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UNIVERSIDAD JOSE CARLOS MARIATEGUI

ESCUELA PROFESIONAL DE ARQUITECTURA

CURSO: METODOLOGIA DE LA INVESTIGACION


CICLO: II CICLO
NOMBRE: - MARINA LISSET HERRERA MOSTAJO
- JEFFREY COAQUIRA
TRABAJO: PROYECTO DE INVESTIGACION INCREMENTO DE
TRANSITO PEATONAL EN ZONAS NO COMERCIALES
ALREDEDOR DE LA PLAZA DE ARMAS DE ILO.

ILO - PERU
2018
PROTOCOLO DE PROYECTO DE INVESTIGACIÓN

1. DATOS
1.1. Título
Incremento de Seguridad y tránsito peatonal en zonas no comerciales alrededor de la
Plaza de Armas de Ilo.

1.2. Área de Investigación

Este estudio analiza la problemática de las áreas públicas poco transitadas del centro
histórico de Ilo, en un tramo específico de la intersección Calle Zepita con Jr. 28 de julio y
con Jr. Mirave y alrededores, debido a la mala aplicación de urbanismo y el mal uso de
espacios de socialización en este sector.

1.3. Autor o grupo investigador


- Marina Lisset Herrera Mostajo
- Jeffrey Coaquira

2. EL PROBLEMA DE INVESTIGACION
2.1. Descripción de la Realidad Problemática

El preocupante fenómeno de la inseguridad en los núcleos urbanos, es de características


mundiales y ciertamente alarmante, tanto para los gobiernos como para los ciudadanos.
Entre las numerosas hipótesis planteadas sobre la causa del fenómeno, la escasa
transitabilidad peatonal es una de las más referidas.

Cada día se está haciendo más necesario construir un conocimiento complejo de


nuestros espacios de socialización tejiendo proyectos que lo afronten desde diferentes
enfoques. Miradas desde lo ambiental, lo físico, lo simbólico, lo jurídico, lo económico,
lo social, lo espiritual y lo político deben transformar y formar parte del cambio al que
se enfrentan nuestras ciudades y sus principales espacios de interrelación. Estos están
llamados a constituirse como lugares de intervención desde diferentes disciplinas y,
esperemos, ejemplos de convivencia entre ellas.

Si agregamos a la poca transitabilidad el problema de alcohol y drogas estaríamos


llevando la situación a posibles problemas delincuenciales, lo que desfavorece la
seguridad peatonal y el sector turístico de una Ciudad.
2.2. Definición del Problema
- Tenemos que la poca transitabilidad de la zona se debe al mal uso de los espacios de
sociabilización, la mala apliacion de normas de urbanismo, la falta de iluminación y la
presencia de consumo de alcohol y drogas por la zona.

- Despues de 40 años, la subida por el cuartel en Miramar tendrá


veredas, esta obra esta siendo ejecutada por la Municipalidad
Provincial de Ilo, se trata de la calle Bolognesi, ubicada en Upis
Miramar (Altura del cuartel) donde se intervendrá el mejoramiento de
bermas y veredas, el tratamiento de áreas verdes, instalaciones
eléctricas, entre otros acabados. Dentro de los trabajos se viene
desarrollando movimiento de tierra, demolición de veredas y bermas,
relleno compactado, cambio de cajas de agua y desagüe, entre otras
actividades, se tratan de una obra esperada por más de 40 años, donde
se realizó las gestiones para lograr los recursos que permita su
ejecución.

2.3. Objetivo de la Investigación


A. Objetivo General
Mejoramiento urbano
B. Objetivos Específicos
- Identificación de un correcto uso de Zona de Socialización mediante la creación de un
centro espiritual.
- Incremento del tránsito peatonal
- Incremento de movimiento comercial.

2.4. Justificación e importancia de la investigación

La seguridad ha cobrado durante este nuevo siglo una dimensión inédita; sin
embargo, hoy día es un factor de calidad y formas de vida, relacionado con el
diseño urbano. Por ello, existen nuevos paradigmas de análisis como el de la
“geoprevención”.

La “prevención del crimen a través del diseño ambiental” (CPTED, en sus siglas
en inglés) ha demostrado ser una estrategia útil y efectiva para prevenir el crimen
y los sentimientos de inseguridad; dicha orientación puede integrarse en el
paradigma multidisciplinar de la “geoprevención”.

Esta estrategia sirve para analizar la relación entre medio urbano y seguridad
pública como una consecuencia de diferentes situaciones socioculturales,
económicas o políticas. Por todo ello, la CPTED se basa en las vulnerabilidades.
Para conseguir disminuir o erradicar esas vulnerabilidades se emplea: el control
natural de accesos, la vigilancia natural, el refuerzo del territorio, el
mantenimiento de los espacios públicos y participación comunitaria.

La aplicación de futuras estrategias para la reducción de la violencia deberá


ponerse en relación directa con otras estrategias territoriales.

Desde una perspectiva conceptual, la seguridad cuenta con tantos matices que
nos invita a presentarla como una realidad poliédrica (Ruiz y Vanderschueren,
2007). No es sólo un valor jurídico, normativo o político, también lo es social,
pues se asienta en la base del bien común de las sociedades para el desarrollo
justo y equitativo de todos sus integrantes. Como valor es uno de los pilares
primordiales de la sociedad, se encuentra en la base de la libertad y la igualdad; y
contribuye al desarrollo pleno y equitativo de los individuos.

La violencia urbana afecta a la calidad de vida de las personas de una manera


determinante. El miedo y la inseguridad derivados de ella, en sus aspectos
emocionales más básicos, son una de las problemáticas inherentes a la vida
urbana de las sociedades postindustriales. Estas percepciones no sólo alteran y
condicionan los hábitos de las personas que viven en las ciudades, tanto de
manera general, devaluando su libertad y su calidad de vida, inhibiendo sus
hábitos sociales, condicionando el desarrollo de algunas de sus actividades; como
individualmente generando estrés, ansiedad, reducción de movilidad, rechazo de
contactos sociales, etc.; sino que además contribuyen al establecimiento o
modificación de los lazos afectivos que establecen los propios individuos con el
territorio más próximo a ellos.

Entre los discursos sociales urbanos, frente a la inseguridad, muy especialmente


durante los treinta últimos años, se han consolidado diferentes tipos de
propuestas relacionadas con la seguridad, y de una forma más concreta, con la
seguridad ciudadana.

Uno de los objetivos del presente trabajo será comprender, algo mejor, estos
rasgos identitarios de las sociedades postindustriales y, por lo tanto, sus discursos
derivados. Todo ello implica entender, y por lo tanto actuar, sobre las etiologías
que generan dichos comportamientos violentos y las manifiestas relaciones que
presentan con el territorio. En este contexto emerge recientemente el enfoque de
la “geoprevención”. El origen, análisis, desarrollo y algún ejemplo concreto de
esta nueva fórmula de contribución a la seguridad ciudadana serán algunos de los
centros de interés a los que prestaremos atención más adelante.

La caminata diaria en un espacio seguro y ameno es una de las claves para la salud y la
calidad de vida. La caminata no sólo beneficia al individuo sino también a la sociedad,
promoviendo la integración social, la seguridad pública y vitalidad económica de los
negocios del barrio. Caminar, junto con montar bicicleta y el transporte público contribuye
a crear una ciudad sana y amena con menos tráfico y contaminación.

De acuerdo con la OMS, una caminata ligera diaria ayuda a reducir el riesgo de padecer
enfermedades no transmisibles tales como la diabetes o enfermedades cardiovasculares.
Menor contaminación reduce el riesgo de enfermedades respiratorias.

Balanceando la inversión en infraestructura de transporte, ofreciendo opciones de calidad


para peatones, ciclistas y usuarios de autobus. Una ciudad en la que todos puedan escoger
como desplazarse sin afectar su seguridad o comfort.

Las ciudades caminables tienen un impacto positivo en las economías locales,


promoviendo la actividad de pequeños y medianos comerciantes. Las ciudades caminables
estimulan el turismo e incentivan la inversión privada.

La vitalidad del centro se mide en la cantidad de peatones en sus calles

2.5. Variables
- Creación de un Centro de Desarrollo Espiritual.

2.6. Hipótesis de la investigación


Se incrementará la seguridad y transitabilidad peatonal, con la creación de un Centro de
Desarrollo Espiritual (Iglesia), debido a la asidua congregación de los miembros, la adicion
de nuevos miembros y la visita de terceros.

3. MARCO TEORICO

3.1. Antecedentes de Investigación


Se resumen los Antecedentes y estudios principales sobre los cambios realizados en una
comunidad por la Creacion de un Centro Espiritual.
Márquez, Pavelyn (2012). Intervenciones urbanas en el espacio público y percepción de (in)seguridad
ciudadana: el caso del Bulevar de Catia (tesis de pregrado). UNES, Universidad Nacional Experimental
de la Seguridad.

La investigación presentada ha permitido conocer las vinculaciones entre las intervenciones físicas y
socioculturales de los espacios públicos con la percepción de (in)seguridad de los ciudadanos y ciudadanas, vistos
en un caso particular: el Bulevar de Catia. Dentro de los hallazgos de la investigación, se destaca que es posible
relacionar la seguridad de los espacios públicos con las condiciones físico-ambientales, es decir, existen elementos
estructurales que contribuyen o acondicionan el lugar para que sea percibido como inseguro o no. Llamó la atención
que el procesamiento de los datos hace ver que en líneas generales, las personas que utilizan el Bulevar de Catia
consideran que tienen características físicas que invitan a los ciudadanos a utilizarlo, catalogándolo como bonito y/o
seguro. No obstante, este uso del espacio se realiza en un horario específico que se relaciona con las horas donde
se cuenta con luz natural. Igualmente, esa seguridad va acompañada de estrategias que evitan ser víctima de delitos,
como por ejemplo estar alerta, asegurar sus pertenencias y retirarse temprano. El Bulevar de Catia viene siendo
objeto de importantes intervenciones tanto físicas como socioculturales que se proponen mejorar sus condiciones.
En este sentido, a través de la opinión de los entrevistados encontramos dos visiones que califican como positivas
tales intervenciones. Dentro de las principales intervenciones físicas podemos mencionar la colocación de parques
en todo el bulevar, la sustitución de adoquines, la peatonalización de las calles transversales, la iluminación y la
recuperación del mercado. La intervención más impactante para las personas consultadas es la colocación de
parques a lo largo del recorrido. Consideramos que estas intervenciones fueron acertadas ya que invitan a
permanecer y utilizar el bulevar como lugar de esparcimiento y recreación. La otra visión, aunque reconoce lo
positivo de las intervenciones, destaca que no existió una planificación sistemática de las intervenciones, ya que se
tomaron diversos espacios del bulevar al mismo tiempo, causando molestias a los transeúntes, esto hace reflexionar
sobre el reconocimiento hacia el mejoramiento físico del espacio pero considerando las implicaciones que trae.
Como parte de las intervenciones socioculturales, en el bulevar se realizaron conciertos, bailoterapias, jornadas de
salud, entre otras. Estas acciones también han sido valoradas como positivas por la totalidad de las personas
entrevistadas; aspectos en el que coincidimos como investigadoras, ya que estas han perneado la visión de los
ciudadanos, motivando al uso y disfrute del espacio público a través de actividades culturales, deportivas y
recreativas. De esta manera, se considera que las iniciativas desarrolladas por la Universidad Nacional Experimental
de la Seguridad (UNES), especialmente las relacionadas con las jornadas de salud y la bailoterapia han tenido una
recepción positiva en el colectivo. Estos eventos promovidos por la UNES se enmarcan dentro la Política Catia Pura
Vida, la cual busca crear un sentido de pertenencia por parte de los usuarios hacia los espacios de la parroquia. En
cuanto al trabajo policial, encontramos que las personas entrevistadas tienen dos posturas respecto a su actuación:
La primera reconoce el trabajo de los funcionarios policiales como bueno, donde frecuentemente se transita por
todo el lugar. La segunda, se vincula con la idea de reconocerlo como autoridad que debe velar por el mantenimiento
del orden y el cumplimiento de la normativa. El tema de la intervención policial, nos hizo llegar a la reflexión sobre el
papel de las policías. Para el caso abordado se observó una apropiación del bulevar por parte del efectivo policial, no
obstante, llamó nuestra atención que existen dos cuerpos de seguridad posicionados en el mismo. Las indagaciones
permitieron conocer que a la Policía del municipio Libertador (Policaracas) le corresponde estar atentos en el
bulevar en el horario de la mañana y la tarde, mientras a la Policía Nacional Bolivariana se encarga del mismo en
horas de la noche. El tema de la seguridad en el caso revisado se maneja bajo elementos que se vinculan con
situaciones actuales, diarias. Es por esta razón, que algunos de los actores clave buscan conocer en detalle las
fortalezas y debilidades del espacio. Para cerrar consideramos pertinente asomar algunas sugerencias que
surgieron a partir del proceso de investigación en este caso de estudio:

› Fortalecer los mecanismos que favorecen la participación de las comunidades en sus espacios.

› Promover y divulgar las acciones que manejan los entes encargados de la seguridad.

› Utilizar la geografía del delito para comprender los procedimientos y las acciones que en materia de seguridad se
deben emprender en el bulevar.

› Proponer algunas estrategias que contribuyan a fomentar el valor de los espacios públicos de la ciudad
(densificación y cambios de uso

› Implementar estrategias educativas sobre normas de convivencia.

› Estudiar la posibilidad de incorporar, lo que algunos autores llaman “la policía a pie o la policía orientada con la
comunidad”.

› Colocar señalización que se corresponda con las condiciones propias del lugar. Finalmente, es relevante destacar
que los resultados llevan a pensar en la importancia del trabajo cogestionado que involucre a todos los actores clave
(policía, instituciones, comunidad) en la gestión de la seguridad ciudadana.

ARQ. WADY JULIAN M. DAZA (2008). LA INTERVENCION EN EL ESPACIO PÚBLICO COMO ESTRATEGIA PARA
EL MEJORAMIENTO DE LA CALIDAD DE VIDA URBANA Caso de Estudio: VALLE DE LABOYOS (PITALITO -
HUILA). (tesis doctoral). PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA MAESTRIA EN PLANEACION URBANA Y
REGIONAL Bogotá D.C.

La operación urbanística propuesta presenta como componentes o unidades estratégicas las siguientes
intervenciones: • Adecuación áreas exteriores Coliseo Cubierto • Rehabilitación y adecuación de la Plaza de Ferias •
Recuperación ronda hídrica río Guarapas y proyecto de renovación urbana Barrio El Libertador • Operación
plataforma de turismo ecológico y de negocios 116 Para la ejecución del proyecto propuesto, se plantea una
estructura de financiamiento mixto basado en la cooperación público – privado, definido en cinco fases, replicables
de forma cíclica para cada uno de las unidades de actuación:

FASE 1 – ESTRUCTURACION Y FACTIBILIDAD.

FASE 2 – LICITACION PUBLICA PARA FIDUCIA.

FASE 3 – INVITACION A INVERSIONISTAS PRIVADOS.

FASE 4 – CONVOCATORIA A CONCURSO DE LOS DISENOS DE LAS OPERACIONES.

FASE 5 – EJECUCION DE OBRAS.

FASE 6 – ENTREGA Y OPERACIÓN.

Se espera que el proyecto propuesto cree espacios de inversión mediante esquemas de cooperación publico privado
que permita generar flujos de recursos necesarios para la atención de necesidades sociales; recuperar el segmento
urbano del río Guarapas y su ronda, incorporándola a una operación paisajística que la vinculara con la dinámica
urbana y permitirá devolverle su carácter estructurante; generar equipamientos para la recreación activa y pasiva
de los pobladores, incrementando el número de metros cuadrados disponibles para su uso y disfrute; mejorar la
provisión de espacios para el desarrollo de actividades culturales que refuerzan los valores culturales y tradiciones
de los pobladores y contribuyen a asegurar su preservación en el tiempo; y finalmente, generar ofertas para la
relocalización de aquellos habitantes que se encuentran en situación de riesgo por situarse sobre zonas de reserva
– ronda hídrica.

ANDREA MARCELA NAVA SÁENZ (2009). PROPUESTA DE DISEÑO URBANO PARA LA RECUPERACIÓN DE LA
ESTRUCTURA URBANA Y AMBIENTAL DEL SECTOR DE BAZURTO EN CARTAGENA (tesis para título de
arquitecto). PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA MAESTRIA EN PLANEACION URBANA Y REGIONAL
Bogotá D.C.

Planteamiento eje de intervención Considerando que en la ciudad de Cartagena se ve muy polarizado el desarrollo
hacia la zona del Centro Histórico, se propone una intervención en el eje que conecta el área del Centro Histórico
con el área deprimida de la ciudad, puesto que dicho eje actualmente imposibilita la eficaz comunicación entre estos
sectores, viéndose cada vez más relegada la zona deprimida de la ciudad. De acuerdo a lo anterior, se propone una
intervención a nivel vial donde se amplía la vía Pedro de Heredia de acuerdo a lo establecido por TransCaribe
aprovechando esta intervención para poder generar pasos peatonales arborizados junto a esta. Así mismo se realiza
una intervención en las manzanas adyacentes, donde se propone una nueva tipología edificatoria de uso mixto en la
que se permite una amplia comunicación entre manzanas por medio de elementos tales como puentes, pasos
elevados y pérgolas de igual forma se propone un aprovechamiento de la cubierta de dichos edificios por medio de la
creación de equipamientos y cubiertas arborizadas. En cuanto el desarrollo de espacio público se propone vías
peatonales sobre las principales vías del sector las cuales se conectan creando un sistema de espacio público que
remata en la Ciénaga de las Quintas en un malecón que incluye una marina recreativa. En el sector específico donde
está ubicado el mercado de Bazurto se conserva el edificio del mercado, el cual es una edificación de gran
importancia para la memoria urbana y colectiva de la ciudad, por lo que se realizan intervenciones a nivel urbano
para descongestionar el sector, darle un mejor funcionamiento, integrar el edificio a la nueva propuesta y así
aumentar su poder de atracción, de acuerdo a esto se genera mayor espacio público recuperando las áreas
apropiadas por los vendedores informales, se genera un área comercial y se propone la creación de equipamientos
culturales como lo son un Centro Artesanal y una escuela de Arte. 64 Con las intervenciones anteriores se busca
establecer el eje como una centralidad urbana que permita terminar con la concentración del desarrollo hacia el
sector del Centro Histórico (zona oeste de la cuidad), y así se empiece a llevar el desarrollo hacia la deprimida de la
ciudad (zona este)

ROGERIO GARCÍA FERNÁNDEZ (2016). PROYECTOS, ACCIONES E INICIATIVAS DE INTERVENCIÓN URBANA:


LA PRODUCCIÓN CULTURAL LOCAL COMO ESTRATEGIA DE DESARROLLO DE LA CREATIVIDAD EN LAS
CIUDADES (TESIS DOCTORAL). UNIVERSIDAD COMPLUTENSE DE MADRID.

observamos que los proyectos analizados en nuestra muestra del Río Manzanares en Madrid y Porto
Maravilha en Río de Janeiro son efectivamente creativos, a la medida que poseen las cuatro
características de la creatividad analizadas que la bibliografía propone; además incluyen otros
proyectos, iniciativas y acciones públicas, privadas y de la sociedad civil; como también son exitosos en
sus objetivos de promocionar mejor movilidad urbana, crearon espacios de ocio y cultura y además,
urbanizaron las zonas degradadas mejorando la comunicación, la cultura, contribuyendo con la
comunidad. Estas características destacadas, además de la generación de una cultura de producción
creativa, también fueron validadas como imprescindibles a través de lo que dijeron los expertos en los
grupos focales. Así que podemos afirmar que la hipótesis siguiente es válida: Para que sean creativos los
proyectos, iniciativas o acciones que llevan a cabo entidades gubernamentales o no gubernamentales,
empresas, colectivos y ciudadanos en las ciudades iberoamericanas es imprescindible desarrollar una
cultura de producción creativa. Aun sobre la hipótesis general la investigación encontró como
características de la comunicación una búsqueda por parte de los proyectos de una interacción con las
personas de la ciudad y se notó, por los grupos focales, que esta es más que una necesidad, también de
las personas de la ciudad, es decir, la ciudades comunican y buscan formas de comunicar porque es una
necesidad de la propia ciudad. Esta comunicación tiene cambiado porque está claro en la investigación
que no se trata apenas de comunicar lo que está ocurriendo, se trata de dar informaciones y recibir
todos los tipos de fedback. Las ciudades están cada vez más buscando formas de integración, las
acciones acaban por afectar el cotidiano de una ciudad y de las personas, por eso deben ser bien
comunicadas para generar seguridad y entendimiento sobre los cambios como necesarios e
importantes. En 446 general son acciones que afectan además la estructura física de ciudad afectan la
cultura, y la comunidad debe pasar por una reorganización. Sassen (2007) destaca la importancia de un
entendimiento más profundizado, es decir, un proyecto de acción global debe ser examinando en
términos de proceso, de condiciones y sus consecuencias. Por eso que uno de los puntos apuntados en
los grupos focales es la mejora de la comunicación, que no puede ser apenas en el sentido de informar,
más de garantizar participación para que las personas participen también comentando sus expectativas.
En las ciudades globales iberoamericanas es imprescindible para su éxito llevar en consideración las
características específicas de la cultura. En los grupo focales se relacionó la cultura con la
comunicación, en el sentido de la comunicación ser el medio de la cultura se presentar y se desarrollar
de forma plural. Se trata de entender también las características de la sociedad. Se trata de considerar
la ciudad, la cultura y la sociedad como afirma Pratt & Hutton (2012) como un espacio amplio de diálogo,
en este sentido se debe considerar la ciudad creativa como un campo de la política en lugar de una
política en particular de ideas que han sido fragmentados y recombinados muchas veces en lugares
diferentes. En las ciudades globales la comunicación, la cultura y la sociedad están cada vez más
relacionadas, por supuesto que cada fragmento tiene características especiales pero acaban
encontrando ejes de relaciones para que los objetivos finales sean de interese común. Cuanto la
hipótesis que afirma que las ciudades globales iberoamericanas enseñan proyectos llevando en cuenta
sus aspectos creativos en sus páginas Web, considerando la amuestra utilizada, podemos afirmar que en
los casos estudiados la hipótesis es verdadera, pues se encuentra fluidez en las Informaciones sobre la
atracción, la flexibilidad en las posibilidades que la atracción ofrece, también se nota la originalidad en el
uso de espacios públicos para ocio y por fin la elaboración se nota cuando se presenta las actividades
que el espacio ofrece. 447 Como apunta García García (1981) la creatividad es una capacidad que va
encaminada de la búsqueda de soluciones nuevas, es decir, esta investigación considera que con el uso
de la internet es posible articular diferentes temáticas, es decir, es posible abordar el lugar, la intención,
la finalidad y la estructura. Una estructura que pone más el proyecto en contacto con personas y estas
puede contribuir con ideas, sugerencias y críticas. La hipótesis de las ciudades globales iberoamericanas
realizaren proyectos creativos considerando la comunicación, la cultura y la sociedad, en el caso de los
proyectos analizados, también es verdadera pues se observó en el análisis narrativo que las páginas Web
son un subsidio de consulta diaria para los ciudadanos. En las páginas se encuentran formas de
mantener el ciudadano informado, un contacto con los sectores de actuación en la ciudad y tiene una
comunicación casi en tiempo real, con noticias diarias. Esta hipótesis también se registra como
verdadera cuando se observa los elementos que componen el proyecto, es decir, en términos de servicio
ofrece informaciones locales, cuanto a impacto cultural, presenta apoyo a cultura, actividades políticas y
de tramites obligatorios. También se tiene la comunicación interactiva cuando las páginas Web enseñan
los elementos urbanos y de mejora de la ciudad. En términos sociales se muestran con potencial de
desarrollo económico con acciones que pueden servir a los ciudadanos. Los cambios organizados en las
ciudades pueden generar nuevas posibilidades económicas, como frentes de trabajo durante el proyecto
y nuevas posibilidades cuando se termina. En el caso de Madrid y Río de Janeiro se muestran como
acciones que generaran cambios en zonas degradadas. Aun en términos de sociedad se puede afirmar
que hay manifestaciones de valores, un tema bastante abordado en los grupos focales, con soluciones,
experiencias, vivencias y necesidades relacionadas a la ciudad. La inclusión social es un valor para los
proyectos porque mejoraron la 448 vida de los ciudadanos. En los dos proyectos analizados, las ofertas
de arte, cultura y ocio son bastante valorados y se presentan como esenciales y aparecen como
justificativa para la obra. Tanto el proyecto Río Manzanares en Madrid y Porto Maravilha en Río de
Janeiro se presentan de un modo general, como proyectos creativos que acontecen en ciudades globales
con líneas de comunicación social y cultura bastante desarrolladas. En los materiales analizados de los
dos proyectos se ve una preocupación que los cambios además de ser entendidos como importante para
la estructura de la ciudad, que sean de forma muy práctica algo que toda la comunidad pueda disfrutar

3.2. BASES TEORICOS

Primera sección de la Carta

La ciudad y su región.
1. La ciudad no es más que una parte del conjunto económico, social y político que constituye la región.
2. Yuxtapuestos a lo económico, a lo social y a lo político, los valores de orden psicológico y fisiológico ligados a la
persona humana introducen en el debate preocupaciones de orden individual y de orden colectivo. La vida
solamente se despliega en la medida en que concuerdan los dos principios contradictorios que rigen la
personalidad humana: el individual y el colectivo.
3. Estas constantes psicológicas y biológicas experimentarán la influencia del medio: situación geográfica y
topográfica, situación económica, y situación política. En primer lugar, la situación geográfica y topográfica, la
índole de los elementos, agua y tierra, la naturaleza, el suelo, el clima...
4. En segundo lugar, la situación económica. Los recursos de la región, contactos naturales o artificiales con el
exterior...
5. En tercer lugar, la situación política; sistema administrativo.
6. Ciertas circunstancias particulares han determinado los caracteres de la ciudad a lo largo de la historia: la
defensa militar, los descubrimientos científicos, las sucesivas administraciones, el desarrollo progresivo de las
comunicaciones y de los medios de transporte (rutas terrestres, fluviales o marítimas, ferrocarriles y rutas
aéreas).
7. Las razones que presiden el desarrollo de las ciudades están, pues, sometidas a cambios continuos.
8. El advenimiento de la era del maquinismo ha provocado inmensas perturbaciones en el comportamiento de los
hombres, en su distribución sobre la tierra y en sus actividades mismas; movimiento irrefrenado de concentración
en las ciudades al amparo de las velocidades mecánicas; evolución brutal y universal sin precedentes en la historia.
El caos ha hecho su entrada en las ciudades.
Análisis
En estos primeros 8 puntos hace énfasis en la ciudad, y los factores que han ayudado o perjudicado al desarrollo de
este. Menciona el marco social y económico en el que se crea o desenvuelve una ciudad.
Habla de las delimitaciones de las zonas urbanas y de cómo el hombre ah realizado sus divisiones territoriales sin
considerar la unidad geográfica; al realizar esto se volvía aun más difícil poder controlar y manejar bien estas
unidades. Las condiciones vitales de una región están determinadas por las vías de comunicación que permiten
realizar los necesarios intercambios y que la vincularse con los demás, y de esta forma se puede convertir en un
municipio muy rico, lleno de lujos y tecnología o quedar varado en la pobreza y seguir siendo una población no tan
desarrollada.
El hombre debe de vivir en comunicación con las demás personas, y al mismo tiempo tener la opción de privacidad
para crear el equilibrio necesario que una persona sana física y mentalmente necesita.
Todo, desde la situación geográfica y topográfica en la que se desenvuelve, hasta la situación económica y política
en la que vive tienen gran influencia en la persona de manera psicológica y biológica.
Dentro de los estudios y análisis de este documento también habla de cómo ciertas circunstancias particulares
determinan los caracteres de una ciudad a lo largo de la historia: una guerra o conflicto militar, los
descubrimientos científicos, la administración de esta o el desarrollo de las comunicaciones, los medios de
transporte, todo marca desde la arquitectura del lugar, a la mentalidad y la forma de vivir de las personas.
Haciendo conciencia de este análisis, podemos encontrar como es muy cierto, y todos vivimos día a día de las
consecuencias de las delimitaciones de ciudades, no tomando en cuenta el factor geográfico y como la falta de
comunicación puede frenar el desarrollo de los municipios.

Segunda sección de la Carta

Estado actual de las ciudades. Críticas y remedios.


9. En el interior del núcleo histórico de las ciudades, así como en determinadas zonas de expansión industrial del
siglo XIX, la población es demasiado densa (se llega a sumar hasta mil e incluso mil quinientos habitantes por
hectárea).
10. En los sectores urbanos congestionados, las condiciones de habitabilidad son nefastas por falta de espacio
suficiente para el alojamiento, por falta de superficies verdes disponibles y, finalmente, por falta de cuidados de
mantenimiento para las edificaciones (explotación basada en la especulación). Estado de cosas agravado todavía
más por la presencia de una población con nivel de vida muy bajo, incapaz de adoptar por sí misma medidas
defensivas (la mortalidad llega a alcanzar el veinte por ciento).
11. El crecimiento de la ciudad devora progresivamente las superficies verdes, limítrofes de sus sucesivas
periferias. Este alejamiento cada vez mayor de los elementos naturales aumenta en igual medida el desorden de la
higiene.
12. Las construcciones destinadas a vivientes se hallan repartidas por la superficie de la ciudad, en contradicción
con las necesidades de la higiene.
13. Los barrios más densos se hallan en las zonas menos favorecidas (vertientes mal orientadas, sectores
invadidos por neblinas o gases industriales, accesibles a las inundaciones, etc.).
14. Las construcciones aireadas (viviendas acomodadas) ocupan las zonas favorecidas, al abrigo de vientos
hostiles, con vistas seguras y graciosos desahogos sobre perspectivas paisajistas: lago, mar, montes, etc., y con
abundante exposición al sol.
15. Esta distribución parcial de la vivienda está sancionada por el uso y por unas disposiciones municipales que se
consideran justificadas: zonificación.
16. Las construcciones levantadas a lo largo de las vías de comunicación y en las proximidades de los cruces son
perjudiciales para la habitabilidad: ruidos, polvo y gases nocivos.
19. Las escuelas, en particular, se hallan frecuentemente situadas en vías de circulación y demasiado alejadas de
las viviendas.
20. Los suburbios se ordenan sin plan alguno y sin vinculación normal con la ciudad.
21. Se ha tratado de incorporar los suburbios en el ámbito administrativo.
22. A menudo los suburbios no son más que una aglomeración de barracas donde la indispensable viabilidad resulta
difícilmente rentable.
23. En lo sucesivo, los barrios de viviendas deben ocupar los mejores emplazamientos en el espacio urbano,
aprovechando la topografía, teniendo en cuenta el clima y disponiendo de la insolación más favorable y de los
espacios verdes oportunos.
24. La determinación de las zonas de habitación debe estar dictada por razones de higiene.
34. Los terrenos que podrían ser destinados a las horas libres semanales se hallan a menudo mal comunicados con
la ciudad.
35. En lo sucesivo, todo barrio residencial debe contar con la superficie verde necesaria para la ordenación
racional de los juegos y deportes de los niños, de los adolescentes y de los adultos.
36. Los islotes insalubres deben ser demolidos y sustituidos por superficies verdes: con ello, los barrios limítrofes
resultarán saneados.
37. Las nuevas superficies verdes deben asignarse a fines claramente definidos: deben contener parques infantiles,
escuelas, centros juveniles o construcciones de uso comunitario, vinculado íntimamente a la vivienda.
38. Las horas libres semanales deben pasarse en lugares favorablemente preparados: parques, bosques, terrenos
deportivos, estadios, playas, etc.
40. Deben estimarse los elementos existentes: ríos, bosques, colinas, montañas, valles, lago, mar, etc.
44. Debido a la falta de todo programa -crecimiento incontrolado de las ciudades, ausencia de previsiones,
especulación del suelo, etcétera-, la industria se instala al azar, sin obedecer a regla alguna.
47. Los sectores industriales deben ser independientes de los sectores de habitación; unos y otros deben estar
separados por una zona verde.
53. Las dimensiones de las calles, inadecuadas para el futuro, se oponen a la utilización den las nuevas velocidades
mecánicas y a la expansión regular de la ciudad.
62. El peatón debe poder seguir caminos distintos a los del automóvil.
64. Las zonas verdes deben aislar, en principio, los cauces de gran circulación.
Patrimonio histórico de las ciudades.
65. Los valores arquitectónicos deben ser salvaguardados (edificios aislados o conjuntos urbanos).
66. Los testimonios del pasado serán salvaguardados si son expresión de una cultura anterior y si responden a un
interés general...
69. La destrucción de tugurios en los alrededores de los monumentos históricos dará ocasión a la creación de
superficies verdes.
70. La utilización de los estilos del pasado, con pretextos estéticos en las nuevas construcciones alzadas en las
zonas históricas tiene consecuencias nefastas. El mantenimiento de semejantes usos o la introducción de tales
iniciativas no será tolerado en forma alguna.

3.3. MARCO CONCEPTUAL

El Plan de Desarrollo 2016-2019, Ilo cuenta con ustedes, es producto de un ejercicio de construcción colectiva con
los ciudadanos, los gremios y sectores más representativos de la sociedad ileña, las juntas y organizaciones
sociales de cada comuna y corregimiento de la ciudad, los servidores públicos del Municipio de Ilo, y el nuevo
gabinete municipal. En el presente documento se describe la propuesta de ciudad que soñamos para el periodo
2016-2019, considerando como esencia conceptual de dicho plan su enfoque hacia el desarrollo integral del
Municipio de Ilo, entendiendo desarrollo integral como “un proceso de transformación multidimensional,
sistemático, sostenible e incluyente que se genera para lograr el bienestar de la población en armonía y equilibrio
con lo ambiental (natural y construido), lo sociocultural, lo económico y lo político administrativo en un territorio
determinado (…) y teniendo en cuenta un contexto global” (Departamento Nacional de Planeación, 2010). Cabe
resaltar que la construcción y formulación de este Plan de Desarrollo fue establecida por el Departamento
Administrativo de Planeación Municipal, y regulada mediante el Decreto 0225 de 2016. Dicha metodología se
estructuró basada en los lineamientos y normativas vigentes a nivel nacional, especialmente la Constitución
Política de Peru de 1991 y la Ley 152 de 1994, y por supuesto en la propuesta de proyecto de desarrollo urbano,
presentada en calidad de candidato a la Alcaldía del municipio e inscrita ante la Registraduría Nacional del Estado
Civil el 21 de julio 2015. Es importante tener en cuenta que el Plan de Desarrollo 2016-2019, parte de un claro
modelo viable, sostenible y sustentable de ciudad liderado por el Alcalde William Valdivia Dávila, convertido no solo
en un sueño de todo un equipo de trabajo y de la ciudadanía en general, sino en un conjunto riguroso de
estrategias cuyo objetivo es hacer de este sueño una realidad, con una orientación metodológica basada en
resultados concretos en el territorio, y construido y ejecutado de manera democrática y participativa dentro del
marco de la legalidad y la transparencia. Con el enfoque destacado de desarrollo integral para el territorio, los
niveles definidos para la estructura del plan fueron:

Gráfica 1: Estructura anteproyecto Plan de Desarrollo 2016 – 2019


Fuente: Elaboración propia. Proyecto de desarrollo urbano, 2016.

El primer nivel: ‘Dimensiones estratégicas’, obedece a los ejes fundamentales de ciudad donde se enfocan los
impactos considerables de este gobierno; el segundo nivel: ‘retos’, como la palabra lo dice son los grandes
desafíos de ciudad dentro de cada una de estas temáticas; el tercer nivel: ‘programas’, son las agrupaciones de
proyectos encaminados a resolver la misma problemática; y el último y cuarto nivel: ‘proyectos’, como la unidad
básica de la gestión pública donde se describen el conjunto de acciones para satisfacer una necesidad puntual de
la sociedad, tal y como lo establece la autoridad nacional en materia de planificación, el Proyecto de desarrollo
urbano ilo. Desde el discurso de posesión del Alcalde el 1 de enero de 2015, las palabras claves para describir las
problemáticas que hoy vive la ciudad fueron tres: se necesita un ILO legal, segura y equitativa, de ahí que el
anteproyecto actual gire en torno a la solución de estos tres temas. La primera dimensión de carácter transversal
a todo el ejercicio de gobierno se llama Creemos en la cultura ciudadana. El interés del gobierno es propiciar que
la ciudadanía sea corresponsable del desarrollo de la ciudad, empezando primero que todo por entender nuestro
papel como ciudadanos, donde todas sus acciones con respecto a la salud, al cuidado del medio ambiente, a los
valores, a la participación, la convivencia y en general todas sus acciones cotidianas, impactan no solo en la
familia sino también en la escuela, el trabajo y demas espacios de la sociedad. Para esto en la dimensión se
describen las acciones que se 19 desarrollarán en función de ese trabajo por el cambio en la cultura ciudadana, los
medios por los cuales puede participar la ciudadanía y las diferentes acciones que como estado se harán para
construir con todos los ciudadanos una ciudad mejor. Con la dimensión Recuperando la seguridad y convivencia
ciudadana, es claro que se debe atender una necesidad sentida por todos, mientras no recuperemos la seguridad
no podemos disfrutar plenamente de nuestros derechos como ciudadanos. Paralelamente a la recuperación de la
seguridad, desarrollamos estrategias para una sana convivencia ciudadana que propenda por una ciudad
tolerante. Es por esto que se describen en esta dimensión todas las acciones en materia de planificación,
infraestructura física y tecnológica en materia de seguridad de la ciudad y todas las iniciativas para el
mejoramiento de la convivencia entre los ciudadanos, la recuperación de confianza en las instituciones que inciden
en la construcción de paz desde nuestro territorio y la apuesta de reconstrucción del tejido social y del reto que
significa el posacuerdo para nosotros como ciudad. Atendiendo la problemática de la desigualdad, se construye la
dimensión tres, como un nuevo modelo de equidad social para la ciudad de ILO, ya que hoy se tienen muchos
programas de atención e inclusión social, algunos que se deben revisar al interior, pues nos hemos vuelto
receptores de población en condiciones vulnerables de otros municipios. Aquí, más que atender esta población y
seguir teniéndola en estas condiciones, ILO y todos debemos apostarle a que dicha población salga de su condición
de vulnerabilidad y alcance condiciones normales de calidad de vida que le permitan más y mejores oportunidades
de desarrollo. Es por esto que se describen todas las acciones en esta materia siempre desde el punto de vista de
cómo mantenemos y mejoramos los programas y proyectos sociales que existen pero con un enfoque diferente
donde se mejore la cobertura pero al mismo tiempo se migre de la vulnerabilidad a la prosperidad. En la dimensión
de educación de calidad para el desarrollo y la competitividad , si bien se reconocen los avances importantes de
ciudad en esta materia, la preocupación hoy de la administración en sintonía con el gobierno nacional es la calidad
educativa y el acceso a la eduación superior. Los esfuerzos se centran en procesos de formación de calidad con
pertinencia a la oferta laboral de la ciudad, por esto en esta misma dimensión aparecen los programas para el
desarrollo económico y la competitividad de la ciudad, visibilizando así la importancia de hacer concurrir el
desarrollo de las capacidad humanas y las competencias laborales con las necesidades del mercado. No se puede
dejar atrás el reconocimiento mundial como la ciudad mas innovadora en el 2013, y por esto se tiene una gran
apuesta en esta materia sobretodo con un enfoque de innovación cercana al ciudadano tal y como es el modelo de
administración de este gobierno.

La metodología CPTED (Prevención del Crimen a Través del Diseño Ambiental)


En los años setenta y ochenta, la ausencia de estructuras policiales adecuadas para hacer frente a la mayor parte
de los tipos de violencia urbana conocida y la necesidad de ofrecer una respuesta eficaz provocaron la
transformación relativa de las tradicionales estructuras securitarias y de los sistemas de control social,
abriéndose de una forma evidente al conocimiento y al estudio analítico y científico de las interrelaciones entre
violencia y ciudad. Su relación es innegable, y resulta extremadamente complejo definirla con claridad. En este
contexto se desarrolla la metodología CPTED, invirtiéndose los términos tradicionales, y proponiendo primero el
diseño de forma segura, para después construir.

La Prevención del Crimen a Través del Diseño Ambiental o CPTED (Crime prevention through environmental design,
según sus siglas en inglés) es una metodología desarrollada por el criminólogo estadounidense Clarence Ray
Jeffery a mediados de los años setenta. Básicamente, dicha aportación da por entendido que el ambiente físico y
social urbano puede generar oportunidades para que se cometan los delitos y con la propuesta, el autor es
consciente de que las oportunidades para la violencia urbana pueden reducirse al modificar ciertos parámetros
ambientales.

El concepto CPTED (Jeffery, 1977) junto con los principios de “espacio defendible” promovidos por el arquitecto e
investigador Oscar Newman, aproximadamente al mismo tiempo, han sido claves para consolidar el desarrollo de
estrategias geopreventivas, a finales del siglo XX.

La aplicación de las estrategias CPTED en los diferentes tipos de equipamientos (hospitalarios, escolares,
universitarios,...) puede contribuir de manera importante a prevenir la violencia urbana, y en el caso de los
equipamientos escolares a desarrollar un ambiente de aprendizaje más seguro al influir en la conducta de los
estudiantes y de los visitantes a estos centros.

La orientación propone la necesidad de entender los objetivos conductuales antes de considerar una estrategia de
prevención del delito. Este enfoque reconoce la necesidad de apoyar inicialmente los comportamientos deseados
dentro de los diferentes tipos de espacios urbanos, incidiendo en ellos por medio del diseño, del uso y de la
administración de los entornos microambientales y sólo después aplicar las estrategias para reducir los
comportamientos no deseados o antinormativos. Este hecho tiene el beneficio de asegurar que las estrategias de
prevención del delito sean contextualmente apropiadas y no se determine de forma indebida el uso óptimo del
espacio.

Esta metodología tiene cinco conceptos primarios interrelacionados que están destinados a reducir las
oportunidades de la comisión de actos violentos así como también el miedo al delito: control de acceso, vigilancia,
refuerzo territorial, mantenimiento de espacios públicos y participación comunitaria.

Estos conceptos básicos ofrecen un marco de trabajo para promover el diseño urbano eficiente y el uso “seguro”
de los espacios de nuestras ciudades, minimizando los comportamientos violentos en sus calles y barrios.

La vigilancia natural
Por vigilancia natural se entiende el grupo de características formales de observación que deben tener las
ciudades. Está orientada a aumentar la oportunidad de ver y ser visto dentro de un espacio urbano concreto y de
sentir confianza en ese mismo espacio por sus características físicas y por las personas que lo habitan.

En un espacio urbano, la mejora de la vigilancia natural se puede conseguir a través de la mejora de las
perspectivas de visión, iluminación y usos adyacentes compatibles. La consideración de este aspecto en el diseño
urbanístico desalienta los comportamientos violentos en la ciudad, al mejorar las oportunidades de respuesta e
intervención.

La vigilancia natural puede ser negativa o positiva, dependiendo de la comunidad que esté controlando ese espacio.
La falta de vigilancia natural está relacionada con los diseños urbanos problemáticos a los que se refería Newman,
y está ocasionada por una iluminación escasa o por la presencia de zonas urbanas reservadas con un diseño
confuso, fragmentado y repleto de potenciales escondites.

Como el control de acceso, la vigilancia también contribuye a la definición de los territorios personales y al
aumento de las expectativas de respuesta en los comportamientos indeseables y violentos.

El refuerzo territorial

El refuerzo territorial en un espacio microambiental urbano hace alusión a los lazos afectivos que establecen sus
habitantes con el entorno ambiental más próximo. La idea de reforzar los vínculos con el territorio por medio del
apego emocional es muy importante y debe potenciarse de una manera prioritaria en las estrategias de
prevención de la delincuencia. Este tipo de acciones actitudinales están encaminadas a reforzar el sentido de
pertenencia al lugar, la posesión y las expectativas conductuales dentro de un espacio dado, así como también a
facilitar la protección dentro del mismo.

El conocimiento del entorno más próximo y la capacidad para ver y comprender lo que está sucediendo en él son
importantes para asegurar un sentimiento de control en una situación concreta y se conoce como refuerzo
territorial. Yi-Fu Tuan (1977) abre su libro “Space and place. The perspective of the experience” con esta
afirmación: “espacio y lugar son palabras familiares que denotan experiencias comunes,... lugar es seguridad,
espacio es libertad”.

Con la utilización de barreras reales o simbólicas, un espacio residencial urbano puede subdividirse en sectores
más pequeños, fácilmente controlables por los residentes, debido al refuerzo territorial. En nuestras ciudades hay
marcas territoriales de pueden ser positivas y negativas; dichas marcas permiten este tipo de refuerzo. Un
ejemplo de marca territorial negativa es, por ejemplo, el graffiti.

El mantenimiento de los espacios públicos

El concepto de mantenimiento de los espacios públicos hace relación a la instrumentalización de los tres
anteriores términos en el diseño y elaboración de planes para asegurar el éxito de una estrategia preventiva de la
violencia urbana.

Las diferentes presiones sobre la ciudad actual producen un triple proceso negativo: disolución, fragmentación y
sobre todo privatización. En este sentido, y siempre desde un planteamiento securitario, nos vemos obligados a
reflexionar sobre el fenómeno de mantenimiento de los espacios públicos, contextualizando el debate del dualismo
público-privado que contribuye a la transformación de nuestras ciudades en el siglo XXI.
No sólo la ciudad se transforma, también las relaciones entre lo público y lo privado, y consecuentemente las
pautas de movilidad por estos tipos de espacios, produciéndose una conflictividad asimétrica, debida a la
segregación y la marginalidad.

Baste un simple ejemplo para ilustrar el fenómeno, los grandes centros comerciales (malls, según la denominación
anglosajona) metropolitanos reúnen hoy una parte importante de las actividades (ocio, cultura, venta,
semideporte, comercio,...) que en el pasado realizábamos en espacios nítidamente públicos; sin embargo no
debemos olvidar que la mayor parte de estos nuevos espacios son de titularidad privada. Su potencialidad a la
hora de fidelizarnos y atraernos hacia la vorágine consumista nos está desplazando de los espacios
verdaderamente públicos (plazas, calles comerciales, centros culturales y deportivos públicos, etc.) y nos
aproxima, cada vez más, a esos otros privados, por lo que muchas administraciones están abandonándolos, o en el
mejor de los casos reduciendo sus inversiones. Todo ello trae la consecuente generación de importantes déficits
(de control natural de accesos, de vigilancia natural, o de refuerzo territorial) en muchos de los espacios públicos
que en el pasado fueron hitos relevantes del fenómeno urbano.

Cuando para los transeúntes se hace difícil reconocer la titularidad pública o privada de los lugares, se debe en
gran medida a que el dominio privado se cierra de un modo cortante y excluyente sobre el dominio público. Y por
esa razón se reducen los itinerarios cortos, especialmente aquellos que son exteriores a la vivienda propia y a los
espacios públicos y se incrementan los trayectos largos, que trascienden al ámbito del hogar o del barrio,
fundamentalmente por espacios privados.

El buen uso y el orden de los diversos espacios públicos de la ciudad, y por lo tanto su mantenimiento, corresponde
a los gobiernos y administraciones locales, aunque de un modo complementario la responsabilidad de su cuidado
recae en la comunidad que hace uso de ellos, y por lo tanto en los individuos que la integran.

La participación comunitaria

Es otro de los aspectos ineludibles en las estrategias de prevención del crimen a través del diseño ambiental. Sin
la incorporación genérica de la comunidad, y de los individuos que la configuran, en particular, no hay garantías de
asegurar el éxito de esta estrategia participativa. Dicha componente es determinante a la hora de aplicar los
diferentes tipos de estrategias preventivas en los momentos de diseño, ejecución y evaluación de los espacios
públicos de riesgo. Estos diagnósticos elaborados por los ciudadanos son fundamentales por la razón de que son
precisamente ellos, los que conocen las zonas de mayor inseguridad y riesgo, las posibles necesidades que deben
arbitrarse, y sin ellos, además, es imposible el refuerzo de los lazos afectivos con el territorio.

La incorporación del ciudadano a las tareas de seguridad permite hablar de la necesidad de coproducir seguridad
entre todos los actores involucrados (Smith, 1986). Esta práctica requiere un énfasis en la participación
comunitaria de los ciudadanos, y por ello, la colectividad está, hoy día, en el centro de toda acción eficaz de
prevención de la criminalidad. Son las personas que viven, se desplazan, trabajan en la comunidad, quienes mejor
comprenden los recursos, los problemas, las necesidades específicas y las capacidades de su entorno.

Este nuevo polo de atención implica buscar formas y mecanismos adecuados de cómo incorporar a la comunidad,
y por otro lado de cuándo hacerlo; en otras palabras, en qué instancias la comunidad puede desempeñar un rol y
cuáles son las otras instituciones y organismos llamados a hacer frente a la seguridad.

Una valoración prospectiva de la metodología CPTED


La aplicación de estas cinco estrategias de prevención del crimen a través del diseño ambiental está resultando
enormemente positiva desde una perspectiva securitaria. Su integración, dentro de diferentes tipos de espacios,
para la promoción, reafirmación y sostenimiento de comportamientos deseados; está incidiendo favorablemente
en la ciudadanía, generando una reducción de los comportamientos antinormativos violentos y promoviendo en
muchos vecindarios el aumento del sentimiento de seguridad (Valdivia, 2004).

Las estrategias de apoyo pueden ser de diferente índole y están orientadas a facilitar aún más el cumplimiento de
comportamientos deseados. Algunos ejemplos claros pueden ser: la existencia de transiciones claramente
definidas desde los espacios públicos exteriores hacia los espacios semi-públicos dentro de las demarcaciones de
escuelas, institutos, hospitales, etc.; la presencia de mapas de orientación cerca de los accesos y puntos de
entrada, o la existencia de señalizaciones de itinerarios y dirección dentro de la propiedad.

Mientras los principios de control de acceso se identifican fácilmente al restringir la entrada a las propiedades y
edificios, su uso como concepto CPTED va más allá. Por ejemplo, los objetos como mobiliario urbano, carteles
informativos y de avisos y teléfonos públicos pueden legitimar la presencia de los transeúntes en un espacio
urbano y facilitar el anonimato para los individuos que los utilizan. La aplicación de las estrategias CPTED permite
identificar y potenciar el uso al que están destinados estos objetos, mientras que aseguran que están física o
visualmente separados de los blancos potenciales de delito.

Algunos aspectos del diseño urbanístico, o incluso la localización de equipamientos o de instalaciones concretas,
de una misma forma, pueden potenciar involuntariamente los comportamientos antinormativos de los ciudadanos
en algunos espacios urbanos. Por ejemplo, muchos equipamientos utilizan vallas, rejas o portones para restringir
el movimiento en su interior; al hacerlo, es conveniente estudiar la fórmula de obstaculización y control para
asegurarse de que su diseño no proporcione un “acceso natural” a esos espacios que quieren protegerse y
separarse de lo público (Ponce, 2006).

En los últimos treinta años, han sido muchas las experiencias de diseño ambiental para la prevención de la
delincuencia que han tenido éxito en instituciones públicas y de servicios. De los primeros trabajos de diseño,
probablemente, el más conocido sea el proyecto de prevención del delito escolar en el Condado de Broward,
Florida (Estados Unidos) que se financió gracias a un programa de concesión federal en los años setenta. Este
proyecto evaluó los beneficios de la aplicación de la metodología CPTED acerca de la vigilancia natural y el
refuerzo territorial, incluyendo la promoción de un “mayor sentido de responsabilidad por parte de los estudiantes
para la prevención del delito”. A pesar del tiempo transcurrido, este proyecto sigue siendo modélico en el día de
hoy, y muchas escuelas han impulsado el modelo haciendo uso de sus planteamientos para resolver problemas
similares de seguridad y control de la delincuencia menor (Kruger, Landman y Liebermann, 2001).

En 1993, el Departamento de Educación de Florida, publicó un conjunto comprensivo de orientaciones y consejos de


diseño para sus escuelas basado en conceptos y principios CPTED. Las propuestas del documento se centran en
actuaciones concretas en las inmediaciones de la escuela, en el diseño del sitio, en el diseño del edificio y espacios
interiores, así como en la disposición de los sistemas de control y equipamiento. La publicación del Departamento
reconoce en el documento la importancia del contexto dentro del cual se aplican las estrategias y toma en cuenta
la necesidad de que el ambiente primero apoye el uso destinado del espacio.

En muchas intervenciones estratégicas la prevención situacional va unida a la metodología CPTED. Este tipo de
estrategia se desarrolla fundamentalmente en el reino Unido y centra su interés en la prevención del blanco
(objetivo), trabajando aquellos aspectos que permiten la reducción del riesgo de ser víctima de un acto delictivo.

Más recientemente, en el arranque del año 2007 se celebró en Madrid el Congreso Internacional “Ciudades,
Urbanismo y Seguridad” en el que participaron más de veinte especialistas en seguridad ciudadana de la Unión
Europea y Latinoamérica, poniéndose en evidencia el alto grado de aplicabilidad y éxito que está generando en
algunos países el desarrollo de esta metodología (VV. AA., 2007).

El enfoque de la “geoprevención”
En la actualidad, debido a los cambios organizativos generados por las nuevas demandas securitarias en el ámbito
de la seguridad interior y las formas en las que los ciudadanos perciben su entorno territorial más inmediato se
establece una relación recursiva que ha determinado la emergencia del enfoque de la “geoprevención”. Una nueva
fórmula para la gestión de la seguridad y la prevención de la delincuencia a partir de la integración de todas las
estrategias preventivas definidas con anterioridad y su implementación a partir de la utilización de herramientas
SIG. Según esta propuesta, cualquier política de seguridad ciudadana debería incluir el diseño de las medidas
encaminadas a la reducción de la violencia, sin ser ajenos a la comunidad, a sus características y a las de la
población que reside en ellas, haciendo uso de estas potentísimas herramientas tecnológicas para analizar todas
las posibles relaciones entre los agentes y el territorio con el objetivo de contribuir a la reducción del crimen y al
aumento de la seguridad.

Estas nuevas metodologías están más orientadas hacia la prevención y contención del hecho delictivo antes de su
ejecución que al desarrollo de instrumentos exclusivamente punitivos. Este proceso de trabajo en equipo con la
comunidad urbana ayuda además a priorizar las áreas que requieren una mayor atención, y permiten también
tomar decisiones de una forma más rápida.

La “geoprevención” es una alternativa importante pues articula las redes informales de control social, además de
promover la descentralización a nivel de barrio de la gestión de los pequeños conflictos, a través de estructuras
públicas y con el protagonismo del tejido social. Sólo las instancias de control formal no sirven, si no hay un
sustrato de relaciones y una organización informal entre ciudadanas y ciudadanos, que son los que en definitiva
crean seguridad.

El nuevo paradigma de análisis geopreventivo de la violencia urbana se fundamenta en los siguientes rasgos:

La búsqueda de nuevas formas de organización de la participación de todos los agentes sociales


• implicados en la relación dialéctica seguridad-violencia y en el análisis global y transversal de sus
implicaciones urbanas y territoriales, así como de las transformaciones resultantes.

La formulación de una crítica a la falta de transparencia del proceso de producción de ciudad y por
• extensión de todo el fenómeno urbano, y en consecuencia a los procesos de estigmatización, de
segregación y de exclusión social, además de los conflictos que genera entre sus habitantes.

La asunción de un rol activo, de cara a la toma de decisiones en los procesos duales detectados. Este
• posicionamiento debe superar las actitudes pasivas, relacionadas con la solución y mitigación de los
problemas y conflictos urbanos.

La utilización de potentes herramientas de gestión territorial como son los Sistemas de Información

Geográfica.

La lista de objetivos que deben contemplarse desde cualquier aproximación que haga uso del enfoque de la
geoprevención es larga y ya ha sido esbozada en otros trabajos (Hernando, 2007):
Definir los principales tipos de riesgos securitarios generados por el deterioro de la calidad de vida, por
1 las formas de confrontación entre miembros de una comunidad, o por las conductas violentas y
antinormativas de los ciudadanos.

Conocer la relación que existe entre esos riesgos securitarios no sólo con la morfología de los
2 asentamientos urbanos y sus dinámicas, sino también con las diferentes tipologías derivadas del
crecimiento histórico de la ciudad.

Describir las pautas de localización de los comportamientos delictivos, en relación a los distintos tipos de
3 riesgos y a los diferentes modelos de asentamiento, concentración y evolución urbana, poniéndolos en
relación con la seguridad subjetiva y objetiva de los ciudadanos.

Identificar los factores de localización, o fuerzas capaces de explicar esos comportamientos delictivos en
4
los distintos ámbitos urbanos, desde una relación de causa - efecto.

Analizar la evolución temporal y el dinamismo espacial de la seguridad ciudadana, lo que supone


establecer los cambios que conocen los factores y pautas de localización, así como los flujos o
5 interrelaciones entre cada uno de los diferentes tipos de hechos delictivos, intentando definir etapas o
fases de características diferenciadas y su relación con la propia dinámica de la ciudad (formal,
estructural y funcional).

Elaborar clasificaciones o tipologías de espacios identificados por el cruce de variables que hagan relación
tanto al grupo de características homogéneas de la trama urbana (temporales, formales, etc.), como a los
6
niveles securitarios previamente definidos y marcados por los diferentes tipos de actividades delictivas
detectadas.

Evaluar el impacto territorial derivado de la localización de estas “desutilidades” en el tejido urbano, así
como sobre los comportamientos, la movilidad y estructura de la población, en la relación existente con
7 los procesos de urbanización, los efectos del crecimiento económico, o sencillamente con las muestras
tangibles de bienestar social, de sus “desutilidades”, o de los procesos de exclusión social observados en
los entornos urbanos.

Establecer las asociaciones espaciales que se deriven de la aplicación de las diferentes acciones,
programas y proyectos dirigidos desde los sistemas de control social, que estén en relación con la
8
población y las propuestas de seguridad, así como el análisis de las interrelaciones espaciales o flujos que
las caracterizan.

Como consecuencia de todo lo anteriormente apuntado emerge, sobre la esencia de la seguridad en lo local y el
papel activo de todos los agentes que participan en su consecución, un nuevo campo de estudio donde la Geografía
debe estar presente. En palabras de Fariña, la mayor parte de las medidas que parecen adecuadas para conseguir
la sostenibilidad territorial urbana, lo son también para mejorar la seguridad de sus habitantes. Por ello, desde
este nuevo paradigma se propugnan nuevas fórmulas de organización de las áreas urbanas, que atiendan a
criterios de eficiencia, incluidas aquellas cuestiones relativas a la seguridad (Fariña y Ruiz, 2002).

En este sentido, resulta necesario recordar que la eficacia en la lucha contra la inseguridad de nuestras ciudades
no depende exclusivamente ni de las sinergias tecnológicas, ni de las corporativas, sino más bien de la creación de
consensos activos y de la supresión de barreras y superación de problemas urbanos que generan la exclusión
social. Este enfoque implica que no deberían ser exclusivamente los agentes del control social los únicos
involucrados en trabajar sobre la seguridad, sino también la propia sociedad en un sentido amplio, y más
particularmente aquellos actores y agentes sociales que la demandan a partir de algunas acciones como las que
hemos propuesto en este trabajo (vigilancia natural, refuerzo territorial, mantenimiento de los espacios públicos,
participación comunitaria, o control natural de accesos).

Un ejemplo de geoprevención: El Observatorio de la Seguridad y su Atlas


El Observatorio de la Seguridad de Madrid, órgano dependiente de la Coordinación General de Seguridad,
constituyó a finales de 2006 un equipo con miembros de la Universidad, de la Policía Municipal y de la Coordinación
General del Área de Urbanismo del Ayuntamiento con la finalidad de establecer el mapa de riesgos relacionados
con la seguridad de la ciudad que ayudara a elaborar, de cara al futuro, los correspondientes diagnósticos para la
toma de decisiones relacionadas con su política securitaria.

En una primera fase, el trabajo del equipo, que he tenido el honor de coordinar, se ha plasmado en el documento
que lleva por título: Atlas de la Seguridad de Madrid (Hernando, 2007). En sus casi trescientas páginas se plantea
un proyecto de investigación muy ambicioso, que desborda el mero análisis locacional de más de un millón de
intervenciones realizadas por parte de la Policía Municipal como respuesta a las demandas directas de los
ciudadanos. La lectura de las páginas de dicho documento y la interpretación de sus más de quinientos mapas, no
sólo ponen de manifiesto y sacan a la luz todos estos datos (georreferidos y clasificados por tipo de incidencia),
sino que además hace público por primera vez en nuestro país un proyecto elaborado dentro de la filosofía de la
“geoprevención”.

El Atlas refleja, en buena medida, el fruto de las actuaciones de la Policía Municipal de Madrid sistematizadas de tal
manera que se constituye en una herramienta a su servicio, con vocación de sumarse a los modos de trabajo
innovadores que previamente hemos definido en este trabajo. Las imágenes que integran el proyecto del Atlas de
la Seguridad dejan en evidencia la profunda ligazón existente entre investigación geográfica de la trama urbana y
los sistemas de representación espacial, evocando una larga serie de explicaciones territoriales que podrán
desarrollarse a partir de esta propuesta seminal en distintas fases.

Actualmente el proyecto se encuentra en una segunda fase, en la que con la ayuda del documento elaborado se
están estableciendo correlaciones entre los datos urbanísticos (como los mostrados como ejemplo en el conjunto
gráfico para el distrito Centro) y los relativos a las actuaciones policiales. De estas correlaciones se están
extrayendo conclusiones que, en muy breve tiempo, ayudarán a mejorar la calidad de vida de los ciudadanos de
Madrid tanto en el aspecto de prevención de la delincuencia, como en el del aumento de la sensación de seguridad.
En este sentido, será preciso realizar diferentes trabajos de investigación paralelos que permitan, por ejemplo,
conocer las causas que explican la existencia de una mayor incidencia delictiva en un área específica de la ciudad
o relacionar la sensación de inseguridad con determinados valores urbanísticos y sociales como la densidad, el
grado de conservación de los edificios, la capacidad socio-económica, el estilo de vida, la tipología arquitectónica o
el tipo de viario.

En una tercera fase posterior, el documento (actualizado en tiempo real, corregido y ampliado a partir de las
nuevas tecnologías de la información) tendrá la función de servir para consolidar el proyecto securitario que ha
esbozado el Observatorio para la capital, y que además de reflejar una película, evolutiva, relacional y en tiempo
real, de las circunstancias que afectan de modo directo a la seguridad ciudadana, permita:

Poner a disposición de todos los agentes intervinientes y relacionados con la seguridad ciudadana una

información útil y eficaz par tomar decisiones.

Renovar los tradicionales métodos de acción policial por medio de una información más detallada,

relacional e inmediata.
• Promover políticas integradas de seguridad ciudadana con los consecuentes planes de acción y formación.

Encontrar nuevas ideas y prácticas por medio del intercambio de experiencias locales cada vez más
• eficientes, contextualizándolas en lo que podríamos denominar un urbanismo participativo y solidario, que
incida sobre el planeamiento, los proyectos urbanos y la configuración formal y estructural de la ciudad.

En definitiva, esta tercera fase estará orientada a fortalecer la seguridad de nuestros conciudadanos en el
respeto de las libertades democráticas, haciendo uso de la investigación y el conocimiento; poniendo todos los
resultados a disposición de otras políticas públicas más genéricas para su coordinación y aplicación.

Y todo ello, desde la conciencia de que ninguna institución pública detenta en exclusividad el monopolio, y por lo
tanto el control, de la seguridad ciudadana. En cualquiera de los casos, nos espera una tarea difícil y compleja, no
sólo por la dificultad de establecer una etiología de los fenómenos que se relacionan con los temas de seguridad,
sino también por la transversalidad que implican las interacciones, así como por la influencia de los múltiples
agentes implicados en ella.

De una manera sintética el trabajo que todavía queda por hacer pasaría por las fases siguientes:

Puesta en marcha de un sistema en tiempo real de georreferenciación de las incidencias policiales


1
mediante un SIG que posibilitara el trabajo posterior con los datos introducidos.

Propuesta de un sistema periódico de informes que permitiera conocer a diferentes niveles (por ejemplo:
interno de la policía para distribución de efectivos; a los grupos del Ayuntamiento; a los responsables
2
municipales; a la opinión pública y a la prensa) la evolución de determinadas variables ambientales
urbanas.

Establecimiento de indicadores de alarma que permitieran detectar zonas o puntos problemáticos y


3
establecer prioridades.

Realización de diferentes trabajos de investigación que fundamentaran algunas de la principales


4 recomendaciones de diseño y planeamiento y detectar correlaciones entre variables urbanísticas, sociales
y delictivas.

Confección, publicación y difusión entre los colectivos profesionales de manuales prescriptivos sobre
5
“diseño urbano seguro”, “arquitectura segura” y similares que ayudaran a la realización de los proyectos.

Establecimiento de listas de chequeo que permitieran verificar con un mínimo de objetividad los efectos de
6 la aplicación de las diferentes estrategias de seguridad, o incluso de otras políticas urbanas de rango
mayor.

Creación de un visado de seguridad (en principio voluntario) al que deberían de someterse los proyectos
7
urbanísticos. Estos visados ya se encuentran operativos en algunos países.

Es muy importante recalcar que al finalizar el proceso todo el colectivo de evaluadores expresó su satisfacción
por el sistema seguido y su convencimiento de que las modificaciones propuestas incrementarán la seguridad en
ambos casos (tanto real, como subjetiva).
La geoprevención: de la teoría a la práctica

El grado de ambición que muestra el Atlas de la Seguridad de Madrid nos ha llevado a plantear con dos ejemplos
concretos (un parque y una plaza) un par de ejercicios teóricos como ilustración de lo que puede ser el enfoque
geopreventivo. De ellos no deberían deducirse conclusiones maniqueas o/y coyunturalistas de los diseños
actuales; en ambos casos son ejemplos reales y la metodología seguida entendemos que es perfectamente
aplicable a cualquier otro espacio metropolitano.

Las fases de aplicación práctica de nuestro ejemplo de “geoprevención” son:

Detección mediante el Atlas de ambos ejemplos prácticos como puntos conflictivos desde el punto de vista
1
de las incidencias policiales producidas.

Levantamiento minucioso del estado real, con trabajo de campo del que resultó una planimetría precisa,
2 secciones, alzados y fotografías, considerando aquellas variables que, presumiblemente, iban a tener
incidencia en la conflictividad.

Comprobación, mediante trabajo de campo de los caracteres ambientales de los espacios urbanos
3
seleccionados, y establecimiento de hipótesis para una posterior evaluación.

El proceso de evaluación se realizó por tres arquitectos y tres policías bajo la supervisión de los
directores del proyecto en varias sesiones conjuntas en las que se abordaron, para cada caso, los
siguientes grupos de cuestiones:
• Espacios y tipos de usos
• Vigilancia natural
4 • Visibilidad
• Iluminación
• Control de accesos
• Identidad del espacio público
• Participación y sentido de pertenencia del espacio público
• Mantenimiento

Como resultado del proceso se consensuaron unas recomendaciones que deberían traducirse en
5
modificaciones de la situación actual.

El resultado de estas modificaciones se plasmó en una propuesta que mediante los planos
6
correspondientes se presentó al Observatorio de Seguridad para su puesta en marcha.

Será el Ayuntamiento de Madrid quien asuma, esperemos en un futuro próximo, las propuestas elaboradas
7
desde el Atlas de la Seguridad.

Es muy importante recalcar que al finalizar el proceso todo el colectivo de evaluadores expresó su satisfacción
por el sistema seguido y su convencimiento de que las modificaciones propuestas incrementarán la seguridad en
ambos casos (tanto real, como subjetiva).

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