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66 GLORIA ÁMPARO RODRÍGUEZ - CARLOS LOZANO /\COSTA - ÁNDRES GóMEZ REY

Se requiere abordar el manejo de agua como una estrategia de


carácter nacional desde la perspectiva ambiental e integral que recoja
las particularidades de la diversidad regional y las potencialidades de
la par/ icipaclon de sectores sociales e institucionales (Poi ítica Nacional
para la Gestión Integral del Recurso Hidrico, MAVOT, 2009).
Dado que el agua es indispensable para la vida, en especial para el
hombre y, además se relaciona directamente con la salud; que se presentan
enormes dificultades en el acceso, uso, manejo de este recurso, creemos
que es fundamental la participación ciudadana en su gestión; que es
considerado elemento fundamental para la dignidad humana, relacionado
además con principios de solidaridad y como una categoría de los derechos
humanos como se señala en el segundo capítulo de este texto.
La participación tiene que ver con la interacción entre el Estado,
las organizaciones sociales y el sector productivo y constituye la
forma para diseñar de manera conjunta políticas, construir proyectos
y programas y, en general, incidir en aquellos temas de su interés. La
Corte Constitucional ha protegido por vía de tutela diferentes aspectos
del derecho al agua relacionados con la garantía mínima de la (i)
disponibilidad, (ii) calidad, (iii) acceso y (iv) no discriminación en la
distribución, en consonancia con la obligación de emplear el máximo
de los recursos que se dispongan para hacer efectivo el derecho al agua
a todos sus habitantes65.
La participación constituye un proceso mediante el cual es posible
lograr la gestión integral del agua. La intervención social en el manejo
y uso eficiente del recurso hídrico es fundamental, dados los múltiples
intereses que se presentan en torno a éste recurso donde es necesario que
se presenten de forma activa procesos de incidencia ciudadana.
En este contexto, se requiere la gestión participativa del agua, entre otras
cosas, para mejorar las condiciones y calidad de vida; para ejercer deberes
y hacer respetar los derechos: para incluir esta, la gestión, en la forma de
decisiones; construir alianzas que permitan la protección del recurso y
crear espacios propositivos de diálogo, discusión y concertación.
La participación puede darse tanto en el ámbito particular como en el
colectivo que puede concebirse como un proceso social cuyo fin es incluir

Ver Corte Constitucional. Resaltamos la Sentencia T-418 de 201 O, T-616 de 201 O.


HACIA LA GESTIÓN PARTICIPATIVA DEL AGUA 67

en la torna de decisiones que, de alguna manera, se vinculan con los


intereses de los particulares. Generalmente participamos en la medida en
que nos sentirnos afectados por una situación, cuando nuestros intereses
se ven inmersos de forma positiva o negativa, tenemos una motivación
sobre algún beneficio que podrá percibirse o también, cuando hemos
desarrollado un sentido de pertenencia sobre un lugar, una situación,
unas personas o algún tipo de bien66. Esto es evidente cuando en estos
procesos se involucra el recurso agua, fundamental para la vida y el
desarrollo de la sociedad.
Hoy se presenta un cambio en lo referente a la participación y en
cuanto a la disposición de los diferentes colectivos en relación con el
agua. Según el manifiesto del agua67, el significado básico de la revolución
del agua es ser considerado un derecho a la vida de todos y el objeto del
cambio es crear las condiciones para la actividad política en nuestras
sociedades para promover, consolidar y garantizar el acceso continuo a
la vida para todos los seres humanos y para la comunidad; construir la
sociedad juntos como una comunidad humana mundial, en la creencia
de que garantizar un acceso continuo a la vida es una responsabilidad
conjunta de todas las sociedades humanas.
Desde la Constitución Política de Colombia se promueve la
participación en las decisiones ambientales (artículo 79), condición que
ha sido resaltada por la Corte Constitucional:
La participación ciudadana y comunitaria en la protección del
ambiente y de los recursos naturales tiene sólidosfundamentos en
la Constitución Política. El carácter democrático, participativo
y pluralista del Estado, el principio de participación de todos en
las decisiones que los afectany la soberanía popular, establecen
un modelo político muy definido que moldea las relaciones
individuo-Estado, particularmente en aspectos tan sensibles y
vitales para todos como es el tema ambiental. El Constituyente
elevó a la categoría de derecho colectivo el goce de un medio
ambiente sano, y dispuso que la ley garantizará la participación
de la comunidad en las decisiones que puedan afectarlo'".

66
RODRÍGUEZ, Gloria Amparo y Musoz, Lina Marcela. la participación en la gestión
ambiental. un reto para el nuevo milenio, Colección de Textos de Jurisprudencia
de la Editorial de la Universidad del Rosario, p. 20.
67
PETRELLA. Riccardo. El manifiesto del agua. Argumentos afavor de un Convenio Mundial
del Agua. Encuentro. Icaria Editorial. Intermón Oxfarn. España. 2002. p. 23.
68
Corte Constitucional. Sentencia C.328 de 1995. M.P. Eduardo Cifuentcs Muñoz.
68 GLORIA J\MPARO RODRIGUEZ - CARLOS LOZANO ÁCOSTA - ANDRÉS GOMEZ REY

De acuerdo con la Política Nacional para la Gestión Integral del


Recurso Hídrico, la participación ciudadana cobra relevancia en la toma
de decisiones en lo relacionado con el manejo y uso de los recursos
naturales renovables y en la gestión ambiental del país y esta debe
entenderse como lo plantea la Corte Constitucional:
La participación es el derecho de los ciudadanos a intervenir en
las deliberaciones y decisiones cuando les asista interés o puedan
resultar afectados con ellas y que la participación ciudadana
constituye un principio fundamental "que ilumina todo el actuar
socia/y colectivo en el Estado social de derecho y que en relación con
el régimen constitucional anterior, persigue un incremento histórico
cuantitativo y cualitativo de las oportunidades de los ciudadanos de
tomar parte en los asuntos que comprometen los intereses generales.
Por ello mismo, mirada desde el punto de vista del ciudadano, la
participación democrática es un derecho deber, toda ve.: que le
concede lafacultad ya la vez la responsabilidad de hacerse presente
en la dinámica social que involucra intereses colectivos".
Para Ángela ANDRADE, "la existencia de espacios institucionales
que permitan la intervención de los actores en la toma de decisiones
depende del contexto poi ítico y económico, de la fortaleza de los
procesos de participación existentes y de su rol, importancia y capacidad
de influencia. La participación está orientada a generar procesos de
empoderam iento de los actores locales para una mayor eficiencia en la
toma de decisiones y depende de la capacidad de identificación adecuada
de los actores, de su rol, importancia y capacidad de influencia en los
procesos'?", Lo importante es tener presente que la participación debe
ser coordinada y articulada entre los diferentes sectores.
La importancia que reviste el derecho al agua implica en consecuencia
el establecimiento de mecanismos de protección. Es un deber de los
Estados "organizar todo el aparato gubernamental y, en general todas
las estructuras a través de las cuales se manifiesta el ejercicio del poder,
de manera tal que sean capaces de asegurar jurídicamente el libre y
pleno ejercicio de los derechos humanos. Como consecuencia de esta
obligación, los Estados deben prevenir, investigar y sancionar toda

Corte Constitucional. Sentencia C-252 de 201 O. M.P . .Jorge lván Palacio Palacio.
70
J\NDR.-\DE P.. Ángela. "Análisis comparado de los estudios de caso". En: l.a aplicación
del enfoque ecosistémico en la gestion de los recursos hidricos. Un análisis de
estudio,' de caso en América Latina. Guerrero. E. De Keize. O. Córdoba. R. UICN.
Quito, Ecuador. 2006. p. 42.
I-IACIA LA GESTIÓN PARTICIPATIVA DEL J\GUA 69

violación de los derechos reconocidos por la Convención y procurar,


además, el restablecimiento, si es posible, del derecho conculcado y, en
su caso, la reparación de los daños producidos por la violación de los
derechos humanos"71•
En la tarea de establecer mecanismos para asegurar el disfrute de todas
las personas a los derechos y en este caso específico al derecho al agua,
se han consagrado en Colombia diferentes mecanismos como Ja Acción
de Tutela y las Acciones Populares y, el derecho al agua comprende el
saneamiento, el acceso al recurso.

DEMOCRACIA AMl31ENTAL PARTICIPATIVA

"Cada uno de nosotros tiene un papel en la historia de la


creación de nuestro futuro. Cada uno de nosotros es responsable
del kutnbh - el caldero sagrado". (Vandana Sliiva).

La democracia participativa o la democracia promovida en nuestro


país en forma contundente con la Constitución Política de 1991, ha
ampliado los espacios democráticos para otorgar al pueblo la posibilidad
de participar más directa y frecuentemente en la toma de decisiones que
afectan a las comunidades. Esto obedece al principio fundamental según
el cual Colombia es un Estado social de derecho, organizado en forma
de República unitaria, descentralizada, con autonomía de las entidades
territoriales, democrática, participativa y plural ista, fundada en el respeto
de la dignidad humana, en el trabajo y la solidaridad de las personas
que lo integran y en la prevalencia del interés general (Artículo 1° de la
Constitución Política de Colombia).
El Estado social de derecho hace relación a la forma de organización
política que tiene como uno de sus objetivos combatir las penurias
económicas o sociales y las desventajas de diversos sectores, grupos o
personas de la población, prestándoles asistencia y protección. Exige
esforzarse en la construcción de las condiciones indispensables para
asegurar a todos los habitantes del país una vida digna dentro de las
posibilidades económicas que estén a su alcance. El fin de potenciar
las capacidades de la persona requieren de las autoridades actuar

71
Corte Interamericana de Derechos Humanos, Sentencia del 29/7/1966, párr, 166,
referenciado en "El derecho humano al agua: particularidades de su reconocimiento.
evolución y ejercicio" de Mauricio Esteban Pinto, Nohelia Torchia; Liber Martín.
Buenos Aires, Abeledo Perrot, 2008.
70 GLORIA AMPARO RODRÍGUEZ - CARLOS LOZANO /\COSTA - ANDRÉS GóMEZ REY

efectivamente para mantener o mejorar el nivel de vida, el cual incluye


la alimentación, la vivienda, la seguridad social y los escasos medios
dinerarios para desenvolverse en sociedad".
Para la Corte Constitucional,
"El principio de participación democrática expresa no sólo un
sistema de toma de decisiones, sino un modelo de comportamiento
social y político, fundamentado en los principios del pluralismo, la
tolerancia, la protección de los derechos y libertades así como en
una gran responsabilidad de los ciudadanos en la definición del
destino colectivo. El concepto de democracia participativa lleva
ínsita la aplicación de los principios democráticos que informan la
práctica política a esferas diferentes de la electoral. Comporta una
revaloracióny un dimensionamientovigoroso del concepto de ciudadano
y un replanteamiento de su papel en la vida nacional. No comprende
simplemente la consagración de mecanismos para que los ciudadanos
tomen decisiones en referendos o en consultas populares, o para que
revoquen el mandato de quienes han sido elegidos, sino que implica
adicionalmente que el ciudadano puedeparticipar permanentemente en
losprocesos decisorios no electorales que incidirán significativamente en
el rumbo de su vida. Se busca asifortalecer los canales de representación,
democratizar/os y promover un pluralismo más equilibrado y menos
desigual. La participación concebida dentro del sistema democrático
a que se ha hecho referencia, inspira el nuevo marco sobre el cual se
estructura el sistema constitucional del Estado colombiano. Esta implica
la ampliación cuantitativa de oportunidades reales de participación
ciudadana, así como su recomposición cualitativa enforma que, además
del aspecto político electoral, su espectro se proyecte a los planos de lo
individual, familiar, económico y social':".
Vandana Smvx, una de las científicas ambientalistas más reconocidas
del mundo, ha planteado los principios de la democracia del agua
partiendo de reconocer que este recurso es limitado y que puede llegar
a agotarse. Esboza además, que una ley de derechos ambientales que
incluya el derecho a una industria limpia; a no verse expuesto a sustancias
dañinas; a la prevención; a la información y a la participación; a normas
de protección y al cumplimiento de las mismas; a la indemnización de
los posibles daños; y a la descontaminación de los lugares afectados,
todos ellos como elementos básicos de una democracia del agua en la

n Corte Constitucional. Sentencia T-12 de 1992. M.P. José Gregario Hernández.


7_1
Corte Constitucional. Sentencia C-180 de 1994. M.P. Hernando Herrera Vergara.
HACIA LA GESTIÓN PARTICIPATIVADEL AGUA 71

cual el derecho a un agua limpia (potable) esté garantizado para todos


los ciudadanos, cuyos principios, que a continuación se presentan, deben
apuntalar la democracia del agua74:
l. El agua es un don de la naturaleza. El agua proviene de la
Naturaleza, que nos la cede gratuitamente. Hemos de corresponder
utilizando este obsequio con moderación, para cubrir nuestras
necesidades básicas, manteniendo su calidad y cantidad. Los
trasvases que suponen la creación de zonas áridas o anegadas
atentan contra los principios de la democracia ecológica.
2. El agua es esencial para la vida. El agua es fuente de vida para
todas las especies. Todas las especies y todos los ecosistemas
tienen derecho a la parte que les corresponde de las aguas del
planeta.
3. Toda vida está interconectada a través del agua. El agua conecta
a todos los seres y a las diferentes partes del planeta a través del
ciclo hidrológico.
4. El agua destinada a las necesidades básicas debe ser gratuita.
Dado que la Naturaleza nos ofrece gratuitamente las aguas, su
compra y venta con ánimo de lucro es contraria al derecho que
todos tenemos a este bien de la Naturaleza y niega a los pobres
algo que forma parte de Jos derechos humanos.
5. El agua es limitada y puede agotarse. El agua es limitada y
susceptible de agotarse si no se utiliza de forma sostenible. La
extracción de un volumen de agua superior al que la Naturaleza
puede recargar en un ecosistema (insostenibilidad ecológica), así
corno un consumo de agua mayor que la parte que nos corresponde,
teniendo en cuenta el derecho de otras personas (insostenibilidad
social) constituye usos no sustentables del agua.
6. El agua debe conservarse. Todas las personas tienen obligación
de conservar el agua y de utilizarla de forma sostenible, dentro
de unos límites ecológicos y equitativos.
7. El agua es un bien común. El agua no es una invención humana.
No puede confinarse ni se le pueden poner fronteras. Por su propia
naturaleza, se trata de un bien común. Nadie puede adueñarse del
agua, convirtiéndola en propiedad privada y vendiéndola como
si de una mercancía se tratase.

SHIVA, Vandana. Las guerras por el agua. Contaminación, privatizacióny negocio.


[caro editorial S.A., Barcelona, 2004, pp. 52-53.
71 GLORIA AMPARO RoDRiGUEZ - CARLOS LOZANO J\coSTA - ANDRÉS GoMEZ Rr.v

8. Nadie tiene derecho a malgastar el agua. Nadie tiene derecho


a emplear indebidamente, ni a despilfarrar ni a contaminar las
aguas. Los permisos de contaminación transferibles atentan contra
los principios de utilización sostenible y equitativa del agua.
9. No hay sustituto posible para el agua. El agua es intrínsecamente
diferente de los demás recursos y productos. No puede tratarse
como una mercancía.
El derecho al agua adquiere un valor inusitado en un Estado social de
derecho, en el contexto actual, por cuanto demanda de las instituciones
y autoridades encargadas de asegurar el goce efectivo de este derecho,
una acción clara, decidida y eficiente, para afrontar los retos que se
imponen. Todas las sociedades del planeta tierra, enfrentan grandes
retos para respetar, proteger y garantizar este derecho humano básico".
Como se especifica en la Observación General No. 1576 sobre la cual nos
referiremos en forma más profunda en el siguiente capítulo, el derecho
al agua exige que sean reconocidos los siguientes factores":
a. Disponibilidad: el agua disponible para cada persona debe ser
suficiente y constante para sus usos personales y domésticos.
b. Calidad: el agua debe ser salubre, exenta de microbios, de
sustancias químicas y de riesgos radiológicos que constituyan
una amenaza para la salud -el agua debe tener un color, un
olor y un gusto aceptables para cada utilización personal o
dornéstica-.
c. Accesibilidad:
l. Accesibilidad fisíca: el agua así como las instalaciones y
servicios deben ser accesibles físicamente y sin peligro
para la población y ser de una calidad suficiente. Las
instalaciones y servicios deben adaptarse a la cultura.
ll. Accesibilidad econámica: el agua debe tener un costo
asequible para todos.
111. No discriminación: todos deben poder acceder al agua sin
discriminación.
IV. Accesibilidad de la información: cada cual debe poder
buscar, recibir y ampliar la información referente a los
temas que tiene que ver con el agua.

75
Corte Constitucional. Sentencia T-418 de 2010. M.P. María Victoria Calle Correa.
76
Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales.
77
Refcrenciado en el libro de SMETS, Henri. Por un derecho efectivo al agua potable.
Universidad del Rosario, 2006, p. 82.
lll\CIA LA GESTIÓ~ i'ARTICIP•\llVA Dl::.LAGUA 73

TIPOS DE DERECHOS Y DEBERES AL USO DE AGUA

Los derechos de agua en términos concretos


Cuando se habla de derechos de agua, suele referirse
a una faja de derechos, que incluye:
Derecho de participar en la toma de
Derechos operativos
decisiones colectivas
Derecho de participar en la decisión
Derecho de uso de una sobre la gestión: definir los detalles del
parte del flujo de agua reparto de agua, fechas de largadas,
caudales. cargos en la organización. etc.
Derecho de uso de
Derecho de participar en la decisión
la infraestructura
sobre la inclusión/exclusión de
de conducción y
miembros: definir quiénes pueden y
distribución para
quiénes no pueden ser miembros del
conducir el agua hacia
sistema
un terreno definido
Derecho de ser elegido
y ocupar cargos en
la organización del Derecho de participar en la decisión
sistema para ejecutar sobre el cambio o la ampliación del
las decisiones con sistema hidráulico y la tecnología de
respecto al reparto del riesgo
agua y la gestión del
sistema
Derecho de participar en la decisión
sobre el enajenamiento de los derechos
de uso del agua, de la fuente o de la
infraestructura hidráulica.
FUENTE: CEPA L, 200278

Sobre el tema de la democracia participativa en nuestro país, aseguran


Rafael Colmenares y Juan Camilo Mira de la Corporación Ecofondo,
que existe una tradición de lucha por el acceso al agua en Colombia,

CEPAL. El agua. poder y conflicto étnico. Legislación de recursos hldricos y


reconocimiento de los derechos indígenas en los países andinos: Importancia.
obstáculos,perspectivas y estrategias. Dr., Phi! Ingo Georg Gentes. CEPAL, Santiago
de Chile, 2002. p. 61.
74 GLORIA /\~!PARO RODRIGUEZ - CARLOS LOZA '0 ACOSTA - ANDRl:S GóMl:Z RE\

que se mantiene como una tendencia a pesar de algunos mejoramientos


en el suministro (ampliación de la cobertura) y calidad del agua, que
se registran sobre todo en las grandes ciudades y en general en las
capitales los departamentos. Esta lucha ha tendido según estos analistas,
a intensificarse en los años recientes por efectos de la privatización de
los servicios públicos, que conlleva al encarecimiento de las tarifas, en
particular del agua", A estos argumentos agregaríamos la inclusión de las
Acciones Públicas Constitucionales, en especial de las Acciones Populares
en la Constitución Política de 1991 y su posterior reglamentación.
Hoy se presenta un marcado énfasis en la exigencia de la protección
y garantía de los derechos, entre ellos el derecho al agua mediante la
utilización de diversos mecanismos de participación.

Ml:CANISMOS DE PARTICIPACIÓN RELACIONADOS CON EL AGUA

Como hemos venido planteando en este documento, las participaciones


de los diferentes actores sociales e institucionales constituyen elementos
fundamentales para la gestión integral del agua. En la actualidad se ha
promovido que la relación del Estado con las personas se fundamente en
la oportunidad que tiene de participar en la gestión pública y de incidir
en los medios que se relacionan con su calidad de vida o que los afecten
de alguna manera como individuos o como grupo.
En nuestra legislación encontramos diversos mecanismos de
participación judiciales, políticos y administrativos que se han creado
y que tienen que ver con el agua, entre ellos podemos señalar:

La Acción de Tutela en cuanto al recurso agua

La acción de tutela es un mecanismo de participación que tiene como


objetivo proteger los derechos fundamentales, es decir, aquellos que son
inherentes a la persona humana y prevalecen frente a cualquier norma
que pretenda desconocerlos. Es un mecanismo constitucional que busca
garantizar la protección inmediata y evitar que la vulneración de un
derecho fundamental se produzca o hacer cesar el daño o la violación
del derecho que ya se esté causando. Es el mecanismo mediante el cual

7')
COLMENARES FAccrNI. R .. MIRA SÁNCllEZ, J.C. "Paradojas del agua en Colombia.
Privatización y alternativas públicas". En: Colombia: ¿Un futuro sin aguar.
Corporación Ecofondo, Ediciones desde abajo y Foro Nacional Ambiental. Bogotá,
2007, p. 17.
HACIA LA GESTIÓN PARTICIPATIVA DEL AGUA 75

cualquier persona puede solicitar a un juez la protección rápida y efectiva


de sus derechos fundamentales, cuando estos son amenazados o violados
por una entidad pública o particulares".
La Constitución Poi ítica consagra el derecho a gozar de un ambiente
sano, como un derecho colectivo y para este tipo de derechos existe un
mecanismo especial de protección que se denomina la acción popular. Sin
embargo, mediante la acción de tutela se logra la protección del derecho
a un ambiente sano, cuando este derecho se encuentra ligado con un
derecho fundamental como por ejemplo la vida, la salud, la integridad
física, entre otros.
La tutela en materia ambiental requiere de la existencia de un nexo
entre la violación del derecho colectivo y la violación del derecho
fundamental. Se requiere además, que exista la prueba del perjuicio
concreto que una acción u omisión del Estado o de los particulares pueda
causar a un grupo de personas o a una persona ind ividual".
En cuanto al recurso agua, resaltaremos algunas sentencias emanadas
de la Corte Constitucional Colombiana que han sido fundamentales en
la garantía del derecho al agua:
La Corte Constitucional a través de la Sentencia T-578 de 1992,
dijo que en principio, el agua constituye fuente de vida y la falta del
servicio atenta directamente con el derecho fundamental a la vida de
las personas. Así pues, el servicio público domiciliario de acueducto y
alcantarillado en tanto que afecte la vida de las personas, la salubridad
pública o la salud, es un derecho constitucional fundamental y como
tal, ser objeto de protección a través de la acción de tutela82• Este alto
tribunal en esta providencia ha sosten ido que e] agua constituye un
verdadero derecho fundamental cuando está destinada al consumo
humano: "En principio, el agua constituye fuente de vida y laja/ta de
servicio atenta directamente con el derecho fundamental a la vida de
las personas. Así pues. el servicio público domiciliario de acueducto y
alcantarillado en tanto que afecte la vida de las personas (CI' art.I I),
la salubridad pública (CI' arts. 365 y 366), o la salud (CI' art. 49), es
un derecho constitucionalfundamental ".
Con posterioridad, éste alto Tribunal en la Sentencia T-523 de 1994
se expresó en relación con la importancia del agua y la cultura: "El

80
Reglamentada por el Decreto 2591 de 1991, el cual fuc reglamentado a su vez por
el Decreto 306 de 1992.
XI
Véase T-411/92, T-451/92. T- 528/92 y T -536/92, entre otras.
82
Corte Constitucional. Sentencia T-578 de 1992. M.P. Alejandro Martíncz Caballero.
76 GLORIA AMPARO RODRiGUEZ - CARLOS LOZANO ÁCOSTA - ANDRÉS GóMEZ REY

agua siempre ha estado en el corazón de los hombres y en la base de


las civilizaciones. Se puede pasar varios días sin comer, pero sin beber
es imposible sobrevivir unos pocos. En el cuerpo humano el 96% de
la linfa es agua, hay el 80% en la sangre, las dos terceras partes de los
tejidos también contienen agua. Un proverbio usbeko enseña: que no es
rico quien posee tierra sino quien tiene agua. Todas las culturas están
íntimamente ligadas al concepto del agua. En la Muisca, Bachúe surge
en una de las ocho lagunas de lguaque, sobre los páramos, a más de
tres mil metros de altitud, lagunas pequeñas, expresión del nacimiento
de una raza. Más grandiosidad tiene el mito de Titikaka en los albores
del imperio Inca83.
Así entonces, según lo expuesto, el agua potable constituye un derecho
constitucional fundamental cuando está destinada para el consumo
humano, pues es indispensable para la vida. Por lo tanto, como lo ha
señalado esta Corporación, la vulneración de este derecho es amparable
a través de la acción de tutela.
La Corte Constitucional ha señalado de manera reiterada (Sentencia
T-413 de 1995), que procede la tutela contra los particulares que estén
encargados de la prestación de servicios públicos domiciliarios, sin que
sea indispensable demostrar la personería jurídica de la entidad que
presta el servicio. La acción se puede dirigir contra el representante del
órgano que presuntamente violó o amenazó el derecho fundamental. El
derecho al agua, para el uso de las personas, en cuanto contribuye a la
salud, a la salubridad pública, y, en últimas, a la vida, SÍ es un derecho
fundamental y que, por el contrario, NO lo es cuando se destina a la
explotación agropecuaria o a un terreno deshabitado. Sin agua no se
puede vivir, luego lo lógico es que un acueducto construido para uso
domiciliario del Iíqu ido debe tener preferencial mente tal destinación. Lo
razonable es atender primero las necesidades domésticas de las familias
que son socias o usuarias del acueducto regional y, si hay un excedente
de agua entonces sí, de manera reglamentada, se puede aprovechar
excepcionalmente para otros usos. Se deja en claro que la orden que se
da en esta tutela obedece al presupuesto de que existe escasez de agua
para uso doméstico de los usuarios del acueducto".
"Sin agua no hay vida" dijo la Corte Constitucional (Sentencia
T-410 de 2003) y por ende, el servicio público de acueducto tiene como
finalidad la satisfacción de necesidades vitales de las personas, lo

Corte Constitucional. Sentencia l-523 de 1994. M.P. Alejandro Martínez Caballero.


84
Corle Constitucional. Sentencia T-413 de 1995. M.P. Alejandro Martínez Caballero.
HACIA LA GESTIÓN PARTICIPATIVA DEL AGUA 77

que exige, naturalmente, el suministro de agua apta para el consumo


humano pues no podrá considerarse que el servicio se presta con el mero
transporte del líquido, sin aplicarle ningún tipo de tratamiento cuando
no reúne las condiciones físicas, químicas y bacteriológicas mínimas
exigidas para su uso, sin que ponga en riesgo la salud y la vida de sus
consum idores85• La Corte Constitucional señaló que el comprobado
suministro de agua contaminada y no apta para el consumo humano por
parte de las autoridades, constituye un factor de riesgo y de vulneración
de los derechos fundamentales a la vida, la dignidad humana, la salud
y el ambiente sano.
La jurisprudencia constitucional Colombiana en sentencia mucho
más reciente (Sentencia T-418 de 2010), ha entendido que el derecho al
agua comprende, entre otras las siguientes protecciones:
Cuando la prestación del servicio se vuelve dramáticamente
intermitente y esporádica, afectando los derechos fundamentales
de las personas;
Cuando una comunidad no dispone ni accede a agua de calidad
para el consumo humano-concretamente ha tutelado el derecho a
tener un acueducto, tanto en su faceta positiva como negativa-;
El derecho a acceder y disponer de agua con regularidad y
continuidad, en especial si se deterioraron las condiciones básicas
de prestación del servicio;
El derecho al acceso al agua de una o varias personas, cuando se toman
acciones positivas que implican limitar la disponibilidad o el acceso
a la misma y cuando las autoridades dejan de adoptar las medidas
adecuadas y necesarias para evitar que esa situación continúe;
Que la disposición y acceso al agua no se suspenda en condiciones
de urgencia;
El acceso al agua sin discriminación;
Cuando se cuenta con un inadecuado servicio de alcantarillado,
que pone en riesgo los derechos fundamentales de las personas;
Cuando se cuenta con un inadecuado servicio de acueducto, que
pone en riesgo los derechos fundamentales de las personas; y
Cuando los reglamentos, procedimientos o requisitos establecidos
son usados como obstáculos que justifican la violación del derecho

85
Corte Constitucional. Sentencia T-410 de 2003. M.P. Jaime Córdoba Triviño.
78 GLORIA AMPARO RODRIGUEZ - CARLOS LOZAJ\0 ACOSTA - ANDRÉS GóMEZ REY

al agua. No obstante, como todo derecho constitucional, en un


Estado social de derecho, este encuentra límites. e incluso puede
ser objeto de restricciones razonables. No todo reclamo con base
en la protección del derecho al agua es susceptible de ser objeto
de amparo mediante acción de tutela".
Continúa señalando la Corte Constitucional en la mencionada
Sentencia T-418 de 2010, que las personas que presentan la acción
de tutela pueden reclamar que se protejan judicialmente aquellas
dimensiones del derecho al agua que comprometan su mínimo vital
en dignidad ... la acción de tutela es el medio adecuado de defensa
judicial para asegurar el goce efectivo del derecho al agua en muchas
ocasiones. Existen recursos judiciales diferentes a la acción de tutela
para defender dimensiones del derecho al agua que no comprometen el
canten ido fundamental del mismo (por ejemplo, el derecho a acceder al
agua necesaria para mantener una cancha de golf por parte de un club
o el derecho a que un centro comercial tenga acceso al servicio de agua
en sus locales), no implica que en aquellos casos en que las garantías
constitucionales básicas sí están en juego, el medio adecuado e idóneo,
por lo menos como recurso transitorio, es la acción de tutela.
En la Sentencia T-616 de 2010, la Corte Constitucional señaló
adicionalmente que en dos situaciones el derecho al agua adquiere sin
dudarlo el carácter de fundamental. La destinada al consumo y lo que
pretenden garantizar es la posibilidad de obtener la cantidad suficiente
para el consumo, la higiene personal y doméstica, y la preparación de
alimentos. Toda vez que la carencia del agua para estos usos pone en
grave peligro la realización de la dignidad, la vida y la salud de los
accionantes, su protección es urgente y la vía más idónea para hacerlo
es la acción de tutela87•
La Sentencia T-055 de 201188 hace referencia a que la eficiencia, la
oportunidad y el mayor cubrimiento de los servicios públicos, son los
medios más adecuados que tiene el Estado para asegurar el mejoramiento
de la calidad de vida de todas las personas y dar solución a las
necesidades básicas insatisfechas en materia de saneamiento ambiental
y de agua potable, de tal suerte que muchos de los factores que regulan
legalmente su prestación deben tener como consideración fundamental
el interés social que el los revisten. Es a partir de este criterio general

R6
Corte Constitucional. Sentencia T-418 de 2010. M.P. María Victoria Calle Correa.
~7
Corte Constitucional. Sentencia T-616 de 2010. M.P. Luis Ernesto Vargas Silva.
8R
Corte Constitucional. Sentencia T-055 de 2011. M.P. Jorge lván Palacio Palacio.
HACIA LA GESTIÓN PARTICIPATIVADEL AGUA 79

de cubrimiento a toda la población que la misma Carta delegó en la


ley, la función reguladora de tales servicios públicos, estableciendo
que los mismos pueden estar a cargo del Estado de manera exclusiva
o indirectamente por comunidades organizadas o por particulares,
manifiesta la Corte.
El A !to tribunal señala que, en cuanto a las características y elementos
esenciales de los servicios públicos, la misma Constitución estableció
preceptos que constituyen su fundamento esencial, siendo la solidaridad
y el derecho a la igualdad los postulados que han de orientar su
prestación, teniendo especial alcance en la aplicación proporcional de
un régimen tarifario preferente o beneficioso respecto de los sectores
sociales de bajos ingresos y asegurando con esta medida la garantía de
principios de equidad y solidaridad (arts. 367 y 368 Superior). Además,
sefíala la Corte Constitucional en esta providencia, que de estos factores
que orientan la misma razón de ser de los servicios públicos, existen otros
que deben entenderse integrados a las características de tales servicios,
en cuanto medio propicio para asegurar el respeto y eficacia de otros
derechos fundamentales. Ello implica el desarrollo de un entorno legal
que fue esbozado a nivel constitucional y que conlleve (i) la calidad y la
eficiencia del servicio público y su aptitud para satisfacer las necesidades
básicas de los usuarios (art, 367 Superior); (ii) la atención prioritaria
de las necesidades básicas insatisfechas en materia de agua potable y
saneamiento básico (art. 366 Superior), y (iii) la ampliación permanente
de la cobertura hasta que llegue a cobijar a todos los habitantes del
territorio nacional (art. 365 Superior) - Sentencia C-739 de 2008.
De este modo, la universalidad en la prestación, la calidad del servicio y
la continuidad del mismo no solo aseguran la satisfacción de necesidades
básicas insatisfechas en lo concerniente a servicios públicos, sino que
además constituyen la base fundamental para la garantía de otros derechos
fundamentales como la vida en condiciones dignas y la salud.
Resalta la Corte Constitucional que el agua potable como derecho ele
todas las personas, ha sido ampliamente contemplada en los tratados
internacionales. En efecto, el Comité de Derechos Económicos, Sociales
y Culturales, mediante la Observación 15 de 2002, dijo que en tanto "el
agua es un recurso natural limitado y un bien público fundamental para
la vida y la salud", es una "condición previa para la realización de otros
derechos humanos", por ello los Estados deben implementar las medidas
adecuadas para garantizar la eficacia de los derechos y libertades implícitos
al agua, de tal forma que todas las personas puedan gozar en igualdad
de condiciones del derecho a su suministro para suplir las necesidades
80 GLORIA AMPARO RODRÍGUEZ - CARLOS LOZAt\0 /\COSTA - ÁNDRE~ GOMl:l REY

alimenticias, agrícolas y tecnológicas, además que debe evitarse los cortes


arbitrarios del suministro, e impedir Ja contaminación de los recursos
h ídricos para así disfrutar del derecho al agua. Así Jo sostuvo:
"Para lograr dichos objetivos, el Comité de Derechos Economicos,
Sociales y Culturales dijo que el derecho al agua debe cumplir los
siguientes elementos: i) debe ser adecuado a la dignidad. la vida y la
salud humana. ii) el agua debe tratarse como un bien social y cultura!
y 110 como un bien economico, iii) el ejercicio del derecho al agua dehe
ser de tal forma que sea sostenible tanto para las generaciones actuales
como para las futuras.
"De igual manera. el Comité nianifesto que aunque el adecuado
ejercicio del derecho al agua varíe enfuncion de distintas condiciones.
de todas maneras deben aplicarse los siguientes/actores:
"al.La disponibilidad. El abastecimiento de agua de cada persona debe
ser continuo y suficiente para los usos personales y domésticos.
Esos usos comprenden nonnalntente el consumo, el saneamiento,
la colada, la preparación de alimentos y la higiene personal y
doméstica. La cantidad de .agua disponible para cada persona
debería corresponder a las directrices de la Organización Mundial
de la Salud (OMS).
"También es posible que algunos individuos y grupos necesiten
recursos de agua adicionales en razón de la salud. el clima y las
condiciones de trabajo.
"b) La calidad. El agua necesaria para cada uso personal o doméstico
debe ser salubre, y por lo tanto, no ha de contener microorganismos o
sustancias químicas o radiactivas que puedan constituir una amenaza
para la salud de las personas. Además, el agua deberia tener un color,
un olor y un sabor aceptables para cada uso pers0110I o doméstico.
"e) La accesibilidad. El agua y las instalaciones y servicios de agua
deben ser accesibles a todos, sin discriminación alguna, dentro de
la jurisdicción del Estado Parte. Haremos referencia a este tema de
manera más profunda en el capitulo siguiente".
En la mencionada Sentencia T-055 de 2011 se asegura que este
Tribunal Constitucional ha reiterado el rango de derecho fundamental
que tiene el agua potable y el acceso a la misma, más aún cuando su falta
o la dificultad para acceder a ella, somete a quien carece del servicio a
un perjuicio irremediable, haciendo viable este mecanismo excepcional
de protección, sólo en los eventos en los que el suministro de agua sea
requerido para el consumo humano y no para otras necesidades.
HACIA LA GESTIÓN PARTICIPATIVA DEL AGUA 81

La jurisprudencia constitucional entró a considerar otro elemento


esencial del derecho al agua y es el referente a su calidad. En este
contexto la Sentencia T-055 de 2011 señala que la Corte fue muy clara
en la sentencia T-1104 de 2005 al señalar:
"el servicio público de acueducto t lene como finalidad la
satisfaccion de necesidades vitales de las personas, lo que exige.
naturalmente, el suministro de agua apta para el cons unto
humano pues no podrá considerarse que el servicio se presta
con el mero transporte del líquido, sin aplicarle ningún tipo de
tratamiento cuando 110 reúne las condiciones físicas, químicas
y bacteriológicas mínimas exigidas para su uso, sin que ponga
en riesgo la salud y la vida de sus consumidores ... la falta de
prestación de éste servicio también está llamada a constituir una
posible violación del derecho que tienen todas las personas a
vivir una vida digna. Se concluye entonces que el servicio público
domiciliario de acueducto puede ser objeto de protección judicial
a través de la acción de tutela" (Sentencia T-41 O de 2003).
De esta manera, y en consideración a los múltiples pronunciamientos
hechos por esta Corporación, en la sentencia T-381 de 2009, se sintetizaron
los elementos que permiten definir el derecho al agua potable como un
derecho fundamental:
"El derecho al agua sólo tiene el carácter de fundamental cuando
está destinada al consumo humano, pues únicamente entonces
está en conexión con el derecho a la vida en condiciones dignas
y a la salud;
Por lo anterior, la acción de tutela resulta procedente para hacer
efectivo el derecho fundamental al agua potable, solamente
cuando ella es necesaria para preservar la vida, la salud o la
salubridad de las personas, pero no cuando está destinada a otras
actividades, tales como la explotación agropecuaria o a terrenos
deshabitados;
Cuando el agua es necesaria para preservar la vida, la salud o la
salubridad de las personas, el derecho fundamental que recae sobre
ella puede ser protegido a través de la acción de tutela, que resulta
procedente tanto contra la autoridad pública como contra el particular
o particulares que estén afectando arbitrariamente el derecho;
El derecho al consumo humano de agua potable puede ser
protegido por vía de tutela, que desplaza la acción popular, cuando
existe afectación particular del derecho fundamental en cabeza
g:; GLORIA AMPARO RODRÍGUEZ - CARLOS LOZANO ACOSTA - A:'\DRES GóMEZ REY

de una, varias o múltiples personas, o cuando existe la amenaza


de consumación de un perjuicio irremediable en la órbita de este
derecho fundamental;
De conformidad con los criterios interpretativos sentados por
el Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales,
el contenido del derecho fundamental al agua implica la
'disponibilidad continua y suficiente' de agua para los usos
personales y domésticos, la 'calidad salubre' del agua, y la
'accesibilidad física', económica e igualitaria a ella".
Finalmente, este alto tribunal resalta en la Sentencia T-055 de 2011
que referimos, que de esta manera es evidente que son numerosos los
argumentos jurídicos que permitan considerar el derecho al agua potable
como un derecho fundamental, muy particularmente y cuando a través
de éste y su acceso efectivo con la prestación del servicio de acueducto
se está dando alcance a uno de los fines esenciales del Estado como es la
solución de las necesidades básicas insatisfechas de las personas y porque
con la garantía de este derecho se protegen otros derechos fundamentales
tan trascendentales como la vida en condiciones dignas y la salud.
Es importante señalar que sobre el tema de las acciones de tutela y el
agua como derecho fundamental, regresaremos en el siguiente capítulo
de esta publicación.

Acciones populares
La acción popular es un mecanismo de participación que tiene como
objetivo la protección y defensa de los derechos e intereses colectivos,
contra toda acción u omisión de las autoridades públicas o de los
particulares, que hayan violado o amenacen violar estos derechos, los
cuales pertenecen por su naturaleza a todas las personas integrantes de
una comunidad o grupo, pero a ninguno de ellos en particular, y mediante
los cuales se garantizan las condiciones básicas para su desarrollo
integral89• La acción pop u lar tiene una finalidad preventiva, reparadora
y establecedora. Su objetivo es público y no persigue intereses subjetivos
o pecuniarios sino proteger a la comunidad en su conjunto y respecto de
sus derechos e intereses colectivos.
Las acciones pop u lares que se presentan y que se encuentran
relacionadas con el agua buscan en su gran mayoría el goce de un
ambiente sano, de conformidad con lo establecido en la Constitución,

K9
Reglamentada por la Ley 472 de 1998.
HACIA LA GESTIÓN PARTICIPATIVA DEL AGUA 83

la ley y las disposiciones reglamentarias y la existencia del equilibrio


ecológico y el manejo y aprovechamiento racional de los recursos
naturales para garantizar su desarrollo sostenible, su conservación,
restauración o sustitución.

ACCIONES POPULARES EN MATERIA DE AGUA

TIPOSDE ACCIONES POPULARES TOTAL


AGUA POTABLE 228
AGUA NO POTABLE 485
AGUAS SUBTERRÁNEAS 7
AGUAS NEGRAS 34
AGUAS LLUVIAS 52
AGUAS SERVIDAS 114
TOTAL 920

REGISTRO DE ACCIONES POPULARES - AGUAS 2004-2011

-,
•OAGUAPOTABLE 1

114 ' 1
•AGUA NO POTABL9

mi AGUAS ¡
SUBTERRANEAS i
El AGUAS NEGRAS 1

o AGUAS LLUVIAS 1

1
485 o AGUAS SERVIDAS 1

________ _J
!

FUENTE: DEFENSORÍA DEL PUEl3LO, REGJSTRO DE ACCIONES


POPULARES. FECHA CONSULTA 23 DE MAYO DE 201 J

En cuanto a la procedencia de la acción de tutela cuando la afectación


de un derecho colectivo conlleva la vulneración o amenaza de derechos
colectivos, siempre que se cumplan los siguientes requisitos":

90
Cfr. Sentencias T-1451 de 2000. SU-1116 de 200 r, T-288 de 2007 y T-659 de 2007.
84 GLORIA AMPARO RODRIGUEZ - CARLOS LOZANO ACOSTA - ANDRÉS ÜÓMEZ REY

1. Que exista conexidad entre la vulneración de un derecho colectivo y


la violación o amenaza a un derecho fundamental, de tal suerte que
el daño o la amenaza del derecho fundamental sea "consecuencia
inmediata y directa de la perturbación del derecho colectivo";
[l. El peticionario debe ser la persona directa o realmente afectada en
su derecho fundamental, pues la acción de tutela es de naturaleza
subjetiva;
Ill. La vulneración o la amenaza del derecho fundamental no deben ser
hipotéticas sino que deben aparecer expresamente probadas en el
expediente; y
IV. Finalmente, la orden judicial debe buscar el restablecimiento del
derecho fundamental afectado, y "no del derecho colectivo en sí
mismo considerado", pese a que con su decisión resulte protegido,
igualmente, un derecho de esta naturaleza.
Para continuar con el tema de participación, en el marco de los
procesos administrativos ambientales, es decir, en los procesos para
otorgar licencias o permisos, concesiones o autorizaciones ambientales
y en los procesos sancionatorios ambientales se pueden dar los siguientes
mecanismos de participación:

Audiencia pública ambiental

La audiencia pública ambiental es un mecanismo de participación que


tiene por objeto dar a conocer a las organizaciones sociales, comunidad,
o entidades públicas y privadas, la solicitud de licencias, permisos o
concesiones ambientales, o la existencia de un proyecto o actividad,
los impactos que éste puede generar o genere, y las medidas de manejo
propuestas o implementadas para prevenir, corregir o compensar dichos
impactos. Igualmente la audiencia busca abrir espacios para recibir
opiniones, información y documentos de los interesados que aporten la
comunidad y demás entidades públicas o privadas?'.
En los procesos administrativos ambientales, entre ellos los señalados
en el capítulo tercero de este texto, existe la oportunidad de celebrar la
audiencia pública ambiental que procederá en los siguientes casos:
a. Con anticipación al acto que le ponga término a la actuación
administrativa, bien sea para la expedición o modificación de la

91
Establecida por la Ley 99 de 1993 y reglamentada por el Decreto 330 de 2007.
HACIA LA GESTIÓN PARTICIPATIVA DEL AGUA 85

licencia ambiental o de los permisos que se requieran para el uso


y/o, aprovechamiento de los recursos naturales renovables;
b. Durante la ejecución de un proyecto, obra o actividad, cuando
fuere manifiesta la violación de los requisitos, términos,
condiciones y obligaciones bajo los cuales se otorgó la licencia
o el permiso ambiental.
Debemos señalar que de acuerdo con la investigación que se ha realizado,
en el análisis efectuado no se encontró la implementación real y efectiva de
este tipo de mecanismos de participación en los diferentes procedimientos
administrativos ambientales relacionados con el recurso agua.

Audiencias públicas consultivas para el agua

Estas audiencias se celebran en todos los departamentos del país,


con el propósito de elaborar un listado de proyectos susceptibles de ser
apoyados financieramente por parte del Gobierno en el marco de los Planes
Departamentales de Agua y Saneamiento. A ella pueden asistir todas las
personas quienes, además, pueden intervenir previa inscripción.
El Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible mediante
resolución convoca a la audiencia pública que es de carácter consultivo,
con el propósito de elaborar dicho listado de proyectos de agua potable y
saneamiento básico para ser financiados, dando cumplimiento al Decreto
3200 de 2008. En este acto administrativo se señala además cómo se
realizarán las inscripciones para las intervenciones, el orden del día de
la audiencia y el listado preliminar de proyectos previstos.

Intervención en los procedimientos administrativos ambientales

La intervención en procedimientos ambientales es un mecanismo


de participación, mediante el cual se da la posibilidad a cualquier
persona, ya sea natural o jurídica, pública o privada, sin necesidad de
demostrar interés jurídico alguno, de intervenir en los procedimientos
administrativos que adelanta la autoridad ambiental para a la expedición,
modificación o cancelación de permisos o licencias ambientales de
actividades que afecten o puedan afectar el medio ambiente, o para la
imposición o revocación de sanciones por el incumplimiento de normas
y regulaciones ambientales92•

Establecida por la Ley 99 de 1993.


86 GLORIA ÁMPARO RODRÍGUEZ - CARLOS LOZANO ÁCOSTA- ANDRÉS G()MEZ REY

El trámite de este procedimiento es muy sencillo y se encuentra


contenido en el Título X de la Ley 99 de 1993. La entidad administrativa
al recibir una petición para iniciar una actuación administrativa ambiental
o al comenzarla de oficio dicta un acto de iniciación de trámite que
notifica y publica, en los Boletines existentes para ello. A partir de este
momento, la persona entra a ser parte dentro del proceso administrativo
ambiental que se encuentra en trámite.

Derecho de petición

El derecho de petición es un mecanismo de participación que consiste


en la posibilidad que tiene cualquier persona, ya sea natural o jurídica, de
dirigirse respetuosamente ante las autoridades, en forma verbal o escrita,
con el fin de obtener información y recibir una pronta respuesta.
El Código de Procedimiento Administrativo y de lo Contencioso
Administrativo (Ley 1437 de 2011), señala en el articulo 13 que toda
persona tiene derecho a presentar peticiones respetuosas a las autoridades,
por motivos de interés general o particular, y a obtener pronta resolución.
Toda actuación que inicie cualquier persona ante las autoridades implica
el ejercicio del derecho de petición consagrado en el artículo 23 de la
Constitución Política, sin que sea necesario invocarlo.Mediante él, entre
otras actuaciones, se podrá solicitar el reconocimiento de un derecho
o que se resuelva una situación jurídica, que se le preste un servicio,
pedir información, consultar, examinar y requerir copias de documentos;
formular consultas, quejas, denuncias y reclamos e interponer recursos.
El ejercicio del derecho de petición es gratuito y puede realizarse sin
necesidad de representación a través de abogado.
El derecho de petición de información en materia ambiental permite
que cualquier persona (natural o jurídica) solicite información a la
autoridad ambiental con relación a los elementos susceptibles de
producir contaminación y los peligros que el uso de dichos elementos
pueda ocasionar a la salud humana, y sobre el monto y utilización de los
recursos financieros que están destinados a la preservación del medio
ambiente. En estos casos específicos, la autoridad ambiental cuenta con
el término de 10 días hábiles para responder la petición?'.

'))
Consagrado en el Artículo 23 de la Constitución Nacional y en el artículo 5 del
Código Contencioso Administrativo. El derecho de petición de información sobre
asuntos ambientales está consagrado en el artículo 74 de la Ley 99 de 1993.
HACIA LA GESTIÓN PARTICIPATIVA DEL AGUA 87

Para la Corte Constitucional. el derecho de petición se convierte


en uno de los instrumentos más adecuados para hacer efectiva la
democracia participativa en el sentido de ofrecer vías alternativas de
comunicación entre la administración y el pueblo en tanto titular de la
soberanía y hacerlo de una manera fluida, transparente, respetuosa y
eficaz. El derecho de petición es un vehículo de singular eficacia para la
participación, precisamente por el conocimiento de la cosa pública, por
parte de todos los ciudadanos sobre aquellos asuntos de incumbencia
colectiva que en tal virtud poseen carácter público?'.
El derecho de acceso a los documentos públicos tiene algunos límites
según la Corte, que deben inspirarse "en una objetiva prevalencia del
interés general. En este orden de ideas, es permitido a los funcionarios
impedir el acceso a documentos reservados, si va autorizada, también
cuando el contenido de los documentos vulnere el derecho a la intimidad".
La efectividad del derecho a obtener copias es manifestación concreta
del derecho a obtener pronta resolución a las peticiones formuladas que
también hace parte del núcleo esencial del derecho de petición. "La
violación de este derecho implica la vulneración del derecho fundamental
a la obtención de la copia del respectivo documento público" para cuya
defensa y efectividad "no existe en el ordenam iento ningún medio judicial
diferente de la acción de tutela que pueda garantizar en términos de
eficacia y celeridad su protección inmediata"?'.
Según el artículo 14 del Código de Procedimiento Administrativo, salvo
norma legal especial y so pena de sanción disciplinaria, toda petición
deberá resolverse dentro de los quince (15) días siguientes a su recepción,
pero están sometidas a términos especiales las siguientes peticiones: (1)
Las peticiones de documentos deberán resolverse dentro de los el iez (1 O)
días siguientes a su recepción. Si en ese lapso no se ha dado respuesta al
peticionario, se entenderá, para todos los efectos legales, que la respectiva
solicitud ha sido aceptada y, por consiguiente, la administración ya
no podrá negar la entrega de dichos documentos al peticionario, y
como consecuencia las copias se entregarán dentro de los tres (3) días
siguientes. (2) Las peticiones mediante las cuales se eleva una consulta a
las autoridades en relación con las materias a su cargo deberán resolverse
dentro de los treinta (30) días siguientes a su recepción.
Según esta norma, cuando excepcionalmente no fuere posible resolver
la petición en los plazos aquí señalados, la autoridad deberá informar de

\l.J
Corte Constitucional. Sentencia T-306 de 1993. M. P. f f ernando Herrera Vergara.
95 Corte Consriruoinnal. Sentencia T-306 ele. 1 Q()i M P l-Icrnando l-Ierrr-rn VPranrn
88 GLORIA /\MPARO RODRÍGUEZ - CARLOS LOZANO /\COSTA - J\NDRÉS UOMEZ REY

inmediato, y en todo caso antes del vencimiento del término señalado en la


ley, esta circunstancia al interesado expresando los motivos de la demora y
señalando a la vez el plazo razonable en que se resolverá o dará respuesta,
el cual no podrá exceder del doble del inicialmente previsto.
El derecho de petición se constituye en un derecho fundamental cuya
efectividad según la Corte, resulta indispensable para el logro de los fines
esenciales del Estado, particularmente el servicio a la comunidad, la
promoción de la prosperidad general, la garantía de los principios, derechos
y deberes consagrados en la Constitución y la participación de todos en
las decisiones que los afectan, así como para asegurar que las autoridades
cumplan las funciones para las cuales han sido instituidas".
Este es el mecanismo de participación más conocido y utilizado por
eso la Corte Constitucional considera que el derecho de petición, en
suma, se convierte en uno de los vehículos más idóneos para establecer
un puente fluido y transparente de la comunicación entre el pueblo y
las autoridades administrativas. Configura, por tanto, un instrumento
de primer orden en el camino hacia la ampliación y profundización de
la democracia participativa",
El derecho de petición es un derecho público subjetivo de toda
persona que le permite acudir ante las autoridades, con miras a obtener
pronta resolución a una solicitud o queja. Aunque su objeto no incluye
el derecho a obtener una resolución determinada, sí exige que exista
un pronunciamiento oportuno. El ejercicio del derecho de petición
impone a las autoridades u organizaciones privadas señaladas en la ley
una conducta consistente en resolver de fondo la petición, bien sea en
sentido positivo o negativo".

Veedurlas ciudadanas en asuntos ambientales

"Las veedurías ciudadanas, constituyen quizá la expresión más clara


de la posibilidad de injerencia de las comunidades en el desarrollo de
la gestión pública, sus resultados y el manejo de los recursos que ello
implica. En efecto, en la Constitución se establece este derecho de la
ciudadanía, con el fin de ampliar su participación en la conducción
de los programas esta ta les de desarrollo y bienestar, por tanto incide

lJ6
Corte Constitucional. Sentencia T-12 de 1992. M.P. José Grcgorio Hernández.
97
Corte Constitucional. Sentencia C-542 de 2005. M.P. 1 lurnbcrto Sierra Porto.
Corte Constitucional. Sentencia T-443 de 1994. M.P. Eduardo Cifuentcs Muñoz.
HACIA LA ÜESTIÓN PARTICIPATIVA DEL AGUA 89

directamente sobre la posibilidad de incluir en el mejoramiento de la


calidad de vida"?".
Las veedurías ciudadanas son un mecanismo de participación que
permite a los ciudadanos o a las diferentes organizaciones comunitarias
ejercer vigilancia. fiscalización y evaluación sobre la gestión pública que
realizan las autoridades administrativas, políticas.judiciales, electorales,
legislativas y órganos de control, así como las entidades públicas o
privadas, o las organizaciones no gubernamentales que operen en el
país, encargadas de la ejecución de un programa, proyecto, contrato, o
de la prestación de un servicio público.
Las veedurías ciudadanas pueden ser constituidas por todos los
ciudadanos en forma plural o a través de organizaciones civiles como:
organizaciones comunitarias, profesionales.juveniles, sindicales, benéficas
o de utilidad común, no gubernamentales y sin ánimo de lucro'?",
La Corte Constitucional ha advertido que las veedurfas ciudadanas se
inspiran en dos grandes principios: de un lado el principio democrático,
que irradia transversalmente todo el ordenamiento constitucional,
incluidos obviamente los mecanismos de participación ciudadana. Por
otro lado, esas organizaciones responden al principio de autonomía,
no sólo en virtud de su origen privado, sino como condición para el
ejercicio libre de la vigilancia ciudadana sobre la gestión pública. De igual
forma, para este tribunal las veedurías adquieren una doble dimensión,
porque además de ser un mecanismo de participación ciudadana, son
la concreción del derecho a participar en la conformación, ejercicio y
control del poder político. También señala la Corte que la prestación de
servicios públicos domiciliarios no es un asunto extraño a la vigilancia
que pueden ejercer las veedurías ciudadanas. En otras palabras, que las
empresas de servicios públicos domiciliarios no tienen por qué sustraerse
a ese tipo de vigilancia colectiva, ni regularse por normas ajenas a una
regulación integral de las veedurías'?'.

El referendo constitucional aprobatorio por el derecho al agua

Diversas organizaciones sociales y políticas lideradas por la


Corporación Ecofondo impulsaron el referendo del agua como un

LOSADA. María Teresa. Democracia y participación ciudadana: el nuevo


')')
Munoz
orden constitucional y legal. Escuela de Liderazgo Democrático. Corporación S.O.S.
Colombia - Viva la Ciudadanía. Bogotá, 1995. p. 45.
100
Reglamentada por la Ley 850 de 2003.
wi Corte Constitucional. Sentencia C-292 de 2003. M.P. Eduardo Montcalegre Lynctt.
90 GLORIA AMPARO RODRÍGUEZ - CARLOS LOZANO ACOSTA -ANDRÉS GóMEZ REY

derecho humano fundamental en Colombia. Para ello realizaron diversas


campañas, navegaron el rio Magdalena, hicieron eventos, seminarios,
reuniones, conciertos, etc., buscando las firmas que se requerían
para presentar esta iniciativa popular al Congreso de la República.
Adicionalmente constituyeron el Comité Nacional de Defensa del Agua y
la Vida, compuesto por más de sesenta organizaciones que se encargaba
de ser el promotor del mencionado referendo.
Este proceso participativo generó una gran movilización local,
regional y nacional en defensa del agua, buscando incidir en diferentes
problemáticas relacionadas con el recurso como el encarecimiento .
del servicio de acueducto y alcantarillado y la exclusión creciente de
la población, mostrando la relación de estos fenómenos con las crisis
ambiental, argumentando que si no cambiábamos nuestra relación con los
ecosistemas, construyendo una nueva cultura ambiental, no tendremos
agua, así logremos derrotar la privatización1º2•
En el panorama político colombiano se desarrolló esta iniciativa para
la inclusión del derecho al agua como fundamental y el recurso como
bien público en la Constitución, por vía de referendo constitucional
aprobatorio'?'. Se trata de un esfuerzo del movimiento social colombiano
que constó de varias etapas. La construcción de una línea base sobre el
estado de los ecosistemas generadores de agua; foros regionales para la
discusión de dicha linea base y campañas regionales en torno a un "caso
símbolo" por su importancia para la gestión de los recursos hldricos'?'. De
manera simultánea, se promovieron de forma transversal la construcción
de alianzas, redes y acuerdos políticos interorganizativos'". Así, el
proceso fue fruto del trabajo de indígenas, afrocolombianos, usuarios de
servicios públicos, sindicatos, ambientalistas y gestores de acueductos
comunitarios, en el contexto de un país con abundantes recursos hídricos
que empieza a ser "objeto de interés por parte de transnacionales con
intereses en la geopolítica del agua" según manifestaba el Comité
Nacional en Defensa del Agua y de la Vida.

º
1 2
COL.MENARES FAcc1N1, R., MIRA SANCHEZ, J.C. "Paradojas del agua en Colombia.
Privatización y alternativas públicas". En: Colombia: ¿Un futuro sin agua?
Corporación Ecofondo, Ediciones desde abajo y Foro Nacional Ambiental. Bogotá,
2007, p. 24.
103
ECOFONDO. El agua un bien público: razones para una campaña. [en línea]
[Consultado el 13 de septiembre de 2009]. Disponible en http://agua.ecofondo.
org.co/index.php?option=com_content&view=article&id=45&Itemid=29.
104 Ibíd.
105
Tbíd.
HACIA LA GESTIÓN PARTIClPATIVA DEL AGUA 9)

El trámite del referendo está regulado por la constitución y por la ley


134 de 1994. Conforme al artículo 33 de esta norma, el gobierno o un
grupo de ciudadanos no menor al 5% del censo electoral, podrán solicitar
al Congreso que someta a consideración, mediante ley que demanda la
aprobación de ambas cámaras, un proyecto de reforma constitucional. Para su
aprobación, es preciso que más de la mitad de los sufra gantes, cuyo número
debe exceder a la cuarta parte del censo electoral, voten afirmativamente'?'.
Asimismo, el referendo debe realizarse dentro de los seis meses siguientes a
la presentación de la solicitud, previa remisión de los respectivos formularios
con los respaldos ante la Registraduría, por parte de los impulsores de la
iniciativa'?', Esta figura tiene un control constitucional previo por vicios
de trámite y de competencia y la certificación del cumplimiento del censo
electoral está a cargo de la Registradurla'?".
La propuesta de reforma contenía un amplio espectro de normas que
se ubican temáticamente alrededor de dos ejes: la consideración del
acceso al agua como un derecho y la consagración de su propiedad como
un bien de naturaleza pública. En ambos casos, prescribe una serie de
obligaciones a cargo del Estado.
El referendo propuso adicionar al título 1 sobre principios
fundamentales, una prescripción relacionada con la protección del agua
en todas sus manifestaciones, dada su esencialidad para la vida de las
generaciones presentes y futuras y la consideración del recurso como
bien común'?". En el mismo sentido, propuso la consagración del derecho
humano al agua dentro del capítulo sobre derechos fundamentales, en
los siguientes términos:
"Título 11 capítulo J De los derechos fundamentales. Artículo nuevo
de la Constitución: El acceso al agua potable es un derecho humano
fundamental. El Estado tiene la obligación de suministrar agua potable
suficiente a todas las personas, sin discriminación alguna y con equidad
de género. Se debe garantizar un mínimo vital gratuito" (Comité
Nacional en Defensa del Agua y de la Vida).
En el título de derechos económicos, sociales y culturales, promovían
la inclusión de un parágrafo adicional al artículo 63, relativo a los bienes

106
Colombia. Ley 134 de 1994. Art. 33.
107
Ibíd., Art. 22.
108
lbíd., Art. 24.
109
"Articulo nuevo de la Constitución. El Estado debe garantizar la protección del agua
en todas sus manifestaciones, por ser esencial para la vida de todas las especies
y para las generaciones presentes y futuras. El agua es un bien común y público".
Comité Nacional en Defensa del Agua y de la Vida.
92 GLORIA AMPARO RODRÍGUEZ - CARLOS LOZANO ACOSTA - ANDRÉS GóMEZ REY

de uso público. En tal virtud, pretendían consagrar las aguas como


bien público, y prescribían la protección para las que se encontraban en
territorios colectivos y para sus usos culturales'!", Finalmente, el capítulo
111 del título 11, relativo a los derechos colectivos y del ambiente tendría un
nuevo parágrafo en el artículo 80, que se ocupa de la planificación estatal
del manejo de los recursos naturales que elevaría a rango constitucional
la protección de ecosistemas estratégicos para el ciclo ecohidrológico,
conciliando el equilibrio ccosistémico con el uso sustentable del líquido
(Art. 80 Constitución Política).
Por otra parte, se intentó la reforma del título XI 1 de la Constitución
sobre el régimen económico y la hacienda pública, con el fin de que el
servicio de saneamiento sea prestado por el Estado o por comunidades
organizadas (Parágrafo Art. 365 de la Constitución Política) . Este punto
dio lugar a un intenso debate al interior del movimiento impulsor del
referendo, pues algunos sectores objetaban que la posición de respaldo a la
gestión comunitaria privada debilitaba la intención de mantener el recurso
como bien público y su prestación como deber a cargo del Estado. Según
este punto específico de la iniciativa, la gestión no podría tener ánimo de
lucro y será objeto de control ciudadano. Esto implica que, en la práctica,
los servicios de acueducto y alcantarillado serían una excepción a la regla
general que permite la prestación de servicios públicos con ánimo de lucro
a particulares, conforme al artículo 365 de la Carta Política.
El referendo por el derecho al agua era una iniciativa ciudadana
que reflejaba un esquema jurídico de acceso a los recursos hídricos
altamente garantista, pensado en clave de justicia social (expresada en
la idea de suministro vital mínimo) equidad de género y perspectiva
ecológica (en razón de la elevación del equilibrio ecosistémico en el ciclo
hidrológico como bien jurídico protegible a nivel constitucional). Su
contenido además parece acorde con los principios y valores generales
que orientan la cláusula de Estado social de derecho, propia de la
Constitución de 1991, entre ellos el mandato de igualdad material y la
vida en condiciones dignas. No obstante lo anterior, dicha iniciativa no
hace parte aún del ordenamiento jurídico colombiano, pues no ha sido

110
"Parágrafo nuevo para el artículo 63 de la Constitución. Todas las aguas. en todas sus
formas y estados, los cauces, lechos y playas, son bienes de la nación, de uso público. Se
respetará una franja de protección de los cauces de ríos, lagos y humedales. Las aguas
que discurren o se encuentren en territorios indígenas o en los territorios colectivos de
fas comunidades negras son parte integrante de los mismos. Se garantizará además el
valor cultural del agua como elemento sagrado en la cosmovisión de los grupos étnicos",
Comité Nacional en Dcf ensa del Agua y de la Vida.
HACIA LA GESTIÓN PARTICIPATIVA DEL AGUA 93

aprobada en debida forma, y por consiguiente no puede ser considerada


como componente válido del cuerpo normativo vigente sobre derecho
al agua en Colombia.
El espíritu inicial del proyecto preguntaba si está de acuerdo o no
con la consagración del mínimo vital de agua potable como un derecho
humano, con que se protejan los ecosistemas que hacen parte del ciclo del
agua y con que el agua potable y el acueducto sean administrados por el
Estado, entre otros. El Congreso de la República eliminó lo fundamental
y cambió el sentido para que la norma impulse valores opuestos a los
que buscaban los firmantes. Ellos querían fortalecer el carácter público
del agua y el nuevo texto amplió los derechos de propiedad privada
sobre el agua y consagró la administración con ánimo de lucro, lo cual
terminó por tergiversar los planteamientos inicialmente realizados por
las organizaciones sociales que convocaron dicha iniciativa.
El proyecto fue debatido ampliamente en el Congreso de la República,
pero los promotores del texto original, como consecuencia de los
cambios tan profundos que se realizaron al texto, consideraron que de
esta forma se estaba promoviendo aquello que precisamente no deseaban
(la privatización del recurso, aumento en las tarifas, etc.) y lo plantearon
en diferentes escenarios y a los mismos congresistas.
En palabras de Juan Camilo Mira de Ecofondo, "la Comisión V de
la Cámara de Representantes recortó los alcances del tema del derecho
humano al agua potable en el proyecto de ley del referendo, al reducirlo
a una fórmula que reafirmaba de modo simple la esencialidad del agua
para la vida; eliminó el artículo sobre el parágrafo propuesto al artículo
365 de la Constitución Política nacional sobre la no privatización y la
gestión pública del agua; y limitó el mínimo vital gratuito a los estratos
1, 2 y 3, que son los sectores populares más empobrecidos y vulnerados
en sus derechos y los de menores ingresos. Esta ponencia fue aprobada
por la Comisión y el proyecto fue enviado a la Plenaria de la Cámara para
su firma a comienzos del 2010. Esta propuesta fue votada negativamente
y de esta manera es negado en la Cámara de Representantes111•
Ante estos hechos, de manera simultánea el grupo de organizaciones
de Antioquia interpuso acción de tutela para garantizar el debido proceso
a la iniciativa del referendo en el Congreso y la sentencia señaló que el
proyecto estaba recibiendo el trámite necesario.

111 MIRA, Juan Camilo. "Agua - Un bien público y un derecho humano". En Boletín
Ecofondo No. 32. Eco fondo, Bogotá, 2011. p. 65.
94 GLORIA AMPARO RODRÍGUEZ - CARLOS LOZANO ACOSTA - ANDRÉS GóMEZ REY

La situación acaecida con el referendo del agua generó gran decepción


al interior de las organizaciones ambientalistas y entre quienes lo
promovieron. Se demuestra con esto que existen dificultades en entender
la importancia de promover verdaderos procesos de participación,
donde la comunidad no sea solamente escuchada sino que logre que sus
inquietudes, manifestaciones y propuestas sean ten idas en cuenta en las
decisiones finales.
Lo anterior evidencia como lo venimos planteando en diversos ámbitos
y documentos, que es necesario avanzar en la creación de instrumentos
genéricos y en procesos que faciliten la participación de las personas
y además:
Promover la construcción de sistemas de información ambiental
de toda índole.
Generar mecanismos de información, divulgación y comunicación
entre el Estado y la sociedad.
Apoyar el fortalecimiento de las organizaciones de la sociedad
civil.
Definir recursos financieros y técnicos adecuados y suficientes
para la participación.
Incentivar la generación de procesos participativos planificados.
De no hacerse este proceso de cambio en materia de democracia
participativa, aumentarán no solo los costos económicos sino los sociales,
políticos e institucionales en este tipo de procesos, como consecuencia de
la deficiente incidencia de las comunidades en las decisiones ambientales,
llegando a poner en riesgo los mismos proyectos, demorando su
desarrollo, afectando las inversiones en las diferentes regiones del país,
utilizando de manera ineficiente los recursos y, además, escalando los
conflictos ambientales.

Dificultades en los procesos de participación en las concesiones

La norrnatividad sobre algunos permisos relacionados con el recurso


hídrico posee reglas particulares de participación en la norrnatividad,
las cuales no siempre están de acuerdo con las reglas generales
establecidas más recientemente en nuestro país. Verbigracia, en la
concesión de aguas superficiales112 encontramos tres regímenes que

112
Sobre el particular se sugiere ver: GóMEZ REY, Andrés ... La concesión de aguas
superficiales a la luz de la teoría general del acto administrativo. Incidencia de la tradición
HACIA LA GESTIÓN PARTICIPATIVA DEL AGUA 95

se pueden contraponer. El primero de ellos está en el Decreto 1541 de


1978; el segundo en la Ley 99 de 1993 y el último en la Ley 1437 de
2011, que empezará a regir en el 2012.
Aunque en estricto sentido, se trate de una sola clase de participación
llamada en los procedimientos de tipo administrativo, bajo la cual se da
la posibilidad a cualquier persona, ya sea natural o jurídica, pública
o privada, sin necesidad de demostrar interés alguno, de intervenir en
los procedimientos administrativos que adelanta la autoridad ambiental
para la expedición, modificación o cancelación de permisos o licencias
ambientales de actividades que afecten o puedan afectar el medio
ambiente (Art. 69 de la Ley 99 de 1999).
Comenzando con nuestra tarea, la contraposición planteada recae
sobre el interés que debe demostrar un ciudadano para participar y
el tiempo para hacerlo, implicando de este modo sólo dos limitantes
normativas a la posibilidad para participar. Así pues la primera referencia
-como se indicó- la encontrarnos en el Decreto 1541 de 1978 (artículos.
57 y 60), el cual plantea la existencia de los dos limites mencionados.
Veamos en el caso del procedimiento para otorgar de las concesiones lo
que plantea la norma:
"Articulo 57. Por lo menos con diez (JO) días de anticipación a
la práctica de la visita ocular el Instituto Nacional de los Recursos
Naturales Renovables y del Ambiente, Inderena, hará fijar en lugar
público de sus oficinas y de la alcaldía o de la inspección de la localidad,
un aviso en el cual se indique el lugar, la fecha y el objeto de la visita,
para que las personas que se crean con derecho a intervenir puedan
hacerlo. Para mayor información, en aquellos lugares donde existan
facilidades de transmisión radial, el Instituto Nacional de los Recursos
Naturales Renovables y del Ambiente, Inderena, podrá, a costa del
peticionario, ordenar un comunicado con los datos a que se refiere el
inciso anterior, utilizando tales medios".
"Articulo 60. Toda persona que tenga derecho o interés legítimo,
puede oponerse a que se otorgue la concesión. La oposición se hará
valer ante el Instituto Nacional de los Recursos Naturales Renovables
y del Ambiente, Inderena, antes de la visita ocular o durante esta
diligencia, exponiendo las razones en las cuales se fundamenta y
acompañando los títulos y demás documentos que el opositor crea
convenientes para sustentarla. El Instituto Nacional de los Recursos

dogmática del derecho público en el derecho ambiental". En: Revista de Estudios


Sociojuridicos. Julio-diciembre de 2010. Universidad del Rosario, Bogotá, 2010.
96 GLORIA AMPARO RODRiGUEZ - CARLOS LOZANO /\COSTA - ANDRES GóMEZ REY

Naturales Renovables y del Ambiente, Jnderena, por su parte, podrá


exigir al opositor y al solicitante de la concesión los documentos,
pruebas y estudios de orden técnico y legal que juzgue necesarios,
fijando para a/legarlos un término que no excederá de treinta (30) días.
La oposición se decidirá conjuntamente en la resolución que otorgue o
niegue la concesión".
En consecuencia y a la luz de este decreto, la participación en
concesiones de aguas superficiales se podrá real izar en el tiempo,
únicamente antes o durante la práctica de la visita ocular, por consiguiente
vencido el mismo no procede; dejando sin esta posibilidad el lapso
comprendido entre la elaboración del informe técnico y la expedición
del acto administrativo que otorga o niega la concesión.
Ahora bien, en los casos de prórroga o de modificación del acto
aparentemente no existen posibilidades de participación. La norma
no contempla dicho caso, sin embargo si el procedimiento incluye la
realización de una visita, es posible entender que sí.
Refiriéndonos ahora sobre el segundo límite, se observa que la norma
trae consigo la condición de poseer un interés legítimo para participar,
es decir hay exigencia de legitimación en el procedimiento -legitimatio
ad processum- la cual es un presupuesto para comparecer al trámite en
comento. Así pues, quien no lo posea podrá verse excluido de las
decisiones a adoptar.
Nada impide entonces, que sea rechazada una intervención en la
concesión por ausencia de legitimación o por ser extemporánea ya que
la norma lo exige. Sin embargo hay que considerar que el ambiente,
al ser un derecho en interés colectivo permite o debe permitir que
cualquier persona pueda participar; lo cual nos remite al artículo 79
de la Constitución Política y a los artículos 1° y 69 de Ley 99 de 1993.
Esta referencia que nos invita a pensar que los requisitos de tiempo y
de legitimación en la causa no son aplicables. Es decir se trata de una
participación abierta por naturaleza, en la cual ni siquiera se exigen
requisitos de capacidad legal para ejercerla.
La Ley 1437 de 2011, prevé la intervención de terceros en todo
procedimiento administrativo general, lo cual constituye otra posibilidad
de participación, sin que establezca tiempo alguno, pero exigiendo una
especie de legitimación en la causa respecto de, ser sujeto pasivo de los
efectos de acto administrativo; veamos la norma:
"Artículo 38. Intervención de terceros. Los tercerospodrán intervenir
en las actuaciones administrativas con los mismos derechos, deberes
HAC'IA LA ÜESTION PARTICIPATIVA DEL AGUA 97

y responsabilidades de quienes son parte interesada, en los siguientes


casos:
l. Cuando hayan promovido la actuación administrativa
sancionatoria en calidad de denunciantes, resulten afectados con
la conducta por la cual se adelanta la investigación, o estén en
capacidad de aportar pruebas que contribuyan a dilucidar los
hechos materia de la misma.
2. Cuando sus derechos o su situación jurídica puedan resultar
afectados con la actuación administrativa adelantada en interés
particular, o cuando la decisión que sobre ella recaiga pueda
ocasionarles perjuicios.
3. Cuando la actuación haya-sido iniciada en interés general".
Sentido en el cual, se requiere para poder ejercer la participación
demostrar que los efectos del acto a expedir, en nuestro caso, concesión de
aguas superficiales le van a generar una externa! idad positiva o negativa.
Continuando, éste es el panorama de las normas contradictorias
propuestas en un comienzo: las cuales podrán generar los siguientes
escenarios: a) que se exija cumplir con los requisitos de legitimación
y tiempo del Decreto 1541 de 1978; b) que ún icamcnte se exija la
legitimación de nuevo código contencioso -efectos del acto' 13-y e) que
no se exija requisito alguno -Ley 99 de 1993-.

EL DERECHO A LA INFORMACIÓN EN LA PROTECCIÓN


DEL RECURSO AGUA

El derecho a la información o el derecho a saber es la garantía


fundamental que tiene toda persona a acceder a la información, a
informar y a ser in formada. También se puede decir que el derecho a
la in formación es la capacidad de acceder, solicitar y conocer datos,
documentos y demás contenidos que el ciudadano considere de interés
o necesidad. Este derecho se sustenta en los artículos 15, 20 y 23 de la
Constitución Política de Colombia y tiene tres estados de aplicación: 1)
forma activa, cuando soy yo quien brinda la información, 2) forma pasiva,
cuando la solicito y, 3) forma neutra, cuando puedo conocer que existe
acerca de mí en bases de datos tanto públicos como privadas114•

113
Se pretende en el presente establecer como requisito de participación que sea sujeto
pasivo de los efectos de un potencial acto administrativo a futuro.
LORA, A.M .. Musoz, L., RooRiGUEZ. G.A. Manual de acceso a la información y a la
114

participación ambiental en Colombia. Publicaciones ILSA. Bogotá, D.C., 2008. p.14.

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