UNIVERSIDAD DE ORIENTE

NÙCLEO MONAGAS
ESCUELA DE CIENCIAS SOCIALES Y ADMINISTRATIVAS
DEPARTAMENTO DE CONTADURIA PÚBLICA
MATURIN-ESTADO MONAGAS

La ética y la ética
profesional

Maturín, Febrero de 2019

 LA ÉTICA
La ética es algo que permanece en el tiempo, no varía o cambia, trata
de la formación del carácter de las personas, la que nos permite ser
consientes y nos ayuda a reflexionar sobre lo que es valioso para la vida. Es
un concepto muy eficaz para los individuos ya que este no es un ser aislado
sino que se relaciona con la sociedad, es allí donde cada individuo reflexiona
el por qué de ciertas acciones o situaciones.

La ética es la reflexión que hacemos sobre nuestra voluntad, es por

eso que se dice que la ética y la moral tienen relaciones porque la moral son
los valores que tiene la persona y la ética se encarga de dar respuesta el
porqué se tienen esos valores. Una persona con una moral es aquella que
tiene, comprende y expresa los valores de manera adecuada ante la
sociedad la que sabe cómo ser virtuoso como realizar las cosas mejor sin
agraviar la integridad de los demás. Se debe tener en cuenta que tener moral
es un compromiso personal que relacionándola con la ética nos permite
construir sociedades justas, no excluyendo aquellas personas que no puedan
devolver nada a cambio y nos hace recordar que es más prudente ayudar a
los demás que buscar el máximo beneficio individual.

El decidir con libertad lo que deseamos y lo que no, nos permite

apreciar la importancia que tienen los valores morales, el valor de saber lo
que está bien y de lo que se encuentra mal, el valor de decidir hacer bien las
cosas. La ética tiene sentido porque nos permite ser conscientes de que las
personas tenemos la capacidad de cambiar y desde nuestra libertad escoger
diferentes cursos de acción. Alcanzar un buen carácter es uno de los fines
mismos de la vida, cultivar hábitos que sean positivos para cada individuo.
Decidir cómo vivir nuestra vida, o cómo utilizar los recursos que tenemos
cerca para hacer nuestro camino, resulta esencial, porque aunque la libertad
no garantice una vida buena, al menos nos otorga la posibilidad de intentar
hacer bien las cosas, aplicando los valores morales.

LA ÉTICA PROFESIONAL
La profesión es una actividad social que una persona generalmente
realiza con ayuda de otros individuos. La ética es la cualidad clave para el
desarrollo profesional y nos incentiva a reflexionar sobre las metas que se
desean. La ética profesional se trata del estudio de la moral y de realizar
acciones que generen el bienestar de la sociedad.

La ética profesional se trata de la reflexión que hacemos sobre las

pautas de conductas para el desempeño de las funciones de una actividad.
En la contaduría las actividades que el contador realiza debe existir
responsabilidad ante la empresa y la sociedad, dando garantía de
transparencia, generando confianza en cada uno de los procesos que lo
involucran y lo hacen participe del acontecer diario de su vida empresarial.

Cultivar la responsabilidad debe hacerse mediante la siembra de

valores y el echar raíces de los mismos, mediante la aplicación del
conocimiento, contribuyendo enormemente a la formación de una conciencia
colectiva.

La profesión no solo es un asunto individual, los contadores ejercen

una actividad pública y útil a la sociedad y para ser buenos se debe de tener
vocación y excelencia. La primera no es más que las cualidades que se
tienen para realizar las actividades y la segunda consiste en ser virtuoso es
decir ser hábiles y poner al servicio esas habilidades a la comunidad.

Actualmente con los tiempos de crisis se ha creado la falta de

presencia de buenos profesionales, conscientes de que en el desarrollo de
su actividad, no se están sirviendo a sí mismos, sino a una tarea que les
trasciende. Cada actividad contiene su propio fin, el cual le otorga sentido,
por ejemplo, el contador público sería un fin social y no solamente
económico. Esto supone que aquellas personas que se incorporan a la
actividad, deben ser fieles a dicho propósito y no anteponer sus intereses
individuales, no anteponer el dinero y el poder, porque los motivos
individuales no son razones, no se convierten en argumentos si no tienen por
base las exigencias de la meta profesional. Además hay que tener en cuenta
que la búsqueda de la excelencia en el desarrollo profesional no se trata de
competir con los demás sino con el mismo para seguir ofreciendo mejoras en
su profesión.