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El arte según Theodor Adorno y Paul Desmond

Por Kalinesti

De Theodor Adorno a Paul Desmond, dos miradas de un mismo paisaje, por Marcelo
Jeremías

"Ha llegado a ser evidente que nada referente al arte es evidente"... "ni siquiera su derecho
a la existencia".

Así comienza escribiendo Theodor W. Adorno su Teoría estética en 1969 donde excluye la
posibilidad de una teoría del arte anteponiendo en la palabra "estética" un punto de
perspectiva previo intentando posiblemente así validar un lugar desde donde "manipular" el
océano de la información social relacionado al arte. Y adoptó este enfoque pese a haber
compuesto música atonal en su juventud lo que le habría dado la posibilidad de escribir
simplemente como músico.

De todas maneras Adorno fue un ensayista original y un pensador que supo deshilvanar
ideas en criterios que con el tiempo la industria de la cultura articuló en lo que se dio en
llamar "cultura de masas" y en esto anticipó el malestar de la civilización ante la pérdida
del misterio relacionando la aparente libertad del artista con la pérdida de libertad de la
sociedad y ésta no parece ser una relación muy feliz ya que los problemas básicos de
identidad o libertad en la sociedad no son cosas impuestas premeditadamente por los
artistas para después "vender canciones de protesta o de consuelo", es que los artistas nunca
moldearon las necesidades humanas ni mucho menos los límites sino que, en el mejor de
los casos, hicieron ver a través de sus obras nuevos paradigmas siendo muchas veces una
obra la consecuencia directa de la "necesidad" de comer, de afecto o de dinero en el mundo
moderno y no una representación de ninguna idea filosófica, psicológica o metafísica del
problema de la libertad. Sin embargo es posible que a mediados del siglo XX algunos
personajes hayan visto en la expresión artística al crisol desde donde moldear la identidad
de las masas y por lo tanto cargaron (de forma favorable o negativa) sobre quienes ellos
consideraron que eran "artistas"y aquí aparece en el juego la "industria de los medios" (de
comunicación) y los "reyes ocultos" que son los propietarios de las cadenas
(conglomerados) de difusión.

Aquí otra frase de Adorno extraída de su "teoría...": "El arte, al irse transformando, empuja
su propio concepto hacia lugares que antes no tenía".

Y en esta idea vemos que la secularización de la expresión humana trae (de modo paralelo a
la solidificación de la sociedad de mercado) determinadas pautas que se potencian según el
entorno tecnológico hacia una definición de identidad de nuevas "tribus" que comulgan
crisis existenciales al hallarse habitando cárceles de cemento con barrotes invisibles (y esa
es una de mis definiciones predilectas de lo que es una gran ciudad).

Luego dice : "El arte se determina por su relación con aquello que no es arte". Aquí vemos
la estructura dialéctica de su forma de narrar aunque esta frase tiene una validez relativa
porque el proceso de identificación con los maestros de la música es tan importante para un
músico en su formación como la cuestión de la originalidad de una obra en una segunda
etapa.De todos modos uno no entiende muy bien porqué razón Adorno quedó encasillado
dentro de la categoría de pensadores marxistas ya que en definitiva en su pensamiento
describe los distintos fenómenos relacionados con la comunicación de hacedores de
expresión artística en el contexto de la sociedad de mercado (cultura de masas) cuyo último
capítulo en crisis (que por algunos estudiosos es vista como sistémica) es lo que hoy
llamamos "neoliberalismo", entonces este autor trabajó (aunque de modo crítico) para una
formulación estética de la sociedad de mercado que en definitiva hoy rige buena parte del
planeta.En otra frase dice : "El arte es la antítesis social de la sociedad y no se puede
deducir inmediatamente de ella..." . Este es un concepto evidentemente erróneo en el
sentido de que hoy día la sociedad hace una lectura de lo que es arte a partir de (por dar un
sólo ejemplo) lo que ve en el escenario y así un artista que vive su vocación en la escena
está plenamente integrado a la sociedad innegablemente y del mismo modo cada expresión
tiene su espacio "dentro" de su mundo aunque en su contenido una novela (por ejemplo)
hable de "otras realidades".El problema de fondo (para Adorno) en todo caso fue intentar
realizar una teoría estética escindida de una "idea del hombre" y consecuentemente de una
ideología del ser humano. Es que no es viable una teoría estética sin una ideología del "yo"
y aquí retornamos al viejo problema de las "clases sociales", asunto que en el contexto de la
civilización de mercado se intentó superar irracionalmente y así hoy día vivimos las
nefastas consecuencias de esta situación.Adorno escribió :"No hay arte que no contenga en
sí, aquello contra lo cual choca..." (Aquí en un sentido nos vemos con un psicologísmo
extremo típico de la generación en la que se "descubrió" el psicoanálisis como herramienta
de la psicología en la pretensión de "ordenar" las clases sociales según la respuesta de las
personas a ciertos impulsos y desconsiderando el problema de la dignidad humana como
algo común e inherente a todas las personas, es decir que la técnica psicoanalítica se usó, en
vez de para construir una sociedad mejor, para solidificar las insalvables injusticias y
contradicciones que el capitalismo totalitario genera en sí mismo del mismo modo que en la
industria farmacéutica se liberaron al mercado medicamentos que no necesariamente curan
a la gente por simple cuestión de dinero). Y de aquí viene la famosa frase de Pichon Riviere
(miembro fundador de la escuela psicoanalítica argentina y posteriormente de la escuela
denominada psicología social) cuando dijo (refiriéndose a ciertos psicoanalistas cultores de
la "ultraindividualidad"): "Aquellos cafiyos de la angustia ajena" exponiendo así la falta de
consciencia social y la crisis moral consecuente de estos intelectuales. Adorno en su
"Teoría ..." dice: "Toda obra de arte es un instante, toda obra de arte conseguida es una
adquisición, un momento de detenerse en el proceso, al manifestarse éste al ojo que lo
contempla. Si las obras de arte son respuestas a sus propias preguntas, también se
convierten ellas por este hecho en preguntas..."Y esta idea es atractiva y estimulante para
un hacedor de expresión artística ya que encierra en sí algunas ideas tal vez "orientales" o
antiguas pero de todas maneras positivas hacia el hecho de trabajar con sonidos, colores,
palabras o gestos desde algún instante particular de la memoria como faro o punto de
referencia.Un autor que definió su teoría estética de modo mucho más sencillo (pese a ser
graduado en lengua inglesa en la universidad) fue Paul Desmond y aquí dos frases de esta
persona quien fue además compositor de una melodía que llega a nosotros desde el Real
Book con el título de "Take five" :
"He ganado varios premios al saxo más lento del mundo, así como un galardón especial al
silencio en 1961"._"Yo ya había pasado de moda antes de que nadie me conociera".
Dos imágenes de Paul Desmond con su saxo alto y dos frases más que esclarecen su
oxigenada ideología:

'Probé a practicar unas pocas semanas y acabé tocando demasiado rápido.'


'Creo que de forma inconsciente quería sonar como un martini seco.'

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