INFORME DE LECTURA

(LA PREDESTINACIÓN)

JUAN DAVID SÁNCHEZ PORRAS

LAS DOCTRINAS DE LA GRACIA EN JUAN

MEDELLÍN, 20 DE MARZO DEL 2018

 INFORME DE LECTURA
(LA PREDESTINACIÓN)
1. Datos Bibliográficos
Titulo: La predestinación (The Reformed Doctrine of Predestination)
Capítulos: 5
Páginas: 84
Autor: Loraine Boettner
Editorial: Presbyterian and Reformed Publishing Company
Ciudad: Phillipsburg, New Jersey
Año de publicación: 1932
2. Bosquejo del Contenido
- SECCIÓN II
 CAP 10: Inhabilidad total
1. Exposición de la doctrina
2. El alcance y los efectos del pecado original
3. Los defectos en las virtudes comunes de los hombres
4. La caída del hombre
5. El principio de representación
6. La bondad y la severidad de Dios
7. Pruebas bíblicas
 CAP 11: Elección incondicional
1. Exposición de la doctrina
2. Pruebas bíblicas
3. Argumentos lógicos
4. La fe y las buenas obras son los frutos y las evidencias, no la base de la elección
5. La reprobación
a. Exposición
- Comentarios de Calvino, Lutero, y Warfield
b. Pruebas bíblicas
- La doctrina de la reprobación está basada en la del pecado original; Ninguna
injusticia es hecha a los elegidos.
 - La condición de los paganos
- Propósitos del decreto de reprobación
- Los arminianos concentran sus ataques sobre esta doctrina
- No estamos obligados a explicar todos los detalles de estas doctrinas
6. Infralapsarianismo y supralapsarianismo
7. Muchos son escogidos
8. Un mundo o raza redimida
9. Los redimidos – una inmensa muchedumbre
10. El mundo se esta tornando mejor progresivamente
11. La salvación de los niños pequeños
12. Resumen de la doctrina reformada de la elección
 CAP 12: Expiación limitada
1. Exposición de la doctrina
2. El valor infinito de la expiación de Cristo
3. El propósito y la aplicación de la expiación son limitados
4. La obra de Cristo como el perfecto cumplimiento de la ley
5. Un rescate
6. El propósito divino en el sacrificio de Cristo
7. La exclusión de los no elegidos
8. El argumento basado en la presciencia de Dios
9. Ciertos beneficios que se extienden a la humanidad en general
 CAP 13: La gracia eficaz
1. La enseñanza de la confesión de Westminster respecto a la doctrina de la gracia eficaz
2. La necesidad del cambio
3. Un cambio interno efectuado por el poder sobrenatural de Dios
4. El efecto producido en el alma
5. La suficiencia de la obra de Cristo el principio evangélico
6. El concepto arminiano de la gracia universal
7. El libre albedrío del hombre no es violado
8. La gracia común
 CAP 14: La perseverancia de los santos
 1. Exposición de la doctrina
2. La perseverancia no depende de nuestras buenas obras sino de la gracia de Dios
3. Aunque es verdaderamente salvo, el creyente puede caer temporalmente y pecar
4. Una profesión externa no es siempre prueba de que la persona es un creyente
verdadero.
5. El sentido de inseguridad de los arminianos
6. El propósito de las advertencias contra la Apostasía en las Escrituras
7. Pruebas bíblicas
3. Resumen
CAP 10: Inhabilidad total
Lo que en realidad significa es que el hombre desde la caída se encuentra bajo la maldición del
pecado, que es movido por principios pecaminosos, y que es incapaz de amar a Dios o de hacer
algo que haya de ameritar la salvación. En lo que a su salvación respecta, el hombre no
regenerado no posee la libertad de escoger entre el bien y el mal, sino sólo entre un mal mayor y
uno menor, lo que en realidad no es libre albedrío. El hecho de que el hombre caído aún tenga
habilidad para hacer algunas obras moralmente buenas en sí mismas no prueba que pueda hacer
obras que ameriten la salvación. Todas sus virtudes comunes o buenas obras tienen un defecto
fatal, y es que los motivos que las generan no tienen como fin el glorificar a Dios, un defecto tan
fatal que totalmente oscurece todo elemento de bien en el hombre. Los efectos de la caída son
tales que la voluntad del hombre tiende sólo hacia abajo, hacia actos de pecado y estupidez.
CAP 11: Elección incondicional
El amor de Dios para con los hombres caídos se manifestó en su elección de una innumerable
multitud para la salvación y en la provisión de un redentor quien, actuando como cabeza federal
y representativa, asumió la culpa, pagó la pena, y compró la salvación de los elegidos. Las
Escrituras atribuyen siempre el decreto de elección al amor de Dios y nunca se cansan de
levantar nuestra vista del decreto mismo al motivo detrás del decreto. Como todos son pecadores
y están destituidos de su gloria, él es libre para mostrar misericordia al que quiere. La fe y las
buenas obras vistas de antemano por Dios no son, por tanto, la causa de la elección divina sino,
más bien, los frutos y las evidencias de dicha elección. Creemos que desde toda la eternidad Dios
se propuso dejar a algunos de la posteridad de Adán en sus pecados, y que el factor decisivo en la
vida de cada uno se encuentra sólo en la voluntad de Dios.
CAP 12: Expiación limitada
Como podrá notarse, esta doctrina se desprende necesariamente de la doctrina de la elección. Si
desde la eternidad Dios se propuso salvar a una porción de la humanidad y al resto no, sería
contradictorio afirmar que su obra tiene referencia igual a ambas porciones, o que envió a su
Hijo a morir por aquellos que él había predeterminado no salvar en el mismo sentido en que lo
envió a morir por aquellos que había escogido para salvación. Esta doctrina no significa que se
puede limitar el valor o el poder de la expiación que Cristo hizo. El valor de la expiación
depende de y es medido por la dignidad de la persona que la hizo; y dado que Cristo sufrió como
una persona divina—humana, el valor de su sufrimiento es infinito. La expiación es limitada sólo
en el sentido de que era destinada para salvar a ciertos individuos en particular y, por
consiguiente, es aplicada únicamente a dichos individuos; es decir, a los salvos. Sostenemos que
Cristo actuó como sustituto de los elegidos, que hizo plena satisfacción por los pecados de éstos,
y así quitó la maldición que pesaba sobre ellos a causa del pecado de Adán y de todos los
pecados temporales; y que mediante su vida impecable guardó perfectamente para ellos la ley
que Adán había transgredido, ganando así para los escogidos la recompensa de la vida eterna.
CAP 13: La gracia eficaz
Si el hombre está muerto en pecado, entonces nada menos que el poder sobrenatural y
vivificador del Espíritu Santo podrá moverle a hacer aquello que es espiritualmente bueno. La
regeneración es un don soberano de Dios, concedido gratuitamente a los escogidos; y sólo Dios
posee el poder para llevar a cabo esta gran obra de recreación. El don de la regeneración no
puede ser concedido a los hombres por haberse previsto en ellos alguna cosa buena, ya que en su
naturaleza no regenerada los hombres son incapaces de actuar con motivos rectos hacia Dios; por
tanto, ningunas buenas obras son previstas en ellos. La regeneración del alma es algo efectuado
en nosotros y no una obra realizada por nosotros. Es un cambio instantáneo de muerte espiritual
a vida espiritual y ni aun estamos conscientes de él en el momento en que ocurre, ya que ocurre a
un nivel más allá del estado consciente. Como resultado de dicho cambio, la persona pasa de un
estado de incredulidad a uno de fe salvadora, no por algún proceso de investigación o de
argumentación, sino por una experiencia interna. Esta gracia eficaz e irresistible convierte la
voluntad misma y produce en el individuo, mediante un acto creador, un carácter santo.
CAP 14: La perseverancia de los santos
Si Dios ha escogido absoluta e incondicionalmente a ciertas personas para vida eterna, y si su
Espíritu aplica eficazmente a éstas los beneficios de la redención, entonces la conclusión
ineludible es que estas personas serán eternamente salvas. Los verdaderos creyentes tienen
dentro de sí mismos el principio de vida eterna, es decir, el Espíritu Santo; y puesto que el
Espíritu Santo vive dentro de ellos, ya son potencialmente santos. Y aunque es cierto que son
sometidos a diversas pruebas y aún no ven lo que habrán de ser, deben saber que lo que ha sido
comenzado en ellos será perfeccionado hasta el fin, y que la misma lucha que hay en ellos es
señal de vida y promesa de victoria. El amor infinito, misterioso y eterno de Dios para con los
creyentes es una garantía de que jamás se perderán. Este amor divino no está sujeto a
fluctuaciones sino que es tan inmutable como el mismo ser de Dios. La doctrina de la
perseverancia, cabe señalar, no significa que el creyente no pueda caer víctima del pecado
temporalmente, ya que esto es ocurrencia demasiado común. Mientras el creyente permanezca en
este mundo su estado es uno de continua lucha. Sufre derrotas temporales y en ocasiones puede
que parezca haber perdido toda la fe; sin embargo, si ha sido verdaderamente salvo, no puede
caer completamente de la gracia.
4. Evaluación
El autor del libro es alguien que esta defendiendo la fe bíblica y que admite los cinco puntos del
calvinismo como parte fundamental del cristianismo reformado en oposición del arminianismo.
Expresa una idea contundente de lo que son las doctrinas de la gracia y expresa de una manera
amplia lo que son, como aparecen en las Escrituras y lo que significan para la raza caída y en
especial para los escogidos para salvación. Pone en oposición el arminianismo que se encarga de
creer todo lo contrario a lo que es expuesto en el TULIP, el autor desmiente esto con argumentos
sólidos y se encarga de defender el calvinismo como aquel que se apega a las Escrituras. Su base
es bíblica, y el desarrollo profundiza en el tema de las doctrinas de la gracia.
5. Aplicación Personal
En si el libro es de bastante ayuda en lo que concierne a las doctrinas de la gracia y en la
exposición de las mismas. Es un libro que me sirvió para seguir adquiriendo más conocimiento
acerca de la fe reformada y de esta manera poder presentarla a las personas que no la conocen
como una fe que se apega a las Escrituras y a Dios mas que al hombre mismo como lo enseña el
arminianismo, de esta manera al conocimiento le saco provecho frente a situaciones de defensa
pero aún mas sabiendo que todo esto debe ser con el fin único de glorificar el nombre de Dios.