Académique Documents
Professionnel Documents
Culture Documents
ABRASADOS
de Luc Tartar
“Solos: No tenemos amor, no tenemos amigos, no tenemos enemigos, no tenemos familia, no tenemos
hermano, no tenemos hermana, no tenemos padres, no tenemos perro, no tenemos gato, no tenemos
pez, no tenemos pájaro, sólo tenemos las lágrimas que derramamos.”
D.
“No quiero parecerme a ninguno de los rostros que tienen las esposas con sus senos resecos como pan
olvidado al fondo del fregadero.
C.
Un beso
Un beso en el patio de la prepa
Ellos se besan
Así como así
Sin pena
En el patio
En serio
Besos he visto pero como ese
Es la primera vez
Nunca había visto eso
Un beso como ése
Dos alumnos en un patio
Y nosotros a su alrededor
Las chicas los chicos los profes incluso el director
El reglamento interno de la escuela prohibe los besos en el patio
Ellos se besan
Las chicas y los chicos no pueden creer lo que ven
Vivo enfrente de la escuela. Los conozco a todos
Soy Vivi
Soy Youssef
Soy Dorothée
Soy Ludivine
Soy Jean-Baptiste
Soy Isabelle
Soy el padre
Soy la madre
Dorothée Vivi Youssef el director y los padres madre angustiada padre colérico
Ábreme. No azotes la puerta
Pero si ya sabes como son las chicas
Un flechazo
En un patio de escuela
ABRASADOS – HUMBERTO PÉREZ MORTERA 3
S’EMBRASENT – LUC TARTAR
Dos seres en equilibrio inestable a la orilla del mundo
Díganle a mi madre que me quemé los ojos viéndolos besarse
Díganle que tuve un ataque de celos
Me quemo los ojos
Me muerdo la lengua
Me trueno los dedos
Pierdo la voz
Se me caen los brazos
Se me aflojan las piernas
El mundo está enfermo. Pues que se asome a mi ventana
Tropiezo me desmayo caigo
Ese beso me lastima me pega en el vientre se cobija en mi cabeza y me impide avanzar
Mi primera arruga. Un surco que me atraviesa de los pies a la cabeza y me parte en dos
Díganle a mi madre
No quiero parecerme a ninguno de los rostros que tienen las esposas con sus senos resecos como pan
olvidado al fondo del fregadero.
Abrazados
Jonathan sexualmente hace que todo el mundo se humedezca. Las chicas los chicos los profes incluso
el director. Te cruzas con él en los pasillos es como las cataratas del Niágara. Sudas tanto no puedes
más. Es hermoso y sus ojos estrellas relámpagos pequeñas puntas mojadas en el veneno paralizante
que te cosquillean en la piel que repiquetean a tu puerta y penetran tu corazón. Una mirada y me
paralizo. Hiervo. Me humedezco. Una verdadera olla de vapor.
Jonathan lo hizo con Sophie Isabelle Dorothée Ludivine Jean-Baptiste pero conmigo no
Yo no escribí eso
Mensaje de texto
Jonathan sexualmente nos hace babear. Él se queda en el patio bien erguido no hace más que respirar
el cuerpo relajado abierto al mundo y eso nos hace temblar. Las hojas los árboles el piso eso nos hace
temblar en lo más profundo olvidamos todo lo que aprendimos los consejos de mamá “No confíes en
extraños” temblamos en lo más profundo y ayer lo que debía pasar Latifa se derrumbó
Cayó de su pedestal
Es un deslumbramiento total. Latifa cae hacia atrás el cráneo cargado de promesas después de un
intercambio de miradas. Latifa es nueva y las noticias corren rápido. Le decimos “Jonathan
sexualmente” ella se cruza con él en el patio y es un flechazo que la sacude y que le da un premio un
boleto hacia la felicidad. Latifa no piensa en el futuro cae hacia atrás y entra en lo desconocido. Y él
Jonathan se gira y la atrapa al vuelo. Es un ángel. Se mueve a la velocidad del rayo. La toma en sus
brazos la abraza suavemente y la besa. Sus cuerpos se mezclan – una mano aquí un pie allá. Diríamos
que van a caer. Pero no. Se besan. Y nosotros nos preguntamos que es eso. Hacemos círculo a su
alrededor. Quisiéramos entender. La gravedad. La pesadez. Ese cuerpo a cuerpo absurdo y nosotros
sólo detrás de las cuerdas. Venir al mundo. Mantenerse de pie. Franquear uno a uno los obstáculos
creerse invencible y descubrir el verdadero sentido de la vida en un beso en el patio de la prepa.
Mamá. Papá. Todo se desmorona. Yo también caigo. Y nadie que me atrape
Tropiezo me desmayo caigo ese beso me lastima me pega en el vientre se cobija en mi cabeza y me
impide avanzar. Me imagino películas historias de amor que recuerdo al despertar que me prenden y
ABRASADOS – HUMBERTO PÉREZ MORTERA 5
S’EMBRASENT – LUC TARTAR
que me ayudan a pasar el día pero hoy bang Jonathan besa a Latifa y cómo mantenerse de pie después
de eso
Los amantes ellos dan sus primeros pasos. Cruzan el patio bajo nuestra mirada atontada y atraviesan la
salida. La escena es presenciada por todos. Las chicas los chicos los profes incluso el director. Que
suertuda esa Latifa. Encontró su media naranaja. Ella camina. Ella y su Romeo al otro lado de la
calle. Nos quedamos con la boca abierta
Y el director
Cabizbajo. Parece que se da por vencido ante tanta evidencia o que busca algo que decir. Ahí. Una
huella dejada por Jonathan. A continuación levanta los ojos llenos de cólera y grita “Agarren al
ladrón”
Agarren al ladrón
Y yo me pregunto: Y mis ilusiones. Y mis sueños de niño. Mis clases mis tareas mi lunch. Y mi
consciencia mi concepción del mundo y mis perspectivas del futuro. Y mi vida. Quince años
aprendiendo cosas del mundo y hoy mi corazón se retuerce. Jonathan ama a Latifa. Y yo qué
Se vuelan
Jonathan y Latifa parecen tomar impulso. Pasan frente a nosotros nos ven como si ya no estuviéramos
en su mundo. Toman impulso ya sabes como los pájaros que baten sus alas antes de levantar el vuelo o
el del salto triple que recorre la pista a grandes zancadas. Jonathan y Latifa es un salto hacia adelante
diríamos que nos roban algo un poco de complicidad y las horas de la noche que uno pasa perdiendo el
tiempo con los amigos. Jonathan y Latifa juegan con fuego se enamoraron sin pedir permiso eso crea
una conmoción pasado el momento de estupor al verlos elevarse nos vemos unos a otros nos sentimos
estúpidos de tener aún los pies sobre la tierra pero ahora completamente solos con este calor que se nos
cuela bajo la piel el sol que nos quema la cabeza y este pedazo de tierra batida y rebatida que ya no se
acuerda de haber sido pasto. No me gusta el regreso a clases
ABRASADOS – HUMBERTO PÉREZ MORTERA 6
S’EMBRASENT – LUC TARTAR
Se atragantan
Para
Los incendios del amor es una mierda. A veces le doy de cachetadas a la tele. Mi madre dice “Para es
hora de Los incendios del amor”. Los incendios del amor es una mierda. Mi madre dice “Eso hace
soportable la vida”. Me río. “¿Qué vida? ¿La tuya?” Cachetada. Ella dice “¿Y tú que quieres hacer
con tu vida?” Yo digo “Quiero hacer el amor”. Segunda cachetada. Ella se suelta a llorar. Dice “Tú
no sabes lo que es el amor”. Mamá. Como se ve que nunca te has cruzado con Jonathan en los pasillos
Se encierra
Ábrame. No azotes la puerta. Levántate cuando te dirijas a mí. Mírate. Pareces un espantapájaros.
Desapareces en los pliegues de tu pantalón. Tela que chorrea a lo largo de las piernas. Me pregunto
como sigues de pie. Es más, me pregunto si todavía tienes piernas. ¿A dónde se fue tu cuerpo? Dónde
estás
Estoy en el metro. Cómo es pendeja la gente que habla por teléfono y dice “Estoy en el metro”.
“Estoy sentado. Las puertas se cierran. Arrancamos”. “Nos movemos”. Diríamos que están narrando
su vida. Hacen ruido. Buscan sentido. “Estoy en el metro”. Y yo escucho “En el trajín de todos los
días”. En el siempre lo mismo. En el día a día. Y no salgo. Arrancamos pero cómo es lento. Mi vida
ABRASADOS – HUMBERTO PÉREZ MORTERA 7
S’EMBRASENT – LUC TARTAR
está encarrilada. No hay lugar para sorpresas. Y me aburro. Auxilio. Estoy en el metro. Mi padre es
un rottweiler y mi madre revisa mi correo. Los dos me atosigan. Me caen encima. Te lo juro un día
voy a saltar mientras esté en marcha
Ábreme
Es normal que en la casa escuche gritar. Eso me arrulla. Me duerme. Me veo como un domador de
fieras llevando un traje bien acolchonado
Mi madre me brinca encima. La mando de regreso a su cocina y azoto la puerta. Vagón de los
fugitivos. Latifa está junto a mí. Cierra la cortina. Y que no nos vengan a buscar a la estación
Sangre fría
Yo la primera vez pensé que echaba a perder mi vida. Esta sangre entre las piernas. Mi infancia que se
escurre
Un borrador
Yo la primera vez todo resbala. Nuestros cuerpos el uno contra el otro los cierres del pantalón él me
agarra yo lo aprieto pero todo resbala. Tengo la sensación de estar sobre una mesa jabonosa resbalo
resbalo ahí estamos a los pies de la cama no hay nada a lo que me pueda agarrar tampoco a él que ya no
se aguanta se viene muy rápido se vuelve a vestir se va cierra la puerta y ya no hay nadie que me
ABRASADOS – HUMBERTO PÉREZ MORTERA 8
S’EMBRASENT – LUC TARTAR
acaricie me quedo sola como en el fondo de un hoyo tengo frío intento levantarme me resbalo me caigo
me lastimo y mierda acabo de echar a perder mi primera vez
Y tú
Yo lo hice pero nadie nunca lo sabrá. Ni aquellas que hacen castillos en el aire mientras me comparan
con Vivi Leski la ninfómana del primero B ni aquellos que se inventan películas y que hablan de lo
sexy de nuestras tangas. Yo lo hice pero nada cambió. El mundo sigue siendo el mundo y Jonathan
sigue siendo Jonathan. Veo a mi madre que ve la televisión. Ardo al tomar sus senos en mis manos.
Mamá. Tus senos... Se consumen en mis manos. Silencio bebé. No es nada. Son Los Incendios del
amor
Se enmarañan
Lo hiciste o no lo hiciste
Fuck déjame
Qué fuck eso puede no significar nada o cualquier cosa fuck. No es una grosería es sólo una expresión
que nadie entiende. Algo que adquiere sentido en el interior de la boca y
Qué Latifa
Mira mi piel Youssef. Tercer grado. Fue un flechazo. Tu hermana y yo nos encendiamos
inmediatamente
Centinela
Soy una sobreviviente de la canícula. Ochenta y tantos años bien vividos. Vivo enfrente de la prepa.
Desde aquí arriba desde mi cuarto veo el patio en picada. Imagínense si no he visto besos. Pero como
ese... Como todos los días estoy en la silla detrás de las cortinas espiando las idas y venidas. Me
encanta observar lo que pasa en el patio. Los grupos que se hacen se deshacen los aislados los
intercambios de todos tipos. Si hablamos de contrabando yo soy una experta. Y también abastezco.
Abajo en la calle sobre el alfeizar de la ventana al alcance de la mano coloqué un plato lleno de
preservativos donde está escrito “Tome”. Y funciona. Cuando el plato está vacío tocan a mi ventana
como si quisieran decir “Ya no hay”. Así que abastezco. Compró por mayoreo en la farmacia y lleno
mi plato. Un distribuidor hogareño de preservativos sobre el filo de mi ventana. ¿Por qué no? Nunca
me gustaron los geranios. Mucho menos los canarios. El mundo sufre. Así que se puede asomar a mi
ventana. Además me gusta ser una sobreviviente de la soledad sé lo que es el despertar de los sentidos.
Ochenta años. Imagínense cuantos no he visto. Pero besos como ese... Sus almas entrelazadas
bailando sobre una cuerda floja los cuerpos sacudidos por un deseo violento que rompe desarma y
despedaza. Dos seres en equilibrio inestable a la orilla del mundo. Un flechazo. Frente a eso nos
quedamos sin aire. Olvidamos respirar. Comidos por la emoción. En el patio chicas y chicos no creen
lo que ven y se amontonan alrededor de los enamorados como si quisieran tocar con el dedo ese Amor
con A mayúscula que pone en riesgo su día a día y hace que los sueños se vuelvan dolorosos. Es un
shock. Desde mi observatorio escucho los gritos de auxilio. Allá abajo veo caer los cuerpos uno tras
otro. Chicas y chicos abatidos por un amor arrebatador que echa chispas. Dos seres se besan y es el
mundo el que tiembla. Que historia. Como diría la canción... (Ella canta) “Ils se sont aimés dans un
grand champ de blé.”. ¿Cómo se llamaba
Michel Fugain
¡Ve ese culo y esas chichis! ¡Está rebuena esa Vivi Leski!
Según yo mi madre no dejaría que mi hermana llevara ese tipo de ropa. Una joven que deja ver sus
calzones es una chica fácil porque deja ver sus calzones
¿Y tú que vas a saber? Una cosa es el exterior y otra el interior. No porque ella deje ver su tanga lo
que haya debajo ya va a estar maduro. ¿Entiendes lo que quiero decir?
Tengo escalofríos. Es más fuerte que yo. Dentro de mi cuarto babeo sobre mi almohada
Déjame
Okey me callo pero voltea. Ve lo que veo: Jonathan y Latifa. Atraviesan la salida de la prepa.
Caminan dando largos pasos. Hacia el frente. Se escapan. Es una fuga quizá un secuestro se van
digamos que al pasar nos pisan nos avientan el mundo a la cara y desaparecen en un abrir y cerrar de
ojos se van a vivir de amor y de aire a la aventura a un país lleno de sol sin dejar siquiera su dirección
sumiendo a sus familias en un gran desamparo y dejando detrás de ellos un aroma de felicidad que da
ganas de vomitar. Guácala. No me gustan los enamorados. (Grita agarrándose la entrepierna)
Latifa regresa yo también tengo unos y más grandes
Puñetazo
¿Estás enfermo? Qué te pasa
Es mi hermana
Se angustia
Se ennecia
Mi sueño es una pendejada: se parece a la vida de cualquiera. Una casa un coche un hombre bueno y
amable que traiga dinero. A los doce años ya era estúpido pero por lo menos más emocionante: soñaba
con el príncipe azul tú sabes de que tipo. Un chavo rubio y musculoso un modelo que sonríe con todos
los dientes pero de pronto pum no supe que pasó mi sueño se desinfló. De chavo hiperguapo pasé a un
hombre bueno y amable que trae dinero a la casa. Es para llorar. No quiero ese sueño. Y sin embargo
no puedo evitarlo. Cada noche o casi sueño con el hombre bueno y amable que lleva dinero a la casa.
Incluso a veces hasta transpiro por eso y por la mañana recuerdo ciertos detalles que se me quedan
grabados en la cabeza del tipo el número de la placa del coche o el color del sofá. No quiero ese sueño.
Mi sueño es una estupidez. Mi sueño es una pesadilla.
Sin red
Por la mañana me despierto me levanto no puedo tragar nada. En el camino a la prepa vomito lo que
no pude tragar. Mi estómago se revuelve. Angélica me dice “¿Te lo quieres quedar?”
Estás embarazada
Lo amo
Sin voz
Veo a los que no duermen los que se desmayan los que se cortan las venas. Veo a los que ya no hablan
que se deprimen que adelgazan. Veo a los que se tragan pastillas que vomitan a su familia o que
denuncian a su padre. Veo de todos colores y sabores. Soy la enfermera de la escuela. Tengo días
difíciles. Mi enfermería no se vacía y entre dos llamadas telefónicas para intentar unir nuevamente
relaciones rotas - “Buenas tardes señora su hija...”- observo por la ventana que da sobre el patio de la
prepa. Jonathan besa a Latifa. Qué locura. Es un temblor que hace explotar la escala de Richter.
Corro hacia los heridos y los tomo en mis brazos. Chicas y chicos paniqueados como después de un
gran incendio. “No le digas a mi madre que me quemé los ojos viéndolos besarse.” “No digas que tuve
un ataque de celos y que me mordí la lengua”. “No digas que los seguí por la calle.” “No digas que
saqué mi navaja”. Dios mío qué hacer con todas estas palabras
Se entrenan
Maricón
Montes y valles hasta el infinito una piel delicada y salvaje que te absorbe las manos pasadizos secretos
hacia la felicidad y cabellos que aún mucho después del acto ondulan sobre tu cuerpo. Una chica es un
sol. Un corazón explotando y rayos fulgurantes que atraviesan tu cielo. Flamas que crepitan por todos
lados y bajan hacia ti en cascada. Una joven cuando se te mete debajo de la piel primero tienes que
dejar tus maletas y protegerte los ojos. Escucha. Respira. Es oxígeno puro y oro en tus manos. Flotas.
Abres los ojos y recibes la luz. Después sólo hay que hablar. A una joven también hay que hablarle.
Las palabras son caricias.
Cállate y golpea
Solloza
Cancelé mi suscripción a “Chicas de hoy”. Me quedo pasmada cuando veo las modelos que salen en
todas las páginas. En serio que me gustaría colgar sus pósters sobre mi cama y pedir todo el
ABRASADOS – HUMBERTO PÉREZ MORTERA 1
4
S’EMBRASENT – LUC TARTAR
maquillaje posible. Nunca puedo parecerme a ellas. Después lloro toda la noche me sofoco tengo la
impresión que los pósters me caen encima me aplastan me envuelven como a un tamal. Por la mañana
me veo en el espejo. Vivi eres una torta de tamal. En serio. Te tropiezas con la alfombra. Qué
persona tan apática. Reacciona. En la prepa me río como una idiota pero nadie es tonto. En mi voz se
escuchan lágrimas. Y hay que ver como resuenan por los pasillos. Youssef. Qué guapo. Como si
fuera un leopardo que se acercara a gran velocidad. Ay Vivi haz algo no dejes que te pisen
Se embriagan
Qué pasa
Mi primera arruga. Un surco que me atraviesa de los pies a la cabeza y que me parte en dos. Mi piel
que se abre y deja un camino. El calor me invade. Ahí está. El tiempo se inscribe en mí y de golpe
crezco. Ve. Mi piel se agrieta. Muy pronto yo también seré un pergamino. Llévame. A nuestro
alrededor el aire es triste y empieza a faltar. Abandonemos los fregaderos las cocinas las casas las
prepas todos esos lugares que organizan la vida y en los cuáles nos ahogamos. Escapemos de los
hombres cómodamente sentados que nutren su frustración las amas de casa que empujan su carrito de
compras y todos aquellos que ya no reclaman porque ya pasó su momento. Yo, yo abrazo la vida. Oh
Jonathan. Algo arde en mí. Me cruzo contigo en el patio y ahora algo arde en mí
ABRASADOS – HUMBERTO PÉREZ MORTERA 1
5
S’EMBRASENT – LUC TARTAR
Yo que esperaba una tele-vida ahora me encuentro con un corsario que navega en alta mar. Había
pensado que estaba destinada a uno más de esos incendios del amor.
¿Miedo? Este plato está lleno de preservativos. Si eso no quiere decir vida
Sanguíneo
“Señor Leski su hija está embarazada”. Vivi. Ella que aún juega con muñecas. Ella se desmaya de
camino a la prepa y los análisis de sangre nos dicen que está embarazada. Vivi. Mi tontita. En algún
momento me perdí un capítulo. Vivi. Embarazada. Ella me deshonra. Yo la desheredo. Maldición me
perdí la parte donde yo hacía el papel del bueno. El padre perfecto que le habla de la vida a su hija para
evitarle que haga alguna pendejada. En lugar de eso no encontré las palabras y ahora estamos
atrapados en un espectáculo de segunda en el cuál yo hago el papel del pendejo que se la pasa diciendo
“Vivi. Preñada”. Yo que le prohibí el lápiz labial me entero que está “preñada”. (hacia el público,
avergonzado) “Lleva una tanga”. “Una jugarreta del destino”. Ese es el nombre de la telenovela. Qué
vergüenza. “Papá lo amo”. “Entonces no tiene caso que regreses a casa”. Maldición. ¿Por qué dije
eso?
Abrazados
Un beso como ese es un espacio de libertad al cuál el mundo entero se precipita. Las chicas los chicos
los profes la enfermera e incluso el director. Ni siquiera yo me quedo atrás. Bajo los escalones de a
ABRASADOS – HUMBERTO PÉREZ MORTERA 1
6
S’EMBRASENT – LUC TARTAR
dos atravieso la puerta de mi casa y salgo a la calle con la maleta en la mano. Estoy lista para irme para
fugarme con los enamorados para caminar por las calles principales y hablar cada noche en los pueblos
de su flechazo de su amor naciente. Ofrezco mis servicios. Ochenta y tantos años. Con experiencia y
recuerdos hasta decir basta. También puedo preparar crepas o cantar canciones. (Ella canta.) “C’est
un beau roman. C’est une Belle histoire.” Muy bien. Todos tuvimos la misma idea. La calle está
inundada de gente. Una multitud que se junta en silencio y que se dirige a mi casa. Los conozco a
todos. Dorothée Vivi Youssef el director y los padres madre angustiada padre colérico o al revés y
también ausentes o abrumados o haciendo lo mejor posible a fin de cuentas padres. Juntos hacemos un
círculo. Frente a nosotros dos jóvenes asomados a la ventana. El tiempo en pausa y todos manteniendo
el equilibrio. A la orilla del mundo. La multitud es compacta y nerviosa. Me parece ver brillar una
hoja de metal. Una chispa podría encender la mecha. Y todo esto podría degenerar en escena de
pánico con ataque de histeria: “Jonathaaaannn.” Por un breve instante el mundo vacila. Nos vemos
como si nos fuéramos a decir “¿Quién se movió? Y después todo se mueve. Lentamente Jonathan y
Latifa se separan de la multitud. Se suben al alfeizar de la ventana. Los ojos los siguen. No se pierden
ni un detalle. Bocanadas de calor nos ahogan y nosotros nos humedecemos la frente. Jonathan y Latifa
mantienen el equilibrio. Parecen tan frágiles. Parece que se van a caer. Pero no. Se besan. Sobre el
alfeízar de mi ventana. Bajo la luz del sol. Un sol enceguecedor que se transforma en una bola de
fuego y los atraviesa de par en par. Sus cuerpos abrazados sacudidos por un deseo que rompe y
deshace. Se escucha con claridad una página que se rasga. El vidrio vuela en pedazos. Los amantes
entran. Por la ventana. Como si pasaran al otro lado del espejo. Y desaparecen. Engullidos por mi
casa.
Vimos la escena sin protegernos los ojos y ahora ya tenemos 20 años más
La mirada ojerosa
ABRASADOS – HUMBERTO PÉREZ MORTERA 1
7
S’EMBRASENT – LUC TARTAR
No fuimos parte del viaje pero a partir de ahora podremos dar testimonio
Y describir el fenómeno
E incendia los corazones de los amantes hasta hacerlos desaparecer de los ojos del mundo
Solos