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UN MENSAJE A LOS PADRES: por Ken Ham

Uno de mis pasajes favoritos está en Josué capítulo 4, donde leemos el relato de cómo los
Israelitas cruzaron milagrosamente el río Jordán. Dios instruyó a Josué para que tomara
a 12 hombres que recogieran 12 piedras del río y construyeran un memorial: Y habló a
los hijos de Israel, diciendo: Cuando mañana preguntaren vuestros hijos a sus padres, y
dijeren: ¿Qué significan estas piedras? declararéis a vuestros hijos, diciendo: Israel pasó
en seco por este Jordán. Porque Jehová vuestro Dios secó las aguas del Jordán delante de
vosotros, hasta que habíais pasado, a la manera que Jehová vuestro Dios lo había hecho
en el Mar Rojo, el cual secó delante de nosotros hasta que pasamos; para que todos los
pueblos de la tierra conozcan que la mano de Jehová es poderosa; para que temáis a
Jehová vuestro Dios todos los días. – Josué 4:21-24.

Que gran recordatorio, asegurarse de decir a las nuevas generaciones acerca del Señor
para que ellos pudieran conocer Quien es El Dios verdadero. Y también esto sería
testimonio al mundo concerniente al único Dios verdadero. Posteriormente cuando Josué
murió, y toda la generación que estuvo con Josué murió, leemos en Jueces uno de los
pasajes más tristes de la Biblia: Y toda aquella generación también fue reunida a sus
padres. Y se levantó después de ellos otra generación que no conocía a Jehová, ni la obra
que Él había hecho por Israel. Después los hijos de Israel hicieron lo malo ante los ojos
de Jehová, y sirvieron a los baales. Dejaron a Jehová el Dios de sus padres, que los había
sacado de la tierra de Egipto, y se fueron tras otros dioses, los dioses de los pueblos que
estaban en sus alrededores, a los cuales adoraron; y provocaron a ira a Jehová. – Jueces
2:10-12.

¡Los niños que se suponía preguntarían el significado de esas 12 piedras se rebelaron y


adoraron falsos dioses! Esto debería ser una advertencia a nosotros el día de hoy. El Salmo
78 instruye a los padres a enseñar a sus hijos en el conocimiento del Dios verdadero: El
estableció testimonio en Jacob, Y puso ley en Israel, La cual mandó a nuestros padres
Que la notificasen a sus hijos; Para que lo sepa la generación venidera, y los hijos que
nacerán; Y los que se levantarán lo cuenten a sus hijos, A fin de que pongan en Dios su
confianza, Y no se olviden de las obras de Dios; Que guarden sus mandamientos – Salmo
78:5-7 Y posteriormente leemos: Y no sean como sus padres, Generación contumaz y
rebelde; Generación que no dispuso su corazón, Ni fue fiel para con Dios su espíritu. -
Salmo 78:8

Es obvio que estos padres de la antigüedad no obedecieron a Dios y no instruyeron a sus


hijos en el temor del Señor como debían haberlo hecho. Como resultado, ellos perdieron
a la siguiente generación después de Josué. En esencia, esto está pasando en la Iglesia
hoy. Las estadísticas, como las publicadas por el libro de mi co-autoría “Los que ya se
fueron”, hace claro que 2 de cada 3 jóvenes en los Estados Unidos están dejando la Iglesia
para asistir a la universidad y muy pocos regresan. Pew Research en 2010, claramente
mostró una tendencia similar en las Iglesias de USA, con solo 18% de la nueva generación
asistiendo a la Iglesia, comparada con el 56% de la generación anterior.

La investigación realizada para los libros “Los que ya se fueron” y la continuación:


“Listos para Regresar”, muestran claramente que los padres y las Iglesias han fallado en
instruir generaciones que sepan que es lo que creen, porque lo creen, y como defender la
fe cristiana. Tristemente, no hemos criado generaciones que sostengan un verdadero
punto de vista cristiano acerca del mundo. En muchos aspectos, hemos delegado nuestra
responsabilidad dada por Dios de ser cabeza espiritual del hogar y de asegurarnos que el
correcto legado espiritual sea pasado a nuestra siguiente generación. Personalmente creo
que muchos padres necesitan arrepentirse por no invertir el tiempo para instruir a sus
hijos. Ellos han entregado a sus hijos a el mundo (escuelas públicas y redes sociales
mundanas), y a la Iglesia (la cual no enseña apologética, sino que ha comprometido la
Palabra de Dios acerca de la creación en Génesis) como las fuentes primarias de
educación.

Justo como en los días después de Josué, ahora vemos las consecuencias de esta falta de
instrucción y la secularización de esta generación se ha incrementado en un sentimiento
anti-cristiano que ha crecido en la cultura. Si, cuando contemplemos esta realidad cada
día debería ser un triste día del padre. En este día del padre: padres, Nos desafío a todos
nosotros a comprometernos a hacer lo que Dios nos ha mandado hacer en la instrucción
espiritual de nuestros hijos. Después de todo cada niño es un ser humano que vivirá para
siempre ya sea en el cielo o en el infierno, lo cual debería preocupar a cada uno de
nosotros con respecto al tiempo y a los recursos que invertimos en cada uno de nuestros
niños.

Y vosotros, padres, no provoquéis a ira a vuestros hijos, sino criadlos en disciplina y


amonestación del Señor. – Efesios 6:4.

En este día, como también en cualquier otro día del año, recordemos lo que Dios nos ha
mandado concerniente a nuestra responsabilidad para con nuestros hijos.

Gracias por detenerse a leer el artículo y gracias por orar.


Ken Ham.

Publicado originalmente en inglés como “A Sad Father’s Day Message!”, by Ken Ham
Asnwers in Génesis

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