Académique Documents
Professionnel Documents
Culture Documents
Tesis de grado
Licenciatura en Diagnóstico y
Gestión Ambiental
Autora: Basla, María Magdalena
Directora: Dra. Nuñez, Mariana. V
Codirector: Dr. Moscuzza, Hernán
Facultad de Ciencias Humanas
Universidad Nacional del Centro de la Provincia de Buenos Aires
Tandil, 2018
Agradecimientos
A los profesores, a la Facultad de Ciencias Humanas y a los miembros del CINEA por
recibirme cálidamente y formarme como estudiante universitaria y profesional.
Muchas gracias!!
1
Resumen
La presente tesis de grado tiene como objetivo general relevar, localizar y elaborar el
diagnóstico ambiental de los establecimientos de engorde a corral del partido de Tandil
para el año 2017. Asimismo, se establecieron objetivos específicos, que consistieron en
generar cartografía temática en relación a la localización y diagnóstico ambiental de los
establecimientos como insumo para la gestión ambiental, identificar los impactos
ambientales en la actividad productiva y su entorno; y brindar recomendaciones para su
adecuación al ambiente.
Para ello, se consideraron como unidad de análisis las cuencas hidrográficas del partido
en cuestión y cada uno de los establecimientos situados en ellas a partir de sus estudios
de impacto ambiental. En ese sentido, se estableció que el partido de Tandil tiene una
totalidad de 35 feedlots, distribuídos en determinadas cuencas siendo la más afectada la
correspondiente al arroyo “Las Chilcas”, la cual concentra la mayor cantidad de
establecimientos de engorde a corral de bovinos. El análisis de los principales impactos
ambientales permitió la identificación de las acciones potencialmente impactantes de la
actividad en cuestión y los factores ambientales impactados.
2
Índice
Introducción………………………………………………………………………………… 10
Pregunta directriz…………………………………………………………………. 15
Objetivo General………………………………………………………………….. 15
Objetivos Específicos…………………………………………………………….. 15
Propósitos………………………………………………………………………….. 15
Hipótesis………………………………………………………………………….... 16
Marco Teórico……………………………………………………………………………..... 17
Marco Legal………………………………………………………………………………… 31
Legislación Nacional……………………………………………………………… 32
3
Ley Nacional de Gestión Integral de Residuos Industriales y de Actividades
de Servicios N° 25612……………………………………………………... 32
Legislación Provincial……………………………………………………………. 33
Legislación Local……………………………………………………………….... 34
Normas ISO………………………………………………………………………. 35
ISO 14000…………………………………………………………………... 35
ISO 14001…………………………………………………………………... 35
Resoluciones……………………………………………………………………... 36
4
Resolución N° 029/10 de Acumar………………………………………... 36
Marco Regional………………………………………………………………………........ 37
Medio Natural…………………………………………………………………….. 37
Medio Socioeconómico………………………………………………………….. 48
Caracterización ambiental………………………………………………………. 49
Materiales y Métodos…………………………………………………………………...... 51
Área de estudio……………………………………………………………………………. 60
Resultados y discusión………………………………………………………………….. 67
Conclusiones………………………………………………………………………………. 111
Bibliografía…………………………………………………………………………………. 113
Anexos……………………………………………………………………………………… 121
5
Índice de figuras
6
Índice de Cuadros
Cuadro 1. Legislación ambiental vigente de la República Argentina…………….. 31
Cuadro 2. Normas ISO………………………………………………………………... 35
Cuadro 3. Resoluciones ambientales………………………………………….......... 36
7
Índice de Tablas
Tabla 1. Acciones potencialmente impactantes asociadas a los establecimientos de
engorde a corral de bovinos………………………………………………………... 53
Tabla 2. Criterios de valoración de impactos ambientales……………………… 56
Tabla 3. Criterios para la valoración de impactos ambientales………………… 58
Tabla 4. Categorías de importancia de los impactos ambientales…………….. 59
Tabla 5. Cuencas hidrográficas del partido de Tandil…………………………… 69
Tabla 6. Feedlots del partido de Tandil…………………………………………… 72
Tabla 7. Matriz de relaciones entre factores ambientales impactados y actividades
potencialmente impactantes……………………………………………………….. 86
Tabla 8. Matriz de importancia de impactos ambientales………………………. 87
Tabla 9. Apertura, mejoramiento y mantenimiento de caminos o vías de
acceso………………………………………………………………………………… 88
Tabla 10. Almacenaje de alimentos……………………………………………….. 89
Tabla 11. Provisión de alimento y agua…………………………………………… 90
Tabla 12. Circulación de máquinas………………………………………………... 90
Tabla 13. Manejo y circulación de rodeos………………………………………… 91
Tabla 14. Manejo y sanidad del rodeo…………………………………………….. 91
Tabla 15. Transporte de ganado…………………………………………………… 92
Tabla 16. Mantenimiento de corrales……………………………………………… 93
Tabla 17. Generación de estiércol (residuos sólidos y líquidos) y gases……... 94
Tabla 18. Ocupación de mano de obra…………………………………………… 94
Tabla 19. Acción y cantidad de impactos identificados según categorías de
impactos……………………………………………………………………………… 95
Tabla 20. Cantidad de feedlots del partido de Tandil para cada compartimento
ecológico……………………………………………………………………………… 106
Tabla 21. Feedlots del partido de Tandil según compartimentos ecológicos…. 106
Tabla 22. Medidas de mitigación de impactos ambientales asociados a la actividad de
engorde de ganado bovino a corral………………………………………………... 108
8
Índice de gráficos
Gráfico 1. Unidades de importancia por medio y factor ambiental afectado…….. 55
Gráfico 2. Años de presentación de EIA’s de los feedlots ante el Municipio de
Tandil…………………………………………………………………………………….. 69
Gráfico 3. Tamaño en hectáreas de los establecimientos con feedlots identificados en el
partido de Tandil………………………………………………………………………… 70
Gráfico 4. Área destinada a la actividad de engorde a corral en los distintos
establecimientos del partido de Tandil……………………………………………….. 71
Gráfico 5. Capacidad máxima de cabezas de animales que pueden recibir los feedlots
del partido de Tandil……………………………………………………………………. 72
Gráfico 6. Influencia de las acciones impactantes de los feedlots del partido de Tandil
sobre el factor aire……………………………………………………………………… 97
Gráfico 7. Influencia de las acciones impactantes de los feedlots del partido de Tandil
sobre el factor agua superficial……………………………………………………….. 98
Gráfico 8. Influencia de las acciones impactantes de los feedlots del partido de Tandil
sobre el factor agua subterránea…………………………………………………….. 99
Gráfico 9. Influencia de las acciones impactantes de los feedlots del partido de Tandil
sobre el factor suelo…………………………………............................................... 101
Gráfico 10. Influencia de las acciones impactantes de los feedlots del partido de Tandil
sobre el factor de población (riesgos laborales)……………………………………. 102
Gráfico 11. Presencia o ausencia de barreras forestales de los feedlots del partido de
Tandil…………………………………………………………………………………….. 103
9
Introducción
A mediados del siglo veinte, la producción agropecuaria en los países más desarrollados
se llevaba a cabo en establecimientos mixtos que producían forrajes, ganados y grano
dentro de la misma explotación (Giuffré, 2008).
10
estancamiento agrícola de casi tres décadas a partir de los años 60, la expansión agrícola
se produjo a expensas de la superficie dedicada a ganadería extensiva y ha ocupado en
los últimos años más del 50% del espacio productivo de la pampa húmeda (Zarilli, 2010).
Según Zarilli (2010), se fue desarrollando con el correr del tiempo, un proceso de
agriculturización que se consolidó primero en la pampa húmeda, siendo en los años 70
cuando empezó a implantarse en otras ecoregiones del país. Allí se trasladaron
capitales, tecnologías de producción, parte de la producción de carne bovina y los
semilleros-criaderos de granos y forrajeras.
11
en el NEA, 53%; en el NOA, 57%; en la región semiárida, 58% y en la patagónica,
63%.La invernada también sufrió el corrimiento a otras zonas, sobre todo a la de islas
del Paraná, desde Reconquista-Goya hasta el delta bonaerense. Éstos son ecosistemas
más frágiles, de menor productividad y mayor incidencia de fenómenos climáticos
extremos como sequías o inundaciones (Santalla, 2008).
En el caso de las explotaciones ganaderas, el modelo intensivo comenzó con las aves
de postura, seguida por la de carne y los cerdos. Luego, ante la evolución del mercado,
aparece este sistema en el ganado vacuno y ovino (Giuffré, 2008).
Con ello surgieron en los años ’70, los primeros establecimientos de engorde a corral
denominados “feedlots”. El mayor despliegue de la actividad se dio en la década de los
’90, cuando algunos pocos invernadores se animaron a emprender una nueva forma de
engordar, ante una buena relación del precio de los granos con el de la carne. Los
feedlots dejaron de ser una “moda circunstancial”, para desenvolverse como una
actividad “instalada” con identidad propia (Ferrari y Speroni, 2008).
En coincidencia con Santalla (2008), Pordomingo (2003) expresa que los principales
problemas ambientales asociados a los establecimientos de engorde a corral son la
contaminación del suelo y del agua por el mal manejo de efluentes, más específicamente
de las deyecciones de los bovinos, y la contaminación del aire junto con la degradación
del paisaje. Ligado a otros problemas como el escaso control de la gestión ambiental por
parte del sector privado y público.
12
Tal como lo expresan Viglizzo y Frank (2010), esta actividad produce desbalances en el
ciclado de nutrientes del suelo debido a la alta concentración de animales en una
superficie pequeña con retorno de grandes cantidades de excretas al suelo.
Según un estudio realizado por Hernández (2012), en el partido de Tandil, el 88% de los
feedlots vierten en promedio entre 1000 y 6000 toneladas de estiércol por año, y el 81,3%
desechan sus efluentes dentro del sistema de engorde. A su vez, especifica que el mayor
impacto generado por esta actividad se da en el recurso agua, producto del escurrimiento
y la lixiviación de nitratos en un 95 %. Cabe destacar que, según la autora, en la mayoría
de los feedlots de la zona no se realizan los tratamientos adecuados frente a los
problemas ambientales que dicha actividad genera debido al elevado costo que ello
requiere y porque los productores no consideran sus emprendimientos lo suficientemente
grandes como para justificar la realización de los mismos y a su vez, porque no existen
normas claras aplicables al sector.
13
A su vez, no se efectúan los permisos de perforación y solicitud de agua que establece
la Resolución 289/08 del ADA (Hernández, 2012).
Si bien existen diversas formas de analizar la relación existente entre una actividad como
ésta y su entorno, una de ellas se basa en los estudios a nivel de cuencas hidrográficas
de un lugar, ya que éstas se comportan como conjuntos de fuentes integradoras de los
sistemas ecológicos, donde los posibles impactos ambientales generados en ellos no
sólo comprometen el propio desarrollo, sino que también pueden impactar en otros
ecosistemas (Sánchez, 2002; Sánchez y Zulaica, 2003).
Esta tesis servirá de aporte para la base de datos de la Dirección de Medio Ambiente de
la Municipalidad de Tandil, debido a que se enmarca en un Convenio Específico
establecido entre dicho ente y la Universidad del Centro de la Provincia de Buenos Aires
bajo el proyecto de investigación denominado “Cartografía y Teledetección como
herramientas de diagnóstico para la gestión ambiental” dirigido por la Mag. Ana C.
Ulberich, cuyo código es 03-D304. Este proyecto tiene el objetivo de “Diagnosticar el
estado ambiental de distintas áreas de estudio a partir de la aplicación de herramientas
de la cartografía y la teledetección” y su propósito es “Contribuir al diagnóstico de
distintos problemas ambientales a fin de lograr información de base que colabore con los
responsables de la toma de decisiones”. Dicho proyecto fue aprobado por la Secretaría
de Ciencia, Arte y Tecnología de la UNICEN.
14
Pregunta Directriz
¿Cuáles son las principales características de los feedlots del partido de Tandil y cuáles
serían sus impactos ambientales en el año 2017?
Objetivo General
Objetivos específicos
• Identificar las acciones llevadas a cabo por la actividad y los factores susceptibles
de ser impactados por ellas.
Propósitos
15
la gestión ambiental”, dirigido por la Mag. Ana C. Ulberich y promover un correcto
ordenamiento ambiental del territorio.
Hipótesis
16
Marco Teórico
Así como la sociedad es capaz de influir en la naturaleza, ésta también lo hace sobre la
sociedad. Por tanto, debe existir una esfera que comprenda parte de ambos sistemas.
Las dinámicas de esta esfera se sustentan en el sistema de regulaciones sociales que
funcionan a través del intercambio cultural y el sistema de regulaciones biofísicas, que
funcionan a través de los flujos de materia y energía, generando un intercambio natural
(Pardo, 1997).
Para Pardo (1997), esa esfera en la que el sistema social y el natural se interrelacionan,
se origina por un proceso de interacción, que apropia e integra elementos del mundo
natural en la esfera social, estableciendo así un control sobre partes del entorno material.
Sánchez (2009) establece que el ambiente es todo aquello que siendo objetivamente
aportado por el sistema ecológico envuelve la existencia del hombre y los elementos por
él introducidos al desarrollar el ecosistema que ocupa. Es un sistema dinámico antrópico
17
-ecológico en el que accionan numerosos procesos ecológicos, interactuando entre sí y
con procesos sociales y económicos que también interactúan entre sí.
Para Leff (1998), el ambiente es un objeto complejo que está integrado por procesos de
orden natural, técnico y social. En tanto que Psathakis (2010), establece que es el
entorno que afecta a los seres vivos y que abarca bienes y valores naturales, sociales,
culturales y las interacciones entre los mismos.
En ese sentido, Giannuzzo (2010) plantea que un análisis por separado de los
subsistemas ecológicos y los sociales no proporciona una suficiente comprensión del
conjunto y la unidad de investigación debe incluir el acoplado socioeconómico-ecológico
del sistema. Aclara que la complejidad, no linealidad y auto-organización caracterizan a
estos sistemas.
El ambiente visto como sistema complejo cambia constantemente, así como la sociedad
y los ecosistemas que lo conforman (Sánchez, 2009).
Los sistemas complejos conforman una totalidad organizada con propiedades que no
son lineales y poseen una estructura determinada con relaciones de interdependencia
que constituyen vínculos dinámicos que dan lugar a nuevas estructuras (García, 2006).
En estos sistemas se pueden apreciar jerarquías, donde cada uno de sus elementos
18
funciona como un subsistema del mismo, y el propio sistema como un subsistema de un
orden mayor (Giannuzzo, 2010).
Para Giannuzzo (2010), una mayor riqueza de relaciones y, por ende, una mayor
dependencia de funciones entre los elementos de estos sistemas y del conjunto con otros
conjuntos, comprendidas a su vez en diversas escalas espaciales y temporales, supone
una mayor complejidad.
Tal como lo expresa García (2006), las propiedades estructurales del sistema determinan
la estabilidad o inestabilidad con respecto a cierto tipo de perturbaciones. La inestabilidad
está, a su vez, asociada a los procesos de desestructuración y reestructuración del
sistema. Una alteración producida en el conjunto de elementos, en los elementos, en las
relaciones, o en un fragmento de la estructura del gran sistema ambiental se puede
propagar a través de la red de relaciones, provocando a su vez alteraciones que
estructuren nuevas organizaciones, distintas respecto de las primeras (Giannuzzo,
2010).
Según Gallopín (2000), en la relación inadecuada entre las acciones tecnológicas y las
reacciones productivistas se pueden generar consecuencias negativas conformando una
problemática ambiental. Para Pardo (1996), estas relaciones tienden hacia el
desequilibrio y a un autoreforzamiento del proceso de disrupción ecológica inducida por
la expansión económica.
Las problemáticas ambientales son los cambios que tienen lugar en ecosistemas
naturales o en sistemas socioeconómico-ecológicos, donde actividades humanas locales
o externalidades de origen antrópico, afectan negativamente algún componente
ecológico y/ o social y /o económico del sistema. A su vez, pueden ser consideradas
19
como todo cambio social, económico y/o ecológico que desfavorezca el bienestar
humano o el desarrollo de cualquier forma de vida (Sánchez, 2009).
En ese sentido, las relaciones entre la sociedad y la naturaleza pueden tener déficits de
racionalidad ocasionando problemas ambientales, que sólo se manifiestan como tales
según la medida otorgada por un modelo de racionalidad. Esa medida siempre está
relacionada con cierta calidad y cantidad de perjuicio que un sujeto social específico
recibe (Fernández, 2000).
Tal como lo expresa Odum (1972), los ecosistemas son unidades que incluyen todos los
organismos en una zona determinada interactuando con el entorno físico dentro del
sistema. Para Van Dyne (1969), citado por Viglizzo y Filippin (1993), los ecosistemas son
una unidad funcional que surgen de la integración de todos los elementos vivos y no
vivos del ambiente.
Según Gallopín (1982), la esfera que corresponde a la naturaleza también puede ser
denominada como sistema ecológico o bien, ecosistemas naturales, los cuales están
conformados por componentes que están interrelacionados entre sí. En ellos, coexisten
especies vegetales y animales con diversidad genética dentro de cada especie y
diversidad de estados vegetativos y fisiológicos (Viglizzo y Filippi, 1993).
20
En ese sentido, existe un tipo de ecosistema asociado a variables socioeconómicas, que
tiene por fin la producción de bienes y servicios de importancia económica. Ellos son los
agroecosistemas, los cuales poseen componentes biológicos que han sido distribuidos
en el tiempo y el espacio, interactuando con componentes socioculturales (Flores &
Sarandón, 2014).
Tal como lo establece Odum (1984), los agroecosistemas son un tipo especial de
ecosistemas intermedios entre los ecosistemas naturales y los ecosistemas urbanos
como las ciudades, totalmente construídos por el ser humano.
21
En ese sentido se dio origen a un proceso de agriculturización definido como el uso
creciente y continuo de las tierras para cultivos agrícolas en lugar de usos ganaderos o
mixtos. Este proceso también se asocia en la Pampa a cambios tecnológicos,
intensificación ganadera, expansión de la frontera agropecuaria hacia regiones extra-
pampeanas y, fuertemente relacionado con la sostenibilidad, la tendencia a
producciones orientadas al monocultivo, principalmente soja o la combinación trigo-soja
(Zarilli, 2010).
Según Norgaard (1994), los tractores sustituyeron a la energía animal, los fertilizantes
reemplazaron a las complejidades de los cultivos cruzados que albergaban bacterias que
fijan el nitrógeno y los pesticidas suplieron a los controles biológicos de los
agroecosistemas complejos. La agricultura dejó de ser la cultura agroecosistémica de
comunidades relativamente autosuficientes y se convirtió en la cultura agroindustrial de
muchos actores separados y distantes vinculados por los mercados globales.
Ante los déficits generados por las actividades de los agroecosistemas, se debe trabajar
adoptando una correcta gestión ambiental, la cual se basa en diagnosticarlos,
estableciendo sus relaciones de causa-efecto y mitigarlos, moderando o eliminando la
conflictividad intersocial (Fernández, 2000).
22
Los países más avanzados en materia ambiental apuntan a unificar el manejo de sus
ambientes en sistemas integrados de gestión ambiental (SIGEA) que tienen proyección
a distintas escalas espaciales. Un SIGEA es, simplemente, un enfoque sistemático por
el cual una empresa u otra organización social administran sus impactos sobre el
ambiente, dentro de un ciclo de mejoramiento continuo. Su característica más común es
que vinculan la gestión ambiental con la competitividad comercial. Procuran crear
credibilidad internacional a través de la certificación ambiental de sus productos y
procesos mediante la aplicación de estándares como las normas ISO 14000, los
protocolos EUREP, o la auditoria EMAS (Carreño y Viglizzo, 2007).
El territorio debe ser considerado no sólo desde un punto de vista físico sino también,
como una dimensión que tiene sociedades incorporadas (Fernández, 2005).
23
Tal como lo expresa Psathakis (2010), el Ordenamiento Territorial era considerado
antigüamente como un proceso de organización del territorio en sus aspectos
económicos y sociales que reflejaba una mera planificación de los usos del suelo en
estas dimensiones. Consistía en una planificación de usos por zonas estáticas donde
predominaba el derecho de dominio en su versión más restrictiva, por sobre intereses
colectivos, comunes o sociales. Con él, el territorio se organizaba por medio de la división
política-administrativa.
Así como el clima modifica el relieve, las acciones humanas también pueden hacerlo
alterando fisiográficamente el paisaje. El hombre convive desde siempre con diferentes
geometrías de superficie terrestre, donde establece asentamientos, construcciones,
aglomeraciones urbanas, redes de transporte, cultivos y actividades pecuarias o
forestales. Dichas geometrías resultan de procesos evolutivos de cada unidad
geomórfica, donde en ellas existe un balance de interacciones entre fuerzas y procesos
morfogenéticos externos e internos (Sánchez, 2009).
24
La Ordenación Ecológica de áreas (OE) comprende el estudio integrado de la diversidad
de sistemas ecológicos que caracterizan la organización espacial de los paisajes de una
región, subregión, cuenca hídrica o cualquier sistema de tierras de extensión
considerable. Considera que la heterogeneidad del terreno puede ser arbitrariamente
circunscripta a través de diferentes escalas espaciales y temporales. En ella, se debe
documentar la organización de las tierras en estado natural o seminatural ya que es
necesario evaluar el efecto y magnitud de los cambios ecológico-ambientales generados
por el proceso de desarrollo (Sánchez, 2009).
En ese sentido, una cuenca hidrográfica es considerada como el área en la cual el agua
que precipita corre por su superficie y siguiendo diferentes caminos, sale de dicha área
por la sección del río considerada. Una cuenca está limitada por un contorno que está
constituido por la divisoria de aguas que coincide con la divisoria topográfica o de
máximas alturas (Galarreta y Rodríguez, 2013).
Para Psathakis (2010), la visión desde una perspectiva de cuenca es una de las más
importantes al momento de hablar del Ordenamiento Territorial vinculado a la gestión de
los recursos hídricos.
25
territorio. En ese sentido, se requiere de una ordenación mediante estrategias holísticas
y de esa manera enriquecer el Ordenamiento Territorial (Sánchez, 2009).
En ese sentido, el análisis de dicha relación se puede realizar por medio de un proceso
denominado Evaluación de Impacto Ambiental que consiste en un estudio y evaluación
sistemática de los impactos ambientales producidos por las actividades productivas en
su entorno ambiental, tanto de forma directa como indirecta y en la elaboración de un
registro de los impactos ambientales más significativos. La ponderación de dichos
impactos se realiza mediante una matriz de importancia de los mismos donde se
interceptan tanto los factores de cada medio estudiado con las acciones de la actividad
en cuestión que los pueden impactar negativa o positivamente (Conesa Fernández-
Vítora, 1997).
26
ser aceptada, modificada o rechazada por parte de las diferentes administraciones
públicas competentes.
Tal como lo expresa Gómez Orea (1992), el entorno es la porción del sistema ambiental
que interacciona con una actividad en términos de influentes, de espacio
ocupado/transformado y de efluentes emitidos por parte de la misma y en cuanto a fuente
de recursos, materias primas, soporte de elementos físicos y receptor de dichos
efluentes.
Según Gómez Orea (1992), una actividad no puede ser algo superpuesto al medio, y
mucho menos contrapuesta a él, sino que la actividad y el entorno deben entenderse
como partes de un sistema. Es por ello que una actividad no se puede considerar
correctamente concebida, es decir, planificada, proyectada y gestionada si no configura
un sistema funcional y armónico con su entorno.
En ese sentido, existe una herramienta que permite estudiar el entorno de una actividad
identificando todos los factores que caracterizan al medio previsiblemente afectado por
la actividad y se la conoce como diagnóstico ambiental, el cual incluye la determinación
del medio físico, socioeconómico y de infraestructuras (Conesa Fernández-Vítora, 1997).
27
mapear y estudiar dichos elementos e interrelaciones (Sánchez y Cardoso da Silva,
1995).
Esta técnica puede ser utilizada por medio de los Sistemas de Información Geográfica
ya que consisten en una herramienta de relevancia que posibilita el fácil almacenaje,
acceso y gestión de datos, y permiten organizar y analizar de manera sistemática la
información, donde su principal producto es la generación de cartografía y la planificación
futura. Estos sistemas permiten elaborar cartografía referida a actividades agropecuarias
para su comparación e identificación de cambios en el tiempo, visualización de diferentes
escenarios y la toma de decisiones con respecto al desarrollo y manejo de la producción
(Iuorno et al, 2014).
28
formaciones ambientales del territorio a través de un proceso de planificación que
considere sus interrelaciones y logre una organización del territorio de manera que
sustente la economía teniendo en cuenta la equidad social y la protección de los bienes
ecológicos (Sánchez, 2009).
Para Sánchez (2009), se deben localizar, seleccionar y orientar las actividades humanas
compatibilizando las necesidades y expectativas de la población con la conservación de
los recursos naturales renovables que se encuentran involucrados en el desarrollo. En
ese sentido, la planificación con fines de desarrollo territorial debe contemplar el espacio
físico natural y las actividades sociales y económicas que están involucradas en la
intervención de los sistemas ecológicos. Es así, que este tipo de planificación consiste
en un proceso sistémico donde se ejecuta el análisis de las relaciones e interacciones
entre los elementos espaciales y la búsqueda de su optimización ambiental teniendo en
cuenta el manejo integrado de los recursos naturales, tecnológicos y socioculturales.
En ese sentido, la aptitud territorial se define como la medida en que el entorno cubre los
requisitos locacionales de una actividad y se determina para localizar posibles
extensiones territoriales de los asentamientos humanos. El procedimiento que sigue a la
asignación de usos, al tomar en cuenta sólo la capacidad de uso de la tierra y a lo sumo,
la aptitud de la tierra, conduce a una asignación fundamentada en la capacidad de
soporte natural. Tal como lo expresa Barredo (1996), la aptitud puede definirse como el
potencial que posee un lugar para soportar una actividad determinada, es decir, el
29
conjunto de requisitos locacionales que debe poseer un lugar para poder acoger una
actividad determinada. A su vez, la aptitud varía a medida que varían los factores del
medio o las clases de los factores, estableciéndose así un rango de aptitud para una
actividad en un territorio dado.
Según lo expresado por Gómez Orea (1992), al considerar la aptitud territorial junto con
la capacidad de acogida frente a la generación de los impactos ambientales negativos
en la planificación territorial, se origina un proceso de integración ambiental que se
inscribe en el contexto de la Ordenación Territorial y que consiste en componer un todo
con las partes optimizando la interacción antes dicha atendiendo por igual a ambos
aspectos, de tal manera que trasciende la simple reacción ante los efectos negativos de
las actividades para propiciar aquellas más afines con las características físico-naturales,
sociales y económicas del medio en el que se ubican. En ese sentido, la integración
ambiental significa incorporar sensibilidad y compromiso ambiental a los procesos de
toma de decisiones, en todas sus fases y en todos los sectores.
30
Marco Legal
A continuación se detalla minuciosamente el marco legal de referencia para la actividad
productiva en cuestión, en el ámbito nacional, provincial y local (Cuadro 1).
31
Legislación Nacional
Ley General del Ambiente N° 25675: Establece los lineamientos, principios e institutos
principales que deben regir la política ambiental nacional. Siendo los artículos que se
mencionan a continuación los más significativos:
Art. 11 de Ley N° 25675: Explicita que toda obra o actividad que, en el territorio
de la Nación, sea susceptible de degradar el ambiente, alguno de sus
componentes, o afectar la calidad de vida de la población, en forma
significativa, estará sujeta a un procedimiento de Evaluación de Impacto
Ambiental, previo a su ejecución.
Art. 28 de Ley N° 25675: Indica que el que cause el daño ambiental será
objetivamente responsable de su restablecimiento al estado anterior a su
producción o a su indemnización sustitutiva.
Legislación Provincial
Ley Integral del Medio Ambiente y los Recursos Naturales N° 11723: Tiene por objeto la
protección, conservación, mejoramiento y restauración de los recursos naturales y del
ambiente en general en el ámbito de la Provincia de Buenos Aires, a fin de preservar la
vida en su sentido más amplio; asegurando a las generaciones presentes y futuras la
conservación de la calidad ambiental y la diversidad biológica. Indica que la Autoridad
Provincial deberá establecer los patrones de calidad y/o niveles guía de los componentes
ambientales receptores como así también los niveles de emisión permisibles por los
contaminantes y fuentes de contaminación.
Ley Provincial de Protección a las fuentes de provisión y a los cursos y cuerpos receptores
de agua y a la atmósfera N° 5965/58: Prohíbe las reparticiones del Estado, entidades
públicas y privadas y a los particulares, el envío de efluentes residuales sólidos, líquidos
o gaseosos, de cualquier origen, a la atmósfera, a canalizaciones, acequias, arroyos,
33
riachos, ríos y a toda otra fuente, cursos o cuerpo receptor de agua superficial o
subterráneo, que signifique una degradación o desmedro del aire o de las aguas de la
provincia, sin previo tratamiento de depuración o neutralización que los convierta en
inocuos e inofensivos para la salud de la población o que impida su efecto pernicioso en
la atmósfera y la contaminación, perjuicios y obstrucciones en las fuentes, cursos o
cuerpos de agua.
Legislación Local
34
corrales) y suministro de dietas de alta concentración energética y alta digestibilidad;
radicados o a radicarse en el partido de Tandil. No quedan sujetos a la normativa los
encierres de carácter temporal para destetar terneros, encierres por emergencias
climáticas y/o sanitarias. Las instalaciones para acopio, procesado y distribución de
alimentos se consideran parte de la estructura.
Normas ISO
A su vez, existen normas ISO relacionadas con la actividad productiva en cuestión, las
cuales se aprecian a través del Cuadro 2.
ISO 14000: La serie ISO 14000 es la cara ambiental más visible de ISO. Tiene una
aproximación multifacética hacia el medio ambiente. Trata los aspectos ambientales a
nivel de organizaciones así como también a nivel de productos. Ofrece una amplia
variedad de normas sobre muestreo, ensayo y métodos analíticos para la calidad del
aire, agua y suelo. También establece normas sobre la integración del diseño y desarrollo
de un producto con el medio ambiente, tratamiento de residuos, eficiencia energética y
recursos renovables, incluyendo energía nuclear e hidrógeno (Fernández, 2008).
ISO 14011: Parte del sistema de gestión global que incluye la estructura organizativa, las
actividades de planificación, las responsabilidades, las prácticas, los procedimientos, los
procesos y los recursos para desarrollar, implementar, realizar, revisar y mantener la
política ambiental.
35
Resolusiones
Resolución de la Autoridad del Agua (ADA) de la Pcia. De Bs. As: pretende aprobar los
requisitos necesarios para la presentación de solicitud de disponibilidad de agua y
permiso de perforación del recurso hídrico subterráneo.
36
Marco Regional
Medio Natural
Tal como lo expresa Mateucci et al. (2012), una ecoregión es un territorio de máxima
jerarquía, geográficamente definido en el que dominan determinadas características de
relieve, geología, grandes grupos de suelo, procesos geomorfogenéticos, tipos de
vegetación y complejos faunísticos.
Sin embargo, la suavidad del relieve se ve interrumpida hacia el sur de la región por las
sierras de Tandil y de la Ventana, las cuales tienen alturas que rondan entre los 500 y
los 1000 m.s.n.m, respectivamente (Burkart et al. 1999). A su vez, comprende campos
37
de dunas fosilizadas y arenales y espejos de agua temporales o permanentes (Mateucci
et al. 2012).
38
Figura 2. Ecoregión Pampeana. Fuente: Mateucci et al. (2012).
39
El clima es subtropical con un gradiente decreciente de humedad de este a oeste y
sudoeste. Los factores determinantes de su clima son los anticiclones del Atlántico sur y
del Pacífico sur (Mateucci et al. 2012). Las precipitaciones anuales varían entre 600 mm
en el suroeste hasta 1100 mm en el noreste. Los veranos son cálidos y las temperaturas
medias anuales rondan los 15° C en el sur y 18° C en el norte (Burkart et al. 1999).
La red hidrográfica de esta ecoregión tiene poco desarrollo, a excepción de los ríos
pertenecientes a las áreas onduladas del norte y a las sierras del sur (Burkart et al. 1999).
Esto se debe a la ausencia de declives marcados y a la topografía (Mateucci et al. 2012).
El sector oeste presenta un extenso sistema de lagunas de aguas dulces o salobres que
en partes se encuentran encadenadas entre sí (Burkart et al. 1999). En ese sentido,
existe un grupo de lagunas marginales ubicadas entre las lagunas de Mar Chiquita y de
Chascomús, donde se incluyen las lagunas costeras hasta el cabo San Antonio y a lo
largo de la Bahía de Samborombón y otras más dispersas a lo largo de la costa Atlántica
desde Monte Hermoso hasta Miramar, las cuales son lagunas de embalse que se forman
por la presencia de barreras como dunas marítimas, cordones de conchillas o médanos
continentales (Mateucci et al. 2012).
Burkart et al. (1999) establece que esta ecoregión presenta suelos desarrollados con un
alto contenido de materia orgánica y nutrientes cuyos horizontes subsuperficiales son
arcillosos. Esto se originó debido al clima húmedo, a las características geoquímicas de
los sedimentos y a los ciclos vegetativos del pastizal. A su vez, presentan colores oscuros
o pardos y tienen una estructura granular o migajosa moderada y fuerte que facilita el
movimiento del agua y del aire y tienen moderada a alta capacidad de intercambio y
elevada saturación con bases, siendo el catión calcio el predominante (Mateucci et al.
2012).
En ese sentido, estos suelos son denominados Molisoles, los cuales son aptos para la
agricultura y la ganadería, aunque esta aptitud declina acompañando un gradiente de
isohietas anuales que varía entre los 1.000 mm al noreste y los 400 mm al sudoeste
(Viglizzo y Frank, 2005).
Tal como lo expresa Burkart et al. (1999), en ciertas partes presentan limitaciones como
la presencia de tosca en profundidad característica de los suelos al sur de las sierras,
40
drenajes deficientes en la depresión del Salado, baja capacidad de retención de agua en
el sector oeste por la textura arenosa.
Burkart et al. (1999), Viglizzo y Frank (2005) y Mateucci et al. (2012), coinciden en que
la vegetación dominante es el pastizal templado donde predomina la comunidad del
flechillar, la cual presenta una alta palatabilidad ganadera y está conformada por géneros
de gramíneas como Stipa, Piptochaetium, Bromus, Aristida, Briza, Setaria, Melica, Poa,
Paspalum y Eragrostis. En los sectores sur y oeste predominan las estepas psamófilas
y halófilas como Distichlis sp, Spartina sp o los pajonales de juncos y totoras. A su vez,
existen bosques ribereños en las zonas costeras de los ríos alóctonos, bosques de
galería o matorrales ribereños en las costas de arroyos alóctonos y talares con cordones
de conchillas en las barrancas de los ríos y en los albardones costeros marinos.
También se encuentran las estepas oreófilas en los roquedales de las sierras, a más de
500 metros de altura que presentan gramíneas tales como Festuca ventanicola, Festuca
pampeana, Stipa pampeana, Stipa juncoides, Stipa ventanicola, entre otras. (Cabrera,
1971).
Según Cabrera (1971), existen muchas hierbas no graminiformes que crecen entre las
matas durante la primavera, como la bella margarita punzó (Glandularia peruviana),
Oxalis cordobensis, Convolvulus hermanniae, Sphaeralcea australis, entre otras.
41
La Ecoregión Pampeana es la que más transformaciones han sufrido a causa de la
intervención humana. En ese sentido, Viglizzo y Frank (2005) expresan que los sistemas
agrícolas y ganaderos de la región han coevolucionado en el tiempo, transformándose
en actividades más intensivas.
Tal como lo expresan Viglizzo y Frank (2005) y Mateucci et al. (2012), gran parte de los
pastizales de esta ecoregión han sido convertidos en cultivos o pasturas bajo una
agricultura que se fue adecuando a paquetes tecnológicos simplificados y de alta
productividad, donde se destacaron los cultivos transgénicos, la siembra directa, el
aumento del uso de plaguicidas y fertilizantes y la precisión de la actividad. En cuanto a
la ganadería, también se produjo una gran intensificación en la actividad, donde se
establecieron formas de producción más cercanas a las industriales las cuales fueron
creciendo en cantidad a lo largo del tiempo.
42
Sierras Bonaerenses que conforma la Subregión Subhúmeda detallados por Mateucci et
al. (2012).
Tal como lo expresa Mateucci et al. (2012), la Pampa Deprimida se formó sobre la cuenca
tectónica hundida del Salado, donde posteriormente comenzó a rellenarse. En ese
sentido, los sedimentos característicos de esta zona son loéssicos originados en los
Andes, los cuales se depositaron en ambientes fluviales o eólicos. El Complejo consiste
en una llanura plana con relieve bajo, donde el paisaje se formó por la agradación fluvial.
Dominan terrazas fluviales amplias y planicies aluviales.
Con respecto a las características edáficas, en la Pampa Deprimida existen suelos con
elevada cantidad de sales de sodio debido al pH alto. En el sector oeste del Complejo
los suelos son interrumpidos por costras calcáreas entre 50 y 100 cm de profundidad y
son denominados Argiudoles típicos someros y Natracuoles típicos someros. El sector
43
oriental está conformado por suelos denominados Vertisoles, los cuales contienen
material de origen marino y poca permeabilidad por la existencia de una elevada cantidad
de arcilla en todo su perfil. En cuanto a la zona de transición entre los pedemontes y la
parte central del Complejo, está compuesta por suelos profundos donde los valores de
pH en la superficie son neutros mientras que en profundidad son alcalinos y mal drenados
(SAGyP-INTA, 1990).
Respecto del sector central y este son suelos sódicos desde los primeros 10 cm de
profundidad y son denominados Natracualfes típicos y Natracuoles típicos. En estos
suelos se producen frecuentes anegamientos donde se depositan en sus superficies
grandes capas limo-arcillosas (SAGyP-INTA, 1990). Según Imbellone et al. (2010), estos
suelos son halomórficos, sódicos y salino-sódicos a partir de la evolución holocena bajo
clima húmedo que no permitió la eliminación del sodio intercambiable. Éstos presentan
una estructura débil del horizonte A que surgió por la acción dispersante del sodio y la
baja permeabilidad del horizonte B.
Según SAGyP-INTA (1990), existen diversas limitaciones que tienen los suelos de este
Complejo las cuales son la anegabilidad, baja permeabilidad, sodicidad, influencia de la
capa freática, poca profundidad y, en algunos sectores, delgado espesor del horizonte
superficial con baja cantidad de nutrientes y materia orgánica.
Según Burkart et al. (2005), en la pradera húmeda de mesófitas, las especies más
características son Danthonia montevidensis, Mentha pulegium, Chaetotropis elongata,
Sporobolus indicus, Eclipta bellidioides, Leontodon taraxacoides, Ambrosia tenuifolia y
44
Alternathera philoxeroides. Los autores establecen que debido a los altos niveles de
sodio subsuperficial de los suelos, en estas praderas existen especies características de
ambientes halomórficos como Distichlis sp.
En los sectores de topografía cóncava donde los acuíferos freáticos están próximos a la
superficie, la comunidad se encuentra verde todo el año y las especies más comunes
son Eleocharis spp, Leersia hexandra y Alternanthera philoxeroides. En la zona central
de este Complejo se encuentran parches relictuales del pajonal de paja colorada
conocido como Paspalum quadrifarium la cual es una gramínea de suelos húmedos no
aptos para la ganadería bovina por su baja digestibilidad (Mateucci et al. 2012).
Tal como lo establece Mateucci et al. (2012), en los sitios con uso agrícola el pastizal es
más pobre y contiene una baja cantidad de matas de S. trichotoma, donde los estratos
bajos están dominados por Phyla canescens. Las especies naturales se encuentran
modificadas con un elevado deterioro debido al pastoreo y a la pulverización con
glifosato, entre otras actividades agrícolas. A su vez, la ganadería bovina extensiva es la
predominante y se han introducido especies forestales exóticas como las de Eucalyptus
camaldulensis.
Según Comparatore et al. (1996), la fauna de este Complejo está compuesta por
mamíferos como roedores cricétidos, Akodon azarae, Oryzomys flavescens y
Oxymycterus rutilans, Reithrodon physodes conocida como la rata conejo, Calomys
laucha, Myocastor coypus o nutria, marsupiales como Monodelphis dimidiata y Didelphis
albiventris más conocida como comadreja overa. A su vez existen otros mamíferos como
45
la mulita o Dasypus hybridus, Chaetophractus villosus también conocido como peludo,
el zorrino o Conepatus chinga, Galictis cuja o hurón menor, Dusicyon gimnocercus o
zorro, cuises o Cavia aperea, la liebre común o Lepus capensis. Las especies de aves
más comunes son Asthenes hudsoni, Spartonoica maluroides, Cranioleuca sulphurifera,
Cistothorus platensis, Rhynchotus rufescens, Circus spp., Asio flammeus, Hymenops
perspicillata, Embernagra platensis, Sicalis luteola, Sturnella loyca y Pseudoleistes
virescens.
Las Sierras de Tandilia y Ventania son las más antiguas dentro de la Ecoregión Pampa,
ya que surgieron a partir de depósitos de capas de sedimentos del Paleozoico sobre
basamento precámbrico que luego sufrió un gran proceso de erosión. Posteriormente se
produjo otro proceso de sedimentación con arcillas rojas (Mateucci et al. 2012).
46
Según dichos autores, la red de drenaje del Complejo se encuentra bien definida y
formada por arroyos encajonados como en el caso de las Sierras de Tandilia, donde
dichos arroyos bajan de las mismas y posteriormente se tornan temporarios o se insumen
en la llanura. Algunos de los arroyos que se destacan en este sector son el arroyo
Tapalqué y el Tandileofú, entre otros, los cuales forman parte de la cuenca del Salado.
En el centro del sistema de las Sierras de Tandilia, los cerros están conformados por
rocas graníticas que afloran en superficie, por lo cual no existen suelos. Sin embargo, en
la zona de los pedemontes serranos existe un desarrollo del suelo ya que están formados
por loess depositados sobre costras calcáreas conocidas como tosca y representan a los
suelos denominados Argiudoles típicos y Argiudoles típicos someros los cuales son aptos
para la agricultura a pesar de la poca profundidad y el riesgo de erosión hídrica que
tienen. Estos suelos, tienen un horizonte superficial oscuro y horizonte de alteración con
bajo contenido de arcilla. A su vez, contienen abundante cantidad de calcio aunque los
carbonatos están concentrados en concreciones duras (SAGyP-INTA, 1990).
Las Sierras Bonaerenses contienen un pastizal dominado por especies de los géneros
Stipa. En el sector de los cerros y de los afloramientos rocosos existen Paspalum
quadrifarium o hierbas del género Eryngium. En las zonas más húmedas predomina
Cortaderia selloana y en los suelos más profundos y bien aireados dominan arbustales
densos como Colletia paradoxa, Dodonaea viscosa, Buddleia spp, Baccharis spp,
Cestrum spp, entre otros. En las Sierras de Tandilia se encuentran arbustales como
Baccharis tandilensis o Eupatorium buniifolium y en las Sierras de Ventania predominan
Discaria americana y Wedelia sp. Este Complejo presenta más de 400 especies de
plantas vasculares nativas y endemismos como las gramíneas Festuca ventanicola,
Festuca pampeana, Bromus bonaerensis y Poa iridifolia (Mateucci et al. 2012).
Con respecto a la fauna, ésta está compuesta por anfibios como B. arenarum e H.
pulchella pulchella y M. stelzneri montevidensis, mamíferos como el coypo o Myocastor
coypus, cuises como Galea tixiensis y Cavia aperea, la vizcacha pampeana o
Lagostomus maximus (Mazzanti y Quintana, 2011).
Medio Socioeconómico
47
Tal como lo expresa Vázquez y Zulaica (2011), la Ecoregión Pampeana es la más
intervenida en términos humanos debido a las características particulares que posee en
relación a la capacidad productiva de sus suelos, donde las actividades se fueron
intensificando con el correr del tiempo a causa del desarrollo agrícola – ganadero.
Es por ello que Celemín y Velazquez (2010), establecieron que es la ecoregión que
posee mayor desarrollo y crecimiento económico, destacándose del resto de las
ecoregiones.
Del total de la superficie de la Ecoregión Pampeana, el 98,4% de las tierras tienen aptitud
para el uso agropecuario. En ese sentido, el total de tierra utilizable por este uso es de
aproximadamente 51,5 millones de hectáreas (Cascardo et al. 1991).
Según Cascardo et al. (1991), esta ecoregión se caracteriza por ser el área de secano
más productiva del país, donde se cosecha el 90% de los cereales y oleaginosas, el 70%
de la carne vacuna y el 88% de leche del total nacional. Los cultivos más comunes son
maíz, trigo, sorgo granífero, soja, girasol, lino, entre otros.
La Pampa Deprimida se caracteriza por ser una zona pecuaria, donde existe la
predominancia de cría de ganado hacia el este y de invernada hacia el oeste, mientras
que el Complejo de las Sierras Bonaerenses se destaca por realizar actividades agrícola-
ganaderas. En los centros urbanos de estos Complejos, son características las
actividades manufactureras y de servicios con la presencia de universidades nacionales
de relevancia (Celemín y Velazquez, 2010).
48
Tal como lo expresa Cascardo et al. (1991), las actividades ganaderas más conocidas
en este sector son la producción de carne bovina, ovina y porcina, la producción de leche
y la de lana. Dentro de establecimientos más pequeños se realiza la producción de pollos,
huevos, miel y conejos.
Siguiendo a dichos autores, los suelos para uso agropecuario se han clasificado según
su aptitud en suelos de aptitud agrícola, los cuales abarcan un 12,4% de las tierras de la
ecoregión; agrícola – ganadera, que representan un 28,8%; ganadera – agrícola,
comprendiendo el 37,9% y ganadera, que corresponde a un 24,9% de las tierras.
Caracterización Ambiental
A su vez, con la realización de una agricultura de riego se han producido serios procesos
de salinización de lenta reconversión en espacios con infraestructuras de riego por
gravedad de muy alto costo. Son muy pocos los casos donde se utilizan las técnicas de
riego por goteo y por aspersión con pivote central. En este caso, sólo se usan para
alfalfares de semilla importada o producciones de muy alto valor (Mateucci y Morello,
2000).
Otros efectos generados por esta forma de producción han sido la pérdida de los
contenidos de materia orgánica, los problemas de acidez o alcalinidad, la pérdida de
49
estructura y la reducción de la capacidad de infiltración o arrastre del agua en el suelo
(Pengue, 2009).
Tal como lo expresan Mateucci y Morello (2000), no sólo se pudieron apreciar los efectos
de este modelo de producción en la Ecoregión Pampeana, sino en otras ecoregiones
donde se destaca la deforestación para el avance de la frontera agrícola y por ende la
pérdida de biodiversidad, la cual se ha incrementado también por el sobre uso y mal uso
de plaguicidas y fertilizantes.
50
Materiales y Métodos
La base de tipo ráster, que se confeccionó a partir de información cartográfica del Centro
de Ciencia y Observación de Recursos Naturales de la U.S Geological Survey y una
renderización unibanda gris al constar de una sola banda, permitió elaborar un mosaico
en QGIS a escala 1:500.000 en Posgar 94 - Zona 5; para así generar: una capa de
polígonos con las cuencas del Partido, a partir de considerar flujos de acumulación y
dirección del agua junto con datos altimétricos del territorio; una capa de líneas con los
cursos de agua superficiales; y otra capa de puntos con la localización de los feedlots
que se realizó con coordenadas suministradas por el Municipio de Tandil. La
superposición de capas permitió relacionar los emplazamientos de feedlots con las
cuencas.
51
“Identificar las acciones llevadas a cabo por la actividad y los factores susceptibles de
ser impactados por ellas.”
En ese sentido, se revisaron los estudios de impacto ambiental de los distintos feedlots
del Partido, disponibles en la Dirección de Medio Ambiente de la Municipalidad de Tandil.
Dichos establecimientos fueron identificados con un letra mayúscula. Se hizo especial
hincapié en las matrices de impactos ambientales para conocer la valoración cuantitativa
de los impactos ambientales identificados.
52
(USDA) en el año 1990 para proyectos que pudieran afectar terrenos agrícolas (citada
por Canter, 1998), la misma consta de 69 preguntas sobre los impactos producidos por
las actividades en el medio. La lista elaborada en este estudio consta de 59 preguntas.
Siguiendo la metodología propuesta por Conesa Fernández-Vitora (1997) para la
elaboración de estudios de impacto ambiental, una vez identificados los factores
impactados por cada acción se confeccionó una matriz de relaciones en cuyas columnas
se indican las actividades y en las filas los factores ambientales discriminados según
integren el medio físico (factores abióticos y bióticos), el medio socioeconómico y el
medio perceptual. En dicha matriz, los distintos puntos de cruce, indicativos de un
impacto, se señalan con el número de aquella pregunta de la lista de control que obtuvo
respuestas positivas. Dichos puntos de cruce, indican que la actividad ocasiona un
impacto sobre ese factor, tanto negativo como positivo.
53
diario (permanente) y voluntario, el mismo se da dentro de los propios corrales
y está principalmente asociado a las áreas de alimentación y bebederos.
6. Manejo y sanidad del Aplicación de antibióticos, vacunaciones, curaciones, marcado, señalada,
rodeo castraciones, control de parásitos y otros tratamientos.
7. Transporte de Movimiento de camiones asociado al ingreso y egreso de los animales del
ganado feedlot.
Control de los alambrados, verificación del correcto funcionamiento de los
8. Mantenimiento de bebederos y comederos para que no se produzcan pérdidas, mantenimiento
corrales de las pendientes mínimas para garantizar el escurrimiento superficial de
efluentes.
9. Generación de Producto del metabolismo animal se generan importantes volúmenes de
estiércol (residuos residuos sólidos y líquidos orgánicos, siendo aproximadamente del 5 al 6% del
sólidos y líquidos) y peso vivo de cada animal. De la totalidad eliminada el 85% aproximadamente
gases es húmedo, siendo el 15% restante materia orgánica seca.
10. Ocupación de mano
Contratación del personal necesario para el desarrollo de la actividad.
de obra
Una vez identificadas las acciones impactantes y los factores a ser afectados se
determinó la importancia de los impactos (valoración cualitativa y cuantitativa de los
mismos), y se elaboró la matriz de importancia. El valor de importancia absoluta del
impacto queda representado por un número que se deduce en función del valor asignado
a los símbolos que se presentan en el siguiente modelo.
54
Gráfico 1. Unidades de importancia por medio y factor
ambiental afectado
I: Importancia; ±: Impacto Positivo (+) o Negativo (-); In: Intensidad; EX: Extensión; MO: Momento; PE:
Persistencia; RV: Reversibilidad; SI: Sinergia; AC: Acumulación; EF: Efecto; PR: Periodicidad; MC:
Recuperabilidad.
55
Cada uno de estos símbolos posee una valoración específica propuesta por la
metodología (Tabla 2 y 3), siendo que “I” sintetiza en una cifra la importancia del impacto
en función de estos once símbolos. La “importancia relativa del impacto” se obtiene al
relacionar el valor de importancia con la UIP dada a cada factor.
56
Se refiere a la posibilidad de reconstruir el factor afectado por los
medios naturales, y en caso de que sea posible, el intervalo de tiempo
que se tardaría en lograrlo, que si es de menos de un año se
Reversibilidad (RV)
considera corto plazo, entre uno y cinco años se considera el medio
plazo, entre cinco y diez es largo plazo, y si se superan los diez años
es irreversible.
57
Tabla 3. Criterios para la valoración de impactos ambientales.
58
Tabla 4. Categorías de importancia de los impactos ambientales.
Símbolo
Categoría Valor de Importancia
Positivos Negativos
Cabe aclarar que el análisis de la influencia de las acciones impactantes, respecto de los
feedlots, sobre los factores ambientales susceptibles de ser impactados se obtuvo a
partir de la sumatoria de los valores de los impactos negativos muy altos de cada acción,
plasmados en los distintos estudios de impacto ambiental disponibles en los expedientes
de la Dirección de Medio Ambiente de la Municipalidad de Tandil (Anexo II).
59
Área de Estudio
El mencionado partido se caracteriza, entre otros aspectos, por la importancia que tienen
en su economía la agricultura y la ganadería. Ambas actividades ejercen primacía sobre
el resto de las actividades en cuanto a la superficie utilizada. Según FCEc-SEPyD (1999),
60
la actividad ganadera ocupa el 31% de la superficie y la agricultura el 39%; el 30%
restante se distribuye entre otras actividades primarias, como así también, secundarias
y terciarias.
El clima de Tandil se caracteriza por ser templado donde predominan vientos del sector
norte, noreste, este, sur y suroeste, siendo los veranos e inviernos muy marcados, donde
los primeros son muy calurosos y los segundos más frescos con precipitaciones
mensuales menores a los 50 mm (Picone, 2014). Las heladas son frecuentes durante el
invierno con un promedio de 200 días libres de heladas (Mateucci et al. 2012).
El Partido recibe la influencia del anticiclón del Atlántico sur que aporta las masas de aire
cálidas y húmedas y del anticiclón del Pacífico sur que transporta aire frío y seco
(Campos y Picone, 2014).
Según Sánchez et al. (1999), el partido de Tandil se encuentra conformado por tres
compartimentos ecológicos: Serranías , Llanura Periserrana y Llanura Distal (Figura 4).
Tal como lo expresan los autores antes mencionados, las Serranías ocupan un área de
56.000 ha en el partido de Tandil (11,3%). Están formadas por cumbres que se
encuentran más o menos empinadas, lomadas amplias longitudinales asociadas a
techos convexos y laderas altas y pronunciadas. A su vez, poseen alturas mayores a los
200 m.s.n.m cuyos máximos son de 500 m y presentan afloramientos rocosos en las
zonas de laderas y cúspides (Foto 1).
61
Figura 4. Compartimentos ecológicos del partido de Tandil (Sánchez y Zulaica, 2002).
62
Bordeando a este compartimento, se encuentra otro denominado Llanuras Periserranas
que ocupa un área total de 260.300 ha (52,7 %). El mismo está compuesto por llanuras
de relieves más o menos ondulados. También contienen lomadas bajas. Sus alturas
rondan entre los 200 y 300 m en sus contactos con las Serranías y en cercanías al relieve
plano alcanzan los 170 m. En cuanto a las pendientes, comprenden un porcentaje entre
el 2 y 10%. Presentan pequeños sectores con afloramientos rocosos y pedregosidad en
superficie cerca de las alturas más bajas del relieve. El área está compuesta por material
loéssico situado sobre costra calcárea o tosca (Foto 2).
Estas llanuras se encuentran en contacto con otras menos inclinadas y chatas las cuales
conforman el compartimento de la Llanura o Planicie Distal ocupando 177.200 ha
(35,9%). Está compuesta por relieves planos con concavidades internas y posee
altitudes mínimas entre 112 y 115 m; y máximas entre 160 y 170 m. A su vez, no posee
afloramiento y pedregosidad, excepto en algunas lomadas. Sus paisajes contienen una
escasa declividad que es menor al 0,2% y posee pendientes de formas inconstantes por
las irregularidades suaves del relieve. Se sitúa sobre el relleno sedimentario de una fosa
tectónica de hundimiento como consecuencia de la combinación de la sucesión de
ingresiones marinas y depósitos eólicos en tiempos anteriores (Tricart, 1973). Según lo
establece éste autor, la Llanura Distal hace que el Sistema de Tandilia contacte con la
Depresión del Salado, constituyendo un fragmento del extremo meridional de la Pampa
Deprimida (Foto 3).
Los suelos que predominan en el partido de Tandil pertenecen al orden de los Molisoles
(SAGyP-INTA, 1989).
En las Serranías, los suelos poseen contactos líticos muy próximos a la superficie, es
decir que son poco profundos. El espesor del material edáfico ronda entre los 5 y 30 cm.
En ese sentido, se caracterizan por ser parte del subgrupo de los Hapludoles líticos,
donde existen impedimentos en la infiltración ante excesos de agua (Sánchez et al. 1999;
Sánchez, 2005).
63
Foto 1. Serranías del partido de Tandil.
64
Foto 3. Llanura distal del partido de Tandil.
En el caso de la Llanura Distal, existe depositada en sus suelos, una gran proporción de
limos y arcillas. También se encuentran costras calcáreas interrumpiendo su formación
superficial. Sin embargo, poseen moderadas a buenas condiciones de drenaje interno y
superficial. Son suelos del Orden de los molisoles, con presencia de Argiudoles típicos
como Subgrupo en las planicies bien drenadas. En los bajos dulces de este
compartimento, existen suelos pobremente drenados donde presentan un
condicionamiento por parte de la química del sodio. En este compartimento difunden
suelos clasificados como Natracuoles típicos (Sánchez et al. 1999; Sánchez y Zulaica,
2002).
65
Además de sus diferencias topográficas los tres compartimentos ecológicos comprenden
tierras con contrastes en sus potenciales de escurrimiento superficial (Verellen y
Sánchez, 2009).
66
Resultados y Discusión
Tal como lo expresan Sánchez et al. (1999), la presencia del sistema serrano de Tandilia,
induce en el partido de Tandil la ocurrencia de abundantes cabeceras de cursos de agua
superficiales con alcance regional, donde sus caudales están orientados hacia el norte,
noreste y este por medio de ríos y arroyos poco caudalosos como el Arroyo Los Huesos,
Chapaleofú, Langueyú, Tandileofú, Las Chilcas, Napaleofú y Quequén Chico, siendo
este último el de mayores caudales y con desagüe hacia el sudoeste de la Provincia.
67
Figura 5. Cuencas hidrográficas y distribución de feedlots en el partido de Tandil. Elaboración personal.
68
Tabla 5. Cuencas hidrográficas del partido de Tandil.
Cuenca Superficie
Cantidad de feedlots
hidrográfica ha %
De Los Huesos 74.173 15,03 2
Chapaleofú 136.650 27,69 9
Langueyú 101.711 20,61 6
Tandileofú 37.309 7,56 6
Las Chilcas 50.238 10,18 10
Napaleofú 44.760 9,07 0
Quequén Chico 48.659 9,86 2
Total 493.500 100 35
Elaboración personal en base a datos brindados por la Dirección de Medio Ambiente de la Municipalidad
de Tandil.
14
12
Cantidad de feedlots
10
0
2008 2009 2010 2011 2012 2013 2014 2015 2016
Año
Gráfico 2. Años de presentación de EIA’s de los feedlots ante el Municipio de Tandil. Elaboración
personal en base a datos brindados por la Dirección de Medio Ambiente de la Municipalidad de Tandil.
69
En el partido de Tandil, la actividad de engorde a corral se desarrolla en establecimientos
agropecuarios de diferentes superficies. En ese sentido, se pudieron establecer
diferentes rangos en cuanto a dichos tamaños en hectáreas, los cuales fueron: menos
de 100 ha, entre 100 y 500 ha, 501 y 1000 ha, 1001 y 1500 ha, 1501 y 2000 ha; y más
de 2000 ha. A partir de ello se obtuvo como resultado que la mayoría de los feedlots se
ubica dentro de establecimientos que poseen entre 100 y 500 ha (37,03% de los
establecimientos); y también entre 501 y 1000 ha (29,62% de los establecimientos), tal
como lo demuestra el Gráfico 3.
12
10
Cantidad de feedlots
0
Menos de Entre 100 y Entre 501 y Entre 1001 y Entre 1501 y Más de 2000
100 500 1000 1500 2000
Hectáreas
70
16
14
12
Cantidad de feedlots
10
0
Menos de 5 Entre 5 y 10 Entre 11 y 20 Más de 20
Hectáreas
Gráfico 4. Área destinada a la actividad de engorde a corral en los distintos establecimientos del partido
de Tandil. Elaboración personal en base a datos brindados por la Dirección de Medio Ambiente de la
Municipalidad de Tandil.
Los feedlots también se diferencian por la cantidad de cabezas de ganado que pueden
recibir. Con respecto a la capacidad máxima, se pudo apreciar que varía dependiendo
del tamaño de los mismos, tanto del área de la actividad propiamente dicha como de la
infraestructura asociada que posee cada establecimiento. En ese sentido, los
establecimientos que presentan una menor superficie almacenan menor cantidad de
animales. La mayoría de los feedlots del Partido están preparados para hospedar una
cantidad de entre 500 y 1000 cabezas de animales (Gráfico 5).
71
14
12
Cantidad de feedlots
10
0
Menos de 500 Entre 500 y Entre 1001 y Entre 2001 y Más de 3000
1000 2000 3000
Capacidad máxima en cabezas de animales
Gráfico 5. Capacidad máxima de cabezas de animales que pueden recibir los feedlots del partido de
Tandil. Elaboración personal en base a datos brindados por la Dirección de Medio Ambiente de la
Municipalidad de Tandil.
La Tabla 6 presenta un detalle de cada uno de los feedlots ordenados según la cuenca
hidrográfica a la que pertenecen.
72
L “Las Tinajas” S/E --- ---
“Sucursal de Raúl
M 500 120 1,15
de Prado”
N “El Rosario” S/E --- ---
Langueyú
Ñ “Los Laureles” 750 535 2
73
Tal como lo demuestra la Tabla 6, la cuenca hidrográfica del arroyo “De Los Huesos”
presenta una totalidad de 2 feedlots, donde uno tiene una capacidad máxima menor a
500 cabezas y el otro contiene 1000 cabezas. El tamaño total de uno de ellos ronda entre
100 y 500 ha, mientras que el otro presenta entre 501 y 1000 ha, siendo el área destinada
a la actividad de engorde a corral de menos de 5 ha.
74
animales, dos del total presentan entre 1001 y 2000 cabezas de animales, y otros dos
tienen una capacidad máxima entre 2001 y 3000 cabezas de bovinos. Con respecto al
tamaño total de los establecimientos, existen tres de la totalidad de feedlots que abarcan
una superficie entre 100 y 500 ha, uno entre 1001 y 1500 ha, mientras que dos del total
de establecimientos presentan un área mayor a 2000 ha. El tamaño de los feedlots de
esta cuenca respecto de sus corrales, es menor de 5 ha para uno de ellos. Otros tres
feedlots contienen un área de corrales entre 5 y 10 ha, mientras que uno de ellos contiene
entre 11 y 20 ha. El feedlot restante presenta una superficie de corrales mayor a 20 ha.
Considerando la cuenca hidrográfica del arroyo “Las Chilcas”, se puede apreciar a través
de la Tabla 6, que contiene una totalidad de 10 establecimientos. De esa manera se la
considera como la cuenca que concentra la mayor cantidad de feedlots. En ella se
presentan tres establecimientos cuyas capacidades máximas son menores a 500
cabezas de animales, otros tres contienen una capacidad entre 500 y 1000 cabezas de
bovinos y sólo uno del total presenta una capacidad máxima entre 1001 y 2000 animales.
A su vez, el tamaño total de tres de dichos establecimientos se encuentra entre 100 y
500 ha, mientras que cuatro del total presentan entre 501 y 1000 ha. En cuanto al tamaño
de los corrales de los feedlots de dicha cuenca hidrográfica, seis del total de ellos
presentan una superficie menor a 5 ha, mientras que uno de los feedlots abarca un área
de corrales de entre 5 y 10 ha.
Tal como se aprecia en la Tabla 6, la cuenca hidrográfica del arroyo “Quequén Chico”
presenta un total de 2 feedlots, uno con una capacidad máxima menor a 500 cabezas de
bovinos y el otro con una capacidad mayor a 3000 animales. A su vez, se puede
visualizar que el tamaño total de uno de los establecimientos consiste en un área entre
100 y 500 ha, mientras que el otro presenta una superficie total mayor a 2000 ha. Con
respecto al área de corrales, uno de los feedlots contiene una superficie menor a 5 ha y
el otro abarca entre 11 y 20 ha.
Al relacionar la cantidad de cabezas de bovinos y el tamaño de los establecimientos con
la actividad de engorde a corral, se evidencia que la cuenca hidrográfica principalmente
afectada es la del arroyo “Tandileofú”.
La mencionada cuenca concentra 11.900 cabezas de ganado en un área de 37.309 ha
(superficie de la cuenca), siendo la cuenca que presenta el mayor valor en la relación
75
cabezas de bovinos/área de la cuenca. Lo mismo sucede al relacionar el área específica
de corrales (157 ha) con el área de la cuenca.
Teniendo en cuenta la Tabla 5 y 6 al considerar las superficies de las cuencas
hidrográficas con las magnitudes de los feedlots, se puede establecer que la actividad
de engorde a corral se concentra mayormente en la cuenca del arroyo “Quequén Chico”
en un 17,42% seguida por la cuenca del arroyo “Tandileofú” en un 16,47% , continuando
con la del arroyo “Las Chilcas” en un 7,51% y en la del arroyo “Chapaleofú” en un 1,37%.
En ese sentido, se deduce que el simple dato de cantidad de feedlots por cuenca no
hace referencia a la magnitud y el impacto de la actividad en las mismas, considerando
que las cuencas de los arroyos “Chapaleofú” y “Las Chilcas” contienen una cantidad
mayor de establecimientos que la cuenca del arroyo “Tandileofú”.
76
alimentación completa con propósitos productivos. Siendo que las instalaciones para
acopio, procesado y distribución de alimentos se las considera parte de la estructura del
feedlot (NSW Agriculture, 1998). En ese sentido, es posible identificar acciones
asociadas a la actividad que se asocian a lo que Pordomingo expresa en su definición
de feedlot.
Tal como fue anticipado en el capítulo de Materiales y Métodos, el análisis de los
impactos ambientales asociados a la actividad ha sido realizado de manera global y
esquemática, entendiéndose que en un sentido riguroso dicho análisis debe ser
concebido a nivel de parcela asociada a cada establecimiento rural. Esto surge de
entender que cada parcela asocia –al menos en la Pampa Húmeda- una historia
particular en relación al proceso de ocupación y desarrollo de las tierras.
Las 10 acciones potencialmente impactantes asociadas a los establecimientos de
engorde a corral de bovinos son: 1) Apertura, mejoramiento y mantenimiento de caminos
o vías de acceso, 2) Almacenaje de alimento, 3) Provisión de alimento y agua, 4)
Circulación de maquinaria, 5) Manejo y circulación del rodeo, 6) Manejo y sanidad del
rodeo, 7) Transporte de ganado, 8) Mantenimiento de corrales, 9) Generación de
estiércol (residuos sólidos y líquidos) y gases y 10) Ocupación de mano de obra. Las
fotografías 1 a 15 demuestran las acciones mencionadas anteriormente.
77
Foto 2. Almacenaje de alimento. Silobolsas pertenecientes al establecimiento “San Lorenzo’.
78
Foto 4. Provisión de alimento y agua. Maquinaria distribuidora de alimento perteneciente al
establecimiento “Cerro Pampa”.
79
Foto 6. Manejo y circulación del rodeo. Bovinos circulando en los corrales del establecimiento “San
Lorenzo”.
Foto 7. Manejo y sanidad del rodeo. Presencia de barro en corrales que afecta a la movilidad del ganado
en el establecimiento “San Lorenzo”.
80
Foto 8. Mantenimiento de corrales. Bovinos en corrales del establecimiento “San Lorenzo”.
81
Foto 10. Mantenimiento de corrales. A la derecha de la imágen se puede visualizar un desnivel en el
suelo producto del pisoteo del ganado del establecimiento “San Lorenzo”.
Foto 11. Generación de estiércol. Presencia de pilas de estiércol producidas por bovinos del
establecimiento “Vanguardia Sur”.
82
Foto 12. Generación de estiércol. Depósito de estiércol en los suelos del feedlot “San Lorenzo”.
Foto 13. Generación de estiércol. En esta foto se puede visualizar una pileta de tratamiento de efluentes
generados en el feedlot “Vanguardia Sur”.
83
Foto 14. Generación de estiércol. Ganado bovino en corrales sobre depósitos de estiércol en el suelo del
establecimiento “San Lorenzo”.
84
La lista de control simple elaborada para identificar los potenciales impactos ambientales
de la actividad se presenta en el Anexo I.
La Tabla 7 presenta la matriz de relaciones, mientras que en la Tabla 8 se presenta la
ponderación cuantitativa y cualitativa de los diversos impactos, positivos y negativos
identificados.
85
Tabla 7. Matriz de relaciones entre factores ambientales impactados y actividades potencialmente impactantes.
ACTIVIDADES IMPACTANTES
FACTORES AMBIENTALES IMPACTADOS
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10
Medio 14/18/
Calidad Subterránea 14/19 17/18
Inerte 19
2/4/
Degradación Física 4/5 4 4 4 4 4
5/32
Suelo
17/18/
Contaminación 19 19 19 19 19 17/18
19
Relieve 3
Geomorfología
Escurrimiento 10 10 10
Medio 22/27/
Flora/Fauna 22/28
Biótico 29
36/38/ 45/46/
Medio Socio-económico
86
Tabla 8. Matriz de importancia de impactos ambientales.
ACTIVIDADES IMPACTANTES
FACTORES AMBIENTALES IMPACTADOS UIP
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10
Medio
Flora/Fauna 30 - 1.0 - 0.8
Biótico
Riesgo en trabajadores 90 - 2.7 - 2.7 - 2.3 - 2.3 - 1.9 - 2.6 - 2.3 - 2.6
Salud
Poblaci Riesgo área de influencia 30 - 1.1 - 1.1
ón
Segurida
Riesgo de accidentes 100 - 3.0 - 3.3 - 2.4 - 3.0 - 2.7 - 2.4 - 2.4 - 2.4 - 3.2 - 2.4
d
Actividades económicas locales o regionales 40 + 1.2 + 1.3 + 1.2 + 1.1 + 1.4 + 1.1 + 1.0
87
A continuación se describen los impactos ambientales asociados a cada una de las
acciones identificadas en el presente estudio.
Los factores más afectados por dicha acción corresponden al medio socio-económico
(actividades económicas locales o regionales). Asimismo se generan impactos sobre los
factores aire, suelo, geomorfología, flora y fauna, agua y paisaje (Tabla 9).
88
Almacenaje de alimentos
Tal como se presenta en la Tabla 10, el acondicionamiento y almacenaje de los alimentos
impacta principalmente sobre el factor aire, suelo, flora y fauna, geomorfología, paisaje,
salud y seguridad.
Circulación de maquinaria
En la Tabla 12 se puede apreciar que los impactos principales se producen en el factor
aire, suelo (degradación física y contaminación del mismo), y en el medio socio-
económico (actividades económicas y población, transporte).
89
Tabla 11. Provisión de alimento y agua.
Factores Principales efectos ambientales
Actividades • Aumento de los flujos económicos locales, dinamizando otros mercados como
económicas el de maquinarias, combustibles, insumos, etc.
• Alteraciones en la calidad del suelo por erosión y degradación física del mismo
Suelo (compactación).
• Contaminación asociada a derrame de sustancias (aceites, combustibles).
90
Manejo y circulación del rodeo
El movimiento de los animales se produce entre los distintos corrales y, a su vez, dentro
de cada uno de ellos; lo cual impacta principalmente en el factor aire, suelo,
geomorfología y población (Tabla 13).
Según la Tabla 14, los impactos principales se producen en el factor suelo (degradación
física y contaminación del mismo), y en el medio socio-económico (actividades
económicas y población).
91
Transporte del ganado
Tal como lo expresa la Tabla 15, el ingreso y egreso del ganado se realiza en vehículos
de diferente tipo, marca y capacidad, generándose un incremento del movimiento
vehicular. Esta acción podría provocar una potencial afectación a la atmósfera y al suelo.
Asimismo se impacta en el factor actividades económicas y en el área
transporte/servicios públicos/infraestructura. Otros potenciales impactos se asocian a la
población (riesgo de accidente y en la salud de trabajadores).
92
recurrente incrementan los requerimientos energéticos de los animales para sostener su
masa corporal. En ese sentido, Hernández (2017) citando a Pordomingo (2003) expresa
que existe un incremento de hasta 33% en los requerimientos energéticos debido a las
actividades físicas adicionales en las que se ven involucrados los animales bajo
situaciones ambientales marginales (anegamiento y lluvias), en desmedro del aumento
de peso
93
Tabla 17. Generación de estiércol (residuos sólidos y líquidos) y gases.
Factores Principales efectos ambientales
• Demanda de sistemas de tratamiento para el adecuado saneamiento de los
Infraestructura residuos generados.
94
En la Tabla 19 se presentan las acciones identificadas y una síntesis de la cantidad de
impactos que generan y su categorización.
95
MA 0
A 4
3. Provisión de alimento y agua 8 M 2
B 1**
MB 1
MA 1
A 4
4. Circulación de maquinaria 7 M 0
B 2*
MB 0
MA 0
A 1
5. Manejo y circulación del
5 M 3
rodeo
B 0
MB 1
MA 0
A 2
6. Manejo y sanidad del rodeo 7 M 3
B 1**
MB 1
MA 0
A 5
7. Transporte de ganado 8 M 1
B 2*
MB 0
MA 0
A 1
8. Mantenimiento de corrales 2 M 0
B 1**
MB 0
MA 5
9. Generación de estiércol
A 2
(residuos sólidos y líquidos) y
11 M 1
gases.
B 2*
MB 1
MA 0
A 1
10. Ocupación de mano de obra
5 M 2
B 1**
MB 1**
* Del total de impactos identificados en esa categoría, la mitad son impactos positivos.
** Constituyen impactos positivos.
***Categorías: MA: Muy alta; A: Alta; M: Media; B: Baja; MB: Muy baja.
96
En ese sentido, mediante la presente tesis se obtuvo como resultado que el mayor valor
de importancia de impacto negativo para el factor aire se generó debido a la acción
correspondiente a la generación de estiércol (Gráfico 6).
80
70
Influencia de las acciones impactantes
60
50
40
sobre el factor aire
30
20
10
Generación de estiércol
manteniemientos de caminos o
Mantenimiento de corrales
vías de acceso
Acciones Impactantes
Gráfico 6. Influencia de las acciones impactantes de los feedlots del partido de Tandil sobre el factor aire.
Elaboración personal en base a datos brindados por la Dirección de Medio Ambiente de la Municipalidad
de Tandil y matriz de importancia elaborada en el presente estudio.
97
propicia aún más la movilización de residuos líquidos y sólidos hacia el curso de agua
superficial más próximo (en función de la dirección y grado de la pendiente),
principalmente con la ocurrencia de precipitaciones y en superficies de baja infiltración
por compactación de carga animal y contacto lítico próximo a la superficie (Gonzalez
Colombi et al. 2011).
Tal como lo expresan las autoras, la disminución de la infiltración del agua a causa de la
compactación de los suelos, que provoca un aumento directo de la escorrentía en las
superficies impermeabilizadas, impide la recarga gradual del agua subterránea en el área
de influencia, disminuyendo la retención de ciertos elementos y favoreciendo su
dispersión (por ejemplo el fósforo).
En ese sentido, se pudo apreciar que el impacto más significativo en términos
ambientales en el factor correspondiente al agua superficial con respecto a la actividad
de engorde a corral de bovinos del partido de Tandil fue aquel proveniente de la acción
de generación de estiércol (Gráfico 7).
45
Influencia de las acciones impactantes
40
sobre el factor agua superficial
35
30
25
20
15
10
5
0
Generación de estiércol
Transporte del ganado
Almacenaje de alimentos
Mantenimiento de corrales
vías de acceso
Acciones Impactantes
Gráfico 7. Influencia de las acciones impactantes de los feedlots del partido de Tandil sobre el factor
agua superficial. Elaboración personal en base a datos brindados por la Dirección de Medio Ambiente de
la Municipalidad de Tandil y matriz de importancia elaborada en el presente estudio.
98
Con respecto al factor de agua subterránea, se puede apreciar a través del Gráfico 8,
que el mayor valor de importancia del impacto negativo de los feedlots del partido de
Tandil es efectuado por la generación de estiércol como acción potencialmente
impactante, seguido por el manejo y circulación del rodeo y el mantenimiento de corrales.
En ese sentido, Andriulo (2003) establece que el nitrógeno en forma de nitrato
proveniente de las excretas animales puede contaminar el agua subterránea.
50
impactantes sobre el factor agua
45
40
Influencia de las acciones
35
30
25
20
subterránea
15
10
5
0
caminos o vías de acceso
Generación de estiércol
Ocupación de mano de
Transporte del ganado
Manejo y circulación del
Mantenimiento de corrales
Provisión de alimento y
rodeo
agua
obra
Acciones Impactantes
Gráfico 8. Influencia de las acciones impactantes de los feedlots del partido de Tandil sobre el factor
agua subterránea. Elaboración personal en base a datos brindados por la Dirección de Medio Ambiente
de la Municipalidad de Tandil y matriz de importancia elaborada en el presente estudio.
Tal como lo establecen Nuñez et al. 2017, en el suelo se pueden generar alteraciones
en cuanto a su calidad debido a la degradación física a partir de la compactación
producida por la carga animal y por erosión del mismo como así también alteraciones en
la composición de los horizontes. Los consecutivos encierres de ganado, aunque no
superan la carga máxima de animales por corral, generan un proceso de
apelmazamiento de la capa superficial del suelo por el continuo pisoteo del ganado.
Dicha compactación incide en la estructura del suelo y en su estabilidad, agudizando
99
problemas potenciales de pérdida del mismo a partir de procesos de erosión (vinculado
a la incidencia de precipitaciones que movilizan el material suelto).
Según las autoras, los cambios en la estructura y composición de los horizontes
superficiales por acumulación de estiércol junto al proceso de compactación (activo en
periodos de encierre y engorde), produce un nuevo estrato superficial con características
diferentes a las iniciales (excesivo aporte de materia orgánica, disminución de porosidad,
aumento de humedad, etc.) y por lo tanto un comportamiento diferencial. No obstante,
dicho comportamiento se ve influenciado por la superficie destinada por cabeza de
ganado. En un establecimiento que cuente con una amplia superficie por cabeza, los
procesos se producirán en forma más lenta que si se confinaran los animales a una
menor área. Sin embargo estos procesos no dejarían de actuar, a menos que se
suspenda la actividad.
Tal como lo establece Andriulo (2003), las excretas derivadas de un feedlot pueden
contribuir a la contaminación del ambiente con nutrientes como nitrógeno y fósforo,
materia orgánica, sedimentos, patógenos, metales pesados, hormonas, antibióticos y
amonio.
El volumen de estiércol depende de la carga animal, por lo cual se estima una generación
estacional (abril a julio). En ese sentido, tal como lo plantea Gil (2006), un vacuno excreta
por día alrededor del 5-6% de su peso vivo. En un novillo de 400 kg de peso vivo sería
alrededor de 20-25 kg diarios de estiércol. Dado su porcentaje de humedad del 80-85%,
serían -en promedio- unos 3 kg diarios de residuo sólido por animal que se eliminarían
al corral. La composición en nutrientes, como porcentaje de sólidos totales secos, es
aproximadamente en el estiércol recién excretado de: nitrógeno 3-4%; fósforo 1-2%;
potasio 1,5-3%; calcio 0,6% (Dyer, 1975). Las deyecciones además contienen nutrientes,
ya que el bovino absorbe en proporción muy poco de lo que ingiere.
100
70
impactantes sobre el factor suelo 60
50
Influencia de las acciones
40
30
20
10
0
caminos o vías de acceso
Generación de estiércol
Transporte del ganado
Manejo y circulación del
Mantenimiento de corrales
rodeo
agua
Acciones Impactantes
Gráfico 9. Influencia de las acciones impactantes de los feedlots del partido de Tandil sobre el factor
suelo. Elaboración personal en base a datos brindados por la Dirección de Medio Ambiente de la
Municipalidad de Tandil y matriz de importancia elaborada en el presente estudio.
Según lo expresado por EPA (2004), los principales efectos potenciales generados sobre
la salud pública por parte de las actividades que se llevan a cabo en un feedlot son la
proliferación de moscas que pueden ser transmisoras de la bacteria Campylobacter
jejuni, que provoca campilobacteriosis proveniente de los animales, causando diarrea
acuosa con presencia de sangre, fiebre, náuseas, dolor de cabeza, muscular y abdominal
en los humanos, olores nauseabundos; nutrientes, sales como los nitratos que pueden
causar metahemoglobinemia, metales tóxicos, antibióticos y hormonas derivadas o
excretadas a partir de los residuos animales y cadáveres generan la contaminación de
101
las aguas subterráneas tras lixiviarse desde la superficie del suelo donde generalmente
son dispuestos, impidiendo su consumo; la proliferación de otras enfermedades
causadas por otros tipos de bacterias tales como la Escherichia Coli por contaminación
en el hombre por parte de las heces del ganado al tomar contacto directo con ellas o al
hallarse en el agua consumida. Esta bacteria provoca la aparición de síntomas
hemorrágicos que pueden conducir a la muerte en un 5-7% de los individuos afectados.
Otro tipo es la Listeria monocytogenes causante de la listeriosis grastrointestinal que
proviene de animales alimentados con ensilado y que por contacto directo con sus heces
causa diarreas, calambres abdominales y náuseas en el humano. A su vez, existen
parásitos que pueden encontrarse en el agua proveniente de las heces de los vacunos,
y que tras ser consumida por el hombre, pueden causar Criptosporidiosis, como el
Cryptosporidium que provoca diarrea acuosa, fiebre, vómitos y pérdida de peso como
síntomas y la Giardia Lamblia, causante de la giardiasis, generadora de diarreas
repentinas amarillentas en el ser humano, acompañada por cólicos y malestar general.
35
30
Influencia de las acciones impactantes
25
sobre el factor población (riesgos
20
15
10
5
laborales)
0
Mantenimiento de corrales
Generación de estiércol
manteniemientos de caminos o
vías de acceso
Acciones Impactantes
Gráfico 10. Influencia de las acciones impactantes de los feedlots del partido de Tandil sobre el factor de
población (riesgos laborales). Elaboración personal en base a datos brindados por la Dirección de Medio
Ambiente de la Municipalidad de Tandil y matriz de importancia elaborada en el presente estudio.
102
Otro de los resultados a los que se llegó con respecto a dichos establecimientos fue la
presencia u ausencia de barreras forestales capaces de frenar el avance de olores
fuertes producto de la generación de estiércol de los bovinos y disminuir la erosión eólica
e hídrica de los suelos donde una de sus consecuencias es la presencia de partículas en
el factor aire. De esa manera se obtuvo que 19 del total de los feedlots que presentaron
la evaluación de impacto ambiental en el Municipio de Tandil, no presenta barreras
forestales y 7 de ellos si las contiene (Gráfico 11).
20
18
16
14
Cantidad de feedlots
12
10
0
Con barreras forestales Sin barreras forestales
Gráfico 11. Presencia o ausencia de barreras forestales de los feedlots del partido de Tandil.
Elaboración personal en base a datos brindados por la Dirección de Medio Ambiente de la Municipalidad
de Tandil y matriz de importancia elaborada en el presente estudio.
Una vez analizados los principales impactos ambientales y los factores del medio más
afectados se evaluó el impacto de la actividad a nivel de sistemas paisajísticos del partido
de Tandil.
104
Figura 6. Distribución de los feedlots del partido de Tandil en los distintos compartimentos ecológicos.
Elaboración personal a partir de Sánchez y Zulaica (2002).
105
Tabla 20. Cantidad de feedlots del partido de Tandil para cada compartimento ecológico
Serranías 8
Llanura periserrana 16
Planicie distal 11
Elaboración personal a partir de Sánchez y Zulaica (2002).
106
AC “El Vergel” S/E --- ---
Elaboración personal en base a datos brindados por la Dirección de Medio Ambiente de la Municipalidad
de Tandil.
Recomendaciones para la adecuación de la actividad respecto del ambiente a los
establecimientos existentes
107
un conjunto de medidas pensadas y diseñadas por distintos autores para
establecimientos dedicados al engorde de ganado vacuno, algunas de ellas tomadas de
Pordomingo (2003).
- Reducción de polvo.
Disminución de la superficie de evaporación de humedad mediante la instalación de sombra
para el ganado.
Mantenimiento de un 25% de superficie húmeda, a través de riego o disminución del área por
animal en épocas de escasas precipitaciones, evitando la pérdida de humedad al aumentar el
aporte de excretas y disminuir la superficie de exposición a la radiación.
- Disminución de ruido.
Provisión de elementos de seguridad personal (auriculares) y/o tractores con cabina, para
aislar al operador.
Realizar estudios periódicos de control de ruidos en el ámbito laboral.
108
usado como fertilizante natural para huertas, viveros, extensiones mayores para agricultura.
Al evitarse la anaerobiosis, se minimiza la producción de metano (Pordomingo, 2003).
Acumulación y esparcido en tierras de cultivo. Se trata de un sistema abierto, aeróbico y
directamente los procesos de degradación ocurren en el suelo. Esta práctica puede llevarse a
cabo en zonas con suelos impermeables, con napas freáticas profundas, suelo sin fracturas,
no erosionado, lejos del recurso hídrico. La aireación para evitar la metanogénesis y facilitar
la humificación se puede hacer mecánicamente con arados. La temperatura ronda los 25 a
35°C y la humedad es menor al 50%. Se calcula un esparcido de 25 a 50 tn de abono por
hectárea por año para ser utilizado como fertilizantes (Dyer, 1975; Klepper et al. 2000; Pérez
Carrera, 2002). Asociado a esta actividad es necesario hacer un control periódico de balance
de nutrientes.
109
- Disminuir pendientes pronunciadas a valores de 2 a 5% como máximo.
- Disminuir la compactación del suelo del corral evitando el ingreso de maquinaria
para provisión de alimentos, colocando los comederos a un lado del corral con una
calle limpia destinada a tal fin.
- Provisión de elementos de seguridad personal (auriculares, barbijo) y/o tractores
con cabina, para minimizar la exposición a ruidos y material particulado en
suspensión.
- Provisión de elementos básicos de seguridad del personal aplicador de
fitosanitarios (mameluco, guantes, anteojos, barbijo, botas), para disminuir el riesgo
de contraer enfermedades.
Riesgo en la
- Contar con provisión (tanque o canilla) de agua potable en las cercanías para
población
limpieza e higiene de emergencia ante posibles derrames.
- Colocar recipientes para acopiar los residuos derivados de sustancias veterinarias
para luego realizar el tratamiento correspondiente.
- Disponer de un manual de primeros auxilios ante ocurrencia de accidentes durante
las operaciones y asegurar su conocimiento por parte de todos involucrados en las
tareas.
- En aquellos establecimientos que no lo presenten, instalar una cortina forestal (de
hoja caduca, para evitar la generación de barro en épocas de menor radiación) en
los límites del predio teniendo en cuenta la dirección de los vientos, la capacidad de
proporcionar sombra a los animales en verano y la visibilidad de los corrales por parte
Reacción social de la comunidad.
- Para el tratamiento y disposición de los residuos generados por el feedlot realizar
las sugerencias expresadas en los apartados de “deterioro de la calidad del suelo y
y el agua”.
110
Conclusiones
111
actividad asociada a la generación de estiércol producto del metabolismo animal, es la
que genera los impactos negativos más significativos.
Tal como ha sido anticipado, en el partido de Tandil, fueron identificados y diferenciados
tres sistemas ecológicos con características particulares. En ese sentido, ante las
intervenciones antrópicas, la variabilidad ecológica determina diferencias en las
respuestas productivas y en la susceptibilidad a la degradación de la calidad ecológica
de las tierras. Los compartimentos de las Llanuras periserranas y Llanura distal son los
que albergan la mayor cantidad de feedlots en Tandil. El compartimento de las Serranías,
asumido como el sector de cuenca alta de los arroyos del Partido, también presenta
establecimientos dedicados a la actividad de engorde a corral, aunque en menor cantidad
que los otros dos compartimentos. Si bien, los sistemas ecológicos de Llanura
periserrana y distal ofrecen las condiciones físicas óptimas para el desarrollo de la
actividad, es altamente necesario garantizar la aplicación de medidas de mitigación de
impactos ya que ambos sistemas constituyen las cuencas media y baja respectivamente
de la red de arroyos de Tandil y la degradación de los mismos acarrearía problemas
ambientales principalmente hacia la cuenca baja.
Según los resultados obtenidos, se sugiere que los establecimientos existentes
requerirán de un correcto seguimiento en cuanto al manejo de efluentes sólidos y líquidos
generados por los bovinos en los corrales de manera periódica, considerando las
medidas de mitigación nombradas en la presente tesis.
Los resultados del presente estudio servirán de aporte para la base de datos de la
Dirección de Medio Ambiente de la Municipalidad de Tandil, ya que se enmarca en el
Convenio Específico nombrado anteriormente, establecido entre dicho ente y la
Universidad del Centro de la Provincia de Buenos Aires bajo el proyecto de investigación
denominado “Cartografía y Teledetección como herramientas de diagnóstico para la
gestión ambiental” dirigido por la Mag. Ana C. Ulberich.
112
Bibliografía
Acosta, G. G. 2014. Régimen Jurídico Ambiental aplicable al Engorde Bovino a Corral
en la República Argentina. Campo Jurídico. Vol. 2, n. 2. 77-107 pp.
Andriulo, A., Sasal, C., Améndola, C., y Rimatori, F. 2003. Impacto de un sistema
intensivo de producción de carne vacuna sobre algunas propiedades del suelo y
del agua. Revista de investigaciones agropecuarias, 32(3). 27-56 pp.
Barredo, J. 1996. Sistemas de Información Geográfica y Evaluación Multicriterio en la
ordenación del territorio”. Ra-Ma, Madrid.
Bernasconi, O. H. 1947. Contribución al estudio hidrogeológico en el partido de
Tandil (Doctoral dissertation, Facultad de Ciencias Naturales y Museo).
Bosque Sendra, J., y García, R. C. 2000. El uso de los sistemas de información
geográfica en la planificación territorial. Publicado en Anales de Geografía de la
Universidad complutense. 20: 49-67 pp.
Brizuela, A. B,. y Sione, W. F. 2000. Elaboración de un sig para apoyar la planificación
de la empresa agropecuaria. Recuperado de http://www.cicyttp.org.
ar/climatologiafca/investigacion/investigacion_sig_planificacion_agropecuaria.pdf
Burkart, R., Barbaro, N. O., Sánchez, R.O., y Gómez, D. A. 1999. Eco-Regiones de la
Argentina. Administración de Parques Nacionales. Programa Desarrollo
Institucional Ambiental. Componente Política Ambiental. Secretaría de Recursos
Naturales y Desarrollo Sustentable. Presidencia de la Nación.
Burkart, S. E., Garbulsky, M. F., Ghersa, C. M., Guerschman, J. P., León, R. J. C.,
Oesterheld, M., Paruelo, J. M y Perelman, S. B. 2005. Las comunidades
potenciales del pastizal pampeano bonaerense. 379-400 pp. En: La
heterogeneidad de la vegetación de los agrosistemas: un homenaje a León, R. J.
C., Oesterheld, M., Aguiar, M. R., Ghersa, C. M y Paruelo, J. M (compiladores).
2005. 472 pp. 1º Edición. Editorial Facultad Agronomía. Universidad de Buenos
Aires.
Busquet, M., Calsamiglia, S., Ferret, A., y Kamel, C. 2006. Plant Extracts Affect In Vitro
Rumen. Microbial Fermentation Dairy Sci. 89. 761-771 pp.
Cabrera, A.L. 1976. Regiones Fitogeográficas Argentinas. En: Enciclopedia Argentina de
Agricultura y Jardinería. ACME, 2ª Edición. Buenos Aires.
113
Calsamiglia, S., Busquet, M., Cardozo, P. W., Castillejos, L., y Ferret, A. 2007. Invited
Review: Essential Oils as Modifiers of Rumen Microbial Fermentation. J. Dairy Sci.
90. 2580-2595 pp.
Campos, A. M., y Picone, N. 2014. Comparación urbano-rural de parámetros
meteorológicos en la ciudad de Tandil, Argentina. En: Revista de Climatología.
Vol.14. 13-23 pp.
Canter, L. W. 1998. “Manual de evaluación de impacto ambiental. Técnicas para la
elaboración de estudios de impacto”. 841 pp. Universidad de Oklahoma. Editorial
McGraw-Hill interamericana de España. Colombia. Traducido de la segunda
edición en inglés “Environmental Impact Assessment”; 1996. Editorial McGraw-
Hill. USA.
Carrasco, A., Sánchez, N., y Tamagno, L. 2012. Modelo agrícola e impacto socio-
ambiental en la Argentina: monocultivo y agronegocios. Serie Monográfica
Sociedad y Ambiente: Reflexiones para una nueva América Latina. Monografía N°
1. AUGM Comité de Medio Ambiente. Universidad Nacional de La Plata. 135 pp.
Carreño, L. V., y Viglizzo, E. F. 2007. Provisión de Servicios Ecológicos y Gestión de los
Ambientes Rurales en Argentina. Área Estratégica de Gestión Ambiental.
Ediciones INTA, Buenos Aires, Argentina, 68 pp.
Carta Europea de Ordenación del Territorio. 1983. Meeting of European Ministres in
Torremolinos. Málaga.
Cascardo, A. R., Pizarro, J. B., Peretti, M. A., y Gómez, P. O. 1991. Sistemas de
Producción Predominantes. En Barsky, O. (Editor). El Desarrollo Agropecuario
Pampeano. INDEC-INTA-IICA. Grupo Editor Latinoamericano; Colección Estudios
Políticos Sociales. Buenos Aires. 95-146 pp.
Comparatore, V. M., Martínez, M. M., Vasallo, A. I., Barg, M., y Isacch, J. P. 1996.
Abundancia y relaciones con el habitat de aves y mamíferos en pastizales de
Paspalum quadrifarium (paja colorada) manejados con fuego (Provincia de
Buenos Aires). Departamento de Biología. Facultad de Ciencias Exactas y
Naturales. Universidad Nacional de Mar del Plata, Argentina. INTERCIENCIA
21(4). 228-237 pp.
Conesa Fernández-Vítora V. 1997. “Guía metodológica para la evaluación de impacto
114
ambiental”. Tercera edición. Ediciones Mundi-Prensa. Madrid, España. 412 pp.
Dyer, I. A., y O’Mary, C. C. 1975. Engorde a corral (The Feedlot). Ed. H. Sur.
Environmental Protection Agency. EPA. 2004. Risk Management Evaluation for
Concentrated Animal Feeding Operations. U.S. Environmental Protection Agency
Office of Research and Development National Risk Management Research
Laboratory Cincinnati, Ohio. 1-106 pp.
FCEc-SEPyD, Facultad de Ciencias Económicas-Secretaría de Promoción y Desarrollo.
1999. Ventajas Competitivas y Oportunidades de Inversión; Tandil 1999/2000.
Año 0 – Nº 0. Tandil.
Fernández, R. J. 1998. Nociones de Medio Ambiente. En: La Ciudad Verde. Manual de
gestión ambiental urbana. Facultad de Arquitectura, UNMdP.
Fernández, R. J. 2000. La ciudad verde: teoría de la gestión ambiental urbana. Buenos
Aires. Espacio Editorial.
Fernández, R. 2005. Planificación estratégica y evaluación ambiental. Una reflexión
introductoria sobre la Evaluación Ambiental Estratégica. Conferencia para el
Consejo de Planeamiento Estratégico, Plan Estratégico 2010. Gobierno de la
Ciudad de Buenos Aires.
Fernández, R. J. 2008. Impacto global de las actividades agropecuarias. En:
Agroecosistemas: Impacto ambiental y sustentabilidad. 1a ed. Universidad de
Buenos Aires. Buenos Aires. 19-34 pp.
Ferrari, O. L., y Speroni, N. A. 2008. Feedlot actual. Difusión ganadera, 1era Edición, 7
p. La Nación. Buenos Aires.
Flores, C. C., y Sarandón, S. J. 2014. Agroecología: bases teóricas para el diseño y
manejo de agroecosistemas sustentables. 1a ed. Editorial de la Universidad
Nacional de la Plata. Universidad Nacional de la Plata. La Plata. 1-464 pp.
Gallopín, G. C. 1982. Tecnología y sistemas ecológicos. Seminario sobre tecnología y
medio ambiente. Fundación Getulio Vargas. Río de Janeiro.
Gallopín, G. 2000. Ecología y ambiente. En: Leff, E. (Org.) Los problemas del
conocimiento y la perspectiva ambiental del desarrollo. México: Siglo XXI. 88-141
pp.
115
García, R. 2006. Conceptos, método y fundamentación espistemológica de la
investigación interdisciplinaria. Filosofía de la Ciencia. Primera Edición. Editorial
Gedisa, S.A. Barcelona, España. 1-199 pp.
Giannuzzo, A. N. 2010. Los estudios sobre el ambiente y la ciencia ambiental. Scientiae
studia. São Paulo, v. 8, n. 1. 129-56 pp.
Gil, S. B. 2006. Engorde intensivo (feedlot) elementos que intervienen y posibles
impactos en el medio ambiente. Sitio Argentino de Producción Animal.
www.produccion-animal.com.ar. 10 pp.
Giuffré, L. 2008 . Agrosistemas: impacto ambiental y sustentabilidad. 1a ed. Buenos
Aires, Argentina. 493 pp.
Gómez Orea, D. 1992. Planificación Rural. Editorial Agrícola Española, S.A. Madrid.
González Colombi, F., Nuñez, M. V., y Verellen, M. C. 2011. Impactos ambientales
asociados a Feedlots: recomendaciones para su gestión en el partido de Tandil
(Buenos Aires). VII Jornadas Interdisciplinarias de Estudios Agrarios y
Agroindustriales. Trabajo publicado en CD. Con referato.
Hernández, G. 2012. Problemas ambientales en establecimientos de engorde de bovinos
a corral (feedlot) del partido de Tandil. Tesis de licenciatura. UNCPBA.
Imbellone, P. A., Giménez, J. E., y Panigatti, J. L. 2010. Suelos de la región pampeana.
procesos de formación (No. P33 INTA 18288). INTA.
Instituto Nacional De Estadística y Censo. (INDEC. 2010). “Censo Nacional de Población
y Vivienda”. Partido de Tandil, provincia de Buenos Aires. Argentina.
Iuorno, M. V., Gil, V., y Bagnulo. C. 2014. Sistemas de información geográfica aplicados
al inventario y gestión de información rural. Geograficando, 10 (1). Recuperado
de: http://www.geograficando.fahce.unlp.edu.ar/article/view/GEOv10n04
Klepper, K., Blair, G., y Ahmad, R. 2000. The impact of feedlot manure and effluent on
nutrient cycling and crop productivity in a high rainfall zone in Australia. Animal
agricultural and food processing wastes. Proc. of the Eight Intern. Symp.,
Desmoines, Iowa, USA.
Leff, E. 1998. Saber Ambiental: Sustentabilidad, racionalidad, complejidad, poder.
México. S. XXI. 124-130 pp.
116
León, R. J. C. 2001. Heterogeneidad espacial y temporal de la vegetación pampeana.
Academia Nacional de Agronomía y Veterinaria. Tomo IV. Buenos Aires,
Argentina. 336-344 pp.
Lobbosco, F. A. 2009. El engorde a corral para la producción de carne en la provincia de
Buenos Aires: un análisis económico(Doctoral dissertation, Universidad Nacional
de Mar del Plata).
Mateucci, S. D., y Morello, J. 2000. Singularidades territoriales y problemas ambientales
de un país asimétrico y terminal.
Mateucci, S. D., Morello, J., Rodríguez, A. F., y Silva, M. 2012. Ecoregiones y complejos
ecosistémicos argentinos. Ecoregión Pampa. Orientación Gráfica Editora S.R.L.
12. 391-445 pp.
Moscuzza, C. H. 2008. Dinámica de nutrientes en sistemas intensivos de engorde bovino.
Tesis de doctorado. UBA.
Norgaard, R. B. 1994. Development Betrayed: The End of Progress and a Coevolutionary
Revisioning of the Future. Una sociología del medio ambiente coevolucionista.
Londres/Nueva York: Routledge. 167-178 pp.
Nuñez, M. V., Basla, M. M., y Ulberich, A. C. 2017. Relevamiento, localización y
caracterización de feedlots del partido de Tandil. IV Congreso Internacional de
Ambiente y Energías Renovables. Villa María, Córdoba. 1-10 pp.
NSW Agriculture. 1998. The New South Wales feedlot manual. The Inter-Department
Committee on Intensive Animal Industries (Feedlot Section) (2nd ed.): Update
98/I.
Odum, E. P. 1972. Ecología. Tercera Edición. Editorial Interamericana. México. 639 pp.
Odum, E. P. 1984. Properties of agroecosystems. In: Lowrance R, BR Stinner & GJ
House (Eds). Agricultural Ecosystem: Unifying concepts. J Willey & Sons. New
York. 5-11 pp.
Oliveira Dias, Marilza do Carmo (Coordenadora). 1999. Manual de Impactos Ambientais:
orientaão básicas sobre aspectos ambientales de actividades produtivas. Banco
do Nordeste; equipo de elaboração Mariaza do Carmo Oliveira Dias
(coordenadota), Mauri César Barbosa Pereira, Pedro Luis Fuentes Dias, Jair
Fernández Virgilio. Fortaleza do Banco do Nordeste. Fortaleza. 297 pp.
117
Pardo, M. 1996. Sociología y ambiente: Hacia un nuevo paradigma relacional. Política y
Sociedad, 23. Universidad Pública de Navarra. Pamplona, Madrid. 33-49 pp.
Pardo, M. 1997. Sociología y Medioambiente: Teorías y Valores sobre la Naturaleza y el
Medioambiente. 1-19 pp.
Pengue, W. A. 2008. La apropiación y el saqueo de la naturaleza: conflictos ecológicos
distributivos en la Argentina del Bicentenario. 1era Edición. Lugar Editorial.
Buenos Aires. 53 pp.
Pengue, W. A. 2009. Cuestiones económico ambientales de las transformaciones
agrícolas. Problemas del Desarrollo. Revista Latinoamericana de Economía. Vol.
40, N°157, abril-junio/2009.
Perez Carrera, A. 2002. Lagunas de estabilización. Importancia del tratamiento de los
efluentes agropecuarios. En: Perez Carrera, A., Garaicoechea, J., y col. Aspectos
ambientales de las actividades agropecuarias. 91- 97 pp.
Picone, N. 2014. Clima urbano de la ciudad de Tandil. Universidad Nacional del Sur.
Tesis Doctoral en Geografía.
Pordomingo, A. J. 2003. Gestión ambiental en el feedlot. Guía de buenas prácticas. INTA
Anguil. 90 pp.
Psathakis, J. 2010. Una aproximación al Ordenamiento Ambiental del Territorio como
herramienta para la prevención y trasformación democrática de con ictos socio-
ambientales - Volumen 1; Buenos Aires; Fundación Cambio Democrático. 76 pp.
Quintana, C. A., y Mazzanti, D. L. 2011. Las vizcachas pampeanas (Lagostomus
maximus, Rodentia) en la subsistencia indígena del Holoceno tardío de las Sierras
de Tandilia Oriental (Argentina). Latin American Antiquity. 22(2). 253-270 pp.
Ruiz de Galarreta, V. A., y Rodríguez. C. I. 2013. Conceptos básicos de la hidrología:
Resolución del balance hisdrológico. 1ª ed. Tandil: Universidad Nacional del
Centro de la Provincia de Buenos Aires. 164 pp.
SAGyP-INTA. 1989. Mapa de Suelos de la Provincia de Buenos Aires. PNUD-Argentina
85/019. INTA. Buenos. Aires.
SAGyP-INTA. 1990. Atlas de Suelos de la República Argentina. Buenos Aires. Tomo I.
Pp. 83-202. Proyecto PNUD Argentina 85/019.
118
Sánchez, R. O., y Cardoso da Silva. T. 1995. Zoneamiento Ambiental: uma estrategia de
ordenamento dais paisagems. Cad. De Geociencias. IBGE. Río de Janeiro. 14:43-
53 pp.
Sánchez, R. O., Mattus, G., y Zulaica. L. 1999. Compartimentación Ecológica y Ambiental
del Partido de Tandil (Provincia de Buenos Aires). En "Ambiental ´99". San Juan.
Sánchez, R. O., y Zulaica, M. L. 2002. Ordenamiento morfoedáfico de los sistemas
ecológico-paisajísticos del partido de Tandil (provincia de Buenos Aires). Buenos
Aires. En “Contribuciones Científicas”, 63 Semana de Geografía. 387-402 pp.
Sánchez, R. O y Zulaica. M. L. 2003. Zonificación ecológica de la cuenca del arroyo
Langueyú (partido de Tandil). En “Contribuciones Científicas”, Sociedad Argentina
de Estudios Geográficos. Bahía Blanca. 665-684 pp.
Sánchez, R. O. 2005. Ordenación Ecológico-paisajística del Territorio: metodología,
alcances geográficos y estudio de caso. Conferencia y publicación: Primeras
Jornadas Argentinas de Ecología de Paisajes. GEPAMA-FADU/UBA. Buenos
Aires.
Sánchez, R. O. 2009. Ordenamiento Territorial: bases y estrategia metodológica para la
ordenación ecológica y ambiental de tierras. 1era Edición, 1 p. Orientación Gráfica
Editora. Buenos Aires.
Sans Fonfría, R., y de Pablo Ribas, J. 1989. Ingeniería Ambiental: Contaminación y
tratamientos. Marcombo Boixareu Editores. Barcelona, España.
Santalla, E. 2008. Evaluación, diagnóstico y propuestas de acción para la mejora de
problemáticas ambientales y mitigación de gases de efecto invernadero
vinculados a la producción porcina, avícola y bovina (feedlots y tambos) UNICEN
Facultad de Ingeniería.
Sheng, T. C. 1992. Manual de campo para la ordenación de cuencas hidrográficas:
Estudio y planificación de cuencas hidrográficas Vol. 13. Food & Agriculture Org.
Soil Survey Staff. 1975. Soil Taxonomy, a basic system of soil classification for making
an interpreting soil survey. Agric.Handbook nro. 436. Govenrn Printing Office,
Washington DC, USA.
Teruggi, M. E y Kilmurray, J. O. 1975. Tandilia. En VI Congreso Geológico Argentino –
Relatorio “Geología de la Provincia de Buenos Aires”. Buenos Aires. 55-77 pp.
119
Tricart, J. 1973. Geomorfología de la Pampa Deprimida. INTA, colección científica nro.
12, Buenos Aires.
Ulberich, A. C. 2011. Cartografía y teledetección: teorías y aplicaciones.- 1ª ed. Tandil:
Universidad Nacional del Centro de la Provincia de Buenos Aires. 197 pp.
Van Dyne, G. M. 1969. Implementing the ecosystem concept in training in the Natural
Resource Sciences. En: The Ecosystem Concept in Natural Resource
Management, G. M. Van Dyne (Ed.), Academic Press. New York. 383 pp.
Vázquez, P., y Zulaica, L. 2011. Cambios en el uso de la tierra del partido de Tandil y
principales impactos ambientales. Párrafos Geográficos. Volumen 10, n. 2. 242-
267 pp.
Vázquez, P., y Zulaica, L. 2012. Transformaciones agroproductivas e indicadores de
sustentabilidad en el partido de Tandil (provincia de Buenos Aires), durante los
períodos 1988- 2002 y 2002-2010. En: Campo-territorio: revista de geografía
agraria, V. 7, n 13. 5-39 pp.
Velazquez, G. A., y Celemín, J. P. 2010. La calidad ambiental en la Agentina. Análisis
regional y departamental. 1a ed. Universidad Nacional del Centro de la Provincia
de Buenos Aires. Facultad de Ciencias Humanas. Tandil, Argentina. 210 pp.
Verellen, M. C., y Sánchez, R. O. 2009. Morfología superficial de la Llanura Deprimda
del Partido de Tandil (provincia de Buenos Aires). En XII Encuentro de Geógrafos
de América Latina. ISBN 978-9974-8002-9-8. Montevideo, Uruguay.
Viglizzo, E., y Fillippin. C. 1993. Los agroecosistemas de la Argentina. En: Goin, F., y R.
Goñi. Elementos de Política Ambiental. Honorable Cámara de Diputados de la
Provincia de Buenos Aires.
Viglizzo, E., y Frank. F. 2005. Land use options for Del Pla- ta Basin in South America:
Tradeoffs analysis based on ecosystem service provision. Ecological Econo- mics.
Viglizzo, E. F., y Frank, F. C. 2010. Erosión del suelo y contaminación del
ambiente. Expansión de la frontera agropecuaria en Argentina y su impacto
ecológico-ambiental. Ediciones INTA, Buenos Aires.
Zarilli, A. 2010. ¿Una agriculturización insostenible? La provincia del Chaco, Argentina
(1980-2008). Historia Agraria: revista de agricultura e historia rural. 51. 146 pp.
120
Anexos
Anexo I
puede
TEMA si no
ser
Formas del terreno ¿Produce la actividad:
1 Pendientes o terraplenes inestables?
Un impacto sobre terrenos agrarios clasificados como de primera
2
calidad o únicos?
3 Cambios en las formas del terreno, orillas, cauces de cursos o riberas?
4 Destrucción, ocupación o modificación de rasgos físicos singulares?
Efectos que impidan determinados usos del emplazamiento a largo
5
plazo?
Aire/climatología. ¿Produce la actividad:
Emisiones de contaminantes aéreos que provoquen deterioro de la
6
calidad del aire ambiental (niveles de inmisión)?
7 Olores desagradables?
8 Alteración de movimientos del aire, humedad o temperatura?
Agua. ¿Produce la actividad:
9 Vertidos a un sistema público de aguas?
Cambios en los índices de absorción, pautas de drenaje o el índice o
10
cantidad de agua de escorrentía?
11 Alteraciones en el curso o en los caudales de avenidas?
12 Represas, control o modificaciones de algún cuerpo de agua?
Vertidos en aguas superficiales o alteraciones de la calidad del agua
13
considerando, pero no sólo, la temperatura y la turbidez?
14 Alteraciones en el volumen del flujo de aguas subterráneas?
15 Alteraciones de la calidad del agua subterránea?
16 Disminución de las reservas públicas de agua?
Riesgo de exposición de personas o bienes a peligros asociados al
17
agua?
Residuos. ¿Produce la actividad:
18 Residuos sólidos o basuras?
19 Residuos líquidos?
Residuos peligrosos. ¿La actividad:
121
Implicará la generación, transporte, almacenaje o eliminación de algún
20
residuo peligroso regulado?
Ruido. ¿Produce la actividad:
21 Aumento de los niveles sonoros previos?
22 Mayor exposición de la gente a ruidos elevados?
Vida vegetal. ¿Produce la actividad:
Cambios en la diversidad o productividad o en el número de alguna
23 especie de plantas (incluyendo árboles, arbustos, herbáceas, cultivos,
microflora y plantas acuáticas)?
Reducción del número de individuos o afectará el hábitat de alguna
24 especie vegetal considerada como única, en peligro o rara en listas de
prioridad de conservación o protección?
Introducción de especies nuevas dentro de la zona o creará una
25
barrera para el normal desarrollo pleno de las especies existentes?
26 Reducción o daño en la extensión de algún cultivo agrícola?
Vida animal. ¿ La actividad:
Reducirá el hábitat o número de individuos de alguna especie animal
27 considerada como única, rara o en peligro en listas de prioridad de
conservación o protección?
Introducirá nuevas especies animales en el área o creará una barrera
28
a las migraciones o movimientos de animales?
29 Provocará la atracción o invasión, o atrapará la vida animal?
30 Dañará los actuales hábitats naturales?
Usos del suelo. ¿ La actividad:
31 Alterará sustancialmente los usos actuales o previstos del área?
Provocará impacto sobre un elemento de los sistemas de Parques
Nacionales, Refugios Nacionales de la Vida Salvaje, Ríos Paisajísticos
32
y Naturales Nacionales, Naturalezas Nacionales y Bosques
Nacionales?
Recursos naturales. ¿ La actividad:
33 Aumentará la intensidad del uso de algún recurso natural?
34 Destruirá sustancialmente algún recurso no reutilizable?
Energía. ¿ La actividad:
35 Utilizará cantidades considerables de combustible o de energía?
Aumentará considerablemente la demanda de las fuentes actuales de
36
energía?
Transporte y flujos de tráfico. ¿ Produce la actividad:
37 Un movimiento adicional de vehículos?
122
Efectos sobre las instalaciones actuales de estacionamiento o
38
necesitará nuevos estacionamientos?
39 Un impacto considerable sobre los sistemas actuales de transporte?
Alteraciones sobre las pautas actuales de circulación y movimiento de
40
gente y/o bienes?
Un aumento de los riesgos del tráfico para vehículos motorizados,
41
bicicletas, o peatones?
42 La construcción de caminos y/o rutas nuevas?
Servicio público. ¿Tendrá la actividad un efecto sobre, o producirá, la
demanda de servicios públicos nuevos o de distinto tipo en alguna de
las áreas siguientes:
43 Protección contra incendios?
44 Escuelas?
45 Otros servicios de la administración?
Infraestructura. ¿La actividad producirá una demanda de sistemas
nuevos o de distinto tipo de las siguientes infraestructuras:
46 Energía y gas?
47 Sistemas de comunicación?
48 Agua?
49 Saneamiento o fosas sépticas?
50 Red de aguas pluviales?
Población. ¿La actividad:
Alterará la ubicación o la distribución de la población humana en el
51
área?
Riesgos de accidentes. ¿La actividad:
Implicará el riesgo de explosión o escapes de sustancias
potencialmente peligrosas incluyendo, pero no sólo, petróleo,
52
pesticidas, productos químicos, radiación u otras sustancias tóxicas en
el caso de un accidente o una situación "desagradable"?
Salud humana. ¿La actividad:
53 Creará algún riesgo real o potencial para la salud?
54 Expondrá a la gente a riesgos potenciales para la salud?
Economía. ¿La actividad:
Tendrá algún efecto adverso sobre las condiciones económicas
55 locales o regionales, por ejemplo: turismo, niveles locales de ingresos,
valores del suelo o empleo?
Reacción social. ¿La actividad:
56 Conflictivo en potencia?
123
Una contradicción respecto a los planes u objetivos ambientales que
57
se han adoptado a nivel local?
Estética. ¿La actividad:
58 Cambiará una vista escénica o un panorama abierto al público?
Creará una ubicación estéticamente ofensiva abierta a la vista del
59 público (por ejemplo: fuera de lugar con el carácter o el diseño del
entorno)?
Cambiará significativamente la escala visual o el carácter del entorno
60
próximo?
Arqueología, cultura e historia. ¿La actividad:
Alterará sitios, construcciones, objetos o edificios de interés
61
arqueológico, cultural o histórico?
124
Anexo II
Influencia de las acciones impactantes de los feedlots del partido de Tandil sobre los factores ambientales
Factores Feedlots
ambientales A B C D E F G* H I* J* K* L* M N* Ñ O P Q R S T U V W X Y Z AA AB* AC* AD AE AF* AG AH** TOTAL
Aire
Apertura, Agua Superficial
mejoramiento y
mantenimiento de Agua Subterránea
caminos o vías de
acceso Suelo
Población 3 3 3 3 3 15***
Aire
Agua Superficial
Almacenamiento
Agua Subterránea
de alimento
Suelo
Población 3,3 3,3 3,3 3,3 3,3 17
Aire
Agua Superficial
Provisión de
Agua Subterránea
alimento y agua
Suelo
Población
Aire
Agua Superficial
Circulación de
Agua Subterránea
maquinaria
Suelo
Población 3,4 3 3 3 3 15
Manejo y
circulación del Agua Subterránea 3 3 3 3 3 3 3 3 3 3 36
rodeo
Suelo 3,5 3,2 3,2 3,5 3,2 3,2 3 3,5 3 3,2 3,6 3,2 3 3,2 3,2 3,2 62
Agua Superficial
Manejo y sanidad
Agua Subterránea
del rodeo
Suelo 3,2 3,2 3,2 3,2 3,2 13
Población 3,3 3,3 3,3 6,4 3,3 20
Aire
Agua Superficial
Transporte del
Agua Subterránea
ganado
Suelo 3,2 3,2 3,2 3,2 13
Aire 3,6 3,2 3,6 3,6 3,3 3,6 3,6 3,6 3 3,3 3,2 3,6 3 3,6 3,6 3,6 3 3 3,6 3,6 3,6 3,2 75
Generación de Agua Superficial 3,6 3,2 3,6 3,6 3 3,5 3,6 3 3,6 3,6 3,2 40
estiércol (residuos
Agua Subterránea 3,4 3,2 3,1 3,1 3,2 3,4 3,5 3,1 3,5 3,5 3,5 3,5 3,2 43
sólidos y líquidos)
y gases Suelo 3,4 3,6 3,3 3,6 3,5 3,5 3,3 3,4 3 3,5 3,6 3,5 3,3 3,3 3,5 3,5 3,5 3,4 62
Población 3,2 3,2 3,2 3,3 3,2 3,3 3,3 3,2 3,3 3,2 32
Aire
Agua Superficial
Ocupación de
Agua Subterránea
mano de obra
Suelo
Población
* No presentaron el correspondiente estudio de impacto ambiental ante la Dirección de Medio Ambiente del Municipio de Tandil.
** Sólo presentó una memoria descriptiva ante la Dirección de Medio Ambiente del Municipio de Tandil.
*** Los casilleros sombreados en color rojo representan a la sumatoria de los valores de los impactos negativos muy altos de cada acción de los feedlots del partido de Tandil sobre los factores ambientales.
Elaboración personal en base a Gonzalez Colombi et al. (2011) y la Dirección de Medio Ambiente de la Municipalidad de Tandil.
125