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Según el último estudio del Ministerio de Educación en el año 2010 existen 373, 749 niños o
adolescentes en edad escolar (0-20 años) con algún tipo de discapacidad. Sin embargo, a pesar de
las mejoras, aún el 80% continúa sin acudir a un centro de enseñanza. (Tumes, 2017)
Así mismo acerca de la discapacidad en el Perú, en el 2010 se conoció que la región que
presenta mayor número de niños y adolescentes con discapacidad es Lima (186,451), seguido por
Piura (20,705), La Libertad (18,147), Puno (15,155), Cajamarca (14,813), Cusco (11,720),
Arequipa (11,201) y otras regiones que concentran en total 20, 196 casos. Se espera que luego del
censo efectuado el 22 de octubre del presente año se puedan actualizar las cifras de la población
con discapacidad. (Tumes, 2017)
El Sistema Educativo Peruano ha experimentado en los últimos cuarenta años una serie de
cambios profundos y significativos en las políticas, culturas y prácticas, los cuales se reflejan en
la escuela y en la comunidad educativa para dar respuesta a las necesidades educativas especiales
de los niños, niñas y jóvenes con discapacidad. (Ministerio de Educación, 2012).
ANTES AHORA
Modelo clínico: Modelo social:
Basado en una educación excluyente. Basado en una educación inclusiva.
Se separaba a los alumnos “normales” Cada alumno es singular.
de los que presentaban “problemas”. Se desarrollan las capacidades particulares de cada
Rehabilitar alumnos con problemas. alumno.
Un experto se encargaba del estudiante Un maestro especial colabora con el regular para
fuera del aula. complementar la educación y mejorarla.
Escuela tradicional: Escuela inclusiva:
La INDIVIDUALIZACIÓN La INDIVIDUALIZACIÓN es dar diferentes
significaba ubicar a cada estudiante en ayudas pedagógicas a cada estudiante, según sus
el “tipo” y “nivel” de enseñanza más necesidades en el contexto de enseñanza.
ajustado a su patología.
Ha sido largo el camino de la Educación Especial en la atención a este colectivo, desde las
propuestas basadas en terapias individualizadas, con un enfoque clínico rehabilitador y en
instituciones educativas especiales, totalmente divorciadas de la educación regular prevista para
estudiantes “normales”, hasta la implementación de un modelo social basado en un enfoque de
derechos, siendo el más importante el derecho a una educación de calidad en igualdad de
condiciones y oportunidades, conjuntamente con sus pares, en instituciones educativas regulares
como lo propone la Convención sobre los derechos de las personas con discapacidad en su Art.
24 (ONU2006), ratificado por el Gobierno peruano en el 2007.
CONVENCIÓN SOBRE LOS DERECHOS DE LAS PERSONAS CON DISCAPACIDAD-ONU-2006
Artículo 24: Educación
1. Los Estados Partes reconocen el derecho de las personas con discapacidad a la educación. Con
miras a hacer efectivo este derecho sin discriminación y sobre la base de la igualdad de
oportunidades, los Estados Partes asegurarán un sistema de educación inclusivo a todos los niveles
así como la enseñanza a lo largo de la vida, con miras a:
A- Desarrollar plenamente el potencial humano y el sentido de la dignidad y la autoestima y
reforzar el respeto por los derechos humanos, las libertades fundamentales y la diversidad
humana;
B- Desarrollar al máximo la personalidad, los talentos y la creatividad de las personas con
discapacidad, así como sus aptitudes mentales y físicas;
C- Hacer posible que las personas con discapacidad participen de manera efectiva en una sociedad
libre.
3. Los Estados Partes brindarán a las personas con discapacidad la posibilidad de aprender
habilidades para la vida y desarrollo social, a fin de propiciar su participación plena y en igualdad
de condiciones en la educación y como miembros de la comunidad. A este fin, los Estados Partes
adoptarán las medidas pertinentes, entre ellas:
A- Facilitar el aprendizaje del Braille, la escritura alternativa, otros modos, medios y formatos de
comunicación aumentativos o alternativos y habilidades de orientación y de movilidad, así como
la tutoría y el apoyo entre pares;
B- Facilitar el aprendizaje de la lengua de señas y la promoción de la identidad lingüística de las
personas sordas;
C- Asegurar que la educación de las personas, y en particular los niños y las niñas ciegas, sordas
o sordociegos se imparta en los lenguajes y los modos y medios de comunicación más
apropiados para cada persona y en entornos que permitan alcanzar su máximo desarrollo
académico y social.
4. A fin de contribuir a hacer efectivo este derecho, los Estados Partes adoptarán las medidas
pertinentes para emplear a maestros, incluidos maestros con discapacidad, que estén cualificados
en lengua de señas o Braille y para formar a profesionales y personal que trabajen en todos los
niveles educativos. Esa formación incluirá la toma de conciencia sobre la discapacidad y el uso de
modos, medios y formatos de comunicación aumentativos y alternativos apropiados, y de técnicas y
materiales educativos para apoyar a las personas con discapacidad.
5. Los Estados Partes asegurarán que las personas con discapacidad tengan acceso general a la
educación superior, la formación profesional, la educación para adultos y el aprendizaje durante
toda la vida sin discriminación y en igualdad de condiciones con las demás. A tal fin, los Estados
Partes asegurarán que se realicen ajustes razonables para las personas con discapacidad.
En la década de los 80, la Ley General de la Educación, Ley 23384 (1982), en el capítulo XII
De la Educación Especial, señala que es una modalidad destinada a aquellas personas que por sus
características excepcionales requerían atención diferenciada y abarcaba tanto a quienes adolecían
de “deficiencias mentales u orgánicas” o “desajustes de conducta social”, como también a los que
presentan “condiciones sobresalientes”, siendo uno de sus objetivos principales contribuir a la
formación integral del “excepcional”, así como orientar a la familia y comunidad para su
participación en la identificación, “tratamiento” y reconocimiento de los derechos de las
“personas excepcionales” . En esa década se establecen Centros de Educación Especial–CEE, con
los niveles de educación inicial y primaria, para estudiantes “excepcionales” a partir de los seis
años. Los estudiantes con problemas motores y sensoriales se integraban a los colegios regulares
a partir de la secundaria con el acompañamiento de los Servicios de Apoyo y Complementación
para la Integración del Excepcional – SACIE, y los estudiantes con retardo mental eran orientados
hacia la formación laboral.
Uno de los logros estratégicos en la atención educativa a la población escolar con discapacidad,
talento y superdotación fue la creación de la Dirección Nacional de Educación Básica Especial
(D.S. N° 006-2006-ED), que le dio rango y autonomía frente a la anterior estructura orgánica que
la hacía dependiente de la Dirección Nacional de Educación Inicial y Primaria. Este cambio
permitió el diseño de las políticas de la Educación Básica Especial, así como la formulación de
planes, programas y proyectos con un enfoque inclusivo y transversal al sistema educativo, para
su aplicación a nivel nacional, constituyéndose en un reto la articulación intrasectorial en que
todas las direcciones del sector se articulen para impulsar la educación inclusiva e intersectorial
que brinde atención integral a este segmento de la población escolar, y a partir del 2008 se
adquiere el rango de Dirección General. Asimismo, el MED expide el D.S. 026-2003-ED que
declara la “Década de la Educación Inclusiva 2003-2012”, que establece se lleven a cabo planes,
convenios, programas y proyectos que garanticen la ejecución de acciones que promuevan la
educación inclusiva.
Ley Nº 28044 Ley General de Educación
La Educación Básica Especial (EBE) es la modalidad que atiende, con enfoque inclusivo, a niños, niñas,
adolescentes y jóvenes que presentan necesidades educativas especiales asociadas a discapacidad, talento
y superdotación.
La educación de las personas con necesidades educativas especiales, asociadas a discapacidad, talento y
superdotación, valora la diversidad como un elemento que enriquece a la comunidad y respeta sus
diferencias. Su atención es transversal a todo el sistema educativo, articulándose mediante procesos
flexibles que permitan el acceso, permanencia y logros de aprendizajes, así como la interconexión entre
las etapas, modalidades, niveles y formas de la educación.
Los estudiantes con necesidades educativas especiales, asociadas a discapacidad, incluidos en los
diferentes niveles y modalidades del sistema educativo, son promovidos de grado, tomando en cuenta el
logro de los aprendizajes establecidos en relación con las adaptaciones curriculares previstas y su edad
normativa de escolarización. Su permanencia se flexibiliza hasta un máximo de dos años sobre la edad
normativa correspondiente.
a) Brindar una atención oportuna y de calidad a los niños, niñas, adolescentes y jóvenes con discapacidad
severa y multidiscapacidad.
b) Promover y asegurar el acceso, la permanencia, buen trato y el éxito de los estudiantes con necesidades
educativas especiales asociadas a discapacidad en la Educación Básica y Educación Técnico-Productiva.
c) Garantizar la atención oportuna, en los Programas de Intervención Temprana, a los niños y niñas
menores de 3 años de edad, con discapacidad o en riesgo de adquirirla.
d) Brindar soporte pedagógico, de recursos y materiales, a las instituciones y programas educativos para
la atención de las necesidades educativas especiales asociadas a discapacidad, talento y superdotación, a
través de los Centros de Recursos de la Educación Básica Especial.
Los estudiantes con necesidades educativas especiales asociadas a discapacidad que no hayan tenido
escolaridad previa serán matriculados, de acuerdo con la edad normativa, en el correspondiente grado de
estudios, en Educación Básica o Ciclo Básico de la Educación Técnico-Productiva, siendo responsabilidad
del director regularizar su historial educativo solo con fines pedagógicos. Cuentan con el Asesoramiento
del Servicio de Apoyo y Asesoramiento para la Atención de Necesidades Educativas Especiales - SAANEE.
Los docentes de los Centros de Educación Básica Especial y de las Instituciones Educativas de los diversos
niveles y modalidades que incluyen estudiantes con necesidades educativas especiales asociadas a
discapacidad, establecen las diversificaciones y adaptaciones curriculares individuales en relación a las
características y necesidades especiales de los estudiantes y define la ayuda pertinente, en base a la
evaluación psicopedagógica. La información debe ser registrada de manera individual y permanentemente
actualizada.
La evaluación de los aprendizajes para los estudiantes con necesidades educativas especiales, en todas las
modalidades y niveles del sistema educativo, es flexible, formativa, sistemática, permanente y diferenciada.
Destacan los aspectos cualitativos para verificar los resultados y mejorar la acción educativa. Está en
función de los niveles de logros previstos en las diversificaciones y en las adaptaciones curriculares para
cada estudiante. Debe realizarse con medios, instrumentos, materiales, lenguajes, espacios accesibles y
tiempos más adecuados.
Los documentos oficiales de evaluación se complementarán con un informe sobre las adaptaciones
curriculares efectuadas, de acuerdo con las necesidades educativas especiales, y forman parte del legajo
del estudiante.
Para los que presentan necesidades educativas especiales, se requiere que este servicio sea comprensivo
y flexible, ajustándose a las necesidades educativas asociadas a discapacidad y a quienes presenten talento
y superdotación. Favorece la inclusión de estos estudiantes a su grupo de clase y a la comunidad educativa.
Artículo 82.- Formación docente para la atención de las necesidades educativas especiales
Se orienta a garantizar una educación inclusiva, con calidad y equidad, de estudiantes con necesidades
educativas especiales, asociadas a discapacidad, talento y superdotación. Busca promover, en el docente,
competencias, capacidades y actitudes positivas para la formación de los estudiantes y potenciar su
desenvolvimiento profesional, además de garantizar su calificación en aspectos relacionados con la
identificación y la respuesta educativa.
Las instancias de gestión educativa descentralizada impulsarán acciones intersectoriales para promover
la ejecución de acciones de prevención, sensibilización, difusión y certificación de la discapacidad y la
atención integral, fundamentalmente con los sectores sociales del Estado y la cooperación internacional,
a fin de ampliar las oportunidades de formación integral de los estudiantes con discapacidad.
SUBCAPÍTULO II
a) Centro de Educación Básica Especial (CEBE). Atiende a los estudiantes con necesidades educativas
especiales asociadas a discapacidad severa y multidiscapacidad que, por la naturaleza de sus limitaciones,
no pueden ser atendidos en las instituciones educativas inclusivas de otras modalidades y formas de
educación. Con ello, contribuyen al desarrollo de sus potencialidades, en un ambiente flexible, apropiado
y no restrictivo, mejorando sus posibilidades para lograr una mejor calidad de vida. Incluyen en su
estructura orgánica los Servicios de Apoyo y Asesoramiento para la Atención de las Necesidades
Educativas Especiales (SAANEE), encargados de brindar orientación y acompañamiento a las
instituciones educativas inclusivas en el área de influencia.
b) Programa de Intervención Temprana (PRITE). Brinda atención no escolarizada a los niños menores
de 3 años con discapacidad o en riesgo de adquirirla. Realiza acciones de prevención, detección y atención
oportuna al niño y la niña, la familia y la comunidad para su inclusión a los servicios de la Educación
Inicial de la Educación Básica Regular o a los Centros de Educación Básica Especial, según el caso. Está
a cargo de personal profesional interdisciplinario, con fines de prevención, detección y atención oportuna.
Promueve la participación activa de los padres, o quienes hacen sus veces, e impulsa el acceso oportuno
de los menores a las instituciones de Educación Básica Regular del nivel de Educación Inicial.
Las instituciones de Educación Básica Especial contarán con los recursos humanos necesarios para
cumplir las funciones de asesoramiento y de gestión psicopedagógica para la formación integral de los
estudiantes. Estos profesionales, además de lo establecido en el artículo 56 de la Ley, deben tener
especialización o capacitación para la atención de estudiantes con necesidades educativas especiales,
capacidad de innovación permanente, conocimiento y manejo de estrategias de trabajo individualizado, de
interaprendizaje y de trabajo con la familia y comunidad.
La atención de los estudiantes con necesidades educativas especiales asociados a discapacidad severa en
el Centro de Educación Básica Especial, se brinda en los niveles educativos de Inicial y Primaria. El
tiempo de permanencia de los estudiantes es, como máximo, hasta los veinte (20) años de edad.
Los estudiantes con discapacidad severa y multidiscapacidad con más de 20 años de edad que no han
accedido oportunamente a la escolarización recibirán atención no escolarizada de las instituciones de
Educación Básica Especial, a través de programas y/o módulos elaborados por el equipo de apoyo, con
participación de la familia y la comunidad, a cargo de un profesional del Centro de Educación Básica
Especial, por un periodo no mayor a dos años.
Tumes L. (18 de noviembre del 2017), Explorando la educación especial en el Perú ,Punto
Seguido.Recuperado de https://puntoseguido.upc.edu.pe/explorando-la-educacion-basica-
especial-en-el-
peru/?fbclid=IwAR0MkoEnQuXeMjHx8H1oeCX4qiUIswuyFNngKzmw22vwuVopG9Z2
Dh1qPsY
Ministerio de educación (19 de junio del 2018), Ley que promueve la educación inclusiva,
modifica el artículo 52 e incorpora los artículos 19-a y 62-a en la ley 28044, El
peruano.Recuperado de https://busquedas.elperuano.pe/normaslegales/ley-que-promueve-
la-educacion-inclusiva-modifica-el-articul-ley-n-30797-1662055-2/