Déficit cognitivo

Para llegar a un posible diagnóstico del Déficit Cognitivo, se cuentan con tres criterios
principales: tener un C.I. inferior al promedio, menor de 70; presentar alteraciones en la
funcionalidad exigida por su entorno; además debe presentarse antes de los 18 años. El DSM-5
propone una nueva aclaración para el Déficit Cognitivo, basada en un enfoque multidimensional
que permita describir los cambios que se producen a lo largo del tiempo en la persona. Este
nuevo enfoque pretende evitar depender del C.I. para asignar un nivel de discapacidad y todo
ello se evalúa a través de cuatro dimensiones: Funcionamiento intelectual y habilidades
adaptativas, tomando en cuenta áreas psicológica, emocional, físicas, sensorial, etiológicas,
causas ambientales, etc.

Para determinar las limitaciones de las habilidades adaptativas, se debe realizar dentro de su
ambiente, siempre teniendo en cuenta las necesidades individualizadas de apoyo. Una vez que
la persona ha sido diagnosticada, es necesario describir sus fuerzas y debilidades, salud y
ambientes que le rodean en las cuatro dimensiones antes descritas. El equipo interdisciplinario
determina la intensidad del apoyo que el sujeto necesitara en cuatro dimensiones: Intermitente
es la persona que no siempre necesita el apoyo; el limitado necesita de apoyo consistente en el
tiempo; el extenso necesita de apoyo regular, en al menos, algunos entornos y sin limitación
temporal; y por último el completo necesita de un apoyo significativo por su constada y elevada
intensidad, en todos los entornos.

La evaluación del déficit se determina con la aplicación de un test de inteligencia; por ejemplo
la Escala Weschler, sin embargo el número del C.I. no es el único reflejo que debe tomarse en
cuenta; por ello, se debe de aplicar pruebas que evalúen la funcionalidad del sujeto en su vida
diaria en distintas áreas como sensorial, motora, autonomía, comunicación, socialización, entre
otras. El perfil tendrá énfasis en diferentes áreas según déficit cognitivo, en un caso severo se
priorizará la autonomía y la comunicación; en un caso leve, el aprendizaje y habilidades
vocacionales; asimismo, se debe incluir las condiciones socioeconómicas, culturales y del
entorno. Como resultado, debe proponer un programa de atención grupal, con otros sujetos del
mismo nivel, e individual, para realizar un seguimiento específico de los logros en el sujeto.

Según el DSM-V señala la necesidad de evaluar diferentes áreas y explicar los niveles de
funcionalidad del sujeto. La capacidad adaptativa se ve refleja en como la persona responde a
las exigencias de la vida diaria, a más alto el nivel de exigencia mayor desarrollo tendrá el niño.
Para este tipo de evaluación se ha de recolectar información de diferentes personas cercanas al
sujeto, para obtener mayor objetividad. Dicho esto, el rango del C.I. puede diferir de la
adaptabilidad, en los casos graves, su detección se da a edad temprana; en casos leve, se hacen
notorios en la edad escolar. Cabe mencionar que en algunos casos de Déficit Cognitivo presentan
comorbilidad con trastornos mentales, que suelen ser imperceptibles ya que no son muy
evidentes e incluso pueden establecerse diagnósticos erróneos.

Existen 5 niveles de Déficit Cognitivo: leve, medio, grave, profundo y límite. En los niveles leve y
medio, la persona puede alcanzar mayor desarrollo y autonomía, la supervisión es mínima y
pueden comunicarse sin dificultades, en otras palabras, se adaptan al entorno sin mayores
dificultades. Como se ha mencionado anteriormente, la funcionalidad de ellos va a depender de
la exigencia del entorno, la cultura y el nivel socioeconómico. Caso contrario, el nivel grave,
profundo y limite; presentan mayor dificultad para aprender a comunicarse, a su vez pueden
presentar comorbilidad con otras enfermedades lo que dificulta su desarrollo y adaptación, por
lo que requiere de mayor atención y supervisión de su entorno.

Vivian Calixtro, Elizabeth Montañez Psi. De las personas con habilidades diferentes
Preguntas
1. ¿Considera ser un problema tener un coeficiente intelectual inferior a 70?
2. ¿Delegarías trabajos a una persona con este diagnóstico?
3. ¿De qué manera ayudarías a las personas con un déficit cognitivo?
4. ¿Consideras que necesitan de ayuda especializada?
5. ¿Qué mensaje darías a la población a cerca de las personas con déficit cognitivo?

Vivian Calixtro, Elizabeth Montañez Psi. De las personas con habilidades diferentes