Jóvenes Al Frente

Jóvenes Al Frente nace de un sueño, de la política, del momento histórico, la mística, la canción, de una parte
de sonrisas que militaba por un mundo mejor.
Durante muchos años, en lo personal y responsabilidad dentro de la organización, fue la conducción, por
referencia histórica, por militancia, por perseverancia, por táctica, por amor y por convicción.
Entendíamxs que la juventud, la justicia social y la lxs de abajo, tenía que estar en el frente.
A medida que paso el tiempo, nuestra organización comenzó a crecer, a soñar como si retumbara el bombo
a punto de saltar en una matanza de amigues, a creer que la lucha por la tierra, la educación y la alimentación
era posible con nuestrxs pares, con lxs vecinxs, con nuestra familia, con lxs de nuestra clases, con les excluidxs
(pobres, inmigrantes, mujeres, negrxs, jóvenes, tortas, putos y trabas), fue así que Jóvenes Al Frente, se
consolidaba en Parque Esperanza, un territorio declarado comunitario, disidente y plurinacional.
La militancia empezaba a sentirse dentro del corazón, del cuerpo, se sentía que corrían transformaciones de
libertad.
Esta organización nace en pleno ascenso de la ola verde, en el 2012 (cuando el mundo se acababa).
Comenzamos a tener conciencia de clase, de organización, de lucha, de unidad, de estrategia y
principalmente militar lo neo-liberal que había en nosotrxs.
Pude crecer a bucle personal y ser tan fuerte que aprendí a no avergonzarme de mi, a ser feliz con lo que yo
soy, con lo que elijo, con lo que me autoconstruyo, como mis deseos me construyen.
Venir de clase baja y pelearla es muy difícil, poder acceder a la Universidad, militar sin un patrón arriba,
elegir un camino juntx a un compañere, caminar por la calle y sentirme incómodo su alguien iba delante mío,
porque pensaba "por mi forma de vestir o caminar pensara que les voy a robar", en fin, muchas trabas para
a realizarme, me sentía constantemente orpimidx, por negro, por puto, por político, por militante.
A pesar de todo eso me di cuenta que aún mi cuerpx en lo cotidiano disfruto privilegios por ser masculino,
porque desde pequeño me han formado así, que no me siento incómodo por los privilegios, pero estos hace
tiempo vienen haciendo cosquillas en mi y ya no lxs quiero.
Nuestras compañeras de base, de Barrio de Nuestra Organización, se les hace 10 veces más difícil, por ser
mujer.
Es por eso entiendo que debo renunciar a mis privilegios y creo que uno de ellxs es la Conducción de Jóvenes
Al Frente.
De desde hace mucho tiempo, nuestro camino nxs llevo a esto, a compañeras empoderadas, en mandada,
salieron a luchar por la liberación, por su liberación.
Compañeras podemos decir que JOVENES AL FRENTE LO CONDUCEN LAS MUJERES Y EL FEMINISMO
POPULAR PLURINACIONAL POR LA TIERRA, LA JUSTICIA SOCIAL Y LA LIBERACIÓN porque el contexto, la
trayectoria y el día a dia que vivimos en un lugar concreto.
Me pongo a disposición de las compañeras conductoras Para a que ellas evalúen la responsabilidad o
responsabilidades en las que estaré felizmente militando y aportando como siempre lo hice desde el corazón
y la convicción y siento que todo lo vivido en el Jaf nxs transforma a ser cada vez más sanxs y/o menos
enfermo.
Hay que construirnxs libertarios y sacar en patriarcado que habita dentro nuestro y eso es lo que tengo que
hacer. JOVENES AL FRENTE ES UNA HERRAMIENTA POLITICA PARA EL AVANCE DEL FEMINISMO.
Podemos decir que es una de las primeras organizaciónes sociales con base territorial de Cordoba donde las
conductoras son mujeres, como lo es milagro salas en jujuy, como lo fue Juana azurduy, como lo es Vanesa,
Rebeca, Irma, Naty y claudia, la nueva mesa de conducción.
Renuncio a mi privilegio de varón conductor y sigo creyendo que el feminismo popular nxs va salvar, no se
cae,lo voltearemos.
Andres Villalba, disidente. 💚❤🖤🔥✊🏽. Vamxs a vencer!

Preguntas para el debate: ¿Qué tipo de feminismos construimos? Que dice y no dice estos textos
disparadores sobre qué lugares deben y no deben ocupar las identidades masculinas y no masculinas en las
organizaciones sociales y las luchas populares. Pensar estas cuestiones en términos de nuestras lógicas de
organización, nuestros espacios de participación, discusión y decisión, etc.