Académique Documents
Professionnel Documents
Culture Documents
En su intento por cruzar la frontera, los niños migrantes son muy vulnerables a la
explotación, a la trata y a ser víctimas de la delincuencia, por lo que la protección de sus
derechos es una prioridad para el mandato de UNICEF en México. Para UNICEF es
fundamental asegurar que estos niños y niñas reciban un trato digno por parte de las
autoridades, les sean respetados sus derechos y les sea garantizada la reunificación
familiar.
¿POR QUÉ VIAJAN SOLOS LOS NIÑOS?
Los niños, niñas y adolescentes deciden viajar solos para cruzar la frontera de los Estados
Unidos en primer lugar por el deseo de reunirse con sus familiares, en segundo término por
el deseo de mejorar su nivel de vida a través del desempeño de un trabajo y, por último, por
el deseo de escapar de la violencia familiar o de la explotación sexual.
¿A QUÉ SE ENFRENTAN LOS NIÑOS QUE VIAJAN SOLOS?
En los últimos años, los controles migratorios en la frontera de los Estados Unidos se han
recrudecido. El desvío de flujos migratorios a zonas más inseguras para evadir dichos
controles y la contratación más frecuente de traficantes de personas, pone en peligro la vida
de los migrantes indocumentados, especialmente la de los niños y las niñas. Los niños y
niñas que deciden cruzar la frontera sin compañía pueden sufrir graves violaciones a su
integridad física y a sus derechos humanos. Los niños migrantes pueden: sufrir accidentes
(asfixia, deshidratación, heridas); ser enganchados a redes del crimen organizado; ser
sometidos a explotación sexual o laboral; sufrir maltrato institucional en el momento de la
repatriación o perder la vida en el momento del transito y cruce, entre muchas otras cosas.
Estos niños se encuentran en un estado permanente de violación de derechos ya que,
además de los riesgos que enfrentan, interrumpen sus estudios regulares, lo cual frena sus
posibilidades de desarrollo y, por supuesto, no disfrutan de derechos básicos como el
derecho a la alimentación, a la salud, a vivir en familia, entre otros. CICLO MIGRATORIO
(REPATRIACIÓN Y RETORNO) Con algunas variaciones, el ciclo migratorio y el
procedimiento administrativo por el que atraviesan los niños migrantes no acompañados es
el siguiente:
1) El niño sale del lugar de origen.
2) Llega a la frontera.
3) Cruza la frontera.
4) Es detenido por la autoridad migratoria del lugar de destino.
5) Es llevado a una estación migratoria.
6) El Consulado del país de origen coordina la repatriación.
7) Es trasladado a al puerto de entrada de su país.
8) Se queda en un albergue de tránsito (Si es que existe)
9) Se localiza a los padres o familiares.
10) Es trasladado de regreso a su lugar de origen.
Articulo de unicef
El largo camino de la migración infantil
Según el Instituto Nacional de Migración (INM) aprehendió a 36 mil menores de edad tan
sólo en 2015 y de éstos, la mitad viajaba sin su familia
El problema de los niños migrantes que cruzan nuestro país rumbo a Estados Unidos —en
especial quienes lo hacen por cuenta propia, es decir, los “no acompañados”— tiene
muchas aristas y plantea más preguntas que respuestas, y aunque éste es un fenómeno de
larga data, lo inédito es la cantidad actual de infantes dispuestos a emprender dicha
travesía, indica Javier Carreón Guillén, profesor de la Escuela Nacional de Trabajo Social
(ENTS) de la UNAM.
Sin embargo, muchos de estos infantes son retenidos por las autoridades mexicanas y
retornados a sus países. Según datos oficiales, el Instituto Nacional de Migración (INM)
aprehendió a 36 mil menores de edad tan sólo en 2015 y de estos, la mitad viajaba sin su
familia.
“Pero debemos tener cautela con las cifras, pues más que individuos éstas consignan
eventos y no es extraño que una persona deportada intente cruzar dos o tres veces tras ser
detenida, lo que redunda en una contabilidad engañosa. Lo indudable es que cada vez hay
más niños migrantes y esto, en sí mismo, es preocupante”, refirió.
Las agresiones de pandillas, maras o el crimen organizado son el día a día en el Triángulo
Norte de Centroamérica, lo que además de ser un lastre social que fragmenta a
comunidades, obliga al desplazamiento de las personas, niños incluidos.
No obstante, menos del uno por ciento de los detenidos por las autoridades migratorias son
reconocidos como refugiados”, expuso el Human Rights Watch en su reporte de 2016.
Sobre las razones para no concederles el estatus, Carreón adujo intereses económicos,
pues costaría mucho extender esta protección a miles de individuos.
Sobre cómo ayudar a los migrantes “no acompañados”, Carreón Guillén subrayó que
quienes se dedican al Trabajo Social tienen un ejemplo notable en el Medio Oriente (en
particular Irán, Irak y Siria), donde abundan los niños que deambulan sin rumbo, tras haber
sido arrancados de sus familias por diversos conflictos bélicos.
Para el académico, poner en marcha estas estrategias es algo no sólo factible, sino
aplicable en el corto plazo, pues muchas de estas ONG tienen contemplado trasladarse a
EU para hacer frente a las políticas migratorias que regirán durante la administración Trump
y ello, inevitablemente, las hará venir a México.
“No podría ser de otra manera pues a grandes males remedios aún mayores. Debemos
actuar ya, de lo contrario nos quedaríamos tan sólo en palabrerías y buenos propósitos”,
concluyó.
Art. Gaceta unam
Niñez migrante: vidas en tránsito
Todos los años, miles de niños, niñas y adolescentes transitan solos por México hacia la
frontera Norte. Escapan de la violencia, los abusos y la falta de oportunidades en busca de
un presente y un futuro mejor o con el deseo de reunificarse con su familia. Por viajar solos
son más vulnerables y se enfrentan a numerosos riesgos frente a la posibilidad de ser
reclutados por el crimen organizado, caer victimas de traficantes y ser expuestos a violencia
y explotación.