, el abad manda mismo dice que murio don henrique el segundo año de mill y trecientos y setenta y
autorizar los traslados de diversos privilegios sobre el Monte de Matallana nuebe y que le sucedio su hijo don Juan el primero (...) y es lo cierto que este abbad don
y la exención del tributo de mula y vaso (Tumbo, fols.85v y 242v; pub. fray Juan saco la dicha sentencia como el lo refiere el año de mill y trecientos y ochenta
por FERNÁNDEZ, I972: 42I). En torno a la segunda década del siglo XIV y seis (fol.86v). YÁÑEZ NEIRA, I974: 68; idem, I975: 33I, lo coloca
fray Domingo, abad de Matallana, por mandamiento e por poder que avemos de entre I 3 7 0 y I393.
don Diego, nuestro padre por essa misma gracia abbat de Valbuena, actúa en la Guillermo, presbítero cardenal y Francisco, obispo de Narbona,
2 5 9 5
demanda hecha por Gutierre, obispo de Toledo, sobre la visita y correc- ambos oficiales de cámara de Clemente VII, libraron en I393 al monas-
ción de Bonaval. El abad Diego de Valbuena llama al de Matallana nues- terio del pago del servicio común y derechos de las bulas que se expidie-
trofijo (A.H.N., Clero, carpeta 3.44I, doc. I3. Se trata de un documento ron cuando fue elegido abad don Lope, por haber informado éste de la
fragmentado, sin fecha, en cuyo reverso aparece escrito lo siguiente: Si a pobreza y escasa renta del monasterio (Tumbo, fols. 20r y 86v-87r). Entre
este Poder no le hubieran quitado lafirmay data, muchas cosas se podrian sacar, pero como I 3 9 4 y I 4 0 4 tiene lugar el pleito por los vasallos de Fuensaldaña
no esta autorizado no vale nada). YÁÑEZ NEIRA, I 9 7 4 : 68; idem, I 9 7 5 : 3 3 0 - (fol.87r), en I 4 0 0 otro contra la villa de Villalba y su señor y el cabildo
331, lo sitúa en I 2 9 5 - I 3 2 5 de Palencia sobre los diezmos de las tierras que poseía el monasterio en
Según el autor del abadologio del Tumbo, pienso que en su tiempo, año de
2 5 9 0 los términos de dicha villa (fol.87r). El 25 de mayo de I 4 0 4 unos veci-
I329, el 2 de diciembre, Alfonso XI concedió al monasterio un privile- nos de Villerías quisieron impedir al abad y a otros monjes que fuesen a
gio libertándole de pagar tributo (fol.85v). YÁÑEZ NEIRA, I974: 68; decir la misa dominical a su iglesia de Santa María de Sandrones, haciendo
idem, I975: 33I, lo sitúa en I 3 2 5 - I 3 3 2 (vid. nota siguiente). estos un requerimiento contra aquellos (fol.87r-v). Entre el 3 de junio y
2 5 9 1 El autor del Tumbo señala lo siguiente: sospecho que era ya abbad año de el 3 de febrero de I 4 0 8 aparece documentado en diversos documentos
1332, cuando el 26 de enero de dicho año Alfonso XI concedía en Valla- relativos al pleito con Villalba de los Alcores sobre Fuenteungrillo (inser-
dolid un privilegio para no pagar tributo, que ya había sido concedido tos en A.H.N., Clero, carpeta 3.4I7, doc. I0; cit. por Tumbo, fol.87). El
por Alfonso X, Sancho I V y Fernando I V (fols.85v-86r y 243r) y en 3 I 8 de abril de I 4 I 0 compra a Juan, Obispo de Segovia, un juro de 2000
de agosto de agosto de I 3 3 5 confirmaba todos los privilegios concedi- mrs situado en las tercias de Becerril y Villaumbrales, a cambio de la granja
dos por sus antecesores (fols.86r y 243v). Sin embargo añade que a la de Otea (Tumbo, fols.87v y I50r; pub. por FERNÁNDEZ, I972: 425). Los
m u e r t e del monarca ( I 3 5 0 ) dicese en el libro 2°'fol.10, que era abbad deste monas- días 5 y I 7 de junio de I 4 I I aparece mencionado en una carta de poder
terio a esta sapn el santo don fray Benito si bien no muestra escritura de donde conste, y traslado del compromiso y sentencia de los jueces árbitros del término
pero por la fee que con su autor tengo, y porque yo no hallo escritura que lo contradiga, de Fuentes de Ungrillos con el monasterio y Villalba (A.H.N., Clero,
siguiendo su parecer digo que poco despues debio de morir y le sucedio el ya nombrado don legajo 7.542; cit. por Tumbo, fol.87v; A.H.P.V, Protocolos, legajo 9962,
FUNDACIONES MASCULINAS • 419
fol.I46v). En 1412 Juan II confirmó el juro de aquellos 2000 mrs una viña, y dio en arrendamiento perpetuo el término de Sandrones a
(fols.20r y 88r). Al año siguiente, estando el rey en Valladolid y con con- Fernando de Velasco, señor de Villerías, por 35 cargas de pan mediado
sentimiento de sus tutores (su madre y el rey de Aragón) el 10 de mayo puestas en el monasterio (Tumbo, fol.89r).
concedió un privilegio a petición del abad por el que confirmaba las liber- Entre el 27 de abril y el 13 de octubre de 1443 encontramos diversos
tades otorgadas por los anteriores monarcas (fol.244). El mismo día con- documentos relacionados con el pleito contra Valbuena sobre la visita-
cedió otro para no pagar tributo, pecho ni servicio a los reyes ción y corrección que pretendía sobre este monasterio (A.H.N., Clero,
(fols.244v-245r). El 14 de septiembre de 1419 y el 17 de enero del año legajo 7659), y ese mismo año Eugenio IV concedió una bula en la que
siguiente los volvió a confirmar (fol.245r). En 1419 había comprado una daba comisión al obispo de Palencia, y a los abades de Sahagún y de la
viña en Fuensaldaña, que fue confirmada por Juan II un año después, y iglesia colegial de Valladolid para ser jueces conservadores del monaste-
en 1423 Salvador Rodríguez, vecino de Villalba donó al monasterio y a rio (fol.89r). También este año hubo un pleito por Fuentes de Ungrillos,
su abad Lope de Oña un prado con su madera en el valle de Monteale- que siguió al año siguiente (1444), y otros con Villalba (fol.89r-v). El
gre y otros bienes en Valoria (fol.88). 17 de junio de 1444 Eugenio IV liberaba a Matallana y a sus "herma-
En 1424 se producen varias compras: Montealegre, 20 de junio, com- nas" de su jurisdicción y encargaba la visitación de los mismos a Sobrado
pra a Juan Sánchez y a su mujer Marina Díaz dos viñas en el término de (A.H.N., Clero Carpeta 363, doc. 4, en traslado notarial de 1445,
Montealegre por 1380 mrs. (A.H.N., Clero, carpeta 3.417, doc. 3); febrero, 23. Valladolid). YÁÑEZ NEÍRA, 1974: 68; idem, 1975: 331-
Santa María de Matallana, 17 de noviembre, compra a Martín Gutiérrez 333, coloca su abadiato entre 1393 y 1444.
Herrero una viña en el término de Montealegre por 350 mrs. (A.H.N., I de junio de I445. Documento perteneciente al pleito sobre Fuen-
2 5 9 6
Clero, carpeta 3.417, doc. 4); Sta. María de Matallana, 18 de diciembre, tes de Ungrillos (A.H.N., Clero, legajo 7.545). El 10 de junio de ese año
compra a Alfonso Fernández Cabezón dos alanzadas de viñas en el tér- da carta de poder para que fray Alfonso de Dueñas pueda entablar plei-
mino de Montealegre por 1050 mrs. (A.H.N., Clero, carpeta 3.417, tos. Son testigos además del abad y del susodicho: Toribio de Capillas,
doc. 5); todos ellos cit. por Tumbo, fol.88. El 19 de diciembre de 1425 prior; Pedro de Meneses, Juan de Fuentepudia y Juan de Meneses
se traslada en Montealegre una cláusula del testamento de Juan Gutié- (inserto en A.H.N., Clero, carpeta 3.417, doc. 10; cit. por Tumbo,
rrez Ferrero, vecino de Montealegre, para que se rece un responso un fol.90r). También en ese momento dio los vasallos de Fuensaldaña a
día del año (A.H.N., Clero, legajo 7.542). Alonso Pérez de Vivero, contador mayor de Juan II a cambio de 10000
En 1426 amojonó el término de Matallana a la parte de Villerías. Al mrs de juro perpetuo; ese mismo año, Juan II estando en El Espinar
año siguiente fray Toribio de Capillas, soprior, con poder del abad y (Segovia) concedió un privilegio por el que aprueba esa compra; también
monasterio hizo un compromiso con Valladolid, y Juan II estando en fray Toribio, monje y sacristán del convento, con poder del abad, hizo
Toro confirmaba de nuevo el juro de 2000 mrs. En 1432 hizo un true- apeo de los bienes que tenía el monasterio en Palazuelos de Vedija; El
que de una bodega por otra en Piña de Val de Esgueva. En 1438 recibe abad compro la tierra de Piña I y apeó las heredades y viñas de Villa-
una bula de Enrique IV por la que mandaba so pena de excomunión que muriel (Tumbo, fol.90r). El 21 y 22 de septiembre de 1446 don Rodrigo,
ninguna persona de qualquier estado, condicion, o dignidad que sea, presuma de se lla- prior de Santa María la Mayor de Valladolid, comisionado por el Papa
mar protector, ni defensor ni commendatario de este monasterio, sino tan solamente lo sea Eugenio para informarse acerca de la utilidad del contrato con el con-
el Rey de Castlla, cometiendo al obispo de Palencia y al abad de San Benito cejo de Villanueva, lo aprueba (A.H.N., Clero, carpeta 3.417, doc. 9). El
de Sahagún la ejecución de la pena si fuera necesario (Tumbo, fols.20v y 2 I de diciembre le donaron una tierra sita en el término del monasterio
88v). (A.H.N., Clero, legajo 7.538). También hubo un pleito sobre los lími-
El 22 de mayo de 1439, en el monasterio de San Pedro de la Espina, el tes de la granja de Sandrones entre Villerías y Meneses, y los señores de
abad de este monasterio otorga una carta de poder para vender el sex- ambas villas (Tumbo, fol.90v).
millo Meneses al abad don Lope de Matallana por 13500 mrs. para Juan II confirmó el 12 de abril de 1448, estando en Tordesillas, la venta
hacer frente a unas deudas (A.H.N., Clero, carpeta 3.417, doc. 6; tam- que hizo el abad del lugar, vasallos, jurisdicción y otros bienes que tenía
bién en traslado en legajo 7.542; cit. por Tumbo, fol.88v); Villanueva, 23 en Piña de Esgueva a Alonso Pérez de Vivero (fol.90v). El 10 de agosto,
de marzo, contrato con el Concejo de Villanueva sobre la granja de Por- donación hecha a favor de García de Villanueva, abad de este monaste-
tillejo (inserto en A.H.N., Clero, carpeta 3.417, doc. 7); Sta. M de a rio, por el licenciado Juan González de Valdenebro, de ciertas heredades
Matallana, 10 de noviembre, contrato perpetuo y de la granja de Porti- en Fuentes de ungrillos, el I 0 de agosto de I448 (en provisión del rey
llejo a los vecinos y concejo de Villanueva de los Infantes, a cambio de don Felipe, dada en Medina del campo el 2I de junio de I603, para
sesenta cargas de pan, mitad pan y mitad cebada, anuales, estando pre- compulsarla: A.H.N., Clero, legajo 7.542).
sentes el abad Lope; Toribio, prior; García de Villanueva, cillerero; y los El 28 de marzo de 1449 en Aguilar de Campos Juan II confirmó la
monjes Juan de Capillas, Alfonso de Dueñas, Juan de Fuempudia, Juan renuncia que había hecho don Fadrique, almirante de Castilla, en favor
de Mirones, Juan de Carrión y García de Arroyuelo (inserto en A.H.N., del monasterio de 3000 mrs de juro perpetuo sobre la villa de Palacios
Clero, carpeta 3.4I7, doc. 7; cit. por Tumbo, fol.88v). el 8 de marzo de ese año (fol.9Ir)
En Florencia, el 24 de septiembre de 1440 Eugenio IV, a petición de Valladolid, 30 de noviembre de I453: Carta de amparo de Juan II con-
Lope de Oña, comisionó al prior de la iglesia colegial de Valladolid para tra Enrique de Acuña y sus vasallos, a pedimento de García de Villa-
investigar la venta del sexmillo de Meneses, aprobarla y autorizarla nueva de los Infantes, abad (A.H.N., Clero, legajo 7.543; pub. por
(Tumbo, fols.2Ir y 89r). Este mismo año, el papa concedió otra bula por FERNÁNDEZ, 1972: 430-432; cit. por Tumbo, fols.9Ir y 245).
la que da comisión al abad de Sandoval para juzgar sobre un pleito que 18 de febrero de I455: Foro perpetuo de las tierras y granja de Bel-
tenía Matallana con el de Nogales acerca de unos florines de Aragón monte que se aforó a don Pedro Sarmiento y al concejo de Belmonte, en
(fols.2Ir y 89r). 40 cargas de trigo cada año. Aparecen mencionados don Garcia, por la gra-
El 25 de noviembre de 1441 vende a Juan García, vecino de Fuempudia, cia de Dios y de la Santa Yglesia de Roma, abad; T o r i b i o de Capillas, prior;
de dos viñas en Villoria por 950 mrs. (A.H.N., Clero, legajo 7.542), y Alfonso de Dueñas, cillerero; Pedro de Meneses, cantor; Juan de Miro-
un año después compraba de Sancho Reinoso, hijo del señor de Valoria, nes, socantor; Alvaro, maestro de novicios; Juan de Meneses, sacristán;
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
420
Alfonso de Dueñas: 1471, 1472, I 4 7 3 . 2597 Francisco Enríquez: I 5 0 9 - I 5 I 0 2600 .
García Laso de Mendoza: 1476, 1480, 1489, 1492, Pedro de Santillana: I 5 I 0 - I 5 I I 2 6 0 1 .
1493, 1501, I 5 0 6 . 2598 Juan de Loaysa: I 5 I I - I 5 I 5 .
2602
Pedro de Castro; Bartolomé, camarero; Miguel de Villalba; Francisco de tro de novicios; Francisco de Palacios, enfermero; y los monjes Juan de
Palacios; Diego de Villalba y Miguel de Villanueva (A.H.N., Clero, legajo la Torre, Juan de Castrillo y Juan Salvador de Montealegre (A.H.N.,
7.542). El 20 de marzo, en un documento relativo a Fuentes de Ungri- Clero, carpeta 3.417, doc. 14).
llos, además del abad, aparecen Alonso, cillerero; y otros dos monjes, Según su sepultura, falleció en septiembre de 1469. YÁÑEZ ÑEIRA,
Juan de Mirones y Juan de Meneses (A.H.N., Clero, legajo 7.544). Enri- 1974: 68; idem, 1975: 334-336, sitúa su abadiato entre 1445 y 1469.
que IV, estando en Jaca el 30 de abril de 1455, confirmó los juros que Según el Tumbo aparece mencionado como abad en un pleito con-
2 5 9 7
había confirmado a su vez su padre en 1445 y en 1449 (Tumbo, fol.9Iv). tra Valdenebro de 18 de mayo de 1471 (fol.94v). El 9 de febrero de
Matallana, 31 de enero de 1456. Carta de poder extendida a Alfonso de 1472 se redacta la carta de venta de Hernando de Fuentes, vecino de
Dueñas, cillerero, para que actúe en nombre del monasterio en el pleito Villalba del Alcor, a don Alonso, abad, de una yugada y media de tierra
con Valdenebro. Son testigos: García de Villanueva, abad; Toribio de en Moralejo por 500 mrs (A.H.N., Clero, legajo 7.542). Y en Montea-
Capillas, prior; Juan de Capillas, soprior; Álvaro, maestro de novicios; legre, a 8 de octubre de ese mismo año, la carta de venta de Pedro Sán-
Pedro de Meneses; Juan de Meneses, cantor; Juan de Mirones, socantor; chez, vecino de Villalba, al abad Alonso, de una tierra en Fuentes de
Juan de Astorga; Miguel de Villalba; Bartolomé, camarero; Bartolomé ungrillos por 600 mrs. (A.H.N., Clero, legajo 7.542). El 25 de enero
de Palacios, sacristán; Pedro de Castro; Diego Solana; Juan de Villanueva; de 1473, en Medina de Rioseco, los jueces del Almirante dictaron auto
Pedro de Roa; Pedro de Castroverde (inserto en A.H.N., Clero, carpeta en el compromiso con Valdenebro (A.H.N., Clero, legajo 7.542; también
3.417, doc. II). Valladolid, 3 de febrero. Pleito con la villa de Valdene- inserto en A.H.N., Clero, carpeta 3.417, doc. II). YÁÑEZ ÑEIRA, 1974:
bro sobre el término de Fuentes. Aparecen nombrados García de Villa- 68; idem, I975: 336-336, colocan su mandato entre I469 y I476.
nueva de los Infantes, abad y Alfonso de Dueñas, cillerero. (A.H.N., Según el Tumbo, fue en 1476 cuando Enrique I V dio en enco-
2 5 9 8
Clero, carpeta 3.417, doc. II). Valladolid, 19 de junio. En otro docu- mienda el monasterio a este personaje. Como administrador perpetuo de
mento alusivo al pleito con Valdenebro aparece mencionado García de Matallana, recibió de los Reyes Católicos en 15 de mayo de 1480 una
Villasanta, criado del abad (inserto en A.H.N., Clero, carpeta 3.417, provisión para que los vecinos de Valdenebro respetasen los compro-
doc. II). Valladolid, 26 de julio. Aparecen nombrados García de Villa- misos que tenían desde I 4 5 7 con el monasterio, y un mes más tarde otra
nueva, abad y Alfonso de Dueñas, cillerero (inserto en A.H.N., Clero, para desembargar todos los juros pertenecientes al cenobio (Tumbo,
carpeta 3.4I7, doc. I I ) . El 24 de junio de I456, estando el rey en fol.96r.). Entre julio de I489 y I 3 de febrero de I493, aparece docu-
Medina del Campo, confirmó el juro real concedido por Enrique II, mentado en diversas escrituras, junto al prior Pedro de Gamarra (3 de
Juan I, Enrique III, la reina Catalina y el infante don Fernando, Juan II julio de 1489 y 12 de julio de 1492) y con Alonso de Tamariz, cille-
y él mismo (fols.9Iv-92r). rero; Alonso de San Cebrián; Alonso de Dueñas; Juan de Vierga; Bar-
Matallana, 21 de noviembre de 1457. Compromiso entre el monasterio y tolomé, enfermero; Juan de Tamariz, sacristán; Juan de Capillas; Martín;
la villa de Valdenebro sobre el pasto de ganados en el lugar de Fuentes. Jerónimo de Palacios; Andrés de Valdenebro; Pedro de Montealiste;
Aparecen nombrados además del abad García de Villanueva de los Infan- Pedro de San Cebrián; Alonso de Boada; Juan de Meneses; Juan de
tes; Toribio de Capillas, prior; Juan de Capillas, soprior; Alfonso de Due- Tamariz; Francisco de Capillas (9 de febrero de 1493; A.H.N., Clero,
ñas, cillerero y procurador; Pedro de Meneses; Juan de Meneses, cantor; legajo 7.542). El 27 de julio de 1501 da testimonio sobre el censo y tri-
Juan de Astorga, socantor; Juan de oyón; Pedro de Cervera; Miguel de buto que se había de pagar a la Iglesia Mayor de Valladolid (A.H.N.,
Villalba y Francisco de Palacios (A.H.N., Clero, carpeta 3.417, doc. 12). Clero, legajo 7.545). Murió el 2 de diciembre de 1506, según su epi-
4 de febrero de I458. Escritura de trueque y permuta que hizo el monas- tafio. YÁÑEZ ÑEIRA, 1974: 68; idem, 1975: 337-338, fechan su man-
terio con doña Inés de Guzmán, de 40 cargas de pan que tenía el monas- dato entre I476 y I506.
terio en Belmonte, por 5000 mrs. de juro. Son testigos, además del abad; YÁÑEZ ÑEIRA, 1974: 68; idem, 1975: 3339, fecha su mandato en
2 5 9 9
Toribio de Capillas, prior; Alfonso de Dueñas, cillerero; Juan de Capi- 1512. Sobre las fechas del abadiato de este personaje, véase la introduc-
llas, soprior; Pedro de Meneses; Juan de Carrión, maestro de novicios; ción histórica.
Juan de oyón; Miguel de Villalba, cantor; Juan de Astorga, socantor; Vid. nota anterior.
2 6 0 0
Juan de Meneses, sacristán; Francisco de Palacios; Juan de Villalba; Diego Según el abadologio del Tumbo obtuvo en 1506 de la reina Juana la
2 6 0 1
de la Torre de Mormojón; Juan de Olmos; Salvador de Montealegre; confirmación de los juros de la abadía (Tumbo, fol.97r)y YÁÑEZ ÑEIRA,
Bartolomé de Palacios; Bartolomé de Capillas; Alfonso Reinoso y Juan 1974: 68; idem, 1975: 338-339, sitúa su mandato entre 1506 y I 5 I I ,
de Fuempudia (A.H.N., Clero, legajo 7.542). colocándolo por tanto en posición anterior a la de Francisco Enríquez.
El 9 de diciembre de I460 se realiza el cambio y trueque de las sesenta Sobre este problema de fechas, vid. la introducción histórica.
cargas de pan que percibía el monasterio del concejo de Villanueva con Nombrado por el Papa el 26 de septiembre de I 5 I I , fray Vale-
2 6 0 2
don Garci Sánchez y sus hijos por 12000 mrs. y 25 florines de oro anua- riano de Olivenza, General Reformador, suplicó a Loaysa que renun-
les situados en algunas villas y lugares de la diócesis de Palencia, por juro ciase a la abadía; el rey Fernando el 15 de marzo de 1515 se dirigió a su
de heredad. Son testigos: Juan de Capillas, soprior; Alfonso de Dueñas, embajador en Roma para que pactase con él una rebaja en la pensión
cillerero; Juan de Carrión, sacristán; Juan de oyón, camarero; Juan de que solicitaba a cambio de la renuncia GARCÍA ORO, 1969: 236-239, en
Meneses, cantor; Juan de Astorga, socantor; Miguel de Villalba, maes- concreto 238-239; PÉREZ-EMBID, 1986: 690, nota 121.
Fundaciones femeninas
• 423 •
cando incluso la primera piedra del edificio monástico, fray c a . I I 4 6 - I I 4 9 , a mediados de siglo o hacia I I 5 7 ,
26n 2f)I2 2f>I3
2603 En los pocos documentos medievales conservados del monasterio 2605 Así constaba en el Becerro del monasterio -hoy en paradero desco-
siempre se hace alusión a su ubicación al exterior del recinto amurallado: nocido-, de donde toman el dato ORTEGA RUBIO, I895: II, 285, y GAR-
en el arraval de la villa de olmedo (I466) o extramuros de la villa de olmedo (I496).CÍA, I935: 98. Son de la misma opinión, los autores del Catalogusgeneralis
El rey Felipe II le otorgará una real cédula en I8 junio I557 en la que Abbatiarum..., 346; GARCÍA-MURILLÓ BASAS, I986: I44; CAVERO DOMÍN-
se refiere cómo el cenobio se localizaba en el arraval desa dicha villa y lexos de GUEZ, I999: 80I-802; SÁNCHEZ DEL BARRIO, 200I: I7; SÁENZ RODRÍ-
sus arrabales y de las puertas de san martin y de la vega por donde se probeeyan de las
GUEZ y ÁLVAREZ CLAVIJO, 2007: 240; y el redactor anónimo de Estampas
cosas nes^esarias al dicho monasterio, por lo cual les concede permiso para abrir de la historia..., 3, 5 y 6 (2). MILLARUELO, I98I: 77, pone en duda la pre-
un portillo en la cerca entre el monasterio de San Francisco y la casa de sencia del hermano del santo. Sobre éste y su vinculación a Doña Sancha
Don Rodrigo Vivero (Archivo del Monasterio de Nuestra Señora de y su posible venida a la Península, vid. la monografía de La Espina.
Vico (Arnedo, La Rioja). Omitimos referencias al capítulo de CASAS 2606 Fr. Ignotus, I95I: II0; YÁÑEZ NEIRA, I973 (3); MILLARUELO,
CASTELLS dedicado a este monasterio (2005: 6I3-6I4), ya que trans- I98I: 77; GARCÍA-MURILLO BASAS, I986: I43; o CAVERO DOMÍNGUEZ,
cribe casi textualmente nuestro texto de 2003. I999: 80I; GONZÁLEZSARMENTERO, 2009.
YEPES, I 6 0 9 - I 6 2 I : II, 34I; SANDOVAL, I6I5: I83 -quien
2 6 0 4 ORTEGA RUBIO, I895: II, 285; PRADO Y SANCHO, I906: 78-79;
2 6 0 7
comenta que lo fundó seguramente "para recogerse en el"-; BERGANZA, BRASAS EGIDO, I977: I77; SÁENZ RODRÍGUEZ y ÁLVAREZ CLAVIJO,
I72I: II, I25; ORTEGA RUBIO, I895: II, 278 y 285; ÁLVAREZ, I954: 2007: 240.
I27; GARCÍA-MURILLOBASAS, I986: I44; MATAMALAy URREA, I998: GARCÍA-MURILLO BASAS, I986: 34 -en la I44, dice que lo hace
2 6 0 8
49; CAVERO DOMÍNGUEZ, I999: 802; GONZÁLEZSARMENTERO, 2009. dos años después que el de La Espina-; MATAMALA y URREA, I998:
También encontramos este dato en una historia anónima escrita en la 49. FÓRTÚN, 2007: 47, genéricamente, en el XII.
segunda mitad del siglo XX que se conserva en el Archivo del Monaste- 2609 Catalogus generalis Abbatiarum..., 346; Ramillete piadoso..., I892: 327; y con
rio de Vico y que lleva por título Estampas de la historia de la abadía de Santi interrogante, MILLARUELO, I98I: 77, y GIBERTTARRUELI, I98I: I02.
Spiritus, fol.3 (lo citaremos en adelante como Estampas de la historia...) Por ° AJO GONZÁLEZ DE RAPARIEGOS, I994: 700.
26I
su parte, GARCÍA CALLES, I972: I0I, señala que además de las noticias 2 6 HGARCÍA, I935: 98.
aportadas por Yepes y Sandoval, "no he encontrado ningún otro tipo de RUIZ SOUZA, I998 (5): 475.
2 É I 2
documento comprobatorio". Sobre la actividad fundadora de la infanta, 261:3Estampas de la historia..., 5 y 6 (2), sugiriendo que se trata de una afi-
vid. lo que se comenta en la monografía de La Espina. liación.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
424
siendo unos pocos los que estiman que la instalación de las finales del XIII , rechazando la tradición que lo remontaba
2620
monjas cistercienses en Olmedo sería muy posterior < 26I4 a tiempos de Alfonso VII, debemos ser cautos con las noti-
Lo cierto es que el primer documento en que se men- cias que no están documentadas, especialmente cuando la
ciona el monasterio del Sancti Spiritus y, al mismo tiempo, presencia de Nivardo en la Península es poco probable < 262I
su vinculación a la Orden cisterciense está fechado en Pocos instrumentos conservamos de época medieval
I 3 3 I . En efecto, el 2 6 de enero de ese año D o n Sancho
2 W 5 referentes al Sancti Spiritus, siendo todos, excepto uno, pri-
Blázquez Dávila, obispo de Ávila, funda en esta última ciu- vilegios reales . El 23 de diciembre de I395, estando en
2622
dad el monasterio de San Benito para acoger a las monjas de Medina del Campo, el infante D o n Fernando, Señor de
Sanct Clemeynte, de allen de Adaja de Avila, de la orden de ¡istel, que Lara y Duque de Peñafiel, concedía al monasterio el rema-
debieron abandonar el suyo por la ruina del edificio, nom- nente del agua del caño nuevo para su huerta, siendo con-
brando abadesa del mismo a Illana Muñoz, abadessa que fue firmado por la Reina doña Juana, su hija, en Madrigal a 5
del monasterio de Sancti Spiritus de Olmedo de la dicha orden . 26I6 de julio de I 4 3 0 . Cinco años más tarde, el 23 de octu-
2623
relacionado su erección con el monasterio también cister- Enrique IV como su mujer y luego Fernando el Católico le
ciense pero masculino de La Espina . Sin embargo, la cone-
2W8
otorgasen privilegios para reparar y sostener el edificio. El
xión con este último cenobio no está documentada y de lo I 0 de abril de I 4 6 5 el rey Enrique extendía un albalá por
primero nada se sabe. En cambio, lo que es seguro es que el cual le donaba un juro de heredad de 5.000 mrs anuales
estaba bajo la obediencia y jurisdicción del prelado dioce- situados en las alcabalas de Medina del Campo porque ten-
sano, ya que de otra forma no se explicaría el traspaso de aba- gan con que se proveer e sostener i para reparar el dicho monesterio, c o n -
desas. Estaríamos por tanto ante una de tantas fundaciones firmándolo el 2 8 de julio de I 4 6 6 . Su mujer, Juana, les
2625
femeninas autónomas que siguen los usos cistercienses pero hizo también merced de de 2.420 mrs anuales en las alca-
que no estaban afiliadas de iure a la Orden ni dependían de balas de carne y vino y de la martiniega de Olmedo de la
otro femenino incorporado o de uno de varones . 26I9
siguiente forma: I . 0 0 0 para el reparo del dicho monesterio, I . 0 0 0
Y aunque no pretendemos retrasar la creación del para una capillania, 300 para mantenimiento de la comuni-
monasterio y su vinculación a la Orden hasta por lo menos dad y los últimos I20 para tres escusados. Esta dotación no
M I 4YÁÑEZ NEIRA, I973 (3) (en I999: 53, señala como inadmisible la DE CARDENAL, I96I: 209-2I0, en concreto 2I0; BARRIOS GARCÍA,
fecha de I I 4 2 en base a que Nivardo no llegó a España hasta II47); Fr. I98I: I22-I25; y GUTIÉRREZ ROBLEDO y VICENTE DELGADO, I99I:
Ignotus, I95I: II0. Por su parte, Fray Dalmacio Ortiz Espinosa en su I4-I5, en particular, I5.
Reseña histórica... , 30, señala que lo más seguro es que sea posterior a II70, M I 7GARCÍA-MURILLO BASAS, I986: I44.
y HERNÁNDEZ HERNÁNDEZ, I959: I4I, a pesar de que lo vincula con M I 8CAVERO DOMÍNGUEZ, I999: 802.
Doña Sancha, en II90. Así sucedía en el caso de Santa María de Gúa, San Bernardo de
2 É I 9
no hemos encontrado prueba documental alguna, creemos que pueda hacer filiación suya (vid. más abajo en el texto), aparece documentado por pri-
referencia al de Otero de las Dueñas, por derivación o mala lectura de mera vez en I299 en dos diplomas de Fernando IV (BENAVIDES, I860:
"Outeiro" u "Otero" (el mismo PÉREZ-EMBID, que antes vimos cómo lo II, I96-I97), si bien se retrotrae su fundación tres años antes.
identificaba con el de Olmedo, en I986: 249 nota 68, indica que se refiere 2 6 HVid. nota 2604.
al leonés); curiosamente, tanto el abad de La Espina como el de Sandoval Los correspondientes al siglo XV han sido citados por Estampas de la
2 6 2 2
tomaron parte importante en la recepción de tierras donadas por María historia..., 7-8; SANDOVAL, I6I5: I83; ORTEGA RUBIO, I895: II, 285;
Núñez a la Orden del Cister hacia I230 y que culminaría en I240 con la AJO GONZÁLEZ DE RAPARIEGOS, I99I: 550-55I; idem, I994: 700-
erección de un monasterio de monjas cistercienses en Otero (una regesta 70I; y SÁNCHEZ DEL BARRIO, 200I: I7.
del documento en RODRÍGUEZ, I949: 8 y 88). Archivo del Monasterio de Vico.
2 6 2 3
Ana de Ávila, códice I-pergamino I, ha sido publicado por GONZÁLEZ A.H.N., Clero, carpeta 3.430, doc. I.
2 6 2 5
FUNDACIONES FEMENINAS • 425
llegó a ser efectiva, por lo que el 2 3 de julio de 1477 presente superior al señor obispo de avila y sus predecesores y, p o r lo
estando Fernando el catolico en Medina del c a m p o y tanto, no estaba incluido entre los monasterios que com-
viendo la pobreza del monasterio, ordenó que se cumpliese. prendía la citada bula pontificia . 2632
reforma del monasterio. El cronista de la orden, Ángel Man- A finales del XVI y principios de la siguiente centuria se
rique, no está seguro si durante el mandato de Pablo Núñez, reforman el claustro y la iglesia, esta última de una sola nave,
abad de Palazuelos (1549-1551) las monjas de Olmedo esta- tal vez siguiendo la planta de la primitiva. En el primer
ban sometidas a la Observancia: "An Moniales de Olmedo cuarto del siglo XVII se renueva el templo, participando en
per hoc tempus Observantiae subessent, in dubio est", aun- las obras Tomás de Benavente, Bernardo de Céspedes y
que sí está cierto de que se les asignaba un confesor . sin 2630 Francisco Casado . La ruina del complejo obliga a la
2634
embargo, se han conservado un par de instrumentos de prin- comunidad a trasladarse en 4 de octubre de 1956 al anti-
cipios del siglo XVII que hacen referencia a este suceso: hacia guo monasterio de Nuestra Señora de Arconada, en Ampu-
1611 las monjas de Sancti Spiritus prometieron someterse a dia (Palencia) y posteriormente al de Nuestra Señora de
la reforma de la Congregación de Castilla en virtud de una Vico, en Arnedo (La Rioja) el 12 de octubre de 1 9 7 7 . 2635
2626 A.H.N., Clero, carpeta 3.430, doc. 2. 2631 Se trata seguramente de la bula expedida en 28 de julio de 1596 por
A.H.N., Clero, legajo 7.609.
2 6 2 7 la cual se determinaba que los monasterios de monjas cistercienses suje-
HERNÁNDEZ HERNÁNDEZ, 1959: 141; GARCÍA-MURILLO BASAS,
2 6 2 8 tos a monasterios masculinos incorporados la Congregación de Castilla
1986: 145; Estampas de la historia..., 10; Fray Dalmacio Ortiz Espinosa en debían someterse a la visita del Reformador General (HENRÍQUEZ, 1630:
su Reseña histórica..., 406; AjO GONZÁLEZ DE RAPARIEGOS, 1994: 700; 374); cit. por Policarpo Zakar en su Documento sobre el estado jurídico de los
POZA YAGÜE, 1998 (28). Por su parte, HERNANDO GARRIDO y monasterios de monjas cistercienses en España, de 1990.
VICENTE DELGADO, 1991: 14, señalan que el que en 1331 se trajese a 2632 A.H.P.V, Protocolos, 10.929, fols.41r-44r; cit. por MATAMALA y
esta abadesa de olmedo no quiere decir que las monjas que poblaban en URREA, 1998: 50. También hace referencia a este episodio CANSECO
origen el de San Clemente de Adaja, trasladadas en esa fecha al recién OYARBIDE, 1998: 1121.
fundado San Benito, procediesen también de aquella ciudad, como se 2633 A.H.N., Clero, legajo 7.609.
había sugerido en alguna ocasión, y que sigue manteniendo, por ejemplo, MATAMALAy URREA, 1998: 51-52; SÁNCHEZ DEL BARRIO, 2001:
2 6 3 4
el ya citado AjO GONZÁLEZ. 17-19; SÁENZ RODRÍGUEZ y ÁLVAREZ CLAVIJO, 2007: 240-241. Sobre
2629 LAYNA SERANO, 1943: 14; DAILLIEZ, 1988: 206; RUIZ SOUZA, su mobiliario artístico, vid. especialmente ARIAS MARTÍNEZ y HER-
1998 (5): 475; TORNÉ CUBELLS, 1998: 127; Ortiz Espinosa, Reseña his- NÁNDEZ REDONDO, 2001: 44-45; y SÁENZ RODRÍGUEZ y ÁLVAREZ
tórica... , 53 y 461. Vid. nota 2620. CLAVIJO, 2007: 241-268.
2630 MANRIQUE, 1642-1659: IV 630 (2010: 188). ROMERO REDONDO, 2001.
2 6 3 5
• 427 •
A pesar de la contundencia con que los documentos su fundación en I 2 8 2 y un ulterior incendio en I 3 2 0 que
confirman la fundación del monasterio de Santa María la provocó su traslado al palacio de la reina . 2639
Real de las Huelgas de Valladolid por María de Molina en Como se aprecia, ambas versiones coinciden en un
1320, la historiografía ha venido ofreciendo dos interpre- punto, el cambio de ubicación del cenobio a raíz de un
taciones muy diferentes de este hecho . 2636
incendio. Según estas fuentes el antiguo cenobio se locali-
Por un lado estaría aquélla que sitúa su origen en un zaba en el Prado de la Magdalena, entre dos molinos junto
"beaterio de la Orden del Cister" que según unos pocos se a las huelgas del Esgueva, de donde tomaría su nombre:
tintas versiones que ofrecen del origen y primeros años del además de establecer su fundación en tiempos de Alfonso
monasterio los Tumbos -contradictorias incluso dentro
264I
VII y ya con el nombre de Las Huelgas, implica a su her-
de cada uno de ellos-, fuentes de la que se ha nutrido la
mana Doña Sancha como introductora de la comunidad
historiografía tradicional.
cisterciense femenina:
De una parte, el autor del Tumbo de I 5 9 6 hace una
Y según estas scripturas estaba este monasterio fundado y con
mala lectura de la data de las licencias expedidas por el
vasallos en tiempo del ymperador don Alonso pues le haze mer-
obispo de Palencia a petición de María de Molina ( I 3 I 9 y
ced del portazgo de sus vasallos y otros donadíos (....) Y se
I320): confunde la era con el año y las fecha respectiva-
mente en I 2 8 I y I 2 8 2 , y ello a pesar de que cuando
2642
puede entender que laynfanta dona Sancha hermana del Ynpe-
llega el momento de describir estos instrumentos lo hace de rador don Alonso setimo quefundo el monasterio de la espina
forma correcta . El Tumbo de I 7 2 I cae también en esa
2643
y trujo Religiosos y entre ellos un hermano de San Bernardo a
confusión y se atreve a hablar de dos "fundaciones", la pri- la espina por su horden de la Señora dona Sancha ynfanta se
mera realizada en I 2 8 2 (era I 3 2 0 ) y la segunda en I 3 2 0 trujesen para este monasterio monjas del avito blanco del ¡istel
(era I 3 6 8 ) . 2644
y se fundo y conserbo con nombre de las Huelgas de Vallado-
lid como consta de estos dos privilegios, etc. . 2647
2640 Así lo indica Antolinez de Burgos en el Libro Segundo de la Ystoria de aquí se conserva el llamado Tumbo nuevo, mandado hacer por la abadesa
la mui Ylustrey mui Leal Ciudad de Balledeolid. Trata de lafundacion de todos sus tem- doña Manuela Tomasa de la Rasilla, siendo General de la Orden fray
plos, Parroquias, Combentos, hospitales y hermitas ( B N mss. I 9 3 2 6 , fol. 3 7 I ) . Crisóstomo de Vargas en I72I, y que en ocasiones copia textualmente
Vid. también ANTOLÍNEZ DE BURGOS, I640: I05, "cuya mansión y al anterior (le llamaremos Tumbo de I72I).
estancia fue primero entre las dos paredes de los molinos del Prado de fol.Ir.
2 6 4 2
la Magdalena, pegado a las Huelgas del Esgueva, de donde tomo el nom- u n a anotación al margen escrita con posterioridad da cuenta de
2 6 4 3
bre"; CANESI, I750: II, I83, "en otro [sitio] que llaman la Florida junto este error: Donde se pone Era en este lugar, y en el de abaxo, se pone mal, porque assi
a los molinos altos del prado de la Magdalena, lugar de manantiales y la licencia defundar el Monasterio de las Huelgas que dio el obispo de Palencia, y su rati-
arroyuelos que los antiguos titularon Huergas de que tomando el nom- ficacion fue aquella el año de 1319 y esta la Era de 1358 que corresponde al año de
bre del sitio como algunos quieren se llamó el convento de las Huer- 1320, como consta de las Bullas citadas por el Author deste Tumbo y que estan en el
gas"; o SANGRADOR VÍTORES, I 8 5 I - I 8 5 4 : I, I62, "en la margen caxon L.
izquierda del Esgueva inmediato a la Ciudad". Otros autores, sin Año de 1320 [no año, sino era] a pedimiento de la señora doña Maria muger
2 6 4 4
embargo, lo consideran una imitación de su homónimo burgalés del Rey Don Sancho, el obispo de Palencia da licencia parafundar este monasterio de Santa
(MORAL, I973 (6): I698-I699; GUTTÉRREZBAÑOS, I997: 5I; idem, María la Real de las Huelgas (...) El año (era) de 1368 el obispo de la ciudad de
I999: 75-76). Palencia dio lizencia para reedificar yfundar este dicho monasterio ( f o l . I r ; transcrito
^^ TUMBO y recopilacion de todas las escrituras que este insigne y Real Monaste- en MARTÍN GONZÁLEZ y PLAZA SANTIAGO, I987: I23).
rio de las Huelgas de Valladolid tiene, assi privilegios Reales, y bullas Apostolicas, como Tumbo de I596, hoja sin foliar al principio del libro y en fols.32v-
2 6 4 5
donaciones, foros, censos, apeos, y ejecutorias, donde consta de su hazienda, juros y pro- 33r.
piedades: y lo que cada una ha valido en tiempos pasados, y renta de presente. fecha Año A.M.H.V, arca I, doc. I3.
2 6 4 6
MDXCVI. Por mandado de nuestro Reverendissimo Padre Generalfray Pedro de Villa- Tumbo de I596, hoja sin foliar al principio del libro. En el fol.33r
2 6 4 7
lobos. Siendo Abadesa la religiossisima Sra. Donna Anna de Toledo (en adelante apunta: Destos dos privilegios consta como este monasterio en tiempo del ymperador
Tumbo de I596), custodiado en el Archivo del Monasterio de Las Huel- tenia vasallos y se llamaba de las huelgas de valladolid este monasterio. S o b r e la atri-
gas de Valladolid (a partir de ahora citado como A.M.H.V). También bución de la fundación a Doña Sancha, vid. nota 2637.
FUNDACIONES FEMENINAS • 429
inciden sobre la supuesta antigüedad del cenobio , 2648 la villa, en u n a tierra de pan llevar ¡erca de las heras de la puerta de
sugiere un origen benedictino y su afiliación a la Orden del la madalena desa dicha villa en la qual dis que antiguamente estuvo fecho
Cister por deseo de María de Molina: e hedficado el dicho monesterio . El traslado al actual asenta-
2651
No consta de que avito fuese y en las scrituras referidas de miento —junto a la magdalena- vendría condicionado según
Alonso setimo y se entiendefueron Benitas y se podria presu- esta misma relación por un incendio que tuvo lugar por oca-
mir mudaron el avito de negro en blanco como lo hizieron sión de estar alli una señora ynfanta recoxida, que es señal de gran
muchos monasterios en tiempo de nuestro Padre San bernardo nobleza antigua deste monasterio . 2652
y consta dello en los monasterios de Sobrado, San Clodioy San También los fragmentos de este Tumbo de 1596 que
Martín de castañeda, Carracedo y otros (...) pero como dize la sitúan la fundación del monasterio en I 2 8 2 hablan del
escriptura del Rey Don Alonso honzeno nieto de la Reyna incendio y consiguiente traslado, haciendo igualmente alu-
Doña Maria fundadora deste monasterio que oy dura que su sión a la cédula real de I500:
abuela [ ] monjas blancas y la misma fundadora dize
... y parece la fundo lo primero en el arrabal que oy llaman de
le puso nombre santa maria la Real y que sea de la Regla de
San Juan en esta ciudad, en el sitio y lugar que ocupan las cas-
San benito y Reformazion del ¡istel que da a entender este
monasterio comenzo de avito blanco en tiempos de la Reyna sas y calles de Santa Lucia de una y otra parte asta lindar con
doña maria . 2649
esgueva= Y calle de Penitencia la hera de mano izquierda como
se ba a dicha calle de sancta Lucia y calle del obispo de una y
A continuación menciona un posible cambio de ubi- otra parte= Y el arrabal de la puerta de san juan que es toda
cación del monasterio basándose en la existencia de otros la hera linde el camino Real y la calle nueva de Renedo de una
dos documentos que aludirían a este hecho, los cuales han y otra parte asta la cassa inclussive de Doñafrancisca de sovera
llegado a nuestros días. El primero, en el que se hace refe- que todo este dicho Espacio hacia y ha¡e ocho lugadas menos tre-
rencia a las "huelgas viejas", es el expediente de un arren- cientos y veinte y seis palos el qual dicho sitio se sembraba de
damiento fechado entre el 4 y el 9 de febrero de I498 de pan asta que se torno arbitrio de dar los suelos para fundar cas-
u n a s tierras que ha por linderos de la una parte el camino que va alre- sas (... ) En el qual dicho sitio estubo fundado este dicho Monas-
dedor desta dicha villa de valladolid desde la puerta de san juan al camino terio treinta y ocho años asta que según traslación [tradicion]
de cabe¡on e ha¡ia los molinos primeros del esgueba e de la otra parte un se quemo y quedo todo asolado... . 2653
archivo se duda quefuese Religiosa por que no la nombra tal aunque se dize tubo her- del siglo XVI conservado en la Colección Salazar y Castro de la Biblio-
mano maestro de templarios exidio [sic] y alonso undezimo da a Qaratan a este teca de la Real Academia de la Historia (F-40, fols.82v-83r) aparece
monasterio Año de 1335 por aver sido de la orden del temple ( f o l . 2 6 8 r ) . MASO- consignado otro relato del incendio: ...he sabido de un capellan deste monaste-
LIVER, 1990: 15 y 17, erróneamente y basándose en este fragmento del rio ques hombre de ingenio queste monasterio no sefundo aqui por la reyna doña Maria
Tumbo, denomina a Teresa Gil, "la primera de sus abadesas conocidas", sino fuera de la puerta de la magdalena como un tiro de arcabuz donde agora llaman el
cuando en realidad no lo fue nunca, ni siquiera profesó como monja meson quemado y que viniendo la reyna teniendo las monjas en deposito una muger fasta
en este u otro convento; sobre este personaje vid. el trabajo de RUC- averiguar el juez eclesiastico un matrimonio clandestino de la muger y el que la preten-
QUOI, 1 9 9 2 . dia por esposa por ¡acarla sierta noche conserto con ella de ha¡er un alboroto en el monas-
2649La escritura mencionada es la confirmación de la dotación reali- terio a desora y que abriendo las monjas las puertas la sacaria y el alborotofue pegarfuego
zada por el nieto de la reina en 12 de febrero de 1320. a el monasterio y emprediose de suerte que todo se quemo.
2650A.H.N., Clero, legajo 7807. 2 6 5 5 fols.2v-3r; Tumbo de 1721, fol.I.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
430
Resulta extraño, y así lo ha visto también el autor de de un documento que, de ser auténtico, hubiera traído gran-
una de las relaciones de la fundación del monasterio que des beneficios al monasterio.
aparece en el Tumbo de I 5 9 6 , que ni en la dotación de
2656
Respecto al incendio, está claro que es un reflejo del
María de Molina ( I 3 2 0 ) o su testamento ( I 3 2 I ) , ni en las que asoló el monasterio en I 3 2 8 . La Gran Crónica de
2658
licencias expedidas por el obispo de Palencia autorizando Alfonso XI cuenta cómo cuando el monarca quiso entrar en
la fundación ( I 3 I 9 y I 3 2 0 ) o en las donaciones realizadas Valladolid en busca de su hermana la infanta Leonor para
a favor del cenobio unos años antes de su fundación oficial llevarla a su boda con el rey de Portugal, algunos ciudada-
y en las confirmaciones posteriores no se hable de esa nos de la villa le negaron la entrada porque creían que en
supuesta antigüedad y que en todos ellos se considere a la realidad la quería casar con el odiado Álvar Núñez de Oso-
reina como fundadora . 2657
rio, conde de Trastamara; por ello, comenzó a asediar la ciu-
Ya hemos comentado cómo sólo ha llegado hasta nos- dad, "et asi como el monesterio de las Huelgas que fizo la
otros uno de los documentos —la confirmación de Juan II de Reyna, está muy cerca de la villa, la gente del Conde venia
I 4 I 0 - que hacen referencia al hipotético privilegio conce- por cima del monesterio para entrar la villa: et por esto Pero
dido por Alfonso VII concediendo la exención del pago de Rodriguez de Zamora puso fuego al monesterio, et
portazgo en todo el reino a los vasallos del monasterio, luego comenzó de arder primeramente en el palacio do la Reyna
ratificado por alguno de sus sucesores (Fernando III, yacia enterrada. Et el Rey desque vio aquello, mandó sacar
Alfonso X, Fernando I V y Alfonso XI). Curiosamente ni dende el cuerpo de la Reyna, ca el fuego era tan grande que
Pedro I, Enrique II, Juan I, Enrique III, Enrique I V o los todo el monesterio quemó, sinon fue tan solamiente el
Reyes Católicos confirman un privilegio de tal envergadura, cabildo et un palacio cerca del" . Pero en realidad fueron
2659
cuando las más importantes prerrogativas obtenidas por el las tropas de Álvar N ú ñ e z las que asolaron el monasterio,
monasterio (véase por ejemplo el portazgo de Cabezón, el según se declara en un privilegio concedido a favor del Con-
pago de derechos de chancillería, el trueque del cillero de cejo de Valladolid por Alfonso XI datado en Madrid, a 8
de a g o s t o del a ñ o siguiente: Et el dicho traydor Alvar Nunnez con
Valladolid por Villagarcía o la exención de tributos a criados
el poder que avia, mando a las sus gentes et a las mias talar et ffazer
y vasallos que morasen en su compás) lo son por casi todos
danno en la dicha villa et mandola conbater. Et en el conbatimiento la
ellos. También sorprende que ninguno de aquéllos docu-
gente del dicho traydor Alvar Nunnez entraron por el monesterio de las
mentos que confirmaban la carta del emperador se hayan
Huelgas, por que era logar por do cuydaban poder entrar por y la villa,
conservado. Pero además, si nos fijamos con detenimiento en
porque estava un palacio allegado a la cerca de la villa et f f u e y puesto
el instrumento de Juan II, aunque las datas tópicas y crono- ffuego en guisa que ardio una grant partida del monesterio . 2660
2 6 5 6 Tumbo de I 5 9 6 , fol.268r. de D. N u ñ o Pérez, de I 3 I 8 ) ; monesterio que la dicha Reyna nuestra avuela edifico
2657 el mio monesterio que yo edifique (dotación de María de Molina de I320); en la villa de Valladolit (confirmación de Alfonso XI, de I320); etc.
del mio monesterio de las Dueñas de Qistel que yo ffago en Valladolit (testamento de Vid. nota 2636.
2 6 5 8
M a r í a de M o l i n a de I 3 2 I ) ; pensso e quisso comentar efafer a honrra de santa Maria 2659 ROSELL, I953: 2I6.
monesterio de dueñas de la Orden de Qstel (licencia de Juan, obispo de Palencia, Archivo Municipal de Valladolid, Sección histórica, privilegio 32;
2 6 6 0
de I 3 2 0 ) ; monesterio de santa maria la Real de las huelgas de valladolit que la dicha sen- pub. por ANTOLÍNEZ DE BURGOS, I640: I, 88-9I; AGAPITO Y REVILLA,
nora Reyna nuestra madrefafe e mandafafer (donación de Fernando I V de I 3 0 9 ) ; s.a.: 96-I00; y PINO REBOLLEDO, I988: I63-I67; cit., entre otros, por
mando a la Reyna mi señora paral su monesterio de valladolid (testamento de u r r a c a MAÑUECO VILLALOBOS y ZURITA NIETO, I 9 2 0 : I 9 2 ; y GUTIÉRREZ
Martínez, de I 3 I 7 ) ; monesterio que la Reyna fafe agora en valladolit (testamento BAÑOS, I997: 5I-52; I999: 76-77.
FUNDACIONES FEMENINAS • 431
palacios del Rey e mios que son cabo de la Eglesia de Sancta Maria Mag- constante a todo el mundo. Ya en el d o c u m e n t o m á s a n t i g u o que
dalena . El único instrumento al margen de las noticias
2661
hace mención al monasterio —el de Fernando IV de 1309—
transmitidas tardíamente por los Tumbos y el Becerro que se habla del monesterio de santa maria la Real de las huelgas de valla-
recoge la noticia del traslado es la cédula real de 1500 a la dolit, y aunque la advocación por propio deseo de la funda-
que aludimos anteriormente, aunque no se afirma de forma dora fue Santa María la Real y como tal es denominado en
tajante el cambio sino que simplemente apunta que se dis que los documentos que siguieron a la dotación oficial de
antiguamente estuvo fecho e edificado el dicho monesterio . 2662 Resulta 1 3 2 0 , desde septiembre de 1326 en que volvemos a
2666
curioso que a partir del famoso incendio no se vuelva a encontrar el apelativo de las huelgas la veremos en ocasio-
2667
hablar en la documentación de estos palacios de la Magda- nes sola o combinada con éste sobrenombre , gene-
2668 2669
lena, lo que lleva a plantearnos que efectivamente el monas- ralizándose desde mediados de los años treinta de esa
terio ocupara a partir de entonces y no antes las casas de los centuria el título con el que será conocido, monesterio de sancta
reyes . N o obstante, debemos ser cautos en este punto, ya
2663
maria la real de las huelgas . Y como ocurrió en el caso del
2670
que tal vez el origen de esta creencia derive de la simple monasterio homónimo de Burgos, en donde a ese término
mención a unas "huelgas" en el censo también comentado se le quiso atribuir un origen relacionado con el supuesto
de 1 4 9 8 . 2664
palacio de recreo de Alfonso Viii, cuando en realidad hacía
En lo tocante al nombre, el Tumbo de 1596 tras refe- alusión al tipo de terreno donde se asentaba, unas tierras
rir que estaba ya fundado en época de Alfonso V i i señalaba para el pasto del ganado "de huelgo", es decir, aquel que no
q u e el llamarse huelgas no se sabe que principio tubo y algunos difen es se dedicaba al trabajo , el nuestro lo recibiría igualmente
2671
2 6 6 1 En la licencia del obispo de Palencia otorgada ese mismo año lo 1327, enero, 12 -A.M.H.V., arca 2, doc. 110-; 1329, agosto, 4
2 6 6 8
sitúa ferca del su palacio real que difen el alcafar de la Magdalena; en el testamento -A.M.H.V., arca 2, doc. 83-; 1332 febrero 14 -A.M.H.V., cajón 4, doc.
de la reina, ferca de los Palacios de la Magdalena, y en u n privilegio de Alfonso 1-; 1332, febrero, 23 -A.M.H.V., arca 1, doc. 18-;1332, febrero, 26
X I de enero de 1326, ferca de los nuestros palacios que son cabo de la eglesia de sancta -A.M.H.V., cajón 12, doc. 26-; 1332, marzo, 4 -A.M.H.V., cajón 30,
maria Magdalena. doc. 2-; 1333, febrero, 6 -A.M.H.V., arca 1, doc. 53-.
2662 Vid. nota 2651. 26691327 noviembre 9 -A.M.H.V., cajón 1, doc. 1, fol.28v-; 1330,
2663 Algunos investigadores sugieren que desde un principio monaste- enero, 8 -A.M.H.V., arca 1, doc. 27-; 1331, julio, 14 -A.M.H.V., arca
rio y reyes compartieron los palacios de la Magdalena (PÉREZ HIGUERA, 2, doc. 88-; 1332, mayo, 15 -A.M.H.V., arca 1, doc. 11-; 1333 enero
1993: 81-82; GUTIÉRREZ BAÑOS, 1997: 50-51; idem, 1999: 75; LÓPEZ 23 -A.M.H.V., cajón 6, doc. 1 - .
GUZMÁN, 2 0 0 0 : 2 5 1 ; o BELADO PACHÓN, 2 0 0 1 : 2 5 9 ) , sin embargo en E n alguna ocasión t a m b i é n se le llamará monesterio de las huelgas de
2 6 7 0
todos los documentos se utiliza el "cerca" para indicar su situación con santa maria la real ferca de valladolit ( 1 3 3 3 mayo 2 0 . A.M.H.V., cajón 7, doc.
respecto a ellos, nunca el "en", y tampoco hay mención alguna a la dona- 37b).
ción de una parte de esos palacios. 2 6 7 1 RODRÍGUEZ LÓPEZ, 1 9 0 7 : I, 3 6 - 3 7 .
Vid. nota 2650. Volveremos sobre este asunto en el apartado dedi-
2 6 6 4 2 6 7 2 GUTIÉRREZ BAÑOS, 1 9 9 7 : 50; idem, 1 9 9 9 : 75, señala que "a juz-
cado al análisis artístico y proceso crono-constructivo. gar por los detalles que se dan en el testamento [de la Reina], retrotrae
fol.268r.
2 6 6 5 el proyecto de fundación del monasterio hasta, por lo menos, 1312",
26661 3 20, mayo, 14 -A.M.H.V, arca 2, doc. 61-; 1322, enero, 28 basándose en la mención de una renta que había prometido Fernando IV
-A.M.H.V, arca 1, doc. 41-; 1322, noviembre, 7 -A.M.H.V, arca 1, doc. a la reina para su monasterio, e identifica de forma correcta el monesterio
38-; 1326, enero, 20 -A.M.H.V., arca 1, doc. 19-; 1326, febrero, 19 que la Reyna fafe agora en valladolit que aparece en el p r i m e r testamento del
-A.M.H.V., arca 1, doc. 51-; 1326, agosto -A.M.H.V., arca 2, doc. 108-. canciller de María de Molina, D. Nuño Pérez (1318), con este de Las
2 6 6 7 monesterio de las huelgas de santa maria la real que es ferca de valladolit ( 1 3 2 6 , Huelgas.
septiembre, 23. A.M.H.V., arca 1, doc. 52).
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
432
En efecto, el I de agosto de I309, estando Fernando IV Valladolid la carta de fundación del monasterio . Por ella 2678
en Valladolid, concedía a su madre 50.000 mrs de renta anual entrega el mio monesterio que yo edifique a servifio de dios et a hon-
situados en diversos lugares del reino para mantenimiento del rra de la bien aventurada virgen gloriosa sancta maria su madre en la
abbadesa e monjas del monesterio de santa maria la Real que ellafafia mi villa de Valladolit (... ) el qual monesterio es ferca de los palafios del
e edificava en valladolit. Y l o entregaba al dicho monesterio de santa Rey e mios que son cabo de la Eglesia de Sancta Maria magdalena Et es
maria la Real de las huelgas de valladolit que la dicha sennora Reyna de la Orden de Cistel, e a que yo puse nonbre el monesterio de Sancta
nuestra madre fafe e mandafafer ferca de la dicha villa, p a r a q u e la Maria la Real a la abadesa María Fernández de Valverde para
comunidad rogase por su alma, la de sus padres y la de los q u e lo ayades todo bien e complida mente para siempre jamas con todo
reyes venideros. Además, señala que el cuerpo de la dicha sennora su suelo e con todo su pabimento en quefue fundado labrado e por labrar
Reyna nuestra madre sea honrrada asi como ella lo merece e pues el su e con todas las tierras e terminos que aderredor del son que mias son e
cuerpo se a y de enterrar . También se acuerda de este monas-
2673 yo compre. Et este dicho monesterio e logar vos do segunt dicho es para en
terio Urraca Martínez, camarera de la reina, en su testa- que sirvades y a dios e a la bien aventurada virgen gloriosa Sancta Maria
mento de 2 8 de diciembre de I 3 I 7 , por el cual mandaba a su madre e mantengades y la Regla de Sant Benito e la Orden de Cis-
la Reyna mi señora paral su monesterio de valladolid la casafuerte que tel e que lo ayades libre e quito por siempre jamas asi lo que es fecho e
yo he en mandayona con su aldea con todo el señorio ( ) e mandol mas labrado fasta aqui commo lo que se y fisiere e se labrar daqui adelante,
a esta mi señora la torre e toda la otra heredat e bienes que yo he en este quito e libre e esempto de todo pecho e de todo tributo Real. A ñ a d e que
dicho lugar de mayadona (... ) e mandogelo paral monesterio sobredi- siempre una duenna del mio linage sea Sennora del dicho monesterio para
cho . Y no podía olvidarse de él D o n N u ñ o Pérez, canci-
2674 guardar e enderefar el monasterio e poner recabdo en los sus bienes asi
ller de la reina, quien en su testamento firmado el 2 3 de como lo es en el monesterio de las huelgas de Burgos . A c o n t i n u a -
2679
mayo de I 3 I 8 en Valladolid legaba 50.000 mrs para la lavor ción sigue la copiosa dotación: las villas de Villagarcía, Bal-
de la eglesia del monesterio que la Reyna fafe agora en valladolit . 2675 tanás, Nogal de Cabreros y Ciadoncha; las casas, viñas y
El 9 de marzo de I 3 I 9 Juan, obispo de Palencia, con- heredades de Toro; la casa de Mejorada en término de Hita;
cede licencia a la reina para fundar un monasterius monialium y la martiniega y portazgo de Cabezón. Tres días más tarde
cisterciensis ordinis in Vallisoleti propre palacia sua regalia (... ) in hono- su nieto Alfonso XI confirmaba este documento al mones-
rem et reverenciorum beatissime Marie Semper virginis dedicatum , la 2676
terio que la dicha Reyna nuestra avuela edifico en la villa de Valladolit . 2680
cual sería ratificada por él mismo justo un año después . 2677 Pero aún habría de entregar más bienes la reina a su
Y el 9 de febrero de I 3 2 0 María de Molina firmaba en monasterio. Así el I 4 de mayo de ese mismo año, en virtud
2673 Copia autorizada y realizada por Juan Álvarez escribano público e implicaba la representación de la monarquía en el monasterio, inter-
de Valladolid en 2 de julio de I387 (A.M.H.V., arca I, doc. I0; Tumbo viniendo en cualquier asunto relativo a la organización del monasterio
de I596, fol.3Iv). y configuración de su patrimonio; aparece documentado por vez pri-
Traslado de I2 de mayo de I334, por el escribano Pedro Sánchez,
2 6 7 4 mera en la figura de Berenguela, hermana de Alfonso X, si bien con
de Valladolid en A.M.H.V., cajón I, doc. I, fols.I7r-23r, en concreto, anterioridad se encuentran a otras figuras que ejercieron funciones
fol.I8v. similares a las realizadas por Berenguela y sus sucesoras, como Cons-
A.M.H.V., arca 2, doc. 63.
2 6 7 5 tanza, entre I23I y I233 (LIZOAIN y GARCÍA, I988: 375-377). Vid
2676 A.M.H.V., cajón I, doc. 3; cit. por Tumbo de I596, fol.Iv, y Becerro, además sobre este particular, BALBÁS, 1987 o más recientemente
fol.2. GAYOSO, 2000 y ALONSO ABAD, 2007: I05. Sobre su utilización en
2677 A.M.H.V., cajón I, doc. 2; cit. por Tumbo de I596, fol.Iv, y Becerro, otros monasterios, como Cañas y Vileña o también en Otero de las
fol.2; pub. por MASÓLÍVER, I990: 73-75. En ella señalaba cómo la reina Dueñas y la Zaidía, vid. BAURY, I999: I9I-208; ALÓNSO ÁLVAREZ,
penssó e quisso comenfar e fafer a honrra de santa Maria un monesterio de dueñas de la 2004: 4I-42; idem, 2007: 680 y 704-705; idem, 2009: 345-346. En
Orden de Qistel en la su villa de Valladolit, ferca del su palafio real que difen el alcafar de el monasterio de Ferreira encontramos una figura semejante persona-
la Magdalena, para lo cual Damosle lifentia e otorgamiento, que pueda en el dicho logar lizada en Doña Milia custos et domina que aparece con este apelativo en
fafer e poblar el dicho monesterio e poner y monjas de la Orden de Qistel, segunt dicho es. noviembre de I247 (FERNÁNDEZ DE VÍANA, I994: doc. I5, 30-3I),
E otrossi, que pueda edifficar efafer en el dicho monesterio Eglesia e capiellas. pero que desde I242 actúa junto a la comunidad del monasterio en
Inserto en confirmación de Alfonso XI de I 2 de febrero de I320,
2 6 7 8 diversos asuntos económicos (YÁÑEZ NEÍRA y RODRÍGUEZ, 2000: 305
A.M.H.V., cajón 3, doc. 3 -cit. por Tumbo de I596, fols.Iv-2r; Tumbo de nota 43). También en Villabuena aparece la reina y fundadora Teresa
I72I, fol.I-; B.R.A.H., Col. Salazar y Castro, D-I6, fols.I0I-I02. Lo de P o r t u g a l , c o m o tenente del m o n a s t e r i o (CAVERO DOMÍNGUEZ y
consideran el instrumento fundacional GAIBROÍS DE BALLESTEROS, I967: GONZÁLEZ GARCÍA, 2000: I I 0 ) . Aunque desconocemos si en el de
230-23I; RUCQUOI, I987: I, 203; REGLERO DE LA FUENTE, I993: I72; Santa Colomba de las Monjas llegó a existir esta figura, lo cierto es que
GUTIÉRREZ BAÑOS, I 9 9 9 : 75; LÓPEZ GUZMÁN, 2 0 0 0 : 2 5 I ; o ALONSO una de las condiciones para la fundación del monasterio es que la aba-
ÁLVAREZ, 2007: 686. ARGÁIZ, por su parte, sitúa erróneamente la fun- desa fuera del linaje de los f u n d a d o r e s : Abbatissa vero hujus Monasterii sem-
dación por la reina María en I325 (I675, I: 352r). per sit de progenie eorum qui in hacc Charta scripti sunt (YÁÑEZ NEÍRA, I 9 9 4 :
2679El título "Señora de las Huelgas" del monasterio burgalés era con- 233, 238 y 264-265).
fiado en exclusiva a las infantas castellanas como protectoras del mismo Vid. nota 2678.
2 6 8 0
FUNDACIONES FEMENINAS • 433
de un poder que le había dado D o n N u ñ o Pérez, unía e I 3 2 2 , aunque en octubre de 1326 se lo trocará por el
2685
incorporaba al monasterio el Hospital de Nuestra Señora cillero de Valladolid, las casas de Tovar y el soto de Medini-
la Nueva, que aquél había fundado junto a la puerta de San lla . El 26 de febrero de ese año, una heredad en la merin-
2686
Juan en Valladolid, con la condición de que no pudiese per- dad de Cerrato que había pertenecido a Francisco Ibáñez . 2687
llanías y aniversarios, le entrega 55.000 mrs para obras de Mayorga, anteriormente posesión de los templarios . Ese 2689
su templo y otros 50.000 mrs de renta que le había legado mismo año, el 5 de febrero, les había concedido una viña en
su hijo Fernando IV situados en las salinas de Compás, más término de Valladolid y todos los bienes que tenía esa misma
la casa de Tovar, cilleros de Valladolid, Villavieja y Toro, y Orden en Alcanadre y Duruelo, aldea y término de Ávila . 2690
la martiniega y cillero de Medina de Rioseco, reiterando su El 8 de enero de 1346, estando en Madrid, completa la
orden de que una muger que viniere del linage del Rey Don Sancho donación de Mayorga entregando a las monjas aquellos
e de mi de la linea derecha, que sea monja e señora deste monesterio, por- bienes que en dicho lugar poseía Ruy González . 2691
y consolidación del patrimonio monástico donándole la villa servicios reales, salvo la moneda forera a los yugueros de su
de Villagarcía con todos sus derechos el 2 8 de enero de casa de Mejorada, los pastores que guardaban su ganado y al
2681 A.M.H.V, arca 2, doc. 61. rale Capitulum cum sororibus Maria Evognes, Caresia Manuelis, Maria
2682 A.M.H.V, cajón I, doc. I, fols.Ir-IIr (traslado de 12 de mayo de Roderici de Castrillo et Agnete Alvari de Osorio, monialibus monaste-
1334 ante Pedro Sánchez escribano y en presencia de Alfonso García, rii Vallisoleti, Palentinae dioecesis. ut non obstante defectu natalium,
alcalde de Valladolid; Tumbo de 1596, fols.5r-8v; Tumbo de 1721, fols.4r- quem patiuntur, ex solutis parentibus procreata, ad omnes status et gra-
7v; B.R.A.H., 9 / 1098, fols.42Iv-430r. Pub. por MASOLIVER, 1990: 77- dus, beneficia et honores Ordinis legitimos, citra abbatiatum promoveri
88; LARRIBA BACIERO, 1995: 205-211; cit. por ANTOLÍNEZ DE BURGOS, J., valeant de gratia speciali" (CANIVEZ, I933-I94I: III, año 1399 def.7I,
1640: 105-107; CANESI, 1750: II, 184-185; SANGRADORVITORES, 1851- 732-733; recogido por PÉREZ-EMBID, 1986: 585 nota 17).
1854: II, 296-297; GONZÁLEZ GARCÍA-VALLADOLID, 1900: II, 406; GAI- A.M.H.V., arca I, doc. 41.
2 6 8 5
BROIS DE BALLESTEROS, 1967: 243; MARTÍN GONZÁLEZ y PLAZA 2686 Copia en 1326, noviembre, 28. A.M.H.V., arca 2, doc. 84; confir-
SANTIAGO, 1987: 109; RUCQUOI, 1987: I, 203; MASOLIVER, 1990: 15-16; mado en Valladolid a 20 de enero de 1332 -A.M.H.V., arca I, doc. I I -
REGLERO DE LA FUENTE, 1993: 172; GUTIÉRREZ BAÑOS, 1997: 50; idem, y el 14 de febrero de 1332 -A.M.H.V., cajón 4, doc. I - ; Becerro, fol.97v-
1999: 75; Fray Dalmacio Ortiz en su Reseña histórica..., 390; entre otros. 98r; Tumbo de 1596, fol.9r, I0r-I1r y 32r.
2683 GONZÁLEZ DÁVÍLA, 1645: I, 650 —quien erróneamente fecha la licen- A.M.H.V., cajón 12, doc. 26a; copia de 1779 en doc. 26b; Tumbo
2 6 8 7
cia de fundación otorgada por el obispo de Palencia en I325-; y CANESI, de 1596, fol.33r.
1750: II, 184; por su parte ARGÁIZ hace originarias a las monjas del "Con- Inserto en confirmación de Pedro I, A.M.H.V., cajón 6, doc. I;
2 6 8 8
vento de Buenas Fuentes en Francia" (I675: 352r). Respecto fray Martín copia autorizada por Juan Sánchez, escribano público de Valladolid en
de Aranda, según la cronología del P. Constantino Cordón era abad en A.M.H.V., arca I, doc. 6b; Tumbo de 1596, fol.IIr y 202-203.
1299, pues consta en una escritura de compra de una viña, pero se cree que 2689 A.M.H.V., cajón 12, doc. 3; copia del XVIII en A.M.H.V., cajón
renunció a la abadía (291), aunque luego vuelve a aparecer como tal entre 12, doc. 15; Becerro, fol.282r-284r; Tumbo de 1596, fol.33v.
1345-1349 (292) (AGUILERA Y GAMBOA, 1908). 2690 A.M.H.V., arca I, doc. 42.
Así consta en la comisión de Gerardo, abad de Cíteaux al de la
2 6 8 4 2691 A.M.H.V., cajón 12, doc. 25; Becerro, fol.308r.
Espina para que asista a la elección de abadesa del monasterium holgarum 2692 A.M.H.V., arca I, doc. 54.
vallisoleti nobis inmediate subiecti, de noviembre de 1387 (A.M.H.V., otros 2693 A.M.H.V., arca I, doc. 19; Tumbo de 1596, fol.9r y 32v; Tumbo de
pergaminos de cajón, doc. I). Por otro lado, solamente hemos locali- 1721, fols.I5r-I6v; en 1332, enero, 27 lo confirma -A.M.H.V., arca I,
zado una referencia al monasterio en los Capítulos Generales de la Orden doc. 24.
anterior a la reforma de finales del XV: "Dispensatur gratiose per gene- GONZÁLEZ CRESPO, 1985: 331-332 y 373-374.
2 6 9 4
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
434
hombre que cuidaba las viñas y al casero que guardaba las abadesa María Fernández de Valverde y el convento exten-
casas de Hita . El 4 del mes siguiente le hacía merced de no
2695
dían una carta de pago a Mosse Franco, judío de Vallado-
pagar derechos de chancillería y el 6 de febrero de I333
2696
lid e hijo de Zulama Franco, por la que se comprometían a
entregaba las fonsaderas de Baltanás y Ciadoncha . El 2 de 2697
pagar en un año I0.000 mrs. que aquél les había prestado
enero de I340 le concede 6.000 mrs. de juro cada año sobre para provisión de el y para desempeñar dos lamparas de plata en que
las tercias del obispado de Palencia . En I34I manda a las jus-
2698
puede averfasta veynte marcos e dos califes de plata e un enfensario de
ticias hagan guardar a las monjas de las huelgas el privilegio que tienen de plata e una copa de plata e otros ornamentos que son de la eglesia del nues-
poder desheredar todos y quales quier vienes que las pertenezcan y si algunos tro monasterio que estaban empeñados en la judería . 2704
de I 3 4 4 otorga 2000 mrs. de juro cada año para comprar A partir de entonces los monarcas se limitarán prácti-
pescado sobre la renta de los puertos y el I de octubre 2700
camente a confirmar estas propiedades y privilegios concedi-
siguiente comunica a la aljama de los judíos de Valladolid que dos por sus antecesores, encontrando escasas donaciones . 2705
ha decidido que entreguen al monasterio 4.000 mrs anual- Durante el reinado de Pedro I sólo encontramos dos
mente situados sobre sus derechos . El resto de diplomas de
270I
concesiones, aunque no lo son en sentido estricto: el I 3 de
su reinado son confirmaciones . 2702
febrero de I 3 5 3 manda que se pague al monasterio todo lo
Su mujer, por su parte, tomará bajo su protección al que se le estaba adeudando y el 25 de marzo de I 3 6 3
2706
Huelgas de Valladolid poseía un importante número de tantes instrumentos que expide a favor del monasterio son
villas, heredades y muchas e importantes posesiones en las
confirmaciones . 2708
2696 A.M.H.V, cajón 30, doc. 2; Becerro, fol.6IIv-6I2r; Tumbo de I596, Tumbo de I596, fol.33r).
fol.32r; Tumbo de I72I, fol.I8. A.M.H.V., arca I, doc. 47.
2 7 0 7
vados de las tercias de Valladolid o de Zaratán, según eligiese la abadesa dolid, los 6.000 mrs de juro que poseían sobre las alcabalas de Zaratán
(A.M.H.V., arca 2, doc. 8I; copia autorizada de I 3 9 8 en A.M.H.V., (A.M.H.V., cajón 3I, doc. I I ) y el de 42.000 mrs de moneda nueva en
arca 2, doc. 82); I428 mayo 7. Valladolid, confirma un albalá suyo (26- las alcabalas de pescado de Valladolid (A.M.H.V., arca 2, doc. I 0 I ) ;
III-I428) por el que concedía al monasterio cambiar el juro situado I48I, marzo, I4. Valladolid, los I3000 mrs de juro situados en las alca-
sobre las tercias del arcedianato de Campos por las alcabalas de Valla- balas del pescado de Valladolid dados por Álvaro de Luna en trueque por
dolid o Zaratán; las monjas eligieron Zaratán, como viene indicado en la hacienda de San Esteban de Gormaz. (A.M.H.V., arca 2, doc. I02);
la confirmación de juan II (A.M.H.V., cajón 3I, doc. I I ) ; I430, junio, I48I, marzo, 3. Valladolid, los juros que tenían situados en las alcaba-
29. Valladolid, que no entre justicia en el compás y exención de tribu- las de carne de Valladolid (A.M.H.V., arca 2, docs.I03 a I05). Con pos-
tos a los criados (A.M.H.V., arca I, doc. 2I); I430, julio, 3. Vallado- teridad a la reforma, recibirá nuevos privilegios y confirmaciones.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
436
Al margen de las donaciones y privilegios de los de Benedicto XII de I 3 3 7 por el que le confirma todas las
monarcas, son escasísimas - p o r no decir casi nulas- las que libertades, inmunidades y privilegios recibidas de papas y
recibe de manos de particulares y todas ellas obra de per- reyes ^ y dos comisiones a los prelados diocesanos de
2 9
sonajes estrechamente ligados a la casa real. Sigüenza y Zamora para que investigasen la naturaleza y
El I de agosto de I 3 2 6 D o n N u ñ o Pérez dictaba de beneficios que podían traer al monasterio ciertos trueques . 2720
las huelgas que es ferca daqui de Valladolit que mi señora la reyna doña
La intervención del Capítulo General de la Orden no
maria que dios perdonef i f ofafer e do ella es enterrada en la eglesia; ade-
excluyó una posterior actuación de la Congregación de Cas-
más les cedía la casa del Prado, cerca de Hita con sus here- tilla en sus asuntos. De hecho, en el capítulo provincial de la
dades, derechos y pertenencias, con su molino y huertas, y congregación castellana celebrado en Valdeiglesias en 28 de
300 mrs para pitanza . 27I8
marzo de I524 el propio monasterio pedía ser acogido en
Respecto a la intervención del pontificado en la vida de hermandad , si bien el 2 I de septiembre de I525, en el
2722
Las Huelgas, sólo hemos encontrado tres instrumentos: uno capítulo provincial de Montesión se decidiese romper el lazo
VELÓ Y NIETO, I950: en concreto 357-358; cit. Tumbo de I596, fol.8v- lado de I2 de mayo de I334 por el escribano Pedro Sánchez, a petición
9r y 3Ir; Tumbo de I72I, fols.7v-8v; SANGRADORVÍTORES, I85I-I854: de la abadesa doña María Fernández de Valverde; B.R.A.H., 9 / I098,
I, I69 nota a; GONZÁLEZ GARCÍA-VALLADOLID, I900: II, 406; GARCÍA fols.452v-457r; Becerro, fol.20; Tumbo de I596, fol.3Iv; Tumbo de I72I,
CHICO, I960: 762; GUTIÉRREZ BAÑOS, I997: 50-5I; idem, I999: 75; fol.8v.
Fray Dalmacio Ortiz en su Reseña histórica..., 39I; entre otros. Volveremos Tumbo de I596, fol.222r; Tumbo de I72I, fol.27r.
2 7 r a
sobre este documento en el apartado dedicado al análisis artístico y pro- I409, octubre, 4 y I433, noviembre (A.M.H.V., arca I, docs.45 y
2 7 2 0
está en el claustro de este monasterio"; OLIVERA ARRANZ, I999: 336, (quien en la data de la regesta se equivoca y lo fecha el día 2I); y Becerro,
define correctamente la estancia. MARTÍ Y MÓNSÓ, I898-I90I: 396, fol.8v.
transcribe la lápida que allí colocaron con motivo de la traslación y que Erróneamente MANRIQUE, I642-I659: IV 60I y 604 (20I0: I07);
con motivo de las obras llevadas a cabo en los años 60 del siglo XX ha MASOLIVER, I990: I8 y 43 sitúan la reforma en I482 y de mano de la
desaparecido: E N ESTA SEPOLTVRA ESTA E N T E R R A D O D. Congregación de Castilla. Por su parte, también RUCQUOÍ, I987: II, 309
N V Ñ O PÉREZ DE M O N R O Í ABAD DE SANTANDER BIEN- y Fray Dalmacio Ortiz en su Reseña histórica..., 392, hablan también de ese
H E C H O R DESTE REAL C 0 N B E N T 0 CHANCILLER DE LA mismo año, aunque sin hacer referencia alguna al mentor de la reforma.
REINA [ilegible] FALLECIO A Ñ O I364. Esta confusión en la fecha Ltem manda el dicho capitulo por quanto el abbadesa y monjas de las huelgas de
2 7 2 2
deriva de una mala lectura del epitafio original que se encontraba en el balladolid suplicaron al dicho Capitulo las admitiese a nuestra hermandad condescendiendo
hospital, en el cual aparecía claramente indicado que I364 correspon- a su piadoso ruego quando alguna religiosafallefiere del dicho monesterio los sacerdotes e
día a la era, es decir, año I 3 2 6 : Aquí iaze D. Nuño Perez Abad quefue de San- religiosos de nuestra observanfia les diga las missas y psalterios acostumbrados por los
tander e Notario Maior por el Rey D. Alfonso del Reino de Leon, que fizo este Ospital defuntos y lo mismo cumplan ellas por los Religiosos de nuestra Congregafion y obser-
para los pobres mantener a su servicio de Lesuxpto, e de la Virgen Maria su madre, e de vanfia (A.H.N., Clero, libro 20.26I).
FUNDACIONES FEMENINAS • 437*
2 0 de agosto de 1551 se celebraba en este monasterio el En cuanto a las dependencias monásticas, hay que esperar a
Capítulo General de la Congregación de Castilla, cuyos mon- 1326 para encontrar noticias relativas a ellas, aunque en rea-
jes actuarían en numerosas ocasiones como visitadores del lidad no son nada explícitas: sólo sabemos que el I 7 de
mismo 2724 y en el Tratado de derecho regular de fray Malaquías febrero la abadesa y demás miembros de la comunidad, estando
Pérez, constaba como uno de los dos monasterios de mon- ayuntadas en nuestro cabildo, nombraron a fray Arias procurador
jas que dependían directamente del General Reformador . 2725 para representarlas en un arrendamiento , y que el 2 4 de 273I
2. ANÁLISIS ARTÍSTICO Y PROCESO un privilegio de Alfonso XI del compás del monasterio y de los
criados que allí vivían .
CRONO-CONSTRUCTIVO
2733
recordar que tales términos, incluso el "construir", emplea- Otrosi, mando que fagan luego en el monesterio do ya¡e la reyna
dos en ambientes monásticos deben interpretarse general- enterrada una eglessia de tapias e cubierta de madera para labrar
mente como sinónimos de "fundar" , las primeras noticias
2728 ¡erca del cabillo, porque muden el cuerpo de la reyna en el cabillo
relativas a la fábrica del monasterio datan de I 3 I 8 . Cuando e que digan y las oras e muden los coros en que estan las monjas
el 23 de mayo de dicho año Don N u ñ o Pérez dictó su pri- assi como esta agora en el pala¡io fasta que la eglesia sea acavado
mer testamento, en él disponía que se concediesen 50.000 o a do seer. Otrosi, mando que fagan un colgadi¡o de madera sobre
m r s para la lavor de la eglesia del monesterio que la Reyna fa¡e agora en pies para claustra do anden las monjas a la eglessia e vengan al refi-
valladolit, conociendo por otra de las mandas dirigidas a la tor e al dormitor (... ) Otrosi, mando fa¡er el portal delant de la
colegiata de esa misma ciudad qué materiales se emplearían eglessia e las otras lavores que son a fa¡er segunt que lo yo mande
en su construcción: Otrosi mando que se faga la claustra de la Egle- fa¡er a Estevan Martinez (...) Otrosi, mando parafa¡er las capie-
sia de santa maria la mayor de valladolit de tapia segunt lo del monesterio llas de la reyna do se a de enterrar, tres mill doblas de oro. E mas
que manda fa¡er la Reyna e valladolit e cubierto de madera ¡epillada . 2729 para cobrir de plata la sepultura de la reyna segunt la del Rey
Tres años más tarde la propia María de Molina también en Don Sancho, que dios perdone, mil doblas de oro (... ) Otrosi,
sus últimas voluntades legaba para la lavor de la Eglesia del mio mando para fa¡er el oratorio e la claustra del monesterio de la
monesterio de las Dueñas de Qistel que yo ffago en Valladolit ¡erca de los reyna que yo mando fa¡er mill doblas . 2734
ban Guerra, secretario del General Reformador, de 26 de septiembre de I 4 respecto al empleo del término "construir" en la documentación más
ese mismo año. Lo cierto es que monjes de la propia Congregación antigua del monasterio de Las Huelgas de Burgos, aunque el citado autor
debieron actuar posteriormente como visitadores del monasterio, por reconoce que tal vez no sea ese el caso del cenobio burgalés.
cuanto en el Capítulo General celebrado en 1572 se estipulaba lo 2729 A.M.H.V., arca 2, doc. 63.
siguiente: Yten manda el capitulo que al balcon de las Huelgas de Valladolid se ponga 2730 A.M.H.V., cajón I, doc. I, fols.Ir-IIr.
una red de manera que las religiosas no puedan salirfuera la qual este cerrada y por alli 2731 A.M.H.V., arca I, doc. 51.
negocien y declara por clausura del monasterio todo aquello a donde las religiosas pueden 2732 A.M.H.V., arca I, doc. 50.
salir (A.H.N., Clero, libro 16.536, fol.28v; libro 16.521, fol.29v). Con 2733 A.M.H.V., arca I, doc. 19.
anterioridad a esta reunión capitular, el 10 de mayo de 1481 el mismo 2734 A.M.H.V., cajón I, doc. I, fols.I3v-I6r; pub. por VELO Y NIETO,
Pedro Serrano había presidido una reunión de 33 abades y I I procura- 1950: 358 (tomado de una copia de 1602 conservada en Guadalupe, corri-
dores en la iglesia del monasterio, en el curso de la cual se decidió el cie- giendo algunos errores de transcripción); cit. por RUCQUOI, 1987: I, 215;
rre de Torquemada y el encarcelamiento de los abades de Nogales y GUTIÉRREZ BAÑOS, 1997: 51; idem, 1999: 75 (toma los datos de la copia
Gumiel (FINESTRES Y DE MONTALVO, J., 1753-1765: II, 160; cfr. conservada en la B.R.A.H.).
FUENTE COBOS, 1 9 8 7 : I 4 I - I 6 3 ) .
2 7 2 5 Mss. conservado en San Isidro de Dueñas, fol.28 (Cfr. YÁÑEZ
NEIRA, 1 9 9 4 : 2 5 4 ) .
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
438
El 9 de noviembre del año siguiente ya consta la exis- del dicho monesterio, intercambian con Diego López de Zúñiga
tencia de un ámbito destinado a iglesia donde estaba sepul- el lugar de Ciadoncha por 4.000 mrs de juro sobre las alca-
tado el cuerpo de María de Molina, como se deduce de una balas de pescado de Valladolid, más 5.000 mrs de gracia y
de las mandas testamentarias de Marina Juan, camarera de 5.000 que les presta para proveymiento i mantenimiento del dicho
la reina: Primeramente do e ofrefco mi alma a dios e mando mio cuerpo monesterio . Como vemos, el de Zúñiga entregó una impor-
2740
enterrar en el monesterio de santa maria la real de las huelgas que es tante cantidad de dinero que sería empleada para reparar el
ferca daqui de Valladolit que mi señora la reyna doña maria que dios per- claustro del monasterio, según se nos informa en una con-
donef i f o f a f e r e do ella es enterrada en la eglesia.. .
2 7 3 5 firmación del intercambio realizada en 2 I de septiembre
Sea como fuere, el incendio de I328 lo redujo a ceni- de I 4 I 2 : et por que ellasfuesen mas contentas diera e mandara dar et
zas salvándose únicamente la sala capitular y un palacio o fisiera entonfes quando el dicho troque e permutafion con ellasfisiera dief
salón, como cuenta la Crónica de Alfonso XI: "comenzó de mil mrs de moneda vieja de mas de los mrs del dicho troque para repa-
arder primeramente en el palacio do la Reyna yacia ente- rar e enderesfar la claustra del dicho monesterio la qual avia menester
rrada. Et el Rey desque vio aquello, mandó sacar dende el reparafion nesfesaria por que no se cayese como estava para se caer e
cuerpo de la Reyna, ca el fuego era tan grande que todo el cayera sy no se reparara con los dichos mrs, e n t r e g á n d o l e s en el
monesterio quemó, sinon fue tan solamiente el cabildo et momento de la ratificación del trueque tres mil mrs para qui-
un palacio cerca del" . 2736
tar fiertos ornamientos del dicho monesterio que tenian enpeñados para
sus menesteres para fierta quantia de mrs que estavan obligados a dar e
Desde entonces hasta finales del XIV no volvemos a pagar a plafo fierto que era pasado e so fierta pena con juramento . 274I
tener referencias al estado del edificio, aunque sí hemos Por si fuera poco, la larga disputa entre Beatriz Gon-
localizado tres documentos que hacen alusión a la camara de zález y María Gutiérrez de Aguayo por el cargo abacial en
la abadesa, donde se reunieron las monjas para concertar un I 4 0 I había provocado importantes pérdidas en el patri-
trueque en mayo de I 3 6 9 , a el Palacio cerca de la Camara que
2737
monio monástico, tanto que dos años después apenas
disen del Paraiso en nuestro cavildo en d o n d e se o t o r g ó u n a carta tenían con qué mantenerse ya que el dinero ni siquiera les
de procuración a favor del mayordomo del monasterio en llegaba para comprar pan, por lo que tuvieron que empeñar
junio de I 3 7 7 y al palafio del cabillo donde se acuerda otro
2738
la cruz de plata del dicho monesterio e algunos de los otros ornamentos
intercambio en octubre de I 3 8 0 . 2739
del. P o r ese m o t i v o y p o r q u e este dicho monesterio esta estroydo por
A finales del XIV y principios del XV la situación del non ser reparado e esta parte del caydo espefialmente la iglesia de repa-
monasterio era muy precaria. El 2 I de abril de I398, con rar, e el cabildo de tejar et una torre defafer et un palafio que esta todo
licencia de Pedro de Lezana, abad de Valbuena, y de Lope descobierto que se cayo, e es nesfesario de se reparar por que se non caya
de Oña, abad de Matallana, reformadores de la Orden del en tierra, se vieron obligados a vender al Concejo de Toro el
Cister, la abadesa y monjas estando dentro en el monesterio de llamado Monte de la Reina por 20.000 ducados de
santa maria la real de las huelgas de la dicha villa dentro en el cabildo moneda vieja el 22 de junio de I 4 0 3 . 2742
MAÑUECO VILLALOBOS y ZURITA NIETO, I 9 2 0 : I 9 2 ; MORAL, I 9 7 3 (6): dolid que servirán de apéndice a su Historia. B N mss. I I 2 8 5 , f o l s . I 5 9 r - I 6 I v ,
I699; RUCQUOI, I987: I, 204 nota 470; PÉREZ HIGUERA, I993: 8I; idem, en concreto, fol.I59r.
I994: I76; MASOLIVER, I990: I7 y 29-30; BANGO TORVISO, I998 (4): 2739El día I4 de tal mes y año, la abadesa junto a la priora y monjas del
327; LÓPEZ DE GUEREÑO, I998 (3): 276 nota 9; GUTIÉRREZ BAÑOS, monasterio, estando ayuntadas a canpana tanida en el palafio del cabillo dentro en el
I997:5I-52; idem, I999: 76-77; VALDÉS FERNÁNDEZ, 200I: 648. Por su dicho monesterio a nuestro cabillo segunt que lo avemos de uso e de costumbre, cambian
parte, GUTIÉRREZ BAÑOS señala que probablemente no se habían empezado con Juan Martínez de Rojas, vasallo del rey y Alcalde Mayor de los Fijos
aún las obras patrocinadas por Don Nuño Pérez, "dado el poco tiempo dalgo, el cillero de Villavieja con la casa del soto y todas sus heredades
transcurrido y la muerte en extrañas circunstancias de una de las personas por I6.000 mrs de juro en la cabeza del pecho de la alhama de los judíos
encargadas de llevarlas a cabo, Esteban Martínez, criado del canciller, cuyo de Valladolid (A.M.H.V., arca 2, doc. 99).
cadáver apareció en las aguas del Pisuerga a los pocos días de muerto éste". A.M.H.V., arca I, doc. 55.
2 7 4 0
De otro lado, NIETO GALLO, I964: 6I, dice que no debió causar mucho « A.M.H.V., arca I, doc. 58.
2 7
daño pues hasta I579 no comienza la obra de la nueva iglesia. Todos estos hechos están detallados en la escritura de venta que se
2 7 4 2
A partir de entonces y hasta finales de esta centuria no dicha villa en los tiempos que oviesen nefesidad e que aquella fesando se
tenemos más noticias de las distintas estancias monásticas ferrasen las dichas puertas, como en efecto fue hecho. Pero como
que las simples menciones al lugar donde se celebra el capí- el Concejo de Valladolid exigía en este momento a la monjas
tulo abacial: durante la primera década sabemos que la comu- que mostrasen ese instrumento y en caso contrario haría derro-
nidad se reúne en el estrado de la abadesa , en los años 20 2743 car e derrocariades el dicho hedififio, y éstas l o había perdido, los
aparece mencionado como cabildo o cabillo , en el segundo 2744 monarcas otorgan una nueva con el fin de impedir que el
tercio del siglo volvemos a encontrar referenciado el estrado Concejo derribe o permita que sea rocado el dicho hedififio que asy
de la superiora , mientras que a finales de siglo se reunían
2745 estafecho para ferrar la dicha ferca e ronda que confyna con el dicho mones-
en la red y grada que sale al corral y portería del dicho monesterio . 2746 A terio de las huelgas . 2747
ellas hay que añadir las recomendaciones hechas por el abad Entre I 5 7 9 y I599 se construye un nuevo y monu-
de Piedra, fray Pedro Serrano, durante la reforma del monas- mental templo en el que intervienen Mateo Elorriaga, juan
terio (27 de marzo de I 4 8 I ) destinadas a observar con rigu- de Nates, Ribero Rada y Sebastián de la Vega. Durante el
rosidad la clausura: q u e se ponga torno quanto mas pronto se pora siglo XVII se reformarán otras dependencias, destacando el
poner en el lugar por nos asignado, que las mongas duerman todas en claustro reglar y el dormitorio, obra de Francisco de Praves
dormydor, e non por camaras y que se alcen las paredes de la huerta e de ( I 6 2 I - I 6 3 4 ) , y se embellece la capilla mayor del templo
los otros lugares, como es necessario et asignado. con un soberbio retablo de Gregorio Fernández y trazas del
Respecto a este último punto, una cédula de los Reyes propio Praves ( I 6 I 3 - I 4 ) . Con la reordenación urbana
2748
Católicos fechada en Granada, I 2 de septiembre de I500 del entorno del monasterio, la construcción de un colegio
i n f o r m a d e c ó m o el m o n a s t e r i o les fizo relafion diziendo que puede y la renovación de las dependencias situadas en torno al
aver diez e ocho annos poco mas o menos tiempo quel dicho monesterio fue claustro principal, intervenciones llevadas a cabo desde
reformado e puesto en observanfia e que por las personas que reformaron el mediados del siglo XX, desaparecen prácticamente todos los
dicho monesterio viendo que por la ferca e ronda desa dicha villa que confyna vestigios que aún permanecían del cenobio bajomedie-
con el dicho monesterio podria venir a la reformafion e observanfia de el val , habiendo sido vinculados los que aún perduran con
2749
dicho monesterio algun perjuyzio e danno por cabsa de las personas que por los llamados palacios de la Magdalena.
alli pasavan sy no se ferravan la dicha ferca e ronda, p o r lo cual ellos Ya vimos en la introducción histórica cómo, de forma
mismos habían expedido anteriormente otra cédula con el generalizada, tanto las fuentes documentales como la his-
fin de que la dicha ferca e ronda fuese ferrada por manera que personas toriografía modernas habían venido señalando la instala-
ni personas algunas no podiesen andar nin pasar por enfima della con tanto ción de la comunidad de Las Huelgas en los palacios de los
que quedasen puestas ferradas que se podiesen abrir para velar e rondar la reyes tras el incendio que asoló el monasterio. Por otro lado,
2 7 4 3 I 4 0 0 , diciembre, 22: estando ayuntadas en el dicho nuestro monasterio en el villa de valladolid a la grada e red del dicho monasterio ayuntadas a su capitulo
estrado de la dicha abadesa (A.M.H.V., arca I, doc. 57); I40I, diciembre, 4: (A.H.N., Clero, legajo 7.807); I499, diciembre, 2-4: en el monesterio de
estando ayuntadas en el dicho nuestro monesterio en el estrado de la dicha abadesa santa maria la rreal de las huelgas de la dicha villa de valladolid a la rred y grada que
( I d e m ) ; I 4 0 2 , marzo, I 0 : estando ayuntadas dentro en el dicho monesterio en el sale al corral y porteria del dicho monesterio (... ) estando ayuntadas a su capitulo
estrado de la dicha señora abbadesa (A.M.H.V., cajón 6, doc. I 7 ) ; I 4 0 3 , junio, (A.H.N., Clero, legajo 7.806).
22: estando ayuntadas en el estrado de la dicha abadesa (Archivo Muni- A.M.H.V., cajón I3, doc. 8 ; cit. por Tumbo de I596, fol.40r; y
2 7 4 7
cipal de Toro); I 4 0 6 , febrero, I I : nos las monjas i el convento de santa maria la Tumbo de I72I, fol.98r.
Real de las huelgas de valladolid estando ayuntadas dentro en el dicho nuestro monaste- Sobre estas obras, vid. SAÑGRADORVITORES, I85I-I854: II, 297-
2 7 4 8
rio en el estrado do se solian ayuntar las abadesas pasadas (A.M.H.V., cajón 6, doc. 298; RUBIO Y BORRÁS, I895: 79; MARTÍ Y MONSÓ, I898-I90I: 395-
17); 1 4 0 9 , m a r z o , I 0 : estando en su estrado dentro en el dicho monesterio 397; CHICOTE, I903-I904: I38-I39; GARCÍA CHICO, I940: 42, 45,
(A.M.H.V., arca I, doc. 57). 79, I50-I5I; idem, I960: 762-780; MARTÍN GONZÁLEZ, I967: 60-
I 4 2 3 , julio, I 8 a 3 I : estando capitularmente juntas el abadesa e monjas del dicho
2 7 4 4 6I; idem, I972: I52-I54; MARTÍN GONZÁLEZ y PLAZA SANTIAGO,
monesterio en el lugar que difen cabildo (A.M.H.V., arca I, doc. 46); I 4 2 8 , marzo, I987: I I 0 - I I 2 ; BUSTAMANTE, I983: 84-88, I06-I07, 462-465 y 5I3-
I 9 a 26: estando presentes capitularmente iuntas la abadesa e monjas del dicho moneste- 5I5; MERINO BEATO, I989-I990: I, 2I3; MASOLIVER, I990: 30-33;
rio en el lugar que difen cabillo llamadas a canpana tañida segunt que lo han de uso e cos- FERRERO MAESO, I995: I27-I28, I43, I80, I83, I92 y 200; VVAA.,
tumbre de se ayuntar para los abtos capitulares (A.M.H.V., arca I, doc. 45). I995: II, 872-873.
I 4 3 7 , enero, 27: estades ayuntadas en vuestro cabildo en el estrado de la dicha
2 7 4 5 2749 MASOLIVER, I990: 23. Tanto en el propio monasterio como en el
señora abadesa dentro en el dicho monesterio (A.H.N., Clero, legajo 7.803); I 4 5 2 , Archivo Municipal de Valladolid se conservan diversos proyectos relati-
agosto, I 2 : ayuntadas a vuestro cabildo en el estrado de vos la dicha señora abadesa vos a estas intervenciones, destacando el de construcción del colegio en
dentro en el dicho monesterio ( I d e m ) . enero de I964 (A.M.V., I207-78) que afectaría a la zona oriental del
I 4 9 I , mayo, 5: estando como estamos ayuntadas a nnuestro capitulo a la grada
2 7 4 6 monasterio, y el de apertura de la calle Estudios, de enero de I966
a la parte de dentro de dicho monasterio (A.M.H.V., cajón I, doc. 5); I 4 9 8 , (A.M.V., I360-I5) que traería consigo la demolición de las dependen-
febrero, 4 - 9 : estando en el monasterio de santa maria la real de las huelgas desta dicha cias más meridionales y posterior urbanización de la antigua huerta.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
440
el que en el relato que hace la Crónica de Alfonso XI de este de la nueva organización aplicada por las monjas apenas
suceso se aluda al "palacio do la Reyna yacia enterrada", sabemos nada -fuera de los datos documentales ofrecidos
que en el instrumento concedido por este mismo monarca más arriba-, dificultando su estudio la ausencia tanto de
al Concejo de Valladolid en I329 se hable de que se quemó descripciones históricas del conjunto y documentos gráfi-
un palafio allegado a la cerca de la villa y el hallazgo p o r M a r t í n cos antiguos, como por la ausencia de una buena planime-
González y de la Plaza Santiago del término "palacio" en tría (fig. 3 3 ) . 2755
las cuentas correspondientes a I 6 9 4 motivó que ese espa- u n o de los restos más conocidos de los primitivos pala-
cio se relacionase directamente con aquella residencia cios de la Magdalena es la puerta monumental conservada
2756
que aparecía ese vocablo en el libro de cuentas de I649- sido puestas en relación con la residencia regia, como la anti-
I 7 8 7 : en I 6 7 I se mencionan las secretas de los palacios, en
2753
gua iglesia, la sala capitular o un torreón interior . 2758
dad cisterciense se asentó en las casas de los reyes tras el parece en toda la Iglesia ser obra muy antigua", añade datos
incendio, la conversión del palacio en monasterio conlleva- relativos a los sepulcros que en algunos aspectos contradi-
ría un lógico proceso de transformación encaminado a la cen a la descripción anterior: "La reyna está enterrada en
adaptación de las diferentes estancias que lo componían medio de la Capilla Mayor en cama alta de marmol blanco,
para su nuevo uso. De la configuración del palacio e incluso con bulto de lo mismo. Tiene Corona, mas está en habito
2750 I987: I I I y I29. 75 y 77-78; LÓPEZ GUZMÁN, 2000: 250-252; VALDÉS FERNÁNDEZ,
2751 Vid. por ejemplo, VALDÉS FERNÁNDEZ, 200I: 648. 200I: 648-649. Otros investigadores la han identificado como parte
2752 Vid. nota 2663. integrante del palacio de María de Molina (MARTÍ Y MÓNSÓ, I898-
2753 A.M.H.V, Libro de cuentas, 1649-1787, s.f. I90I: 4I2; GARCÍA CHICO, I960: 766; VVAA., I995: II, 872; Fran-
En San Benito de Valladolid, por ejemplo, una vez donado el alca-
2 7 5 4 cisco Antón en su Catálogo monumental de Valladolid, 5I; NÍETO GALLO,
zarejo y acomodado a sus necesidades las estructuras preexistentes, cons- I964: I0 y 6I; URREA, I982: 77; idem, I990: 87; AZCÁRATE, I990:
truyeron otras, entre ellas dos amplias salas alargadas situadas en los 94; o VVAA., I995: II, 872), mientras que unos pocos creían que se tra-
lados E. y O. del patio procesional que recibieron el nombre de "pala- taba de una de las puertas de la ciudad (ORTEGA Y RUBIO, I88I: I, I09;
cios" (MARTÍN MONTES y MOREDA BLANCO, 200I: 93I-933). GONZÁLEZ GARCÍA-VALLADOLID, I900: I, 29I; LAVADO PARADINAS,
Existe un croquis realizado en 1887 por Gerónimo Ortiz de
2 7 5 5 I975: III, 395-398; y DOMÍNGUEZ RODRÍGUEZ, I976: I9). De otro
Urbina y que se conserva en el propio monasterio, al igual que planos lado, en un manuscrito de fines del XVI (B.R.A.H., Col. Salazar y Cas-
parciales del conjunto que también se pueden encontrar en el A.M.V tro, F-40, fol.83r) se refiere a cómo La reyna mientras les edificava la casa reci-
2756 GUTIÉRREZ BAÑOS, I997: 44-55 e idem, I999, realiza un minu- biolas en la suya ques donde agora ellas estan y sobreviniendo la muerte degosela por
cioso estudio documental y bibliográfico sobre estos palacios así como propia y asi parefe en la entrada que tiene esta yglesia del monasterio y su manera que
las transformaciones que sufrieron a lo largo de su corta historia. aya sido comofortalefa o palacio antiguo, haciendo sin duda alusión a esta por-
MARTÍN GONZÁLEZ, I972: I52; idem, I976: I3-I4; MARTÍN
2 7 5 7 tada y a la cerca que lo separaba de la iglesia de la Magdalena.
GONZÁLEZ y PLAZA SANTIAGO, I987: I I I ; URREA, I988: 6-7; MASO- MASOLIVER, I990: 33 considera que la galería meridional que pre-
2 7 5 8
LIVER, I990: 29; PÉREZ HIGUERA, I993: 8I-82; idem, I994: I75-I76; cede la entrada al coro de la iglesia es obra del siglo XIV. Sin embargo, y
idem, I995: 3I2; ARA GIL, I998: 230; MARTÍN MONTES y MOREDA creemos que acertadamente, LAVADO PARADINAS, I975: III, 396 la sitúa
BLANCO, I999: I83; BELADO PACHÓN, 200I: 259; DOMÍNGUEZ CASAS, ya dentro del XVI.
I999: 45; GUTIÉRREZ BAÑOS, I997: 46-47 y 53-55; idem, I999: 73- 2759 B.R.A.H., Col. Salazar y Castro, F-40, fol.82.
FUNDACIONES FEMENINAS • 441*
honesto sin tener letra alguna. Tiene los escudos con Cas- Iglesia antigua. La yglesia antigua que este Real monasterio tubo
tillo, y León, y otros con solo Leon, y Castillo por orla, que y la sobredicha Reyna edifico, era de humilde edificio aunque de
parece fueron las Armas de su Padre el Infante D. Alonso mucha devocion en la qual se mandó enterrar, como en efeto se
de Molina. A ambos lados en la pared estan arcos labrados enterro, en medio de la Capilla maior, en un tumulo de alabas-
de follages de yeso con tumbas no muy grandes de lo tro con su figura en lo superior de el y por los lados los escudos
mismo con aquellos Escudos de Leon, y sin letra. Son de sus armas, leones y castillos. Ansimismo enterro la sobredicha
sepulturas de los Infantes sus hijos, como las Monjas por Reina dos infantes, hixo e hixa suios i del dicho Rei Don San-
tradicion refieren" .2760 cho, mui chiquitos, en sus athaus, en un nicho en el lado de la dicha
capilla maior .
Será Antolínez de Burgos el primero en identificar
2763
esta iglesia con uno de los salones del palacio de la reina al Sea como fuere, esta misma fuente nos da una pista
afirmar que "hasta el año de 1581 no tuvo por iglesia mas acerca de su ubicación en el conjunto monástico. Al rela-
que una sala vieja del palacio (... ) aquella antigua sala baja cionar las capillas privadas fundadas por algunas de las
que les servía de iglesia" , siendo casi literalmente seguido
2761
monjas y abadesas en torno al nuevo templo y el claustro
por autores posteriores . 2762
reglar, mencionan cómo Isabel de Mendoza y su sobrina
Sin embargo, la tradición del monasterio no recogía Mariana de Velasco mandaron construir hacia 1614 desde
este hecho, destacando únicamente la pobreza del recinto y su principio y cimientos la capilla del Nas¡imiento en el sitio y parte que
las sepulturas que alojaba: antes era la capilla de San Juan en la sobre dicha Yglesia antigua, que la
mencionada la yglesia viexa, aunque durante esta interven- Ambrosio de Morales habla de "una Capilla que hay
ción desaparecería totalmente. Así, todo parece indicar que del Abad de Santander, es cosa distinta de la Iglesia, y que
el antiguo templo se situaba en el extremo occidental de la no tiene puerta á ella" , aludiendo sin duda a esta sala,
277t
panda norte del claustro y se extendía hacia el Oeste ocu- que acogería los restos de D o n N u ñ o Pérez desde I579,
pando parte del coro actual de las monjas. Nada sabemos como también apunta Canesi . 2772
GONZÁLEZ y PLAZA SANTIAGO, I987: I25. legajo 7.803; pub. por GARCÍA CHICO, I960: 776-780.
A.M.H.V., caja 36; pub. por BUSTAMANTE, I983: 5I3-5I5.
2 7 6 5 2769 Las sucesivas intervenciones realizadas en el recinto hasta casi el
2766 La iglesia de Santa Ana de Ávila, construida entre I33I y I350, día de hoy, unido a la ausencia de buenas planimetrías, hacen imposible
tenía una sola nave alargada y capilla de testero recto, al igual que la de delimitar correctamente el espacio de cada uno de estos ámbitos, y sólo
San Clemente de Sevilla. Sobre la utilización de este esquema planimé- contamos con las informaciones facilitadas por la actual comunidad de
trico en la provincia de Valladolid durante los siglos XIV y XV, vid. CAS- monjas.
TÁNLANASPA, I998: 6I-63. Tumbo de I596, fol.2v; y con alguna variación en el Tumbo de I72I,
2 7 7 0
Derribado en la segunda mitad del siglo XX, el capí- en lo alto por ventanales de forma rectangular. Las torres
tulo era una amplia y alta sala rectangular paralela a la panda destacaban considerablemente sobre el salón central, abrién-
norte del claustro, flanqueada por dos cuerpos torreados de dose en el costado oriental de la del oeste un amplio rosetón
planta cuadrada, y que la tradición del monasterio había vin- cuya tracería estaba formada por dos coronas en torno a una
culado con los palacios reales al considerarlo "el oratorio de rosa central de ocho lóbulos, la interior compuesta por sen-
la reina Doña María de Molina" . Al interior, en uno de
2773 cillos tetralóbulos y la exterior que combina los anteriores
los lados menores se disponía un monumental pabellón con con otros diseños cercanos a lo flamígero (lám. I88). Sólo se
labores renacentistas en yeso, del estilo de jerónimo del ha conservado in situ y muy transformado el torreón occi-
Corral, dividido en tres tramos cubiertos con bóvedas de cru- dental, que ha sido reconstruido en ladrillo, pero mante-
cerías con terceletes y combados, y que albergaba el Calva- niendo el gran óculo; nada queda de la "ventana con celosía,
rio ; en el suelo se disponían los enterramientos del
2774 que cierra un sencillo recuadro" que viera García Chico . 2775
canciller de María de Molina y de algunas abadesas. Por el Durante las obras de demolición del capítulo, salieron a la luz
exterior se apreciaba su rudimentaria fábrica de tapial con un buen número de placas de yesería correspondientes al
algunos parches intermitentes de ladrillo elevada sobre un arrocabe del artesonado que cubría originalmente este espa-
zócalo compuesto por grandes sillares irregulares, y recorrida cio (láms. I89 y I 9 0 ) . 2776
2 7 7 7 Sobre este tipo de ámbitos palaciegos y su relación con el que estu- situado la construcción de este torreón ya dentro del siglo XV, basándose
diamos, vid. GARCÍA FLORES y RUIZ SOUZA, 2004: 9-10. seguramente en el diseño del rosetón.
MARTÍN GONZÁLEZ y PLAZA SANTIAGO, 1987: I I I ; V V A A . ,
2 7 7 8
1995: II, 872; o LÓPEZ DE GUEREÑO, 1998 (3): 2 6 6 y 2003: 95, han
FUNDACIONES FEMENINAS • 445*
monesterio para guardar e enderefar el monasterio e poner recabdo que en esta carta dise asi como sobredicho es en todo ni en parte
en los sus bienes asi como lo es en el monesterio de las huelgas de dello por vos lo enbargar ni por vos lo contrallar en ninguna cosa
Burgos. Otrosi vos do e vos otorgo e ofresco que ayades daqui en por ninguna rason. Et qualquiere que lo fisiere sea maldito de
adelant por juro de heredat para siempre jamas con el monesterio dios e aya la suyra. Et peche al Rey en coto mill mrs de oro et a
sobredicho para ayuda de vuestro mantenimiento estas villas e la Abbadesa e al convento del monesterio sobredicho o a quien su
estos logares e estas rentas e derechos e heredamientos que aqui bos toviere todo el danno dobado que por ende resfibiere. Et sobre
seran dichos que es cosa conosfida e sabida que yo tove e fueron esto pido e ruego al Rey don Alfonso mio nieto que vos otorgue e
mios fasta aqui. Primera mente la villa de Villa garfia ue yo vos confirme por su previlegio esta carta desta donafion que vos
herede de donna Teresa Alfonso mi tia. Et la villa de Baltanas. yofago segunt que sobredicho es e en esta carta se contiene. Et por
Et Noguel de Cabreros. Et Qdadoncha. Las quales villas e loga- que esto sea firme e estable para siempre jamas di vos ende esta
res yo compre por mios dineros. Et otrosi vos do las mias casas e mi carta seellada con mio seello de fera colgado. Dada en Valla-
las mias vinnas e el heredamiento que yo he en la villa de Toro e dolit Sabbado nueve dias andados del mes de febrero en era de
en sus terminos que fueron de los fijos de pero fechor quales yo mili e tresientos e finquenta e ocho annos.
tome por que fueron dados porfalsarios por sentenfia por que
labraron monedafalsa. Et otrosi vos do la mia casa de meiorada
que es en termino defita con las vinnas que y a e con todos los
Abadesas y monjas
heredamientos quales quier que a e le ertenefen quefue de Alvar - María Fernández de Valverde
Sanchez defita fijo de Sancho Marques de Ledanca qualyo tome I320, febrero, 9 (A.M.H.V, I, doc.I; cajón 3,
por rason de sentenfia quefue dada contra el que perdiese lo que doc.3)
avia por que mato un omme sobre tregua. Et estas villas e estos I322, enero, 28 (A.M.H.V, arca, doc.4I)
logares e estas casas e estos heredamientos que sobredichos son vos I322, noviembre, 7 (A.M.H.V, arca, doc.38)
do que lo ayades todo bien e complida mente libres e quitos por juro Toda, cillerera.
de heredat para siempre jamas segunt que dicho es con todos los I326, febrero, I9 (A.M.H.V, arca, doc.5I)
vasallos e suelos e con todos los pechos e derechos e rentas que yo
1326, marzo, 28-29 (A.M.H.V, arca,
y avia e devia aver. Et con todos sus terminos poblados e por
doc.49/50)
María Ortiz, priora.
poblar e con montes e con fuentes con rios con pastos con exidos
e dehesas con aguas corrientes e non corrientes e con sus entradas
Urraca Fernández, camarera de la abadesa.
I326, agosto, 26 (A.M.H.V, arca, doc.I08)
e con sus salidas e con todas sus pertenenfias quantas an e aver
I326, septiembre, 2 3 (A.M.H.V, arca, doc.52)
deven. Et con la justifia e con todo el sennorio asi como lo yo y
I329, agosto, 4 (A.M.H.V, arca, doc.83)
avia e devia aver en qualquier manera. Otrosi vos do e vos otorgo
1331, julio, I 4 (A.M.H.V, arca, doc.88)
la martiniega e el portadgo e la afenna e los derechos de Cabefon
1332, febrero, 26 (A.M.H.V, cajón I2,
aldea de Valladolit que yo compre por mis dineros de maestre doc.26a)
Nicolas fisico quefue del Rey e mio que lo dio el Rey don San- 1333, mayo, 20 (A.M.H.V, cajón 3, doc.I8;
cho por heredamiento Et daqui adelante me parto de todo el sen- cajón 7, doc.37b)
norio e toda la propiedat e la jurisdifion que yo avia e devia aver 1334, mayo, I 2 (A.M.H.V, cajón I, doc.I)
en las villas e en los logares e en los vasallos e en las rentas e en 1338, septiembre, 25 (A.M.H.V, arca, doc.3I)
los derechos e pechos e heredamientos que sobredichos son que vos 1339, noviembre, I 0 (A.M.H.V, cajón 3,
do en donafion segunt que en esta carta dise. Et por esta mi carta doc.7).
vos apodero dello e vos do el sennorio e la propiedat e la jurisdi- 1340, enero, 2 (A.M.H.V, cajón 3I, doc.I0)
fion que yo y avia e devia aver que lo ayades todo bien e complida I342, julio, 20 (A.M.H.V, arca, doc.II2)
mente segunt dicho es e en esta carta se contiene sin enbargo nin- I346, enero, 8 (A.M.H.V, cajón I2, doc.25)
guno en tal manera que a mi ni a otro por mi en ello ni en nin-
guna cosa dello nonfinque ningun derecho ni jurisdifion ninguna.
- Aldonza Fernández Duque
I353, septiembre, 25 (A.M.H.V, cajón 3I,
Et apodero vos de todo por esta carta que lo ayades commo en ella
doc.I0)
dise asi como si yo misma corporal mente vos lo entregase e vos
I359, marzo, I 7 (A.M.H.V, arca, d o c . I I I )
dello apoderase. Salvo que retengo y la justifia si vos o otro por
Velasquita Alfonso, priora.
vos non lafisieredes o la minguarades que el Rey que lafaga. Et
otrosi nunera [sic] de oro o de plata o de otro metal qual quiere I369, mayo, I5-22 (A.M.H.V, arca, doc.44)
si se y descubriere que sea del Rey. Otrosi que de las dichas villas Velasquita Alfonso de Villaquirán,
e logares e de lasfortalesas que oy dia y son e de las que fisiere- priora.
des daqui adelant que siemprefagades dellas guerra e pas al Rey
Mayor Sánchez de Villiegas.
don Alfonso mio nieto e a los Reyes que despues del Regnaren.
Teresa Ordoño, enfermera.
Mayor Rodríguez, cillerera.
Ende mando e defiendofirme mente que ninguno ni ningunos non
Mencía Alfonso de Fernosilla.
sean osados de venir contra esta donafion que vos yofago segunt
Sancha Alfonso, sopriora.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
446
I 3 7 I , septiembre, I 5 (A.M.H.V., cajón 3, 1398, diciembre, 19 (A.M.H.V., cajón 3,
doc.I8; cajón 7, doc.37b) doc.I8; cajón 7, doc.37b)
I 3 7 I , septiembre, 28 (A.M.H.V., cajón 3, - Teresa Gutiérrez de Camargo
doc.7). 1400, diciembre, 22 (A.M.H.V., arca, doc.57)
I380, octubre, I 4 (A.M.H.V., arca, doc.99)
Teresa de Lara, priora. - María Gutiérrez de Aguayo
María Diez Calderona, sopriora. 1401, diciembre, 4 (A.M.H.V., arca, doc.57)
Velasquita Alfonso de Villaquirán, can- Beatriz González de Manzaneda, priora.
tora. María Alfonso, cantora.
Teresa Ordoñez, sacristana. Francisca Sánchez.
Mencia Alfonso de Fermosilla, enfer- Inés Álvarez Osorio.
mera. Isabel Rodríguez, portera.
María Sánchez de Villegas. Inés Fernández de Encinas, sacristana.
María Gutiérrez de Encinas. Teresa Manuel.
Elvira León. Marina Álvarez.
Elvira López de Pina. María López.
Mencia Núñez de Contreras.
- Velasquita Alfonso María Rodríguez de Castriello.
I382 (Tumbo de I 7 2 I , hoja sin foliar) Sancha Martínez.
- Juana Gutiérrez 1402, marzo, I0 (A.M.H.V., cajón 6, doc.I7).
I387, agosto/noviembre, I 8 / 6 (A.M.H.V., Beatriz González de Manzanedo, priora.
Otros pergaminos de cajón, doc.I) 1403, junio, 22. Valladolid (Archivo Municipal
María Gutiérrez priora. de Toro, pergaminos).
Beatriz G , sacristana. Beatriz González, priora.
Mayor, cillerera. María Alfonso, sopriora.
Elvira López, portera. Elvira León, enfermera
María Alfonso, cantora. Francisca Sánchez, cillerera.
urraca López. Inés Álvarez, sacristana.
Teresa Gutiérrez. Isabel Rodríguez, portera.
Francisca Sánchez. Teresa Manuel, bodeguera.
- María Gutiérrez Beatriz López, cantora.
María López, panera.
I388 (Tumbo de I 7 2 I , hoja sin foliar)
Inés Fernández.
- Urraca López de Toriso Mencía Ramírez
I398, abril, 2 I (A.M.H.V., arca, doc.55) Mencia Núñez
Beatriz González de Manzanedo, priora. Catalina Núñez.
Elvira León. María Rodríguez.
María Alfonso, cantora. Guiomar Núñez
Teresa Gutiérrez. Inés Méndez
Francisca Sánchez. Catalina Vázquez
Inés Álvarez. Teresa Alfonso
Inés Fernández. Violante López
Teresa Manuel. Marina Álvarez
Marina Álvarez. Juana González
Beatriz López.
Inés López. - María Alfonso de Villaquirán
Sancha Martínez. I409, marzo, 8 (A.M.H.V, arca, doc.57)
Constanza Alfonso. Inés Fernandez, priora.
María Iñiguez. Inés Álvarez, sopriora.
Mencia Nuñez. María Álvarez, bodeguera.
María Rodríguez. María, sacristana.
Catalina Nuñez. Violante López.
María Álvarez. I409, marzo, I9 (A.M.H.V., cajón 3, doc.I8;
Violante López. cajón 7, doc.37b)
Constanza Fernández. I409, junio, 30 (A.M.H.V, arca, doc.99)
FUNDACIONES FEMENINAS • 447*
Considerado por la historiografía como el primer nada acerca de sus fundadores, si bien la tradición del ceno-
monasterio de monjas fundado en Valladolid , la noticia 2779
bio ha querido vincularlo a la casa real:
más antigua que nos habla de su existencia data de 2 3 de
febrero de I288, cuando Sancho I V concede a las dueñas del De sus primeros fundadores por ser su antigüedad tanta
no ay clara noticia: por tradicion se tiene recivido por cierto
monasterio de santa maria de allent la puente de Valladolit, u n h o r t e -
fue real su fundacion, si bien no consta por instrumentos
lano para que les labre un huerto que tienen cerca de su
publicos por edificios ni rentas que de los Señores Reyes de
monasterio libre de todo pecho y tributo por que he muy grant
Castilla ni de Leon este convento gofe la verdad que esto
voluntad defafer mucho bien en este lugar por que comienfa agora nue-
tenga (..): lo que de cierto se savey parece por las historias
vamente et por que sean tenidas de rogar a dios por los reyes onde yo
antiguas es quefue muy estimado y favorecido este convento
vengo . 2780
2 7 7 9 ANTOLÍNEZ DE BURGOS, I 6 4 0 : 3 4 5 ; GONZÁLEZ DÁVILA, I 6 4 5 : 2780 Inserto en confirmación de Juan II dada en Segovia a 28 de octu-
I, 649; ARGAIZ, I675: I, 35Iv; CANESI ACEVEDO, I750: 65; GONZÁLEZ bre de I407 (A.M.S.Q., carpeta legajo I).
GARCÍA-VALLADOLID, I900: I, 6I7; URREA, I982: 73; entre otros. El 2™ CANESI ACEVEDO, I750: 65, señala su instalación en torno a I256,
libro Becerro (a partir de ahora le citaremos como Becerro) conservado en aunque no señala la fuente de donde toma el dato; RUCQUOI, I987: II,
el archivo del monasterio (A.M.S.Q.), también señala este aspecto: El 276, lo considera fundado probablemente en la segunda mitad del XIII;
convento de San Quirce desta Ciudad de Valladolid, que es de la orden y habito Cister- y ARA GIL, I998: 230 y FORTÚN, 2007: 47 lo sitúan genéricamente en
ciense y profesa la Regla de nuestro Padre San Benito es de los mas principales de ella y el XIII, el segundo con interrogantes. Otros en cambio, considerando que
el mas antiguo de todos los monasterios de monjas que ylustran esta ciudad (fol.Ir); el primer documento conocido en el que aparecía mencionado era el del
Lafundacion mas antigua de conventos de Valladolid de monxas de la advocacion de San testamento de Teresa Gil de I307, colocan la fundación ya en el XIV
Quirce y por otro nombre Sancta Maria de las Dueñas (fol.3r). P o r su parte, (MILLARUELO, I98I: 9I; GIBERTTARRUELL, I98I: I02; REGLERO DE
MARTÍN GONZÁLEZ y PLAZA SANTIAGO, I 9 8 7 : I 8 7 , señalan que el pri- LA FUENTE, I993: I 7 I ; RUIZ SÓUZA, J.C., I998 (4): 474; y Fray Dal-
mero fue el de Las Huelgas, luego éste. Omitimos referencias al trabajo macio Ortiz Espinosa en su Reseña histórica..., 55). Incomprensiblemente
de CASAS CASTELLS, 2005: 62I-622, que reproduce con escasas varian- VAN DER MEER, I945: 300, lleva sus orígenes al siglo IX.
tes el texto que sobre este monasterio publicamos en 2003.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
450
tiempos de su primera fundacion, hubo una señora infanta más tarde no volvemos a tener noticias del monasterio: el
de Castilla llamada Maria de quien se halla particular 28 de diciembre de I 3 I 7 urraca Martínez, camarera de la
mencion en papeles antiguos . 2782 reina María de Molina, concede a las monjas de allen de la puente
Tampoco aparece mencionada en este instrumento ni desta dicha villa [Valladolid] fient mrs en sus últimas volunta-
la regla que seguía ni el instituto monástico al que perte- des . El 2 3 de mayo del año siguiente Don N u ñ o Pérez,
2788
necía, si bien nadie ha cuestionado un posible origen ajeno Canciller de la reina, otorgaba su primer testamento en el
a lo cisterciense . 2783
cual mandaba que ferque el monesterio e la huerta del monesterio de
sant quirfe que es allent de la puente de valladolit de quatro tapias en alto
Lo que sí parece claro es su advocación -Santa e su fimiento de piedra . Es esta la primera vez que aparece el
2789
Gil su testamento por el cual dejaba a las monjas de allent la segundo y definitivo testamento I de agosto de I 3 2 6
puente de Valladolit, quatro fientos maravedis . 2787 Hasta diez años dejaba doscientas doblas de oro para cercar el monasterio de San
2782Becerro, fol.Ir. Poco más adelante (fol.Iv), recoge un suceso con el (3); MILLARUELO, I98I: 9I; ARA GIL, I998: 230.
que insiste en la estrecha relación del monasterio con los reyes de Castilla: ANTOLÍNEZ DE BURGOS, I640: 345; CANESI, I750: 65; SANGRA-
2 7 8 6
Y por tener este convento tanta autoridad y virtud en aquel tiempo antiguo, en ocasión de DOR VITORES, I 8 5 I - I 8 5 4 : I, I 4 9 y II, 2 9 9 ; QUADRADO, I 8 8 5 : 2 7 y
que ciertos infantes de navarra tubieron diferencias con el rey don Fernando el Quarto, que 63-64; GONZÁLEZGARCÍA-VALLADOLID, I900: I, 6I7; COSSÍO, I922:
perturbaron la paz deste Reyno, se retiro a el este Rey con la reyna doña Juana su mujer 8 5 - 8 6 ; AGAPITO Y REVILLA, I 9 3 7 : 4 8 9 ; MARTÍN GONZÁLEZ y PLAZA
para esperar que reciviera un cardenal legado a latere quel Pontifice envio para componerles SANTIAGO, I987: I87; MERINO BEATO, I989-I990: I, I88.
estando como entonces estaba en el sitio de san Lazaro: de la chronica del rey don Alphonso SANGRADOR, I 8 5 I - I 8 5 4 : I, I49 nota c, añade que ocupó las casas
onceno hijo deste Rey don Fernando consta lo dicho y dello y de lo que se dira que este con- números I, 2 y 3 de dicha calle, "advirtiéndose hoy en esta última un
ventofue fundacion Real o que si no lofue era muy grande la reverencia y estimacion que magnifico arco de piedra, que sería indudablemente la puerta principal
de las Relligiosas suyas hacian los Reyes y personas Reales con que se califica su mucha vir- del antiguo Monasterio". Por su parte Floranes en las anotaciones a la
tudy nobleza. Recogen sin m á s esta noticia ANTOLÍNEZ DE BURGOS, I 6 4 0 : Historia de Valladolid de Antolínez de Burgos, intenta afinar más y lo sitúa
345-346; GONZÁLEZ DÁVILA, I645: I, 649; y CANESI, I750: 65. Sin n o en el m i s m o sitio que el hospital, sino mas arriba en la acera de casas que
embargo, Rafael de Floranes en las anotaciones que hace en la Historia de sigue desde allí; en una de las quales se veen aun los arcos caidosy en lafachada el prin-
Valladolid de Antolínez de Burgos señala que este acontecimiento no tuvo cipal de la puerta (fol.356v).
lugar en tiempos de Fernando IV, sino después, durante la minoría de 2 7 8 7 Publica el testamento, RUCQUOI, I992: 3I6-323, en concreto, 3I9;
A l f o n s o X I (Historia de Valladolid que dexó Manuscrita Juan Antolinez de Burgos, cit. p o r el Becerro, fols.Iv y 3r; ANTOLÍNEZ DE BURGOS, I 6 4 0 : 3 4 6 ; GON-
vecino de la misma Ciudad y la original se conserva en el Archivo de ella. Año de 1641. ZÁLEZ DÁVILA, I 6 4 5 : I, 6 4 9 ; CANESI, I 7 5 0 : 6 5 ; SANGRADORVITO-
Don Juan Antonio de la Reguera la trasladó Año 1695. Sacose esta copia por la de Don RES, I85I-I854: II, 299; QUADRADO, I885: 64; ORTEGA RUBIO, I895:
Juan Antonio de la Reguera para la Librería de Don Rafael Floranes Robles y Encinas, Señor I, 88; GONZÁLEZGARCÍA-VALLADOLID, I900: I, 6I7-6I8; AGAPITOY
de Tavaneros. Año 1779. B.N., mss I0.662, fol.357r; en adelante citado His- REVILLA, I 9 3 7 : 4 8 9 ; MARTÍN GONZÁLEZ y PLAZA SANTIAGO, I 9 8 7 :
toria de Valladolid), tal y como aparece recogida en la crónica de este último I87; REGLERO DE LA FUENTE, I993: I7I nota 99; RUCQUOI, I987: I,
monarca (ROSELL, I953: I, I9I). Correctamente, GAIBROISDEBALLES- 2 0 3 ; DIAGO HERNANDO, I 9 9 7 : 8 2 0 .
TEROS, I967: 240, y RUCQUOI, I987: I, 203 lo sitúan en I32I. Recien- Se conserva una copia del testamento realizada el I2 de mayo de
2 7 8 8
temente Rucquoi ha sugerido la intervención de María de Molina en la I334 en el Archivo del Monasterio de Las Huelgas Reales de Vallado-
fundación: "C'est a cette époque que la reine María de Molina favorisa lid (A.M.H.V.), cajón primero, doc. I, fols.I7r-27v, en concreto fol.20r.
l'installation a proximité de Valladolid du monastere de San Quirce" 2789 A.M.H.V., arca 3, doc. 63.
(2000: 5I3), si bien de haber sido así seguramente en su testamento la A.M.H.V., cajón primero, doc. I, fols.Ir-IIr; copias en Tumbo de
2 7 9 0
reina hubiera hecho alusión a ello. I596, fols.5r-8v; y Tumbo de I72I, fols.4r-7v. Publican el testamento
2783 Como veremos más adelante, la primera mención a la orden es BENAVIDES, I860: I, 680-686; MASOLIVER, I990: 77-88, para lo rela-
muy tardía. tivo a San Quirce, 80; y LARRIBA BACIERO, I995: 205-2II, en concreto,
Numerosos monasterios cistercienses femeninos se instalaron en
2 7 8 4 2 0 6 . Citan esta m a n d a el Becerro, fols.Iv y 3r; ANTOLÍNEZ DE BURGOS,
las afueras de pequeños núcleos rurales y de grandes villas urbanas, como I640: 346; GONZÁLEZ DÁVILA, I645: I, 649; CANESI, I750: 66 -que
Las Huelgas de Burgos, Gradefes, Carrizo, San Clemente de Toledo, San lo fecha en I de junio del, año siguiente-; SANGRADORVlTORES, I85I-
Bernardo de Guadalajara, San Clemente de Adaja en Ávila, etc. Sobre este I854: II, 299; QUADRADO, I885: 64; GONZÁLEZGARCÍA-VALLADOLID,
particular, vid. BAURY, I999: 228-230, y RUCQUOI, 2000: 5I2-5I3. I 9 0 0 : I, 6 I 8 ; AGAPITO Y REVILLA, I 9 3 7 : 4 8 9 ; REGLERO DE LA FUENTE,
Manual histórico de Valladolid, 5 I ; RUBIOY B O R R Á S , I 8 9 5 : 8 2 ; Cata-
2 7 8 5 I993: I 7 I nota 99; MARTÍN GONZÁLEZ y PLAZA SANTIAGO, I987:
logus GeneralisAbbatiarum..., 3 I 7 ; ÑIETO GALLO, I 9 6 4 : I 0 9 ; MORAL, I 9 7 3 I87; RUCQUOI, I987: I, 203; entre otros.
FUNDACIONES FEMENINAS • 451*
Quirce de allende la puerta de Valladolid . 2791 Al año siguiente de la rregla de sant benito un albalá confirmando el privilegio del
Marina Juan, camarera de la reina Constanza otorgaba en hortelano otorgado por Sancho I V . 2795
Valladolid testamento a 9 de noviembre de I327, por el Dos aspectos debemos resaltar de este documento.
q u e legaba a las monjas de Sant quir¡e de allen de la puente de valla- En primer lugar, es la primera vez que se menciona que el
dolit ¡inquenta m r s . 2792
monasterio vive bajo la Regla de San Benito, aunque sigue
Debemos dejar pasar casi un siglo para encontrar nue- sin aludirse a su adscripción a la Orden cisterciense. Y en
vas noticias relativas al cenobio. El 2 de julio de 1400 el segundo lugar, aclara la fecha del traslado al interior de la
cabildo de Santa María la Mayor de Valladolid da su poder villa. Tradicionalmente se ha venido situando en el marco de
a Fernando Alfonso, arcediano de Lugo, provisor y vicario las luchas fratricidas entre Pedro I y Enrique II (1360-
general, para que en nombre de Ferrán Sánchez Manuel, I 3 6 9 ) , incluso algunos lo remontan a la época de María
2796
abad de Valladolid, lleve a cabo un compromiso con la priora de Molina , sin embargo tuvo lugar varios años después,
2797
e convento del monesterio de sant quir¡e desta dicha villa p o r el cual en época de Juan I, durante la guerra con los portugueses
puedan recibir en él sepultura quienes lo deseen con la con- ( I 3 8 0 - I 3 8 5 ) , tal y como consta en el albalá de 1407:
2798
dición de que una cuarta parte de lo que destinasen a ese fin ... por cuanto el dicho monesterio era edificado primeramente
fuese entregado a la colegiata, produciéndose la firma del allende de la puente de la dicha villa e tenia un huerto ¡erca del
convenio al día siguiente . Este documento es muy
2793 dicho su monasterio (... ) Et di¡en que por quanto al tiempo de
valioso por cuanto nos indica que no hacía mucho tiempo las guerras quel Rey don Juan mi abuelo que dios de santo
que el monasterio se había trasladado al interior de la villa, parayso ovo con los ingleses e con el Rey de Portugal les mando
ya que este tipo de instrumento era expedido por el cabildo derribar el dicho monesterio ...
a los institutos monásticos recién instalados dentro del
También se ha discutido la propiedad de las casas donde
recinto urbano . 2794
se asentaron dentro de la villa. Aunque la tradición del monas-
El 23 de agosto de 1407 Catalina de Lancaster, como terio y la mayoría de las fuentes apuntan a que las cedió el
madre y tutora de Juan II extendía a petición de la priora e mariscal Juan de ulloa , contribuyendo además la propia
2799
monjas e convento del monesterio de sant quir¡e de la villa de valladolit ciudad a las obras de acondicionamiento y construcción del
2791 Publica el testamento, VELO Y NIETO, 1950: en particular 358; al sitio que oy ocupa; y más adelante, en el fol.3r: Pero las grandes guerras que en
cit. p o r RUCQUOI, 1 9 8 7 : I, 2 0 3 y 2 1 5 ; REGLERO DE LA FUENTE, 1 9 9 3 : este tiempo avia con el rey don Pedro el Cruel y su hermano ocasionaron que este con-
171 nota 99. vento se trasladase y estubiese dentro de Valladolid... D e esta opinión son ANTO-
2792 La copia del testamento hecha en 12 de mayo de 1334 se custodia LÍNEZ DE BURGOS, 1 6 4 0 : 3 4 6 ; CANESI, 1 7 5 0 : 6 6 - p a r a este autor la
en el Archivo del Monasterio de Las Huelgas Reales de Valladolid, cajón inauguración del nuevo monasterio se realizaría en I 3 7 I - ; Manual histó-
primero, doc. I, fols.28v-33r, en particular, fol.30. Cit. por REGLERO DE rico de Valladolid, 5 1 ; RUBIO Y BORRÁS, 1 8 9 5 : 82; C0SSÍ0, 1 9 2 2 : 86; Cata-
LA FUENTE, 1993: 171 nota 99. logus Generalis Abbatiarum..., 3 1 7 ; MORAL, 1 9 7 3 (3); MÍLLARUELO, 1 9 8 1 :
2793 Archivo de la Catedral de Valladolid (A.C.V), 7/12; cit. por RUC- 91; GIBERT TARRUELI, 1981: 102 -quien da la fecha exacta de I364-;
QUOÍ, 1987: II, 287. En la firma del compromiso estuvieron presentes MARTÍN GONZÁLEZ y PLAZA SANTIAGO, 1 9 8 7 : 187; RUCQUOI, 1 9 8 7 :
todos los miembros de la comunidad monástica, desde la superiora a las I, 203 - n o obstante, en II: 280-281 señala que la traslación fue tiempo
postulantas: elvira afonso priora e catalina rodrigues sopriora e mariaferrandes sacris- después-. Otros, como RUIZ SOUZA, 1998 (4): 474, apuntan simple-
tana e maryna gon¡ales e sancha lopes e maryna ruis e ynes gon¡ales e maria alfonso e mente que se produjo en la segunda mitad del XIV.
ynes alfonso e beatris gon¡ales dueñas del dicho monesterio e otrosy juana martines e SANGRADOR VÍTORES, I85I-I854: I, 209 y II, 299; QUADRADO,
2 7 9 7
juanaferrandes freyras e teresa sanches e sanchaferrandes e maria sanches e maria xime- 1 8 8 5 : 64; y AGAPÍTO Y REVILLA, 1937: 4 8 9 . T a m b i é n el Becerro al hablar
nes e teresa ferrandes mugeres que estan en el dicho monesterio para monjas e freyras. de la donación de Alonso de Burgos en 1499 dice que fue 178 años des-
RUCQUOI, 1987: II, 284.
2 7 9 4 pués de la traslacion del dicho Monasterio al sitio en que esta (fol.Iv), es decir, 1321,
Inserto en la confirmación de Juan II dada en Segovia el 28 de
2 7 9 5 fecha del testamento de María de Molina.
octubre de 1407, citada en nota 2. Anteriormente había sido confir- P o r su parte, GONZÁLEZ GARCÍA-VALLADOLID, 1 9 0 0 : I, 617, comenta
mado este privilegio por Enrique II, según nos informa el Becerro, fol.Iv: sin decantarse por ninguna, las opciones barajadas por la historiografía
Enrique el segundo reconociendo la necesidad que tenian de huerta las relligiosas y la des- anterior.
comodidad en que della se valian, les concedio privilegio para quel hortelano que las sir- De esta opinión son los redactores de la "Memoria del trabajo rea-
2 7 9 8
viesse fuesse libre de todo pecho y tributo que se tiene original en su poder este convento lizado en el Convento de San Quirce y Santa Julita, Orden Cisterciense,
aunque sin uso de el por la negligencia y descuido que an tenido en confirmarle (tam- de Valladolid, sobre la clasificación, ordenación y descripción de fondos
bién en fol.3r; cit. por ANTOLÍNEZ DE BURGOS, 1640: 346-347; GON- de su archivo y catalogación de fondos bibliográficos" (1992) conservada
ZÁLEZ DÁVILA, 1 6 4 5 : I, 6 4 9 ; SANGRADOR VÍTORES, I 8 5 I - I 8 5 4 : II, en el propio monasterio y de la que existe una copia en el Archivo His-
3 0 0 ; GONZÁLEZ GARCÍA-VALLADOLID, 1 9 0 0 : I, 6 1 8 ) . tórico Provincial de Valladolid.
2 7 9 6E n el Becerro, f o l . I r consta que de alli por la inquietud de las guerras que Becerro, fol.3r; QUADRADO, 1885: 64; MARTÍN GONZÁLEZ y PLAZA
2 7 9 9
avia en Castilla, por el incendio que padecio su edificio y por el prejuicio que las aveni- SANTIAGO, 1 9 8 7 : 1 8 7 .
das del rio le ocasionaban se traslado este monasterio dentro de la ciudad entonces villa
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
452
templo , es más que probable que el benefactor fuese Ruy
2800 Episodio de gran trascendencia para el monasterio
Sánchez de Herrera, regidor de Valladolid y tesorero del tiene lugar en la segunda mitad del siglo XV, momento en
infante don Fernando . 2801
que se produce la reforma del monasterio . 2805
Poco tiempo después, el 2 4 de octubre de I 4 I 9 , Juan Parece ser que fueron las propias monjas las que en
II les concedía 3000 mrs. cada año en la renta del pan en I403 acudieron a Benedicto XII para que las reformase y con-
grano de Valladolid , y en I 4 3 7 salió de esta casa una
2802
cediese la clausura, y así lo acordó el Papa por bula de 5 de
monja, Catalina Martínez de Bonilla, para convertirse en agosto de ese mismo año, encargando su cumplimiento al
abadesa de Torquemada, filial de Las Huelgas de Burgos, obispo de Palencia, aunque éste no llegara nunca a reali-
después del trágico episodio provocado allí por el abad de zarlo . Lo cierto es que ca.I460 el monasterio se encon-
2806
2800 ANTOLÍNEZ DE BURGOS, I640: 346; CANESI, I750: 66; SANGRADOR CALVO, I846: 49; RODRÍGUEZ LÓPEZ, I907: I, 67 nota I y 279-280;
VITORES, I 8 5 I - I 8 5 4 : II, 2 9 9 ; Manual histórico de Valladolid, 5 I ; GONZÁLEZ MÍLLARUELO, I98I: 8I; ESCRIVÁ DEBALAGUER, I988: 2I9;y Fray Dal-
GARCÍA-VALLADOLÍD, I900: I, 6I7, "y para perpetua memoria de este macio Ortiz Espinosa en su Reseña histórica..., 295. Véase además lo que
beneficio se veían en ella esculpidos en el techo lo escudos de armas de esta se comenta al respecto en la monografía de La Espina.
ciudad". También el Becerro comenta al respecto: entro a la parte con el gasto de A.G.S., Mercedes y Privilegios, legajo 4, n.30. En el caso de otros
2 8 0 4
levantar y disponer la yglesia y oi se ven en algunas partes las armas de la ciudad (fol.3r) monasterios como Montesión, también se añade al nombre la misma
y más adelante añade, y la villa entro a la parte en el gasto de lebantar y disponer la coletilla de la orden de sant bernaldo (legajo 4, n.70), mientras que a otros,
Yglesia, como se ven hoy dia en el techo della escudos de Armas de la ciudad (406r). como Palazuelos, esta otra: de la orden de fistel (legajo 4, n.I53).
2 8 W Rafael de Floranes en sus anotaciones a la Historia de Valladolid de Anto- Además del Becerro, fols.Iv-2r y 3v, en el archivo del monasterio se
2 8 0 5
línez de Burgos, aclara lo siguiente: No de Apellido Ulloa si no de Apellido Herrera, conservan varias reseñas históricas relativas a la reforma (caja 2. 3). N o
cuya hija D."Juana de Herrera caso con el Doctor Pero Yañez de Ulloa del Consejo del Rey obstante, la relación más completa es la de Mancio de Torres, Libro Pri-
D. Juan 2° cuyos descendientes son los Condes de Villalonsoy los Marqueses de la Mota. Lla- mero de la Historia de San Benito el Real de Valladolid. M s s del siglo XVIII cus-
mose el Cavallero Ruy Sanchez de Herrera quefue Regidor de Valladolid y enterrado en dicho todiado en la Biblioteca Universitaria, Colegio de Santa Cruz de
Monasterio con su mujer, en monumentos altos, los quales mando rebajar y cercar de rejas Valladolid, 253-255 y 259-279 (en adelante lo citaremos como Histo-
su nieto Rodrigo de Ulloa Contador Mayor de Castilla Señor de la Mota, en su testamento ria de San Benito...). También se pueden encontrar noticias sobre la misma
otorgado juntamente con su muger D. Aldonza de Castilla en Alcalá la Real a 20 de abril
a en ANTOLÍNEZ DE BURGOS, I640: 347-348; CANESI, I750: 67 -con
de 1491, que esta en el Archivo del Convento de S.Lldefonso de Toro de PP. Dominicos, ori- algunos fallos en la cronología-; SANGRADÓRVITORES, I85I-I854: II,
ginal en el Cax. 8 n 1. Y en el Cax.10 n.1 está el de su madre D. Juana de Herrera 2
a a 300-304; ORTEGA Y RUBIO, I88I: I, 237-238; GONZÁLEZ GARCÍA-
mujer de D. Pedro Yañez de Ulloa del Consejo del Rey D. Juan 2° hecho aquí en Valladolid VALLAD0LID, I 9 0 0 : I, 6 I 8 - 6 I 9 ; Manual histórico de Valladolid, 5 I ; BELTRÁN
siendo ya viuda, a 5 de Mayo de 1471, ante Afon Rodriguez de Cuellar escrivano publico. DE HEREDIA, I937: 2I2-2I3; ZARAGOZA PASCUAL, I973: I27-I29;
En la qual despues de varias disposiciones da poder para otras muchas al M. Fr. Anton de RODRÍGUEZ MARTÍNEZ, I98I: I I 9 - I 2 0 ; RUCQUÓÍ, I987: II, 308;
Peñafiel Prior del Convento de San Pablo, al Comendador Francisco de Leon Regidor de esta DIAGO HERNANDO, I997: 82I-825; y ZARAGOZA PASCUAL, 2009.
villa y a Garcia de Tovar vecino de ella; los quales, ella difunta, las acabaron estando en la Mancio de Torres en su Historia de San Benito, 75-76; SANGRADOR
2 8 0 6
Yglesia de S.Andres en 8 deJulio por testimonio del mismo Escrivano. Y una de ellas fue man- VÍTORES, I85I-I854: II, 300; GONZÁLEZGARCÍA-VALLADOLID, I900:
dar 500 misas por las animas del Mariscal Ruy Sanchez y su muger padres de la difunta, I, 6I8.
de las quales las 100 se dixesen en S.Quirce donde estavan enterrados. Asi bien declaran que A.H.N., Clero, legajo 7.730; cit. por DÍAGO HERNANDO, I997:
2 8 0 7
D." Juana dio en vida al dicho Convento para ciertos aniversarios por su alma, 3 pares de 822. También Mancio de Torres en su Historia de San Benito se refiere al
casas en la calle de la Juderia de esta Ciudad, las que compro para este efecto D." Catalina y lamentable estado espiritual del monasterio: Uno de los Monasterios que tenian
D."Maria de Ulloa sus hijas. Le mandan mas, por aver sido esta su intencion, 1500 mrs. mucha necesidad de reformación era el de San Quirce de Valladolid de la Orden del Cis-
de juro perpetuo, y que se ls costee la saca del privilegio en su cabeza (en Historia de Valla- ter, porque aunque todas las monjas salian y acompañaban los Difuntos e iban a hacer
dolid, fol.357v). Le sigue RUCQUÓÍ, I987: I, 203 y II, 280-28I. sus honrras y cantarles misas a otras Yglesias, y demas de esto salian a sus negocios y entre-
2802 Becerro, fol.Iv. tenimientos sin haber en España mas de quatro Monasterios con reclusión y observancia
2803 Archivo del Monasterio de Las Huelgas de Burgos, legajo 6, que eran Zafra, Zamora, Rapariegos y Santander como dixe al principio. Con todo esto
núm.I96 (Vid. Apéndice documental). Reseñan este acontecimiento, estaba muy notado el de San Quirce de mucha relaxacion ( f o l s . 2 5 6 - 2 5 7 ) .
FUNDACIONES FEMENINAS • 453*
honestamente, al tiempo que inhibía a cualquier monje o de I 4 6 2 ordenando al merino mayor de Valladolid Alfonso
prelado de la Orden que pudiera entrometerse en el Niño hiciese cumplir las disposiciones necesarias para pro-
asunto . La oposición de un grupo de monjas no se hizo
2808 ceder a la reforma del monasterio™ . A pesar de todo ello,
0
esperar y se negaron a recibir al carpintero enviado por fray las rebeldes obtuvieron letras inhibitorias a favor de la
Juan de Gumiel para poner reja y torno con el fin de esta- priora depuesta y de los abades que la apoyaban en 2 8 de
blecer la clausura, llegando incluso a derribar algunas paredes abril de ese mismo año, citando a Juan de Gumiel para que
de la clausura para que no la huviese. Además, la por entonces se presentase en Roma el día 2 2 de junio a dar explicacio-
priora Isabel González de Portillo junto a otras cuatro o nes de su a c t i t u d . El I 0 de septiembre Pío II extiende
28n
cinco monjas huyeron del monasterio llevando consigo otro breve reafirmándole el encargo de la reforma y el 9 28I2
alhajas y documentos, haciéndose apoyar por gente armada. de noviembre el prior lanza censuras sobre aquellos que
El 29 de enero de I 4 6 2 el prior de San Benito fulminó cen- tuvieran ocultos bienes, escrituras y privilegios del monas-
suras contra estas religiosas y sus colaboradores. Mientras terio o debieran deudas y rentas. Finalmente, el 28 de mayo
tanto, en el monasterio habían quedado las afectas a la de I 4 6 3 el Papa daba fin a la reforma, confirmaba la elec-
reforma: Inés González, sopriora, Juana Pan de Salvi de ción de Juana del Valle como priora y sometía el monaste-
Valdenebro, María Fernández, María Núñez de Paredes, rio a la autoridad de San Benito . 28t3
Juana Sanzio y Juana de Valle, nombrando a ésta última Como hemos visto, hasta el segundo tercio del siglo
nueva priora. XV no aparece documentado el monasterio como cister-
El 24 de febrero las monjas rebeldes requirieron al de ciense. Y aunque este dato por sí solo no es en absoluto con-
San Benito que no volviese al monasterio, pero dos días más cluyente, es extraño que el tratamiento que se da a la superiora
tarde lanzaba censuras contra Juan Rodríguez de Toro, Arce- de San Quirce de Valladolid sea el de priora, aunque no es un
diano de Valderas y Chantre de Valladolid, que se intitulaba a caso único™ . Pero además, cuando el Capítulo General de
4
Juan de Palazuelos con el fin de que impidiese la reforma. que en Valladolid no había por entonces otro monasterio cis-
Éstos excomulgaron a Gumiel y éste a su vez, como juez comi- terciense femenino o, al menos, que San Quirce no estaba
sario e delegado dador deputado por nuestro señor el papa pio segundo para
por entonces sujeto pleno iure a la Orden™ . N o obstante, la6
dolid, lo que tuvo lugar el 3 de septiembre de I 6 3 3 por bula de Sobre esta circunstancia, vid. lo que se comenta en la monografía
2 8 I é
Urbano VIII (A.H.N., Clero, libro I6.975, Constituciones del Illmo. Sr. D. del Sancti Spiritus de Olmedo y en la introducción general histórica.
ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )
454
"oficial" de la Orden , aunque siga sin estar claro si fue
2817
3. APÉNDICE DOCUMENTAL
cisterciense desde su origen.
1437, junio, 29. Monasterio de Santa María del
Escobar, Torquemada.
Testimonio de la toma de posesión como abadesa del
monasterio de Santa María del Escobar, de Catalina Mar-
2. ANÁLISIS ARTÍSTICO tínez de Bonilla, profesa de San Quirce de Valladolid, en el
Ningún resto permanece de las construcciones medie- que se hace un relato de la pretensión de Alfonso de
vales y los escasos datos documentales que conservamos Urueña, abad de la Espina, de convertir el monasterio del
anteriores a la reforma se refieren exclusivamente al primer Escobar en abadía masculina y los pleitos que se sucedieron
asentamiento del monasterio y aún así no son nada con- por este motivo entre aquél y el monasterio de Las Huel-
cluyentes. En el momento en que las monjas de San Quirce gas de Burgos, de cuya filiación era el de Torquemada.
se instalaron en el interior de la villa habilitarían las distin- Archivo del Monasterio de Las Huelgas de Burgos,
tas dependencias que conformaban las casas de Ruy Sán- Legajo 6, n. 196.
chez de Herrera para su nuevo uso, participando al parecer In dei nomine Amen. Conoscida cosa sea a todos quantos la pre-
la propia ciudad de Valladolid en la construcción de la igle- sente escriptura oyeren e vieren como en el monesterio de santa
sia28I8 maria de escobar ¡erca de la villa de torquemada de la orden de ¡is-
. N o obstante las obras avanzarían de forma bastante
tel de la dio¡esis de palen¡ia domingo veynte e nueve dias del mes
lenta, por cuanto a finales del siglo XV fray Alonso de Bur- de junio año del nas¡imiento de nuestro Señor iesu christo de mil
gos ofreció un cuantioso donativo en su testamento de 2 4 e quatro¡ientos e treynta e siete años en la indi¡ion quin¡ena e en
d e o c t u b r e d e 1 4 9 9 : Otrosi, mandamos al monasterio de San Quirce el alo septimo del pontificado del muy Sanctissimo Iesu christo
de esta villa treinta mil maravedis para el reparo de la casa, especialmente padre e seños nuestro Añor el papa eugenio quarto, estando y pre-
para acabar las tapias de lafrontera y delantera del dicho monasterio . 2819
sente la muy noble e venerable religiosa donna maria de gu¡man
El resto de noticias que hemos localizado se limitan única- por la gracia de dios abbadesa del monesterio de santa maria la Real
mente a mencionar la celebración del capítulo, bien a la de las huelgas ¡erca de burgos, madre superiora e visitadora que es
puerta de la capilla pryn¡ipal del dicho monesterio que sale a la claostra del dicho monesterio de sancta maria de escobar, e asi mesmo,
( I 4 7 2 ) , en la capilla mayor de la iglesia ( I 4 7 4 ) o en
2820 2821
estando y presente el reverendo padre e señor don Sancho por essa
la grada (1475 y I 4 9 I ) . 2822
mesma dicha orden de la diocesis de burgos, en presencia de mi
El 9 de agosto de 1620 se comprometía Francisco de juan Alfonso preste de burgos notario publico por la auctoridad
Praves a reedificar la iglesia, sacristía, capítulo, escalera y apostolica e de los testigos de yuso escriptos, luego la dicha Señora
claustros alto y bajo. A mediados del siglo XVIII se hace un abbadessa dixo que don Alfonso Abbat de la espina syn ningund
nuevo coro . Entre 1964 y 1967, ante el estado de ruina
2823 titulo ni auctoridat con poder de gente de armas no se sabiendo
se levanta un convento de nueva planta, conservando ade- con que espiritu echara del dicho monesterio de santa maria de
más de la iglesia pocos restos del edificio moderno . 2824 escobar por fuer¡a a doñaynes Alvarez de monte mayor abbadessa
apoyo del superior de La Espina, siendo confirmado por bula de Ale- 2821A.H.N., Clero, legajo 7.789.
jandro VI en 1500 (sobre este episodio, vid. CAVERO DOMÍNGUEZ, 1475, enero, 21; y 1491, mayo, 16 (A.H.N., Clero, legajo 7.790).
2 8 2 2
1992: 740; idem, 1994: doc. 194, 66-67, doc. 196, 67 y doc. 204, 69; Sobre estas intervenciones, vid. MARTÍ Y MONSÓ, I898-I90I: 608
2 8 2 3
CAVERO DOMÍNGUEZ y GONZÁLEZ GARCÍA, 2000: 96-98). nota I; GARCÍA CHICO, 1940: 149; NIETO GALLO, 1964: 109-110;
Vid. nota 2801.
2 8 1 8 MARTÍN GONZÁLEZ, 1967: 56-58; idem, 1972: 105-106; BUSTAMANTE
2819 Publican el testamento: Rafael de Floranes en sus Apuntes para la his- GARCÍA, 1983: 470-471; MARTÍN GONZÁLEZ y PLAZA SANTIAGO,
toria de Valladolid, BN, mss. 11.283, fols.245v-263r, en concreto, 250r; y 1987: 187-189; MERINO BEATO, 1989-1990: I, 188; o FERRERO
ARRIAGA, 1928: 113-136, en particular, 118; cit. por Becerro, fols.Iv y MAESO: 1995: 122-125, 178-179.
3v; ANTOLÍNEZ DE BURGOS, 1640: 347; CANESI, 1750: 66; SANGRADOR El proyecto, firmado en enero de 1965, se puede consultar en el
2 8 2 4
VÍTORES, I85I-I854: II, 300; GONZÁLEZ GARCÍA-VALLADOLID, 1900: Archivo Municipal de Valladolid, 1232-99
FUNDACIONES FEMENINAS • 455*
quefuera del dicho monesterio a la qualfefiera renunfiar la dicha ron e intronifaron en la silla pastoral de abbadessa segunt que lo
abbadia en sus manos defiendose visitador de la orden e echara las han de uso e de costumbre e luego la copiaron al dicho cabillo e la
otras monjas efreyras e religiosas que en el dicho monesterio esta- asentaron en el logar donde se acostumbraron las predecesoras abba-
van e puso en el dicho monesterio afray Juan de paredes por abbat desas de assentar en el dicho cabillo et luego el dicho cabildo ante la
e monjes otros con los quales la dicha Señora abbadessa de las huel- dicha Sennora abbadessa ynes lopez e juana nunnez monjas que y
gas asi como madre superiora del dicho monesterio e de las dichas estavan e olallagutierrez freyrafefieron obedienfia a la dicha catha-
monjas que asi fueron echadas litigaron e ovieron questiones e plei- lina martinez electa poniendo las manos en el libro de la Regla de
tos delante el conservador del dicho monesterio de las huelgas el la dicha orden que la dicha electa tenia en sus manos defiendo cada
qual diera e pronunfiara sus sentenfias contra el dichofray lohan una de ellas singularmente yo vos prometo obedienfia de bien fasta
abbat que se defia e contra los otros monjes que con el estavan e la muerte secund regulam sancti beneditti E la dicha electa respondia
advidico al dicho monesterio de las huelgas e a la dicha Sennora a cada una deg det vita eterna E luego la dicha Sennora abbadessa
abbadesa la superioridat e paternmitat del dicho monesterio de santa aviendofallado e con conseio del dicho sennor abbat la dicha catha-
maria de escobar e ser de su subieccion e obedienfia segund mas lar- lina martinez electa por verdadera enformafion de personas fide-
gamente se contiene en las dichas sentencias a las quales dichas sen- dignas ser de legitima edat para aver la dicha abbadia e de legitimo
tencias el dicho fray juan abbat que se defia obteniero e advico e matrimonio procreada e profess expressamente en la dicha orden e
renunfio la dicha abbadia et el dicho don alfonso abbat de la espina de buena vida e conversafion e honesta e parta no sacta [?] para
puso otro por abbat en el dicho monesterio qye se deía fray pedro aver e administrar en lo spiritual e temporal la dicha abbadia e
de sant andres monje del monesterio de la espina, sobre lo qual monesterio dixo que le instituya e instituyo por abbadessa e pas-
todo por su parte de la dicha sennora abbadessafue expuesto en el tora del dicho monesterio e la instalava e instalo e la asignava e la
cabillo general que los abbades deste Reynofefieron en la noble Villa asigno logar en el cabillo e stado en el coro e le dio la administra-
de Valladolit estando y presentes los visitadores de la orden et los fion en lo espiritual e temporal E en sennal de la administrafion
otros abbades los quales avida su plenaria informacion e sobre todo de lo spiritual e temporal e de la possessio e que si de todo ello le
su deliberafion fallaron todo lo fecho e autorifado por el abbat de dio la Regla de la orden e un sello e las llaves prinfipales del mones-
la espina ser ninguno et el non poderfafer de derecho lo que avia terio E el dicho sennor abbat en presenfia de la dicha sennora abba-
fecho. E por ende que ellos que lo revocavan e anullavan e davan desa tomo e resfibio de la dicha electa juramento en forma devida
por ninguno asi commo defecho era e ponian e pusieron perpetuo segunt orden que bien e leal e verdaderamente regiria e adminis-
silenfio al dichofray pedro abbat que se defia intruso e a todos los traria el dicho monesterio e personas del e todos los bienes e frutos
otros intrusos, incrudendo so fiertas penas e que dexassen la pos- e rentas e derechos al dicho monesterio pertenesfientes e de guardar
sesion corporal real actual del que si vel dicho monesterio de santa siempre la obedienfia e reverencia del dicho monesterio de las huel-
maria de escobar a la dicha sennora abbadessa madre superiora gas e de la dicha Sennora abbadessa e de sus successoras echado de
que era e es del dicho monesterio. E a ella que tomasse por suio por la confusion del juramento E la dicha electa respondio si juro e
su fierto mandado la dicha possession. Esto e otras cosas segunt se Amen E en testimonio de lo qual la dicha Sennora abbadessa
contiene mas largamente en las dichas sentenfias E agora que ella mando a mi el dicho notario que fisiese e ordenasse de todo lo suso-
por virtud de las dichas sentenfias e asi como madre superiora que dicho una carta de decreto o dos o mas para la dicha electa e las
era del dicho monesterio dixo que avia tomado e tomara la posses- mandava sellar de su sello e que rogava al dicho abbat que le sellasse
sion del dicho monesterio e que la fallava vacado de abbadessa e con su sello e a mi que la signasse de mi signo e a los presentes que
monjas en que a ella asi como madre superiora pertenesfia e con- fuessen dello testigos que fue fecho todo lo suso dicho en el dicho
venia la provision de la dicha abbadia del dicho monesterio, por monesterio de santa maria de escobar año indifion e mes e dia e
ende que ella seyendo enformada de la verdadera honestidad e difi- pontificado susodichos testigos que fueron presentes don fray gil
cacion de la honesta e devota religiosa Cathalina martinez de voni- monje confessor en el monesterio de las huelgas e juan fernandez
lla monjaprofessa en la dicha orden en el monesterio de sant quirfe de nobares notario apostolico e bartholome sanchez cura e diego
de valladolid, discreta y virtuosa e monjas expresamente proffessa rodriguez bachiller en decretos e juan alfonso clerigos benefifiados
e de legitimo matrimonio procreada en lo spiritual e temporal cir- en la eglesia de santa olalla de la dicha villa de torquemada a esto
cunsptecta invocada la grafia del spiritu sancto sobre todo avido su llamados espefialmente e rogados
conseio e deliberafion e plenaria informacion e con conseio del dicho
señor abbar, dixo que preveia e proveyo a la dicha cathalina mar- E yo el dicho Johan afonso notario apostolico que a todo lo
tinez de la dicha abbadia E que la instituyera e instituyo por abba- dicho es presente fuy, e de mandamiento e ruego de la dicha
desa pastora regidora e governadora del dicho monesterio de santa Sennora doña maria de gufman abbadessa de las huelgas madre
maria de escobar E luego la dicha Cathalina martinez que presente superiora e visitadora del dicho monesterio de santa maria de
estava dio assenso a la dicha provision e consistio en ella cantando escobar esta carta de decreto escrita en uno con su sello e con el
el dicho Seños Abbad de ruego de la dicha sennora abbadessa por sello del dicho Sennor abbad le signe con mi signo en fe e en tes-
falta de monjas Te deu laudo ing. con otras personas honestas e timonio de verdat para la dicha
religiosas E el dicho Señor abbat e la dicha Sennora abbadessa leva- lohannes afonso
ron a la dicha cathalina martinez con el canto al choro e la pusie-
notario publico apostolico.
Cuarta parte
Fuentes documentales
y Bibliografía
Fuentes documentales
• 461 •
Fuentes documentales
Valbuena: 246 r
A R C H I V O G E N E R A L D E LA A D M I N I S T R A - UNIVERSIDAD DE SANTIAGO
C I Ó N . ALCALÁ D E H E N A R E S D E COMPOSTELA. BIBLIOTECA
LÓPEZ DE URIBE, J., 1 9 8 1 : Proyecto de obras de restauración en el G E N E R A L (LA C O R U Ñ A )
Monasterio de Santa María de Valbuena de Duero. Valladolid.
Copia manuscrita del Cronicón, manuscrito igualmente, de Santa María
Cultura, AGA 68.052.
de Sobrado, compilado por Fr. Mauricio Carbajo, p o r Benigno
Cortés y García. Mss. 587.
SECRETARÍA D E ESTADO D E CULTURA.
ARCHIVO CENTRAL. M A D R I D
* "Expediente de obras urgentes en la Iglesia de Santa María MINISTERIO D E AGRICULTURA.
la Real de Palazuelos, 1945-1946", C. 87.406. Archivo de la Dirección General de Desarrollo Rural
* "Antecedentes relativos a la Iglesia de Santa María la Real * Proyectos de reparación y reconstrucción del monasterio
de Palazuelos, 1944-1956", C. 88.639. de Valbuena, 1961-1964, 10840, 12658, 12752 y
13601.
INSTITUTO DEL PATRIMONIO HISTÓRICO
ESPAÑOL. M A D R I D I N S T I T U T O D I E G O V E L Á Z Q U E Z (CSIC)
Servicio de Monumentos y Arqueología. ANTÓN, F., Catálogo monumental de la provincia de Valladolid.
Bibliografía
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Bibliografía
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índice
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PRESENTACION 9
PRÓLOGO II
INTRODUCCIÓN 13
2. Las filiaciones . 43
2.1. Las fundaciones masculinas: Clairvaux y Morimond frente a Citeaux 43
2.2. La diversidad jurídica de los monasterios femeninos 44
3. Los fundadores: monarquía y nobleza 45
4. Principales causas de la implantación cisterciense. 48
5. Crisis y reforma. . 50
. 5 0 6 . ARQUITECTURA DE LA ORDEN DEL CÍSTER EN LA PROVINCIA DE VALLADOLID ( I I 4 7 - I 5 I 5 )