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DEPARTAMENTO DE CIENCIAS DE LA SALUD

ENTREVISTA PSICOLÓGICA II

AUTORAS:

ALVAREZ GUTIERREZ, Tania Solangge

NAVARRO MORENO, Katia Jacqueline

RODRIGUEZ SAIRA, Alexandra Antonella

VARGAS VASQUEZ, Vanessa

DOCENTE Santisteban
INDICE

I. ENTREVISTA PSICOLÓGICA, UNA VISIÓN HISTÓRICA


II. INTRODUCCIÓN
III. INICIO
IV. CONCEPTUALIZACIÓN DE LA ENTREVISTA
V. ASPECTOS DE DESARROLLO DE LA ENTREVISTA
VI. EVALUCIÓN DE LA ENTREVISTA EN EL CAMPO DE LA PSICOLOGIA
VII. IMPORTANCIA DE LA ENTREVISTA EN EL CAMPO PSICOLÓGICO
VIII. LA ENTREVISTA Y SU IMPLICANCIA

 NIÑOS
 ADOLESCENTES
 ADULTOS
 FAMILIAS
IX. LA ENTREVISTA DESDE LAS PERSPECTIVAS DEL MODELO

 CONDUCTUAL
 COGNITIVO
 SISTÉMICO
 PSICODINÁMICO

X. CONCLUSIONES
XI. BIBLIOGRAFÍAS
I. ENTREVISTA PSICOLÓGICA, UNA VISIÓN HISTÓRICA

A mediados del siglo XIX el modelo de la entrevista periodística inspiraba a muchos


psicólogos que posteriormente diseñaron y construyeron lo que hoy conocemos
como historia de vida. En el transcurso del siglo XIX se comenzó a delimitarse más
en el campo de la psicología como disciplina independiente y es ahí que surge la
entrevista psicológica en el marco de la psicología analítica, desarrollado por Freud
cuyo trabajos iban a dirigidos a tratar casos que no podían ser explicados.
En 1893 Freud publica su trabajo “Sobre el mecanismo psíquico de los fenómenos
histéricos”, a partir de ese momento empezara a indagar sobre el origen psíquico de
ciertos síntomas en aspectos de la vida emocional, fueron varios simpatizantes de
Freud que dejaron la práctica hipnótica y se dedicaron a trabajar con métodos
verbales.

Alex Munthe padre de la medicina psicosomática hizo fama entre las sociedades
europeas al permitir hablar al paciente con libertad, con el fin de encontrar la
problemática y crear una método propio de su edad. En su trayectoria otros médicos
incursionaron con el método catártico y realizaron un paso en la psicología y
psicoanálisis al separar la medicina e implicándose en la escucha del discurso del
entrevistado.

Al final del siglo el psicoanálisis hace dos aportaciones a la entrevista psicológica,


primero consiste en la comunicación entre médico y paciente de una forma más
privilegiada. Segundo mantiene que las prácticas psicológicas por medio de las
psicoanalíticas mantienen resultados vigentes.

Durante la primera guerra mundial los psicólogos construyeron instrumentos con un


estilo similar a la entrevista, para que a través de preguntas y respuestas los
candidatos a milicia presentaran características personales

Durante la evolución de la técnica de la entrevista tenemos métodos de recopilación


de datos generales que da una subjetividad al individuo. Alrededor de 1950
pretenden diferenciar entre la entrevista psicológica, del interrogatorio del médico
donde se aplicara anamnesis para poder recabar en la historia clínica médica.

Autores como José Bleger, Nahoum, entre otros se dedicaron a la investigación, a


documentar y publicar libros que mostraran la entrevista psicológica como un
campo propio de la psicología y por otra parte, establecieron relación entre la
entrevista psicológica y las pruebas psicológicas, que son complementarios a los
resultados de la entrevista. Hoy en día la entrevista- pruebas psicológicas es bastante
utilizado pero si el psicólogo es un buen entrevistador puede prescindir y establecer
un diagnostico con la información obtenida en ella.
II. INTRODUCCIÓN
III. INICIO
IV. CONCEPTUALIZACIÓN DE LA ENTREVISTA

Conxa Perpiñá (2012), la entrevista es una técnica de recogida de información, y


por tanto, de evaluación; pero también es mucho más que eso. Su versatilidad y
flexibilidad permiten moldear una entrevista para cada finalidad y adaptarla
incluso a las necesidades del entrevistado y al estilo personal del entrevistador, lo
que le confiere gran ventaja respecto al resto de las técnicas de evaluación
psicológica.

La entrevista es una comunicación con un propósito. Por lo tanto, los elementos


que se encierran tras esta afirmación son; la comunicación, la interacción y el
objetivo, finalidad. (1924; Bigham y Moore 1973)

La entrevista es una conversación entre dos o más personas, pero en la que uno, el
entrevistador, es el que pregunta con un objetivo pre-determinado. La vía es de
comunicación simbólica, preferentemente oral y bidireccional, pero también hay
un importante componente no verbal. Tanto la información verbal como la no
verbal son registradas y analizadas para realizar la evaluación, el diagnostico, el
asesoramiento o la intervención psicológica. (1924; Bigham y Moore 1973)

Colín M. (2009), la entrevista es un dialogo que se genera entre dos o más


personas para poder profundizar algo de interés. La entrevista propone como
objetivo una conversación cotidiana y contiene factores como escuchar, recabar
datos, motivar, retroalimentar, indagar y confrontar. La entrevista psicológica no es
una conversación informal, menos interrogatorio, se basa más en desarrollos
teóricos y una práctica especifica que se irá profundizando a lo largo del objetivo.

V. ASPECTOS DE DESARROLLO DE LA ENTREVISTA


VI. EVALUCIÓN DE LA ENTREVISTA EN EL CAMPO DE LA PSICOLOGIA

VII. IMPORTANCIA DE LA ENTREVISTA EN EL CAMPO PSICOLÓGICO

La manera más directa de saber qué sucede a una persona es preguntarle, y en esto
consiste básicamente la entrevista. Es la técnica de recogida de datos más
ampliamente utilizada pero también la más difícil y complejo de llevar a cabo. Es
tal su versatilidad que, aunque nace en un contexto de evaluación y diagnóstico, se
ha venido utilizando como otras muchas funciones en el proceso de evaluación-
intervención e incluso fuera del ámbito de la salud o de la relación de ayuda.

La entrevista se ha ido adaptando y, sobre todo, enriqueciendo de todos aquellos


campos por los que ha sido utilizado. Son diversos los autores por ejemplo, (silva,
1988) que indican que la entrevista comienza a tener una especial relevancia en el
campo clínico de la mano de Krapelin en su interés por explorar con minuciosidad
los síntoma de los pacientes. Ello permitiría poder realizar un diagnóstico que se
pudiera articular en una clasificación de los trastornos mentales. Con este fin, la
exploración del estado mental del paciente resulta imprescindible y, esa
exploración y otros datos de la historia clínica del paciente se recababan,
precisamente, a través de una entrevista.

Otra aportación fundamental fue la del psicoanálisis, la “Terapia parlante” de


Freud, en la que se funda en la búsqueda de información, la evaluación y la
terapia. La entrevista se convierte en un estupendo medio para fomentar la
comunicación espontánea del paciente y con ello suscitar su “curación” gracias,
entre otras cosas, al flujo de sus asociaciones libres. Freud es uno de los primeros
en entender que el entrevistador (terapeuta) tiene una notable confianza en la
dinámica de la entrevista. El terapeuta no es un elemento neutral de la entrevista,
y por ello mismo debe esforzarse por ejercer un papel pasivo en ello, de modo que
no es anecdótico que para controlar esa influencia del entrevistador se mantenga
fuera de la vista del entrevistado y permanezca tomando notas tras el diván de su
paciente.

Un paso más allá, en este reconocimiento de que el entrevistador no es un


elemento neutro en la inevitable “relación” que se establece en la entrevista entre
sus dos protagonistas lo da Sullivan, quien en su clásico de 1954 The psychiatric
Enterview indica que la entrevista es un proceso de relación interpersonal
planificada. Subraya que entre ambos miembros de esta diada se produce una
intervención “real” y que el terapeuta ha de sacar ventaja de ello, de «observador
participante» y trabajando activamente esa interacción social real en beneficio de
su paciente.

Finalmente hay que mencionar la figura de Carl Rogers, que en su terapia


centrada en el cliente imprime a la entrevista terapéutica un estilo «no directivo»
por excelencia que se consolida y que se centra en el marco de referencia del
cliente y en su expresión y comprensión emocional y evita cualquier tipo de
interpretación del mismo; por otra parte, hay que mencionar el avance que Rogers
supuso en la investigación de la entrevista. La primera transcripción textual la
realiza Rogers en la década de los cuarenta, además de adoptar como metodología
habitual la grabación rutinaria del audio de las entrevistas para su estudio
posterior.

Junto a las críticas al diagnóstico psiquiátrico, Skinner y Eysenck en la década de


los cincuenta pusieron también en solfa la entrevista al poner de manifiesto ciertos
sesgos producidos, por ejemplo por los reforzamientos verbales, así como otras
fuentes de error que también se comienzan a evidenciar desde el área social y las
entrevistas de investigación. Sin embargo, con la aparición del conductismo de los
años setenta, los propios terapeutas de conducta no estaban dispuestos a renunciar
a una técnica que, aun con sus problemas, resultaba tan útil (Turkat, 1985, 1987).
En 1965 Kanfer y Saslow publican Behavior Analysis, entre cuyos argumentos
cabe destacar que señalan que la entrevista es un instrumento fundamental en el
análisis funcional de la conducta, pero exigiendo un buen nivel metodológico para
garantizar su fiabilidad y validez.

Las entrevistas estandarizadas con propósitos diagnósticos, como la SCID


(Structured Clinical Interview for DSM-IV Axis I Disorders, SCID-I; First,
Spitzer, Robert, Gibbon y Williams 1996), o las series de las ADIS, nacen con ese
propósito, asegurando que el entrevistador pueda a través de su técnica llegar a
conclusiones diagnósticas fiables o formular hipótesis de intervención válidas.

La aportación de la investigación social a la entrevista, desde un campo


completamente distinto, es estandarización y cuantificación de la técnica, muchas
veces obligada a manejar gran cantidad de datos y de personas evaluadas. Desde
la sociología y la psicología social cabe mencionar, al menos, dos tipos de
desarrollo: las entrevistas destinadas a la selección de personal y evaluación de
recursos humanos en empresas, centradas fundamentalmente en la valoración de
las capacidades, actitudes y motivación de los candidatos para el puesto de trabajo
al que aspiran, y las entrevistas de encuesta, destinadas a evaluar una parte de la
muestra de población a la que se pretende sondear sobre algunos aspectos
concretos, para luego generalizar los resultados. Aquí la posibilidad de
cuantificación y estructuración será crucial, no sólo para ser eficientes en el
momento de la recogida de las respuestas sino también para generalizar a la
población de referencia.

VIII. LA ENTREVISTA Y SU IMPLICANCIA


 NIÑOS
 ADOLESCENTES
 ADULTOS
 FAMILIAS
IX. LA ENTREVISTA DESDE LAS PERSPECTIVAS DEL MODELO
 CONDUCTUAL

En este contexto se encarga de identificar y definir un problema, para poder


establecer serán las conductas objetivo de una posible modificación, también
indaga variables, antecedentes y consecuentes relacionadas con el problema, así
establecer un plan de acción y verificar si los resultados son los correctos.

1. Trukat señala dos objetivos principales:

1.1. Llegar a un diagnostico psiquiátrico


1.2. Desarrollar una formulación conductual.

2. Base de tres componentes:


2.1. Identificar las relaciones funcionales entre los diferentes
problemas del paciente.
2.2. Explicar la etiología de esos problemas conductuales.
2.3. Predecir las respuestas del paciente antes situaciones futuras.

Para lograr un equilibrio durante el proceso de la entrevista es necesario hacer


preguntas apropiadas y bien expresadas, centrarse en las necesidades del paciente
y dejar de lado criterios personales, como Morgansten dice que los registros de
datos deben basarse en los antecedentes, conducta y consecuencia.

3. Inicio de la entrevista conductual

Puede iniciar con preguntas abiertas como las siguientes: ¿En qué le puedo
ayudar?, ¿Cuál es su problema?, ¿Que le ha hecho venir a consulta? Sin embargo,
algunos terapeutas especifican que se debe intentar identificar, a lo largo de la
entrevista:

1. Todos los problemas que tenga el paciente (variables dependiente)


2. Antecedentes personales y consecuentes (variables independientes)
3. Inicio de cada uno de ellos
4. Historia del desarrollo de los mismos.
5. Factores que predisponen a su desarrollo

El terapeuta debe comportarse de manera abierta y empática; ser capaz de aportar


nuevos conocimientos sobre los malestares del paciente y crear una relación que
permite establecer predicción precisa sobre su comportamiento. De esta forma, la
entrevista será una de sus principales herramientas de acceso a datos relevantes
del sujeto.
Después de las preguntas y recomendaciones generales se hace una recolección de
datos del paciente:

1. Datos de identificación
2. Problemas principales que presenta
3. Antecedentes históricos
4. Dimensiones del problema
5. Consecuencias del problema
6. Historia pasado de tratamientos
7. Historia educativa
8. Historia médica de salud
9. Historia evolutiva y de relaciones sociales
10. Historia familiar, marital y sexual
11. Diagnostico según DSM/IV
12. Cualidades y desventajas
13. Objetivos
14. Tratamiento recomendado

4. Recopilación de datos

4.1. Cuestionario de auto-informe: Es uno de los recursos que


más datos aportan a la evaluación conductual y constituye a una de
las herramientas más utilizadas ya que se puede obtener una gran
cantidad de información con una intervención mínima de tiempo.

4.2. Observación directa conductual: Consiste en el registro de


las repuestas observables de los individuos por una o varias
personas, de esta manera puede controlarse mejor la cantidad y la
calidad de comportamientos o productos derivados. Esto incluye
datos basados en las frecuencias y debe contarse el número de veces
que tiene lugar una conducta durante un periodo de observación
determinado.

4.3. Autoregistro: Se refiere al procedimiento de observar y


registrar, de manera sistemática, aspectos del comportamiento
propio. Para obtener estas medidas de registro es necesario utilizar
instrumentos que facilite la tarea y permitan terminan con precisión
esta herramientas pueden ser mediantes aparatos mecánicos,
electrónicos, de medición o de lápiz y papel.

 COGNITIVO
 SISTÉMICO
 PSICODINÁMICO
X. CONCLUSIONES
XI. BIBLIOGRAFÍAS

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