Vous êtes sur la page 1sur 12
ACCION DE LA COCAINA SOBRE LA RESISTENCIA ALA FATIGA EN EL PERRO Carios Guriérrez-Noprizca Depestamentos de Farmacologia del Instituto Nacional de Higiene y de ta Feculted de Medicina. Desde la mAs remota antigitedad los peruanos han utilizado la coca para combatir el hambre, el frio y la fatiga. Las crénicas de los prime- ros afios de la colonia contienen algunos datos sobre este empleo de la droga. Segiin una observacién de Hirduito UNaNue, en el sitio de La Paz de 1771, la coca permitié a los habitantes soportar el hambre, el {rio y la fatiga durante varios meses de asedio. El mismo autor refiere que slo los soldados que masticaban coca lograron atravesar cierta region del altiplano durante la misma guerra. El coronel Carvayat, segin una cita de Fuswres, refiere en su Boletin Militar que durante la campafia de Junin, en la guerra de la Independencia, los soldados que masticaban coca fueron los tinicos capaces de combatir después de una esforzada jornada en las punas. Otros muchos autores han llamado la atencién sobre la accién vigorizante de la coca, de los cuales merecen especial ‘mencign Mortimer, MzrzBacter y RAIMONDI, que hicieron interesan- tes observaciones sobre la resistencia a la fatiga. Finalmente el general Mutter, que participé en las guerras de Ja independencia americana, Ilevé su conviccién sobre Ja accién vigorizante de la coca no sélo hasta permi- tir su uso entre sus tropas, sino a experimentarla en si mismo. La aplicacién de las drogas para intensificar el rendimiento del tra- bajo humano y para retardar la fatiga, que se inicia como acabamos de ver hace muchos siglos entre los aborigenes peruanos, es un problema de gran actualidad. En efecto, el ejército aleman ha utilizado la bence- dtina y el pervitim o desoxifedrina para aumentar el vigor de los solda- dos (StauB). Pero el interés de los europeos por las drogas que con- trarcestan la fatiga y aumentan el rendimiento de trabajo se inicia en rea~ lidad a fines del siglo pasado. 330 REVISTA DE MEDICINA EXPERIMENTAL Ea 1893 Mosso publicé sus primeras observaciones sobre el aumen- to de la capacidad de trabajo por accién de la cafeina. ° Tres afios des- pués, Hoci & KRAEPPELIN y luego Oseretz-Kowsky & KRAEPPELIN, ob- ‘servan que la cafeina aumente la fuerza de contraccién, pero sin afectar la frecuencia de las contracciones, infiriéndose, puesto que el nimero de ‘scontracciones depende de Ja accién sobre el sistema nervioso central y Ja intensidad de la concentracién del mésculo, que la cafeina actia so- Ine el masculo. Al contrario, Rivers 6 Wenser afirmaron que la cafei- na actita sobre los dos mecanismos, central y periférico, nervioso y mus- cular. El efecto periférico, segin las observaciones de Rei, es muy poco importante para la fatiga. En experimentos con el ergografo de Mosso, Tue. 5 Messic de- mostraron que dosis de 0.05 a 0.1 grs. de cocaina por via oral aumentan Ja resistencia a la fatiga. También se han verificado observaciones so- ‘bre Ia accién directa de la cocaina sobre el misculo de rana, demostran- dose que aumenta Ia resistencia a {a fatiga e intensifica Ja contraccién. A fuertes concentraciones produce el efecto opuesto. En el hombre, la ingestién de cocaina_a la dosis de !00 mgrs. aumenta mucho el trabajo voluntario, pero ta misma dosis por via parenteral disminuye tanto el trabajo esponténeo como la respuesta a las excitaciones {citado por Zunz). Recientemente se ha concedido especial interés a la cafeina, ala ben- cedrina y a Ja desoxifedrina. Merece citarse, entre los numerosos tra- bajos que se han publicado, las observaciones de Foutz, SCHIFFRIN & Ivy, sobre la bencedrina y cafeina, en 23 sujetos no entrenados los que examinados por el test del doble periodo de trabajo no presentaron mo- dificaciones significativas con dosis de 10 mgr. y 0.5 gr. de la primera y segunda de las drogas mencionadas. Al contrario,’ en sujetos entrena- dos Ia cafeina aumenta la ejecucién y acelera la recuperacién (Fourz, Iw « Barsorxa). Los mismos autores demostraron que la bencedrina ‘no tiene efecto sobre la ejecucién del primero y segundo periodo de tra- bajo ni sobre la recuperacion, y que la desoxifedrina aumenta la ejecu- cién del primer periodo de trabajo pero que no afecta la recuperacién. Segan Autes & Fricen la bencedrina y la cafeina tienen una accién dua- lista. Dosis de 10 a 40 mgrs. de bencedrina inhiden la produccién de fatiga, y afectan la extensidn de las contracciones 0 el numero de ellas, ‘© bien ambos factores; pero estos autores atribuyen la accion de la ben- cedrina principalmente a un mecanismo nervioso central. Dosis de ca- feina aun diez veces mayores producen un efecto inferior-a la bencedri- na. También Jacopson & Krart, en experiments sobre’el movimiento COCAINA ¥ RESISTENCIA A LA PATIGA 331 de los dedos, ofrecen resultados a favor de la bencedrina, y Enzer, Si- MONSON & BLANKSTEIN legan a la misma conclusién utilizando el mismo método con el pervitim. Los expetimentos de la accién de Jas drogas sobre el trabajo muscu- Jar efectuados recientemente, no se refieren a la cocaina, Al contrario, se han publicado observaciones que podsian interpretarse desfavorable- mente, pues se refieren a una posible. accién curarizante, de la cocaina y de la novocaina, Las primeras pesquisas se deben a Mac Grecor y a Harvey, y las mas recientes y demostrativas a Jaco y Woon, quienes no sélo afirman que 1a cocaina y la novocaina poseen una accién curari- a, sino un antagonisme con respecto a la accién muscarinica de la pros- tigmina. En el presente trabajo referimos nuestras primeras observaciones acerca del efecto de Ja cocaina sobre la resistencia a la fatiga de los perros. MEérovo Se han puesto en practica diversos métodos para el estudio de In accién de fas drogas sobre la resistencia a Ja fatige. En conjunts pueden dividirse, dejande a un Jado Jos detalles de céonica, en dos grupos : métodos para estudiar Ja fatiga de un s6- fo misculo o de un limitado conjunto de muisculos, de los que ef ergégrato de Mosso es el mejor ejemplo; y métodas para el estudio de la fatiga en todo el organismo, que no s6lo comprenden el factor neuro-muscelar sine también los factores cardio-respira- tories, Ninguno de los procedimientos para el estudio de Ia accién de lax drogas sobre Ja fatiga carece de inconvenientes. De alli las discrepencias de los resultados basta hoy obtenidos, como es dable apreciar por la bibliografia citada, Las dificultades se duplican cuando se utilizan animales ef el estudio del problema, pues en este caso no es posible contar con ta cooperacién del sujeto experimentado, que en los métodos aplicados al hombre es un factor indispensable. Asi, algunos procedimientos bien co- nceidas para el estudio de Ja actividad espomidnea en los animales. por ejemplo las jaulas giratorias o senéibles al movimiento y en conexién con un sistema de registro, no som aplicables a este caso. Por este motivo fué elegido un ejercicio del cual no puede evadirse ef animal ex- perimentado y em el que se ponen en accién Ja mayoria de los musculos. El proce- dimiento consiste en introducit al petro en una piscina en la que se le mantiene na~ dando hasta gue sparecen los primeros sintomas de fatiga, que consisten en fa pérdi- da de capacidad para mantenerse a flote, es decir, cuando el animal se bande y em~ piesa a tragar agua. La temperatura, la frecuencia de latidos cardiagos-y la respi- racién fueron determinadas antes del ejercicio, y después de éste cada 19 minutos has- ta la recuperacion completa. Puesto gue en esta clase de experimentos el entrenamiento es un factor de primer ‘orden, se utilizaron dos procedimientos a fin de descartarls y no coafundirlo con el efecto de la droga, Liamamos al primero método de los experimentos interpalados:

Vous aimerez peut-être aussi