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1. La evaluación debe ser justa, se debe ceñir a los conceptos y habilidades trabajados en
el aula dejando de lado cualquier tentación de proponer preguntas que no puedan ser
respondidas por la totalidad de los estudiantes.
2. En todo examen deben aparecer preguntas enfocadas hacia lo general del tema a evaluar,
y otras enfocadas hacia aspectos concretos que, a tenor del docente, merecen ser tratados
de manera específica y con profundidad.
3. Se debe evitar, en la medida de lo posible, que la evaluación esté enfocado únicamente a
evaluar las capacidades memorísticas de los estudiantes. Se debe buscar el equilibrio entre
el saber hacer y el saber recordar, y dando la importancia debida a cada una de estas dos
características dependiendo de la materia, el momento del curso y el objetivo de la
evaluación.
4. La evaluación que se produzca a partir de las clases debe ser claramente comprensible
por todos los agentes que participen de él, dejando de lado cualquier tipo de ambigüedad
que pueda dar la sensación de que esta evaluación se produce al azar o por motivos
ocultos para cualquiera de las partes.
5. En la medida de lo posible la evaluación y su calificación deben ser sensibles a factores
que en un primer momento pueden ser irrelevantes, como las anécdotas ocurridas en el
aula, las referencias culturales de los propios estudiantes y del ambiente en el que se
encuentra el centro educativo, el material empleado. Sin todo lo anterior se produce un
efecto de lejanía entre lo vivido y percibido por los estudiantes frente a los conceptos por
los que se les están evaluando.
6. Muy importante: la evaluación debe ser resistente a trampas, al menos a aquellas que
sean más fáciles de realizar por los estudiantes durante su desarrollo. Para conseguirlo
puedes cambiar el orden de las preguntas en la evaluación. cambiar los datos de algunas
de ellas o bien generar las preguntas para que tus estudiantes puedan hacer uso de sus
libros y apuntes durante la evaluación.
7. Y, por último, una vez evaluado y transmitidas las calificaciones a los estudiantes, un buen
examen solo se dará por terminado tras escuchar los comentarios realizados por estos, con
el fin de ser tomados en cuenta en la evaluación final como parte importante y fundamental
del proceso evaluativo.