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1825-1860

-Hasta 1830 se vive “en la época de las luces”, racionalista y humanitaria. Bajo el signo de la
Ilustración se hizo la revolución de mayo, la independencia y la primera organización política y
cultural de la República.

-Desde 1830 Buenos Aires recibe las influencias del romanticismo francés y se forma la
generación del 37 (Echeverría, Alberdi, Gutiérrez, Sarmiento, López, Mitre) en la que todos
coinciden en justificar la ruptura total con España, en expresar las emociones originales que
suscita el paisaje americano y en probar un sistema político liberal.

Romanticismo

Preeminencia del yo y su contorno, el romántico se siente centro del mundo pero a la vez
criatura del mundo, está más atento a las voces de su vida individual que a los consejos de una
razón universal.

-armonía entre lo subjetivo y lo objetivo.

-Inspiración libre y espontanea, impulsos pasionales

-La literatura como evocación a un pasado nacionalista y también como propaganda para un
mundo liberal.

Imbert alude a dos generaciones románticas

1. Antes de 1850

Fue mas una actividad civilizadora que una escuela de bellas letras: las armas, por literarias
que parecieran era para usarlas fuera de la literatura en la guerra entre tradición y
progreso, hispanismo y europeísmo, masas y minorías

-Para no confundirse con los románticos tradicionalistas, vueltos hacia la Edad Media, la
religión, la leyenda y el egotismo, hubo muchos que militaron en un romanticismo social,
democrático, progresista, profético, liberal, colectivista y negaban ser románticos. Estos se
apartaban del pasado español, defendían los derechos de una lengua americana y
prometían una literatura nacional, basada sobre todo en el paisaje y los modos de vivir.

Fue más europeizante que hispanófila, los modelos románticos de otros países fueron más
bien los de España, en nuestro caso, franceses.

-La prosa se dignificó literariamente en novelas, cuentos, folletines periodísticos, cuadros


de costumbres, ensayos, memorias de viajes y aun poemas en prosa. El cuadro de
costumbres simpatiza con el color local, se hace dinámico y se convierte en cuento. El
costumbrismo de los “cuadros” entra en la composición de novelas realistas.

Producción literaria:

Echeverría: Elvira o la novia del Plata (1832), la cautiva (1837), el matadero (1838,
publicado en el 71)
Alberdi: las cartas quillotanas
Juan María Gutiérrez: Poesías (1869); el hombre hormiga (1838)
Sarmiento: Facundo (1845), ensayo; Mi defensa (1843); Recuerdos de provincia (1850);
Campaña en el ejercito grande (1852); Conflicto y Armonías de las razas en América (1883)
Vicente Fidel López: La novia del hereje (1840)novela histórica.
Hilario Ascasubi: Paulino Lucero, Aniceto el gallo, Santos Vega o los mellizos de la flor
(1872)
José Mármol: Armonías (1851-54); Amalia (1851-55) novela política.

2. Después de 1850:

-Temas: tristezas de titanes vencidos, costumbres y hablas populares, leyendas


indígenas de pueblos extinguidos, la historia, el destierro, las guerras civiles.
- el costumbrismo, de origen romántico, acabó por hacerse realista.

Producción literaria:

Los poetas gauchescos


Estanislao del Campo: respondía a las sátiras que Ascasubi publicaba con el seudónimo
de Aniceto el Gallo, como Anastasio el pollo. Esto ocurría desde 1857 en adelante.
Logro el estilo de poesía tradicional, esa que el pueblo siente suya y la transmite de
boca en boca sin que a nadie le interese quien fue el autor individual. Pero al marchar
hacia el estilo poético tradicional se apropió de un estilo de vida que no era el propio
y, festivamente creó personajes individuales, con sus modos de sentir pensar, de
actuar, asomados al mundo culto.
Del campo fue superior a su modelo Ascasubi. Sin embargo sería superado después
por otro poeta gauchesco: Hernández. Con el motivo de la publicación de Fausto
(1866) se renovó en Buenos Aires a cuestión de si existía una “literatura nacional”. Se
hace un balance y, en 1870, hay quienes dicen que no la hay.
José Hernández: Martin Fierro (Ida 1872, vuelta 1879). El propósito era serio. En el
fondo de sus versos hay una polémica sorda contra un grupo europeísta, indiferente a
lo gaucho; o de europeístas que creían que Fausto era la medida de lo que el género
gauchesco podía dar.
Reprocha a los poetas gauchescos el haber dejado una tarea a medio hacer.
Remeda, con más talento que todos, la voz autentica del gaucho. Martin Fierro tienen
un doble público: se dirige a lectores cultos y a los gauchos.
Con las mismas palabras ofrece dos mensajes distintos: ante los cultos, reclama justicia
para el gaucho y ante los gauchos, procura darle lecciones morales que mejoren su
condición. De esta manera era un poema político cuando de lo leía en la ciudad y un
poema pedagógico cuando se lo leía en el campo.
Martin Fierro no es un poema épico (postura de Imbert) es un poema popular en el
que el poeta, con toda deliberación, pone su cano al servicio de una tradición oral.
Hernández no refunde poemas ajenos: lo inventa todo pero en la postura espiritual del
payador. Por eso su Martin Fierro parece surgido del pueblo anónimo, por eso los
gauchos lo leyeron como cosa propia.
En la “Ida” Hernández levanta un retablo sociológico y sobre el hace mover la figura
anárquica orgullosa y maltratada del gaucho. El punto de partida es lógico,
constructivo, de quien ha estudiado la realidad social y se propone dar un mensaje
político. Alegóricamente, Fierro huye y no tiene mas esperanza que la que ofrece la
indiada al otro lado de la civilización.
En la “vuelta”, Fierro reaparece con una visión europea y progresista del trabajo.
Ahora elude la pelea y da explicaciones de porqué antes mató; justificaciones legales
que justifican que Hernández en el fondo, era un conservador respetuoso de la lay. Y
es que, en 1879 (ya no gobierna Sarmiento, Avellaneda es el nuevo presidente),
reconoce legítima la sociedad que antes en la “ida” la condenó. Hay dos morales en la
“Vuelta” la que Hernández propone y la que el cinismo del viejo Vizcacha documenta
como una realidad; una moral con fines ideales y ora moral oportunista, Civilización y
Barbarie y he aquí que Hernández, el enemigo de Sarmiento, a la postre coincide con
él.
Martín Fierro es uno de los poemas más originales que ha dado el romanticismo
hispánico (literatura como expresión de la sociedad, color local, nacionalismo, simpatía
por lo popular, el exótico tema de las costumbres indias; el héroe victima de la
sociedad, exiliado y doliente; la noble amistad con cruz, los episodios novelescos de
violentos contrastares como la muerte de Vizcacha, la pelea entre el indio y Fierro ante
la mujer y la criatura degollada y los felices encuentros de Fierro con sus hijos y con los
de cruz.

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