Vous êtes sur la page 1sur 8

----PALABRAS VIVAS EN COLOMBIA

Profesora: Angélica Hoyos Guzmán


Botamán Bijá dicen los Kamentsá para hablar de su palabra como portadora de belleza.
Para los Uitoto la palabra es poder y los seres humanos somos portadores de un canasto
que hilvanamos con ella. Para la comunidad Wayú el palabrero es quien resuelve los
conflictos, esta forma de conciliación y de justicia es considerada hoy patrimonio
inmaterial de la humanidad, título que le otorga la organización de las naciones unidas
para la educación la ciencia y la cultura (UNESCO). La palabra viva, o palabra mayor
constituye el legado de la conversación alrededor del fuego, nuestra historia que se hace
vigente en un mundo que se posesiona sobre la minoría y las diversidades.

Por ello, Miguel Rocha Vivas habla entonces de considerar los mitos y leyendas de
comunidades indígenas en Colombia como la palabra viva. Eso que fundamenta la
pluriculturalidad y la riqueza lingüística en el país, reconocida desde la constitución del
91 e invisibilizada tras las interpretaciones e imposiciones de los conquistadores, la
dominación ideológica y las interpretaciones que nos han hecho desconocer la
autenticidad polifónica de lo que somos puesto que según reza la historia “El
descubrimiento de América es lo que anuncia y funda nuestra identidad” (Todorov
Tzvetan, 1987, 28P). Se pretende, en el curso de Antropología Lingüística I, resaltar lo
fundacional desde nuestras raíces aborígenes sin desconocer que somos el resultado de
las mezclas que nos preceden.

En este sentir, podemos asegurar que a pesar de los múltiples problemas sociales y
culturales que enfrentamos los ciudadanos en Colombia, el reconocimiento de la
diversidad, su descubrimiento, es el logro representativo que tenemos como producto
del diálogo y las reflexiones en nuestro espacio de clases. Léase entonces una
construcción académica, que más allá de centrarse en la definición del mito, pretende a
través de lo que se expone una valoración de la cultura como visión de mundo, la cual
como se verá, organiza la estructura social de las comunidades étnicas y categoriza su
referencia ante el mundo.

En la diversidad de relatos mitológicos y leyendas de nuestros pueblos encontramos


muchos de los denominados mitos universales que a fuerza del sincretismo han armado
su nido en las tradiciones de los pueblos originarios y configuran el entorno natural y
espiritual de indígenas y comunidades afrodescendientes. También es fácil notar
algunos elementos comunes frente a la representación de la mujer, la importancia de la
naturaleza y la tierra como fuente de la vida, según se leerán. Entonces, más allá de la
mitografía propiamente dicha, el valor de lo aquí estudiado lo constituye su
acercamiento a vivificar esa palabra y las formas diversas de creer y manifestarse ante
los hechos de la vida.

Bien vale entonces recordar las palabras del Nobel de Literatura Gabriel García Márquez:

“En la esquina de los dos grandes océanos se extendían cuarenta mil leguas
cuadradas que Colón entrevió apenas en su cuarto viaje, y que hoy lleva su
nombre: Colombia. Lo habitaban desde hacía unos doce mil años varias
comunidades dispersas de lenguas diferentes y culturas distintas, y con sus
identidades propias bien definidas. No tenían una noción de estado, ni unidad
política entre ellas, pero habían descubierto el prodigio político de vivir como
iguales en las diferencias. Tenían sistemas antiguos de ciencia y educación, y una
rica cosmología vinculada a sus obras orfebres geniales y alfareros inspirados. Su
madurez creativa se había propuesto incorporar el arte a la vida cotidiana –que tal
vez sea el destino superior de las artes– y lo consiguieron con aciertos memorables,
tanto en los utensilios domésticos como en el modo de ser (…).”(Por un país al
alcance de los niños).

Para acercarnos al conocimiento y reconocimiento de esta diversidad en


Colombia y el Caribe, necesitamos hacernos de tres métodos específicos de la
lingüística: el análisis de niveles de la lengua, el reconocimiento fonético que nos
permitirá entrar en desde las relaciones de la estructura lingüística con sus
sentidos en el contexto. Para profundizar sobre el análisis estructuralista se hace
entonces necesario aclarar los postulados esenciales del curso de lingüística
general de Ferdinand De Saussure.

1. De Saussure utiliza los conocimientos del mundo antiguo, la filología, la


lingüística comparada, los neogramáticos, para establecer sus teorías del
signo y definiciones.
2. De Saussure atiende como materia de la lingüística todas las expresiones
del lenguaje, como corpus los textos escritos.

Relaciones interdisciplinarias:

“La lingüística tiene conexiones muy estrechas con varias ciencias, unas que le
dan datos, otras que se los toman. Los límites que la separan de ellas no siempre
se ven con claridad. Por ejemplo, la lingüística tiene que diferenciarse
cuidadosamente de la etnografía y de la prehistoria, donde el lenguaje no
interviene más que a título de documento; tiene que distinguirse también de la
antropología, que no estudia al hombre más que desde el punto de vista de la
especie, mientras que el lenguaje es un hecho social. Pero ¿tendremos entonces
que incorporarla a la sociología? ¿Qué relaciones existen entre la lingüística y la
psicología social? En el fondo todo es psicológico en la lengua, incluso sus
manifestaciones materiales y mecánicas, como los cambios fonéticos; y puesto
que la lingüística suministra a la psicología social tan preciosos datos.”

3. Definición del objeto de estudio de la lingüística:

“A nuestro parecer, no hay más que una solución para todas estas dificultades: hay
que colocarsedesde el primer momento en el terreno de la lengua y tomarla como
norma de todas las otras manifestaciones del lenguaje. En efecto, entre tantas
dualidades, la lengua parece ser lo único susceptible de definición autónoma y es la
que da un punto de apoyo satisfactorio para el espíritu. Pero ¿qué es la lengua? Para
nosotros, la lengua no se confunde con el lenguaje: la lengua no es más que una
determinada parte del lenguaje, aunque esencial. Es a la vez un producto social de la
facultad del lenguaje y un conjunto de convenciones necesarias adoptadas por el
cuerpo social para permitir el ejercicio de esa facultad en los individuos. Tomado en
su conjunto, el lenguaje es multiforme y heteróclito; a caballo en diferentes dominios,
a la vez físico, fisiológico y psíquico, pertenece además al dominio individual y al
dominio social; no se deja clasificar en ninguna de las categorías de los hechos
humanos, porque no se sabe cómo desembrollar su unidad. La lengua, por el contrario,
es una totalidad en sí y un principio de clasificación. En cuanto le damos el primer
lugar entre los hechos de lenguaje, introducimos un orden natural en un conjunto que
no se presta a ninguna otra clasificación.”

4. Lenguaje/ lengua / habla : defiiciones:


“Entre todos los individuos así ligados por el lenguaje, se establecerá una especie
de promedio: todos reproducirán —no exactamente, sin duda, pero sí
aproximadamente— los mismos signos unidos a los mismos conceptos. ¿Cuál es
el origen de esta cristalización social? ¿Cuál de las dos partes del circuito puede
ser la causa? Pues lo más probable es que no todas participen igualmente. La parte
física puede descartarse desde un principio. Cuando oímos hablar una lengua
desconocida, percibimos bien los sonidos, pero, por nuestra incomprensión,
quedamos fuera del hecho social. La parte psíquica tampoco entra en juego en su
totalidad: el lado ejecutivo queda fuera, porque la ejecución jamás está a cargo de
la masa, siempre es individual, y siempre el individuo es su arbitro; nosotros lo
llamaremos el habla (parole). Lo que hace que se formen en los sujetos hablantes
acuñaciones que llegan a ser sensiblemente idénticas en todos es el
funcionamiento de las facultades receptiva y coordinativa. ¿Cómo hay que
representarse este producto social para que la lengua aparezca perfectamente
separada del resto? Si pudiéramos abarcar la suma de las imágenes verbales
almacenadas en todos los individuos, entonces toparíamos con el lazo social que
constituye la lengua. Es un tesoro depositado por la práctica del habla en los
sujetos que pertenecen a una misma comunidad, un sistema gramatical
virtualmente existente en cada cerebro, o, más exactamente, en los cerebros de un
conjunto de individuos, pues la lengua no está completa en ninguno, no existe
perfectamente más que en la masa. Al separar la lengua del habla (langue et
parole), se separa a la vez: 1° lo que es social de lo que es individual; 2° lo que es
esencial de lo que es accesorio y más o menos accidental. La lengua no es una
función del sujeto hablante, es el producto que el individuo registra pasivamente;
nunca supone premeditación, y la reflexión no interviene en ella más que para la
actividad de clasificar, de que hablamos en la pág. 147 y sigs. El habla es, por el
contrario, un acto individual de voluntad y de inteligencia, en el cual conviene
distinguir: 1° las combinaciones por las que el sujeto hablante utiliza el código de
la lengua con miras a expresar su pensamiento personal; 2° el mecanismo
psicofísico que le permita exteriorizar esas combinaciones”

5. Recapitulemos los caracteres de la lengua: 1° Es un objeto bien definido en el


conjunto heteróclito de los hechos de lenguaje. Se la puede localizar en la porción
determinada del circuito donde una imagen acústica viene a asociarse con un
concepto. La lengua es la parte social del lenguaje, exterior al individuo, que por
sí solo no puede ni crearla ni modificarla; no existe más que en virtud de una
especie de contrato establecido entre los miembros de la comunidad. Por otra
parte, el individuo tiene necesidad de un aprendizaje para conocer su
funcionamiento; el niño se la va asimilando poco a poco. Hasta tal punto es la
lengua una cosa distinta, que un hombre privado del uso del habla conserva la
lengua con tal que comprenda los signos vocales que oye. 2° La lengua, distinta
del habla, es un objeto que se puede estudiar separadamente. Ya no hablamos las
lenguas muertas, pero podemos muy bien asimilarnos su organismo lingüístico.
La ciencia de la lengua no sólo puede prescindir de otros elementos del lenguaje,
sino que sólo es posible a condición de que esos otros elementos no se inmiscuyan.
3° Mientras que el lenguaje es heterogéneo, la lengua así delimitada es de
naturaleza homogénea: es un sistema de signos en el que sólo es esencial la unión
del sentido y de la imagen acústica, y donde las dos partes del signo son
igualmente psíquicas. 4° La lengua, no menos que el habla, es un objeto de
naturaleza concreta, y esto es gran ventaja para su estudio. Los signos lingüísticos
no por ser esencialmente psíquicos son abstracciones; las asociaciones ratificadas
por el consenso colectivo, y cuyo conjunto constituye la lengua, son realidades
que tienen su asiento en el cerebro. Además, los signos de la lengua son, por
decirlo así, tangibles; la escritura puede fijarlos en imágenes convencionales,
mientras que sería imposible fotografiar en todos sus detalles los actos del habla;
la fonación de una palabra, por pequeña que sea, representa una infinidad de
movimientos musculares extremadamente difíciles de conocer y de imaginar.

6. Razones por las que el corpus del estructuralismo europeo es la escritura:

“¿cómo se explica semejante prestigio de la escritura? 1° En primer lugar, la


imagen gráfica de las palabras nos impresiona como un objeto permanente y
sólido, más propio que el sonido para constituir la unidad de la lengua a través del
tiempo. Ya puede ese vínculo ser todo lo superficial que se quiera y crear una
unidad puramente ficticia: siempre será mucho más fácil de comprender que el
vínculo natural, el único verdadero, el del sonido.

2° En la mayoría de los individuos las impresiones visuales son más firmes y


durables que las acústicas, y por eso se atienen de preferencia a las primeras. La
imagen gráfica acaba por imponerse a expensas del sonido.
3° La lengua literaria agranda todavía la importancia inmerecida de la escritura.
Tiene sus diccionarios, sus gramáticas; según los libros y con libros es como se
enseña en la escuela; la lengua aparece regulada por un código; ahora bien, ese
código es a su vez una regla escrita, sometida a un uso riguroso: la ortografía; eso
es lo que confiere a la escritura una importancia primordial. Se acaba por olvidar
que se aprende a hablar antes que a escribir, y la relación natural queda invertida.

4° Por último, cuando hay desacuerdo entre la lengua y la ortografía, el debate es


siempre muy difícil de zanjar para quien no sea lingüista; pero como el lingüista
no tiene voz en la disputa, la forma escrita obtiene casi fatalmente el triunfo,
porque toda solución que se atenga a ella es más cómoda; la escritura se arroga de
esta ventaja una importancia a que no tiene derecho.”

7. Definición de signo lingüístico:

“Llamamos signo a la combinación del concepto y de la imagen acústica: pero en


el uso corriente este término designa generalmente la imagen acústica sola, por
ejemplo una palabra (arbor, etc.). Se olvida que si llamamos signo a arbor no es
más que gracias a que conlleva el concepto.”

Diferente de símbolo: “Se ha utilizado la palabra símbolo para designar el signo


lingüístico, o, más exactamente, lo que nosotros llamamos el significante. Pero
hay inconvenientes para admitirlo, justamente a causa de nuestro primer principio.
El símbolo tiene por carácter no ser nunca completamente arbitrario; no está
vacío: hay un rudimento de vínculo natural entre el significante y el significado.
El símbolo de la justicia, la balanza, no podría reemplazarse por otro objeto
cualquiera, un carro, por ejemplo.”

8. Ley de la sincronía y ley de la diacronía

“En resumen, si se habla de ley en sincronía, es en el sentido de orden y arreglo,


de principio de regularidad. La diacronia supone, por el contrario, un factor
dinámico por el cual se produce un efecto, un algo ejecutado. Pero este carácter
imperativo no basta para que se aplique la noción de ley a los hechos evolutivos;
no se habla de ley más que cuando un conjunto de hechos obedece a la misma
regla, y, a pesar de ciertas apariencias contrarias, los sucesos diacrónicos siempre
tienen carácter accidental y particular.”
“La lingüística sincrónica se ocupará de las relaciones lógicas y psicológicas que
unen términos coexistentes y que forman sistema, tal como aparecen a la
conciencia colectiva.

La lingüística diacrónica estudiará por el contrario las relaciones que unen


términos sucesivos no percibidos por una misma conciencia colectiva, y que se
reemplazan unos a otros sin formar sistema entre sí.”

“Mientras que la prospección resulta una simple narración y se funda toda entera
en la crítica de los documentos, la retrospección exige un método reconstructivo,
que se apoya en la comparación. De un signo único y aislado, no se puede
establecer la forma primitiva, mientras que dos signos diferentes, pero del mismo
origen”

9. Entidades lingüísticas: significante/ significado. La entidad lingüística no está


completamente determinada más que cuando está deslindada, separada de todo lo
que la rodea en la cadena fónica. Estas entidades deslindadas o unidades son las
que se oponen en el mecanismo de la lengua.

10. Unidades: sonido: fonema / palabra: morfema/ oración: sintaxis / discurso:


enunciado, acto de habla

11. “La lengua es también comparable a una hoja de papel: el pensamiento es el


anverso y el sonido el reverso: no se puede cortar uno sin cortar el otro; así
tampoco en la lengua se podría aislar. el sonido del pensamiento, ni el
pensamiento del sonido; a tal separación sólo se llegaría por una abstracción y el
resultado sería hacer psicología pura o fonología pura. La lingüística trabaja, pues,
en el terreno limítrofe donde los elementos de dos órdenes se combinan; esta
combinación produce una forma, no una sustancia”

12. Teniendo en cuenta lo anterior, las unidades crean entre sí, sincrónicamente, un
sistema de valores lingüísticos de significación que crean el sentido, relativo al
lazo social, a la colectividad y su idiomática manifiesta en la materialidad del
signo lingüístico. Identificar las propiedades y unidades lingüísticas de un estado
de la lengua, sus unidades y análisis de sus niveles es lo que nos permitirá luego
establecer relaciones con el contexto por eso es necesario un ejercicio de
identificación de los niveles de la lengua, así:
EJERCICIO DE PRÁCTICA: IDENTIFICACIÓN DE NIVELES DE
ANÁLISIS SINCRÍNOCO DE LA LENGUA (50 puntos)

Pude hacerse en parejas

Nombre o nombres de los estudiantes:

___________________________________________________________________
___________________________________________________________________

A. Transcribe una porción del discurso de un hablante, escoge del material en la


página de la Oraloteca.

B. Identifica y escribe aquí la noción de lengua/ habla/ lenguaje propuesta por De


Saussuere a partir de la transcripción y discurso escogido.

C. Con base en la lectura Curso de Lingüística General, identifica los conceptos de


significante y significado atendiendo a la transcripción que has escogido.

D. Realiza un inventario de las siguientes unidades lingüísticas disponibles en tu


texto escogido e identifica niveles: fonético-fonológico /morfológico / léxico-
semántico /sintagmático/ semántico pragmático:

Fonemas (predominancia de sonidos):

Palabras (tipos):

Oraciones (tipos):

Léxico:

Actos de Habla:

E. RESPONDAN ALUDIENDO A LAS LECTURAS REALIZADAS:

¿Qué quiere decir De Saussure cuando plantea que: la lingüística tiene por único
y verdadero objeto la lengua considerada en sí misma y por sí misma? ¿Cómo se
relaciona esto con las ideas de Bordelois en la Palabra Amenazada?

Vous aimerez peut-être aussi