Reflejo, en fisiología, respuesta involuntaria que se produce en un organismo animal
frente a un estímulo. En su forma más simple consiste en la estimulación de un nervio sensitivo (aferente) a través de un órgano de los sentidos o receptor, seguida de la transmisión del estímulo, por lo general a través de un centro nervioso, a un nervio motor (eferente). El resultado de este proceso es la acción de un músculo o glándula, que recibe el nombre de efector. Sin embargo, en la mayoría de las acciones reflejas el estímulo pasa a través de una o más neuronas intermedias que modifican y dirigen su acción, a veces hasta el punto de producir la actividad muscular de todo el organismo. Por ejemplo, un estímulo doloroso aplicado en una mano produce la retirada refleja de la mano, la cual implica la contracción del grupo de músculos que cierran el ángulo de la articulación (músculos flexores) y la relajación del grupo opuesto de músculos, que por lo general mantienen abierto el ángulo de la articulación (músculos extensores). Si el estímulo es fuerte, las neuronas que lo coordinan lo transmiten a los músculos del brazo, y también a los músculos del tronco y de las piernas. El resultado es un salto para retirar del estímulo doloroso, no sólo el brazo, sino todo el cuerpo.
El sistema de neuronas coordinadoras funciona de manera que diferentes tipos de
estímulos pueden dar lugar al mismo resultado. Por ejemplo, el estímulo producido por la visión de la comida y el originado por su olor, viajan por vías aferentes distintas, pero ambos confluyen en una vía final común que estimula la secreción por parte de las glándulas salivares. La vía final común también se activa a través de tractos nerviosos relacionados con ella por un estímulo que no esté conectado con la respuesta. El fisiólogo ruso Iván Petróvich Pávlov dio a este tipo de reflejo el nombre de condicionado. En 1904, Pávlov descubrió que haciendo sonar una campanilla cada vez que un perro iba a recibir alimento le producía la salivación por reflejo, que persistía aunque no se proporcionara comida al animal. Algunos fisiólogos y psicólogos consideran que la creación de este tipo de reflejos constituye una base importante para muchos tipos de comportamiento, tanto voluntario como involuntario.
Por lo general, se conocen las rutas normales de muchos reflejos, y la presencia,
ausencia o exageración de las respuestas físicas normales a ciertos estímulos constituyen síntomas que los neurólogos utilizan para determinar cuál es la situación de las vías neurales implicadas. Un reflejo que los médicos comprueban de forma común es el reflejo rotuliano: un espasmo involuntario de la rodilla cuando se golpea ligeramente el tendón de la rótula. La presencia de este reflejo pone de manifiesto la eficacia de determinados tractos nerviosos de la médula espinal.