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FACULTAD DE INGENIERIA
PROGRAMA DE INGENIERIA INSDUSTRIAL
INGENIERÍA ADMINISTRATIVA
MARZO 2 DE 2016
Introducción
Frederick Taylor y Henri Fayol han sido considerados como soportes fundamentales del
pensamiento administrativo predominante en el occidente industrializado. Cada uno, a
su manera, buscaba optimizar las rentabilidades de las empresas en las que laboraban y
retribuirles mejor a los obreros la gestión realizada en la empresa.
Uno de los principios más evidentes, y en la que se basaron ambos, fue en la división y
especialización del trabajo, principio que aún se mantiene en la actualidad y se ha
renovado tanto hasta la repartición de roles dentro de la empresa.
La administración entre tradición y renovación
Fue el padre de lo que se denominó Organización científica del trabajo, que no fue más
que un sistema de producción, una forma de subdivisión, repartición y control del
trabajo; que utiliza técnicas y modelos racionales, sistemáticos y calculados,
dependientes de métodos y enfoques propios de la ciencia. Se le mal llamó
científicamente ya que no respondía a requisitos científicos, sino más bien a exigencias
de incrementar la producción en las fábricas industriales. Aunque, su único carácter de
científico lo tiene ya que hace uso del método científico (observación, registro,
clasificación, medición, cálculo, etc.). Además del aspecto científico en los trabajos de
Taylor sobre la adecuación de las herramientas y los materiales, así como también de la
fatiga del obrero.
Desde muy niño tuvo la manía de ser meticuloso con sus cosas. Todo lo contaba y
medía, siempre buscando hacer todo más eficaz. Taylor aportó los principios de la
decisión técnica del trabajo y de rentabilización y del mínimo ademán del obrero.
Taylor desarrolló estas ideas en una época donde se estigmatizaba al obrero de
tramposo, pobre, vicioso, poco inteligente, ignorante, perezoso y demás defectos; malas
cualidades que él no tomó en cuenta, esto dado a que él en sus principios fue obrero y
fue escalando todos los peldaños posibles dentro de una organización.
La pereza sistemática era una práctica grupal, todos los obreros sabían que si alguno de
ellos colocaba un tipo de marca en su trabajo ésta, tarde o temprano, se convertiría en
parte de su jornada obligatoria. Este es el estado de lucha por el valor agregado, lucha
inevitable entre trabajadores y empleados, donde unos quieren transformar los
excedentes en máxima ganancia y los otros, en incremento o no reducción del salario.
Taylor considera normal que los obreros pretendan defender sus intereses al ver que el
salario por piezas ha disminuido en comparación con el anterior, por haber trabajado
enérgicamente, aumentando su producción. No obstante, los culpaba por engañar a sus
patrones, lo cual consideraba deshonesto e inaceptable. Pero lo más transcendental es
que eso es lo que arruina el clima de confianza bilateral que debería imperar entre ellos,
y lleva a la situación en la que se pierden de vista los objetivos comunes y, al mismo
tiempo, desaparecen los beneficios recíprocos.
El gran problema que enfrentaba era que, después de la revolución industrial, se tomaba
la concepción del obrero como una máquina de la cual había que extraer el máximo
rendimiento posible, evitando, de cualquier modo, ser condescendientes con excesos de
salarios que lo volverían caprichoso. Además de eso, los “mundos”, tanto de los obreros
como de los patrones, están separados por el pensamiento de que cada una de las partes
está convencida de que la otra no aporta sino una íntima parte de lo que, en realidad,
debería aportar tanto en producción como en salario. La solución que Taylor encontró
fue persuadir tanto a unos como a otros de que su verdadero interés es colaborarse
conjuntamente respecto a lo que se puede y se debe producir, y lo que se puede y se
debe pagar. Este medio reside en los principios de dirección científica, para lo cual
Taylor propone cinco principios:
1. Operaciones técnicas
2. Operaciones comerciales
3. Operaciones financieras
4. Operaciones de seguridad
5. Operaciones de contabilidad
6. Operaciones administrativas
La que muy poco se tenía presente era la operación administrativa, considerando esto
como un craso error, dado que es esta quien engloba a las demás, puesto que tiene la
misión de desarrollar el programa general de acción de la empresa, constituir su cuerpo
social, coordinar esfuerzos y armonizar los actos.
1. Principio de la división del trabajo. De orden natural, tiene por objetivo llegar a
producir más y mejor con el mismo esfuerzo.
2. Principio de autoridad-responsabilidad. Entiéndase la autoridad como el poder
de mandar y el derecho de hacerse obedecer; que deben ir acompañados de
responsabilidad.
9. Principio de jerarquía. Serie de jefes que va desde la autoridad superior hasta los
agentes inferiores.
10. Principio de orden. Un lugar para cada cosa y cada cosa en su lugar; y un lugar
para cada persona y cada persona en su lugar. Orden natural y social.
12. Principio de estabilidad del personal. Se requiere tiempo para que un agente se
inicie en una tarea y sea capaz de cumplirla satisfactoriamente; por ende, deben
limitarse los cambios de personal a lo requerido por la edad, enfermedad, retiro
u otros.