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Debido a las reparaciones del manguito de los rotadores pueden ser extremadamente complejos,
la rehabilitación es a menudo extensa, dura de tres a seis meses. Para rehabilitar a los pacientes,
terapeutas ocupacionales utilizan actividades que reflejan las demandas de las ocupaciones de los
pacientes - a diferencia de los fisioterapeutas, que utilizan ejercicios como el principal medio de
rehabilitación. Sin embargo, los terapeutas ocupacionales suelen implementar programas de
entrenamiento con pesas libres durante la fase de fortalecimiento de la rehabilitación.
El primer paso
Una vez que la evaluación se ha completado, los objetivos iniciales de la rehabilitación son para
proteger el tendón reparado, disminuir el dolor y reducir la inflamación en el hombro. El brazo se
inmoviliza en un cabestrillo durante los primeros 5 a 6 semanas después de la cirugía, y un
régimen de medicamentos de terapia fría y anti-inflamatorias generalmente se instituyó.
Una vez que la inflamación ha disminuido, la siguiente fase de la rehabilitación implica gama
pasiva de ejercicios de movimiento. Con estas actividades, el terapeuta guía dedos del paciente, la
muñeca, el brazo inferior y superior a través de una serie de estiramientos para ayudar a
aumentar la flexibilidad, evitar la rigidez y romper el tejido cicatrizal. Esta fase de tratamiento a
menudo incluye el uso de compresas calientes, hielo y terapia de ultrasonido.
Después de los pacientes completar las partes pasivas de los programas de rehabilitación - que
puede a menudo pasado cinco a seis semanas - se mueven a rango activo de ejercicios de
movimiento. Los pacientes realizan estos ejercicios a sí mismos, tanto bajo la supervisión del
terapeuta, y en su tiempo sobre la base de los regímenes descritos por los terapeutas. Además de
estiramientos básicos, estos ejercicios a menudo incluyen péndulos hombro, flexión del codo /
movimientos de extensión y movimientos básicos de rotación interna y externa que se adaptan a
las exigencias de la ocupación del paciente. Esta parte de la rehabilitación no incluye ejercicios de
fortalecimiento.
La epicondilitis medial o lateral es frecuente, y suele producir incapacidad. El tratamiento rehabilitador tiene éxito, pero conviene
esperar a que el dolor haya cedido o sea mínimo antes de empezar la rehabilitación. En general, cuanto más tiempo dure el dolor, más
largo va a ser el período de recuperación completa.
Fases de la rehabilitación
FASE 1. Básicamente, Disminuir la inflamación y el dolor. Consiste en reposo, frío local (hielo) y, si es necesario, antiinflamatorios.
Ejercicios suaves de contracción muscular consistentes en flexión, extensión y rotación de muñeca. Suele seguirse la siguiente secuencia:
1. Extensión de muñeca.
2. Flexión de muñeca.
3. Flexión-Extensión combinadas de muñeca.
4. Extensión de los dedos.
5. Pronación/Supinación del antebrazo.
FASE 3. Mejorar la fuerza muscular, mantener y mejorar la flexibilidad, y volver gradualmente al nivel previo de actividad deportiva. A
veces, en esta fase, conviene hacer modificaciones en el equipo.
Ejemplo: una mala raqueta puede haber contribuido al desarrollo de la epicondilitis.
https://www.tuotromedico.com/temas/ejercicios_rehabilitacion_epicondilitis.htm