Documento de Trabajo N˚11

Centro de Investigación social

Un Techo para Chile
Abril 2010

SERIE
El espacio público en conjuntos de vivienda social de UTPCH.
Un estudio exploratorio.

Segundo Informe
Principales problemas de los espacios públicos:
Uso, mantención, financiamiento y diseño.

Autoras:
Gabriela Guerrero, Sociología UDP
Catalina Martínez, Sociología UDP
Carla Morgado, Sociología UAH

Edición:
Isabel Contrucci Hohlberg
Coordinadora de Investigaciones CIS
Un Techo para Chile
El Espacio público en conjuntos de vivienda social de UTPCH.

Principales problemas de los espacios públicos:

Uso, mantención, financiamiento y diseño.

La presente publicación forma parte de la serie de Do-

cumentos de Trabajo del Centro de Investigación Social
de Un Techo para Chile. Las opiniones expresadas en
este documento son de exclusiva responsabilidad de
sus autores.

Documento de Trabajo Nº 11
El Espacio público en conjuntos de vivienda social de
UTPCH. Un estudio exploratorio.

Directora CIS:
Javiera Pizarro

Autoras:
Gabriela Guerrero, Sociología UDP
Catalina Martínez, Sociología UDP
Carla Morgado, Sociología UAH

Edición:
Isabel Contrucci Hohlberg

Diseño:
Vinka Bravo
 El Espacio público en conjuntos de vivienda social de UTPCH.

Principales problemas de los espacios públicos:

Uso, mantención, financiamiento y diseño.

En los últimos años, las políticas habitacionales en Chile han to-

mado un nuevo curso de focalización –un interés que va más allá
de la disminución del déficit en vivienda- integrando el espacio
público como uno de los ejes importantes para contrarrestar y su-
perar problemáticas sociales específicas de ciertos grupos. Com-
plementariamente, en muchos de estos nuevos barrios de vivien-
da social, es probable que no se haya superado completamente
la precariedad de las viviendas y los espacios al interior de ella
sigan siendo reducidos. Por lo anterior, los lugares públicos de uso
común se presentan como espacios privilegiados de interacción,
convirtiéndose muchas veces en el centro de la socialización. En
este contexto, se ha realizado una investigación cuyo objetivo fue
determinar los usos, valoraciones y principales problemas que
presentan los espacios públicos para los habitantes de barrios de
vivienda social construidos bajo el alero de Un Techo para Chile.

El presente documento es el segundo de una serie de tres infor-

mes.

Palabras claves: Barrio, Vivienda social, Espacio público,

Valoración, Uso, Apropiación, Mantención, Financiamiento,
Capital Social

2

Introducción
El año 2006 en nuestro país se implementa una nueva polí-
tica habitacional que se orienta principalmente a asegurar
una mejor calidad de vida, mediante la intervención y la
participación de las familias en el proceso de obtención de
la vivienda (Brain et al, 2007). Si bien uno de los objetivos
principales de la nueva política habitacional, sigue siendo
disminuir el déficit habitacional, éste va acompañado por
la preocupación de la calidad de las viviendas, la manten-
ción de redes sociales de integración, la conformación de
barrio y la promoción de organizaciones sociales de los
propios pobladores, entre otros.
La nueva política habitacional vigente concede una mayor
importancia a la injerencia de los miembros de la comuni-
dad durante los procesos de postulación a sus viviendas
definitivas, y para que ésta se lleve a cabo, una familia –o
conjunto de familias- debe postular y participar de manera
activa en la conformación del proyecto, en conjunto con
una Entidad de Gestión Inmobiliaria Social (EGIS). Uno de
los objetivos de esta nueva forma de postulación es incen-
tivar a que las familias se comprometan e integren en el
El Espacio público en conjuntos de vivienda social de UTPCH.
diseño, desarrollo e implementación de las viviendas.
En esta nueva política, ya no sólo se observa la calidad de
la vivienda, “sino también la calidad del barrio en el que se
insertan las viviendas” (Segovia, 2005). “Esta problemática
ha sido abordada sobre todo desde un enfoque de espa-
cio público, con un fuerte énfasis en los problemas de di-
seño urbano de las villas” (Skewes, 2005).
Por otra parte, en el desarrollo de un proyecto habitacio-
nal, se está obligado por ley -Ley General de Urbanismo y
Protecciones- a ceder una cantidad de áreas verdes, circu-
laciones y equipamientos, proporcional a la cantidad de
pobladores y de la densidad del conjunto habitacional.
Sin embargo, muchos estudios coinciden en que esto no
implica necesariamente que dichos metros cuadrados es-
tén organizados de manera adecuada espacialmente, que
conformen espacios públicos de calidad ni que se asegure
su futuro mantenimiento.
Lo que observamos hoy en la mayoría de los barrios vul-
nerables, son espacios comunes que son cerrados como
patios privados, y que son mantenidos y cuidados por
los propietarios. Sin embargo, en los espacios que son de
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Principales problemas de los espacios públicos:
Uso, mantención, financiamiento y diseño.
todos pero de nadie al mismo tiempo, no son cuidados
ni denotan una preocupación por ser mantenidos. ¿Qué
hace que la gente priorice el espacio privado o al espacio
público? ¿Por qué sus habitantes no sienten como parte
de su propiedad el espacio público que se extiende desde
el límite de su vivienda hacia el exterior?
Los resultados de la investigación presentada se fundan
sobre la idea de que los espacios públicos son una instan-
cia fundamental para la integración de las personas y el
fortalecimiento del sentimiento de comunidad entre los
habitantes. En este sentido, es importante destacar que
las prácticas que se desarrollan en los espacios públicos
adquieren significados, valoraciones y usos diferentes
para las distintas personas y grupos, las que en conjunto
constituyen un reflejo de la integración social y una pro-
longación del sentido de pertenencia no sólo al barrio sino
que a la sociedad en su conjunto. “Diversos aprendizajes
muestran que el grado o nivel de sociabilidad e integra-
ción en los espacios públicos de un barrio sería reflejo de
la instalación de una confianza común, lo que contribuiría
a una mayor percepción de seguridad; la autovaloración
de la vida personal y social en un hábitat específico estaría

vinculada al grado de identificación espacial que se tenga
con el espacio público de éste” (Segovia y Jordán, 2005).
El estudio llevado a cabo procura dilucidar cuáles son las
diferencias que se observan respecto del espacio público
en los dos tipos de conjuntos habitacionales con los que
trabaja Un techo para Chile: condominio privado y mixto,
a modo de esclarecer cuáles son los beneficios y perjuicios
que cada una de estas modalidades en términos del uso,
apropiación y mantención de los espacios públicos exis-
tentes. Esa información puede ser muy útil para las EGIS a
la hora de proponer y decidir qué tipo de conjunto habita-
cional conformar en conjunto con las familias.
Complementariamente, busca aportar al debate que se ha
generado en el último tiempo respecto de la creación de
una política de espacios públicos, mediante la implemen-
tación del programa de recuperación de barrios: “Quiero
mi barrio”. Este programa tiene por objetivo “contribuir al
mejoramiento de la calidad de vida de los habitantes de
barrios, que presentan problemas de deterioro urbano y
vulnerabilidad social, a través de un proceso participativo
de recuperación de los espacio públicos y los entornos ur-
El Espacio público en conjuntos de vivienda social de UTPCH.
banos de las familias” en doscientos barrios en todo Chile
(Quiero mi Barrio, 2007).
En el marco de este programa de recuperación de barrios
vulnerables, el énfasis está puesto en la apropiación y re-
cuperación de estos espacios, los que en conjunto con
relaciones sociales fortalecidas y una mayor integración
social y urbana, serían determinantes para mejorar el en-
torno barrial (Quiero mi barrio, 2007). Este enfoque inte-
gra el entorno barrial, como parte esencial para la solución
habitacional y la calidad de vida. Lo anterior se explicaría
por la existencia de barrios, en donde aún no se ha su-
perado completamente la precariedad de las viviendas,
y los espacios al interior de ella siguen siendo reducidos.
Por lo tanto, son los lugares públicos en común los que se
convierten en el centro de la socialización y desarrollo de
redes sociales.
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Principales problemas de los espacios públicos:
Uso, mantención, financiamiento y diseño.
Pregunta de investigación
¿Cuáles son las formas predominantes de apropiación y
uso de los espacios públicos en los conjuntos habitacio-
nales de vivienda social de UTPCH?
Objetivo general:
Determinar las formas de apropiación y uso de los espa-
cios públicos en los conjuntos habitacionales de vivienda
social de UTPCH.
Objetivos Específicos:
1. Determinar las valoraciones y usos que tienen los habi-
tantes de los espacios públicos del barrio.
2. Indagar en los principales problemas generados en los
barrios respecto a la mantención de los espacios públicos.
3. Determinar si existe una relación entre un mayor uso de
los espacios públicos y el aumento del capital social en los
habitantes de los barrios de vivienda social.
 El Espacio público en conjuntos de vivienda social de UTPCH.

Principales problemas de los espacios públicos:

Uso, mantención, financiamiento y diseño.

Aspectos metodológicos
Tabla Nº1: Muestra entrevistas
La investigación realizada fue de carácter exploratorio-
descriptivo, con aplicación de metodología tanto cuali-
tativa –entrevistas a habitantes mayores de 18 años, ob-
servación no participante y fotografías- como cuantitativa
-encuesta a mayores de 18 años-.
Universo: Habitantes de todos los barrios de vivienda so-
cial en los que UTPCH ha realizado acompañamiento du-
rante el proceso de postulación a la vivienda, específica-
mente, en la comuna de Renca.

Ambas muestras se segmentaron en base a los criterios de Tabla Nº2: Muestra encuestas
régimen habitacional -se estudiaron dos modalidades de
propiedad, con las que trabaja UTPCH, condominio y mix-
to- y edad. La muestra de entrevista siguió el criterio de sa-
turación de información y la muestra de encuesta conside-
ra una muestra representativa de los habitantes mayores
de 18 años de los cuatro barrios, con una confiabilidad del
95% y un error del 5%. En cada barrio se encuestó aleato-
riamente a un número proporcional al total de habitantes
mayores de 18 años. Las muestras de entrevistas y encues-
tas se desglosan en las tablas Nº1 y 2, respectivamente:

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 El Espacio público en conjuntos de vivienda social de UTPCH.

Principales problemas de los espacios públicos:

Uso, mantención, financiamiento y diseño.

Principales resultados deberse a que los padres no se preocupan de enseñar y

A continuación se expondrán los principales resultados
obtenidos. Los resultados serán entregados en tres series,
siendo éste documento el segundo de ellos, y en el que se
abordan los problemas que presentan los espacios públi-
cos, específicamente referidos a la mantención, el diseño,
y el financiamiento, entre otros.
Mantención de los espacios públicos
La mantención es uno de los principales problemas que se
detectan en los diferentes barrios. Los principales elemen-
tos dañados en el espacio público, son los juegos, árboles
(pequeños, recién plantados) y las pocas áreas verdes que
existen. Los principales actores identificados como los res-
ponsables, son los niños.
educar a sus hijos. En palabras de los mismos vecinos, esto
podría cambiar si es que la gente se preocupara de cuidar,
limpiar y mantener los espacios de toda la comunidad,
fundando así un sentimiento de responsabilidad y apro-
piación del barrio.
“Para que sean sustentables se deben cuidar los juegos,
la plaza, la cancha etc. debe comenzar por cada uno, o
mejor dicho por los padres educando a sus hijos para
que ellos cuiden los espacios de todos como si fueran de
ellos.”
(Hombre de 35 años. Barrio Nuestros Sueños)
“Que todos los cuidemos para que no se ensucie. Si, si los
cuido. También los siento como míos, si vivo acá.”
(Adolescente mujer de 14 años. Barrio Eben-Ezer)
“Porque la gente está desconforme entonces no cuidan
nada. Trabajando en conjunto y poner las cosas bien
claras, que la gente cuide las cosas.”
(Mujer de 40 años. Barrio Eben-Ezer)
“Ni siquiera los vecinos se preocupan de mantener los
espacios, la calle está llena de basura, lleno de caca de
perro, realmente asqueroso.”
(Mujer de 31 años. Barrio Nuestros Sueños)
Gráfico Nº1: Evaluación de la matención de los espacios
públicos de barrios en vivienda social.

“Los niños rompen los árboles, no los cuidan. No sé si se
ha hecho algo para que lo dejen de hacer.”
(Niña de 11 años. Barrio Eben-Ezer)
Según los habitantes entrevistados, lo anterior podría
La mala mantención, la disconformidad con el espacio ini-
cial tal y cual como se entregó, la poca claridad y acuerdo
sobre cómo se organiza la limpieza y el fracaso de iniciati-
vas personales, terminan con la toma de espacio públicos
y el cuidado individual.
Elaboración propia N= 186
6

El primer gráfico expresa que un 34% evalúa la manten-
cion de los espacios públicos de su barrio como ni buena
ni mala, un 35% de ellos la evalúa como buena o muy bue-
na, y un 25% como mala o muy mala.
Al preguntarle a los habitantes de lo barrios quién debie-
ra hacerse responsable de la mantención de los espacios
públicos del barrio, un 43% afirmó que deberían ser los
vecinos, un 25% el municipio, un 21% la junta de vecinos
y sólo un 10% consideró necesario crear una comisión es-
pecial para este asunto.
Gráfico Nº2: Atribución de responsabilidad de la manten-
ción de los espacios públicos del barrio.
El Espacio público en conjuntos de vivienda social de UTPCH.
Organización comunitaria
La organización comunitaria aparece como una de las po-
sibles soluciones al problema de la mantención. Al respec-
to, se evaluó de que manera las comunidades se organizan
con el fin de lograr una mejor mantención de sus espacios
públicos.
En el barrio Amankay, los entrevistados relatan tener un
problema en la mantención de los espacios públicos. Esto
porque existe un sector del barrio, que no ha logrado or-
ganizarse para limpiar, barrer y mantener el pasto. Ese sec-
tor está cercano a las viviendas del grupo de los allegados,
que no han logrado ponerse de acuerdo. Este problema en
la organización remite nuevamente a la existencia de dos
grupos en el barrio.
“No llegan a acuerdos porque se vinieron a conocer acá,
no son del campamento como nosotros. Es como que
fueran dos pasajes diferentes, uno no tiene nada que
ver con el otro. Podrían hacer una organización entre
esos vecinos y poner a gente que se encargue de limpiar,
barrer y mantener el pasto; pero eso ya lo tendrían que
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Principales problemas de los espacios públicos:
Uso, mantención, financiamiento y diseño.
ver ellos, porque a nosotros no tenemos esos problemas
de este lado.”
(Hombre de 22 años. Barrio Amankay)
Para el barrio Eben-Ezer, pareciera que la organización co-
munitaria se encuentra bastante desarrollada, existiendo
una directiva y asambleas periódicas con el propósito de
lograr objetivos en provecho de toda la comunidad. Al res-
pecto una dirigente recalca:
“Y yo le digo a la gente, si lo podemos hacer pero
tenemos que unirnos como asamblea y decidirlo en la
asamblea, porque hay un estatuto, pero el estatuto está,
está ahí y nosotros como gente tenemos que unirnos y si
querimos algo diferente esta la asamblea, en la asamblea
se decide y en la asamblea lo que decida es ley pa la
gente.”
(Mujer de 41 años. Barrio Eben-Ezer)
En Antumalal la organización comunitaria se ha conver-
tido en una de sus mayores fortalezas. En este barrio la
directiva ha realizado actividades y ha emprendido pro-
yectos para toda la comunidad, que han resultado en su

mayoría exitosos. Esto ha fortalecido la confianza de la co-
munidad hacia la directiva y entre los miembros de ella
misma.
“Esta todo organizado si quieren ocupar la plaza se
anotan y listo… no hay muchos problemas. Si, se hace
harto… se hacen las reuniones, después las actividades
para recaudar los fondos”
(Hombre de 62 años. Barrio Antumalal)
“Mira hay un grupo… yo no sé quiénes son pero hay un
grupo que es el que hizo la cancha que pidió tanta ayuda
y ganó el proyecto de poder hacerse la cancha.”
(Mujer de 64 años. Barrio Antumalal)
La situación de Nuestros Sueños es completamente
opuesta. La razón principal es que la directiva de este ba-
rrio está completamente disuelta y es casi inexistente. Al
comienzo del proyecto el hecho de adquirir la vivienda
definitiva motivó a la directiva y a sus habitantes a utili-
zar y potenciar las instancias de participación comunitaria.
No obstante una vez que obtuvieron las viviendas, sólo se
realizó una reunión y desde ahí en adelante que ya no se
El Espacio público en conjuntos de vivienda social de UTPCH.
han realizado más asambleas. Se observa que desde ese
entonces existe cierta incertidumbre en el barrio, respecto
a las cuotas (que muy pocos vecinos han pagado) y a la
manera de resolver las problemáticas que han surgido en
este período.
“Más encima no tenemos a quien reclamarle, ni pedir
ayuda, estamos completamente al aire. Además antes de
venirnos a vivir había dirigente, ahora las cosas son poco
claras, algunos piensan que hay dirigentes otros dicen
que no. Ya no se hacen reuniones, no se conversa nada de
la comunidad”
(Mujer de 31 años. Barrio Nuestros Sueños)
“De que llegamos acá, fue la última reunión, o sea cuando
nos juntamos todos fue cuando nos entregaron las llaves
y de ahí que no se ha pronunciado la directiva”
(Mujer de 49 años. Barrio Nuestros Sueños)
“Ahora la directiva del barrio está bien disuelta y hace
tiempo que no se toman decisiones, no sólo por el tema
de espacios públicos si no que en todos los problemas
de la comunidad. Falta más organización y que haya una
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Principales problemas de los espacios públicos:
Uso, mantención, financiamiento y diseño.
directiva de verdad”
(Hombre de 52 años. Barrio Nuestros Sueños)
Es importante destacar que la participación comunitaria
se perfila como uno de los caminos más eficientes para ha-
cer frente a los problemas de mantención dignosticados
en los espacios públicos de los barrios. Sólo allí donde la
comunidad efectivamente participe -ya sea en mesas de
trabajo o asambleas- los dirigentes podrán recoger sus in-
quietudes y actuar consecuentemente.
Financiamiento
Los habitantes de Amankay y Eben-Ezer, pertenecen a un
régimen de tipo mixto1. En cuanto al financiamiento de los
espacios públicos en los barrios mixtos, se ha podido ob-
servar que los habitantes tienen un conocimiento bastan-
te deficiente, pues no identifican la presencia y el apoyo
del municipio en esta materia y sólo reconocen los aportes
financieros de la comunidad.
1 En el régimen habitacional de tipo mixto, tanto la responsabi-
lidad de financiamiento como la manetención de los espacios
públicos es compartida entre el municipio y la comunidad.
 El Espacio público en conjuntos de vivienda social de UTPCH.

Principales problemas de los espacios públicos:

Uso, mantención, financiamiento y diseño.

Algunos problemas en esta área se han provocado por el
incumplimiento de las cuotas y también del reglamento
de co-propiedad que se creó para el barrio.
“Sí, ha habido problemas, ya que no todos cumplen los
estatutos establecidos y no nos respetamos entre noso-
tros. Hay tomas de terreno, lo primero sería devolverlo. El
condominio tiene una cuota de mil pesos por residente
para poder hacer cosas”
(Mujer de 41 años. Barrio Eben-Ezer)
En este barrio, la mayoría de las confusiones se debían a la
disolución de la directiva, pues la cuota que se había fijado
en un inicio jamás se pagó y actualmente la mantención
está a merced de cada vecino.
“Mira se quedó de acuerdo de poner una cuota mensual
que no iba a ser mucha para no se, para gastos de la mis-
ma comunidad, pero como no se ha hecho reunión no se
sabe cuánto uno tiene que pagar ni cuando, nada.”
(Mujer de 49 años. Barrio Nuestros Sueños)
Al respecto se preguntó a los encuestados si es que sabían
quién era el encargado de financiar la mantención de los
espacios públicos del barrio. En el gráfico Nº3 se presentan
los resultados mas relevantes.
Gráfico Nº3: Conocimiento respecto del responsable de la
mantención de los espacios públicos.

Antumalal y Nuestros Sueños se encuentran bajo un ré-
gimen de propiedad de condominio2. En Nuestros Sue-
ños, los vecinos no conocen del todo las características
de este tipo de régimen de propiedad, y por lo tanto se
crean vacíos respecto de quien debe ser el responsable de
la mantenciñon, la manera en que se estableció la cuota, la
capacidad de la directiva de asegurar el pago de todos los
vecinos, entre otras materias.
2 En un régimen de tipo condominio, son los habitantes del
barrio los encargados de la mantención y financiemiento de los
espacio públicos pertenecientes al condominio. En este tipo de
barrios, existe un reglamento de copropiedad que establece las
responsabilidades -tanto financieras como en la mantención y
cuidado- de los espacios públicos comunes.
La percepción para el caso de Antumalal era un poco más
clara y cercana a la de su régimen. Reconocían que sólo
ellos mantenían los espacios públicos, por medio de la
cuota que todos pagaban. Su preocupación estaba en ob-
tener información respecto a cómo y en qué se utilizaba
el dinero de la comunidad.
“Si la plata la estoy poniendo yo, sí me gustaría saber Al respecto, se observa que un preocupante 49% de los
todo el rato en qué se está usando la plata. Y si no la estoy vecinos no sabe quién financia la mantención de estos es-
poniendo yo, igual es bueno saber una vez al mes para pacios, un 28% reconoce que el responsable es la junta de
estar enterado de lo que pasa en el condominio.” vecinos, un 15% piensa que era el municipio, un 6% le atri-
(Hombre 52 años. Barrio Nuestros Sueños) buye la responsabilidad a ambos. Esto expresa la falta de
9

infromación que tienen los vecinos respecto del regimen
de propiedad bajo el que se encuentran.
Percepción de Seguridad
Respecto a la percepción de seguridad en los barrios, se
observan situaciones bastante distintas: En Amankay hay
una división en esta materia. El grupo que venía del cam-
pamento perciben el barrio como seguro, posiblemente
debido a que se conocen hace tiempo y han logrado desa-
rrollar cierta confianza que les permite saber que nadie va
a provocar daño, ni robo o violencia.
“Es muy seguro porque es toda gente que conocemos
hace años. La gente es tranquila. No es tan peligroso
como otros barrios. Es toda gente humilde, que viene
de campamentos y personas que viven dignos, no hay
problema con los vecinos.”
(Joven hombre de 22 años. Barrio Amankay)
Para aquellos que eran allegados, la percepción es com-
pletamente diferente pues no se conocen entre ellos ni
tampoco con los del campamento. Para ellos, si bien el
El Espacio público en conjuntos de vivienda social de UTPCH.
barrio es seguro se debe más a que el barrio está cerrado y
que hasta el momento no ha ocurrido nada.
“Es seguro, por lo menos ahora no ha pasado nada. Lo
más inseguro está afuera del condominio.”
(Mujer de 18 años. Barrio Eben-Ezer)
“No hay peligro uno se siente seguro pero está cerrado.”
(Mujer de 61 años. Barrio Amankay)
En Eben-Ezer, niños y jóvenes se sienten seguros, pero en
el grupo de los adultos las percepciones son más diversas.
En general y en comparación a los barrios donde habita-
ban antes, la mayoría siente que el barrio actual es más
seguro. La casa sigue siendo el lugar más seguro y la im-
presión general es que fuera del barrio es más peligroso e
inseguro.
En algunos barrios es común que los vecinos sugieran la
instalación de una reja que restrinja el acceso al barrio de
los vecinos. Aunque todos reconocen que hasta el mo-
mento no ha ocurrido ninguna situación que lo amerite.
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Principales problemas de los espacios públicos:
Uso, mantención, financiamiento y diseño.
“El lugar más seguro es la casa y el espacio en sí como la
sede o los juegos. El más inseguro son los alrededores del
barrio, por eso es clave que pongan una reja para que los
vecinos no se metan en el barrio.”
(Mujer de 52 años. Barrio Eben-Ezer)
“Aquí hay gente y volaos pero no molestan al resto de
la gente, pero nunca he escuchado que alguien se ha
muerto o que han matado alguien(haciendo referencia al
otro barrio donde vivía). Si es un barrio seguro”
(Mujer de 51 años. Barrio Eben-Ezer)
La percepción de seguridad en los espacios públicos de
Antumalal, es un poco menor a la de los barrios anteriores,
pues se detecta la presencia de un grupo llamado “los do-
mésticos” que habita en el barrio, que se dedica a robar y
delinquir en el barrio, por lo que son percibidos como pe-
ligrosos y el sector donde residen como un lugar inseguro.
E: ¿consideras que el barrio es seguro?
“Sí, es seguro, acá si no fuera por los domésticos del
frente”.
E: ¿Quiénes son ellos?
 El Espacio público en conjuntos de vivienda social de UTPCH.

Principales problemas de los espacios públicos:

Uso, mantención, financiamiento y diseño.

“ Los domeeeeesticos po’ los que andan robando a los de
por acá”
(Hombre de 15 años. Barrio Antumalal)
“No, o sea acá es seguro (apuntando a su pasaje y los
pasajes aledaños) pero si vemos en general con los del
frente no podría decir que sí es seguro (sector donde
habitan los domésticos)”
(Mujer de 13 años. Barrio Antumalal)
El siguiente gráfico retrata cuán seguros se sienten los en-
cuestados en su casa cuando están solos y es de día. Se ob-
serva que un 54% de los encuestados afirmó que se sentía
muy seguro en su casa y un 26% se sentía bastante seguro.
Gráfico Nº4: Percepción de seguridad estando solo en la
casa de día.
no existe realmente una tendencia marcada en cuanto a
la percepción de seguridad en esta situación. Se observa
que un 27% de los vecinos declaran sentirse muy seguros,
mientras que un 34% de ellos se sienten poco o nada se-
guros.
Gráfico Nº5: Percepción de seguridad caminando por el
barrio al anochecer.

¿Me podría decir cuán seguro se siente

En Nuestros Sueños existe inseguridad pero no se debe a caminando solo por su barrio al anochecer?
la ocurrencia de situaciones peligrosas. Se hace referencia
11%
a la casa como el lugar más seguro y a la instalación de
27%
rejas para asegurar este asunto. MUY SEGURO
23%
BASTANTE SEGURO

“No tenemos reja, asique no puede ser un barrio seguro, ALGO SEGURO
POCO SEGURO
el que quiera puede entrar”
18% NADA SEGURO
(Mujer 31 años. Barrio Nuestros Sueños)
21%

“Sería bueno una reja, uno que va a ser más seguro,
porque cada uno va a tener sus llaves y no va a pasar todo
el dÍa abierto”
(Mujer 49 años. Barrio Nuestros Sueños)
Elaboración propia. N=186
Elaboración propia. N=186
El gráfico Nº5 revela información que contribuye a escla-
recer la percepción de seguridad en los espacios públicos
en el barrio. Del total de los encuestados se observa que

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Robos, asaltos y vandalismo
La experiencia de haber sido asaltado es un indicador
bastante fuerte a la hora de medir la seguridad efectiva
de los barrios. Al respecto, observamos que la mayoría de
los entrevistados no ha sido víctima de un robo o asalto
en el barrio, en los últimos 12 meses, ni tampoco sabe de
alguien del barrio a quien le hubiese sucedido. Inclusive
algunos mencionan que nunca en su vida habían vivido
esa situación.
“Gracias a Dios no, como no salgo mucho a la calle tengo
menos riesgos.”
(Hombre de 52 años. Barrio Nuestros Sueños)
Solamente cuatro personas del total de entrevistados
habían sido robados o asaltados. Dos de ellas fuera del
barrio, uno en el centro de Santiago y otro en la misma
comuna (Renca).
“Sí, cuando recién llegue a esta población me pusieron
una pistola en la cabeza y me quitaron la chaqueta, el
celular y el gorro ahh y una cadena y las 5 y media de la
El Espacio público en conjuntos de vivienda social de UTPCH.
Principales problemas de los espacios públicos:
Uso, mantención, financiamiento y diseño.
tarde acá en la otra población. Pero nosotros ya arregla- Presencia de pandillas
mos.”
(Hombre de 15 años. Barrio Antumalal) La presencia de pandillas o grupos delictuales reconoci-
dos como tal por los vecinos, es otro indicador que puede
Los datos de la encuesta reafirman las opiniones particula- ser útil para evaluar la seguridad de los barrios de manera
res de los entrevistados. Del total de vecinos de los cuatro más concreta. Al respecto, sólo dos personas detectan la
barrios, un 77% sostiene que ni a ellos ni a conocidos les existencia de pandillas propiamente tal. Uno de ellos es el
habían robado en la calle y un 91% no ha sufrido robos en joven entrevistado que mencionó a los “domésticos” y otro
su hogar. (Ver Gráfico Nº6) joven reconoce que en el barrio existen distintas pandillas
pequeñas, o grupos violentos que pelean entre ellos.
Gráfico Nº6: Experiencia de haber sido asaltado en su casa
o en la calle en los últimos 12 meses. “No es malo igual decir son todos los del “frente”. Porque
de repente nosotros salimos y están ahí y no hacen na’
En los últimos 12 meses, usted o algún
conocido, ha sufrido robos en su casa o en la pero de repente nos ven a nosotros y hacen harto. (refi-
calle? riéndose a los “domésticos”)”
91% (Hombre 15 años. Barrio Antumalal)
100% 77%
80%
60% SI “Los cabros aquí porque uno los mira feo y ellos al tiro te
23%
40%
9% NO
miran “y qué loco que pasa” y empiezan así las peleas, son
20%
0%
violentos (...) acá hay muchas como pandillas o no sé si
EN LA PROPIA CASA EN LA CALLE pandilla pero grupitos po’ y se llevan mal.
(Hombre 13 años. Barrio Antumalal)
Elaboración propia. N=186
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Principales problemas de los espacios públicos:

Uso, mantención, financiamiento y diseño.

Es interesante conocer la imagen que los propios vecinos

“No hay pandillas, pero sí he visto peleas de jóvenes, creo
que de unos 17 o 18 años. Algunos jóvenes son violentos,
he visto varias peleas callejeras.”
(Mujer de 49 años. Barrio Nuestros Sueños)
Consumo de alcohol y drogas
El consumo de alcohol y drogas es otro indicador que
muestra la autoimagen que tienen los vecinos del lugar en
que viven. En este contexto, se les preguntó que tan co-
munes era ver a gente tomando alcohol y/o consumiendo
drogas en las calles del barrio. En este ámbito los entrevis-
tados de Amankay observan que estas situaciones no ocu-
rren en su barrio. Existe claridad en que esas actividades
no son para realizarlas en los espacios públicos.
El caso de Eben-Ezer es bastante distinto. En este barrio
tienen de su barrio. Con este objetivo, se les ha pregunta-
la mayoría observa que el consumo de alcohol y drogas
do si ciertas situaciones calificadas como “situaciones de
son actividades comunes en el barrio y sobre todo entre
riesgo” son comunes en sus barrios. Al respecto, vemos el
los jóvenes. Por lo general estas situaciones se ven en los
gráfico Nº7 muestra que un 61% de los vecinos reconoce
espacios públicos acentuándose en la noche y los fines de
como algo común en su barrio el consumo de drogas en
semana.
la calle. Un 52% piensa que en su barrio es común ver a
gente consumienrdo alcohol en las calles y un 47% piensa
“Los jóvenes, porque ellos se aburren y creen que lo más
que en su barrio son comunes los jóvenes vagando y las
entretenido es tomar. (...) se ponen a tomar alcohol y a
balaceras y riñas callejeras. Las conductas de riesgo me-
consumir drogas.”
nos comunes a ojos de los vecinos son los robos, asaltos,
(Mujer de 40 años. Barrio Eben-Ezer)
vandalismo y ataques a la propiedad privada.
Gráfico Nº7: Presencia de situaciones de riesgo en el barrio.
¿Son comunes estas situaciones en su barrio?
% de respuestas afirmativas.

“Ni las plazas ni la pérgola están para que se vayan a Consumo de drogas en la calle 61%
52%
tomar o a consumir drogas, y eso se cumple.” Consumo de alcohol en la calle
Jovenes vagando en la calle 47%
(Mujer de 33 años. Barrio Amankay) 47%
Balaceras, riñas callejeras
Trafico de drogas 26%

“No se juntan los jóvenes a tomar ni carretear, se ve más Robos y asaltos 25%
Vandalismo 24%
mugre, pero no restos de gente tomando.”
(Mujer de 61 años. Barrio Amankay) 0% 10% 20% 30% 40% 50% 60% 70%

13

Conclusiones
La mantención es uno de los principales problemas que
los vecinos identifican en los espacios públicos muchas
veces se encuentran mal cuidados y deteriorados. Esta
situación podría explicarse por la poca responsabilidad
y la falta de apropiación de los espacios. Al respecto se
indica que la educación en el hogar es importante para
comprender que estos espacios, son de todos y en conse-
cuencia deben ser cuidados por todos.
Pareciera ser que el financiamiento en sí mismo no es la
única causa de los problemas de mantenimiento. De he-
cho, hemos podido constatar que en algunos barrios efec-
tivamente la cuota pactada es pagada por la mayoría de
los vecinos. Sin embargo, muchos problemas se presentan
porque no existe claridad en qué y cómo se ocupa exac-
tamente.
Se plantea como hipótesis que para solucionar los proble-
mas de mantención es relevante poner más énfasis en la
organización, la participación y en el rol de la comunidad,
que el financiamiento. Esto no quiere decir que el financia-
El Espacio público en conjuntos de vivienda social de UTPCH.
miento es innecesario, por el contrario sirve para adquirir
recursos y bienes comunitarios de naturaleza material que
no existen en los barrios. Se propone que en primera ins-
tancia debe ser la comunidad la que resuelva los proble-
mas procurando velar por el bien común y decideaadop-
tando distintas estrategias, entre las cuales puede estar
el financiamiento, u otras solución específica para cada
problema particular del barrio.
Se evidencia que la mantención de los espacios, también
está ligada a la falta de servicios y equipamiento. Entre
ellos se observa la inexistencia de áreas verdes, poca ilu-
minación, calles y veredas sin pavimento. La presencia de
espacios públicos que desde un inicio están deteriorados
o que no cuentan con esos servicios y equipamiento ter-
mina por desmotivar el cuidado y la mantención de dichos
espacios.
La sensación de seguridad o inseguridad, está constituida
a partir de la oposición de espacios en el barrio. En primer
lugar está la contraposición entre la casa y el barrio. Y en
segundo lugar está el barrio en oposición a lo que está
fuera de él (sectores aledaños dentro de la comuna). El
14
Principales problemas de los espacios públicos:
Uso, mantención, financiamiento y diseño.
lugar más seguro siempre es la casa, luego los espacios
públicos que constituyen el entorno inmediato de las vi-
viendas, usualmente percibidos como lugares seguros
pero en una proporción considerablemente menor al de
la vivienda. Por último todo lo que se consideraba como
“fuera” del barrio o más allá de los límites de él, es percibi-
do en general como un lugar extraño, desconocido, peli-
groso e inseguro.
Este orden que construyen los habitantes de los barrios
está relacionado con las restricciones y barreras que exis-
ten en la vivienda, el barrio y lo que está fuera de él. Es así
como la casa es el lugar más seguro pues es el lugar pri-
vado y de uso exclusivo para los miembros de la familia o
quienes ahí habiten. El núcleo familiar comprende un gra-
do de confianza tal que provee de seguridad ese espacio.
El barrio se percibe con menor seguridad a la vivienda
pues todas las personas que habiten en las viviendas de
ese barrio, circulan libremente por los espacios públicos.
Para que este espacio se perciba como seguro, los habitan-
tes de los barrios consideran que lo más importante es la
confianza, la restricción y la vigilancia constante. La con-
fianza es entendida como una construcción que principal-
mente se hace a base del conocimiento que existe entre
los vecinos. En cuanto a la restricción y la vigilancia, son
considerados como elementos fundamentales a la hora de
mantener y resguardar la seguridad del barrio y del hogar.
Fundamentalmente la manera en que se concretizan am-
bas (restricción y vigilancia), es a partir de la instalación de
rejas, protecciones, cerraduras, cámaras y otros elementos.
De los cuatro barrios estudiados, dos estaban cerrados con
rejas y dos no. Pero en todos sin ninguna excepción, se ex-
presaba que esos elementos eran por antonomasia un si-
nónimo de seguridad y deseables de adquirir en el barrio.
Por último todo aquello que estaba más allá de los límites
del barrio, fuera de él, era representado como peligroso,
por la ausencia de la mayoría de los elementos menciona-
dos anteriormente.
En el caso de robos y asaltos, eran circunstancias poco ha-
bituales e incluso reiteradas veces ninguno de los habitan-
tes del barrio había sido víctima de ellas. No así, los actos
de vandalismo que eran recurrentes en espacios públicos,
atrofiando y deteriorando el equipamiento de éstos. En
concordancia con esto, se detecta la existencia de grupos rrios están más preocupados por adquirir elementos físi-
violentos de jóvenes, que eran responsables de actos de cos que aseguren su seguridad, que por forjar relaciones
vandalismo, como también de rencillas y peleas callejeras. de confianza entre los vecinos.
El consumo de drogas y alcohol en los espacios públicos,
es una actividad común sobre todo entre los jóvenes, que En el tercer informe de esta serie se abordará la relación
se reúnen en las noches cuando es más fácil pasar des- entre el uso del espacio público de los barrios de vivienda
apercibidos. Se comprende que estas actividades son ile- social, y la formación de capital social entre lo vecinos.
gales de realizar en los espacios públicos, pero igualmente
se siguen realizando.
Aquellos que se sienten seguros en sus barrios, es porque
declaran tener confianza y conocer a la mayoría de sus ve-
cinos. Mientras que aquellos que no tienen confianza y se
desconocen entre ellos, reconocen que esa es la razón por
la que están inseguros. En general la percepción de segu-
ridad aumenta cuando el acceso al barrio está restringido
por medio de rejas y portones o vigilancia. Se expresa que
en comparación al barrio anterior donde vivían, todos los
barrios actuales son más seguros.
Aunque se reconoce que la desconfianza, el desconoci-
miento y la falta de relación entre los vecinos contribuyen
a la percepción de inseguridad, los habitantes de los ba-
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