EMPATÍA

Es importante ser empáticos con los niños

(ponernos en su lugar y comprender que es
normal si lloran, tienen miedo, etc.)
Ello implica que debemos de tomar una postura
de compañeros en el proceso de adaptación
Mantener la calma, no alarmarse si grita, patea o
llora en la hora de ingreso, durante clase o en la
salida.

EXPLICAR
Es importante hablar con nuestros niños,
explicarles a dónde van a ir, qué van a realizar en
el colegio, a quiénes conocerán, su horario de
clases, etc. También explicarles que es normal si
tienen miedo, pero deben aprender a confiar en
su tutora y en su co-tutora (mencionamos sus
nombres). La explicación es la mejor forma para
la adaptación.
 ACTITUD POSITIVA
Involucra la sonrisa cuando nos despedimos de
los niños y al momento de salida.
Comentarle lo bonito que es creciendo juntos,
los juegos, los amigos nuevos que ha conocido y
lo bien que lo reciben sus tutoras.
Mostrar emoción cuando lleguen al colegio
Escuchar las molestias y preocupaciones del niño
y buscar el aspecto positivo de sus experiencias.

DESPEDIDA
Es importante despedirse de manera rápida,
mencionándole quién es la persona lo o la
recogerá
Dejarlo(a) cuando está distraído no es una buena
opción, puesto que se asustan al sentirse
abandonados.
Es mejor que la despedida sea rápida.
 ¿CÓMO REACCIONAR ANTE SUS
EMOCIONES?
No alarmarse, es importante mantener la calma.
Explicarles que lo que sienten es normal,
contarles alguna experiencia personal (cuando yo
era niña…)
Crear y narrarles un cuento que contenga
personajes similares a la realidad y mostrarles la
solución a través de la historia

¿QUÉ HACER SI LUEGO DEL 1° MES

CONTINÚA CON ESTAS REACCIONES?
Acercarse al CONSULTORIO PSICOLÓGICO,
nosotros les podemos brindar técnicas para superar
y mejorar las conductas que se presenten.
Lo mejor para el niño (a) es que mantenga una
adecuada disposición ante una dificultad. La negación
de la realidad perjudica al niño, haciendo que el
proceso de adaptación sea más largo y las conductas
a mejorar sean más complejas de trabajar.
 LONCHERA LIGERA
Cada padre o madre conoce cómo se alimenta su
niño, si observa que no está comiendo como
antes, puede deberse al proceso de adaptación.
Lo mejor es enviar una lonchera ligera con los
alimentos que más le gustan (evitar golosinas) y
que los alimenten.
Las cantidades se pueden manejar gradualmente,
cada semana podemos ir aumentando un poco
más.