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REGISTRAL
PROFESOR TITULAR: ESCRIBANO JOSÉ RAUL PEREYRA. CATEDRA “A”
2014
UNIVERSIDAD NACIONAL DEL NORDESTE
FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIAS SOCIALES Y POLÍTICAS
INTEGRANTES DE GRUPO:
- ABOGADO BETTIANA.
- ÁLVAREZ SALVADOR MARCELA ANDREA.
- KARLEN ELIGIA.
- MARTINEZ ELISA.
- MORINIGO MIRIAN.
- REYES SABRINA.
- SÁNCHEZ MARÍA LUISA SOLEDAD.
- SELLES JUAN.
- VIGAY CECILIA.
REPRESENTACION
CONCEPTO DE MANDATO:
Nuestro Código Civil regula el contrato de mandato en el Título IX de la Sección III del Libro
Segundo y brinda una definición en el artículo 1869, a saber: “El mandato, como contrato, tiene
lugar cuando una parte da a otra el poder que esta acepta, para representarla, al efecto de
ejecutar en su nombre y de su cuenta un acto jurídico, o una serie de actos de esta naturaleza”.
Siguiendo a Claudia Iris Verese de Chain, el mandato rige las relaciones entre mandante y
mandatario, es un acto bilateral, un contrato. Requiere acuerdo de voluntades, expreso o tácito
entre mandante y mandatario. Regula las relaciones internas entre el principal o interesado
(mandante) y la persona a quien éste le confía sus asuntos (mandatario). También podemos decir
que es un contrato por el cual una persona confía la ejecución de uno o varios actos jurídicos a
otra que por su aceptación, se obliga a ejercerlos en su nombre.
ESPECIES DE MANDATO:
• El mandato puede ser gratuito u oneroso, el Código Civil en su art. 1871 establece “El
mandato puede ser gratuito u oneroso. Presúmase que es gratuito, cuando no se hubiere
convenido que el mandatario perciba una retribución por su trabajo. Presúmanse que es oneroso,
cuando consista en atribuciones o funciones conferidas por la ley al mandatario, y cuando consista
en los trabajos propios de la profesión lucrativa del mandatario, o su modo de vivir.”; por su parte,
en el derecho mercantil, se tiene por mandato a aquel contrato por el cual una persona se obliga a
administrar uno o más negocios lícitos de comercio que otro le encomienda. El mandato comercial
es siempre oneroso. En sentido más restringido la ley comercial llama especialmente mandato,
cuando la persona que administra el negocio obra en nombre de la persona que se lo ha
encomendado, y denomina comisión o consignación, cuando una persona que desempeña por
otros, negocios individualmente determinados, obra a nombre propio o bajo la razón social que
representa.
• Expreso o tácito, según el art. 1873 “El mandato puede ser expreso o tácito. El expreso
puede darse por instrumento público o privado, por cartas, y también verbalmente”,
seguidamente el art. 1874 preceptúa “ El mandato tácito resulta no sólo de los hechos positivos
del mandante, sino también de su inacción o silencio, o no impidiendo, pudiendo hacerlo, cuando
sabe que alguien está haciendo algo en su nombre”.
OBJETO: El Objeto de este contrato pueden ser todos los actos lícitos, susceptibles de producir
alguna adquisición, modificación o extinción de derechos (artículo 1889).
Sin embargo existen ciertos actos que no pueden ser objeto del mandato, como por ejemplo, el
mandato para testar.
REPRESENTACIÓN, MANDATO Y PODER:
* Representación contractual: es cuando por un contrato una persona realiza un acto jurídico por
otra, asumiendo esta todos los efectos del mismo.
Mandato: Es el contrato por el cual una persona encomienda a otra que la represente y en su
nombre otorgue actos jurídicos, asumiendo de esta manera todos los efectos del mismo. El
mandato puede ser Civil o comercial, su diferencia que lo caracteriza es que el mandato comercial
nunca se presume gratuito, su objeto siempre es un acto de comercio.
El artículo 1869 del Código Civil define al mandato y expresa: “El mandato como contrato tiene
lugar cuando una de las partes da a otra un poder, que esta acepta, para representarla, al efecto
de ejecutar en su nombre y de su cuenta un acto jurídico, o una serie de actos de esta naturaleza”.
Poder o “acto de apoderamiento”, consiste en un acto jurídico unilateral y abstracto que inviste a
una persona de la facultad de representación y que le permite realizar actos jurídicos a nombre de
otra. El poder es independiente de la relación de gestión subyacente (mandato) y, por esta
circunstancia, el art. 1938 del Código Civil determina que “Las órdenes reservadas o las
instrucciones secretas del mandante no tendrán influencia alguna sobre los derechos de terceros
que contrataron en vista de la procuración, órdenes o instrucciones que le fueron presentadas”.
El acto documentado en sede notarial consiste usualmente en un “poder” que, como acto
unilateral, sólo es otorgado por el poderdante y puede ser anterior al contrato de mandato; en
otras palabras, el poder se refiere el acto mediante el cual una o varias personas expresan su
voluntad para que alguien actúe en su nombre. La actuación del representante será eficaz y
comprometerá al representado, vinculándolo directamente con el tercero, si se obra dentro de las
facultades conferidas. Regula las relaciones entre el representado y el tercero.
En caso de instrumentar el mandato por escritura pública, debe ser otorgado por ambas partes
(mandante y mandatario), debe pactarse expresamente las facultades de representación (arts.
1890 y 1929) y resulta conveniente prever expresamente el carácter de oneroso o gratuito (art.
1871) juntos con las modalidades del encargo (plazo, condiciones, etc.).
El objeto del mandato puede consistir en cualquier acto jurídico lícito (art. 1889). No obstante,
existen ciertos actos denominados “personalísimos” que son indelegables por requerir la
presencia y declaración de voluntad directa del titular del interés, como el matrimonio y el
testamento. El carácter personalísimo también puede pactarse en ejercicio de la autonomía de la
voluntad respecto de los efectos de un determinado contrato (por ejemplo, la presencia personal
del titular de un billete premiado).
Nuestro Código Civil establece la forma de escritura pública para los poderes generales o
especiales que deban presentarse en juicio, los poderes para administrar bienes y que tengan por
objeto un acto redactado o que deba redactarse en escritura pública (art. 1184, inc. 7º).
El artículo 1870 del Código Civil, que se transcribe a continuación, enumera, en siete incisos,
diferentes tipos de representaciones:
1. A las representaciones necesarias, y a las representaciones de los que por su oficio público
deben representar determinadas clases de personas o determinadas clases de bienes, en todo lo
que no se oponga a las leyes especiales sobre ellas.
3. A las representaciones por administraciones o liquidaciones de sociedades, en los casos que así
se determine en este Código y en el Código de Comercio.
4. A las representaciones por personas dependientes, como los hijos de familia en relación a sus
padres, el sirviente en relación a su patrón, el aprendiz en relación a su maestro, el militar en
relación a su superior, las cuales serán juzgadas por las disposiciones de este título, cuando no
supiesen necesariamente un contrato entre el representante y el representado.
PODER GENERAL.
Este tipo de poder comprende todos los negocios del mandante, según lo establece el artículo
1879 del Código Civil.
El artículo 1880 expresa que el mandato concebido en términos generales, no comprende más que
los actos de administración, aunque el mandante declare que no se reserva ningún poder, y que el
mandatario puede hacer todo lo que juzgare conveniente.
Por actos de administración se entiende aquellos que se relacionan con la conservación del
patrimonio y que procuran la obtención de rentas, utilidades o productos ordinarios de aquel.
Podemos encontrar varios tipos de poderes generales, a saber: para asuntos judiciales, de
administración y disposición, este último consiste en un poder general de administración sumado
a una extensa enumeración de poderes especiales. Mientras que respecto de la administración del
poder resulta general, en relación con la disposición debe interpretarse en forma restrictiva.
(art.1884).
PODER ESPECIAL.
Es aquel que se utiliza para ciertos negocios hasta llevarlos a su fin o para actos aislados. La regla
general es que los actos de disposición requieren un apoderamiento especial.
• Los actos administración extraordinaria: son aquellos que pueden exponer a ciertos bienes
a una desvalorización importante al exceder su aprovechamiento y conservación normal.
(Ejemplo: locación por más de 6 años).
• Actos de obligación: son aquellos que no consisten en una disposición patrimonial actual
pero que recaen sobre los bienes ante el incumplimiento de una obligación (ejemplo la fianza).
Dentro de los poderes especiales se distinguen: los especiales genéricos o abstractos (son la regla
general) que requieren la precisa individualización del acto que se autoriza, por ejemplo, hipoteca,
venta, etc y los específicos o especialísimos que además de la individualización del acto, requieren
la del objeto materia del mismo, como es el supuesto de la donación que no puede hacerse por
apoderado sin poder especial con la designación del bien determinado que puedan donar
(art.1807 inc. 6).
El artículo 1881 del Código Civil enumera los casos en que la validez del acto del apoderado
depende de su expresa enunciación, por ello dice este artículo que son necesarios poderes
especiales para los siguientes supuestos:
2° Para hacer novaciones que extingan obligaciones ya existentes al tiempo del mandato;
4° Para cualquier renuncia gratuita, o remisión, o quita de deudas, a no ser en caso de falencia del
deudor;
5° derogado.
7° Para cualquier contrato que tenga por objeto transferir o adquirir el dominio de bienes raíces,
por título oneroso o gratuito;
8° Para hacer donaciones, que no sean gratificaciones de pequeñas sumas, a los empleados o
personas del servicio de la administración;
9° Para prestar dinero, o tomar prestado, a no ser que la administración consista en dar y tomar
dinero a intereses, o que los empréstitos sean una consecuencia de laadministración, o que sea
enteramente necesario tomar dinero para conservar las cosas que se administran;
10° Para dar en arrendamiento por más de seis años inmuebles que estén a su cargo;
11° Para constituir al mandante en depositario, a no ser que el mandato consista en recibir
depósitos o consignaciones; o que el depósito sean una consecuencia de la administración;
12° Para constituir al mandante en la obligación de prestar cualquier servicio, como locador, o
gratuitamente;
• 1882: poder especial para transar, no comprende el poder para comprometer en árbitros.
• 1883: el poder para vender, no comprende el poder para hipotecar, ni recibir el precio de
la venta, cuando se hubiere dado plazo para el pago, ni el poder para hipotecar, el poder de
vender.
• 1884: el mandato especial para ciertos actos de naturaleza determinada, debe limitarse a
los actos para los cuales ha sido dado, y no puede extenderse a otros actos análogos, aunque estos
puedan considerarse como consecuencia natural de los que el mandante ha encargado hacer.
• 1885: el poder especial para hipotecar bienes inmuebles del mandante no comprende la
facultad de hipotecarlos por deudas anteriores al mandato.
• 1886: el poder para contraer una obligación, comprende el de cumplirla, siempre que el
mandante, hubiese entregado al mandatario el dinero o la cosa que se debe dar en pago.
• 1887: el poder de vender bienes de herencia no comprende el poder para cederla, antes
de haberla recibido.
Para la notificación de la revocación la forma más eficaz es la escritura pública, del mismo modo
que fue otorgado.
Dice el artículo 1970 que siendo la revocación un derecho potestativo del poderdante, puede
revocar el mandato siempre que quiera.
La revocación puede ser expresa o tácita. Será expresa por medio verbal, escrito o por signos
inequívocos y será tácita por hechos o actos que hagan presumir la revocación.
En algunos casos, la ley presume que con el nombramiento de un nuevo mandatario para un
mismo negocio se produce la revocación del anterior apoderado.
También la revocación se produce aun cuando el segundo poder no produzca efectos ya sea por
fallecimiento o incapacidad sobreviniente del segundo mandatario, por la no aceptación de éste o
cuando el instrumento del mandato sea nulo por vicio de forma. O bien cuando el mandante
interviene directamente en el negocio y se relaciona con el tercero a menos que expresamente
manifieste que su intención no es revocar el mandato.
La renuncia, en cambio, es una potestad facultativa del apoderado, pero debe cumplir con
algunas condiciones, que de faltar determinaría su responsabilidad. El mandatario puede
renunciar a su mandato dando aviso al mandante, pero si lo hiciese en tiempo indebido, sin causa
suficiente y justa, debe satisfacer los perjuicios que la renuncia causare al mandante (art. 1978
CC). Se debe dar aviso en tiempo propio, pero aún así, aunque renuncie con justa causa, debe
continuar sus gestiones si no le es del todo imposible, hasta que el mandante pueda tomar las
decisiones necesarias para ocurrir a ésta falta de mandante (art. 1979 CC).-
La cesación de la vigencia del poder puede tener lugar por causas objetivas o subjetivas. Entre las
primeras se cuentan la expiración del plazo para el que se otorgó la representación y el
cumplimiento del negocio (art. 1960). Entre las segundas, la revocación del poder, la renuncia del
apoderamiento y la muerte, incapacidad o quiebra del poderdante o del apoderado (art.1963).
Los terceros que contrataron con el apoderado luego de la extinción del poder mantienen los
derechos en virtud de la aplicación de la teoría de la teoría de la apariencia, siempre que sean de
buena fe por no haber conocido o podido conocer la cesación (art. 1964 y 1967).
De las relaciones entre el mandante y los terceros: a) los actos realizados con
conocimiento o ignorancia imputable de la cesación, carecen de valor para el mandante y el
tercero no puede demandar su cumplimiento; b) si los actos fueron realizados ignorando el
tercero, sin culpa, de la cesación del mandato, son obligatorios para el mandante, sus herederos y
representantes pero le queda a éste (mandante) la acción contra el mandatario en el caso de que
éste haya actuado sabiendo de que el mandato había cesado con anterioridad.
El ARTÍCULO 1977 establece: “El mandato puede ser irrevocable siempre que sea para negocios
especiales, limitado en el tiempo y en razón de un interés legítimo de los contratantes o un
tercero. Mediando justa causa podrá revocarse”.
“ES AQUEL CUYO MODO DE SER ES DETERMINADO POR LA EXISTENCIA DE UN INTERÉS LEGÍTIMO,
DISTINTO AL DEL PODERDANTE, CUYA PRROTECCIÓN EXIGE MANTENER LA ESTABILIDAD DEL
EFECTO REPRESENTATIVO”.-
• El interés legítimo de los contratantes hace referencia a las partes de un negocio jurídico
especial (boleto de compraventa, división de condominio, contrato de sobreelevación, etc.) y no a
los sujetos del contrato de mandato.
• El negocio base debe estar concluido como tal con sus elementos perfectamente
determinados (sujetos, objeto y causa). Resulta recomendable que el poder especial irrevocable se
relacione la existencia del negocio en forma detallada para facilitar su ulterior prueba.
La irrevocabilidad, no es absoluta, sino que cesa frente a la existencia de justa causa dirimida en
sede judicial.La justa causa de revocación del poder debe ser declarada judicialmente. Ante una
notificación fehaciente de la revocación efectuada al notario, éste debe formular un juicio de
valor y decidirá su otorgamiento o la suspensión del acto, tomando en cada caso los recaudos que
estime conveniente.
El mero pacto de irrevocabilidad no torna aplicables los artículos 1977 y 1982 del Código Civil. Por
esta razón, no puede otorgarse un poder general en forma irrevocable ni un poder especial
irrevocable para donar, ya que ambos casos carecen de negocio base.
Parte de la doctrina entienden que el poder especial irrevocable es una especie del poder común y
otro sector sostiene que se trata de una figura autónoma, desvinculada del régimen general del
mandato. La adopción de una u otra posición repercute frente a la posibilidad de emplear el poder
especial irrevocable luego del vencimiento del plazo. Los partidarios de la tesis mencionada en
primer término admiten su empleo como un poder común, sometido a la eventualidad de la
revocación o extinción por muerte o incapacidad, mientras que la segunda teoría descarta
completamente su utilización bajo esas circunstancias.
Por este motivo, resulta conveniente en la redacción de los poderes especiales irrevocables la
previsión de su utilización y vigencia como poder común luego de la expiración del plazo
establecido o prever la irrevocabilidad en relación únicamente con el plazo.
Los poderes especiales irrevocables pueden ser empleados par escriturar a nombre de una
persona distinta de la indicada en el negocio base, siempre que ésta sea sucesor universal o
singular del primitivo adquirente.
A) Ventajas.
En cuanto a la seguridad del cumplimiento del negocio, ofrece las siguientes ventajas:
Con la representación irrevocable se busca -(y se logra, cuando se dan los presupuestos
contractuales y legales)- impedir que, con su sola voluntad, el poderdante revoque la
representación que había sido dada en interés de las partes o de un tercero; dicho de otra
manera, que no pueda quedar al arbitrio de una persona revocar una representación cuya
permanencia se tuvo en cuenta como una de las bases del contrato.
Así como no funciona la revocabilidad por mera voluntad del poderdante, también esa
imposibilidad de revocación subsiste frente al fallecimiento de éste, con lo que se evidencia otra
de las ventajas del apoderamiento en esas condiciones.
No debe olvidarse en este caso que las prestaciones que el apoderado hubiera percibido a nombre
del poderdante y no le hubiese liquidado antes de su fallecimiento, deberá liquidarlas a los
herederos del poderdante, en el respectivo juicio sucesorio, ya que la irrevocabilidad no libera de
la rendición decuentas.
B) Desventajas.
Con respecto a la seguridad del cumplimiento del negocio diremos que, en principio, las
desventajas no son de la figura jurídica del poder irrevocable, sino que derivan de aspectos que
éste no cubre, en cuanto a la seguridad de arribar sin dificultades al final del negocio.
Tales son los embargos e inhibiciones sobrevinientes, sobre el bien o la persona del titular de
dominio.
Esta faz negativa de la figura del poder irrevocable puede poner al comprador frente a la
necesidad, si quiere llegar a la escrituración, de satisfacer las obligaciones que de mala fe siga
contrayendo el vendedor.
Queda claro, por lo tanto, que el poder irrevocable no asegura la posibilidad de una transmisión de
dominio en el momento en que el adquirente lo desee, que en la mayoría de los casos se da recién
cuando éste ha encontrado otro adquirente.
Como podemos observar, existen las siguientes formas de extinguir el poder especial irrevocable:
• Vencimiento del plazo: una vez cumplido el término por el cual fue dispuesto el poder
especial irrevocable, el mismo quedaría extinguido. Acá cabe distinguir que siempre que venció el
plazo se extinguió la irrevocabilidad, pero no siempre se extingue la representación, ya que en el
mismo poder se puede establecer que “vencido el plazo de irrevocabilidad, el presente valdrá
como poder simple de venta (o el contrato que sea)”.
• Revocación por justa causa: que pretende el mandante y debe resolverse por vía judicial.
Si bien el poder, mientras no haya sentencia firme que así lo determine o medida cautelar que
impida su uso, sigue siendo válido, es particularmente cuestionable la buena fe del contratante
que, sabiendo del inicio de la acción, contrata a pesar de ello.
• Desaparición del interés.
• Cumplimiento del objeto para el cual se dispuso o por fracaso definitivo del negocio tenido
en vista.
• Por acuerdo de todas las partes: Nada impide que antes de la ejecución del objeto, todas
las partes intervinientes convengan su extinción (estipulación expresa del mandante, mandatario y
si lo hubiere con terceros Art. 1977 y 1200 CC).
Este artículo se refiere a encargos para después de la muerte del mandante; se rige por las
disposiciones legales relativas al testamento.
Este caso es absolutamente distinto a los de poder irrevocable (art. 1977 a 1982), y a las del
contrato de mandato (art. 1980 y 1981), ya que se relaciona directamente con las disposiciones de
última voluntad.
De acuerdo al artículo 1983, el encargo de un negocio futuro, que mandatario debería concertar
en nombre del mandante ya fallecido, sólo podría celebrarse válidamente si el instrumento de
mandato vale por su forma como testamento, y lógicamente, dentro de las limitaciones
patrimoniales del orden sucesorio, si hubiere herederos con partes legítimas.
El art. 1983 no corresponde a las disposiciones del contrato de mandato o a las relativas al poder
de representación. Pudo estar perfectamente ubicado entre las que se refieren a la sucesión
testamentaria del Título XI de la Sección I del Libro IV del Código, acorde al artículo 3.607 que dice
que el testamento es el acto escrito, celebrado con las solemnidades de la ley, por el cual una
persona dispone del todo o parte de sus bienes para después de su muerte.
B) El artículo 1.980: “La muerte del mandante no pone fin al mandato, cuando el negocio
que formo el objeto del mandato debe ser cumplido o continuado después de su muerte. El
negocio debe ser continuado, cuando comenzado hubiere peligro de demorarlo”.
El artículo citado es relativo al contrato de mandato. Establece obligaciones del mandatario ante la
muerte del mandante.
El principio general es que el efecto de los contratos pasa a los herederos, en los supuestos en que
probada la subsistencia del negocio base, subsistirán el poder y el mandato, independientemente
de su revocabilidad.
Subsisten entonces, los poderes y mandatos en todos los supuestos en los que el negocio base
subsiste aún después de la muerte del mandante. Del mismo modo, el notario debe negarse a
utilizar el poder cuando conoce la muerte del otorgante, si el negocio base no está probado
suficientemente.
La previsión de este artículo se aplica a negocios en ejecución, donde los intereses económicos
fluctuantes pueden afectar a los herederos, se refiere a las relaciones internas entre mandante y
mandatario en un contrato de mandato y no tiene aplicación en el poder especial irrevocable-
donde los intereses económicos ya están consumados- en opinión de Etchegaray y Lambert; en el
mismo sentido se pronunció la Jornada XXII Notarial Bonaerense celebrada en Lomas de Zamora
en el año 1978.-
D) Artículo 1.977: “El mandato puede ser irrevocable siempre que sea para negocios
específicos, limitado en el tiempo y en razón de un interés legítimo de los contratantes o un
tercero. Mediando justa causa podrá revocarse”.
El objeto de este artículo es el poder irrevocable fundado en el interés legítimo de las partes
contratantes o un tercero para negocios especiales, limitado en el tiempo y que puede revocarse
por justa causa.
E) Artículo 1.982: “El mandato continúa subsistiendo aún después de la muerte del
mandante, cuando ha sido dado en interés común de éste y del mandatario, o en el interés de un
tercero”.
Se refiere en este supuesto al poder irrevocable aun ante la muerte del poderdante fundado en el
interés de las partes o un tercero.
Es claro que el interés de las partes o del tercero, es el mismo que el del art. 1.977, pero no está
explicitada la referencia al negocio especial, pero se sobreentiende que se habla de partes, no
pueden ser otras que las contratantes en el negocio causal que sirvió de base al otorgamiento del
poder.
Para finalizar, podemos decir, que los arts. 1.977 y 1.982 del Código Civil configuran para el poder
irrevocable una categoría autónoma, separada de los principios generales del contrato de
mandato y aún del poder de representación.
El mero pacto de irrevocabilidad no hace aplicable los citados arts. y sólo tiene relevancia entre
mandante y mandatario y no frente a terceros.
El poder irrevocable supone la existencia de un negocio base, del que surge el interés de las partes
en lograr su ejecución. Las referencias del plazo limitado y a la justa causa de revocación se
considera que pudo haberse omitido en su redacción, por estar implícitas en todo negocio por
aplicación de los principios generales de buena fe, equidad, abuso de derecho y moral.
El Poder Especial Irrevocable del art. 1977 es siempre accesorio de un negocio jurídico con
contenido negocial anterior o simultáneo a su otorgamiento. Y es siempre, subsistente post
mortem.
Por lo expuesto, los requisitos del mandato y poder irrevocable con eficacia post mortem muchas
veces son los mismos. Pero no siempre es así.
El Poder Especial Irrevocable es siempre post mortem; en cambio, un mandato post mortem
puede no ser irrevocable.
PODER GENERAL PARA JUICIOS
INSTRUMENTO
…comparece A…
Dado que el poder es un acto unilateral solo resulta necesaria la comparecencia del poderdante.
No es indispensable consignar la clave fiscal del otorgante por no tratarse de un acto registrable.
Sin perjuicio de ello, puede ser de utilidad incluirla ya que facilitará el ejercicio de algunos actos
contenidos en el poder para los cuales será exigida.
Interviene por si y expone: Que confiere PODER GENERAL PARA ASUNTOS JUDICIALES Y
EXTRAJUDICIALES a favor del doctor B, titular del Documento Nacional de Identidad número xxxx,
para que en su nombre y representación intervenga en todos los asuntos judiciales y
extrajudiciales que al momento tenga pendientes o se le susciten en el futuro y en que el
otorgante sea parte legítima o tenga interés como actor, demandado, tercerista o en cualquier
otro carácter.
Ante la pluralidad de apoderados, se prevé la posibilidad de que estos actúen en forma indistinta,
conjunta, separada o alternada. De esta manera, se permite la actuación más amplia y de todas
las formas posibles respecto de cada uno de los apoderados.
Al efecto lo faculta para ejercer las acciones o gestiones pertinentes ante los Tribunales y Juzgados
federales u Ordinarios y autoridades administrativas nacionales, provinciales, municipales o de la
Ciudad Autónoma de Buenos Aires; instar juicios ordinarios, sumarios, sumarísimos, ejecutivos y el
cumplimiento de sentencias; presentar escritos, escrituras, testimonios, partidas, títulos y
documentos de toda clase, recusar, prorrogar o declinar jurisdicciones; constituir domicilios
especiales; celebrar conciliación o mediación; entablar o contestar demandas de cualquier
naturaleza, tercerías o reconvenciones; oponer o contestar excepciones, prescripciones y
caducidades; aceptar o exigir fianza, cauciones, arraigos y demás garantías; asistir a audiencias y
juicios verbales, al cotejo de documentos o firmas, a exámenes periciales y solicitarlos , citar de
evicción, designar o promover administradores de bienes, tasadores, inventariadores,
rematadores, martilleros, letrados, partidores, escribanos y toda especie de peritos, aceptando o
impugnando sus operaciones y peritajes; solicitar, aceptar o rechazar divisiones de condominio,
mensuras, deslindes y amojonamientos, particiones de todo tipo y adjudicaciones de bienes,
realizar o solicitar inventarios; compulsar libros; protocolizar, agregar o desglosar documentos;
pedir testimonios e inscripciones, acordar términos y conceder esperas y/o quitas; formular
protestos y protestas; reconocer obligaciones anteriores de mandato, hacer novaciones que
extingan obligaciones anteriores o posteriores al mandato; renunciar o aceptar renuncias de
derechos; oponer o interrumpir prescripciones y renunciar a prescripciones adquiridas; pagar o
cobrar y percibir judicial o extrajudicialmente, incluso de compañías aseguradoras, créditos
preexistentes o posteriores a este poder, o cualquier otra suma de dinero y otros valores que
deban abonársele al poderdante; dar y exigir los recibos correspondientes; recibir cheques, recibir
una cosa por otra;
El texto comprende los pasos procesales que se inician con la interposición de la demanda,
contestación o reconvención y confiere facultades amplias al apoderado, quien puede percibir
dinero y otros valores que se deban al poderdante, incluso en forma extrajudicial. En relación con
la facultad de percibir, habrá que asesorar al respecto al requirente para que decida su inclusión, o
no.
En relación con las facultades de sustituirlo, el otorgante, previo asesoramiento al respecto, deberá
decidir si quiere, o no, facultar la sustitución.
PODER GENERAL DE ADMINISTRACION
INTRUMENTO
COMPARECE A
Dado que el poder es un acto unilateral, solo resulta necesaria la comparecencia del poderdante.
El contrato de mandato no queda documentado en la escritura pública de poder, sino que sus
instrumentación resultará de otros documentos previos o posteriores o aun en forma tácita,
mediante la ejecución por el apoderado de los actos para los cuales se lo ha facultado. No es
indispensable consignar la clave fiscal del otorgante por no tratarse de un acto registrable. Sin
perjuicio de ello, puede ser de utilidad incluirla ya que facilitará el ejercicio de algunos actos
contenidos en el poder para los cuales será exigida.
Interviene por sí y expone: Que confiere PODER GENERAL DE ADMINISTRACION a B, titular del
documento Nacional de Identidad número xxxx, para que en su nombre y representación pueda
realizar los siguientes actos: PRIMERO (administración de bienes): administrar libremente todos
sus bienes, actuales o futuros, con facultad para efectuar reparaciones y refacciones en ellos y
tomar todas las medidas que fueren necesarias para su conservación; celebrar toda clase de
contratos relacionados con la administración bajo cualquier forma y condición, tales como
locaciones y sublocaciones, arrendamientos y subarrendamientos, aparcerías y comodatos;
requerir a los locatarios o sublocatarios el pago de las obligaciones a su cargo; aceptar fianzas y
cualquier otro tipo de garantía; adquirir y conservar la tenencia; contratar seguros y cobrar sus
indemnizaciones; determinar en cada contrato sus elementos esenciales, naturales y accidentales,
así como sus formalidades; rescindir, resolver, modificar, aclarar, rectificar, confirmar, ratificar,
reconocer, renovar o extinguir los actos jurídicos de administración; pagar los gastos propios de la
administración, los extraordinarios y los que se originen por las reparaciones, refacciones y actos
de conservación, impuestos, tasas, contribuciones, servicios públicos, multas, comisiones y
honorarios de toda índole y, en general, todo lo adeudado y repetir sus pagos; suscribir y pagar
moratorias; hacer, aceptar o impugnar pagos, incluso por subrogación o por consignación; dar
recibos; asistir a asambleas de consorcios de copropietarios, con derecho a voz y voto; nombrar
administradores; representar al poderdante ante administradores, consejos de administración,
comisiones especiales y en toda cuestión que se susciten entre copropietarios; solicitar el registro
de bienes y documentos; protocolizar instrumentos públicos, privados o particulares; retirar o
enviar la correspondencia epistolar o telegráfica y los valores, giros, certificados, cargas y
encomiendas consignadas a su nombre y suscribir avisos, recibos y demás resguardos.
En la presente cláusula se prevén los contratos que usualmente se celebran con la finalidad de que
los bienes produzcan las utilidades que hacen al giro normal del patrimonio. No se prevén las
locaciones por más de seis años ni la cesión del contrato, por configurar actos de administración
extraordinarios que pueden incluirse en el concepto amplio de “disposición”.
Se contemplan las ulterioridades comunes a la mayoría de estos contratos, como la adquisición o
entrega de la tenencia, el cobro de alquileres y la suscripción de recibos. También se prevé el pago
de impuestos, tasas, contribuciones, servicios, multas y la representación del poderdante ante los
órganos del edificio sometido a Propiedad Horizontal.
SEGUNDO (operaciones bancarias): depositar en los Bancos o en poder de otras personas físicas o
jurídicas toda clase de valores, en cuenta corriente, caja de ahorro o a plazo fijo y extraer total o
parcialmente depósitos; realizar operaciones de cualquier naturaleza autorizadas por el Banco
Central de la Republica Argentino en los Bancos, Bolsas o con cualquier persona física o jurídica del
país, sin limitación de tiempo ni de cantidad, con facultades para: librar, endosar, descontar, girar,
transferir, adquirir, avalar, aceptar, enajenar, ceder, renovar, amortizar o cancelar y negociar de
cualquier modo letras de cambio, pagares, giros, vales, cheques, títulos de renta, acciones,
cupones, bonos y demás documentos de crédito público o privado o papeles de comercio, abrir
cuentas bancarias, girar en descubierto hasta la cantidad autorizada por los establecimientos
bancarios o por los particulares, autorizar débitos, descontar valores, dar en caución títulos,
acciones u otros efectos; abrir o clausurar cuentas corrientes, cajas de ahorro comunes o
especiales y de seguridad¸ solicitar libretas de cheques y conformar su recibo; concertar contratos
de plazo fijo; solicitar resúmenes y saldos, conformarlos y obsérvalos; efectuar denuncias de
extravío, hurto o robo; formular protestos.
En esta cláusula se establecen las operaciones bancarias más frecuentes que hacen al giro normal
del patrimonio. Por ejemplo, se prevé la apertura de cuentas en nuestro país y el giro en
descubierto hasta la cantidad autorizada en el contrato respectivo.
En este caso es uno de los supuestos más frecuentes de utilización del poder irrevocable,
esto es, cuando se ha suscripto boleto de compraventa y abonado la totalidad del precio pero, por
diferentes razones, no se otorga la escritura de transferencia de dominio. En el ejemplo se ha
trasmitido al adquirente la posesión del inmueble, lo que esa habitual cuando éste paga la
totalidad del precio.
INSTRUMENTO
Es requisito para la irrevocabilidad del poder que éste se confiera en interés legítimo de
los otorgantes o de terceros. La doctrina coincide en que este interés debe resultar perfeccionado,
es decir que cuente con todos sus elementos. Por tanto, será necesario hacer referencia concreta
al contrato cuyo cumplimiento será objeto del poder. En este caso se agrega a la escritura copia
del contrato base, por lo que no es necesario hacer ningún otro detalle del negocio. Del querer
agregar copia, deberán relacionarse los elementos esenciales del boleto.
Esta redacción permite que, una vez cencido el plazo, el poder mantenga su vigencia como
un simple poder especial. En cambio, si se optara por fijar un plazo, el poder se extinguiría
automáticamente al vencimiento de este término (art. 1960 C.C.)
Dado que se ha otorgado boleto y posesión en la misma fecha que el poder irrevocable,
resulta la obligación para la autorizante del documento de proceder a la retención del Impuesto a
la Transferencia de inmuebles, en virtud delo dispuesto por la ley 23.905. Si el vendedor hubiese
optado por la exención prevista en el art. 14 de la ley 23.905, se consignará:
Asentimiento Conyugal: En los casos comprendidos en el artículo 1277 del Código civil
deberá concurrir al acto el cónyuge del vendedor para dejar prestado su asentimiento. Cuando se
tratara de un vendedor casado pero para la venta objeto del poder no se requiera asentimiento,
debería él declarar que no corresponde el asentimiento previsto por el artículo 1277 del Código
Civil por tratarse de un bien propio que no es sede del hogar conyugal.
PODER IRREVOCABLE PARA VENTA SIN TRANSMISION DE LA POSESION
INSTRUMENTO
Es requisito para la irrevocabilidad del poder que este se confiera en interés legítimo de
los otorgantes o de un tercero. La doctrina coincide que en este interés debe resultar de un
contrato perfeccionado, es decir que cuenta con todos sus elementos. Por tanto, será necesario
hacer referencia concreta al contrato cuyo cumplimiento será objeto del poder. En este caso se
agrega a la escritura copia del contrato base, por lo que no es necesario hacer mención a ningún
otro detalle del negocio. De no querer agregar copia, deberán relacionarse los elementos
esenciales del boleto.
TERCERO: Que con la finalidad de dar cumplimiento al requisito impuesto por el art. 1977 del
Código Civil, fija a la irrevocabilidad de este poder un plazo de cinco años contado desde la fecha
de esta escritura. Vencido dicho término, el poder continuará su vigencia mientras no sea
revocado.
Esta redacción permite que, una vez vencido el plazo, el poder mantenga su vigencia como
un simple poder especial. En cambio, si se opta por fijar un plazo, el poder se extinguiría
automáticamente al vencimiento de este término (art. 1960 C. C.)
CONSTANCIAS NOTARIALES:…
Asentimiento Conyugal: En los casos comprendidos en el art. 1277 del C.C. deberá concurrir al acto
el cónyuge del vendedor para dejar prestado su asentimiento. Cuando se tratara de un vendedor
casado él declara que no corresponde el asentimiento previsto por el art. 1277 del C.C. por tratarse
de un bien propio que no es sede del hogar conyugal.
PODER IRREVOCABLE. BOLETO DE
COMPRAVENTA “EN COMISION”
INSTRUMENTO
Es requisito para la irrevocabilidad del poder que este se confiera en interés legítimo de
los otorgantes o de un tercero. La doctrina coincide en que este interés debe resultar de un
contrato perfeccionado, es decir que cuente con todos sus elementos. Por tanto, será necesario
hacer referencia concreta al contrato cuyo cumplimiento será objeto de poder. En este caso se
agrega a la escritura copia del contrato base, por lo que no es necesario hacer mención a ningún
otro detalle del negocio. De no querer agregar copia, deberán relacionarse los elementos
esenciales del boleto.
TERCERO: Que con la finalidad de dar cumplimiento al requisito impuesto por el art. 1977 del CC.,
fija a la irrevocabilidad de este poder un plazo de cinco años contado desde la fecha de esta
escritura. Vencido dicho término, el poder continuará su vigencia mientras no sea revocado.
Esta redacción permite que, una vez vencido el plazo, el poder mantenga su vigencia como
un simple poder especial. En cambio, si se optara por fijar un plazo, el poder se extinguiría
automáticamente al vencimiento de ese término (art. 1960 C.C.).
CONSTANCIAS NOTARIALES:…
Asentimiento Conyugal:En los casos comprendidos en el art. 1277 del C.C. deberá concurrir al acto
el cónyuge del vendedor para dejar prestado su asentimiento. Cuando se tratara de un vendedor
casado pero para la venta objeto del poder no se requiera asentimiento, deberá él declarar que no
corresponde el asentimiento previsto por el art. 1277 del C.C. por tratarse de un bien propio que no
es sede del hogar conyugal.
PODER CON EFECTO POST MORTEM
Si bien el mandato se extingue con el fallecimiento (art. 1963, inc. 3°), nuestro Código Civil
prevé una excepción cuando el objeto debe ser completado o continuado después de la muerte
del causante (art. 1980).
El mandato es un negocio inter vivos cuya eficacia no puede condicionarse en forma
suspensiva a la muerte del mandante, ya que de lo contrario se trataría de un negocio mortis
causa o disposición de última voluntad prohibida en el ámbito de esta figura (art. 1890), salvo que
se ajuste a las formas testamentarias (art. 1983).
Resultan válidos aquellos mandatos sobre negocios que deban ser iniciados en vida del
mandante y continuados en el caso de su fallecimiento, cuando existe la posibilidad de perjuicio
por la demora que significaría la extinción del contrato, como en el supuesto de la defensa en
juicio del poderdante, la venta de mercadería perecedera, la celebración de contratos sucesivos
regidos por plazos perentorios, entre otros. Se trata de mandatos post mortem en los que la
muerte no consiste en una condición suspensiva ni resolutoria de su eficacia. El negocio en
comendado debe ser continuado para evitar los perjuicios que la demora en la continuación del
mandato pudiera acarrear a los herederos del mandante (art. 1980).
En el caso de los poderes con efectos post mortem, la subsistencia luego del fallecimiento
no depende del pacto, como en el caso de los poderes especiales irrevocables, sino del tipo o
calidad del negocio que conlleva una situación de peligro en la demora de la ejecución. Estos
poderes revisten naturaleza distinta de la de los previstos en los artículos 1977 y 1982 del C.C. y,
por esta razón, la vigencia post mortem no guarda relación con la irrevocabilidad.
La excepción a la eficacia post mortem de estos mandatos consiste en la existencia de
herederos menores o incapaces del fallecimiento del mandante (art. 1981). Esta salvedad no se
extiende a los supuestos de poderes especiales irrevocables, en los que el interés legítimo de las
partes del negocio es superior al de los herederos incapaces.
INSTRUMENTO
…comparece A… interviene por sí y expone: Que confiere PODER ESPECIAL a favor de B para que en
su nombre y representación proceda a VENDER los quinientos litros de cerveza negra artesanal
marca…, de elaboración del mandante, embotellada bajo los números…, bajo el número de lote…,
cuyo vencimiento estimado es el día…
Al efecto de cumplir con el encargo, el poderdante confiere las siguientes facultades: celebrar
contratos de compraventa por instrumentos públicos o privados, pactar un precio no menor a…
pesos por litro, percibir el importe al contado y otorgar recibo, poner en posesión de la cosa al
comprador y realizar cuantos más actos, gestiones y diligencias sean conducentes al ejercicio del
presente poder.
PODER. SUSTITUCION
…comparece A… y expone: PRIMERO: Que es apoderado de B, en virtud del poder especial que éste
le confirió por escritura número…, de fecha…, autorizada por el escribano de…, don…, al folio… del
Registro número… a su cargo.
La primera cláusula determina el objeto del acto, a saber: a sustitución del apoderado.
Asimismo, se reitera el objeto del poder.
TERCERO: A tal efecto, C podrá, como expresa textualmente el poder especial sustituido, “convenir
el precio de venta, sea al contado o a plazos, exigir garantías reales o personales, por los saldos de
precio deudores que resulten, estipulando en este caso, plazos intereses, amortizaciones y demás
clausulas necesarias; firmar boletos de compraventa; corar y percibir el precio de las enajenaciones
e intereses, dar recibos y cartas de pago; otorgar y firmar la escritura a favor del o los
compradores; aceptar en su caso la hipoteca que se constituya por el saldo de precio, firmado en
su oportunidad las escrituras de cancelación; gestionar ante el Archivo de Protocolos Notariales la
expedición de segundo testimonio del título de propiedad y declarar su extravío, firmar los escritos,
solicitudes, recibos, declaraciones juradas y demás documentos; poner al o los compradores en
posesión del inmueble, abonar tasas y demás gastos,; sustituir el presente poder y, en definitiva,
realizar cuantas más actos, gestiones y diligencias sean necesarios para el mejor cumplimiento del
presente”. Es copia fiel de parte del original.
En esta clausula se transcribe en forma parcial el texto del poder originario. Consideramos
que esta redacción es conveniente ya que de este modo la escritura de sustitución es
autosuficiente. Puede optarse las facultades, en cuyo caso éstas deberán consultarse
directamente de la primera copia del poder sustituido.
INSTRUMENTO
…comparece A… interviene por sí y expone: PRIMERO: Que por escritura número…, de fecha…, de..,
de.., autorizada por el escribano de esta ciudad…, al folio número…, del Registro número… de su
titularidad, confirió poder especial a favor de…, titular del Documento Nacional de Identidad …,
para vender el inmueble ubicado en …
La primera cláusula de la escritura consigna los datos que permiten individualizar al poder
otorgado por el compareciente. Se menciona el nombre y apellido y documento nacional de
identidad del apoderado para su posterior individualización en la notificación. No resulta
imprescindible detallar el contenido del poder.
Esta cláusula contiene la revocación expresa del poder cuyos datos se expresaron en el
punto anterior. Como variante, cuando la revocación es parcial, en este punto pueden detallarse
las facultades específicas que el poderdante deja sin efecto.
TERCERO: Que solicita de mi que en la fecha o en días sucesivos me constituya en el domicilio del
apoderado, ubicado en la calle…, con la finalidad de notificarle esta revocación y exigirle la
devolución de la primera copia del poder relacionado. LEO…
Siendo las catorce horas, acompañado por el requirente, me constituyo en l domicilio indicado en el
requerimiento, calle…, donde soy atendido por la persona que se identifica como…, a quien informo
mi calidad de escribano, manifiesto la revocación del poder mencionado a través de la lectura del
texto que antecede en esta escritura, y su obligación de devolver la primera copia del poder del
poderdante.
En la diligencia puede prescindirse de la presencia del requirente, aunque en este caso es
recomendable para que, el apoderado pueda entregarle la primera copia del poder. También
puede preverse que el apoderado entregue el instrumento al escribano. El escribano debe
informar su calidad de tal y expresar el objeto de la diligencia, que puede realizarse a través de la
lectura dl texto de la escritura de revocación o por medio de una somera explicación. Asimismo, se
notifica al requerido de su obligación de devolver el instrumento del poder. (Art. 1970).
1. “Teoría y Técnica de los Contratos, Instrumentos Públicos y Privados”, Tomo II, Carlos
Marcelo D`alessio;
4. GATTARI, Carlos Nicolás, “Práctica Notarial” Tomo 3. Editorial Depalma. Buenos Aires.
Reimpresión AÑO 1995, pág. N°3 a 70.-