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SOLICITA DECOMISO ANTICIPADO

Señor. Fiscal Federal:

Margarita Stolbizer, en mi condición de denunciante y amicus


curiae, con el patrocinio de la Dra. Silvina A. Martínez T°94 F° 458 CPACF,
manteniendo el domicilio constituido, respetuosamente ante V.S. en la causa
N° 11352/2014 digo:

I. OBJETO.-

Que atento el estado de la causa, y en el entendimiento que


resulta aplicable lo dispuesto en el articulo 23 del Código Penal es que
solicito, por su intermedio, se requiera al juez de la causa, disponga el
decomiso anticipado de los bienes utilizados como instrumento para cometer
los delitos que se investigan en las actuaciones y que fueran de Néstor
Kirchner, como así también sus ganancias.
El articulo 23 CP requiere que se haya comprobado el origen
ilícito de los bienes o el hecho material con el que están vinculados y una
imposibilidad de juzgar a las personas imputadas en tales delitos o que éstas
hubieran reconocido la ilicitud del origen de los bienes o su uso ilícito. Esta
disposición se aplica a los bienes que sirven como instrumento del delito de
lavado de activos o que constituyen su producto o provecho, y a los efectos
relacionados con aquél.
Por ello, a los fines expuestos, y en base a las consideraciones
de hecho y de derecho que a continuación expongo, es por lo que se solicita
se arbitren las medidas a los fines de que se ordene el decomiso de los
bienes que fueran de Néstor Kirchner, ya sea que fueran utilizados para
cometer los delitos investigados como también el producto o ganancia
derivada de los hechos criminales o de los mencionados bienes.

II. HECHOS .-

La presente causa se origina a raíz de una denuncia por mi


efectuada en el año 2014, en la cual describí una operatoria de lavado de
activos a través de la utilización de hoteles de propiedad de la Familia
Kirchner.
Así, a lo largo de la instrucción pudo comprobarse que Néstor
Kirchner, Cristina Fernández, Máximo Kirchner, Florencia Kirchner, Lázaro
Báez, Martín Báez, Osvaldo Sanfelice, Víctor Manzanares, entre otros,
habrían formado parte de un complejo entramado societario que se
desarrolló con el fin de poner en circulación en el mercado parte de las
ganancias obtenidas como consecuencia de la defraudación al Estado
nacional cometida a través de la adjudicación irregular de la mayor porción
de obra pública vial en la provincia de Santa Cruz, lo que se habría
materializado hasta el 12/11/15. Para ello, realizaron diversas operaciones
comerciales -con las que pretendieron otorgarles a las ganancias antes
mencionadas apariencia de legítimas- mediante las cuales se canalizaron los
fondos en forma regular desde las empresas de Báez adjudicatarias de
dichas obras y sus vinculadas, a Valle Mitre SA -también del empresario
nombrado-; fundamentalmente a través de la actividad hotelera.

Valle Mitre SA, sin contar con capacidad económica ni


experiencia en el rubro, administró el hotel Alto Calafate y la hostería Las
Dunas -propiedad de la familia Kirchner- y abonó mensualmente en
concepto de cánones locativos, sumas de dinero que finalmente se
introdujeron en el patrimonio de aquellos, todo con miras a ocultar la fuente
real de los fondos y a otorgarles apariencia de lícitos.

Para la ejecución fue necesario que el fallecido Néstor Kirchner


y Cristina Fernández se hicieran de fondos líquidos para poder justificar la
adquisición de esos establecimientos hoteleros; en consecuencia, registraron
entre los años 2005 y 2009 múltiples negocios -en su mayoría con Lázaro
Antonio Báez-. Con el dinero recaudado de aquellas operaciones, Kirchner -a
través de su hijo Máximo- adquirió el 12/2/08 el hotel Las Dunas por la
suma de U$D 700.000 y el 7/11/08 la totalidad del paquete accionario de la
firma Hotesur SA, propietaria del hotel Alto Calafate, por U$D 4.900.000,
operación en la que intervinieron diversas personas físicas y jurídicas a él
vinculadas.

Con posterioridad, se le cedió la explotación comercial de


aquellos a la firma Valle Mitre SA, la que, como se dijo, habría receptado los
fondos de las empresas que fueron adjudicatarias de obra pública vial en la
provincia de Santa Cruz y de sus vinculadas, para luego direccionarlos al
pago de los cánones locativos derivados de esos contratos.
Finalmente, la concesión de los hoteles Las Dunas y Alto
Calafate pasó a manos de la firma Idea SA, sin perjuicio de lo cual Austral
Construcciones SA continuó girando dinero a Valle Mitre SA al menos por la
suma de $15.291.568,75 y hasta el 12/11/15; aun cuando ésta disminuía su
actividad comercial. Aquella habría sido utilizada para abonar las deudas
que la segunda mantenía con la AFIP.

Néstor Kirchner, Fernández y sus hijos, habrían extraído dinero


de Hotesur SA, sin distribuir dividendos de acuerdo con las ganancias
realizadas y líquidas correspondientes a un balance de ejercicio
confeccionado y aprobado; además de haberse detectado otras anomalías
vinculadas a la forma en la que fueron llevados los libros societarios.
Contemporáneamente a todo ello, otras empresas del conglomerado
societario de Báez se habrían ocupado de transferir, directa o
indirectamente, parte de los fondos provenientes de la irregular asignación
de obra pública vial en la provincia de Santa Cruz a dicha gerenciadora por
diferentes conceptos; lo que se habría justificado mediante contratos
simulados.

Pudo comprobarse que Néstor Kirchner, Cristina Elisabet


Fernández, Máximo Carlos y Florencia Kirchner, Lázaro Antonio y Martín
Antonio Báez, Osvaldo Sanfelice, a través de la estructura conformada a tal
fin, posibilitaron con su accionar concreto que los fondos que eran
obtenidos de forma irregular a través de las empresas pertenecientes al
conglomerado de Báez fueran conducidos hacia la actividad hotelera y con
posterioridad, se integraran al patrimonio de la familia Kirchner. Todo esto,
con el objeto de que pudieran disponer de ellos libremente ya que se
encontraban “blanqueados” y en apariencia distanciados de su origen.

Los nombrados, menos Néstor Kirchner, fueron procesados en


las presentes actuaciones. En el caso del primero la acción penal se
encuentra extinguida con motivo de su fallecimiento.

Ahora bien, cuando avanzaban las investigaciones judiciales


contra la familia Kirchner, rápidamente y en una maniobra para evitar el
decomiso anticipado, y a pesar de las inhibiciones dispuestas judicialmente
Cristina Kirchner, cedió sus bienes inmuebles a sus hijos y estos últimos
inscribieron los bienes que eran de su padre a su nombre. Se trata de otra
de las maniobras para evadir medidas judiciales. Años tardaron en inscribir
la declaratoria de herederos en relación a los bienes de Néstor Kirchner ya
que no había riesgos de su decomiso. Y recién cuando la justicia ordenó la
intervención de la sucesión con desplazamiento del Sr. Máximo Kirchner
como administrador, apareció una escritura de cesión de derechos en
relación con los bienes que le pertenecía por liquidación de la sociedad
conyugal a la Sra. Cristina Fernández de Kirchner en favor de sus hijos
Máximo y Florencia Kirchner. Alertamos esta maniobra nuevamente ante la
justicia como una burla a las diferentes medidas judiciales e informamos
que los bienes habían sido inscriptos a nombre de los hijos de la Sra.
Fernández a fin de evitar nuevos embargos. Entonces la justicia dispuso la
inhibición de bienes para impedir que tanto Máximo como Florencia Kirchner
pudieran desprenderse de ese patrimonio.

Otra de las maniobras tuvo por objeto ocultar el dinero en


efectivo de Néstor Kirchner. Alertamos sobre la maniobra para que todo el
dinero en efectivo de la sucesión de Néstor Kirchner (el cual se había
duplicado en pocos años sin explicación legal) y que estaba alojado en unas
cajas de seguridad en el Banco Galicia Casa Central había pasado a nombre
de Florencia Kirchner, quien no era investigada hasta ese momento en causa
judicial alguna. Rápidamente la justicia encontró dichos fondos y
actualmente se encuentran embargados ascendiendo a casi 5 millones de
dólares. Se trataba de una nueva maniobra para que la justicia no pudiera
embargar ese dinero, cuando pesaban diferentes causas judiciales que
investigaban el origen de la fortuna familiar.

Pero la maniobra de los Kirchner para entorpecer el curso del


proceso y vulnerar medidas judiciales no termina aquí. Una vez que la
justicia dispuso la intervención con desplazamiento de administrador en
relación a la sucesión de Néstor Kirchner, Máximo y Florencia Kirchner
burlaron dicha intervención creando un condominio, y percibiendo los
alquileres que correspondían a las más de 26 propiedades de las que
resultaban titulares producto de la sucesión de su padre y la cesión de
derechos de su madre. Consecuencia de esa maniobra que fue entendida
como un intento de burlar o eludir la investigación judicial, se ordenó la
detención de Víctor Manzanares, contador de la familia Kirchner.

III: FUNDAMENTOS DE LA PETICION:


No debe perderse de vista que la República Argentina ha
asumido diversos compromisos internacionales con relación a las acciones
necesarias que los Estados deben adoptar para lograr la identificación de
bienes y el recupero de activos de origen ilícito. Entre ellos se destacan: la
Convención de las Naciones Unidas contra el Tráfico Ilícito de Estupefacientes
y sustancias Psicotrópicas (aprobada por ley 24.072), la Convención
Interamericana contra la Corrupción (aprobada por ley 24.759), la
Convención Internacional Contra la Delincuencia Organizada Transnacional y
sus protocolos complementarios (aprobada por ley 25.632), la Convención
Interamericana contra el Terrorismo (aprobada por ley 26.023) y la
Convención de las Naciones Unidas contra la Corrupción (aprobada por ley
26.097). Idéntica actitud fue asumida a través de la participación directa de
la Argentina en distintos foros internacionales, como el Grupo de los 20 (G-
20) y el Grupo de Acción Financiera sobre el blanqueo de capitales
(GAFI/FATF), GAFISUD, entre otros.

Bajo estos lineamientos, al art. 23 del Código Penal, por ley N°


26.683 le fue incorporado el siguiente texto: “.....En caso de los delitos
previstos en ....Título XIII del Libro Segundo de este código, serán
decomisados de modo definitivo, sin necesidad de condena penal, cuando se
hubiere podido comprobar la ilicitud de su origen, o del hecho material al que
estuvieren vinculados, y el imputado no pudiere ser enjuiciado por motivo de
fallecimiento, fuga, prescripción o cualquier otro motivo de suspensión o
extinción de la acción penal, o cuando el imputado hubiere reconocido la
procedencia o uso ilícito de los biene s. Todo reclamo o litigio sobre el origen,
naturaleza o propiedad de los bienes se realizará a través de una acción
administrativa o civil de restitución. Cuando el bien hubiere sido subastado
solo se podrá reclamar su valor monetario. El juez podrá adoptar desde el
inicio de las actuaciones judiciales las medidas cautelares suficientes para
asegurar el decomiso del o de los inmuebles, fondos de comercio, depósitos,
.....y todo otro bien o derecho patrimonial sobre los que, por tratarse de
instrumentos o efectos relacionados con el o los delitos que se investigan, el
decomiso presumiblemente pueda recaer....”.

Por otra parte, el art. 305 del Código Penal prevé en su segundo
párrafo: “...En operaciones de lavado de activos, serán decomisados de modo
definitivo, sin necesidad de condena penal, cuando se hubiere podido
comprobar la ilicitud de su origen, o del hecho material al que estuvieren
vinculados, y el imputado no pudiere ser enjuiciado por motivo de
fallecimiento, fuga, prescripción o cualquier otro motivo de suspensión o
extinción de la acción penal, o cuando el imputado hubiere reconocido la
procedencia o uso ilícito de los bienes. Los activos que fueren decomisados
serán destinados a reparar el daño causado a la sociedad, a las víctimas en
particular o al Estado. Sólo para cumplir con esas finalidades podrá darse a
los bienes un destino específico. Todo reclamo o litigio sobre el origen,
naturaleza o propiedad de los bienes se realizará a través de una acción
administrativa o civil de restitución. Cuando el bien hubiere sido subastado
sólo se podrá reclamar su valor monetario.”

Esta disposición debe aplicarse a los bienes que sirven como


instrumento del delito de lavado de activos o que constituyen su producto o
provecho, y a los efectos relacionados con aquél. Los productos “refieren a
los bienes derivados u obtenidos, directa o indirectamente, de la comisión de
un delito”. Por su parte, como bienes entendemos “activos de cualquier tipo,
tangibles o intangibles, muebles o inmuebles, y documentos legales o
instrumentos que evidencien la titularidad o participación en esos activos”.

Así es que puede aplicarse el decomiso sin condena tanto al


instrumento empleado en la comisión del delito como a los bienes que
derivan o se obtienen inmediatamente del delito. Pero también incluyen las
ganancias que se obtienen o derivan del producto directo del delito.

En el caso se dan los presupuestos para su aplicación: El Sr.


Néstor Kirchner no puede ser enjuiciado por lavado de activos por las razones
expresamente referidas en el artículo (extinción de la respectiva acción
penal). De no haber mediado la extinción de la acción penal aquel podía
haber sido enjuiciado de acuerdo con la normativa aplicable al caso. Se
corrobora en el caso -cuanto menos- una de las condiciones previstas que
impedirían el enjuiciamiento de uno de los imputados (fallecimiento). Se
requiere, además, la comprobación judicial de la ilicitud de su origen o del
hecho material al que estuviere vinculado. Y ello surge en forma clara de las
presentes actuaciones como también del auto de procesamiento
oportunamente dictado.

Como resulta expresamente de la letra del art. 305, párr. 3º, del
CP, el delito de lavado de activos causa daño a la sociedad. Por ello, la
persona cuyo bien es decomisado en los términos del art. 305, párr. 2º, del
CP no tiene derecho a indemnización alguna.

Cuando el art. 17 de la CN establece que la confiscación de


bienes queda borrada para siempre del Código Penal argentino, está diciendo
que lo que está prohibido es la confiscación irrazonable de esos bienes, mas
no la confiscación (decomiso) sujeta a reglamentación prudencial. En
palabras de Bidart Campos, la confiscación que queda abolida es la
confiscación general de bienes; no puede asimilársele el decomiso de objetos
particulares que son producto o instrumento del delito ni la recuperación de
bienes mal habidos cuando la dispone una sentencia dictada en juicio y
fundada en ley. En el caso, decomiso de bienes sin condena penal en los
términos del art. 305, párr. 2º, del CP es una reglamentación razonable del
derecho constitucional a la propiedad.

Por otra parte, creemos necesario realizar alguna aclaración en


relación a la aplicación de los artículos mencionados del CP a hechos
anteriores a su entrada en vigencia. En el derecho comparado el decomiso sin
condena es una acción autónoma, en tanto lo que se pretende no es
determinar la responsabilidad penal del individuo ni se procura aplicar una
pena contra la persona. Con el decomiso sin condena una sentencia
declarativa afirmará (o no) la inexistencia del derecho aparente que se
ostentaba sobre el bien, cuyos efectos necesariamente se proyectarán
retroactivamente al momento de la desvirtuada adquisición de tal derecho.
Tales conceptos son también de aplicación a la citada norma del art. 305,
párr. 2º, del CP, pues en el proceso de decomiso sin condena no se persigue
la aplicación de una pena, sino la verificación de una situación de
determinado bien a la luz de operaciones de lavado de activos.

Es necesario una interpretación que vaya más allá de la mera


literalidad de los términos jurídicos, ello con el objetivo de recuperar el dinero
producto de ilícitos graves como el caso que nos ocupa. La jurisprudencia no
es unánime ni pacífica en invocar los institutos jurídicos por medio de los
cuales se procede a recuperar los bienes y ganancias obtenidas por delitos.
No obstante, sea en carácter de decomiso, restitución, reparación o
reposición al estado anterior, puede observarse que efectivamente en
Argentina se cuenta con los medios legales suficientes para proceder a la
confiscación del producto del delito.
IV. PETITORIO:

a) Se me tenga por presentada, en la calidad invocada y sea considerado


este escrito por el Señor Fiscal Federal a los fines que correspondan;

b) Se tenga por acreditados los requisitos establecidos en el art. 23 del


CPP y se requiera al Sr. Juez Federal interviniente el decomiso de los
bienes que fueran de Néstor Kirchner.

SERA JUSTICIA

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