ÉTICA Y TRANSPARENCIA PÚBLICA

La ética es el campo de función que posee el ser humano para constituir uno de los
valores más importantes, este permite que el individuo distinga las actitudes morales
que debería tener frente a diferentes situaciones que se le presentan en el diario
vivir y aplicable asimismo a diversas áreas como lo es de gran importancia el sector
público, en este sentido, la ética pública es la ciencia del buen comportamiento en
la prestación de un servicio, por medio de la cual se busca la calidad de la
administración evitando en lo posible el desarrollo de la corrupción por medio de la
elección de los representantes más idóneos para gobernar, además se entiende
que es un sistema y un mecanismo de control para las injusticias inevitables que se
presentan en el abuso del poder.

En lo que refiere a la trasparencia, se dice que es uno de los valores éticos más
importantes con el que debe contar todo servidor público para aplicar al ejercicio de
su función, siendo ésta un pilar fundamental para cumplir los objetivos de un
gobierno de manera exigible que conlleva una responsabilidad para con la sociedad
y debe estar asociado a características básicas de la información como son claridad,
calidad, actualización, clasificación adecuada y utilidad de la misma con el fin de
facilitar las relaciones comunicativas y comprensivas entre los seres humanos de
manera que se permita la ejecución de una vigilancia óptima. Según Aguilar Rivera,
“la transparencia es una práctica o instrumento que utilizan las organizaciones para
publicar o volver publico cierto tipo de información o bien para abrir al público
algunos procesos de toma de decisiones”. Aun así, es cierto que, aunque la
transparencia sea un derecho ciudadano y democrático por excelencia, ésta debe
mantener un proceso de construcción e implementación a largo plazo dentro de
cada ciudadano, siendo importante mencionar la relación que existe entre las
instituciones estatales de las cuales es parte fundamental para el cumplimiento de
sus objetivos.

De los conceptos anteriormente desarrollados – ética y transparencia pública- nace

una importante e inevitable conexión con la administración pública en la cual los
representantes juegan un papel muy importante ya que son los encargados de
brindar la tranquilidad y confianza hacia los ciudadanos que esperan en ellos un
compromiso responsable al cumplir sus funciones estatales. La finalidad del Estado
al exigir la ética y transparencia a sus trabajadores públicos es asegurar un gobierno
íntegro y honesto en búsqueda de la responsabilidad y eficiencia en el desarrollo de
sus funciones y gestiones a lo largo de su periodo de permanencia en el cargo
público. Refiriéndonos a la transparencia, cabe denotar que como pilar fundamental
es un eje central de actividades públicas que requieren de su aplicación para lograr
la efectividad de las funciones que deben desarrollarse en un gobierno justo, como
se muestra en el siguiente gráfico:

Control
social

Ètica pùblica y
Acceso a la
Transparencia Lucha Contra la
informacion Corrupciòn.

Rendiciòn
de cuentas