Acto III

Escena 1
NARRADOR: Era domingo de noche una pareja de personas paso por el refugio con una
linterna. Todos quedaron asustados pensando que irían a visar a la policía. El día
siguiente es lunes de Pascua y nadie iría a trabajar hasta el martes así que no podían
moverse hasta cierto día en la mañana.
SRA. VAN DAAN: Oh no que pasara con nosotros si nos descubren. Oh no, ¡qué miedo!
ANA: Ya cálmese señora solo hay que esperar hasta el martes y todo será normal.
SR VAN DAAN: Shhh, guarden silencio, si no la policía nos descubrirá.
MARGOT: Todos queremos ir al baño, pero no podemos, ahora que haremos.
PETER: Usaran mi cesto de papeles para no usar el ruidoso inodoro. (sosteniendo uno)
OTTO: Bueno usaran todos los baldes de Peter. Pero cuando terminen se recostarán en
el suelo y trataran de dormir.
NARRADOR: Todos trataban de dormir, pero no podían a causa del miedo y los
cuchicheos. Luego de un par de horas quedaron dormidos a causa de la fatiga, a la
mañana siguiente recibieron la visita de Henk, el esposo de Miep.
ANA:(Despertándose) Pero que frio.
OTTO: Oigo unos pasos en la parte de afuera. Espera creo que es Henk.
ANA: Si es Henk ábranle la puerta.
HENK: (Entrando) Hola como están, ayer mientras pasaba con mi esposa escuche unos
ruidos extraños por aquí así que saque mi linterna, pero me acorde de que eran
ustedes así que seguí mi camino.
ANA: ¿Eras tú? Vaya pensé que eran unas personas que avisarían a la policía sobre
nuestro escondite.
HENK: Solo pase para avisarles y también ver mi oficina, disculpe la molestia más bien,
hasta luego me tengo que retirar al trabajo (se despide y sale de escena)
ANA: ¿Papá y donde está el señor Dussel?
OTTO: La verdad no sé, creo que fue a buscar un par de cigarrillos en su habitación.
ANA: Voy a la oficina a ver si hay algo que arreglar.
PETER: Hola Ana, ¿que buscas por aquí?
ANA: nada especial….
PETTER: ¿deseas que te ayude?
ANA: bueno, un poco de ayuda no vendría mal. (sonriéndole)
NARRADOR: Ana y Peter sostuvieron una conversación muy larga sobre lo que paso
días atrás. La velada termino con un beso reciproco que gusto mucho a Ana.
ANA: Un día de estos llevare mi diario con Peter para que profundicemos en algunas
cosas. O tal vez mostrarle la linda flor que me regalaron el sábado. Mejor me empiezo a
irme a mi habitación para escribir lo ocurrido en mi diario.