Juan Carlos Onganía (presidente de facto): Las razones ideológicas de la

“Revolución Argentina”

Locutor:
Desde su despacho, para referirse a las medidas de gobierno adoptadas en la víspera, hará uso
de la palabra a continuación el excelentísimo señor presidente de la Nación, teniente general
Juan Carlos Onganía.

Juan Carlos Onganía:

Me dirijo al pueblo argentino con la convicción que nace de los acontecimientos que todos
hemos debido sobrellevar en tiempos recientes y la preocupación que me incumbe como
responsable de la conducción de la Revolución Argentina. Otras veces nuestra palabra ha
tenido una finalidad relevante, pero nunca como hoy sentimos la necesidad de expresar a la
ciudadanía nuestro pensamiento en momentos que consideramos propicios para el inicio de
una etapa de singular importancia en la vida nacional.
Vivimos en un mundo perturbado y violento, apremiado por la contradicción, la confusión y
el enfrentamiento. En él, la Argentina ha sido siempre, a través de toda su historia y a pesar de
sus crisis, un ejemplo de cordura, de sensatez y seriedad. Dios ha bendecido nuestro destino
excluyendo de nuestras circunstancias todas aquellas contradicciones de razas, origen e
ideologías que han sumido en la aflicción y el dolor a la mayor parte de los pueblos del
mundo. Nuestro país ha sido así una isla privilegiada de dones generosos distribuidos en un
territorio (…) ávido de trabajo y buena voluntad.
El mundo entero sabe de la hidalguía de nuestro pueblo, cuya tradición joven y vigorosa se
expresa en un estilo de vida cristiano y generoso. Pero no hemos podido sustraernos al flagelo
materialista y cruel que agobia a la humanidad, hechos a la costumbre de nuestra patria,
fundada en el desinterés y la tolerancia. Hemos debido soportar la sorpresa de una violencia
injuriosa, apátrida y malévola destinada a la destrucción de nuestras más caras tradiciones
nacionales.