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Redescubriendo

La Ministerialidad
Servir a
Dios con
amor
• En la vulgata latina del n.t ministerium designa una
función de servicio y minister un ministro al
servicio de alguien.

• La vulgata traduce del hebreo mesaret del


antiguo testamento otros términos griegos como
diáconos, leiturgos, hiperetes, dulos en contextos
que implican el ejercicio de una actividad religiosa
de servicio a Dios y los hombres.

• De parte del griego encontramos la palabra


diakonía que designa el servicio eclesial en su
totalidad (Rm 11,13).
Los ministerios pueden ser por
designación expresa de Jesús
(los doce apóstoles: Lc 6,13;
Mt 10,2; Mc 6,30) otros por
designación del espíritu santo
(Rm 12,6-8; 1 Cor 12, 8-11; Ef.
4,11) y otros por designación
de la iglesia ( los
colaboradores de los que se
hablan en Hch 6,1-6; 13, 1-3; o
en las carta paulinas (1 Cor
16;16; 1 Tes 5,12).
Jesucristo es sacerdote directamente desde
su humanidad, es decir, desde el momento que
la divinidad asumió la naturaleza humana como
instrumento para obrar la redención del
El máximo momento en el que
Cristo vincula a su propia
potestad el poder que
concede a los Apóstoles
ocurre tras la Resurrección,
en el dialogo a la vez
purgativo y constitucional del
ministerio de Pedro, en el que
Cristo le confiere ser pastor
de los corderos y de las
ovejas. A la vista de estas
referencias se ha de concluir
que los Apóstoles, por la
misión recibida de Cristo, son
pastores en la Iglesia.
Cristo llamó a muchos discípulos, y de
estos escogió a unos pocos para formar
el pequeño grupo de los Apóstoles.
«Llamó a los que el quiso, y vinieron
donde Él e Instituyo Doce, para que
estuvieran con Él, y para enviarlos a
predicar con poder de expulsar
demonios» Mc 3,13-14.
Por el Apóstol, constituido como tal por la
misión, el Resucitado continua presente y
operante entre los hombres. El esquema
“como el Padre me ha enviado os envío yo a
vosotros” ( Jn 20,21; Mt 28,18 -20).
¿Con la muerte del ultimo Apóstol
terminó también la misión apostólica
que los Apóstoles habían recibido de
Jesucristo?
Desde Jerusalén hasta las iglesias paulinas

Zequenim Kohen presbyteroi


Entre los judíos helenistas cristianos

Hechos 6,1-6
En Antioquia
Efesios 2,20
Carismas y ministerios de la palabra según pablo
El anuncio sacerdotal del evangelio tiene para pablo la forma concreta de ser en
si mismo un ministerio, pues se trata de una diaconía que está puesta al servicio
de la iglesia.

¿La eclesiología de Pablo esta toda ella edificada


sobre los carismas o supone desde el primer
momento la existencia de ministerios estables?
• El carisma en el sentido de pablo es un don de Dios con un elemento
comunitario concedido a una persona en grado del llevar un encargo o una
función en vista del la construcción eclesial bajo el impulso del espíritu santo.

• 1 Cor 12,28-30 y Rm 12,6-8

• Por las diversas funciones que, como dones o carismas eclesiales, se han de
realizar en la Iglesia, se resalta en primer lugar a la triada de los apóstoles, los
profetas y los doctores. El apóstol, que en este caso no ha de ser identificado
con los Doce, es el que ha sido enviado por la comunidad. Los profetas, que,
buscando un equivalente en nuestro lenguaje, diríamos que son los que
predican, los que anuncian la palabra. Los doctores, que se encargan de la
enseñanza sistemática. Podría decirse que se trata de los catequistas de la
comunidad.
El kerigma pronunciado bajo el impulso del
espíritu santo prevalece sobre la enseñanza.
Vemos aquí una relación entre la proclamación
fundante y la palabra siempre viva de los
sucesores de los apóstoles.
Un cambio de vocabulario: los obispos y los servidores

Cristo envió a los Apóstoles por su palabra, sin que mediase ningún otro rito.
¿no podían hacer lo mismo los Apóstoles?
Las razones de esta diversidad
La estructura colegial de la Iglesia nació en Jerusalén bajo
la presidencia de los llamados presbíteros y que se fue
extendiendo a las Iglesias de la diáspora, donde, en
ambiente helénico, el titulo de presbítero se permuto por el
de obispo.
• Los ministerios en la iglesia post apostólica
• Después de la destrucción del templo hacia el 70 dC. pero antes de la
persecución de Domiciano 95 d.c. se instaura un periodo de relativa calma
donde se pone especialmente atención al cuidado de la iglesia, se desarrolla la
imagen del rebaño que la escritura aplicaba a Israel y con ella el titulo de
pastor (poimen) (cfr. Jn 21,16; 1ped 5,2-3).

• Las cartas pastorales


• El ministerio permanece como don de Dios, ligado a la palabra. Nadie se arroga
por si mismo el ministerio porque es siempre dado, en relación con una
palabra que autentica su surgir en el halo de la primera tradición, apostólica y
profética.
•Conclusión: es necesario resaltar el ligamen esencial entre palabra de
salvación y ministerio, sin olvidar entonces que en el ambiente bíblico una
palabra es hecha de voces y gestos. La palabra hace lo que dice, en cuanto es
encarnada, y en los gestos que la iglesia llamara sacramentos. El concilio
Vaticano II recuerda que la propia responsabilidad ministerial no debe diluir la
especificidad del ministerio ordenado.

• La diversidad y la riqueza de los primeros ministerios cristianos son grande y


dejan espacio a una otra distribución de ministerios, contemporánea a la
tradición y respondiendo a las necesidades de la actual evangelización.
• Sin el espíritu santo y el resucitado siempre vivo el ministerio desaparece.

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