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SINOPSIS DE LA ENSEÑANZA
Versículo de memoria: Juan 14: 16 “Y yo le pediré a Dios el Padre que les envíe al Espíritu Santo,
para que siempre los ayude y siempre esté con ustedes”. TLA
PROPÓSITO DE LA LECCIÓN
Recordar a los niños y las niñas que hay una promesa que fue dada hace muchos años, y esta
promesa fue la del Espíritu Santo en la vida de cada uno de ellos.
LECCIÓN INTRODUCTORIA
Material de apoyo: Globo desinflado, versículo escrito.
Se necesitaran dos actores que se caracterizaran como niños, y entraran muy emocionados jugando
con una pelota
Niño 1: espera... tengo una mejor idea… juguemos con este globo (saca un globo desinflado de su
bolsillo)
Niño 2: (mira caer el globo al piso, y con cara de aburrido) que te pasa así no se juega con los
globos, primero lo debes inflar…
La promesa del Espíritu Santo
Niño2: Hay no… así es más aburrido que jugar futbol con Neymar…
Niño 2: mira (toma el globo y lo empieza a inflar, le hace un nudo, y lo lanza para que empiecen a
jugar)
Así es con el Espíritu Santo, Una persona que no tiene al Espíritu Santo es como un globo que no
está lleno de aire. Va a ser sin vida, muy blanda y no va a ser divertido.
El Espíritu Santo te da vida, así como el aire le da vida al globo, además él siempre les va a
ayudar y siempre estará con nosotros. Cuando Jesús estuvo aquí en la tierra el prometió que enviaría
al Espíritu Santo. La palabra de Dios dice en Juan 14: 16 “Y yo le pediré a Dios el Padre que les
envíe al Espíritu Santo, para que siempre los ayude y siempre esté con ustedes”.
Material de apoyo: Biblia para el maestro, video del pentecostés. “Dan Stevers. La historia del
Pentecostés”
“https://www.youtube.com/watch?v=MuvYVnnrdNU
5 En aquel tiempo, muchos judíos que amaban a Dios estaban de visita en Jerusalén. Habían llegado de
todas las regiones del Imperio Romano. 6 Al oír el ruido, muchos de ellos se acercaron al salón, y se
sorprendieron de que podían entender lo que decían los seguidores de Jesús. 7 Estaban tan admirados que
se decían unos a otros:
La promesa del Espíritu Santo
«Pero estos que están hablando, ¿acaso no son de la región de Galilea? 8 ¿Cómo es que los oímos hablar en
nuestro propio idioma? 9 Los que estamos aquí somos de diferentes países ¡Es increíble que los oigamos
hablar, en nuestro propio idioma, de las maravillas de Dios!»
13 Pero algunos comenzaron a burlarse de los apóstoles, y los acusaban de estar borrachos. 14 Pero los
apóstoles se pusieron de pie, y con fuerte voz Pedro dijo:
«Israelitas y habitantes de Jerusalén, escuchen bien lo que les voy a decir. 15 Se equivocan si creen que
estamos borrachos. ¡Apenas son las nueve de la mañana! 16 Lo que pasa es que hoy Dios ha cumplido lo que
nos prometió, cuando por medio del profeta Joel dijo:
17 “En los últimos tiempos, les daré a todos de mi Espíritu: hombres y mujeres hablarán de parte mía; a los
jóvenes les hablaré en visiones y a los ancianos, en sueños.
La ardilla Cascabel se iba de viaje al Valle de los Cerezos. En la despedida de sus mejores amigas:
Boli y Balín, las tres ardillas lloraban de emoción.
- ¡Oh!, ¡eso es mucho tiempo! - Exclamó Balín - ¡Te vas a olvidar de nosotras!
- ¡Claro que no, ustedes son mis amigas! - Repuso Cascabel - Prometo llamarlas al llegar, así les
cuento qué tal ha sido el camino y cómo es el valle.
- Y les traeré una cesta enorme de cerezas y dos tarros de mermelada de naranjas cuando vuelva.
Los días pasaron y Boli y Balín extrañaban a su amiga, pero tal y como les había prometido, les
enviaba mensajes todos los días de diferentes maneras. Cada mañana, preguntaban al padre de Púa,
La promesa del Espíritu Santo
que era el erizo cartero del bosque, si había noticias. Y él les entregaba todo lo que su amiga les
había mandado.
Boli y Balín estaban deseando ver a la viajera, porque recordaban que ella les había prometido una
canasta de las más ricas cerezas y dos tarros de mermelada de naranja… Su boca se les hacía agua
pensando en lo que Cascabel les iba atraer, pero cuando Cascabel apareció sin la cesta de cerezas ni
los tarros de mermelada de naranja, se sintieron muy decepcionadas.
Las ardillas le dijeron: “al no cumplir lo prometido, sentimos que nos has mentido”
Cascabel las miro y les dijo: mamá… ¿ustedes creen que yo olvide la promesa que les hice?...
Cascabel dijo: el hecho que no traiga nada en las manos no quiere decir que he olvidado mi
promesa, todo lo contrario es tan grande lo que les he traído que deben pasar a mi casa por ello, ya
que no lo he podido traer hasta aquí…
Boli y Balín se emocionaron y corrieron con Cascabel a su casa, y cuál fue su sorpresa al ver lo que
cascabel les había traído que gritaron de la emoción… ella les había traído no una canasta llena de
cerezas… les había traído 2… y de las mermeladas había traído muchísimos sabores para que cada
una escogiera la que más le gustaba.
Jesús nos prometió al Espíritu Santo antes de irse y nos dijo que nos enviaría a otro consolador y el
hoy cumple su promesa, a él no se le olvida lo que nos ha dicho.
Si tu hoy quieres recibir al Espíritu Santo vas a hacer esta oración conmigo…