REICHSTAG NEW GERMAN PARLIAMENT

Sitio + Clima

El diseño utiliza la luz natural como una característica arquitectónica. Se prestó especial
atención al movimiento del sol alrededor del edificio y cómo se podría usar para iluminar el
espacio.

Forma + Masa

El proyecto de renovación buscó traer luz y apertura al edificio. Para lograr esto, se instaló
una gran luz del cielo en forma de cúpula para ayudar a capturar y reflejar la luz del día en la
profundidad de la estructura.

Diseño pasivo

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El colector solar aporta iluminación natural al corazón del edificio, mientras que una sombra
solar automatizada protege contra la ganancia solar directa no deseada. La cámara principal
del parlamento se ventila naturalmente a través de la cúpula.

Sistemas ambientales

El edificio fue diseñado para optimizar el uso de sistemas pasivos mientras se minimizan los
sistemas activos. Tanto la iluminación artificial como la ventilación están controladas por un
sistema BMS central y un intercambiador de calor recupera el calor residual del aire de
escape.

Energía renovable

Un combustible de biocombustible, Combinado de Calor y Energía (CHP) proporciona

aproximadamente el 80% de la electricidad anual y el 90% de la carga de calor del edificio.
Una gran bomba de calor de fuente terrestre (GSHP) actúa como un almacén de temporada
tanto de calor como de frío. La energía fotovoltaica en el techo potencia la sombra solar
dentro de la escultura luminosa.
Infraestructura energética

Las unidades CHP y GSHP, en la operación máxima, proporcionan energía tanto al Reichstag
como a los edificios gubernamentales circundantes.

Movilidad + conectividad

Hay enlaces de transporte público cerca del edificio y una gran cantidad de bastidores para
bicicletas tanto para el personal como para los visitantes.

Materiales + residuos

El diseño tuvo como objetivo proteger y mantener el armazón de mampostería del edificio
patrimonial, mientras se re-urbanizaban algunas de las áreas centrales. Al retener la mayor
parte de la estructura original del edificio, los desechos de construcción y demolición se
redujeron significativamente.

Agua

Dentro del edificio se seleccionaron accesorios y accesorios de bajo flujo para ayudar a
reducir los requisitos de agua potable. Todo el paisajismo es de bajo mantenimiento, para
minimizar el uso del agua.

Tierra + Ecología

El biocombustible utilizado para alimentar la unidad de CHP se deriva del aceite vegetal de
colza producido localmente. El Reichstag, junto al río Spree, está rodeado de zonas
ajardinadas, con una mezcla de diversidad biológica que está protegida y gestionada.
Cultura + patrimonio

Al desmontar la reconstrucción previa del edificio, se descubrieron huellas del pasado que
incluían el grafiti dejado por soldados soviéticos. Estos descubridores influyeron en el
diseño, creando un espacio que buscaba convertirse en un "museo viviente" de la historia
alemana. Dando luz al corazón del edificio, ayudó a crear una plataforma abierta y visible
para el proceso democrático alemán.

Bienestar

El diseño buscó traer aire ligero y fresco al corazón del Reichstag, mejorando el bienestar del
usuario. La incorporación de galerías de observación y espacios abiertos ha traído
comodidades adicionales al edificio.

Prosperidad

El uso de un biodiesel producido localmente ha ayudado a proteger y mejorar la economía

agrícola local. El aumento del número de turistas en el Reichstag ha permitido obtener
beneficios adicionales en las inmediaciones.

Planeando para el cambio

Crear un edificio abierto y honesto sobre su pasado lo ha ayudado a tener una mentalidad
abierta y con visión de futuro sobre su futuro. El Reichstag se ha convertido ahora en un
faro, que señala el vigor del proceso democrático alemán.

Rendimiento en uso

El perfil energético operativo de The Reichstag muestra que utiliza un 57% menos de
energía primaria que los edificios existentes típicos, y un 39% menos que los requisitos para
edificios nuevos.

La transformación del viejo Reichstag se fundamenta en cuatro aspectos

relacionados entre sí: la importancia del Bundestag en tanto que foro
democrático, el entendimiento de la historia, el compromiso con la
accesibilidad del público y un sólido programa ambiental. El Reichstag
había quedado mutilado por la guerra y afeado por una ulterior reparación
insensible. La reconstrucción sigue el ejemplo de la estructura original. Se
despojó al edificio de las capas de historia para dejar al descubierto las
llamativas huellas del pasado (marcas de picapedreros y grafitis rusos),
cicatrices conservadas a modo de «museo vivo». No obstante, en otros
aspectos, el edificio actual se aleja por completo del pasado: bajo su
denso caparazón se ha generado un espacio diáfano y transparente que
deja a la vista las actividades que se realizan en su interior.
Tanto los ciudadanos como los políticos acceden al edificio por el mismo
punto. El espacio público continúa en el restaurante de la terraza del
tejado y en la cúpula, donde unas rampas transitables ascienden hasta
una plataforma de observación que permite a los visitantes situarse
simbólicamente por encima de las cabezas de los representantes electos
en la cámara. La cúpula se ha convertido ya en un punto de referencia de
Berlín. Simboliza el renacimiento a la vez que posibilita la iluminación y
ventilación naturales del edificio. En su núcleo alberga una «escultura de
luz» que refleja la luz del horizonte y la proyecta en la cámara inferior,
mientras que un brise-soleil motorizado sigue la trayectoria del sol con el
objetivo de filtrar la radiación y la intensa luz solar. Al caer la noche, este
proceso se invierte y la cúpula se convierte, entonces, en un faro en el
horizonte de la ciudad, símbolo de la fortaleza y el vigor del proceso
democrático alemán.
La quema de biocombustible renovable (aceite vegetal refinado) en una
instalación de cogeneración para producir electricidad, que es un sistema
mucho más limpio que quemar combustibles fósiles, convierte al edificio
en un modelo para el futuro. Gracias a este proceso, las emisiones de
dióxido de carbono se reducen en un 94%. El exceso de calor se destina
a calentar agua que se almacena en un acuífero soterrado a bastante
profundidad. El agua caliente almacenada se bombea cuando se necesita,
y puede utilizarse para calentar el edificio, o bien para alimentar una
planta de refrigeración por absorción y producir así agua fría. Resulta
bastante significativo que las necesidades energéticas del edificio sean
tan modestas: este produce más energía de la que consume, lo cual le
permite funcionar como una minicentral eléctrica en el nuevo barrio
gubernamental. En suma, supone toda una lección de sostenibilidad.