Paola Corredor Morales

Especialización Auditoría y Control de Gestión

Universidad de Antioquia

La constitución de 1991 fue el pilar para el control interno en el sector público, su

artículo 269 el cual cita “En las entidades públicas las autoridades correspondientes

están obligadas a diseñar y aplicar, según la naturaleza de sus funciones, métodos

y procedimientos de control interno, de conformidad con lo que disponga la ley, la

cual podrá establecer excepciones y autorizar la contratación de dichos servicios

con empresas privadas colombianas” y donde el articulo 209 da unos lineamientos

básicos, esto con el fin de no extralimitar las funciones del servidor público.

Desde ese entonces a la fecha en la parte publica se han venido dando una serie

de decretos y leyes que van en pro del mejoramiento o adecuación del control

interno en el sector público, entre ellos está el Decreto 1083 con el cual se

reglamentó las funciones del sector público, la valorización del riesgo, realizar la

evaluación y seguimiento entre otros son los puntos consignados en este decreto.

Por otro lado, en el sector privado estas medidas de control vienen dados desde las

juntas directivas y son vigiladas por el área de control interno y/o empresas externas

a ellas esto con el fin de proteger algún acto de dadivas. Si tanto las entidades del

sector público y del sector privado se rigen por las normas y leyes colombianas, las

del sector publica tienen ciertas características más particulares: Los trabajadores

públicos siempre están sometidos a la lupa de las entidades de control como la

contraloría, la procuraduría y la fiscalía; cada una de ellas con sus funciones

respectivas y delimitadas. Contraloría a los concerniente a los gastos, procuraduría

a las funciones de los trabajadores públicos y la fiscalía a la parte judicial en los

cuales pueda incurrir no solo funcionarios de este sector sino de todo el territorio

nacional, paralelo a estas órganos de vigilancia también se encuentran la

superintendencias (financiera, economía solidaria, subsidio familia y de salud) estas

entidades junto con la DIAN tienen como tarea principal, vigilar a las empresas que

ejercen en el sector privado y a las personas naturales, que se pueden ver inmersas

en diferentes controles que permitirán conocer sus movimientos financieros y

garantizar la transparencia de los mismos. En la parte sancionatoria el sector público

y el sector privado tienen diferencias significativas, esto ya que en la parte publica

como se mencionó anteriormente pueden traer sanciones desde disciplinarias,

pecuniarias hasta judiciales; mientras que en la parte privada estas se rigen a los

manuales de ética de cada entidad o a los procesos disciplinarios que se vea

incurrido la persona, sin embargo no quiere decir que las entidades privadas estén

libres de sanciones, por el contrario deben responder a los diferentes entes

reguladores; aunque esto sea visto como una obligación y en ocasiones hasta en

un castigo, estos evaluaciones y reportes que las entidades deben presentar

justificando el desempeño y los movimientos de sus negocios, también sirve como

control y monitoreo para el momento de tomar decisiones y tomar acciones frente a

hallazgos que puedan afectar el desarrollo de las compañías.

En el sector privado estas revisiones las puede realizar la misma entidad y no son

estrictamente sancionatorios si así no se considerase o que no infrinjan la ley.

Lo anterior no significa que las auditorias en el sector privado sean menos rigurosas,

solo que estas son sujetas a sanciones dentro de la misma organización o pueden

ser encaminadas para planes de acciones correctivas para aminorar el riesgo o

anularlo.

En la parte de riesgo ambas partes están expuestas a los mismos riesgos, pero en

la parte privada está sometida a intereses particulares vigiladas por las mismas

juntas que ponen sus controles, mientras tanto en la parte publica son intereses

generales donde toda la población está inmersa en ser objetivo de algún detrimento,

en esta última parte quisiera ser enfática en que a pesar que una compañía sea

privada, también genera problemas a la ciudadanía en general, así no sea pública,

pero tiene una responsabilidad social que puede contribuir al desarrollo de una

sociedad, con la generación de empleo por ejemplo.