INFORME DEL DEFENSOR UNIVERSITARIO SOBRE EL REGLAMENTO POR EL QUE SE
REGULA EL PROCESO DE EXTINCIÓN Y ADAPTACIÓN DE LOS PLANES DE ESTUDIO DE LA URJC AL ESPACIO EUROPEO DE EDUCACIÓN SUPERIOR
La progresiva implantación de las nuevas Titulaciones de Grado lleva aparejada
la desaparición de las actuales Titulaciones de Licenciado, Diplomado, Arquitecto, Ingeniero, Arquitecto Técnico e Ingeniero Técnico. De hecho, el Real Decreto 1393/2007, de 29 de octubre, por el que se establece la ordenación de las enseñanzas universitarias oficiales, establece en su Disposición Adicional Primera que en el curso académico 2010-2011 no podrán ofertarse plazas de nuevo ingreso en primer curso para estas titulaciones. Este mismo Real Decreto, en su Disposición Transitoria Segunda, plantea la extinción definitiva de esos planes de estudio el 30 de septiembre de 2015.
Con este objetivo, la normativa aprobada por el Consejo de Gobierno de la
URJC, plasmada en el Reglamento citado, regula el proceso y los plazos de extinción, así como los derechos de los estudiantes.
Sin embargo, tomando como referente el procedimiento utilizado en anteriores
reformas de planes de estudios debidas a cambios en la legislación general, se comprueba que en algún aspecto concreto el Reglamento de la URJC es sumamente restrictivo en los derechos de los estudiantes.
En concreto, en el artículo 4. Derechos de los estudiantes, en su punto 2, se
establece lo siguiente:
4.2. Los alumnos matriculados en alguna de las titulaciones en proceso de extinción
podrán examinarse de las asignaturas matriculadas aunque no se imparta docencia, hasta la convocatoria correspondiente a septiembre de 2015, contando cada curso con sólo dos años más para poder superar las asignaturas pendientes desde la implantación del Grado, es decir, desde la extinción de la docencia, garantizando la organización de cuatro convocatorias de examen en los dos cursos académicos siguientes a la fecha de extinción del curso correspondiente. Aunque el alumno no se presente a examen, consumirá las convocatorias de estos años.
A juicio del Defensor Universitario, estas condiciones son sumamente
restrictivas, ya que limitar a cuatro convocatorias en los dos cursos siguientes a su extinción supone una considerable merma en las oportunidades de los estudiantes para finalizar sus estudios. Y este juicio se sustenta en los puntos siguientes:
1. Lo contenido en al artículo 4.2. es contrario a lo contemplado en la
Normativa sobre Permanencia aún vigente de la URJC, ya que en ésta se contempla lo siguiente:
ALUMNOS MATRICULADOS POR SEGUNDA Y POSTERIORES VECES
2.1.- Con carácter ordinario, el alumno dispone de seis convocatorias para la
superación de cada asignatura, no contando aquellas en las que no se presente a examen. De manera excepcional, el Rector, previa solicitud debidamente razonada y justificada, podrá autorizar una séptima convocatoria extraordinaria.
Esta Normativa no está derogada, de manera que el Defensor
Universitario considera que lo contenido en el Reglamento es contrario a lo reconocido –y aún vigente– en las normas de Permanencia, lo que puede suponer una vulneración de derechos, y es, en todo caso, una merma significativa del principio de igualdad de oportunidades respecto a los estudiantes que aún están cursando esas titulaciones sin que les afecte la extinción.
2. Esta restricción además no se encuentra fundamentada en criterios de
eficiencia de recursos ni de incremento del gasto, ya que mantener el número de convocatorias de examen no supone apenas gasto alguno, ni material ni humano, salvo el tiempo del profesorado empleado en realizar y evaluar los exámenes y el uso de las aulas correspondientes, y el Defensor Universitario entiende que ambos son perfectamente asumibles por la institución dentro de sus actividades habituales.
Por todo lo anterior, el Defensor Universitario finaliza este Informe con la
siguiente RECOMENDACIÓN:
Que se reconsidere la limitación contenida en el artículo 4.2 del Reglamento
citado de cuatro convocatorias de examen en los dos cursos académicos siguientes a la fecha de extinción del curso correspondiente, y se sugiere que se adopte la más beneficiosa para los estudiantes de acuerdo con las normas de permanencia de la URJC. La propuesta del Defensor es, en consecuencia, que se garantice la posibilidad de seis convocatorias en todas las asignaturas, con independencia de la fecha del curso en extinción, hasta el plazo máximo contemplado en el Real Decreto 1393/2007 de 30 de septiembre de 2015.