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Propiedades de la materia:

 Propiedades Extensivas: Dependen de la cantidad de materia que se


considere, por ejemplo: Volumen, peso, solubilidad etc.
 Propiedades Intensivas: La propiedad No depende de la masa del cuerpo
(1) Carácter Organolépticos: NO dependen de la masa del cuerpo, y que
podemos percibir con los sentidos de tacto, olfato, gusto etc. Por
ejemplo: Color, olor, textura, sabor, etc.
(2) Constantes Físicas: Son las propiedades que tampoco dependen de la
masa del cuerpo, y que determinan a través de instrumentos de medición
en el laboratorio. Pueden ser expresadas numéricamente, como sucede
en el punto de ebullición. Por ejemplo: Densidad, punto de ebullición,
punto de fusión, dureza, conductividad eléctrica, térmica y peso
específico.
Estados de agregación de la materia:
La materia se presenta en tres estados fundamentales: solido, liquido y gaseoso, los que
se denominan estados de agregación o estados físicos. Cada estado particular resulta de
la acción de dos tipos de fuerzas intermoleculares: de atracción y de repulsión.
Las fuerzas de atracción, llamadas también fuerzas de Van der Waals, tienden a unir a
las moléculas de tal manera que ocupen el menor espacio posible, mientras que las
fuerzas de repulsión tienden a separarlas.
De la intensidad de estos dos tipos de fuerzas dependen los estados físicos de la materia.
Los cuerpos en estado sólido poseen forma propia, la que dentro de ciertos
límites subsiste, aun cuando existan fuerzas exteriores que tienden a
deformarlos. Tienen volumen propio. En ellos, las fuerzas de atracción que
actúan entre las moléculas prevalecen sobre las de repulsión.
 Los cuerpos en estado liquido no poseen forma propia, aunque si volumen
propio. Adoptan la forma del recipiente que los contiene. Cuando se hallan en
reposo, presentan una superficie plana horizontal. En ellos se equilibran las
fuerzas de atracción con las de repulsión.
Los cuerpos en estado gaseoso no presentan forma o volumen propios,
adecuándose a la forma y volumen del recipiente que los contiene. Son
fácilmente compresibles. En ellos, las fuerzas de repulsión molecular
prevalecen sobre las de atracción.
Todo cuerpo en estado solido se caracteriza por la disposición regular de las
moléculas que lo constituyen. En cambio, en los estados liquido y gaseoso, la
disposición de las moléculas es más o menos desordenada.
Cambios de Estado:
Fusión: Es el pasaje de estado sólido a líquido. A una determinada temperatura
(temperatura de fusión), la fuerza de atracción entre las moléculas disminuye y el cuerpo
solido pasa al estado líquido. Por ejemplo: el hielo, por acción del calor funde, es decir
se convierte en líquido. Lo mismo ocurre con el plomo, azufre, el hierro.
Solidificación: Es el pasaje del estado liquido al sólido. Se produce por disminución de
la temperatura. Por ejemplo: el agua, por enfriamiento, solidifica y se transforma en
hielo. Escriba aquí la ecuación.
Vaporización: Es el pasaje del estado liquido al gaseoso. Cuando se produce en toda la
masa del líquido se denomina ebullición, que ocurre por aumento de temperatura o
disminución de la presión. La vaporización que solo tiene lugar en la superficie del
líquido, y que se produce a cualquier temperatura, se llama evaporación.
Licuación o condensación: Es el pasaje del estado gaseoso al líquido. Se produce por
disminución de temperatura o aumento de presión, o bien cuando se modifican
simultáneamente ambos factores. Asi, por ejemplo, el aire sometido a bajas
temperaturas y a altas presiones se licua, transformándose en aire líquido. Todos los
gases, como el oxigeno y el cloro, pueden ser licuados.
Sublimación: Es un proceso doble que consiste en el pasaje del estado solido al gaseoso
y del gaseoso al solido sin pasar por el estado líquido. Ejemplo: por acción del calor el
yodo se transforma en vapor, que al chocar contra una superficie fría se convierte
nuevamente en yodo sólido. El alcanfor, la naftalina y el hielo seco (dióxido de carbono
solido) también pueden sublimar.
Sistemas Materiales
Se llama sistema material a toda porción del universo que se aísla, real o
imaginariamente, para su estudio.
Son ejemplo de sistemas materiales: un trozo de mármol; agua y aceite contenidos en
un recipiente; gas en el interior de un neumático.
Se los clasifica en dos grandes grupos: homogéneos y heterogéneos.
 Sistemas homogéneos:
Si analizamos las propiedades intensivas de una muestra de agua pura (punto de
ebullición, de fusión, densidad) veremos que ellas permanecen constantes para
cualquier porción de agua que se considere. Lo mismo sucede, por ejemplo, con
el cloruro de sodio (sal común).
Si ahora disolvemos cierta cantidad de sal en agua, podemos comprobar que
también en este caso las propiedades intensivas de la solución son análogas para
todos los puntos de su masa.
Decimos entonces que el agua pura y la solución de sal en agua constituyen
sistemas homogéneos.
Es aquel que presenta las mismas propiedades intensivas en todos sus puntos.
Las muestras de azufre, yodo o alcohol; también lo son las soluciones de alcohol
en agua, el agua de mar filtrada, el aire puro y seco.
 Sistemas Heterogéneos:
Si analizamos un sistema constituido por agua y nafta, comprobaremos que no
posee homogeneidad, ya que puede discriminarse a simple vista entre la zona
ocupada por un líquido y la que ocupa el otro: se presenta como una capa
definida por encima del agua. También podemos comprobar que ciertas
propiedades intensivas (por ejemplo, la densidad) no se mantienen constantes
cuando pasamos de un punto ocupado por el agua a otro ocupado por la nafta.
El agua y la nafta forman un sistema heterogéneo.
Presenta distintas propiedades intensivas en por lo menos dos de sus puntos.
Ejemplo: muestras de agua con arena; talco con limaduras de hierro; de pólvora
(clorato de potasio, azufre y carbón en polvo); y mucho más.
En un sistema heterogéneo, se denomina fase a cada uno de los sistemas
homogéneos en que puede considerárselo dividido.
Las fases pueden presentar cualquiera de los tres estados físicos, y están
separadas entre si por superficies netas y definidas.
El sistema arena-agua y sal consta de dos fases. En cambio, el nuevo sistema que
ilustra la figura esta formado por tres fases: agua, arena y madera.
Sistema Dispersos:
Si agitamos un sistema heterogéneo formado por agua y arcilla podemos
observar las partículas de arcilla, finamente divididas, dispersas en el agua.
Este sistema se denomina Sistema Disperso o dispersiones.
Las dispersiones comprenden las soluciones (sistemas homogéneos) y los
sistemas heterogéneos en los que una fase contiene a otra distribuida en ella, en
forma de partículas muy pequeñas. En el segundo caso (dispersiones
heterogéneas) la fase que se encuentra dividida se llama fase dispersa o interna;
la otra es la fase dispersante o externa. Esta nomenclatura no se utiliza en el caso
de las soluciones, ya que por tratarse de sistemas homogéneos constan de una
única fase.
Las partículas dispersas pueden presentar cualquiera de los tres estados físicos;
los mismo sucede con el medio en el que dichas partículas se hallan distribuidas.
Por lo tanto, existen nueve casos posibles:
Las dispersiones mas comunes son aquellas en que el medio donde se dispersan
las partículas es un líquido.
Las propiedades de los sistemas dispersos y su estabilidad dependen del tamaño
de las partículas dispersas. Si estas son muy grandes, los sistemas dispersos son
inestables, y en poco tiempo se produce la separación de las fases.
Para expresar las dimensiones de las partículas dispersas es frecuente utilizar la
unidad denominada micrón (𝜇), equivalente a la milésima parte de un milímetro.
Según el grado de división de las partículas dispersas, las dispersiones se
clasifican en:
a) Dispersiones groseras o macroscópicas: Son sistemas heterogéneos que se
caracterizan porque la fase dispersa puede ser observada a simple vista o
con una lupa. Las dimensiones de las partículas dispersas son mayores que
𝟓0μ. Por ejemplo: talco y agua; azufre y limaduras de hierro, agua y gas.
(soda)
b) Dispersiones finas: Son sistemas heterogéneos en los cuales la fase dispersa
no es visible a simple vista, pero si lo es observada al microscopio. Las
dimensiones de las partículas dispersas oscilan entre 50𝜇 𝑦 0,1𝜇. Por
ejemplo: la leche se presenta a simple vista como un líquido blanco
homogéneo, pero observada al microscopio resulta ser un sistema
heterogéneo constituido por la dispersión de partículas de materia grasa en
un medio líquido. En este caso, ambas fases son liquidas: la dispersión se
denomina emulsión. Si la fase dispersa es sólida la dispersión se llama
suspensión.
c) Dispersiones coloidales o soles: Son sistemas heterogéneos cuya fase
dispersa posee un alto grado de división y solamente es visible al
ultramicroscopio. Este aparato no es mas que un microscopio común en el
cual la luz no incide directamente sobre las partículas sino en forma lateral.
Son ejemplos de estos: la gelatina, el agua jabonosa, la clara de huevo en
agua. Las partículas de la fase dispersa reciben en este caso el nombre de
micelas y sus dimensiones oscilan entre 0,1𝜇 𝑦 0,001𝜇.
d) Soluciones verdaderas o moleculares: en este caso las partículas dispersas
se encuentran en un grado de división máxima: las dimensiones de las
partículas son menores que 1 𝑚𝜇 (milímicron). Por ejemplo: sal disuelta en
agua. Constituyen sistemas homogéneos, llamados simplemente soluciones.

Separación de fase
Tamización: se emplea cuando el sistema heterogéneo está formado por fases
sólidas, Cuyas partículas son de diferente tamaño. Por ejemplo: cuándo tamizo
con el colador la harina; Cuando tamizo en la malla metálica la arena.
Las partículas de mayor tamaño que dan sobre el tamiz; y las partículas más
pequeñas lo atraviesan.
Levigación: Se separan sistemas heterogéneos formados por fases sólidas de
distinto peso. Por ejemplo: 1) cuando separamos oro de arena, Se hace pasar
sobre una corriente de agua que arrastra el componente más liviano y deja el
más pesado (oro). 2) agua- arena- aserrín.
Flotación: Se separan sistemas heterogéneos formado por sólidos de distinta
densidad, tales como arena y partículas de corcho. Si se sumerge el sistema en
un liquido de densidad intermedia (por ejemplo: agua) la fase más liviana
(corcho) flota, y la mas pesada (arena) se deposita en el fondo del recipiente.
Filtración: permite separar una fase solida dispersa en un medio líquido, tal
como talco en agua. Como material filtrante suele emplearse papel de filtro. Se
utiliza arena, carbón en polvo, amianto, algodón.
Decantación: se emplea para separar las fases de un sistema heterogéneo
formado por líquidos no miscibles (no solubles entre sí) de distinta densidad,
como por ejemplo: agua y nafta. Si se deja el sistema en reposo, por diferencia
de densidad se separan ambas fases; la nafta (menos densa) sobrenada y el agua
(más densa) Se deposita en el fondo del recipiente.
En los laboratorios emplean recipientes especiales denominados ampollas o
embudo de decantación. Cuando se abre la llave, el líquido que ocupa la posición
inferior circula hacia abajo y ambas fracciones se separan.
La decantación se emplea también para separar una fase sólida dispersa en un
líquido, tal como arena y agua por diferencia de densidad.
Centrifugación: Se emplea para acelerar el proceso de “decantación”,
sometiendo el sistema a una rotación. La fuerza centrífuga que actúa sobre las
fases permitir la separación de las mismas con mayor rapidez.
Disolución: se aplica cuando una de las fases es soluble en un determinado
solvente, mientras que la otra no lo es.
Un sistema formado por arena y sal puede ser separado introduciéndolo, en un
recipiente que contiene agua, luego agitar el sistema para permitir la disolución
de la sal, se lo somete a filtración, separándose así la arena del agua salada. A su
vez se separa el agua de la sal por evaporación del disolvente.
Sublimación: Permite separar aquellas fases capaces de sublimar, así ocurre en
el caso de un sistema constituido por “yodo y arena”.
El yodo Sublima por efectos del calor y se convierte en vapor, adoptando luego
nuevamente el estado sólido al tomar contacto con una superficie fría.

Fraccionamiento de Fases:
Los métodos de fraccionamiento de fases más importantes son la destilación y la
cristalización.
Destilación simple:
Se emplea, por ejemplo: para separar un líquido de las sales disueltas en él. Así es posible
obtener agua pura a partir del agua de mar. El fundamento es muy sencillo: Si la solución
es llevada a una temperatura adecuada, el agua se vaporiza, “separándose” de la sal
disuelta en ella. Al condensar el vapor de agua, obtenemos nuevamente agua en estado
líquido.

El aparato de destilación consta de: a) un balón de destilación; b) un tubo


refrigerante; c) un termómetro y d) un recipiente colector.
En el balón se coloca el agua que contiene sales disueltas y se la somete a la
acción del calor. Cuando se produce la ebullición, los vapores pasan por el tubo
refrigerante y allí se condensan. Para ello, el conducto por donde circulan dichos
vapores debe ser enfriado, lo cual se logra por medio de una corriente de agua
que fluye continuamente por fuera de aquel. El agua pura, condensada, se
recoge en el recipiente colector.
Destilación Fraccionada:
Se emplea para separar líquidos miscibles que tengan puntos de ebullición
sensiblemente diferentes.
Si eso no ocurre, los vapores de los componentes más volátiles (de menor punto de
ebullición) arrastran consigo a los de aquellos componentes menos volátiles (de mayor
punto de ebullición) y estos a su vez, retienen a los primeros. El fraccionamiento resulta
por lo tanto insatisfactorio.
En la práctica se utilizan dispositivos llamados columnas rectificadoras o deflegmadores,
Que permiten una separación definida de los líquidos.

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