TEMA III: LA NATURALEZA

1. DEFINICIÓN DE NATURALEZA

Aristóteles define la naturaleza del siguiente modo:

“La naturaleza es principio y causa de movimiento y de reposo para la cosa en la cual

reside inmediatamente y a título de atributo esencial y no accidental” (Fís. 192 b)

Es decir, la naturaleza es principio de movimiento y de reposo; según la concepción

antigua, por ejemplo, la naturaleza de un cuerpo pesado lo hacia mover hacia su lugar natural
y cuando llegaba a éste, reposaba.
También la naturaleza es un principio interno, con lo cual se distinguía del arte, ya que
la naturaleza es un principio interno especifico de las actividades del ser que ella constituye.

Santo Tomás en la Suma Teológica (III, 2, 1 co) decía:

Hay que decir. Para solventar esta cuestión
conviene tener en cuenta la noción de
naturaleza.
Etimológicamente, el nombre de naturaleza
viene o está tomado de naciendo.
Por lo que, en primer lugar, se usó tal
nombre para designar la generación de los
vivientes, que se llama natividad o
germinación: por eso naturaleza equivale a
la/lo que ha de nacer.
Después el nombre de naturaleza se
desplazó a significar el principio mismo de
la generación.
Y como el principio de la generación en los
seres vivos es algo intrínseco, el término
naturaleza pasó a significar más adelante
cualquier principio intrínseco de
movimiento.
De ahí que diga el Filósofo en II Physic.8:
La naturaleza es principio de movimiento
en el ser en que está en virtud de sí misma y
no accidentalmente.
Tal principio es la forma o la materia. Por
eso la palabra naturaleza unas veces
significa forma, y otras materia.
Y como en el ser engendrado el fin de la
generación natural es la esencia específica,
que es la expresada por la definición, de ahí
que naturaleza signifique además esencia
específica.
Así la define también Boecio en el libro De
Duabus Nat. 9: Naturaleza es la diferencia
específica que informa cada cosa, es decir,
Respondeo dicendum quod ad huius
quaestionis evidentiam, oportet considerare
quid sit natura.
Sciendum est igitur quod nomen naturae a
nascendo est dictum vel sumptum.
Unde primo est impositum hoc nomen ad
significandum generationem viventium,
quae nativitas vel pullulatio dicitur, ut
dicatur natura quasi nascitura.
Deinde translatum est nomen naturae ad
significandum principium huius
generationis.
Et quia principium generationis in rebus
viventibus est intrinsecum, ulterius
derivatum est nomen naturae ad
significandum quodlibet principium
intrinsecum motus,
secundum quod Philosophus dicit, in II
Physic., quod natura est principium motus
in eo in quo est per se et non secundum
accidens.
Hoc autem principium vel forma est, vel
materia. Unde quandoque natura dicitur
forma, quandoque vero materia.
Et quia finis generationis naturalis est, in eo
quod generatur, essentia speciei, quam
significat definitio, inde est quod huiusmodi
essentia speciei vocatur etiam natura.
Et hoc modo Boetius naturam definit, in
Libro de Duabus Naturis, dicens, natura est
unamquamque rem informans specifica
la que satisface la definición de la especie. differentia, quae scilicet complet
definitionem speciei.

2. LA NATURALEZA ES LA MATERIA Y SOBRE TODO LA FORMA

Aristóteles señaló que la naturaleza es tanto la materia como la forma:

“En un sentido, por consiguiente, la naturaleza se entiende así, a saber, la primera

materia sujeto de cada ser, que posee por sí misma el principio del movimiento y del
cambio”

“En otro sentido, en cambio, es la forma y la esencia, que entra a formar parte de la
definición”

Pero es más naturaleza la forma que la materia, porque de ella proviene la actividad
especifica de cada ente.

Por eso concluía:

“La naturaleza, por tener dos sentidos, el de forma y el de materia, debe ser estudiada
tal como buscaríamos la esencia de lo romo; y en consecuencia, de esta suerte los
objetos no carecen de materia, y sin embargo no son considerados bajo su aspecto
material” (Fís. 194 a 13)

Es decir, el punto de vista de la forma es el que predomina en el estudio de la

naturaleza, por lo cual “al adoptar esta posición, Aristóteles determinaba de hecho la
orientación de toda su metodología física. Si la resolución del ser de la naturaleza en sus
elementos conserva su valor, es su resolución por medio de las estructuras formales, y en
último análisis por la causalidad final, lo que conduce a las explicaciones más satisfactorias”
(Cf. Gardeil H D, Iniciación a la Filosofía de Santo Tomás de Aquino - II Cosmología, pág.
41.)

3 LO NATURAL Y LO ARTIFICIAL

3.1. Motivación teológica

Siempre se ha esforzado el hombre con su trabajo y su ingenio en perfeccionar

su vida, pero en nuestros días, gracias a la ciencia y a la técnica, ha logrado
dilatar y sigue dilatando el campo de su dominio sobre casi toda la naturaleza...
Ante este gigantesco esfuerzo que afecta ya a todo el género humano, surgen
entre los hombres muchas preguntas. ¿Qué sentido y valor tiene esa actividad?
¿Cuál es el uso que hay que hacer de todas esas cosas? (G.S. n° 33)

Frente a estas preguntas, Paulo VI, planteaba los peligros que se podían seguir:

Después de haberse asegurado un dominio necesario sobre la naturaleza ¿no se

está convirtiendo ahora (el hombre) en esclavo de los objetos que fabrica?
(Octogésimo Adveniens n° 9)

Por eso Juan Pablo II afirma la importancia de la técnica en la vida del hombre:
 El desarrollo de la industria y los diversos sectores relacionados con ella hasta
las modernas tecnologías de la electrónica, especialmente en el terreno de la
miniaturización de la informática, de la telemática y otros indica el papel de
primerísima importancia que adquiere, en la interacción entre el sujeto y el
objeto de trabajo, precisamente esa aliada del trabajo, creada por el cerebro
humano, que es la técnica. (Laborem Excercens n° 5)

3.2. Punto de partida

De todas las cosas que lo rodean en este momento, cuente cuántas son directamente
producto de la naturaleza y cuántas son producto de lo que el hombre ha fabricado.

3.3. Lo natural y lo artificial en Aristóteles.

En Aristóteles. las cosas naturales y las cosas artificiales en algunos aspectos se

contraponen y en otros se asemejan.

1) En primer lugar, Aristóteles señala cuáles son las cosas que él considera naturales y cuáles
artificiales.

NATURALES ARTIFICIALES

Unas existen por naturaleza... ...otras por diversas causas

Existen por naturaleza los animales y sus En cambio, el lecho y el vestido, y cualquier
partes, las plantas y los cuerpos simples, otra cosa posible de este mismo género... son
como la tierra, el fuego, el aire y el agua (Fís. producto de un arte. (Fís. 192 a)
192 a)

2) mostrando que las cosas naturales tienen en sí su principio de cambio y reposo, mientras
que las artificiales no.

...las cosas que existen naturalmente parecen ...en cuanto son producto de un arte, no
poseer en sí mismas un principio de poseen ninguna fuerza interna que los impela
movimiento y de reposo. (Fís. 192 a) al cambio o al movimiento. (Fís. 192 a)

3) además las cosas naturales poseen el principio eficiente de su producción, mientras que las
artificiales no.

Ahora bien: poseen una naturaleza todas las
cosas que tienen un principio de esta clase
(eficiente de su propia producción). Y todas
son sustancias. (Fís. 192 b)
...pues ninguno de ellos tiene en sí mismo el
principio eficiente de su propia producción...
por ejemplo, la casa y cualquier otro ser de
los que son fruto de una manufactura o una
fabricación. (Fís. 192.b)

4) Ahora bien, todo lo artificial supone una materia segunda a la cual se le ha dado una forma
accidental, según un arte o una técnica; por eso, la materia segunda es algo natural.

La esencia. ser a aquello que permanecería ...el ser lecho fuera algo que se da de forma
aún bajo la continua modificación impuesta accidental en el leño, es decir, una simple
por la forma y el arte. (Fís. 193 a) disposición de partes, conforme a una forma
y a un arte. (Fís. 193 a)

5) Llamando naturaleza y arte a uno y a otro.

...se llama naturaleza a lo que es conforme a ...llamamos arte a lo que es conforme a las
ella y es natural. (Fís. 193 a) normas del arte y es artificioso o artificial.
(Fís. 193 a)

6) Por otro lado, lo natural y lo artificial, ambos obran por un fin

En general, el arte perfecciona y acaba en

...es evidente que también se
teleológicamente las cosas naturales.
...que entre lo posterior y lo anterior de los
seres naturales. (Fís. 199 a)
parte lo que la Naturaleza misma no puede
acabar y ultimar y, en otra parte imita a la
misma naturaleza. Por tanto, sí las cosas que
son fruto y efecto del arte se hacen con un fin
determinado...
harán
Pues la misma reciproca relación teleológica
hay entre lo posterior y lo anterior de las
obras de arte...

7) Y por ello cabe en ambas el error

Es pues evidente que también en la Por otra parte, hay que tener en cuenta que el
Naturaleza ha de suceder eso (el error). error tiene cabida en las cosas que son obra
de arte.
Algo semejante, pues, ocurre en los seres ...en los seres en que se comete alguna falta o
naturales; y así los monstruos serán error sin duda el arte intentó algo concreto
simplemente errores o faltas de aquel con un determinado fin, pero equivocó su
principio, que obra sin duda con un camino. (Fís. 199 b)
determinado fin. (Fís. 199 b)

Sto. Tomás, por otra parte, afirma que las cosas naturales proceden del intelecto divino y las
artificiales del intelecto humano (I,16,1).

Las cosas se llaman verdaderas en absoluto por relación que dicen al entendimiento de que
dependen (su ser)...

...los seres naturales son verdaderos por
cuanto alcanzan a tener semejanza con las
especies que hay en la mente divina, y así se
llama piedra lo que tiene la naturaleza propia
de piedra según la preconcibió el
entendimiento divino.
Por eso aquellas cosas artificiales son dichas
verdaderas por el orden a nuestro intelecto.
Así la casa es verdadera cuando reproduce la
forma que está en la mente del artífice.

(Cf. M. Artigas. J. J. Sanguineti, Filosofía de la Naturaleza, pág. 91).