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Terapéutica

en APS
Tipos de inmovilización en las urgencias
extrahospitalarias
Eva Buller Viqueiraa,*, Jesús Guerra Morenob, Juana Cabello Pulidoc y Antonio Caballero Parejaa
aMédico de Familia. Centro de Salud Virgen de la Oliva. Vejer de la Frontera. Cádiz. España.
bTécnico en Emergencias Sanitarias. Centro de Salud Virgen de la Oliva. Equipo de emergencias. Vejer de la Frontera. Cádiz. España.
cEnfermera. Centro de Salud Rodríguez Arias. San Fernando. Cádiz. España.

Correo electrónico miji_77@yahoo.com

Puntos clave

● Es fundamental el trabajo en equipo y conocer los ● La camilla de palas sirve para movilizar al paciente desde
dispositivos a nuestro alcance. una superficie plana a la camilla.

● No existe un dispositivo ni técnica de elección; depende de ● El tablero espinal se puede usar en distintos escenarios
la zona de trabajo, los medios disponibles y las junto con otros dispositivos de inmovilización; ayuda a
características individuales del paciente. extraer heridos de vehículos.

● Es fundamental conocer el mecanismo lesional para saber ● El colchón de vacío está indicado en politraumatismos,
cómo se va a movilizar y/o inmovilizar. especialmente si se sospecha lesiones de la columna, pelvis
o extremidades.
● Inmovilizar antes de movilizar, pero el individuo siempre
debe encontrarse hemodinámicamente estable; hay casos ● La férula espinal es un dispositivo para inmovilizar la
en los que se moviliza antes. columna toracolumbar, especialmente en pacientes en
sedestación.
● El collarín cervical inmoviliza la columna cervical de los
movimientos de flexoextensión, y el inmovilizador ● Las férulas de miembro pueden ser neumáticas, de vacío,
tetracameral se le acopla para evitar los de lateralización. de tracción, de Kramer, y mantienen los miembros lo más
alineados posible.

Palabras clave: *ONPWJMJ[BDJØOt"UFODJØOQSJNBSJBt'JKBDJØOEFGSBDUVSBt5SBOTQPSUFEFQBDJFOUFT

Los objetivos de una inmovilización implican atenuar los


Definición actual del problema
efectos de una lesión o posible lesión primaria y disminuir o
En el medio extrahospitalario nos veremos ante situaciones evitar las lesiones secundarias que puedan producirse (lesio-
en las que hay que movilizar y/o inmovilizar a los pacientes. nes medulares, nerviosas, musculares, vasculares, dolor,
Son conceptos diferentes, pero a la vez muy similares. La shock, etc.), además de facilitar el traslado del paciente para
movilización se define como el conjunto de técnicas destina- que sea lo más cómodo y menos doloroso posible tanto
das al desplazamiento del paciente desde un lugar a otro sin
para el paciente como para el personal sanitario1,2.
que suponga un agravamiento de sus lesiones. La inmovili-
En el medio extrahospitalario no existe ni dispositivo ni
zación es el conjunto de técnicas que se usan para lograr la
supresión temporal o permanente de todos los movimientos técnica de elección para inmovilizar; se debe adaptar a la zo-
de una zona corporal o miembro. En condiciones normales na de trabajo, a los medios disponibles y a la situación indi-
se inmoviliza y después se moviliza, pero existen ocasiones vidual del paciente. Describiremos los sistemas de inmovili-
en las que hay que movilizar antes; por ejemplo, en casos de zación y sus indicaciones, tanto para la extracción de
riesgo para el paciente, los sanitarios o si un paciente difi- pacientes atrapados como para la inmovilización y transpor-
culta el acceso a otro más grave1-3. te del paciente traumatizado.

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Son varios los elementos que podemos encontrar en el Los collarines rígidos sí inmovilizan la columna cervical
mercado para la inmovilización del paciente, pero hoy día impidiendo los movimientos de flexoextensión, pero son po-
no existe ningún estudio científico que indique que exista al- co efectivos para evitar los laterales, por lo que se deben
guno que realice la inmovilización completa, ya que tene- complementar con inmovilizadores laterales (se verá en in-
mos que utilizar varios dispositivos para que el paciente pue- movilizador tetracameral). Permiten mantener el apoyo de la
da quedar lo más inmovilizado posible para su traslado cabeza en posición neutra. Tienen apertura en la parte ante-
prehospitalario. rior para la toma de pulso carotídeo y acceso ante la posibili-
Los dispositivos en general deben ser ligeros, de fácil ma- dad de tener que realizar una traqueotomía. Son radiopacos4.
nejo y fáciles para almacenaje en la ambulancia, por su re- Los collarines cervicales rígidos se clasifican en los que
ducido espacio. están compuestos por una o por dos piezas. El de una pieza
Para saber qué elemento de la ambulancia debemos usar (Stifneck®, Ambu®) puede ser multitalla o de talla fija. El
para la inmovilización, tendríamos que conocer e identificar multitalla pediátrico incluye dos tallas y el de adulto cuatro
la cinemática del trauma y entender cómo la energía cinemá- (fig. 1). Las tallas fijas son las mismas que las que se inclu-
tica pudo provocar las lesiones en el paciente traumatizado. yen en el multitalla: pediátricos son dos (bebé 1, pediátrico 2)
Conocer los patrones de lesión permite evaluar mejor al pa- (fig. 2) y adultos cuatro (ultracorto o sin cuello 3, corto o ba-
ciente. jo 4, regular 5 y largo o alto 6) (fig. 3). El collarín rígido de
Los traumatismos pueden provocar lesiones mortales que dos piezas (Philadelphia ® Thomas ®) (fig. 4) se compo-
afectan a los órganos de la respiración y la circulación, por ne de una pieza anterior y otra posterior y presenta cuatro
lo que su traslado rápido es de importancia vital. Aunque no puntos de apoyo: a nivel de mentón, articulación clavicu-
sea el objetivo de este trabajo, no está de más recordar que loesternal, apófisis mastoides y espalda. Es el collarín cervi-
primero debemos cumplir el ABC (apertura de la vía aérea, cal que consigue limitar más la flexoextensión, pero tampo-
reestablecer la respiración y la circulación); si el paciente no co lo consigue al 100%.
está hemodinámicamente estable, no podemos movilizarlo.
La movilización nunca debe perjudicar al paciente; si la ma-
niobra lo desestabiliza, antes de movilizarlo incidiremos de
nuevo sobre el ABC. Es fundamental el trabajo en equipo, y
para ello debe tomar el mando el más experimentado en la
movilización de pacientes traumatizados sin tener que ser el
coordinador del equipo. El que asume el mando se coloca en
la cabeza para realizar la inmovilización cervical bimanual,
desde donde dirige la operación, y todos realizarán movi-
mientos coordinados, suaves y precisos1,2.
El mecanismo de la lesión es importante para determinar
cómo movilizar e inmovilizar la columna.

Terapéutica actual disponible Figura 1. Collarines cervicales multitalla de adulto y pediátrico des-
montados.
Antes de realizar algún acto, cuando nos encontramos
frente a un paciente politraumatizado es importante planifi-
car todo lo que se va a hacer, y para eso debemos conocer
antes los distintos dispositivos que tenemos a nuestro alcan-
ce y cómo se utilizan.

Dispositivos para la inmovilización


de la columna cervical

Collarín cervical
El collarín cervical es el primer elemento inmovilizador que
se debe colocar. Sirve para inmovilizar la columna cervical.
Los collarines blandos y los semirrígidos se utilizan para li-
mitar el movimiento de las vértebras cervicales en el caso de
lesiones menores del cuello, pero no inmovilizan de forma
Figura 2. Collarines cervicales pediátricos desmontados.
correcta y por eso no se usan en urgencias extrahospitalarias.

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Figura 3. Collarines cervicales de adulto desmontados.

Figura 5. Colocación del collarín cervical.

cuentra en decúbito supino, se introducirá primero la parte


posterior del collarín y si se encuentra en sedestación, la par-
te anterior. El segundo sanitario fija con los velcros y el pri-
mero no puede soltar hasta que el paciente quede fijado a un
dispositivo de inmovilización. El collarín no sustituye por
completo la tracción que se realiza manualmente1,2,4-6.

Inmovilizador tetracameral o Dama de Elche (fig. 6)


Su finalidad es evitar los movimientos laterales de la colum-
na cervical y se complementa con el collarín cervical. Se
compone de una base rectangular con cintas para fijarlo al
tablero espinal o camilla de cuchara. Tiene dos piezas latera-
les trapezoides con orificios para los oídos (para que el pa-
ciente pueda oír y que podamos vigilar otorrea) y se fija a la
base con velcro. Tiene una cincha alargada para estabilizar
la frente y el mentón que se fija con velcro. Tiene una míni-
Figura 4. Collarín cervical rígido de dos piezas.
ma interferencia a rayos X.
La cabeza del paciente con el collarín cervical puesto se
El collarín cervical está indicado en un individuo incons- coloca sobre la base rectangular; a ambos lados de la cabeza
ciente, en cualquier lesión por encima de las clavículas, cer- se colocan las piezas trapezoides sin presionar. Después se
vicalgia espontánea o a la palpación (cualquier sospecha de colocan las cinchas, primero la del mentón, que debe que-
lesión cervical), traumatismo múltiple, accidente a alta velo-
cidad o priapismo1,2,4.
Para su colocación, primero retirar pelo, ropa, joyas, etc.
La columna cervical debe colocarse en posición neutra de-
jando un hueco entre el occipucio y la columna, para evitar
una hiperextensión del cuello, y los ojos deben quedar mi-
rando al frente (fig. 5). El primer sanitario estabiliza la cabe-
za y el cuello colocando la columna en posición neutra. El
segundo sanitario mide el cuello desde el borde inferior de la
mandíbula hasta el hombro usando sus dedos. Si el collarín
es muy pequeño, puede comprimir vasos sanguíneos y facili-
tar la flexión, y si es muy grande no inmoviliza. En caso del
collarín cervical multitalla se ajusta antes de su colocación y
se bloquea (tiene unos tapones para ello). El segundo sanita-
rio coloca el collarín mientras que el primero no deja de
Figura 6. Inmovilizador tetracameral.
mantener la inmovilización bimanual. Si el paciente se en-

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dar por encima del reborde superior del collarín cervical, se


pasa por la argolla de plástico en la pieza trapezoide y se fija
con el velcro. Posteriormente se coloca la cincha frontal de
la misma manera1,2.

Dispositivos para la inmovilización


de la columna toracolumbar
A la hora de movilizar el tronco debemos tener en cuenta
considerarlo un bloque. Se moviliza siempre teniendo en
cuenta el espacio que tenemos para movilizar, las lesiones
existentes, la afectación de los miembros, la posición del he-
rido y sobre todo la de la cabeza. En caso de encontrarse en
decúbito supino se recomienda girar en sentido contrario a la
dirección de la cabeza para no hiperextender el cuello y no Figura 7. Camilla de cuchara.
arrastrar la cara contra el suelo1,2,5,6.

Camilla de cuchara o camilla de pala (fig. 7) Colchón de vacío


Es un soporte de un material metálico o de plástico, formado Es un elemento imprescindible para la inmovilización y mo-
por dos ramas simétricas, ligeramente cóncavas, unidas entre vilización terrestre y aérea (revisar constantemente porque
ellas y adaptables telescópicamente para conseguir diferen- con la altura, al disminuir la presión atmosférica puede per-
tes longitudes. der consistencia). Se trata de un colchón bicameral, relleno
Se trata de recoger al paciente que se encuentra en decú- de millones de diminutas bolitas de polipropileno o polies-
bito supino sobre una superficie dura y regular con intención pan (fig. 9). Lleva una válvula, donde se conecta una bomba
de trasladarlo a la camilla. Las dos ramas de la camilla de de vacío o un aspirador de secreciones para realizar el vacia-
cuchara se separan entre ellas mediante el cierre que existe
en cada extremo, dejando una a cada lado del paciente. El
primer sanitario sujeta cabeza y cuello sobre el que previa-
mente se ha colocado un collarín cervical, otro mide la lon-
gitud de la camilla y el tercero realiza un ligero volteo del
individuo. El que estaba midiendo es el que coloca esa mitad
de la camilla bajo el herido y se coloca al paciente sobre esa
mitad. Se lleva a cabo el mismo procedimiento con la otra
rama, siempre manteniendo la alineación del paciente en
bloque (cabeza, tronco y extremidades). Está contraindicado
su uso para transporte prehospitalario1,2,7,8.

Tablero espinal
Normalmente, como su nombre indica, es una superficie du-
ra, de madera, alargada, aunque puede ser de plástico rígido.
La tabla o tablero espinal mide 40 × 180 cm y pocas miden
45  cm de ancho. El límite de peso para estas tablas oscila
entre 112 y 113 kg (fig. 8). A diferencia de la camilla de cu-
chara, el tablero se puede utilizar en diferentes escenarios,
especialmente para la liberación de heridos en vehículo. Se
puede colocar de distintas maneras, girando al paciente en
bloque y colocándolo en decúbito lateral y el tablero espinal
pegado a su espalda bajando al paciente lentamente hasta el
suelo o levantando al paciente ligeramente del suelo, y en
bloque sujetando cabeza, cuello, hombros, pelvis y rodillas,
deslizando el tablero por debajo y bajando de nuevo al heri-
do hasta colocarlo sobre el tablero. Tanto en la camilla de
cuchara como en el tablero espinal se recomienda el uso
Figura 8. Tablero espinal con inmovilizador tetracameral fijado.
de correas para la movilización del paciente1,2,7,8.

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Figura 10. Férula espinal.

portante reevaluar al paciente para asegurar que las correas


no queden tan apretadas como para comprometer la correcta
ventilación. Tiene unos refuerzos de aluminio que le dan ri-
gidez al dispositivo. Una vez colocado, se extrae a la vícti-
Figura 9. Colchón de vacío con bomba. ma. La maniobra consiste en rotar al paciente hasta que se
pueda tumbar, y extraerlo por la puerta abierta del vehículo,
do del mismo, con lo que adquiere consistencia y rigidez, ayudado con la tabla espinal. La férula espinal tiene unas
dando la forma anatómica del paciente; además, reduce las asas por la parte de atrás del dispositivo a la altura de la ca-
vibraciones en el traslado prehospitalario, especialmente en beza y la espalda para ayudar mientras se tira del herido1,2,9.
terrenos irregulares. Se complementa con el collarín cervi- Nos parece importante recordar que hay que tener mucha
cal. Se debe colocar sobre una superficie dura como la cami- precaución a la hora de la extricación de heridos por acci-
lla de palas o el tablero espinal, porque al levantarlo, a pesar dente de tráfico. En cuanto al airbag, puede quedar dañado y
de estar rígido, se puede arquear. Está indicado en politrau- no activarse el mecanismo en el momento del accidente y sí
matismos, especialmente si se sospecha lesiones de la co- hacerlo posteriormente. Es especialmente peligroso para los
lumna, pelvis o extremidades, traslado de pacientes con fija- que se introducen en el vehículo. El airbag tarda unos 30-
ciones externas, etc.1,2,7,8,9. 40  ms en inflarse a una velocidad de aproximadamente
300 km/h. En caso de sanitarios, si no se han desplegado los
Férula espinal, corsel espinal de Kendrick o chaleco sistemas de seguridad, se recomienda desconectar la batería
de extricación FERNO KED y la corriente eléctrica quitando la llave del contacto antes de
Este dispositivo (fig. 10), también llamado body espinal, se valorar a los heridos. En caso de que el vehículo disponga
emplea en pacientes en sedestación. Se usa estando el pa- de airbags, entrar al vehículo por la zona más lejana a ellos y
ciente de forma erguida, ligeramente hacia delante, colocan- nunca apoyarse ni manipular los airbags sin desplegar. Si los
do el dispositivo por detrás. Se coloca la parte más ancha ha- heridos no están atrapados, retirar el asiento lo máximo po-
cia abajo. Una vez colocado, se cierran las cinchas; no existe sible. Desconectar los airbags de acompañante con la llave
unanimidad entre autores en cuanto al orden. Se aprietan las de contacto. Esperar el tiempo reglado de 10-15 minutos (el
cinchas largas, que son de color negro, en las ingles; segui- sistema eléctrico sigue activado 10-15 minutos tras el corte
damente, el resto de correas desde abajo hacia arriba. Existe de suministro). Se recomienda el uso de equipos de protec-
un código de colores, que nos guían a la hora de la coloca- ción ante el despliegue de airbags (fig. 11). En caso de que
ción. Se deben unir las correas del mismo color. Se fija la ya se hayan desplegado los airbags, igualmente se debe des-
cabeza mediante un velcro a nivel de frente y mentón por conectar la batería y el contacto (existen airbags de doble
encima del collarín cervical previamente colocado. Es im- explosión o de dos etapas) y el uso de equipos de protección

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Figura 12. Férulas neumáticas.

Figura 11. Equipo de protección de airbag.

de airbag. El polvo residual que se libera con la detonación


no es tóxico, pero sí irritativo; se recomienda el uso de gafas
protectoras y guantes10.

Dispositivos para la inmovilización


de extremidades
Debemos seguir una serie de recomendaciones para realizar
la inmovilización correctamente. Dicha inmovilización debe
incluir las articulaciones proximal y distal a la fractura. De-
bemos comprobar siempre, tanto antes como después de su
colocación, los pulsos distales, temperatura, sensibilidad y
Figura 13. Férulas de vacío.
coloración del miembro afectado. Antes de colocar la férula,
retirar todo aquello que comprometa la circulación sanguí-
nea, tales como anillos, pulseras, relojes. En el caso de frac-
turas inestables o que presenten gran deformidad deberemos (fig. 13). La diferencia está en que en vez de introducir aire,
realizar una tracción simple. Siempre será preferible una in- este se extrae conectándolo a una bomba al igual que en el
movilización en una postura no anatómica, pero con pulso, a colchón de vacío. No ejerce presión en los puntos sangran-
una anatómica sin él1,2,11,12. tes, pero permite mayor flujo distal a la extremidad11,12.
Entre los tipos de férulas que se usan más frecuentemente
en el ámbito extrahospitalario encontramos los siguientes. Férulas de tracción
Compuesta de doble barra metálica con apoyo en la zona in-
Férulas neumáticas guinal, posee una rueda dentada en el otro extremo donde se
Son hinchables y tienen la forma anatómica de la extremi- fija al tobillo para realizar la tracción, alinear y estabilizar
dad. Existen de brazo, antebrazo, muñeca-mano, pierna, me- así la fractura (fig. 14). Están indicadas en fracturas de fé-
dia pierna y pie-tobillo (fig. 12). Están compuestas de mate- mur y proximal de tibia, y no son útiles en las de rodilla, to-
rial plástico y poseen varias cámaras que realizan una
compresión no circular para evitar así la isquemia del miem-
bro. Se cierran con cremalleras o velcro. Son más recomen-
dables las transparentes para así poder valorar la presencia
de hemorragias o provocar la compresión de puntos sangran-
tes. Un inflado excesivo puede producir síndrome comparti-
mental1,2.

Férulas de vacío
El material es similar a los colchones de vacío y existen los
Figura 14. Férula de tracción.
mismos modelos que en el caso de las férulas neumáticas

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Otras férulas rígidas


Tales como las de Matrix, compuestas por polímero y velcro
ajustable a la extremidad afectada, o las férulas de MEI, rígi-
das, articuladas, con cinchas y anclajes contralaterales que
se usan para inmovilizar fracturas de fémur previamente a
la extricación de personas atrapadas. Se pueden poner con la
pierna flexionada.

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Son metálicas, deformables (fig. 15). Hay que cubrirlas con Ortop Traumatol. [Internet]. 2002 Dic [citado 2016 Oct 14];16(1-2) 48-
52. Disponible en: http://scielo.sld.cu/scielo.php?script=sci_
vendaje antes de su colocación. Se moldean fácilmente de arttext&pid=S0864- 215X2002000100008&lng=es.
manera que podemos colocarlas en todo tipo de fracturas y 10. Hernández Hernández JM. ‘EL AIRBAG’ intervención y rescate en ac-
cidentes de tráfico. ‘datos no publicados’.
fracturas con luxación, sin tener una forma prefijada. Esto
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permite inmovilizar incluso en los casos en que no es posi- gueño L. Inmovilización del Miembro Inferior con Férulas de Vacío en
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