“La profesión del abogado debe caracterizarse por un vigilante sentido moral e

inspirarse en los principios éticos que no solo se basan en la ley positiva sino en la
ley moral y en la conciencia subjetiva del abogado”la abogacía debe rendirle culto
a la verdad y buscar incansablemente la justicia. Monroy Cabra.
Según el artículo 28, numeral 2 es deber del abogado “Defender y promocionar los
Derechos Humanos, entendidos como la unidad integral de derechos civiles y
políticos, económicos, sociales y culturales y de derechos colectivos, conforme a
las normas constitucionales y a los tratados internacionales ratificados por
Colombia” Por lo tanto la posición del abogado frente a su defendido debe ser
vigilante y diligente durante el proceso y en especial a la hora de la ejecución de la
pena penitenciaria.
Por otro lado en este caso en concreto los mandamientos que el abogado debe
tener en cuenta para una adecuada defensa y para cumplir con los deberes que le
impone el ordenamiento son:
 Estudia: el abogado debe estar en constante capacitación sobre las leyes
actuales para de esta forma exigirle al juez las mas favorable al defendido. al
igual que estar en constante estudio de los procesos que lleva a su cargo
 trabaja: en los procesos la defensas no son fáciles de llevar pero se debe de
trabajar de forma ardua pues se trata de la vida y la dignidad de las personas
 se leal: siempre se debe tener lealtad para con el cliente, se le debe informar
sobre el estado del proceso y se le debe explicar en términos comprensibles
en qué consiste cada parte del proceso
dentro de la ética del abogado esta acompañar a su defendido puntualmente en
todas las audiencias explicarle en términos comprensibles los temas jurídicos
relativos a su defensa, solicitar las pruebas que sean relevantes para sustentar su
defensa, interponer los recursos dentro de los términos de ley y sustentarlos
jurídicamente, estar atento a las pruebas y solicitudes que haga la contraparte para
refutarlos de ser necesario, visitar a su defendido en el centro de reclusión
correspondiente y entregar toda la información referente al caso, así como explicarle
la estrategia a seguir para sacar adelante su pretensión; todo lo anterior con el fin
de evitar una pena penitenciaria que sea innecesaria o rebajar la pena desde que
sea posible.
En contraposición con lo anterior lastimosamente la posición del abogado se
encuentra limitada, debido al Estado de cosas inconstitucionales que se presentan
en los diferentes centros de reclusión y a pesar de acudir a todos los recursos que
brinda el ordenamiento, el Estado ha sido incapaz de ponerle orden a esa situación.
la sentencia principal sobre este tema es la T-388 de 2013, que unifica varias
acciones de tutela de diferentes ciudadanos que están recluidos en distintas
cárceles del país, pero el argumento de fondo es el mismo, “el estado de
inconstitucional que enfrentan los presos en las cárceles Colombianas”.En las las
acciones de tutela y las demandas presentadas se reconoce las violaciones que se
presentan en las cárceles Colombianas y se le ordena al Estado y al INPEC que es
el encargado de administrar los centros penitenciarios del país que solucionen el
problema, pero hasta la fecha siguen existiendo las mismas problemáticas.

También es de gran importancia tener en cuenta que el abogado tiene otras

limitaciones, en especial si se trata de un defensor público que puede tener a su
cargo como mínimo 100 procesos, lo que le impide realizar una adecuada defensa
e incluso presentarse de manera oportuna a las audiencias, dificultando que a las
personas se les aplique una pena justa y que sea él quien en la etapa de la
ejecución se encuentre vigente en el proceso.
En conclusión, si bien el abogado tiene ciertos deberes que debe cumplir y tiene
una misión fundamental en los procesos, su labor no acaba al momento de la
ejecución de la pena sino al contrario, ahí es donde debe de luchar por el respeto
de los derechos fundamentales de su cliente y velar incansablemente para que a su
defendido no se le vulnere su dignidad humana.