Resumen Introducción y Parte I La Autoridad suprema en materia de fe. Milne Bruce.

Introducción

El estudio de la doctrina es vital por cuatro razones: 1) “Todo cristiano es un teólogo”

2) “Entender bien la doctrina es la clave para entender bien todo lo demás” 3) “El estudio de

la doctrina es una expresión de amar a Dios con nuestra mente” 4) “La doctrina es

fundamental porque es imposible separar a Cristo de las verdades que las escrituras revelan

acerca de Él.” (Milne, 2008, pp. 17-19)

1. La Autoridad

“La autoridad es el derecho o poder de exigir obediencia.” (Milne, 2008, p. 28) Si

alguna persona pensara en omitir, voluntariamente, la perspectiva que Dios tendría acerca de

una dada situación, la posterior mala consciencia al respecto, otorga a Dios la autoridad que

tiene y su actual vigencia. En la historia los credos, las confesiones de fe, el desarrollo del

pensamiento de la iglesia, la experiencia personal, la razón cristiana, y una voz interior, han

contribuido a lo que es la autoridad, sin embargo, ninguna de las anteriores fuentes es

adecuada para señalar la autoridad. Esta última reside únicamente en Dios, en la trinidad.

2. La revelación

La revelación pasa del sentido natural al sentido teológico, haciendo referencia a las

realidades religiosas. Hay una gran diferencia entre Dios y el hombre, la cual está demostrada

desde el génesis, cuando se presenta al hombre como un ser creado por Dios, y por tanto,

subordinado a él. Además, a causa del pecado, nuestra posibilidad de conocimiento de Dios,
se ha visto coartada, por lo cual se hace necesaria la revelación del creador a su creación.

(Milne, 2008, pp. 33-34)

La figura de Dios como creador, y además su naturaleza amorosa, hacen que la

probabilidad de la revelación se haga realidad. Dios se revela por medio de la creación, la

experiencia moral, el sentimiento universal de la búsqueda religiosa y una realidad dinámica

continua, con intervalos de las diferentes formas de revelación. Además, hay otras formas de

revelaciones especiales en las que Dios se ha dado conocer, la mayor de ellas es la persona

de Jesucristo, y en segundo lugar, la Biblia como tal. Estas formas se relacionan y llegan a

cumplir un rol especial en lo que es el plan de redención. (Milne, 2008, pp. 35-42)

3. Las escrituras

La revelación especial de Dios, es manifestada a través de la Biblia, en ella está la revelación

de Jesús y, se convierte en la base de la predicación y enseñanza cristianas. Dios se comunica

con el hombre en su lenguaje y no es de extrañar la forma directa que se usa en la Biblia.

Además de comunicarse en la forma racional del hombre y en su lenguaje, Dios se comunica

en las escrituras por medio de analogías. Además la Biblia al encontrase en lenguaje escrito,

tiene varias ventajas que otras formas de comunicación no poseen.

En cuanto a las bases para aceptar la Biblia como la palabra escrita de Dios, es clave

mencionar que Jesús mismo le otorgó autoridad a las escrituras al citarlas directamente en

varias ocasiones. Además de eso, los apóstoles también hicieron menciones al A.T., así que

no solamente confirmaron la autoridad de la escritura, sino que también reconocieron la

autoridad de Cristo al respecto. En todo esto se puede rastrear a Dios mismo revelándose a
nosotros, incluso cuando haya intervención humana, se tiene la confianza de que es Él quien

ha dado a conocer sus palabras.

4. Aplicación

“Ya que somos seres creados y pecadores, podemos encontrar la verdad de Dios solamente

como un don de su condescendencia que supera nuestra resistencia informa hacia Él e ilumina

nuestras mentes oscurecidas” (Milne, 2008, p. 72)

Se necesita pues: Nacer de nuevo, estudiar las escrituras, predicar y exponer la Biblia y

obedecer las escrituras aceptando con ello su autoridad como revelación y palabra de Dios.