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FACULTAD DE CIENCIAS MEDICAS

ESCUELA DE MEDICINA HUMANA

FARMACOLOGUA BIOQUIMICA I

DOC: DR. RODAS MALCA VALDIMIR ALEXANDER

TEMA: FISIOPATOLOGIA DE LA ANEMIA

INTEGRANTES: ALVA VASQUEZ NESTOR MIGUEL


CHUQUIPOMA ROJAS VICTOR PIER
ZAVALETA DELGADO BRUNO

TRUJILLO- PERU

2018
I.INTRODUCCION
Podemos definir la “anemia “como el descenso, por debajo del nivel normal, de la
hemoglobina funcional total circulante con o sin disminución de glóbulos rojos por otra
parte definimos anemia como la disminución de la masa de hemoglobina circulante.
La anemia es un importante problema de salud pública tanto en países desarrollados como
en países en vías de desarrollo. La más frecuente es la anemia ferropénica, causada por
deficiencia de hierro. Según datos de la OMS, aproximadamente 1.000 millones de
personas en el mundo padecen anemia ferropénica, siendo más prevalente en mujeres en
edad fértil, niños y embarazadas. Por otra parte las deficiencias de ácido fólico y vitamina
B12 pueden causar anemia megaloblástica, la deficiencia de folatos se produce
especialmente en ciertas poblaciones de riesgo (embarazadas y personas de edad
avanzada) y puede estar asociada a determinadas patologías (patología intestinal,
alcoholismo crónico o deficiencia de vitamina B12).
La deficiencia de vitamina B12 o cobalamina puede deberse a una ingesta insuficiente
(que es poco frecuente) o a malabsorción de la vitamina (por aclorhidria o falta de factor
intrínseco).
La anemia aplásica ocurre cuando la médula ósea produce muy poca cantidad de los tres
tipos de células sanguíneas: glóbulos rojos, glóbulos blancos y plaquetas. Una cantidad
reducida de glóbulos rojos provoca disminución abrupta de la hemoglobina (tipo de
proteína presente en los glóbulos rojos cuya función es transportar oxígeno a los tejidos
del cuerpo).
Una cantidad reducida de glóbulos blancos vuelve al paciente susceptible a las
infecciones. Y una cantidad reducida de plaquetas puede hacer que la sangre no coagule
adecuadamente.
OBJETIVO GENERAL
• Proporcionar a las personas los fundamentos y los conocimientos básicos de la
fisiopatología de los tipos de anemia.
OBJETIVOS ESPECIFICOS
• Ayudar a que las personas que tengan un conocimiento claro sobre los tipos de
anemia.

II.TIPOS DE ANEMIA

2.1 ANEMIA FERRICA


La anemia ferropénica se define como el descenso de la concentración de hemoglobina
(Hb), hematocrito o número de glóbulos rojos (GR) por milímetro cubico en sangre,
secundario a una disminución de la concentración de hierro en el organismo.
Fisiopatología
METABOLISMO DEL HIERRO
El hierro se distribuye en metabólico activo y depósitos. El hierro corporal total es de
alrededor de 3,5 g en hombres sanos y de 2,5 g en mujeres; la diferencia se relaciona con
el menor tamaño corporal de ellas, los niveles de andrógenos más bajos y la escasez de
hierro de reserva por las pérdidas menstruales y el embarazo. En un hombre promedio, la
distribución del hierro corporal es Hb 2.100 mg, ferritina 700 mg (en células y plasma),
hemosiderina 300 mg (en células), mioglobina 200 mg, enzimas tisulares (hemo y no
hemo) 150 mg y compartimiento de transporte de hierro 3 mg.
Absorción de hierro
El hierro se absorbe en el duodeno y el segmento superior del yeyuno, y depende del tipo
de molécula de hierro y de qué otras sustancias se ingieran. La absorción de hierro es
óptima cuando los alimentos contienen hierro en forma de hemo (carne). El hierro no
hemo de la dieta debe ser reducido a estado ferroso y liberado de los alimentos por las
secreciones gástricas. La absorción del hierro no hemo se reduce en presencia de otros
alimentos y ciertos antibióticos (p. ej., tetraciclinas). El ácido ascórbico es el único
elemento conocido de la dieta habitual que aumenta la absorción de hierro no hemo.
La dieta estadounidense promedio, que contiene 6 mg de hierro elemental/kcal de
alimento, es adecuada para la homeostasis del hierro. De alrededor de 15 mg/día de hierro
de la dieta, los adultos absorben sólo 1 mg, que es la cantidad aproximada que se pierde
diariamente por descamación celular de la piel y el intestino. En la depleción de hierro,
se incrementa la absorción, aunque no se conoce el mecanismo de señalización exacto;
sin embargo, la absorción rara vez aumenta a> 6 mg/día, a menos que se agregue un
suplemento de hierro. Los niños tienen mayor necesidad de hierro y parecen absorber más
para satisfacerla.
Transporte y utilización de hierro
El hierro de las células de la mucosa intestinal es transferido a la transferrina, una proteína
de transporte de hierro sintetizada en el hígado; la transferrina puede transportar hierro de
las células (intestinales, macrófagos) a los receptores específicos de los eritroblastos, las
células placentarias y las células hepáticas. Para la síntesis de hemo, la transferrina
transporta hierro a las mitocondrias de los eritroblastos, que lo introducen en la
protoporfirina para que ésta se convierta en hemo. La transferrina (semivida plasmática,
8 días) es extruida para ser reutilizada. La síntesis de transferrina aumenta con la
deficiencia de hierro, pero disminuye con cualquier tipo de enfermedad crónica.
Almacenamiento y reciclado de hierro
El hierro que no se utiliza para la eritropoyesis es trasladado por la transferrina, una
proteína transportadora de hierro, a los depósitos de hierro; el hierro se almacena en 2
formas: ferritina y hemosiderina. La más importante es la ferritina (un grupo heterogéneo
de proteínas que rodean un núcleo de hierro), que es una fracción soluble y de depósito
activo localizada en hígado (hepatocitos), médula ósea y bazo (en macrófagos), en los
eritrocitos y en el suero. Se dispone fácilmente del hierro almacenado en forma de
ferritina para cualquier requerimiento corporal. La concentración de ferritina circulante
(suero) corre paralela al tamaño de las reservas corporales (1 ng/mL = 8 mg de hierro en
el pool de almacenamiento). El segundo depósito de hierro es la hemosiderina, que es
relativamente insoluble y se almacena sobre todo en el hígado (en las células de Kupffer)
y en la médula ósea (en macrófagos).
Deficiencia de hierro
La deficiencia evoluciona en estadios. En el primer estadio, el requerimiento de hierro
supera la ingesta, lo que causa depleción progresiva de los depósitos de hierro de la
médula ósea. A medida que disminuyen los depósitos, aumenta en compensación la
absorción de hierro de la dieta. Durante estadios más tardíos, la deficiencia altera la
síntesis de eritrocitos, y la consecuencia final es la anemia.
La deficiencia de hierro intensa y prolongada también puede causar disfunción de las
enzimas celulares que contienen hierro.
ESTADIOS
Se distinguen tres estadios sucesivos, de intensidad sintomática creciente, en el déficit de
Fe:
1) Fe latente: se inicia el vaciamiento de los depósitos férricos del SRE, primero en hígado
y bazo, y después, en médula ósea, de curso asintomático
2) Fe sin anemia: aumenta el déficit de Fe, evidenciado en su menor disponibilidad sérica,
con mayor afectación analítica bioquímica, pero sin afectación del hemograma, y
aparición de sintomatología atribuible al déficit de las enzimas tisulares que contienen Fe
3) Fe: alteraciones hematológicas propias, mayor afectación de las anomalías previas y
sintomatología de anemia.
ETIOLOGÍA
Pérdida de sangre
Esta es la causa más común de la anemia ferropénica, e incluye:
 abundante ciclo menstrual
 sangrado en el estómago o en los intestinos debido a una úlcera o un crecimiento
canceroso
 sangrado causado por medicamentos, como la aspirina u otros antiinflamatorios
no esteroideos (NSAID)
 una lesión u operación quirúrgica asociada con una gran pérdida de sangre
 sangrando de una infección por anquilostomas
Disminución en la absorción.
Es poco habitual. La absorción del hierro tiene lugar en el duodeno y parte proximal del
yeyuno. Previamente, en el estómago el ácido clorhídrico favorece el paso del hierro
ingerido de la forma ferrosa a la férrica y esto facilita una mayor absorción. En pacientes
gastrectomizados puede darse una clara disminución en la absorción. Otras patologías
que cursen con problemas en la absorción, como la celiaquía o el síndrome de
malabsorción, pueden padecer ferropenia. Hay que tener en cuenta toda una serie de
factores que pueden modificar la absorción del hierro.
Mayor requerimiento de hierro
Desde el nacimiento hasta los 2 años y durante la adolescencia, cuando el crecimiento
rápido requiere una gran ingesta de hierro, el incorporado con la dieta a menudo es
inadecuado. Durante el embarazo, el requerimiento de hierro del feto aumenta el de la
madre (media, 0,5-0,8 mg/día); pese a la ausencia de menstruaciones. La lactancia
también incrementa el requerimiento de hierro (media, 0,4 mg/día).
Mala alimentación o digestión
Si usted no recibe suficiente hierro en su dieta, es vegetariano o vegano puede desarrollar
anemia ferropénica
SÍNTOMAS
Anemia
 Palidez: el signo más clásico, pero habitualmente no es visible hasta valores de
Hb < 7-8 g/dl.
 Con valores de Hb más bajos (generalmente <5-6 g/dl): taquicardia, soplo
cardíaco sistólico, dilatación cardíaca, irritabilidad, anorexia y letargia.
 Astenia y fatigabilidad excesiva.
Ferropenia
 Repercusión sobre el sistema nervioso central: irritabilidad, déficit de atención,
dificultad de aprendizaje y disminución de rendimiento.
 Pica: trastorno de la conducta alimentaria de patogenia desconocida, consistente
en la ingestión de sustancias no nutritivas, como tierra (geofagia) o hielo
(pagofagia).
 Alteraciones digestivas: anorexia (quizás la más precoz), queilitis angular,
glositis, hipoclorhidria y atrofia vellositaria.
 Alteraciones dermatológicas: xerosis, descamación cutánea, pelo ralo y escaso,
uñas quebradizas y coiloniquia (en forma de cuchara).
 Alteraciones inmunológicas: afectan a la quimiotaxis, a la función bactericida de
los neutrófilos y a otras formas de respuesta inmunitaria.
 Alteraciones en la termorregulación: menor respuesta adaptativa al frío.
 Relación con el trastorno por déficit de atención con hiperactividad, con el
síndrome de las piernas inquietas, con alteraciones del sueño y con pausas de
apnea.

2.2. ANEMIA APLASICA


ocurre cuando la médula ósea produce muy poca cantidad de los tres tipos de células
sanguíneas: glóbulos rojos, glóbulos blancos y plaquetas. Una cantidad reducida de
glóbulos rojos provoca disminución abrupta de la hemoglobina (tipo de proteína presente
en los glóbulos rojos cuya función es transportar oxígeno a los tejidos del cuerpo).
También cantidad reducida de glóbulos blancos vuelve al paciente susceptible a las
infecciones. Y una cantidad reducida de plaquetas puede hacer que la sangre no coagule
adecuadamente.
FISIOPATOLOGIA
• Ausencia o defecto de los precursores hematopoyéticos. El aumento de las
alteraciones nucleares en algunos pacientes, la existencia de alteraciones cromosómicas
y el defecto en las 3 líneas celulares en el síndrome de hemoglobinuria paroxística
nocturna (HPN)/aplasia. sugieren una alteración de las células precursoras. El número de
células CD34+ y otros precursores hematopoyéticos disminuyen, así como su capacidad
funcional, lo que se demuestra en cultivos de médula ósea con y sin factores de
crecimiento.
Muchos enfermos tratados con inmunosupresión (IS) recobran aparentemente la función
medular, pero persiste pancitopenia moderada con cambios dismielopoyéticos en la MO.
Además, la síntesis de ADN que está disminuida durante la fase aguda de la enfermedad,
se mantiene baja después del tratamiento IS. Estos resultados reflejan trastornos de la
función celular y sugieren un defecto en la proliferación que persiste después del
tratamiento.
Algunos autores niegan la existencia de células premalignas al inicio de la enfermedad,
otros consideran la AA como un trastorno premaligno, y sugieren que existe una
alteración al nivel medular que, en dependencia del grado del daño celular previo, la
intensidad de los mecanismos inmunes, la resistencia de las células a los agentes agresores
y la edad del paciente, puede evolucionar hacia una AA, HPN, leucemia aguda o un
síndrome mielodisplásico (SMD).

• Afectación del microambiente medular. Una parte decisiva en el desarrollo celular


es el control que ejerce el microambiente en la regulación de la hematopoyesis, más
importante para el compartimento de células madre que para el resto de células. Esta
hemopoyesis está regulada por mecanismos de gran complejidad, en los que las células
hemopoyéticas interactúan entre sí, con su microambiente, con factores de crecimiento y
con la matriz extracelular. La célula germinal hematopoyética pluripotente, capaz de auto
renovarse y dar lugar a todas las líneas celulares sanguíneas, estará influida y
condicionada por este microambiente en su diferenciación. Por lo tanto, un daño en el
microambiente puede generar una falta de crecimiento de células hemopoyéticas como
en el caso de la anemia aplásica.

• Reacción inmune contra el tejido hematopoyético. Para la mayoría de los autores,


la destrucción de la hematopoyesis por el sistema inmune desempeña un papel central en
la fisiopatología de la AA. Esta hipótesis se sustenta en la respuesta de los pacientes a
suero antilinfocítico, la supresión in vitro de la proliferación celular en MO normal por
células de enfermos y la necesidad de inmunosupresión previa a la realización del TMO
singénico. Para tratar de definir los mecanismos inmunes que ocurren en esta patología
se han realizados varios estudios, pero la ausencia de un modelo animal, el escaso número
de células sensibles al ataque inmune y la heterogeneidad de la enfermedad han impedido
alcanzar conclusiones definitivas. Se han descrito múltiples mecanismos inmunológicos
en la AA: alteraciones de los linfocitos T, con producción de gamma interferón y factor
de necrosis tumoral que actúan sobre la mitosis, aumentan la expresión del antígeno Fas
en las células CD34+ y la apoptosis en las células hematopoyéticas; depresión de las
colonias hematopoyéticas en MO normal por células mononucleares de sangre periférica
y MO de pacientes con AA; proliferación limitada en número de células T en pacientes
dependientes de la ciclosporina A (CsA), que indica la presencia de algún estímulo
antigénico en la MO; observación de un clon de células CD34+ capaces de destruir células
hematopoyéticas autólogas, existencia de inmunocomplejos; inhibición de la formación
de colonias hematopoyéticas mediadas por monocitos macrófagos y en casos raros la
producción por linfocitos B de anticuerpos inhibidores de la actividad medular. Como en
muchos otros trastornos inmunes se ha observado una predisposición genética unida a los
antígenos de histocompatibilidad (HLA) clase II, fundamentalmente el HLA-DR2. Se ha
demostrado una mayor frecuencia del alelo DRB1*1501 en el genotipo que determina el
HLA-DR2, lo cual pudiera estar asociado con la susceptibilidad inmune en la aplasia.
Aunque los mecanismos por los cuales un agente químico o biológico alteran la
inmunidad no están bien definidos, la asociación con drogas se ha inferido por estudios
epidemiológicos, nunca por análisis de laboratorio sistemáticos, y es poco probable que
una célula o citocina aislada sea la única causa de la enfermedad.
• Adquiridas: generalmente por toxicidad en la médula ósea.:
1. Drogas: AINES (poco frecuente), sales de oro (usados en AR por ejemplo),
cloranfenicol, sulfonamidas, anticonvulsivantes, diuréticos. En este grupo se incluyen
algunas drogas que a diferencia de las anteriores producen una mielotoxicidad transitoria,
conocida de previo y controlada, como por ejemplo el caso de los quimioterapéuticos
(dependiendo del tipo de quimioterapia y la dosis ya se conoce cuánta aplasia puede
producir y el tiempo que dura).
2. Radiación: al igual que la quimioterapia, es Controlada. Igual depende de la dosis y
en algunos casos podría ser una aplasia más prolongada.
3. Químicos: benceno, insecticidas. Es una aplasia que se presenta a largo plazo, después
del contacto con la sustancia, y depende mucho de si se le dio o no un manejo adecuado.
4. Virus: CMV, EBV, HCV. Parvovirus y VIH producen una aplasia que puede ser
transitoria o puede ser prolongada, generalmente lo que se afecta es la célula madre
precursora de la línea mieloide (productora de granulocitos, eritrocitos, megacariocitos)
y NO la línea de los linfocitos. en los pacientes con Anemia Aplásica (AA) se pueden
encontrar muchos linfocitos en la médula y no es que hay mucho, sino que están normales,
pero todo lo demás está disminuido.
Los enfermos con aplasia presentan manifestaciones clínicas derivadas de la disminución
de las células sanguíneas de las tres series hematopoyéticas. Clínicamente presenta la
siguiente triada:
1. Síndrome anémico: palidez, debilidad, disnea y fatiga.
2. Infecciones de repetición, consecuencia de la neutropenia y monocitopenia
3. Fenómenos hemorrágicos por la trombopenia (petequias, hematomas, epistaxis,
sangrado vaginal y sangrados inesperados)
Además, también pueden incluir debilidad, fatiga y palidez por anemia. Petequias (es
decir, pequeñas hemorragias cutáneas punteadas) y equimosis (es decir, hematomas) a
menudo se desarrollan en la piel, y puede haber hemorragia nasal, de encías, vagina o
tubo digestivo por descenso de las concentraciones plaquetarias. La disminución del
número de neutrófilos incrementa la susceptibilidad a las infecciones.
2.3 ANEMIA MEGALOBLASTICA
Las anemias megaloblásticas constituyen un subgrupo de anemias carenciales en las que
la formación de hematíes resulta perturbada por la deficiencia de uno o varios factores
madurativos como son la vitamina B12 o los folatos. Se caracterizan por la presencia de
macrocitosis en la serie roja tanto en la médula ósea como en sangre periférica, expresión
de un trastorno madurativo de los precursores hematopoyéticos debido a una alteración
en el metabolismo de la vitamina B12 y del ácido fólico, ambos metabolitos esenciales
en la síntesis del ADN. La eritropoyesis ineficaz, que constituye el mecanismo
fisiopatológico principal de la anemia, obedece al aborto medular de los precursores
eritroides, que desaparecen antes de finalizar el proceso de maduración.
La hemólisis secundaria es consecuencia de la destrucción periférica de los eritrocitos
defectuosos que lograron alcanzar la maduración megaloblástica. La deficiencia de
ambos nutrientes ocasiona, además del cuadro hematológico clásico, retraso en el
crecimiento y en el desarrollo psicomotor, defectos del tubo neural e
hiperhomocisteinemia. Además, son de gran importancia las anemias megaloblásticas
secundarias a deficiencia de folatos, ya que representan la causa más frecuente de anemia
carencial en nuestro medio después de la anemia ferropénica.
Fisiopatología de la anemia por déficit de cobalamina y folatos
La vitamina B12 o cobalamina es un compuesto organometálico complejo, en el que un
átomo de cobalto se sitúa dentro de un anillo de tetrapirrol. La cobalamina actúa como
cofactor en diferentes y complejas reacciones enzimáticas, mediante 2 formas
metabólicamente activas:
1. Metilcobalamina. cofactor esencial en la síntesis de metionina a partir de la
homocisteína, acoplada a la transformación de metiltetrahidrofolato a tetrahidrofolato. En
los casos de deficiencia de vitamina B12 se produce una
disminución del tetrahidrofolato intracelular, que explica la alteración en la síntesis de
ADN. La alteración en la transformación de homocisteína a metionina es
parcialmenteresponsable de las complicaciones neurológicas.
2. Adenosilcobalamina. cuya deficiencia produce un aumento de metilmalonil coenzima
A –y de su precursor, el propionil coenzima A– y, como consecuencia, aumenta la síntesis
de «ácidos grasos no fisiológicos», que se incorporan a los lípidos neuronales y, por tanto,
contribuyen igualmente
a las complicaciones neurológicas. En la síntesis de ADN existen 2 enzimas clave,
importantes en el desarrollo de megaloblastosis: la timidilato sintetasa y la metionina
sintetasa. En la formación de esta última intervienen tanto la cobalamina como los
folatos2. La metilcobalamina interviene como cofactor de la metionina sintetasa en la
reacción de desmetilación que transforma la homocisteína en metionina. La deficiencia
de ácido fólico causa anemia megaloblástica inhibiendo la síntesis de timidilato, alcarecer
de metilén-THF como coenzima. La cobalamina no interviene directamente en ninguna
reacción de síntesis de ADN.
La homocisteína se sintetiza a partir de la metionina, por lo que en su metabolismo están
implicado los folatos y las vitaminas B6 y B12. La homocisteína elevada es un factor de
riesgo cardiovascular, causa complicaciones durante el embarazo o enfermedades como
el Alzheimer.
PRINCIPALES CAUSAS
La cobalamina o vitamina B12 es sintetizada de manera exclusiva por microorganismos,
por lo cual es necesario adquirirla de alimentos de origen animal entre ellos leche, huevos,
carne, pescado; ya que hay producción de esta vita-mina por bacterias intestinales. La
absorción de la cobalamina es facilitada en el estómago por el pH ácido, con lo que se
promueve la unión de la B12 a glicoproteínas (cobalofilinas), el complejo pasa a intestino
donde las proteínas pancreáticas hidrolizan y liberan la B12, ésta se une al factor
intrínseco y llega hasta íleon, en donde se encuentra el receptor del factor a nivel de
mucosa, absorbe la cobalamina junto con el factor extrínseco, éste último es des-truido y
la cobalamina es llevada a la circulación por la transcobalamina, de allí pasa al sistema
porta, médula ósea y otras células. El requerimiento mínimo de vitamina B12 es de 1-2
μg, y a nivel hepático se cuenta con depósitos de hasta 2-3 mg. Esta vitamina juega un
papel fundamental como cofactor esencial para dos enzimas: sintasa de metionina y
sintasa de metilmalonil-coenzima A, implicadas en la síntesis de ADN, por un lado como
aceptor de grupo metilo en la reacción de desmetilación de ácido N-5 metil-
tetrahidrofolato (N-5 metilTHF) a tetrahidrofolato (THF), por otro lado como dador de
grupos metilo a la reacción de metilación de la homocisteína que forma metionina,
entonces cuando hay carencia de cobalamina no se obtiene THF, que es cofactor de la
enzima timidilato sintasa.
Causas de déficit de cobalamina :
Descenso en la ingesta.
1. Alteración de la absorción
2. deficit de factor intrínseco, déficit de enzimas pancreáticas, alteraciones en intestino
delgado
3. 4. Embarazo, lactancia, hipertiroidismo, leucemias, anemias hemolíticas.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

 Katzung B. Masters S. Farmacología Básica y Clínica. 12va. México: McGraw-


Hill Interamericana; 2011.

 Hardman J. Limbird L. Goodman & Gilman. Las bases farmacológicas de la


terapéutica. 10ma. México: McGraw-Hill Interamericana; 2003.

 Alvarado J. Manuel de Farmacología. 2da. Perú: Apuntes Médicos del Peru; 2012.

 Rang H. Ritter J. Flower R. Rang y Dale Farmacología. España: Elsevier; 2016.

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