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  • Lectura INTRODUCCIÓN-Merino, J-Manual de Filosofía Franciscana.

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    Es una introducción a libo de Merino sobre la filosofía franciscana

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    xIV Introduccién nal; el conocimiento y la aceptacién de obras filoséficas desconoci- das hasta entonces, jiglo de las guesas y de tereses econdmicos. Las ciudades demuestran un gran dinamismo en la vida econémica, cultural y religiosa y un fuerte deseo de autonomia y de emancipa- cién tanio del poder del Emperador como del Papa. Bs la época del wuracin imperial. Es mejor y de asimi en su Fisica y en su Metafisica solamente de servirse de Aristételes en la meto- ia, es decir, se vive » de Aristoteles. Con otras palabras, se agudiza aho- el problema de la relacton entre fe y r Las universidades. Las universidades fueron la creacién més ori- inal y fecunda de .cibn occidental medieval y asimismo la expresién y el resultado de un nuevo espirita y de una nueva menta~ lidad. Los origenes de las corporaciones universitarias nos son tan ‘oscuros ¢ imprecisos como lo son aquellos de las agrupaciones y de las corporaciones de entonces. La universidad es una creacién caracteristica del siglo Xt, que tuvo importancia decisiva en su tiempo y posteriormente. Es produc- Saad ed si ‘occidental, que crea su propio modelo cul- ue tiene muy poco que ver no sélo con las Hscuelas anterio- tes ((aonacales, cpiscopales y la palatna), sino tampoco on los centros antiguos de ensefianza superior como, por ejempl demia de Platén, el Liceo de 1 Museo de © los centros culturales persas producto caracteristico del espiritu corporativo de este tiempo, con Introdueciin xv su espectfico sentido de agrupacién profesional, donde maestros y inen y se organizan en forma de gremio, de corpora ato» que buscan Ta propia autonomia y la propia que tutelaba y defendia los propios intereses. La denomi por vez primera en un documento de ‘decir, se trataba de una cierta corporacion compuesta por maestros 0 profesores y estudiantes. La universidad de Paris pronto fue objeto de gran atencién y cuidado por parte del papado, que la favorecié en su desarolo yen su autonomia respect a a ttle dee, de obi ical» de la universidad explica por qué las sobre todo los representantes del Papa, intervinicron en ciertas controversias y pro- hibicron determinados textos sospechosos. En la universidad de Bo- lonia, que se caracterizaba por el Derecho, predominé la universitas scholarums, 0 la corporacién de estudiantes, a la que Federico I Bar- i legios. Importante fue también la ‘gracias a su universidad, la que tuvo el honor de ser ‘studiorum nobilissima civitasy, «eivitas philoso- phorum» por excelencia, convirtiéndose en el centro principal de ta ‘vida intelectual del medidevo, en el que ensefiaron los més destacados ‘maestros intemacionales de su tiempo, y a donde iban los estudiantes ms interesados en el saber. Los reyes y los papas la halagaron con ‘notables privilegios, incluso sus miembros estaban exentos del servi- cio militar, de los impuestos y no podian ser excomulgados 2 * Bie 1200 y 1400 se erearon on Occidente mis de $0 universidades, de as cuales 29 eran de fi ‘universidades de Paris, de Bolonia donde saves as, Iniroduccién de la universidad medieval tuvo no jento de un grupo especial de maestros, sacerdotes y| 8 que la Iglesia confiaba la delicada mision de ensefiar Ia do ‘miembros de un gremio 0 de una corporacién, y que no pertenecen a una funcién jerdrquica Los nuevos maestros, aun no perteneciendo @ Ia jerarquia, estén reconocidos oficialmente para poder hablar de fe y de doctrina e, in- su decisién investida de autoridad. Ahora el studium tercer poder junto al sacerdotium y al regnum, es decir, tura adquiere una nueva consideraci res, Si la antigua divisién de la sociedad estaba hecha segtin la tria- da: oratores, bellatores y laboratores, a parti de ahora el nuevo orden social lo constituyen los sapientes, los nobiles y los sive potentes, El intelectual, el nuct dde ese nuevo organismo 0 nueva i

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