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“AÑO DEL DIALOGO Y LA RECONCILIACION NACIONAL”

DERECHO NOTARIAL Y REGISTRAL

FACULTAD:

DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS

TEMA:

RESPONSABILIDAD DEL REGISTRADOR EN LA CALIFICACION DE


TITULOS

INTEGRANTE:

MASUMI MIYOKO VICENTE REMIGIO

DOCENTE TUTOR:

FRANK YURI NUÑEZ MORILLAS

CICLO:

IX.

CHIMBOTE -2018
DERECHO NOTARIAL Y REGISTRAL

RESPONSABILIDAD DEL REGISTRADOR EN LA CALIFICACION DE


TITULOS

La función del registrador consiste en la calificación registral del título cuya solicitud de
inscripción es rogada por el usuario. Luis Diez-Picazo (1) explica lo siguiente:

“Dos son pues los medios que el registrador puede utilizar en su calificación: los mismos
documentos presentados y los asientos del Registro.

Se aprecia, en estos términos, una cierta escasez en los medios con que el registrador
cuenta para realizar la calificación. Esta escasez contrasta con la amplitud de la materia a
calificar, pero la exigencia legal es ineludible.

Lo que no está en los documentos presentados o en los asientos del Registro no puede ser
tenido en cuenta a efectos de calificación”.

Dentro de esa perspectiva, en el artículo 32 del TUO del Reglamento General de los
Registros Públicos se desarrollan los alcances de la calificación registral, y para el
presente tema, resulta importante conocer que en su inciso d) consta el deber de
“comprobar que el acto o derecho inscribible, así como los documentos que conforman
el título, se ajustan a las disposiciones legales sobre la materia y cumplen los requisitos
establecidos en dichas normas.

Así, el fundamento normativo de comprobar la autenticidad del instrumento presentado


al Registro lo encontramos en el inciso d) del citado artículo 32; pues dentro de la
calificación registral corresponde efectuar el examen de los elementos extrínsecos a fin
de determinar si los instrumentos contenidos en el título satisfacen los requisitos
establecidos en el ordenamiento jurídico para que acceda al Registro (2).
Jurisprudencialmente, la Segunda Sala del Tribunal Registral en la Resolución N° 495-
2010-SUNARP-TR-L, del 18 de agosto de 2010, conforme a reiterada y uniforme
jurisprudencia registral (3) – sustenta dicho deber a través de los incisos c) y d) del mismo
artículo del reglamento para concluir lo siguiente: “… dentro de los alcances de la
calificación del Registrador y de Tribunal Registral, cada uno en sus respectivas
instancias, sí se encuentra el deber de verificar la autenticidad de los documentos
presentados, para lo cual, se procederá a comprobar la identidad de las firmas y los sellos
que constan en el registro del módulo general de consultas ‘notarios’, herramienta
informática que está a disposición de los funcionarios registrales y al que se acceda a
través del servicio de INTRANET”.

Cabe destacar que, el empleo de las herramientas informáticas es acorde con lo señalado
en el III Congreso Internacional de Derecho Registral (Puerto Rico, 1977),
específicamente, en el dictamen de la Comisión III que en su oportunidad declaró: “Es
recomendable que los registros adopten los medios técnicos idóneos para comprobar la
autenticidad de los documentos inscribibles mediante procedimientos que reúnan el
mayor grado de eficacia y agilidad” (4).

En efecto, se trata de una labor del Registro y que no puede ser trasladada a los
particulares; por cuanto, de acuerdo al principio administrativo de presunción de
veracidad contenido en el punto 1.7. Del artículo IV del Título Preliminar de la Ley del
Procedimiento Administrativo General (Ley N° 27444) al presumirse que los documentos
presentados por los administrados responden a la verdad de los hechos que ellos afirman.
Por ello, el administrado que presenta un instrumento público no está obligado a
demostrar su autenticidad. Si es discutible la autenticidad del instrumento, a quien la
niegue corresponderá demostrar la falsedad; y por tanto, esta regla constituye una ventaja
del documento público sobre el privado (5).

En este orden de ideas, las herramientas informáticas puestas al alcance de los


Registradores Públicos conforman los medios para “advertir” la supuesta falsedad de la
documentación presentada en el título, y de esta manera, se explica los dos momentos
señalados en el artículo 36 del TUO del Reglamento General de los Registros Públicos
para la tacha por falsedad documentaria: el primero, que consiste en “advertir” la falsedad
del documento, o mejor dicho, “sospechar” de la falsedad mediante el cotejo de la
identidad de las firmas y los sellos que constan en el registro del módulo general de
consultas; y el segundo, la realización del trámite que lo acredite de manera indubitable
que, por lo general, consiste en solicitar el pronunciamiento de quien autorizó el
instrumento falsificado a fin de que lo señale de manera expresa.

Finalmente, no debe olvidarse que en el inciso b) del artículo 45 del Estatuto de la


SUNARP (4) se precisa que el Registrador Público no será responsable si extiende
inscripciones o cancelaciones basadas en documentos falsificados o adulterados, siempre
que la falsedad o adulteración no se desprenda de manera evidente o notoria del mismo
documento. Cabanellas de Torres define, de un lado, lo “evidente” como “la certidumbre
plena de una cosa, convicción consciente; de modo tal que el sentir, juzgar o resolver en
otra forma constituya temeridad o suscite escrúpulos” (5); y de otro lado, define que
“notorio” es lo “público y de todos sabido. Los hechos notorios relevan de prueba”(6). La
confrontación del instrumento público con las herramientas informáticas permitirá
determinar si notoriedad o evidencia de la falsificación.

RESPONSABILIDAD ADMINISTRATIVA

Contra la actuación del Registrador se pueden interponer Quejas y Denuncias.

QUEJAS

Son las reclamaciones realizadas por los administrados relativas a procedimientos en


trámite, a través de las que se cuestionan las deficiencias en el desarrollo normal de su
tramitación, en especial aquellas a que se refiere el artículo 158 de la Ley del
Procedimiento Administrativo General.

El incumplimiento de los plazos de procedimiento, la denegatoria de recursos


impugnativos o cualquier acción que produzca la indebida desviación del procedimiento
regular pueden ser materia de queja por defectos de tramitación.

Las quejas relativas a procedimientos a cargo de Registradores de los Órganos


desconcentrados, corresponderá resolver al Jefe Zonal.

Las quejas relativas a procedimientos a cargo del Tribunal Registral serán resueltas por
el Superintendente Adjunto. La queja se formula de manera oral o escrita, con indicación
del nombre, documento de identidad y domicilio del quejoso.

Cuando la queja se formule por escrito, podrá emplearse el telegrama, el correo


certificado, facsímil, correo electrónico o cualquier otro medio que permita comprobar
fehacientemente su recepción por parte de la entidad.
A dicho efecto, los órganos desconcentrados y la Sede Central de la SUNARP, designarán
a los encargados de canalizar dichas quejas y derivarlas a la autoridad competente para
atenderlas. Las quejas formuladas por correo electrónico se efectuarán a la siguiente
dirección: sugerencias@sunarp.gob.pe. La Oficina de Imagen Institucional y Relaciones
Públicas de la SUNARP, las derivará, en el día, al órgano competente para atenderlas,
con copia al Superintendente Nacional.

De formularse la queja de manera oral, el personal de la entidad encargada de la atención


al público, ingresará la información proporcionada por el usuario al formato de quejas
aprobado por Resolución Nº 602-2002-SUNARP-SN.

El órgano que debe resolver la queja ordenará a los Registradores de la tramitación


reclamada, que emitan los informes necesarios dentro de un plazo no mayor de un (01)
día de recibido el requerimiento.

Las quejas serán atendidas, sin necesidad de previo dictamen, dentro de un plazo no
mayor de tres (03) días contados desde la fecha en que fueron presentadas. Si del análisis
efectuado se comprueba la deficiencia en la tramitación y el procedimiento no ha
culminado, al declararse fundada la queja se ordenará la inmediata subsanación de la
misma, a fin de impulsar el procedimiento respectivo, sin perjuicio de remitir al órgano
competente los antecedentes del caso, para que evalúe el inicio del procedimiento
administrativo disciplinario a que hubiere lugar.

Si el procedimiento materia de queja concluye ante de resolverse ésta, o si ya se


encontraba concluido al momento de presentarse la misma, deviene en imposible ordenar
las subsanación de la deficiencia reclamada.

En tales casos, se dispondrá el archivamiento de la queja, sin perjuicio de proseguirse con


la determinación de responsabilidades funcionales a que hubiere lugar, de ser el caso y se
adopten las medidas correctivas correspondientes para evitar situaciones similares.

Lo resuelto por la autoridad competente es irrecurrible. Está facultado para formular queja
la parte afectada con las deficiencias del procedimiento en trámite. En el procedimiento
registral están legitimados para formularla las personas a que se refiere el artículo III del
Título Preliminar del Reglamento General de los Registros Públicos.

DENUNCIAS
Comunicación realizada por el administrado a la autoridad competente sobre la presunta
comisión de faltas administrativas tipificadas en el artículo 44 del Estatuto de la
SUNARP.

El artículo 44 del Estatuto de la SUNARP está referido a la responsabilidad de los


Registradores Públicos en los siguientes casos:

a) Por incumplimiento de las normas vigentes.

b) Por abuso en el ejercicio de sus funciones

c) Por conducta irregular, vicios o costumbres que menoscaben el decoro y respetabilidad


del cargo.

d) Por denegar, retardar o no extender indebidamente alguna inscripción, anotación,


cancelación o nota marginal.

e) Por extender inscripciones, anotaciones, cancelaciones o notas marginales en partidas


que no corresponden a los títulos, en discrepancia con estos o sin existir ellos o, en
general, infringiendo las leyes, reglamentos o directivas registrales.

f) Por expedir constancias o certificados falsos, incompletos o que de alguna forma


induzcan a error.

g) Por no liquidar debidamente los derechos arancelarios en perjuicio de la institución o


del usuario o por apropiarse de los mismos.

h) Por cobrar a los usuarios sumas mayores a las debidas según el arancel vigente o
percibir dádivas u obtener provechos indebidos con motivo del ejercicio de sus funciones.
i) Por negligencia en el desempeño de sus funciones.

DEL PROCEDIMIENTO DE DETERMINACION DE RESPONSABILIDAD


ADMINISTRATIVA DISCIPLINARIA.

El Superintendente Nacional es competente para conocer del procedimiento


administrativo disciplinario en segunda instancia contra Registradores sancionados en
primera instancia por el Jefe Zonal respectivo.
El Directorio de la SUNARP es competente para conocer, en segunda instancia, del
procedimiento administrativo disciplinario seguido contra los integrantes del Tribunal
Registral.

El Superintendente Adjunto es competente para conocer del procedimiento


administrativo disciplinario seguido contra los Vocales del Tribunal Registral, en primera
instancia.

El Jefe Zonal es competente para conocer el procedimiento administrativo disciplinario


seguido contra los Registradores, Certificadores y Abogados Certificadores, por las
inconductas atribuidas en el ejercicio de la expedición de publicidad registral.

Para imponer la sanción correspondiente se deberá observar los criterios de graduación


siguientes:

a) La naturaleza o gravedad de la falta;

b) La existencia o no de intencionalidad;

c) El daño o perjuicio ocasionado;

d) La rectificación de la irregularidad antes de causar daño;

e) La jerarquía de quien incurre en la falta;

f) El carácter especializado de las funciones en cuyo ejercicio se incurre en falta;

g) La reiteración y reincidencia.

En este último caso, sólo se considerarán las sanciones impuestas en los últimos tres (03)
años, salvo que hubiera sido promovido, en cuyo caso no se considerarán las sanciones
impuestas cuando el registrador ejercía el cargo anterior, aun cuando correspondan al
período citado;

h) Criterios objetivos que inciden en la función del servidor o funcionario.

Por las faltas incurridas por los registradores se impondrán las siguientes sanciones:

a) Amonestación escrita:

b) Suspensión de uno (01) a sesenta (60) días;

c) Despido.
La amonestación escrita es la medida disciplinaria aplicable cuando el registrador ha
incurrido, por acción u omisión, en falta administrativa que no reviste gravedad.

La suspensión es la medida disciplinaria aplicable cuando el servidor o funcionario ha


incurrido en falta administrativa de relativa o significativa gravedad.

Implica la separación temporal del centro de labores sin percepción de remuneración. El


despido es separación definitiva del trabajador por haber cometido falta grave, tipificada
expresamente en la ley.

Sólo podrá aplicarse esta sanción en el procedimiento administrativo disciplinario,


cuando la falta administrativa constituya además causa justa de despido según la ley
laboral.

En estos casos, la imputación de la causa justa de despido debe estar contenida en la


Resolución que dispone el inicio del procedimiento administrativo disciplinario.

RESPONSABILIDAD CIVIL

En general, aquel que por dolo o culpa causa un daño a otro está obligado a indemnizarlo.
El descargo por falta de dolo o culpa corresponde a su autor, tal como dispone el Art.
1969 del Código Civil.

En el caso de los Registradores, su actuación en la inscripción previa la calificación


registral, puede causar daño al usuario o a terceros como ya hemos explicado en la
introducción de esta sesión.

RESPONSABILIDAD PENAL

Está referida a la responsabilidad de los Registradores, entre otros funcionarios de la


administración pública, en la comisión de los delitos de abuso de autoridad, concusión,
patrocinio ilegal, cohecho impropio, etc.; tipificados en los Artículos 376, 382, 385 y 394
del Código Penal, que si bien algunos no tiene relación directa con la calificación
registral, constituyen todos delitos en que pueden incurrir los Registradores Públicos.
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS

 Gonzales, G. (2015). Derecho Registral y Notarial, Lima: (4ta ed.). Ediciones


Legales
 Novoa, J. (2015). Derecho Notarial y Registral. Chimbote: ULADECH
Católica. Derecho Registral y Notarial, Lima: Ediciones Legales.
 Ley 27444 del Procedimiento Administrativo General.
 T.U.O del Reglamento General de los Registros Públicos
 Código Penal, Arts.376 a 401
 Código Civil, Arts. 1969 a 1988.
 Decreto Supremo 04-95-JUS

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