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EL POSITIVISMO

El positivismo es una corriente filosófica que afirma que todo conocimiento deriva de
alguna manera de la experiencia, la cual se puede respaldar por medio del método
científico, por tanto rechaza cualquier conocimiento previo a la experiencia.

Positivismo, epistemológicamente hablando, significa ‘sin valor’ o ‘sin prejuicios’. Es decir,


que no cree en las ideas previas o ideas a priori porque todo está en abierto hasta que se
demuestre objetivamente a través de un método científico.

ANTECENDENTES

El término positivismo surgió en Francia a mediados del siglo XIX. El primero en hacer
mención del positivismo fue el filósofo francés Saint-Simon, precursor de la filosofía social.
El sociólogo y filósofo francés Auguste Comte (1798 - 1857) quien popularizó dicha
corriente filosófica junto con, el filósofo y político británico, John Stuart Mill (1806 – 1873).

Tanto Comte como Mill se basaban en la idea de que todo conocimiento o actividad
filosófica o científica debía partir de hechos reales y posibles de comprobar a través del
método científico, por lo que rechazaban cualquier tipo de conocimiento previo a la
experiencia.

El pensamiento de A. Comte.

Tomando como trasfondo la Revolución Francesa, Comte acusa a estos dos autores de
generar utopías metafísicas irresponsables e incapaces de otorgar un orden social y
moral a la humanidad.

Los problemas sociales y morales han de ser analizados desde una perspectiva científica
positiva que se fundamente en la observación empírica de los fenómenos y que permita
descubrir y explicar el comportamiento de las cosas en términos de leyes universales
susceptibles de ser utilizadas en provecho de la humanidad.

Comte afirma que únicamente la ciencia positiva o positivismo podrá hallar las leyes que
gobiernan no sólo la naturaleza, sino nuestra propia historia social, entendida como la
sucesión y el progreso de determinados momentos históricos llamados estados sociales.

La Ley de los tres Estados.

Según Comte, los conocimientos pasan por tres estados teóricos distintos, tanto en el
individuo como en la especie humana. La ley de los tres estados, fundamento de la
filosofía positiva, es, a la vez, una teoría del conocimiento y una filosofía de la historia.
Estos tres estados se llaman:

 Estado Teológico:
Es ficticio, provisional y preparatorio. En él, la mente busca las causas y los principios de
las cosas, lo más profundo, lejano e inasequible.
Estado Metafísico:

O estado abstracto, es esencialmente crítico, y de transición, Es una etapa intermedia


entre el estado teológico y el positivo. En él se siguen buscando los conocimientos
absolutos. La metafísica intenta explicar la naturaleza de los seres, su esencia, sus
causas. Pero para ello no recurren a agentes sobrenaturales, sino a entidades abstractas
que le confieren su nombre de ontología

Estado Positivo:

Es real, es definitivo. En él la imaginación queda subordinada a la observación. La mente


humana se atiene a las cosas. El positivismo busca sólo hechos y sus leyes. No causas ni
principios de las esencias o sustancias.

Características de la filosofía positiva


Rechaza las nociones a priori y los conceptos o creencias de tipo universal que no hayan
sido comprobados.
 El positivismo se basa en que los hechos empíricos son los que fundamentan el
conocimiento.
 Promueve como válido el conocimiento de carácter científico respaldado por el
método científico.
 El método científico debe ser aplicado tanto a las investigaciones científicas como
humanísticas.
 El conocimiento que se obtiene del positivismo debe ser objetivo.
 Las pruebas documentadas son las más importantes, no sus interpretaciones.

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