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UNIVERSIDAD PERUANA LOS ANDES

FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIAS POLITICAS


ESCUELA ACADEMICA PROFESIONAL DE DERECHO

MONOGRAFÍA PARA EL CURSO DE TEORIA GENERAL DEL


PROCESO:

PRESENTADO POR:

 BARZOLA HUANUCO, Urpy

 GASPAR REYES, Ecson

 SUDARIO VILCHEZ, Jean

SEMESTRE Y SECCIÓN: III-B1

2016
A nuestros padres por el apoyo
incondicional q nos brinda cada
uno de los días con el fin de poder
formarnos como futuros
abogados justos.

2
AGRADECIMIENTO

A la Universidad Peruana Los Andes “Facultad de Derecho y Ciencias Políticas”,

por permitirnos seguir nuestro anhelado sueño de ser futuros profesionales en el

ámbito del Derecho.

A la señorita bibliotecaria del Colegio de Abogados de Junín, por las facilidades

brindadas para obtener los libros que nos sirvieron de apoyo en la redacción del

presente trabajo monográfico.

A las personas que acotaron con sus opiniones para la culminación del presente.

3
OBJETIVOS

OBJETIVO GENERAL:

* Explicar y diferenciar los proceso de conocimiento, abreviado y sumarísimo,


describiendo las diversas instituciones que traen consigo, para la elaboración de
un cuadro comparativo.

OBJETIVOS ESPECIFICOS:

4.1.- Recordar los aspectos generales de la Teoría del Proceso en general, que
constituyen las bases teóricas del aprendizaje del Derecho Procesal Civil.

4.2.- Recordar la importancia Debido Proceso y Tutela Jurisdiccional Efectiva en


los procesos de Conocimiento Abreviado y Sumarísimo.

4.3.- Explicar el proceso de conocimiento, describiendo sus instituciones


procesales para la elaboración de un cuadro sinóptico.

4.3.- Explicar el proceso abreviado, describiendo sus instituciones procesales


para la elaboración de un cuadro sinóptico.

4.4.- Explicar el proceso sumarísimo, describiendo sus instituciones procesales


para la elaboración de un cuadro sinóptico.

4
INTRODUCCIÓN

La necesidad del ser humano y de la sociedad en general es lo que ha logrado

que se tenga una teoría acerca del Proceso, así mismo un Derecho Procesal ya

que cada día la sociedad evoluciona a pasos agigantados, es por eso, que se

necesita tener cuerpos legales e instrumentos para poder llevar a cabo una

buena administración e impartición de justicia.

El presente trabajo monográfico consta de tres capítulos:

El Primer capítulo hace referencia a la historia y el inicio de La teoría general de

proceso, parte muy importante del derecho ya que está realizando estudios

técnicos jurídicos que tienen una estrecha relación con el derecho, en tal sentido

general es el cómo funciona la administración justicia en nuestro país.

El segundo capítulo, trata sobre los procesos no contenciosos que vienen a ser

los Derechos objetivos, con reglamentaciones y requisitos, siendo aquellos en

los que se ventilan asuntos en que no existe, al menos en teoría, conflicto de

intereses o litigio, vale decir, no hay sujetos que asuman la calidad, propiamente

dicha, de demandante y demandado.

El tercer capítulo, nos da a conocer los procesos contenciosos, se identifica

bastante con el Juicio Ordinario. Su estudio tiene una especial importancia por

ser el modelo o patrón de todos los demás juicios y procedimientos establecidos

en nuestra legislación.

5
INDICE

DEDICATORIA

AGRADECIMIENTO

OBJETIVOS

INTRODUCCIÓN

INDICE

CAPITULO I

1. EL ORIGEN DEL PROCESO .......................................................................... 10

2. PRINCIPIOS GENERALES DEL PROCESO

2.1. DEFINICIÓN ........................................................................................ 12

2.2. CLASES DE PRINCIPIOS ................................................................... 13

2.2.1. PRINCIPIOS DEL PROCESO .................................................. 13

2.2.2. PRINCIPIO DEL PROCEDIMIENTO ........................................ 15

3. LA NORMA PROCESAL

3.1. DEFINICIÓN ............................................................................................. 18

3.2. NATURALEZA DE LA NORMA PROCESAL ............................................. 18

3.3. APLICACIÓN DE LA NORMA PROCESAL EN EL TIEMPO ..................... 19

3.3.1. APLICACIÓN INMEDIATA DE LA NORMA .................................. 20

3.3.2. APLICACIÓN ULTRAACTIVA DE LA NORMA ............................. 20

3.3.3. APLICACIÓN RETROACTIVA DE LA NORMA ............................ 21

3.3.4. APLICACIÓN DIFERIDA DE LA NORMA ..................................... 22

6
CAPITULO II

CLASIFIACIÓN DE LOS PROCESOS

1. PROCESOS CONTENCIOSOS

1.1. ASPECTOS GENERALES ........................................................................ 24

1.2. CARACTERISTICAS ................................................................................ 24

1.3. COMPETENCIA ........................................................................................ 25

1.4. REQUISITOS Y ANEXOS DE LA SOLICITUD .......................................... 26

1.5. INADMISIBILADAD O IMPROCEDENCIA ................................................ 26

1.6. CONTRADICCIÓN .................................................................................... 26

1.7. PROCEDENCIA DE LA APELACIÓN ....................................................... 27

1.8. TRAMITE DE LA APELACIÓN CON EFECTO SUSPENSIVO .................. 27

1.9. TRAMITE DE APELACIÓN SIN EFECTO SUSPENSIVO ......................... 27

1.10. INTERVENCIÓN DEL MINISTERIO PUBLICO ...................................... 28

1.11. ASUNTOS QUE SE TRAMITAN COMO PROCESO NO CONTENCIOSO

A. Inventario ......................................................................................... 28

B. Administración judicial de bienes ..................................................... 29

C. Adopción .......................................................................................... 30

D. Autorización para disponer derechos de incapaces ......................... 32

E. Declaración de desaparición, ausencia o muerte presunta .............. 32

F. Patrimonio Familiar .......................................................................... 36

G. Ofrecimiento de pago y consignación............................................... 40

H. Inscripción y rectificación prueba ..................................................... 43

I. Sucesión intestada ........................................................................... 45

CAPITULO III

PROCESOS CONTENCIOSOS

1. EL PROCESO DE CONOCIMIENTO

1.1. ANTECEDENTES ..................................................................................... 46

7
1.2. CONCEPTO DEL RPOCESO DE CONOCIMIENTO ................................ 47

1.3. CARACTERISTICAS DEL PROCESO DE CONOCIMIENTO ................... 49

1.4. DIFERENCIAS DEL PROCESO DE CONOCIMIENTO CON LOS PROCESOS

PREVISTOS EN EL CODIGO PROCESAL CIVIL ..................................... 50

1.5. PRETENSIONES QUE SE TRAMITAN EN EL PROCESO DE

CONOCIMIENTO ...................................................................................... 52

1.6. ESTRUCTURA DEL PROCESO DE CONOCIMIENTO SEGÚN SUS PLAZOS

................................................................................................................. 54

2. PROCESO ABREVIADO

2.1. ANTECEDENTES ..................................................................................... 55

2.2. CONCEPTO ............................................................................................. 56

2.3. CARACTERISTICAS ................................................................................ 58

2.4. PRETENSIONES ...................................................................................... 59

3. EL PROCESO SUMARISIMO

3.1. CONCEPTO ............................................................................................. 59

3.2. CARACTERISTICAS DEL PROCESO SUMARISIMO .............................. 61

3.3. PRETENSIONES QUE SE TRAMITAN EN EL PROCESO SUMARISIMO

................................................................................................................. 63

4. PROCESO DE EJECUCIÓN............................................................................ 63

4.1. FUNDAMENTO DEL PROCESO DE EJECUCIÓN ................................... 65

4.2. CARACTERISTICAS DEL PROCESO DE EJECUCIÓN ........................... 66

4.3. LOS TITULOS EJECUTIVOS REGULADOS EN EL CODIGO PROCESAL

CIVIL ......................................................................................................... 67

4.4. LEGITIMACIÓN EN EL PROCESO DE EJECUCIÓN ............................... 69

4.5. LA COMPETENCIA EN EL PROCESO DE EJECUCIÓN ......................... 70

4.6. LA CONTRADICCIÓN EN EL PROCESO DE EJECUCIÓN ..................... 72

5. PROCESO CAUTELAR

5.1. ASPECTOS GENERALES ........................................................................ 75

5.2. CLAES DE MEDIDAS CAUTELARES....................................................... 75

8
5.3. FINALIDAD DE LA MEDIDA CAUTELAR ................................................. 76

5.4. IMPORTANCIA DE LA MEDIDA CAUTELAR ........................................... 77

5.5. CARACTERISTICAS DE LAS MEDIDAS CAUTELARES ......................... 78

5.6. REQUISITOS DE LA SOLICITUD CAUTELAR ......................................... 79

5.7. CONTENIDO DE LA DECISIÓN CAUTELAR ........................................... 82

5.8. LA CONTRACAUTELA ............................................................................. 84

5.9. VARIACIÓN DE LA MEDIDA CAUTELAR ................................................ 86

CONCLUSIONES

SUGERENCIAS

BIBLIOGRAFÍA

9
CAPITULO I

1. EL ORIGEN DEL PROCESO

El derecho romano es base fundamental, es el alma y la vida de los procesos


civiles de la actualidad, es decir la historia de los procesos civiles modernos
se resumen en un lento retorno a la idea romana. Luban sostiene que el más
mínimo estudio de cualquier código moderno, tiene como origen el derecho
romano, principalmente en el periodo clásico ya que compone la base del
proceso civil moderno entonces al entender esta idea nos damos cuenta que
el “PROCESO” no es algo nuevo en nuestra actual sociedad, por el contrario
es un conjunto de reglas y procedimientos que se originan en el derecho
romano, pero la diferencia es que en el derecho romano se hablaba de forma
general, es decir que no había una enseñanza particularizada de los procesos
como hoy se tiene. Lo cierto es que el derecho procesal era el derecho romano
puesto en práctica en sus instituciones, pese a las transformaciones que sufre
con la influencia de la iglesia y la religión, que cambia las reglas de la defensa
técnica y asigna mayores poderes y actividades al juez en el proceso.

Roma se dividió en tres periodos que comprende su historia política, cada


periodo corresponde a un modelo procesal diferente como consecuencia de
la transformación de sus instituciones. La monarquía se caracterizó por sus
formas orales, solemnes y gestos simbólicos que deben pronunciarse y
cumplirse con estricto respeto a los términos de la ley mediante los cuales el
actor expone el conflicto ante el magistrado y en presencia del demandado. A

10
través del trueque de fórmulas orales aprobadas por el magistrado quedaba
tratada la Litis en presencia de testigos. Se fijaban los límites y el estado de
cuestión litigiosa que se sometería a la decisión del juez, y la forma en que
debía de dictar sentencia según el resultado de la prueba. Esta primera parte
constituía la Litis contestatio, seguía después la instrucción del juicio por el
juez ante quien los testigos repetían lo que expusiera el magistrado, y luego
de producida la prueba dictaba la sentencia. La republica también trajo
cambios en el sistema que existía hasta entonces, las legis actiones eran
extremadamente solemnes y la desconfianza en los testigos estaba siempre
latente, por lo cual se promulgo la ley Aebulia. Luego de oír a las partes el
magistrado entregaba al actor una instrucción escrita o formula médiate la cual
designaba al juez y fijaba los elementos que debían ser tenidos en cuenta, por
este al dictar sentencia que consisten en los hechos y el derecho invocados
por el actor, el objetivo litigio y las defensas opuestas por el demandado.
Consta la fórmula de cuatro partes, la demostración que contenía la
exposición de los hechos denunciados por los litigantes, la intención, que
resumía lo pretendido por el demandante, y la condena la facultad que daba
el juez de absolver o condenar de acuerdo al resultado de la prueba, la
adjudicación que permitía al juez atribuir a algunas de las partes la propiedad
de la cosa litigiosa. El sistema formulario que después fue remplazado por el
sistema extraordinario, que impusiera Diocleciano. Desaparece la división del
proceso en dos tiempos, para comenzar su desarrollo ante solo un
magistrado. La demanda se presenta por escrito, el demandado es
oficialmente citado o comparecer y debe contestar la pretensión por escrito,
lo cual implica un debilitamiento de los principios de oralidad e inmediación.
Además al desaparecer la necesidad de la presencia del accionado en el
proceso, es posible la continuación del mismo en rebeldía, adoptándose
también la imposición de costas al dictar sentencia, la que podía ser
impugnada.

En cambio el fenómeno era desigual en los germanos, en la edad media el


sistema judicial era diametralmente distinto al racional que se elaboraba
desde las normas del imperio, porque dominaban juicios divinos e
invocaciones de aspecto místico, no habían procedimientos ni cuestiones sino
enjuiciamientos comunes para lo privado y lo público, lo civil o lo penal. El
trámite es oral y público completamente ocupado de ritos y solemnidades
11
muchos de ellos de carácter religioso, además contra la sentencia no había
recursos ya que supuestamente el que dictaminaba la sentencia es un ser
divino, un ser superior, era como irse en contra de dios. El proceso germánico
se dividía en dos etapas una para las afirmaciones y la otra para la prueba.
La primera tenía lugar con la exposición del demandante y la invitación al
demandado para que exponga su defensa, la palabra del actor generalmente
hacia fe si su honorabilidad estaba abonada por testigos, luego de ello se
dictaba una sentencia “interlocutoria” que se limitaba a declarar el derecho e
indicar la prueba. Esta etapa es una invocación a un juicio de divinidad, que
se caracteriza fundamentalmente con el juramento de purificación por el cual
miembros de la misma tribu declaran sobre la credibilidad que merece el
demandado, pero el principal medio de prueba era el juicio de Dios u ordalías,
que consistía en pruebas sagradas, como las del agua caliente, del fuego, del
hierro candente. El procedimiento era público y oral, extremadamente
formalista, tenía lugar ante las asambleas populares, en las cuales residía el
poder jurisdiccional, limitándose la función del juez a dirigir el debate y a
proclamar la sentencia que es dictada a propuesta de una comisión de
miembros peritos.

Al pasar el tiempo los romanos intervinieron en la administración de justicia de


los germanos dando así grandes cambios, la innovación más importante se
alcanza en la prueba que se toma de manera racional abandonando las
deidades, otro gran aporte fueron los testigos ellos eran o son los medios de
verificación y convencimiento, ambas aportaciones siguen siendo vigentes a
lo largo de los años ya que hasta hoy en día usamos ambas opciones. En
definitiva el derecho procesal como ciencia admite tener raíces en el
desglosamiento del derecho romano, que hace la doctrina germana que
enaltece la investigación y amplia horizontes.

2. PRINCIPIOS GENERALES DEL PROCESO


2.1. DEFINICIÓN

Los principios procesales son aquellas condiciones, orientaciones y,


fundamentos que sirven de base para el desarrollo del proceso en su
conjunto; pero a la vez, cuando son incorporados en un código de
manera taxativa ponen en manifiesto el sistema procesal que adopta ya
sea publicística o privatistica. Se dice también, que son normas

12
universales, que regulan la relación procesal desde el inicio del ejercicio
del derecho de acción hasta el fin del proceso.

2.2. CLASES DE PRINCIPIOS

Se distingue los principios del proceso y los principios del procedimiento.


Refiere: los primeros son aquellos indispensables para la existencia de
un proceso, sin ellos esto carecería de elementos esenciales para ser
admitido como tal. Los segundos, en cambio, son lo que caracterizan e
identifican la presencia de un determinado sistema procesal.

2.2.1. PRINCIPIOS DEL PROCESO


A. Principio de la exclusividad y obligatoriedad de la función
jurisdiccional.

La función de resolver conflictos de intereses intersubjetivos o


incertidumbres jurídicas le corresponde al Estado a través de
sus órganos especializados, por eso tiene la exclusividad de la
función jurisdiccional. En cuanto a la obligatoriedad, significa
que si una persona es demandada ante un órgano
jurisdiccional debe someterse al proceso y cuando este acabe,
estará obligado a cumplir con la decisión que se emita en el
proceso1.

B. Principio de la independencia de los órganos jurisdiccionales

La actividad jurisdiccional del juez no debe ser afectada por


ningún otro tipo de poder o elemento extraño que altere su
voluntad al momento de decidir. El juez debe ser soberano en
su decisión para resolver un caso concreto.

C. Imparcialidad

El juez no puede ser parte en el proceso que se va resolver,


está prohibido de resolver cualquier caso concreto que tenga
relación con quienes participan en él. Esta imparcialidad

1
Monroy Gálvez; Juan. Introducción al Proceso Civil. Pág. 81.

13
alcanza a las partes interesadas en el proceso judicial ya que
si hacen lo contrario son punibles los actos que realiza.

D. Contradicción

Consiste en que todos los actos del proceso deben ser


conocidos por las partes ya que conociéndolos en el momento
oportuno puede estar de acuerdo o no y hacer valer sus
derechos. Este principio está ligado al objeto de la notificación
procesal ya que a través de esta las partes tomaran
conocimiento de los actos realizados en el proceso.

E. Publicidad

La actividad de la función jurisdiccional debe ser difundida y


no ser reservada, esto constituye una garantía de la eficacia
de los actos procesales, por eso se deben realizar en
escenarios que permitan la presencia de quien quiera
conocerlos.

F. Obligatoriedad de los procedimientos establecidos en la ley

Las normas procesales son de orden público con algunas


excepciones, por eso son de obligatorio cumplimiento o
imperativas. Las partes no pueden convenir una tramitación
distinta a la prevista en la ley procesal tienen que adecuarse
a lo predeterminado.

G. Motivación de las resoluciones judiciales

Los jueces están obligados a fundamentar sus decisiones


salvo aquellas que son simplemente de impulso procesal.
Esta exigencia también se impone a las otras partes del
proceso ya que deben sustentar todas las peticiones que
formule o las absoluciones que realice a los planteamientos
de la otra parte, así mismo deberán fundamentar los medios
impugnatorios que interponga.

H. Cosa juzgada

14
La decisión final que emite un juez en la sentencia,
es decir en un pronunciamiento sobre fondo y cuando ya
no exista ningún medio impugnatorio que cuestione dicha
sentencia o que no haya sido impugnada por la parte
favorecida adquiere la calidad de cosa juzgada, es decir que
ninguna autoridad puede modificar o alterar dicha sentencia
quedando esta inmutable por el principio de seguridad
jurídica.

2.2.2. PRINCIPIOS DEL PROCEDIMIENTO


A. Principios que orientan el Sistema Privatistico.
a) Iniciativa de Parte

Este principio significa que toda persona distinta del juez


pude solicitar tutela jurídica haciendo uso de su derecho de
acción afirmando que tiene interés y legitimidad para obrar,
es decir que su conflicto no tiene otra solución que no sea la
intervención del órgano jurisdiccional.

b) Defensa Privada

Es la actitud procesal que asume el demandado en


respuesta a la pretensión intentada ante él por el
demandante, es decir ejercerá su derecho de defensa.

c) Congruencia

Significa que el juez no puede darle a una parte más de lo


que esta pide. El juez civil no tiene facultad para afectar la
declaración de voluntad del demandante y concederle más
de lo que este ha pretendido en su demanda.

d) Impugnación Privada

Consiste en la prohibición al juez de que pida un nuevo


examen de la resolución que ha expedido es decir de variar
su decisión. El nuevo examen de un acto procesal se hace
utilizando los medios impugnatorios que están al servicio de
las partes o de los terceros legitimados que son los únicos
titulares del derecho de impugnar un acto procesal.

15
B. Principios que orientan el sistema publicístico
a) Dirección Judicial del Proceso

Significa que el juez tiene autoridad para hacer efectivo el


derecho objetivo y establecer la paz social en justicia
limitando los excesos del sistema privatistico por el cual las
partes tienen mayor dinamismo en el proceso.

b) Impulso Oficioso

Consiste en la facultad que se le concede al juez para


conducir y hacer avanzar el proceso, sin la intervención de
las partes, a fin de lograr la finalidad del proceso. Este
principio busca que el juez no sea un simple espectador de
los actos de las partes, sino que pueda intervenir en el
desarrollo del proceso para conducirlo a su fin.

c) Inmediación

Consiste en que el juez debe estar permanentemente


vinculado con los sujetos y elementos que intervienen en el
proceso, recibiendo directamente las alegaciones de las
partes y las aportaciones probatorias, a fin de que pueda
tomar conocimiento de todo el proceso y pueda interpretar
los hechos aplicando la norma pertinente.

d) Concentración

Consiste en que el juez debe regular y limitar la realización


de actos procesales como promoviendo su ejecución en
las audiencias correspondientes y en el menor número
de actos.

e) Buena fe y de lealtad procesales

Consiste en el comportamiento ético de las que participan en


un proceso sancionando las conductas que contravienen a
los valores éticos trascendentes, como la lealtad, la
veracidad y la buena fe. La lealtad procesal es consecuencia
de la buena fe y excluye las trampas judiciales, la prueba
deformada y las inmoralidades de todo hombre.
16
f) Economía Procesal y Celeridad Procesal

Consiste en el ahorro de tiempo de tiempo, gasto y esfuerzo.


En cuanto al tiempo se refiere a que no se debe prolongar
innecesariamente el cumplimiento de los actos; la economía
de gasto es la necesidad de que los costos del proceso no
impidan que las partes hagan efectivo todos sus derechos;
y, en cuanto a la economía de esfuerzo está referida a la
posibilidad de concretar los fines del proceso evitando la
realización de actos innecesarios como tramites superfluos
o redundantes por lo tanto se debe aminorar el trabajo de los
jueces y auxiliares jurisdiccionales.

g) Socialización del Proceso

Consiste en la igualdad de las partes ante la ley, por lo que


el juez debe ejercer su función jurisdiccional sin ningún tipo
de discriminación por razones de raza, sexo, religión, etc.
Este principio también faculta al juez para impedir que la
desigualdad entre las partes que concurren a un proceso sea
un factor determinante para que los actos procesales o la
decisión final tenga una orientación que vulnere al valor
justicia como por ejemplo cuando una de las partes carece
de recursos económicos para la actuación de medios
probatorios con el pago de tasas judiciales debiendo el juez
admitir el auxilio judicial a quien lo requiera.

h) Integración del Derecho Procesal

Este principio concede al juez la posibilidad de cubrir los


vacíos o defectos en la norma procesal, es decir, las lagunas
o contradicciones sobre la base de ciertos recursos
metodológicos, como los de recurrir a los principios
generales del derecho procesal, en la doctrina y
jurisprudencia correspondiente.

i) Vinculación y elasticidad

17
Consiste en que las normas procesales tienen carácter
imperativo, es decir, de cumplimiento obligatorio, salvo las
normas que prescriban que no tienen tal calidad. El
principio de elasticidad está referido al cumplimiento
de las formalidades previstas en el ordenamiento procesal.

j) Principio de Adquisición

Consiste en que una vez que la actividad procesal concreta


o sea los actos, documentos, informes, etc. Que hubieran
sido admitidos e incorporados al proceso dejan de
pertenecer a quien lo realizo y pasa a formar parte del
proceso. La parte que no participo de su incorporación
puede hacer uso de lo incorporado.

k) Principio de Preclusión

Consiste en la exigencia de que los actos procesales deben


ser ejecutados en las etapas procesales correspondientes,
de no hacerlo se perderá en derecho a realizarlos o
cuando estos fueran ejecutados fuera de plazo no tendrán
ningún valor porque el momento a precluido.

3. LA NORMA PROCESAL
3.1. DEFINICIÓN
Es la que se ocupa de regular el proceso y las relaciones que de él nacen
y se deducen, sea en lo civil, en lo penal, en lo contencioso-
administrativo, en lo laboral, constitucional y otras leyes especiales.
La normas procesal es una especie de género formado por las normas
jurídicas, algunos autores sostienen que la línea de separación entre la
norma sustancial y procesal está en su contenido o en su objeto.

3.2. NATURALEZA DE LA NORMA PROCESAL


Resulta problemático asumir una posición en torno a la naturaleza
jurídica de la norma procesal como en el caso de la tesis del realismo
ingenuo que afirma que las normas procesales se determinan por su
ubicación en el ordenamiento jurídico, pero resulta que es un tema más
complejo porque se tiene que identificar aquellos rasgos que hacen

18
diferente a la norma procesal, es necesario saber cuándo estamos ante
una norma procesal o ante una norma sustancial para definir su eficacia,
su vigencia en el tiempo o en el espacio, el criterio de interpretación más
idóneo donde la naturaleza de la norma determina cuales deben ser los
instrumentos a ser utilizados para su análisis2.

En suma, norma procesal es la que rige el proceso de aplicación de la


ley sustancial por eso su carácter es formal, dinámico y neutro.

Tiene carácter formal porque la aplicación del derecho exige la


intervención del órgano jurisdiccional a través de actos con requisitos
extrínsecos referidos a la forma como esta se debe actuar; es dinámica
porque al ser aplicada por el órgano jurisdiccional a solicitud de los
justiciables se desenvuelve en una relación que continuamente avanza
hacia su fin, que es la sentencia; y tiene un carácter neutro porque tiene
un contenido que no es favorable ni desfavorable ya que responde a un
sistema normativo especifico.

La norma procesal trasciende tanto al derecho público como al derecho


privado, tomando en cuenta la voluntad de las partes.

3.3. APLICACIÓN DE LA NORMA PROCESAL EN EL TIEMPO

El principio generalmente admitido es que la norma nueva rige para


todos hechos o actos que se produzcan a partir de su vigencia, sin
embargo surge un problema cuando se trata de identificar la norma
aplicable a un hecho iniciado durante la vigencia de la norma derogada,
pero que sus consecuencias se producen bajo la vigencia de la nueva
norma. Este problema se resuelve con la aplicación de la irretroactividad
de la nueva norma, llamada también teoría de la aplicación
inmediata. El principio de irretroactividad de la norma implica que se
respeten los derechos legítimamente adquiridos bajo la norma antigua.

2
Monroy Gálvez, Juan. Introducción al Proceso Civil. Pág. 145

19
En ciertos casos la norma puede tener efecto retroactivo cuando se trata
de leyes penales benignas al reo, en el proceso penal.

Asimismo se puede solucionar el tema de la aplicación de la norma


procesal con la ultra actividad de la norma derogada, es decir no se
puede alterar el cauce previsto y ya aplicado al proceso por lo que la
nueva norma procesal solo debe aplicarse a los procesos que se inicien
luego de su vigencia.

A continuación detallaremos la aplicación temporal de las normas:

3.3.1. Aplicación inmediata de la norma


Es aquella que se hace a hechos, situaciones o relaciones jurídica
que ocurren durante la entrada en vigencia de la norma hasta el
momento de quiebre, modificación o derogatoria.

Esta aplicación inmediata o necesaria de la norma se debe a lo


que nosotros llamamos y vemos con frecuencia en los dictados
de sentencia por los jueces o sanciones que corresponden a
consecuencias jurídicas que tienen lugar o son consumados
durante el periodo, desde que entra en vigencia la norma.

Entonces podemos decir que Juan Pérez ha consumado un hecho


con la vigencia de un ordenamiento jurídico, pues se le aplicara la
norma que estuvo vigente en el momento de comisión del hecho.

3.3.2. Aplicación Ultraactiva de La Norma


Es aquella norma que se aplica a los hechos, situaciones y
relaciones que ocurren luego que ha sido derogada o modificada
de manera expresa o tácita, es decir, luego que termine su
aplicación inmediata, aún este vigente una norma nueva.

En el ordenamiento jurídico, nuestras normas se van modificado


o derogando de manera expresa (por pronunciamiento de la
misma norma) y tácita (por incompatibilidad de la norma), pero

20
muchas veces en ese proceso hay situaciones o relaciones que
han sido constituidas antes de que esta haya sido sometida a este
proceso de modificación o derogación y que posteriormente
después de la derogatoria se produzcan las consecuencias, pero
que las consecuencias primarias ya habían tenido en su totalidad
lugar en la legislación anterior.

La aplicación de la ultra actividad de la norma derogada, se


sustenta en la consideración del proceso como un acto único, es
por eso, que no se puede alterar el cauce previsto y ya aplicado
al proceso, su alteración puede afectar la decisión a pronunciarse,
razón por la cual la nueva norma procesal solo debe aplicarse a
los procesos que se inicien luego de su vigencia.

Entonces, si Juan Pérez deja interpone una demanda sobre


nulidad de testamento con el ordenamiento jurídico de 1936, y
después entra en vigencia el Código Civil de 1984, en pleno
giro, necesariamente tiene que aplicarse al proceso el Código
de 1936, es decir el derogado.

Si bien usamos las reglas de la lógica y los principios que este


tema establece, nos encontramos frente a un análisis ultracctivo
de la norma.

3.3.3. Aplicación Retroactiva de La Norma

Es aquella que se hace para regir hechos, situaciones o


relaciones jurídicas que tuvieron lugar antes del momento en que
entra en vigencia la norma, es decir, antes de su aplicación
inmediata.

Esta aplicación retroactiva conoce dos modalidades:

 Aplicación retroactiva restitutiva: Es aquel caso en que la


aplicación retroactiva es absoluta de acuerdo con las

21
consecuencias jurídicas que derivan de sus supuestos. Es
decir, modifica en su totalidad los hechos, relaciones o
situaciones jurídicas. Nos referimos en su totalidad y su
absolutismo ya que puede modificar las sentencias judiciales
que hayan pasado a cosa juzgada. Este modelo de
aplicación retroactivo de la norma es prácticamente
inexistente en nuestro derecho actual.

 Aplicación retroactiva ordinaria: es aquel caso en el que la


aplicación de la norma se hace de manera relativa. Esto
quiere decir que modifica de manera parcial los hechos,
relaciones o situaciones lo que significa que puede
modificar actuaciones anteriores al momento del punto de
quiebre de la norma, pero salvo las sentencias judiciales que
hayan pasado en calidad de cosa juzgada.

A. Antecedentes:
Si nos dedicamos a la revisión de la constitución de 1979
nosotros vamos a encontrar que la aplicación retroactiva en
tres materias del sistema jurídico: derecho laboral, derecho
penal y derecho tributario.

La retroactividad en el derecho laboral, es aquella que se daba


cuando era favorable al trabajador. La retroactividad en el
derecho tributario, es aquella que se daba cuando era más
favorable al contribuyente; y La retroactividad en el derecho
penal, es aquella que se hace cuando es más favorable al reo.
B. Actualidad
Con la entrada en vigencia de la constitución política del Perú
de 1993 se tuvo que cambiar en modo de ver la retroactividad
con respeto a dichas materias del sistema jurídico, puesto que
nosotros vamos a encontrar en el artículo constitucional 103
que la retroactividad se da en materia penal salvo cuando es
favorable al reo.

22
3.3.4. Aplicación Diferida de La Norma
Es aquella en que la norma, de manera expresa, ha señalado
que deberá aplicarse en un momento futuro.

Entonces, aquí nos encontramos a un modelo de norma


especial, porque esta misma, expresamente, señala cuando
debe aplicarse. Esto no significa que cuando no señala su
aplicabilidad esta derogada temporalmente, sino que esta norma
establece una vacatio legis que es característica de esta norma

23
CAPITULO II
CLASIFICACIÓN DE LOS PROCESOS

1. PROCESOS NO CONTENCIOSOS
1.1. ASPECTOS GENERALES
Los procesos no contenciosos o de jurisdicción voluntaria son aquellos
en los que se ventilan asuntos en que no existe, al menos en teoría,
conflicto de intereses o litigio, vale decir, no hay sujetos que asuman la
calidad, propiamente dicha, de demandante y demandado sin que ello
obste que, dentro de nuestro sistema, se presente la figura de la
oposición. En tales procesos o procedimientos quienes los promueven
solicitan, por lo general, en sede judicial o notarial, que se preste
autorización para llevar a cabo ciertos actos jurídicos, o que se
homologuen o aprueben estos, o que se documenten, certifiquen o
declaren determinadas situaciones también de orden jurídico, o,
finalmente se pide que se fijen plazos o se dispongan medidas de
protección.

1.2. CARACTERÍSTICAS

En el proceso no contencioso no existe controversia, ni dualidad entre


las partes. Se trata de actuaciones ante los jueces, para la solemnidad
de ciertos actos o para el pronunciamiento de determinadas resoluciones
que los tribunales deben dictar.

24
o No hay confrontación de pretensiones contrarias. Como no hay litis,
no hay contendientes. Por lo tanto, no existe confrontación de
pretensiones contrarias.
o Intervención del Ministerio Público en los procesos no contenciosos.
(Art. 759 del CPC). Cuando se haga referencia al Ministerio público
en los procesos regulados en el título I, será notificado con las
resoluciones que se expidan en el proceso, para los efectos del Art.
250, inciso 2 de la constitución ; el Ministerio Público no emite
dictamen. La referencia del Código es la constitución de 1979, cuyo
artículo 250 inciso que se disponía que corresponde al Ministerio
público: "velar por la independencia de los órganos judiciales y por
la recta administración de justicia".
o Elimina una incertidumbre jurídica. Dando certeza de un documento
al final del proceso.

1.3. COMPETENCIA
El código procesal civil, en cuanto a la competencia para conocer de los
procesos no contenciosos establece lo siguiente:
 Son componentes para conocer los procesos no contenciosos, los
Jueces Especializados en lo Civil y los de Paz Letrados, salvo en
los casos en que la ley atribuye su conocimiento a otros órganos
jurisdiccionales (como por ejemplo a las salas civiles de las cortes
superiores de justicia, en el caso del proceso no contencioso de
reconocimiento de resoluciones judiciales y laudos expedidos en el
extranjero: Art. 837 CPC.

 En el proceso no contencioso es inaplicable la competencia por


razón de turno (Art. 750 segundo párrafo del CPC).
 La competencia de los juzgados de paz letrados es exclusiva para
los procesos de inscripción de partidas (regulado en el sub. capítulo
9 del título II de la sección sexta del CPC.) y para los que contienen
en la solicitud una estimación patrimonial no mayor a cincuenta
unidades de referencia procesal (si la estimación patrimonial
excede las 50 URP., serán competentes los jueces civiles para

25
conocer de los procesos no contenciosos). Los procesos de
rectificación de partidas podrán ventilarse ante los juzgados de paz
letrados o ante los notarios.

Es de destacar que, en aplicación del artículo 6 de la ley N° 26662, es


requisito indispensable (del trámite notarial referido a los asuntos no
contenciosos) el consentimiento unánime de los interesados. Si alguno
de ellos, en cualquier momento de la tramitación manifiesta oposición, el
notario debe suspender inmediatamente su actuación y remitir lo
actuado al juez correspondiente, bajo responsabilidad.

Por último, debe tenerse presente que existen otros asuntos no


contenciosos que pueden ser tramitados en sede notarial (sin que ello
obste que puedan ser ventilados también en sede judicial, en vía de
proceso abreviado): la formación de títulos supletorios, la prescripción
adquisitiva de dominio y la determinación o rectificación del área,
linderos y medidas perimétricas de terrenos.

1.4. REQUISITOS Y ANEXOS DE LA SOLICITUD

La solicitud debe cumplir con los requisitos y anexos previstos para la


demanda en los artículo 424 y 425 del CPC. 104.

1.5. INADMISIBILIDAD O IMPROCEDENCIA


El Juez al calificar la demanda puede declarar su inadmisibilidad o
improcedencia, con arreglo a lo dispuesto por los artículo 426 y 427 del
CPC.
Que si declara inadmisible la solicitud concederá tres días para que el
demandante subsane la omisión o defecto en la que haya incurrido, bajo
apercibimiento de archivar el expediente, siendo tal resolución
inimpugnable.
Que si declara improcedente la demanda, ordenará la devolución de los
anexos presentados.
1.6. CONTRADICCIÓN

26
La persona a quien se dirige el petitorio puede contestar la demanda
formulando "contradicción". La contradicción se plantea por escrito
dentro del término de cinco días, acompañado de los medios probatorios
correspondientes.
Admitida la contradicción, previa evaluación por el Juez, se cita a las
partes, para los 15 días siguientes, a una audiencia única denominada
"Audiencia de actuación y declaración judicial", bajo responsabilidad. Si
no hubiera contradicción, el Juez expedirá resolución final en la misma
audiencia, y en caso de contradicción, previamente se resolverá ésta y
después se expide la sentencia.

1.7. PROCEDENCIA DE LA APELACIÓN


La resolución que declara fundada la contradicción es apelable con efecto
suspensivo, y la que la declara infundada es apelable sin efecto
suspensivo y con calidad de diferida.
Según el Art. 755º del CPC La resolución que pone fin al proceso, es
apelable con efecto suspensivo.

1.8. TRAMITE DE LA APELACIÓN CON EFECTO SUSPENSIVO


Si se declara fundada la contradicción, el proceso queda suspendido.
El secretario del Juzgado enviará el expediente al superior dentro de
cinco días de concedida la apelación o la adhesión, en su caso, bajo
responsabilidad.
Dentro de cinco días de recibido el expediente, el superior comunicará a
las partes que los autos están expeditos para ser resueltos y señalará
día y hora para la vista de la causa. La resolución definitiva debe
expedirse dentro de los cinco días siguientes a la vista de la causa.

En segunda instancia es inadmisible la alegación de hechos nuevos.

El trámite antes indicado para la segunda instancia se aplica también


para la apelación de la resolución final del proceso no contencioso (Art.
756 y 376 del CPC).

1.9. TRAMITE DE LA APELACIÓN SIN EFECTO SUSPENSIVO

27
La apelación sin efecto suspensivo tiene el carácter de diferida, por tanto
el juez reserva su trámite a fin de que sea resuelta por el superior
conjuntamente con la resolución final, decisión del Juez que es
inimpugnable.
La falta de apelación de la resolución final determina la ineficacia de la
apelación diferida; Arts. 757 y 369 del CPC.
Además de los casos en que el CPC lo disponga, de oficio o a pedido de
parte, el juez puede ordenar que se reserve el trámite de una apelación
sin efecto suspensivo, a fin de que sea resuelta por el superior
conjuntamente con la sentencia u otra resolución que el Juez señale. La
decisión motivada del juez es inimpugnable.

La falta de apelación de la sentencia o de la resolución señalada por el


juez determina la ineficacia de la apelación diferida.

1.10. INTERVENCIÓN DEL MINISTERIO PUBLICO


Conforme al Art. 759 del CPC, el Ministerio Público interviene en los
procesos no contenciosos para velar por la independencia de los
órganos judiciales y por la recta administración de la justicia, conforme
al Art.250 Inc. 2) de la Constitución de 1979, en concordante con el Art.
159 de la constitución de 1993.
En los procesos no contenciosos sobre autorización para disponer de
bienes de menores, patrimonio familiar y sucesión intestada, se da la
intervención especifica al Ministerio Público , así se encuentra señalado
en los artículos 787, 798 y 835 del CPC.
El Ministerio Público puede actuar como parte o como informante o
ilustrador. En el primer caso se le notifica con todas las resoluciones, y
en último, se remiten los autos para que emita dictamen.

1.11. ASUNTOS QUE SE TRAMITAN COMO PROCESO NO


CONTENCIOSO
A. Inventario
“…El inventario consiste en un acta descriptiva de la existencia de
los bienes, documentos, etc., que se encuentran en un determinado
momento en posesión detentación de determinadas personas, o

28
que formen parte de un determinado acervo patrimonial o estén
custodiados o aun solo materialmente colocados en un
determinado lugar, se sepa o no quién es en aquel momento el que
tiene jurídicamente su posesión o su detentación…”3.
Cualquier interesado puede presentar la inclusión de bienes no
señalados, con la intervención de los interesados que concurran.
En el acta se describirán ordenadamente los bienes que se
encuentran en el lugar, su estado, las características que permitan
individualizarlos, sin calificar la propiedad ni su situación jurídica,
dejándose constancia de las observaciones e impugnaciones que
se formulen Art. 764 CPC.

B. Administración judicial de bienes


La administración comprende la ejecución de todos los actos y la
celebración de todos los negocios necesarios a la conservación,
cultivo y mejora de los bienes.
La administración judicial de bienes es un asunto que se tramita en
vía de proceso no contencioso (art. 749-inc. 2)- del CPC) y la
solicitud en ese sentido tiene por finalidad la designación de
administrador judicial y la aprobación de la relación de bienes que
estarán sometidos a dicho régimen de administración.

El objeto del proceso no contencioso de administración judicial de


bienes:
a) El nombramiento de administrador judicial en los casos que
proceda (vale decir, cuando existan bienes pertenecientes a
personas que no tienen padre, tutor o curador, según el caso, o
en los supuestos de ausencia y copropiedad).
b) La aprobación de la relación de bienes que va a ser sometidos
al régimen de administración judicial. Es de destacar que si fuera
materia de discusión (entre quien promovió el proceso y el
emplazado u otros interesados) lo relativo a la inclusión o no de
determinados bienes en el referido régimen de administración,

3
Redenti; 1957. Tomo III: pág. 50

29
se dejará este punto pendiente de resolución y simplemente se
designará al administrador judicial, quien será el encargado de
promover el proceso de inventario que individualice y establezca
la existencia de los bienes que estarán sujetos a administración
judicial.

Están facultados para promover el proceso no contenciosos de


administración judicial de bienes todas aquellas personas
autorizadas, en forma expresa, por el ordenamiento jurídico y
quienes tengan interés sustancial para solicitar dicho régimen de
administración, correspondiéndole al juez en este último caso
(en que la legitimidad activa no está legislada expresamente)
examinar la legitimidad activa y resolver si el peticionante cuenta
con ella o no.
C. Adopción
El Código de los Niños y de .los Adolescentes (CNA) define la
adopción de la siguiente forma: "La adopción es una medida de
protección del niño y adolescente por la que bajo la vigilancia del
Estado, se establece de manera irrevocable la realización paterno-
filial entre personas que no la tiene por naturaleza. En
consecuencia, el adoptado adquiere la calidad de hijo del adoptante
y deja de pertenecer a su familia consanguínea". Sanjurjo opina
que la adopción presenta los siguientes caracteres:
a) Es un acto jurídico. No es un contrato, ya que la voluntad común
de las partes no puede crear las condiciones para realizarla,
deben sujetarse a lo que disponga la ley y la autoridad
competente.
b) Es solemne. Debe ser realizada bajo la forma prescrita por la ley,
bajo sanción de nulidad.
c) Es bilateral. Resulta importante la manifestación de la voluntad
para que la adopción se perfeccione. Ejemplo: Si el adoptante
es casado, será necesario el asentimiento de su cónyuge, si el
menor tiene más de 10 años, también debe prestar su
asentimiento.

30
d) Crea cierto lazo de parentesco, semejantes a los que provienen
de la filiación legítima. El adoptado adquiere la calidad de hijo
del adoptante con los efectos que dicho parentesco conlleva.
Ejemplo: Convertirse en heredero forzoso.

En este proceso se tramita la adopción de personas mayores de


edad si el presunto adoptado es incapaz, se requiere la
intervención de su representante. Si este es el adoptante, la
solicitud se entenderá con el Ministerio Público (Art. 781 CPC).
La adopción se tramita siguiendo las reglas del Código de los Niños
y Adolescentes, la Ley de Procedimientos Administrativos de
Adopción de menores de edad declarados judicialmente en estado
de abandono (Ley Nº 26981, del 1 de octubre de 1998) y del Código
Procesal Civil. Las dos primeras normas regulan la adopción de
menores y el último cuerpo legal comprende la adopción de
personas mayores de edad.
El Código de los Niños y Adolescentes establecen que, además de
los requisitos del artículo 378 del CC, para la adopción de menores,
se requiere que se haya declarado previamente el estado de
abandono del menor.
La solicitud debe reunir los requisitos establecidos para los
procesos no contenciosos y, adicionalmente, la persona que quiera
adoptar a otra debe acompañar:

1. Copia certificada de su partida de nacimiento, de matrimonio,


si es casado,
2. Copia certificada de la partida de nacimiento del adoptado y de
su matrimonio si es casado,
3. Los medios probatorios destinados a acreditar su solvencia
moral.
4. Documento que acredite que las cuentas de su administración
han sido probadas, si el solicitante ha sido representante legal
del adoptado,
5. Copia certificada del inventario y valorización judicial de los
bienes que tuviera el adoptado, y

31
6. Garantía suficiente otorgada por el adoptante, a criterio del juez
si el adoptado fuera incapaz (Art. 782 del CPC).

D. Autorización para disponer derechos de incapaces


Únicamente en los casos en que no exista consejo de familia
constituido antes de la presentación de la solicitud de autorización
para disponer derechos de incapaces, el Ministerio Público será
parte en el proceso no contencioso en que se tramita la aludida
solicitud y no emitirá dictamen alguno.
E. Declaración de desaparición, ausencia o muerte presunta
a) Declaración de la desaparición
Es un hecho jurídico, como lo es el matrimonio, el nacimiento, la
muerte o la residencia. Este hecho, tiene como requisitos según
al artículo 47º del CC, los siguientes:
 Que la persona no se halle en el lugar de su domicilio. No se
trata de que alguien se encuentre lejos, en otro lugar, sino
de la persona cuya ubicación es incierta, desconocida o
ignorada;
 Que se carezca de noticias de su paradero y que no tenga
información alguna sobre su destino; y,
 Que no tenga apoderado con facultades suficientes.

La falta de uno de estos requisitos, impide que se produzca la


desaparición. Ejemplo: Si la persona anuncia, en alguna forma,
el lugar de su paradero, no existe jurídicamente desaparición;
como tampoco habrá desaparición si existe apoderado con
facultades suficientes o ha nombrado durante su ausencia uno
nuevo.

El efecto inmediato de la desaparición es la designación de


CURADOR INTERINO excepto si el desaparecido tiene
apoderado con facultades suficientes. Esta medida es
eminentemente proteccionista, pues lo que se busca es la
seguridad inmediata de los bienes. El curador es de carácter
interino porque es una situación transitoria que pronto tendrá un

32
desenlace en el tiempo. En efecto, la desaparición se extingue
por la reaparición de la persona, con la incorporación de hecho
al lugar de su residencia; cuando se logra establecer el paradero
del desaparecido, cuando designa apoderado con facultades
suficientes; y cuando, después de dos años, se solicita
judicialmente la declaración de muerte presunta.

El nombramiento de curador interino debe de ser de inmediato,


hay necesidad de mantener el patrimonio sin desmedro alguno.
Socialmente no es conveniente paralizar las actividades del
desaparecido, desde que tal actitud puede perjudicar los
intereses de los familiares dependientes del desparecido, de sus
acreedores, de sus trabajadores y de la comunidad misma.
Es consecuencia es aconsejable actuar con celeridad porque
puede correr el peligro de disminuir y aun desaparecer los bienes
que constituyen el patrimonio del desaparecido.
La solicitud no contenciosa de declaración de desaparición debe
reunir los requisitos y anexos contemplados en los Artículos 424
y 425 del CPC.
Además es exigible como requisito de la aludida solicitud la
indicación de la relación de bienes y deudas que se conozcan
del desaparecido. Debe tenerse presente también que, para que
prospere la solicitud de declaración de desaparición (y
designación de curador interino del desaparecido), deben
configurarse los presupuestos de la desaparición normados en
el artículo 47 del CC.

b) Declaración de Ausencia:
Mientras la desaparición es un hecho verificable por el juez, la
ausencia es un concepto jurídico que requiere declaración
judicial y se hace a base de la desaparición comprobada y el
transcurso por espacio de dos años.
La desaparición es primero, la ausencia es después; ésta se
basa sobre aquélla.

33
En la desaparición hay que actuar de inmediato para poner a
buen recaudo el patrimonio del desaparecido y protegerlo de
cualquier atentado que merme su cuantía, en cambio, en la
ausencia hay que esperar el transcurso de 2 años. Este tiempo
es prudencial para dar oportunidad al retorno del desaparecido.
Del Art. 49º del CC, deducimos, que la existencia de dos
requisitos indispensables para que proceda la declaración de
ausencia. Ellos son:
1. Que la persona haya desaparecido. este hecho debe estar
establecido por sentencia consentida y ejecutoriada.
2. Que hayan transcurrido dos años, contados desde que se
tuvo la última noticia del desaparecido.

Mientras la desaparición tiene como efecto el nombramiento del


curador interino, en cambio la ausencia, tiene como efectos:
1. La posesión temporal de los bienes del ausente; y
2. La apertura de la sucesión por comprobación de la muerte o
por declaración de la muerte presunta.
Declarada la ausencia, por sentencia consentida o ejecutoriada
se procederá a dar posesión temporal de los bienes del ausente
a sus herederos forzosos. Son herederos forzosos, el cónyuge,
los hijos y demás descendientes, los padres y demás
ascendientes.

Si no existen herederos forzosos, continúa la curatela de bienes.


Los herederos que reciben la posesión temporal de los bienes
del ausente, previamente deberán realizar la facción de
inventarios.
No podrán gravarlos ni venderlos, salvo autorización judicial en
casos de utilidad y necesidad.
Como poseedores gozan de los derechos y obligaciones que
corresponden a todo poseedor, según el Art. 896 del CC.
Disfrute de los frutos, pero deberán reservar de un tercio (1/3)
obligatoriamente. Son frutos los provechos renovables que

34
produce un bien, sin que se altere ni disminuya su sustancia (Art.
890 del CC).
Si el heredero que recibe los bienes del ausente es uno solo,
asumirá su control, pero si son varios, se procederá a nombrar
administrador, con las atribuciones y obligaciones previstas en
los Arts. 54 y 55 del CC.
En caso de comprobarse la muerte o de declararse judicialmente
la muerte presunta, se procede a la apertura de la sucesión.
Mientras en caso de desaparición solamente procede la
inscripción de la sentencia en el Registro Personal, en cambio,
en la ausencia, procede doble inscripción. Se inscribirá la
ausencia en el Registro de Mandatos y
Poderes, conforme al Art. 53 del CC y en el Registro Personal,
conforme al Art. 2030 Inc. 2) del CC.
La ausencia termina, según el artículo 59 del CC, por regreso del
ausente, designación de apoderado, comprobación de la muerte
y declaración judicial de la muerte presunta. En los dos primeros
casos, se restituye el patrimonio, en el estado en que se
encuentre, y en los dos últimos casos, se procede a la apertura
de la sucesión.
La solicitud no contenciosa de declaración de ausencia debe
reunir los requisitos y anexos contemplados en los artículos 424
y 425 del CPC.
También constituye requisito exigible iniciar en la referida
solicitud la relación de bienes y deudas que se conozcan del
ausente, así como, el nombre de sus probables sucesores y la
dirección domiciliaria de éstos, en caso de ser conocida.

c) Muerte presunta

Como sucede en todo hecho que tiene repercusión jurídica, la


muerte requiere ser probada para surtir sus efectos.
De conformidad con el Art. 5 de la Ley Nº 24703, la muerte la
certifica el médico, y con ella, se inscribe la defunción, siendo la
partida de los

35
Registros del Estado Civil la prueba por excelencia que acredita
el fallecimiento, según el Art. 73 del CC.
La situación se complica cuando la muerte se produce en una
catástrofe, por ejemplo, que desaparece el cadáver o en casos
de ausencia. Este impase se resuelve a base de
PRESUNCIONES. Entonces, será el juez quien, utilizando las
presunciones establecidas por la ley, declare la muerte presunta.
Presunción es sinónimo de conjetura o suposición. En Derecho
Civil es un medio de prueba legal, inacatable algunas veces y
susceptible de probanza contraria, en otras.
Se infiere de los artículos 23 y 750 del código procesal civil que:
- El juez civil es competente para conocer el proceso no
contencioso de declaración judicial de muerte presunta.
- Tratándose del proceso no contencioso de declaración
judicial de muerte presunta, es competente el juez del
lugar del domicilio de la persona que lo promueve o en
cuyo interés se promueve (respecto de esto último,
entiéndase que será competente el juez del lugar del
domicilio de la persona cuya muerte presunta se pretende
sea declarada, pues, como es evidente, no cabe
encontrar interés alguno en una persona para que se le
declare judicialmente muerto presunto).
La solicitud no contenciosa de declaración de muerte presunta
debe reunir los requisitos y anexos contemplados en los artículos
424 y 425 del CPC.

F. Patrimonio familiar
Se infiere de los artículos 23 y 750 del CPC:
a. Que son competentes para conocer el proceso no contencioso de
constitución de patrimonio familiar, los jueces y los de Paz letrados.
b. Que la competencia de los juzgado de Paz letrados es exclusiva si la
solicitud de constitución de patrimonio familiar contiene una estimación
patrimonial no mayor a cincuenta unidades de referencia procesal, en
caso contrario, conocerá de aquélla el juez civil; y que en el proceso no
contencioso de constitución de patrimonio familiar es competente el

36
Juez del lugar del domicilio de la persona que lo promueve o en cuyo
interés se promueve. Es de destacar que, de conformidad con lo
dispuesto en el artículo 1 inciso 3) de la ley 26662 (ley de competencia
notarial en asuntos no contenciosos, del 20.09.1996), los interesados
pueden recurrir indistintamente ante el poder judicial o ante notario para
tramitar la constitución del patrimonio familiar.

Nuestro ordenamiento jurídico, en cuanto a los efectos del patrimonio


familiar, establece lo siguiente:
 La constitución del patrimonio familiar no transfiere la propiedad de
los bienes del que lo constituye a los beneficiarios. Estos adquieren
solo el derecho de disfrutar de dichos bienes (art. 490 del CC).
 El patrimonio familiar es inembargable, inalienable y transmisible por
herencia (art. 488 del CC)
 Son inembargables los bienes constituidos en patrimonio familiar, sin
perjuicio de lo dispuesto por el artículo 492 del CC (Según el cual,
los frutos del patrimonio familiar son inembargables hasta las dos
terceras partes, únicamente para asegurar las deudas resultantes de
condenas penales, de los tributo referentes al bien y de las
pensiones alimenticias).

De acuerdo a lo normado en el artículo 796 del CPC, la solicitud no


contenciosa de constitución de patrimonio familiar debe reunir, en
principio, los requisitos y anexos previstos para la demanda en el artículo
424 y 425 de dicho cuerpo de leyes. Adicionalmente, se acompañara e
indicará en la referida solicitud:
1. Certificado de gravamen del predio a ser afectado en patrimonio
familiar (casa habitación de la familia o un predio destinado a la
agricultura, la artesanía, la industria o el comercio; art. 489 del CC).
2. Minuta de constitución del patrimonio familiar.
3. Documentos públicos que acrediten la relación familiar invocada
(partida de nacimiento, partida de matrimonio, etc.).
4. Los datos que permitan individualizar el predio (referidos a su
ubicación y, especialmente los datos de inscripción del bien en los
registros públicos, de ser el caso).

37
5. Los nombres de los beneficiarios (quienes pueden ser sólo los
cónyuges, los hijos y otros descendientes menores o incapaces, los
padres y otros ascendientes que se encuentren en estado de
necesidad y los hermanos menores o incapaces del constituyente: art.
495 del CC) y el vínculo que los une con el solicitante.
En la solicitud no contenciosa de constitución de patrimonio familiar debe
pedirse (por lo general en otros) al órgano jurisdiccional de dicha solicitud
sea notificada a los interesados a través de edictos. La referida
notificación edictal se verificara mediante la publicación de un extracto de
la solicitud de constitución de patrimonio familiar por dos días interdiarios
en el diario de los avisos judiciales. Es de destacar que si en el lugar no
hubiera diario deberá emplearse la forma de notificación edictal que
resulte más conveniente a criterio del juez (lo cual se concreta con la
publicación en el diario respectivo de la localidad más próxima y con la
fijación del edicto en los sitios que aseguren su mayor difusión: art. 167-
segundo párrafo- del CPC). La constancia de la notificación edictal que se
practique respecto a la aludida solicitud no contenciosa deberá ser
presentada hasta la fecha en que se realice la audiencia de actuación y
declaración judicial.

En el proceso no contencioso de patrimonio familiar, según se infiere del


artículo 759 y 798 del CPV, el Ministerio Público debe ser notificado con
las resoluciones que se expidan, para los efectos de velar por la
independencia de los órganos judiciales y por la recta administración de
justicia. Tal función del Ministerio Público se hallaba contenida en el inciso
2) del artículo 250 de la constitución de 1979, al que nos remitía el artículo
759 del CPC, debiendo entenderse que la remisión actual corresponde al
inciso 2 del artículo 159 de la constitución de 1993, norma que
prácticamente reproduce el primero de los dispositivos constitucionales
mencionados (pues sólo es sustituido el término “judicial” por el de
“jurisdiccional” Con arreglo previsto en el artículo 799 del CPC, en el
proceso no contencioso de constitución de patrimonio familiar:

 Si ningún interesado formulase contradicción dentro del plazo de ley,


el juez resolverá la solicitud (acogiéndola o desestimándola) en base

38
a la prueba proporcionada por quien promovió el proceso no
contencioso en cuestión.
 En caso de hacer contradicción a la solicitud no contenciosa de
constitución de patrimonio familiar, el proceso seguirá el trámite
señalado en los artículo 753, 754, 755, 756 y 757 del CPC. Estos
numerales forman parte de las disposiciones generales de los
procesos no contenciosos (contenidas en el título I de la sección
sexta del CPC); y tratan sobre la contradicción (art. 753 del CPC, el
trámite de la audiencia de actuación y declaración judicial (art. 754
del CPC, la procedencia de la apelación con efecto suspensivo (art.
756 del CPC), el trámite de la apelación con efecto suspensivo (art.
757 del CPC).

El patrimonio familiar puede ser modificado según las circunstancias (ya


sea variando el bien inmueble objeto del mismo o los beneficiarios del
patrimonio familiar), observándose el mismo procedimiento que para su
constitución (art. 501 del CC). El artículo 800 del CPC menciona al
respecto.
Por disposición del artículo 499 de CC, el patrimonio familiar se extingue:

1. Cuando todos sus beneficiarios dejan de serlo conforme al artículo


498.
2. Cuando, sin autorización del juez, los beneficiarios dejan de habitar
en la vivienda o de trabajar el predio durante un año continuo.
3. Cuando, habiendo necesidad o mediado causa grave, el juez, a
pedido de los beneficiarios, lo declara extinguido.
4. Cuando el inmueble sobre el cual recae fuere expropiado. En este
caso, el producto de la expropiación debe ser depositado en una
institución de crédito para constituir un nuevo patrimonio familiar.
Durante un año, el justiprecio depositado será inembargable.
Cualquiera de los beneficiarios puede exigir dentro de los seis
primeros meses, que se constituya e nuevo patrimonio. Si al término
del año mencionado no se hubiere constituido o promovido la
constitución de un nuevo patrimonio, el dinero será entregado al
propietario de los bienes expropiados. Las mismas reglas son de

39
aplicación en los casos de destrucción del inmueble cuando ella
genera una indemnización.
Una vez (consentida o ejecutoriada) la resolución que prueba la solicitud
no contenciosa de constitución, modificación o extinción del patrimonio
familiar según el caso de trate, el órgano jurisdiccional dispondrá que la
respectiva minuta (de constitución, modificación o extinción del patrimonio
familiar) sea elevada a escritura pública y que está se inscriba en el
registro respectivo
G. Ofrecimiento de pago y consignación
"El ofrecimiento puede ser judicial o extrajudicial (art. 1252 del CC).
Es judicial en los casos que así se hubiera pactado y además: cuando no
estuviera establecida contractual o legalmente la forma de hacer el pago,
cuando por causa que no le sea imputable el deudor estuviera impedido
de cumplir la prestación de la manera prevista, cuando el acreedor no
realiza los actos de colaboración necesarios para que el deudor pueda
cumplir la que le compete, cuando el acreedor no sea conocido o fuese
incierto, cuando se ignore su domicilio, cuando se encuentre ausente o
fuera incapaz sin tener representante o curador designado, cuando el
crédito fuera litigioso o lo reclamaran varios acreedores y en situaciones
análogas que impidan al deudor ofrecer o efectuar directamente un pago
válido.
El ofrecimiento extrajudicial debe efectuarse de la manera que estuviera
pactada la obligación y, en su defecto, mediante carta notarial cursada al
acreedor con una anticipación no menor de cinco días anteriores a la
fecha de cumplimiento debido, si estuviera determinado. Si no lo
estuviera, la anticipación debe ser de diez días anteriores a la fecha de
cumplimiento que el deudor señale."
En lo que atañe al pago por consignación, Marín Pérez lo concibe como
“…el depósito que en forma legal hace el deudor de la cosa objeto de la
obligación cuando el acreedor no quiere o no puede recibirla. De esta
forma el deudor queda liberado de toda responsabilidad”4

4
58 MARIN PEREZ, 1983, Volumen II: 97

40
La solicitud no contenciosa de ofrecimiento judicial de pago y eventual
consignación debe observar, en principio, los requisitos y anexos
contemplados para la demanda en los artículos 424 y 425 del CPC.
Adicionalmente, en la referida solicitud deberá especificarse la naturaleza
de la obligación debida así como la cuantía de ésta.

Según se desprende del artículo 804 del CPC el ofrecimiento judicial de


pago que se pretenda hacer en el proceso no contencioso que nos ocupa
consistirá en el cumplimiento de la prestación debida por quien promueve
dicho proceso en la correspondiente audiencia de actuación y declaración
judicial.
Del texto del artículo 805 del CPC merece destacarse lo siguiente: En
caso de que el emplazado (acreedor) no formule, dentro del plazo de la
ley, contradicción a la solicitud no contenciosa de ofrecimiento de pago y
eventual consignación o no asistiera dicho emplazado a la audiencia de
actuación y declaración judicial, en el curso de esta audiencia el órgano
jurisdiccional expedirá resolución que declare la validez del ofrecimiento
de pago y recibirá éste, teniendo en cuenta, para tal efecto, lo normado
en el artículo 807 del CPC, según el cual para la consignación de la
prestación se procede de la siguiente manera:
1. El pago de dinero o entrega de valores, se realiza mediante la entrega
del certificado de depósito expedido por el Banco de la Nación. El
dinero consignado devenga interés legal.
2. Tratándose de otros bienes, en el acto de la audiencia el Juez decide
la manera, lugar y forma de su depósito, considerando lo que el título
de la obligación tenga establecido o, subsidiariamente, lo expuesto
por las partes.
3. Tratándose de prestaciones no susceptibles de depósito, el Juez
dispone la manera de efectuar o tener por efectuado el pago según lo
que el título de la obligación tenga establecido o, subsidiariamente, lo
expuesto por las partes.
Si quien promovió el proceso no contencioso de ofrecimiento de pago y
consignación (vale decir el deudor) no asistiera a la audiencia de
actuación y declaración judicial, entonces, el órgano jurisdiccional
procederá a expedir resolución (que resulta ser irrecurrible) que declare la

41
invalidez del ofrecimiento y condene a aquél al pago de la multa
respectiva. El mismo proceder tendrá el juez en caso de asistir el deudor
a la audiencia de actuación y declaración judicial y no cumplir con efectuar
el pago correspondiente en la forma ofrecida por él.
No todas las prestaciones materia de pago pueden ser cumplidas en el
curso de la audiencia de actuación y declaración judicial. Es por ello que
atendiendo a la naturaleza especial de la prestación de que se trate (que
impide su cumplimiento material dentro de tal audiencia), y de manera
excepcional el órgano jurisdiccional resolverá en la referida audiencia l
oportunidad en que el obligado debe cumplir con la prestación debida así
como la forma en que se verificará dicho cumplimiento.

Si el bien materia de la prestación de vida o el solicitante se encontrase


en peligro de deterioro o perecimiento (y pérdida también, porque no), este
último puede pedirle al órgano jurisdiccional que le autorice a vender, por
cuenta propia y bajo su responsabilidad, el bien en cuestión a la brevedad
posible. La aprobación del juez del pedido formulado por el deudor en el
sentido indicado se hará previa citación del emplazado (acreedor),
teniendo el auto en que conste tal decisión la calidad de inimpugnable, no
ocurriendo lo mismo tratándose de la resolución que desestima el referido
pedido de venta efectuada por el deudor, en cuyo caso es posible la
impugnación, vía apelación que será concedida con efecto suspensivo.
Es de destacar que, aprobada la venta del objeto de la prestación de vida
susceptible de deterior, perecimiento o pérdida y realizada dicha venta por
el deudor, el precio que se obtenga deberá ser consignado (en sustitución
del objeto de la prestación original), pudiendo deducirse los gastos
derivados de la venta aludida.

En el proceso no contencioso de ofrecimiento de pago y consignación, en


caso de formular el emplazado (acreedor) contradicción a la solicitud
respectiva, en la audiencia de actuación y declaración judicial el órgano
jurisdiccional expedirá resolución autorizando la consignación, pero no se
pronunciara acerca de los efectos de la misma. En dicha resolución el juez
declarara además, la conclusión del proceso y no emitirá pronunciamiento
alguno respecto de la contradicción planteada por el emplazado

42
(acreedor). Puntualizamos que queda a salvo el derecho de las partes
para hacer valer en el proceso contencioso correspondiente los efectos
de la consignación efectuada con propósito de pago (tratándose del
deudor) o las aseveraciones contenidas en la contradicción (en caso del
acreedor). Comprobación de testamento

En principio, cabe señalar que el testamento es un acto puramente


personal y de carácter revocable, por el cual una persona dispone del todo
o de parte de sus bienes, para después de su muerte, según lo define el
Código Civil es su artículo 686.

En el proceso no contencioso de comprobación de testamento resultan


inviables las contradicciones referidas a la validez del contenido del
testamento. Ello obedece a que en dicho proceso sólo es susceptible de
comprobación la autenticidad y el cumplimiento de formalidades de
testamento (art. 817 – primer párrafo- del CPC), por lo que toda
contradicción que no esté dentro de dichos parámetros debe ser
desestimada por el juzgador, máxime si la resolución final a expedirse en
el citado proceso no contencioso no prejuzga la validez del testamento ni
la de del contenido de las disposiciones testamentarias (art. 823-in fine-
del CPC). Si existieran cuestionamientos a la validez de las estipulaciones
consignadas en el testamento, ello deberá ventilarse en el proceso no
contencioso que corresponda (como, por ejemplo, el de nulidad de
testamento).

H. Inscripción y rectificación de partida


La inscripción o rectificación de partida es un asunto que se tramita en vía
de proceso no contencioso (art. 749, inc. 9 del CPC). Sobre el particular,
Salvat sostiene que “la rectificación de una partida consiste en todo
cambio, supresión o adicción, destinado a salvar las irregularidades que
contenga…” (SALVAT, 1954, Tratado de Derecho Civil Argentino. Parte
General I: 326).
Salvat, acerca de la legitimidad en el proceso de rectificación de partida,
anota lo siguiente:”la rectificación puede ser demandada por todos los que
tenga un interés legitimo en hacerlo; es el principio general que rige en

43
materia de acciones; para poder iniciar una acción de cualquier naturaleza
que sea, es necesario tener interés. Pero en esta materia se admite que
no es necesario un interés pecuniario; basta un interés moral.

Por ejemplo: Tendría derecho de demandar la rectificación el propio


interesado, es decir, la persona a quien se refiere la partida; la persona
que figura como padre legítimo, natural o adulterino, no siéndolo, o por lo
menos, que niega su paternidad; la esposa y el hijo legítimo, en el caso
de que el esposo, aunque estén divorciados, hubiera hecho inscribir como
natural un hijo que fuera adulterino; etc.” 5

Los procesos no contenciosos de inscripción y rectificación de partidas no


solo tienen la particularidad de ser imperativa la notificación adicta de la
respectiva solicitud inicial, sino que, además, se caracterizan por la
exigibilidad de la autorización por abogado de los documentos que
contienen los edictos, sin la cual éstos no podrán ser publicados. Tal
autorización, dicho sea de paso, se materialización la indicación clara (en
los referidos documentos) del nombre del letrado y su número de registro.

El artículo 829 del CPC contempla los casos que ameritan se disponga
judicialmente de plano (vale decir, sin mayor trámite, por lo que no se
convoca a audiencia de actuación y declaración judicial) la rectificación de
partida de nacimiento, matrimonio o defunción que hubiera sido solicitada
por las personas cuyo nacimiento se haya inscrito en los registros del
estado civil de las municipalidades y consulados peruanos. Los casos en
mención son las siguientes;
1. Errores en las partidas consistentes en la figuración entre los nombres
y apellidos de la palabra “de” o las letras “y”,“i”, “e” o “a”.
2. Errores manifiestos de ortografía en las partidas.
3. Errores manifiestos referidos al sexo de quienes figuran en las
partidas.
4. Errores manifiestos similares a los indicados precedentemente, que
puedan apreciarse de la propia partida cuya rectificación se solicita.

5
Salvat, 1954, tratado de derecho civil argentino. Parte general I: 330.

44
I. Sucesión intestada

Conforme al artículo 660 del Código Procesal Civil, desde el momento de


la muerte de una persona sus bienes, derechos y obligaciones que
constituyen la herencia se transmiten a sus sucesores. Si bien es cierto
que la transmisión se produce por el solo hecho del fallecimiento, sin
embargo, es necesario que los herederos o sucesores acrediten la
transmisión.
Existen dos formas de acreditar la transmisión sucesoria: el testamento y
la declaración judicial de herederos.
Mediante el testamento la persona puede disponer de sus bienes, total o
parcialmente, para después de su muerte, y ordenar su propia sucesión
dentro de los límites de la ley y con las formalidades que ésta señala (Art.
686º del CC).
A falta de testamento o si habiéndolo se produce la nulidad o caducidad
total o parcial del mismo, el título para acreditar la transmisión sucesoria
es la declaración judicial de herederos, seguida mediante proceso no
contencioso que el código procesal civil denomina "Sucesión Intestada".
El proceso no contencioso de sucesión intestada puede ser promovido por
cualquier interesado (presuntos sucesores) y, también, por el ministerio
público, interviniendo este último en salvaguarda de los derechos e
intereses sucesorios de los incapaces que carecen de representante
legal.

45
CAPITULO III

PROCESOS CONTENCIOSOS

1. EL PROCESO DE CONOCIMIENTO

1.1. ANTECEDENTES

El Proceso de conocimiento se identifica bastante con el Juicio Ordinario


regulado en el anterior Código de Procedimientos Civiles de 1912, así
como también en el Código de Enjuiciamientos en Materia Civil de 1852.
PERLA VELAOCHAGA comenta sobre el proceso ordinario: “Su estudio
tiene una especial importancia por ser el modelo o patrón de todos los
demás juicios y procedimientos establecidos en nuestra legislación, ya
que los demás que existen son solamente ampliaciones o reducciones
del modelo que es el juicio ordinario”.

En buena cuenta al hablar del proceso ordinario, es lo mismo que el


proceso de conocimiento y es válido recordarlo nuevamente, que es el
proceso base de los demás procesos ordinarios o menores como lo son
los procesos abreviado y Sumarísimo.

Es preciso señalar que en el anterior proceso ordinario, la etapa


postularía del proceso estaba normada de forma muy limitada, mientras
tanto que en el nuevo Código Procesal Civil se la regula dándole mucha
mayor trascendencia, tal es así que se le dedica toda una sección
especial lo cual no solamente sirve para el proceso de conocimiento, sino
también a todos los tipos de procesos regulados en el código (abreviado,
sumarísimo, de ejecución, cautelar y no contencioso) claro está con las
variantes establecidas para cada tipo de procedimiento, incluso de

46
manera supletoria es válido para los procesos constitucionales,
laborales, comerciales y otros.

Es la Tercera Disposición Final del Código Procesal Civil, la cual


establece que el proceso de conocimiento es equivalente al proceso
ordinario. Al respecto tenemos la opinión de WILDELBER ZAVALETA
quien refiere que la equivalencia se fija por los propósitos que ambos
persiguen, ya que ambos son procesos largos y engorrosos, los cuales
ofrecen a los justiciables las garantías máximas tanto en la acción y en
la defensa; otorgan también etapas completas de tramitación con plazos
máximos; permitiendo usar todos los medios probatorios posibles; así
como también permiten emplear todos los recursos impugnatorios e
instancias procesales. De otro lado es preciso indicar que si hablamos
de juicio, proceso y procedimiento no es igual ya que los conceptos antes
mencionados se diferencian de forma Sustancial.

Al respecto según el Profesor TEOFILO IDOGRO “juicio” es el acto de


diferenciar Entre lo bueno y lo malo, lo verdadero y lo falso, lo justo y lo
injusto, que realiza el Juez en el ejercicio de sus funciones
jurisdiccionales durante el proceso, mientras que el proceso dice que son
todos los actos procesales coordinados, sistematizados, lógicos que
realizan las partes y también terceros ante los órganos jurisdiccionales
para la solución de un conflicto de intereses desde la interposición de la
demanda hasta la ejecución de la resolución judicial firme.

A su turno JUAN MONROY GÁLVEZ manifiesta que el procedimiento es


el conjunto de normas o reglas de conducta que controlan la actividad,
participación, y las potestades y deberes de los sujetos procesales así
como también la forma en la que se realizan los actos dentro de un
proceso o en parte del mismo.

En buena cuenta para Monroy Gálvez un procedimiento son los actos


internos del proceso llevados a cabo por los sujetos del proceso quienes
impulsan el trámite y le otorgan la respectiva formalidad del caso.

Cabe mencionar que el proceso de conocimiento se encuentra inmerso


dentro de la etapa postularía del proceso.

1.2. CONCEPTO DEL PROCESO DE CONOCIMIENTO

47
Al respecto tenemos diferentes conceptos como por ejemplo que opina:
PEDRO SAGASTEGUI: Nos dice que se conoce como Juicio Ordinario
al proceso de conocimiento, general, común, de mayor cuantía y que
sirve tanto para cualquier asunto importante de tramitación especial en
el Código de Procedimientos Civiles, como para los de mayor cuantía,
conteniendo normas de aplicación subsidiaria a los demás procesos.

HUGO ALSINA: Nos dice que Juicio Ordinario es la forma común de


tramitar la Litis, en tanto que los Juicios Especiales tienen un trámite
distinto y esto es según la naturaleza de la cuestión en debate.

WILDELBER ZAVALETA: Define el proceso de conocimiento como el


proceso patrón, modelo o tipo, en donde se dan a conocer conflictos de
intereses de mayor importancia, y tienen un propio trámite buscando dar
solución a la controversia mediante una sentencia definitiva con el valor
de cosa juzgada.

FRANCISCO CHIRINOS: nos dice que Proceso de Conocimiento es la


actividad Judicial en donde el Juez adquiere a través de la información
que le puedan proporcionar las partes, el conocimiento de un asunto
para luego emitir una sentencia que decida y ponga fin a un
enfrentamiento o controversia.

Dicho de otra forma, el proceso de conocimiento es aquella actividad


jurisdiccional a través de la cual el Juez adquiere por medio de la
información que le brindan las partes, el conocimiento de la cuestión
litigada, para luego se resuelva ésta en la forma establecida por Ley; así
mismo este concepto sirve para los procesos abreviado y sumarísimo,
pero es preciso señalar que guardan ciertas diferencias

Según el tipo de pretensiones que según el grado de dificultad, el monto


de la

Cuantía, la urgencia de la tutela jurisdiccional y algunas otras


pretensiones que la ley señala se tramiten en cualquiera de estas vías.

Finalmente en la opinión del Doctor Benjamín Gutiérrez Pérez nos dice


que el proceso de conocimiento, es un proceso contencioso,

48
eminentemente declarativo, amplio de acción y contradicción ilimitada,
donde las partes ponen en conocimiento del Juez sus pretensiones
debidamente fundamentadas para ser analizadas desde su origen, y que
teniendo en cuenta su naturaleza son complejos por la concurrencia de
varios demandados y/o pretensiones o sea de puro derecho o de mayor
cuantía, representando una herramienta que respalde el debido proceso.

1.3. CARACTERISTICAS DEL PROCESO DE CONOCIMINENTO

Dentro de las características más resaltantes que se le otorgan al


proceso de conocimiento tenemos:

A. Es un Proceso Contencioso: Por que en esencia está orientado a


resolver una litis entendida como un conflicto de intereses
intersubjetivos, donde uno de los interesados es el que pretende y el
otro es quien resiste.
B. Es Teleológico: Desde este punto de vista el proceso de
conocimiento como conjunto de normas no debe ser estudiado de
forma aislada, sino comprendiendo las motivaciones y la labor para
lo cual ha sido creado, el cual es no solo poner fin al conflicto de
intereses de forma clara sino también de aspirar a alcanzar la paz
social en justicia.
C. Es un Proceso Modelo: En cuanto a su estructura de plazos es el
más engorroso y amplio, y en cuanto a la actividad procesal es la
que sostiene el total de los actos procesales llevados a cabo por las
partes, los terceros y el Juez. Es considerado un proceso único y
especial y como tal es considerado como modelo para los demás
procesos.
D. Es un Proceso de Pretensiones Complicadas: Al respecto podemos
decir que este tipo de proceso soporta el peso de las más
complicadas pretensiones, de mayor cuantía, de puro derecho; ya
que los otros procesos tienen como tarea dar solución a las
pretensiones menos complicadas, de menor cuantía y solo son
interpuestas para casos especiales y simples.
E. Es de Competencia Especial: Ya que el proceso de conocimiento es
único y en forma exclusiva de competencia del Juez Especializado
en lo Civil. Al respecto es preciso señalar que las Salas Civiles o

49
Mixtas de la Corte Superior y de la corte Suprema tiene conocimiento
de éstos casos en vía de apelación o de casación; por su parte el
Juez de Paz Letrado no tramita los procesos de conocimiento, solo
tramita las pretensiones de su competencia en los procesos
abreviado y sumarísimo.
1.4. DIFERENCIAS DEL PROCESO DE CONOCIMIENTO CON LOS
PROCRESOS PREVISTOS EN EL CODIGO PROCESAL CIVIL

A. Diferencias con los procesos abreviados y sumarisimos

La diferencia entre el proceso de conocimiento con los procesos


abreviado y sumarísimo, no es tan marcada como se piensa ya
que los tres antes mencionados son de conocimiento; muchos
autores precisan que el proceso abreviado debería llamarse
proceso de conocimiento abreviado, mientras que el sumarísimo
proceso de conocimiento sumarísimo, ya que todos estos tipos de
procesos están orientados a resolver conflictos de intereses que
no parten de la existencia de un título ejecutivo, ni mucho menos
tienden a dar por segura una decisión definitiva como lo hace el
proceso cautelar, mucho menos se les puede comparar con los
procesos no contenciosos.

La diferencia sustancial entre estos tipos de procesos radica en


cuanto a su estructura de plazos y pretensiones que el legislador
ha escogido por su dificultad, naturaleza o cuantía para su trámite
en éstos.

B. Diferencia con el proceso no contencioso

La principal diferencia del proceso de conocimiento con el proceso


no contencioso, es que en el primero existe litis, mientras que en
el segundo no existe litis o contención. Dicho de otro modo en el
proceso de conocimiento se resuelven conflictos intersubjetivos
de intereses, mientras que el proceso no contencioso se eliminan
incertidumbres jurídicas; por ejemplo como demostrar que una
persona es heredera de su antecesor para así poder cobrar una

50
deuda, o también realizar la rectificación de una partida de
nacimiento por el error de una letra.

C. Diferencias con los procesos de ejecución o cautelar

Si bien es cierto que en el proceso de conocimiento es el Juez


quien toma conocimiento de las propuestas de las partes en litigio,
para resolver el conflicto mediante una actividad de juzgamiento
con carácter de cosa juzgada.

En el proceso de ejecución o también llamado ejecutivo, se hacen


efectivos en forma breve y coactivamente el cumplimiento de las
obligaciones adquiridas, las cuales constan de forma clara sin la
necesidad de que se dan las amplias formas de los juicios
declarativos. Como bien lo manifiesta Davis Echeandia cuando no
se trate de una pretensión discutida la cual implique necesario
manifestar quien tiene la razón, sino todo lo contrario cuando se
trate de una pretensión cuya existencia aparece clara y fijada en
el título que se aduce, pero se encuentra insatisfecha ya que el
obligado no ha cumplido con su obligación consecutiva, es ahí
donde se está frente a un proceso ejecutivo.

De ello se desprende que el proceso ejecutivo parte siempre de


un título ejecutivo, al cual la Ley le da la calificación de verdad y
por ende el Juez lo tiene que ejecutar. Es preciso mencionar que
el nuevo Código Procesal Civil regula dentro de los procesos
ejecutivos a los procesos de ejecución de resoluciones judiciales
y a los procesos de ejecución de garantías, siendo éstos solo
formas de ejecución que necesitan siempre de un título ejecutivo
para su trámite.

Refiriéndose al proceso cautelar, Lino Palacio nos indica que


dicho proceso es aquel el cual está orientado a impedir que el
derecho que ha sido reconocido sea obtenido a través de otro
proceso. Dicho de otra forma lo que los procesos cautelares
pretenden es desvitalizar, quitarle eficacia o hacer que un derecho
ganado no se cumpla.

51
De otro lado el propósito que persiguen los procesos cautelares
es hacer que se cumpla la sentencia definitiva en forma clara y
contundente.

1.5. PRETENSIONES QUE SE TRAMITAN EN EL PROCESO DE


CONOCIMIENTO

Dentro de las pretensiones que se tramitan vía el proceso de


conocimiento tenemos los siguientes:

A. No tengan una vía procedimental, no estén atribuidos por ley a


otros órganos jurisdiccionales y, además cuando por su naturaleza
o complejidad de la pretensión el Juez considere atendible su
empleo. Al respecto podemos mencionar que la Ley para ciertas
pretensiones ha establecido un procedimiento determinado tal es
el caso de la pretensión de desaprobación de cuentas o balances
y la de responsabilidad por incumplimiento de deberes, establecido
en el Art 106 del Código Civil que se tramitan en proceso de
conocimiento, mientras que existen otras pretensiones que no
tienen establecido en forma enumerada el procedimiento al cual
deben de sujetarse; para tal caso el Juez debe apreciar la
naturaleza y la dificultad de la pretensión para adecuarlo al proceso
de conocimiento. Del mismo modo debemos mencionar que la
pretensión se torna compleja cuando en el proceso intervienen
varios demandantes y demandados, y también cuando se plantean
acumulación de pretensiones en sus variadas formas. Por último
cuando la norma señala que la pretensión demandada no debe
estar otorgada por Ley a otros órganos jurisdiccionales, al respecto
el Art 139 inc 1 de la Constitución Política, fija la unidad y
exclusividad de la función jurisdiccional al Poder Judicial, a
excepción de la militar o la arbitral.
B. La estimación patrimonial del petitorio sea mayor de trescientas
unidades de referencia procesal al respecto es preciso mencionar
que la Unidad de Referencia Procesal viene a ser el equivalente al
10% de la Unidad Impositiva Tributaria y para el presente año la

52
suma fijada es de 350 nuevos soles, por lo que cabe mencionar
que las pretensiones mayores a 300 URP equivaldría a más de
105000 nuevos soles y se tramitan exclusivamente vía proceso de
conocimiento.
C. Son inapreciables en dinero o hay duda sobre su monto, y siempre
que el Juez considere atendible. En cuanto a esta pretensión
debemos indicar que existen derechos civiles patrimoniales y
extramatrimoniales, así mismo la norma señala que se tramitan en
proceso de conocimiento las pretensiones inapreciables en dinero
tales como cuando: estén en discusión el nombre, la capacidad de
una persona, la filiación, la invalidez del matrimonio, etc.
En referencia a la duda sobre el monto, no se tendrá ningún
problema si el cobro de la deuda es determinada, pero existirá duda
si se trata de una demanda de indemnización de daños y perjuicios,
ya que si bien el demandante estima una suma de dinero el monto
del mismo puede variar a través del proceso.
En ambos casos, el demandante debe tener una justificación de su
trámite en esta vía, con el propósito de que el Juez estime atendible
su empleo.
Al tratarse de derechos mixtos es decir patrimoniales y extra
patrimoniales, la demanda respectiva también puede ser tramitada
en esta vía, siempre y cuando el Juez estime atendible su empleo,
teniendo en cuenta la justificación que exponga el demandante.
D. El demandante considere que la cuestión debatida solo fuese de
derecho existen pretensiones las cuales son discutidas en donde
solo se debaten interpretaciones de la ley, o quizás la aplicación de
una norma legal, dejando de lado los hechos los cuales ya están
demostrados, aunque de forma estricta no existe derecho sin
hechos, sino lo que se busca es que se declare el reconocimiento
de un derecho. Ejemplo: Cuando se pone en tema de discusión el
derecho al logotipo entre dos personas jurídicas.
E. En otros casos cuando la Ley lo señale: Con referencia a otros
casos los cuales puedan ser tramitados dentro del proceso de
conocimiento tenemos la pretensión de separación de cuerpos o
divorcio por causal, estipulado en el Art 480 del Código Procesal

53
Civil y podemos mencionar otras pretensiones más las cuales
también pueden ser tramitadas en ésta vía tales como:
 La pretensión sobre nulidad o anulación de los actos o
contratos que celebren, en los casos fijados por ley,
tratándose de Fundaciones. (Art 104 inc. 9 del Código
Civil).
 La pretensión de desaprobación de cuentas o balances y
la de responsabilidad por incumplimiento de deberes. (Art
106 Código Civil).
 La pretensión de desaprobación de cuentas del comité (Art
122 del Código Civil).
 La pretensión sobre ineficacia de los actos onerosos (Art
200 del Código Civil).
 La pretensión sobre invalidez del matrimonio (Art 281 del
Código Civil).
 La pretensión de desaprobación de la rendición de cuentas
dentro del plazo de caducidad de sesenta días luego de
presentadas las cuentas (Art 542 del Código Civil).
 La pretensión sobre petición de herencia (Art 664 del
Código Civil).
 La pretensión de nulidad de la partición de bien, realizada
con la preterición de algún sucesor (Art 865 del Código
Civil).
 La pretensión de nulidad de acuerdos societarios (Art 150
de la Ley General de Sociedades).
 Existiendo otras pretensiones las cuales también se
tramitan dentro de proceso de conocimiento.
1.6. ESTRUCTURA DEL PROCESO DE CONOCIMIENTO SEGÚN SUS
PLAZOS

Al respecto el Art 478 del Código Procesal Civil, señala los siguientes
como máximos los cuales se aplican a este tipo de proceso:

1.- Cinco días para interponer tachas u oposiciones a los medios


probatorios, contados desde la notificación de la resolución que
los tienen por ofrecidos.

54
2.- Cinco días para absolver las tachas u oposiciones.

3.- Diez días para interponer excepciones o defensas previas,


contados desde la notificación de la demanda o de la
reconvención.

4.- Diez días para absolver el traslado de las excepciones o defensa


previas.

5.- Treinta días para contestar la demanda y reconvenir.

6.- Diez días para ofrecer los medios probatorios si en la contestación


se invoca hechos no expuestos en la demanda o en la
reconvención, Art 440

7.- Treinta días para absolver el traslado de la reconvención.

8.- Diez días para subsanar los defectos encontrados en la relación


procesal, Art 465.

9.- Veinte días para la realización de la audiencia conciliatoria, Art 468.

10.- Cincuenta días para la realización de la Audiencia de Pruebas,


párrafo 2do del Art 471.

11.- Diez días contados desde realizada la audiencia de pruebas para


la realización de las audiencias especial y complementaria de ser
el caso.

12.- Cincuenta días para expedir sentencia, Art 211.

13.- Diez días para apelar la sentencia, Art 373.

2. PROCESO ABREVIADO
2.1. Antecedentes:

En las leyes de Justiniano encontramos el antecedente histórico


denominado como juicio suman. En Europa comúnmente se conocía el
juicio ordinario, pero gracias a los Pontífices Romanos Alejandro III,
Gregorio IX, Inocente IV y Clemente V, se dictaron varias normas
mediante las cuales se simplificó el procedimiento principalmente para
asuntos de menor cuantía. Los Estatutarios incorporaron durante los
55
siglos XIII y XIV en las ciudades italianas el juicio sumario por razón de
la pequeña cuantía y, diferenciaron con los Juicios ejecutivos, con la
finalidad de proteger a las personas pobres y por la urgencia de resolver
los pleitos Este juicio se caracterizó por la brevedad de los plazos,
supresión de muchas formalidades y en donde el Juez dictaba la
sentencia inmediatamente agotado trámite.

En el Perú, el proceso abreviado tiene su antecedente legal en el juicio


suman o de menor cuantía previsto en el Código de Procedimientos
Civiles de 1912. Es por ello que la Cuarta Disposición Final del Código
Procesal Civil vigente, señala que cuando se haga referencia al juicio
suman o de menor cuantía, tiene su equivalente en el proceso abreviado.

El artículo 935 del Código de Procedimientos Civiles establecía que se


tramitaba en juicio de menor cuantía, cuando su valor pasaba de
quinientos soles y no excedía de dos mil soles, sufriendo varias
modificaciones en cuanto a su cuantía. Estos juicios se caracterizaban
por la brevedad y abreviación de los términos en su trámite, así como
una gran oralidad, las excepciones se tramitaban conjuntamente con la
cuestión principal debatida, y a través de este procedimiento se
tramitaban una serie de juicios, como el interdicto, desahucio, aviso de
despedida, divorcio, etc.

2.2. Concepto.

Antes de dar un concepto del proceso abreviado, transcribimos algunos


conceptos de su antecedente legal, el juicio de menor cuantía. El
profesor PINO CARPIO, conceptúa el juicio de menor cuantía
«Denominase juicio de menor cuantía al que se tramita por el
procedimiento llamado sumario, cuyo acto procesal fundamentalmente
es la diligencia de comparendo, acto en el que, de manera definitiva
queda circunscrita la controversia que el juez debe resolver en la
sentencia. Aparte de la diligencia de comparendo, caracteriza al juicio de
mayor cuantía, la tramitación conjunta de la acción, de la reconvención
y de las excepciones que en el mismo acto de comparendo deben
deducirse.

56
La reducción del termino probatorio, el ofrecimiento de todas las pruebas
dentro de los tres primeros días de aquel termino (con excepción de la
instrumental publica que puede ofrecerse en cualquier estado del juicio)
y la abreviación de los tramites en su actuación, son otras tantas
características del juicio de menor cuantía en cuestión». Sobre el
particular, VELASCO GALLO, apunta «Se denomina juicio de menor
cuantía (del latín quantum, cuanto) al que se tramita por el procedimiento
llamado sumario, cuyo acto procesal fundamental es la diligencia de
comparendo. El juicio tiene gran importancia, porque su procedimiento
se aplica a otros de carácter sumario, como retracto, interdictos, cuentas,
etc.

En este juicio se han abreviado los tramites y se restringe el


conocimiento a dos instancias, para que los gastos judiciales no sean
mayores que el valor de la cuestión litigiosa».

Estos conceptos nos dan las pautas generales de lo que viene a ser el
proceso abreviado, pues el Código Procesal Civil vigente no lo define,
pero por sus características se puede construir un concepto
WILBELDER ZAVALETA, expone «Es el proceso que se tramita ante el
Juez de Paz Letrado o Juez Civil Especializado, según la cuantía, para
conflictos de intereses específicamente determinados por la ley y para
aquellos que oscilan entre 100 a 1000 unidades de referencia procesal,
con el mismo trámite del proceso de conocimiento, pero con reducción
de plazos y concentración de actos procesales».

El tratadista colombiano MONROY CABRA conceptúa «El proceso


abreviado es un proceso declarativo pero con un trámite breve, los
lineamientos son iguales a los del proceso ordinario, pero los términos
son más cortos y no existe recurso extraordinario de casación»
Recapitulando, según la doctrina y nuestra normatividad, el proceso
abreviado, es un proceso contencioso, de conocimiento, intermedio
entre el proceso propiamente dicho de conocimiento y el proceso
sumarísimo, que sirve para resolver conflictos de intereses
intersubjetivos y cuya competencia se ha fijado expresamente en la Ley.
En este proceso los actos procesales son restringidos y los plazos son

57
menores en cuanto al proceso de conocimiento y mayores a los del
proceso sumarísimo.

3.3. Características:
A. Es un proceso de conocimiento o de cognición.- Porque resuelve
pretensiones a través del conocimiento que las partes presentan al
juez, y que no se sustentan en títulos ejecutivos, sino en derechos
que previamente se requieren demostrar la verdad. Este proceso
tiene similitud con los procesos de conocimiento y sumarísimo, ya la
función que cumplen está delimitadas por el tipo de pretensión que
son de su conocimiento, ya sea por la complejidad del caso, la
urgencia o la cuantía de sus pretensiones, pero todas son de
conocimiento o cognición propiamente dichos.

El profesor CHIRINOS SOTO, sostiene que «el proceso abreviado


es también un proceso de conocimiento, pero abreviado.
Precisamente, el calificativo de abreviado no es autónomo, sino que
se vincula al proceso más importante. La denominación cabal seria,
entonces, proceso de conocimiento abreviado».

B. Es un proceso contencioso.- Porque resuelve conflictos de intereses


intersubjetivos existentes entre dos partes o más. Estos procesos se
caracterizan por el conflicto existente, denominado litis. Se
diferencian de los procesos no contenciosos porque en ellos no hay
conflicto y, únicamente se requiere a través del órgano jurisdiccional
eliminar una incertidumbre jurídica.

Al decir, más de dos partes, nos referimos cuando en un proceso


intervienen litisconsortes y terceros legitimados, a quienes también
se les denomina «parte procesal».

C. Tiene una competencia determinada.- La competencia del juez por


razones de grado, territorio y materia están debidamente asignadas
por el Código Procesal Civil y otras normas procesales y, la
competencia por razón de la cuantía tiene un mínimo y un máximo.
El Artículo 488 del citado corpus, fija la competencia del proceso
abreviado, pero esta debe concordar con las reglas generales de la

58
competencia previstas en el Capi I del Título II del Código Procesal
Civil.
D. Se abrevian los actos procesales.- Las etapas procesales se
abrevian con relación al proceso de conocimiento, tal es así, la
concentración en una sola audiencia el «saneamiento» y «la
conciliación», mientras que en el proceso de conocimiento
anteriormente se desarrollaban independientemente, ya que ahora
con la ley 29057 no existe audiencia de Saneamiento.

Igualmente los plazos en relación a los del proceso de conocimiento


son menores, pero mayores en relación al proceso sumarísimo; por
ejemplo, el plazo para contestar la demanda en el proceso de
conocimiento es de treinta días habites, mientras que en el proceso
abreviado es de diez días y en sumarísimo de cinco días.

E. Es exclusiva para determinadas pretensiones.- La ley señala


determinadas pretensiones que se tramitan específicamente en
proceso abreviado por razones que la propia naturaleza de éstas así
lo exige, por ejemplo el derecho de retracto, títulos supletorios, etc. ;
aunque la selección hecha por el legislador debe reformularse,
porque hay pretensiones que han sido escogidas para tramitarse en
esta vía procesal, cuando por calidad y sencillez deberían ubicarse
en el proceso sumarísimo; por ejemplo, la rectificación de área o
linderos.
F. La reconvención es restringida.- La reconvención viene a ser, la
demanda que el demandado dirige contra el demandante en el
mismo proceso y, la nueva pretensión propuesta debe estar
íntimamente ligada a la pretensión principal del demandante. En el
proceso de conocimiento la reconvención es ilimitada, bastando el
cumplimiento de los requisitos generales para su admisión, mientras
que en el proceso abreviado se prohíbe reconvenir contra
determinadas pretensiones planteadas, tales como, por ejemplo, en
la demanda de prescripción adquisitiva de dominio y su justificación
se da por razones propias de la naturaleza de esta pretensión.
2.4. Pretensiones

59
Lo encontramos en el artículo 486 del CPC, así como también, los que
nos señalan otras normas.

3. EL PROCESO SUMARISIMO
3.2. Concepto

La doctrina procesal le otorga diversas definiciones y clasificaciones,


así tenemos la opinión diversa de distintos procesalistas tales como:

Por ejemplo ELMER CONTRERAS CAMPOS clasifica al proceso


sumarísimo de la siguiente forma:

a. Hay quienes consideran a los procesos sumarísimos como de


simple reducción de plazos y formas procesales, y se oponen
contundentemente al juicio ordinario, así tenemos por ejemplo a:
Piero Calamandrei, Vicente Caravantes, Santiago López Moreno y
también los peruanos de la talla de Remigio Pino Carpio y Mario
Alzamora Valdez.
b. De otro lado también hay quienes sostienen que los procesos
sumarios son de cognición incompleta, y ello debido a las
alegaciones limitadas que presenta, entre quienes sostienen ello
tenemos a Víctor Fairen Guillén, Leonardo Prieto Castro, Juan
Montero Aroca, entre otros.
c. Así mismo tenemos a quienes definen a los procesos sumarios
como un producto de la indeterminación procesal. Al respecto el
profesor italiano Andrea Proto, afirma que este tipo de procesos
son aquellos los cuales el legislador no ha normado de forma clara
y expresa su procedimiento, más bien lo ha dejado al criterio del
juzgador la formación del iter procesal, todo ello de acuerdo a lo
que exija el caso materia de la litis. Es preciso señalar que esta
indeterminación al cual se hace referencia tiene lugar en Italia.

A su turno el civilista Benjamín Gutiérrez Pérez da su definición sobre


los procesos sumarios y nos dice que son aquellos que tienen por
propósito buscar la eficacia del proceso, por medio de la reducción de
plazos, de actos procesales, de la limitación en sus alegatos, y por
todo ello se acepta la composición parcial del litigio, ya que el Juicio

60
se basa en una gran probabilidad mas no en la certeza (ésta última
propia de los procesos plenarios).

A manera de acotación es preciso señalar también que el proceso


sumarísimo, es un proceso de mínima cuantía, donde los actos
procesales se llevan a cabo en forma concentrada, siendo
eminentemente oral y haciendo una comparación con los procesos de
conocimiento y abreviado los plazos que brinda son menores.

A su turno el autor CARLOS HERNANADEZ, señala que el proceso


de conocimiento se trata de un proceso, donde se tienen diversas
limitaciones que se dan con el propósito de acortar su plazo de
tramitación. Ahora bien los límites mencionados pueden hacer
referencia a la materia probatoria así como a los trámites de
recurribilidad de los decisorios. Como todo proceso este tipo de
proceso se ha fijado para determinadas materias así como el monto
que se solicita a través de ella no supere ciertos límites.

3.3. CARACTERISTICAS DEL PROCESO SUMARISIMO


A. Reducción de Plazos

Como ya lo veníamos mencionando líneas arriba, en comparación al


proceso de conocimiento y al proceso abreviado, éste es el proceso
contencioso que tiene los plazos más cortos, ya que para la
contestación de la demanda emplea tan solo cinco días hábiles
contados éstos desde la notificación de la demanda.

De igual forma ocurre para con el plazo para convocar a la audiencia


única y formular el recurso impugnatorio.

B. Concentración de actos procesales

En comparación a los procesos de conocimiento y abreviado, en el


proceso sumarísimo los actos procesales se agrupan en una sola
audiencia que se llama “Audiencia de saneamiento, conciliación,
actuación de pruebas y sentencia”, mientras que los otros procesos
se llevan a cabo en audiencias individuales en dos, tres y hasta más
sesiones.

61
C. Urgencia

Al respecto podemos señalar que los procesos sumarísimos, han sido


creados por la urgencia con la que deben ser atendidas ciertas
pretensiones, como lo indica el Art 546 inc. 6 del Código Procesal
Civil.

D. Oralidad

A diferencia de los procesos de conocimiento y abreviado donde las


tachas u oposiciones se interponen de forma escrita, en los debidos
plazos para cada procedimiento, en el proceso sumarísimo las tachas
u oposiciones se dan a conocer en forma oral, todo ello en la audiencia
única donde se absuelven y resuelven las mismas. De igual forma
sucede con las excepciones y defensas previas las cuales se
contestan de forma oral en dicha audiencia. Al respecto de la
audiencia única es preciso indicar que como se realiza en una sola
sesión, todo incidente que se proponga es resuelto de inmediato,
incluso la sentencia que el Juez dicta en forma pública.

E. Representación irrestricta

En este tipo de procesos las partes pueden estar representados por


un apoderado sin límite alguno, tan solo basta tener capacidad para
comparecer en el proceso, es así como lo estipula el Art 554 del
Código Procesal Civil. Es preciso mencionar que la representación
irrestricta no impone ningún tipo de formalidades ni exigencias en
cuanto al poder y alcance

F. Medios probatorios de actuación absoluta

En un proceso sumarísimo los medios probatorios que se ofrecen,


tienen que actuarse inmediatamente, ello implica que deben ser
posibles de tener a la vista al momento de ser presentados u
ofrecidos; caso contrario desvirtuaría su celeridad y concentración
de los actos procesales, ya que tendría que convocarse a nuevas
sesiones con el propósito de que los medios probatorios sean
actuados.

62
3.4. PRETENSIONES QUE SE TRAMITAN EN EL PROCESO SUMARISIMO

Dentro de las pretensiones que se tramitan en el proceso sumarísimo


tenemos las siguientes:

a) Alimentos (Corresponde al Juez de Paz Letrado)

b) Separación Convencional y Divorcio ulterior (Corresponde al Juez de


Familia)

c) Interdicción Civil (Corresponde al Juez de Familia);

d) Desalojo;

e) Interdictos (Corresponde al Juez especializado en lo Civil);

f) Los que no tienen una vía procedimental propia, son inapreciables en


dinero o hay duda sobre su monto o por que debido a la urgencia de
tutela jurisdiccional, el Juez considere atendible su empleo
(Corresponde al Juez especializado en lo Civil);

g) Aquellos cuya estimación patrimonial no sea mayor de veinte


Unidades de Referencia Procesal. Ahora pasaremos a desarrollar
cada una de estas pretensiones de forma más detallada:

4. PROCESO DE EJECUCIÓN

El proceso de ejecución no busca la constitución o la declaración de una


relación Jurídica sino satisfacer un derecho ya declarado.

El proceso de ejecución es definido como aquel que, partiendo de la


pretensión del ejecutante, realiza el órgano jurisdiccional y que conlleva un
cambio real en el mundo exterior, para acomodarlo a lo establecido en el título
que sirve de fundamento a la pretensión de la parte y a la actuación
jurisdiccional. Liebman califica al proceso de ejecución como “aquella
actividad con la cual los órganos judiciales tratan de poner en existencia
coactivamente un resultado práctico, equivalente a aquel que habría debido
producir otro sujeto, en cumplimiento de una obligación jurídica”. Para
Couture6 el derecho está aquí en contacto con la vida, de tal manera que su
reflejo exterior se percibe mediante as transformaciones de las cosas y lo

6
COUTURE; Eduardo. Fundamentos del Derecho Procesal Civil, Depalma, Buenos Aires, pág. 442

63
explica así: “Si la sentencia condena a demoler el muro, se demuele; si
condena a entregar el inmueble se aleja de él a quienes lo ocupen; si condena
a pagar una suma de dinero y esta no existe en el patrimonio del deudor, se
embargan y se venden otros bienes para entregar su precio al acreedor. Hasta
el momento, el proceso se había desarrollado como una disputa verbal, simple
lucha de palabras; a partir de este instante cesan las palabras y comienzan
los hechos”.

La jurisdicción no se limita a declarar el derecho, comprende también su


ejecución. Como las sentencias declarativas y constitutivas no imponen el dar,
hacer u omitir algo, la ejecución se dirige a asegurar la eficacia práctica de las
sentencias que condena. Proceso de cognición y proceso de ejecución, son
independientes entre sí. De un lado el proceso de cognición puede, en efecto,
no requerir la ejecución, ya sea ya sea porque el acto que lo concluye alcance
por sí solo el objeto prefijado (sentencia de declaración de certeza o
constitutiva), ya sea porque después de recaída la sentencia de condena el
deudor cumpla voluntariamente su obligación. De otro lado, no siempre a la
ejecución preceder la cognición judicial: en determinados casos se puede
proceder a la ejecución sin necesidad de realizar precisamente un proceso de
cognición judicial, como es la conciliación extrajudicial, donde las partes han
definido consensualmente el derecho, o el caso del arbitraje.

De este modo, cognición y ejecución se contemplan recíprocamente; la


primera prepara y justifica la actuación de la sanción y esta da fuerza y vigor
práctico a aquella. Entre el proceso de cognición y de ejecución, la distribución
de la actividad se hace por ley, en armonía con la función propia de cada uno
de ellos.

Por eso, corresponde al primero conoces y dirimir el derecho en conflicto. Al


segundo, la actuación de la sanción.

En este orden de ideas, tenemos que precisar que la tutela efectiva no solo
se agota con los procesos de cognición sino con los de ejecución. La tutela
solo será realmente efectiva cuando se ejecute el mandato judicial.

El incumplimiento de lo establecido es una sentencia con carácter de cosa


juzgada implica la violación, lesión o disminución antijurídica de un derecho
fundamental: la tutela efectiva, que la jurisdicción tiene la obligación de reparar

64
con toda firmeza. El que la sentencia declare que el demandado adeuda una
cantidad de dinero al demandante y le condene a pagarla, no supone ello
tutela efectiva. Para que esta se logre es necesario una actividad posterior
que pueda realizarse de dos maneras: cumpliendo el obligado, de manera
voluntaria, la prestación que le impone la sentencia o ingresando, ante su
resistencia, a la ejecución forzosa de la prestación. Lo interesante de esta
etapa es que la ejecución permite algo que hasta el momento de la cosa
juzgada era imposible: “La invasión en la esfera individual ajena y su
transformación material para dar satisfacción a los intereses de quien ha sido
declarado triunfador en la sentencia. Ya no se trata de obtener algo con el
concurso del adversario, sino justamente en contra de su voluntad. Ya no se
está en presencia de un obligado, como en la relación de derecho sustancial,
sino en presencia de un subjectus, de un sometido por la fuerza coercible de
la sentencia”.7

En síntesis, podemos señalar que proceso de ejecución es aquella actividad


con la cual los órganos judiciales tratan de poner en existencia coactivamente
un resultado práctico, equivalente a aquel que habría debido producir otro
sujeto, en cumplimiento de una obligación jurídica. Es pues, el medio por el
cual el orden jurídico reacciona ante la trasgresión de una regla jurídica
concreta, de la cual surge la obligación de un determinado comportamiento
de un sujeto a favor de otro.

4.1. Fundamento del proceso de ejecución:

Al estado le incumbe garantizar los derechos de los particulares, pues a


éstos se les prohíbe hacerlos valer por sí mismo; pues la autoayuda está
incluida aun en el supuesto de que tales derechos hayan sido declarados
por los órganos jurisdiccionales del estado. De manera que quien tenga
un derecho que hacer valer puede contar con la fuerza coercitiva
suficiente para realizarlo pudiendo aplicarla en perjuicio del obligado, o
no disponer personalmente de los medios coercitivos adecuados y
entonces su derecho sucumbiría por inercia en su aplicabilidad. Estos
extremos son incompatibles de acuerdo con la organización del estado

7
COUTURE, Eduardo. Ob. Ct.; p. 439.

65
moderno, quien necesariamente debe intervenir como regulador del
orden jurídico interno a través de sus organismos competentes como son
los tribunales de justicia.

Su intervención, además, garantiza para quien tiene su derecho, la


realización de éste sin exigir al deudor más sacrificios que los
absolutamente necesarios para tal fin. De este modo cumple el Estado
una de las funciones primordiales que debe llevar en el seno de la
colectividad, como ser el ejercicio del poder jurisdiccional por medio de
la prestación del servicio de la administración de justicia.

4.2. Características del Proceso de Ejecución

Respecto a las características del proceso ejecutivo, son los siguientes:

A. Carácter sumario del juicio ejecutivo (o de ejecución)

(…) la sumariedad del juicio ejecutivo (o de ejecución) está dada por


la circunstancia de que, en tanto el conocimiento judicial debe
circunscribirse, en caso de oposición a la pretensión, a un número
limitado de defensas. Ha señalado la jurisprudencia que la
naturaleza sumaria del juicio ejecutivo no admite la apertura y
producción de pruebas tendientes a acreditar la veracidad de la
afirmación del excepcionante en el sentido de que el pago efectuado
corresponde a la deuda que se ejecuta (…)8

B. Naturaleza especial

La propia estructura del juicio ejecutivo (o de ejecución), deriva de


reglas propias, es la que confiere especificidad a su naturaleza.

Es así como el traslado de la demanda ha sido sustituido por la


intimación de pago y citación para oponer excepciones. Los actos y
recursos son más limitados y el conocimiento importa su excepción.

La especialidad importa la existencia de normas particulares que


deben ser respetadas al analizar el juicio en sí mismo.

8
ZULETA GONZALES, 1966: 10

66
C. Función ejecutiva

La función del juicio ejecutivo (o de ejecución) es conseguir la


satisfacción del acreedor en relación a una deuda documentada en
títulos que traen aparejada ejecución.

No es pura ejecución, pues la coacción está precedida de una etapa


de conocimiento limitada. Dicha etapa es más importante que en las
ejecuciones de sentencias, al admitirse un número mayor de
excepciones.

4.3. Los Títulos ejecutivos regulados en el Código Procesal Civil

Una vieja discusión doctrinaria en relación con el título de ejecución se


orienta a dilucidar si el título configura un acto o un documento. Discusión
así: Liebman defiende la primera postura y sostiene que el documento
no es más que el aspecto formal del acto; y este, en tanto tiene una
eficacia constitutiva que consiste en otorgar vigor a la regla jurídica
sancionatoria y en posibilitar la actuación de la sanción en el caso
concreto, crea una nueva situación de Derecho Procesal que no debe
confundirse con la situación de Derecho material existente entre las
partes; en cambio, Carnelutti, adhiriéndose a la segunda tesis, sostiene
que el titulo ejecutivo es un documento que representa una declaración
imperativa del juez o de las partes, y agrega que siendo esa declaración
un acto, “ con el intercambio acostumbrado entre el continente y el
contenido y, por tanto, entre el documento y el acto que él está
representado, se explica la costumbre corriente de considerar como
título al acto en vez del documento”. Alsina, dentro de la misma óptica
de Carnelutti, señala que “el título no es otra cosa que el documento que
comprueba el hecho del reconocimiento: como en la ejecución de
sentencia es el documento que constata el pronunciamiento del tribunal”.

Señala Palacio, las concepciones aludidas son susceptible de


conciliarse si se considera que la eficacia del título ejecutivo constituye
la resultante de un hecho complejo que se integra, por un lado, a través
de un acto configurativo de una declaración de certeza judicial o presunta
del derecho (aspecto substancial) y por otro lado, mediante un
documento que constata dicha declaración (aspecto formal). Desde este

67
último punto de vista el titulo ejecutivo, como documento que acredita la
existencia de un acto jurídico determinado, es suficiente para que el
acreedor, sin necesidad de invocar los fundamentos de su derecho,
obtenga los efectos inmediatos que son propios de la interposición de la
pretensión ejecutiva9.

Enfocado, en cambio, el problema desde el punto de vista substancial el


acto constatado en el documento brinda al deudor de la oportunidad de
demostrar la falta de fundamento de derecho del acreedor, debiendo
distinguirse, al respecto, según se trate de títulos ejecutivos judiciales o
extrajudiciales, pues mientras los primeros solo pueden invalidarse
mediante la demostración de los hechos posteriores de los hechos a su
creación, los segundos son susceptibles de perder eficacia tanto en esas
hipótesis como en la consistente en acreditarse, aunque en un proceso
posterior a la ejecución, que el derecho del acreedor nunca existió.

El artículo 688° del Código Procesal Civil establece que los títulos
ejecutivos provienen por la actividad judicial o por el ejercicio del principio
de autonomía privada de partes, que comprende a los acuerdos por
conciliación o transacción homologados y las sentencias judiciales
firmes. Se debe precisar que tanto la transacción judicial y la conciliación
judicial, una vez homologadas, son equiparables a la sentencia definitiva
y tienen eficacia de cosa juzgada (Véase lo normado en los artículos 337
y 328 del CPC). Ello justifica que cuando se conviene que una o ambas
partes cumplan con una determinada prestación, se apliquen, frente al
eventual incumplimiento, las normas que gobiernan el proceso de
ejecución de sentencias. Además, el efecto de la cosa juzgada es tal,
que solo se podría enervar dichos efectos por actividad fraudulenta en la
forma que señala el artículo 178 del CPC.

El artículo 688 del CPC, norma lo siguiente sobre Títulos ejecutivos:

“Solo se puede promover ejecución en virtud de títulos ejecutivos de


naturaleza judicial o extrajudicial según sea el caso. Son títulos
ejecutivos los siguientes:

9
PALACIO, Lino. Derecho Procesal Civil, T. VII. Pág. 224

68
1. Las resoluciones judiciales firmes;

2. Los laudos arbitrales firmes;

3. Las actas de conciliación de acuerdo a ley;

4. Los títulos valores que confieran la acción cambiaria, debidamente


protestados o con la constancia de la formalidad sustitutoria del
protesto conforme a lo previsto en la ley de la materia;

5. La constancia de inscripción y titularidad expedida por la Institución


de Compensación y Liquidación de Valores, en el caso de valores
representados por anotación en cuenta, por los derechos que den
lugar al ejercicio de la acción cambiaria, conforme a lo previsto en
la ley de la materia.

6. La prueba anticipada que contiene un documento privado


reconocido.

7. La copia certificada de la Prueba anticipada que contiene una


absolución de posiciones, expresa o ficta.

8. El documento privado que contenga transacción extrajudicial;

9. El documento impago de renta por arrendamiento, siempre que se


acredite instrumentalmente la relación contractual.

10. El testimonio de escritura pública;

11. Otros títulos a los que la ley les da mérito ejecutivo".

4.4. Legitimación en el Proceso de Ejecución

La legitimación viene determinada por el título. A pesar de que la


redacción del artículo 690° del CPC considera que “está legitimado para
promover ejecución quien en el titulo tiene reconocido un derecho a su
favor”, hay circunstancias en las que la ejecución puede realizarse por y
frente a quienes no aparecen en el título, como es el caso de la fusión y
la absorción de las personas jurídicas.

En estos supuestos nos encontramos ante la legitimación derivada,


porque surge después de la formación del título.

69
Puede darse el caso de que se pida la ejecución por persona no
designada en el título que no afirme su legitimación por sucesión 10. En
este caso el Juez no deberá admitir la ejecución por falta de legitimación;
en caso contrario, el ejecutado podrá alegar la excepción que recoge el
inciso 6 del artículo 466° del CPC.

La redacción original del artículo 690° ha sido alterada por las


modificaciones contenidas en el Decreto Leg. 1069. De su actual texto
podemos decir que el artículo está estructurado bajo dos supuestos: la
primera parte, hace referencia a la legitimidad para actuar como parte en
el proceso, sea como demandante o como demandado. En este último
caso, cuando se trata de la legitimidad pasiva, el texto anterior de ese
artículo contemplaba la posibilidad de promover ejecución contra aquel
que en el mismo título tiene la calidad de obligado; sin embargo, dicha
referencia normativa, tal como estaba redactada, no asumía de manera
expresa la posibilidad de acoger como legitimados pasivos a terceros,
para garantizar las obligaciones de pago asumidas por terceros.

Por ejemplo: Un propietario que entrega en hipoteca un bien de su


propiedad a favor de un acreedor para asegurar la obligación de pago
de un tercero.

Como se puede apreciar el texto modificado la legitimación que se invoca


para promoverla ejecución se sustentaba en el título ejecutivo , en el que
el acreedor tenia reconocido un derecho a su favor, contra aquel que en
el mismo título tenía la calidad de obligado, no contemplando la
posibilidad de que una tercera persona hubiera constituido garantía
sobre un bien de su propiedad para garantizar deudas de terceros, como
señala el artículo 1097° del CC: “Por la hipoteca se afecta un inmueble
en garantía del cumplimiento de cualquier obligación propia o de un
tercero”. Nada impide que un tercero ajeno a la relación obligatoria afecte
un bien de su propiedad en garantía del cumplimiento de una obligación
asumida por otra persona.

4.5. La Competencia en el proceso de ejecución.

10
Falcón; 1978: pg. 394

70
El artículo 690-B del CPC norma lo concerniente a la competencia para
conocer de los procesos únicos de ejecución, desprendiéndose del
primer párrafo de dicho precepto legal:

a. Que el Juez de Paz letrado es competente para conocer de los


procesos únicos de ejecución con título ejecutivo de naturaleza
extrajudicial cuya cuantía no exceda las cien unidades de referencia
procesal.

b. Que será de competencia del juez civil los procesos únicos de


ejecución con título ejecutivo de naturaleza extrajudicial cuya cuantía
sea superior a las cien unidades de referencia procesal. No podemos
dejar de mencionar lo dispuesto en el artículo 34 del código adjetivo,
conforme al cual los procesos de ejecución se someten a las reglas
generales sobre competencia, salvo disposición distinta al código
procesal civil.

Según se colige del segundo párrafo del artículo 690-B del CPC, el juez
de la demanda es el órgano jurisdiccional competente para conocer de
los procesos únicos de ejecución con título ejecutivo de naturaleza
judicial (resolución judicial firme, acta de conciliación aprobada
judicialmente y transacción judicial debidamente probada u
homologada).

Ramos Méndez, en lo que atañe a la competencia para conocer de la


ejecución de títulos jurisdiccionales, sostiene que “la competencia
funcional viene encomendada al juez o tribunal que hubiere conocido
de la primera instancia: luego que sea firme una sentencia se procederá
a su ejecución, siempre a instancia de parte, y por el juez o tribunal que
hubiere conocido del asunto en primera instancia…11”

Finalmente, en aplicación del tercer párrafo del artículo 690-B del CPC,
el juez civil es el órgano jurisdiccional competente para conocer de
aquellos procesos de ejecución con garantía constituida (que es el caso
de la ejecución de garantías reales regulada en el artículo 720 al 724
del CPC).

11
RAMOS MENDEZ; 1992, Tomo II: 1009

71
4.6. La Contradicción en el Proceso de Ejecución

El Código Procesal Civil, en su artículo 690-D, regula lo concerniente a


la contradicción en el proceso único de ejecución. Del citado precepto
legal (concretamente de su primer párrafo) se puede apreciar, en
principio, que la oportunidad para formular contradicción en el referido
proceso y proponer excepciones procesales y defensas previas, es de
cinco días de notificado el ejecutado con el mandato ejecutivo. Tal
plazo es aplicable al proceso único de ejecución, cuya demanda se
sustenta en un título ejecutivo de naturaleza extrajudicial (el art. 688°
del CPC contempla los títulos ejecutivos de naturaleza judicial y
extrajudicial en virtud de los cuales se puede promover ejecución).

En el proceso único de ejecución cuya demanda se basa en un título


ejecutivo de naturaleza extrajudicial, el ejecutado puede plantear (en
su escrito de contradicción a la ejecución y según el primer párrafo del
artículo 690°-D del CPC) las excepciones procesales previstas en el
artículo 446° del CPC, cuales son las siguientes:

1. Incompetencia;

2. Incapacidad del demandante o de su representante;

3. Representación defectuosa o insuficiente del demandante o del


demandado;

4. Oscuridad o ambigüedad en el modo de proponer la demanda;

5. Falta de agotamiento de la vía administrativa; 6. Falta de legitimidad


para obrar del demandante o del demandado;

7. Litispendencia;

8. Cosa juzgada;

9. Desistimiento de la pretensión;

10. Conclusión del proceso por conciliación o transacción;

11. Caducidad;

12. Prescripción extintiva; y,


72
13. Convenio arbitral.

También puede proponer el ejecutado (en su escrito de contradicción a


la ejecución y según el primer párrafo del art. 690-D del CPC) defensas
previas como el beneficio de inventario, el beneficio de excusión, entre
otras.

En el proceso único de ejecución cuya demanda se sustenta en un título


ejecutivo de naturaleza extrajudicial, el ejecutado debe presentar, en el
mismo escrito que contiene la contradicción a la ejecución, los medios
probatorios correspondientes que acrediten lo expuesto en tal
contradicción. Si no lo hiciere el órgano jurisdiccional declarará
inadmisible la contradicción (art. 690-Dsegundo párrafo del CPC).

En el proceso único de ejecución cuya demanda se basa en un título


ejecutivo de naturaleza extrajudicial, existe una limitación de medios
probatorios (justificada por la naturaleza extrajudicial, existe una
limitación de medios probatorios (justificada por la naturaleza sumaria de
tales procesos), pues en dicha clase de proceso únicamente podrá
ofrecerse y admitirse los siguientes medios de prueba (indicados en el
segundo párrafo del artículo 690-D del CPC):

- La declaración de parte.

- Los documentos.

- La pericia.

Por otro lado, en el proceso único de ejecución cuya demanda se basa


en un título ejecutivo de naturaleza extrajudicial la contradicción que
formula el ejecutado solo puede fundarse en las hipótesis previstas en
los incisos 1), 2), y 3) del artículo 690-D del CPC, debiendo el juez
rechazar liminarmente (esto es, de plano) la contradicción cuyo sustento
sea ajeno a tales hipótesis, siendo tal decisión judicial apelable sin efecto
suspensivo. Las referidas hipótesis que constituyen causales de
contradicción a la ejecución, son, pues, las siguientes:

A) Inexigibilidad de la obligación contenida en el Titulo ejecutivo, lo cual


Significa que la obligación en cuestión se encuentra sujeta a plazo

73
todavía no vencido o sometida a condición o cargo pendiente de
cumplimiento.

B) Iliquidez de la Obligación contenida en el Titulo Ejecutivo, vale decir,


que el monto o cuantía de la obligación no se encuentra determinado
ni es determinable mediante operación aritmética.

C) Nulidad formal del Título Ejecutivo, esto es, que dicho título carece de
los requisitos formales exigidos por la ley bajo sanción de nulidad o
no cuenta con los requisitos extrínsecos que confieren a un título o
documento merito ejecutivo.

D) Falsedad de Título Ejecutivo, lo cual implica que este no sea autentico


por no corresponder su contenido o firma en el impresa a la realidad
del acto o hecho producidos (máxime si son inexistentes) o a la
persona a la que se le atribuye, pudiendo comprender la falsedad la
elaboración integra del documento contrario a la verdad o su
adulteración.

E) Completar en forma contraria a los acuerdos adoptados el título


ejecutivo consistente en un título valor emitido en forma incompleta.
Al respecto, cabe señalar que el artículo 19 de la Ley de Títulos
Valores(ley N° 27287) contempla las causales de contradicción en las
acciones derivadas del título valor, (estableciendo en su inciso 19.1)
que cualquiera que fuera la vía que se ejerciten las acciones derivadas
dl título valor, el demandado puede contradecir fundándose en:

a. El contenido literal del título valor o en los defectos de forma legal de


éste.

b. La falsedad de la firma que se le atribuye;

c. La falta de capacidad o la representación del propio demandado en


el momento en que se firmó el título valor.

d. La falta del protesto, o el protesto defectuoso, o de la formalidad


sustitutoria, en los casos de títulos valores sujetos a ello.

e. Que el título valor incompleto al emitirse haya sido completado en


forma contraria a los acuerdos adoptados, acompañando

74
necesariamente el respectivo documento donde consten tales
acuerdos transgredidos por el demandante.

f. La falta de cumplimiento de algún requisito señalado por la ley para


el ejercicio de la acción cambiaria.

El artículo 19 de la Ley N° 27287 en su inciso 19.2, prescribe que el


deudor también puede contradecir al tenedor del título valor
proponiendo la defensa que se deriven de sus relaciones personales
y las que resulten procedentes según la ley procesal. El inciso 19.3
del artículo 19 de la ley N° 27287 precisa que el demandado no
puede ejercer los medios de defensa fundados en sus relaciones
personales con los otros obligados del título valor, ni contra quienes
no mantengan relación causal vinculada al título valor, a menos que
al adquirirlo, el demandante hubiese obrado a sabiendas del daño
de aquél.

5. PROCESO CAUTELAR
5.1. Aspectos Generales

La medida cautelar, denominada también preventiva o precautoria, es


aquella institución procesal mediante la cual el órgano jurisdiccional, a
instancia de parte, asegura la eficacia o cumplimiento de la sentencia
a dictarse en el proceso que dirige, anticipando todos los determinados
efectos del fallo, en razón de existir verosimilitud en el derecho
invocado y peligro en que la demora en la sustanciación de la litis u otra
razón justificable traiga como consecuencia que la decisión judicial no
pueda reintegrar a la parte vencedora en el juicio la totalidad de su
derecho.

5.2. Clases De Medidas Cautelares

Según nuestro ordenamiento procesal peruano puede clasificarse las


medidas cautelares:

A) De acuerdo a la oportunidad en que han sido peticionadas. En:

1.- Medidas cautelares anticipadas o fuera del proceso (artículos 608


y 636 del CPC).
75
2.- Medidas cautelares dentro del proceso (artículo 629 del CPC).

B) Según su previsión o no en el ordenamiento legal. En:

1. Medidas cautelares genéricas o atípicas (artículo 629 del CPC).

2. Medidas cautelares específicas o típicas (Capitulo II del Título IV de


la Sección Quinta del CPC). Estas medidas se subdividen a su vez
en:

a) Medidas para futura ejecución forzada (artículos 624 al 673 del


CPC).

Pueden ser las siguientes:

a.1) Embargo:

- En forma de depósito.

- En forma de inscripción.

- En forma de retención.

- En forma de intervención: Que puede ser:

- Intervención en recaudación.

- Intervención en información.

- En forma de administración.

a.2) Secuestro:

- Judicial

- Conservativo

a.3) Anotación de demanda en los Registros Públicos.

b) Medidas temporales sobre el fondo (artículos 674 al 681 del


CPC).

c) Medidas incoativas (artículos 682 al 686 del CPC).

d) Medidas de no innovar (artículo 687 del CPC).

5.3. Finalidad de la medida cautelar.

76
La medida cautelar tiene por finalidad darle –en lo posible- al solicitante
de la misma la seguridad que lo ordenado en la sentencia va ha ser
cumplido o ejecutado. De esta manera se garantiza que no solo va
obtener una simple declaración respecto de su derecho, sino que su
pretensión va ha ser amparada de modo efectivo. En el artículo 608
último párrafo- del Código Procesal Civil se precisa que la medida
cautelar tiene por finalidad garantizar el cumplimiento de la decisión
definitiva.

5.4. Importancia de la medida cautelar.

De acuerdo a lo dispuesto por el articulo III del Título Preliminar del


Código

Procesal Civil, la finalidad concreta del proceso “… es resolver un


conflicto de intereses o eliminar una incertidumbre, ambas con
relevancia jurídica, haciendo efectivo los derechos sustanciales…”
mientras que su finalidad abstracta “… es lograr la paz social en justicia
“. (La ultima –en nuestra opinión- no es sino una consecuencia de
la primera).

Ahora bien, para alcanzar tales finalidades es necesario que del proceso
derive un resultado material que no es otro sino el efectivo cumplimiento
de la sentencia. No basta con la declaración judicial, es necesario
impregnarle pragmatismo a su contenido, es indispensable que se dé
una autentica composición de la litis, es decir, que sea resuelta
eficazmente.

La medida cautelar funda su importancia en lo expuesto al constituir un


mecanismo procesal que probablemente permitirá asegurar la
ejecutabilidad del fallo final (pues no toda medida preventiva es
absoluta), lo que de por sí puede significar la futura obtención del
resultado material aludido, contribuyendo de ese modo a lograr el
cometido del proceso.

Trasciende entonces esta figura procesal de manera considerable,


porque garantiza que durante el curso del proceso no se convierta en
ilusoria la declaración judicial contenida en la sentencia, permitiendo un
real cumplimiento de ella. Es tal la importancia de las medidas cautelares

77
que Gozaini la destaca aún mas diciendo que “… ellas no son
salvaguarda del derecho subjetivo, sino de la finalidad jurisdiccional”.

5.5. Características De Las Medidas Cautelares

El artículo 612° del Código Procesal Civil está referido a las


características de la medida cautelar y preceptúa lo siguiente:

“Toda medida cautelar importa un prejuzgamiento y es provisoria,


instrumental y variable”12.

Dicho numeral peca de limitado, porque las medidas cautelares se


caracterizan –principalmente- por su:

 Jurisdiccionalidad.
 Provisoriedad
 Instrumentalidad.
 Variabilidad.
 Función aseguradora.
 Reserva.
 Proporcionalidad.

Jurisdiccionalidad: La medida cautelar se caracteriza por su


Jurisdiccionalidad, porque emerge de una resolución dictada por el
órgano judicial. Es, pues, un acto jurídico procesal del Juez, quien expide
su decisión cautelar a solicitud parte. Las medidas precautorias “…son
jurisdiccionales, en cuanto son actos anticipados de una actividad
probatoria reconocidamente jurisdiccional…”

La Jurisdiccionalidad de la medida cautelar implica, además, que el


juzgador tiene la potestad o autoridad para asegurar su mandato final,
anticipando todos o determinados efectos de la sentencia a dictarse en
el proceso. Ello es entendible si se tiene presente que nunca se
encuentra desligada de la jurisdicción el imperio (el poder del juez para

12
GOZAINI, 1992, Tomo I, Volumen 2; pág 795

78
materializar sus decisiones y hacer efectivo el derecho), porque de ser
así, las resoluciones judiciales carecerían de ejecutabilidad.

Se dice, entonces, que la medida cautelar es jurisdiccional, porque se


adelanta ciertos efectos del fallo (lo que representa en esencia una tutela
mediata) con lo que se garantiza la aplicación material del derecho
proclamado en él.

5.6. Requisitos de la solicitud cautelar

La fundamentación de la pretensión cautelar (requisito de la solicitud


precautoria previsto en el artículo 610 –inc. 1)- del CPC) implica la
exposición de los argumentos que causen convicción al Juez respecto
del fumus boni iuris o verosimilitud del derecho invocado (que sustenta
la pretensión principal), respecto de la necesidad de la decisión
preventiva por la existencia del periculum in mora y respecto de la
razonabilidad de la medida precautoria para garantizar la eficacia de la
pretensión.

La solicitud debe contener los “fundamentos de la pretensión cautelar”


(inciso 1 del artículo 610 del CPC). Esta exigencia es determinante para
conceder la medida, pues en ella el interesado debe mostrar los
elementos de la cautela: verosimilitud y peligro en la demora; si se
carece de estos, la pretensión se desestimará y carecería de objeto
ingresar a analizar la adecuación de la medida, la contracautela, tipo de
cautela, bienes, órgano de auxilio, etc.

La admisión de una medida cautelar dependerá de la observancia de los


requisitos que a continuación se indican:

- Fumus boni iuris

- Peligro en la demora u otra razón justificatoria de la medida precautoria.

- Razonabilidad de la medida cautelar para garantizar la eficacia de la


pretensión.

- Contracautela.

a. El fumus boni iuris es una expresión del Derecho Romano que


debe ser entendida como apariencia o verosimilitud del derecho.

79
“Esta expresión latina (…) significa la apariencia del derecho
legítimo, el humo del buen derecho…”. Un derecho es verosímil
cuando reviste apariencia de verdadero. La certeza del mismo se
configurara cuando se adquiere convicción de su existencia.
Ahora bien, para decidir la litis es indispensable que el Juez este
convencido de la certeza del derecho en que se sustenta la
pretensión, lo cual se logra si están acreditados suficientemente
los hechos en que la última reposa. Es por ello que la actividad
probatoria de las partes tendrá por finalidad formarle tal
convicción al Juez. Sin embargo tratándose de la medida cautelar
solo le es exigible al peticionante que acredite no la certeza sino
la verosimilitud. del derecho en que funda su pretensión principal.

“… El conceder o no las providencias cautelares, depende de una


apreciación de probabilidad del Juez acerca del presumible
fundamento de la acción-pretensión de fondo…” . Sera en el curso
del proceso central que se determinara si el derecho aparente que
se invocó para la concesión de la medida cautelar resulta ser
cierto –y por lo tanto amparado- o, en su defecto, inexistente, por
lo que no será objeto de tutela. La determinación de la
verosimilitud del derecho emerge, pues, de una apreciación
sumaria y nada exhaustiva en comparación con la que tendrá
lugar en la fase probatoria del proceso principal del que derivara
la declaración de certeza sobre la existencia o inexistencia del
derecho invocado. Dicha declaración de certeza confirmara si el
cálculo de probabilidades en que consiste la decisión cautelar
respecto del derecho que se alega corresponde a la realidad o no.

Por lo tanto, “… no se trata de establecer la certeza de la


existencia del derecho, que es propiamente el objeto del proceso
principal, sino solamente de formular un juicio de probabilidad de
su existencia, sobre la base de una cognición sumaria y
superficial…”.

b. Peligro en la demora u otra razón justificatoria de la medida


precautoria, “Constituye requisito especifico de fundabilidad de la
pretensión cautelar el peligro probable de que la tutela jurídica

80
definitiva que el actor aguarda de la sentencia a pronunciarse en
el proceso principal no pueda, en los hechos, realizarse
(periculum in mora), es decir que, a raíz del transcurso del tiempo,
los efectos del fallo final resulten prácticamente inoperantes…”13.

El peligro en la demora es, pues, aquel requisito de la medida


cautelar consiste en el riesgo de ineficacia de la sentencia a
dictarse en el litigio, en caso de no expedirse en forma inmediata
el auto de cautela que asegure el cumplimiento o ejecutabilidad
de aquella. BREMBERG, dice de este requisito que “no se trata
(…) de peligro genérico de daño jurídico que puede amenazar al
derecho y subsanable mediante la tutela ordinaria, sino del peligro
que, contemplando cualitativamente iguales riesgos,
circunscribese a los ocasionados o facilitados por el transcurso
del tiempo en que el proceso requiere para alcanzar su cometido”

Para Ángeles Jove, “… el periculum in mora es, específicamente,


el peligro de ulterior daño marginal que podría derivar del retraso
en la obtención de la resolución definitiva. Por tanto, aparecen
delimitados los dos elementos configurados de este presupuesto:
la demora en la obtención de una sentencia definitiva, y el daño
marginal que se produce precisamente a causa de este retrato.
No obstante, ambos se entienden formando un todo unitario
debido a su necesaria interrelación”.

c. Razonabilidad de la medida cautelar para garantizar la eficacia


de la pretensión, la medida cautelar que se solicite no debe estar
dirigida a causar perjuicio a la contraparte de un modo
desproporcionado, abusivo o innecesario, sino que debe estar
orientada, estrictamente, a asegurar el cumplimiento de la
decisión definitiva. Es por ello que en la fundamentación de la
pretensión cautelar, el peticionante debe explicar
adecuadamente la razonabilidad de la medida preventiva para
garantizar la eficacia de la pretensión. Si tal medida fuese a
todas luces excesiva o si busca imponer a la parte contraria un

13
REDENTI, 1957, Tomo II: 245

81
gravamen innecesario, entonces, se estará incumpliendo el
requisito examinado en este apartado y deberá desestimarse la
solicitud cautelar.

d. Contracautela, requisito de la medida cautelar previsto en el


artículo 610, inc 4 del CPC, denominada también fianza o
caución judicial, puede ser definida como aquella figura
procesal dirigida a garantizar la reparación de los daños y
perjuicios causados indebidamente a quien sufre la ejecución
cautelar. Consiste en la garnatia real (dinero, hipoteca, garantía
mobiliaria, etc.) o personal (fianza o caución juratoria) que se
pone a consideración del juzgado, la cual, de ser admitida,
tendrá por objeto asegurar la indemnización que pueda
corresponder al afectado, haciéndose efectiva sólo en el caso
que el derecho que sustenta la pretensión del cautelado sea
desestimado, pues, resulta evidente que no puede hablarse de
daños y perjuicios derivados de la tramitación cautelar cuando
la pretensión del solicitante de la medida es al final amparada
por el órgano jurisdiccional.

5.7. Contenido De La Decisión Cautelar

La medida cautelar es otorgada sin contradictorio y en forma inmediata.

Frente a ello, y a fin de no ser arbitraria la decisión que tome el juez, se


exige la presencia de ciertos elementos para concederla, como la
verosimilitud del derecho y el peligro en la demora. La contracautela no
es un elemento de “la medida cautelar” sino un presupuesto para la
“resolución cautelar” y por ende, para la ejecución de ella. En ese
sentido, el artículo 611° del CPC precisa que la contracautela forma parte
de la resolución cautelar más no de la medida cautelar en sí. El solo
otorgamiento de la contracautela no autoriza el amparo de la medida
cautelar, ella se justifica en atención a la verosimilitud y sobre todo a los
efectos que el peligro en la demora encierra; sin embargo, existen otros
autores como Monroy Palacios que consideran-a la adecuación- como
un tercer elemento para la medida cautelar, pues se exige que la medida
cautelar sea congruente y proporcional con el objeto de su

82
aseguramiento. Como señala el artículo 611° del CPC, el juez dictará
medida cautelar en la forma solicitada o la que considere adecuada
atendiendo a la naturaleza de la pretensión principal.

Cuando nos referimos a la verosimilitud del derecho, tenemos que


considerar a lo aparente, esto es, a la probable existencia de un derecho,
del cual se pide o se pedirá, tutela en el proceso principal. Como señala

Liebman, no se trata de establecer la certeza de la existencia del


derecho, que es propiamente el objeto del proceso principal, sino de
formular un juicio de probabilidad de su existencia sobre la base de una
cognición sumaria y superficial14. En ese sentido, Para Rivas ”lo
verosímil ha de ser el derecho, que el invocado por quien pide la medida,
aparezca a la luz de la razón como posiblemente cierto, es decir,
conllevando por su contundencia, la virtud de ser reconocido por un juicio
de certeza si se confirman durante el pleito los elementos que se
observan al tiempo de formular el juicio de verosimilitud. Es el fumus boni
iuris del Derecho Romano. Lo posible es lo que es admitido como
susceptible de darse en la realidad; el derecho será verosímil si es
probable que exista, y lo probable es lo que se puede demostrar
mediante la comprobación de los hechos”. Debe exigirse la mera
apariencia del derecho y no la existencia incontestable de él, para lo cual
la verificación debe ser prima facie, sin exigir un examen exhaustivo.

El peligro en la demora constituye el elemento más importante a tomar


en cuenta en el estudio de la medida cautelar. Este requiere ser alegado
y justificado, mas no probado. Barrios De Angelis advierte que todo el
fenómeno no determina el peligro actual para que el objeto del proceso
se Modifique, por causa externa o interna, antes de que las funciones
principales se hallen en estado de transformarlo; o que el peligro actual
vierta sobre la alteración de los medios de instrucción, por causa externa
sumada a la falta de instantaneidad del proceso. En ambos casos se
tiene en cuenta el daño previsible para la plena eficacia de las funciones

14
LIEBMAN, Enrico Tullio. Manual de Derecho Procesal Civil, Ediciones Juridicas Europa-America (EJEA),
Buenos Aires, 1980, p.162

83
ejercidas en el futuro de ahí que en la doctrina se haya acuñado la
locución periculum in mora15.

El segundo párrafo del artículo 611° del CPC señala que solo se afectan
bienes y derechos de las partes vinculadas por la relación material o de
sus sucesores, en su caso. Frente a ello tenemos que señalar que tanto
los bienes como los derechos forman parte del patrimonio de una
persona físico o jurídica, destinado no solo a la satisfacción de sus
necesidades sino a garantizar sus responsabilidades. Los derechos, que
pueden ser de naturaleza real y personal, así como los bienes que lo
integran tienen que ser susceptibles al tráfico jurídico del comercio entre
los hombres. Es importante precisar ello porque los derechos que no
reúnen estas condiciones, no forman parte del patrimonio, aunque
pertenezcan a su titular.

5.8. La Contracautela

La contracautela responde al principio de igualdad, ya que viene a


contrarrestar la ausencia de la contradicción inicial que caracteriza al
proceso cautela. La determinación del tipo y del monto de la
contracautela se halla librada al criterio judicial. Como señala el artículo
613° del CPC, “La admisión de la contracautela, en cuanto a su
naturaleza en monto, será decidida por el juez quien podrá aceptar la
ofrecida por el solicitante, gradual, modificarla o, incluso, cambiarla por
la que considere pertinente”.

La contracautela se justifica en atención a que la medida cautelar nace


para una función asegurativa, la que puede cumplir satisfactoriamente
con su objetivo o puede ser inútil y provocar perjuicio; de ahí que una
de las características de la medida cautelar es la contingencia, porque
está ligada al riesgo. Si no se ampara la demanda, hay la obligación de
indemnizar al perjudicado con la ejecución cautelar.

La obligación de indemnizar no surge porque la medida cautelar dictada


sea injusta, sino por el hecho que su expedición y ejecución importa
riesgo, que debe ser asumido por quien se beneficia con él. Esto nos

15
BARRIOS DE ANGELIS, Dante. Teoría del proceso, 2ª ed., Julio Cesar Faira editor, Buenos Aires, 2002, p.
209

84
lleva a señalar que también concurre una cautela a favor del ejecutado
con la medida, por supuesto con un objeto diverso al del ejecutante,
pues no solo el mandato del juez se orientará a cautelar la satisfacción
futura del derecho en litigio sino en cautelar el daño que pudiere causar
la ejecución de dicha medida; de ahí que algunas opiniones disienten
calificar de contracautela a la tutela de posible daño al ejecutado con la
cautela, pues en ambos casos hay cautela.

La contracautela según su naturaleza se divide en real y personal. La


real se va a expresar en una suma de dinero, títulos o bienes, que
pueden pertenecer al propio beneficiado o terceros, quienes darán su
conformidad.

La contracautela personal se expresa en la fianza, sin embargo, se


permite el juramento propio afectado o promesa de terceros de
reconocida solvencia económica y moral de responder por el perjuicio
que pudiera producir la traba, por ejemplo, un banco u entidad
financiera podría otorgar esa contracautela, siempre y cuando el
derecho en discusión no esté relacionado con la mala fe o con la
actividad ilícita del banco.

La contracautela en relación al tiempo, puede ser transitoria o


permanente.

En el caso de contracautela sometida a plazo, su vencimiento y la falta


de renovación, produce la pérdida del efecto garantizador, que se
extenderá a la propia medida garantizada, en la forma que señala la
última parte del artículo 613°, esto es, sin necesidad de requerimiento
y dentro del tercer día de vencido el plazo. Este efecto que recoge dicho
artículo resulta coherente con la razón de ser la contracautela en el
procedimiento cautelar. Hay que recordar que la contracautela se funda
en el principio de igualdad, que debe tener en cuenta la resolución
cautelar, pues no solo se debe pretender asegurar al actor un derecho
no actuado, en atención a la verosimilitud y el peligro en la demora, sino
que también debe preverse la posibilidad de asegurar al demandado la
efectividad del resarcimiento de los daños, si aquel derecho no
existiera. Más allá de la forma como se otorgue la contracautela, nada

85
impedirá que se cumpla el principio rector en la responsabilidad civil en
la actividad judicial, cual es, todo aquel que cause un daño debe
repararlo.

5.9. Variación de la medida cautelar

Una de las características de la medida cautelar es su variabilidad. Ello


implica que la medida dictada puede ser modificada para lograr simetría
entre ella y la naturaleza, magnitud o extensión de la tutela ordenada.

Cuando no se aprecia este equilibrio, el sistema cautelar permite que


cualquiera de las partes puedan buscar modificarla. A través de la
mejora, ampliación reducción y sustitución de la ya ordenada medida
cautelar. Lo provisorio de la medida no aparece regulado en este
artículo, sino que está vinculado con la temporalidad del proceso y con
la definición del derecho asegurado.

De acuerdo al artículo 617° del CPC, la medida cautelar es susceptible


de variación en cualquier estado del proceso, pudiendo ésta
concretarse con:

- La modificación de su forma.

- El cambio de los bienes cobre los que recae.

- El aumento o reducción de su monto.

- La sustitución del órgano de auxilio judicial (depositado, custodio,


interventor recaudador, interventor informador o administrador).

En virtud del principio de igualdad procesal, la parte afectada con la


medida cautelar puede también solicitar su variación en cuanto a la
forma, bienes, monto y órgano de auxilio judicial. De la solicitud de
variación que presente el demandado se correrá traslado al solicitante
de la medida preventiva, y, absuelto el mismo o en su rebeldía, será
resuelta por el juez, quien en esta hipótesis, así como en la del pedido
de variación formulado por el peticionante de la medida, decidirá
atendiendo a las circunstancias particulares del caso. Tal decisión
puede ser materia de recurso de apelación, que, de ser concedido, se
tramitará sin efecto suspensivo (por lo que la eficacia de la resolución

86
impugnada se mantiene, incluso para el cumplimiento de esta: art. 368°
inc. 2 del CPC).

87
CONCLUSIONES

CONCLUSIONES BARZOLA HUANUCO, URPY

Lo que podemos concluir de todo lo anteriormente expuesto es que la teoría


general de proceso es la base del derecho procesal ya que desde mi punto de
vista todo tipo de derecho civil, penal, laboral, etc. Comienza con una teoría para
posteriormente convertirse en una realidad es decir que sus aspectos generales
se hagan ya legales en todo. El derecho procesal surgió como una necesidad
para regular la conducta de los que administra la justicia así mismo para llevar a
cabo cada parte del procedimiento como debe ser y no como los administradores
de justicia quisieran que fuera.

CONCLUSIONES SUDARIO VILCHEZ, JEAN

En todo los tiempos yo pienso que habido distintas necesidades pero siempre la
necesidad de tener un cuerpo normativo que regule tal o cual situación, ya que
si no existirían los cuerpos normativos y quienes lo aplicaran caeríamos en la
barbarie, es bien sabido que ha aun exigiendo tales cuerpos normativos o legales
muchas veces la sociedad se encuentra en conflictos y disgustos. Entonces es
necesario que existan estos y yo considero que uno de los más importantes tipos
de derecho es el derecho procesal es decir un proceso un procedimiento en dado
caso que así se requiera y no importe de que rama estemos hablando pública o
privada al fin y al cabo todos estos tienen que llevar paso su procedimiento y en
base a este derecho es como ellos se van a guiar.

CONCLUSIONES: GASPAR REYES ECSON


En el presente trabajo que presento se trató de escribirlo a medida de lo
humanamente posible hemos tratado de utilizar un lenguaje claro y accesible,
puesto que en verdad no soy un jurista dedicado, sino que vivo a la medida de
mis posibilidades y oportunidades, el presente se inicia con los conceptos básico
como lo es el proceso, ya que tuvimos que diferéncialo de los tantos existente,
al proceso que nos interesa que es el proceso civil, el proceso en sí, es el
conjunto de actos mediante los cuales se constituyen, desarrolla y termina la
relación jurídica que se establece entre el juzgador, las partes y las demás

88
personas que en ella intervienen; y que tiene como finalidad dar solución al litigio
planteado por parte, a través de una decisión del juzgador basada en los hechos
afirmados y probados y en el derecho aplicable. Luego entonces; El proceso es
la suma de actos por medio de los cuales se constituyen, desarrolla y terminan
la relación jurídica. Esto está encaminado a que todo proceso tiene una trilogía,
y en este caso la componen la acción, que es la que abre el proceso, y la
Jurisdicción, que es la facultad que tiene es estar para intervenir en el litigio, y
por último el proceso, que ya antes se mencionó.

Luego entonces podemos definir al proceso; Es la disciplina que estudia el


conjunto de normas que regulan el proceso a través del cual se solucionan los
litigios que versan sobre la interpretación o aplicación de normas sustantivas
civiles.

Continuando con las conclusiones podemos decir que las fuentes del derecho
procesal son; los Tratados internacionales, la ley, la costumbre, la jurisprudencia,
principios generales del derecho, la doctrina.

También aprehendimos sobre la clasificación de los diferentes procesos como


los son; los contenciosos y los no contenciosos. Dentro de la historia del derecho
procesal civil nos remontamos hasta la época precortesiana, la cual ya nuestros
antepasado tenían la noción de este derecho, y hasta llegar a la época
independiente, en donde ya se establece con un derecho en sí, dentro de nuestro
estado de derecho. Es de gran importancia saber que el proceso se divide en
varias fases o etapas, en las que el litigio se desenvuelve para llegar una final.

En cada una de las diferentes fases hay diferentes promociones que a las partes
y a los abogados les toca realizar, y sólo el juez será un receptor de toda la
información la cual sirve como alimento al juicio y a la administración de la justicia
para que con ello el juez, tenga la suficiente masa, para poder definir y dictar una
resolución, esta resolución va a estar basada como ya lo dije anteriormente de
la información, esta información, van hacer básicamente las pruebas, ya que con
ellas las partes en el proceso van a defender sus hechos y derechos mediante
la razón de dichas pruebas.

Posteriormente de unos buenos alegatos, vendrá la Sentencia la cual estará


basada en todo lo aportado oportunamente, en donde el juez considerará las

89
pruebas, los hechos, y derechos de las dos partes, la cual es una decisión
delicada por parte del estado, como responsable de impartir justicia.

Destacamos también los Juicios Especiales, que son; Estos procedimientos


constituyen verdaderos juicios o procesos, que en muchos casos son meras
tramitaciones, formas especiales de tramitación o de procedimientos. Sólo
algunas de estas formas de juicios especiales sí constituyen un genuino proceso,
o un genuino juicio. Los cuales son de gran importancia por ser característicos
dentro del Derecho Procesal Civil, los cuales son los siguientes; Juicio
hipotecario, juicio especial de desahucio, juicio arbitral, juicio en rebeldía,
tercerías, juicios sucesorios, jurisdicción voluntaria.

90
SUGERENCIAS

GASPAR REYES ECSON

 Implementación de los libros en la biblioteca y actualización.

 Halos coordinadores del colegio de abogados a dar mejores


informaciones.

 Facilitar halos alumnos que realizan sus carreras profesionales de


derecho la obtención de carnets al colegio de abogados.

91
BIBLIOGRAFÍA

1. QUINTERO, Beatriz y PRIETO, Eugenio; Teoría General del Proceso, Editorial


Temis S.A, Santa fe de Bogotá-Colombia, 1995.
2. TICONA POSTIGO, Víctor; El Debido Proceso y la Demanda Civil; 2da ed,
Tomo I, RODHAS; Lima-Perú, 1999.
3. MONTERO AROCA, Juan y otros. El Nuevo Proceso Civil 2000, Ediciones
Tirant Lo Blanco, Valencia, España, 2000.
4. CARRION LUGO, Jorge, Tratado de Derecho Procesal Civil, Volumen I, Teoría
General del Proceso, Editora y Distribuidora GRIJLEY e.i.r.l, 2001. MONROY
GALVEZ, Juan; Introducción al Proceso Civil, Ed, Tomo I, Editorial Temis-de
Belaunde & Monroy, Santa Fe de Bogotá, Colombia, 1996.
5. Código Procesal Civil, 2016; TOMO I y II.

92

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