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La experiencia que he podido tener hace aproximadamente desde 1 año, ha sido un poco
desagradable, ya que debido a los favores políticos, la mayoría de profesionales que ingresan a
entidades públicas, en este caso la Alcaldía del Municipio de Cimitarra Santander, piensan que porque
van recomendados por el Alcalde, Concejales o Personas pudientes, pueden llegar a tratar a las
personas como ellos deseen. A título personal, he tenido en repetidas ocasiones inconvenientes con mi
Jefe, ya que a veces tiene una forma un poco indecente para dirigirse no solo conmigo, con mi grupo
de trabajo. En repetidas ocasiones nos ha gritado, le dice a otras personas cosas que no se deben decir,
manifiesta que ella es la Jefe y que se hace lo que ella diga. Hemos hablado con la Secretaria de
Salud, pero la solución de ella ha sido escucharnos y decir Muchachas deben mejorar la forma en la
que se dicen las cosas, esa es la solución por parte de ella. Todo esto se presenta debido a que son
personas que se sienten tan seguras de su puesto de trabajo que no les interesa pasar por encima de sus
colaboradores, solo por sentirse importantes o que tienen un mando, es aquí donde se ve la
corrupción que se vive dentro de cada una de las oficinas, ya que así como nosotras, hay empleados
que se encuentran en la misma situación y nadie da manejo. La Ética Profesional es olvidada, los
valores la forma de trabajar, cuando se tiene la oportunidad de trabajar con estas entidades se ve como
dan el mal manejo a los recursos financieros y como falta calidad humana, es desconcertante una
situación como está.
Según la ética de Aristóteles se entiende que no se hacen las cosas si no de obrar bien u obrar mal, de tal
manera se deduce que en la sociedad la ética no es clara siempre está contaminada de malos pensamientos, no
todas las personas obran ante los demás de buena fe y las personas que llegan actuar de buena manera son
juzgadas por la misma comunidad. A mi parecer debemos tratar de actuar siempre de manera correcta, ya que
no hay nada más hermoso que tener la satisfacción de que en cada obrar damos lo mejor de sí mismos, somos
humanos y por ende no somos perfectos, pero tenemos la capacidad de brindar una excelente ayuda poner
nuestro granito de arena y así contribuimos a un mundo mejor.
La virtud es, por tanto, un hábito selectivo, consistente en una posición intermedia para nosotros, determinada
por la razón y tal como la determinaría el hombre prudente. Posición intermedia entre dos vicios, el uno por
exceso y el otro por defecto. Y así, unos vicios pecan por defecto y otros por exceso de lo debido en las
pasiones y en las acciones, mientras que la virtud encuentra y elige el término medio. Por lo cual, según su
sustancia y la definición que expresa su esencia, la virtud es medio, pero desde el punto de vista de la
perfección y del bien, es extremo. (Aristóteles, Ética a Nicómaco, libro 2, 6)
Las virtudes éticas: son las relacionadas con los aspectos irracionales de la conducta humana. Para Aristóteles
son la consecuencia del aprendizaje de aquellos hábitos que por contribuir al bien de la propia naturaleza son
buenos. Por el contrario habrá hábitos que atenten contra la propia naturaleza impidiendo el desarrollo del ser
y la consecución de sus fines así como de la felicidad.