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Acción y efecto de Administrar, aplicación de una cosa a un fin, gobernar, regir, manejar, cuidar los
negocios o intereses, públicos o privados, propios o ajenos.
El término administración deriva del latín administrare, que significa «gobernar, regir, ordenar,
disponer».
H. Fayol (1841-1925) se inició como Ingeniero de Minas en una empresa metalúrgica - carbonífera,
y culminó como Gerente General. Se convirtió en un excelente administrador.
Prever: Formular un plan de acción que permita a la organización alcanzar sus metas.
Organizar: Movilizar los recursos materiales y humanos para poner en práctica los planes.
Mandar: Dar dirección al personal, conocerlo, inspeccionarlo y vigilarlo.
Coordinar: Lograr armonía entre las actividades de la empresa para alcanzar los objetivos
deseados.
Controlar: Verificar que las actividades de la empresa se están haciendo de acuerdo a los
planes. Hacer un seguimiento de los mismos.
M.P Follett (1868 -1933) introdujo muchos elementos nuevos al estudio de la administración.
Estaba convencida de que ninguna persona podría sentirse completa a no ser que formara parte
de un grupo y que los humanos crecían gracias a sus relaciones con otros miembros de las
organizaciones.
Reflexiones
Usted está estudiando Administración en un momento y lugar en que muchas personas están
volviendo a analizar el verdadero objetivo de la Administración.
Las organizaciones forman parte de las noticias y de nuestra conversación todos los días. Vivimos
en una sociedad llena de organizaciones con fines económicos, culturales, socia-les, políticos,
educativos. Todas ellas deben y necesitan ser administradas para alcanzar sus metas y objetivos.
Cuando pensamos en Administración las ideas más frecuentes son decisiones, empresa,
planeación, liderazgo, tiempo, personas.
El éxito o fracaso de una organización depende de la eficiencia y eficacia con que la obtenga y
utilice sus recursos. Sin Administración no es posible que un banco, una escuela o un sindicato
logren los resultados para los que han sido creados.
La Administración primero se aplica a las personas. Resulta indispensable que todo ser humano
aprenda a administrarse. Toda persona debe formular su propia misión y objetivos existenciales.
Las personas necesitan administrar las relaciones con todos los seres con los cuales interactúan,
sus habilidades y carencias, para lograr sus objetivos.
La administración es también una técnica. Las técnicas son esencialmente formas de hacer las
cosas, métodos para lograr un determinado resultado.
Son importantes en todos los campos de actividad, desde luego lo son en la Administración. Las
técnicas reflejan la teoría y constituyen un medio para ayudar a los administradores a emprender
actividades con la mayor eficacia.
La técnica es la caja de herramientas con procedimientos, normas, reglas y recursos que se utilizan
para desarrollar las actividades administrativas.
La administración como práctica es un arte. Quién por sus cualidades denota estar capacitado en
algo es un artista.
Administrar es una especialidad que trata de las cuestiones referentes al tiempo y a las relaciones
humanas que se presentan en las organizaciones de las cuales formamos parte.
Teorías administrativas
Introducción
La Administración es una de las actividades humanas más importantes. Desde que los seres
humanos comenzaron a formar grupos para alcanzar metas que no podían individual-mente, la
Administración ha sido esencial para asegurar la coordinación de los esfuerzos individuales. Al
repasar la historia de la humanidad, aparece la huella de pueblos que trabajaron unidos en
organizaciones formales, por ejemplo los ejércitos griegos y romanos, la Iglesia Católica Romana,
etc.
Las personas llevan muchos siglos formando y reformando organizaciones. Sin embargo son
relativamente recientes los esfuerzos por desarrollar teorías y principios de administración.
En particular con la Revolución Industrial del siglo XIX se introdujo el desarrollo de nuevas
tecnologías que concentraron grandes números de obreros en fábricas. Se produje-ron bienes en
cantidades que tenían que distribuirse ampliamente.
La nueva situación originó grandes conflictos y dificultades. El hecho de que estos elementos
tuvieran que coordinarse llamó la atención al problema Administrativo.
Las primeras Teorías sobre la administración fueron intentos por tratar de resolver los problemas
de la vida industrial a finales del siglo XIX.
Si bien estas Escuelas se desarrollaron en secuencia histórica, cada nueva Escuela ha tendido a
complementar a las anteriores o a coexistir con ellas.
Aunque es imposible pronos-ticar que estudiarán las generaciones del futuro, en estos momentos
sí es posible identificar tres perspectivas o enfoques de la Teoría de la Administración:
Enfoque de Sistemas.
Enfoque de Contingencias.
Enfoque de Compromiso Dinámico (Calidad Total)
La Administración como ciencia y su relación con otras ciencias
Administración Empírica y Administración Científica
La tarea de administrar puede desarrollarse sobre dos bases: una empírica y otra científica.
Empírico es todo sistema o doctrina fundado en la experiencia, la rutina o la práctica.
Se habla entonces de Administración Empírica cuando se sustenta solo en estos elementos, sin
apoyarse en el conocimiento y en técnicas que son producto de la investigación y el estudio.
La Administración Científica en cambio implica la existencia de una disciplina que se ocupa del
estudio de los problemas específicos de la administración.
Con la administración sucede frecuentemente que muchos administradores consideran que solo la
experiencia puede guiarlos. Ante situaciones que permiten que se alcancen altas posiciones
administrativas con pocos conocimientos y experiencia, reafirman su creencia.
Para remediar tal situación hay sólo una salida; que se mejore la práctica de la administración. Tal
mejora debe comenzar con la teoría, con las ideas, con la reflexión sobre la naturaleza de la
administración y sobre los métodos que permiten aplicar ciertos principios básicos a la realidad;
esto no quiere decir que se desconozca por completo el valor de la experiencia.
Un autor (Gulick), sostiene que: “la capacidad para dirigir a las personas es una habilidad, un arte.
No es esencialmente algo que el hombre tiene o no al nacer, no es tampoco una mera colección
de conocimientos. Un individuo podría ser un veterano curtido en el ejercicio de la administración,
con muy pocos conocimientos, pero puede ser mejor administrador si se las arregla para
mantenerse al corriente de los últimos conocimientos en la materia”.
Concluimos pues que la administración, para que tenga un carácter realmente progresista, y sea
capaz de enfrentar con éxito la complejidad creciente de las organizaciones del mundo moderno,
debe tener una base científica, complementada con un permanente estudio e investigación de los
problemas que se presentan, pudiendo ser alumbrada con la luz de la experiencia de situaciones
ya vividas.
Relación con otras ciencias
La Administración Científica es aquella que se apoya en los conocimientos que aporta la teoría
administrativa y otras ciencias cuyas investigaciones son útiles a aquella.
Gráficamente lo podemos expresar como sigue:
Administración Empírica
Experiencia.
Intuición.
Rutina.
Práctica.
Administración Científica
Teoría Administrativa.
Técnica contable.
Derecho.
Técnicas matemáticas.
Psicología.
Sociología.
Economía.
Experiencia, rutina, práctica.
La administración cinética implica la existencia de una disciplina que se ocupa del estudio de los
problemas específicos de la administración.
Surge así un nuevo enfoque de lo que puede entenderse por “administración”: un área de estudio,
un campo de investigación, una parte del conocimiento humano: la ciencia de la Administración.
Las leyes o principios de las ciencias sociales no se revelan válidas en manera absoluta y universal;
ellas más bien tienen un valor de probabilidad.
Resumiendo
El término Administración como campo de investigación, denomina a una ciencia que tiene por
finalidad la explicación del comportamiento de las organizaciones, por medio de técnicas
científicamente probadas, que facilitan la conducción de aquellas hacia sus metas y objetivos con
la mayor eficiencia posible.