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Ajedrez en Cuba - No 10

2. LA ESTRATEGIA DESDE LA APERTURA


NIMZOINDIA "A LA HOLANDESA"
Un ejemplo de como elaborar planes estratégicos a partir de la apertura

Muchas veces se ha insistido en la importancia que tiene realizar el estudio de las


aperturas sin desvincularlo del medio juego, y esto, dicho en términos concretos,
equivale a establecer un enlace directo entre el planteo y la subsiguiente estrategia
del juego.
Esto, que parece obvio, puede resultar para muchos aficionados un lenguaje
abstracto, difícil de interiorizar si no se parte de ejemplos demostrativos. Por ello,
nos ha parecido oportuno dedicar este espacio a ejemplificar la importancia que
tiene la planificación estratégica del juego desde la misma apertura, destacando que
la idea de que el estudio de las aperturas no puede sentarse exclusivamente en el
conocimiento absoluto de cientos de variantes y novedades teóricas, si ello no está
soportado en un conocimiento general de la estrategia a que pueden conducir las
principales líneas de un sistema de juego.
Con este propósito me parece oportuno tomar como tema central una interesante
forma de tratamiento que suelen asumir las negras en algunas variantes de la
Defensa Nimzoindia, y que, por su semejanza con esquemas de la Defensa
Holandesa, bauticé con el nombre de "Nimzoindia a la holandesa", en un artículo
que escribí hace ya algunos años.
La línea de referencia tiene además la interesante particularidad de que mantiene,
hasta hoy, un saldo favorable a las negras, de acuerdo con las estadísticas que
reportan no menos de un 40% de triunfos, contra un reducido 20% de derrotas,
hecho notable si consideramos que al segundo jugador no le es frecuente un índice
tan favorable en la mayoría de los planteos.
El trabajo en sí está dividido en dos partes: en la primera, se toman como modelo
algunas partidas que sintetizan la idea genérica sobre la que deseamos fijar la
atención del ajedrecista, es decir la esencia del plan estratégico que va a regir el
juego negro desde las primeras jugadas; y a continuación, establecidos los
principios estratégicos generales, pasaremos al resumen teórico "clásico", en el
que se proponen algunas líneas complementarias que permitirán al estudioso
adquirir un nivel general de conocimiento, basado en ideas esenciales y no en las
variantes frías que pueden conseguirse y triplicarse consultando partidas en una
buena base de datos.
Para entrar en materia veamos en primer lugar una vieja partida, de 1956,
referencia obligada en el estudio que nos proponemos desarrollar.

Ekstein - Laes [E32], 1956

1.d4 Cf6 2.c4 e6 3.Cf3 Ab4 4.Cc3 b6 Las negras inician con esta jugada el plan
básico de explotación de la casilla e4, sobre la que recaerá el peso esencial de toda
la lucha. 5.Dc2 Ab7 6.a3 Ac3 7.Dc3 O-O 8.e3 d6 9.Ae2 Esta posición ha sido
tratada durante años de muy diversas maneras. Algunos comentaristas prefieren
recomendar aquí el rápido avance b4; por ejemplo: 9.b4 Cbd7 10.Ab2 Ce4 11.Dc2
f5 12.Ae2 Cg5 13.c5 Ae4 14.Dc3 Ad5 15.c6 Ce4 16.Dc1 Cdf6 17.O-O De8 18.b5

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Dh5 19.Dd1 Dh6 20.a4 Cg4 21.h3 Tf6 22.hg4 fg4 23.Ch2 Cf2 24.Tf2 g3 25.Cg4 gf2
26.Cf2 De3 27.De1 Taf8 28.Af3 Tf3 29.gf3 Df3 30.Rf1 Ac4 31.Rg1 Dg3 32.Rh1 Ad5
33.Ce4 Tf1 0-1 Kortschnoj V-Simagin V, Leningrado 1960. 9...Cbd7 También es
posible la transposición 9...Ce4 10.Dc2 f5 11.b4 (11.O-O Tf6! 12.Ce1 Th6 13.f3
Dh4! 14.fe4 Dh2 15.Rf2 fe4) 10.O-O Ce4 11.Dc2 f5 Y llegamos a la posición típica
que, como veremos, sirve de fundamento estratégico a esta "manera" de jugar la
Defensa Nimzoindia. Recomendamos poner especial atención al resto de las
jugadas que siguen. 12.b4 Tf6 13.Cd2 Para evitar las complicaciones que siguen
es preferible 13.Ab2 Tg6 14.Tad1 De7 Rubinetti-Smyslov, Lucerna 1956. 13...Th6
14.g3 Las blancas ya se encuentran en grave peligro y prácticamente resulta
imposible evitar un desenlace fatal. Otras líneas sin resultado son: 14.Af3 Dh4
15.h3 Cg5! 16.Ab7 Ch3; 14.h3 Cd2 15.Dd2 Ag2! 16.Rg2 Dg5 17.Rh2 Dh4; 14.f3 Cd2
15.Dd2 Dh4 16.h3 Dg3 17.Rh1 g5 14...Cd2 15.Dd2 Dh4 0-1.

La esencia estratégica desarrollada por el negro -con la ingenua ayuda de su


oponente- ha quedado perfectamente perfilada, pero preferimos pasar al estudio de
una segunda miniatura, que repite prácticamente el mismo tema -y observe que a
partir de variantes diferentes- para que sea el propio lector quien "descubra" el
fundamento sobre el que descansa este sistema de juego, que vincula de alguna
manera las ideas estratégicas básicas de tres defensas totalmente diferentes: la
Defensa Nimzoindia, la Defensa Holandesa y la Defensa India de Dama.

Leonard C- Delgado A [E 32] corr Cuba, 1992

1.d4 Cf6 2.c4 e6 3.Cc3 Ab4 4.Dc2 O-O 5.a3 Ac3 6.Dc3 b6 7.Cf3 Y ahora las
negras adelantan el plan de referencia haciendo 7...Ce4 8.Dc2 f5 9.e3 Ab7 10.Ad3
d6 11.O-O Cd7 12.b4 Tf6 Llegándose a la posición que pudiera considerarse
óptima para las negras, (que por supuesto, las blancas podían evitar) de acuerdo
con el plan estratégico general previsto, que permite el siguiente desenlace:
13.Ab2 Tg6 14.Tad1 Una posición casi idéntica ya la hemos visto en la referencia
Rubinetti-Smyslov del ejemplo anterior, pero con una importante diferencia: el alfil
que ahora se encuentra en d3, fue ubicado en esa partida en la casilla e2.
Aparentemente este cambio no es importante, y en todo caso pudiera pensarse que
el alfil en d3 es mucho más agresivo; pero ¡increíble!, las blancas están ahora
perdidas, ¡en sólo dos jugadas! 14...Cd2 15.Td2 Tg2! y las blancas abandonaron.

No hay dudas que el resultado es impactante: casi en plena apertura, y sin que
se aprecien errores fatales, las blancas han perdido contra una Defensa
Nimzoindia, en muy pocos movimientos.
¿Qué ha ocurrido realmente?
Si aceptamos, como primera conclusión, que las blancas no han cometido errores
"a lo Chigorin", es decir errores increíbles, fatales, entonces sólo cabe suponer que
se han producido errores estratégicos importantes, pero ¿cuáles?.
En primer lugar, es necesario reconocer que estamos en presencia de toda una
estrategia de acción de las negras, que incluye las siguientes características
básicas:
 Fianchetto del alfil dama.
 Control absoluto de las casillas e4 y f3, con piezas menores.

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 Peones negros en las casillas f5, e6 y d6.
 Plan basado en los desplazamientos ...Tf6; ...Tg6 ó ...Th6; y ...Dh5.
 Si todo va bien, se efectuará la entrega definitiva de la torre en g2 combinado en
ocasiones con el sacrificio de una pieza menor en f3.
 No llevar el peón dama propio a la casilla d5, a menos que el desarrollo de la
partida así lo aconseje.

Con "recetas" de este tipo, que no implican debilitamientos propios, inician las
negras su juego, sin importarles mucho qué líneas jugará el blanco contra la
Defensa Nimzoindia. Para cada una de ellas siempre habrá alternativas que
permitan reajustar el plan general.
Veamos una tercera partida en la que las negras se apoya fielmente en estos
principios y obtienen otro interesante triunfo.
Pérez Marín L - Delgado A [E43] corr Cuba, 1992

1.d4 Cf6 2.c4 e6 3.Cc3 Ab4 4.e3 b6 5.Ad3 Ab7 6.Cf3 O-O 7.O-O Ac3 8.bc3 Ce4
9.Dc2 f5 Y nuevamente estamos en presencia del esquema estratégico de
referencia. Aquí lo natural es continuar con 10.Cd2 ó 10.Ce1, pero el blanco optó
por 10.a4?! Guiándose posiblemente por un plan análogo, que se emplea en
situaciones parecidas. Pero las negras también tienen su plan y no piensan
renunciar a él tan fácilmente... 10...d6 11.a5 Tf6 12.ab6 ab6 13.Ta8 Aa8 14.Cd2
Cd2 15.Ad2 Af3! Cuando se cuenta con un plan estratégico bien estructurado, las
ideas se complementan hasta en las situaciones más inesperadas. 16.e4 Tg6 17.g3
Dh4 18.Ta1 f4 19.Ae1 Dh2! y las blancas tienen que abandonar.

Después de analizar estos tres ejemplos resulta más clara la razón de las rápidas
derrotas blancas: la presencia del alfil en la casilla d3 debilita sensiblemente puntos
claves de la defensa, a lo que se suma el tardío avance b4, jugada que posibilita el
rápido desarrollo del alfil por b2, tocando el punto clave f6. A esto se añade también
la ausencia del muchas veces indispensable plan d2, que busca eliminar la
presencia del molesto caballo de e4, tras la jugada f3.

En la segunda parte de este trabajo presentamos un resumen que agrupa


algunos ejemplos más o menos recientes, de manera que tanto los partidarios de
blancas, como los amantes de la Nimzoindia, puedan estudiar y valorar
comparativamente las ideas presentadas en esta variante, a la luz de la teoría
actual.

Zawadski - Levacic [E 43] Camp Francia. 1989

1.d4 Cf6 2.c4 e6 3.Cc3 Ab4 4.e3

La flexibilidad del plan estratégico "a la holandesa" permite que sea adaptable a las
diferentes líneas con que cuenta el blanco al enfrentarse a la Defensa Nimzoindia.
Para el caso de la variante Capablanca, que centró la primera parte de este trabajo,
viene bien considerar los siguientes ejemplos: 4.Dc2 b6 (4...O-O 5.a3 Ac3 6.Dc3 b6
7.Cf3 c5 8.dc5 bc5 9.b4 Ce4 10.Dc2 f5 11.e3 Cc6 12.b5 Ce7 13.Ae2 Ab7 14.O-O
Cg6 15.Ce1 Dh4 16.f3 Cg5 17.Cd3 d6 18.Cf4 e5 19.Cd5 Ad5 20.cd5 f4 21.Ad3 e4! 
Guliev S-Tukmakov V, Nikolaev zt 1993) 5.a3 (5.f3 es un plan nada despreciable,
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pues evita al blanco muchos problemas en este tipo de posiciones 5...Ab7 6.e4 d6
7.Ad3 Cbd7 8.Ag5 h6 9.Ah4 g5 10.Af2 g4 11.O-O-O De7 12.Cge2 O-O-O 13.Ah4
Thg8 14.a3 Ac3 15.Dc3 gf3 16.gf3 Tg7 17.e5 de5 18.de5 Dc5 19.ef6 Tg2 20.Cd4
Dh5 21.Ag3 Cc5 22.The1 Ca4 23.Db3 Cc5 24.Dc3 Ca4 25.Db4 Cc5 26.Af1 a5
27.Db5 Tg3 28.hg3 Dg5 1-0 Plahuta D-Jernej S, Sentjur op 1996 ) 5...Ac3 6.Dc3
Ab7 7.Cf3 (7.Ag5 d6 8.Cf3 Cbd7 9.Cd2 c5 10.f3 d5 11.dc5 bc5 12.e3 O-O 13.Td1
Db6 14.Cb1 a5 15.Td2 e5 16.cd5 Cd5 17.Dc2 h6 18.Ac4 C7f6 19.e4 hg5 20.ed5 e4
21.O-O e3 22.Td3 Tfe8 23.Te1 Aa6 24.b3 a4 25.Tee3 Te3 26.Te3 ab3 27.Tb3 Da7
28.Cd2 Cd5 29.De4 Cf6 30.De3 Te8 31.Dd3 g4 32.Rf1 De7 33.Ce4 Ce4 34.fe4 Df6
35.Re2 Ac4 36.Dc4 Df4 0-1 Lorscheid G-Vadasz L, Budapest 1997) 7...d6 8.e3
Cbd7 9.Ae2 O-O 10.O-O Ce4 (10...De7 11.b4 Ce4 12.Dc2 f5 13.Ab2 Tae8 14.a4
Cg5 15.Cg5 Dg5 16.d5 ed5 17.Af3 Ce5 18.Ae5 Te5 19.cd5 De7 20.Dd3 Df7 21.Tfd1
f4 22.Tac1 fe3 23.fe3 Te7 24.Tc3 Df6 25.Dd4 Dg5 26.Rh1 Ac8 27.Tdc1 Tff7 28.e4 h5
29.De3 Dg6 30.De1 Dg5 31.Dg3 Dg3 32.hg3 Ag4 33.Tf1 Te4 34.Ae4 Tf1 35.Rh2 Tf7
36.a5 Te7 37.Ag6 Rf8 38.ab6 ab6 39.Ta3 Td7 40.Ta8 Novikov M-Mishuchkov N, St
Petersburg 1997/0-1 (51)) 11.Dc2 f5 12.b4 Tf6 De nuevo el plan de marras en plena
acción! 13.Ab2 Tg6 14.d5 Una jugada que no se vió en los ejemplos anteriores
14...c5 15.de6 Cf8 16.bc5 bc5 17.Ce1 Dg5 18.f4 Y la posición se agota, pero el
negro ha logrado parcialmente sus objetivos. Ahora el juego se introduce en un mar
de complejas maniobras posicionales 18...De7 19.Tb1 Te6 20.Af3 Te8 21.Cd3 Cg6
22.g3 Dd7 23.Aa1 Ac6 24.Ce1 Ce7 25.Cg2 Cc8 26.Ch4 T6e7 27.Ag2 Cb6 28.Tfc1
Tf8 29.De2 De6 30.Af3 Ad7 31.Rh1 Ac8 32.Tc2 Aa6 33.Tbc1 Cc4 34.Tc4 Varga P-
Enders P, Budapest 1996/0-1 (46).
4...b6 5.Ad3 Ab7 6.Cf3 Ce4 7.O-O

También se juega 7.Dc2 f5 8.a3 Ac3 9.bc3 O-O 10.O-O d6 (10...Tf6 11.Cd2 Th6
12.Ce4 fe4 13.Ae4 Dh4 14.f3 Dh2 15.Rf2 Dh4 16.Re2 Ae4 17.De4 De4 18.fe4 Tg6
19.Tf2 d6 20.a4 Cc6 21.Aa3 Tf8 22.Taf1 Tf2 23.Tf2 h6 24.Ab4 Tg525.Rd3 Th5
26.Re2 Th1 27.Tf1 Tf1 28.Rf1 Rf7 29.Rf2 Cb4 30.cb4 a5 31.ba5 ba5 32.Rf3 e5
33.Rg4 Rg6 34.Rh4 Rf6 35.Rh5 Rf7 36.Rg4 Rg6 37.Rh4 h5 38.Rh3 Rg5 39.Rg3 h4
40.Rf3 Rh5 41.Re2 Rg4 42.Rf2 h3 0-1 Karttunen M-Jouhki Y, Kuopio 1996) 11.Cd2
Cd2 12.Ad2 Cd7 13.f3 Dh4 14.Tab1 (14.e4 fe4 15.fe4 e5 16.Ae3 Cf6 17.g3 Dh3
18.d5 Cg4 19.De2 Tae8 20.Ad2 Ac8 21.Dg2 Dh5 22.Ae2 Dg6 23.Tf8 Tf8 24.Tf1 Tf1
25.Rf1 Cf6 26.Ad3 Dh5 27.Re1 Ag4 28.Rf2 Ah3 29.Df3 Df3 30.Rf3 Cg4 31.Ag5 Ch2
32.Rf2 Cg4 33.Rf3 Cf6 34.Af6 gf6 35.g4 h5 36.gh5 Rg7 37.Rg3 Ad7 38.Rh4 Rh6
39.Af1 Aa4 40.Ae2 Ac2 41.Af3 Rg7 42.Rg4 Aa4 43.h6 Rg6 44.h7 Ad7 45.Rh4 Rh7
46.Ah5 Aa4 47.Af3 Ac2 48.Rg4 Rg6 0-1 Bjornsson S-Ernst T, Reykjavik op 1994)
14...g5 15.Ae1 Dh5 16.e4 f4 17.Af2 c5 18.a4 e5 19.a5 g4 20.Ae2 Dg6 21.dc5 g3
22.hg3 fg3 23.Ae3 Dh5 24.Tfd1 Dh2 25.Rf1 Dh1 26.Ag1 Cc5 27.Td6 Ae4 28.Dc1
Tf4 29.Dd1 Taf8 30.Td8 Ce6 31.Tf8 Tf8 32.Tb5 Cf4 33.fe4 Cg2 34.Af3 Ce3 0-1
Korniukhin G-Gerbich V, Vladivostok op 1995.

7...Ac3

Esto responde al espíritu general de la variante, de asumir por largo tiempo el


control de la casilla e4. Pero paralelamente también es posible adelantar el plan "a
la holandesa" haciendo directamente 7...f5 Sin embargo, esto permite al blanco
cierto rejuego con el salto 8.Ce5 O-O 9.Ce4 fe4 10.Ac2 Ad6 11.Dg4 Ae5 12.de5 Tf5
13.f4 Ca6 14.Ad2 De7 15.Tad1 Cc5 16.b4 Cd3 17.De2 d6 18.Ac3 de5 19.Ad3 ed3
20.Td3 ef4 21.ef4 Taf8 22.Tg3 T8f7 23.Te3 Ac8 24.Dd2 h5 25.Ae5 Dd7 26.Td3 Dc6

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27.Td8 Tf8 28.Tf3 h4 29.Th3 Ab7 30.Th4 Dc4 31.Tf8 Tf8 32.Tg4 Tf7 33.Dd8 1-0
Nenashev A-Aleksic N, Aegina op 1994. Otras variantes son:
a) 8.d5 Ac3 9.bc3 Cc5 10.Aa3 Cba6 11.Ac2 O-O 12.Cd4 Tf7 13.Cb3 De7 14.Te1 e5
15.f4 d6 16.Ac5 Cc5 17.Cc5 dc5 18.e4 fe4 19.Te4 Tf4 20.Dd3 Te4 21.De4 g6
22.Te1 Tf8 23.De5 De5 24.Te5 Aa6 25.Te4 Rg7 26.Aa4 g5 27.Ab5 Ac8 28.h3 Tf4
29.Te8 Tf8 30.Te4 Tf4 31.Te8 ½-½ Balashov Y-Emms J, BL2-W 1995;
b) 8.Dc2 Ac3 9.bc3 O-O 10.Ce1 Dh4 11.Aa3 Tf7 12.c5 Cc6 13.c4 Tf6 14.Cf3 Dg4
15.d5 Ca5 16.Ce5 Dh4 17.g3 Dh3 18.Ae4 fe4 19.De4 Cc4 20.c6 Aa6 21.Cc4 Th6
22.Tfc1 Dh2 23.Rf1 Dh5 24.cd7 ed5 25.Dg2 Td8 26.Rg1 Ac4 27.Tc4 dc4 28.Ae7
Td7 29.Da8 Rf7 30.Df8 Re6 31.Ah4 Df7 32.Da8 Th4 33.gh4 Dg6 34.Rh2 Rf7
35.Tg1 Df6 36.De4 c3 37.Tg4 Td2 38.Rh3 Tf2 39.Dd5 De6 40.Dh5 Rg8 41.Dg5
Dd7 42.Rg3 Tf5 0-1 Wunnink M-Gustafsson J, Hengelo 1997;
c) 8.Ce2 O-O (8...Ad6 9.Ce1 Dh4 10.g3 Cg5 11.f3 Dh5 Ch3 12.Rg2 Dh5 13.e4 O-O
14.Cc3 f4 15.g4 Dh4 16.Cc2 Cg5 17.De2 h5 18.gh5 Dh5 19.Ad2 Ae7 20.Rh1 c5
21.d5 e5 22.Dg2 d6 23.Cb5 a6 24.Cc3 Ac8 25.De2 Ah3 26.Tf2 Ch7 27.Tg1 Ah4
28.Tfg2 Cg5 29.Tg5 Ag5 30.Cd1 Ah4 31.Cf2 Af2 32.Df2 Cd7 33.Af1 Tf6 34.Ah3
Dh3 35.Ce1 Rf7 36.Tg4 Th6 37.Dg1 g6 38.Dg2 Tah8 39.Dh3 Th3 40.Tg2 g5
41.Rg1 Tg8 0-1 Beckhuis G-Ikonnikov V, Berliner Sommer 1996) 9.Ce1 (9.Cg3
Ad6 10.Dc2 Ag3 11.hg3 De8 12.Cd2 Dg6 13.b4 a5 14.b5 d6 15.c5 dc5 16.dc5
Cc5 17.Aa3 Cbd7 18.Ae2 Tfc8 19.Cc4 Ce4 20.Tfd1 Ad5 21.Tac1 h5 22.Af3 Dh6
23.Td4 c5 24.Td3 Tab8 25.Ab2 Cdf6 26.Ae5 Tb7 27.Dd1 Tf8 28.Af6 Df6 29.Td5
ed5 30.Dd5 Yusupov A-Kengis E, Riga 1995/½-½ (35)) 9...Dh4 10.f3 Cf6 11.c5
Ae1 12.De1 De1 13.Te1 Aa6 14.cb6 ab6 15.Cf4 c5 16.dc5 bc5 17.Ad2 e5
18.Aa6 Ta6 19.Ce2 Cc6 20.Cg3 g6 21.Tec1 d6 22.e4 fe4 23.fe4 Tb8 24.Tf1 Rg7
25.Ac3 Cb4 26.a3 Cd3 27.Tf3 Cb2 28.Taf1 Ca4 29.Ad2 Tf8 30.Ag5 Cd7 Volke
K-Wahls M, Biel op 1993/0-1 (55).

8.bc3 f5 9.Cd2

La alternativa más usual es 9.Ce1 y ahora el negro dispone de dos variantes


principales:

a) 9...O-O 10.f3 Cf6 11.a4 (11.Tb1 d6 12.Tb2 Cc6 13.Tbf2 Cd7 14.Cc2 Ca5 15.e4
f4 16.g3 g5 17.Tg2 Rh818.h4 Tarjan-Fries, Lucerna ol 1982) 11...c5 (11...d6 12.a5
Cc6 13.a6 Ac8 14.c5 dc5 15.Aa3 Ca5 16.dc5 Te8 17.Ab4 Jelen Iz-Koskar K, Bled
op 1993) 12.a5 ba5 13.Tf2 Cc6 14.Tfa2 Dc7 15.Ae2 Aa6.
b) 9...Cc3 10.Dh5 g6 11.Dh6 Ce4 12.f3 Cg5 13.e4 Cf7 14.Dg7 De7 15.ef5 gf5
16.Af5! Cc6 17.Cc2 O-O-O 18.Aa3 Dg5 19.Dg5 Cg5 20.Ad3 Semkov S-Wilder M,
Saint John 1988.

9...Dg5

Esto es lo que recomienda la teoría, considerado superior a 9...Dh4 10.f3 Cd2


11.Ad2 O-O 12.De2 Cc6 (12...d6 no es menos interesante, y en cierta medida hasta
más lógica, pues el blanco nada obtiene con la ruptura 13.e4 fe4 14.Ae4 Ae4 dado
que toda simplificación conducirá a un final favorable al negro, por su mejor
estructura de peones.) 13.e4 fe4 14.fe4 d6 15.g3 Dh3 16.Ag5 Tae8 17.Tab1 e5
18.d5 Ca5 19.c5 dc5 20.Ab5 c6 21.Aa4 Malaniuk V-Hjartarson J, Tilburg 10' 1993.

10.Ce4 fe4 11.Ae2 O-O 12.f3 ef3 13.Af3 Cc6

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13...Af3 14.Tf3 Cc6 y la posición está equilibrada.

14.e4 Dg6 15.Aa3 d6 16.e5 Ca5 17.Ab7 Cb7 18.ed6 cd6 19.De2 Tfe8 20.Df3 Ca5
21.Ad6 Cc4 22.Af4 Tac8 23.Tf2 e5 24.de5 Ce5 25.Ae5 Te5 26.Taf1 h6 27.Db7
Tec5 ½

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