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II.

Las Capacidades Coordinativas como Medio de Desarrollo Motriz en la Etapa


Escolar (Inicial)
2.1. Investigar sobre la coordinación:
Definición: Las capacidades coordinativas son pre-condiciones
psicomotrices generalizadas de los deportistas las cuales cumplen la
función de regular acciones motoras. Son aquellas capacidades que
dependen del sistema nervioso central y periférico para su dirección y
regulación. Estas capacidades son necesarias para que la acción del
individuo sea rápida, exacta y adaptada a las condiciones del entorno.
Según los especialistas alemanes Reh, J. Ritter, I (s/f). Estas son:
- De orientación: permite al movimiento del cuerpo cambiar de situación en
el espacio y el tiempo de acuerdo a las exigencias del medio. - De
diferenciación: permite al individuo diferenciar una habilidad de otra
sincronizando las fuerzas musculares.
- De combinación: permite reunir varios movimientos parciales para lograr
una acción más compleja.
- De adaptación: permite que la actuación se adapte y modifique de
acuerdo a las situaciones presentes.
- De reacción: permite una respuesta rápida frente a un estímulo dado. - De
equilibrio: es la mínima cantidad de oscilación del cuerpo en las diferentes
acciones del cuerpo.

Medios
La psicomotricidad nace de la interacción del cuerpo con el medio externo.
Desde que él bebe nace está en contacto con su entorno y busca
relacionarse con su medio ambiente, a través de esta relación se forma en
nuestro psiquismo las implicancias del movimiento.
La psicomotricidad presenta diferentes dimensiones:
 Madurativas: relacionadas con la maduración del sistema nervioso.
 Sensorio perceptuales: el niño desde que nace entra en contacto con
su cuerpo y su medio ambiente a través de los sentidos.
 Motrices: relacionado con el movimiento del cuerpo en sí mismo.
 Cognitivos: el mover su cuerpo y explorar su medio ambiente le
permite al niño adquirir nociones básicas y desarrollar
los procesos depensamiento.
 Emocionales: un niño que se mueve, explora y descubre el mundo, es
un niño bien adaptado y feliz.
Por lo tanto, cuando un niño logra desarrollar su psicomotricidad,
adquiere el control de su cuerpo a través de sus acciones, desarrolla un
componente interno donde representa mentalmente su propio cuerpo y
su posibilidad de acción, pudiendo usar diversas herramientas.
Medios
Desarrollo de habilidades motrices de niños
Es una etapa fundamental para el desarrollo de la personalidad del niño
- niña y está determinada por factores biológicos y sociales que influyen
en el resultado de la adaptación intelectual y motriz producto de la
interacción de su organismo con el medio circundante. Cada acción
significa una experiencia, las cuales se coordinan mediante esquemas
que abarcan un radio de acción con influencias que van siendo cada
vez más amplias y complejas. Este proceso no es apresurado, sino lleva
su tiempo y varía según los factores biológicos y sociales como
la herencia, maduración biológica, desarrollo físico y crecimiento,
experiencia práctica además del proceso de instrucción y formación en
el que participe.
En estas edades resulta de gran importancia el perfeccionamiento de
las funciones del organismo del niño, la contribución a su correcto
desarrollo y el fortalecimiento físico, elevar la eficiencia y capacidad
de trabajo, además del rápido crecimiento y desarrollo de los órganos
y sistemas. La actividad motriz de los mismos no se ha perfeccionado
completamente, las propiedades de defensa del organismo se
manifiesta muy débilmente; por lo que los niños pequeños están
expuestos a las influencias perniciosas del medio exterior. Es por ello
que resulta tan necesario contribuir al correcto desarrollo y
perfeccionamiento del sistema óseo, a la formación de las líneas
fisiológicas de la columna vertebral, al desarrollo del arco del pie, a
fortalecer todos los grupos de músculos, al desarrollo del sistema
cardiovascular, a fortalecer los músculos que ayudan al funcionamiento
de este y así como a contribuir a que la respiración se produzca de una
forma profunda y rítmica, además del desarrollo del sistema nervioso y
de los analizadores.
Según Herminia Watson Brown en su libro "Educación de la motricidad
infantil entre las edades de 3-5 años los niños - niñas realizan los
movimientos con mayor orientación espacio-temporal y mejor desarrollo
de las capacidades coordinativas, además de variadas acciones con su
cuerpo de forma individual con y sin objetos, combinándolos en
pequeños grupos. Logran organizar juegos y actividades motrices,
vinculando las tareas motrices con diversas construcciones organizadas
por ellos, lo cual contribuye a enriquecer sus movimientos por iniciativa
propia.
Existe un predominio de la memoria, el pensamiento y el lenguaje en los
procesos cognitivos y mayor desarrollo de la imaginación. Se aprecia un
inicio de equilibrio entre lo afectivo motivacional y regulativo de forma
tal, que controla mejor su actuación, aunque no sobre sus propios
procesos. Esto le permite un mayor nivel de independencia en el
quehacer cotidiano y la posibilidad de elegir qué y con quién hacer.
El juego ocupa un lugar central en su vida.
Entre los logros a alcanzar tenemos: carrera combinando con otros
elementos, cuadrúpeda por encima de bancos y tablas con movimientos
coordinados, reptan por el piso coordinadamente, caminan por bancos
con diferentes combinaciones y buena estabilidad, escalan, capturan
pelotas con ambas manos y lanzan de diferentes formas y desde
diferentes posiciones.
En estas edades, es necesario tener en cuenta el desarrollo del
pequeño en relación con la motricidad fina, motricidad gruesa con
etapas del habla y el lenguaje. El progreso de los niños - niñas
dependen del desarrollo individual de cada uno.
Motricidad fina
Construye torres de alturas indefinidas.
 Corta figuras sencillas con tijeras.
 Realiza figuras con plastilina.
 Sostiene objetos con los dedos en vez de sostenerlos con el puño.
Motricidad gruesa
 Se reta a sí mismo durante los juegos en el receso.
 Se para en un pie durante cinco o diez segundos.
 Atrapa pelotas.
 Camina, corre y salta en diferentes direcciones.
 Lanza y golpea pelotas de forma combinada.
 Escala con coordinación.
 Trepa por un plano vertical.

2.2. Investigar sobre la lateralidad


Definición: Las capacidades físicas coordinativas de lateralidad son aquellas
que le permiten a un individuo desarrollar movimientos de manera precisa y
eficaz (Porto, 2016).
Se relacionan principalmente con la práctica ordenada de los movimientos
para cumplir un objetivo, están fundadas en percepciones y/o en acciones,
que se aplican al proceso de regulación y dirección del movimiento.
Este tipo de capacidades se reconocen por ser esenciales para que los
deportistas puedan ejercer determinadas actividades de forma más o
menos adecuada dentro de sus disciplinas.
En concreto, las capacidades físicas coordinativas tienen que ver con toda
ejecución de una acción motora que requiera exactitud. En combinación
estrecha con otras cualidades, le dan a cualquier deportista las condiciones
indispensables para lograr un alto rendimiento.
Es importante notar que las capacidades físicas deben ser trabajadas
desde la infancia y adolescencia, a la manera de entrenamiento técnico,
con el objetivo de conseguir un adecuado desarrollo motriz.
Por mucho tiempo, los entrenadores deportivos prestaron más atención a la
práctica deportiva y a las capacidades condicionales (la fuerza, la
resistencia y la velocidad).
Con el paso de los años y ante un entorno cada vez más competitivo,
ampliaron su horizonte hacia otras capacidades profundamente afines con
el sistema nervioso.

Medios:
Ejercicios para definir la lateralidad del cerebro de los niños

Alcanzar la lateralidad completa del cerebro de los niños es el objetivo de


estos ejercicios, que están especialmente indicados para los niños que
después de realizar los tests para conocer si utiliza más el hemisferio
izquierdo o el derecho dek cerebri, han demostrado que tienen una
lateralidad cruzada, es decir, que no tienen una lateralidad completa
definida, lo que puede conducirles a problemas de aprendizaje en el
colegio. Una vez que el niño/a domine los ejercicios de patrón
cruzado y haya demostrado una preferencia clara hacia uno de los lados,
izquierdo o derecho, podemos ayudarle a alcanzar una lateralidad plena
fomentando el uso de esa parte del cuerpo.
Ejercicios para definir la lateralidad del cerebro de los niños

Uso de la mano
Para afianzar la lateralidad hay que enseñarle a hacer las cosas
exclusivamente con la mano dominante ya sea diestro o zurdo: - Al comer,
que use los cubiertos con la mano apropiada. - Al beber, hemos de poner el
vaso en el lado adecuado del plato para que utilice siempre la mano que
corresponde.
- Podemos observar cuando juegue con que mano coge los objetos e
insistirle que lo haga con la mano correctamente.
 Si el niño tiene dificultad en desarrollar una "mano dominante", podemos
hacerle que cierre los ojos para, a continuación, ponerle un pequeño
objeto en la palma de la mano (clip, canica, etc.) y que lo identifique por el
tacto para estimularle.

Escritura
Si un niño tiene mala letra con la mano dominante necesitará algún
ejercicio adicional de escritura, con el consejo del colegio. Lo ideal es
utilizar una pizarra antes de pasar a los tradicionales cuadernos de
caligrafía. Le haremos ponerse frente a la pared, derecho, con la barbilla
tocando la pared: ese será el punto para marcar el centro exacto de la
pizarra cuando está colgada. El niño deber estar siempre de pie mientras
escribe en la pizarra, de forma recta y sin apoyarse en nada. Ha de escribir
las palabras que sabe leer, copiándolas, y grandes. Si no es capaz de
escribir en línea derecha, le haremos con esparadrapo una guía, a la altura
de su barbilla. La duración de las sesiones (hasta 4 al día, según lo mala
que sea la escritura del niño) ser en de 10 minutos o menos. 3. Tirar una
pelota La destreza natural m s difícil de enseñar es la de lanzar una pelota.
Si es preciso, puede practicar diez minutos al día. Si el niño es diestro se
comi ...

Tirar una pelota


La destreza natural m s difícil de enseñar es la de lanzar una pelota. Si es
preciso, puede practicar diez minutos al día.
Si el niño es diestro se comienza por hacerle tirar suavemente una pelotita
de goma con la mano derecha de abajo hacia arriba. Luego le
enseñaremos a poner el pie derecho hacia delante, cada vez que tire la
pelota.
Cuando haya aprendido a comenzar con el pie derecho adelante, uno de
los padres ha de poner la mano sobre ese pie (el derecho) mientras tira.
Como no puede mover el pie derecho, esto ayudar al movimiento del pie
izquierdo, el pie adecuado para un tirador diestro.
El ejercicio completo consiste dar un paso hacia adelante con el pie
izquierdo al tiempo que tira con la mano derecha. Cuando mejore lo hará de
forma natural en patrón cruzado.
Para los zurdos, el pie izquierdo se pone en posición adelantada y se
inmoviliza. Mientras la mano izquierda se mueve hacia atrás para lanzar la
pelota, el pie derecho se mueve hacia adelante terminando el movimiento
en un patrón cruzado.
Uso del pie
Hay que entrenar el pie del mismo lado que la mano dominante. Puede
comenzarse, por ejemplo, levantando canicas con los dedos del pie que
quiere hacerse dominante. Luego puede intentar levantar cosas más
difíciles. Luego, habrá que enseñarle a coger un lápiz, o un rotulador
grueso, entre el dedo gordo y el siguiente, para que trate de dibujar. Al
principio lo encontrar muy difícil, pero podemos motivarle intentándolo
también nosotros. Después, podemos pasar a chutar la pelota. Al prin ...

Uso del oído


Si las pruebas indican que el oído que el niño utiliza no es el del mismo lado
que su mano dominante, requerir un entrenamiento de esta rea. Lo haremos en
dos periodos de 5 minutos cada uno, hablándole o leyéndole. Mientras nos
sentamos a su lado derecho, le diremos que se tape el oído izquierdo mientras
escucha. Si el niño es zurdo, nos sentaremos a su lado izquierdo, tapándose el
oído derecho. Haremos esto dos veces al día por espacio de cinco minutos
cada vez.

Guiñar
Mientras el niño comienza a hacer uso predominante de una mano, un oído y
un pie, podemos añadir este ejercicio visual adicional: enseñarle a guiñar el ojo
opuesto a su dominante. Algunos niños tienen dificultades para hacerlo. Con la
práctica aprender a guiñar el ojo no dominante mientras mantiene el otro
abierto. Practicaremos esto en cuatro sesiones de un minuto cada día.
Podemos usar un tubo de papel para que el niño mire por él con el ojo
dominante. Le enseñaremos a cerrar el otro ojo mientras mira. Puede practicar
acercando el tubo directamente al ojo dominante, hasta que sepa hacerlo sin
vacilación. Si ya domina esta operación, le haremos practicar acercando el
telescopio al ojo debido sin cerrar el ojo no dominante.

Tiro al blanco

Podemos instalar una pequeña diana en un rincón, con una X grande en


una hoja de papel. Que el niño señale el blanco, a cierta distancia, con el
dedo índice de su mano dominante, mientras cierra el ojo no dominante,
como si estuviera disparando.
Cuando haya aprendido, podemos comprarle una pistola de juguete de
las que tiran un corcho, o munición de goma o dardos de punta de goma
para que practique tiro al blanco. Tiene que mirar con el ojo dominante y
mantener cerrado el no dominante. Tras un tiempo de práctica su puntería
habrá mejorado. Entonces le enseñaremos a tirar con los dos ojos
abiertos.
Que practique puntería con el dedo y tiro cuatro veces al día, durante un
minuto cada vez.

Posición de dormir
or la noche, podemos colocar al niño en la posición adecuada para dormir.
Primero, le enseñaremos a dormir boca abajo. Para ello, esperaremos a que
esté dormido, luego le giraremos boca abajo suavemente, una vez cada noche,
preferiblemente a la hora que nos acostamos nosotros. Si usa almohada, le
pondremos una mediana porque las grandes suelen impedir dormir así.
Cuando hayamos conseguido que el niño duerma boca abajo regularmente,
comenzaremos a colocarlo en la posición adecuada todas las noches, después
de que se haya quedado dormido. La posición adecuada se ve en los dibujos.

2.3. Investigar sobre equilibrio

Definición
Equilibrio, conjunto de reacciones del individuo a la gravedad, es decir, su
adaptación a las necesidades bipedestación y de los desplazamientos en forma
activa. La contribución del equilibrio a la psicomotricidad es la expresión de la
habilidad motriz y la incorporación de información externa.
Medios:
Coordinación: La coordinación es realizar actividades que tengan por objeto
desarrollar la conciencia global del cuerpo, es realizar movimientos que
comprometen varios segmentos corporales, así como la capacidad para
adecuarlos a los datos entregados por los sentidos. En cuanto a la motricidad
los niños de esta edad tienen un impulso enorme al movimiento, sobre todo los
de 4 años: corren escaleras arriba y abajo, desean manejar una bicicleta,
circulan velozmente, caminan hacia atrás distancias largas, saltan una
distancia de 30 a 60 cms., salta sobre una cuerda colocada a 20 cm. del suelo.

También gustan de permanecer sentados y ejercitar la motricidad fina:


enhebrando perlas, armando puzzles, cortando con una tijera, haciendo
monitos de plastilina, dibujando, construyendo torres.
Adquieren independencia para correr lentamente, consiguen vestirse y asearse
solos.

A los 3 años se ponen zapatos, aunque a veces no en el pie correcto;


desprenden los botones de la parte de adelante de sus ropas, usan las dos
manos para construir una torre, copia un circulo con un lápiz, cierra el puño y
mueve el pulgar, edifica cosas sencillas con bloques, puede usar una esponja o
toalla para la cara y colgarla en su lugar después de usarla.

Existe una buena coordinación de manos y dedos, puede mover los dedos
independientemente uno de otro. En cuanto al tomar a los 3 años el equilibrio
sedente es bueno, pero se halla torpemente combinado con la actividad de
toma. El niño se inclina a partir de las nalgas, sin doblar ni la cintura ni el cuello.
Persiste, sin embargo, una marcada flexión del tronco y de la cabeza hacia un
lado.
El perfeccionamiento del mecanismo con la vista se hace evidente en el hecho
de que puede trazar un cuadrado, copiar el dibujo de un circulo y construir una
torre de 9 o 10 cubos. Puede atajar una pelota grande con los brazos
completamente extendidos, por lo menos una de entre dos o tres veces,
aunque la acomodación realizada por los brazos el recibir la pelota es escasa,
si no nula. Puede alimentarse por sí solo sin derramar la comida en demasía y
con ayuda de ambas manos puede verter
Al desvestirse puede sacarse los pantalones.

Juegos:

Los más efectivos ejercicios para mejorar el equilibrio de los niños

1.- Equilibrio en un solo pie


Haz que el niño se ponga con un pie en el suelo y el otro sobre un banquito de
su tamaño. Es la actividad más sencilla para mejorar el equilibrio en un solo pie
y puede modificarse para hacerla cada vez más difícil.
En vez de una superficie estable como un banco, reemplázala por una pelota
en la que sea más complicado sostenerse.

2.- Tablas de balanceo


Una tabla de balanceo o equilibrio es una superficie de plástico o madera que
tiene una forma curva por debajo. Con un pie en cada extremo de este
implemento, el niño debe intentar conservar la estabilidad. El solo hecho de
permanecer unos segundos erguido será un gran logro para el pequeño.

3.- Caminata sobre cintas


Pega dos líneas de cinta de color sobre el suelo para simular una barra de
equilibrio. En los primeros intentos, ubícalas a una distancia de unos quince
centímetros para que tenga un margen más ancho.
Luego, para aumentar el nivel de dificultad deja solamente 10 centímetros entre
ellas. El niño debe caminar por el espacio entre las cintas y, si toca una de
ellas, volver al inicio de la ruta.
Una vez que el niño supere este reto, coloca una barra de madera que esté
elevada sobre el piso. Para evitar accidentes, pon una superficie acolchada
(una alfombra o colchoneta) que lo reciba de forma segura en caso de una
caída.

4.- Rayuela
Este tradicional juego es un maravilloso ejercicio para mejorar el equilibrio de
los niños y pasar un rato divertido en familia. Traza la figura con líneas y pídele
a tu hijo que haga todos los saltos y movimientos con un solo pie. Puedes
hacer variaciones usando ambas extremidades o alternándolas cuando tú lo
indiques.

5.- Balance en el trampolín


En un trampolín instalado a una altura segura para el niño, invítalo a pararse
sobre un pie en el extremo. Para exigirles un poco más de esfuerzo, haz que
otra persona camine a lo largo de la superficie y que el pequeño conserve su
postura. Es una actividad adecuada para el desarrollo físico y también puede
ser muy divertida.
«La mayoría de las personas se sienten mareadas de vez en cuando. Los
niños, al igual que los adultos, a veces pueden sentir mareos o inestabilidad.
Pero si esa sensación se repite o interfiere con la vida cotidiana, podría ser un
signo de un trastorno del equilibrio»
–National Health Institutes–

6.- Pelotas de gimnasia


Otra excelente actividad para ejercitar el equilibrio del niño es sentarlo sobre
una pelota de gimnasia. El reto es que no puede poner los pies sobre el
suelo. Si le resulta muy fácil, proponle realizar otra tarea mientras conserva esa
posición. Un buen ejemplo sería un juego de mesa mientras permanece sobre
la bola.

7.- Montar en bicicleta


Sin duda, una de las actividades que más contribuye a mejorar el equilibrio de
los niños es montar en bicicleta. Haz que empiece con un nivel de complejidad
bajo y que use las que tienen ruedas de apoyo.
Una vez que se haya apropiado de movimientos para desplazarse y sientas
que está listo para el siguiente paso, retíralas. Tendrás que estar ahí para
sostenerlo al principio pero cuando se sienta seguro podrá hacerlo por sí
mismo.
Para desarrollar adecuadamente el equilibrio dinámico y estático y ayudar al
niño a ubicarse espacialmente, modifica todas estas actividades. La forma más
sencilla de hacerlo es pedirles que cierren los ojos al ejecutarlas.

2.4. Investigar sobre la Ritmo y Tiempo

DEFINICION:
Ritmo.
Es el manejo del pulso y el acento que se hace en la ejecución de las
actividades motrices. Es la capacidad que tiene el organismo de alterar
fluidamente las tensiones y distensiones de los músculos por la capacidad de
la conciencia.
Movimiento repetido, con orden, a intervalos regulares de tiempo que permite
cuando uno lo realiza una economía de movimiento.
Tiempo es la capacidad de ubicar las partes del cuerpo en relación con los
objetos y los objetos en relación al cuerpo, en un espacio y un tiempo.
Además, es el manejo segmentario de las partes del cuerpo. Es la conciencia
del movimiento por unos espacios de tiempo
• Puede crear una imagen cerebral más clara.
• Aspectos:
• ORDEN: que es la organización del movimiento.
• Este puede ser de 2 tipos:
INTERNO: PROPIO DEL QUE REALIZA EL MOVIMEINTO O DE ESE
MOVIMIENTO.
EXTERNO: DADO POR FACTORES QUE PUEDEN INFLUENCIAR ESE
RITMO INTERNO.
Medios:

La precisión rítmica depende de la capacidad motriz del niño, a la vez que la


favorece, es un proceso lento que se ha de ir trabajando progresivamente.

El punto de partida para la educación del ritmo ha de ser el cuerpo,


convirtiéndose la maduración motriz en un factor condicionante de la capacidad
de expresar sonoramente los distintos ritmos. En este sentido, podemos afirmar
que la base verdadera del ritmo se encuentra en el movimiento corporal.

Teniendo en cuenta, el desarrollo psicoevolutivo del niño, encontramos que


el ritmo se produce desde la más tierna infancia, ya que el sujeto se entrega a
actividades rítmicas de balanceo, de ajuste de objetos o de sincronización. Si
realizamos un eje cronológico comprobamos que:

 Al año y medio, el niño es capaz de utilizar todo su cuerpo para responder a la


música rítmicamente.
 Hacia los dos años, su motricidad va respondiendo ante el fenómeno musical
dando golpes con los pies y moviendo la cabeza.
 Con cuatro años el niño va adquiriendo un mayor control motriz de las
extremidades inferiores.
 Hacia los cinco años, comienza la maduración en el desarrollo musical del niño,
empezando a coordinar su propio ritmo y el de la música.
 Con seis años la sincronización del ritmo corporal con el de la música será más
eficaz.

Algunas consideraciones didácticas del ritmo dependen del movimiento


natural del niño que será un punto de partida en el trabajo del ritmo musical.
Mediante el ejercicio rítmico, concretado en las canciones, se conseguirá la
regularidad de la pulsación.

El ritmo es por tanto, el elemento de la música que incide con más fuerza en
la sensibilidad infantil y es a través del movimiento cómo el niño lo percibe. El
trabajo del ritmo está dividido en diversos aspectos: Ritmo motriz con o sin
sonido (Ritmo corporal) y el Ritmo musical (pulsación y figuras musicales).
Estos aspectos se trabajan a la vez.

Por otro lado, las canciones motrices constituyen el medio a través del cual
se sintetizan las dos áreas de conocimiento, la educación física y musical. El
ritmo tratado a través de las canciones, presenta sus dos aspectos más
significativos: el ritmo y el movimiento, y el ritmo y la palabra. Siguiendo el
espíritu de la reforma educativa se presenta una metodología basada en la
acción y la globalización como elementos básicos del aprendizaje, a través de
estrategias lúdicas basadas en la motivación y los intereses de los niños. Las
letras que plantean las canciones motrices permiten al niño conectar su
aprendizaje con su experiencia cotidiana.

Para los niños, el canto es una necesidad y constituye un acto espontáneo


que desarrolla la capacidad de expresión artística y afectiva, contribuyendo al
desarrollo global de su personalidad en sus tres dimensiones: física, intelectual
y afectiva. En cuanto a la melodía, son sencillas, pegadizas y de fácil
memorización. El timbre, es la cualidad del sonido emitido por una voz o un
instrumento, que a su vez permite diferenciarlo de otras voces o instrumentos.
En las canciones motrices se debe presentar una grabación instrumental de
gran variedad tímbrica para que éstas resulten atractivas a los niños.

La metodología de las canciones motrices debe establecer una secuencia


para la enseñanza del texto, de las habilidades motrices propuestas, ritmo y
melodía para facilitar la tarea final: la entonación de la canción. El
procedimiento de la enseñanza de las canciones motrices debe cumplir estas
fases:

Juegos
La música es una terapia excelente para todo, estimula la inteligencia del bebé
y del niño y está demostrado que ayuda en los problemas de aprendizaje,
trastornos y deficiencias de los niños, aumenta su autoestima... Por ello vamos
a ponernos en marcha y proponer 15 actividades con música para estimular
la creatividad de los niños.

Además, para llevar a cabo la mayoría de estas propuestas no necesitaremos


preparación, ni un lugar especial o materiales específicos, de modo que
podemos divertirnos aprendiendo en cualquier momento.

 Hacer musica con el cuerpo, es decir, hacer "body percussion", crear sonidos
pegando palmadas con las manos, palmeando las piernas, la barriga, los
mofletes...

 Experimentar con los sonidos de la boca, ya que no suena igual una "a" larga
que una corta, una "u" con la boca muy cerrada, tapando la nariz, silbando... Se
puede inventar una canción en un lenguaje inventado con sonidos variados y
palabras no existentes en nuestra lengua.

 "Dialogar" con los sonidos del cuerpo o de la boca. Es una mezcla de las dos
actividades anteriores y puede venir muy bien para niños pequeños, ya que
nosotros ponemos una base y ellos nos repiten (a modo de eco) o intentan
responder con una variación de sonido o de musicalidad.

 Imitar sonidos del entorno, de animales, de electrodomésticos, jugar con


onomatopeyas... En el parque, en casa o de excursión, siempre estamos
rodeados de sonidos, solo hay que prestarles atención.

 Hacer sonar instrumentos musicales adecuados para los peques como


panderetas, maracas, flautas, guitarras infantiles, tambores... intentando buscar
ritmos o acompañando una canción. Si quieren seguir su formación musical,
aquí te explicamos cómo elegir el instrumento más adecuado.

 Inventar o construir instrumentos. No es necesario contar con un


instrumento "al uso". Muchos objetos cotidianos pues hacer "música" (o al
menos ritmos) y también podemos crear tambores, maracas o flautas
caseros, reciclar para crear instrumentos...

 Escuchar los sonidos del entorno, tanto naturales como artificiales, y


describirlos con sus propias palabras para ser más conscientes de lo que nos
rodea y ampliar las habilidades lingüísticas.

 Dibujar los sonidos: una variante de la actividad anterior, pero que no


describe con palabras sino con dibujos, echando a volar su imaginación y
desarrollando la motricidad fina.

 Imaginar historias a partir de un sonido, contar un cuento o introducir el motivo


de un sonido o de una música en un cuento inventado.
 También podemos hacer el ejercicio inverso: a partir de un cuento, vamos a
ponerle banda sonora, añadiendo una canción que nos gusta o inventando una
música para esa historia.

 Bailar. Hay muchas razones para bailar con nuestros niños, es un ejercicio
divertido y fortalecedor que ayuda a desinhibirse. Con los más pequeños
podemos ejecutar ritmos básicos (binarios y ternarios) a través del movimiento
corporal, con o sin desplazamiento... pero no nos olvidemos del baile libre y
"alocado".

 Alumnos de nuestros hijos. Los peques pueden ser los mejores profesores
de baile, de modo que tiene que escoger su música favorita y a crear una
coreografía llena de imaginación.

 Grabarnos cantando o bailando, podemos registrar nuestro propio vídeo


musical, ¡pero para que quede bien habrá que ensayar antes!

 Jugar a juegos de corro, el corro de la patata y otros sencillos bailes


tradicionales.

 Poner banda sonora a su estado de ánimo. ¿Qué canción te sugiere tristeza?


¿Qué música te resulta alegre? ¿Cuál sía erla música para el enfado?

Esperamos que el ritmo y el tiempo no decaiga y que pongáis en práctica


estas actividades con música y mucho ritmo que estimulan la creatividad de los
niños, además de mejorar su autoestima. Cualquier momento y cualquier lugar es
idóneo pata divertirse.

2.5. Investigar sobre Ubicación Espacial

La organización espacial se halla íntimamente relacionada con el esquema corporal.


Puede entenderse como la estructuración del mundo externo, que primeramente se
relaciona con el yo y luego con otras personas y objetos tanto se hallen en situación
estática como en movimiento. Se trata, por consiguiente, del conocimiento del mundo
externo tomando como referencia el propio yo (esquema corporal).

Para Le Boulch (1972) es "El espacio es la diferenciación del "yo" corporal respecto
del mundo exterior".

Fernández (2003) lo describe como "Medio en el que se sostienen nuestros


desplazamientos, delimitado por sucesos (intervención temporal) y por sujetos
(intervención personal), en el que cada individuo organiza una ordenación de sus
percepciones en función a las vinculaciones que mantiene con dicho medio,
reportándole un continuo Feed-back".

Batlle (1994), aporta dos definiciones "La evolución de la conciencia de la estructura


y organización del espacio se construye sobre una progresión que va desde una
localización egocéntrica a una localización objetiva", a su vez lo entiende como "El
desarrollo de actividades para el conocimiento espacial pretende potenciar en el niño
la capacidad de reconocimiento del espacio que ocupa su cuerpo y dentro del cual es
capaz de orientarse".
Medio:

Localización Espacial: Allí, Aquí, Allá, Acá, Ahí, Entre, Centro (en el), Cerca-lejos,
Próximo-lejano.

Alomar (1994) concluyó que una mala orientación en el espacio supondrá la difícil
localización del propio cuerpo, y por tanto, se apreciará una irregular organización. La
orientación espacial es la aptitud para mantener constante la localización del propio
cuerpo tanto en función de la posición de los objetos en el espacio como para
posicionar esos objetos en función de la propia posición. Esto podemos comprobarlo al
realizar una rondada.

Según Defontaine (1978), el espacio en el niño se puede considerar una evolución


paralela con la imagen del cuerpo. Para conocer en mayor medida el espacio exterior,
el niño debe reconocer en primer lugar su propio espacio (el que ocupa). Así pues,
distinguiremos entre espacio próximo y lejano. En el primer concepto se advierte de la
zona por la que el niño se mueve, y en el segundo ese espacio se limitará al medio y
lugar hasta donde alcanza su vista.

Alomar (1994), para reforzar los parámetros de espacialidad, el niño debe reconocer
su propio espacio, que es el que envuelve su cuerpo en cualquier acción que realice,
el espacio próximo, propio del área o zona por la que el niño se mueve y el espacio
lejano que es el entorno o paisaje en que se encuentra y alcanza su vista.

En la misma dinámica sobre el espacio exterior o espacio externo, Lapierre (1974)


diferencia entre la distancia y dirección respecto al yo, puesto que, el espacio externo
se percibe como una distancia del yo (el gesto ha de ser más o menos largo) y la
dirección (el gesto ha de ser hacia la derecha, izquierda, arriba, abajo, etc.).

Mencionada dirección es aprobada según Linares (1989) en el niño entre los 3 y 7


años, edad en la que éste es consciente ya de las nociones de orientación; derecha-
izquierda, arriba-abajo, delante-detrás. Entre los 3 y 7 años, el niño accede a las
nociones de orientación (derecha-izquierda, arriba-abajo, delante-detrás).

A modo de conclusión se sugieren a tal percepción de la dirección en relación al


espacio externo, conceptos tales como los siguientes, en cuanto al tema de la
localización espacial:

 Allí: en aquel lugar, a aquel lugar. Establece el lugar en lejanía de forma


precisa.
 Aquí: en este lugar, a este lugar. Se refiere al lugar exacto.
 Allá: indica lugar menos determinado que el que denota allí. Advierte, en
lejanía, estar junto a.
 Acá: lugar cercano, aunque no denota precisión como el del adverbio aquí.
Determina la proximidad o cercanía a un objeto o persona de forma imprecisa.
 Ahí: en ese lugar, a ese lugar. Fija lugar exacto.
 Entre: denota la situación o estado en medio de dos o más cosas.
 Centro (en el): lugar de donde parten o a donde convergen acciones
particulares.
 Cerca: próxima o inmediatamente a un lugar o a un móvil.
 Lejos: a gran distancia, en lugar distante o remoto en referencia a algo o
alguien.
 Próximo: cercano, que dista poco en el espacio o en el tiempo respecto a un
móvil o lugar establecido.
 Lejano: que está lejos en el espacio o en el tiempo en alusión a otro móvil o
lugar.

Juegos:
6 ejercicios de habilidad espacial para los niños

1. PASAR LA PELOTA. Para recordar direcciones y situaciones. Colocar a un niño


frente a diversas personas u objetos para que vaya diciendo: los nombres de los niños
que están a su derecha, de los que están a su izquierda, de los que están enfrente,
etc. Se puede "complicar" cuanto se quiera, cambiando sus posiciones de ellos, o las
de otras personas u otros objetos.
2. APRECIACIÓN DE DISTANCIAS. "VEO, VEO... Para relacionar situaciones y
distancias de varios objetos. Dar la oportunidad de observar los objetos del salón.
Después, hacerle preguntas como: dime dos objetos que estén a la misma distancia,
uno que esté más lejos, más cerca, más arriba, más abajo, más a la izquierda, más a
la derecha, etc.

3. LA GALLINA CIEGA. Para mejorar el conocimiento interno de las sensaciones


(propiocepción). Tocarle diferentes puntos del cuerpo. Después, pedirle que señale
sobre el dibujo de un cuerpo humano los sitios donde se le tocó.

4. MAPAS. Para mejorar su conocimiento del espacio exterior. Describir un recorrido


por la casa. Tiene que saber que si sigue con exactitud el recorrido indicado llegará a
la meta, de lo contrario, no. Por ejemplo: colócate delante de la nevera, da dos pasos
a la izquierda, tres pasos hacia delante, gira rodeando por la izquierda la columna, etc.

5. EL ROBOT. Una variante del juego anterior para niños un poco mayores. Aquí es
el niño quien debe dirigir los pasos de un adulto o de otro niño hasta llevarlo a la meta.
Para ello, debe ir describiendo los movimientos que debe hacer la otra persona. Se
puede complicar jugando "al contrario": es decir, la orden hay que interpretarla al
revés, con lo que el niño tendrá que pensar primero la dirección correcta y después
decir la contraria. Así practica la "reversibilidad".

6. EL ARQUITECTO. Representar gráficamente las distintas estancias de casa


(realizar planos), el aula del colegio, el salón de los abuelos, etc. Deben situar
correctamente todos los muebles y elementos decorativos que haya en cada lugar y
esforzarse en representar todos los elementos presentes.
2.6. Dibujos, laminas o fotos
BIBLIOGRAFIA
https://glosarios.servidor-alicante.com/educacion-fisica/capacidades-coordinativas
https://www.hacerfamilia.com/educacion/difinir-lateralidad-cerebro-infantil-lateralidad-
cruzada-20170926094736.html
https://www.efdeportes.com/efd144/ritmo-canciones-motrices-en-educacion-infantil.htm
https://rieoei.org/historico/documentos/rie47a04.htm

https://ww w.efdeportes.com/efd59/espac.htm
III. Conclusiones

La Educación Física juega un papel rector para la formación de capacidades, habilidades y


movimientos que el niño en estas edades realiza y desarrolla en las instituciones
educacionales, como son los Círculos Infantiles y las escuelas primarias.
A partir del año 1993 se puso en práctica, luego de un profundo estudio del sector
educacional, el Programa "Educación preescolar por vías no formales", comenzando de
forma gradual y con la ambición de extender esta experiencia al 75-80% de los niños
cubanos de 0 a 4 años que no asistieran por diferentes causas a los Círculos Infantiles.
Es por eso que el Programa Nacional de Acción presentado en la Cumbre Mundial a favor
de la Infancia en 1991, plantea entre uno de sus objetivos, lograr una educación preescolar
que garantice el desarrollo integral de los niños en etapas tempranas de su vida y su
preparación para su ingreso a la escuela.
La actividad programada de Educación Física constituye una de las formas fundamentales
de trabajo para llevar a cabo el proceso docente-educativo en el Círculo Infantil y tiene
como objetivo la realización de los ejercicios de forma sistemática y organizada, con el fin
de lograr el correcto desarrollo físico e intelectual del niño.
Se efectúa obligatoriamente con todos los niños sanos y durante todo el curso escolar. En el
horario de vida están planificadas las frecuencias semanales para cada grupo evolutivo a
partir del 1er. año de vida hasta el 6to. En realidad esta actividad está planificada en el
horario de vida de los niños de Círculos Infantiles con una duración de 30 minutos. Esto le
posibilita a la educadora preparar el área con antelación.
Para lograr los objetivos trazados en la actividad programada se debe partir de una buena
preparación y estudio de los programas y orientaciones metodológicas así como de una
correcta adecuación del área donde se realiza la actividad, factores primordiales para
efectuar un trabajo docente-educativo con las exigencias de la pedagogía de las edades
preescolares.
En el caso de los grupos de preescolar, o sea, 5to y 6to año de vida, se puede trabajar con
una cantidad de hasta 20 niños, dadas las características de estas edades.

IV. Bibliografia

https://glosarios.servidor-alicante.com/educacion-fisica/capacidades-coordinativas
https://www.hacerfamilia.com/educacion/difinir-lateralidad-cerebro-infantil-lateralidad-
cruzada-20170926094736.html
https://www.efdeportes.com/efd144/ritmo-canciones-motrices-en-educacion-infantil.htm
https://rieoei.org/historico/documentos/rie47a04.htm

https://ww w.efdeportes.com/efd59/espac.htm

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