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Historia de la Civilización I

Unidad I: Prehistoria

CRONOLOGÍA

PRECAMBRICO ¿? a 570.000.000 a C.

PRIMARIO 570.000.000 a C. a 225.000.000 a C.

SECUNDARIO 225.000.000 a C. a 65.000.000 a C.

TERCIARIO 65.000.000 a C. a 1.000.000 a C.

CUATERNARIO 1.000.000 a C. a ¿?

PLIOCENO ¿? a 700.000 a C.

PLEISTOCENO 700.000 a C. a 0

Período Cultura Tipo humano

PLEISTOCENO INFERIOR
700.000 a C. a 500.000 a C.

PALEOLITICO INFERIOR Pebble - Australopitecos

PLEISTOCENO MEDIO
500.000 a C. a 150.000 a C.

- Sinántropo
Abbeillense / Chelense
- Pitecántropo

- Eurántropo
PALEOLITICO INFERIOR Achelense / Clactoniense
- Heidelbergense

Micoquiense / Tayaciense - Presapiens

Levalloisiense / Musteriense - Neandertal

PALEOLITICO MEDIO - Homo Sapiens

- Fossilis

Auriñaciense - Homo Sapiens:

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Gravettense - Combe Capelle

PALEOLITICO SUPERIOR
Solutrense - Cro-Magnon
Magdaleniense - Chancelade

150.000 a C. a 10.000 a C.

HOLOCENO

Azilliense Primeros
MESOLITICO Tardenolisiense Tipos
Maglemoisiense Braquicéfalos

10.000 a C. a 1 a C. Difusión de la Braquicefalia

Campiñiense
NEOLITICO (1).

(1) “DESARROLLO DE LA INDUSTRIA LITICA Y OSEA DESDE EL PALEOLITICO AL NEOLITICO".

Para la reconstrucción de la vida en la prehistoria los hallazgos más significativos son los objetos hechos de
piedra y hueso. Supeditados a las necesidades fundamentales de la existencia – nutrición, vivienda, defensa –
los utensilios de uso común se desarrollaron de acuerdo con la evolución de las culturas primitivas, que, a su
vez, estuvieron influenciadas por el descubrimiento de materiales más aptos y por técnicas nuevas de
elaboración.
PALEOLITICO INFERIOR
• Bifacial abbevilliense, guijarro del clactoniense, guijarro de la “pebble culture”.
• Amigdaloide y punta achelense; fragmento de roca levalloisiense con plano de percusión pulimentado.
PALEOLITICO MEDIO
• Puntas, rascadores y cuchillos musterienses.
PALEOLITICO SUPERIOR
• Puntas y rascadores auriñacienses.
• Puntas, sierras y hojas de cuchillo solutrense.
• Puntas de lanza con forma de hoja de laurel del solutrense.
• Puntas, arpones y propulsor en hueso magdaleniense.
MESOLITICO
• Arpones de hueso y microlitos del azeliense.
• Puntas y disco perforado mesolíticos.
NEOLITICO
• Evolución de la hoja de hacha hasta el tipo pulimentado.
• Puntas de flechas líticas y puñales de hueso del neolítico. Sanint-Germain-en-Laye. Musée des antiquités
nationales”. HISTORIA UNIVERSAL. ANESA – NOGUER – RIZZOLI – LAROUSSE.

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INTRODUCCIÓN

Por Prehistoria se entiende el tiempo anterior a la historia escrita. Es posible que el

hombre tenga mucho más de un millón de años, pero no escribió hasta aproximadamente
5000 años atrás. Sin embargo, los hombres de la Prehistoria, dejaron involuntariamente un
registro de su presencia y de su cultura.

Para algunos la existencia de vida sólo se puede explicar por la creación de un ser
superior.(2) Pero la evidencia que proporcionan los fósiles hallados indica que la
vida ha existido en la Tierra desde hace algunos miles de millones de años (3).

Alrededor de 65 millones de años atrás y con la desaparición de los dinosaurios, se produjo la

proliferación de los mamíferos, dentro de los cuales se encontraban los primates (4), entre
ellos se diferenciaban los primates superiores. Hace 50 millones de años, entre los primates
superiores se destacó la familia de los hominoides, que siguió su propia evolución,
separándose de ella a su vez, los gorilas y los chimpancés. Los homínidos, siguieron su
evolución, hasta la aparición de la conducta característica del hombre: la creación cultural.

El hominido se irá adaptando al ambiente en el que le toca vivir, perderá la cola,

adoptará la posición bípeda, aumentará su capacidad craneana y, finalmente,
fabricará utensilios(5), momento en el cual comienza la llamada Prehistoria.(6)

(2) El obispo Ussher, analizando los datos bíblicos, sostuvo que la creación del hombre, por Dios, se
produjo el 25 de octubre de 4004 a C.

(3) Los científicos, sin estar totalmente de acuerdo, sostienen que la vida surgió en la Tierra hace
unos tres mil millones de años, o más.

(4) Para el estudio de los orígenes de la vida y su evolución, se acudió a una clasificación por eras
geológicas, cuatro etapas llamada convencionalmente: Primaria (360 millones de años) dividida en
Cámbrico, Ordoviciano, Silúrico, Devónico, Carbonífero y Pérmico; Secundaria (160 millones de años)
dividida en Triásico, Jurásico y Cretácico; Terciaria (73 millones de años) dividida en Eoceno,
Oligoceno, Mioceno y Plioceno y, finalmente, Cuaternaria (dos millones de años, o más), dividida en
Pleistoceno y Holoceno. Los primates aparecen en el Terciario. El Cuaternario, con sus períodos
alternantes de frío (glaciaciones) y aumento general de la temperatura (varias teorías pretenden
explicar estos cambios sin que ninguna haya sido aceptada plenamente), es el habitáculo del
hombre, que surge en el Pleistoceno (moderno o reciente) y se desarrolla plenamente en el Holoceno
(totalmente reciente), que abarca los últimos 10000 años y en el que el hielo retrocede
definitivamente.

(5) Comienza por tallar la piedra y hacer fuego. Las pruebas más antiguas de estas primeras
manifestaciones de la especie “humana” datan de comienzos del período Pleistoceno.

(6) En 1974, en Etiopía, se encontraron los restos de un australopiteco, que permitió, gracias a su
estado de conservación, grandes estudios sobre los antepasados prehumanos. Este australopiteco que
habría vivido hace aproximadamente 3.400.000 años recibió, por parte de quienes lo hallaron, el
nombre de Lucy.

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PALEOLÍTICO

El período más antiguo de la Prehistoria, cuando aparecen los primeros seres que poseen
rasgos prehumanos, los pitecos(7), en Africa nororiental, recibe el nombre de Paleolítico y se
prolonga hasta aproximadamente el 10.000 a de C., pasando por diferentes etapas
convencionalmente llamadas:

Paleolítico inferior,
Paleolítico medio y
Paleolítico superior.

El vocablo paleolítico procede del griego paleos (antiguo) y lithos (piedra), por alusión al
instrumental de sílex que utilizaban. Es fácil suponer que utilizaban también la madera,
mucho más fácil de trabajar, pero que no ha tenido la resistencia al paso del tiempo que si
tiene la piedra. Múltiples causas, entre ellas, la enorme mortalidad infantil, la indefensión ante
los numerosos peligros, la carencia casi total de higiene, dificultades en la nutrición y la
práctica frecuente de la antropofagia, hicieron que la densidad de población fuera escasísima.
Se trataba de pueblos nómades, que se desplazaban a lo largo de los ríos o del litoral, en
forma instintiva, refugiándose, cuando era necesario, en cuevas o abrigos de ramaje.

Las diferenciaciones culturales comenzaron en el Paleolítico superior y se hicieron

más evidentes en el Mesolítico y el Neolítico.

Tradicionalmente, de modo convencional y según un orden cronológico, se duele dividir al

Paleolítico superior en tres períodos, llamados Auriñaciense (por Aurignac, Francia),
Solutrense (por Solutré, Francia) y Magdaleniense (por La Madelaine, Francia), en los que
se aprecia un perfeccionamiento de las primeras industrias humanas, en particular con
relación a las armas de defensa y ataque.

Posiblemente, algunas tribus se especializaron en la caza de ciertos animales; pero, no

practicaban la cría y el aprovechamiento de los animales domésticos.

Es indudable que existía una jerarquía de tipo patriarcal o religioso, con jefes reconocidos, a
quienes se atribuía la propiedad de los “bastones de mando” que se han encontrado, tallados
en hueso, con grabados y perforados en su extremo superior como si estuviesen destinados a
ir colgados. Es probable que muchos adornos personales, collares, pectorales, brazaletes y
rodilleras hayan constituido signos distintivos de jerarquía, como las diademas de plumas y
otros ornamentos.

Si bien, los primeros homínidos no modificaron su hábitat, sus restos fósiles y los
utensilios que fabricaban, nos permiten inferir que no permanecían largo tiempo
en un lugar, trasladándose para poder subsistir a medida que se agotaban sus
fuentes de alimentos.

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De las varias especies de australopitecos, se conocen sus restos fósiles, pero muy poco se
sabe sobre su forma de vida y los utensilios que pudieron fabricar. Sus principales alimentos
eran semillas, raíces y restos (carroña) de animales muertos.

Alrededor de 2.500.000 de años a.C., aparece el llamado homo habilis, el primer

representante del género humano y, capaz de fabricar herramientas. Pero esta capacidad,
todavía no le permitió cambiar en gran medida sus hábitos de alimentación o alejarse de las
fuentes de agua. Agregaron a su dieta, similar a la de los hominidos, algunos animales que,
gracias a algunas armas que fabricaban, pudieron llegar a cazar.

Un poco más de 1.000.000 de años a de C., apareció el homo erectus. A diferencia de los
anteriores, este se mantenía erguido, lo cual produjo cambios muy importantes, por ejemplo:
al modificarse sus pies pudo recorrer grandes distancias, obtuvo una mejor visión al no
caminar como un cuadrúpedo, las manos le quedaron libres y en ellas, la posición del pulgar
le permitió agarrar mejor los objetos. Además, una mayor capacidad creneana le permitió
una organización cerebral más compleja. Debido a esto, el homo erectus, se transformó en un
gran cazador, por lo que mejoro sus condiciones de vida. Por lo general, se organizaron en
hordas que con otras vecinas, se unían para obtener mejores cacerías. En estas hordas, se
produjo una rudimentaria división del trabajo; las mujeres realizaban la recolección, los
hombres cazaban. Por otra parte, continuaron con el nomadismo, mejoraron la técnica del
tallado de la piedra. Pero su mayor avance cultural consistió en el control del fuego.

Alrededor de 200.000 años a.C., se produjo la aparición del llamado homo sapiens.
Algunos prehistoriadores, consideran al Neanderthal, por su desarrollo cerebral, su género
de vida y su capacidad inventiva, mucho más próximo al homo sapiens que al pitecántropo.

Descendientes de los anteriores, los neandeerthalenses (8) se ingeniaron para fabricar y

perfeccionar armas mediante el método de la percusión. Las nuevas armas le permitieron
realizar caza mayor y, los utensilios perfeccionados los utilizó para carnear a los animales y
preparar los cueros para darles diversos e importantes usos como: confeccionar
vestimentas, construir refugios temporarios y proteger la entrada de las cavernas.

Mientras las mujeres se ocupaban de la recolección, de las tareas “domésticas”, de la

preparación del cuero, los hombres cazaban. Es evidente que poseyeron el sentido de la
destructibilidad corporal; es decir, la idea de la muerte y, posiblemente a ella asociaron el
primer germen de religiosidad. En este período, es notable la importancia de la “religión”, la
familia, etc., esto es, de la vida espiritual. Los enterramientos son el mejor argumento para
demostrar la espiritualidad del homo sapiens, en ellos se destaca el cuidado con que se
disponía el suelo y el cadáver. Por otra parte, las ofrendas, demuestran la creencia en una
vida más allá de la muerte. Un hecho importante a destacar consiste en que el Neanderthal
ponía mangos a sus utensilios y armas, lo cual indica el pasaje del instrumental sencillo al
complicado. Sin embargo su habilidad técnica no lo llevó a la búsqueda de formas artísticas,
en cambio, los testimonios de su vida espiritual
parecen irrefutables.

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Algunos prehistoriadores dudan en considerar al Neanderthal un homo sapiens, a quien

consideran el último peldaño de la evolución humana.

Los primeros homo sapiens fossilis, se encontraron en Europa en 1868, en Cro-Magnon

(Dordoña, Francia). Junto con los restos encontrados en otros continentes alcanzan una
antigüedad superior a algunas decenas de miles de años. El cráneo poco resistente y de gran
capacidad, es apenas diferente del cráneo del hombre actual.

La llegada a Europa del hombre de Cro-Magnon y de otros tipos de homo sapiens, hacia
mediados de la última glaciación, abre el período del Paleolítico superior, llamado
frecuentemente la Edad del Reno, por alusión a la abundancia de estos rumiantes en el norte
de los Alpes y en los Pirineos. Esta última etapa de la civilización de la piedra tallada abarca
unos treinta y tantos mil años (entre 40.000 y 10.000 a C.) y se subdivide en tres fases
desigualmente repartidas en Europa: Reno antiguo (auriñaciense-perigordiense), Reno medio
(solutrense) y Reno superior (magdaleniense). Desde sus comienzos las técnicas de tallar
piedra y trabajar el hueso alcanzaron gran perfección. En el magdaleniense aparece el
anzuelo, el arpón y la mayor revolución técnica: la aplicación de la flexibilidad de la madera
para el lanzamiento de proyectiles.

Entre los años 40.000 y 35.000 a C., convive con el Neanderthal, el llamado Cro-Magnon(9)
que, para diferenciarlo de Neanderthal, algunos historiadores lo llamaron homo sapiens
sapiens.

Alrededor de 30.000 años a. C., culminó el lento proceso de extinción del Neanderthal,(10)
hasta desaparecer, superado por el homo sapiens sapiens, cultural y biológicamente mejor
adaptado. Su inteligencia y los adelantos técnicos, le permitieron desplazarse a todos los
espacios más o menos habitables, sobreviviendo al Neanderthal. Desde Africa y Asia, donde
evolucionó, se desplazo a Europa, Oceanía y América. Fue acompañado por varios tipos
raciales distintos, conocidos por lo general con el nombre del lugar donde fueron hallados sus
restos. En realidad se desarrolló una complicada mezcla étnica, y a la variedad racial se debe
agregar el resultado de los cruzamientos entre neanderthales y cromagnones. Su modo de
vida nómade y de características similares a sus antecesores, tuvo pequeñas variaciones
regionales. En el sur de Egipto, recogía cereales silvestres, en zonas costeras pescaba con
arpones y recogía moluscos, lo cual le permitió una dieta más diversificada. Las mujeres se
ocupaban de las tareas “domesticas” y del cuidado de la prole. Sin dificultades alimentarias,
mejoraron su condición de vida y se produjo una “explosión demográfica”.

Pero lo más importante del Paleolítico superior es el descubrimiento del arte.

Al tener, en parte, resueltas sus preocupaciones vitales, el Cro-Magnon, pudo dedicarse a

otras actividades, por ejemplo al “arte”. Alrededor de 30.000 años a.C., aparecen pequeños
objetos de hueso, marfil y asta, tallados a los que se denominó “arte mobiliar”. Es posible
que se tratara de adornos, bastones de mando, etc., u objetos a los cuales se le atribuían
poderes mágico-religiosos. Sin embargo, no se le ha podido adjudicar, con certeza, una

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función específica. Esencialmente dedicadas a la representación de la fauna, en él las

representaciones de las figuras humanas son raras. Aparecen unas veces asociadas a un
animal y otras a la exaltación mágica de los atributos sexuales de la mujer, “como símbolo de
la fecundidad”. También fueron encontradas estatuillas de mujeres, talladas hueso, marfil y
piedra, que recibieron el nombre de Venus. Se las consideró diosas o se las vinculó con ritos
de fertilidad.

En la segunda mitad del siglo XIX, conmovió el hallazgo de las llamadas pinturas rupestres,
en las Cuevas de Altamira (España), la de Lascoux (Francia). En ellas representaron a los
animales que conocían, con los que convivían o cazaban para obtener alimentos y
vestimenta. Los representaron en variadas actitudes, entre ellas atacando o huyendo.

¿Se trataba de ritos misteriosos de magia?.

Como ejemplificaría el hechicero de la cueva de Trois Fréres. El significado religioso del arte
parietal, para algunos prehistoriadores, es evidente. Pinturas y esculturas aparecen en los
sitios menos accesibles de las cuevas donde jamás penetra la luz del día, manifiestan un goce
estético de crear y un gusto exuberante de fantasía que aun admiramos.

En los abrigos el Levante español, ofrecen representaciones a escala menor, donde

predominan las figuras humanas y tanto éstas como las de los animales constituyen
verdaderas escenas grupales, entre ellas de cacería, dinámicas e instantáneas, en actitudes
de movimiento, pintadas en nichos o en abrigos de roca al aire libre, lo cual hizo pensar en
algún tipo de conjuro mágico para obtener una buena cacería. La duda subsiste: ¿éstas
representaciones tenían un fin utilitario o se trató de simples manifestaciones
estéticas?.

A finales del Paleolítico y en un prolongado paréntesis que abarca tres o cuatro milenios –
entre 12.000 y el 8.000 a C., según algunos historiadores, la vida humana experimenta una
profunda transformación. El hombre va abandonando las cuevas y construye refugios y sedes
de poblamiento con mayor o menor sedentarismo, donde se produce la domesticación de
algunos animales y los primeros intentos de explotación agrícola y ganadera. En algunos
lugares más evolucionados nacen las primeras civilizaciones forestales y agrarias, con sus
chozas cónicas o redondas y sus hatos de ganado. Las variaciones climáticas ya no son tan
frecuentes o intensas.

(7) Para algunos autores hay una línea evolutiva que va de los primeros hominidos, los pitecos,
siendo el mas representativo el australopiteco, que se sitúa en el peldaño más antiguo y elemental,
pasando por los pitecántropos, representantes del siguiente peldaño, correspondiente a un estadio de
desarrollo psiquico e intelectual más avanzado, siendo el Pithecanthropus erectus; es decir “hombre-
mono de pie”, al hombre de Neanderthal.

(8) En la mitad del siglo XIX, se descubrieron en el valle del río Neander, cerca de Düsseldorf
(Alemania), restos humanos, a los cuales se les puso el hombre de hombre de Neanderthal.

(9) A mediados del siglo XIX, en la población de Les Eyzies, en la Dordoña francesa, en una caverna,

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se encontraron restos humanos en el yacimiento de Cro-Magnon. Los arqueólogos le dieron este

nombre a los restos que encontraron allí.

(10) “(...) hace unos 100.000 años, en la que una variedad racial nueva va a ocupar todo el Viejo
Mundo, desarrollando, además, una técnicas propias para preparar el abundante utillaje que
conocemos. Antropológicamente, la variante más típica nos muestra un ser de baja estatura, sin
barbilla, con arcos superciliares muy acusados y de frente poco desarrollada, huidiza y baja. Además,
es notable su dolicocefalía –cabeza alargada– con presencia de una especie de “moño” occipital.
La posición del cuerpo es erguida, pero la proporción entre brazos y extremidades inferiores, respecto
al hombre moderno, es distinta: los brazos son más largos. La capacidad craneana es muy grande,
con frecuencia superior a la de los cráneos modernos, aunque en éstos se halle compensada por una
mayor riqueza y complejidad de las circunvoluciones cerebrales. Pericot, L. Y Martin, R. La Prehistoria,
Salvat Editories, Barcelona, 1973.

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NEOLÍTICO

Alrededor del 10.000 a. C. , termino la era glaciar, cambiando el clima del mundo y
modificando la forma de vida de los hombres. De recolector y cazador, luego de un largo
proceso, el hombre se convirtió en productor de sus alimentos, enfrentándose exitosamente
al medio ambiente y modificándolo.

En el Cercano Oriente(11), en la llamada Media Luna de las Tierras Fértiles, de la cual

también forma parte la llamada Mesopotamia (entre los ríos Tigris y Eufrates)(12), el hombre
fue abandonando el nomadismo. Las condiciones ambientales de esta zona, fueron ideales
para que se produjeran algunas plantas y cereales en estado salvaje, (como el trigo) y
guisantes, además cabras y ovejas. El hombre aprendió a domesticarlos, obteniendo una
mayor diversidad en su alimentación. Sólo era necesario esperar que los cereales crecieran y
los animales se reprodujeran, para lo cual se hizo habitual el sedentarismo, es decir la
formación de grupos de agricultores y ganaderos.

De alrededor del 8.000 a de C., proceden los primeros asentamientos del Neolítico, (en la
Mesopotamia)(13), en ellos se encontraron restos de animales, de cereales, piedras para
molerlos, restos de hogares para cocinar, etcétera. Posiblemente cambió la función de la
mujer y la estructura de la familia. También, posiblemente, se desarrolló el concepto de
propiedad. La producción cerealera, planteó ciertos problemas a resolver como: su
almacenamiento para prever posibles malas cosechas. Los nuevos hábitos alimenticios, el
sedentarismo, el aumento de la población, hicieron necesaria una mayor división de las
tareas, que junto con los adelantos técnicos hicieron posibles mejores condiciones de vida y
la búsqueda de mayor confort. Se construyeron casas de adobe, techadas con paja, junto a
ellas, corrales para los animales y cisternas para almacenar agua.

En la región mesopotámica, a partir del siglo VII a C., esparcen objetos de alfarería,
cerámicas decoradas, utilizadas para almacenar cereales, agua, o como utensilios para
cocinar e intercambiar con comunidades vecinas. La existencia del trueque, nos indica que el
comercio había comenzado a desarrollarse. Llevar las cuentas de la producción de la aldea, de
los excedentes, etc., hizo que se desarrollar un sistema que, es probable, derivaría en la
escritura.

Por otro lado, se han encontrado en muchos yacimientos, enterramientos con cierta
uniformidad en la práctica lo cual sugiere un sistema religioso muy difundido en la zona
limitada por el Tigris y el Eufrates.

De alrededor del 5.000 a C., proceden algunos edificios de dimensiones importantes y planta
cuadrangular, posiblemente se tratara de templos.

Otro de los grandes adelantos del Neolítico fue la utilización de metales como el cobre y el
plomo.

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(11) “Las condiciones ambientales del Próximo Oriente constituyeron el entorno ecológico para la
introducción de la agricultura y la formación de la sociedad urbana. (...)El Próximo Oriente es una
región geográfica de gran diversidad (...) El clima está regido por un régimen de lluvias invernales y
de sequía estival (...) La diversidad topográfica y la distribución de lluvias, suelos y comunidades de
vegetación (...) Algunos tipos de accidentes geográficos y de condiciones climáticas favorecen el
crecimiento de determinadas especies de plantas, las cuales a su vez sirven de nutrición a diversos
animales, entre los que se incluyen los seres humanos.(...) Redman, Ch., Los orígenes de la
civilización. Desde los primeros agricultores hasta la sociedad urbana en el Próximo Oriente,
Barcelona, Crítica, 1990.

(12) “La relación entre los primeros asentamientos de la llanura mesopotamica y sus localizaciones
ecológicas está determinada en primer lugar por la ubicación y los regímenes de los dos ríos más
importantes, el Tigris y el Eufrates. (...) El Eufrates (...) no varía mucho en los cursos medio y bajo.
En cambio, el Tigris (...) una de las características de este río son los frecuentes desbordamientos
(...) Estas inundaciones tienen lugar en un mal momento (...) el nivel más alto llega en el momento
en que los cultivos maduran y están dispuestos para la recolección. Por tanto, más que una ayuda
para el crecimiento, las aguas representan una amenaza para la cosecha” Idem nota 6.

(13) Los primeros en entrar en el Neolítico fueron los habitantes de la Mesopotamia, otras regiones
del mudo entraron más tarde, por ejemplo, los egipcios la hacen alrededor del 5.000 a C., los chinos,
alrededor del 4.000 a. C., y los hindúes alrededor del 3.400 a C.

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EL COMIENZO DE LA HISTORIA: LA ESCRITURA

Probablemente, los grandes pasos de la humanidad prehistórica hacia la historia, fueron: el

dominio del fuego, el aprendizaje y desarrollos de la agricultura y la ganadería, la vida urbana
y la invención de la escritura. En la aldeas neolíticas se agrupaban agricultores, ganaderos,
artesanos y mercaderes. Es posible que fueran estos últimos los que realizaran los primeros
pictogramas, con el objeto de conocer la cantidad de productos que tenían almacenados y los
que podían intercambiar.

Estos rudimentos de escritura surgieron en distintos lugares y en diferentes tiempos. Sin

embargo, podemos mencionar sus etapas:

1ª Pictografía, es decir, representación de los objetos mediante su imagen, una espiga

representaba al cereal;

2ª Representación de escenas en una secuencia más o menos lógica, hombres

recolectando espigas, entonces se indicaba la recolección de la cosecha, es decir se relataba
lo que se hacía,

3ª Escritura ideográfica o fonética. En esta, la imagen no representa un objeto,

representa un sonido, es decir, un fonema. Esta escritura permitió representar sílabas y
palabras.

4ª Cilindros o sellos. Por lo general, de piedra, en los cuales aparecen talladas imágenes de
divinidades o de hechos de la vida cotidiana. Se los aplicaba en cacharros de arcilla, para
evitar que fueran robados o violados.

5ª Escritura cuneiforme, posiblemente derivada de los sellos o cilindros. Alrededor del

3.000 a C., con un cuño, se realizaban marcas en tabletas de arcilla cruda, que después era
cocida. Este tipo de escritura es atribuido a los sumerios.

Los egipcios, para la misma época (3.000. a C.), le asignaron funciones fonéticas a los
antiguos pictogramas, dando origen a la escritura jeroglífica, (del griego hierós = sagrado, y
glyphein = grabar), constituida por grabados sacros, en sus comienzos tallada o grabada en
piedra, en las paredes y columnas de los templos y otros lugares religiosos.

Paralelamente, los signos jeroglíficos fueron simplificados, para que pudieran ser escritos en
papiro o en cuero, dando lugar a la llamada escritura hierática (o sacerdotal), que con el
transcurso del tiempo, en la Baja Epoca, fue reemplazada por la demótica (del griego
dêmos)(14), esto es, escritura popular. Lencina Pujol, P: Lecciones de Historia de la
Civilización I. En preparación.

(14) Jean François Champollion, logró descifrar la escritura egipcia a partir de la llamada “Estela de

Roseta”, una piedra hallada durante la campaña de Napoleón, en el Delta, en 1799. Esta piedra
contiene un texto, en escritura jeroglífica, demótica y griega y en dos lenguas, egipcio y griego.

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ACTIVIDADES

1. Imagine el paisaje natural de la tierra antes de la presencia del hombre. Enumere los
cambios que él introdujo.
2. Enumere todas las ciencias que la Historia necesita para que la auxilien en la
descripción de la sociedad en que vivimos.
3. Establezca los distintos tipos de prehombres.
4. Responda las siguientes preguntas: ¿Qué es la Prehistoria?. ¿Cuándo empieza?.
¿Cuándo termina?. ¿Dónde nació el hombre?. ¿Cuándo?. ¿Cómo?.
5. Intente dar una definición del hombre.
6. Cite las primeras herramientas de las que se valió el hombre.
7. Señale como y para que utilizaba los instrumentos el hombre prehistórico.
8. Explique la importancia de la Cronología para analizar los hechos históricos.
9. Analice el papel de las fuentes y documentos en el estudio de la Historia.
10. Describa la relación entre pasado, presente e Historia.
11. Mencione las distintas edades de la Prehistoria.
12. Compare las piedras de Abbeville con las comunes.
13. Analice el papel de las cuevas para el estudio de la Prehistoria.
14. Describa como se formaron las diferentes capas que cubren el suelo de las cuevas
prehistóricas.
15. ¿Qué representaban los hombres prehistóricos en las cuevas?. ¿Para qué?
16. Analice el papel de la sociedad con relación a la existencia del hombre.
17. Confeccione su diccionario de la Prehistoria, Ejemplo:

ABBEVILLENSE: Una de las antiguas subdivisiones del Paleolítico

(antiguamente Chelense). Termino propuesto por el abate Breuil y admitido por
la inmensa mayoría de prehistoriadores para designar a la más antigua industria
de bifaces. Yacimiento epónimo en Abbeville (Somme, Francia).

CIVILIZACION: . . .
...
...

FOSIL: Literalmente, extraído de la tierra; dícese de todo anterior a la época

geológica actual.
...
...
GLACIACION: Período en cuyo transcurso el clima fue mucho más riguroso que
en nuestros días. Escandinavia y sus alrededores, hasta Alemania central,
estaban recubiertos por una espesa corteza de hielo, como actualmente lo está
Groenlandia. En el transcurso del Cuaternario tuvieron lugar cuatro glaciaciones:

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Günz, Mindel, Riss y Würm, nombre de las cuatro fases glaciares del Cuaternario
europeo. Identificadas por los geólogos alemanes Penck y Brückner, recibieron
los nombres de los valles del norte de los Alpes donde sus morrenas dejaron
vestigios característicos.
...
...
PITECANTROPO: Homínidos de comienzos del cuaternario.
...
ETCÉTERA, ETCÉTERA
...

LA CUEVA DE ALTAMIRA

“...El perro fue el primer animal domesticado por el hombre, (...) más tarde, un perro fue la
causa (...) del descubrimiento que revelaría al hombre uno de los más extraordinarios
momentos de su pasado.

El proceso, pues lo fue, dio comienzo en 1869 en Santillana del Mar (Santander) cerca de las
propiedades de don Marcelino de Sautuola, donde un cazador acosaba a un zorro (...) el perro
desapareció como tragado por la tierra (...)” el cazador “creyó escuchar un débil gemido
debajo de las hierbas. Se asomó, intrigado, y descubrió una grieta en cuyo fondo había caído
el perro. Pero en el fondo de la falla quedó sorprendido al descubrir una inmensa cueva. (...)
En 1875, (...) Marcelino de Sautuola (...) visito superficialmente la cueva (...) Las cosas no
hubiesen pasado de aquí si (...) no hubiese ido a París a visitar la exposición mundial (...)
Don Marcelino regresó de Francia entusiasmado por la idea de hallar vestigios de un lejano
pasado ibérico. (...) tenía una hija de doce años a quien las misteriosas idas y venidas de su
padre tenían intrigada en gran manera. (...) María pidió insistentemente que se la autorizase
para acompañar a su papá en los viajes al país del pasado.(...) mientras él manejaba el
azadón, la pequeña María se aventuraba por unos nichos (...) enroscada en un agujero, lanzó
un grito (...) no estaba en peligro (...) a la vacilante luz de la vela que llevaba en la mano
había descubierto una alucinante carga de bisontes pintada en las paredes y en la bóveda.”

Tomado de: Albessard, Nestor: EL ORIGEN DE LA HUMANIDAD.

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