LISÍSTRATA de Aristófanes.

Por: Elard Meza Llerena

Complementación Pedagógica – Arequipa.

Nos encontramos ante una obra de teatro que a pesar que nos muestra una forma de comedia
fuerte y directa en una primera lectura es en el fondo un manifiesto a favor de la paz. La obra
tiene dos acciones importantes, una es la huelga de sexo y la otra la toma del poder.
Sobre la huelga de sexo:
Es la parte de la historia que nos ofrece la comedia dura y directa, llena de alusiones y frases con
segundas intenciones, en algunos casos y en otras ocasiones con menciones claras y directas. El
sexo tal y como lo presentan aquí, es una fuerza tan poderosa y el hombre esta tan esclavizado a
él, que por la necesidad de satisfacer sus ansias carnales es capaz de abandonar cualquier otro
interés (poder, dinero, etc.)
Bien sabemos que en la cultura griega el papel de la mujer en el campo político era nulo, se le
consideraba un ser inferior por tal es allí donde inicia la comedia. Las mujeres asumirán, mediante
la negación al acto sexual, el poder sobre sus maridos.
La comedia se burla de todos, incluso de las mismas mujeres “¡Ay cómo es de calentón todo el
género femenino! Con justicia suministramos temas para tragedias, porque siempre le estamos
dando vueltas a lo mismo” menciona la protagonista Lisístrata iniciadora de esta revolución, una
mujer recia de ideas claras y carácter fuerte.
A lo largo de la obra, la abstinencia ya está causando sus estragos, algunas mujeres desean
desertar y para ello inventan excusas absurdas “Quiero ir a casa; allí tengo una lana de Mileto
que se la están comiendo los gusanos”, “¡Desdichada, desdichada de mí, que he dejado en casa
un calabacín sin pelar! ” y ni que decir de los hombres, ya el pobre Cinesias (esposo de Mirrina)
en sus propias palabras muere de ansias por su mujer “¡Esa mujer me ha matado y me ha hecho
polvo; dejando aparte otras cosas me ha pelado y se ha largado!”, Entre mirrina y el transcurre
una de las escenas más cómicas que contiene la obra, la manera en que el hombre loco de lujuria
no puede lograr su objetivo debido a la calma y dulce juego de seducción que aplica su esposa.
Sobre la toma del poder.
Este aspecto de la obra no suele ser mencionado, es más atractiva la idea de las mujeres
controlando a los hombres mediante el uso del sexo. Pero la verdadera fuerza de esta obra está en
las mujeres asumiendo el poder, y no el de su casa, sino el poder político y económico. Porque
como ya mencionamos anteriormente la mujer debía mantenerse en el hogar y no opinar sobre la
vida política del país, pero ello no significa que no entendiera acerca de cómo se daban las cosas
“Así pues, yo callaba. Y nos enterábamos de vuestras sucesivas decisiones, cada una más
equivocada que la anterior, y entonces decíamos: < ¿Cómo actuáis tan estúpidamente,
marido?>.”
Es entonces en ese momento en que deciden realizar este cambio, buscar su libertad y tomar la
Acrópolis (bastión impenetrable del ego masculino de la época). Coros de ancianos (hombre y
mujeres) discuten de las maneras más cómicas, y los varones más cómicos aun. Las mujeres
desean la paz, para poder volver a sus hogares y por ello han decidido que no es necesario seguir
en guerra y que no permitirán el derroche de los dineros del pueblo.
El fuerte carácter de estas mujeres ha dejado a los hombres sin sus juguetes favoritos y así han
logrado la paz.
Para finaliza, un lema “Quien hace la guerra, no hará el amor” (El lema es prestadito,
lamentablemente no se de quien, ja)